Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

43
1 P OLONIA HUELE A FLORES Entrevista a Katty Kowaleczko LA TIERRA QUE SE ABRE Faceta desconocida de Puerto Montt Dorota Stańczyk ENIGMAS DE LA VIDA COTIDIANA Monika Trętowska Embajada de Polonia en Santiago de Chile BOLETÍN

description

 

Transcript of Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

Page 1: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

1

POLONIA HUELE

A FLORES Entrevista a Katty Kowaleczko

LA TIERRA QUE SE ABRE

Faceta desconocida

de Puerto Montt

Dorota Stańczyk

ENIGMAS DE LA

VIDA COTIDIANA

Monika Trętowska

Embajada de Po lon ia en S a n t i a g o d e C h i l e

BOLETÍN

Page 2: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

2

INTRODUCCIÓN

DETENTE, PIENSA

“ Vivimos más, pero menos

precisos y con frases cor-

tas” escribió en su poema

“No lectura” la poeta y premio

Nobel polaca Wislawa Szym-

borska. Estas palabras reflejan

adecuadamente la locura de

nuestros tiempos, su falta de re-

flexión y superficialidad. Vivi-

mos una época en la cual nos

resulta cada vez más difícil

“detenernos” y encontrar un

momento de reflexión e intros-

pección. Los seres contemporáneos no quieren esperar. Sin considerar en qué dirección

las vicisitudes de la vida los llevan, enfrentan una cantidad enorme de decisiones y eligen

dentro de una diversidad sin fin. ¿Es una razón para alegrarse? No estoy tan segura. Esta-

mos sin armas frente a tantas posibilidades, nos damos cuenta de que el mundo es bas-

tante imprevisible y inconsciente del rumbo en que va. Vale la pena pensarlo quizás dan-

do un paseo al anochecer por la avenida Alameda en el centro de Santiago: durmiendo en

la niebla, vacía, poco real como una imagen de enseño. También podemos tratar de bus-

car la respuesta en el “Libro de las Preguntas” de Pablo Neruda, poeta chileno, también

premio Nobel: “¿Sufre más el que espera siempre que aquel que nunca esperó a nadie?”

Aleksandra Piątkowska

Embajadora de Polonia en Chile

Page 3: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

3

CONTENIDOS

4-9 Entrevista: Katty Kowaleczko

10-12 Enigmas de la vida cotidiana Monika Trętowska

14-17 Faceta desconocida de Puerto Montt Dorota Stańczyk

18-25 Tierra, que se abre

26-27 Rescato los quiltros chilenos Jolanta Polk

28-29 Música, creadora, artista Anna Wiesner

30-32 Mi pequeña España Karolina Bodych

33 Guardia presidencial de La Moneda Nano Fernández

34-35 Sabores de Polonia Cristobal del Castillo Camus

36-40 Comprar, comer, encontrar

41 Prensa chilena sobre Polonia

42 Bienvenidos al final del mundo

43 Calle sin salida

EMBAJADA DE POLONIA EN SANTIAGO

Publicado por Embajada de la República de Polonia en Santiago de Chile Editores: Jacek Piątkowski [email protected] Anna Kowalczyk [email protected] Monika Trętowska [email protected] Hellen Izarra (correción) Agata Sękowska (asistente de traduc-ciones) La foto de la portada: Magdalena Owsiak Photography Www.magdaowsiak.com Mar del Plata Providencia-Santiago tel (0056-2) 2 204 12 13 [email protected] http://santiagodechile.msz.gov.pl https:twitter.com/PLenChile http://www.facebook.com/ambasadachile

Page 4: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

4

POLONIA HUELE A FLORES

‘La verdad es que no sé cuál es el límite, en mi casa, de donde termina lo chileno y comienza lo polaco y viceversa. Esta todo mezclado’. La popu-lar actriz chilena Katty Kowaleczko conversa con Monika Trętowska acerca de Polonia y sus raíces polacas.

CONVERSA MONIKA TRĘTOWSKA

ENTREVISTA

Page 5: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

5

¿ Se siente Polaca?

Tengo una parte muy fuerte polaca. En Polonia, tenemos contacto con una familia. Mi pa-pá falleció en el año 1988 (Chile), pero fue repatriado. Esta entera-do en su lugar natal, en Lublin. Cada vez que tengo la oportuni-dad de ir a Europa, siempre, pa-so por Polonia. Es un lugar que me acomoda y que gusta, mu-cho, a su gente polaca. ¿Por qué?

Porque la gente es muy acoge-dora. Porque los polacos agrade-cen cuando uno habla algo de polaco. Tienen mucho sentido de humor y de cierta forma se pare-cen un poco a los chilenos: en lo de gozadores, en lo bueno para conversar. Por el hecho que po-laco se habla solo en Polonia, ellos saben que hay muchas otras formas de comunicarse, no solamente la verbal. Por ejem-plo: la mímica, cuando estás en la reunión y uno no entiende y no esta słownik (risa) (diccionario – red.) o los dibujos. Cuando uno quiere comunicarse no hay límites. En Polonia, en comparación con otros países, hay una gran disposición a en-tender los extranjeros. ¿Habla polaco o solo alguna palabras?

No, solo algunas palabras. Aun-que, tengo muchas ganas de aprender. Cuando voy para allá me aplico, pero aquí lamentable-mente no tengo con quien ha-blar, mi vocabulario se va per-diendo y es difícil mantenerlo. ¿tiene alguna palabra favori-ta en polaco?

Si: Dżdżownica (risa) (lombriz –

red.) La encuentro Graciosa! ¿Su papá le hablaba polaco cuando era chica? ¿ le enseña-ba?

Sí, me enseñaba algunas pala-bras. Mi papá cuando llegó a Chi-le en los años 50 dijo: aquí en Chile quiero hacer mi vida de nuevo. Quiero ser feliz. Todavía tengo la oportunidad’. En la casa si, él hablaba polaco, él tenia al-gunos amigos polacos que le ve-nían a ver, pero a mí me enseño muy poquito. Me dejo en un co-legio donde enseñaban la lengua castellana. Después tuve un ami-go con quien aprendí un poco, una amiga polaca que me hizo clases antes de un gran viaje a Polonia, también. Su padre era polaco pero, también, pasó un tiempo difí-cil en su país por la guerra ¿Cómo le hablaba de Polonia? ¿La extrañaba? Aquí en Chile se dedicó al arte y pintura.

Yo, creo que mi papá, aquí, en Chile estuvo completamente fe-liz, tuvo familia, trabajo, lo dis-fruto, recorrió y conoció Chile, lo encontró muy bonito para vivir, lo valoró muy bien. Sin embargo, su nostalgia fue siempre palpi-tante, sobre todo sabiendo que no podía volver. Uno de los sue-ños de papá era ¡volver! Incluso, su mandato fue: una vez que falleciera, quería volver. Aunque fuera en una ánfora. Todo, para estar al lado de su madre, mi abuela, y ¡así! se tuvo que hacer. Hay mucha nostalgia que impul-sa a ¡hablar! ¡a recordar! ¡a evo-car!, ¡colores!, ¡sabores!, ¡olores, que uno no se las puede traer en un viaje! y esa nostalgia es latente y punzante. Acá, ha-bían cosas que le transportaban a Polonia por ejemplo: un pan

negro, la mantequilla que comía. La disfrutaba! ¡Oh, si que la dis-frutaba! pero con una añoranza muy profunda que siempre fue comentada. Siempre escuche un papá polaco. El papá nostálgico. ¿Cuándo usted visitó Polonia por primera vez, como fue la confrontación del prejuicio con la realidad polaca? ¿Le sorprendió de alguna forma?

Cuando fuimos, por primera vez, me recibió mi medio hermano que vive allá con su familia. El viaje superó todas nuestras ex-pectativas: los lugares, los colo-res, la comida de la que hablaba papá, la comida que le enseñó a hacer a mi mamá acá. El recibi-miento de la gente, como nos trataban. A veces, solíamos salir solas. Una vez, buscamos poczta (correo-red.) y nos desorienta-mos en Varsovia. De repente, una persona que nos observaba y con el mapa en la mano, nos pregunto, ¿qué buscan? Vengan! Amablemente, nos encamino dos cuadras hacia nuestra direc-ción y después se marcho. Recorrimos, mucho, Polonia. Mi hermano tomo vacaciones y en conjunto estuvimos recorrién-dola, más de, un mes. Entonces, fue un viaje intenso a lugares bellos, a lugares históricos de mi familia y lugares históricos pola-cos, también.

EN POLONIA, EN COMPARACIÓN CON OTROS PAÍSES, HAY UNA GRAN DISPOSICIÓN A ENTENDER LOS EXTRANJEROS.

EMBAJADA DE POLONIA EN SANTIAGO

Page 6: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

6

Yo también recuerdo los paí-ses por sus sabores y colores más que nada. ¿Cuales tiene Polonia para usted?

Nunca he vivido el invierno po-laco y no sé si quiero ir (risa). He estado en primavera y oto-ño. Pero en general los colores son brillantes. ¡Hay olor a hu-mo! ¡hay olor a muchas flores! allá, se valoran muchos las flo-res, sobre todo en el verano, son olores frescos. En las casas hay olor a comida, a los aliños: la pimienta, la páprika que se usa mucho allá. Echo de menos el ají que allá no se ocupa mu-cho pero si hay cosas que son de cada país. ¿Encontró otras diferencias?

En Polonia la población está muy bien repartida en el área del territorio, no como aquí en Santiago de Chile. Uno viene a Santiago y es una selva ruidosa, hay mucha gente y uno choca. Allá esta todo mucho más orga-nizado. Bueno, tiene una geo-grafía que es, mucho, más ama-ble también. Uno siente la diferencia de na-cer en un continente nuevo, un continente que es joven. Acá en Chile, la primera vez cuando

vino mi hermano le llevamos a lugares históricos y cuando es-tuvimos acá dijimos, ¡qué histo-ria!, la historia es muy nueva en América. Un edificio de 1800 acá es algo absolutamente nor-mal. En cambio, para nosotras ver cosas más antiguas, de un par de siglos, como la famosa grúa de madera en Gdansk a mi me impactó. Es del año 1444! Acá no existíamos todavía como lo que somos hoy. Eso llama mucho la atención. ¿Tiene algún lugar favorito en Polonia?

Siempre cuando voy a Polonia visito Lublin, el cementerio de Santa Agnes, donde está ente-rrado mi papá. Otros lugares favoritos … hm!!, son muchos: Gdańsk, Gdynia, Szczecin, Var-sovia, Cracovia es muy precioso! Es que todo es muy bonito. Ade-más son lugares con mucha acti-vidad durante el día, durante la noche, hay muchos conciertos en todas partes. Hay lugares bellos que aquí nadie sospecha como esa mina de sal que esta cerca de Cracovia (Wieliczka – red). Es una joya, es indescripti-ble. Sabes, me llama mucho la aten-

ción como los polacos recuer-dan las malas experiencias. Es algo que acá, nosotros, trata-mos de olvidar, allá lo tienen muy presente. Nos conmovía mucho ver en las esquinas las placas de la guerra donde fue-ron asesinadas las personas civi-les y que están vivos hasta el día de hoy con flores, con velas. Es para no olvidar. ¿Sigue celebrando algunas tradiciones polacas hoy en día con su familia?

Hay unas botellas de vodka que están guardadas como ¡hueso santo! (reliquias) Recién pasó el 3 de mayo, el Día de la Constitu-ción en Polonia, y en mi casa hay un habito de tomar un corto de vodka haciendo un brindis ¡na zdrowie! (salud-red.) por la constitución. Compramos una botella de vodka polaca allá, a nosotros nos gusta el vodka, y creemos que es mucho mejor que el sueco, que es muy famo-so acá en Chile. ¡Leeejos, el vod-ka polaco el mejor! Cuando re-galo vodka a mis amigos, es vodka polaca!. ¿Pero costumbres? Hay costum-bres que están arraigadas y que permanecen hasta el día de hoy, las costumbres de Pascua, de Navidad, la costumbre de andar en la casa sin zapatos y ponerse pantuflas. No es un hábito chi-leno. Mi hija además pinta hue-vitos, busca la primera estrella, recibimos la comunión en Navi-dad. Son cosas que se mantie-nen hasta el día de hoy. La verdad es que no sé cuál es el límite?, en mi casa, de donde termina lo chileno y comienza lo polaco y viceversa. Esta todo mezclado.

ENTREVISTA

Page 7: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

7

AMBASADA RP W SANTIAGO DE CHILE

SIEMPRE CUANDO VOY A POLONIA VISITO LUBLIN, EL CEMENTERIO DE SANTA AGNES, DONDE ESTÁ ENTERRADO MI PAPÁ. OTROS LUGARES FAVORITOS … HM!!, SON MUCHOS: GDAŃSK, GDYNIA, SZCZECIN, VARSOVIA, CRACOVIA ES MUY PRECIOSO!

EMBAJADA DE POLONIA EN SANTIAGO

Page 8: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

8

¿Hay algo que siempre se ase-gura traer de Polonia?

Cigarrillos Sobieski. Yo fumo, y siempre, me gusta andar con Sobieski. Siempre traigo, tam-bién, de suvenir unas cajas de madera artesanal y unos pape-les recortados, de colores, muy bonitos. ¿Cómo se llaman? ¿Wycinanki?

Si, wycinanki! con los gallitos, las flores, son muy bonitas y muy apreciados, como regalos, por mis amigos. Eso es lo que siem-pre me aseguro de traer.

¿Y su hija ha ido a Polonia?

No, no todavía y es una deuda que tenemos pendiente, pero está con muchas ganas de ir. Mi hija nació, mucho, después que falleció su abuelo, pero ella tiene una convivencia diaria, muy fuerte, con él, con lo que se ha-bla de su abuelo, con las cosas de su abuelo en la casa, tiene la misma tendencia artística. ¿También pinta?

Le gusta pintar, quiere estudiar arte. Me pregunta, de repente, donde estudiaba mi papá? para irse a estudiar allá. Mi papá fue una persona que marco, mucho, mi infancia; y yo como mamá, como no sabía ser mamá, imité lo que hicieron conmigo, en mi infancia. No sé si es bueno o ma-lo, pero los resultados son: una hija que le gusta escribir, le gus-ta leer, le gusta la literatura, le gusta el arte. Además se le habla del teatro. El otro día vimos un

dato de investigar un afiche po-laco. Es que acá, hacer un afiche es un medio de información, na-da mas! en Polonia es un arte!, además, reconocido en todas las partes. Acá, también, han llega-do unas exposiciones preciosas de afiches polacos. Entonces, claro! yo sin querer, también, la incentivo a que ponga atención a lo que está pasando allá. A ver como en otros lugares se desa-rrollan las cosas, en distintas for-mas para lograr el mismo objeti-vo. Y creo que eso es bueno también. ¿Y usted tiene más de su papá o su mamá?

No sé (risa). En mi trabajo me tildan muy de Polaca porque soy de horario, soy ordenada. No sé, quizás es problema de mi gremio de actores que son un poco des-ordenados y son más etéreos, más volados. Yo creo que tam-bién soy muy chilena. Disfruto

EN MI TRABAJO ME TILDAN MUY DE POLACA PORQUE SOY DE HORARIO, SOY ORDENADA... YO CREO QUE TAMBIÉN SOY MUY CHILENA.

ENTREVISTA

Page 9: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

9

mucho y estoy muy orgullosa de donde nací, de la artesanía chi-lena, del folklor bonito, me gus-ta bailar cueca. Tuve un placer de bailar mazurki una vez cuan-do tuve una presentación con mi hija y también lo disfrute mu-cho. Bailamos con nuestros tra-jes cracovianos y todo! Mira, lo disfruto todo, no tengo una predilección, por algo nací acá. Me habría encantado qui-zás haber podido nacer en Polo-nia donde hay una tendencia teatral muy fuerte, muy marca-da. El teatro allá es impactante, el trabajo que hacen, los acto-res, los directores, las puestas en las escenas. Pero por algo me tocó hacer un teatro acá que elegí como opción de vida y que también disfruto mucho. No vi-vo con añoranza, vivo con ganas de viajar, con ganas de reencon-trarme con espacios, con gente, pero eché mis raíces acá, tengo mi familia acá. Hablando del arte, ¿hay al-gún proyecto con el teatro polaco en el camino, cierto?

No vas sacar nada de mi por mi superstición! (risa). Bueno, es verdad. Polonia tiene grandes dramaturgos, grandes directores que son maravillosos. El año pasado, me toco viajar a La Ha-bana y me encontré con un fes-tival de teatro polaco. Después, también, me pasó lo mismo en México y España y dije ¡acá en Chile teatro polaco no llega! Por eso me gustaría hacer una pro-ducción, comprar los derechos y empezar a mostrar acá lo que es el teatro polaco, los drama-turgos polacos que no se cono-cen. Hace poco, hubo una actividad de lectura, en la comuna donde vivo. Se trataba que, la gente

mayor debía acudir a colegios, para leerles a los jóvenes, cual-quier autor que quisieran. Yo lleve a Sławomir Mrożek, que me encanta, lo encuentro muy gracioso. Es una gran sorpresa porque ni alumnos ni profesores conocen este autor que tiene una gran trayectoria. Se sor-prender con las lecturas, inclui-do los profesores de filosofía me piden los datos y las editoriales donde conseguir los autores porque sirven como materiales de trabajo. Descubren cosas nuevas y lo quiero hacer, tam-bién, con el teatro polaco hace mucho tiempo. Ya han venido acá las compañías de teatro po-laco, trajeron trabajos preciosos y la gente quedó encantada, yo creo que hay espacio para darlo conocer. Lo primordial ahora, para mí, es conseguir una buena traducción al castellano. Estoy cruzando los dedos para que resulte. ¡Yo también!

¡Muchas gracias! Uno conoce aquí básicamente la historia de Polonia sufrida, de la última

guerra, no saben que pasó antes y de porque los polacos son co-mo son. Con ese patriotismo, con ese romanticismo, tan ague-rrido. La valoración que da un Polaco a un hecho de ser polaco de tomo y lomo. No hay infor-mación allá. Es fácil encontrar fotos de la Torre Eiffel, de la to-rre de Pisa, pero del Palacio de Zamkowy no. El Wawel, no sa-ben que es y cuando mis amigos van allá se quedan impresiona-dos y quieren quedarse a estu-diar en Wawel! Son lugares que a la gente chilena le encantaría ver.

Katty Kowaleczko (Katarzyna Helena Kowaleczko), conoci-da también como Katty Ko, una actriz chilena de ascenden-cia polaca. Su padre polaco, Tadeusz Kowaleczko, emigró a Chile después de la Segunda Guerra Mundial donde em-pezó su carrera artística. Sus dibujos eran publicados, entre otros, en ‘El Mercurio’. Empezó una carrera de modelo cuando tenía 15 años, participó también en diversos concursos de belleza. Desde su debut en la teleserie chilena ‘La invitación’ en el año 1987, y ha actuado en más de 30 series y películas. Su par-ticipación en la teleserie ‘Los 80’ le otorgó nuevamente gran reconocimiento. Kowaleczko es una animadora de programas en Canal 13. Tiene también su programa en Radio Imagina. Tiene una hija, Micaela.

NO VIVO CON AÑORANZA, VIVO CON GANAS DE VIAJAR, CON GANAS DE REENCONTRARME CON ESPACIOS, CON GENTE, PERO ECHÉ MIS RAÍCES ACÁ, TENGO MI FAMILIA ACÁ.

EMBAJADA DE POLONIA EN SANTIAGO

Page 10: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

10

ENIGMAS

D esde que vivo en Santiago he observado, con curiosidad,

esas diferencias de la vida cotidia-na en Chile. Momentos que desorientan a los turistas polacos, que desconcentran sus costum-bres. Cada día, en la calle, en la tienda, en el metro, etc. Aunque Polonia y Chile son sorprendente-mente similares, logré encontrar un par de situaciones, basadas en mis aventuras y en turistas extran-jeros perdidos. Aquí viene mi Top 10. Quizás resultará útil para aque-llos que planifican un viaje al país del vino y del desierto más árido del mundo.

¿A LA IZQUIERDA O A LA DERE-

CHA?

Para preguntarle la dirección a un chileno hay que prepararse a reci-bir la respuesta: ‘sube’ o ‘baja’. A menudo también podemos oír:

‘anda hacia las montañas’, lo que manda en este país metido entre los Andes y el Pacifico es la geogra-fía, por ende nuestro polaco ‘gira a la izquierda’ o ‘gira a la derecha’ cambia en referencia de las mon-tañas, en el horizonte. Si estamos en la calle donde se pueden ver las cumbres no hay problema, es una respuesta bastante lógica, pero si estamos en el subterráneo del me-tro sin conocer la ciudad la posi-ción de los Andes es un misterio para el pobre turista. Preguntar un par de veces por lo de la izquierda o la derecha puede dar resultados. Por ende no hay que perder la es-peranza.

HACER ‘BIP’ CON BIP

Hablando del metro, aquí también nos esperan un par de sorpresas. Olviden de preguntar por un ticket diario, semanal o mensual como lo

MONIKA TRĘTOWSKA

MONIKA TRĘTOWSKA Pe-riodista, viajera y corre-sponsal de la Radio Na-cional Polaca en Chile y América del Sur. Autora del blog: tresvodka.com

Hay países en el mundo donde por un simple beso en la calle podríamos ir a la cárcel; por regalar un reloj se puede ofender al dueño de la casa y con el popular gesto “OK” con el pulgar arriba buscarse un golpe. Cada sociedad tiene sus costumbres, las cuales pueden facilitarnos o dificultar nuestra estancia en dicho país, especialmente la primera vez. No hay que buscar muy profundo, la vida simple y cotidiana como compras o transporte puede desorientarnos un poco. ¡Cuántas veces un invitado extranjero en Polonia, se sorprendió con lo de dejar los zapatos en la entrada de la casa y andar sólo en calcetines o pantuflas! ¡Cuántas veces en Chile mis amigos se extrañaron cuando puse crema amarga en el pepino, haciendo mizeria, una ensalada polaca!

DE LA VIDA COTIDIANA

AMÉRICA LATINA A TRAVÉS DE MIS OJOS

Page 11: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

11

es en Varsovia. En Santiago fun-ciona la tarjeta BIP, la cual hay que cargar y pagar cada vez que uno sube al metro o al bus. No hay otra opción, podemos dejar de molestar a la pobre cajera del metro con las preguntas. Lo bueno es que después de hacer nuestro ‘bip’ podemos tomar un bus dos veces gratis aunque solo durante la siguiente hora.

METRO ROJO – METRO VERDE

¡Espera! ¡¿Por qué el metro no paró en mi estación?! ¡Estaba en la lista de paradas y acabamos de pasar por ella! Bueno, probable-mente viajas en la hora punta cuando cada línea tiene una luz roja o verde. No se trata de poner los trenes más lindos, sino de in-dicar que el metro va a parar es-tación por medio. Un sistema pa-ra facilitar el flujo de pasajeros. Subiendo hay que fijarse en el co-lor del vagón y el de nuestra esta-ción de destino... Los turistas apu-

rados para tomar avión o bus sa-ben bien que tan importante pue-den ser un par de minutos de una confusión.

EN LA FILA PARA... UN BUS

Filas para tomar Transantiago pueden ser una gran sorpresa pa-ra los polacos. Los chilenos espe-ran uno detrás de otro para subir al bus por la puerta del frente, y ¡sólo la del frente! A diferencia de Polonia, las puertas del medio y las de atrás sólo sirven para bajar. No es todo, algunas veces hay dos filas! Es mi reciente descubrimien-to de los alrededores de la esta-ción metro Los Leones en Santia-go: la primera fila es para la gente que quiere sentarse en el bus, la otra es para la gente que está dis-puesta a viajar de pie. Cuando ya se terminaron los asientos, la fila número dos empieza a subir. Es posible entonces llegar al parade-ro después de la primera fila y subir antes que ellos!

OLVIDEN DE PREGUNTAR POR UN TICKET DIARIO, SEMANAL O MENSUAL COMO LO ES EN VARSOVIA.

PARA PREGUNTARLE LA DIRECCIÓN A UN CHILENO HAY QUE PREPARARSE A RECIBIR LA RESPUESTA: ‘SUBE’ O ‘BAJA’

EMBAJADA DE POLONIA EN SANTIAGO

Page 12: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

12

UN ENIGMA CHILENO

Un verdadero enigma, para un turista extranjero, será la falta de horarios en las paradas de buses. No hay horas, no hay ru-tas, no hay nombres de los para-deros del recorrido... Lo que va-mos a encontrar es sólo el núme-ro del bus y su parada final. ¿Y qué pasa entre medio? Adivina o pregunta... La situación mejora, aunque sólo un poco, con la lle-gada del bus que tiene la lista de 4 o 5 paradas colgada en la ven-tana. ¡Pero eso es todo! Por lo que veo los chilenos viajan ‘de memoria’. ¡Qué misterioso siste-ma tienen!, se dan cuenta de esto cuando tienen que explicar-le a un extranjero ‘como llegar a...’. Lo que vale la pena tener en esta situación es la aplicación mapcity.com.

LOS TAXIS ESPECIALES

Si no metro y no bus ¿quizás un taxi entonces? Ojo con los colec-tivos, especialmente en las ciu-dades pequeñas. Los colectivos son taxis especiales que comien-zan su viaje cuando se llena todo el auto, es decir, cuando hay 4 personas que quieren ir al mis-mo barrio. Son más baratos que los taxis tradicionales, pero el viaje puede durar mucho más. ¿Cómo reconocerles? Si no hay una indicación en el paradero, la pista será las placas con nom-bres de barrios en el techo del taxi.

NÚMEROS POR TODOS LADOS

Haciendo compras en Santiago no se puede olvidar de tomar un número. No se trata sólo de lu-gares como correo, también los supermercados en la parte de los quesos o las carnes, o la farma-cia. Un turista desorientado que

espera infinitamente su turno es algo que veo muy a menudo ¡Sin número no hay compra!

HACER COMPRAS 3 EN 1

Una tienda de cosméticos, tam-bién, puede ser una aventura. Es allí donde descubrí uno de los sistemas chilenos más sorpren-dentes. Resulta que en las tien-das sin autoservicio, hay que pedirle al vendedor los produc-tos. Hay tres pasos para la com-pra: primero hay que elegir un producto con un primer vende-dor, después hay que ir con la boleta a la caja en la otra parte de la tienda y pagar, y al final retirar nuestro producto en el tercer lugar, y con un tercer ven-dedor. Para un turista polaco todo eso podría parecer una pérdida de tiempo pues en Polo-nia la compra es atendida por una sola persona. Yo trato de entender el sistema chileno co-mo una manera de que más per-sonas tienen trabajo.

INTERROGATORIO EN LA CAJA

Eligiendo una tienda con auto-servicio o ir a un supermercado se puede evitar la situación del punto anterior. Por otro lado aquí tenemos que estar prepara-dos para un interrogatorio. Cuando alguien no habla español puede ser difícil adivinar de que se trata esa entrevista si, solo compramos productos inofensi-vos como pan, queso o agua. La cajera entonces nos preguntará si acumulamos puntos de la tien-da, después si tenemos la tarjeta de miembro de la tienda y al fi-nal si queremos donar un par de pesos a alguna fundación de ca-ridad. Nada terrible al final ¡pero son muchas preguntas!

EL PISO DESPARECIDO

Ropa de mujeres esta en el se-gundo piso, dice alguien. Subes al segundo piso y encuentras ju-guetes para niños o ropa de de-porte ¿?. Es porque en Chile no existe el piso 0, como en Polonia. Ni en edificios ni en oficinas. La numeración empieza desde 1 no más. Por ende los chilenos en Polonia van a desorientarse de la misma manera, pero al revés. Van a terminar en un piso más abajo. No es un error en mate-mática de los turistas es, simple-mente, otra visión inmobiliaria.

Seguramente hay más diferen-cias chilenas que las menciona-das. La vida cotidiana de cada uno está llena de costumbres que ni siquiera las notamos. So-lemos hacer cosas de forma me-cánicamente, como los chilenos y sus viajes de memoria en los buses. Uno de los placeres más grandes en viajar es, entre otros, observar y descubrir en diferen-tes partes del mundo estas cos-tumbres, las maneras de organi-zar las cosas, sus soluciones y los distintos métodos a los nuestros. Así podemos aprender algo el uno del otro. Al final, diferente no significa peor.

HACIENDO COMPRAS EN SANTIAGO NO SE PUEDE OLVIDAR DE TOMAR UN NÚMERO. NO SE TRATA SÓLO DE LUGARES COMO CORREO, TAMBIÉN LOS SUPERMERCADOS EN LA PARTE DE LOS QUESOS O LAS CARNES, O LA FARMACIA.

AMÉRICA LATINA A TRAVÉS DE MIS OJOS

Page 13: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

13

AMBASADA RP W SANTIAGO DE CHILE

VISITA NUESTRO FACEBOOKA www.facebook.com/ambasadachile

Page 14: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

14

HAY QUE VER EN CHILE

P uerto Montt fue funda-da en el año 1853 por Vicente Pérez Rosales.

Construida por colonos ale-manes y chilenos, a la orilla del Seno de Reloncavi. En aquella época, ya, era obvio que estas tierras se converti-rían en el mayor centro de comercio del sur del país. To-do, gracias a la diversidad de peces y bosques intermina-bles que ofrece un sur desco-

nocido. Actualmente, aparte de su larga e interesante his-toria y su amplia gama de servicios que brinda a los tu-ristas, Puerto Montt, lamen-tablemente se convierte en un lugar de paso y nada más. Los visitantes suelen comen-tar que la única ventaja que tiene es: la de poder pasarla y dejarla, atrás, muy rápido. Pero Puerto Montt no es sólo el terminal de autobuses…

FACETA DESCONOCIDA DE

PUERTO MONTT Cada mañana, Puerto Montt se despierta frente a las aguas azules del Seno de Reloncavi y la Patagonia lejana. Esta ciudad lluviosa, la casa de marine-ros y pescadores es considerada muchas veces solamente como la puerta a lo que esconde el sur extremo de Chile.

DOROTA STAŃCZYK

Dorota Stańczyk, politóloga, vive

en Puerto Montt a partir del ene-

ro de 2012. Autora del blog

http://pewnegorazuwchile.co/

Page 15: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

15

Gota de agua en vidrio

Puerto Montt es una ciudad típica del sur de Chile. Eso signi-fica que la vida pasa mucho más lento que en la capital. En las calles no se ve ningún apu-ro. Los habitantes, cada día, se desplazan caminando al traba-jo, los niños y jóvenes en uni-formes van amodorrados a la escuela… De hecho, la ciudad se despierta cuando llega la temporada alta (entre los me-ses de noviembre – marzo). Diariamente, al puerto llegan barcos repletos de miles de tu-ristas; las calles se llenan y uno puede sentirse anónimo. Por ser una de las ciudades con ma-yor tasa de lluvia en el año, ca-da día soleado se celebra con entusiasmo, algo sorprendente en otras poblaciones. En esos días, cada jardín emana olor a carne asada, oyéndose las char-las de sus habitantes… Al pri-mer vistazo, Puerto Montt, puede parecer poco atractivo; pero al conocerla, profunda-mente, esa impresión desapa-rece. Su ubicación es extraordi-naria. Sus alrededores maravi-llosos hacen que aparte de ser un destino de excursión ideal, vivir ¡allá! sea todo un privile-gio.

Colonos, árbol más anti-guo y patache

El punto central de Puerto Montt es la Plaza de Armas. Ésta parte fue la más antigua, cuando se construía la ciudad. Lo que la distingue, de otras plazas chilenas, son sus jardi-nes. En su centro, se encuentra el monumento, en honor, a los inmigrantes alemanes, recor-dándoles a los turistas quienes

fueron los primeros habitantes y la importancia que tuvieron en cuanto a las tradiciones y costumbres del sur chileno. Al lado se encuentra la Catedral de Nuestra Señora del Carmen de Puerto Montt, levantada en el año1856 con estilo gótico. Para su construcción se usó el árbol más antiguo del mundo, el alerce. En uno de los cerros cercanos al centro, se encuen-tra otro monumento histórico: la Torre Campanario, que per-tenece al Colegio San Francisco Javier. Éste Jesuita, Lorento Wolter, rector del colegio de aquella época, tomó la decisión de construirla en el año 1893. A unos cuantos metros de la plaza, se encuentra la avenida Diego Portales. Una de sus par-tes forma el muelle. Desde allí, la vista a la bahía, a las islas cercanas y a la cordillera de los Andes es impactante. La alame-da que va a lo largo de la costa nos lleva al puerto más famoso de la ciudad, desde, donde sa-len los barcos hacia la ciudad de Aysén. También, podemos encontrar el mercado local An-gelmo, considerado el corazón de la ciudad. Después de la compra, uno puede relajarse en

los múltiples restoranes y de-leitarse con la ¡exquisita comi-da chilena! que ofrece la zona. Los platos sobresalientes son: los de mariscos frescos como el curanto, el plato tradicional de la isla Chiloé patache, pastel de jaiba y los pescados como la merluza, congrio y salmón.

Desde lo alto

En los tiempos pasados, los indígenas Mapuches nombra-ron a estas tierras Mellipulii, lo que en mapudungun quiere decir “Cuatro Cerros”. De he-cho, está fundada en laderas y cada sitio le da una vista mara-villosa, a cada ciudad de la re-gión. Existen tres miradores: el primero está ubicado a 400 metros del Ayuntamiento, el segundo cerro Miramar lo en-contraremos al lado del termi-nal de autobuses. Desde allá se puede contemplar la bahía de Angelmo y la isla Tenglo. En cambio, el tercer mirador y principal de la ciudad, está ubi-cado en el cerro más elevado de Puerto Montt, ofreciendo la mejor vista a los volcanes Osorno y Calbuco, la isla de Maillen y otros lugares excep-cionales.

EMBAJADA DE POLONIA EN SANTIAGO

Page 16: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

16

Rumbo a la Carretera Austral, pero antes…

La comuna de Puerto Montt está llena de pueblos e islas. La isla con mayor importancia es la de Tenglo. En su corazón se construyó el santuario que con-memora la visita del papa Juan Pablo II (1987). Una de las atracciones son los cruceros por la bahía que pasan cerca de las islas Maillen y Guar y que ofre-cen paisajes vistosos. Además, en Puerto Montt comienza la famosa y legendaria Carretera Austral (R-7). Antes de partir hacia la infinita Patagonia, vale la pena parar y conocer, por un rato, las aldeas y descansar en la playa. Los pueblos con, más,

encanto son la de Piedra Azul, Lenca o Metri.

Suena la música

Cada año miles de turistas par-ticipan en la, tal, llamada Ruta de las Tradiciones. Es un even-to cultural que acerca las cos-tumbres y maneras de vivir de los puertomontinos, a los visi-tantes y sus vecinos. Entre los meses de enero y febrero, cada sábado y domingo, se organizan las fiestas en varios puntos de la ciudad. En todas las partes se ofrecen los sabores excepciona-les de la cocina chilena, suena la música, se vende la artesanía regional… La fiesta significa, sobre todo, pasar un l tiempo

inolvidable. Otra actividad de verano se organiza en el Parque La Paloma, a 6 kilómetros del centro. En la superficie de 4 ha hay canchas, sitios para hacer un picnic y restaurantes. En in-vierno, principalmente en julio lleno de aguaceros, es reco-mendable ir a la Casa de Arte, Diego Rivera. Aquí, se desarro-llan los famosos Temporales Internacionales de Teatro. Este evento tiene, ya, una historia que se remonta hacia dos déca-das y la participación es gratui-ta. Además, durante todo el año la Casa de Arte organiza las exhibiciones de varios artistas chilenos bien conocidos y las exhibiciones temporales de los autores de todo el mundo.

HAY QUE VER EN CHILE

Page 17: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

17

Ponemos, en marcha, un nuevo ciclo de artículos que tienen como objeto motivarles a

viajar por el sur Chile. En la edición anterior les contestamos las preguntas más generales

como: ¿con qué medio de transporte viajar?, ¿dónde dormir? o ¿cómo planificar su

estancia en Chile? Esta vez intentaremos despertar su interés por las ciudades chilenas,

luchando contra los estereotipos que las rodean. Queremos presentarlas desde el punto de

vista de los oriundos de Puerto Montt. – pues, son los que ven y saben, más, que un

turista corriente. En todo caso, Santiago no es Chile.

EMBAJADA DE POLONIA EN SANTIAGO

Page 18: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

18

TIERRA, QUE SE ABRE En Chile la tierra se mueve casi cada día, con diferente fuerza, en varias partes y con distintos efectos. Vale la pena saber por qué pa-sa esto, que podemos esperar cuando llegamos a este país y como protegernos de los efectos de los sismos. Los especialistas explican los movimientos de la tierra; sobre sus consecuencias nos hablan los sobrevivientes.

¿POR QUÉ LA TIERRA SE MUEVE EN CHILE?

A menudo escuchamos o leemos en las noti-cias sobre terremotos en varias partes del

mundo. Por lo general aparecen los nombres de los países tales como Chile o Japón pero los terre-motos ocurren también en Turquía o Japón. ¿De dónde vienen? La Tierra es un planeta dinámico y podemos observar tanto erupciones volcánicas y sus efec-tos como los movimientos y cambios de los conti-nentes. Imagínense el flotante subcontinente In-dio que choca con el continente asiático. De esta manera simplificada se puede explicar cómo fue-ron creadas las montañas más altas del mundo, los Himalaya. Es precisamente la placa India que presionó la placa euroasiática. Fue al comienzo del siglo pasado cuando un geofísico y meteorólogo alemán, Alfred Wegener, propuso la teoría del movimiento de los continen-tes. Se establece que la corteza terrestre no es homogénea y está compuesta de placas tectóni-cas que se mueven. Mirando el mapa del mundo es fácil de notar que los bordes de África y Améri-ca del Sur encajan a la perfección; realmente, ha-ce alrededor de 135 millones de años fueron par-te del mismo continente: Gondwana. Inicialmente la teoría no gozó de popularidad en los círculos académicos porque para los geólogos fue un tipo de teoría como fue la de Copérnico para los astró-nomos: cambió totalmente la manera de mirar nuestro planeta, fue reconocida solamente des-pués de la muerte del gran científico. En Chile observamos la convergencia de dos placas tectónicas. Acá aparece la llamada línea de subducción donde la placa oceánica de Nazca presiona la Placa Sudamericana alzando los An-

des. Este movimiento produce grandes cantida-des de energía que se libera durante los terremo-tos. El hecho de que Chile se ubica en la esfera de subducción es tanto la maldición por la cantidad de los volcanes activos y terremotos, como la bendición ya que hace que Chile tenga cantidades enormes de yacimientos minerales. Los terremotos se los mide en la escala de Richter que es una escala logarítmica. El aumento de dos grados en esta escale significa que la ener-gía se incrementa 1000 veces. Por lo tanto la dife-rencia entre el terremoto de 2 o 3 grados no es mucha pero entre los grados 7 y 8 ya es muy im-portante. En todo el mundo los terremotos de grado 2 en la escala de Richter ocurren en prome-dio 8000 veces al día! Los chilenos están acostum-

CHILE

Page 19: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

19

brados a esto y nadie reacciona a los temblores suaves. Gracias al uso de tecnología especial en la construcción tanto en Chile como en Japón la can-tidad de víctimas durante terremotos fuertes es escasa. A menudo los terremotos resultan en tsunami que pueden causar estragos en lugares alejados miles de kilómetros del epicentro. Por ahora no se puede predecir los terremotos pero sabemos dón-de hay más probabilidad que ocurran y cómo pro-tegernos. Lo más seguro es estar al aire libre lejos de cualquier cosa que pueda caer sobre nosotros. Pero si no podemos salir del edificio hay que es-

conderse al lado de un mueble sólido lo que gene-ra el llamado triángulo de la vida. Pero si estamos en una playa y observamos el mar baja, en vez de admirar las conchas y caminar al fondo del mar hay que correr lo más lejos y alto posible porque esto significa que un tsunami está por llegar.

Katarzyna Staniewska es geóloga especializada en mineralogía aplicada y geoquímica. Estudió en Berlín en la Technische Universität. Vive en Chile desde el año 2007.

Antes de un sismo

1. Averiguar si el inmueble es sismo resistente. De lo contrario, dentro del edificio no existen luga-res seguros pero lo que hay que identificar es la Zona de Seguridad al exterior.

2. Si una construcción es resistente hay que identi-ficar y demarcar los Lugares de Protección Sís-mica. Estos se encuentran alejados o protegidos de las ventanas y de los objetos que podrían caer (ej. muebles, lámparas o el acondiciona-dor). Un lugar seguro se puede encontrar deba-jo de una mesa de madera o la pared estructu-ral del edificio.

3. Averiguar donde se encuentran las llaves y cor-tes generales de agua, electricidad y gas. Apren-de cómo cortar el suministro en caso de emer-gencia.

4. Verificar que las instalaciones eléctricas y de gas estén en buen estado.

5. Asegurarse de que las puertas, pasillos y vías de tránsito estén libres de obstáculos tales como estufas, plantas y muebles.

6. Se recomienda mantener abiertas y acuñadas las puertas de dormitorios, especialmente cuan-do se trata de habitaciones de menores, adultos mayores o discapacitados.

7. Instalar los objetos grandes o pesados en las partes inferiores de los muebles. Colocar cerro-jos en estanterías destinadas a la cristalería, va-jilla y otros artículos frágiles.

Durante un sismo

8. En un inmueble sismo resistente, ubicarse en un Lugar de Protección Sísmica. No usar los ascen-

sores ni la caja de escaleras o la zona vertical de seguridad destinada a la evacuación en caso de incendio.

9. Abrir la puerta principal y la de los dormitorios al inicio del sismo.

10. Si se está en la calle en un sector con edificios en altura, alejarse de las edificaciones y dirigirse hacia el centro de la calle teniendo precaución con los vehículos en tránsito ya que los conduc-tores pueden no haber percibido el sismo. Ale-jarse de postes, cables de electricidad y árboles.

11. Si se va conduciendo reducir la velocidad y con precaución detenerse en un lugar seguro aleja-do de postes, árboles y cables eléctricos. Si se va conduciendo por un túnel intentar no dete-nerse al interior. En el caso de que no sea posi-ble se debe encender las luces de emergencia del vehículo y detenerse.

Después de un sismo

12. Si se está en la costa evacuar inmediatamente hacia las Zonas de Seguridad ubicadas en zonas de altura.

13. Cortar los servicios básicos y evacuar hacia una Zona de Seguridad al exterior del inmue-ble. Se debe estar preparado para los sismos posteriores o réplicas.

14. No usar velas, fósforos ni otras Fuentes de ig-nición. Usar linternas a batería.

Más información y recomendaciones se puede en-contrar en el manual “Antes, durante y después de sismos y terremotos” emitido por el Ministerio de Interior y de la Seguridad Pública.

¿QUÉ HACER CUANDO SE MUEVE LA TIERRA?

EMBAJADA DE POLONIA EN SANTIAGO

Page 20: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

20

M e desperté por la noche, lo que significa que el temblor era de verdad grande! Ante-

riormente, había leído sobre los temblores más nunca los había sentido. Esta vez todo era distinto. Salí corriendo de la cama y me dirigí a despertar a mi hija. Nos encontramos en el pasillo, nos pega-mos en el marco de la puerta. Nos miramos estu-pefactas. El ruido era estrepitoso. El edificio chas-queaba y restallaba, se movía de un lado al otro… pero resistió. En un momento tembló con más fuerza. Sólo tuve tiempo de observar como se caían los libros del estante. Desde la cocina nos llegaba el sonido de ollas y vasos resquebrajándo-se… Tenía la impresión que, ¡eso! (terremoto) nun-ca iba a terminar… Se cortó la luz, se activaron las

alarmas de los coches. Al cabo de tres minutos todo se tranquilizó. Mi celular re-sultó ser la única fuente de luz. Gracias a éste pu-

de encontrar pantalones, jersey y las llaves de la casa. Apuradas bajamos por la escalera y salimos del edificio. Iluminadas por la luz de las alarmas de los coches, se pudo ver los azulejos y yesos rotos en el pasillo. Hasta el amanecer, junto con los veci-nos, nos encontrábamos sentados frente al edifi-cio. Poco a poco, se comenzó a hablar de las pri-meras víctimas en el sur de Chile… Después de 12 horas, por primera vez en la tv, vi las dimensiones de lo que pasó la noche anterior. Antes, no había ni electricidad, ni Internet, no funcionaban los ce-lulares. Allá donde vivo no se notaba la fuerza del terremoto – no cayó ningún edificio. Sólo las calles estaban totalmente vacías. Tengo que admitir que las construcciones antisísmicas en Chile son de verdad seguras…

Elżbieta Jedlewska

música, desde hace 23 años vive y trabaja en Chile

E n Chile siempre truena cuando se eli-ge a un nuevo presidente. Bueno, casi

siempre. Yo he vivido al menos cinco te-rremotos verdaderamente fuertes. Los recuerdos relacionados con esto son dra-máticos, escalofriantes como graciosos. Los que hasta hoy me sacan una buena sonrisa. Me acuerdo de unas cuantas imágenes terribles posteriores al terremoto. Una vez en las calles de la ciudad de Viña del Mar se fracturó y abrió la tierra por debajo de la gente que paseaba y se cerró justo des-pués. Las personas que quedaban atrapa-das dentro de este hecho de la madre na-

turaleza, se les debió amputar las piernas, ¡así al tiro!... Otro recuerdo se relaciona con el cementerio de Valparaíso, ubicado en uno de los cerros de la ciudad. Los tem-blores eran tan fuertes que los ataúdes y los restos humanos fueron escupidos del cerro. La vista era macabra: los cadáveres estaban dispersos en las calles, los patios y tejados de las casas. Vi a hombres de 40 y 50 años quebrándose en llanto. Sus ma-dres, mucho más mayores, tenían que tranquilizarlos. A mí, personalmente, jamás me ha pa-sado algo grave. Sólo una vez cuando tem-bló por la noche, mis compañeros de de-partamento de aquel entonces me saca-ron de la cama y me empujaron con fuerza hacia fuera de la casa. Después de un rato me di cuenta que estaba totalmente des-nudo! Por suerte no fue difícil encontrar una bata…

Raul Nałęcz-Małachowski pintor, vive en Chile a partir del año 1950

CHILE

SOBREVIVIMOS EL TERREMOTO RECUERDOS

Page 21: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

21 By Claudio Núñez [CC-BY-SA-2.0 (http://creativecommons.org/licenses/by-sa/2.0)], via Wikimedia Commons

EMBAJADA DE POLONIA EN SANTIAGO

Page 22: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

22

F ue un viernes extraño, decidí quedarme en casa. Sin embar-

go, a las 02:45 a.m. aprox., recibí una llamada, era una amiga, para que nos juntemos. Pensé que era una locura y le respondí que lo iba a pensar. Me quedé despierta pen-sando ¿si iba? o ¿no iba?, ¿si me levantaba? o ¿no?, ¿si le avisaba a mi mamá? o ¿no le decía nada?, para no molestarla… total era una noche de verano, que estaba terminando y podía aprovecharla. Finalmente me di vuelta y seguí dormitando, cuando de repente mi cama se empezó a mover, un temblor pensé, ya va a pasar… como todos. Siguió el movimiento, yo pensaba "¡que pare!", (ya pasó el tiempo nor-mal para un temblor), pero no paró. Sentada en mi cama, sentía que esto era más que un temblor. Y, en un segundo estaba de pie, desorientada. To-do se movía, había mucho ruido, la luz se cortó, el movimiento era más fuerte que mi cuerpo. Corrí y llamé a mi mamá. Ella, agachada en el otro extremo del pasillo, dijo: "está fuerte este temblor". Y por primera vez supe que, se trataba de algo más grande y le grité, "es un terremoooto!!!" Por la ventana se veían luces de flash, como si sacaran fotos, pero eran cables eléctricos que se cor-taban, y alumbraban a la azotada ciudad que se estaba quedando a oscuras. Escuchaba que se rompía, como caían las cosas de otros dormitorios, como la tierra rugía. Mi mayor sorpresa fue sentir ¿cómo es posible que en un quinto piso, tuviera un pie 10 cms mas arriba que el otro?, el piso ondea-ba una y otra vez, y yo me encomendaba a todos los santos que no se par-tiera, que no termináramos bajo escombros, que nada nos hiriera. De pron-to empezó a parar, nos miramos, y la sensación era una, salir lo más rápido posible de ahí. Al mismo tiempo, escuchábamos gritos, observábamos gen-te corriendo en pijama, gente asustada, gente que revivía un trauma, y no-sotras viviéndolo por primera vez. ¡Estábamos paralizadas!. Salimos, nos juntamos con otros, nadie sabía nada, los teléfonos esta-ban copados, no había luz, alguien tenía una radio, se escuchó algo de un tsunami, nadie sabía ¿dónde? ¿ni cuándo?, ¿un tsunami? ojalá que le avisen a la gente. El sentimiento era de pena y miedo. Seguía oscuro, habían répli-cas, pero todos seguíamos juntos, por primera vez fuimos comunidad, nos aprendimos los nombres de nuestros vecinos, nos calmamos entre todos. Algunos lograron comunicarse con sus seres queridos, mi hermano también estaba bien, no había dormido en la casa. Finalmente empezó a amanecer y a todos les dio el valor de volver a sus casas, con luz todo parece más seguro. Nos despedimos y volvimos, cuando entramos al departamento, estaba todo en el piso: libros, partituras, cua-dros, platos, y todas las botellas de alcohol que teníamos. Nuestra casa, por un buen rato, parecía el campo de batalla de una cantina de ebrios, pero como todo en la vida, fue ordenado.

CHILE

Agnieszka Lisowska

Diseñadora del interior, estudió diseño integral en Universidad de

Chile .

Page 23: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

23

Museo de Bellas Artes de Santiago después del terremoto del año 2010

Source: http://es.wikipedia.org/wiki/Terremoto_de_Chile_de_2010#mediaviewer/Archivo:Museo_de_Arte_Contempor%C3%A1neo_Earthquake_in_Chile.jpg

EMBAJADA DE POLONIA EN SANTIAGO

Page 24: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

24

A quella vez, tuve un día intenso, lleno

de muchas actividades. La verdad es: todo el día tuve una sensación ex-traña, como que si de alguna manera pudiera percibir que sucedería algo. Sin embargo, con las ajetreadas actividades del día y lo ra-cional que se vuelve uno, viviendo en una sociedad que va a mil por hora, no le tome mayor importancia a esas extrañas sensa-ciones que apretaban mi pecho y garganta diciéndome ¡algo pa-sara , ojo! Recuerdo que era día viernes y al llegar a eso de las 22:00 horas a m i departamento en el sexto piso de un edificio ubicado en Barrio Lastarria, en el centro de santiago, me pregunte: ¿qué hacemos? ¿Salir de fiesta? ¿Juntarse con los amigos? o ¿quizás simplemente dormir?, en ese minuto cerré los ojos y deje que mi interior decidiera la alternativa correcta, por fin estaba en mi casa, tranquilo, pero no dejaba de percibir esa angustia que saca-ba mi corazón por la garganta, me sentía un poco extraño. Estaba inquieto, no podía conciliar el sueño, sabia que algo pasaría, pero no sabía qué? Sobre la cama me di mil vueltas. Y por fin, a eso de las 02:30 a.m., logré conciliar el sueño. De pron-to comencé a sentir que me estaban moviendo la cama. ahhh!, entre dormido y medio despierto, justo a las 03:34:08 horas, con un fuerte sonido empezó a danzar la tierra. Mi edificio se partía en dos. Miré por la ventana y las construcciones, más antiguas, se caían a pedazos. La iluminación de las calles, comenzaba a ex-plotar, parecía una invasión marciana. El departamento parecía un barco en altamar. No sé cómo podría lograr salir del inmueble e ir a un lugar seguro, si el piso se movía de lado a lado, ¡parecía de gelatina! Era imposible caminar. Al fin, pude bajar por la escalera, al pa-tio central del complejo. Allí, me reuní con la mayoría de los veci-nos, algunos venían de alguna la fiesta, otros estaban en ropa interior muertos de miedo, otros lloraban..., fue una experiencia fuerte. Con el pasar de las horas, me enteré de la magnitud e in-tensidad que había alcanzado el terremoto y de las, lamentables, pérdidas humanas a lo largo del país. Un escenario muy triste para todos. Entendí que es de suma importancia la conexión con nues-tras percepciones y el hecho de lograr entenderlas. Además, lo-gré dimensionar que somos totalmente vulnerables frente a la naturaleza, y que de un momento a otro podemos partir a mejor puerto, por eso desde ese momento mi vida cambió rotunda-mente y a su vez me hice mas conciente del hoy y el ahora, de vivir cada minuto como si fuera el ultimo, de aprovechar con in-tensidad esos pequeños momentos que te regala la vida que a su ves marcan grandes diferencias, de vivir con gratitud, de fluir y simplemente ser feliz.

Criss Sandoval

Actor chileno, estudió design en Buenos Aires, profesor de yoga

CHILE

Page 25: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

25 By Jorge Barrios[CC BY-SA 3.0(http://creativecommons.org/licenses/by-sa/2.0)], via Wikimedia Commons

EMBAJADA DE POLONIA EN SANTIAGO

Page 26: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

26

RESCATO LOS QUILTROS CHILENOS

Una de las imágenes de las calles de Santiago que quedan en la memoria

son los perros vagos. Están en todas partes: descansan en las paradas de

micros y caminan en jaurías al frente del palacio presidencial. Lo curioso

es que cruzan la calle solamente con luz verde. Sobre el tema de “la suer-

te del perro” en Chile escribe Jolanta Polk, agregada de la Embajada de

Gran Bretaña en Chile.

POLACOS EN CHILE

Page 27: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

27

M i primera mascota llegó, a mi vida, el día menos pensado:

el día en que hice mi primera comunión. Lo recuerdo muy bien… ése día, yo, tenía puesto mi vestido blanco y mis zapatos de charol, el cabello con rulos y unas pequeñas flores blancas y, en mis brazos tiritaba una bola de pelo amarillo – ¡mi cachorro! A pesar de haber pedido un pe-rrito, mi mamá me respondía: ¡no! No me quedaba de otra que bajar a jugar con Zolka, la perrita de mi vecina la Sra. Koralewska (la costurera del barrio). En primavera, Zolka tu-vo cachorros cuando cumplí sie-te años. Cuando los cachorros tuvieron un mes de vida, justo el día de mi primera comunión, me enteré que Zolka murió atropellada; dejando huérfanos a sus tres cachorros. Mi mamá no lo pensó dos veces y decidió que este día importante y lleno de alegría (para cualquier niña polaca) no podía quedar en mis recuerdos como un día triste y es así como llegó a mi vida mi primera mascota. Los años pasaron y los cami-nos de la vida me llevaron a mu-chos países. En el año 1999 lle-gué a Chile. En el trayecto desde el aeropuerto a lo que sería mi casa en Ñuñoa, observaba a tra-vés de la ventana y quedé asombrada al ver tantos perros paseando solos por la calle. Pa-samos por el lado del palacio presidencial La Moneda donde había una jauría de perros; to-dos sin dueños y sin correa. Sin embargo, algunos vestían con cuellos de polar y su lugar de descanso era frente a La Mone-da, en el pasto verde, bajo el sol

calentador de invierno. Desde entonces, nuestra ca-sa ha sido un hogar temporal, para más de 30 perros, mientras buscamos familias adoptivas para ellos y, en ese mismo in-tertanto, uno que otro perro se ha quedado viviendo con no-sotros. Actualmente, nuestra familia perruna está integrada por Noelia, Dalia y, una la llega-da reciente, Julieta. Hemos dedicado, mis hijos y yo, muchas horas al cuidado de los perros callejeros de la comu-na de Ñuñoa. Desde el año 2010 somos parte, del Centro de Res-cate Canino (www.facebook.com/voluntarioscrc?fref=ts), apoyan-do y participando en las labores y jornadas de adopción. Los re-creamos (perros) fuera del re-cinto. Se realizan ventas de ga-raje y recolección de donacio-nes. Y desde hace dos años, también, somos socios de Matpet (www.facebook.com/pages/Matpet-Refugio-de-Perritos/281548868545066?fref=ts ) un refugio, particular, en la ciudad de Curacavi. Aquí, hay 150 perros los cuales reci-ben alimentación y cuidados veterinarios. Esto, último, es posible gracias a las donaciones mensuales de gente bondadosa y amante de los perros. Nuestra labor es solo una gota en éste océano de miseria perruna. En Chile no hay leyes ni políticas estatales que prote-jan a los perros o castiguen a los que los abandonan. Debido a esta falta de reconocimiento, en Chile, la eutanasia es pro-puesta-solución a lo más fácil, pero ¡no! la más efectiva a nivel global. Pues, en Polonia y en

otros países europeos, la esteri-lización y la tenencia responsa-ble de mascotas es, por lejos, la mejor manera de dar solución a la falta de leyes en Chile. No soy quien debe dictar lo que es correcto y/o aceptable en una sociedad. Personalmen-te y en mi plena voluntad elegí, con un pequeño granito de are-na, contribuir con la protección de la fauna callejera, entregan-do mi amor y mi tiempo al quil-tro chileno.

De los editores: Los que todavía no saben si adoptar un perro o un gato debieran ver el video de Moby de “Almost home” - www.youtube.com/watch?v=qr_qFHF7Zr0

W EN EL AÑO 1999 LLEGUÉ A CHILE. EN EL TRAYECTO DESDE EL AEROPUERTO A LO QUE SERÍA MI CASA EN ÑUÑOA, OBSERVABA A TRAVÉS DE LA VENTANA Y QUEDÉ ASOMBRADA AL VER TANTOS PERROS PASEANDO SOLOS POR LA CALLE.

EMBAJADA DE POLONIA EN SANTIAGO

Page 28: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

28

POLACOS EN CHILE

MÚSICA, CREADORA, ARTISTA…

A unque gano dinero tra-bajando en una escuela, me considero sobre to-

do violonchelista y estoy invo-lucrada en varios proyectos ar-tísticos. Para mí la música no es solamente hobby sino mi ma-nera de vivir. Me tocó esta suerte de te-ner un lugar de trabajo estable que siempre me deja un poco de tiempo libre para sacrificarlo con otras pasiones. La presti-giosa escuela internacional Ni-do de Águilas de Santiago, don-de trabajo, es un buen estable-cimiento educacional de alto nivel. Además, lo valoro por el ambiente de trabajo que me da. Enseño a los niños tocar el violonchelo aplicando el méto-do Suzuki. Este fue creado por Shinichi Suzuki, violinista y pe-dagogo japonés. Según este último, los niños son capaces de aprender a tocar un instru-mento, de la misma manera que aprenden a hablar su len-gua materna. Creemos que ca-da niño puede aprender a tocar un instrumento así como se empieza a hablar. El factor más importante es sólo crearle un ambiente favorable que apoye su aprendizaje. Los niños pue-den seguir tocando sin tener que aprobar los exámenes: Shi-nichi Suzuki considera que el genio en cada uno es distinto y que su desarrollo depende del entorno y, en gran medida, de

los adultos. Lamentablemente son ellos (adultos) los que “matan” el talento de un niño, los limitan y frenan el creci-miento de habilidades. En Nido de Águilas los peda-gogos tienen tiempo para plani-ficar y organizar las clases, co-municarse con padres o corre-gir las tareas. Por eso nunca llevo mi trabajo a casa - lo que, por desgracia, tienen que hacer los maestros de otras escuelas. Tengo bastante tiempo para mi propio trabajo artístico y mi familia, la que es tan importan-te para cada uno. Por otra parte, en cuanto puedo participo en varios pro-yectos artísticos donde, en mu-chos casos, participan los artis-tas famosos o estrellas de músi-ca popular como Peter Gabriel o Richard Clayderman (acompañé a la orquestra du-rante sus conciertos en Chile). De vez en cuando toco para la orquestra de cámara Camerata Universidad de los Andes dirigi-da por Eduardo Browne y parti-cipo en los proyectos de musi-cales (My Fair Lady, The Sound of Music, Matin Rivas). Antes de comenzar mi tra-bajo pedagógico en Nido de Águilas tuve la oportunidad de tocar en varias orquestras chi-lenas: Orquesta Sinfónica de Santiago u Orquesta Filarmóni-ca Teatro Musical de Santiago de Chile, entre otros. También,

había sido asistente del concer-tino de violonchelos de la or-questa de cámara de Talca y en la misma orquestra me había presentado como solista. Todo el tiempo colaboro con el Teatro Municipal de Santiago y con el Cuarteto Egmont. Doy conciertos y clases magistrales en varias regiones de Chile. Ac-tualmente, planifico un ciclo de conciertos de cámara junto con pianista japonesa, Kunika Shika-rawa. Amo mi trabajo. Me encanta enseñar y exhibirme. Eso no es nada fácil, exige un montón de energía, fuerza y creatividad. Supongo que muchos de Uste-des me preguntarían que tiene que ver creatividad con hacer música o si un músico-instrumentista es creador o imi-tador. Pero responderlo ya se-ría otro tema infinito...

La violonchelista Anna Wiesner vive en Santiago a partir del año 2008. Nos cuenta de niños ingeniosos, orquestras chilenas y su cooperación con... Peter Gabriel.

AMO MI TRABAJO. ME ENCANTA ENSEÑAR Y EXHIBIRME. ESO NO ES NADA FÁCIL, EXIGE UN MONTÓN DE ENERGÍA, FUERZA Y CREATIVIDAD.

Page 29: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

29

EMBAJADA DE POLONIA EN SANTIAGO

Page 30: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

30

A ntes de llegar a Santiago, vi-vía en el soleado Madrid du-rante casi tres años. Sin em-

bargo, no me falta la compañía de los españoles, en la capital de Chile. Muchas veces tengo la sensación de que han traído acá una pequeña par-te de su patria. Mi novio es de Extre-madura, la empresa donde trabajo está dirigida por dos excepcional-mente simpáticos españoles (Nicolás es de Salamanca y José Ignacio de

Madrid), y nuestro mejor amigo, aquí, es de Bilbao. Cada uno de otra región, pero tienen una cosa en co-mún: pasión por la buena cocina.

La vida en la calle

España es un país no sin razón famo-so por mucha vida en la calle. En lite-ralmente cada calle hay por lo me-nos un bar, un restaurante o simple-mente una cafetería. A los españoles

Mi pequeña

España

¿Dónde encontrar, en Santiago, un buen restaurante español? ¿Dónde

comer una paella tradicional? ¿Dónde el número de españoles excede el

límite de personas permitido por metro cuadrado? Para dar un paseo

buscando la cocina de la Península Ibérica, nos invita Karolina Bodych,

autora del blog "Mi gran aventura en Santiago".

KAROLINA BODYCH

KAROLINA BODYCH,

ABOGADA. EN

SANTIAGO DESDE

ENERO 2014.

TRABAJA EN PACIFIC

CONSULTING SPA,

UNA EMPRESA QUE

OFRECE

ASESORAMIENTO

FINANCIERO Y LEGAL.

La Balbona

HAY QUE VER EN SANTIAGO

Page 31: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

31

les encanta salir y celebrar con amigos, cenar en restaurantes o estar de fiesta hasta la madru-gada. Al mismo tiempo, debe-mos recordar que la cocina es-pañola se caracteriza principal-mente por la sencillez. Entonces ¿qué hay detrás del sabor mági-co de estos platos? Sin duda, son los ingredientes frescos de origen nacional. Y aunque no hay un ingrediente secreto, cada tortilla es diferente. “¡La de mi madre es la mejor!”, suele decir Juan, mi pololo. Durante tres años probé como mínimo qui-nientas y créenme cada una era diferente. Entonces ¿será posi-ble que la cocina española tenga el mismo sabor en otros lugares de la tierra? Como una amante fanática de la buena comida y platos de la península Ibérica decidí investigar, para gran ale-gría de Juan, en que condición se encuentra la cocina española en Santiago.

La Balbona

La Balbona (Av. Vitacura 3891) es, tal vez, el restaurante más conocido. El dueño y su perso-nal son españoles. Comprenden perfectamente las necesidades del cliente y ofrecen comida y servicio en un nivel muy alto. Los platos reflejan cien por cien-to el espíritu de la cocina tradi-cional española, aunque tengan algunos en un giro un poco más moderno. Es posible, también, tomar aquí una cerveza españo-la, cosa que los clientes aprecian mucho. Este es uno de esos lu-gares donde un almuerzo en día sábado familiar de repente se convierte en una larga tarde, acompañada con un gin - tonic o ron - cola. Las bebidas están ser-vidas como "en casa", es decir, en un vaso grande, parecido a

una copa utilizada para coñac pero en versión maxi y con una vistosa decoración. La clientela son en la mayoría los españoles, pero tampoco faltan otras na-cionalidades.

La Boquería

A la vuelta de la esquina hay un restaurante especializado en platos de Cataluña - La Boqueria (Pasaje El Manio 1637). Aquí, sin duda nuestro bolsillo sufrirá más, pero vamos a tener la oportunidad de probar unos pla-tos en un giro verdaderamente moderno. El ambiente no es tan relajado como en Balbona, y en-tre los clientes no encontrare-mos tantos españoles como en el lugar de al lado. Aunque la comida es muy sabrosa, no re-comendaría este lugar para “principiantes". Al final, siempre es mejor empezar con los clási-cos.

La cocina de Javier

Que sirvan como ejemplo de la buena y clásica comida española los platos del restaurante La Co-cina de Javier (Av. Vitacura 7482). Javier es el fundador y el jefe de la cocina y quizás uno de los primeros españoles que em-pezaron a servir platos típicos

de su patria. También se pueden pedir otros platos de la carta, así que cada uno debe salir conten-to y satisfecho del restaurante. Yo tuve la oportunidad de pro-bar la exitosa paella del chef en Vichuquen (al sur de Santiago), donde Javier sirvió la paella para todos los invitados de una mari-na local. El éxito del restaurante ha dado luz a una filial, en la misma calle, que solamente vende platos para llevar.

La Ibérica

La Ibérica (Santa Isabel 462, es-quina con Avenida Italia) es el lugar más español de todos los lugares en Santiago. El dueño y

ESPAÑA ES UN PAÍS NO SIN RAZÓN FAMOSO POR MUCHA VIDA EN LA CALLE. EN LITERALMENTE CADA CALLE HAY POR LO MENOS UN BAR, UN RESTAURANTE O SIMPLEMENTE UNA CAFETERÍA

El Magdalena

EMBAJADA DE POLONIA EN SANTIAGO

Page 32: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

32

chef, Fernando, es un simpati-quísimo catalán. Su restaurante está situado en un lugar tan emblemático que cuando uno está paseando por la Avenida Italia a la hora de almuerzo, durante el fin de semana, no hay manera de perder la vista a la paella preparada "en vivo" en la ventana del restaurante y frente a todos los clientes. Aun-que el olor atrae a los tran-seúntes la paella, no es la mis-ma paella que podríamos espe-rar después de pasar las vaca-ciones en Valencia o en otra localidad costera. Esta no es la versión típica de cual se des-prenden conchas de mejillones o colas de gambas. Fernando prepara sus paellas emblemáti-cas a base de verduras y pollo. En mi escala subjetiva saca 10/10! En la carta por supuesto vamos a encontrar otros tipos de paella: con arroz negro que su color se debe a la tinta del calamar, la versión con maris-cos clásica y muchas otras deli-

cias típicas españolas como el queso manchego o platos de carne. Además, Fernando pre-para su paella para fiestas es-peciales y cada vez gana más popularidad. No puedo esperar para celebrar mis cumplea-ños... Aunque el restaurante de Fernando esta visitado en ma-yoría por los españoles, tam-bién reconoce con satisfacción que el número de visitantes chilenos está creciendo.

El Magdalena

Pasemos ahora al corazón del barrio de Providencia, la calle Las Urbinas. Aquí se encuentra el restaurante- bar El Magdale-na (Las Urbinas 27). Su dueño Javi es hilarante y adorable. Javi es chileno pero sabe mu-cho de la cocina española sabe. Su jefe de cocina viene del país Vasco y en conjunto forman un dúo armónico. Este lugar es muy popular sobre todo en las noches de jueves, cuando el número de españoles excede

la cantidad permitida por me-tro cuadrado. Las noches son a menudo “happy hour” sin fin para la cerveza española acom-pañada por tapas y la fiesta du-ra a veces hasta el amanecer. Curiosamente, Javi debe modi-ficar ligeramente su menú de-bido al gusto exigente de sus clientes chilenos. El típico que-so manchego español no se ha vendido en todo y práctica-mente se retiró de la carta.

Recordemos los

momentos

Como se puede leer, no faltan lugares en Santiago donde se puede ir a comer delicioso. Hay que recordar que los españoles aprecian especialmente la vida familiar. A los que están aquí y están solos o sólo con su otra mitad, también les gusta orga-nizar comidas o asados, mu-chas veces con su nueva "familia" a quien la ha conoci-do aquí , con sus amigos o com-pañeros de trabajo. Así como lo fue en mi caso, cuando uno de los últimos fines de semana he pasado el día en la casa de José Ignacio comiendo la gran paella de Nicolás. Y estos son los mo-mentos que recordaré más de todas mis aventuras en Chile.

A LOS ESPAÑOLES LES ENCANTA SALIR Y CELEBRAR CON AMIGOS, CENAR EN RESTAURANTES O ESTAR DE FIESTA HASTA LA MADRUGADA.

La Ibérica

HAY QUE VER EN SANTIAGO

Page 33: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

33

Hay que ver en Chile

GUARDIA PRESIDENCIAL DE LA MONEDA

U na de las ceremo-nias que puedes apreciar, cada se-

mana, en plena Plaza de la Constitución es el cambio de la Guardia Presidencial del Palacio de La Moneda. Compuesto por efectivos del cuerpo de Carabineros de Chile y que tiene como misión resguardar al presidente de la República y al palacio presidencial desde tiempos de la colonia. Además, vela por la seguridad de to-dos los ex presidentes de Chile y de cual-quier Jefe de Estado extranjero que se en-cuentre de visita en el país. Tarea que es asumida desde el ingreso al país y pisan territorio nacional, acompañándolos a ca-da ceremonia o actividad que realicen en Chile. La Guardia de Palacio es dependien-te del Departamento de Seguridad Presi-dencial que se desempeña como guardia de palacio y escolta presidencial; acompa-ñando al presidente o presidenta en todo acto cívico y privado que el mandatario realiza en el país o el extranjero, y además se hace cargo de la seguridad de sus fami-liares más cercanos y de la casa presiden-cial. Antiguamente, La Moneda era custo-diada por el Ejército y Carabineros. En el año 1932, el ex presidente Arturo Alessan-dri Palma establece que la misión de res-guardar el palacio presidencial sea exclusi-vamente de la policía uniformada, función que se ha ejercido, ininterrumpidamente, hasta la fecha. Esta “Ceremonia de Relevo” (como oficialmente se le conoce) se realiza día por medio, a las nueve de la mañana en la Plaza de la Constitución al son de marchas militares y de canciones populares chile-nas.

La plaza de la Constitución se en-cuentra ubicada entre las calles Agustinas, Morandé, Moneda y Teatinos, en donde se pueden apreciar, además, las figuras de algunos presidentes que ha tenido Chile y los ministerios que rodean al Palacio de La Moneda, como: el de Hacienda, de Justi-cia, de Relaciones Exteriores y la Intenden-cia Metropolitana. Una vez que la Guardia entrante ha-ce su arribo a la plaza, la Guardia saliente hace el cambio y deja sus aposentos en La Moneda para que sea ocupada por un nuevo contingente por cuarenta y ocho horas aproximadamente. Quien queda al mando de la Guardia de Palacio es un teniente de Carabineros. Sin embargo a partir del año 2001 se inte-graron, a esta unidad especial, las mujeres policías. Así que no se sorprendan si ven a una Teniente comandando el equipo de seguridad y de Guardia presidencial. La vestimenta que ocupan, actual-mente, los guardias de palacio es similar a la que ocupaban antiguamente el cuerpo de Carabineros en el año 1927.

NANO FERNÁNDEZ GALLARDO

NANO FERNÁNDEZ GALLARDO ES EL DIRECTOR DE UR-

BAN SANTIAGO MA-

GAZINE Y EDITOR DE BARRIO ITALIA TV. TWITTER: @URBANSANTIAGO

EMBAJADA DE POLONIA EN SANTIAGO

Page 34: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

34

VISITA EN POLONIA

LOS SABORES DE POLONIA Cristóbal del Castillo, historiador del Museo Histórico y Militar de Chile y estudiante de polaco, recibió un maravilloso regalo de graduación: viajar donde quiere. Decidió visitar a Cracovia y la región de Silesia. Nos cuenta sobre sus paseos por los parques, la comida de la Pascua de resurrección y el ritmo de vida en Polonia del sur.

¿ Cuál fue la prime-ra impresión que tuviste a la llega-

da a Polonia? En Polonia hay que tener pa-ciencia. En Santiago estamos muy acostumbrados a que to-do sea rápido y desesperarnos si las cosas no ocurren de in-mediato. Al abordar el tren del aeropuerto de Cracovia a la

estación de tren principal, me tocó esperar mucho. Por suer-te, mi amiga Justyna me reco-mendó tener mucha paciencia. Básicamente, eso fue lo que hice y creo que eso me permi-tió disfrutar mi viaje de mejor manera: mirar los paisajes, caminar por las calles y disfru-tar de Polonia completamente.

¿Cuál fue la mayor sor-

presa que tuviste du-rante la visita? Mis mayores sorpresas co-menzaron el minuto que lle-gué a la casa de mi amiga Na-talia, donde me quedaría por unos días en Cracovia y luego, en la casa de Magda, cerca de Gliwice. Ahí comencé a apren-der lo que significa verdadera-mente “la hospitalidad pola-ca”, reflejado en la amistad, el interés genuino en el huésped,

Page 35: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

35

la comida y, por supuesto, las bebidas típicas. Pude ver y sentir una verdadera pince-lada de la cultura polaca: desde probar pierogi ruskie y placki ziemniaczane a disfru-tar de una deliciosa Żu-brówka con jugo de manzana en un acogedor bar del ba-rrio de Kazimierz o una na-lewka casera en una fría no-che de primavera. Además, pude participar de la Pascua de resurrección en Polonia, la cual es muy distinta a Chi-le. Para los chilenos, sólo te-nemos la comida del viernes santo (que, generalmente es pescado y mariscos) y los huevos de chocolate el do-mingo, mientras que en Po-lonia, primero se pintan hue-vos y luego se llevan a ben-decirlos a la Iglesia en una canasta. Finalmente, el do-mingo en la mañana se hace un gran desayuno familiar de Pascua de resurrección, en donde se comparte un huevo duro y se comparte una va-riedad de comidas, todas ellas deliciosas.

¿Qué es lo que mejor recordarás después de tu estadía en Polonia? Lo que más recuerdo de Po-lonia es la gente y los paisa-jes. Tuve la oportunidad de conversar con muchos pola-cos, especialmente los pa-dres y abuelos de Magda, sobre la historia de su país y cómo hay muchos nexos con la historia chilena, especial-mente en su época contem-poránea. Todo eso afirmó mi interés por Polonia, por lo que en este momento estoy aprendiendo polaco y prepa-rando unas nuevas vacacio-nes allá en agosto.

EMBAJADA DE POLONIA EN SANTIAGO

Page 36: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

36

Cuando llegamos a un país nuevo, empezamos a buscar unos lugares que nos ayuden a entender la nueva realidad: la tienda más cercana, una pana-dería, algún mercado…. Sabemos que la amistad con un carnicero o el co-nocimiento de un lugar donde dan de comer barato y bien, no tienen pre-cio. Publicamos la segunda parte de nuestra guía de compras en Santiago. También esperamos sus recomendaciones, consejos, y preguntas.

COMPRAR, COMER, ENCONTRAR

E n cada rincón del mundo, los mercados de pulgas dan testimonio del tiempo y sus logros,

de las tradiciones y sus tendencias, de tecnologías innovadoras. Simplemente, reflejan la continuidad de la vida en un lugar. Por este motivo, ingresar a un país nuevo y desconocido, mis primeros pasos los dirijo no solamente al cementerio o a la feria artesanal, también, a la curiosidad que me enca-mina, siempre, hacia las antigüedades. Alguien me diría que las cosas antiguas en Chi-le realmente no son antiguas y que no vale la pena vagabundear por el país buscándolas, pero yo les contesto que paseando por las ferias no suelo comprar nada – solamente ¡escudriño! ¡toco! ¡huelo! ¡palpo las cosas! y me siento como si estu-viera, por un ratito, en otra época. Y esta sensa-ción no me marea. Es verdad que uno no va a Chi-le para encontrar los vestigios de los tiempos pa-sados. Sabiendo eso, vayámonos por la ruta de antigüedades. Comencemos nuestra búsqueda de antiguallas santiaguinas. En el Persa Bío Bío, (ubicado en la estación Franklin del metro de Santiago), uno en-cuentra todo tipo de cachivaches. Quien quiera matar varios pájaros de un tiro, tiene mi recomen-dación para pasar por acá. En este recinto uno encuentra de todo, como: rosales para el jardín, carne para hacer el asado, pomada para curar reu-matismo, bolsos de piel de serpiente, libros anti-guos a mitad de precio, etc... Me parece que es un lugar para los aficionados-errabundos. Aquí, se encuentran los objetos e instrumentos musicales más interesantes y mejor conservados. Mirando bien, se puede dar con tesoros como pinturas vie-jas... Sin lugar a duda, visitar el Persa Bío Bío es una excursión para un día entero... En caso que a alguien le dé ganas de pasear más hacia el centro, observando, además, la parte

más hermosa de Santiago, recomiendo un peque-ño (jaja) recorrido por avenida Brasil, desde Ala-meda hasta río Mapocho. Llenos de emociones surgidas por este paseíto agradable, por el verda-dero centro viejo de la ciudad (con palmeras im-presionantes), llegamos al galpón (la antigua co-chera de tranvías), que parece ser todo lo contra-rio del Bío Bío. La feria es bien organizada, cada uno de los mercaderes conoce su lugar, al primer vistazo se ve quien es quien. Es el foco de hábiles vendedores, donde no es posible comprar nada de oferta o negociar los precios. Si no fuera por el ritmo lento del lugar, se podría decir que la gente hace todo el esfuerzo, solamente, para desempol-var, lustrar, abrillantar una cosa y luego venderla a doble precio. Acá todo es caro. Si buscas la aven-tura y quieres descubrir algo – no es el lugar co-rrecto. Ahora bien, si de verdad te atraen mue-bles, productos de metal o artesanía mapuche de madera – aquí, al menos podremos tocar ... sillas, tinas, escudillas, palanganas y otros. Lo más mara-villoso son los palos que sirven para sacar pan del horno y que hasta hoy son usados en todo el país. Aparte de la sensación tan agradable de estar en este lugar, al lado del hall principal lleno de muebles, se encuentran innumerables almacenes, talleres y estudios cubiertos de polvo, de donde aún no todo ha sido sacado a la luz. Si no eres apasionado de las caminatas bajo la sombra de palmeras ancianas, un día sábado súbete a un taxi con rumbo a la Plaza Perú. El mer-cado de allá es como la nobleza de todos los mer-cados de antigüedades que va relacionado con sus precios. Tal vez, debido a esta distinción es el que más me ha gustado, sobre todo porque puedo en-contrar cosas chiquititas: plumillas, ganchillos que antiguamente se usaban para arreglar los puntos en las mallas (todavía se acuerdan de que es

MERCADOS DE PULGAS

Page 37: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

37

eso?)... También, se pueden encontrar otras curio-sidades. Esta plaza es importante porque los ven-dedores tienen sus propias tiendas verdaderas y si uno comienza la aventura de buscar lo antiguo, en el intertanto, se puede conocer a mucha gente que nos ayude encontrar lo que necesitamos. En Chile para sentirse como verdadero descubri-dor hay que buscar lo típico por su tradición. Y eso es lo más cerca posible y en plena comodidad. Por ejemplo en el centro comercial Caracol, al lado de Los Leones de la calle... aquí, se esconden tres pi-sos de cuadros, cubertería, platos de plata, reci-pientes de vidrio, etc... Estos últimos hechos en algunas fábricas, que antiguamente existían en Chile, son muy emblemáticos para las costumbres de este pueblo andino: jarras, cántaros, aceiteras, garrafas, vasones, vasos, vasitos, botellones, bote-llas, botellitas… Qué es lo que nos falta...? Ah!, el Barrio Italia. Todos los sábados, el mercado de antigüedades de la calle se mezcla con restaurantes chiquitos, tien-das y turistas que pasean por este. Entre las calles Caupolicán y Lautaro uno puede escoger y encon-trar varios recipientes de aleaciones tradicionales, ornamentos, etc. A su vez, se puede solicitar la re-

novación de los muebles recién comprados. Si a uno no le gusta el arte antiguo, justo al lado está La Sala, una de las galerías de pintura más conoci-das en Chile (La galería, sintiendo el marco del tiempo, cambió de sede a este lugar, tan de moda en los últimos años). Al mismo tiempo La Sala nos deja ver qué de nuevo? están creando los artistas contemporáneos, sin tener que pasar por las calles en esta época tan fría del año. Cuanto más nos acercamos al final del año, hay menos tiempo para ver las novedades que tiene la Feria de Antigüedades, ubicada a los pies de la Municipalidad de Providencia. ¡Créanme! no es un lugar de reuniones “de negocios” es más que eso! Es el lugar del señor que vende libros antiguos con la señora que ofrece las vajillas viejas, de nosotros-visitantes con los vendedores. Agrego, que desde que resido en Santiago, siempre, veo el mismo mueble que a partir de diciembre está en “su lu-gar” en la calle Pedro de Valdivia. Y los ojos de la muñeca antigua ve a la gente curioseando entre miles y miles de chucherías y antiguallas. El verda-dero objetivo nunca es el de comprarlas...

Grażyna Machałek, Cónsul de Polonia en Chile

es.w

ikip

edia

.org

/wik

i/P

ers

a_B

io_B

%C

3%

AD

o#m

edia

vie

wer/

Arc

hiv

o:G

alp

ones_B

iob%

C3%

AD

o_5.J

PG

“EN EL PERSA BÍO BÍO, (UBICADO EN LA ESTACIÓN FRANKLIN DEL METRO DE SAN-

TIAGO), UNO ENCUENTRA TODO TIPO DE CACHIVACHES. QUIEN QUIERA MATAR VA-

RIOS PÁJAROS DE UN TIRO, TIENE MI RE-

COMENDACIÓN PARA PASAR POR ACÁ”

EMBAJADA DE POLONIA EN SANTIAGO

Page 38: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

38

COMPRAR, COMER, ENCONTRAR

E l primer disco que compré, en Chile, fue en la tienda Kind of Blue, ubicado en el barrio Lasta-

rria (calle Merced 323). Desde entonces, es una de mis tiendas favoritas. Aquí, encontraremos lo me-jor de lo clásico, ediciones para coleccionistas y un dueño, siempre, dispuesto a encargar nuestra or-den a los Estados Unidos – hay agradables sorpre-sas para melómanos. Como sugiere el nombre de la tienda, se refiere al famoso disco de Miles Davis. La visita será fructífera para los amantes de Blues y Jazz. También, encontrarán estantes con música Salsa, Bossa Nova, Samba, música del mundo o buen Pop. No todos saben que la tienda tiene un segundo piso lleno de vinilos. Si alguien busca música chilena, especialmente bandas actuales y no tan conocidas, debería echar una mirada en La Tienda Nacional, a un par de pasos de Kind of Blue (calle Merced 389) donde se organizan, a demás, encuentros con artistas y to-catas pequeñas. Buscando vinilos, regularmente, visito la tienda Sonar ubicada en el subterráneo de la entrada de la estación metro Los Leones (Av. Providencia 2209, Paseo Las Palmas, 2209, local 017). Los es-tantes están llenos, principalmente, con música Rock, Pop, Electrónica y alternativa; y los amantes del Jazz, Blues y los clásicos latinoamericanos, tam-bién, van a encontrar algo. Aquí, compro ediciones limitadas de vinilos o discos lado B. Hay, igualmen-te, conciertos en DVD. Sonar es otra tienda donde el dueño sabe exactamente lo que tiene y lo que vende, por ende, se puede pasar una hora hablan-do de discos favoritos o de los mejores conciertos de la vida. Discos y vinilos se pueden encargar. Vale la pena recorrer los alrededores de la es-tación metro Los Leones, porque aparte de la tien-da Sonar, se podrán encontrar otras tiendas: Dis-quería Billboard (Providencia 2124 Local 5, Galería Boulevard Drugstore), Funtracks (Nueva de Lyon 029) y Needle Vinyls (Avenida Providencia 2124, Galería Drugstore), donde, aparte de discos, se puede comprar equipos de tocadiscos estilosos. Tengo tres lugares favoritos, donde encontrar música en Santiago. Uno de ellos es, el persa Bío Bío, ubicado al lado de la estación metro Franklin (Galpón 5, local nº 100). Su dueño es el señor Or-lando. Éste es un gran fan de Elvis Presley. Vende vinilos, joyas y joyitas de los años 60 y 70. Además, tiene clásicos que antes fueron muy populares, y

que actualmente son recordados por apasionados coleccionistas. Aunque su local no es muy grande, la visita es, siempre, una gran inspiración y una fuente de conocimiento. Simplemente, es imposi-ble salir con las manos vacías, especialmente si a alguien le gusta la Samba, el Bossa Nova o el Funk. Otra gran ventaja del lugar es que, siempre, se puede escuchar cada vinilo antes de comprarlo. Por otro lado, los precios parten con pocas lucas. En general vale la pena dar unas vueltas por el persa Bío Bío. Está lleno de locales de música, de viejos discos y vinilos cubiertos de polvo que, toda-vía, pueden hacer a alguien muy feliz. Los hallaz-gos suelen ser muy sorprendentes, como por ejemplo: ¡el mío! Leerán, el año pasado cuando compré un vinilo de Irena Santor (cantante polaca, años 70 y 80, del siglo pasado) lo adquirí por solo 2 mil pesos chilenos! En similares ocasiones, estos precios se dan en pequeñas tiendas de la Avenida Italia donde los dueños se deshacen de muebles viejos y, a menudo, de discos y vinilos de sus pa-dres o abuelos. Los interesados en música latinoamericana de-berían ir a la tienda Discomanía, (cerca de la Plaza de Armas), ubicada en la calle 21 de Mayo 583 - local 894, funciona desde los años 50. La oferta es muy amplia: Cueca, música Andina, Folklor, Etno, Nueva Canción Chilena, Canto Nuevo, Bolero, Tan-go, etc. Discomanía cuenta con página web que, funciona como tienda online (www.chilediscomania.com). Vale la pena seguir las noticias sobre las ferias de música de cada ba-rrio de la capital y de la Feria Internacional de Mú-sica. Ésta última se desarrolla en el Centro Cultural de la Estación Mapocho. Es el evento, de música, más grande en Santiago! Dura un par de días y se realiza cada año. Es una, muy, buena oportunidad para comprar un disco y ver artistas en vivo (www.feriapulsar.cl). Por otro lado, si a alguien le gusta leer revistas de discos y novedades, antes de ir a las tiendas, le recomiendo la página www.musicapopular.cl con actualidad e historia de la música en Chile. Monika Trętowska, Periodista, viajera y corre-sponsal de la Radio Nacional Polaca en Chile y América del Sur. Autora del blog: tre-svodka.com

Música

Page 39: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

39

AMBASADA RP W SANTIAGO DE CHILE

”ÉSTE ES UN GRAN FAN DE ELVIS PRESLEY. VENDE VINILOS, JOYAS Y JOYITAS DE LOS AÑOS 60 Y 70. ADEMÁS, TIENE CLÁSICOS QUE ANTES FUERON MUY POPULARES, Y QUE ACTU-

ALMENTE SON RECORDA-

DOS POR APASIONADOS COLECCIONISTAS.”

EMBAJADA DE POLONIA EN SANTIAGO

Page 40: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

40

BICICLETAS

D esde hace cuatro años observo como las bicicletas se hacen cada vez más populares

en Chile: hay más ciclistas en las ciclovías y en las calles aparecen nuevas tiendas bien surtidas, ta-lleres e incluso ferias para bicicletas; además cada domingo se habilitan “recreo-ciclovias". Me alegro que la ciudad se haga cada vez más ama-ble para los amantes de dos ruedas. En caso de querer comprar una bicicleta vale la pena investi-gar lo que ofrece el mercado. Buenas tiendas. En la comuna de Santiago se encuentra la calle San Diego llamada, también, “la cuenca de las bicicletas”. Aquí, podemos en-contrar varias tiendas que ofrecen bicicletas de todo tipo, como: deportivas, de paseo, de mon-tañas, plegables, las bmx, para niños etc. y tam-bién los accesorios,, y desde muy baratas a bas-tante caras:. Cada uno encontrará algo a su gus-to . También, cabe mencionar, que las tiendas ofrecen servicio de garantía. Las tiendas venden las populares marcas chilenas como Oxford y Bianchi, como las marcas extranjeras Schwinn, Trek, Scott, Schwalbe, Raleigh etc. También se puede comprar bicicletas polacas Kross. Algunas de las tiendas que se encuentran en la calle San Diego son: Rey de las Bicicletas (www.elreydelasbicicletas.cl), Bikenew (www.bikenew), Outlet Bicicleta (www.eloutletdelabicicleta.cl), San Diego Bike Shop (www.sdbikeshop.cl), Mundo Bikes (http://mundobikes.cl), Terrbike (www.terrabike.cl), MKR (www.mkr.cl), MAQ Bike (www.maqbike.cl), Bicicletas Vargas (http://bicicletasvargas.cl), Caupolican (www.icbikes.cl), o Esper Bicicletas (www.casaesper.cl). Por otro lado, sugiero otras tiendas de bici-cletas (Full Bike, Trek Bicycle, Belda Cycles, Belda Kids, Scott) que se encuentran en Mall Sport en Av. Las Condes 13 451 y las tiendas online www.beldabikes.com y www.urbant.cl.

Ciclistas furiosos. Además dejo dos enlaces para los amantes y usuarios de bicicletas: www.chilebikes.cl y www.bicicultura.cl. A los fa-náticos les recomiendo visitar el sitio del Movi-miento de Ciclistas Furiosos donde encontrarán informaciones interesantes y noticias relaciona-das con la promoción de la cultura bicicletera www.furiosos.cl También hay que recordar que el gobierno chileno y las autoridades de la ciudad anunciaron la extensión de las ciclovías en todo el país. Se estima que solamente en Santiago habrá 1000 km de ciclovías antes del año 2025, incluye alre-dedor de 200 km actualmente existentes. Para construirlas se usará el costado del río Mapocho que cruza la ciudad. ¡Nos vemos en el camino!

Radosław Smyk, secretario de Asuntos eco-nómicos de la Embajada de Polonia en Santia-go.

En la ciclovía en la calle Marin con Salvador. En el fondo

se encuentra una tienda y taller de bicicletas con un mural

característico.

COMPRAR, COMER, ENCONTRAR

Page 41: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

41

PRENSA CHILENA

PRENSA CHILENA SOBRE POLONIA Y SUS POLACOS En nuestra revisión por la prensa chilena, queremos mostrar lo diverso que se dice de nuestro país y que, desde luego, crea nuestra imagen en el exterior. Pareciera ser que, una mención sobre nuestra Polonia puede encantar, aumentando la conciencia de los lectores y ser algo más atrayen-te que, los análisis de múltiples páginas o los comentarios formales de las portadas. Nuestra selección de informaciones para el boletín trataremos con más distancia.

L os medios de comunicación en Chile, dedica-ron mucho espacio al describir la invitación que envió la presidenta de Chile, Sra. Miche-

lle Bachelet, a los expertos internacionales. Ésta, tuvo como objeto analizar el sistema de pensiones y recomendar los posibles cambios que se pudie-ran introducir en Chile. Entre ellos, (expertos), se destaca a la profesora polaca, de la Escuela Supe-rior de Comercio de Varsovia, Sra. Leokadia Ore-ziak. También, el portal economista chileno, El Pulso, subraya su actitud crítica hacia los sistemas de pensión, basados en los fondos de inversión privados.

El portal Terra presentó la iniciativa de nueve paí-ses europeos, entre ellos Polonia, para formar el Instituto Europeo para la Paz. Su objetivo, sería, crear un mecanismo para resolver, de forma efec-tiva, los conflictos a nivel global.

Juan Antonio Muñoz, periodista musical de El Mercurio, mantuvo una actitud crítica hacia uno de los estrenos más significantes de este año del Teatro Municipal de Santiago. La interpretación de la ópera del compositor checo Leoš Janáček, ¨Katia Kabanova¨, la consideró como ¨desmesurada¨. Uno de los lados sobresalientes del espectáculo, según él, es la presencia del cantante de ópera polaco, Aleksander Teliga.

El Mercurio dio la reseña del último libro de Anne Applebaum, el título español es El Telón de Acero. La destrucción de Europa del Este (1944-1956). La autora del texto es la profesora de la Universidad Católica de Chile, Alejandra San Francisco.

El destacado escritor chi-leno Jorge Edwards habla con entusiasmo, sobre la exposición Everybody is Nobody for Somebody que tuvo lugar en la ciu-dad de Madrid, en Espa-

ña. Donde, también, presento su colección Graży-na Kulczyk. Edwards acentuó su importancia no solamente artística, sino también intelectual.

Los periodistas de deporte de La Tercera mencio-nan el buenísimo juego de la selección polaca du-rante la Copa Mundial del año 1974. El texto con-memoró a ¨las Águilas de Górski¨. Como ilustra-ción sirvió la fotografía del partido de semifinales, donde se presentó Polonia Vs. Alemania Occiden-tal y Grzegorz Lato (polaco) jugó contra Paul Breit-ner (alemán).

El periódico La Tercera publicó un artículo, de una página, bajó el título significativo El milagro pola-co en educación. El texto trata de la posición pro-minente y reveladora que goza Polonia en las cali-ficaciones internacionales sobre el nivel de educa-ción. Los periodistas destacan dos valores de la reforma de educación polaca: Autonomía y Des-centralización.

El Día, describe la expedición de dos muchachos de la ciudad de Coquimbo, Rubén (13 años) y Clau-dio (10 años), a Polonia. ¨Sus sueños se han hecho realidad¨, así el periodista concluye su visita. Esta expedición fue posible gracias al intercambio de alumnos entre la escuela secundaria de Juan Pa-blo II de Lublin en Polonia y la de Coquimbo en Chile.

Page 42: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

42

BIENVENIDOS AL FINAL DEL MUNDO

¿Físico o arquitecto? ¿Bailarina o guitarris-ta? ¿Crítico de cine o el diseñador del cru-cero más seguro de todo el mundo? o ¿quizás simplemente una buena persona? ¿Quién sabe que va a ser de estos niños en el futuro? Crece una nueva generación de polacos, que nacieron, aquí, en Chile. Les mostramos y cruzamos los dedos: ya, hoy, son totalmente especiales. La columna es-tá patrocinada por el Club de Pequeño Po-laco en Chile (www.klubpolaka.cl)

Gabriela Padres: Anita Dzie-ciątkowska y Francis-co Briceño Mide, pesa: 52 cm, 3,400 kg ¿Quien será en el futuro? Según su mamá: bai-larina y políglota además Según su papá: guitarrista clásica

Lucas Padres: Justyna Skro-bańska y Cristián Maze Mide, pesa: 51 cm, 3,265 kg ¿Quien será en el futu-ro? Según su mamá: crítico de cine Según su papá: diseña-dor de barcos

Ignacio Padres: Ula Wno-rowska y Mauricio Javier Fuentes Vega Mide, pesa: 51 cm, 3,890 kg ¿Quien será en el futuro? Según su mamá: cientista y descubri-dor (tal cual como Ignacio Domeyko; en realidad los amigos ya le llaman el “pequeño Domeyko." Según su papá: espero que sea una buena per-

sona

Miłosz Humberto Padres: Agnieszka Anie-la Muchalska y Humber-to Alejandro Carrasco Gomez Mide, pesa: 55 cm, 4,380 kg ¿Quien será en el futu-ro? Según su mamá: Hmm… un gran (pero no en el sentido literal ya que nació bien grande), amado y cariñoso humano y un destacado médico o arquitecto, según la tradición de la familia. Según su papá: un gran físico y descubridor

CLUB DE PEQUEÑO POLACO

Page 43: Boletín de la Embajada de Polonia en Chile No 16

43

M i nombre es Pędzel (“pincel” en polaco) y dicen que mi cola es parecida a un pin-

cel. Tengo dueña, es la Embajadora de Polonia en Chile y estoy orgulloso y agradecido de ella. Pero no siempre fue mi dueña. Antes, abandona-do, vagabundeé por las calles de Santiago. En aquellos tiempos, me llamaban “callejero”. Algu-na vez tuve una casa, pero me echaron y ya no recuerdo ¿cuándo y por qué? o tal vez, no quiero acordarme. Tuve hambre, mucha hambre! frío! y miedo!, especialmente cuando llegaba la noche, pues, soy pequeño. Un día, aburrido de andar sin rumbo (no sabía que era el día de Pascua!) decidí meterme por la cerca de alguna casa (algo me dijo que debía hacerlo. si! si! mi inteligencia me dijo que debía hacerlo), raudo y veloz, atra-vesé la cerca de un jardín. E Inesperadamente, salió una señora (solamente, después me enteré que era alguien muy importante) gritó asustada

y con sus gritos, claro! que yo también me asus-té, y mucho. En un segundo, nuestras miradas se cruzaron, quedando suspendidas en la velocidad de la luz. En ese instante, mi corazón supo que sería mi dueña y que me quedaría con ella para siempre. Acto seguido, sacio mi hambre, devore una vienesa exquisita! con sus manos cálidas, acariciaba mi lomo y cola frondosa. Después fui-mos a dar un paseo. Ah! Pero no cualquier pa-seo. Fue mi primer paseo. Nuestro primer paseo! Sujetó mi cuerpo con una larga cinta roja, pues no tenía ninguna correa. Me veía tonto, tan tonto! que mis amigos perrunos se reían de mí. Mas, no me importo! y con garbo y alegría des-bordante, paseamos por los alrededores de mi nueva casita. Y por primera vez, en mucho tiem-po, me sentí feliz! Y yo, que pensaba que me encontraba en un callejón sin salida, pero al fin encontré la felicidad. ¿Por qué? No sé responder.

CALLE

SIN SALIDA

ANIMALITO