Carolina Coronado

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Los románticos de la literatura española Siglos XVIII Carolina Coronado

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Los románticos de la literatura españolaSiglos XVIII

Carolina Coronado

Federico Madrazo ; 1850 Madrid, Museo del Prado

Carolina Coronado Romero de Tejada Almendralejo (Badajoz), 1820 - †Lisboa, 1911

escritora española, considerada como la equivalente extremeña de otras autoras románticas coetáneas como Rosalía de Castro, y autora de tal notoriedad que llegaría a ser calificada con el título de "Bécquer femenino".

Biografía Nació en una familia acomodada, de ideología progresista, lo que provocó que su padre y su abuelo fueran perseguidos.

Tras mudarse a la capital de provincia, Badajoz, Carolina sería educada de la forma tradicional para las niñas de la época: costura, labores del hogar...

Ya desde pequeña mostró su interés por la literatura, y comienza a leer cualquier género u obra que puede conseguir.

Sus primeros poemas datan de la temprana edad de 10 años.

Biografía

Padecía de catalepsia crónica: llegando a "morir" varias veces, tuvo la obsesión con la idea de poder ser enterrada en vida, hasta tal punto que embalsama el cadáver de su marido, negándose a enterrarlo e incluso dirigiéndose a él con el apelativo de "el silencioso". Incluso tiene varias "premoniciones" en las que anticipa el fallecimiento de sus hijos.

1852 Madrid; se casó con Justo Horacio Perry, secretario de la embajada de EE.UU.

Biografía Era revolucionaria, en su residencia realizaba las tertulias literarias donde se encontraron los escritores progresistas perseguidos, llegando a asistir algunos de los más renombrados autores del momento.

El refugio clandestino, y su afinidad por la revolución, causarían que sufriese la censura de la época.

Logró publicar algunas de sus obras en periódicos y revistas hasta lograr cierta fama, a la que también contribuyó su belleza física, que causó notoria admiración en otros escritores románticos.

Dicen que tienes trece primaverasy eres portento de hermosura ya,y que en tus grandes ojos reverberasla lumbre de los astros inmortal.

Juro a tus plantas que insensato he sidode placer en placer corriendo en pos,cuando en el mismo valle hemos nacido,niña gentil, para adorarnos, dos.

Torrentes brota de armonía el alma;huyamos a los bosques a cantar.Dénos la sombra tu inocente palma,y reposo tu virgen soledad.

Mas ¡ay! perdona virginal capullo,cierra tu cáliz a mi loco amor.Que nacimos de un aura al mismo arrullo,para ser, yo el insecto, tú la flor.

Versos de José de Espronceda

Obra La producción más importante de Coronado es la poética.

Sus poemas fueron recogiéndose poco a poco en revistas, y más tarde, en 1843, se recopilaron en un volumen Poesías.En las posteriores ediciones de 1852 y 1872 se incorporaron nuevos poemas.

En prosa: quince novelas, Luz, El bonete de San Ramón, La Sigea, Jarrilla, La rueda de la desgracia (1873) y Paquita (1850), ésta última considerada por algunos críticos como la mejor de todas.

Obras teatrales: Alfonso IV de León, Un alcalde de monterilla, El divino Figueroa y El cuadro de la esperanza (1846), que fue su obra mas popular.

Nada resta de ti

Nada resta de ti... te hundió el abismo...te tragaron los monstruos de los mares.No quedan en los fúnebres lugaresni los huesos siquiera de ti mismo.Fácil de comprender, amante Alberto,es que perdieras en el mar la vida,mas no comprende el alma doloridacómo yo vivo cuando tú ya has muerto.¡¡Darnos la vida a mí y a ti la muerte;darnos a ti la paz y a mí la guerra,dejarte a ti en el mar y a mí en la tierraes la maldad más grande de la suerte!!

Cádiz, 1848

A una gota de rocío Lágrima viva de la fresca aurora,a quien la mustia flor la vida debe,y el prado ansioso entre el follaje embebe;gota que el sol con sus reflejos dora;

Que en la tez de las flores seductoramecida por el céfiro más leve,mezclas de grana tu color de nievey de nieve su grana encantadora:

Ven a mezclarte con mi triste lloro,y a consumirte en mi mejilla ardiente;que acaso correrán más dulcemente

las lágrimas amargas que devoro...mas ¡qué fuera una gota de rocíoperdida entre el raudal del llanto mío...!

La rosa blanca ¿Cuál de las hijas del verano ardiente,cándida rosa, iguala a tu hermosura,la suavísima tez y la frescuraque brotan de tu faz resplandeciente?

La sonrosada luz de alba nacienteno muestra al desplegarse más dulzura,ni el ala de los cisnes la blancuraque el peregrino cerco de tu frente.

Así, gloria del huerto, en el pomposoramo descuellas desde verde asiento;cuando llevado sobre el manso viento

a tu argentino cáliz olorosoroba su aroma insecto licencioso,y el puro esmalte empaña con su aliento.

¡Oh, cuál te adoro!

¡Oh, cuál te adoro! con la luz del díatu nombre invoco apasionada y triste,y cuando el cielo en sombras se revisteaun te llama exaltada el alma mía.

Tú eres el tiempo que mis horas guía,tú eres la idea que a mi mente asiste,porque en ti se concentra cuanto existe,mi pasión, mi esperanza, mi poesía.

No hay canto que igualar pueda a tu acentocuando tu amor me cuentas y delirasrevelando la fe de tu contento;

Tiemblo a tu voz y tiemblo si me miras,y quisiera exhalar mi último alientoabrasada en el aire que respiras.

Badajoz, 1845

Monumento de Carolina Coronado en Almendralejo

A finales de junio, la ciudad de Almendralejo vuelve atrás en el tiempo hasta mediados del siglo XIX para homenajear a los autores románticos.

Cientos de personas vestidas de época desfilan por las calles, parques y jardines de la ciudad, lugares que en otro tiempo conocieron a Carolina Coronado o a José de Espronceda.

Fin

3.03.2010