EDICION 02 CONCEPCIÓN, DICIEMBRE DE 2010 PORTADA: ILUSTRACION DE IGNACIO SÁEZ IMPRESIÓN: EDICIÓN CASERA CORREO: EDITORIALCONTEXTOCRITICO@GMAIL.COM “TODA OPINIÓN AQUÍ VERTIDA, ES EXCLUSIVA RESPONSABILIDAD DE LA RAZA HUMANA Y SU DEVENIR BAJO EL FILTRO SUBJETIVO DE LOS AUTORES DETERMINADOS”

Encontrándonos desde una mirada integral y critica, capaz de interpretar las distintas miradas que los individuos/as tenemos con respecto a algo tan intengible y volátil como lo es la Identidad, intentamos desde diversas perspectivas poder profundizar y ahondar de manera fragmentaria, conjunta y destructiva, esta idea social con respecto a de que manera estas (las identidades) se encuentra en crisis. Entendiendo crisis como una coyuntura de cambios, de mutabilidad y de fracturas evanescentes. En éste número colisionan y se encuentran distintos humanoides, quienes desde sus subjetividades y "objetividades" nos entregaron sus entrañas (sus interpretaciones). Intentando no ahogarse ante las pataletas

de un mundo sin raíces, agonizante y deshumanizado, esto en un trabajo fuera de cualquier deber convencional, estructurado y enajenado. La búsqueda por concretar este numero vuelve a dejar las puertas mas abiertas que nunca y nos permite crecer y continuar nuestro camino de exploración sin fin. Por esto (Con)Texto Critico, sin ningún afán por definir y clasificar dictatorialmente el concepto de Identidad, propone la reflexión, el análisis, la crítica como una dialéctica de perspectivas y opiniones. Por esto, es que son textos con un contexto social, histórico y caótico, que buscan la apertura de la conversación y el dialogo ante todo.

Editorial

En el frescor de la edificación “revistera” y de vanguardia, se pueden citar muchas edificaciones que incorporan el concepto de “función oblicua”* (como se entiende según la definición de Claude Parent). Planteamientos que estuvieron por cerca de treinta años en pausa, hasta que vemos (discutiblemente influenciado o no) obras que hacen referencia a estos postulados. Dentro del campo de lo hipotético, en parangón a lo Científico; al método de la experimentación de laboratorio, sus planteamientos proponen, sino una respuesta, la posibilidad de imaginar e indagar opciones

utópicas en resolución a la crisis que ya en aquel entonces se corroboraba en forma vivencial. El libro, ya desde las primeras paginas, suena similar a la literatura de las especificaciones técnicas. Tiene aquel talante dictatorial de lo que “será” y lo que “acontecerá” sin mediación. Recomiendo el libro y me ahorro una reproducción extensiva. Pero me limito a expresar la desconfianza ante el planteamiento, el que no se sabe si tomar por serio o en plan irónico; hasta decantar por el final, en un planteamiento que mas bien trata de sustentarse en lo político y económico para hacer concreta una especulación que solo aparecía como formal y compositiva.

De Espaldas a Alguna Opción Especulativa Lo Netamente Útil / Lo Netamente Inútil Paredes

* La Función Oblicua de Claude Parent se alza como respuesta a la configuración de la ciudad moderna, principalmente al conglomerado vertical de células habitables y también a su formulación como trama de vectores vehiculares que asumen la distancia salvable a petróleo y propone la idea de un plan proyectual de ciudades que logre recuperar la rugosidad natural de la geografía natural. Como enunciado general: Usando el Plano Oblicuo como generatriz de este nuevo tejido capaz de devolver al hombre su relación táctil con el suelo y la dinámica necesaria para solucionar la congestión contemporánea. Cierra su propuesta proclamando que es la misma estructura global la que debiera ser transformada, en el mismo modo que su solución para lo espacial.

Su proposición, en toda arista, ofrece un cambio estructural. Quizás en este preciso punto es donde radica la incredulidad del lector y el utopismo increíble que tal diagonalidad inviste. Sabemos que encargos y clientes, siempre han estado resumiendo el espectro creativo a una economía ajustada (monetaria y teórica). El ejercicio arquitectónico no demanda al acto irracional, este queda relegado al mundo onírico, por lo general emplazado sobre los tiempos libres y potenciado por una necesidad personal. Evito el sectarismo propio de cada profesión (con dificultad), mencionando que el descubrimiento “sin

utilidad aparente” está también en otros planos del conocimiento. …Cuando Newton transformó las leyes de la gravedad para explicar cómo los astros se mueven, la gente dijo “ah, que interesante”, pero no servia para nada…hoy podemos enviar a alguien a la luna y para eso usamos las leyes de Newton…(Mario Markus en The Clinic Nº367). Pienso en los orígenes de los Hackers, en el error de Colón. El descubrimiento inútil está en toda rama del pensamiento. La ciencia lúdica es simplemente una protesta contra el deseo de hacer las cosas solamente porque sirven para algo. Y aquí quizás este el origen de ese distanciamiento entre arte y arquitectura, a pesar de la insistente defensa que algunos mantienen.

Al vuelo recuerdamos la obra de Alejandro Zaera[1] en el Terminal Portuario de Yokohama, los trabajos especulativos de Vincent Guallart[2] (quien utiliza la geometría fractal de Mandelbrot para replicar los modos naturales), como la Montaña en Denia, algunos de los proyectos de Bjark Ingels[3] y también otros de MVRDV[4]; pero

deben ser muchos mas los que no vienen al recuerdo: quienes han citado la obra pionera de Claude Parent junto a Paul Virilio al plantear una nueva “Funcion Oblicua” en la arquitectura.

[1] [2] [3] [4]

Algunos han podido hacer del pensamiento lúdico un resquicio en el mercado, e infiltrarse en los espacios de lo viable; como haciendo del juego mismo una forma de imaginario expectable. Pero hay que considerar que sigue siendo poco lo que ha salido de la pura ensoñación. Hay algunos que han unido su obra concretamente arquitectónica al trabajo dilucidatorio que hay en sus juegos oníricos. Sin el sueño de Étienne-Louis Boullée [5], ni los distorsionados Construktivistas Rusos[6], poco de lo que hoy se asume como moderno y se asume como lógico hubiera tenido espacio en el universo creativo de quienes hoy lo ejecutan. Soñar implica abrir un vector

direccional, dar a luz y presencia a gestos que fuera de la cristalización especulativa no hubiesen siquiera tocado la línea de lo imaginable. Sigo pensando que la diagonal que aparece como descubrimiento o aporte sobre las estructuras primeras, no aporta lo que al ser formulada se estimó. Proveniente de un autor singular (o binario, en este caso, plural en otros, etc.). El pensamiento se encaja en lo humano que difícilmente colinda con la coherencia; lo humano de por sí suscita dudas, la relatividad de la materia (que germina del indeario humano) ya confunde demasiado como para sostener certezas.

[5] [6] Cenotafio de Turenne, Ettiene-Louis Boullée (Siglo XVIII) Wolkenbügel,

“percha de las nubes” (fotomontaje), El Lissitzky (1924)

Por tanto, y cerrando alguna idea concreta: Podemos decir que fuera de la coherencia y de la aplicabilidad de sostenimientos taxativos, el pensamiento experimental que nos lleva hacia postulados “sin utilidad aparente” nos acercan a la medula misma del ser pensante (por tanto social, múltiple, identitario, sensible) y revelan posibles resoluciones futuras que, si se me permite confesar, tampoco tenemos la certeza de si serán coherentes, justas o adecuadas. Conceptos que existan quizás sólo en los diccionarios

Vivir en Lo Oblicuo Claude Parent Editorial: Gustavo Gili Colección:GGmínima La hipótesis de la 'función oblicua', que proponía el plano inclinado como soporte para el asentamiento humano, fue enunciada en 1964 por Claude Parent y Paul Virilio. Este texto Vivir en lo oblicuo trata de ofrecer una idea de conjunto de ciertas soluciones para la concentración urbana, ilustrando con algunos ejemplos concretos las ilimitadas posibilidades de esta nueva forma de ocupar el espacio.

Reseña de Editorial

En cuanto se piensa en la planificación de una ciudad, la primera palabra que contribuye a la proyección de esta, es la identidad, ciudades como Chandigarh, Nueva Delhi y Brasilia son ejemplos claros de cómo arquitectos y urbanistas demuestran sus capacidades de proyectar ciudades, que se enfrentan a distintos rasgos sociales al momento de analizar una urbe y por lo consiguiente desarrollar un plano maestro que apoye la pro activación de estas. Si bien la conceptualización de un espacio pensado en un habitar sin clases sociales, ni aspectos limítrofes separatistas o jerarquizadores como Brasilia toma fuerza en la programación de una ciudad, el condicionante

principal como es la política que rige el gobierno puede cambiar en su generalidad la formación y el avance del vivir en esta. Aunque hondando en detalles que a simple vista se invisibilizan podemos concluir que ambas fases de esta ciudad, el periodo de construcción y proyección basado en un régimen comunista( 1955), frente al periodo capitalista de desarrollo y estabilización de la ciudad ( 1965) concretan y confinan en una visión totalmente impávida y tortuosa de concebir un plano modernista. Principios que se desarrollan de manera distinta pero que marchan en paralelo; un mismo método donde el trabajo y la explotación del habitante común enuncian la distribución y trazado de la capital.

Brasilia: Experimento de una extirpación. Camilo Bustos

Brasilia se forja entonces como una obra poética y plástica en forma de oda al trabajo, al planteamiento de la ciudad como un soporte espacial para el impulso perfecto del trabajo, infundido con tendencias de Le Corbusier sobre ciudades carcelarias, una disposición de cubos y rectángulos en una explanada limpia amplia, que de manera icónica marcan un hito, pero de la forma vivencial, concreta y mas aun humana dejan de lado factores que respetan procedimientos y desarrollos de distintas culturas que evocan en su mayoría a una concepción del habitar mucho mas vasta y libre que la modernista nos plantea, esto se demuestra en pequeños gestos concebidos por los arquitectos a cargo, donde las distancias de las viviendas y los lugares de trabajo son

pequeñas, donde estas son formuladas y reducidas en espacios mínimos que solamente se comunican con las vías que derivan a los espacios designados para el trabajo, dejando lugares como el lago o parques desconectados de estas casi en su totalidad. El origen de un orden totalitarista y rigurosamente controlado desde la medida de sus calles, las distancias, la planificación de las pocas plazas y de lugares gratos para la sociedad, contribuyen y rememoran en su mayoría al control de masas y al desprendimiento de estas por consecuencias de sus identidades que para los sistemas económicos actuales y anteriores estas no son rentables para el desarrollo capitalista del país (Brasil), quebrantando con los paradigmas entablados entre

ciudadanos que conceptualizan la pluralización de las acciones, “ aquí en brasil todo se comparte” es una de las frases que los citadinos proclaman al visitante, las relaciones que conjugan finalmente a la nación completan y responden básicamente a una percepción de la vida mucho mas pasajera y efusiva, , lo que en el contexto de la ciudad planificada de Brasilia, se intenta erradicar de manera metódica y disimulada por una automática y calculadora, para a fin de cuentas desconcentrar el pensamiento critico/colectivo y desencadenar un proceder involuntario, irreflexivo y autómata en las personas. Aquí en estos falaces actos arquitectónicos y urbanistas es donde se una vez mas germina el autoritarismo político dominante con ayuda

de la arquitectura, es donde, en esta ciudad insertada en el centro de America del sur en que se desperdiga la mente humana de sus pares para inconcientizarlo y dejarlo ajeno a la tierra donde se desarrollan, si, libres para el capitalismo de cualquier sentimiento o arraigo pero encarcelados para un solo fin, la producción, el responder al sistema corporativo/político en el que se existe. Existe si de contraparte el rechazo de la población brasilera que se demuestra con el diario debate de esta ciudad con otras del país, todas creadas y concebidas en su mayoría por la colectividad tanto los barrios marginales como los comerciales e incluso los empresariales, que aun así sirviendo siempre a minorías

dominantes, respetan en pequeñas líneas condiciones de vivir centradas en el habitante brasilero, siendo Brasilia en todo el continente sudamericano una ciudad preconcebida por un par de mentes y no por una colectividad, fenómeno que en el resto de la población forma un desapego con esta, evitando la presencia de inmigrantes y del mismo modo las concentraciones culturales, intelectuales, protestas o cualquier manifestación colectiva por una cosa de repudio al arribismo cultural que se vive, que concentra a políticos de cargos importantes que en sus comienzos derivaron en la ciudad por intereses económicos.

El fuerte lazo que mantiene Brasilia con el poder económico se visibiliza cabalmente con sus construcciones, con el manejo total de su espacio y con el desequilibrado y aun mas inconfundible convenio arquitectónico con la minoría dominante, en la que históricamente la arquitectura ha servido para la manipulación sosegada como de igual forma disimulada por decorosas formulas exquisitas que desconcentran al habitante para así hacer mas efectiva su finalidad, la total erradicación de un sentir latinoamericano, suprimiendo este sentir con nuevas propuestas Europeistas de vivir, inspirados casi todos en procesos ajenos a los nuestros, donde la mente latinoamericana, por siglos ha sido hostigada por decisiones del primer

mundo, como una suerte de mantención arquitectónica y social de ciudades para la perfección de estas en relación a la producción lo que contribuye al enriquecimiento de otras naciones, es así como políticas extranjeras y mentes foráneas invierten de mano de la arquitectura en espacios amplios ornamentales y atrayentes para fingir el bienestar de los que allí viven, donde esta inversión es llevada exclusivamente a los sectores de trabajo de la ciudad, como el Brasilia, donde se elimino todo barrio similar o parecido a una Fabela y se instalo el brutalismo vivo de crear bloques donde con una simple solución casi irónica de liberar el primer piso y que todos estos bloques se miraran entre si, crearía vida en estos, error, pues ahora si se recorren estas

súper cuadras como Niemeyer las nombro ( inspiradas también en el fiasco de las unidades habitacionales de le Corbusier ) se observa la soledad misma, donde las almas de las personas circundan desde los perímetros de acceso de sus casas hasta el paradero de autobuses y nada mas, esto es una imagen mas de cómo disminuir las voces del descontento y el reconocimiento del espíritu latino, indígena, que se configura entre líneas totalmente contrarias a las europeas o americanas, estas líneas profundizan en la espontaneidad , en el descanso y el equilibrio de la producción, en el desapego de la pertenencia individual del terreno, siendo el movimiento y la fluidez colectiva un fundamento del habitar, simples fijaciones o puntos en que la arquitectura moderna, de

ningún modo ha hondado, dejando para nosotros modelos modernos que intentamos plagiar de manera torpe siendo crédulos de tendencias que no se configuran de manera optima con lo nuestro, con nuestra identidad. Una vez mas en un fracaso extendido los arquitectos deciden lo compartimentada que está la vida de la gente donde finalmente Brasilia es un ejemplo de la transición desde un punto utópico/ teórico hacia un ejercicio proyectual real aplicando ideas determinadas de Niemeyer y Costa y adaptándolas vagamente a la realidad de brasil, las ideas aquí trabajadas de Le Corbusier son trasladadas prácticamente de manera intacta desde el otro continente diametralmente distinto al nuestro, lo que

denota la insuficiente cognición de identidad y rasgos que predominan en una cultura única y gigante como la brasilera o quizás es la talante mas lacónica de ilustrar ese desesperado afán de europeizar nuestras concepciones, cánones y formas de vida latinas, en que la arquitectura da la espalda caprichosamente por medio de una dictadura de formas plásticas, curvas y teorías que sin saberlo muchos, afectan y se intrometen agresivamente en el desarrollo propio del continente, con estos ejercicios proyéctales se intenta matar toda afloración contestaría a la sobreexplotación que se vive por siglos en America latina, sosegando hasta las minima expresión de quienes somos, extirpando a través de este experimento la esencia del indígena o del

afroamericanos, que piensa y se manifiesta desde los comienzos como una negación al abuso y al aprovechamiento de nuestras riquezas, haciendo olvidar que el entorno nos condiciona; es aquí cuando debemos aprender a discernir si ser maquinas programadas para un conjunto mínimo de poderosos engañados con la palabra progreso, o un pueblo concentrado en el mismo, en la unidad, con un arquitectura que se mira frente a frente con sus ocupantes y la tierra, directamente con sus raíces.-

Revista Habitar Costa Rica 1985

Hago el llamado a olvidar tapujos y mirar hacia lo profundo de cada uno de vosotros, esa esencia volátil que nos define como seres auténticos. Dejar de lado la objetividad y pensar desde el inconsciente. Éste no es un texto redondo, es infinito y surge de un cuestionamiento; cada uno obtiene su propia respuesta…si la busca dentro de sí. No me sentaré a citar a Freud y su teoría del psicoanálisis, ni a Jodorowsky y su provocativa terapia de la psicomagia. Tampoco está en mis planes redundar en las explicaciones existenciales religiosas ni supersticiosas. Lo cierto es que todas tienen un mismo hilo y casi la misma lógica, pero mi propósito es

descubrir qué hay detrás de esta lógica, qué nos define, qué nos condiciona, o nos des-condiciona. La historia comienza con un nacimiento, una madre, un padre y un hijo (dejo abierto a otros posibles personajes o la ausencia de algunos también), una nueva familia, un nuevo ser en el mundo. Su primera aparición, bajo la luz tenue de una vela, abre sus ojos y curioso observa a esas personas, su familia. Avanzamos en el tiempo y algunas cosas cambian, esa persona se ha desarrollado pero hay algo que se mantiene intacto; ante cada nueva aparición, la misma curiosidad y recato. Ese algo que se mantiene intacto, hace que este niño a través del tiempo conserve la misma mirada que cuando

La educación, inconsciente(Mente). ETZNAB

“Es todopoderosa la idea de un sujeto único” Jorge Luis Borges

nació, en la profundidad de sus ojos, un distintivo más allá de la natural curiosidad de cualquier niño normal. ¿Qué es eso? Ahora, busco esa parte de mi memoria, donde me explicaron qué es la identidad: autoimagen, memoria, valores, creencias, individualidad. Y ahora, pienso en la primera palabra que se me ocurre cuando me dicen identidad: impulso. Nacemos con un potencial, que depende de la educación que recibamos, lo desarrollamos o negamos. Día a día escribimos con nuestras experiencias nuestra identidad, construimos una realidad que subyace a nuestro inconsciente.

Esta identidad vendría siendo, el núcleo a partir del cual se conforma el YO, es éste el cual conjuntamente con la razón hacen posible la interacción entre las personas. Para algunos este núcleo es relativo, se moldea y distorsiona según el contexto en el que se desarrolle la persona. Este intercambio o tensión, sería la que determina la construcción de la identidad, donde las características individuales adquieren valor real y son un aporte para la sociedad. Sin caer en...ismos. Quizás muchas de estas explicaciones sobre la identidad, pecan por caer en la doctrina determinista; qué nos determina, el ambiente, la genética, el temperamento, la educación. La educación…volvemos de nuevo al mismo

concepto. ¿Es posible que exista una educación que no nos condicione a un cierto comportamiento social aceptable?, de todas formas qué es lo socialmente aceptable. A mi parecer (me disculpo si sueno soberbia), la verdad; que aclaro no puede ser la única verdad, porque siempre estará subyugada a mi propia subjetividad; es esa misma. La verdad es que cada ser es subjetivo, la realidad jamás será objetiva mirando dentro de nuestras cabezas, incluso los sentidos pasan a ser subjetivos y aunque si bien hay cosas que están más allá de nuestro entendimiento, el error es pretender saberlo todo, imponer formas de pensar, modas, aún la cultura que sin escrúpulos ha sido industrializada. Qué es lo que nos va

quedando si en un mundo descontroladamente artificial, nuestra identidad, supuestamente etérea, ha sido manoseada y manipulada por el mercado. Toda falsa autenticidad disfrazada de peinados, trapos, discursos, no son más que la cultura de la globalización, oculta tras el supuesto afán de vernos y sentirnos únicos. Si la realidad permanece subyugada a nuestro inconsciente…me pregunto si acaso han logrado manipular nuestro inconsciente, si esa educación, promesa del éxito, del desarrollo; ha conseguido adormecer nuestro auténtico valor como personas. El impulso. Esa fuerza temperamental muchas veces difícil de controlar, quizás sea lo último que nos queda de

autenticidad. Fuerza que la educación, se enfoca en reprimir, en lugar de encausarla. Tal vez, reenfocando la educación a entender la orgánica misma de la vida, del ser humano, a reconocer las individualidades; reemplazando el conocimiento, por sabiduría; las normas de un sistema social, por el sentido común, estaríamos privilegiando la creatividad, sacando provecho al potencial de cada persona, en lugar de coartar una individualidad basada en la aceptación de un orden pre-establecido. Reconocer la subjetividad propia y ser capaces de realizar una vida coherente con nuestros impulsos, para mí, es el desafío.

No puedo terminar la historia, porque no sé cómo terminará. Lo que sí sé, es que cuando una persona muere, el cuerpo se pudre; pero esa esencia con la que se nace, extrañamente continúa viva; usted defínala como le plazca. A mí se me murió mi primo, pero lo sigo sintiendo vivo y no es la memoria. Partí diciendo que este texto no era redondo, porque no se puede llegar a ninguna conclusión cuando se trata de la mente humana, quizás mi conclusión sea una interrogante más: ¿tiene relación el espíritu con el inconsciente? ¿Puede la educación transformar la identidad? Mi realidad subjetiva es mente racional, inconsciente, y espiritualidad (predominantemente espiritualidad). Creo que la educación es una de las herramientas más

importantes, por no decir la única; para transformar el mundo, pero de qué nos sirve aprender nombres, definiciones, fechas, mecanismos, si no les damos un sentido…una cabeza llena de conceptos muertos y un inconsciente errante, son la fórmula perfecta para engranar en el sistema por muy corroído que este se encuentre.

Ilustracion: Carola Aravena

Trato de entender la forma de hacer identidad, buscando teorías y frases complejas que muchas veces suenan bien, pero la identidad es realidad, es algo palpable, algo único, que construimos desde nosotros pero necesitamos de los otros, para revalidar el hecho de nuestra identidad, no busco explicaciones solo caminar por caminar, y ver como todos los días la esquina de calle Collao me hace sentir pequeño, diverso, renovado dentro de tanta gente, donde puedo distinguir mis verdaderos actos, aquellos que me hacen único, me detengo antes de cruzar la calle y observo a las personas esperar la micro es casi un desfile o una pasarela de entes que reflejan su estado de ánimo o su vida en ese insignificante momento, que para mí es crucial, los vuelvo a mirar pero ahora de forma más rápida captando imágenes al azar, al volver la mirada

hacia la vereda mi mirada se fija en distintos personajes que le dan una identidad al lugar, tanto las personas que piden plata, como las que venden comida, pasan hacer parte del lugar al existir tanto movimiento de personas, como entes tangibles, reales, que desarrollan su vida a través de la exposición en el lugar, un día entero estando detenidos en el movimiento constante de la masa que va y viene, quizá para ellos no existe identidad en ese lugar más que el hecho de que transita mucha gente de diferentes niveles socioeconómicos, creándose

una verdadera mixtura, que hace que identifiquemos actos que de forma inconsciente aparecen por la saturación de actos en donde me encuentro, por la misma forma en que aparecen con ese grado de instantaneidad y fugacidad no alcanzamos a retenerlos sino que pasa hacer una masa difícilmente definible, así como otras partes de saturación urbana, esa misma

Imágenes que se Apoderan de Otras Mario Aravena M.

Autor

saturación pareciera ir a la par con la densificación icónica en estos lugares, casi como una relación directamente proporcional, los signos pueden durar siglos o ser tan efímeros como su soporte físico, pero en todo momento los signos pertenecen a la vida cotidiana, los cuales se pueden interpretar como una forma de ser urbana. Movimientos, intensiones, preocupaciones, informaciones, llenan las calles de identidades ciudadanas, de consumo, mas allá de que el signo se transforme en una forma efímera o perdurable, marca dentro de la escala urbana una imagen del lugar, que muchas responde a lo que ocurre o quiere ser una imagen invasiva dentro de la ciudad denotando poder dentro de un espacio determinado. Naturalmente la preocupación surge debido al nivel de saturación de información, imágenes, publicidad, etc. Lo que hace reflexionar hasta que punto el ser humano podrá resistir este bombardeo de información, es evidente que la

saturación masiva de imágenes tiende a reemplazar

nuestra experiencia directa de la realidad por una experiencia simbólica, así como su enorme capacidad“hipnótica” tiende a paralizar el sentido crítico y a hacer que nuestra mirada, y nuestras ideas, se deslicen dócilmente por su superficie, casi como una imagen monumental que pasa hacer algo que esta de moda, o que quiere posicionar sobre otros por un tema de poder y marketing, estos nos conlleva a la idea de poder y dominio sobre algo que es totalmente público, el "horror al vacío", el ruido continuo, el movimiento constante, el flujo incesante que se ha convertido en algo que nos persigue en todas partes en todo momento", casi como una mosca que entra en nuestra casa y nos acecha, y que amenaza con "embotar nuestra sensibilidad temporal y encaminarnos hacia una situación de aniquilamiento de la cronestesia: de la sensibilidad ante el paso del tiempo y su marcha discontinua", del preguntarnos o cuestionarnos la

realidad en que vivimos. De cualquier forma como dice Matesse: mixtos o puros, los mensajes objetuales ocupan un espacio, ensombrecen, dejan saturado el campo perceptivo a la par que el campo real en que se colocan, creando rumores de fondo materiales cada vez más difíciles de superar, a la par de los perceptivos. Desde este punto de vista, las ciudades modernas se pueden considerar inmensos conglomerados de mensajes objetuales, donde el amontonarse de los estímulos hace imposible su percepción al receptos…por el contrario los museos son acumuladores, verdaderos y auténticos y oficialmente reconocidos, de mensajes objetuales. Entonces pensemos que desde el punto de vista del sistema social todas estas imágenes o mejor, parte de ellas que son dirigidas con un carácter popular por los mass-media (medios de comunicación masivos o de

masas) y por la propia calle al espectador, son en el fondo unas imágenes en muchos casos culturalistas y hasta sofisticados, por una fuerte manipulación del contexto o del sistema en el que estamos metidos. Tanto la sociedad definida como una superestructura que en la entran factores sociales, económicos y culturales va creando modas que condicionan la mirada del espectador y la mediatizan, variando el espacio en que la imagen acota un espacio que es considerado permanentemente, histórico, como en las obras que tienen la intención de la duración, propiedad de la mayoría de las obras calificadas por su carácter de artisticidad, a excepción de algunas corrientes contemporáneas u obras que tienen la intención de lo efímero como el arte ecológico, pobre, happening, etc, aunque contradictoriamente dejen huellas fotográficas o textos para los museos, y obras efímeras desde que se producen como el cartel, la propaganda política o el

letrero espontaneo que es tachado rápidamente y

calificado como el mayor ruido visual de nuestras calles, participa del contexto urbano, todo ello con un carácter efímero y un alto grado de obsolescencia por su enorme redundancia y saturación. También es importante otro aspecto: como la imagen dialoga con el entorno, muchas veces posicionándose de un conjunto o carácter de la ciudad para jerarquizarla o denotar su característica, el supuesto poder que han adquirido las imágenes en el espacio denotan esa oportunidad para denotar un aspecto que quieren producir, es decir, independientemente de su retorica visual y las técnicas de persuasión del propio partido la imagen se potencia gracias a un contexto social en el que surge o se impone, quizá eso es lo que ocurre hoy, la imagen no es la respuesta de algo a que acontece en el lugar si no mas la imposición de respuestas por la parte de las personas, para determinar ciertos espacios según

las imágenes que denotan, en este momento la imagen se quiebra aunque siguen existiendo imágenes que se apoderan de otras, existen imágenes subterráneas que aletargan ese poder de la gran imagen, casi de forma espontanea las personas exponen muchas veces de forma explícita su forma de pensar, como esos mensajes en los muros sobre el 73 o ahora sobre las hidroeléctricas o problemas sociales, incluso de evangélicos penando por el infierno se les viene, con este se rompe con el dominio u homogenización de estas supuestas imágenes de placebo por imágenes y mensajes que particularizan grupos específicos de personas que ven en la calle un medio para exteriorizar y buscar más adeptos, la calle y los muros han pasado nuestra identidad y el reflejo del descontento y de la multiplicidad de mensajes y realidades que vivimos.-

Así como Simmel analiza el movimiento (sociabilización), no al individuo (sociedad), en la urbanidad pretendo reordenar mis sensibilidades respecto a lo que éste mundo me entrega. Una ciudad que se compone netamente de edificios, calles y semáforos, mientras que la urbanidad responde a toda una ecología moderna, a los movimientos de los individuos, a las transacciones monetarias, a la actitud blasée1, a las interacciones fugaces que nos permiten liberarnos de las ataduras de la comunidad y otras cotidianeidades modernas. La actitud blasée es una de las tantas patologías

1 Disposición o actitud emocional que denota una indiferencia basada

en el hastío. Simmel, G. La metrópolis y la vida mental, 1903. www.bifurcaciones.cl/004/bifurcaciones_004_reserva.pdf

psicológicas que la libertad en la ciudad nos genera, podemos encontrarnos completamente solos dentro de la urbe, de la multitud y esta actitud nos protege, nos coarta de ser parte del mundo, del simple hecho de saludar al resto de individuos. Y ¿por qué libertad? Aquella idea políticamente usurpada, manoseada, cosificada, reorientada pero principalmente redefinida. Dentro de la ciudad somos completamente libres de hacer y deshacer nuestra identidad, de hecho podemos construirnos como individuos completamente distintos a lo que el cotidiano nos conoce. Y ¿por qué? Simplemente porque el individualismo de la vida moderna, de las grandes y pequeñas ciudades, como Concepción, nos convierten en extranjeros, en extraños, en simplemente momentos

La ciudad como espacio de liberación. Carolina Álvarez H.

fugaces en la percepción de “los otros”. Este individualismo, bastante criticado, por lo demás, traspasa todas las esferas de nuestras vidas, cosas tan cotidianas como: las relaciones entre personas, siempre categorizando y calculando el cuanto debo dar en relación de lo que el otro me entregue o el intento cotidiano de poder pagar menos por algún artículo, nos liberan realmente de las ataduras del respeto, de la relación humana con “el otro”. Y claro, es una cuestión criticable, pero bastante cierta en las relaciones impersonales, donde el deseo de supervivencia convierten a esta ciudad en una jungla de cemento. El dinero, una de las herramientas de coacción urbana, puede convertirse además en la COSA más subjetiva de la vida moderna: ¿cuánto es mucho dinero? Según

donde nos posicionemos, esta pregunta puede tener miles de respuestas. Éste fenómeno nos libera del intercambio cultural, personal y subjetivo, el hecho de intercambiar mujeres por vacas o pulseras por collares no se aplica en la sociedad capitalista. En ésta, el dinero es estándar, moneda de cambio que todo lo puede ser tranzar: las mujeres, los hombres, las vacas, la comida, las relaciones de pareja, etc. siempre tienen un costo y éste costo no esta normativizado. Éste, cosifica2 nuestras relaciones impersonales, transformándolas en meras transacciones monetarias. Vacía todo el valor simbólico de nuestra vida: sentimientos, intereses,

2 Reducir a la condición de cosa algo que no lo es. Por ejemplo: Transformar

las relaciones sociales en intercambio monetario: prostitución.

necesidades, frivolidades, angustias, etc. en una estandarización impersonal de intercambio. El hecho de sentirse extranjero nos libera de toda esa carga simbólica que una relación humanx-humanx, en una sociedad no capitalista, nos puede entregar. Podemos convertirnos en extranjerxs, hacer lo que se nos plazca, ya que en esta vida el individualismo maneja nuestras relaciones impersonales (¿a quién le importa lo que yo haga?, cómo dice la canción). Urbanitas desconocidos, como una mera nube anónima, apropiándose de lugares y recorriendo los no lugares. Marc Augé (1992)3 se refiere a los no lugares como

3 LOS <<NO LUGARES>> ESPACIOS DEL ANONIMATO Una antropología de la

Sobremodernidad –Marc Auge.

aquellos espacios sin apropiación simbólica, espacios de paso como las carreteras, las filas, los aeropuertos y los terminales. Son espacios de paso en los cuales no encontramos aquel empoderamiento de la reunión y territorialización como lo es el foro de la Udec, la remodelación Paicaví, la plaza de “la pobla” o quizás aquellos lugares en donde dimos nuestro primer beso, aquellos lugares que forman parte de una historia. Podría decir que estos lugares serían lo más cercano a lo que comprendo como comunidad, donde se genera cierta interacción trascendente en parte de nuestra historia, algunas más importantes que otras.

Y la territorialización de estos lugares cómo componente inmanentemente urbano, grupos urbanos que se apropian de nada, de algo que no han comprado, no han

intercambiado, pero que les pertenece, para ellos y para nosotros. ¿Qué significa esto? La idea de propiedad privada y a la vez pública, esta inserta en el inconciente mismo de nuestro ser, no pretendamos abolir la propiedad privada cuando somos nosotrxs mismxs lxs que le damos significado, nos apropiamos y dejamos que se apropien sin previo aviso de los espacios que alguna vez fueron de todos. Pero vendrá aquel/lla joven intelectual que generará un debate en torno a éste punto “propiedad privada” (y que lo haga), pero mi punto no es materialista, no viene desde la economía, viene de mis entrañas, de lo que la ciudad me genera, me contradice y domestica. Grupos que se apropian, personas que se mueven, actividades que se realizan, pero TODO esto, formará parte del anonimato y es que vivimos a una velocidad extrema, los colores, olores,

caras, rayados, marchas, todo, absolutamente todo lo que sea parte de esta modernidad cotidiana, funciona de manera excelente porque no hay nadie que dirija, no existe aquel líder carismático de otros tiempos, ahora es la masa quien se mueve (y mueve a otras masas) la que se adapta para sobrevivir. Una urbanidad libre del ser parte de algo, tan solo urbanitas, nos movilizamos según nuestros intereses, nuestras subjetividades y frivolidades, que nos conviene, que nos gusta y que nos pertenece. Pero socialmente a pocos nos importa, pasarse estos rollos por la mente. Una mente frágil, que olvida la cotidianeidad urbana pero recuerda la lenta vida de la niñez. Podría resumir que fuera de la comunidad nos convertimos en extranjeros.

A través de los últimos eventos se devela que el mundo se esta moviendo cada vez mas rápido y con esto el crecimiento de la propiedad del espacio; la casa tipo y los rascacielos en la ciudad se han convertido en un logotipo instantáneamente reconocible de muchas ciudades actuales. Las ciudades están yendo directo hacia un estado de capitalismo global, esto significa que instituciones y empresas están cumpliendo un rol cada día más importante en nuestras vidas. Según el pensador Francés Guy Debord “La organización de la ciudad moderna tiene la tarea ininterrumpida de salvaguardar el poder de la clase dominante”

Esta organización fomenta que estos nuevos “Precursores sociales” creen métodos muy específicos para rastrear las tendencias y vigilar los hábitos de la

Los Propietarios del espacio.- Sáez Araneda

población, es aquí cuando los arquitectos y los diseñadores están cumpliendo un rol cada vez más importante en el mundo corporativo, dominar dos aspectos fundamentales: el espacio y el tiempo. A medida que el tiempo ha pasado, gobiernos y empresas cumplen un mayor rol en el espacio urbano, las personas se han convertido en unidades dependientes que se desenvuelven físicamente por el espacio. Se planifica un sistema donde nos movemos y vivimos, un espacio funcional a escala masiva, entendiéndose así que las formas arquitectónicas, con sus planteamientos espaciales, tienen la responsabilidad de controlar e influir para crear individuos sometidos.

La arquitectura es análoga a un tipo de lenguaje, los edificios; diseño y componentes dentro de ellos, pueden como un texto, instruir a los usuarios en la forma que están destinados a ser utilizados y que afectan el ambiente del espacio. Sin embargo los usuarios del espacio leen este idioma de forma distraída, de forma inconciente. Con el transcurso del tiempo es mas difícil descifrar el lenguaje del espacio, en consecuencia es mas fácil guiarnos a través del espacio y el control de nuestra experiencia en el mismo, así se pone en evidencia una problemática social, que los usuarios están en una posición de subordinación en comparación con los dueños del espacio, existe una jerarquía social, donde las personas son subyugadas por los espacios diseñados en masa.

Es aquí cuando uno tiene que realizar ese cambio de switch y transformarse en agentes de cambios para realizar un nuevo tipo de arquitectura, una donde se plantee la deconstrucción de esta visión de ciudad, como un espacio neutro y sin historia, en la que subyace una concepción atemporal y deslocalizada que tiene la pretensión de crear categorías universales de validación. Nuestra tarea es reconstruir la memoria, no la convencional, sino la subversiva que se ha escondido tras las fachadas sociales, arquitectónicas y el falso sentido de integridad.

Plantear una deconstrucción no parece una aberración, tenemos que partir por una personal para luego llevarla acabo en la ciudad, desvalorizar todos los paradigmas sobre la ciudad y su urbanismo, hacer partícipe al usuario, plantear un urbanismo móvil, si se considera la importancia fundamental de los cambios, se hace necesaria la aplicación practica de la teoría de la movilidad. Que las instituciones y formaciones de la vida social se fundan actualmente en normas “eternas”. La propiedad, el matrimonio, la religión, el estado pretenden establecer para la eternidad reglas de relaciones sociales que se conciben desde este ángulo; sin embargo, nadie se forma ilusiones en cuanto a la durabilidad de esta eternidad. La mayoría de los conflictos históricos son consecuencia de la total

inadaptabilidad de las instituciones en relación a los cambios cotidianos. Parece lógico presumir una anulación del término “eternidad” en las relaciones sociales y en sus reglamentos. En consecuencia, la propiedad como alquiler, se transforma en contratos estables para un periodo de espacio y tiempo. La aplicación práctica de un sistema de renovación periódica encuentra el mayor obstáculo en las construcciones: sus formas y usos tienen una duración que sobrepasa los periodos de cambios previstos, sobrepasan incluso la duración de la vida humana. Estas construcciones son las destinadas a la vivienda, a comunicaciones, a servicios de abastecimiento y a producción. Entonces, técnicas para la elastificación del urbanismo son muy importantes, no por la importancia

del urbanismo en sí, sino más bien a causa de los peligros de la masa inerte de una ciudad representada para la movilidad general. La sociedad urbana cambia continuamente, desde el punto de vista psicológico, biológico y desde el punto de vista técnico. Estas transformaciones comportan, naturalmente, modos diferentes de ocupación del espacio y tiempo disponible; la ocupación del espacio se encuentra fatalmente limitada por objetos (construcciones), existentes ya que en este espacio las limitaciones de la ocupación espacial implican también las limitaciones de la ocupación del tiempo. Es así como se convierten en obstáculos para las transformaciones continúas o periódicas por que ni ellos ni sus disposiciones cambian al mismo ritmo que las transformaciones sociales. La movilidad general exige

también unos métodos de construcciones “cambiables” una arquitectura móvil. Que puede ser vista desde la reutilización del espacio, una convertibilidad de las formas y usos de las construcciones. Sabemos hay establecimientos humanos que sufren con las repercusiones por la especialización del trabajo, dado que es difícil, desde un punto de vista natural, soportar estas transformaciones aceleradas. Es preciso encontrar una solución que pueda coordinar estos dos factores de evolución. La especialización de la sociedad y preservar los vínculos afectivos. El hábitat no está en la cadena de estas transformaciones, su rol se expresa más bien por frenar el curso de estos desarrollos. Es un obstáculo perjudicial y es preciso que encontremos una forma o una técnica que deje el camino expedito a los cambios.

Como manifiesta Yona Friedman en su libro la arquitectura móvil “Los arquitectos y urbanistas exageran su importancia y su contribución a las transformaciones de nuestra época: esta contribución sigue siendo secundaria juzgada desde el punto de vista general. Su verdadera función debería consistir en ayudar, y en ceñirse a su campo como técnicos, al desarrollo general.” En este sentido la ciudad debe iniciarse por las necesidades del habitante; que no son las calles, los edificios y los monumentos los que dan un carácter a la ciudad, el efecto de los elementos del urbanismo consiste en acelerar o aminorar el desarrollo de la población, pero no transforman el carácter dado a la ciudad por sus habitantes.

Ilustración: Aerosoles

30cm de huella 20cm de contra huella aproximadamente suficientes para dejar cómoda la planta de la zapatilla mientras subes, sin hacer mucho esfuerzo por dar ninguno de estos doce escalones de baldosa blanca lisa y brillosa, dignas de respeto por sus tres metros sesenta de largo y dos metros cuarenta de alto. Acompañados por un muro verde musgo, a la izquierda mirando desde arriba hacia abajo, de unos 60cm de alto con la misma pendiente del las escaleras cortando en el penúltimo de sus peldaños, la caída mantiene las mismas baldosas lisas que tienen tanto los escalones como el interior del recinto, haciendo de este spot* uno de los más respetados del centro de concepción.

Vamos a Patinar Gabo

Hoy, 5 años post-escuela, me sigue llamando la atención, que sin jamás haber tenido ninguna fijación por los edificios o por la ciudad en particular, la observación de minúsculos detalles, en mi desarrollo a través de los años como skater, sin buscar ser auto-referente, porque no soy solo yo, son todos ellos, cualquiera y ninguno en particular, a nutrido una mirada tan involuntaria como particular de la ciudad. Una visión que no se formulo con horas y horas en clases, fijados a un sillón absorbiendo información resumida densamente de toda la triste historia de los conocimientos de la humanidad que llevaron a conceptualizar el mundo a través de la abstracción, única… barata, perdón cara.

Patinando, patinando y patinando, es así solamente, poco a poco dimensionada a través de recorridos, pendientes, hoyos, fisuras, bifurcaciones, rugosidades de pisos, planos inclinados, escaleras, barandas, tramos de tierra, etc. A través de una sucesión repetida de eventos sincronizados (a simple vista), lo que nos llevó a unir una multiplicidad de factores correlacionados, que debieron ser comprendidos fragmento por fragmento para lograr condicionar ese solo truco, en aquel solo spot, en una sola ciudad. Se hace mesurable esta idea, simplemente al definir; las pequeñas, minúsculas e hipersensibles ruedas, como el modulo inicial (como lo hace el modulor, para un estudiante de arquitectura). A nivel Sensorial se podría

entender como el elemento más básico para un skater, logrando dar energía a la sinergia que es producida por todos sus movimientos. Sería bueno recalcar, su infinita insignificancia, que solo logra variar por lo general entre los 53 y 56 mm. , cuando están nuevas, entendiendo y subrayando que por lo general no lo están (nuevas) y que toda la energía acumulada pasa a través de ella, del movimiento en si misma, que por su fineza, le hace ser como un extremadamente sensible cable que conduce la electricidad, que solo logra ser transmitida a las entrañas de nuestro cuerpo, a través de los trucks, el trasmisor a nuestra tabla, lugar donde se produce la simbiosis de toda esta fuerza con nuestro cuerpo, muy en acción a la vez.

Así sutil y minuciosamente se logra ir caracterizando, la versatilidad de un objeto (skate) particularmente definido desde sus inicios para y por la urbe, sin dar pie a mayor discusión. En un vinculo permanente entre la profunda e inevitable necesidad de sentir velocidad, etéreamente lograda y una visión alterada de lo que nos rodea, de espacios semejantes para todos, distintos y versátiles para los que lo quieran y como lo quieran ver. Una ciudad no hecha para nosotros, sino para ellos, contra una tabla sobre ruedas hecha para nosotros y para ellos. Es aquí como también, una identidad, hecha de pequeños individuos, generalmente molestos para los de antaño, va digiriendo fisura por fisura, baldosa por baldosa, aquel lugar, que el arquitecto denomina urbe.

Ilustración: Carola Aravena

Partiendo alejado de exaltados cuestionamientos en base a la verdadera existencia o no de las identidades, en el actual contexto encasillante y enjaulante presente en los hombres sumisos en la morbosidad y el acostumbramiento sicótico y fetichista por conceptualizar, enlistar, agrupar e intentar incesantemente identificarnos. Mas allá de las formaciones conductuales especificas de cada periodo y sociedad; de manera general o especifica es siempre reconocible elementos comunes básicos entre los distintos individuos. Es innegable que desde la estética, la actitud, hasta los conocimientos sean elementos, por los cuales nos diferenciemos o reconozcamos como parte de un común.

Ahora este común, puede ser reconocido tanto dentro de un aspecto más global, como uno local. Es ya bien reiterado y manoseado el tema, como así mismo evidente de que actualmente los medios de producción masivos, la internacionalización de los mercados, la revolución en los transportes y las tele-comunicaciones han exterminado tradiciones y costumbres identitarias en comunidades enteras. La renacentista y cosmopolita Florencia con su gran intercambio mercantil, es ahora un virus en cuerpo sin defensas, ya no son ciertas ciudades influenciadas por las costumbres, productos y elementos identitarios de las distintas culturas, si no es la orbe en su totalidad invadida por una

Identidades (a)temporales . basuralidad o patrimonio colectivo Kagül

pandemia insaciable. En donde ya no encuéntranos la empolvada autonomía, autonomía asaltada y perdida en este virus que es imagen, es visual, y por supuesto es control. Como es que por ejemplo no exista una lectura común propia de los lugares en que son manufacturados los productos, en donde conglomerado de corporaciones multinacionales utilizan a través de la generación de imaginarios colectivos (globales) cierta identidad en determinados productos. De esta forma ocupan fuerzas de trabajo baratas para el procesamiento de sus productos aumentando su rentabilidad, pero siempre sin perder la imagen identitaria creada, supersobrexpuesta e implantada en las

mentes de los posibles consumidores. Ya que a través de los medios de representación, logran generar una imagen incuestionable. Pero entonces ¿Dónde encontramos y reconocemos a esa fuerza de trabajo barata?, en que podemos apreciar y establecer alguna relación con esos niños vietnamitas, con los manufactureros camboyanos, con las camisetas Adidas made in peru. Donde quedan las identidades locales y regionales en un mundo gobernado por las imágenes, en donde la representación y la degradación del tener en el parecer son la ley. Es necesario entender que si comprendemos las identidades como dinámicas, no estancas, que van

nutriendo y renutriendose a lo largo del tiempo y de las transformaciones de cada contexto. Podemos reconocer identidades trascendentes y atemporales, entendiendo la mantención de ciertos pilares esenciales en sus identidades como intransables. Y al existir una memoria colectiva transformada y trabajada transgrediendo los eventos, las coyunturas, y las generaciones, se va traspasando de forma permanente y continua el conocimiento, como serie de relaciones sociales identitarias particulares de cada localidad. Por lo que la atemporalidad se ve reflejada en el hecho evidente y permanente que nos enrostran al día a día culturas milenarias y ancestrales. La capacidad de estas comunidades de poder

absorver elementos exóticos y nutrirse de ellos sin perder su esencia, es lo que demuestra precisamente la virtud transcendente y atemporal de estas localidades. Ya que debemos comprender, que en donde exista la mano expropiadora del control, es donde estamos completamente perdidos por la desconfianza, que en lo concreto es visual, ya que a través de nuestro conocer, destruimos. Las autonomías en un mundo totalizado, ya no se conciben como vastos territorios autónomos de determinadas comunidades, ya que estos en la actualidad prácticamente no existen (al menos de manera territorial). Si no que la autonomía se remiten a la toma de decisiones

propias, a la autorganización, a la producción de identidad desde lo más propio de cada barrio y lugar, a la okupación y utilización de espacios, a la construcción colectiva de memoria. Pues entonces que sucede con las identidades temporales, aquellas que reconocemos como periodos o épocas claramente reconocibles, ¿son estas identidades más globalizadas, más dinámicas, menos arraigadas y preestablecidas, son una ausencia de memoria histórica? La temporalidad característica de los movimientos otorga una identidad a ciertos periodos y contextos históricos, los 60s hippies y psicoactivos, los 70s punkis y reaccionarios. Son

identidades temporales menos arraigadas, más dinámicas y de una interdependencia que se rige por una multiplicidad de factores comunes, que manifiestan la existencia de relaciones complementarias y totalmente dependientes entre las mismas. Pero entonces que ocurre cuando esto también es parte de una memoria colectiva, donde aparece el nexo conector entre este arraigo territorial, cultural, comunitario, ancestral; con estas identidades mutables generacionalmente, temporales, cambiantes e impredecibles. Y esta es la cuestión, preguntas en búsqueda de soluciones vitales no existen, la certeza es negación y nosotros no somos quienes, pero si que muchos aparentamos serlo.

Ilustración: Carola Aravena

¿Bajo que perspectiva enjuiciamos nuestra realidad? bajo una mirada diversa y enriquecida con historia? ¿O bajo la imposición de una realidad satisfecha de consumismo tan opuesto al equilibrio entre sustentabilidad ecológica y sociedad humana? Los patrones de elección supeditados el interés económico y político: el desarrollo no es más que la anulación de valores genuinos y acertados, con los que la humanidad evolucionó durante milenios, entendiéndose evolución solo como el crecimiento y mejoría de un principio.

Crisis Identitarias y Pérdida de Valores Ancestrales Carolina Acuña

“Porque justamente, la esquizofrenia del

modernismo occidental, el divorcio entre

razón y naturaleza, entre tecnología y

ambiente, llevó a toda la cultura a un

desequilibrio que amenaza seriamente la

salud global de lo viviente.”

MORA Penroz, Ziley W. Yerpún el libro sagrado de la tierra del sur. Concepción, Chile, Kushe, 1992. p.293

Distinto es, este desarrollo que se ha impuesto desde que el hombre diferenció entre confortabilidades naturales y consumos de insumos productores de confortabilidades, antes inexistentes por innecesarias. Valores ancestrales completamente desaparecidos en la actualidad, avasallados por la materialidad artificial que jamás petenecerá a la tierra, tan solo la saturara de inorganicidad contaminante Nuestra identidad local Innegablemente, la cultura mapuche forma parte de nuestra identidad local, pues corresponde a los antepasados que habitaron nuestra zona y bajo mismas

condiciones climáticas supieron relacionarse armónicamente con el entorno para responder constructivamente de la forma más sabia y apropiada según los recursos que la naturaleza tan respetada les otorgaba. En general, antiguas culturas aborígenes tuvieron la sabiduría para lograr el desarrollo sustentable de sus poblaciones, sin embargo hoy podemos ver cómo la nueva cultura occidental y la globalización son actores de la decadencia o completa desaparición de esos pueblos y sus costumbres. La cultura mapuche ha sido carcomida a lo largo de la historia por diferentes procesos, discriminación social y asesinato cultural, poderes ajenos con intereses particulares, económicos y gubernamentales, son capaces de erradicar a los pueblos

junto con sus profundas cosmovisiones. Esta realidad ha desencadenado un hecho irreversible; la aculturación supone una transformación e integración voluntaria u obligada, por parte de la mayor parte del grupo mapuche, al estilo de vida occidental, hecho que podemos corroborar al observar su actual estilo de vida, cada vez más alejado de la cultura original. Sin embargo varios son los motivos de esta aculturación desde los inicios de las luchas territoriales; las reducciones del pueblo, la privatización territorial y la explotación de los recursos naturales, niega la posibilidd de autosustento de cualquier pueblo. Junto a esto, la demanda de la sociedad y el explosivo crecimiento demográfico han cambiado por completo la manera de habitar el medio, y por ende, los modelos ancestrales no

pueden ser aplicados a la realidad actual, pues sus requerimientos, la naturaleza no podría sustentar. Para el rescate de las culturas originarias y sus valores identitarios arquitectonicos, debido a la complejidad de la relación entre la cultura, el comportamiento humano y su entorno, es que los diseños deberían corresponder a una cultura dada según determinadas condiciones del entorno físico y psicosocial, así como condiciones geográficas y climáticas que a fin de cuentas determina a la arquitectura vernácula, o como dice Rapoport “que sean culturalmente específicos” es decir con caracteres particulares o identidad. Para comprender esta especificidad cultural se debe tener en cuenta que las nociones de lo “bueno y lo

malo” son tan subjetivas que ciertas “mejoras” que se pudieran aplicar a sistemas vernaculares, de relaciones sociales, actividades e interacción con el entorno particulares, en muchos casos resulta perjudicial para el grupo, interfiriendo con sus propios conceptos y parámetros de armonía y sustentabilidad. Los conceptos de calidad de un entorno son entonces relativos y subjetivos, y la clasificación de mejores o peores depende de determinados valores culturales. Por lo tanto, es importante mencionar que la calidad de lo construido debe ser considerada desde dos perspectivas, según Rapoport i: émicamente- desde el interior de la cultura, como si destacásemos los mismos aspectos que también considerarían importantes los miembros del grupo.

éticamente- desde la perspectiva de un observador critico, desde afuera, con una visión universal, guiada por el sentido común. (El sentido comun occidental hoy en dia esta determinado por las posibilidads tecnológicas y cientificas que ha desvirtuado los patrones de habitabilidad y confortabilidad, inventando necesidaes y descubriendo enfermedades dependientes de la maquinización artificial, guiada y subyugada por el modelo mercantil) Entonces, para rescatar la identidad es necesario encontrar valores asociados a la cosmovisión, o valores socioculturales, criticando esta determinada cultura y comprendiéndola primeramente desde su propia razón. De lo contrario estaremos creando entornos detestables

para ellos mismos, (los mapuche) si no se busca solución de sus problemas desde “su visión”. La justificación de aquellas visiones, se encuentra bajo la perspectiva, émica y no ética, esta última establece los parámetros actuales de confortabilidad y habitabilidad, bajo la crítica y destructiva visión del desarrollo tecnológico. A modo de ejemplo ,tenemos el caso del fogón con el humo y el prejuicio que este implica bajo cánones eticos de nuestra sociedad: no obstante podríamos afirmar que en la realidad de los tiempos ancestrales no existía la posibilidad de conocimientos respecto a enfermedades asociadas a una baja habitabilidad de sus viviendas, ni tecnologías disponibles para satisfacer las demandas

climáticas, el fogon fue el mejor recurso utilizado en ese entonces para este y otros fines, por ende esta comunidad era sin duda sustentable, bajo sus propia cosmovisión, no asi para las demandas eticas actuales. Esta comprensión émica nos permite ademas comprender como ciertas culturas aprovechan actualmente los beneficios del humo, teniendo en cuenta las consideraciones éticas. En este caso sus justificaciones no dejan de tener razón simplemente por el hecho de ser contrarias a la ética, segun las razones émicas, podemos reconocer las posibilidades y aprovechamientos que otorgaba el humo, como preservante de alimentos, el hollin como impermeabilizante de la ruka, deinfectante, etc.

Sin embargo hoy la sobrepoblación y constante crecimiento demográfico no permitiría tal hecho, de manera que podríamos encontrar una razon a la extinción, no obstante la anulación y completo olvido de tradiciones que aun podrían ser valoradas y aceptadas desde la mirada ética, es preocupante. La extinción de indentidades locales en pro de una globalización que pretende desintegrar comunidades diversas para sustituirlas por una red mercantilista que bajo medios de informacion se instaurara en cada una de las individualidades cuturales para constituir una masa homogénea, es irreversible e inminete una conciencia integra que revalore los conceptos holisticos y sabidurias ancestrales.

Concluyendo, podríamos decir que esta incompatibilidad entre visiones culturales ha ocasionado una pugna, que amenaza constantemente contra las identidades locales: Intolerante visión que enjuicia y pisotea sabidurías desvalidando justamente lo que no alberga la razón materialista y desprovista de virtud, para concebirse como parte de la naturaleza, dentro del ciclo de degradación y renovación. Incomprensión émica por parte de la sociedad hacia un pequeño grupo particular y a la diversidad no permite valorar ni encontrar razón a alternativos pueblos, ricos en valores socioculturales hoy perdidos, los cuales apremia redescubrir para reencontrarnos con la simpleza y cabalidad de la naturaleza y del ser humano. Globalizar la cultura con el fin de enfocar la sociedad hacia el empoderamiento central, hacia el consumismo, deshumanización y

destrucción medioambiental; consumismo contra el autosustento ecológico, mecanización contra cosmovisiones espirituales, y explotación de recursos, atenta contra la propia existencia del todo ser humano, en gran parte, ya actuó sobre los humananos originarios. Una alternativa a esta decadencia identitaria es considerar ambas perspectivas, con el fin de rescatar desde un análisis émico, los valores que éticamente pueden ser positivos para nuestra sociedad actual, la cual carece de principios humanos necesarios y valores ancestrales, no obstante ciertos avances ineludibles; cientificos y tecnologicos, pueden aportar con alternativas de mejoramiento para la calidad de vida del habitante contemporáneo.

i RAPOPORT, Amos. Cultura arquitectura y diseño. Barcelona2003

1) Reconocer la arquitectura del lugar. Eso se hace caminado y recorriendo la ciudad, pausadamente, deteniéndose simultáneamente en el detalle y en la totalidad. Es recomendable girar la cabeza hacia arriba para descubrir aquello que siempre a estado, pero nunca se había visto. Aconsejo también subir a lugares altos, un cerro, los pisos superiores de un edificio, desde allí se obtienen vistas inusitadas de la

ciudad, a vuelo de pájaro, que nos hacen comprenderla mejor. 2) Registrar la arquitectura del lugar. Esto se hace mediante el croquis y la fotografía. El croquis, como instrumento de observación es excelente, puesto que exige seleccionar lo que se quiere dibujar y además toma algunos minutos, lo que proporciona el tiempo necesario para observar. No es necesario saber

dibujar, eso resulta de tanto hacer croquis; o sea, para hacer croquis no hay que ser buen dibujante, te transformaras en un buen dibujante de tanto hacer croquis. Resulta útil dejar breves notas en torno al croquis, eso ayudara a destacar aquello que se quiere recordar. El croquis es un instrumento de la observación. La fotografía es otro instrumento de registro. Pero hay que tener cuidado con ella; es fácil acostumbrarse y dejar de croquear. Tampoco basta con solo hacer un clic, es necesaria

6 Acciones para Descubrir la Identidad Arquitectónica de la Ciudad

Gonzalo Cerda Brintrup, Arquitecto

una intención fotográfica, es decir, igual que en el croquis, atrapan un instante y un objeto. Esto va mas allá de lo técnico, lo que cuenta es una sienta intención. También hay mañas, yo por ejemplo prefiero fotografiar con la luz de la mañana y agacharme frente al objeto a fotografiar, así se realzan sus perspectivas. Tengo amigos sin embargo que prefieren la luz de la tarde, que da sombras largar y extendidas.

3) Descubrir el espacio público. La identidad de un lugar está asociada los espacios públicos, sus plazas, avenidas, parques, calles, veredas. La ciudad de Valdivia por ejemplo debe gran parte de su identidad a la costanera sobre el rio Calle - Calle; la Caleta de Cocholgüe se organiza espacialmente en torno a la plazuela de trabajo de los pescadores, frente al mar; el espacio público más

significativo de la serena es el parque de las esculturas; las escalinatas y miradores de Valparaíso se han transformado en patrimonio cultural de la humanidad. Reconocer el valor patrimonial de estos espacios públicos nos acercara a develar la identidad de estos lugares. He descubierto que no se dan por separado de la arquitectura, de modo que arquitectura y espacio público se funden en una unidad.

4) Reconocer la Historia de la Ciudad. Una mirada informada nos lleva necesariamente adentrarnos en los documentos, en la información pre-existente. Esa se encuentra en libros, revistas, en el internet y también en la tradición oral, de modo que escuchar la historia aportara también a nuestra comprensión del lugar. Para descubrir la historia del lugar, recomiendo adentrarse en los lugares

con historia de la ciudad; mas los informales que los formales. Cito: bares de mala muerte, mercados y ferias, periferias, sitios peligrosos. No sirven tours guiados. Para llegar a las entrañas de un lugar, es necesario navegar aguas profundas, ir de a dos, tomar resguardos mínimos como no exhibir cámaras costosas, ser simpáticos rápidos. En los lugares oficiales tipo iglesias, edificios públicos, regimientos, hospitales, disparar la cámara y después preguntar si se podía: siempre dirán que no.

5) Reconocer el espacio geográfico

circundante y la topografía del lugar. La Identidad está asociada a la geografía del lugar. No resulta posible imaginar puerto varas por ejemplo, sin la presencia del lago Llanquihue y los volcanes Osorno, Calbuco, Puntiagudo, y otros cuatro más que están escondidos a la simple vista. Tampoco es posible imaginar la plana, igual que Chonchi en Chiloé o Calbuco, cuya plaza tiene tres caras

construidas y la cuarta abierta al mar. La presencia del espacio geográfico hace parte de la memoria y la Identidad de la ciudad. Por eso cuando la ciudad y el crecimiento inmobiliario arrasa un humedal, se está arrasando también con la memoria geográfica del lugar.

6) Reconocer la materialidad

predominante de la arquitectura. La materialidad de la obra hace parte de la cultura constructiva de un lugar, y eso hace parte de su Identidad. Por eso resulta tan delicado intervenir con cualquier material. La materialidad de la obra se encuentra en la génesis del edificio, resulta extraño construir palafito en hormigón armado, es mejor hacerlo con materiales livianos, como la

madera o el acero. La materialidad de la obra arquitectónica da sentido e Identidad a poblados enteros. Así, hay pueblos de barro como Toconao, San Pedro de Atacama; de lata como San José de la Mariquina; de madera, como Carahue y Dalcahue, de hormigón moderno como Chillán y Concepción. Recomiendo prestar atención a la materialidad de la obra, eso nos hará no solo mejores constructores, si no también como arquitectos, entender que la cultura constructiva del lugar está asociada a su identidad.

[…] “¿Y el cielo? ¿Y las nubes? Cuéntelas cuando esté en lo más alto, bébase el cielo

que le cae en plena cara desde su inmenso embudo. A lo mejor después, cuando gire en redondo y entre en el piso alto de su casa, en su vida doméstica y diaria, comprenderá que también allí había que mirar muchas cosas en esa forma, que

también en una boca, un amor, una novela, había que subir hacia atrás.” […]

Fragmento, Instrucciones para Subir una Escalera al Revés, Julio Cortázar.

personaje

Soa

Revista The New Yorker, 20 de Enero 1986