Capítulo 3

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CAPÍTULO 3. LAS LECCIONES DE GLASGOW. Las lecciones de Glasgow son, como vimos, apuntes tomados por alumnos de las clases que Smith dictaba en la Universidad de dicha ciudad. De la enorme cantidad de temas que dictaba en las mismas vamos a rescatar dos, el desarrollo de la teoría de los cuatro estadios y la parte dedicada a las ideas económicas. 1. LA TEORÍA DE LOS CUATRO ESTADIOS EN ADAM SMITH. El descubrimiento de América y el contacto con pueblos que vivían en un estado de “primitivismo” llevo a una serie de reflexiones sobre los mismos: ¿Si aceptamos la idea de que Dios creo sólo una vez al hombre, de dónde venían estos pueblos? ¿Por qué se parecían sus costumbres a las conocidas de los pueblos primitivos europeos y de otros continentes? En una primera etapa se creyó que las similitudes se debían a que estos pueblos descendían directamente de comunidades ya conocidas pero, con el tiempo, se impuso la idea de que las similitudes en costumbres, leyes y formas de gobierno se debían a que se encontraban ante circunstancias vitales parecidas. En el siglo XVIII, entre los “filósofos” morales franceses y escoceses, se desarrolló el supuesto de que se podían aplicar a las ciencias vinculadas con los asuntos humanos los mismos instrumentos analíticos que a las ciencias naturales. Varios son los puntos en común que tienen estos pensadores entre sí. Todas las cosas, como sucede en la esfera de las ciencias naturales, están unidas por cadenas de causas y efectos, la tarea del científico consiste en descubrirlas. 1

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CAPÍTULO 3.

LAS LECCIONES DE GLASGOW.

Las lecciones de Glasgow son, como vimos, apuntes tomados por alumnos de las clases que Smith dictaba en la Universidad de dicha ciudad. De la enorme cantidad de temas que dictaba en las mismas vamos a rescatar dos, el desarrollo de la teoría de los cuatro estadios y la parte dedicada a las ideas económicas.

1. LA TEORÍA DE LOS CUATRO ESTADIOS EN ADAM SMITH.

El descubrimiento de América y el contacto con pueblos que vivían en un estado de “primitivismo” llevo a una serie de reflexiones sobre los mismos: ¿Si aceptamos la idea de que Dios creo sólo una vez al hombre, de dónde venían estos pueblos? ¿Por qué se parecían sus costumbres a las conocidas de los pueblos primitivos europeos y de otros continentes?

En una primera etapa se creyó que las similitudes se debían a que estos pueblos descendían directamente de comunidades ya conocidas pero, con el tiempo, se impuso la idea de que las similitudes en costumbres, leyes y formas de gobierno se debían a que se encontraban ante circunstancias vitales parecidas.

En el siglo XVIII, entre los “filósofos” morales franceses y escoceses, se desarrolló el supuesto de que se podían aplicar a las ciencias vinculadas con los asuntos humanos los mismos instrumentos analíticos que a las ciencias naturales. Varios son los puntos en común que tienen estos pensadores entre sí.

Todas las cosas, como sucede en la esfera de las ciencias naturales, están unidas por cadenas de causas y efectos, la tarea del científico consiste en descubrirlas.

Una teoría del conocimiento empirista, que los diferencia de los teóricos del iusnaturalismo de la época. Ellos buscan estudiar a las sociedades y al hombre inmerso en ellas, en toda su riqueza, no buscan determinar como es el “hombre natural”, separado de sus raíces sociales.

Lo que sucede en la historia es: “el resultado de la acción humana, pero no la ejecución de un plan humano”.1 Es decir, la acción de los hombres tiene “consecuencias involuntarias” que hace que sea imposible predecir todas las derivaciones de nuestras acciones.

Pero no sólo el hombre producía la sociedad, aunque no de acuerdo a un plan determinado, sino que el mismo hombre era un producto de las circunstancias en las que se desarrollaba su vida.

Un buen ejemplo del desarrollo de este tipo de problemática es “la teoría de los cuatro estadios”, que sostiene que la humanidad ha ido progresando con el tiempo a través de cuatro estadios sucesivos, la caza, el pastoreo, la

1 Adam Fergurson, 1793, p. 205. Citado en Ronald Meek, 1976, p. 2.

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agricultura y el comercio donde, a cada modo de subsistencia, le corresponden diferentes conjuntos de ideas e instituciones.

Sin entrar a analizar los antecedentes de dicha teoría, que se encuentran cabalmente presentados en el libro de Ronald Meek ya citado, en este trabajo vamos a analizar el desarrollo de la teoría en la obra de Adam Smith.

a) La teoría de los cuatro estadios.

En 1751 Smith fue designado profesor de Lógica de la Universidad de Glasgow, donde impartió lecciones de lógica durante 1751-52. Uno de sus discípulos, John Millar describía de la siguiente manera estas lecciones:

En la cátedra de lógica, para la que el Sr. Smith fue primero nombrado en esta Universidad, pronto advirtió la necesidad de apartarse bastante del programa seguido por sus predecesores, y de dirigir la atención de sus alumnos hacia estudios de una naturaleza más interesante y útil que la lógica y la metafísica escolásticas. Entonces, después de brindar una visión general de los poderes de la mente, y de explicar de la lógica antigua lo suficiente como para satisfacer la curiosidad con respecto a un método de razonamiento artificial, que en su día había ocupado la atención universal de los estudiosos, dedicaba todo el resto de su tiempo a desarrollar un sistema de retórica y bellas letras. El mejor método para exponer e ilustrar las diversas capacidades de la mente humana… proviene de examinar las distintas vías de comunicación de nuestros pensamientos por medio de la palabra…2

En 1752 es trasladado a la cátedra de filosofía moral, veamos como el mismo Millar describe este curso:

Como un año después de su nombramiento como catedrático de Lógica, el Sr. Smith fue elegido para la cátedra de Filosofía Moral. En esta asignatura sus lecciones se dividían en cuatro partes. La primera correspondía a la teología natural, donde estudiaba las pruebas de la existencia y atributos de Dios, y los principios de la mente humana sobre los que se basa la religión. La segunda parte era estrictamente la ética, y consistía en las doctrinas que publicó después en su Teoría de los sentimientos morales: En la tercera parte trataba más en profundidad la rama de la moral relacionada con la justicia que, al ser susceptible de reglas precisas y exactas, puede ser explicada de manera más completa y detallada.

Sobre esta cuestión seguía un plan que parece sugerido por Montesquieu, y procuraba rastrear la evolución gradual de la jurisprudencia, tanto pública como privada, desde los tiempos más rudos a los más refinados, destacar los efectos de las artes que contribuyen a la subsistencia y a la acumulación de la propiedad sobre las mejoras o alteraciones correspondientes al derecho y la política. También era su intención publicar esta importante rama de su trabajo; no vivió para concretar este propósito, al que alude en la conclusión de la Teoría de los sentimientos morales.

En la última parte de sus lecciones examinaba las reglamentaciones políticas que no se basaban sobre el principio de la justicia sino sobre el de la conveniencia, cuyo objetivo es incrementar la riqueza, el poder y la prosperidad de un Estado. Analizaba las instituciones políticas relacionadas con el comercio, las finanzas, las organizaciones eclesiásticas y militares. Lo que opinaba sobre estos temas era la

2 Citado en Stewart, Dugald, 1795, p. 232.

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sustancia del libro que publicó después bajo el título de Una Investigación sobre la naturaleza y la causa de la riqueza de las naciones.3

Este programa, que incluye obviamente la teoría de los cuatro estadios, fue dictado por Smith, de acuerdo a Meek, con algunos cambios de énfasis, sustancialmente de la misma manera durante su período de Glasgow, veamos ahora como fue desarrollado en las clases del autor. Antes de esto merece la pena mencionar la referencia a Montesquieu, uno de los otros autores, junto con Turgot, alrededor de los cuales se produce la discusión de la prioridad del desarrollo de esta teoría.

Antes de que consideremos éste cualquiera de los otros métodos por los que se adquiere la propiedad, será oportuno observar que las regulaciones que los conciernen deben variar considerablemente según el estado o la era en la que se encuentre la sociedad. Hay cuatro estados distintos por los que la Humanidad ha pasado: 1º, La Era de los Cazadores; 2º, La Era de los Pastores; 3º, La Era de la Agricultura; y 4º, La Era del Comercio.4

Acá tenemos enunciado la teoría, la humanidad ha pasado por cuatro estados sucesivos, cazadores/recolectores, pastores, agricultores y comerciantes.

La primera etapa es la de los cazadores/recolectores/pescadores, sistemas de vida que, según Smith, resultan sumamente atrasados y que apenas permiten la subsistencia de una pequeña comunidad. Es evidente que para el desarrollo de la misma será necesario establecer alguna otra forma de producción que asegure el alimento para una cantidad mayor de gente. Los cambios sociales, entonces, están vinculados con la evolución en la forma en que la gente obtiene aquellos bienes que son necesarios para su supervivencia.

Si imaginamos diez o doce personas de diferente sexo asentadas en una isla deshabitada, el primer método que encontrarían para su sustento sería las frutas y animales salvajes que el campo proporcionara. Su única ocupación sería cazar bestias salvajes o pescar. Coger una fruta salvaje no puede considerarse un trabajo. La única cosa que, entre ellos, merecería el nombre de ocupación sería la caza. Esta es la era de los cazadores. Con el paso del tiempo, y conforme se fueran multiplicando, encontrarían la caza demasiado precaria para su sustento. Se verían obligados a idear otro modo de mantenerse... El plan que se les ocurriría de un modo más natural sería el de domesticar algunos de los animales salvajes que atraparan, y en proporcionarles mejor comida que la que pudieran conseguir en cualquier otro sitio al que fueran, para que se quedaran por sus tierras y se reprodujeran. 5

De esta cita es importante recalcar que Smith no imagina, como hiciera Rouseeau, la posibilidad de la existencia de un hombre aislado, aún en épocas tan primitivas el hombre es inherentemente un ser social, un ser que no puede existir si no es en comunidad, aunque esta sea muy pequeña.

…De aquí nace la era de los pastores. Empezarían, probablemente, multiplicando animales mejor que vegetales, pues se precisa menos observación y destreza; nada más que saber qué alimentos les van bien. Encontramos, en consecuencia, que la era de los pastores precedió a la de la agricultura en la mayoría de los países…

3 Citado en Stewart, op. cit. p. 233.4 Adam Smith, 1762/63, p. 46.5 Adam Smith, 1762/63, p. 47.

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Ninguna de las naciones salvajes que subsisten de sus rebaños tiene la menor noción de cómo cultivar la tierra. El único caso que parece ser excepción a esta regla es el estado de los indios de América del Norte. Aunque ni se les ha ocurrido pensar en los rebaños y manadas, tienen –sin embargo- alguna noción de agricultura. Sus mujeres plantan algunos tallos de maíz detrás de sus chozas; pero esto apenas puede llamarse agricultura. Este maíz no forma una parte considerable de su alimento; sirve sólo como aliño o guarnición de su alimento común, la carne de los animales cazados. Los rebaños y manadas son, por lo tanto, el primer recurso de los hombres cuando encontraran dificultad en subsistir de la caza.6

Hoy esta noción de que la época pastoril precedió, casi sin excepción, a la agrícola puede ser discutida, pero no cabe duda que, a mediados del siglo XVIII, la idea de que las distintas sociedades pueden haber seguido un curso similar no dejaba de ser interesante y fructífera.

El paso siguiente es el establecimiento de las sociedades agrícolas motivado, una vez más, por la presión demográfica.

Pero, cuando una sociedad se hace numerosa, hay dificultad en mantenerse por medio de los rebaños y manadas. En ese momento, de forma natural, se dedicarían a cultivar la tierra y a hacer crecer plantas que les produjesen alimentos nutritivos. Observarían que las semillas que caen en el suelo árido, o sobre las rocas, raramente se convierten en algo, pero aquellas que se introducían en la tierra generalmente producían una planta y una semilla similar a la que se plantó. Extenderían estas observaciones cuando descubriesen diferentes plantas y árboles que produjeran un alimento agradable y nutritivo. Y, de este modo, avanzarían gradualmente a la era de la agricultura.7

Pero junto con el excedente agrícola surge la posibilidad de que algunas de las personas de la comunidad pudieran desentenderse de la producción de alimentos y, por lo tanto, especializarse en la producción de otro tipo de bienes, aparece entonces la que es, para Smith, la clave de la civilización, la división del trabajo.

…Como la sociedad se fuera desarrollando, las distintas artes, que al principio eran ejercidas por cada individuo sólo hasta donde fuera necesario para su bienestar, se separarían; unas personas cultivarían unas y otras, otras, según las distintas inclinaciones. Cambiarían con otros los excedentes de la producción, y conseguirían las mercancías que necesitasen y no produjeran ellos mismos. Este intercambio de mercancías se produce con el tiempo, no sólo entre individuos de la misma sociedad, sino también entre diferentes naciones. Así, mandamos a Francia nuestras ropas, manufacturas de hierro y otras baratijas, y conseguimos a cambio sus vinos. A España y Portugal, mandamos nuestros excedentes de trigo, y traemos vinos españoles y portugueses. Así, por fin, nació la era del comercio. Por lo tanto, cuando un país está provisto de todos los rebaños y manadas que puede mantener, cultiva la tierra para producir todo el grano que se pueda y las mercancías necesarias para la subsistencia o, como poco, para mantener a los habitantes; cuando los excedentes –bien naturales o artesanales- se exportan y se traen por intercambio otros necesarios, tal sociedad ha hecho todo lo posible por su comodidad y bienestar.8

Llegamos entonces a la etapa más avanzada de la sociedad, la era del comercio.

6 Adam Smith, 1762/63, p. 47.7 Adam Smith, 1762/63, pp. 47/48.8 Adam Smith, 1762/63, p. 48.

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b) Los derechos de propiedad.

Pero estas distintas formas en que los seres humanos se relacionan para obtener los bienes necesarios para su subsistencia generarán distintos tipos de derecho de propiedad. En la etapa de los cazadores/recolectores, donde casi no hay propiedad, son muy pocas las restricciones impuestas al robo, pues no existe nada que robar.

Es fácil ver que en todas estas distintas etapas de la sociedad, las leyes y las regulaciones con respecto a la propiedad han de ser muy distintas. En Tartaria, donde –como se dijo- el mantenimiento de los habitantes se basa en los rebaños y manadas, el robo se castiga con la muerte inmediata; en Norte América, a su vez, donde subsiste la era de los cazadores, no se presta mucha atención al robo. Como casi no hay propiedad entre ellos, el único daño que se les puede hacer es privarlos de sus piezas de caza. En tal etapa de la sociedad, se requerirán pocas leyes o regulaciones, y éstas no serán muy extensas… El robo, como dijimos, no tiene mucha importancia entre la gente en esta etapa o estado de la sociedad; hay muy pocas oportunidades de cometerlo, y éstas sin demasiado daño para la persona perjudicada.9

Pero cuando se pasa a la etapa pastoril la cosa cambia. La propiedad de los bienes muebles, en particular de los rebaños, pasa a ser prioritaria.

… Pero cuando los rebaños y manadas se crían, la propiedad se hace entonces más considerable, hay muchas oportunidades de dañar a otro y esos daños son extremadamente perniciosos para el que los sufre. En este estado, deben existir muchas más leyes y regulaciones; el hurto y el robo, si de cometen fácilmente, se castigarán en consecuencia con el mayor rigor.10

Por otra parte, el proceso de domesticación de los animales llevó un tiempo considerable, durante el cual el concepto de propiedad de los mismos fue cambiando. En la época de los cazadores el animal cazado pertenecía, en principio, al cazador en tanto que este mantuviera contacto directo con el mismo. Pero con el desarrollo del la cultura pastoril, era necesario garantizar la propiedad del animal al dueño original, aún cuando este se hubiera separado del mismo. Vemos nuevamente la relación entre el concepto de propiedad y el desarrollo social.

La propiedad necesariamente se extendería mucho más allá, cuando los hombres pensaron en domesticar y criar los animales salvajes. Podemos considerar que los animales son de tres clases. 1º, Ferae, tales que están siempre en un estado salvaje. 2º, Mansuefactae, que han sido domesticados de modo que vuelvan a nosotros después de que los dejemos fuera de nuestro poder, y lo hacen con normalidad; aunque los habrá de la misma clase, como los ciervos, liebres, patos, etc., que unos sean salvajes y los otros domesticados. 3º, Mansuetae, aquellos que sólo encontramos domesticados, como los bueyes. Cuando los hombres comenzaron a criar animales domésticos, serían todos de la clase de los mansuefactae, aunque debía haber otros todavía salvajes. Pero incluso en este caso, sería absolutamente necesario que la propiedad no cesara inmediatamente cuando acabara la posesión. El propietario no podría tener consigo todos los animales que hubiera

9 Adam Smith, 1762/63, p. 48.10 Adam Smith, 1762/63, pp. 48/49

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domesticado; sería necesario para la propiedad de este tipo que se extendiera más allá. Consideraban, por lo tanto, que todos los animales deberían permanecer en propiedad de aquel al que pertenecieron al principio, cuando conservaran el hábito de volver a su poder en determinado momento. Y esto sigue ocurriendo con respecto a aquellos animales que son mansuetae, o lo que llamamos propiamente domesticados…Pero, con el paso del tiempo, cuando algunas especies de animales ya no encontraban más que en estado de mansuefactae, perdían ese nombre y se convertían en mansuetae. De este modo se introdujo una extensión más amplia de la noción de propiedad, de modo que se estimaba que todos los animales eran propiedad de su amo mientras que se pudiera distinguir que eran suyos; y serían considerados como de su completa propiedad aunque hiciese tiempo que no estuvieran bajo su poder, lo suponía, sin duda, una gran extensión de noción de propiedad…11

No ocurre lo mismo con la propiedad de los bienes inmuebles, dado que, como se trataba de tribus nómadas, la propiedad de la tierra no tiene ninguna importancia y existen pocas moradas fijas de residencia.

La introducción de los pastores hizo que la morada estuviera hasta cierto punto más determinada, pero todavía incierta. El consentimiento de la tribu permitía que las cabañas que se levantasen fueran propiedad del constructor. Porque no estaría claro por qué una choza debía ser propiedad de uno después de que la dejase, más que de otro; una cueva o una gruta se consideraría como perteneciente a aquel que hubiese tomado posesión de ella mientras continuara allí; pero no parecería que uno tuviera ningún derecho a ella mañana por la noche por el hecho de que se hubiese hospedado allí anoche. La introducción de la propiedad de las casas debe haber ocurrido, por lo tanto, por el consentimiento común de los diferentes miembros de alguna tribu o sociedad. De ahí que, con el tiempo, la casa y las cosas que hay en ellas se acabaran considerando como propiedad del constructor…pero la propiedad no se extendería a la tierra o los pastos. La vida de un pastor requiere que frecuentemente cambie su situación, o por lo menos el lugar de pasto, para encontrar comida para el ganado.12

El desarrollo de la agricultura originó nuevas formas de propiedad y una legislación correspondiente respecto a las mismas.

…En la era de la agricultura, no está quizás expuesto al hurto y al robo abierto, pero sí a muchos más modos en los que puede violarse la propiedad, ya que el número de cosas susceptibles de apropiación se ha ampliado considerablemente. Por lo tanto, habrá mayor número de leyes que en una nación de pastores, aunque no tan rigurosas.13

Con respecto a la apropiación de la tierra, Smith reconoce una instancia original de agricultura comunitaria a partir de la cual se desarrollarían formas privadas de propiedad de la tierra. Este es un punto importante en el cual Smith resulta un antecedente del pensamiento de Marx.14

…Incluso después de la invención de la agricultura, pasó algún tiempo antes de que la tierra se dividiera en propiedades particulares. Al principio, toda la comunidad cultivaba un trozo de suelo común; dividía las cosechas producidas por este trozo de tierra entre los habitantes, según el tamaño de cada familia y el rango

11 Adam Smith, 1762/63, pp. 52/5312 Adam Smith, 1762/63, pp. 53/5413 Adam Smith, 1762/63, p. 4914 Ver, en particular, Carlos Marx, 1857/58.

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de los distintos individuos…El origen primero de la propiedad privada sería probablemente el que los hombres se establecieran en moradas fijas y vivieran juntos en ciudades, lo que probablemente ocurrió en todas sociedad desarrollada. El campo que cultivarían cuando vivieran juntos de este modo sería el contiguo a ellos. Como su lugar de aposento ya era fijo, les parecería más sencillo hacer una división de la tierra de una vez por todas, en lugar de verse en el innecesario problema de dividir la producción cada año…15

Finalmente, la era del comercio, donde los objetos que puede apropiarse la gente son muchos más, conduce al mayor desarrollo posible de la legislación.

…En la era del comercio, como el número de objetos susceptibles de apropiación se ha incrementado enormemente, las leyes deben multiplicarse proporcionalmente. Cuanto más desarrollada está una sociedad y mayor número de medios haya para mantener a sus habitantes, mayor será el número de leyes y regulaciones necesarias para mantener la justicia y prevenir infracciones al derecho de propiedad.16

c) Los derechos de sucesión.

Pasa luego a analizar los derechos sucesorios, los cuales están vinculados con el desarrollo económico de la sociedad. En una primera etapa, las pocas pertenencias que tenían los cazadores eran enterradas con sus dueños pero, con el desarrollo de la riqueza material, estas posesiones eran demasiado valiosas para ser descartados.

En la era de los cazadores no podía haber lugar para la sucesión, porque no había propiedad. Cualquier cosa pequeña, como los arcos o el carcaj, se enterraba con el difunto; tenían muy poco valor para ser dejados a un heredero. En la era de los pastores, cuando la propiedad se extendió enormemente, los bienes que el difunto había poseído eran demasiado valiosos para ser, todos, enterrados con él. Algunos de los objetos con los que se suponía que tenía mayor vinculación, como un caballo, un buey, etc., se enterrarían con él; el resto pasaría a los otros miembros de la familia, como se explicará…17

Con respecto a las leyes de herencia es interesante la posición crítica de Smith con respecto al derecho de primogenitura, es decir, al derecho del hijo mayor a quedarse con la posesión del campo.

Este derecho [de primogenitura] no sólo es absurdo en el más alto grado, sino que es extremadamente perjudicial para la comunidad, pues excluye por completo las tierras del comercio. El interés del estado requiere que las tierras permanezcan en el comercio como cualquier otro bien….Cuando la tierra está en el comercio y frecuentemente cambia de manos es más probable que esté mejor explotada; quienes han alcanzado una fortuna por el comercio o de cualquier otro modo tienen generalmente más dinero del que gastan. También son generalmente hombres juiciosos y emprendedores, así que en su mayoría tienen tanto el deseo como la capacidad de progresar. Por el contrario, aquellos que poseen viejas

15 Adam Smith, 1762/63, p. 5416 Adam Smith, 1762/63, p. 4917 Adam Smith, 1762/63, p. 71

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propiedades familiares raramente cuentan con dinero. El lujo y gasto anuales de la familia consumen los ingresos...18

Algunas cuestiones interesantes aparecen en esta frase, por un lado la necesidad de que las tierras tengan un mercado como cualquier otro bien y, particularmente, la idea de un sector social, los capitalistas agrarios, que dan un uso productivo al excedente frente a la existencia de otro grupo social, los terratenientes, que lo utilizan improductivamente en el gasto suntuario. Aparece acá la idea, que tendrá una importancia relevante en la Riqueza de las naciones, de que no es neutral el hecho que sector social se apropiará del excedente económico.

Por otra parte, todo el sistema de la gran propiedad, heredado del sistema feudal, resulta poco conveniente para favorecer las inversiones necesarias para el desarrollo agrícola.

Vemos, en consecuencia, que las tierras que están cerca de las grandes ciudades, que a menudo cambian de amos, están mucho mejor cultivadas que las situadas a distancia de ellos y que continúan por un largo tiempo en manos de una familia. La propiedad de una familia tiene muy pocas oportunidades de ser muy mejorada. El señor no tiene nada para invertir en ella y los tenientes no están en una situación que los induzca a progresar. Si esta propiedad se dividiese en varias posesiones pequeñas, cada una con un amo distinto, estaría pronto muy bien cultivada. Las fincas arrendadas por largo tiempo o infeudadas son las que favorecen más el progreso del país. Las arrendadas por breve plazo, al igual que las cedidas en precario, nunca pueden inducir al teniente a mejorarlas, pues lo que él ponga no será para sí sino para otros. Pero incluso en los largos arriendos el teniente tiene quizás que pagar como renta un tercio de sus ingresos. Esto supone un gran desaliento. Pero si todas estas fincas pasaran a ser propiedad, al cultivar la tierra los amos, se mejorarían pronto. Y esto ocurriría enseguida si no fuera por el derecho antinatural de primogenitura y por los vínculos, apoyados tan sólo por la vanidad de las familias.19

Otro tema interesante es el referido al surgimiento de nuevas industrias. Con el desarrollo del sistema económico se profundiza la división del trabajo en la sociedad, generando la especialización de los productores en un solo tipo de tareas. Sin embargo, Smith no es un acérrimo defensor de la competencia, el reconoce que, al menos por un tiempo, un cierto grado de protección es necesario para permitir el desarrollo de los nuevos sectores.

…Se piensa que la sociedad debe haber avanzado bastante antes de que los diferentes negocios pudieran subsistir, es decir, antes de que se pueda confiar en lograr la subsistencia con los negocios que no procuran inmediatamente comida de algún tipo…De ese modo, un carpintero o un tejedor no podrían confiar enteramente en su trabajo; sólo tomarían parte en ese negocio como algo subsidiario…Por lo tanto, para lograr la división de los oficios antes de que la realizara naturalmente el progreso de la sociedad, así como para impedir la incertidumbre de todos aquellos que se habían dedicado a uno, se encontró necesario darles la certeza de una subsistencia cómoda. Y, con este fin, el legislador determinó que tendrían el privilegio de ejercer sus propios negocios sin el miedo de que el incremento de sus rivales les impidiera el sustento…Pero, como

18 Adam Smith, 1762/63, p. 10219 Adam Smith, 1762/63, pp. 102/103

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este fin está completamente logrado, sería muy de desear que se quitaran estos y otros muchos remanentes de la vieja jurisprudencia.20

d) Las distintas formas de gobierno.

¿Qué ocurre con las formas de gobierno? Dependen, por supuesto, del desarrollo de los sistemas económicos. En la etapa de los cazadores/recolectores, es imposible que exista un gobierno con la suficiente capacidad de represión de los posibles crímenes. En realidad, es la misma comunidad, en su conjunto, quien debe penalizar las posibles infracciones.

El progreso del gobierno y el castigo de los crímenes es siempre, con mucho, el mismo que el de la sociedad; o, al menos, depende de él en gran medida. En las primeras etapas de la sociedad, cuando el gobierno es muy débil, los crímenes no se castigan; la sociedad no tiene fuerza suficiente para alentarlo a una gran intervención en los asuntos de los individuos. Lo único a lo que se puede aventurar, entonces, es a provocar una reconciliación y a obtener alguna compensación del ofensor para el ofendido.21

Pero a medida que la sociedad se desarrolla surgen las organizaciones estatales con su capacidad para reprimir los distintos delitos. Es importante observar que Smith considera que los primeros crímenes reprimidos son aquellos que afectan al estado y no a los individuos mostrando, a mi juicio claramente, que para él la idea del individuo aislado es muy posterior en el desarrollo de la sociedad. También es llamativa la idea de que los castigos son, en un principio, extremos en grado sumo y que la idea de la proporción de la sanción se logra con el paso del tiempo.

Pero cuando la sociedad adquiere una fuerza mayor, no sólo se exige una compensación, sino que se cambia por un castigo. Los castigos son siempre, en esta etapa de la sociedad, los más severos que puedan imaginarse. Los daños hechos a los individuos no son los que consideraría en primer lugar una sociedad que ha logrado obtener suficiente fuerza para castigar los crímenes; a éstos, sólo se puede acceder por simpatía, poniéndose en el estado de la persona dañada. Los primeros objetos de castigo son los que afectan inmediatamente al estado; la sociedad entera debe acceder a éstos, pues afectan al todo por igual. De este tipo son la traición…Cuando la sociedad hizo un progreso aún mayor, y la paz y el buen orden de la comunidad están asegurados, y la tranquilidad firmemente establecida, estos castigos serían mitigados de nuevo y llevados gradualmente a mantener una proporción justa con los distintos crímenes…22

¿Cómo fueron las distintas formas de gobierno? En la era de los cazadores no existía prácticamente gobierno y las decisiones se tomaban en asambleas de toda la comunidad, era una democracia participativa. La comunidad en su conjunto toma las decisiones vinculadas a la justicia, siempre pensando en los asuntos de la comunidad, como una declaración de guerra, dado que los conflictos privados deben ser solucionados en el seno de las familias o, si involucran a otras familias, mediante la intervención del resto de la tribu, sin la existencia de posibles sanciones punitorias.

20 Adam Smith, 1762/63, p. 11921 Adam Smith, 1762/63, p. 16422 Adam Smith, 1762/63, pp. 164/165

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En la era de los cazadores sólo puede haber muy poco gobierno; pero el que haya será de tipo democrático. Una nación de este tipo consiste en un número de familias independientes, de ningún modo relacionadas más que en que viven juntas en la misma ciudad o pueblo y hablan la misma lengua. Con respecto al poder judicial, en la medida en que existe en estas naciones, pertenece a la comunidad como cuerpo. Los asuntos de las familias privadas, en cuanto interesan sólo a los miembros de una familia, se dejan a la determinación de los miembros de esa familia. Las disputas con otros ocurren muy raramente en este estado; pero, si lo hacen y son de una naturaleza tal que pudieran perturbar a la comunidad, entonces toda la comunidad interfiere para decidir el desacuerdo, que es, normalmente, a lo más que llegan, sin atreverse nunca a infligir lo que se llama propiamente un castigo…En tales naciones, el poder de hacer la paz o la guerra pertenece a todo el pueblo…23

Por otro lado, no existe en sentido estricto un poder legislativo, las regulaciones que existen dentro de la comunidad tienen un carácter tradicional y no son instituidas por ningún cuerpo en especial.

…El poder legislativo podría subsistir en un estado así difícilmente; habría ocasión para muy pocas regulaciones, y ningún individuo se consideraría obligado a someterse a unas regulaciones que han sido hechas por otros, incluso cuando toda la comunidad estuviera interesada…24

No hay tampoco poder ejecutivo, pueden existir personas, que por sus dotes naturales superiores, adquieran cierta trascendencia dentro de la comunidad, pero esta no es hereditaria y es aceptada voluntariamente.

Todo el gobierno, en este estado, en la medida en que lo haya, es democrático. Es cierto que puede haber algunas personas en este estado que tengan un peso y una influencia superiores a las del resto de los miembros; pero esto no atenta contra la forma democrática, pues tales personas sólo tendrán una influencia por su superior sabiduría, valor o calificaciones similares, y sólo sobre aquellos que acepten ser dirigidos por ellas…25

Con los pastores empieza la época de los gobiernos en sentido propio, pero también la de las desigualdades. La existencia de rebaños y manadas hace que la riqueza pueda ser conservada en forma relativamente permanente, es decir, surge la posibilidad de la acumulación de los excedentes. Por otra parte, para que dicha acumulación tenga sentido, debe aparecer, como vimos, la propiedad privada de los mismos. Estas desigualdades en la riqueza llevan a que algunos resulten dependientes de los más afortunados para poder obtener los bienes que les son necesarios para su subsistencia.

La era de los pastores es aquella en la que primeramente comienza el gobierno en sentido propio. Y también es en este tiempo cuando los hombres se convierten en dependientes de los otros en un grado considerable. La apropiación de rebaños y manadas hace que la subsistencia mediante la caza sea muy incierta y precaria. Los animales que están más adaptados para el uso del hombre, como los bueyes, ovejas, caballos, camellos, etc., que también son los más numerosos, no son ya

23 Adam Smith, 1762/63, pp. 238/23924 Adam Smith, 1762/63, p. 23925 Adam Smith, 1762/63, p. 239

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comunes, sino propiedad de ciertos individuos. Surgen, entonces, las distinciones de ricos y pobres. Quienes no tienen posesiones de manadas y rebaños no pueden encontrar otro modo de sustentarse que obtenerlos de los ricos…en este período de la sociedad, la desigualdad de fortuna hace que sea mayor que en cualquier otro la diferencia de poder e influencia del rico sobre el pobre…26

Con las diferencias sociales aparece la posibilidad de conflictos dentro de la sociedad pero, por otro lado, la vida pastoril permite la existencia de un cierto tiempo libre que facilita la solución de los desacuerdos por medio de las asambleas, recordando que aún son sociedades de un tamaño relativamente pequeño.

Supongamos, entonces, una nación de pastores que vivan juntos en un pueblo o una ciudad…el modo en el que los distintos individuos pensarían enseguida, y en el que convendrían enseguida para resolver las diferencias que pudieran aparecer, sería remitirlas a la asamblea de todo el pueblo. No hay duda, como dije antes, de que habría muchas más disputas en esta etapa de la sociedad que en la de los cazadores, pero no tantas como después habrá con los mayores avances de la sociedad…Por lo tanto, no habría muchas disputas que resolver, ni los habitantes tendrían tantos compromisos como para que no les quedara tiempo libre para asistir a estas reuniones.27

Pero junto con las diferencias de riqueza aparecen las diferencias de poder, aquellos que poseen los mayores rebaños, que tienen una mayor cantidad de gente a su servicio, pronto son considerados los depositarios necesarios del poder y, lo que parece particularmente interesante, este poder se transforma en hereditario.

…Pero, al igual que en toda sociedad hay algunas personas que toman el liderazgo e influyen sobre las otras, así habría, sin lugar a dudas, algunas personas eminentes que tendrían influencia sobre las deliberaciones de las otras. Los ricos, que tienen grandes posesiones en rebaños y manadas, tendrían, como observé, muchos dependientes que seguirían su consejo y dirección y, de este modo, tendrían mayor influencia sobre la gente. Del mismo modo que estas personas serían las más eminentes entre los viejos, sus hijos los serían entre los más jóvenes, pues la eminencia de sus padres les aportaría respeto a su persona y, como serían respetados así durante la vida de sus padres, ocuparían naturalmente su lugar después de la muerte…la autoridad de estos jefes en este estado se convertiría pronto en hereditaria…28

Para Smith, en la época pastoril los poderes ejecutivos y legislativos casi no tendrían importancia. La importancia de los caudillos territoriales es tal que estas funciones son ejercidas por los mismos.

Con respecto al poder ejecutivo, o el de hacer la paz y la guerra, en la medida en que existiera, estaría también las mismas manos que el precedente. Las guerras, entre las naciones de este tipo, se emprendían generalmente de repente y se decidían en una o dos escaramuzas. Toda la gente saldría precipitadamente cuando fueran atacados o hicieran una incursión en masa sobre sus vecinos. Sus caudillos no serían comandantes regulares, su ejército sería más una banda ingobernable que un cuerpo disciplinado. Los que aparecieran como los más valientes y esforzados,

26 Adam Smith, 1762/63, pp. 239/24027 Adam Smith, 1762/63, pp. 240/24128 Adam Smith, 1762/63, p. 240

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guiarían a los otros…El poder de estos caudillos no continuaba más allá de la guerra y, por supuesto, era entonces poco más que el de conducir a la batalla…El legislativo nunca existe entre esta gente en este estado de la sociedad. Las leyes y las regulaciones son el producto de unos usos más refinados y de un gobierno más desarrollado, y no se encuentra hasta que está considerablemente avanzado.29

Pero cuando la sociedad avanza hacia sociedades mercantiles, donde se desarrollan las artes y las manufacturas y la gente tiene menos tiempo libre para ocuparse del manejo de la cosa pública, empieza a desarrollarse la función de hacer cumplir las leyes como institución separada y cuyo ejercicio es desarrollado por personal especializado, sin que pierdan poder, al menos al principio, los caudillos.

Entonces, se cultivan las artes y las manufacturas y, entonces, la gente tiene menos tiempo libre y pede asistir menos a los juicios. Además de esto, las causas de disputa también se multiplican. Existen los testamentos, los contratos de matrimonio, etc. Se introducen gradualmente de modo que, por un lado, se incrementa la ocupación y, por otro, la gente tiene menos tiempo libre…El cuerpo del pueblo escoge un cierto número de personas, cuya ocupación es atender las causas y resolver todas las disputas. Los jefes y caudillos de la nación formarán parte, necesariamente, de este consejo; su autoridad todavía continuará y se convertirá en una especie de principal o presidente del tribunal…30

Tenemos entonces que el gobierno surge en la etapa pastoril como una necesidad vinculada al desarrollo de la propiedad privada, en este sentido es visto como una forma que tienen los ricos de proteger su propiedad y someter a los pobres.

…Ciertos individuos se hacen muy ricos en mandas y rebaños, poseyendo mucho ganado bovino y ovejas, mientras que otros no tendrán un solo animal…ya que algunos tienen, del modo que mencione antes, una gran riqueza y otros nada, es necesario que el brazo de la autoridad esté constantemente levantado, y que hagan leyes o regulaciones permanentes que puedan asegurar la propiedad de los ricos de las incursiones de los pobres, quienes de otro modo, la violarían constantemente, y establezca en qué consiste la infracción de esta propiedad y qué casos estarán sujetos a castigo. Las leyes y el gobierno se pueden considerar, en éste como en cualquier otro caso, como un arreglo de los ricos para oprimir a los pobres y preservar en su favor la desigualdad de bienes que, de otro modo, sería pronto destruida por los ataques de los pobres, quienes pronto reducirían, si no fueran estorbados por el gobierno, a los otros a la igualdad con ellos mismos por la fuerza bruta…31

Con el feudalismo el poder se atomizo y los señores feudales fueron quienes detectaron todo el poder dentro de sus respectivos territorios, en particular si tenemos en cuenta que el poder real no contaba con un aparato militar en condiciones de imponer el orden sobre los señores feudales.

…Por lo tanto, estos señores tenían grandes jurisdicciones independientes de todos los tribunales de todos los tribunales, cuyo orden quedó, como consecuencia, enteramente destruido. Este desorden se incrementaba del mismo modo que su poder y, al final, llegó a comprenderse que el gran señor del condado era el “alderman” hereditario o conde hereditario del condado, pues sólo el podía ejercer ese oficio sin estorbo, al tiempo que podía impedírselo a todos los demás. Del

29 Adam Smith, 1762/63, p. 24230 Adam Smith, 1762/63, pp. 242/24331 Adam Smith, 1762/63, pp. 245/246

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mismo modo, el señor principal de cada centena, etc., llegó a presidirla. Y todos estos señores se convirtieron en jueces, poseedores de grandes propiedades, que poseían totalmente libres, sin las cargas introducidas por el gobierno feudal que mencionaré inmediatamente. Como siempre estaban en guerra unos con otros y, a menudo, con le rey, todo poder dependía del servicio de sus servidores y tenientes; pero la mayor parte recaía en sus tenientes, quienes tenían sus tierras, al principio mientras el señor quisiera, llamándoselas durante ese tiempo munera o regalos. Cuando se presentaba la ocasión de pedir algún servicio extraordinario de estos tenientes (ya fuera por parte de los señores o del rey) les prometía la posesión de sus tierras por un número mayor de años. De este modo el teniente llegó a tener, al principio, los munera de por vida, en cuyo caso se llamaban beneficia. Con el paso del tiempo, llegaron a tenerlos el teniente y su hijo de por vida, y así sucesivamente hasta que se convirtieron en totalmente hereditarios y se llamaron feuda…32

Pero nuevamente las modificaciones en la esfera económica condujeron a cambios sociales. El desarrollo del comercio de bienes suntuarios y la necesidad de conseguir efectivo para abastecerse de este tipo de bienes condujo a la nobleza a buscar formas de explotación del campo que le resultaran más rentables, en términos metálicos, esto codujo, de acuerdo a Smith, a la disolución del feudalismo.

Sin embargo, el poder de los nobles declinó en los gobiernos feudales por las mismas causas que en los demás sitios, es decir, por la introducción de las artes, el comercio y el lujo. Su poder consistía en el número de sus servidores y tenientes. El número de sus servidores e, incluso, de sus dependientes se debía a su modo de vida sencillo y hospitalario…La llegada del lujo le dio la oportunidad de gastar mucho, por lo que le costaba trabajo extorsionarlos y sacarles altas rentas. Esto arruinó su poder sobre ellos. Le dirían, entonces, que no podían pagar una renta así por una posesión tan precaria, pero que lo consentirían si les diera posesiones más duraderas; lo que siendo conveniente para ambos, se acuerda con buena disposición… De este modo, el poder de los señores desapareció y, como esto ocurrió generalmente antes de que el poder de los comunes llegara a un alto grado, generalmente seguía un gobierno absoluto…En otros países, las artes y el lujo han producido exactamente el efecto contrario…33 (302/304)

Vale la pena mencionar que en Smith no hay una filosofía de la historia, el desarrollo de las artes y el lujo no conducen necesariamente a la disolución del feudalismo sino que todo va a depender de las condiciones históricas en que esto ocurra.

Finalmente Smith explica como, en Inglaterra, a partir de la incapacidad del rey de imponer militarmente su voluntad, la Cámara de los Comunes adquirió preeminencia, y, por lo tanto, el rey se vio obligado a negociar con los nuevos sectores sociales, quienes estaban adquiriendo una enorme importancia económica.

…Gran Bretaña no tenía vecinos a quien temer, considerándosela entonces superior a toda Europa. Siendo las rentas del rey muy escasas, y habiéndose vendido las tierras dominicales, el principal soporte de los reyes, no tenía más dinero del que era necesario para mantener la dignidad y grandeza de una corte. Por todo ello, se consideró innecesario, así como inconveniente e inútil, establecer un ejército permanente. Los Estados de Francia, la Dieta de Suecia y Polonia, y los

32 Adam Smith, 1762/63, pp. 288/28933 Adam Smith, 1762/63, pp. 304/302

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Lores y Comunes en Inglaterra, tenían el poder de hacer las leyes y regulaciones, y de imponer los impuestos que les parecieran; vemos que los Tudor suprimieron esos debates y, si hubiesen tenido un ejército permanente, habrían sido capaces de hacer lo que quisieran. Pero como el soberano no tenía un ejército permanente, estaba obligado a convocar un Parlamento…Los Comunes estaban ya, entonces, lejos de ser insignificantes como al principio, sino que tenían una gran propiedad, quizás igual o mayor que la de los nobles…Y no otorgaban ni siquiera lo necesario sin eliminar alguna parte de las prerrogativas reales…34

Tenemos entonces que, en el desarrollo de la teoría de los cuatro estadios, tal cual era enseñada por Smith en sus clases, vemos un anticipo de temáticas interpretativas que volverán a surgir en el siglo siguiente en la interpretación materialista de la historia. La importancia de la vinculación entre la forma en que los hombres se abastecen de los medios necesarios para su subsistencia con el desarrollo de la jurisprudencia, el gobierno y aún las costumbres en las distintas sociedades debe ser remarcado. Así como también es importante destacar que esta no es una preocupación particular de Smith, sino que pertenece, por así decirlo, al tipo de problemática de la época, en particular en autores franceses y escoceses.

2. LAS IDEAS ECONÓMICAS EN LAS LECCIONES…

En las Lecciones sobre JurisprudenciaSmith desarrollaba, en las últimas clases, los problemas vinculados a los aspectos económicos. Vamos a detenernos en algunos de ellos, analizando similitudes y diferencias, con respecto a La Riqueza…, para ver como evolucionó el pensamiento del autor respecto a estos temas, en particular sobre la teoría del valor.

Los temas económicos aparecen como parte del análisis de las regulaciones de Policía35 del gobierno, las que incluyen tres tipos de cosas: “la atención prestada por lo público a la limpieza de las carreteras, calles, etc.; 2°, la seguridad; y, en tercer lugar, la baratura o abundancia, que es fuente constante”36 , de las cuales sólo la última, precisamente la dedicada a los problemas económicos, merece, para Smith, ser analizada.

a) Similitudes entre Las Lecciones… y La Riqueza…

Veamos algunas de las similitudes entre los dos trabajos.

La división del trabajo.

La principal es la relación que establece entre el crecimiento de la productividad y la división del trabajo. Smith desarrollaba en sus clases el ejemplo de la fábrica de alfileres para ilustrar sobre las ventajas de la división del trabajo, vamos a desplegarlo a continuación teniendo en cuenta

34 Adam Smith, 1762/63, pp. 307/30835 Police en el original.36 Adam Smith, 1762/63, p. 377.

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que dicho ejemplo, con algunas pequeñas diferencias numéricas, va a ser retomado en La Riqueza…

…¿De qué modo explicaremos entonces la gran parte que tienen él y la gente más baja en la elaboración de las facilidades de la vida? Sólo puede explicarlo la división del trabajo entre diferentes manos. Tomaremos, para este propósito, un ejemplo frívolo, pero que ilustrará suficientemente: la fabricación de un alfiler. Supongamos que un hombre excava el mineral de la mina, lo separa y lo mezcla, lo funde, y prepara los hornos y fragua el bronce en barras, las convierte en alambre, corta este alambre, forma la cabeza, y etc., etc.; difícilmente sería capaz de hacer un alfiler en el plazo de un año…El fabricante de alfileres divide ahora este trabajo en muchas manos; uno corta el alambre, otro afila un extremo para colocar la cabeza, 3 ó 4 están empleados en hacer la cabeza…De modo que en la fabricación de una alfiler se emplean unas 18 personas. Estas harán en un día unos 36.000 alfileres, lo que viene a ser lo mismo que si cada uno hiciera unos 2000…37

Esta división del trabajo es lo que permite un incremento constante en la productividad y será visto, en La Riqueza…, como uno de los dos determinantes, junto con el aumento del trabajo productivo, del crecimiento económico. En este sentido, vemos que ya en Las Lecciones…Smith coloca en el centro de la escena al trabajo como explicación del incremento de la productividad y, por lo tanto, del excedente económico. Esto ya establece diferencias con respecto a los fisiócratas, para quienes el excedente era el resultado de ciertas propiedades naturales de la tierra.

Ahora bien, ¿cuáles son los mecanismos que hacen que la división del trabajo incremente la productividad? De acuerdo a Smith hay tres razones:

Este crecimiento en las existencias de mercancías, y la baratura del trabajo surgida de su división, tiene tres causas. 1ª, la destreza que ocasiona en los trabajadores; en 2º lugar, el ahorro en el tiempo que se pierde pasar de una pieza de trabajo a otra; y, en 3º lugar, la invención de máquinas que ocasiona…38

Analicemos cada una de estas.

a. El incremento de destreza originado por la repetición de una tarea: el trabajo se reduce a una serie de operaciones muy simples, de manera tal que aún un niño puede aprender una tarea con facilidad. Esto tiene una serie de consecuencias sociales de importancia, en particular que desaparece el artesano especializado, que tenía un estatus social de cierta relevancia y cuyo oficio requería de largos años de preparación, y es reemplazado por mano de obra no calificada. Sin embargo, en La Riqueza…, Smith muestra ser consciente del embrutecimiento que provoca en el productor directo esta reiteración de unas pocas operaciones a lo largo de la jornada.

Con el progreso en la división del trabajo, la ocupación de aquellos que viven de su trabajo, es decir, de la mayor parte del pueblo, se reduce a unas cuantas operaciones sencillas, con frecuencia una o dos. Ahora bien, la inteligencia de la

37 Adam Smith, 1762/63, p. 388.38 Adam Smith, 1762/63, p. 392.

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mayor parte de los hombres se forma en sus ocupaciones ordinarias. Un hombre que dedica su vida a ejecutar unas cuantas operaciones sencillas; cuyos efectos son siempre los mismos, o casi los mismos, no tiene necesidad de ejercitar su entendimiento y su capacidad de inventiva para salvar dificultades que nunca se le presentan. En consecuencia, naturalmente pierde el hábito de ejercitarlos, y generalmente se hace todo lo estúpida e ignorante que puede ser una criatura humana.39

La división del trabajo se nos presenta entonces como la vía principal para el crecimiento de la productividad, pero tiene sus costos humanos, que el autor no olvida.

b. El poder realizar una sola tarea permite que no existan tiempos muertos al pasar de una tarea a otra. Esto es particularmente notable en el caso de la producción conjunta de bienes agrícolas y textiles, típica de la época de Smith y, en general, toda la tarea agrícola que está muy condicionada por el ciclo biológico y no permite una planificación y subdivisión del trabajo como lo permite la industria. Esto lo conduce a considerar que el desarrollo capitalista se producirá principalmente en las manufacturas lo que establece una diferencia fundamental con los fisiócratas, que plantean el desarrollo capitalista en el campo.

…Es totalmente evidente que tiene que perderse tiempo cuando el trabajo se realiza en sitios diferentes. Un tejedor que cultiva una granja tiene que perder una gran cantidad de tiempo en ir del a campo a su telar…40

c. La invención de maquinarias origina una productividad mayor. Smith sostiene que estas invenciones son efectuadas, en muchos casos, por trabajadores que buscan ahorrarse esfuerzos,

…Un esclavo al que se puso a triturar maíz hasta convertirlo en polvo entre dos piedras duras y toscas fue, probablemente, la persona que primero pensó en facilitar el trabajo sujetando una de las piedras sobre un eje y girándola con una manivela horizontal…41

Es interesante remarcar la figura del esclavo, en el ejemplo que va a desarrollar posteriormente en La Riqueza… es sustituida por la de un niño que busca ir a jugar con sus amigos. Esto parece indicar que ya se estaba produciendo un incremento del trabajo infantil en Inglaterra, que luego de la Revolución Industrial sería una de las características de la misma.

Otro aspecto interesante es lo primitivo del ejemplo, pero los otros que utiliza no son mucho más modernos: la rueda dentada, el arado y la sembradora, recordemos que estamos, en la época de Smith, todavía en los momentos previos a la Revolución Industrial.

El papel del filósofo en los descubrimientos.

Por otro lado, estos descubrimientos empíricos son de corto alcance si no existe alguien, el filósofo, capaz de desarrollar todas sus potencialidades.

39 Adam Smith, 1776, pp. 810/811.40 Adam Smith, 1762/63, p. 393.41 Adam Smith, 1762/63, p. 394.

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…Muchos, por no decir todos de los que están ocupados de ese modo, son capaces de utilizar una fuerza de un tipo que se haya usado del mismo modo anteriormente; pero utilizar fuerzas que nunca se han usado antes de ese modo, y que parecen totalmente inadecuadas, tiene que ser el trabajo de uno de estos observadores generales a los que llamamos filósofos.42

No deja de ser interesante observar que Smith anticipa, una vez más, planteos filosóficos que aún hoy están en vigencia. Comparemos con la caracterización que realiza Klimovsky de los distintos tipos de descubrimientos43:

Descubrimiento1: lo que Klimovsky denomina “el topetazo”, el investigador, viajante o quien sea se topa con una entidad desconocida, pero no tiene conciencia de que se trata. El ejemplo más claro, que toman Klimovsky y Cecilia Hidalgo44 es el de Colón, quién nunca se dio cuenta de que había llegado a un continente hasta entonces desconocido para los europeos.

Descubrimiento2: la conceptuación forma parte del descubrimiento, Américo Vespucio fue quien pudo identificar aquello con lo que Colón se había topado.

Descubrimiento3: una hipótesis teórica permite predecir que se va a encontrar una entidad, desconocida hasta el momento, con ciertas características particulares. Por ejemplo, el descubrimiento de ciertas partículas subatómicas, como el positrón, por parte de Paul Dirac a partir de la mecánica cuántica.

Descubrimiento4: son los descubrimientos teóricos, formas de interpretar los mismos datos con esquemas conceptuales alternativos. Mendel postuló la existencia de los genes para explicar un fenómeno conocido, la transmisión de rasgos hereditarios.

El caso de los descubrimientos empíricos que menciona Smith lo podemos considerar como parte de los descubrimientos1, cuyo valor es muy relativo si no podemos conceptualizarlos en forma adecuada, es decir, si no pasamos a un tipo de descubrimientos2.

División técnica versus división social del trabajo

Ahora bien, Smith hasta acá nos habla de la división de tareas dentro de la manufactura, es decir, una división técnica del trabajo, lo cual nos remite a alguien que coordine la producción, aunque en esta etapa todavía no estaba contemplada la figura del capitalista, y donde los procesos de producción se nos presentan como algo organizado y planeado de antemano. Pero también se refiere a lo que podemos considerar una división social del trabajo:

¿Cuántos artistas concurren para proveer las distintas mercancías que encontramos en las distintas abacerías, principalmente, para el alimento de un hombre? El

42 Adam Smith, 1762/63, p. 394.43 Klimovsky, 2005.44 Hidalgo, 2005.

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carpintero, el ebanista, el tallista en madera, etc., todos contribuyen, junto con el albañil, el solador, etc., a construir o equipar nuestras moradas…45

En un sistema social medianamente desarrollado existe una división del trabajo en el sentido de que distintas personas se dedican a producir tipos de bienes diferentes, ahora bien, en sociedades como las nuestras, estos bienes toman la forma de mercancías, es decir, que deben ser intercambiados en un mercado, sin embargo este es un proceso desorganizado y espontáneo, precisamente la idea de la “mano invisible” que analizaremos oportunamente tiene por objeto salvar esta brecha.

Smith comete acá, a nuestro juicio, dos errores interrelacionados, en primer lugar no tiene en cuenta que estos dos tipos de división del trabajo son dos asuntos, como vimos, distintos; en segundo lugar, considera que la división del trabajo implica necesariamente una forma mercantil, cuando, en realidad, en las sociedades precapitalistas existía división del trabajo sin sistema mercantil. En distintos tipos de sociedades la distribución de los bienes puede adoptar formas muy diferentes, veamos las tres formas planteadas por Polanyi dentro del marco de la antropología económica.

Para Polanyi la palabra economía tiene dos significados, el primero es el formal y se refiere a una relación lógica entre medios y fines. El segundo, que denomina sustantivo se refiere a la necesidad que tiene los seres humanos de interactuar entre si y con el entorno físico para su subsistencia.

Por otro lado, sostiene que, en las sociedades precapitalistas, las instituciones económicas están “incrustadas” en el total de las instituciones de la sociedad, no hay forma de separar lo económico de lo social y político.

La verdadera condición de estas cuestiones es tan diferente de la mentalidad de mercado, que no es fácil transmitirlo con simples palabras. En realidad, la justicia, la ley y la libertad, como valores institucionales, hicieron su primera aparición en la esfera económica como resultado de una acción estatal. En las sociedades tribales, la solidaridad se salvaguarda mediante la costumbre y la tradición; la vida económica está incrustada en la organización social y política de la sociedad; no hay lugar para las transacciones económicas; y se trata de impedir toda acción ocasional de trueque, ya que se considera un peligro para la solidaridad tribal...46

¿Cuáles son las formas de integración de las economías humanas? Polanyi distingue tres: la reciprocidad, la redistribución y el intercambio. El funcionamiento de estas formas de integración no es ajeno a las estructuras institucionales donde funcionan. En otras palabras, el análisis no puede partir del individualismo metodológico porque estas instituciones no son el producto de la sumatoria de ciertas acciones individuales.

…El funcionamiento efectivo de las formas de integración depende de la presencia de estructuras institucionales definidas. Ha habido autores que consideran que tales estructuras son el resultado de ciertos tipos de actitudes personales: “la propensión

45 Adam Smith, 1762/63, p. 383.46 Polanyi, Karl, 1977, p. 89.

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al trueque, permuta e intercambio” de Adam Smith es tal ve el ejemplo más famoso. No es verdad, sin embargo, que los actos y actitudes individuales se unan simplemente para crear las estructuras institucionales que sustentan las formas de integración.47

Ninguna de estas formas de integración es posible sin la existencia previa de una estructura económica, la cual no es el resultado de las acciones individuales de trueque. En particular, un sistema de intercambios vía trueque no puede originar ni un sistema de precios ni un sistema de mercado.

…Por lo que respecta al intercambio, las acciones fortuitas de trueque entre individuos, si se dan, son incapaces de producir el elemento integrador que es el precio. Aquí, al igual que en la reciprocidad, el factor de validez y organización no surge del individuo, sino de las acciones colectivas de personas en situaciones estructuradas. El intercambio como forma de integración depende de la presencia de un sistema de mercado, un modelo institucional que, contrariamente a lo que se supone, no se origina en las acciones fortuitas de intercambio.48

Veamos, entonces, las tres formas de integración.

a. La reciprocidad.

La reciprocidad implica la existencia de dos subgrupos simétricos que están relacionados a través de la reciprocidad. Puede ocurrir, y es el caso más interesante, que la reciprocidad no sea directa, es decir, si tengo un grupo de cabañas en círculo los participantes puede tener obligaciones con los habitantes de la cabaña ubicada a su izquierda en tanto que ellos son ayudados por los habitantes de la cabaña ubicada a su derecha. Este tipo de relaciones son descriptas por Malinowski en Los argonautas del Pacífico occidental49 con referencia a la institución del Kula que implica relaciones de reciprocidad a lo largo de prácticamente todo el archipiélago y las relaciones familiares entre los trobiandeses, quienes tienen obligaciones con la familia de su hermana y que son correspondidos por el hermano de su mujer.

b. La redistribución.

La redistribución se produce cuando los bienes se dirigen hacia un centro, ya sea físico o disposicional, y luego son distribuidos de acuerdo a la costumbre, la ley o una decisión central. Este tipo de sistemas se pueden dar en pueblos de distinto desarrollo, desde tribus cazadoras primitivas hasta los amplios sistemas de almacenamiento de Babilonia e Inca.

En los pueblos primitivos la distribución suele ir acompañada por festividades, ya sea religiosas o no, funerales, cosechas, etc. Estas son las

47 Polanyi, Karl, 1977, p. 111.48 Polanyi, Karl, 1977, p. 111. Las cursivas son mías (RB)49 Malinowski, Bronislaw, 1922.

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ocasiones en que los jefes distribuyen los bienes, tanto alimenticios como manufacturados, que pueden haber acaparado por distintos medios (impuestos, lazos de vasallaje, etc.) Lo importante es que, para que exista un sistema de este tipo, es necesario el desarrollo previo de una organización central.

La redistribución –sea física o puramente disposicional- no puede darse a menos que existan canales mediante los cuales se pueda realizar el movimiento hacia el centro y subsiguiente movimiento hacia el exterior. Por tanto, es imperativo un cierto grado de centralización. La organización central es crucial, no sólo política sino también económicamente.50

Según Polanyi, cuanto más retrocedamos en la historia de la sociedad humana es menos probable que encontremos actuando al hombre en beneficio propio, sino que debemos analizarlo en el marco de instituciones más amplia que las “pequeñas familias”.

c. Intercambio.

Es un movimiento bidireccional de bienes entre personas que buscan su máximo beneficio. El regateo es su forma más representativa y es necesario para el funcionamiento de estos mecanismos de mercado. Lo importante es que para Polanyi los sistemas de mercado no tienen su origen en operaciones de trueque individuales, sino en mecanismos mucho más complicados que no podemos desarrollar en este trabajo. Con todo hay que mencionar que estos intercambios no implican necesariamente la existencia de mecanismos de mercado oferta-demanda-precio, por ejemplo, el abastecimiento de cereales en Atenas se efectuaba a partir de negociaciones políticas efectuadas por representantes del rey, los “factores”, y no por comerciantes, los precios eran administrados.

Cabe mencionar, sin embargo, las limitaciones que presenta, a nuestro juicio, el sustantivismo. El enfoque que realiza Polanyi está dirigido a detectar ciertas regularidades empíricas en la esfera de la circulación de los productos, sin embargo esto, desde el punto de vista del naturalismo crítico, no es suficiente. En efecto, para lograr una explicación cabal debemos penetrar por detrás de estas regularidades empíricas hasta alcanzar las relaciones sociales que subyacen y explican a las mismas. Es también atendible el comentario de Godelier, quien también considera que el principal defecto de Polanyi es quedarse en el nivel empírico y en las formas de distribución sin analizar las relaciones de producción subyacentes a las mismas.

El mismo Polanyi no pudo pues evitar el comprobar empíricamente la existencia de cierta regularidad estadística en el predominio de tal o cual forma de integración económica en tal o cual época de la historia de la humanidad, en tal o cual forma de organización económica y social. Pero no quiso ir más lejos y sin embargo hubiera podido hacerlo si hubiera analizado rigurosamente lo que él

50 Malinowski, Bronislaw, 1922, 115.

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designaba con el término genérico de “forma de integración” y si hubiera sabido distinguir las dos realidades que confundió bajo ese mismo concepto, las relaciones sociales de producción y las formas sociales de circulación del producto…51

La ahistoricidad de las ideas de Smith.

Ahora bien, el problema se origina a partir de la misma justificación que hace Smith de la división del trabajo y su forma comercial:

Esta división del trabajo no es, sin embargo, el efecto de alguna policía humana, sino que es la consecuencia necesaria de una disposición natural totalmente peculiar a los hombres, esto es, la disposición al trueque…los perros…nunca se ha visto que lleguen a ningún acuerdo, dándose un hueso por otro…Cuando le pides a un cervecero o a un carnicero cerveza o carne, no le explicas cuánto las necesitas, sino lo bien que les vendría el que te permitiese tenerlas por un cierto precio. No te diriges a su humanidad, sino a su egoísmo…52

Estos dos elementos, la apelación al egoísmo y colocar la inclinación al trueque como parte de la esencia humana reaparecen, casi textuales, en La Riqueza… Tenemos entonces que Smith toma una característica propia de las sociedades mercantiles como si fuera intrínsecamente a la especie y, por lo tanto, el tipo de sociedad que esta origina, como la forma natural de organización social.

En La Riqueza… detiene aquí su análisis sobre el origen de la división del trabajo, en el texto que estamos considerando va sostener que esta disposición al intercambio se debe a una disposición natural en los seres humanos a persuadir.

Si investigamos sobre el principio de la mente humana sobre el que se basa esta disposición al cambio, sería claramente la inclinación natural, que cada uno tiene, a persuadir…De este modo, adquieren una cierta destreza y habilidad en dirigir sus asuntos o, en otras palabras, en la dirección de los hombres; y ésta es totalmente la práctica de todos los hombres en los asuntos más ordinarios…53

La idea de la división del trabajo la podemos rastrear hasta La Repúblicca de Platón. Para Platón, la ciudad surge por la dependencia que tienen los hombres, para abastecerse de las cosas necesaria, de la colaboración de los demás, en la base del origen de la ciudad se encuentra, la división del trabajo.

Ahora bien, ¿en qué se basa esta división del trabajo?, en las desigualdades naturales de los hombres, cada ser humano tiene capacidades distintas y debe especializarse en aquello para lo cual es más idóneo.

No me extraña, por Zeus –dije yo -. Porque al hablar tú me doy cuenta de que, por de pronto, no hay dos personas exactamente iguales por naturaleza, sino que en

51 Godelier, 1957, p. 30.52 Adam Smith, 1762/63, p. 395.53 Adam Smith, 1762/63, p. 400.

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todas hay diferencias innatas que hacen apta a cada una para una ocupación. ¿No lo crees así?54

Pero, esta justificación para la división del trabajo lo lleva a terminar convalidando el régimen de castas a partir de las desigualdades humanas. En particular la guerra es un oficio que requiere cierto tipo de habilidades específicas, las cuales vincula con la naturaleza de los guardianes. Tenemos entonces una visión oligárquica de la división del trabajo

Por consiguiente –seguí diciendo -, cuanto más importante sea la misión de los guardianes, tanto más preciso será que se desliguen absolutamente de toda otra ocupación y realicen su trabajo con la máxima competencia y celo.55

Es importante comparar esta justificación de la división del trabajo con la que va a presentar Adam Smith, el principal teórico burgués de este tema, en el siglo XVIII. En primer lugar Smith considera que los hombres son por naturaleza muy semejantes entre sí y que es la división del trabajo la que los va diferenciando a lo largo de la vida.

La diferencia de talentos naturales en hombres diversos no es tan grande como vulgarmente se cree, y la gran variedad de talentos que parece distinguir a los hombres de diferentes profesiones, cuando llegan a la madurez es, la más de las veces, efecto y no causa de la división del trabajo. Las diferencias más dispares de caracteres, entre un filósofo y un mozo de cuerda, pongamos por ejemplo, no proceden tanto, al parecer, de la naturaleza como del hábito, la costumbre o la educación.56

Tenemos entonces una justificación, la de Platón, oligárquica de la división del trabajo, donde los seres humanos somos distintos por naturaleza, frente a una burguesa, en la cual todos tenemos similares capacidades al nacer y estas se van desarrollando en forma diferente como consecuencia de la división del trabajo. No es consecuencia de las diferencias naturales de los seres humanos sino de la propensión de la naturaleza humana a cambiar una cosa por otra: “Nadie ha visto todavía que los perros cambien de una manera deliberada y equitativa un hueso por otro”57

Precio natural versus precio de mercado.

Pero si el mercado es el elemento clave para comprender el funcionamiento de la división social del trabajo, entonces es importante determinar cuales son las circunstancias que determinan el precio de los bienes. En este sentido Smith retoma una distinción que existía por lo menos desde Cantillon, la existente entre el “precio natural” (o “valor intrínseco”) y el “precio de mercado”.

54 Platón: La República, 370 b.55 Platón: La República, 374 e.56 A. Smith: 1776, p. 18.57 A. Smith: 1776, p. 16.

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…espero haber aclarado que el precio o valor intrínseco de una cosa es la medida de la cantidad de tierra y de trabajo que intervienen en su producción, teniendo en cuenta la fertilidad o producto de la tierra, y la calidad del trabajo.

Pero ocurre a menudo que muchas cosas, actualmente dotadas de un cierto valor intrínseco, no se venden en el mercado conforme a ese valor: ello depende del humor y la fantasía de los hombres y del consumo que tales productos se hace.58

A diferencia de Cantillon, Smith solamente considera el “valor del trabajo” al analizar el precio natural, pero no el precio de mercado del trabajo sino su valor “natural”, es decir, la cantidad de dinero necesaria para mantener al trabajador, recompensar sus gastos de educación y asegurarlo contra los riesgos de no tener una vida activa lo suficientemente larga para amortizar dicho gastos.

…Hay, en cada especie de bienes, dos precios separados que se han de considerar, el precio natural y el de mercado. El 1º es el que es necesario para inducir a alguien a dedicarse a un negocio en particular. Así uno no será amanuense a no ser que tenga la perspectiva de mantenerse y compensar los gastos de educación…59

Vemos que, si el precio natural se iguala al salario natural, no tenemos lugar para el concepto de beneficio capitalista, obviamente este punto será radicalmente modificado en La Riqueza…

¿Como se determina el precio de mercado?, por la relación existente entre la oferta disponible y la demanda solvente del bien.

El precio de mercado difiere a menudo considerablemente de éste [se refiere al precio natural], y se regula por otras circunstancias. Cuando se llevan los bienes al mercado, raras veces preguntamos qué beneficios tendrá la persona si los pone a tal o cual precio. Son otras circunstancias las que determinan lo que obtendrá. Estas son, 1º, la demanda o necesidad (ya sea real o caprichosa); en 2º lugar, la abundancia o proporción a la demanda; y, en 3º lugar, la riqueza de la demanda, o de los demandantes.60 (406)

Cómo vemos el precio natural y el precio de mercado están determinados por razones muy diferentes, la pregunta entonces es: ¿existe algún mecanismo de ajuste entre uno y otro? Es decir, ¿de que forma el precio de mercado debe igualarse al precio natural? Por la acción de la competencia de los distintos trabajadores buscando maximizar su salario.

Estos dos precios diferentes, que no parecen estar conectados ni que tengan la menor dependencia entre sí a primera vista, están relacionados muy íntimamente, aunque las circunstancias que los regulas parecen también independientes. Porque, si el precio de mercado fuese tan alto para ser más que suficiente para reembolsar el precio natural… parecerá ser un negocio muy beneficioso y todos se agolparán para dedicarse a él con la esperanzas de hacer fortuna. A medida que aumente el número de manos, también lo hará la cantidad de trabajo hecha y, en consecuencia,

58 Richard Cantillon, 1755, p. 28.59 Adam Smith, 1762/63, p. 404.60 Adam Smith, 1762/63, p. 406.

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pasará a ser objeto de compra por parte de un nivel inferior de hombres, y descenderá hasta su precio natural, porque la abundancia y la baratura son una y la misma cosa…61

Posteriormente, en La Riqueza…, Smith abandona la idea de que son los trabajadores quienes determinan que producir y va a sostener, correctamente desde el punto de vista del análisis de una sociedad capitalista, que es la competencia entre los propietarios de las empresas productivas, buscando las mayores ganancias, lo que va a establece la producción a efectuar.

b) Diferencias entre Las Lecciones… y La Riqueza…

Veamos algunas características que luego cambiaran en la Riqueza…

Smith analiza, en Las Lecciones… una sociedad mercantil de productores independientes, reunidos a lo sumo en cooperativas, donde no figura la existencia de trabajo asalariado. En La Riqueza… nos encontramos con el funcionamiento de una sociedad capitalista compuesta de tres clases, terratenientes, asalariados y capitalistas.

Como consecuencia de lo anterior casi no aparece la categoría de beneficios y cuando menciona algún tipo de excedente lo hace sin vincularlo al monto de la inversión realizada, sino más bien a formas precapitalistas de producción.

…El trabajo y el tiempo del pobre se sacrifica, en los países civilizados, en mantener al rico en la comodidad y el lujo. Al terrateniente lo mantiene en la ociosidad y el lujo el trabajo de sus tenientes, quienes cultivan la tierra tanto para aquél, como para ellos mismos. El hombre adinerado se mantiene con las exacciones que realiza del mercader industrioso y del necesitado, que están obligados a mantenerlo en su comodidad a cambio del uso del dinero…62

Vemos entonces al excedente vinculado a una exacción de plustrabajo a través de relaciones feudales de producción, en el caso del agro, o del funcionamiento del capital financiero. Estos casos no son asimilables al concepto de una ganancia capitalista originada en la esfera de la producción. En otros párrafos relaciona el excedente con la explotación de ventajas comerciales derivadas del poder de monopolio originado en el estado, situación que critica duramente y es un anticipo de las objeciones que va a realizar al mercantilismo en La Riqueza… y que veremos oportunamente. En La Riqueza… el concepto de beneficio es central para analizar el proceso de acumulación y crecimiento.

Finalmente, como vimos, el precio natural de una mercancía debe ser entendido como la retribución de este trabajador individual, es decir, el precio natural sería igual a este salario natural, que debe ser suficiente para mantener a un hombre. En La Riqueza… el precio natural nos

61 Adam Smith, 1762/63, p. 408.62 Adam Smith, 1762/63, p. 387.

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remite a la suma de beneficios, rentas y salarios naturales, como veremos al analizar ese libro.

…como todos los monopolios elevan el precio de las mercancías, serán perjudiciales para la opulencia de la nación. De este modo, la Hudson Bay company, al tener el privilegio exclusivo de importar pieles, disminuye la opulencia de la nación en la misma medida en que son una necesidad o conveniencia para la vida. La compañía siempre traerá menos que si el comercio fuese libre…estos pocos pueden juntarse y unirse fácilmente para traer una pequeña cantidad y venderla muy cara, lo que se impediría con una concurrencia libre.63

Sobre esta idea de que es mediante la concurrencia libre que se puede garantizar la mejor asignación de recursos nos extenderemos cuando analicemos La Riqueza…

63 Adam Smith, 1762/63, p. 412.

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