Boletín Estadístico Trimestral Año 3 - Nº. 9 Enero - … estadistico trimestral i... · ... del...

47
El Derecho a la alimentación de la niñez Derechos de la Niñez y la Adolescencia Boletín Estadístico Trimestral Año 3 - Nº. 9 Enero - Marzo 2013

Transcript of Boletín Estadístico Trimestral Año 3 - Nº. 9 Enero - … estadistico trimestral i... · ... del...

El Derecho a la alimentación de la niñez

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

Boletín Estadístico Trimestral Año 3 - Nº. 9 Enero - Marzo 2013

El Sistema de Información para la Infancia, SIPI

Los Subsistemas del SIPI y las áreas de atención del ISNA.

Subsistema de Atención Inicial: recopila información de niñas y niños de 0 a 7 años atendidos en los Centros de Atención Inicia (CAI) [i], de todas aquellas características personales y de su familia; también, datos de una evaluación inicial que incluye características de la estructura familiar, del grupo de convivencia y de las condiciones de la vivienda. Incluye además una evaluación en el área psicológica, médica y nutricional.

Las instancias de atención para el periodo son: 185 Centros de Bienestar Infantil/CBI y 14 Centros de Desarrollo Integral/CDI. Para otros Centros de Atención Inicial públicos o privados, el subsistema de Atención Inicial se complementa con la información del Subsistema de Entidades.

Subsistema de Protección: recopila información sobre la atención a niños, niñas y adolescentes vulnerados o amenazados en sus derechos, a través de dos modalidades: población en acogimiento institucional y población en seguimiento externo. La información primero se registra en las Unidades de Atención Inmediata y prosigue según el caso en los Albergues o Centros de Restitución de Derechos o unidades de seguimiento externo. Recoge para cada niño, niña o adolescente los datos descriptivos de su familia, su grupo de convivencia y su vivienda. Registra la atención mensual brindada, movimientos de ingreso, reingreso, egreso, traslado y los cambios de medida. Semestralmente registra los datos de la evaluación de los niños y niñas de 0 a 6 años y de la evaluación a mayores de 6 años. La evaluación incluye diversas áreas como: nutrición, salud, educativa, ocupacional o vocacional, social y psicológica.

Este subsistema recoge información de las siguientes unidades de atención: 8 de Atención Inmediata; 3 Centros de Acogida Inmediata o de Emergencia; 9 Centros de Restitución de Derechos; 8 unidades de Atención Externa.

Subsistema de Inserción Social: recopila información sobre la atención a adolescentes y jóvenes de ambos sexos en conflicto con la Ley Penal Juvenil. Se recopila en dos modalidades: población bajo medidas de internamiento (provisional o definitiva) y población con bajo medidas no privativas de libertad. En el primero de los casos la información se registra directamente en los Centros de Inserción Social (CIS). El Subsistema recoge para cada adolescente o joven los datos descriptivos de su familia, su grupo de convivencia y su vivienda. Registra la atención mensual brindada de movimientos de ingreso, reingreso, egreso, traslado y los cambios de medida. Sus instancias de atención son: 4 Centros de Inserción Social y 3 de Unidades de Medio Abierto.

Subsistema de Entidades: recopila información de las actividades de supervisión y coordinación del ISNA a las Entidades que brindan atención a niños, niñas y adolescentes y que se encuentran registradas y sus programas acreditados ante el CONNA, las cuales pueden ser: Gubernamentales o No Gubernamentales. Se cuenta con el registro de los datos de la Entidad y de los movimientos de la población atendida en los Centros de Restitución de Derechos de esas instituciones. El subsistema recoge información para el período de 244 Entidades inscritas y 750 Programas.

El SIPI está orientado a brindar información oportuna y confiable sobre las niñas, niños y adolescentes atendidos directamente por el ISNA, o a través de las instituciones privadas que son supervisadas por este, a efecto de promover y restituir sus derechos y generar información para la elaboración de políticas públicas a favor de la niñez y adolescencia en El Salvador. El SIPI registra información sobre salud, educación, situación legal, desarrollo psicosocial, atención médica, nutricional, entre otras. Además recopila datos socio-demográficos, movimientos de población interinstitucional e información sobre sus familias. El ISNA es la institución pública responsable del procesamiento y difusión de la información producida por el Sistema.

[i]Los CAI incluyen: Centros de Bienestar Infantil (CBI), Centros de Atención Integral (CDI).

Edición 009

El Derecho a la alimentación de la niñez

Atención Inicial

Restitución de Derechos

Inserción Social

Entidades

27

32

38

43

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

4

4BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

El Derecho a la Alimentación de la niñez.

El derecho a la alimentación constituye un eslabón fundamental para el desarrollo integral de la persona humana. No obstante su importancia y su inclusión entre los derechos reconocidos por la Declaración Universal de Derechos Humanos, este derecho ha sido operativizado hasta hace poco en el marco de las legislaciones y políticas nacionales. Muchas de las Cartas Magnas de los países del tercer mundo aún no incluyen a la alimentación como un derecho humano. Además de ser reciente su reconocimiento como derecho, el ejercicio de una alimentación adecuada se ha visto sistemáticamente entorpecido por condiciones estructurales ínsitas al mercado y al Estado de carácter capitalista1.

La configuración de una economía basada en el incremento de la ganancia privada y no en la satisfacción de necesidades humanas concretas, ha llevado a que bienes fundamentales para la vida como los alimentos y el agua sean vistos como mercancías y, por tanto, se mantengan sujetos a un régimen de producción, comercialización y consumo que niega, más que facilita, el acceso a este tipo de bienes.

La niñez y la adolescencia se ven en una doble dificultad. No sólo se enfrenta a la precariedad de acceso y calidad que la libertad irrestricta del mercado supone para toda la población, sino también a la dinámica de exclusión que los valores y conductas adultocéntricas recrean en la relación adultez-niñez. En el caso de las niñas y las adolescentes mujeres, esa doble dificultad se multiplica pues el patriarcado, en todas las formas en que puede expresarse, recorta el acceso y la calidad de los alimentos para las mujeres.

Es claro, por otro lado, que esas limitantes están condicionadas por problemáticas económicas y políticas de fondo. La desigual distribución de la riqueza, el empobrecimiento, la exclusión social y el carácter sesgado de ciertas políticas públicas son los elementos que hacen que ciertos sectores sufran más que otros los impactos de un régimen alimentario no integral. De ahí que la niñez y la adolescencia que vive en situación de marginalidad y pobreza sea más afectada que la que no vive en situación de privación de sus necesidades básicas,

1 El derecho a la alimentación es considerado como un derecho de reciente reconocimiento, según la Observación General No 12 del Comité de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales. A pesar que este se encuentra en la Declaración Universal de Derechos Humanos (artículo 25), en la Convención Sobre los Derechos del Niño y en otros instrumentos jurídicos internacionales, no fue hasta los años 90 cuando su exigibilidad y reconocimiento cobró mayor auge.

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

5BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRAL

Año 3 - No.9 • Enero-Marzo 2013

aunque a ambos, en cierta medida, les afecte la cultura adultocéntrica.

El presente artículo pretende dar un paneo general de la situación alimentaria de la niñez y la adolescencia en El Salvador, para lo cual se ha estructurado en dos grandes apartados sustantivos. El primero aborda los elementos teóricos sobre el derecho a la alimentación desde un enfoque general de soberanía alimentaria; por ello, echa mano de la economía política y el enfoque de derechos para dimensionar la problemática sobre la alimentación de la niñez. El siguiente apartado aborda la problemática concreta de la alimentación en la sociedad salvadoreña, específicamente para el caso de la niñez y la adolescencia, a partir de tres dimensiones: disponibilidad, acceso y calidad de los alimentos. En este apartado también se muestran algunos indicadores de la situación alimentaria de las niñas y niños atendidos en los Centros de Atención Inicial (CAI) que monitorea el ISNA. Finalmente, se sistematizan los hallazgos principales en el apartado de las conclusiones y con base a éstas se elaboran algunas recomendaciones en materia de políticas públicas.

La alimentación como derecho humano

El derecho a la alimentación representa una de las premisas fundamentales para garantizar la plenitud de la vida humana. Como todo ser vivo, el ser humano requiere de alimentos sanos y nutritivos para dar continuidad a su proceso de desarrollo biológico y psíquico. Es, por tanto, la condición necesaria, el requerimiento material mínimo para hacer posible la vida humana.

La Constitución de la República de El Salvador, plantea que la persona humana es el origen y el fin de la actividad del Estado (art. 1, Cn.), por lo cual cabría esperar que la alimentación estuviera reconocida como uno de los elementos indispensables para garantizar la dignidad de la vida humana. No obstante actualmente, la alimentación no está reconocida como un derecho fundamental por la Carta Magna. A mediados de 2012 fue aprobada una modificación constitucional en la que se hacen expresos los derechos humanos a la alimentación y al agua2.

2 Sala de prensa de la Asamblea Legislativa. “Reforman Constitución para incluir derechos al agua y alimentación adecuada”. Abril de 2012. Nota en: http://www.asamblea.gob.sv/noticias/archivo-de-noticias/reforman-constitucion-para-incluir-derechos-al-agua-y-alimentacion-adecuada

6BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

El Pacto Internacional de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales (PIDESC) en su artículo 11 establece que la alimentación es un componente para alcanzar un nivel de vida adecuado. Así mismo, el Comité de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales (CDESC), señala: “el derecho a una alimentación adecuada está inseparablemente vinculado a la dignidad inherente de la persona humana y es indispensable para el disfrute de otros derechos humanos”3. Dimensionado de tal forma, este derecho “es inseparable de la justicia social, pues requiere la adopción de políticas económicas, ambientales y sociales adecuadas, en los planos nacional e internacional, orientadas a la erradicación de la pobreza y al disfrute de todos los derechos humanos por todos”4.

Bajo esta interpretación, el derecho a la alimentación supone un esfuerzo y actividad especiales por parte del aparato estatal, como concreción del poder del Estado, para garantizar el derecho a la alimentación de todas las personas, lo cual da lugar a la formulación de distintos paquetes de medidas de política pública en un sentido amplio. En apartados posteriores serán analizados los enfoques desde los cuales trata de garantizarse el derecho a la alimentación.

En el caso de la niñez y la adolescencia, el derecho a la alimentación se encuentra mediado por la disponibilidad, el acceso y la calidad de los alimentos que son consumidos por el núcleo familiar. Esto es más evidente en el caso de la primera infancia, en donde niñas y niños, por la etapa de desarrollo en la que se encuentran no pueden tener acceso económico por ellos mismos a los alimentos; en este caso, el derecho a la alimentación engloba al menos dos grandes componentes: la alimentación en sentido amplio, y la lactancia materna como fase particular de la alimentación en la primera infancia.

En el Estado del arte sobre la problemática alimentaria, dos enfoques pueden ser identificados en materia de su análisis: el paradigma de la seguridad alimentaria y el paradigma de la soberanía alimentaria. El primero ellos enfoca el problema desde la especificidad de la disponibilidad de los alimentos, lo cual limita a un problema técnico de distribución de recursos escasos ante fines contradictorios; el paradigma de la soberanía, por el contrario, enfoca el problema en todas las etapas que pueden influir en la disponibilidad y acceso de

3 Comité de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales. Observaciones generales adoptadas por el Comité de los DESC. CDESC-ONU. 2004. Pág. 71. 4 Ibídem

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

7BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRAL

Año 3 - No.9 • Enero-Marzo 2013

las personas a alimentos de calidad, asumiendo la necesidad de la sustentabilidad ambiental. Ambos enfoques se discuten más adelante.

La alimentación adecuada se traduce en niveles determinados de nutrición que permiten el desarrollo tanto de la persona como de la sociedad; y es por ello que se plantea como un componente de cualquier estrategia de desarrollo. Tradicionalmente, la alimentación ha sido vista fuera de las relaciones económicas y políticas que prevalecen en una sociedad determinada; de este modo, ha sido relegado el estudio de fenómenos que están estrechamente vinculados a la garantía de este derecho. Por ejemplo, muchas veces aparece difusa la relación entre las políticas comercial, laboral o financiera y el derecho a la alimentación, cuando, en la práctica, hay vinculaciones bastante cercanas.

No obstante, también es notorio el reconocimiento de los organismos internacionales en el sentido de que el derecho a una alimentación adecuada implica una modificación sustancial en las estructuras económicas y políticas. Sobre todo, ha sido señalado el papel que juega el aparato estatal en la garantía de la alimentación, y la incidencia nociva que tienen las empresas transnacionales y ciertos grupos de poder local en la garantía de tal derecho.

La niñez y la alimentación.

La alimentación representa un proceso fundamental para la vida humana. Esta no es posible sin que el cuerpo humano reciba los requerimientos mínimos de calorías, carbohidratos, y otros elementos energéticos. Es debido a ello, que para la realización de la dignidad humana, hay que garantizar la posibilidad de la existencia y, en relación a ésta, la alimentación como un proceso indispensable.

Para las y los niños, la alimentación adquiere características particulares, puesto que se encuentran en una etapa de rápido desarrollo de las facultades físicas y psicológicas. La alimentación, como señalan estudios especializados, es uno de los elementos indispensables para un desarrollo integral; es a través de una alimentación balanceada y nutricional que los seres humanos pueden desarrollar sus órganos y todo su potencial físico y mental.

La Convención sobre los Derechos del Niño (CDN) establece que la alimentación es un componente fundamental de la salud. Por su parte, la Ley de Protección Integral de la Niñez y Adolescencia (LEPINA) enmarca la alimentación nutritiva y balanceada en las condiciones

8BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

que hacen posible alcanzar un nivel de vida digno y adecuado. En ambos casos es notorio el hecho de que la alimentación presupone un requerimiento material indispensable para garantizar la vida humana en dignidad; el enfoque de la CDN implica un abordaje de la salud no sólo como ausencia de enfermedad sino como posibilidad de mantener la vida humana dignamente.

El derecho a una alimentación adecuada no puede ser garantizado haciendo abstracción de factores sociales como el género, la edad, la vulnerabilidad, entre otros. Por ejemplo, es diferente el acceso a los alimentos que tienen los niños que las niñas, fenómeno que se explica porque se considera, en el marco de los estereotipos patriarcales, que los niños son más productivos y más “valiosos” que las niñas5, así mismo el estereotipo de género que esquematiza al niño como más “comelón” que la niña refuerza que la alimentación sea diferenciada entre niños y niñas. En este sentido, la Convención Sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Contra la Mujer (CEDAW) plantea que debe procurarse el acceso mínimo de las mujeres a una alimentación adecuada; en particular esto debe ser procurado para los grupos con mayor vulnerabilidad (niñas, adolescentes mujeres, y mujeres con discapacidad, entre otros).

La alimentación en la primera infancia

Según la OMS, “la primera infancia es la fase más importante para el desarrollo general durante toda la vida”6. Es en esta fase del desarrollo humano que se dan los procesos de “desarrollo cerebral más intensos de toda la vida”7. Por su importancia física y psicológica, la primera infancia debe poder acceder, a través de sus padres y/o responsables, a todos los requerimientos alimenticios y afectivos que le permitan desarrollarse saludablemente.

5 Un estudio del Consejo de Derechos Humanos de la ONU señala: “Las mujeres constituyen el 70% de personas que sufren hambre en el mundo y resultan desproporcionadamente afectadas por la desnutrición, la pobreza y la inseguridad alimentaria. Los gobiernos no están cumpliendo sus compromisos internacio-nales de proteger a las mujeres de la discriminación, por cuanto la diferencia entre la igualdad de jure y la discriminación de facto persiste y resiste el cambio”. Consejo de Derechos Humanos. “La discriminación en el contexto del derecho a la alimentación”. ONU. 2010. Pág. 11. 6 OMS. “Desarrollo de la primera infancia”. Nota descriptiva No 332. Agosto, 2009. Nota en: http://www.who.int/mediacentre/factsheets/fs332/es/index.html. 7 Ibídem.

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

9BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRAL

Año 3 - No.9 • Enero-Marzo 2013

Igualmente, la OMS señala que en este periodo existen factores de riesgo que pueden coadyuvar a entorpecer el desarrollo integral de niñas y niños. Estos factores de riesgo son8: a) malnutrición crónica que limite el crecimiento; b) insuficientes estímulos y oportunidades para el aprendizaje; c) carencia de yodo; y d) presencia de anemia ferropénica. Al menos tres de ellos (malnutrición, carencia de yodo y presencia de anemia), están vinculados a una alimentación inadecuada para los requerimientos fisiológicos de niñas y niños.

Un hecho que muchas veces se deja fuera del análisis es la problemática de la alimentación en los primeros meses de vida de la niña o el niño. En este periodo, también denominado “periodo lácteo”, la lactancia materna o sustancias sustitutas representan la única fuente de alimentación y nutrición del niño o niña. La lactancia materna representa una forma particular y fundamental de la alimentación infantil, puesto que no se reduce al intercambio de alimentos; la leche materna tiene la ventaja de ser inmuno moduladora en tanto que transmite “protección contra infecciones y alergias” y “estimula el propio desarrollo del sistema inmune del lactante”9.

Además, la lactancia materna es un proceso socializador en el que se crea un vínculo afectivo insustituible entre la madre y el niño o la niña, y también en el desarrollo de su reconocimiento futuro como sujeto; según la lactancia materna “transmite al bebé seguridad afectiva y esto repercute en su autoestima y en su empatía hacia las necesidades de las demás personas en el futuro”10. Erickson, plantea que la primera etapa del desarrollo psicosocial es la de confianza básica vs desconfianza básica. “esta etapa inicia durante la lactancia y continúa hasta alrededor de los 18 meses de edad. En estos primeros meses, los bebés desarrollan un sentido de la confiabilidad de las personas y objetos en su mundo […] Erickson consideraba que la situación alimenticia era el entorno para establecer la mezcla correcta de confianza y desconfianza”11.

Después del periodo lácteo, es posible identificar diferentes periodos de la alimentación en

8 Ibídem. 9 UNICEF-Colombia. “La leche humana, composición, beneficios y comparación con la leche de vaca”. Disponible en: http://www.unicef.cl/lactancia/docs/mod01/Mod%201beneficios%20manual.pdf. 10 Consejería de Salud y Consumo. Guía de lactancia materna. Govern de les Illes Balears. 2009. Pág. 4. 11 Papalia, D.E.; Wendkos Olds, S.; y, Duskin F., R. Psicología del desarrollo: de la infancia a la adoles-cencia. McGraw-Hill. 2009. Pág. 245.

10BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

la primera infancia en los que ya no hay una mono dependencia alimenticia y en la que es más fácil encontrar sustitutos alimenticios para balancear la dieta del niño o de la niña.

Seguridad alimentaria vs. Soberanía alimentaria

El derecho humano a la alimentación ha sido abordado principalmente por dos enfoques: el enfoque de seguridad alimentaria, sostenido por organismos multilaterales, y el enfoque de la soberanía alimentaria, utilizado más por organismos de la sociedad civil. A continuación se hará una revisión breve de cada uno de estos, evaluando sus potencialidades y desventajas.

En la concepción generalmente aceptada, la seguridad alimentaria hace referencia a la disponibilidad y acceso de los alimentos. Según la FAO: “existe seguridad alimentaria

12 FAO. Declaración de la Cumbre Mundial sobre la Seguridad Alimentaria. ONU. 2009. Pág. 1. 13 Ibíd.

Beneficios bio-físicos Beneficios psicológicos Beneficios sociales

� Nutrición óptima � Protección

inmunológica � Fácil digestibilidad

� Desarrollo intelectual � Establecimiento del

apego � Equilibrio emocional

de la madre � Refuerzo de vínculos

afectivos familiares

� Garantía de derechos � Espaciamiento de

nacimientos � Economía de recursos � Ventajas ecológicas

Cuadro 1: Importancia de la lactancia materna en el desarrollo bio-psico-social del

ser humano

Fuente: Elaboración propia con información de UNICEF-Colombia.

cuando todas las personas tienen en todo momento acceso físico, social y económico a suficientes alimentos inocuos y nutritivos para satisfacer sus necesidades alimenticias y sus preferencias en cuanto a los alimentos a fin de llevar una vida activa y sana”12. Además, “la dimensión nutricional es parte del concepto de seguridad alimentaria”13.

De esta definición se desprenden líneas de política pública basadas en cuatro pilares:

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

11BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRAL

Año 3 - No.9 • Enero-Marzo 2013

disponibilidad, acceso, utilización y estabilidad. La disponibilidad, como su nombre lo indica, se refiere a la existencia física de los alimentos al alcance de las personas, lo cual puede lograrse a través de la producción del país o de las importaciones. El acceso se refiere a la posibilidad de que las personas puedan comprar y consumir los alimentos a partir del poder adquisitivo socialmente mínimo14.

Por su parte, la utilización alude al hecho de que los bienes alimenticios se usen efectivamente en función de la alimentación humana, de forma nutritiva y balanceada. Por último, la estabilidad se refiere más bien a una característica de la disponibilidad y del acceso, esto es, al hecho de que en el mediano y largo plazo, no se comprometa la existencia física y el acceso a los alimentos15.

Pese a la forma en que son concebidos los principios de la seguridad alimentaria, la realidad mundial ha puesto de manifiesto que tal punto de partida se muestra insuficiente para garantizar el derecho a la alimentación tal como fue definido anteriormente. Esta incapacidad del enfoque de la seguridad alimentaria se encuentra en el hecho de que no se atacan las problemáticas esenciales que reproducen las situaciones de hambre y/o malnutrición.

En este sentido, la disponibilidad física y el acceso social y económico se ven fuera de las relaciones sociales de producción prevalecientes. Este enfoque no tiene en cuenta que la desregulación de los flujos comerciales a nivel internacional cada vez precariza más la producción agrícola sustentable de pequeña escala, potenciando, por el contrario, a la inversión capitalista en la agricultura, es decir, un tipo de inversión caracterizada por: a) alta tecnificación, lo cual supone un impacto social negativo al generar desempleo; b) sustitución de semillas nativas por semillas genéticamente modificadas, las cuales no se pueden utilizar en el largo plazo y por tanto tienden a generar dependencia de los proveedores de insumos; c) utilización extensiva de tierras, lo cual impacta en la biodiversidad, en el cuido de la tierra y en la existencia de conflictos por la propiedad de la misma.

Para las políticas públicas derivadas del enfoque de la seguridad alimentaria no importan mucho la forma en que los alimentos son producidos, la relación entre el capital y el trabajo

14 FAO. Informe de políticas. ONU. 2006. Pág. 1.

15 Ibídem.

12BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

en el proceso de producción, la sustentabilidad de ese proceso, los riesgos de la variabilidad de los precios, entre otros fenómenos relacionados. Ello es palpable en la vinculación de tales políticas con otras políticas macroeconómicas que suponen la ineficiencia de las políticas agrícolas y alimentarias.

En el largo plazo, este modelo tiende a reproducir la dependencia de unos países o regiones, debido a que la profundización de la división internacional del trabajo tiende a eliminar la producción local de alimentos, cediendo el poder sobre los precios a los productores de otros países o regiones. Además, mantener un régimen de monocultivo supone una pérdida de soberanía en tanto que la población sólo tiene acceso a una oferta alimenticia integral a través de las importaciones; de la misma forma, hace más vulnerable a la economía pues está sujeta al vaivén de los precios internacionales de un solo producto

Otro elemento no contemplado es el referente a la sustentabilidad ambiental, como proceso previo a la disponibilidad de los alimentos. Si bien la seguridad alimentaria establece que la utilización de los alimentos supone la utilización de los insumos con fines de satisfacer necesidades humanas de forma saludable; en la práctica, se fomenta la utilización de semillas y otros insumos genéticamente modificados que no está probado que sean completamente inocuos y mucho menos saludables para la vida humana16.

Por el contrario, la soberanía alimentaria se refiere a la construcción de un sistema de producción alternativa que contemple de un modo integral la alimentación y toda su problemática desde un enfoque de economía política. En este sentido, la construcción de un sistema de producción diferente pasa por la modificación sustantiva de las relaciones de poder implícitas en los procesos de producción. En el apartado siguiente se desarrolla más en concreto los principios que sustentan la soberanía alimentaria.

16 Según un documento informativo de la Organización Mundial de la Salud (OMS), señala que “los dife-rentes organismos genéticamente modificados incluyen genes diferentes insertados en formas diferentes. Esto significa que cada alimento GM y su inocuidad deben ser evaluados individualmente, y que no es posible hacer afirmaciones generales sobre la inocuidad de todos los alimentos genéticamente modifica-dos”. FAO. 20 Preguntas sobre los alimentos genéticamente modificados. ONU. Págs. 3 – 4. Disponible en: http://www.who.int/foodsafety/publications/biotech/en/20questions_es.pdf.

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

13BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRAL

Año 3 - No.9 • Enero-Marzo 2013

Los principios de la soberanía alimentaria y los derechos de la niñez

En los apartados anteriores se han desarrollado los componentes del enfoque de la seguridad alimentaria, que representa la “respuesta oficial”, generalizada y estandarizada a la problemática relacionada con la garantía del derecho a la alimentación. Frente al paradigma de la seguridad alimentaria, surge el paradigma de la soberanía alimentaria que supone integrar en una sola discusión teórica el enfoque de derechos, la economía crítica y la ecología política. Habiendo visto los elementos básicos de la soberanía alimentaria, se desarrollarán en el siguiente cuadro sinóptico (cuadro 2)sus principios teórico-políticos.

Los principios que recoge el enfoque de soberanía alimentaria suponen un proyecto más complejo, integral y sustentable para poder garantizar el derecho a la alimentación, que aquel desarrollado por al enfoque de la seguridad alimentaria. Es bajo estos principios que pueden establecerse elementos políticos y económicos que garanticen el derecho a la alimentación en todos sus componentes y que esta garantía se enmarque en acciones sustentables económica y ambientalmente. De igual modo, es bajo la visión antipatriarcal y anticapitalista implícita en el enfoque de la soberanía alimentaria que pueden crearse las condiciones para que la niñez y la adolescencia sean visibilizadas como sujetos de derechos.

Si bien es cierto que explícitamente, la niñez y la adolescencia no son visibles directamente en el enfoque de la soberanía alimentaria, los principios de Control democrático, Paz social y Alimentación como derecho humano, permiten, en el corto plazo, establecer el macro entorno favorable para la garantía del derecho a alimentación en general, enfatizando las condiciones económicas y sociales que puedan mejorar la disponibilidad y el acceso a alimentos de calidad. En el largo plazo, por su parte, la soberanía alimentaria permite construir una base de acción política e institucional más horizontal, participativa y prioritaria sobre la vida y dignidad de niñas, niños y adolescentes.

La situación alimentaria de la niñez en El Salvador En el marco de las premisas teóricas que se han abordado en el acápite anterior, se analiza en los numerales siguientes la situación alimentaria de la niñez y la adolescencia salvadoreñas. Para tal efecto, se hace una recopilación estadística en materia de disponibilidad, acceso y calidad de los alimentos. Vale mencionar que el análisis de las condiciones de la niñez y la adolescencia pasa, por el nivel de agregación de los datos y por la naturaleza del fenómeno, por el análisis de la situación alimentaria de los núcleos familiares.

14BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

Disponibilidad de alimentos

Principio Descripción general

La alimentación como derecho humano

Implica situar a la alimentación como base fundamental para una vida humana con dignidad; supone que cualquier persona independientemente de su

condición debe tener acceso a alimentos aptos para su pleno desarrollo. Implica también que la alimentación es un proceso a cuya base se encuentra una

obligación fundamental de parte del Estado.

Reforma agraria

La descentralización de la propiedad de la tierra representa un factor fundamental para permitir la democratización de la producción y

comercialización de los alimentos y para empoderar económicamente a los pequeños productores directos. El acceso a tierra resulta importante sobre todo porque la forma en que opera el sistema de producción a nivel mundial tiende

a desplazar contingentes crecientes de fuerza de trabajo debido a la tecnificación creciente de los procesos productivos, precarizando el acceso a

empleos dignos, lo cual crea limitantes objetivas para acceder a alimentos por la vía del mercado capitalista.

Protección de recursos naturales

Implica que el medio ambiente es considerado como el medio insustituible en el que se desarrolla la vida humana, del que se extraen recursos fundamentales para llevar a cabo los procesos de producción, y que sirve de depósito final a

los deshechos que esos procesos de producción generan.

Reorganización del comercio

Transformación de las relaciones de intercambio entre productores y consumidores en todo el proceso de la trazabilidad de los bienes alimenticios. Un punto importante en este sentido es la transformación de los canales de comercialización, los cuales en muchos casos se encuentran concentrados y generan altos márgenes de ganancia para los comerciantes pero no para los

productores directos.

Eliminar la globalización del hambre

Se refiere a la consolidación de la igualdad en el acceso a alimentos. Por tanto, implica una transformación paulatina en el carácter de los alimentos: pasar de

ser mercancías a bienes para la vida humana.

Paz social Este principio alude al hecho de que deben garantizarse de forma paralela

todos los derechos humanos que sean posibles, en el marco de una autonomía de las políticas públicas en el tema alimentario.

Control democrático

Posibilidad de controlar democráticamente tanto los recursos naturales, como los activos físicos y económicos de la sociedad. Supone que la sociedad civil en

su conjunto incide en la construcción, gestión y evaluación de las políticas públicas. Este elemento supone el tránsito hacia un sistema democrático

participativo.

Cuadro 2: Principios rectores del enfoque de soberanía alimentaria

Fuente: Elaboración propia con información de Pimbert, M17.

17 Pimbert, Michel. Towards food sovereignty. Reclaiming autonomous food systems. IIED. 2008. Págs. 44 – 45.

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

15BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRAL

Año 3 - No.9 • Enero-Marzo 2013

La disponibilidad de los alimentos en El Salvador ha tendido a precarizarse debido a varios factores, entre los que cabe destacar: a) la desregulación comercial y de inversiones que sometió a los productores agrícolas nacionales a una fuerte competencia extranjera; b) la desregulación financiera, que permitió que contingentes crecientes de créditos pasarán al ámbito de los servicios en detrimento de sectores productivos como la agricultura; c) la ausencia de una planificación económica, con especial énfasis en la garantía de la alimentación y d) producto de todo lo anterior, la desestructuración del aparato agrícola, antaño principal sostén de la alimentación de la sociedad salvadoreña, expresado en una centralización de las tierras con vocación agrícola, el bajo nivel competitivo del sector, entre otros elementos.

Sin entrar en detalles en estos elementos, es necesario apuntar que no han sido tendencias aisladas de las políticas públicas o del mercado mismo como ente autónomo, sino que se enmarcan en la aplicación sistemática de medidas políticas de corte neoliberal, que tenían por objetivo crear en el país una base productiva de exportación de productos no tradicionales (por tanto, no agrícolas), beneficiando con ello a la iniciativa privada nacional y extranjera. Este contexto explica que las medidas de política pública hayan “marginado” al sector agrícola y hayan privilegiado, por el contrario, sectores como el financiero, el comercio o el turismo.

Como menciona un informe de la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH), “el modelo neoliberal implementado durante finales de la década de los ochenta, a través de la desarticulación de la estructura productiva, afectó tanto a las variables que condicionan el acceso a la alimentación, como a las que inciden en la disponibilidad de alimentos producidos localmente […] Bajo la lógica neoliberal se privilegió la atención al sector terciario de la economía (comercio y servicios) y se desatendió a la base productiva. Se impulsaron medidas tendientes al fortalecimiento del libre mercado y la apertura comercial, y con el fin de promover la importación de bienes de consumo, se redujeron los aranceles y se firmaron pactos comerciales con otros países, aún en condiciones desfavorables para la economía nacional”18.

Las estadísticas disponibles sobre producción agrícola se recogen en la tabla 1. Según se

18 PDDH. Tercer informe sobre el estado del derecho a una alimentación adecuada en El Salvador. PDDH. 2012. Pág. 75.

16BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

muestra en dicha tabla, la producción agrícola ha tendido ha reducir su participación dentro de la riqueza total generada por la economía; de esta forma, mientras que para 1990 la agricultura representaba cerca del 17.1% del producto total, para 2011 ésta apenas representaba el 12.3%. Así mismo, una rama estratégica como es la producción de granos básicos (maíz, fríjol, arroz), también muestra una disminución a lo largo del periodo.

La disminución de la producción nacional de alimentos dificulta que estos estén disponibles en la cuantía y en el momento en que la población demande este tipo de productos. Al ser bienes escasos, los alimentos tienden a sufrir un alza en sus precios, haciendo doblemente difícil que la población pueda acceder a ellos oportunamente. Es el caso que en los últimos años se ha visto de forma reiterada con respecto a algunos granos básicos como el fríjol, el cual ha tenido que ser importado por el mismo aparato estatal para poder estabilizar los precios nacionales y permitir que este alimento, parte fundamental de la dieta salvadoreña, se encuentre disponible en el mercado interior.

La escasez y el encarecimiento de los productos agrícolas dificultan que las familias, y por tanto, las niñas, los niños y las y los adolescentes, puedan tener una alimentación adecuada para sus requerimientos fisiológicos. La carencia de alimentos adecuados para un desarrollo integral, incide negativamente en la garantía de otros derechos de la niñez y la adolescencia. Por ejemplo, la falta de alimentos reproduce bajos índices de desempeño escolar19, problemas de salud, entre otros fenómenos que limitan el desarrollo integral de niñas, niños y adolescentes.

Otro elemento importante para el caso de la disponibilidad de los alimentos, y que se mencionaba anteriormente, es el papel que juega el comercio exterior y la política comercial en un sentido amplio . Ello es importante en tanto que en el marco de las políticas neoliberales, un supuesto del que se parte es que la liberalización comercial resulta ser un componente fundamental que permite incentivar a la iniciativa privada, lo cual redundaría en mejorar el crecimiento económico y ello, a su vez, rebalsaría automáticamente mejorando

19 La vinculación se explica en tanto que la mala nutrición incidirá en que ellas y ellos no logren desarrollar plenamente sus facultades psíquicas; lo que a su vez, incidirá negativamente en su rendimiento escolar y su capacidad para aprender.

20 Debe entenderse como “política comercial en sentido amplio” el conjunto de todas las medidas de polí-tica económica que afectan a cualquiera de los componentes de la balanza de pagos. De este modo, los Tratados de Libre Comercio (TLC) y otros acuerdos internacionales en materia de inversión, son compren-didos dentro de la política comercial.

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

17BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRAL

Año 3 - No.9 • Enero-Marzo 2013

los ingresos de las familias. Como se verá a continuación ello no deja de ser más que un supuesto20.

Un punto fundamental dentro de la política comercial neoliberal lo representan los Tratados de Libre Comercio (TLC). La forma en que estos tratados inciden en el derecho a la alimentación es mediante la incorporación de empresas importadoras a la economía nacional, cuyos precios de venta de algunos productos pueden ser menores a los de los productos nacionales, o mediante la incorporación de empresas de producción agrícola que tienden a absorber a los productores locales y/o a imponerles su lógica de producción.

Sector o rama de actividad económica 1990 1994 1998 2002 2006 2010 2011

Agricultura, Caza, Silvicultura y Pesca 17.1 13.8 12.5 11.5 11.9 12.8 12.3

Café oro 26.5 24.4 19.9 14.6 11.6 12.5 11.3

Algodón 1.3 0.4 0.0 0.1 0.1 0.0 0.0

Granos básicos 19.5 18.9 17.7 20.2 20.2 17.0 17.3

Caña de azúcar 3.6 4.5 6.5 5.8 5.0 4.7 5.0

Otras producciones agrícolas 14.1 16.3 17.7 18.8 22.4 24.8 24.2

Ganadería 17.1 16.0 17.7 18.4 17.7 19.1 19.3

Avicultura 8.9 10.2 11.6 13.9 14.5 13.3 13.8

Silvicultura 6.1 5.7 5.7 5.8 5.7 6.2 6.4

Productos de la caza y la pesca 2.8 3.5 3.1 2.5 2.9 2.4 2.7

Explotación de Minas y Canteras 0.4 0.4 0.4 0.4 0.4 0.3 0.3

Industria Manufacturera 21.7 21.1 22.5 23.7 22.7 22.8 22.9

Electricidad, Gas y Agua 1.2 0.5 0.6 0.7 0.7 0.7 0.7

Construcción 3.5 3.7 4.0 4.0 3.7 2.8 3.0

Comercio, Restaurantes y Hoteles 18.1 19.7 19.9 19.8 20.4 20.0 19.9

Transporte, Almacenamiento y Comunicaciones 7.3 7.5 7.7 8.9 9.9 9.4 9.6

Establecimientos Financieros y Seguros 2.2 2.7 3.4 3.8 3.8 3.7 3.7

Bienes Inmuebles y Servicios Prestados a las Empresas 3.5 3.3 3.3 3.2 3.2 3.4 3.4

Alquileres de Vivienda 11.3 9.4 8.7 8.1 7.9 8.0 7.9

Servicios Comunales, Sociales, Personales y Domésticos 6.1 5.5 5.3 4.9 4.7 5.0 4.9

Servicios del Gobierno 7.4 5.8 5.6 5.1 4.8 5.0 5.2

Menos: Servicios Bancarios Imputados 1.7 2.2 3.1 3.2 3.0 2.9 2.9

Mas: Derechos Arancelarios e Impuestos al Valor Agregado 1.8 8.6 9.1 9.0 9.0 9.0 9.0

Producto Interno Bruto a Precios de Mercado 100 100 100 100 100 100 100

Tabla 1: PIB anual a precios constantes de 1990 según sector de actividad eco-nómica y rama de producción, El Salvador 1990 – 2011 (porcentajes)

Fuente: Elaboración propia con información de Banco Central de Reserva.

18BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

La tabla 2 muestra algunos indicadores de aspectos de la soberanía alimentaria vinculados a la política comercial, correspondientes al periodo 2005 – 2010. Como es posible observar, todos los indicadores tienden a mostrar tendencias perjudiciales para que la población pueda abastecerse de los bienes alimenticios. La balanza comercial ha tendido a profundizar su situación de déficit; así mismo, el indicador sobre el grado de dependencia alimentaria tiende a aumentar. Por su parte, las exportaciones de alimentos en relación a las importaciones es cada vez menor; y estas importaciones, lejos de mejorar el acceso por la vía de precios más bajos, recorta las posibilidades de la producción nacional, generando desempleo y pobreza.

No resulta aislado el hecho de que estos indicadores muestren, para el periodo seleccionado, una clara tendencia a la precarización. Lejos de ello, es en el quiebre de 2004 / 2006 cuando se inaugura una tercera etapa en el modelo de acumulación en El Salvador, etapa caracterizada por la implementación de medidas de apertura comercial y de inversiones. Este periodo se inaugura con la ratificación e implementación del Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos, Centroamérica y República Dominicana (CAFTA-DR, por sus siglas en inglés), en 2006. Lejos de representar una ventaja, el CAFTA-DR significó mayores desventajas para El Salvador, en tanto que implicaba someterse a un régimen de competencia con mercados altamente diversificados y con altos estándares de calidad, a la vez que implicaba abrir la economía nacional a la inversión transnacional, poniendo en riesgo la inversión local.

Tal como se mencionó anteriormente, el efecto sobre el derecho a la alimentación de niñas, niños y adolescentes, en este caso se visibiliza en el “recorte” de las posibilidades materiales realmente existentes para poder garantizar tal derecho. Al reducir la disponibilidad de los alimentos, aumentan los obstáculos para su acceso y/o disminuye la calidad a los que se puede acceder. En el caso de la niñez y la adolescencia, que representan grupos económicamente dependientes que se encuentran sujetos a las posibilidades económicas de la familia, la disponibilidad limitada de alimentos se traduce en una alimentación deficiente, reduciendo el potencial de desarrollo físico, psicológico y social de niñas, niños y adolescentes.

21 Al respecto, la PDDH ha sido uno de los organismos que desde el aparato estatal viene reconociendo el carácter estructural e histórico de la desigualdad y la pobreza como uno de los principales elementos que inciden negativamente sobre el acceso a los alimentos. Ver: PDDH. Segundo informe sobre el derecho a una alimentación adecuada en El Salvador. PDDH-OXFAM. 2011.

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

19BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRAL

Año 3 - No.9 • Enero-Marzo 2013

Acceso a alimentos. Con respecto al acceso a alimentos, reiteradamente ha sido señalado por varios estudios que la pobreza y la desigual distribución de la riqueza son los principales factores que precarizan el acceso a una alimentación nutritiva y balanceada. En El Salvador, la incidencia de la pobreza no es un fenómeno nuevo; más bien, se enmarca en la problemática histórica irresuelta que mantiene a la mayoría de la población en condiciones precarias de vida.

Según la información que se presenta en el gráfico 1, la incidencia de la pobreza ha venido en clara disminución en el periodo 1991 – 2010. No obstante, el criterio con que se lleva a cabo esta medición corresponde al método de “línea o umbral de pobreza”22, que no considera otros elementos que limitan la autonomía económica de las familias como la estabilidad laboral, el nivel educativo, el acceso a servicios básicos (agua, saneamiento, electricidad), entre otros elementos y que son consustanciales para poder garantizar el acceso y mejor uso de los alimentos. Esta medición tampoco considera las desigualdades relacionadas con las relaciones patriarcales y adultocéntricas que pueden privar al interior de la familia. La pobreza como fenómeno estructural implica el necesario abordaje desde un enfoque multidimensional que ataque a la vez que los efectos y la situación de la pobreza, sus causas originarias, permitiendo que no sea un fenómeno que se repita o se reproduzca a través de las políticas públicas.

Aspecto 2005 2007 2010

Balanza comercial alimentaria (millones US$) -303.7 -477.2 -496.2

Relación exportaciones/importaciones (alimentos) 42.9 35.8 36.8

Inflación de productos alimenticios (%) 6.9 6.5 7.9

Grado de dependencia alimentaria (%) 47.5 53.5 55.9

Tabla 2: Indicadores de soberanía alimentaria, El Salvador 2005, 2007 y 2010

Fuente: Elaboración propia con información de Banco Central de Reserva.

22 El método de la línea o umbral de pobreza se refiere a que una entidad oficial establece una línea de in-greso definida por el costo de la canasta básica de la población. Los hogares que tienen un ingreso menor a esa línea se encuentran en situación de pobreza, los que están por encima de esa líneas pueden estar en pobreza relativa o en no pobreza.

20BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

La tabla 3 muestra que del total de niñas, niños y adolescentes, tan sólo un 0.23%, un 0.36% y un 0.02% tuvo acceso normal a desayuno, almuerzo y cena, respectivamente. Si bien estos porcentajes aumentan en el caso de la población adulta, ello no significa que exista un gran contingente de población con acceso a alimentos. Por el contrario, la población adulta que tiene a acceso a esos mismos tiempos de comida es de 5.75%, 11.92% y 1.48%, respectivamente.

También hay que señalar que resulta evidente la disparidad en el acceso a alimentos según el género, fenómeno que tiene a la base la discriminación que es ejercida en contra de las mujeres. Como señala la FAO: “la discriminación por motivos de género fomenta la malnutrición y el desempoderamiento de las mujeres, por lo que frecuentemente las prácticas discriminatorias aplicadas en las comunidades rurales generan desequilibrios en la distribución de los alimentos dentro del hogar, de tal forma que las mujeres y niñas tienen acceso a alimentos con menor valor nutricional y en menor cantidad que los varones, tanto niños como adultos”23.

En este sentido, es visible la diferencia entre el acceso de la población adulta y de la población infantil a una alimentación digna, al menos en términos cuantitativos. A ello hay que agregar que muchas veces la alimentación que reciben niñas, niños y adolescentes no cubre los requerimientos nutricionales mínimos, pues no se tiene conciencia de lo fundamental que es la alimentación para que las y los niños desarrollen todas sus capacidades.

23 FAO. “La equidad de género y la inclusión de las mujeres no sólo es una cuestión social, es también una cuestión productiva”. Comunicado de prensa No 4/2013. Nota en: http://coin.fao.org/coin-static/cms/media/11/13627059599470/comunicado_fao_mxico_04_2013.pdf.

Tiempo de alimentación

Niñez y adolescencia Población adulta

Hombres Mujeres Total Hombres Mujeres Total

Desayuno 0.25 0.20 0.23 8.15 3.78 5.75

Almuerzo 0.43 0.30 0.36 16.83 7.90 11.92

Cena 0.02 0.02 0.02 2.81 0.39 1.48

Tabla 3: Personas con acceso a tiempos alimenticios por sexo según tiempo alimenticio, El Salvador 2010 en porcentajes.

Fuente: Elaboración propia con información de DIGESTYC.

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

21BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRAL

Año 3 - No.9 • Enero-Marzo 2013

En los últimos meses, el Ministerio de Educación (MINED) ha impulsado la alimentación en los centros escolares a través del Programa “Vaso de Leche Escolar”; esta medida ha mejorado los niveles nutricionales y, con ello, ha contribuido a mejorar los niveles de asistencia y rendimiento escolar24. No obstante estos beneficios, resultan necesarias medidas de corte fiscal –sobre todo en el área de ingresos- para mantener la sostenibilidad de este tipo de programas en el mediano-largo plazo.

Calidad de los alimentos Evaluar la calidad de los alimentos que son consumidos por niñas, niños y adolescentes resulta un tanto complejo en tanto que no hay datos concretos sobre el consumo personal de alimentos en relación a estándares médico nutricionales adecuados. De hecho, ni siquiera la Canasta Básica Alimentaria (CBA) está construida con un enfoque que permita garantizar la alimentación mínima de un hogar promedio25. Ha sido señalado, por ejemplo, que la composición de la CBA no se corresponde con la forma o medida en que pueden ser

25

30

35

40

45

50

55

60

65

70

1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010

%

Años

UrbanaRuralTotal

Gráfico 1: Tasas de pobreza urbana, rural y total, El Salvador 1991 – 2010

Fuente: Elaboración propia con información de DIGESTYC.

24 Ver notas: Diario El Mundo. “Entregaron paquetes a tres escuelas municipales”. Mayo, 2010. Nota en: http://elmundo.com.sv/entregaron-paquetes-a-tres-escuelas-municipales. La Prensa Gráfica. “Vaso de leche para 500,000 estudiantes”. Enero, 2012. Nota en: http://www.laprensagrafica.com/el-salvador/social/241410-vaso-de-leche-para-500000-estudiantes. Y también: Transparencia activa. “Vaso de leche para medio millón de estudiantes”. Junio, 2012. Nota en: http://www.transparenciaactiva.gob.sv/vaso-de-leche-para-medio-millon-de-estudiantes/. 25 PDDH. Primer informe sobre el estado del derecho a una alimentación adecuada en El Salvador. PDDH. 2009.

22BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

adquiridos los productos en el mercado, infravalorando así el costo del consumo básico de los hogares26.

Otro aspecto se refiere a la posibilidad de que los alimentos tengan algún grado de modificación en su composición genética, fenómeno generalizado hoy en día. Si bien en el país no hay estudios ni estadísticas sistematizadas sobre la modificación genética de productos alimenticios, es evidente que la importación de alimentos con componentes modificados genéticamente ha aumentado en los últimos años.

Tampoco es despreciable la producción primaria que se lleva a cabo a partir de la que, eufemísticamente, se ha denominado “semilla mejorada”. Ésta incluso representa un componente fundamental de los “paquetes agrícolas” que desde 2007 vienen entregando los distintos gobiernos para incentivar la producción agrícola. Si bien este tipo de programas puede ayudar a mejorar temporalmente la percepción de ingresos y/o la alimentación de las personas, no es un mecanismo sostenible fiscal y ambientalmente, debido a la presión que representa sobre las finanzas públicas y por los efectos nocivos que puede tener sobre la salud humana y los ecosistemas.

Según información de la Presidencia, en 2012 habían sido beneficiados más de 300 mil productores agrícolas, cantidad que se espera ampliar en un futuro próximo27. Ello implica una ampliación de la producción que tiene como principal insumo –la semilla- un organismo modificado genéticamente. Por la misma naturaleza de este producto, el mismo puede resultar peligroso si es utilizado como si fuera semilla nativa; por ejemplo, en 2010 una familia entera se intoxicó y dos de sus hijos murieron a causa del consumo de “semilla mejorada”28.

A la problemática de los transgénicos se une la propagación de establecimientos de comida rápida, que fomenta un tipo de consumo que igualmente pone en riesgo la salud del ser humano debido a su composición nutritiva. Moliní Cabrera señala: “este tipo de alimentos

26 Sociología de El Salvador. “Canasta Básica Alimentaria según DIGESTYC”. Abril, 2008. Nota en: http://socioelsalvador.blogspot.com/2008/04/canasta-bsica-alimentaria-segn-digestyc.html. Recuperado el 29-04-2013. 27 Transparencia activa. “Gobierno entregará 65 mil paquetes agrícolas más que en 2012 y duplicará cen-tros de entrega”. Febrero, 2013. Nota en: http://www.transparenciaactiva.gob.sv/gobierno-entregara-65-mil-paquetes-agricolas-mas-que-en-2012-y-duplicara-centros-de-entrega/. 28 Diario El Mundo. “Extrema pobreza obligó a familia a consumir semilla mejorada”. Julio, 2010. Nota en: http://elmundo.com.sv/extrema-pobreza-obligo-a-familia-consumir-semilla-mejorada.

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

23BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRAL

Año 3 - No.9 • Enero-Marzo 2013

coinciden en un aporte de alta densidad energética y calórica y un alto contenido en grasas (saturadas) e hidratos de carbono. Además contienen bastante colesterol y, aunque su contenido mineral es deficiente, en el caso del sodio sucede todo lo contrario, siendo ricos en este mineral […] Son también deficientes en fibra y vitaminas” 29.

Prosigue más adelante la autora: “el abuso de este tipo de comida… altera nuestra dieta diaria proporcionando a nuestro organismo un extra calórico… este extra en calorías de nuestra dieta, unido al hecho de que hoy en día vivimos en una sociedad más sedentaria, hace que se produzca un aumento en la incidencia y prevalencia de la obesidad… la obesidad conlleva una serie de consecuencias sociales, aunque estas son mínimas en comparación con todas las consecuencias fisiopatológicas que se van en relación con exceso de peso”30.

Sin embargo, el exceso de peso u obesidad no debe entenderse como una situación en la que no hay desnutrición, es decir, asimilando esta situación al hecho de que se tienen los nutrientes suficientes para garantizar el desarrollo integral de las capacidades físicas y psicológicas de las personas. En El Salvador, según informan fuentes periodísticas, hay una incidencia creciente de la obesidad; entre 1990 y 1999 el porcentaje de niños y niñas menores de 5 años con obesidad rondaba el 3.9%, indicador que ha aumentado al 5.8% en el periodo 2000 – 200931. A nivel general, las consultas por obesidad han aumentado en un 33% aproximadamente en los últimos meses32.

De esta manera, la subnutrición, la desnutrición y la malnutrición que pueden estar a la base de la obesidad, son problemas que están incidiendo en el desarrollo integral de la niñez y la adolescencia. Tal como hemos señalado en apartados anteriores, en los primeros años de vida, la alimentación determina muchas de las capacidades físicas, mentales y sociales de la niñez, por lo que el descuido de la familia y la falta de programas en los centros de cuidado y/o educativos, la ausencia de una política desde el aparato del Estado para garantizar una alimentación adecuada, son factores que obstaculizan el desarrollo

29 Moliní Cabrera, Ma. Dolores. Repercusiones de la comida rápida en la sociedad. En: Trastornos de la conducta alimentaria. No 6. Sevilla, España. 2007. Pág. 638. Disponible en: http://www.tcasevilla.com/archivos/repercusiones_de_la_comida_rapida_en_la_sociedad.pdf. 30 Ibíd. Pág. 656. 31 El Diario de Hoy. “Obesidad ataca a niños salvadoreños”. Septiembre, 2011. Nota en: http://www.elsal-vador.com/mwedh/nota/nota_completa.asp?idCat=47655&idArt=6161795. 32 El Diario de Hoy. “Atenciones por obesidad se incrementan en 33%”. Abril, 2013. Nota en: http://www.elsalvador.com/mwedh/nota/nota_completa.asp?idCat=47673&idArt=7791520.

24BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

integral de niñas y niños.

La garantía del derecho a la alimentación de niñas y niños atendidos en los CAI.

En apartados anteriores se ha hecho énfasis en la importancia de la alimentación para el desarrollo integral de la niñez y la adolescencia. Así mismo, se ha remarcado que es en los primeros años de vida que el cuido como proceso integrado e integral, en cuya estructura juega un papel clave la alimentación, se presenta como un momento trascendental para garantizar el desarrollo físico y psicológico del ser humano.

El ISNA a través de la Subdirección de Promoción de Derechos (SPD) lleva a cabo el Programa de Atención Inicial en los Centros de Atención Inicial (CAI), en las modalidades de Centros de Desarrollo Infantil (CDI) y Centros de Bienestar Infantil (CBI); en ambas modalidades se brinda atención a niñas y niños menores de siete años. Dos veces al año se realiza en los CAI una evaluación médico-nutricional que tiene por objetivo establecer la situación de salud de las niñas y niños atendidos por el Instituto.

Según la información recopilada por el Sistema de Información Para la Infancia (SIPI) del ISNA, la incidencia de la desnutrición en cualquiera de sus modalidades es relativamente baja. El porcentaje de niñas y niños que tienen un estado nutricional “normal” es, en promedio, el 93.5%. Esta información muestra que la mayoría de la población atendida cuenta con una alimentación adecuada; no obstante, ello no debe indicar que los esfuerzos por garantizar la alimentación de la niñez pueda ser descuidada en relación a otras prioridades.

En los últimos años, los indicadores de desnutrición de niñas y niños atendidos en los CAI han presentado una disminución, especialmente en lo que se refiere a la desnutrición leve y severa, mientras que ha habido un aumento en la desnutrición moderada. Para 2010, los porcentajes de desnutrición leve, moderada y severa fueron de 6.0%, 0.7%, y 0.4% respectivamente; mientras que, en el mismo orden, los porcentajes se ubicaron en 5.3%, 1.2%, y 0.1% para 2012. Esa evolución positiva, si bien ha sido mínima, impele a mantener los esfuerzos en materia alimentaria y a ampliar, en la medida de las posibilidades, la cobertura de alimentos saludables y nutritivos para la población atendida en los CAI.

Desde un enfoque de género, es posible apreciar que la mayoría de la población en

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

25BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRAL

Año 3 - No.9 • Enero-Marzo 2013

situación de desnutrición son niñas. El 53.7% de la población con estado nutricional “normal” es del sexo masculino, mientras que en estado desnutrición leve, moderada o severa, porcentajes del 52.2%, 55.4% y 62.5%, respectivamente, corresponde a niñas. A la luz de esta información resulta incondicional la creación de programas que promocionen el mejoramiento nutricional de las niñas, pues no es casual el hecho de que se encuentren en esa situación de desventaja en relación a sus pares masculinos; al contrario, es un fenómeno que se explica a la luz de la discriminación basada en la desvalorización social de la vida de las mujeres33.

De este modo, la desigualdad en el acceso a alimentos se suma a una situación social en la que la mujer es vista como un sujeto social sin derechos o con menos derechos que sus pares masculinos. Teniendo en cuenta que la alimentación es de por sí uno de los elementos

Estado nutricional

Niñas Niños Total

CBI CDI Total CBI CDI Total CBI CDI Total

Normal 91.2 98.1 92.6 93.0 98.7 94.2 92.1 98.5 93.5

Desnutrición leve

7.1 1.1 5.9 5.8 0.6 4.7 6.4 0.9 5.3

Desnutrición moderada

1.5 0.8 1.4 1.1 0.6 1.0 1.3 0.7 1.2

Desnutrición severa

0.2 0.0 0.2 0.1 0.0 0.1 0.2 0.0 0.1

Total 100 100 100 100 100 100 100 100 100

Tabla 4: Situación médico nutricional de niñas y niños atendidos en el Progra-ma de Atención Inicial, evaluación julio – septiembre 2012.

Fuente: Sistema de Información para la Infancia (SIPI) / ISNA.

básicos para el desarrollo de la persona humana, resulta que su peso en la profundización de la discriminación de las mujeres es muy significativo. Una alimentación de menor calidad implica un menor desarrollo de capacidades físicas y cognitivas, menores posibilidades de aprendizaje y, por tanto, mayores probabilidades de caer en el círculo vicioso de la pobreza. Es importante señalar también que es fundamental el fortalecimiento institucional que permita garantizar el derecho a la alimentación de la población atendida. Esto implica tanto la gestión presupuestaria (aumentar el monto presupuestario para los programas de

33 Ver: Consejo de Derechos Humanos. Op. cit. Pág. 11.

26BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

atención inicial, considerando como principio la progresividad del gasto público), como la elaboración de programas y proyectos enmarcados en el enfoque de derechos.

De lo expuesto a través del presente artículo es posible concluir algunas ideas puntuales. El derecho a la alimentación puede ser abordado desde distintos marcos teóricos, lo fundamental es identificar cuál de estos da la pauta para traducirse en políticas públicas que realmente hagan efectivo este derecho. En el presente artículo, se ha identificado al paradigma de la soberanía alimentaria como aquel que más aportaría a sentar las bases para la garantía del derecho a la alimentación.

La situación del derecho a la alimentación en El Salvador, se ha visto claramente precarizada. Ello es más grave en el caso de niñas, niños y adolescentes, pues este grupo representa un sector de alta vulnerabilidad social. Las políticas públicas de las últimas décadas y la misma dinámica de una economía terciarizada, han llevado a que la población carezca de alimentos de calidad disponibles y accesibles para hacerle frente a sus necesidades nutricionales.

En el caso de la población atendida en el ISNA, la mayoría goza de un buen estado nutricional. No obstante, se mantienen los esfuerzos por llevar la garantía de una alimentación adecuada al 100% de la población. Pero ese objetivo implica lograr una nivelación presupuestaria que permita ampliar la cobertura y mejorar la calidad de la atención que el Instituto brinda.

Las principales recomendaciones para fortalecer el cumplimiento del derecho a la alimentación de niñas, niños y adolescentes, en el marco del principio de corresponsabilidad, se agrupan en torno a tres actores fundamentales, como se presenta a continuación:

Familia: Velar porque la ingesta de alimentos de niñas, niños y adolescentes se encuentre en concordancia con las exigencias nutricionales propias de su etapa de desarrollo. Es importante así mismo que la distribución del gasto familiar atienda en la medida de lo posible en primer lugar a niñas, niños y adolescentes, pues representan un segmento que tradicionalmente se encuentra en desventaja incluso al interior de los núcleos familiares.

Organizaciones de la sociedad civil: Mantener en agenda el tema de la alimentación nutritiva y la soberanía alimentaria, en ambos casos el enfoque de derechos de la niñez y la adolescencia debe resaltarse de forma explícita. De igual manera, la movilización social que ponga en perspectiva las iniciativas gubernamentales debe ser coordinada y articulada intersectorialmente. Para aquellas organizaciones que ejecutan programas de alimentación, es importante que estos se adecuen a los requerimientos nutricionales de niñas, niños y adolescentes según sus etapas de desarrollo.

totalidad; esta circunstancia – definitivamente – viene a repercutir negativamente en los esfuerzos que el Estado Salvadoreño hace para favorecer la garantía de los Derechos de las niñas, niños y adolescentes.

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

27BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRAL

Año 3 - No.9 • Enero-Marzo 2013

Atención Inicial

A dos años de la entrada en vigencia de la Ley de Protección Integral de la Niñez y Adolescencia (LEPINA)34, la construcción del Sistema de Protección Integral de la niñez y Adolescencia en los términos que se establecen a partir del artículo 103 de la LEPINA, no existe en su totalidad; esta circunstancia – definitivamente – viene a repercutir negativamente en losesfuerzos que el Estado Salvadoreño hace para favorecer la garantía de los Derechos de lasniñas, niños y adolescentes.

El Instituto Salvadoreño para el Desarrollo Integral de la Niñez y Adolescencia (ISNA), con la entrada en vigencia plena de la LEPINA, ha sufrido una serie de transformaciones que van desde la introyección de una nueva concepción para el abordaje de las diferentes problemáticas que sufre la niñez y adolescencia, hasta un replanteamiento de sus programas y/o proyectos; sin embargo, con el pasar de los años y el embate de una serie de concepciones históricas de lo que se sabe de ser niño, niña o adolescente, el Programa de Atención Inicial no ha sufrido – al menos en su esencia – cambios significativos; teniendo que, la población que se atiende va desde los cero hasta cumplir los siete años, son dos modalidades: Centros de Bienestar Infantil (CBI) y Centros de Desarrollo Infantil (CDI), los primeros mantienen una cobertura exclusivamente rural, mientras que los segundos es lo contrario.

Durante los últimos años, la cantidad de niñas y niños atendidos en las dos modalidades se ha mantenido casi intacta, variando insignificantemente en algunos periodos; para el primer trimestre del año dos mil trece tenemos que las niñas ocuparon el 47% del total de atendidos y atendidas, el resto fueron niños que durante los periodos pasados siempre han sido mayoría. (Tabla 5).

El Programa de Atención Inicial en ambas modalidades (CBI y CDI), ha sido diseñado para niños y niñas con edades entre los cero y los siete años; sin embargo, existe una edad promedio para los CBI que es de 4.75 meses en el caso de las niñas y 4.61 en el caso de los niños, mientras que para los CDI la edad promedio en las primeras es de 4.28 y la de los niños es 4.21 años, sin embargo, no se descarta que en el Programa se atiendan a mayores de siete años de edad. (Tabla 5).

De los 5911 niñas y niños atendidos, el 54% provenían del área urbana, siendo en su mayoría niños (29%), esto denota que a pesar de que la población femenina es mayoría en este País, son las personas del sexo masculino las que mantienen la preponderancia en el acceso a estos servicios que en definitiva favorecen su desarrollo. El Comité de los Derechos de Niño, ha alentado a los Estados para que elaboren un “programa positivo” en favor de

34 Decreto Legislativo número 839, publicado en el Diario Oficial número 68, Tomo 383, de fecha 16 de abril del año 2009, entrando en vigencia parcial el año 2010, siendo aplicable en su totalidad hasta el año 2012.

28BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

Fuente: Sistema de Información Para la Infancia (SIPI), ISNA 2013.

Tabla 5. Perfil sociodemografico de las niñas y niños en los Centros de Atención Inicial. (CBI, CDI). Enero - Marzo 2013.

Población y Edades Niñas

Niños

Total CBI CDI Total % CBI CDI Total %

Población atendida 2,157 606 2,763 47 2,434 714 3,148 53 5,911

Edad promedio (años) 4.75 4.28 4.61 4.21

Procedencia

Población del área urbana 864 606 1,470 25 1,014 714 1,728 29 3,198

Población del área rural 1,293 0 1,293 22 1,420 0 1,420 24 2,713

Total 2,157 606 2,763 47 2,434 714 3,148 53 5,911

Ambientes socio familiar

Población que vive solo con su madre

760 274 1,034 17 833 295 1,128 19 2,162

Población que vive solo con su padre

31 10 41 1 27 16 43 1 84

Vive con ambos 1,290 297 1,587 27 1,476 367 1,843 31 3,430

Vive con otro* 55 16 71 1 75 27 102 2 173

No dato de padre/madre 21 9 30 1 23 9 32 1 62

Total 2,157 606 2,763 47 2,434 714 3,148 53 5,911

Población en condiciones de pobreza Extrema Urbana

737 198 935 16 876 239 1,115 19 2,050

Población en condiciones de pobreza Extrema Rural

1,135 0 1,135 19 1,225 0 1,225 21 2,360

Población en condiciones de pobreza Relativa Urbana

105 224 329 6 103 260 363 6 692

Población en condiciones de pobreza Relativa Rural

119 0 119 2 143 0 143 2 262

No pobres Urbano 22 184 206 3 35 215 250 4 456

No pobres Rural 39 0 39 1 52 0 52 1 91

Total 2,157 606 2,763 47 2,434 714 3,148 53 5,911

la Primera Infancia35; ya la Convención de los Derechos del Niño recoge en su preámbulo que la Declaración Universal de los Derechos Humanos proclama que las niñas, niños y adolescentes tienen derecho a cuidados y asistencias especiales36, especialmente los niños y niñas muy pequeños37.

35 Comité de los Derechos del Niño, “Observación General número 7: Realización de los Derechos del Niño en la Primera Infancia (2009)”. Párrafo 5.36 Convención de los Derechos del Niño. “Preámbulo”.37 Comité de los Derechos del Niño. Óp. Cit. Párrafo 5.

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

29BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRAL

Año 3 - No.9 • Enero-Marzo 2013

Tabla 6. . Niñas y Niños atendidos en Centros de Atención Inicial (CBI, CDI), por mes, según región. Enero – marzo 2013.

Fuente: Sistema de Información para la Infancia (SIPI). ISNA 2013.

Según el Comité de los Derechos del Niño, los niños y niñas pequeños “crean vínculos emocionales fuertes con sus padres u otros cuidadores, de los que necesitan recibir cuidado, atención, orientación y protección, que se ofrezcan de manera respetuosa con su individualidad y con sus capacidades cada vez mayores”38; tenemos que mas de la mitad de las niñas y niños que son atendidos en los programas de atención inicial (CBI y CDI), viven con su madre y padre (58%), el resto viven con solo con su madre, su padre o con personas ajenas familia nuclear (entre estos podemos mencionar abuelas, abuelos, tíos, tías, primos, primas, hermanos o hermanas). Es importante señalar que solo el 1.4% vive exclusivamente con su padre, contrario al 36.6% que vive solo con su madre (Tabla 5), lo que indica que las tareas de crianza y cuidado de las niñas y niños son en su mayoría asumidas solamente por su madre, mientras que el padre se dedica a otras labores o ha abandonado su responsabilidad.

Existen situaciones ajenas a las familias que las afectan y que a la vez repercuten negativamente en el desarrollo integral de las niñas y niños atendidos en los programas de atención inicial, la pobreza es una de las condiciones a las que el sistema empuja a cientos de familias; el 75% (del área urbana y rural) viven en condición de pobreza extrema y el 16% en pobreza relativa; lo que significa que el 91% de las familias son pobres. (Tabla 5).

Mes Región

Occidental Región Central y Paracentral

Región Oriental Total

Niñas Niños Niñas Niños Niñas Niños Enero 447 513 1,549 1,811 482 489 5,291

Febrero 489 556 1,682 1,979 511 516 5,733

Marzo 488 561 1,641 1,945 503 523 5,661

Podemos observar que en la Tabla 6, la mayoría de niños y niñas atendidos en el primer Trimestre del año 2013, por el Programa (en ambas modalidades), provienen de la región central y paracentral, casi el doble en relación a las otras dos regiones; esto tiene su explicación en el hecho que la mayoría de los CBI y CDI se encuentran ubicados en la región central y paracentral del país.Como hemos mencionado antes el programa de Atención Inicial se encuentra dirigido a la población de niños y niñas con edades entre los cero y los siete años de edad, la tabla 7

38 Ídem. Párrafo 6 literal b)

30BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

Tabla 7. Rangos de edad de niñas y niños atendidos en el Programa de Atención Inicial, según modalidad de atención, enero – marzo 2013.

Fuente: Sistema de Información para la Infancia (SIPI). ISNA 2012.*En este rango se incluyen niños y niñas que cumplen la edad de 7 años durante el año de atención en el programa o que han sido referidos bajo una medida de protección al programa.

Rango de edad CBI CDI

Total % Niñas Niños Niñas Niños

De 0 a 3 años 695 915 259 310 2,179 36.9

De 4 a 7 años 1,309 1,373 341 401 3,424 57.9

De 7 y más* 153 146 6 3 308 5.2

Total 2,157 2,434 606 714 5,911 100.0

nos muestra que la mayoría de las atención son dirigidas a mayores de cuatro años, pero menores de siete, constituyendo el 57.9% del total de la población atendida; niños y niñas que se encuentran bajo el rango de edad propio de la Educación Parvularia39; sin embargo muchos de esos menores de edad no son atendidos bajo las concepciones propias de esa educación.

El modelo de Atención Inicial en ambas modalidades desarrolla tres unidades que pretenden favorecer la preparación para las matemáticas y la lectoescritura, todo bajo una estrategia permanente que se fundamenta en la participación40 y que comprende cinco áreas fundamentales: Cognitiva, lenguaje, motora gruesa y fina, socio afectiva y el área de salud y nutrición.

En ambas modalidades del programa de Atención Inicial se implementa un modelo pedagógico, para lo cual se utilizan los programas y guías metodológicas del Ministerio de Educación41; esto abarca a todos los rangos de edad (0 – hasta cumplir los 7 años de edad).

Como se observa en la Tabla 8, la mayoría de las niñas y niños son atendidos en la zona Central y Paracentral; solo los departamentos de Chalatenango, La libertad y San Salvador ocupan el 43% del total de atenciones, contrario al 18% que suman todos los departamentos

39 La Ley General de Educación establece en el Artículo 18 que “la Educación Parvularia comprende nor-malmente tres años de estudio y los componentes curriculares propiciarán el desarrollo integral en el educando de cuatro a seis años, involucrando a la familia, la escuela y la comunidad” (Decreto Legislativo 917, de fecha 12 de diciembre de 1996, publicado en el Diario Oficial número 242, Tomo 333, de fecha 21 de diciembre de 1996.40 Instituto Salvadoreño para el Desarrollo Integral de la Niñez y Adolescencia (ISNA), “Modelo de Atención Inicial para Centros de Bienestar Infantil y Centros de Desarrollo Integral”, Sub dirección de Promoción de Derechos, departamento de Atención Inicial y Preventiva. 2013. Página 12.41 Ídem. Página 19.

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

31BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRAL

Año 3 - No.9 • Enero-Marzo 2013

de la zona oriental (Tabla 8).

Es importante señalar que la modalidad de los Centros de Desarrollo Integral (CDI), se encuentra presente solamente en 4 de los 14 departamentos del país, esto definitivamente afecta el alcance del programa, la otra modalidad se desarrolla en todas las regiones del País.El alcance del programa de Atención Inicial es escaso, apenas logra atender al 0.54% del total de niños y niñas con edades entre los cero y los nueve años de edad42.

42 Calculo realizado con información de la “Encuesta de Hogares de Propósitos Múltiples 2011”, publicada por el Ministerio de Economía a través de la Dirección Nacional de Estadística y Censo (DIGESTYC), el rango de edad se ha calculado tomando en cuenta la disponibilidad de la información, esta última se en-cuentra desagregada de 0 a 4 y de 5 a 9 años. (Disponible en: http://www.digestyc.gob.sv/phocadownload/ DIVISION_DE_ESTADISTICAS_SOCIALES/Publicacion_EHPM_2011.pdf. Página 245).

Departamento CBI CDI

Total % Niñas Niños Niñas Niños

Ahuachapán 60 70 0 0 130 2

Santa Ana 78 96 211 254 639 11

Sonsonate 154 149 0 0 303 5

Chalatenango 198 235 0 0 433 7

La Libertad 337 409 25 45 816 14

San Salvador 278 305 341 376 1,300 22

Cuscatlán 130 145 0 0 275 5

La Paz 111 140 29 39 319 5

Cabañas 106 145 0 0 251 4

San Vicente 172 197 0 0 369 6

Usulután 312 299 0 0 611 10

San Miguel 20 25 0 0 45 1

Morazán 186 192 0 0 378 6

La Unión 15 27 0 0 42 1

Total 2,157 2,434 606 714 5,911 100

Tabla 8. Cantidad de niñas y niños atendidos en el Programa de Atención Inicial, según modalidad de atención y departamento de procedencia,

enero – marzo 2013

Fuente: Sistema de Información para la Infancia (SIPI). ISNA 2012.

32BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

Restitución de DerechosPodemos considerar la Restitución de Derechos como el proceso por medio del cual un de-recho que ha sido vulnerado, es vuelto al estado que este tenía antes de ser transgredido, una concepción tradicional de la restitución es el que se recoge de algunos autores y que se resume en “la acción de restaurar; devolución de algo a su legitimo dueño; acción de hacer el bien o dar el equivalente a la pérdida, daño o injuria; indemnización”43.

El programa de Restitución de Derechos del ISNA pretende regresar a las víctimas de vulne-raciones a sus derechos el goce pleno de los mismos, a través de la ejecución de las medidas dictadas por las Juntas de Protección y los Juzgados Especializados de Niñez y Adolescencia, estas son de dos modalidades: Privativas de Libertad (institucionalización) y otras que se ejecutan en el seno familiar y comunal de los niños, niñas y adolescentes protegidos (no privativas de libertad).

Es así que el programa durante el primer trimestre del año dos mil trece ha atendido a un total de 1, 181, en su mayoría niñas (59%), siendo las y los adolescentes (12 – 18 años) quienes ocupan el primer lugar en las atenciones ocupando el 49% del total, es importante señalar que existe un 8% que son mayores de edad que aun permanecen recibiendo aten-ción ante su recién mayoría de edad. (Tabla 9).

Los niños y niñas con edades entre los cero y los tres años de edad son quienes ocupan la menor cantidad de atenciones con el 8%.

La mayoría de las niñas, niños y adolescentes provienen del área urbana44 (68%), siendo el 22% los y las que residen en el Área Metropolitana de San Salvador; es importante señalar que las condiciones de vida de estos niños y niñas son precarias, el 63% del total que posee información sobre estos aspectos (807) habitan viviendas bajo condiciones de precariedad sanitaria en su vivienda. (Tabla 9).

43 Portal de Justicia Restaurativa. Disponible en: http://www.justiciarestaurativa.org/intro/practices /restitu-tion44 Cabe mencionar que 53 niños, niñas y adolescentes atendidos no poseían información respecto a su procedencia, desconociéndose la misma, esto representa el 4.5% del total de atendidos y atendidas.

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

33BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRAL

Año 3 - No.9 • Enero-Marzo 2013

Tabla 9. Perfil sociodemográfico de las niñas y niños atendidos en el Programa de Restitución de Derechos. Enero – marzo 2013.

Fuente: Sistema de Información para la Infancia (SIPI). ISNA 2013*53 casos no poseen información relacionada a su procedencia.**807 casos tiene información en el Formulario de familia, los porcentajes están calculados en base a esa cantidad. ***Población mayor de 7 años es: 900, de estas 557 niñas y 343 niños.****Para otros incluye: Madrastra, padrastro, abuela, abuelo, hermanos, otras personas, esposo/a o hijos.

Población atendida

Niñas % Niños % Total

694 59 487 41 1,181

0 a 3 años 49 52 46 48 95 3 a 6 años 48 47 55 53 103 6 a 9 años 69 52 63 48 132 9 a 12 años 87 49 89 51 176 12 a 15 años 148 61 93 39 241

15 a 18 243 72 93 28 336 18 y más 50 51 48 49 98

Procedencia* Niñas % Niños % Total Población del área urbana 474 59 332 41 806 Población del área rural 199 62 123 38 322 Población del AMSS 154 60 101 40 255

Ambiente socio-familiar Niñas % Niños % Total Población en condiciones de precariedad sanitaria de la vivienda**

271 54 235 46 506

Población mayor de 7 años de edad que no tiene escolaridad***

212 54 184 46 396

Con quien vive el Niño, Niña o Adolescente

Niñas % Niños % Total

Población que convive con madre 156 16 128 13 284 Población que convive con padre 29 3 17 2 46 Población que convive con ambos 71 7 45 5 116 Población que convive con otros****

193 20 155 16 348

Población que vive solo 5 1 8 1 13

34BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

El programa de Restitución de Derechos debe comprender entre otros aspectos un compo-nente por medio del cual se garantice el derecho a la educación de las niñas, niños y ado-lescentes atendidos en el mismo45; sin embargo, el 44% del total de niñas y niños mayores de siete años46 no tiene escolaridad, de este total el 62% son niñas y el resto niños, las primeras en su mayoría sufren el embate de las concepciones androcéntricas que limitan las posibilidades que estas pueden tener para posicionarse en un nivel equiparable con sus pares masculinos.

Existen una serie de teorías que se relacionan con la necesidad que poseen los seres hu-manos para crecer en un ambiente que propicie las relaciones de apego entre los distintos miembros del grupo; es así que, para las niñas, niños y adolescentes, el apego puede ser determinante en su desarrollo integral o en sus relaciones futuras con otros seres humanos; la familia en este sentido, juega un papel preponderante para favorecer esas relaciones; sin embargo, la mayoría de las niñas, niños y adolescentes que poseen información sobre sus familias, viven con otras personas (43.12%), entre esas otras personas se pueden incluir a tíos, tías, hermanos, hermanas, primos, primas, abuelos o abuelas. (Tabla 9)

Las madres siguen siendo las que en mayor cantidad se dedican a la crianza exclusivamente de sus hijos, hijas y adolescentes, el 35% de los y las atendidas viven solo con su madre; solo el 6% es criado solo por su padre. (Tabla 9)

Es importante señalar que el 2% de las niñas, niños y adolescentes atendidos y atendidas por el Programa de Restitución de Derechos viven solos o solas (Tabla 9), lo cual definitiva-mente puede ser una limitante en su desarrollo integral.

Tabla 10. Población atendida en el Programa de Restitución de Derechos por modalidades de atención según género. Enero – marzo 2013.

Fuente: Sistema de Información para la Infancia (SIPI). ISNA 2013.

45 El Artículo 174 de la LEPINA establece las condiciones mínimas de programas vinculados con las medi-das de protección, en el literal g) dice: “acceso y garantía a actividades educativas, de profesionalización, culturales, deportivas, de ocio, así como el derecho a estar informado de las situaciones de la comunidad y del país en general”. 46 Según la Ley General de Educación la Educación Básica inicia a los siete años de edad, esta es obliga-toria y gratuita cuando la imparta el Estado (Artículo 20 de la Ley General de Educación).

Modalidades de Atención Niñas % Niños % Total

Acogimiento Institucional 413 58 295 42 708 Atención externa 281 59 192 41 473 Total 694 59 487 41 1,181

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

35BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRAL

Año 3 - No.9 • Enero-Marzo 2013

Las medidas de protección que se aplican a niños, niñas y adolecentes vulnerados en sus derechos y que se fundamentan en la LEPINA, pueden ser privativas de libertad (Acogimien-to Institucional y de Emergencia) o pueden ser no privativas de libertad (el Artículo 120 recoge las medidas que no implican la separación de los y las menores de edad de su seno familiar o comunitario, entre las que podemos mencionar: la orden de matricula o perma-nencia obligatoria en los centros educativos, la orden de tratamiento médico, psicológico o psiquiátrico, la separación de la niña, niño o adolescente de la actividad laboral).

Tabla 11. Total de niñas, niños y adolescentes por motivo de atención en el departamento de Restitución de Derechos, según género. Enero – marzo 2013.

Fuente: Sistema de Información para la Infancia (SIPI). ISNA 2013.*Para otros se incluye: Cuidado Personal y Protección (13 %); irrespeto y desobediencia a madre, padre, responsable y maestro (7 %); Problemas de la familia y el niño (5 %); Extravío (1.2 %); Sin identidad legal (0.5 %); irrespeto a los derechos de otras personas (0.3 %); servidumbre (0.3 %); Educación formal y aprendizaje de oficio (0.2 %); adicción a drogas y alcohol (0.2 %); No vulneración (0.2 %).

Motivos Niñas % Niños % Total

Abandono 117 47 133 53 250 Abuso sexual infantil 139 90 15 10 154 Negligencia o descuido 70 51 67 49 137 Maltrato físico 70 53 62 47 132 Víctima de Tráfico ilegal de personas (salida del país)

26 63 15 37 41

Niñas, Niños y Adolescentes en situación de calle 13 38 21 62 34 Víctima de trata de personas 15 100 0 0 15 Víctima de utilización en la mendicidad 6 43 8 57 14 Maltrato psicológico 10 77 3 23 13 Orfandad 8 67 4 33 12 Explotación sexual comercial 12 100 0 0 12 Víctima de tráfico ilegal al país (entrada) 6 75 2 25 8 Víctima de explotación Económica 6 100 0 0 6 Protección provisional por referencia de Ente legal

1 20 4 80 5

Negación de los servicios de salud 4 100 0 0 4 Negación de los servicios de educación 2 50 2 50 4 Utilización en actividades ilícitas 2 67 1 33 3 Trabajo infantil 0 0 2 100 2 Trabajo de alto riesgo 1 100 0 0 1 Otros* 186 56 148 44 334 Total 694 59 487 41 1,181

Tomando en cuenta lo anterior tenemos que el 60% de las niñas, niños y adolescentes que han sido atendidos en el programa de Restitución de Derechos, lo han hecho a través de

36BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

Tabla 12. Tiempo promedio de duración en meses de la medida de Acogimiento Institucional, según modalidades de atención y grupos de edad.

Enero – marzo 2013.

Fuente: Sistema de Información para la Infancia (SIPI). ISNA 2013.

medidas privativas de libertad (Acogimiento Institucional y de Emergencia) (Tabla 10), esto definitivamente demuestra que estas medidas son las que mas recurrentemente se aplican.

Las medidas que implican la separación de las niñas, niños o adolescentes de su entorno familiar o comunitario pueden acarrear serios problemas en su desarrollo; por otro lado, el otro tipo de medidas implica un soporte institucional (público y privado) más grande y organizado, precisamente esa es la concepción que se plantea en la LEPINA con la RAC.

Las niñas y adolescentes mujeres son las que en su mayoría sufren la aplicación de las me-didas privativas de libertad, 58% del total de menores de edad a los que se les ha aplicado ese tipo de medidas.

La Tabla 11 nos indica los hechos que han originado el ingreso de las niñas, niños y adoles-centes al Sistema de Protección Especial, entre estos podemos destacar los primeros cinco: Abandono 21%, abuso sexual infantil 13%, negligencia o descuido 12%, maltrato físico 11% y las víctimas de trafico ilegal de personas (salida del país) 3%.

Aquí no podemos dejar de mencionar otras causas que definitivamente nos indican que la niñez y adolescencia en El Salvador sufre una serie de vejámenes que riñen con el goce ple-no de sus derechos, podemos mencionar niños, niñas y adolescentes en situación de calle 3%, víctima de trata de personas 1%, niños, niñas y adolescentes utilizados en la mendici-dad, maltrato psicológico, orfandad y explotación sexual comercial con 1%.

Grupos de edad Centros de Protección

Centros de Acogida de Emergencia

Centro de Educación Especial

Niñas Niños Niñas Niños Niñas Niños 0 a 3 años 21.64 22.43 4.82 5.61 0 0 3 a 6 años 30,83 33.34 18.27 12.54 0 0 6 a 9 años 55.9 50.56 10.36 24.27 0 0 9 a 12 años 61.82 52.93 12.11 29.07 0 0 12 a 15 años 53.58 61.67 21.25 46.18 0 0 15 a 18 57.62 64.64 19.92 4.39 0 139.9018 y más 73.41 165.35 29.73 0 168.64 183.88

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

37BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRAL

Año 3 - No.9 • Enero-Marzo 2013

Como mencionamos antes, las medidas que separan a las niñas, niños y adolescentes de su entorno familiar o comunitario (Acogimiento Institucional y de Emergencia), pueden ocasionar serias dificultades en el favorecimiento del desarrollo integral de los menores de edad, teniendo que, como verificamos en la Tabla 10, este tipo de medidas son las que mayormente son aplicadas; esto se puede agravar cuando además de aplicar indiscrimina-damente estas medidas, estas se resuelven para ser cumplidas en un tiempo muy largo47.

La Tabla 12 nos indica el tiempo promedio que dura la medida de acogimiento institucio-nal y de emergencia, la Ley establece que la segunda no deberá de extenderse más allá de 15 días (Artículo 123 LEPINA); sin embargo, tenemos que esta medida puede llegar a extenderse hasta más de 3 años, tal como nos indica la Tabla 8, los adolescentes incluidos en el rango de edad de los 12 a 15 años presenta la mayor cantidad de tiempo sometidos a esta medida, en el caso de las niñas, el mismo rango de edad presenta el mayor tiempo de duración siendo de un poco mas de un año.

Para la medida de Acogimiento Institucional48, también los niños son los que sufren el ma-yor tiempo de institucionalización, llegando a los 5 años para los del rango de edad entre los 9 y 12 años, esa cantidad se repite en el caso de las adolescentes con edades entre los 15 y los 18 años (Tabla 12).

Es necesario mencionar que en el caso de los adolescentes con discapacidad que se encuen-tran protegidos bajo la medida de Acogimiento Institucional en un Centro Especializado, pueden llegar a permanecer en el mismo más de 11 años.

47 La LEPINA establece en el Artículo 123 (Acogimiento de Emergencia) y 129 (Acogimiento Institucional), que este tipo de medidas de protección deben de aplicarse con carácter estrictamente excepcional y por el menor tiempo posible.48 Las medidas de Acogimiento Institucional son aplicadas exclusivamente por los Juzgados Especializa-dos de Niñez y Adolescencia (Artículo 129 LEPINA).

38BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

Inserción Social El área de Inserción Social surge ante la necesidad de ejecutar y supervisar las medidas socioeducativas que los Juzgados de Menores y de Ejecución de Medidas al Menor imponen a las y los adolescentes que se encuentran acusados de ser responsables de la comisión de un hecho sancionado por el Código Penal. Ésta atribución del ISNA, se encuentra contemplada en el Art. 181 de la LEPINA, y se desarrolla a partir de la implementación de programas que contribuyan a alcanzar los objetivos de dichas medidas, las cuales se encuentran definidas en los Arts. 8 – 15 de la Ley Penal Juvenil (en adelante LPJ), y son: a) orientación y apoyo sociofamiliar; b) amonestación; c) Imposición de reglas de conducta; d) Servicios a la comunidad; e) Libertad asistida; y, f) Internamiento.

El Área de Inserción Social desarrolla sus funciones en 3 áreas operativas: Centros de Inserción Social, Departamento de Medidas en Medio Abierto, y Centros de Resguardo. En el presente apartado se describen algunas características de la población atendida en las 2 primeras áreas.

Centros de Inserción Social

Las medidas de internamiento son cumplidas al interior de los Centros de Inserción Social (en adelante CIS o Centros). El ISNA cuenta actualmente con 4 CIS: “Sendero de Libertad”, “Tonacatepeque” y “El Espino”, destinados para población de sexo masculino; y el CIS “Femenino”, destinado para adolescentes y jóvenes de sexo femenino.

Es importante aclarar que el ISNA, en éste ámbito de sus funciones como ente responsable de la ejecución y supervisión de las medidas aplicadas por los Tribunales de Menores, debería atender únicamente a población adolescente, tal como lo establece el Art. 119 de la LPJ; sin embargo, ante la carencia de instituciones destinadas para atender a los jóvenes una vez cumplen los 18 años, ellos y ellas deben continuar con su internamiento en los CIS.

La Tabla 13 muestra que la mayoría de población atendida en los CIS es de sexo masculino (el 90%), posee medida definitiva de internamiento (el 64%) y tienen una edad comprendida entre los 16 y los 17 años (el 45.7%), seguidos por quienes poseen 18 o más años (el 42.3%). Cabe aclarar que las medidas provisionales tienen una duración de 90 días mientras investiga la Fiscalía General de la República, y las medidas definitivas pueden llega a durar hasta un máximo de 15 años, una vez se ha comprobado la responsabilidad de la o el adolescente en el hecho delictivo que se le imputa49.

Los delitos de los cuales se responsabiliza a las y los adolescentes y jóvenes atendidos en

49 Véase: “Ley Penal Juvenil”, Arts. 15 y 68.

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

39BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRAL

Año 3 - No.9 • Enero-Marzo 2013

Tabla 13. Adolescentes y jóvenes atendidos en los CIS, según rango de edad, tipo de medida y sexo. Enero – marzo, 2013.Rango de edad Tipo medida Total %

Provisional Definitivo Niña Niño Niña Niño

De 12 a < 14 años 0 9 0 1 10 1

De 14 a < 16 años 6 52 6 29 93 11

De 16 a < 18 años 19 153 23 196 391 46

> 18 años 8 58 25 271 362 42

Total 33 272 54 497 856 100 Fuente: Sistema de Información para la Infancia (SIPI). ISNA 2013.

50 Véase: “Reglamento General de los Centros de Internamiento para Menores Infractores”, Art. 10.51 Véase: Ibíd, Arts. 17 – 22.

los CIS, se presentan en la Tabla 14. Obsérvese que la mayoría se encuentran acusados o acusadas de “Homicidios”, con un 39.4% del total; porcentaje seguido por un 35% acusados de delitos de “Extorsión”. Ello puede ser un reflejo de los principales delitos que tienen incidencia en el país.

La mayoría de adolescentes y jóvenes son atendidos en el CIS de “Tonacatepeque” (en 44.6%) y en el CIS “Sendero de Libertad” (25.7%); es decir, que en su mayoría de trata de personas afines a la Mara Salvatrucha, en el caso del primer CIS; o bien, personas que no tienen afinidad pandilleril o anteriormente formaron parte de dichas agrupaciones, en el caso del segundo CIS.

La ejecución y supervisión de medidas de internamiento aplicadas por los Juzgados de Menores y Ejecución de Medidas al Menor por parte del ISNA, implica que los CIS deben de poseer programas que contribuyan a su formación integral y a su inserción a su familia, su comunidad y su sociedad. Se pretende además que dichos programas contribuyan a que las y los adolescentes y jóvenes que ingresan a los CIS reincidan en conductas de riesgo que les lleven a cometer hechos delictivos50.

Los programas consisten en formación académica, formación vocacional, recreación, atención médica, cultura, y atención psicosocial, entre otros51, los cuales contribuyen a garantizar sus derechos contemplados en la Convención Sobre los Derechos del Niño y la LEPINA. Cabe mencionar que dichos programas son desarrollados por personal técnico y operativo de los Centros; así, como por otras instituciones gubernamentales y no gubernamentales que prestan apoyo en beneficio de la población con medida socioeducativa de internamiento.

40BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

Tabla 14. Adolescentes y jóvenes atendidos en los CIS, según delito cometido. Enero – marzo, 2013

Fuente: Sistema de Información para la Infancia, 2013.

* Bajo la categoría “Otros” se engloban los siguientes delitos: “Resistencia, encubrimiento y eva-sión” (0.1%); “Receptación” (0.1%); “Fabricación, Potación, Tenencia de Explosivos Artesanales” (0.1%); “Fabricación, portación o conducción ilegal de arma de fuego artesanal” (0.1%); “Contra-bando” (0.1%); y, “Amenazas” (0.1%).

Delito cometido CIS El Espino

CIS Sendero

de Libertad

CIS Tonacatepequ

e

CIS Femenino

Total %

Homicidios 73 86 159 19 337 39

Extorsión 37 65 151 47 300 35

Robos 15 17 16 2 50 6

Violación y agresiones sexuales

5 26 5 1 37 4

Comercio, posesión, tráfico y tenencia de drogas

9 7 13 7 36 4

Tenencia, portación o conducción ilegal de armas de fuego

15 0 3 1 19 2

Tenencia, portación o conducción de armas de guerra

0 2 13 2 17 2

Asociación ilícita y pertenencia a maras

9 1 6 0 16 2

Secuestro y Privación de libertad

1 6 3 3 13 2

Hurtos 1 6 6 0 13 2

Lesiones 0 2 0 3 5 0.6

Incumplimiento de medida

0 0 4 0 4 0.5

Feminicidio 1 0 0 2 3 0.4

Otros* 1 2 3 0 6 0.6

Total 167 220 382 87 856 100

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

41BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRAL

Año 3 - No.9 • Enero-Marzo 2013

52 Véase: LEPINA, Art. 181; “Ley de vigilancia y control de ejecución de medidas al menor sometido a la Ley Penal Juvenil”, Art. 5. 53 Véase: “Ley Penal Juvenil”, Art. 17 – 21; y, “Ley de vigilancia y control de ejecución de medidas al menor sometido a la Ley Penal Juvenil”, Arts. 10 y 11.

Tabla 15. Adolescentes y jóvenes atendidos por el Departamento de Programas en Medio Abierto, según rango de edad y Unidad Regional que les brinda atención.

Enero - marzo, 2013.

Fuente: Sistema de Información para la Infancia (SIPI). ISNA 2013.

Rango de edad

Unidad Central/Paracentr

al

Unidad Occidental

Unidad Oriental Total

F M Total F M Total

F M Total

F M Total %

De 12 a < 14 0 4 4 0 3 3 0 0 0 0 7 7 1

de 14 a < 16 años

2 35 37 2 10 12 2 8 10 6 53 59 8

de 16 a < 18 años

19 130 149 5 58 63 5 52 57 29 240 269 36

> 18 años 21 225 246 5 77 82 6 74 80 32 376 408 55

Total 42 394 436 12 148 160 13 134 147 67 676 743 100

Departamento de Medidas en Medio Abierto

Este Departamento se encarga de brindar apoyo técnico (en el área de trabajo social, psicología y educación) a las y los adolescentes y jóvenes que se encuentran con medidas alternativas al internamiento (orientación y apoyo sociofamiliar; Imposición de reglas de conducta; Servicios a la comunidad; y, Libertad asistida) .

Por otra parte, al igual que en los CIS, los equipos técnicos deben informar al Juez o Jueza respectiva cualquier incidente que acaeciera a las y los adolescentes y jóvenes a los cuales se les brinda seguimiento; y además, deben informar trimestralmente los avances o retrocesos por parte de la o el adolescente o joven en el proceso de inserción social, para que el Juez o la Jueza valore la posibilidad de cesar o cambiar la medida socioeducativa impuesta.

La Tabla 15 muestra la cantidad de población atendida en cada una de las Unidades Regionales del Departamento de Medidas en Medio Abierto. Nótese cómo el 91% de la población atendida es de sexo masculino y el 59% es atendida en la zona Central y Paracentral. Por otra parte, al igual que en el caso de los CIS, el Departamento de Medidas en Medio Abierto atiende a jóvenes que ya han cumplido los 18 años; ello, debido a la falta de una institución que asuma la responsabilidad de brindar seguimiento a dicha población.

42BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

Tabla 16: Adolescentes atendidos por el Departamento de Programas en Medio Abierto, según delito cometido y Unidad Regional que les brinda atención.

Enero - marzo, 2013.Delito cometido Unidad

Central y Paracentra

l

Unidad Occidenta

l

Unidad Oriental

Total %

Extorsión 171 58 64 293 39

Comercio, posesión, tráfico y tenencia de drogas

68 40 14 122 16

Violación y agresiones sexuales 54 20 20 94 13 Homicidios 36 16 13 65 9 Tenencia, portación o conducción ilegal de armas de fuego

30 9 4 43 6

Asociación ilícita y pertenencia a maras

31 3 5 39 5

Tenencia, portación o conducción de armas de guerra

17 5 12 34 5

Robos 14 6 5 25 3

Trafico de objetos prohibidos en Centros Penales

3 0 3 6 1

Secuestro y Privación de libertad 3 0 2 5 1

Lesiones 4 0 1 5 1

Fabricación, Portación, Tenencia de Explosivos Artesanales

1 2 2 5 1

Hurtos 1 0 2 3 0.4 Otros* 3 1 0 4 0.4

Total 436 160 147 743 100 Fuente: Sistema de Información para la Infancia (SIPI). ISNA 2013.* Bajo la categoría “Otros” se engloban los siguientes delitos: “Uso y tenencia de documentación falsa” (0.1); “Resistencia, encubrimiento y evasión” (0.1); “Incumplimiento de los deberes de asis-tencia económica” (0.1); y, “Contrabando” (0.1).

Los delitos por los cuales son atendidos las y los adolescentes y jóvenes que son atendidos en las Unidades Regionales del Departamento de Medidas en Medio Abierto son, principalmente, por los delitos de “Extorsión” (39.4%) y “Comercio, posesión, tráfico y tenencia de drogas” (16.4%). Al contrario que en la Tabla 14, en este Departamento los delitos de “Homicidios” se ubican en el 4º lugar (con un 8.7%), lo que puede reflejar una mayor punición para con ciertos delitos que para con otros.

Ahora bien, si en caso dado dichos entornos fueran nocivos para su interés superior, pueden existir otras alternativas que no dañen tanto su proceso de desarrollo de su personalidad. De manera, que se debe potenciar más las medidas de libertad asistida, en pro de dicho interés superior.

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

43BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRAL

Año 3 - No.9 • Enero-Marzo 2013

EntidadesLa entidades de Atención se encuentran determinadas por lo que dicta la LEPINA, especí-ficamente en lo que se refiere a lo referente a la Red de Atención Compartida (RAC), esta debe ser supervisada y coordinada por el ISNA, quienes deben dirigir su actuar según los parámetros establecidos en las normativas nacionales e internacionales.

Las Entidades de Atención ejecutan una serie de programas encaminados a favorecer el pleno goce de los Derechos de las niñas, niños y adolescentes, todo bajo los principios de-terminados en la LEPINA especialmente los de Corresponsabilidad e Interés Superior.

54 La cantidad de Entidades registradas en el Sistema de Información para la Infancia SIPI, es de 204, las cuales desarrollan un total de 794 programas.55 Sistema de Información para la Infancia, 2013.

Tabla 17. Entidades registradas en el ISNA, según tipo de programa que ejecutan. Enero – marzo 2013.

Fuente: Sistema de Información para la Infancia, 2013.

Tipología de programa Cantidad %

Prevención 480 61

Centro de Atención Inicial 193 23

Restitución de Derechos 75 9

Otros programas 20 3

Programas Especializados 21 3

Hogar de Atención Inicial 5 1

Total 794 100

Tenemos que la mayoría de programas que ejecutan las Entidades de Atención se orientan a la prevención (61%), solo el 9% de esos programas realizan acciones encaminadas a la restitución de los derechos de las niñas, niños y adolescentes vulnerados en sus derechos. (Tabla 17).

La Red de Atención Compartida – por ahora escasamente organizada – debe convertirse en la instancia por medio de la cual las Entidades de Atención deberían ser orientadas a fin de – como dice la LEPINA – “garantizar la mejor cobertura nacional y local, evitar la dupli-cación de esfuerzos y servir de manera eficaz y eficiente a la protección de los derechos de la niñez y adolescencia” (Artículo 170 LEPINA).

Una buena cantidad de Entidades54 centran sus esfuerzos en brindar atención a niñas y niños con edades propias de la Educación Inicial (0 a 7 años de edad), estos Centros de Atención Inicial ocupan el 23% del total de programas. (Tabla 17)55.

44BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

El 80.4% de los programas desarrollados por las Entidades de Atención tienen como sostén institucional a un Organismo No Gubernamental; esto evidencia que el esfuerzo guberna-mental es escaso, sumando el 12.2% del total, este repartido entre las instituciones públicas como Ministerios, Autónomas, etc. (3.9%) y las municipales (8.3%) .

56 ISNA. Boletín Estadístico Trimestral (octubre – diciembre 2013). 57 Para el caso, el trimestre inmediato anterior (octubre – diciembre 2012), contabilizaba 858 programas y la misma cantidad de Entidades de Atención que el trimestre en estudio.

Tabla 18. Entidades registradas en el ISNA, según sector al que se dirige el Programa, Proyecto o Centro. Enero – marzo 2013.

Sector al que va dirigido el programa Cantidad %

Urbana 319 40

Rural 339 43

Urbano-Rural 136 17

Total 794 100

Fuente: Sistema de Información para la Infancia, 2013.

La Tabla 18 nos muestra el sector al que va dirigido el programa, evidenciando que existe una similitud en cuanto a las cantidades que se dirigen a la zona urbana y a la rural, la diferencia entre estas no es significativa, podemos interpretar lo anterior como que existe una cobertura similar entre la zona rural y la urbana, al menos en cuanto a la cantidad de programas que se desarrollan en las mismas; existen otros programas, que constituyen el 17% que orientan sus programas hacia ambas zonas y, es lo que se ha denominado “urba-no – rural”.

En relación al trimestre anterior (octubre – diciembre 2012), la cantidad de programas dirigidos a la zona urbana aumentó y los dirigidos a la zona rural y urbano – rural disminu-yeron56; de igual modo, la cantidad de programas disminuyó57.

La Tabla 19 nos indica la cantidad de niños, niñas y adolescentes que son atendidos en los programas ejecutados por las Entidades de Atención, específicamente aquellos programas vinculados con las medidas de protección, las niñas son siempre las que en mayor cantidad son atendidas, para el caso el 53% del total fueron niñas o adolescentes mujeres; el rango de edad que presenta la mayor cantidad de atendidos y atendidas es el que va de los 12 a los 15 años de edad, siempre las niñas y adolescentes mujeres son las más atendidas.

Para el caso de las y los adolescentes (12 – 18 años), estos y estas constituyen el 54% del total de atenciones, por el contrario las niñas y niños con edades entre los 0 y los 3 años son

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

45BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRAL

Año 3 - No.9 • Enero-Marzo 2013

Tabla 19. Perfil sociodemográfico de las niñas, niños y adolescentes atendidos y atendidas en Acogimiento Institucional en Entidades registradas en el ISNA.

Enero – diciembre 2013.

Fuente: Sistema de Información para la Infancia (SIPI). ISNA 2013.*156 casos no poseen información relacionada a su procedencia.**605 casos tiene información en el Formulario de familia, los porcentajes están calculados en base a esa cantidad. ***Población mayor de 7 años es: 1189, de estas 633 niñas y 556 niños.****Para otros incluye: Madrastra, padrastro, abuela, abuelo, hermanos, otras personas, esposo/a o hijos.

Población atendida Niñas % Niños

% Total

692 53 607 47 1299 0 a 3 15 60 10 40 25 3 a 6 28 54 24 46 52 6 a 9 66 50 66 50 132 9 a 12 137 52 125 48 262 12 a 15 181 52 169 48 350 15 a 18 190 55 155 45 345 18 y más 75 56 58 44 133

Procedencia* Población del área Urbana 469 53 414 47 883 Población del área Rural 138 83 122 47 260 Población del AMSS 195 55 161 45 356

Ambiente socio-familiar **

Población en condiciones sanitarias precarias de la vivienda

256 56 205 44 461

Población >7 años que no tienen escolaridad***

135 50 137 50 272

Institucionalización Promedio en meses de institucionalización en Centros de Protección

91.95 94.72

93.25

Con quien vive el Niño, Niña y Adolescente

Niñas % Niños

% Total

Población que convive con madre 90 14.66 77 12.54

167

Población que convive con padre 13 2.12 14 2.28 27 Población que convive con ambos 52 8.47 26 4.23 78

Población que convive con otros**** 159 25.90 152 24.76

311

Población que vive solo 12 1.95 10 1.63 22

los que presentan la menor cantidad de atenciones (2%), en este rango de edad se presenta la misma característica en relación a que las niñas son las más atendidas. (Tabla 19).La misma tabla nos muestra que la mayoría de las niñas, niños y adolescentes atendidos y

46BOLETÍN ESTADÍSTICO TRIMESTRALAño 3 - No. 9 • Enero-Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia

atendidas por los programas, específicamente los relacionados a la ejecución de las medi-das de protección, proceden del área urbana (68%), solo el 20% proviene del área rural58; es importante señalar que de los atendidos y atendidas el 27% provienen del área metropo-litana de San Salvador o lo que es lo mismo de los municipios de San Salvador, Soyapango, Apopa, Mejicanos, Santa Tecla, Ciudad Delgado, Ilopango, Tonacatepeque, San Martín, Cuscatancingo, San Marcos, Ayutuxtepeque, Antiguo Cuscatlán y Nejapa, estos 14 munici-pios de 2 departamentos reúnen a casi dos millones de personas59, la mayoría menores de edad.

Es importante señalar que del total de los atendidos y atendidas el 92% son mayores de 7 años de edad, de estos el 23% no se encuentran escolarizados (Tabla 19), tomando en cuen-ta que ya deberían encontrarse por lo menos inscritos en los programas de educación bási-ca, la no asistencia a los mismos puede representar una franca vulneración al derecho a la educación de las niñas, niños o adolescentes, obstaculizando con esto su desarrollo integral.

Al referirnos a los programas que se vinculan con la ejecución de las medidas de protección, debemos hacer mención del tiempo que permanecen las niñas, niños y adolescentes bajo medidas de acogimiento institucional, los niños y adolescentes hombres son los que más tiempo se someten a estas medidas, llegando a permanecer casi 8 años bajo el acogimiento institucional (Tabla 19); sin embargo, la diferencia entre ambos sexos no es significativa.

La institucionalización por largos periodos puede ocasionar serias complicaciones para el desarrollo integral de las niñas, niños y adolescentes, para sus relaciones personales futuras y en general puede constituir un tropiezo para que los y las menores de edad puedan gozar de sus derechos plenamente.

En relación con el periodo inmediato anterior, la población que es atendida en los progra-mas relacionados con la ejecución de medidas de protección y que viven solo con su madre, solo con su padre o que viven con otros se redujo mínimamente (Tabla 19); por el contrario, las niñas, niños y adolescentes que viven solos o solas aumentaron significativamente en relación al periodo anterior.

Los datos de la Tabla 18 en relación a con quien viven las niñas, niños o adolescentes, nos permite reafirmar que las mujeres madres son las que en mayor cantidad se ocupan de la crianza de las y los menores de edad; es importante señalar que el 51% de las y los casos que poseen información sobre su familia, viven con otras personas, estas pueden ser abue-la, abuelo, hermanos, hermanas, tíos, tías, otros. solo el 4% reside exclusivamente con su padre.

58 El 12% de los casos no poseen información sobre la procedencia de las niñas, niños y adolescentes atendidos y atendidas en los programas.59 Dirección General de Estadísticas y Censos (DIGESTYC), “Estimaciones y Proyecciones Municipales de Población 2005 – 2020”. San Salvador, El Salvador. 2009.

Instituto Salvadoreño para el Desarrollo Integral de la Niñez y la Adolescencia

Subdirección de Investigación y EstadísticasDepartamento de Investigación

Avenida Irazú y Final Calle Santa Marta, Col. Costa Rica No.2 San Salvador,El Salvador, Centroamérica.PBX: (503) 2213-4700

www.isna.gob.sv

Boletín Estadístico Trimestral Año 3 - Nº. 9 Enero - Marzo 2013

Derechos de la Niñez y la Adolescencia