ciencias naturales

4
Luis Roberto Vivanco Moreno Brujos y aprendices: las ciencias naturales Ningún otro período de la historia ha sido más impregnado por las ciencias naturales, ni más dependiente de ellas, que el siglo xx. Los filósofos no pueden aislarse de la ciencia. Ésta no sólo ha ampliado y transformado nuestra visión de la vida y del universo enormemente, sino que también ha evolucionado las reglas con las que opera el intelecto. En 1919 el número total de físicos y químicos alemanes y británicos juntos llegaba, quizás, a los 8.000. A finales de los años ochenta, el número de científicos e ingenieros involucrados en la investigación y el desarrollo experimental en el mundo, se estimaba en unos 5 millones, de los que casi 1 millón se encontraban en los Estados Unidos, la potencia científica puntera, y un número ligeramente mayor en los estados europeos .Los cerebros del mundo que en la era de las catástrofes escaparon de Europa por razones políticas, se han ido de los países pobres a los países ricos desde 1945 principalmente por razones económicas ,esto es normal, puesto que durante los años setenta y ochenta los países capitalistas desarrollados sumaban casi las tres cuartas partes del total de las inversiones mundiales en investigación y desarrollo. La tecnología basada en las teorías y en la investigación científica avanzada dominó la explosión económica de la segunda mitad del siglo xx, y no sólo en el mundo desarrollado. Sin los conocimientos genéticos algunos países

description

resumen

Transcript of ciencias naturales

Luis Roberto Vivanco Moreno

Brujos y aprendices: las ciencias naturales

Ningn otro perodo de la historia ha sido ms impregnado por las ciencias naturales, ni ms dependiente de ellas, que el siglo xx.Los filsofos no pueden aislarse de la ciencia. sta no slo ha ampliado y transformado nuestra visin de la vida y del universo enormemente, sino que tambin ha evolucionado las reglas con las que opera el intelecto.En 1919 el nmero total de fsicos y qumicos alemanes y britnicos juntos llegaba, quizs, a los 8.000. A finales de los aos ochenta, el nmero de cientficos e ingenieros involucrados en la investigacin y el desarrollo experimental en el mundo, se estimaba en unos 5 millones, de los que casi 1 milln se encontraban en los Estados Unidos, la potencia cientfica puntera, y un nmero ligeramente mayor en los estados europeos .Los cerebros del mundo que en la era de las catstrofes escaparon de Europa por razones polticas, se han ido de los pases pobres a los pases ricos desde 1945 principalmente por razones econmicas ,esto es normal, puesto que durante los aos setenta y ochenta los pases capitalistas desarrollados sumaban casi las tres cuartas partes del total de las inversiones mundiales en investigacin y desarrollo.La tecnologa basada en las teoras y en la investigacin cientfica avanzada domin la explosin econmica de la segunda mitad del siglo xx, y no slo en el mundo desarrollado. Sin los conocimientos genticos algunos pases no hubieran podido producir suficientes alimentos para sus crecientes poblaciones, y a finales de siglo la biotecnologa se haba convertido en un elemento importante para la agricultura y la medicina.As a travs de la estructura tecnolgicamente saturada de la vida humana, la ciencia demuestra cada da sus milagros en el mundo de fines del siglo xx. Es tan indispensable ya que hasta en los rincones ms remotos del planeta se conocen el transistor y la calculadora electrnica.Pese a todo, el siglo xx no se senta cmodo con una ciencia de la que dependa y que haba sido su logro ms extraordinario. Los recelos y temores hacia la ciencia se vieron alimentados por cuatro sentimientos: el de que la ciencia era incomprensible; que sus consecuencias ya sean prcticas o morales eran impredecibles y probablemente catastrficas. El mundo antiguo haba muerto o, como mnimo, estaba en una fase terminal, pero que los contornos del nuevo no estaban todava claramente esbozados. El gran Max Planck no tena dudas sobre la relacin entre la crisis de la ciencia y de la vida cotidiana: Estamos viviendo un momento muy singular de la historia. Es un momento de crisis en el sentido literal de la palabra. En cada rama de nuestra civilizacin espiritual y material parecemos haber llegado a un momento crtico. Este espritu se manifiesta no slo en el estado real de los asuntos pblicos, sino tambin en la actitud general hacia los valores fundamentales de la vida social y personal.Sin embargo, a partir de los aos setenta el mundo exterior afect a la actividad de laboratorios y seminarios de una manera ms indirecta, pero tambin ms intensa, con el descubrimiento de que la tecnologa derivada de la ciencia, cuyo poder se multiplic gracias a la explosin econmica global, era capaz de producir cambios fundamentales y tal vez irreversibles en el planeta Tierra, o al menos, en la Tierra como hbitat para los organismos vivos. No era tan fcil escapar de los subproductos del crecimiento cientfico-econmico. Desde los aos setenta empez a discutirse seriamente el problema del, el calentamiento global debido a la emisin de gases producidos por el hombre, y en los aos ochenta se convirti en una de las principales preocupaciones de especialistas y polticos. En consecuencia, todos los estados apoyaron la ciencia, que, a diferencia de las artes y de la mayor parte de las humanidades, no poda funcionar de forma eficaz sin tal apoyo, a la vez que evitaban interferir en ella en la medida de lo posible. Pero a los gobiernos no les interesan las verdades ltimas sino la verdad instrumental. Pueden a lo sumo fomentar la investigacin de lo que resulta til en el momento porque podra producir algn da algo til aunque los cientficos no tenan ni idea del extraordinario potencial que la ciencia moderna, adecuadamente empleada, pona en manos de la sociedad humana.No obstante, este avance tan grande y tan fructfero en la exploracin de la naturaleza se alcanz sobre las ruinas de todo lo que la teora cientfica haba considerado cierto y adecuado, y por una suspensin voluntaria del escepticismo que no slo los cientficos de mayor edad encontraban inquietante podan aprender los fsicos a vivir en una contradiccin permanente? Nils Bohr pensaba que podan y deban hacerlo. No haba manera de expresar la naturaleza en su conjunto con una nica descripcin, dada la condicin del lenguaje humano. No poda haber un solo modelo que lo abarcase todo directamente. La nica forma de aprehender la realidad era describirla de modos diferentes y juntar todas las descripciones para que se complementasen unas con otras. Estos fueron los fundamentos sobre los que se erigieron las estructuras triunfantes de la investigacin y la teora cientfica, gracias a las cuales el siglo xx ser recordado como una era de progreso y no nicamente de tragedias humanas.

Conclusiones

La guerra fue el detonador acab de convencer a los gobiernos de que dedicar una gran cantidad de recursos a la investigacin cientfica ya que era factible y esencial para el futuro esto alent a un tipo de investigadores que no discutan la poltica de quienes les pagaban y preferan no pensar en las posibles consecuencias o el modo en que seran utilizados estos descubrimientos. La verdad es que la ciencia era demasiado grande, demasiado poderosa, demasiado indispensable para la sociedad en general y para sus patrocinadores en particular como para dejarla a merced de s misma.Se convirti en algo indispensable en todos los rincones del planeta.La revolucin del ADN, fue el mayor descubrimiento de la biologa que domin las ciencias de la vida durante la segunda mitad del siglo, se refera esencialmente a la gentica.