CMO ENSEAR AJEDREZ

El entrenamiento en ajedrez

Ernst Bnsch y Uwe Bnsch

MANUAL METDICO PARA LA ENSEANZA Y EL ESTUDIO

EDITORIALPAIDOTRIBO

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La complejidad y rpida transformacin delmundo moderno hacen que, junto con las ms altasreivindicaciones, se le planteen a la humanidad desa-fos intelectuales y problemas cada vez ms difcilesde superar. En la sociedad de la informacin en quevivimos se nos exige ponderar cada vez con mayorprecisin nuestra decisin final, y eso requiere unapermanente apertura mental hacia los recursos yuna inagotable capacidad de estudio en los adultos.Como consecuencia de la transformacin de la na-turaleza del trabajo, el constante desgaste psiconer-vioso, que forma parte del proceso de produccin,resulta asimismo considerable la exigencia paralelade creatividad y capacidad para resolver con eficacialos problemas profesionales que se le plantean al serhumano. La persona que pretenda ver coronada porel xito su actuacin vital debe preocuparse por inte-grar en sus actividades la dinmica competitiva im-perante y un buen bagaje intelectual, psicolgico ypsquico. A fin de dar una respuesta apropiada a lascuestiones que continuamente se plantean, es preci-so desarrollar el rendimiento mental y poner en elpunto de mira de las distintas consideraciones unpensamiento crtico y constructivo. En muchos m-bitos la economa, la ciencia y la poltica exigen lacomprensin y resolucin de difciles cuestiones in-telectuales, y slo una progresiva sofisticacin intelec-tual y la capacidad para resolver problemas concre-tos permitirn tomar las decisiones que la sociedadrequiere.

Las aspiraciones deportivas de la poblacin vanen aumento, habida cuenta del gran nmero de prac-ticantes. Para la prctica deportiva se requiere buenasalud, espritu de lucha y tambin de equipo. Es pre-ciso saber sobreponerse a la tendencia a rendirse,contar con capacidad de sacrificio y con una acusadapersonalidad. La cultura fsica y el deporte se propo-nen generar en el individuo impulsos sociales y bio-lgicos que acten de forma conjunta, con el fin dedesarrollar fuerza fsica y mental.

La actual consideracin del ajedrez como disci-plina deportiva se ha logrado tras una larga bregapor parte de las organizaciones ajedrecsticas socio-pedaggicas, basndose en los mritos del juego-rey

en los planos mental y cultural, lo que cubre las nece-sidades de buena parte de la poblacin, y en virtudtambin de su facilidad para desarrollar aspectos po-sitivos de la personalidad y la capacidad creativa, demodo que es un buen instrumento para el desarrollode los jvenes. De crculos de amigos, asociacionesde vecinos y solucionistas de problemas, el ajedrezpas a integrarse en asociaciones de mbito na-cional, pasando a preocuparse por los semilleros dejvenes y la organizacin de competiciones propia-mente dichas. Podemos establecer los siguientes hi-tos:

Los honores de haber reivindicado los valoresmentales, culturales y deportivos del ajedrez co-rresponden, de pleno derecho, a las asociacionesvinculadas con el tiempo libre, quienes se mostra-ron especialmente interesadas y activas en la orga-nizacin de competiciones de ajedrez.

Las peculiaridades especficas del ajedrez, en tantoque juego estratgico, son altamente aprovecha-bles para inculcar en los nios el pensamiento lgi-co, la capacidad de concentracin y el espritu au-tocrtico, adems de desarrollar cualidades como lafantasa, la capacidad analtica y combinatoria, in-troducindose, a raz de estas conclusiones, en lasescuelas.

Gracias al fomento del ajedrez como disciplina de-portiva, se ha podido comprobar su influencia en eldesarrollo de la mente y el cultivo del carcter y lapersonalidad, contribuyendo tambin a la expan-sin de otras valiosas cualidades, como fuerza devoluntad, determinacin, valor, aplicacin, perse-verancia y fijacin de objetivos.

La facultad de crear combinaciones y la capacidadde concentracin, la resolucin de problemas y elsentido espacial, la capacidad de asimilar conoci-mientos, la toma de decisiones, son todas cualidadesmuy provechosas a la hora de determinar una orien-tacin o desarrollo profesional. Segn Bleis y Hof-mann, debe propugnarse la lucha cotidiana por lavida y competencia,no lo que tiene xito, no lo msclaro, sino aquello que,como la concentracin, cons-tancia, elaborar ideas, flexibilidad, fantasa, creacin

1. ACERCA DE LA NATURALEZA DEL AJEDREZ

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Por qu preocuparse de las teoras del juego, es-cuelas de ajedrez y exigencias de resultados del pasa-do y de la actualidad? No se trata de la representa-cin de espectaculares xitos, pues la causa de losresultados se reconoce y se puede procesar. La exi-gencia de obtener resultados se ha convertido en unfactor primordial para el jugador. La motivacin deljugador depende en gran parte de los resultados (esdecir, buenos resultados personales) que consiga. Eneste aspecto, hasta ahora apenas se han llevado a ca-bo investigaciones sobre la consecucin de objetivos.Sin embargo, la concepcin de entrenamiento y pla-nificacin racional de resultados se ha ampliado. Porotra parte, es provechoso, y se ha incrementado mu-cho la variedad de las actividades deportivas, es de-cir, el concepto de los mtodos de entrenamiento oel cuidado por los detalles, que, ms all de cristali-zar, examinan la praxis histrica para adquirir un co-nocimiento efectivo y elaborar los mtodos de entre-namiento aplicables en la actualidad.

2.1 Orgenes del ajedrez y su temprana propagacin

El origen del ajedrez ha dado lugar a infinidad demitos y leyendas. La idea de su creacin est asociadacon hiptesis acerca de su nacimiento, su origen y elnombre de sus inventores. Hay escritos que relacio-nan su origen con el persa Ibn Jalikan (1211-1282), ytambin con el sabio brahmn Sissa ibn Dahir. Esteltimo le present a su soberano indio Shihram unjuego en el que el rey era la figura ms destacada, yque con ayuda de otras figuras y peones deba venceral bando contrario, compuesto de las mismas piezas.El soberano qued reconocido al ver la importanciaque le concedan sus sbditos. Como recompensa de-cidi concederle al brahmn el favor que ste le pi-diera, por extraordinario que fuese. Una vez conoci-da su respuesta, se hizo aconsejar por los nobles antela bagatela de la demanda. El premio solicitado eracierta cantidad de trigo, que deba calcularse as: ungrano por la primera casilla del tablero, dos por la se-

gunda, cuatro por la tercera, ocho por la cuarta, y assucesivamente. La cantidad deba doblarse a cada ca-silla. Pronto llegara a una sorprendente conclusin elconsejero del rey, a saber, que el resultado de la ope-racin era de 18.446.744.073.709.551.615

La fantstica cantidad resulta de calcular la fr-mula 1+2+22+...+263 = 264. La consecuencia de loscmputos era que para almacenar el trigo requeridose necesitaba un granero que, con una base de unos80 m2, por ejemplo, tuviese una altura que llegasedesde la tierra hasta el sol, y seran precisos unos 300millones de trenes de mercancas para transportar laharina de trigo que peda el inventor. Esta inagota-ble descripcin parece encajar en un conocido pro-verbio indio:El ajedrez es un mar en el que un mos-quito puede nadar y un elefante ahogarse.

La opinin predominante en cuanto a las ra-ces histricas del ajedrez lo sita en torno a 2.500aos atrs, en la India. En la vieja literatura indiahay referencias a un juego de tablero conocido co-mo Chaturanga, cuyas figuras y casillas guardanparecido con las del ajedrez. Chaturanga es unapalabra del snscrito, que podra traducirse comolas cuatro divisiones. En realidad, guarda unainequvoca similitud con los cuatro cuerpos delantiguo ejrcito indio (elefantes, caballera, carrose infantera) reunidos. Los creadores indios delajedrez quisieron representar una batalla, ilustra-da por medio de un juego. La atraccin de esta lu-cha ldica consiste en trazar un plan estratgico eimaginar su realizacin tctica, anteponindose alos planes enemigos. Las tropas en liza disponende un campo de batalla predeterminado, lo mismoque la posicin inicial y los movimientos de cadapieza. La concepcin del modelo de lucha le con-cede al ajedrez una peculiaridad esencial, que loha convertido en un juego de mesa en el que se ba-rajan datos objetivos y necesidades estrictamenteespecficas.

De la India, el juego pas a Persia hacia finalesdel siglo V y rpidamente se fue propagando. El fa-moso poeta Abul Kassim Mansur ben Hasan Fir-dausi hace referencia, por vez primera, al ajedrez enel ao 1000, en su conocido Libro de los Reyes, men-

2. DESARROLLO HISTRICO PROGRESIVO DE LAS TEORASDEL JUEGO, ESCUELAS DE AJEDREZ Y TENDENCIAS

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cionando las reglas por entonces vigentes. Los persasle dieron el nombre de Chatrang y el juego slo pre-sentaba algunas diferencias en sus reglas. La primeralnea se vaciaba de piezas y todas las piezas enemigaspodan ser capturadas. Un bando consegua la victo-ria cuando el rey enemigo reciba mate o era ahoga-do. El rey (Shah), el caballo (faras) y la torre (rukh)tenan los movimientos actuales. La captura al paso yel enroque eran desconocidos. La dama (fersan) slopoda moverse a la casilla inmediata. El alfil (elefan-te, fil) se mova como el actual, pero saltando slodos casillas. El pen (baidag, o soldado de infantera)tambin, pero no exista el doble avance en la prime-ra jugada. Como puede verse, las reglas no han sufri-do excesivos cambios desde entonces.

El Chatrang pas a los rabes en el siglo VIII,que lo llevaron a la Espaa mahometana, de dondese extendi por toda Europa, excepto Rusia. En laantigua Rusia se encontraron piezas de Chatrang yen la ruta de Asia interior lleg hasta las dinastasmongoles. Una prueba concluyente de que el ajedrezsigui esa ruta surge de la analoga entre los trmi-nos ajedrecsticos rusos y las den