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C hi D tiCoaching Deportivo© Artículo publicado en www.futbol-tactico.com

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TODO GRAN ÉXITO

CONLLEVA UN GRAN

ESFUERZO

 Autor: Héctor Sanz Navarro

• Coach de Deportistas y Entrenadores

de Élite.

• Conferenciante, formador y escritor.

• Experto en Coaching Deportivo

(Escuela de Inteligencia – Universidad 

Camilo José Cela).

Fotos: Shutterstock.com

Piensa en alguna gran obraarquitectónica que conozcas…¿ya lo tienes? Ahora piensa enel tiempo que dedicó primero

el arquitecto o arquitectos adiseñarla, y después piensa enel tiempo que posteriormentededicaron aparejadores y albañiles a construirla.

Con total seguridad comprobaráscomo la cantidad de tiemponecesario fue considerable.

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Coaching Deportivo

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El ejemplo que yo suelo poner son las siete maravillas del mundo moderno, son estas:

- Chichén Itzá, en México

- El Coliseo de Roma, en Italia

- La estatua Cristo Redentor, en Brasil

imposible pararse un momentito a reexionar sobre si es así como se van a conseguir grandes logros o

si en realidad se hace de otra forma.

Como ya hemos visto en el inicio de este artículo, todo gran

éxito requerirá de, entre otras cosas, tiempo. De este modo,

es importante recordar este

punto para no caer 

en la impaciencia,

frustración,

desesperación, y restantesemociones que nacen fruto de

perder de vista la perspectiva que nos

da la consciencia.

Futbolistas que no están rindiendo al nivel que se

espera de ellos, y si bien es cierto que son bastantes los

factores que pueden inuir en ese aspecto, es habitual que se les

exija ciertos resultados antes de tiempo. Será entonces cuando

la labor del entrenador, director deportivo o resto de cuerpo

técnico, consistirá en descubrir si realmente ya es el momento

de esperar tal rendimiento acerca de ese jugador o si, por el

contrario, aún no se le ha dado el tiempo suciente para que

madure y llegue al punto de rendimiento deseado.

En otras ocasiones sí se ha dado el tiempo suciente como

para que el jugador haya podido llegar a esa cota de rendimiento,

y si llegado el momento no se obtiene el rendimiento deseado,

pasaremos a cuestionarnos si se ha dedicado la energía, recursos y

formación sucientes para la consecución del objetivo (obviamente

lo ideal es cuestionarse todo esto desde el primer minuto).

Es labor del entrenador y cuerpo técnico el ser capaces de distinguir 

estos términos. Para ello, será fundamental estudiar a cada futbolista

por separado, ya que cada persona es única y totalmente distinta a los

demás. Hay jugadores que necesitan un tiempo determinado para madurar 

ciertos aspectos del juego, y sin embargo existen otros que requerirán de

otro tiempo distinto, más que el resto. De igual forma será importante, como

decía, observar si estamos dedicando los recursos sucientes para cada

 jugador por separado y para el equipo en global.

 Al no tener en cuenta estos factores (tiempo, recursos, energía) es muy

probable que sometamos a los jugadores a unos niveles de presión y estrés

excesivos, lo cual redundará muy negativamente en su rendimiento.

- La Gran Muralla China, en China

- Machu Picchu, en Perú

- Petra, en Jordania

- El Taj Mahal, en India

Se estima que Chichén Itzá pudo construirse en no menos de veinte años. El Coliseo de Roma se

construyó en aproximadamente diez años. La estatua Cristo Redentor requirió de cinco años para

alzarse imponente. La Gran Muralla China necesitó probablemente decenas, si no centenas de años

para su construcción. Machu Picchu también necesitó decenas de años, sobre Petra ni se sabe

exactamente el tiempo que se invirtió en construirlo, y por último el Taj Mahal requirió de cerca de

veintitrés años para plasmar el amor que sentía el emperador Sha Jahan por su esposa, Mumtaz

Mahal.

Probablemente, después de haber leído todo lo que acabo de exponer, ya hayas llegado al punto al

que quería llegar yo. Sí, toda gran obra conlleva un gran esfuerzo de tiempo, recursos y energía.

Vivimos en una sociedad marcada por ciertos factores que, a priori, parecen inalterables. La necesidad

de que todo vaya y suceda rápido, como si no hubiera un mañana, como si la fruta solo tuviera uno

o dos días de margen para estar madura y poder comerla. La necesidad de que todo suceda ya, la

sociedad del cortoplacismo donde no hay cabida para la paciencia, para el fuego lento, para el “poco

a poco” ni ninguna cosa por el estilo. E inmersos como estamos en esta, nuestra sociedad, pareciera

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Por otro lado, también

será importante inculcar 

a todos los jugadores la

importancia de esforzarse

en cada entreno, en

cada partido, al máximo

para que su rendimiento

vaya creciendo y

maximizándose. Explico

esto porque existeun perl de jugador 

determinado que

tiende a esforzarse

muy por debajo de

sus posibilidades.

Me estoy reriendo al jugador que despunta de

manera natural debido a un talento técnico o físico

innato. Imagina por un instante la cantidad de

horas, esfuerzo y recursos que han dedicado a

prepararse, formarse y entrenar jugadores como

Cristiano Ronaldo, Messi, y tantos otros. Ahora imagina a esos mismos jugadores habiendo dedicadosolo el 10% de las horas, esfuerzo y recursos de los que realmente han dedicado… ¿crees que

estarían donde están actualmente? ¿crees que estarían rindiendo al nivel al que lo están haciendo? 

Obviamente la respuesta es clara y rotunda: NO.

Es así como vemos otra parte fundamental del entrenador y cuerpo técnico, aquella que consiste en

mostrar a los jugadores para todo lo necesario para que comprendan la relevancia de cada minuto de su

esfuerzo, de cada mínimo recurso que se invierte en ellos, de cada gramo de energía que utilizaremos

para ellos y utilizarán ellos mismos.

Y por último, y como decía también antes, tenemos la importancia de comprender que el máximo

rendimiento del equipo no será fruto de un día de trabajo, ni de dos, ni de tres.

Es, por desgracia, demasiado habitual a día de hoy ver cómo presidentes y entrenadores de clubs de

fútbol buscan el triunfo inmediato, la conjunción de sus jugadores en tiempo récord coreando sin cesar 

el “lo quiero ya”. La realidad es que esto no es un juego de mesa, en el que teniendo dinero es suciente

para comprar las piezas del puzzle para luego armarlas una tras otra.

Estamos hablando, antes que de jugadores, de personas. Personas con miles de cosas en la cabeza,

cada uno con su propia y única historia bajo el brazo, que buscan su lugar en el mundo haciendo lo que

les gusta o aquello que se les da bien, que es jugar al fútbol. Mercantilizar a las personas de la forma en

la que se hace hoy en día ha de poder ser compatible con comprender que para conseguir su máximo

desempeño, y así el más probable máximo

desempeño del equipo, necesitamos conocerles,

comprenderles y trabajar colectivamente sí, pero

también individualmente.

Las piezas de este puzzle conformarán un

grupo o un equipo. La diferencia es clara, el

grupo podrá llegar lejos, el equipo podrá ganar 

títulos y conseguir objetivos. Para que el grupo

se convierta en equipo necesitaremos dedicar tiempo, recursos y energía.

Conseguir que todos los jugadores se acoplen

unos a otros, se entiendan en el campo y se

sientan cómodos es trabajo y misión del cuerpo

técnico y del entrenador. Los equipos necesitan

tiempo para madurar, los equipos necesitan dar 

toda su energía en cada entrenamiento, en cada

charla, en cada partido, los equipos necesitan

recibir de su cuerpo técnico y entrenador lo mismo

que ellos dan.

 Aprovechar, nalmente, el máximo de recursos

posibles para terminar de conformar todas las

piezas que nos dará la clave para poder decir, en

voz bien alta, que el puzzle va por buen camino y

que los objetivos podrán conseguirse.

Para concluir, resumiré todo lo dicho en estas

líneas. Tanto jugador como equipo necesitan

tiempo de maduración. Además de tiempo, tanto

 jugador como equipo necesitarán dar toda su

energía y esfuerzo en cada ejercicio, en cada

entreno, en cada partido.

Por último, jugador y equipo necesitarán derecursos para desempeñar su máximo potencial.

Los proveedores y facilitadores de todo el proceso

han de ser entrenadores y cuerpo técnico.

Si todo se ha hecho desde la paciencia, el esfuerzo

y el correcto aprovechamiento de los recursos,

es prácticamente seguro que conseguiremos los

objetivos denidos al inicio de temporada. No

existe gran obra sin un gran esfuerzo, no existe

gran equipo sin un gran esfuerzo.

Todo gran éxito conlleva comprender la alquimiade tiempo, energía y recursos. Que el entrenador 

y cuerpo técnico se conviertan en los alquimistas

del equipo, el resto vendrá solo.