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--EDITORIAL

Teología del trabajo

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El tr8b3jo no es un:) consecuencia ni castigodel pecado. Los últimos Papas, haciéndose ecode los tres primeros capítulos del Génesis, afir­r.lan que el trabajo e::: un precepto divino ante­r:or a la caída de Adán y que, por consiguiente,en la hipóte:ú¡ de que el estado de inocenciase hub:era prolongado a través de los Siglos, lahumanidad habría seguido trabajando.

El trabajo de nuestros p:imeros padres, antesde cometer el pecado, no era penoso, sino agra­dable. En cambio, el trabajo actual, que deberí3ser un placer, se ha convertido, en la situacióndel hombre caído, en algo djfícil y penoso, enuna cruz que hay 'que llevar. El trabajo, en op:­n:ón de Benoit, Thils y otros, continuará de al­puna manera en ,la vida futura, después de laresurrección; ciertamente, no será una actividaddifícil v penosa, sino agradable, que aumentenuestra felicidad externa.

Pío XII nos ha descrito el trabajo como uninstrumento que ennoblece y redime, que con­tribuye a restaurar, p:>co a poco, el sometimientodel mundo material al hombre. luan XXIII hacehincapié en su función de servicio «de unos hijosde Dios en pro de otros».

[1 t:3bajo ennoblece al hombre. Dios hizo alhombre a su imagen y semejanza, inteligente ylibre, capaz de plasmar en la materia la improntade su espíritu. Esta perspectiva confiere al hom­bre la inmensa dignidad de participar de algunamanera en el gobierno divino; también el hom­b:c modela al mundo y lo orienta según sus pro­yectos, convirtiéndose así en un imitador de ladivina Providencia. Evidentemente, Dios ha que­rido asociar al hombre a su obra creadora, paraque dé los últimos toques a las cosas por Elcreadas. De esta forma el hombre crea con Díasy Dios trabaja con el hombre. Por su trabajo elhombre se convierte en creador; creador conminúscula y en sentido analógico, es verdad, perocon algunos matices que lo asemejan realmenteal Creador divino. .

Por el trabajo el hombre se convierte en señorde la naturaleza. Dios hizo al hombre rey de lacreación, pero no rey holgazán. Esta realeza dede:echo se convierte en realeza de hecho graciasal traba~o, que es el medio indispensable par3el dominio del mundo. Cuando el hombre trabaja,imaa a Dios (Ex. 20, 9-11). Dios ha dado el mun­do al hombre no sólo como algo para contemplar,sino también, y principalmente, como algo quet.'ene que continuar, perfeccionar, embellecer yacabar. Quiere que el mundo, además de serpara el hombre, sea también obra del hombre.

El trabajo tiene siempre, y por su misma natu~

raleza, una vertiente social de la que no se puedeprescindir en ningún C8S0. El hombre vive en lascciedad y de la sociedad. El pleno desarrollode su personalidad, el bienestar, la vida digna,puede conseguirlo gracias al trabajo de los de­más. Beneficiándose del trabajo ajeno, todo hom­bre en condiciones de trabajar debe hacerlo, parapagar con la propia actividad personal -que esla única moneda válida- la deuda que tienecontraída ccn la sociedad. La conciencia clara yv:va de esta proyección social del trabajo debeinducirnos a «estimarla, a amarla, a ejecutarlaasidua y responsablemente».

~I trabajo puede ser fácilmente una expresiónobjetiva de la caridad fraterna. Porque, a trovésdel trabajo, los hombres se aman unos a ctros.Ce aquí la gr:mdeza, la nobleza, el mérito ex­ccp:::ional, y también, por otro lado, las respon­sabilidades de la vida profesional.

«El traba;o, hecho por Dios y con Dios, es obrahumana que se transforma en obra divina»(Pío XII). El hombre puede dar a sus acciones,inc:uso a las menos productivas materialmente.un precioso valor trascendente y sobrenatural. Lajornada de trabajo de un verdadero cristiano, ex­teriormente no diversa de la de otros hombres ydedicada también para las cosas de acá abajo,está desde ahora inmersa en la eternidad.

Es prec:so que el trabajo entre a formar partede la virtud de la relig:ón del trabajador. Paraello el ob.-ero debe tener conciencia de que eltrabájo bien ejecutado es la voluntad de Dios,o, si se quiere, uno de los aspectos de la volun­tad de Dios, que le afectan más inmediatamente.Los Pap3s y el Concilio Vaticano 11 lamentan lafalta de alianza y simbiosis entre la vida religiosay la vida profesional de muchos hombres: «eldivorcio entre la fe y la vida diaria de muchosdebe ser considerado como uno de los más gra~

ves errores de nuestra época» (Vaticano 11).En la opinión de un amplio sector de cristia­

nos la mayor parte del día queda al margen dela vida religiosa; la profesión es una necesidadde la existencia a la que los hombres se sometencon más O menos resignación, pero que, segúncierta pseudomística, no tiene nada que ver conla gracia, y hasta se la considera como un es­torbo espiritual. Por eso el Concilio Vaticano 11ha hecho una seria advertencia a aquellos cris­tianos que, bajo la excusa de la esperanza esca­tológica, descuidan sus deberes terrenos, olvi­dando que, como cristianos, están más obliga­dos a cumplirlos. La Iglesia "no aparta al hom­bre de la construcción del mundo ni lo impulsa

(continúa en.ll1 página 4.)

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3 MANZANARES, AYER Y HOY Febrero 1969

POSIBILIDADES GANADERAS DE MANZANARES

Escribe: Diego GALLEGO

El término de Manzanares, co.u una exten~

sión sup',erf-ieía} de 49.'54'2 Has., mantiene unoscensos ganaderos reducidos, con fluctuacionesinsiglllificantes desde hace algunos años. Ex­cep,tuando las especies de trabajo (mwar, ca­ballar y asnal), que por las causas de wdo,sconocidas, mecan.iza.etón del campo princi,pal­mente, han experimentado una drástica dis­minución que puede negar a su casi desapl3.­r:.ción' en un futuro inmediato, ~as restantes,ovina, bovina y capri,na, arrojan cif!as sos­tenidas, con tendenda al aumento en las 10­vin~ y porcina.

Sin emhargo, estas cifras son escasas, sitenemos en cuenta la extensión del término ylas características de su suelo y subsuelo, con

sus enormes posibilidades de regadíos, la cre­c::~ente' demanda de prod'UCl~s pecuarios dreacuerdo cOn .la e~evación del nivel de v:ida,invitan a!l agricultor a cambi1ar de men;taUdadpensando en ganadero, dando un viraje a susp,ropiedades, enfocándolas y p.lanificándoJashacia las explotacion€s mixtas agríoola-gana­deras. Entonces .enriquecerá sus tierras, mi­neralizadas de por sí, en materia orgánica yconseguirá cultivos que al ser utilizados comopiens,os en la propia exp'lotación, los tr,anSlÍor­mará en ca'rrue, leche, huevos, es-ti-éreO'1, etc'.,con 10s consiguientes beneficios económicos.

Las posibiUdades ganaderas de Manzanares,pue,s, pueden s'er incalculahles si s'e produceese cambio tan necesario en la manera actualde expJotar el campo. Los sistemas empleadosen la explotación de nuestro ga:nado ovinodeben, desaparecer; nuestra oveja manche.ga,rep.resentante de una raza autóctona de, pri­mera calidad, de extraordinarios réndimien­to's, v-ive sometida a un réw:imen de pa.sotoreo,aproveCihando Jos escasos pastos de los cul­tivos ininrte-rrumpidog" sin apenas rastrojeras

y menos barbecheras, víctima de las inclemen­c:as ambientales que ponen a prueba su resis­tencia a costa de unos rendimiento,s -muy porbajo d,e sus posibilida'a~s.

El ganado de cerda, que hasta hace poco.:>años se explotaba casi exdus¡'vamente en ré­gimen 'casero, individual, empieza, a cambiareste sistema domiciliario' para desplazarse aexplataciones industr.iales y cebaderos que en·escasas; un.idades' e:le'Van nuestros -efectivos.

En el ganado bo'V'ino,; la elevación del nivelde vida acarrea un mayor consumo de leche,que. sostiene un número de vacas en exp[ota­c:ón en lento pero continuo incremento', pesea la eScas.a rentabilidad que el precio actua'lde la leche para consumo humano supone. E-nel ganado bovino de carne es donde se ini­cian una serie de explotaéione:s. que" nos danunas cifras desüonoc;idas hace··urii3. década deaños.

Si~ embargo, repito que n~estros censosresu'::tan es·ca,s-os, insignificantes e- insu¡f;icien~

tes. Las CJNCUENTA MIL HECTAREASde 'nuestro ;término, de las' cuales 'unas veintemil puéden convertirse en regad-ÍOS, son caopa­ces de "autoa1imentar un efectivo ganade,ro in­finit-ame.n'be supeI'ior al actual. -TOd:a: 1,a zonade nuestro campo, que se conoce con el nom­bre de «'MANCHA», se en-cuentra .atravesadapor unas' ,cCJirrdenrtes f-reáticas de 1m caudalprácticamente inagotable, donde perfectamen­te 'pueden darse 'toda dase de oultivos forra­j eros, base- del manten.imiento de una floTe­ci-ente ganade,ría. E,s pTeciso dar un en!oquedistinto a nuestro campo; nuestro pueb'lo,como nuestro país, es deficital"io en proteínasy alimentos' -noble,s de orig"en animal. Los ín­dices de consumo de carne, huevos, leche, etc.,«(,p,er-cáp:ita)), son muy inferiores a los de lamayoría de los países europeos, de caracterfs­ticas parecidas al nuestro. El E,stado españo[viene haciendo unos' desembolsos considexa­bIes de divisas al tener que importar cientosde miles de toneladas -de .carne, con el consi­derahle perjuicio pa'ra la economía p'atria.Esto puede evitarse tan proruto' como el agri­cultor actua:l haga cambiar la fiison'On1Í-a de suexp.lotación y se convie:r>ta en ganadero.

En el II Plan de Desarrollo, que acaba deaprobar las Cortes, ,se fija especial interés ,ala ganadería, y parece se dedicarán grandessumas a primar y pro,teger pri,ncipa..lmente alganado vacuno prod,uctor de carne. La F AOno cesa en su insistencia de aconsejar e1 des-

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arrollo de una agricultura en estrecha cola­boración con la ganadería, ,para -garantizar laproducción de proteínas an~males para la ali­mentación humana.

La aprobación y puesta en marcha delFORrPA contrihuirá especialmente a dar másestabilidad económica a las explotaciones deg,anado vacuno, elevando su rentabi1idad.

Existen ya, afortunadamente, agricultoresque empiezan a sentir inquietudes ganaderas,fij ando su atención. en la cría de terneros;efectivwme,n.te, el incremento, de la producciónde terneros es la base lógica y racional paraalcanzar las metas ambicioS'as a que el consru­rno de· ·carne aspira. Incluso funcionan yabastantes satisfactoriamente en nuestro tér­mino, explotaciones de este tipo, montadas conarreglo a sistemas y normas actualiz.ados, quenos vienen a demostrar que las condicionesclimatológicas y edaf'Ológicas: son susceptiblesde alcan¡z;ar los resultados que la agriculturade por sí sola no podría brindar.

Resumiendo, propugnamos por una expan­sión g'anadera en nuestro término, hasta lle­gar por 10 menos a nuestro autoaba·stecimien­to, mediante la instalación de modernos sis­temas de explotación, con ventajosos métodosde manejo, paTa lograr UI1 abaratamiento delos costos de p.roducción, a1.imentadón racio­nal, selección de razas, para 10 cual el M~nis­

teria de Agricultura subvenciona la adquisi­ción d,e sementales seledos, así como unaefectiva luc'ha contra las enfermedades epi­zoóticas. E,Sltos planes están poniéndose enmarcha, a escala nacional, por la DirecciónGeneral de Ganadería, que cuenta con las in­versiones que prevé e'l II Pl,an de Desarrollo,

que en total v-ienen a representar para el.cuatrienio 19H8J72, la cifra de do:s mil mmo­nes: de pesetas.

O. G.

1_ ..-_..·-..- ..- ..--

(continuación de la página 2)

1a.,descuidar. el interés. por sus semejan~es; másb,en le obliga a sentir esta colaboracion comoun verdadero deber y, al mismo tiempo, dota

la esta colaboración de un sentido y de una sig­nificación mucho más profundos»_

La más alta perfecc;ón consiste en hacer fiel-

1mente· las obras habituales del propio estado.En la vida natural se muestra como hombre gran·de, noble y perfecto, no el héroe de un día, sino

1.. el que acierta a serlo en las pequeñeces de la

vida cotidiana y profesional. Como dice beHa~mente Pemán por boca de San Ignacio: «No hay

1virtud más eminentej que el hacer sencillamente!lo que tenemos que hacer».

Para algunos, trabajar la tierra, poner al dia

1todas las riquezas que Dios ha encerrado enella, desarrollar las v¡rtualidades de.l cosmos,todo esto es preparar el c:elo nuevo y la tierranueva. El hombre somete, aprisiona, doma, esp¡~

1ritualiza cada vez más la tierra; la hace madurarhasta que un día se encuentre a punto para, con

• la ayuda de Dios, pasar a la eternidad y dar su

1fruto en plenitud.

El mundo futuro de que habla la Escritura seráciertamente nuevo; pero será esta misma tierra,

teste mismo cosmos, porque el fuego no aniqui~lará la creación, sino que la renovará ... Será ne­cesaria una intervención divina que la purifique

tde la herrumbre. y escoria que lleva adheridos,que la transforme, elevándola a un orden sobre­natural, pero dejando a salvo su identidad.

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5 . ENTREVISTA Febrero 1969

LO QUENO SABEMOS DE LA VIDA PARROQUIAL

Tüdos recordamos aquel domingo en que ala entrada de la iglesia -se nos enrt:regaba unatarjeta con cupones numerados. Desp.ués delEvangelio, los fuimos recortando en respues­ta corr-ela,ti,va a unas ,preguntas que se nosdiri.gían desde el altar mayor.

Es probable que más de -uno quedáramosintrigados a,rute tan; inusitado proceder.- P,nes

R. P. Aparicio

bien, con el fin de poner en cla,ro el «porqué»y «para qué» de aquello que parecía un juegoinocen.te, aunque de tal nada tenía, entrevis­tamos al P. Aparicio.

El P. Aparicio, sacerdote joven y estudio­so, inquieto y. con un no :sé qué ,en su mkadade pesadumbre -oculta tras su sonrisa-, con

- ai.re universirtario, taill odg-inal en sus mane­ras de decir, tron. paisano entre los paisanüs,'tan cerca del hombre de la cane, es el autor

> del- pr-oyecto- y encargado de 'elaborar una es­pecie de radiografía de }ia yida par:roquial conlos datos acumulados aqueJ día.

-Díg<Jm'/;.f;, Padre ApariC'io, ¿'S'e trató enaquel entonces de sO'Y'prender la buena fe delos feligreses? ¿Por qué y, para qué se obróde 'bal manera?

_Precisament.e, amigo Carmelo, las flechasiban lanzadas haoia esa ({buena fe» que túdices. Pero un·a huena fe a ((,secas», si,n sor­presa. Buscaba un sincero sí o no, como Gris­to nos enseñ'a. Para ello, como, oonllprenderás"había que evitar la excesiva prudencia, doblezo desconfianz:a del erucuesrtado, que pud·ieraenvieia'r Ilas -respuestas, y, con ello, haberfracasado en mi intento: dar en el blanco.

¿Cuál? Obtener los datos precisos, fiables yobjetivos.

¿Par:a qué? Muy sencillo. Para que, en unsegundo tiempo, recog.idos y seleccionados losdatos, pued'a reaLizar un «juego limpio» demúltiples' ,correlaciones, arteniéndome siemprey con todo rigor a la ,técnica y métodos cien­tíficos adecuados.

l. Resultado final? Conocer la situación ac­tual, con 1a máxima objetivid'ad y certeza po­sible, del catolicismo de la dudad.

-Antes de seguir adelante con el asuntode la encuesta, ¿ tendría inconvenient'e, ha...ciendo gala de su estilo personal, en «(autob1o­grafiarse» ?

~Que si tengo algún inconveniente... ¡Quécosas dices! La materia... Sí, la ,materia quese resiste. Además, en las artes plásticas nohe pasado de simp.le aficionado; tod-avía meencuentro muy lejos de esa ((rara pel'feceióu»cuyo secreto ({Narciso» ,arrancara a las aguas.Sin" embargo, y perdona mi incompetencia, ahíte mando unas cuantas 'pince'ladas (alIgo asícomo arte -a.bstracto), si.n contraluces llli daro­o'scuros; d.igo que a!hí te va-n esas pinc'eladas,por si en algo puedo complacerte:

Terminada la carrera sacerdotal, me desti­naron al monte de El Pardo (colegio). Con­templación, docencia y respirar los aJi:res PIU,..ros de la sierra del 'Gu-adarrama, con alg1lJuaqu·e otra escapada al suburbio de M,adrid. Esoera Itodo. Apenas transeurrtido un año, sailtaba

. a la cos'ba. Estamos en Hantan-de-r. Como pora'rte de ma~ia, de la no,,,he a la mañama, mevi convertido en un p'equ,eño empresario. (Artítu-1o de 'confidencia, te diré q.ue jaI!1ás habíasoñado ,cosa parecida.) Hecho el ba,Janee ysaldadas las cuentas: del año, recibfa 10 quenosotros llamamos, en n-u,esrtro argot con'Veal'­tual, (da obe:dielÍ'cÍa». Ahora venÍla a caer en­tre el monte -y la playa, cerca de la dudad, enel subul'1bio de Madrid. E.ra un sueño y, 311mismo tiempo, una - rewHdad. Parecía haber

-" No solamente creo en la efica­cia de la sociología, sino que la expe­riencia nos muestra su necesidad comoinstrumento, cada vez más imprescin­dible, para diagnosticar la situaciónreal de la sociedad"

en-conrtrado mi razón de ser fl'1anciscano-sacer­dotal: los pobres y su -evang-el>ización. Ginooaños en ,la bre0ha, siempre entre llamas, sinrega:teo 'a:l -es,fuerzo ni miedo a la batalla. Ha-

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Siembra ENTREVISTA 6

bía que hacerlo «todo». También había queestudiar. Era preciso capacitarse pa'ra sermás eficaz, para poder hacer algo... (Sólo lacapacitación es tí,tulo que, en última instan..da, justifica y convence, cuando llega el mo­mento, de tener que actuar o desempeñar unafunción.) Del suburbio a ~a universidad, de launiversidad al subul"ibio, .para el día siguientevolver a recor,rer el mismo camino. Año 19,66,licenciatura en ciencias sociales. Año 1967,cursos de dootor... La bataUa se va ganando.Pero... , ¡alto el fuego! Anrti-cipadamen:te, an­tes de llegar a contemplar la tierra de promi­sión, recibo el dücumento de jubilado. De nue­vo, la rosa de los vientos me señ·ala un nuevorumbo: Ma.nzanare-s. Y ... aquí me- tienes. Sincomentarios. Lo demás, Framcia, Bruselas,Holanda ... , podemos dejarlo para otra oca­sión.

-¿Cree u80ted en la eficacia de la sociologíacomo c.iencia experimental? ¿No miente, al de­cir que cada uno nos comemos pollo y medio,cuando realmente dos se quedan sin comerloy uno sálo 81e come CUaJtro y medio?

-No solamel1Jte creo en la eficacia de la so­ciología, s-ino que la experiencia nos mue.s:brasu necesidad como instrumento, cada vez másimpresc-indtble, para diagnosticar la sá'ÚUaciónreal de la sociedad. Un.a sooiedad dinámica:que viene de ayer. vi,ve ho~ y camin,a ver1Ji­ginosamenrte hacia el mañ,ana. Por eso, pararealizar una huena política, una pastoral efi­caz y ullla economía social ~del p~og.reso ypromoción- habrá que contar cada día máscon 'las aportacionres de la sociología. En otrocaso, se corre el riesgo de repetir, 1Nla y otravez, la faena de nuestro CahaHero M·ancihego':romper lanzas contra molinos de viento. Si almenos fuera ¡poner p-icas en F'landes... Dema­siado 'tragicómico para no tOffi.artlo en serio.

Yeso de que <da sociología dice que cad,auno 'comemos pollo y medio, cuando realmente

Continuamos. Si los cuatro pollos y mediose los come una sola persona, como tú dices,excI.uyendo- a las otvas dos, la sociología ten­d'rá que volver a comp,roba'r otro hecho: untercio de los asistentes al banquete s'e comiólos cuatro poUüs y medio; los otros dos terciosde comens,a1es no ¡probaron bocado. Probab'lecOIliclusión: si esto se repitiera mu-oho-s dias,uno moriría de harto y do'S de hambre. ¿Gómoevitarlo? Ahí es,tá la justicia distributiva, me­dicina que a.plicará una buena política, recetade una pastora:l eficaz...

-¿Qué datos puede adelantar de su es­tudio?

-Realiza-da la ene.uest,a y re<:ogidos los da­tos, hemos pasado a la etapa de elabor-adón.El número de las personas en<:uestadas s'eacerca a las cinco mil. Como com'Prenderás, laabundancia de material 'a inves-tigar, contras­tando con la escasez de medios técnicos, eco~

nómicos y per,sona1es, marcan el ritmo de tra­bajo. De Rihí que los dato,s defin1tivos, quepuedo ad-elantar, de mooneruto, son muy pocos;pe,ro sí lo suficientemente significa'l:.ivos y elo­cuentes. Por ejemplo, el bajo porcentaje deas:s-tencia a .la santa mis-a, acentuándose enalgunas zonas de la ciudad donde se reduce alos minimo-s. Entr.e la's personas que practi­can eIl precep,to dominical, en una mayoríaaplastante, pertenece al género femenino y alos- menores de edad. Como podrás dedudr,de .cuanto l1evamo's diClho, - la asistencia dehombres es de:f:idtarÍ'a, llegando a su prác'l:.icanulidad, si descendemos a ciertas profesionesen concreto. Me _pa'rece demasiado p1rematuroadJelantar nuevas I n.oticias. Te ruego, pues,pasemos a otro tema.

-¿Ve con op.timismo el futuro religioso dela población de Manzanares? -

-.No quisiera caer en un o.ptimismo inge­nuo, halagador, o en el pesiID1smo nefasto,

" ... puedo decirte que se avecina una progresiva descristianización, ano ser que clero y laicos pongan en marcha, sin contemplaciones, larenovación iniciada por Juan XXIII y ratificada por el ConcilioVaticano 11" .

dos se quedan sin comer» no lo encontramosexacto. Ell sujeto de atribución, de tan granherejía, será la seudosociología, jamás la so­ciología sin calificativos.

En cu'anto al hecho que presentas, la socio­logía sólo puede comprobar el dato: tres per­sonas y cuatro pollos y medio, sin ocultarninguna de las personas o sacar más pollosde los que -existen. Nos guste o nos disguste,nos parezca bien o mal. P-rescinde- de toda va­loración particular o de inrereses crea-dos.

que -busca su refugio en la -evasión de tiempospasados, como si «·oualquier tiempo pasadofuera mejOrr». Ahora bien, para ser realista ys.atisfacer al ,mismo tiempo tu curiosidad, nohallo en mí esa musa de profeta o hijo de'profetas, que pueda augurarte, con t-oda cer­teZia, ese futuro que a todos nos preocupa.No obstawbe, por analogía, teniendo en cuenta1-0 sU:ced1do en otras ciudades, que ya han pa­sado por la situadón aet1lal de Manzanares

(continúa en la página 14)

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7 ENTREVISTA Febrero 1969

PROHOCION HVHANil y SOCIAL

-"Los cursos del P.P.O. no son una medida depropaganda política, son una necesidad ap,"e­miante de los puestos de trabajo, creados por elPlan de Desarrollo"

Los géneros periodísticos están v.incuLladosy -condicionados por la actuaHdad, por la no­ticia. Y la noticia, por otra parte, es algobien fugaz y efímero. Hacer del presente, de10 que' se escapa en ;la corriente inevi'tahle delas cosas, algo perdu'rable y duradero, es lag:oria y la tragedia &el periodismo. Muchas,muc:hislimas, la mayoría de ~as no,ticias que

Don José María~Ant6nAvila

fueron actualidad un día pasarían a engrosaresa legión ingente de 10 olvüdado y empolvado,para que, con base y fundamento en ellas-porque sin ellas no serian p'0,sibles- perdu­ren y pervivan las auténticamente futuribles.

No obSltante lo' anterior, el porqué de eSitaentrev,ista -'oonsciem.te de su nI() trascenden­cia, de su no necesidad d€ pervivenClÍa- es,más que periodísttico, en el sentido neto denotLcia o mera información, ilustraibivo o casid,idáctico. Posiblemen,te otra de las ver'bientes

del perio'd'ismo sea la didáctica, ía posihilidadde acercarse a todos con. una cier,ta cargaejemplarizad'ora o de enseñanza. He'rmnsa ta­roo que sería curioso estudiar.

Por lo que a esta entrevista, se refiere, lacosa no puede ser más sen'ciHa. E,l P. P. O.orgamiza un curso, de cuyo contenido' y alcan­ce hablaT-emos después; surge la !posibilidad

de. cono'cer y conversar con uno de sus moni­·tares: &on José Maria Antón Avi1:a. y la cu­riosidad inevitable, cuando, además, es'a mis­ma curiosidad ,prnede contener un in'berés cier­to para muchos manzamareños, nos lleva a de­jar correr la pluma en ese juego de pregun­tas y l'e'Slpuestas que toda entreVlista surpone,sin que ello quiera decir, ni muCiho menos, q.uenue·s-tro propósito sea asépticÚ' totalmente yque no pun,cemos, un poco, siquiera rozándo­las, en determinadas cuestiones.

-iQuieres indicar a los lectores, con la ma­1/0"1' minuciosidad y especificación p.osible'8,cuáles sean los objetivos, condiciones, dura-.ción tern;porf1;l, materias, l11Jflar, horas de ola­8·es, eote., deJ curso organizado en Manzanares?

-Con muc'ho gusto. E,ste curso, que eomen­zará dentro de muy poeo, se denomina «DeMontador, Aj,ustfiJdo,r, Rep,arador de Radio yTelevisión». Respecto a su duración, será denueve meses, eon un mínimo de cuatro horasdiarias; lugar, en las E¡;;cuelas del Gran Teatrohorario d'e elases, a cC)Uivenk con los aJ1umnosen nuestra primera entrevista; maIter,ias, lfiJSne'cesaria:s y sufi,cientes, pues COlUenzaremospor conocimientos básicos de ele~l;.ric-idad, teo­ría de raddo y televisión, en ajuste, y robretodo en reparación. Acompañ,a'll.'C1o a cada ela­se p,rácuica será dooa la necesaria tecnologia.

Tendrán a su disposición no sólo una teoriaadecua.da a su llIiJvlel, sino también un equipode medida y calibración mu~ completo, com­puesto por gener.adores de baj.a y alta fre­cuencia, wobbuladores', mira electróniea, po­límetros, voltímetros a vá'lvula... y un entre­nador de paneles in'tercamhiables que es laúltima pailabra en la en-señanza de electrónd-c-a.

-El Diploma o certiJfwado de apro-vecha­miencto que, ,al final del curso, es en'bregooo' alos alumnos, ¿qué 'f'oelevancia o eficacia tieneen orden a ,su utilizaeián pfJsterior para la O'b­tenci6n <he un puestO' de trabajo?

--La eficacia que (puede tener cu,aJqu:ier cer­tificado de aptitud expedido por un wlto orga­nismo, en es'te caso el Min.isterio de T'rabajo.Nosotros preparamos especialistas, y forma­,mos pa;ra un .puesto de trabado como tal.

-Los cursos que organiza el P. P. O., ¿ sonuna medida de propaganda polític'a o tienenuna efectividad re'al y concreta?

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-Ex'is.ten gran cantidad d€ cursos i~p(l.r;"

tidas en pueblos perdido's, en un:a cochera,' enuna panera, en cualquier local disponible dela locaHdad, sin propaganda de ningún ti~o.

Alumnos, aparat~)is y monitores, Úinico:s testi­gos. No son una medida .de propaganda poH­tica, g.oll una necesidad aipremiante de lospuesws de --trabajo, creados -por el- Plan deDesarrollo.

_¿Qué diferencia hay entre los cur8'os deF ormaeión Prof es,ional A celerada y los delP. P. 0.1

-El P. P. O. traslada material, prc)Íesora­do, se adapta al horal'lio más oportuno y alpuesto de tr-abajo requerido. La F. P. A. poseecentros fijos, lÜ's desplazados son los alumnos.

-¿Qué niveles se exigen para tomar pwrteen estos cursos?

-Ninguno. Tener dieciocho años y ... volun­tad de aprender.

-¿La eficacia de e'stos curSos está propor­cionada a los gastos que su desUtrrollo origi­nan o, por el contrario, son éstos los que ex­ceden o rebasam a aquélla?

-Está comprolYa-do que este sistema es elmás rentable de Europa. Las primeTas causasde eSlbo son: El carecer de grandes locales­institutos, y, como cons,ecuenC'ia de la movi,u­dad de los equi.pos, el no i·n'terrumpir la jama­da laboral del ailumno, no tener que abonaTlesdietas ;por di.a de trabajo perdido, ni por tTas­lados al ,centro. E's necesario pensar qUe esta­mos formando a a<1uJ.tos.

-¿Qué grado de capacitación se os exige alos nwnitores del P. P. Q.?

-Conocimiento teórj,co...p,ráddco de la esp€­c~alidad a im;pa!lti-r y cualidades moooJes y hu­manas, puestas a pr.ueba en. los meses de ca­pad~ación y selección que hay que superar.

-;,Se os exige aflgu1IJa capacítación pedag6­gica., en relación con el nivel de los alumnosa los que habéis· de tratar?

-El curso de capacitacioo y selección a que

.arutes me he referido es sólo ~etodoJó:gico, allí:no .se apre'nde nad'a de: l,a' especiálidad, soÍnosólo a enseñar, según las directrices dlidácli­cas del Programa.

---<Tu experiencia en este campo puede 8e1"­'nos de gran wtilidad. ¿Has p'odido observar enlos cursos' dirigidos por, ti ,un. es.peciwl deseoo inquie,tuil en los alwmnos por wpr-wfw;e1" o co­nocer 'COBas nuevas o; por 'el 'contrwrW, unaespecie de apatía O desidia por todo lo quesignifique salir de la rutina?

-Existen -casos en nuestros' anecdotarios deverdadero sacrific.io. Algunos acuden día a díadesde muchos kilómetros en bicicleta. otrosestudian de n-oohe... Yo personarlm€'ll!te, di elCertificado a un g.itano can grandes deseos desuperaci&n. Estos casos ejemplares siempresuperan 'a los pocos de apatía que, en todos.10'5 órdenes de la vida hay. Cuando el alumnolleva una seman·a en clase, estos p,rohlemas sereducen.

-Una última prre'gunta, ¿sient'e's la íntimasatisfacción de 6'Star desarrollando una laborimportante o, por el contrario, un. cierto es­cepticisrrw se te enreaa agazapado corrw enta1vtos otros jóvenes?

-,La labor del moruitor no sólo es impor­tante, sino, bonita; siempre quedan bu.e:nosamigos -a la hora de partk. El es'ceprtiCli,smono .tiene 'cabida en nruestra níisión, que no sóloes dar conocimientos, sino nuevos hOTizOO1'OOS.Cada curso que se inaugura es una nuevailusión.

y na'da más, nuestro curso tiene las' puer­tas abde:rtas a todo el que qUiÍ'era conocerlo.

El leeto:r inteligente ha:rá la,s deduccionespor su cuenta. Ell pretender ha'cer, despuésde ,una emtrev-i-sta, algo asi como urn trazadode las líneas generales del p'€>llsamient-o enella y sus respuestas implicadas, es ofender aquien lee, quien, por O'tra parte, debe hacerlodinámicamente, participand'O en el juego, co~

opeTanrlo con la ternura de su aceptación oCOIll Ja acidez de su crítica.

LEON RAMOS

-------+----------+--------+----+-

"Los trabajadores fI los agrieultores no sólo quieren

ganarse lo necesario pura la vida, sino que quieren tona­

bién desor.-ollar por naedio del trabajo sus dotes perso­nales fI participa.- activalllente en lo or.lenoción de la

vido econónaieo, soeiol, polítieo fI culturol."

(Const. "Gadium et Spes", 9 - 2 e.)

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9 TEMAS DE EDUCACION CRISTIANA Enero 1969

1Es .. lícito .el trasplante de órganos. humanos 1

Como madre de cinco hijos, afirmo que encaso de 'necesidad no dudaría un solo instante

.en ceder un riñón para salvar la vida a cual­

quiera de ellos. ¿Mi impulso de amor maternohalla una justificación en el ámbito de la moralcristiana? ¿D acaso, no?

El imoulso espontáneo de una buena madr~ no

careCe de importancia cuando se trata de resol­

ver un problema moral. El Concilio Vaticano 11

ha hablado repetidamente del valor del «sentido

de los fieles'». Existe también una percepción eSM

pontánea del bien que con frecuencia tiene un

peso mayor al que puedan tener las más elabo·

radas reflexiones. Por ejemplo: si preguntáramos

a todas las madres buenas y dignas de este nom­

bre si están dispuestas a dar un riñón para sal­

var la vida de uno de sus hijos, y todas nos res­

pondieran con decisión que si, esto constituiría

un criterio de juicio digno de toda considerac:ón.

Cuando se planteó la cuestión del trasplante

de órganos, algunos moralistas se negaron a ad­

mitir su licitud. Entre los varios motivos -que pre­

sentaban, el principal era el de la escasa proba­

bilidad de éxito de la operación. ¿Es lícito sacri­

fIcar un órgano importante cuando hay muy pocas

probabilid_ades de ayudar de verdad a otro? Por

tanto, en un primer momento -la cuestión se re­

solvió en sentido negativo. Sin embargo, hoy la

cirugía ha hecho progresos maravillosos en este

campo, por lo que aquella razón contraria a la

licitud ha perdido mucho de su valor.

Hubo otros que negaron decididamente el tras­

plante de órganos porque veían en ello una auto­

mutilación. Por ejemplo, el moralista alemán 'Er~

mecke, partiendo del principio de que todo acto

humano dE,ba juzgarse individualmente en sí Íl1is~

mo, tomado en su singularidad, sostuvo que esta

operaclon es una automutilac¡ón ilícita y culpa­

ble cualquiera que sea el ,fin por el que uno se

somete a ella, tanto si tira su riñón a la basura

como si lo utiliza para salvar la vida de un hijo

O de un henmano.

La mayor parte de los moralistas católicos que

se han expresado en estos últimos tiempos da,

por el contrario, un juicio positivo: el trasplante

de órganos no es ninguna automüti!ación arbi­

traria, del mismo modo que no lo es exponer la

propia vida al peligro en la cura de enfermos

contagiosos. El cristiano no puede disponer arbi­

trariamente y autónomamente de la propia vida,

de la propia salud y del propio cuerpo. Sín em­

bargo, puede gastar su vida y su sa:ud al ser·

vicio del amor. Más aún: sacrificio cump!¡do por

amor es un postulado central de la moral cris­

tiana: «Nadie ama más que quien da su vida por

sus amigos» (In. 15,13).

No obstante, el amor es verdadera virtud sólo

cuando obra en consonancia con las demás vir­

tudes; por esto, un acto tan valeroso como el que

exam;namos debe ir regulado por la prudencia:

hay, que valorar el precio del sacrificio y del em~

peño que comporta, las perspectivas de éxito y

la propia capacidad en soportar sus consecuend

cias, sin olvidar la responsabilidad que eventual­

mente podemos tener aún para con otras per.

sonas.

El médico ha de examinar siempre atentamente,

bajo cua,lquier aspecto, la persona que ofrece un

órga"no para el trasplante. Su diagnosis deberá

establecer, en cierto modo, si vale la pena y si

puede correr responsablemente tal riesgo.

Horing

Centro de Estudios de Castilla-La Mancha (UCLM)

Siembra

• Febrer:Uo es un mes simpático e irresponsa­ble, al que se le perdonan las faltas. Febrerillo elloco, muere joven. Sus veintiocho dios nos tienensiempre en cuidado, porque nunctJ se sabe por laspeteneras que va a salir. Pero olfinal,le entra comoun remordimiento por todo lo que nos hizo pasar,yen un rasgo de enmiendas eficaces, nos obsequiacon los almendros en flor.

• Y, romanticismos aparte, en febrero sentimosel soplo de un duendecillo oculto que nos demos­tró, por si antes no nos hablamos dado cuenta,la realidad del empuje que por momentos experi­menta nuestra población.

• Viajes, visitas, gestiones, proyectos que seaprueban ... No está muerto, ni mucho menos, elporvenir del Pollgono industrial, cómo muchosimpacientes aseguran... i Qué dificil la labor dealcalde!

• Por atraparte, ¡ahí está la gran calle Toledo!-permításenos por una vez llamarla por su nom­bre primitivo-, orgullosa con su nueva fisonomíade edificios modernos en construcción, junto a losque se encuentran gestándose, que conseguirándarle un extraordinario perfil.

• i Cón:o no detenerse un momento en ese bo­nito estudio que nos puede dar el regalo inestima­ble de la creación de la Asociación de Cabezas deFamilia y Asociación de Amas de Casa . .. !

• i Por qué no expresar nuestrq. admiración yregocijo ante el anU1:cio de esas casi seguras de­mostraciones agrarías que, con carácter interna­cional, tendrán lugar en el mes de septiembre-coincidiendo con las fiestas de Nuestro PadreJesús del Perdón-, y que nos traerla la visita delsenor Ministro de Agricultura y altos cargos delDepartamento! Todo como consecuencia de laimportancia indiscutible de nuestra Feria del Cam­po, en agosto.

10

y comentariosde interés local

• Los bailes de sociedad, con motivo del Car­naval, tuvieron ese sello caracterlstico y alegrede diversión incomparable a ninguna otra, sobretodo para el rfo incontenible de la juvent~d. quesabe calibrar estas cosas como nadie.

• Sin rozar fronteras inmorales, ni atisbar co­natos malintencionados, transcurrieron tos tresdías casi festivos en los cuales puede decirse quetodos estuvimos inmersos en el despliegue alegreJI magnifico del amtiente.

• La Agrupación"Lazarillo" c.ctuó en Tome-·molloso y en Alcázar, obteniendo éxitos indis­cutibles en ambas ciudades. Ya es paradójico quesea fuera de Manzanares en donde nuestro grupoartistico encuentre siempre mejor acogida. hastael punto de tener en cualquier ocasión la ayudanecesaria -en todos los aspectos- para sus re­resentaciones.

• Vino de Manzanares a seis pesetas la copita.¿Se asombran? ¿Lo dudan? Con haberse acerca­do por la barra de uno de los bailes que se celebra­ron á mitad de febrero, lo hubieran podido com­probar. Botellln de cerveza a cinco pesétas, igualque el café; y el "chato" de vino nuestro, a seis.Yeso, el único día que lo hubo. Porque se dió elcaso lamentable de que más de un forastero tuvoflue abandonar el local y marcharse a otro ladopara degustar nuestro producto más representati­vo. Por lo visto esto es hacer patria chica.

• Hay quien enjalbiega su fachada y no se cui~

da de limpiar el nombre de la calle en donde vive,que se halla fijado en la pared. La acción y elefecto resultan deplorables.

• Muy buena la exposición de "Monotipos".de López Mozos en la sala de exposiciones de laBiblioteca "Lope de Vega". Cuadros atrayentes.de logra.dos matices, en los que el colorido vivojuega principaUsimo papel. La exposición de este

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11 DE INTERES LOCAL Febrero 1969

artista local, nos ha sugeridQ hondos pensamien­tos. y, sobre todo, sus pinturas nos transportan,cuando las contemplamos, a la incomparable esta­ción de las flores.

• Don Pedro Echevarrfa Bravo, de la RealAcademia de San Fernando, pronunció una Con­ferencia-concierto sobre el tema "TauromaquiaFolklórico o Música y Toros", organizada por laPena taurina «Ignacio Sánchez Mejfas". El con­ferenciante se adentró, con argumento sugestivo.por el rico y variadfsimo campo del folklore denuestros pueblos, haciendo magnífica semblanzade las coptillas que nunca pueden morir, por estarenraizadas con los gustos del alma popular.Diversas grabaciones, escuchadas entre punto ypunto del temario, amenizaron la feliz actuac:ónde don Pedro Echevarria, que, al final. fue muyfelicitado.

• ~os cursos del P.P.O. para técnicos de tele­visión y de corte y confección para la mujer-apunto de iniciarse cuando escribimos estas lí­neas-~ constituyen una prueba de lo mucho que

Construcciones Agrícolas

puede conseguirse, a poco que no escurramos elhombro y apoyemos las iniciativas de los quepiensan y se preocupan, con la mejor de las in­quietudes, laborando por un Manzanares más res­plandeciente. Ayudemos sin poner zancadillas.

• Hay actualmente en nuestra ciudad bastantesobras del ramo de la construcción, que hablan pors/ solas de adelanto y de progreso,' estructurassólidas que reemplazan las anticuadas casas debarro, armonla indiscutible para halagar la vi­sión . .. Sin embargo, ¿por qué algunos consruc­tor.s no se cuidan de mantener sin obstáculos lavIo pública, la cual interceptan hasta el punto dehacer difIcil -ya veces arriesgada- la marchadel transeúnte?

• y la primavera... , tocando el primer aniver­sario de la salida del número uno de SIEMBRA.Nos congratulamos de esta celebración que col­mará de sano orgullo a todos los manzanareños.

Jesús ROMERO

MARZABUCorro de Lo Solano, 29 MANZANARES Teléfonos 351·451-173

Construcción de

REMOLQUESnormales y basculantesde 2 a 10 toneladas

AP(ROS ÁGRICOLASen una extensa gama para el cultivo económico del suelo y de la viña

-~._._------~------_._.---

u El hombre vale más por lo que es que por lo que tiene u

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Siembra DE INTERE5 LOCAL

ESCRIBEN LOS LECTORES

¿ Cómo andamos de asistencia médica?

12

En ocasiones y con motivo de un casode urgencia nocturna, -se ha notado pesa~

dez en atender con la debida eficacia aenfermos que los acontedmientos poste·dores han justificado la llamada.

Leo en un artículo de Selecciones queen España todas las poblaciones mayoresde 10.000 habitantes tienen una casa desocorro que permanece abierta toda lanoche, para ocuparse de casos de urgenciade cualquier tipo.

¿Es acaso el Hospital Municipal quiencumple esta función?

O bien tenemos que reconocer que es­tamos mal dotados en este aspecto.

Estimo que al no contar con un servicionocturno permanente es preciso al me­nos diligencia para acudir al enfermo queno pueda aguantar varias horas. hasta lavisita del médico.

Madrid, 14 de febrero de 1969

Sr. D. José Antonio F,ernández Rod,ríguez.Direc,tor de. la Revista mensual ((SIEMBRA».Reyes Católicos, 22.MANZANARES (Ciudad Real).

Muy señor mío:Acogiéndome, a su recto proc~eder, le ruego

que publique en la Revista que tan dignamen­te dirig,e, esta carta, ya que nos hemos vistosorprendidos, mi compañero Car.los FeTillándezCuenc'a y ,yo, como autores del Proyecto deled"ficio de la cwlle General Moscardó convuelta a Reyes .Católicos, ante el comentarioaparecido en la sección de Interés Local, delnúmero 9 d'e «8.iembr,a», aparecido en enero de19,69 y firmado por don Jesús Romero.

Dicho comenrtarjo consta de dos párrafosque querríamos comentar.

El primero 'dice así: ,«'E,stímulo es lo queha faltado en 1a- construcción del nuevo ed'i­fic:o de la calle Gener,al Mo'scardó y, so}}retodo, al referirs'e a los 1adrillos empleados enla fachada».

Si ese estímulO' es económico, no ha faltado,ya que podemos asegurar que tanto la Pro­piedad como la CÜ'utrata no han escatimadomedios para lograr un edificio de pr.imeracategoría.

y si es 10 es>tético, creemoíS como profesio-

No deseo en modo alguno molestar ala clase médica, pero sí quiero para todos

- nosotros un sistema que nos proteja con­tra la en~ermedad de un modo práctico.

Un médico tiene socialmente considera­ción de médico, no es un picapedrero, esun poco como nuestro angel tutelar encasos de apuro.

Si no dispone de un teléfono y ganasde atenderlo, no es un médico del todo,es algo así como un negociante de la me·dicina.

Tengo entendido que, en la carrera demedicina, una de las cosas que enseñanes la obligación de atender a los enfer­mos por encima de la propia comodidad.

Señores médicos, a todos nos hace faltaun estímulo de vez en cuando. ¿Quierentomar nota de éste?

Pedro DEL CASTILLO

n·ales, que nadie puede dudar que nos hemosvolcado. ,para aunar una construcción de cali­dad con una composición estética seria y fun­cional.

En cuanto a Jos 'ladrillos se ha escogido unode los más caros y de mejor calid·ad que existeen el mercado,. .

El .s>egundo: «Aunque el asu.nto parezca queno tiene... o' de mal gusto en el estilo de unapoblación».

Aquí el seño'r Romero toca un tema :muydelicado. A él por supuesto puede no gustarlepersonalmente el ed.ifieio, p-rivi-legio- al quegracias a Dios todos tenemos dereClho, pero alinsinuar qu~ e1 edificio o el ladrillo es de«mal gustO» se mete en un terreno comO' esel del guStto del que dice el p-rovel'lbio «(de gus­tos no hay nada escrito», aunque desgr-acia­damente se ha,ya escrito demasiado. Re!Peti­mos que este tema es delicado, sobre todocuando .se hace crítica en una publicación dela labor creadO'ra de otras personas ,que hanpuesto su mejor intención en el trabajo.

Nada más, señor Direotor, en- la seguridadde que ésta será publicada y sin ánimo depolémica, queda a su disposioión y le saludaatentamente,

EnriqueMARTINEZ TERCEROProfesor de la Escuela Técnica Superiol'"

de Arquitectura de Madrid

Centro de Estudios de Castilla-La Mancha (UCLM)

13

JUVENTUD AGRICOlA: NUEVA JUVENTUD

Febrero 1969

.1No hace falta ser muy viejo para recordar el

tiempo en que el único ruido de motor en el

campo era el de la trilladora en la época de lacosecha.

¿Quién arrastraba los grandes carretones consu montaña de heno? ¿Quién tiraba del arado?¿Quién. hundía en la tierra la reja con la fuerzade sus brazos? El campesino. Y no había demaw

siada, diferencia entre el campesino que cantabaVirgilio y el que veía Víctor Hugo.

Ahora toda la campiña retumba con el ruidode. los "motores: la máquina preside la labranza yla cosecha. y se introduce por todas las faenasagrícolas.

Hasta hace poco, la agricultura era el únicosector que permanecía casi inmutable en mediode un mundo en plena transformación. Hoy, lamáquina revoluciona la agricultura, y las organi­zaciones campesinas se plant~an una multitud de~'1raves problemas de industrialización y de co~

mercialización.

Pero también los adolescentes del mundo agrí~

cola se plantean un gran número de problel)las,graves, que los adolescentes de antes nunca sebabían planteado.

En ninguna parte los problemas de la adoles~

cencia han cambiado' más que en el mundoagrícola.

SALIR DEL ESTANCAMIENTOY DEL AISLAMIENTO

El joven de la ciudad' no sueña con dejarla,pero millares de jóvenes de los medios ruralesno" piensán más que en abandonar el campo:porque ti~nen la sensación de no tener porveniren él, porque la necesidad de trabajo los em­puja, y porque las ciudades parecen ofrecerles

siempre mejores empleos.

Es un círculo vicioso. Porque cuanto más se

empobrece el campo para estos lovenes y paraotros más emprendedores, más se agrava lacrisis.

Allí donde los jóvenes se han quedado, hantenido que ingeniárselas para improvisar, paraluchar contra las dificultades, para remontar lacorriente,' y han formado la élite más activa delnuevo mundo agrícola.

Para que las nuevas generaciones de adoles­centes y de jóvenes se decidan hoya permaneceren el campo es preciso proveerles de los mediospara forn:tarse; para informarse seriamente sobrelas condiciones de vida en el campo y en la ciu­dad; hace falta abrirles la posibili'dad de compa­

rar con conocimiento de causa y proporcionarleslos medios para' quedarse; no para «padecer» laevolución de la agricultura, sino para empujarlahacia adelante.

UNA ESCOLARIDAD ACTIVA

Para gobernar una explotación agrícola no bastaya con saber manejar la 'larca u ordeñar lasvacas, y con saber leer, escribir y contar. Espreciso estar iniciado en todos los problemas dela industrialización y de la comercialización' dela agricultura y esto llega en Europa, incluso al

conocimiento de los problemas del MercadoComún.

Hay que prolongar la escolaridad, que es loque se está tratando de hacer.

Pero esta prolongación de la escolaridad nodebe concebirse con un espíritu burocrático. Nodebe proporcionar conocimientos abstractos sinconexión con la vida agrícola; pues en cuanto alpresente repele a los adolescentes y en cuantoal futuro no les sirve de nada.

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Siembra JUVENTUD 14

José RUIZ MARTIN-ALBO

Para tener éxito y estimular a los adolescentesque desean permanecer. en la agricultura, la pro-­Jonga.ción de la escolaridad debe:

1. Proporcionarles conocimientos técnicos bá­sicos para su oficio.

2. Permitirles confrontar inmediatamente estosconocimientos con -la práctica de la vidarural, puesto que los adolescentes quierenya realizar alguna cosa mientras_ se instru­yen, y hacer un verdadero aprendizajeagrícola.

3. Darles una cultura general que les permitaconocer los problemas generales de la agri­cultura en el mundo actual y adaptarse alas incesantes modificaciones que conti­nuará produciendo la evolución de la agri­cultura moderna.

Ya pasó el tiempo en que el agricultor se podíacontentar con las rutinas de la imitación.

la agricultura exige,' por otra parte, un fondosólido de conocimíentos nuevos, de visiones ge~

nerales sobre el mundo actual y de espiritu deinvención para poder ser una agricultura en mar~

cha dentro de un mundo en marcha.

La cri~is de la adolescencia, pág. 20)(fetes et Saisons, en español.

•••••••••••••••

¿PARASITOS?Hay una determinada juventud, mínima por suer~

te, que vaga sin saber adónde va y por qué va.A e'sta juventud la veo todos los dias haciendo

igual, siempre lo mismo, como si la vida por ellosno p::lsara, no existiera. Pasean, deambulan, seexh;ban ... En definitiva, no tienen inquietudes.

Es triste ver pasar a esta juventud que sólo lespreocupa el paseo, la hora señalada cada dJapara ir a hacer lo mismo que el día anterior, esdecir, nada. Son jóvenes, ellos y ellas, más ellasque ellos, que están vacíos, que sólo creen quesu juventud es eso que hacen, pasear o bien ira un bar en donde ni diálogo tienen o a escucharsonidos de una música que. ni siquiera entienden.

En esta juventud su existir y vivir es comoandar, sí'n saber andar, ir y venir en un mundoficticio que cuando se haga realidad no sabránhacerle frente y entonces será demasiado' tarde.

iNo, a esta juventud sin vida, sin sensibilidad,sin inquietud! Creo que ese no es el camino. Sus

.vidas han de ser otra cosa o simplemente esoque ellos tienen y no comprenden: juventud, ju~

ventud consciente, responsable. iJuventud, nadamás y nada menos!

Falta hace que éstos o éstas despierten y dejende hacer tonterias en ese vagar vacío que sonsus jornadas diarias, su vida misma.

Alegre juventud, claro está. Sincera juventud,cómo no. Pero cuidado, no confundamos términos.Porque nunca una juventud será buena si no esresponsable en sus actos e inquieta en su exis~

tencia.

LO QUE NO. SABEMOS •...

(continuación de la página 6)

(de ,rural a urbano), puedo decirte que ,se: ave­cina una progresiva <1escris'tianizadón.. A noser que' clero y laicos'" '·consciente-s de la. reáH­dad mle les. ha tocado vivir' y responsables desu- dimensión apostólica, "pongan en marcha,sin corutemp,laciones, la re,novación inicia<1apor Juan XXIIII y ratificada poor el Oone-ilioVaticano II. Sería lamentable que, una vezmás, nos viéramos desbo'Nlados por la marchaimparable del acontecer histórico.

Concretamente, dos "cos'as, a mi modo de ver,servirian de' freno a'} fenómeno descri"stianli­z-ador: ,el conocimiento de la nueva corr:ientev-ita1 que, nos, gu,g.te O no, se ha, introducidoen 1~ &ociedad y 1a puesta en práctica de me~

dio,s -¡personales y ,técnicos-- ade,cuados paradarle un cauce cristiano.

En' otro caso, corremos el riesgo 1amenta­1.1e, -con su amarga comieid-ad, de estar a'pH­cando un -esfuerzo, unos remedios, unos' mol­des tradicionales a algo que ya no existe. Másexacto, que ha tomado otros derroteros, lejos,cada vez más' lejos, de todo influjo cristiano.¿Dónde eSltá el fermento- evange.lico que pe­netre, -gue sazone, que transfig.ure a la masa?

Por razones de espacio, cortaJll1os aquí laen:trevista, para co.n,tinuar' en el próximo nú~

mero, buceando en el claro y profundo' hon­tanar de este' sacerdote j'Ov-en y tremenda­mente consecuente que se llama P. Apar.icio.

Muchas grac'ias, pada:-e.

C"melo MELüAR

r;=::::::::::-=:l~ el mes de MARZO •

~ 2 al 8 D. Pedro Roncero 1~. 9 al 15 D. Ricardo Gil _t 16 al 22 D' Antonio Menchén tl 23 al 29 D. Eduardo Malpica i! 30 al 5 de Abril D. Sebastián Rodriguez ¡

1- Médicos de guardia en MARZO !

Domingo 2 D. José Muñoz de Luna, ¡:+ 9 D. José Luis R,odJÍgl1ez¡ 16 D. Ricardo Novo ¡

¡ Miér~oles 19 D. Antonio Cabanasl DomilJgo 23 D. Jo!-é Muñoz de Luna lt » 30 D. José Luis Rodríguez (--_._..-._._-

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15 RECORTES DE PRENSA Febrero 1969

LA AUTONOMIA DE LA UNIVERSIDAD

La autonomía se puede referir algobíerno, a la financiación, a la do­cencia y la investigación, y a la selec­ción del profesorado. Las autonomíasrealmente importantes son la autono­mía de docencía, que se traduce en lapreparacíón de los propios planes deenseñanza y de la propia organización,y la autonomia en la seleccíón delprofesorado. La autonomia de gobier­no es instrumental en el sentido deque es la base de esas otras autono­mías; y la autonomía financíera hayque entenderla hoy con un valor rela­tivo. No se puede pensar que ningunauniversidad del mundo, incluso aque­llas que aparecen como privadas,cubren gastos con sus propios fondos.Hoy, casi todas las universidades, enmás o menos, lo hacen con fondos pú­blicos, del Estado. Lo importante, des­de el punto de vista de la autonomía,es que haya una libertad más O menosamplia en la distribución de los fondos.Podrfamos decir que la autonomiafinanciera eS autonomía en la redac­ción del presupuesto para atender a laspropias necesidades.

La autonomia tiene peligros. Uno,que la libertad no sea bien autorizadayen lugar de servir el interés cientí­fico, la posibilidad de dar una mayorflexibilidad a los estudios, se utilicepara servir intereses particulares; estees el mayor peligro de la autonomía.Otras veces se han hecho experienciasparciales de autonomias y no han dadobuen resultado. La autonomía no esuna receta mágica; sirve para eso, para

una mayor libertad, para una mayoragilidad.

La verdad es que los estudiantes tie­nen un perfecto derecho a participaren la gestión de la universidad. El úni­co problema es matizar aquellos puntosen los que tienen competencia y res­ponsabilidad. A fin de cuentas, son losbeneficiarios de la universidad; losdemás somos un poco servidores dela universidad, del pais y de los pro­pios estudiantes, para Jos que la uni­versidad está establecida.

Realmente la sociedad lo que hacees presentar demandas y apoyo. Laparticipación desde el punto de vislasocial es esto: demandas y apoyo. Esdecir, apoyo a la universidad y deman­das a la universidad, que €s ya cues­tión polilica importante. Lo otro, comoesas demandas se pueden satisfacer,es ya un problema técnico.

(Prof. Sánchez AgestD, "Revista lll, febrero de 1969)

Ir'~s-;;;;B-;;~~''l

Revista mensual de lo Parroquia de lo !

IAsunción de Nuestro Señora t

Director: tt Jo!é Antonio Fernández Rodríguez ~

I~ Redacción y Administracción, I

I

Reyes Cató!.icos, 22

Impresa enet Imprenta Rodríguez, Manzanares ~i 11 Gral. Sonjurjo, 5 - Año 1969 tI Opt.o Legal,~. 48 • 1968 t--.---._-..-.--

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Siembra MU5LCA.L 69 ~ ,16

j) .d-a , "' ..

lnu:J.lca

Escribe, MARY GRACY

•

En la actualidad se habla mucho demúsica. Es más, yo dirla que éstallena muchas horas del tiempo de losjóvenes; pero es una verdadera penaque esas aficiones musicales sólo lasencaucen hacia esas canciones que nison rítmicas} ni melódicas, sólo sonuna serie estridente de ruidos, y pareceser que cuanto más gritos, chillidos yruidos disarmónlcos tengan, más pri­van en la juventud y, sobre todo, si elintérprete es un personaje estrambó­tico de largas melenas y ropas origi­nales.

No pretendo con esto decir que todala música actual sea mala, nada máslejos de mi; por el contrario, estoyconvencida de que hay canciones quebien por su ritmo, o 'por su melodiamerecerían estar en el candelero de laadualidad mucho más tiempo del queduran, pero aun no figurando en losprimeros nÚmeros de los "Hlt- Parey"siempre las oimos con agrado.

Si estas canciones las escuchamosal cabo de los años con placer, ¿nocreeis que mereceria la pena siqlllerauna vez intentar oir, no digo ya unazarzuel-a? si~o upa oh.fa _de un compo­sitor clásico?

Ya sé que hablar de música clásicaen estos tiempos es pasar por unantiguo y una persona que vive fuerade época. Pero yo me pregunto: ¿Esaspersonas que así opinan saben, en rea·lidad, qué es mÚsica clásíca? R.eco­giendo, la opinión de eruditos en estamateria, música clásica es: Todamúsica que ha dejado algún valor,que ha enseñado caminos nuevos enel arte de la composición. Pero estono quiere decir que fuera solamentela de los siglos pasados, la de unVivaldi, Bach o Beethoven. Tenemos

una serie de autores contemporáneos,cuyas obras podemos encuadrarlas enlas de música clásica, aún cuandoahora se llamen música selecta, o deconcierto, etc. Entre ellos tenemosdesde un Falla, R.odrigo, TUTina y másaduales un Luis de Pablo o un Cris­tóbal y Ernesto Haffter, esto eú España;en el extranjero hay una serie intermi­nable de autores cuyos nombres· solosocuparían varias páginas.

Cierto que las obras de nuestroscontemporáneos son difíciles de com­

.prender, son lo que podríamos calificarde raras; son duras al oido, pero lopue si hay de verdadero en ellas es elesfuerzo unánime de esta nueva gene­ración que busca caminos nuevosy nada fáciles, como es el de 'la can­ción YE-YE; para encauzar ese deseode comunicación de sus almas 'con lasde sus semejantes.

Si pusiésemos un pequeño granitode arena de nuestra voluntad, no digopara oirnos una Sinfonía completa alprincipio sino simplemente para tralarde comprender el esfuerzo, los trabajosy sinsabores y también todo el senti­miento y poesia, dolores y alegrías, enuna palabra, el alma del músico, quecada obra lleva en ,i, creo sin lugar adudas. que al príncipioaguantariamos,por asi decirlo, unos pocos compasesde esas maravillosas composiciones,pero, poco a poco, iriamos aficionán­donos a ellas y podriamos pasar ratosmagníficos; deleitándonos con esas ma­ravillas compue~tas por hombres a losque Dios dotó de facultades para ha­cerlas y que, por nuestra apatía O, porllev.ar la corriente a la gente al noafirmar que oimbs con placer "Algo

-pasado de moda," somos incapacesde disfrutar.

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17 PARROQUIA VIVA Febrero 1969

El cronista se halla perplejo, al reflejarel movimiento espiritual, específico, de e5~

te mes de enero. No sabe si entonar loslaudes a la piedad tradicional, que se re ..fugia pDr ~stas calendas en las ermitas deSan -Antón, Virgen de la Paz y San Bias,o escribír una elegía, porque el puebloya no vibra como antaño con esas devo­ciones. En la duda, el cronista prefiererelatar los hechos escuetos, dejando elcomentario -favorable o contrario­abierto a las sugerencias de cada ledor.

FESTIVIDAD DE SAN ANTON.- Desde lavispera, toque permanente de campana y,por la noche, hoguera enorme frente a laermita. En su día hubo misa solemne, a lasonce de la mañana, con panegírico a cargodel R.P. Generasa de Barcenilla, Caadjularde esta Parroquia.

FESTIVIDAD DE SAN BLAS.- Se celebró,como de costumbre, la novena, misa solem­ne con panegírico y procesión. los cultosestuvieron dirigidos por el R.P. Cristina delCarpio.

VIRGEN DE LA PAZ.- Navena predicadapor el R. P. Juan Concia de Echalar. La vís­pera, el consabido toque de campana,durante todo el día, y fogata nocturna. Enla fiesta, por la mañana, misa solemne,con panegírico a cargo del predicadordel novenario; por la tarde, procesión,con cohetes y todo.

CURSOS DEL P.P.O.-Duranle lada el messe ha recibido, en el despacho Parroquial,la inscripción para los cursos de radio­televisión y corte-confección. La afluenciade aspirantes ha sido enorme, alrededorde 180. La Parroquia se congratula de verel interés que han despertado estos cursosde promoción y agradece el P.P.O. su efi­caz presencia entre nosotros.

UNIDOS PARA SIEMPRE (Enero)

Emilio Megía Mansilla con Fe-rnanda Villar Ló~

pez; Pedro Torres Silva con María Lorenza Accs­ta Parrado: José Gallego Díaz Roncero con Tri­nidad Muñoz García; Manuel Sánchez LugarnuevoNieto Márquez <:on María Consola-ción FerreroPrieto; Alfonse Criado Callejas con Antonia OrtizMoya; Valentín González Ruiz con Amelia Man~

zanares Díaz.

NUEVOS HIJOS DE DIOS. (Enew)

María Teresa Cabrero Noblejas: Venancia Ji­ménez Serrano; Manuel Jesús Rivera Jiménez;María de los Angeles Parada Maese; Gabriel Fer­nández Pacheco Callejas; Julia Gallego Maese;Manuel Esteban García Cañizares; José Luis Ga­llego Rodríguez; Esther María Fernández Guerrero;Antonio Serrano González Nicolás; Antonia PilarCristina Sánchez de la Blanca Romero Nieva; DavidPatón Almarcha; José Luis García Vao Atienza;Juana Sánchez Carnerero Espinosa; José AntonioIzquierdo Jiménez: Ignacio Antonio Iniesta RuizPeinado; Miguel Angel Velázquez Parada; Maríadel Rosario Briones León; Mcdesto Rodríguez Me­rino; Luis Miguel Monreal Camacho; Josefa Lópezy López Manzanares.

DUERMEN EL SUEflO DE LA PAZ. (Enero)

Isabel Lara Cubas; Juan Taravilla Ballesteros:Antonio Rodríguez Díaz Pínés; Antonia Peña Ta­lavera; -María Garrido López de la Manzanara;Ascensión Ruiz Elvíra Villalta; Javier AntonioLópez Camacho Gallego; Antonio Maese León;José Peña Galindo; Emilia Morales Sánchez; An~

tonio Callejas Camacho; Petra Fernández PachecoGarcía; Dolores Ubeda Mazarro; Antonio LópezGarcía; Angel López de la Osa Sobrino; AníbalPedrero Rodado; Pedro Carrión Márquez; TeresaRuiz Cabrara Municha: Palmira Caba Maeso.Párvulos: María José Sánchez Migallón Martín:Simona Guijarro Fiérrez.

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Siembra RINCON DE LOS AUSENTES 18

Cría de ganado en régimen de estabulación

Un manzanareño inventa un establo mecánico

Entre los grandes problemas que tiene laeconomía española, u-no de los principales, porno decir el primero, es la crisis que sufrennuestra agricultura y su anexa la -ganadería,debida, entre .otras co&as, a sus' primitivos sis­'temas de trabajo y desenvolvimien,to econó­mico.

Actualmente estamos viendo cómo muchosneg<odos de esta cl'ase desaparecen, ya que su

Don José Nieto Lozano

reil1tabilid·ad es, tan - escasa que difícilmentepueden vivir de ellos sus p,ropietarios y mu­chos de los que lo hacen, S'ólo se debe a gran­des sact'ificios personales.

Ante la angustia de esto-s problemas, queestwn prod.uci.endo la d€spoblación de pueblosenteros y la emigración de cientos de personasa .las gran-des urbes industriales, un p'a-is-anonuestro, lejos muchos años de nuestra ciu-dad,pero presente en espíritu en ella y enamoradode sus tierras manchegas, ha querido presen­tar solu~:ones a la actual situación, y si ayerfue un tr,actor de ,características especiales,que pr,esentó en una de las últimas edicionesde nuestra Feria del Campo, hoy su brillanteingenio nos trae la creación de un ESTABLOMECANIZADO, que bien pudiera ser la clavepara los problemas de la ganadería.

Don José Nieto Lo-z.anú --este es su nÚn1­bre:...- es un manzamireño (lue vive en Bar­celona y trabaja de chó-fer -- mecánico en la

ern¡presa de construcción naval «V,apores Sue­rodiá», el cual, sólo con su tesón de gran man­chego, adquirió su profesión .y perfeccionó susconocimientos de mecánica hasta llegar a crearingenios por su cuenta, abriéndose camino enla vida brillantemente.

E-n-terados de su nuevo inven,to --¡pues sonhastantes los que tiene en su haber-, ennuestro a,fán de honroarle y presentarlo y detraer la primacía de la noticia a nuestros lec­tores, hemos acudido al mismo, en una de susestancias en nuestro pueblo, para que nos in­forme sobre sus realizaciones, habiéndonos ma­nifestado lo siguiente:

~((Dad.a la situ,ación actual de la ganade­ría, se hace inminente Ja consabida reestruc~

turación. E'sbud;-üs minuciosos de estadísticay después de genética y zootecnia han demos­trado con eiVid€l1c-ia el a1to grado de p-roduc­ción de carne que se obtiene del ganado enrégimen de estabulación con re,s.'Pecto al arcai­co S'istema del pastoreo tradicional.

En roec,to, las calorías que la oveja enconcreto emplea eii.'; su caminar para su tras­lado hasta la zona de pastos, se cou'Vjertenen un·a considerable 'Pérdida de peso;: este de­l'ir-oche de riquezas, junto con los numerososgastos que requiere el cuidado de estos an'i­males, hacen insostenihles' su mantenimientopara e1 ganadero propietario que,. como, con­seooenci·a, se deshace de ellas', habiéndose per­dido en estos últimos años más de cinco mi­llones de ca:bezas de la cahaña na-cional.

Bien. La estabulación es, pues, el modo másadecuado para la mayor producOÍón de carne.Pero chocamos con su encarecimiento a causade la ,cuantiosa mano de obra de que hay quedisponer en los establos p,ara el barrido' ycuidado en general de estos animales, p'araobtener un adecuado gr·adú' de higiene. Ks',pues, esta higiene lo más co'stoso de m.ante~

. ner. De aquí la necesidad de adaptar la meca-nizoaciÓln a los establos.

Esta se puede conseguir de la siguienteforma:

Preparando un red,nto reotan~lar paracabida de cien ca:bezas, por ejemplo, con una'anchura medio metro mayor que la longitudmedia de la oveja y una longitud 'estimahle.para la colocación de 'las' -cien ovejas -unaal costado de la otra-, siendo el pesebre co­rrid-o a lo largo. del estabJ.o. El suelo estaráel-evado, ·aproximadamente, un metro por en-

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19 RINCON DE LOS AUSENTES Fehrero 1969

cima del nivel del terreno y lo constituiráuna cadena de baldosas de cemento de 0,50por 1,50 metros aproximadamente, que sobreunos raíles laterales se deslizarán continua­mente, cuando a vo1untad se ponga en ma-,:'cllala tracción recogiéndose por debajo de símisma.

E's decir, que cuando sea necesaria la lim­piez,a ,se evacuará el establo, y se pondrá enmarcha la cadena mediante un motor, siendoel estiércol transportado hasta un extrem-o delestablo en el que J,a cadena se elevará enforma de ramp·a hasta salv;ar la altura de uncamión o remolque en el que será vaciadodirectamente. Por otra parte, los orines severterán !lor las ranuras existentes entre bal­dosas hasta una canal común, consiguiendoasí que el suelo permanezca continuamenteseco.

A todo 10 largo del establo aparecen espa­c:osas ventanas especiales por las que desd-eel exterior un hombre podrá ,piensear el .I?a·nado a.demás de obtener una ventilación y luzexcelentes, ya que se puede orientar con res~

pecto a 'la trayectoúa del sol La e,ntrada' ysalida estará en el extremo opuesto all de larampa.

En un conjunto de varios establos, un solomotor sería suficiente para el movimiento delos suelos móviles, pues todos estaóan conec-

tados por medio de embragues individuales.

De este modo dos únicos hombr€$ podíanrealizar en un tiempo mfn"imo la total lim­pieza de un número de establos c&paz- de al­hergar a mil cabezas. Esta propiedad podríatener ,a sus alrededores unos terrenos para elcultivo de sus propios forrajes que abonaríancon el estiércol reco.gido y podrían atenderestos m'smos hombres con ayuda de las co­rrespondientes máquinas.

Es ohvio añadir que esta reducción de tra­baj o y gastos redundaría en una rentable ytotal explo:tacián de la ganadería que estaríaseguida de interesantes y prometedoras co,n­secuencias, con 10 que se contribuiría en granmanera al restablecimiento de esta gran fu-en­te de riqueza.»

Estas han sido las man.ifeS'taciones del se·ñor N:eto Loz·ano, habiéndonos mostr,ado unamaqueta de su invento, la cual hemos exami­nado detenidamen,te, encontrándola muy inte­resante, por 10 que fel'ieitamo's al mismo, de­seándole un feliz éxito en la materializacióncomp~€ta de sus ideas', al p,aso que las ofre­cemos a cuantos estén interesados en ellas,con la soIa condición de que se pongan en con­tacto con nuestro gran paisano y brillanteinventor.

loodoro SANCHEZ MIGALLON

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I ALMACENES GIGANTE iJ 1t iIIorcando una pauta en el estilo del bien vestir l1 !t No nos conformaremos con ser unos Almaceues más, f1 seguiremos la rula asceudente de superación, todo

1 EN BENEFICIO DE NUESTROS CLIENTES 1

! !! Generalísimo, 23 Manzanares l-----+------.--'----------------- --- ----...---.------Tu pueblo necesita de ti. Engrandécelo haciendo crítica constructiva

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jI! I~PRESIONANTE ASPECTO DE LA NAVE DE PRENSADO

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