Asi Que Quieres Ser Arquitecto

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    E S C A LA S A R Q U IT E C TO N IC A S

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    ...A s! q u e q u ieress er arq uite cto

    R oger K . Lew is

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    IS er 0n o s e r ... larquitec to?

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    1lP or q ue s er arq uitec to ?

    Ladecision de convertirse en arquitecto deberia ser una deci-sion positiva basada en expectativas positivas, lQue puedeuno esperar? lCuales son las recompenses y motivacionesque Bevan a hombres y mujeres a invertir de cinco a ochoalios en una forrnacion universitaria y profesional rigurosa,tres alios 0mas adquiriendo experiencia, y decadas mas de-sarrollando la practice, la docencia 0 la investigacion arqui-tectonica?

    Dinero y estilo de vidaEmpecemos con un incentivo obvio con elque puede relacio-narse a la mayoria de las personas: el dinero. La mayoria delas personas ejercen una carrera 0profesion para ganarse lavida, entre otras cosas, y para rnejorar sus ingresos potencia-les, Pero los ingresos de los profesionales pueden variar de.manera drastica, en especial en el campo de la arquitectura,Algunos arquitectosapenas ganan 10 suficiente para asegurarsu supervivencia, en tanto que otros logran una opulencia re-lativa. Cada nivel de ingresos susten tala eleccion del estilo devida correspondiente. Debido a que al arquitecto suele aso-ciarsele con personas y circunstancias que reflejan estilos devida suntuosos, elpublico asume que los arquitectos son pro-fesionistas bien acomodados, acaudalados, de grandes ingre-sos. Algunos 10 son. La mayo ria no.Esposible lograr una riqueza sustancial como arquitecto -ysin lugar a dudas algunos arquitectos 10 persiguen comometa personal principal-, pero es poco probable. En cambio,la mayoria de los arquitectos llevan una vida comoda 0mo-desta, y gozan de una estabilidad y prosperidad economica

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    C U I 0 ' 10 f lI P . .. UJf(/UlIOCIO? 22

    razonable pero limitada. Los ingresos promedio en la profe-sion de la arquitectura son tipicamente de clase media, com-parables con 1 0 que ganan profesores universitarios 0 agentesde ventas.Los arquitectos graduados empiezan su carrera como asala-riados cobrando un sueldo por hora, mes 0afio que refleja lascondiciones imperantes en el mercado. Despues de tres anosde experiencia y practica adicional, pueden convertirse enduerios asociados 0 principales de despachos, en sociedadcon otros 0como propietarios unicos. Normalmente, las com-paruas mas grandes ofrecen ingresos mas altos en todos losniveles, desde socio mayoritario hasta dibujante de contrata-cion reciente.Los arquitectos que obtienen grandes ingresos pueden vivirmuy bien. Por 10 general, viven en atractivas casas decoradasy amuebladas a la moda. Realizan viajes a lugares exoticos,esquian, son due nos de veleros 0se escapan a vacacionar enlas montanas 0 en el mar. Pueden coleccionar obras de arte,ofrecer frecuentes recepciones sociales, hacer contribucionessustanciales para campafias politicas 0apoyar obras e institu-ciones de caridad. Todo esto cuesta dinero, del que la mayo-ria de los asalariados carece.No obstante, para gran parte de los arquitectos menosacaudalados existen varias opciones de estilos de vida que nodependen tanto de ingresos elevados. Muchos arquitectos en-cuentran gran satisfaccion en vivir de manera modesta en ciu-dades, suburbios, poblaciones pequefias 0 areas rurales. Susestilos de vida pueden ser mas precarios, incluso en ocasionesse aproximan aI nivel de subsistencia, pero tambien puedendisfrutar de una flexibilidad y libertad que no se conoce cuan-do se persigue el exito economico, pues la rueda del flujo deefectivo requiere movimiento y lubricadon constantes.Algunos arquitectos han descubierto otros medios, fuera dela practice arquitectonica tradicional, para sostenerse econo-micamente. Quiza la manera ideal de ejercer la arquitecturasea sin estar obligado a ganarse lavida con ella. Asl,losarqui-tectos se han convertido en urbanizadores 0 contratistas,ganando (0 perdiendo) en ocasiones mucho mas dinero delque es posible con lasola practice del diserio. Los arquitectos

    ifb,r que ser arqu itecto? 23

    ejercenla docencia en las escuelas de arquitectura. dondeen ocasiones sus ingresos en nueve meses pueden represen-tar un afio de trabajo en una oficina. Otros mas, por buenasuerte 0con toda intendon, mejoran 0estabiIizan el ingresofamiliar con los bienes 0mgresos de sus conyuges. Desdeluego, elcamino mas corto es heredar din~ro, pero son con-tados los que corren con esta suerte. Quienes son h~rede-ros, pueden ejercer la arquitectura como un pasatiempoapasionado.A veces. generar ingresos puede constituir un serio problemapara los arquitectos y,como severa mas adelante, laremune-radon adecuada y regular esun problema actual para lapro-fesi6n entera. Adiferencia de otros negocios y profesiones, laarquitectura no es un campo en el que se entra para ha~~rserico segtin los convencionalismos actuales, Las prob~blljda-des estan en contra. Pero si se puede mantener un myel devida decoroso con la profesion lamayor parte del tiempo, in-duso sin poseer un talento excepcional-y si a uno no Ie in-comoda apretarse un poco el cinturon de vez en cuando.

    Positi6n socialLa posicion social es otra de las razones par las que uno ~-dna elegir laarquitectura como carrera. Un concepto esc~m-dizo, en el mejor de los casos, que implica alcanzar ~lertaposicion elevada en la jerarquizaci6n que hace la sOCle~adpor 10 que la gente es y hace. La posicion social es relati~a,pues solo tiene sentido en comparadon con otras.ocupaclO-nes 0profesiones. La sociedad asume que los arquitectos soninstruidos, y que poseen tanto sensibilidad artfstica como pe-ricia tecnica. La sociedad no sabe a ciencia cierta lamanera enque trabajan los arquitectos, pero sa~e que con frecuenciacrean disefios monumentales para cbentes monumentales.Como resultado, los arquitectos pueden ser objeto de respetoy admiracion por parte de los miembros de un siste~a socialque, por desgracia, menosprecia a la gente que considera ca-rente de preparacion, menos talentosa y menos aceptable encompania de personas acomodadas, influyentes 0 de las lla-madas de alcumia.

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    Perseguir laposicion social F'flrsi misma es una empresa du-dosa. Pero todos estamos conscientes de la posicion social, ypara m~chas personas alcanzar una posicion elevada puedeconverti rse en una meta deseable y exphcita Esmotive de sa-tisfaccion y estimulante para el ego ser respetado, ser invita-do a lugares y visto con gente que uno admira, 0ser elogiadopor nuestros colegas cuya opinion nos importa tanto. Comoprofesionistas, los arquitectos generalmente se asocian conotros profesionistas, personas de las artes 0 personas de losnegocios 0del gobierno. En muchas culturas,la arquitecturase encuentra entre las profesiones mas respetadas. EIAmeri-can Institute of Architects ha informado que millones deegresados de las escuelas superiores en Estados Unidos -enpart icular menores de 45- han expresado interes enIa arqui-tectura. Y cualquier arquitecto nos dira que con frecuencia haescuchado a personas mencionar que debieron 0 pudieronconvertirse en arquitectos,.Como corolario de laposicion social, laposibilidad de formarparte deillamado es tablishment puede motivar a algunos ar-quitectos. Por es tablishment debe entenderse la estructura depoder dentro de una comunidad, poblacion 0ciudad, ya quelos arq~itectos rara vez tienen acceso a las estructuras de po-der nacionales que no sean las creadas por y para acadernicosy elites culturales. Pertenecer al es tablishment significa tenerrelacion cercana con los negocios, con los intereses politicos ygubernarnentales, y ser visto como una fuerza con la cual secuenta entre las personas con influencia del mismo nivel enel circulo social local.

    Posicion social dentro del es tablishment significa ser conocidopor personas desconocidas, ser solicitado para participar enconsejos y comites, ser buscado periodicamente por la pren-sa, ser invitado a funciones para recaudar fondos, y saber 10que esta ocurriendo tras bambalinas -ser una persona infor-mada de las deliberaciones extraoficialas que tienen lugar ento~as la~com~nidades, gran des y pequenas, y que de mane-ra invariable mduyen a quienes se yen a sf mismos como laelite del poder. Evidentemente,la posicion social y la confer-macion del es tablishment guardan una estrecha relacion.

    I . P o r 4ue s e r a r q U Jl e cr o ? 25

    FamaDespues de la conquista de una posicion econornica y socialse encuentra la tentacion de Iafama. Lafama puede llegar sinriqueza, y en laarquitectura suele ser asi, Lograr elreconoci-miento publico, sino lacelebridad, puede ser un finen simis-mo por encima de todos los demas, Todos pueden nombraral menos uno 0 dos arquitectos famosos, y los arquitectospueden citar docenas, Para ser famoso por 10 general se re-quiere que un individuo haga algo excepcional y que otros 10yean, juzguen y, 10 mas importante, que 10 informen a un au-ditorio receptive e interesado, de preferencia a una escalanacional 0 mundial. Los hechos excepcionales pueden serconstructivos 0destructivos, en tanto Sean excepcionales y,en consecuencia, dignos de mendon.La mayoria de los arquitectos se hacen famosos de maneragradual al realizar trabajos que finalmente son reconocidospor su excelencia. Con frecuencia tales trabajos son conside-rados innovadores 0aoant-garde en sus etapas iniciales, siendolas fases subsecuentes periodos de refinamiento y variacion.Pocos arquitectos buscan lainnovacion en cada proyecto. Entodos los casos, la fama seestablece y mide por consenso pro-fesional , aunado a juicios realizados por historiadores, cri-t icos y periodistas. Por ejemplo, considerese el siguientearticulo del Wa ll S tr ee t J o ur n al : "Cincuenta y ocho decanos ydirectores de reconocidas escuelas de arquitectura elabo-raron recientemente la lista de los principales arquitectos deedificios no habitacionales de este pais. EIganador indiscuti-ble fue I. M. Pei, quien fue mencionado por casi la mitad delos decanos ...Resumiendo, los diez primeros fueron RomaldoGiurgola, Cesar Pelli, Kevin Roche, Philip Johnson, GunnarBirkerts Michael Graves, Charles Moore, Edward LarrabeeBarne;, Richard Meier".Todos estos arquitectos son bien conocidos para otros arqui-tectos, pero pocos 10 son para elpublico. Hace quince afios.Ialista habria sido muy diferente. Hoy, solo algunos de esosnombres estarian en esa lista, y dentro de quince anos.Ia listaactual habra cambiado de nuevo. Yen ultima instancia, Zcuales el significado 0la validez real de elaborar una lista de los

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    SOlO no ser... iarquitecto? 26

    diez principales arquitectos? iImaginemos tener que elabo-rar listas de los diez principales abogados, dentistas, jefes depolicia, ingenieros quimicos, dermatologos 0 editores de pe-ri6dicos!Para los arquitectos,la fama y elreconocimiento se dan a tra-ves de la publicidad y lapublicaci6n de 10que hacen, dicen 0escriben. Esto significa no 5010proyectos y disenos de cons-trucci6n sino tambien g a n a r premios po r proyectos y conseguirque aparezcan en revistas y periodicos, Significa proyectarsey ser proyectado, Dictar conferencias y escribir acerca del tra-ba]o y la filosofia de uno, que otros hablen y escriban de uno,ganar 0 ser jurado en concursos: todo esto promueve la famay empuja a los arquitectos al centro de la atenci6n publicaprofesional.En la actualidad los acontecimientos se desarrollan con talrapidez que los actos de provocacion y revoluci6n prome-ten alcanzar la fama mas pronto. Hoy parece haber mayorcantidad de esfuerzos explicitos por notoriedad y celebri-dad como fines en sfmismos. Los arquitectos, quiza mas queotros profesionistas, consciente 0 inconscientemente anhe-lan lafama, debido a que gran parte de su trabajo espublico.Despues de todo, 10que hacemos se exhibe. Tal vez estemosen una especie de negocio del espectaculo. Ser famosopuede tener sus problemas, pero es una forma de certifica-cion publica, una validaci6n del exito y la salvaci6n delanonimato. lQuien no ha fantaseado con aparecer en laportada de la revista Times? No es sen cillo conseguirlo,pero es posible. Para los arquitectos, la fama por 10generalproduce un efecto secundario deseable: mas clientes y con-tratos. Perseguir la fama puede resultar un buen negocio.Por desgracia, la fama puede ser fugaz, consumirse por so-breexposicion, por modas que carnbian con rapidez y porgustos variables.

    InmortalidadLa fama no solo puede ser efimera sino tambien insuficienteen ultima instancia. Cuando consideramos los impulsos hu-manos basicos, la procreaci6n y la perpetuacion vienen a la

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    mente. Que mejor manera de trascender lavida biologica deuno que a traves de lacreacion de estructuras potencialmen-te etemas y permanentes que, incluso en su calidad de futurasruinas, podrfan contar a los futuros arqueologos, historiado-res y herederos de la cultura la historia de quienes fuimos y10que hicimos. La mayoria de las personas se conforma conque su descendencia y sus reliquias familiares sean conme-moracion de sf misrnos, pero los arquitectos pueden dejaratras arquitectura como monumentos a sfmismos.Quiza parezca presuncion 0 autoelogio, y no obstante tam-bien parece natural, el deseo de los individuos creativos dehacer algo que pueda perdurar para siempre. Recuerdo ha-ber pensado explicitamente al respecto cuando era un estu-diante que hacia comparaciones entre la arquitectura y otrasprofesiones. Solo la arquitectura pareda ofrecer la oportuni-dad de crear algo duradero e inmortal. Elarquitecto, pensabayo, sobrevive y vive para siempre a traves de su obra. Inclusosi mi nombre llegara a perderse en el olvido, ingenuamentecreia que mi creaci6n perduraria.Esprobable que muchos arquitectos compartan este impul-so de inmortalidad bastante romantico, aun cuando de ma-nera consciente 10nieguen 0 se resistan a el. Entendido ycanalizado con propiedad, es un impulso perfectamente sano,no presuncion. Un trabajo de arquitectura loable es en parteuna manifestaci6n de y acerca de su arquitecto: en ultimainstancia, es la obra del arquitecto laque queda atras. Desdeluego, la buena arquitectura tiene muchos creadores. Enconsecuencia, la paternidad debe atribuirsele no s610 al ar-quitecto sino tambien al cliente y a quienes construyen la;~ra, asf como a la sociedad y cultura de las que la arquitec-~ra forma parte .

    Contribuci6n a la culturaLos buenos arquitectos seyen a sfmismos como algo mas queprofesionistas al servicio de sus clientes por una remunera-cion. La arquitectura es una expresion y encarnacion de lacultura y las condiciones culturales, 0 incluso una critica dela cultura. Lahistoria de laarquitectura y la historia de lacivi-

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    S U I C flO set .: i .a rqu iteC!o? 28

    l izacion son inseparables. De hecho, los historiadores de laarquitectura pasan su vida profesional estudiando, analizandoe inte~retando l.~obra arquitect6nica no s610para compren-derla, smo tambien para entender los sistemas polit icos so-dales y e~~n6micos q~e la crearon, A traves del diseno' y laconstruccion, los arquitectos saben que pueden estar hacien-do una contrib~ci~n directa al inventario cultural de ideas ym,onumentos, sm irnportar 10insignificante que sea, Asf, labusqueda de logros culturales apropiados es una motivaci6nimportante para los arquitectos.~e~~em?s en elpasado y evoquemos imagenes de culturas ycivilizaciones en orden cronol6gico. Inmediatamente nosviene a la mem,oria la arquitectura: las piramides de Egipto,los ~emplo~ grIegos y romanos, las catedrales goticas, loscas~ll?s y ciudades medievales, las iglesias y plazas del Re-nactmiento, las casas y jardines ingleses, los kioscos asia ticos,las ciudades y rascadelos de la era industrial. La arquitecturaes un componente indispensable incluso de las culturas me-nos evolucionadas, Sisele pidiera a un nino describir elmundode los indios pieles rojas, lque nino no dibujaria una tienda?Pensemos en elhombre de Neandertal y pronto pensaremosen cavernas.Por,desgracia, no todas las obras arquitect6nicas ofrecen opor-tumdades para el enriquedmiento cultural. Sin embargo,cuando .sur~~n tales oportunidades, por modestas que sean,la contribucion del arquitecto puede no tener precedentesal rroponer n~e":.astend.endas de forma y estilo, tecnologia 0metodos de disefio, 0bien, la obra puede reafirmar 0 afinarconvenciones culturales e iconograffas ya establecidas. Envez de inventar algo nuevo, el arquitecto puede estar contri-buyendo alacervo creciente de obras culturales terminadas 0en proceso. La innovad6n y los cambios revolucionarios re-

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    quieren un desarrollo y evoluci6n ulterior. Los arquitectosdeben abordar esta tarea.

    A yud ar y e ns en ar a o tro sMuchos arquitectos se dejan llevar por motivos humanita-rios. Eldeseo de ayudar 0 ensefiar a otras personas puede sermuy intenso, y ya que la arquitectura puede ser de utilidadpublica y a la vez servir como arte, losarquitectos pueden sa-tisfacer con facilidad este deseo. La mayoria de los arquitec-tos se yen a sf mismos como benefactores de la sociedad,como humanistas y humanitarios. Incluso al disenar proyec-tos comerciales para clientes motivados por el lucro, los ar-quitectos piensan que tienen un cliente adicional de igualimportancia: el publico. Sienten una obligacion hacia todoslos que pueden usar, ocupar 0 ver las construcciones que di-sefian, tanto en el presente como en elfuturo -la obligaci6nno solo de proporcionar abrigo y espacio para actividades,sino tambien de instruir y estimular.Cuando las construcciones estan terminadas y se ponen enservicio, resulta muy satisfactorio para el arquitecto saber queelcliente, los usuarios y elpublico aprecian y sebenefician desu esfuerzo, En ocasiones los arquitectos crean ambientesque influyen de verdad en las vidas de las personas en unaforma positive, quiza mejorando su nivel de vida, su compor-tamiento, su sensacion de bienestar y seguridad 0 sus actitu-

    )des. Algunos estudios demuestran que los ocupantes de unedificio pueden sentirse mejor fisica y psicol6gicamente, tra-bajar con mayor eficiencia y ser mas productivos en ambien-tes disefiados con arte. Las proporciones bien elegidas, lailuminadon y los colores adecuados, las texturas y los deta-lles atractivos, las vistas agradables, el mobiliario comedo, lascualidades acusticas deseables, la ventilaci6n adecuada y lacomodidad termica pueden tener gran impacto en cuerpo ymente. Que formidable recompensa es para los arquitectosescuchar a clientes 0 usuarios expresar satisfaccion y gratitudpor la exitosa intervencion del arquitecto en sus vidas.Los arquitectos con conciencia social contribuyen en otrasformas ademas del diseno de edificaciones. Siendo expertos

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    Se r 0no ser . ., i a rqu i /ec /o? 30

    en cuestiones de organizaci6n, coordinaci6n e intermedia-cion, algunos arquitectos han tenido exito al asistir a indivi-duos, comunidades y grupos de interes particular en apurospara desarrollar proyectos, preservar construcciones 0salvarvecindarios. Aun cuando en estas si tuaciones los arqui tectosquiza no elaboren disenos 0planos, sus esfuerzos y conoci-mientos pueden redundar en const rucciones meritorias 0enuna mejor sensibilidad ambiental. Como la fama, aunque demanera muy diferente, trabajar para otros eleva nuestro egoy da credibilidad a nuestro sentido de realizaci6n y de la valiapersonal.Ensefiar es dar, y aun cuando no siempre este bien recom-pensado en el plano financiero, ofrece a los arquitectos opor-tunidades de enriquecimiento no monetario duradero. Enprimer termino, profesar y transmitir conocimientos a otroses una tarea placentera y l lena de sat isfacciones. En segundo,la docencia proporciona a los profesores tanto est imulo inte-lectual y educacion como 10 hace con los estudiantes, En ter-cero, la libertad academica y la flexibil idad de los programaspermite a los profesores de arquitectura ejercer, escribir, via-jar 0 realizar investigaciones, y ensenar al mismo tiempo. As!,los profesores motivados desempefian una funci6n de inter-cambio, al recibir 0 desarrollar ideas e informaci6nnuevaspara luego transmitirlas a sus estudiantes. Esta interacci6npuede ser profunda y duradera, lAcaso no es la mayor re-compensa de un profesor ver a ex alumnos aplicando conexito 10 que han aprendido 0 siguiendo los pasos de sus men-tores? Nada se compara con escuchar a un estudiante decirque 10 que uno le transmiti6 hace algun tiempo aiin 10 recuer-da, aun es importante y aun 10 aprecia,

    Las recompensas de la creatividad y larealizaci6n inte/ectual

    Gran parte de 10 que hacen los arquitectos se encuentra moti-vado por la fuerza del intelecto humano y del pensamientoracional , pero tambien intervienen las emociones humanas.Para los arquitectos, el matrimonio del intelecto y la emoci6nse manifiesta en el impulso por ser creativo: pensar, sentir,

    tI"tJ/' que ser arqui lec lo? 31

    hacer y materializar. A los buenos arquitectos los domina lavoluntad y pasi6n por ser arquitectos y por la gratificaci6n in-telectual y emocional que la crea tividad puede proporcionar.El impulso creativo es dificil de explicar pero fadl de reconocer.Aparece temprano en la vida y todos los seres humanos 10 expe-r imentan en cierto grado. Empezar con nada mas que materiaprima y pensamientos al azar y luego transfonnarlos en algotangible, bien hecho y estimulante para lamente y los sentidos,es la esencia de la creatividad, Para el arquitecto, la creaci6nde edificaciones ofrece innumerables momentos de regocijo.Crear algo hennoso y con la composici6n estetica apropiada-una obra de arte- es la meta prioritaria de muchos arqui-tectos. Su principal inquietud es disefiar objetos con arte-sean ciudades 0 edificios, piezas de mobiliario 0 teteras-, alos cuales mirar y admirar como uno miraria y admiraria pin-turas y esculturas. Aunque a otros no les agrade el diserio, elojo del arquitecto aun contempla la belleza que ha regalado almundo,La creatividad no se limita a producir obras de arte. La mentecreativa se complace en hacer cosas que funcionen, sean edif i-cios, maquinas 0juguetes. Una parte sustancial de la arquitec-tura aplicada consiste en crear ambientes ffsicos con unafuncionalidad satisfactoria. En otras palabras, ademas de serexpresiones artist icas, las edificaciones deben brindar espaciode manera creativa para las funciones humanas, poder cons-truirse con diversos componentes y materiales, proporcionarabrigo de los elementos naturales, resistir las fuerzas de la na-

    ~raleza preservando al mismo tiempo los recursos naturales,

    y ser costeables. AIcanzar simultaneamente los objetivos fun-onales y esteticos es el mayor reto crea tivo de laarquitectura.

    Una vez asumido este reto, la pasi6n del disefio tan 5610 seequipara con la excitaci6n de la realizacion. Ver construido enla realidad un disefio propio es motivo de jubilo tanto emo-cional como intelectual, y las recompensas de responder alos impulsos creativos se intensifican con la lucha que acom-pafia a la creatividad. Como se vera, superar la adversidadabsorbe gran parte de la energia de un arquitecto, ya quemuchos obstaculos se atraviesan en el camino que transitanel arquitecto y sus proyectos. En ocasiones, el solo hecho de

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    Sa , !J no set.: ( ,arqui tecto? 32

    conseguir que un proyecto llegue a levantarse esuna victoria,y cuando es buena arquitectura, la victoria esaim mas dulce.La arquitectura debe lograr muchas cosas para muchas per-sonas diferentes, por 10cual se requieren habilidades diver-sas que hagan frente a las complejidades del disefio y delproceso de construccion, Asi, parte de Ia satisfacci6n intelec-tual de ejercer la arquitectura radica en dominar estas habili-dades diversas y aplicarlas con ex i to a problemas diffciles. Lasmentes creativas y racionales suelen hallar gran placer en re-solver acertijos,analizar sistemas complicados, organizar datos,examinar opciones multiples y llevar a cabo tareas espedfi-cas. La arquitectura constituye un terreno fertil para que es-tas mentes trabajen,Examinemos el conjunto de oportunidades intelectuales aqutpropuesto. La arquitectura involucra laactividad tanto de lamente como del cuerpo actuando en concierto: pensamiento,dibujo, destreza, observacion. El arquitecto no s610debe sa-ber como dibujar una linea sino tambien por que y cuando,Todos los sentidos deben entrar en juego en laobservacion afin de que lamente pueda analizar y sintetizar. Las ideas debencomunicarse y explicarse en forma grafica y verbaL lCualesson entonces las aptitudes 0 talentos que contribuyen al do-minio y goce del arte y disciplina de la arquitectura?Habi li d ad e s g r ti fi ca s y u is ua le s . La capacidad de observar y ex-presar cosas en forma grafica,Aptitud tecnica. Competencia en maternaticas y el analisiscientifico (no necesariamente en una ciencia en particular).Habilidadesverbales. La capacidad de leer, escribiry hablar, deorganizar 0 analizar Iaexpresion verbal eficaz.Habi li d ad e s d e o r g an iz ac io n . Lacapacidad de analizar y sinteti-zar, de crear orden y direcci6n a partir del desorden y elcaos.Memoria . La capacidad de almacenar y recuperar informa-cion, imagenes 0 ideas.T al en to p ar a l a c om p os ic io n. La capacidad artistica para reali-zar lacomposici6n de una forma visual, en dos y tres dimen-siones, esteticarnente satisfactoria.

    .llJt fli,~ser 8rqui tecto? 33

    Todo esto es esencial para ser arquitecto; son los prerrequisi-tos para la realizaci6n intelectual y emocional en arquitectu-ra. Reflejan, asimismo, Ia naturaleza multidisciplinaria delcampo -la necesidad de los arquitectos de ser artis tas, arte-sanos, dibujantes. tecnologos, sociologos. administradores,contadores, historiadores, te6ricos, fil6sofos, apostadores yotras cosas de las que puedan valerse. Movilizar talentos enun campo tan ricoy diverso puede resultar en alto grado vivi-ficante y recompensante, tan estimulante como podrfa serlocualquier otra profesion.

    Gusto por el dibujoAun cuando en lasecci6n sobre la creatividad y la realizacionintelectual se mencionan brevemente las recompensas de laexploracion y la invencion grafica, es conveniente un comen-

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    S o r 0n o ser . . . Garqui tecto? 34

    tario adicional acerca del dibujo en sf. Para muchos arquitec-tos, el dibujo representa un uso del tiempo en extremosatisfactorio y estimulante -una actividad que constituye supropia recompensa.EIdibujo puede amarse. Puede ser terapeutico, ya que exigegran concentracion y olvidarse de todas las demas distraccio-nes 0preocupadones, Espersonal , ya que no hay dos perso-nas que dibujen exactamente igual. Para eldisefio, el tipo dedibujo mas vital-y acaso el mas disfrutable- es la elabora-cion de bocetos (en oposidon al dibujo de proyectos). EIdi-bujo mas espontaneo, mas plastico y mas interpretativo es elboceto. Al hacer bocetos, los arquitectos plasman y analizansus impresiones al mismo tiempo que exploran y expresannuevas ideas 0visiones. EIdibujo de proyectos, sea de mane-ra manual 0por computadora, tan solo transform a las ideasde los bocetos en analogos de la realidad.Dibujar formas arquitectonicas -edificaciones, espacios enconstrucciones, paisajes, espacios urbanos 0 mobiliario-debe ser tan natural para un arquitecto como leer 0escribir.De hecho, si se les permitiera escoger, muchos arquitectosprobablemente preferirian sentarse y dibujar que encargarsede las demas tareas que requiere lapractica de la arquitectu-ra. Con frecuencia elromance con el dibujo se lleva a los ex-tremos. Los arquitectos pueden producir dibujos cuyascualidades graficas abstractas rebasan las del diseno repre-sentado por los mismos. Algunos disefiadores y proyectistasocupan mas tiempo en la ejecucion y terminado de los dibu-jos mismos que el que dedican a desarrollar y perfeccionarsus ideas arquitectOnicas. Y con frecuencia vemos dibujos deun arquitecto que son tan seductores, con una composidontan artist ica y tan evocadora, que pasamos por al to los meri-tos del tema descrito en tales dibujos.Lapersona que tenga gusto por eldibujo, y en particular porel dibujo a mana libre, puede llegar a amarlo como arquitec-to. A quien no Iegusta el dibujo, quien 10encuentre tedioso 0diffcil , tal vez la arquitectura no sea la eleccion correcta. Lapasion por eldibujo y las tecnicas de dibujo que desarrollan ydominan los arquitectos, son

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    & J t 0n o : : ( //. . I1trqw/Gc/o? 36

    Liderazgo. Tener lacapacidad para persuadir e inspirar a otrosa seguirnos 0a aceptar nuestras propuestas, as! como para to-mar decisiones, sin importar sicuentan con bases firmes 0no.Valor . Disposicion para asumir riesgos que otros rehuyen,para experimenter, para aventurarse en nuevos territorios, paraperder asf como para ganar.Pasion. Lacapacidad de experimentar sentimientos intensosacerca de las actividades, personas, ideas, lugares 0cosas.Este inventario no constituye una lista completa de los requi-sitos para ser arquitecto, ni tampoco es excIusiva de esta pro-fesion. Sin embargo, muchos buenos arquitectos parecentener medidas dosificadas de todos estos atributos. La faltade alguno de estos puede llegar a ser un serio riesgo para al-canzar metas en la arquitectura 0 incluso para graduarse enesta area. En una disciplina en la que menudean lascrft icas ylos juicios negatives, la falta de confianza, temple y perseve-rancia puede ser devastadora, a pesar de que se nazca con ta-lento personal.Encontraste, un arquitecto con talento mediocre pero bende-cido con un gran carisma (una amalgama de varios atributos,en particular liderazgo, confianza en simismo y encanto per-sonal) puede desempenarse siempre muy bien. Este carismapuede tener mas impacto en la carrera de un arquitecto quecualquier competencia cuantificable aprendida en un pro-grama academico, En ultima instancia, la facilidad para ven-der y gular a otras personas puede conseguir mas que lahabilidad para dibujar, calcular, operar una computadora 0incluso concebir grandes pensamientos.Cualquier persona que considere laarquitectura como profe-sion, debera realizar un inventario serio de su personalidad.Con combinaciones variadas de rasgos individuales y en lasintensidades apropiadas, laarquitectura puede ser laprofeslonideal para sacar provecho de tales rasgos. De hecho, algunaspersonas parecen haber nacido para ser arquitectos: poseenuna mezcIa de intelecto, talento, habilidades y cualidadespersonales -algunas de incuestionable origen genetico-que hacen de Iaarquitectura su indudable vocacion.

    Ij~v que ser arqui lec(O? 37

    L lb erta d p ara d es arro ll ar 1 0 q ue u no es

    Quiza debido a que a los arquitectos se les concibe comopersonas creativas y artfsticas, la sociedad acepta sus desvia-ciones periodicas del comportamiento y las actitudes con-vencionales,o incluso las espera a veces. Muchos arquitectosviven en concordancia con su imagen, demostrando sus ten-dencias por la forma en que sevisten, hablan y trabajan 0porsus convicciones. Se esfuerzan por ser individualistas y noconformistas, si no es que radicales. Frank Lloyd Wright, lu-ciendo su memorable capa y su expresion arrogante, desafioy cuestiono todo, convirtiendose en un prototipo para los ar-quitectos iconoclastas.Asi, para las personas con tales inclinaciones, la arqui-tectura puede resultar mas atractiva como carrera que, diga-mos, las finanzas,la contabilidad 0lamilicia. Hay una especiede satisfaccion del ego y una sensacion de ser excepcional quenace de ser unico y diferente, de sobresalir, de ser notado yrecordado.Los arquitectos parecen tener mas opciones para desarrollarsu yo profundo a su modo en nuestra cultura , en especial encomparacion con otras profesiones universitarias. Parecentener mas libertad para conformar y controlar la imagen deslmismos que proyectan a sus colegas, a su clientela y al pu-"

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    r 5e r 0no ser . .. i a rqui leC lo? 3 f3

    La diversion se encuentra siendo ingenioso, creando anecdo-tas ~ absurdos visuales y diseflando fantasias, asi como enmedios recreativos mas convencionales. Pero los buenosmomen tos y las actividades 0distracciones divertidas son ne-ce~arias para al?o mas. Como se explica en el capitulo si-guiente.Ia arquitectura posee un lado negative, y tener unbuen momento puede ayudar a los arquitectos a hacer frentea los malos momentos.

    P or q ue n o s er a rq uite cto

    Sicitar razones para no ser arquitecto puede dar laimpresionde ser una herejia 0una traicion para la profesion de laarqui-tectura, mucho peor pareceria dedicar un capitulo completoal tema. Pero lahistoria estaria incompleta y seria engaflosa sidejara de incluir los aspectos "menos maravillosos" de ser ar-quitecto. Siempre que se nos dice por que deberfamos de ha-cer algo, podrfa haber razones no declaradas de por que nohabriamos hacerlo. La experiencia refuerza este heche, enocasiones de manera dolorosa. Pintar el cuadro completo deconvertirse en y ser un arquitecto ofrece al menos allector laoportunidad de tomar una decision informada, de acepta-cion 0rechazo, sin sentir que ha habido una tergiversacion,Las razones para no ser arquitecto son una cuestion de crite-rio. Por 10 tanto, 10 que sigue son mis propias observaciones einterpretaciones de los riesgos que es comun encontrar, losobstaculos en el camino y las fuentes de frustracion, Algunasson tipicas de todas las ocupaciones 0profesiones y otras sonmas particulares y endemicas de la arquitectura. En uno uotro memento, virtualmente todos los arquitectos han sufridoalguno de estos problemas, 0todos, y se han sentido abruma-dos 0desilusionados. Por desgracia, conocerlos 0 anticiparsea ellos no los hace menos obstructivos.

    Las pro babi lidades de co n segu ir l oCualquier persona que considere hacer carrera en laarqui tec-tura debera saber que, de acuerdo con datos estadisticos, lasprobabilidades de llegar a ser finalmente un arquitecto regis-trado (en Estados Unidos) pueden ser menores del cincuentapor ciento. Muchos estudiantes universitarios que eligen la

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    SV I 0no SO(,., Garqui tecto? 3 ,8

    Ladiversion se encuentra siendo ingenioso, creando anecdo-tas o _ absurdos visuales y disenando fantasias, asf como enmedics recreativos mas convencionales. Pero los buenosmom~ntos y las actividades 0distraccionesdivertidas son ne-ce~anas para algo mas. Como se explica en el capitulo si-gutents, la arquitectura posee un lado negativo, y tener unbuen momento puede ayudar a los arquitectos a hacer frentea los malos mementos,

    2P or que n o s er a rqu itec to

    Sicitar razones para no ser arquitecto puede dar laimpresionde ser una herejia 0una traici6n para laprofesion de laarqui-tectura, mucho peor pareceria dedicar un capitulo completoal tema. Pero la historia estaria incompleta y seria enganosa sidejara de incluir los aspectos" menos rnaravillosos" de ser ar-quitecto. Siempre que senos dice por que deberiamos de ha-cer algo, podria haber razones no declaradas de por que nohabriamos hacerlo, La experiencia refuerza este heche, enocasiones de manera dolorosa. Pintar el cuadro complete deconvertirse en y ser un arquitecto ofrece al menos allector laoportunidad de tomar una decision informada, de acepta-cion 0 rechazo, sin sentir que ha habido una tergiversacion.Las razones para no ser arquitecto son una cuestion de crite-rio. Por 1 0 tanto, 1 0 que sigue son mis propias observaciones einterpretaciones de los riesgos que es cormin encontrar, losobstaculos en el camino y las fuentes de frustraci6n. Algunasson tipicas de todas las ocupaciones 0profesiones y otras sonmas particulares y endemicas de la arquitectura. En uno uotro memento, virtualmente todos los arquitectos han sufridoalguno de estes problemas, 0 todos, y se han sentido abruma-dos 0desilusionados, Por desgracia, conocerlos 0 anticiparsea ellos no los hace menos obstructivos.

    Las pro babi lidades de conseguirloCualquier persona que considere hacer carrera en laarquitec-tura debera saber que, de acuerdo con datos estadisticos, lasprobabilidades de lIegar a ser finalmente un arquitecto regis-trado (en Estados Unidos) pueden ser menores del cincuentapor ciento. Muchos estudiantes universitarios que eligen la

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    carrera de arquitectura nunca terminan el programa profe-sional ni reciben un titulo acreditado de arquitecto. Los estu-diantes de esta carrera se quedan en el camino por variasrazones, como elcambio de intereses,la cantidad y dificultaddel trabajo requerido 0 la perdida de motivacion.Ademas, no todos los que terminan laescuela con titulos profe-sionales acreditados se convertiran en arquitectos registrados yen ejercicio. Algunos carnbiaran de campo por varias razones,por 10 general reladonadas con sus sentimientos acerca de susperspectivas como arquitectos. Pueden sentirse atraidos hadaotros campos por razones economicas 0porque tienen talentosmas apropiados para otras carreras. Algunas mujeres gradua-das en arquitectura suspenden su trabajo para tener familia, alencontrar diffcilcontinuar su carrera en la arquitectura y educarnifios al mismo tiempo. Lamentablemente, algunas de estasmujeres nunca vuelven a ejercer la arquitectura.A pesar de que en Estados Unidos la tasa de desercion yabandono escolar es elevada, no hay deficit de arquitectos, enparticular en las areas metropolitanas, donde se construyenla mayoria de los proyectos. Muchos arquitectos, y algunoseducadores, piensan que en realidad hay demasiados arqui-tectos y demasiados despachos de arquitectos. Adernas, estu-dios realizados por el American Institute of Architects (AlA)indican que aproximadamente entre una cuarta y una terceraparte de los arquitectos que trabajan en despachos son due-nos 0jefes (propietarios, socios 0ejecutivos corporativos). Enotras palabras, la mayoria de los arquitectos actives son em-pleadores, no empleados.Estas estadis ticas indican una baja probabilidad de que al-guien que se prepara para ser un arquitecto en ejercicio termi-ne siendolo, y una probabilidad todavia menor de que llegue aser en realidad dueno 0jefe en un despacho. Estas probabili-dades no son muy alentadoras. No obstante, sabemos que ladesercion ylas metas no alcanzadas son normales en cualquiercompromiso 0 carrera acadernica; las personas cambian deopinion y de especializacion con facilidad y regularidad. Sinembargo, la desercion en la arquitectura es extraordinaria-mente elevada, y quienes logran abrirse paso y ejercer, a pesarde las probabilidades, enfrentan aun serios retos.

    I (iliO no ser a rqu itec to 41

    Fa /f a d e frabajoDe todas las dificultades que enfrentan los arquitectos, quizala mas frustrante sea lafalta periodica de trabajo. Laincapaci-dad de los individuos para encontrar empleo, 0de los despa-chos para obtener contratos, es una de las principales causasde sufrimiento economico y psicologico para los arquitectosen ejercicio.El empleo para despachos e individuos guarda una relaciondirecta con las drcunstancias econornicas tanto locales comonacionales. Cuando los tiempos son buenos y hay crecimientoeconomico, se incrementa elingreso, el ahorro y la inversion.La inversion en la construccion aumenta, 10 que significa masempleo para los arquitectos. Por el contrario, la falta de cr~ci-miento economico, la recesion, la inflacion y las tasas de 10-teres altas merman el ingreso, el ahorro y la inversion, enparticular en bienes rakes. La actividad en la construcci6ntarnbien disminuye, junto con el numero de contratos arqui-tectonicos. Por 10 tanto, la cantidad global de trabajo para losarquitectos se encuentra determinada por las volatiles e im-predecibles circunstancias de la economfa, sobre las que losarquitectos no ejercen control alguno. El arquitecto debe en-frentar de manera permanente la posibilidad de ser subem-pleado 0desempleado de un afio a otro.Lafalta de trabajo tarnbien puede ser el resultado de circuns-tancias mas localizadas sobre las que el arquitecto tampocopuede influir. Aun cuando la economia general sea fuerte, lascircunstandas econornicas municipales 0 estatales puedenser inestables 0estar en descenso. Puesto que los arquitectostrabajan sobre labase de proyecto en proyecto, su destino la-boral esta intimamente ligado al destine de cada c1iente yproyecto. Los clientes contra tan arquitectos cuando se conci-ben proyectos, y los mandan a descansar cuando los proyec-tos se s~spenden 0conc1uyen.Los proyectos son financiados por instituciones de credito 0dependencias gubernamentales,los construyen contratistas,y elpublico es quien los compra, renta 0utiliza. Asi, el procesode construccion es complejo, y por muchas razones los pro-yectos pueden iniciarse e interrumpirse de manera abrupta.

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    Debido a que puede invertirse tal cantidad de tiempo y dine-ro en el trabajo del arquitecto en un solo proyecto, incluso laperdida de uno 0dos proyectos puede constituir un desastreeconomico para un despacho, Silos arquitectos prestaran susservicios a cientos 0miles de dientes al mismo tiempo, esteriesgo sereduciria en gran medida, Pero como la mayoria delos despachos trabajan solo en unos cuantos proyectos porvarios meses 0 anos, el riesgo de no tener trabajo se incre-menta.Enocasiones el trabajo puede desplomarse de manera drama-tica. En Estados Unidos, por ejemplo, en 1974 la expansion'economica que habia continuado de manera regular durantecasi tres decadas, con breves periodos de recesion, termin6abruptamente. Fueron despedidos arquitectos en una propor-cion no vista desde la epoca de la Depresi6n de ladecada de1930.En mipropio despacho me vi obligado a dejar ira la ma-yor parte del personal profesional-una docena de arquitec-tos-- cuando el trabajo se interrumpio de pronto a fines de1973 y en 1974. Fue un agonizante acto de recorte. Algunosdespachos se convirtieron en meras sombras de 10 que algunavez fueron, pues se redujeron en un 70 u 80 por den to.En Cambridge, Massachusetts, en un dia conocido como" elviemes negro", uno de los despachos de arquitectos masgrande y prestigiado despidio a cerca de den empleados de-bido a que los proyectos en marcha sedetuvieron de maneraabrupta. Por fortuna, este no es un suceso de todos los dias.Adernas, los arquitectos jovenes tienden a mostrar movili-dad; pasan de un despacho a otro segun suben y bajan lascargas de trabajo, as!como por razones personales. Elempleoviene despues de los proyectos, hecho ineludible en la vidadel arquitecto.

    CompefenciaLa amenaza de no tener trabajo se agudiza por otro factorsiempre presente: la intensa competencia, Como sila incerti-dumbre economica no fuera suficiente, existe el problema dedemasiados arquitectos detras de muy pocos trabajos. Lacompetencia en el campo de la arquitectura es incisiva e in-

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    terminable. Empieza en la escuela, se prolonga a los prime-ros anos de busqueda de trabajo y en el empleo, y continuaen el mercado del ejercicio profesionaLDesde luego, lacompetencia no es privativa de la arquitectu-ra, pues es parte integral de cualquier sistema de libre e~pre-sa, pero en la arquitectura puede alcanzar proporcionessorprendentes. Por ejemplo, en el periodo que siguio al em-bargo petrolero y la recesion de 1973-1974, no era raro verhasta cien despachos compitiendo por un solo proyecto gu-bemamental pequefio en respuesta al anundo de una de-pendencia en el que solicitaba arquitectos. Cuando lostiempos se toman diffciles, los arquitectos pueden pasar me-ses buscando trabajo sin exito, debido a que el mimero decompetidores es demasiado grande en comparacion con lacantidad de trabajo disponible.La intensidad de la competencia es producto no solo de unaaparente sobreoferta de arquitectos sino tambien de los me-todos mediante los cuales los arquitectos compiten entre sf.Los arquitectos redben el desafio de sus colegas en dos for-mas: por su gran numero y por su habilidad y disposicion enmuchos casos para montar efectivas y agresivas campanaspara conseguir clientes. Competir con exito hoy en dia re-quiere tanto las llamadas ventas suaves como las duras -lastacticas de mercadotecnia y reladones publlcas, que puedenresultar desagradables para algunos arquitectos.

    Remuneraci6n InadecuadaEs posible, pero poco probable, que los arquitectos generengrandes ingresos -la clase de ingres~s qu~ obtienen m~di-cos, abogados. atletas profesionales, eJecutivos corporativosy corredores de Wall Street. De heche, nadie debena. elegir lacarrera de arquitectura con laidea de hacer mucho dinero. Seesarqui tecto por muchas razones, pero no para hacerse rico.Dado elnumero de arquitectos y la competencia, la remune-racion economica en esta carrera puede no ser la mas eleva-da. En general, lamayoria de los arquitectos opinan que noreciben la remuneracion adecuada, y sin Iugar a dudas, que

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    Sa l 0no s e t. .. i a r qu i te c to? 4 4

    no estan bien compensados por 10 que hacen. Cuando elAmerican Institute ofArchitects pregunto a arquitectos regis-trados si sentian que, en comparacion con otras profesiones,los arquitectos recibfan honorarios adecuados por sus servi-cios, el 85.7por ciento respondio que no. Cuando se les pre-gunto si sentian que los empleadores remuneraban a susempleados arquitectos de manera adecuada, el 67 por cientotarnbien respondio que no. Los arquitectos pueden ganar 10suficiente para vivir con comodidad la mayor parte del tiem-po, pero pocos igualaran alguna vez losingresos y bienes desus contemporaneos que ejercen las profesiones mejor paga-das 0de quienes poseen negocios prosperos. Los arquitectospueden tener mas diversion, pero probablemente tendranmenos dinero.Para muchos duenos de despachos de arquitectos, los ingre-sos anuales flucnian en un amplio rango. Despues de ariesbuenos pueden venir afios malos, anos en los que los ingre-sos de un jefe pod nan estar en eln ivel de la pobreza 0ser ne-gativos (una perdida). La dependencia de los arquitectos delas circunstancias econornicas y de los proyectos diferenciasu patron de ingresos del de la mayorfa de los dernas profe-sionistas, cuyas entradas aumentan consistentemente con eltiempo y quienes se mantienen ocupados sean los tiemposbuenos 0malos. Ademas.Ia mayorfa de los arquitectos no tie-nen ingresos que excedan de manera significativa la medianacional, que no es el caso de los profesionistas establecidosen muchos otros campos.Elproblema de la rernuneracion no es nuevo. Decadas atras,durante un periodo particularmente inflacionario en EstadosUnidos, el problema fue destacado por un estudio de la AlA,A r ch it ec ts C om p en sa ti o n i n P e rs p ec ti ve :

    Laremuneraci6n nominal total se ha incrementado 59por cientoen el periodo 1970-81para los jefes, 80por ciento para los super-visores,66 por ciento para elpersonal tecnico I,57 por ciento parael personal tecnico IIy 70por ciento para el personal tecnico 1Il."La inflaci6n medida por eI fndice de Precios alConsumidor (IPC)ha aumentado 140por ciento desde 1970." Esevidente que elin-greso real de los jefes y del resto del personal de los despachos dearquitectos ha declinado tanto a nivel nacional como regional.

    D,#l I~)IW fII(Illileelo

    . ..AIcomparar los incrementos de la rernuneracion de los jefescon los aumentos de sueldos y salarios en el ramo de laconstrue-ci6n y con la remuneracion por servicios profesionales variospara el periodo 197081. .. de nueva cuenta, la remuneracion delosarquitectos no ha seguido elritmo de los incrementos de la re-muneracion de otros trabajadores de la industria de la construe-cion, as! como de otros profesionales, incluyendo ingenieros,top6grafos, contadores y auditores.

    Por diversas razones, los arquitectos en su conjunto no tie-nen la capacidad para exigir una rernuneracion adecuada aSUi funcion y proporcional a sus responsabilidades. Siemprese plantean los mismos puntos: iTantos afios de educacion!iCompetencia demostrable y unical iUna profesion universi-taria reconocida y regulada por laley! iUna actividad que in-cluye riesgos legales y financieros sustanciales que a su vezjustifican una rernuneracion justa y utilidades! Entonces,ipor que hay tantos arquitectos a los que aparentemente seles paga muy poco?Las relaciones de oferta y demanda son el factor principal delproblema: una cantidad muy limitada de trabajo para dema-siados arquitectos. Los honorarios por trabajos arquitectoni-c IS con frecuencia son muy bajos, fluyendo en corrientesimpredecibles, justo como los proyectos. Pero.zpor que serantan bajos los honorarios, dada lapreparacion, los riesgos y losesfuerzos del arquitecto? La respuesta es la competencia. Enel mercado siempre hay presion para cotizar honorarios quesean al menos comparables con las tarifas vigentes y, confrecuencia, para recortar los honorarios abajo de estas, con 10cual se baja otro escalon la tarifa vigente. Los clientes salen a11comprar" arquitectos y rara vez dudan en preguntar elcostode los servicios, Si un despacho de arquitectos esta ansiosopor asegurar el contrato para un proyecto, la tentacion deproponer honorarios rebajados puede ser abrumadora, auncuando esto signifique recortar presupuestos, poner en riesgola calidad de los servicios, ocupar menos tiempo del necesa-rio y pagar sueldos de esclavos a los empleados.Muchos arquitectos en ejercicio se sienten atrapados. Por unaparte, como profesionistas competentes les gustarfa invertirtodo el tiernpo y los recursos necesarios para investigar a fon-do, para descubrir y describir el mejor disefio posible, y para

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    ver que se lleve a cabo correctamente, Esto implica que losclientes deben compartir las metas y vision del arquitecto, yestar dispuestos a compensarlo plenamente por el valor detodos los servicios requeridos. Por otra parte, la experienciade muchos arquitectos en el mundo realles ensefia que losclientes pueden verlos tan solo como a un proveedor masentre varios que compiten; clientes que consideran que loshonorarios por servicios arquitectonicos son excesivos, noobstante quieren un trabajo impecable y complete a un costomenor.Es improbable que en el futuro los arquitectos puedan espe-rar mejorar de manera significativa su nivel de ingresos sincambiar las relaciones de oferta-demanda y sin insistir en una

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    remuneracion com pieta y adecuada, a pesar de 10 que haga lacompetencia. En un sistema de libre mercado, elconsumidorde servicios arquitectonicos -y el empleador de arquitec-tos-- sin lugar a dudas encontrara un numero suficiente deindividuos deseosos y despachos ansiosos y dispuestos a tra-bajar por honorarios mas que rninimos. Sin importar el preciopropuesto, siempre habra un arquitecto en alguna parte quehara el trabajo por menos y que prometa 10 mismo 0 mas.Para el arquitecto 0el despacho establecido, esta situacion esuna bendici6n combinada. Aun cuando la competencia in-tensa por proyectos hace mas diffcil sobrevivir, la ampliaoferta de arquitectos, tanto jovenes como mayores, les permi-te a los despachos mantener sus costos laborales y los hono-rarios en un nivel tan bajo como es posible, ya que la mayorparte de los ingresos brutos arquitectonicos se gastan en sala-rios del personal. De hecho, la estructura econornica actualde la practice arquitectonica depende de esta explotacion dela mana de obra para brindar servicios que por su propia na-turaleza requieren la participacion de mucha gente. Un pro-yecto puede consumir miles de horas-hombre.Vale la pena recordar, antes de concluir esta exposidon sobrela remuneracion, que los puntos aqui planteados son relati-vos, En otras palabras, los arquitectos solo parecen mal paga-dos cuando se les compara con otras profesiones en nuestrasociedad. Pueden ganar mas de 10 que algunas personas [arnasesperarian devengar, y con frecuencia ganan mas que profe-sores, investigadores, musicos, actores y artistas que realizantrabajos que pueden ser igualmente creativos y sa tisfactorios.lncluso es posible que su nivel de ingresos supere el de losoficios rnejor remunerados 0 de profesiones normalmentebien pagadas, siesa esnuestra meta como arquitectos -perono es facil,

    Vulnerabilidad del ego: perdido en la multitudElgrado de involucramiento del ego en laarquitectura esele-vado, 10 cual puede derivar en una gran frustracion, perotambien proporcionar el impetu necesario para alcanzar elexito, Para lamayoria de los arquitectos, el exito significa, en-

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    tre otras cosas, alcanzar cierta posicion y reputaci6n profesio-nal, si no es que la fama. Existe un anhelo vehemente dereconocimiento dentro de la profesion, fuera incluso de laclientela personal, por haber progresado, por ser excepcionalde alguna manera.No obstante, en realidad muchos arquitectos sienten, correc-ta 0 equivocadamente, que no han podido alcanzar la posi-ci6n social 0 el reconocimiento que se merecen. Se afanancomo empleados, asociados 0jefes de despachos, llevando acuestas el demandante trabajo cotidiano de producir arqui-tectura, en tanto que un punado de sus colegas recibe la ma-yor parte de la atenci6n y del credito. Algunos se yen a simismos como engranes anonimos en un sistema gigante so-bre el que tienen un controllimitado. Sienten que seles tratade manera injusta y que no se les toma en cuenta.Si uno visitara un despacho donde trabajaran mas de cin-cuenta arquitectos, muchos de ellos se describirian comoarquitectos no realizados, subapreciados, subpagados y so-bretrabajados, con una cantidad enorme de talento y pocasuerte . Algunos se sienten explotados, encadenados a susescritorios y trabajos, incapaces de abrirse paso a la inde-pendencia e incluso al estrellato. La mayoria contara coneducacion profesional terminada con exito, muchos seranarquitectos registrados y todos tendran diferentes pero im-portantes formas de talento, indispensables en la practice ar-quitectonica. Algunos se sentiran enganados 0 despojadospor fuerzas externas. Otros sentiran que sufren de algunacombinacion de insuficiencias personales que les impide ha-cer 0conseguir mas, y se resignaran alanonimato y se confor-maran tan solo con realizar su mejor esfuerzo. Otros massofiaran y aguardaran el momenta apropiado, la oportuni-dad idonea para emerger de la multi tud.

    L o s r ;e s go s de l a e n v id iatPor que los arquitectos deberfan sentirse 0 pensar asf? tPorque esto suena como la descripci6n de aspirantes a actores enNueva York 0Hollywood y no lade un grupo de profesiona-les con esmerada formacion y registro? tEsta circunstancia es

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    particularmente marcada en la arquitectura? Como se dijo enelprimer capitulo, la fama y la posicion social, una especie deestrellato 0 distinci6n, parecen ser aspiraciones en la arqui-tectura -y SU ausencia implica que el trabajo de uno es in-competente, falto de interes, anticuado, 0bien indigno de sernotado. Por 10 tanto, existe una presion ineludible que moti-vaa losarquitectos pero que tambien puede producir en ellossentimientos de celos 0envidia. Los celos profesionales ocu-rren en todos los campos de trabajo, pero pueden sentirsecon mayor intensidad en la arquitectura. Dada la competen-cia y los egos predominantes, es fadl entender por que los ar-quitectos caen victimas del pecado de la envidia.Laenvidia y los celos rara vez se exteriorizan en publico. Masbien se experimentan y manejan en privado. Pueden apare-cer siempre que un arquitecto observe a otro arquitecto ganarmientras que elobservador esta perdiendo 0es excluido. Re-basan los sentimientos normales de frustraci6n 0desilusi6n ypueden manifestarse en una forma sutil pero corrosiva, untanto rencorosa, en ocasiones acompailada por indicios demala voluntad y resentimiento por elexitocomparalivo de otros.Parad6jicamente, los arquitectos pueden experimentar enforma simultanea sentimientos de respeto y admiraci6n porsus competidores y colegas envidiados. Los celos profesiona-les son un desafortunado componente del alma del arquitec-to, sobre el que rara vez se actua de manera externa, perocapaz de precipitar dafios internos al ego.Cualquier cosa puede detonar tales sentimientos, en especialen momentos de vulnerabilidad: otros tienen trabajo mientrasque uno no, otros ganan premios 0 concursos mientras queuno no, a otros se les publica 0 son objeto de comentariosfavorables en la prensa mientras que uno no, otros recibenascensos mientras que uno no, otros hacen dinero mientrasque uno no. Los estimulos negatives pueden ser intermina-bles. Perder un trabajo 0 contrato del que uno se considersmerecedor, 0 pasar de moda cuando las modas cambian,puede causar irritaci6n y amargura. Estos sentimientos nose limitan a los arquitectos j6venes, inmaduros 0 sin exito,Cualquier arquitecto es susceptible y, de hecho, entre masaltas sean las aspiraciones personales, mayor sera la suscepti-bilidad.

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    Falta de poder e ;nfluenciaAlgunas personas buscan algo mas que la realizaci6n profe-sional y familiar en su carrera y en su vida personal. Puedenaspirar a ganar reconocimiento publico, distincion, poder einfluencia, deseando ser respetados y admirados por un gru-po ajeno alde sus propios colegas y clientes. Buscan contarseentre los promotores y animadores de su comunidad, serconsultados sobre cuestiones fuera del reino de laarquitectu-ra. Quiza sison invitados a servir en juntas 0comisiones im-portantes, puedan ayudar a conformar la polftica publica.Si una persona muestra esta inclinaci6n, entonces tal vez laarquitectura no sea para ella. Los arquitectos rara vez alcan-zan tal posicion social. De hecho, en la sociedad de EstadosUnidos, por ejemplo, los arquitectos gozan de cierta posicioncomo disenadores y especialistas tecnicos, pero rara vez es-tan entre los personajes prominentes que toman las decisio-nes, por 1 0 general politicos, abogados, dueftos de negocios,ejecutivos corporativos y gubernamentales y personas degran riqueza. Lamentablemente, a los arquitectos suele con-siderarseles personas de intereses y competencia estrechos,que se limitan sobre todo a cuestiones esteticas y de construe-cion, aun cuando pueden poseer habilidades, conocimientosy criterio de caracter general. Los propios arquitectos han re-forzado esta percepdon a 1 mantenerse con frecuencia a 1 margeny sin participar. Por desgracia, el perfil publico relativamentebajo de los arquitectos, su participacion minima para tratarcon la sociedad en su conjunto, es un problema persistente.La arquitectura no es una profesion de poder.

    Ansiedad, desengaiio y depresionLa depresi6n relacionada con eJ ejercicio profesional por 1 0general es causada por el fracaso 0la expectativa del fracaso.La falta 0perdida del trabajo, los reveses financieros, el reco-nocimiento inadecuado 0 las criticas adversas pueden ser lacausa. Esto sugiere que para ser un arquitecto feliz, debe po-seerse fortaleza emocional. A la inversa, una persona nodebe ser arquitecto sisufre de ansiedad aguda por causa del

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    N O P UE !> O !O N SE (jU lR e tf rN A N !r A f. 1r E N TO . ..Q U IE R O !O N T R A T A R L OP AR A ! ) ( S EN A R U N( fR A N P R O V E !T O P A R Af .1 ( . i D E rE S E R P O ~ T r !OE N S U ! O N ! E P ! r O N , ! O N r N S P r R A ! r O Nm ~ n !A , S E N Sr rr LrM DA f . 1 J ! 1 E N T A t yR E A L r 2 A ! r O Nf . 1 E T r ! U L O S A r

    rechazo 0miedo al fracaso, ya que las desilusiones y los reve-ses recurrentes estan garantizados en esta profesion.Por supuesto, la ansiedad y la depresion por cuestiones mo-netarias no son privativas de la arquitectura. Pero como dise-nadores profesionales, los arquitectos producen trabajo quede manera continua es objeto de escrutinio, prueba y critica,que a menudo hay que rehacer y que con frecuencia esrecha-zado. Trillado como suena, el rechazo forma parte del terre-no. A nadie le agrada, pero los arquitectos deben tener unacapacidad especial para aceptarlo y hacerle frente. Cons 19uiresto no siempre es facil .lmaginemos los sentimientos que pueden aflorar en un ar-quitecto cuando, despues de invertir quiza cientos 0miles dehoras en un disefto, se Ie comunica que su trabajo es medio-cre, inaceptable 0,peor aun, desastroso. EIrechazo, la desilu-sion y el fracaso son medicinas amargas de tragar, pero todoarquitecto las ha probado, con justificacion 0 sin ella.

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    Elrechazo no significa necesariamente que no se hayan apli-cado talento y esfuerzo extraordinarios para crear un disefioarquitect6nico. Todo el tiempo se rechazan proyectos brillan-tes,junto con los mediocres. Sin embargo, emitir un juicio so-bre la arquitectura puede ser un acto en alto grado subjetivo,basado en los valores y gustos de quien juzga. Los dictarne-nes se hacen por razones politicas, sociales y economicas to-talmente fuera de las facultades de anticipacion y control delarquitecto, por 10 que este apenas tiene otra opcion que so-brellevar estas circunstancias recurrentes, dando siempre 10mejor de S1, 0 bien retirarse. Larenuncia pareceria lamejor al-ternativa a fin de evitar la depresion silos exitos compensato-rios demuestran ser inalcanzables.

    Ob s ta c ulos person alesLaarquitectura demanda asumir riesgos. Oemanda una graninversion de Hempo, esfuerzo y energia emocional y fisicapara alcanzar cualquier cosa que valga la pena. Para poderaprovechar las oportunidades que se presentan 0 perseguirmetas no convencionales, se requiere tanto recursos persona-les como liberarse en cierta medida de los obstaculos 0 trabaspersonales.En particular, establecer un despacho de arquitectos a menu-do implica un gran riesgo, sobre todo financiero. No obstan-te, es el objetivo de la mayoria de los arquitectos que seinician en la practice despues de la escuela, objetivo que soloalgunos alcanzaran. Si un arquitecto mantiene una familiacon su trabajo, sin ninguna otra fuente sustancial de ingresoso bienes, entonces renunciar a un salario regular y seguropara aventurarse como profesionista independiente puedeintimidar un poco.Viajar y reaIizar estudios de posgrado son otras actividadesque pueden reportar grandes beneficios para un arquitecto.Tambien es dificil Ilevarlos a cabo si uno se ve obstaculizadopor la obligacionhacia familiares que dependen de uno, pordeudas 0 por dudas. Obviamente, cuentan con una claraventaja quienes empiezan con un sistema de apoyo financie-ro 0 no enfrentan impedimentos personales. Ayuda heredar

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    dinero 0 estar casado con una pareja que trabaja. Yensenararquitectura puede proporcionar tanto tiempo como ingre-sos para que los j6venes prospectos de arquitectos inicien elejercicio profesional mientras ensefian.Un arquitecto para el que alguna vez trabaje me dio un con-sejo memorable cuando partia de mi traba]o de verano paravolver a la escuela de arquitectura. Despues de llamarme a suoficina para despedirse. apunto con un dedo hacia el cuartode dibujo, ocupado en ese momento por una docena de ar-quitectos inclinados sobre sus restiradores, y declare que de-beria tener presente una cosa si no queria terminar comoellos: "iNo te cases ni tengas hijos muy pronto!" Lo que enrealidad me estaba didendo era que sialgun dia queria viajaro iniciar el ejercicio profesional, en el camino no podia haberdemasiados compromisos prematuros. Los obstaculos finan-cieros y personates pueden mantener a los arquitectos traba-jando en los talleres de dibujo.

    Falta de talentoAlgunas personas fracasan por carecer de talen to. 0 no al-canzan todas sus metas porque no cuentan con los recursosesenciales para hacerlo. Los aspirantes a arquitectos deberianconsiderar esta posibilidad. Sifalta alguno de los atributos in-telectuales, emocionales y personales que semendonan en elcapitulo anterior, la arquitectura puede ser una empresacuesta arriba, incluso para las personas muy inteligentes.Cada ano los profesores de arquitectura se encuentran conestudiantes brillantes que, no obstante, parecen seguir la ca-rrera equivocada porque sus aptitudes estan a todas luces enotra parte. Algunos se sienten incomodos 0 torpes con el di-bujo 0las graficas, Otros mas carecen de habilidad analitica ytecnica. Otros mas muestran escasa creatividad, imaginaci6no sensibilidad visual. Estes pueden ser serios impedimentospara quienes desean ser arquitectos.Ser inteligente no es ninguna garantia de aptitud para la ar-quitectura. Una gran dosis de talento natural esta en los ge-nes; el talento puede procrearse 0 fomentarse, pero noensefiarse. Como ciertas cualidades personales, este talento

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    puede desarrollarse a pesar de, y no debido a, la educaci6nformal. La ~n~ici6n, ~linsti~to y la inventiva son indispensa-bles en el disefio arquttectontco. Senecesitan conocimientos einteligencia, pero no son suficientes.

    Falta de pasion y dedicacion

    Tambien indi~pensables para aJcanzar el e"!to en la arquitec-tura, so~ ~osmveles muchas veces extraordinarios de pasion,d.edl:a.clon y esfuerzo. Sin ellos, el arquitecto en ciemes 0 enejercicio con toda seguridad enfrenrara el rechazo y el fraca-so. Puesto que laarquitectura estan demand ante de tiempo yenergia, la falta d~ disposicion para trabajar duro y para acep-tar con frecuencia recompensas minimas, es una razon depeso para no ser arquitecto.Los estudiantes descubren por primera vez este axioms en la~scuela de arquitectura. A J imponer enormes cargas de traba-jo, pues se requieren innumerables horas de esfuerzo mentaly manual para hacer dibujos y crear modelos ffsicos y basa-dos en computadora, los estudios de arquitectura sirven depreparacion para 1 0 que se avecina en el futuro: mucho mastrabajo duro y siempre la posibil idad del rechazo. Quienesasumen ~n.~ompro~iso total con su trabajo y se apasionancon .su ml~l~n profesional, se benefician de una especie desentido religiose de determinacion que los inspira y ayuda asortear los momentos mas escabrosos. Practicamente todoslos arquitectos consumados a 1 0 largo de la historia han sidomotivados ante todo por elamor al diseno.

    Riesgos legales y financieros

    ~s arquitectos que son duefios de despachos y cuyos dise-nos lleg~n a c~nstruirse, se encuentran expuestos a riesgos Ie-gale~ y fi~ancleros.considerables. EIprincipal riesgo legal, lanegligencia profesional, puede ocasionar que los clientes uotr.aspersonas sufran dafios monetarios. En general, los ar-quitectos Son llevados a los tribunales par demandantes quepiensan que elarquitecto comeno un error que derive en per-

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    juicios 0 perdidas financieras para ellos. Cuando se hacentales demandas legales en contra de un arquitecto, con fun-damentos 0sin ellos, este puede verse obligado a compensaral demandante en alguna proporcion por los presuntos da-nos despues de n egociaciones, arbitraje 0 litigio. Ysin impor-tar cual sea el resultado, por 1 0 general es necesario pagarcuantiosos honorarios legales.Como otros profesionistas de nuestra sociedad que se dedi-can a los llamados servicios personales independientes(medicos, abogados, dentistas, ingenieros), los arquitectosasumen laresponsabilidad por negligencia profesional a titu-lo personal, en calidad de individuos. No pueden protegersus bienes en una sociedad anonima. Pueden adquirir segu-ros que cubriran lamayor parte de loscostos por ladefensa yresolucion de las demandas por negligencia, pero el seguroes costoso.Induso con un seguro, lanegociacion, ellitigio y elarreglo delas demandas son intrusives, consumen tiempo y provocantension. Las demandas y los juicios sehan incrementado de-bido a las expectativas crecientes, a menudo poco realistas,que albergan clientes y consumidores y que los Bevan a de-mandar a arquitectos aun cuando las evidencias de incompe-tencia arquitectonica sean escasas 0 nulas. Asi, un arquitectopuede recibir la afrenta de un juicio a pesar de su inocencia.Ademas, la simple existencia del seguro es una invitaci6npara los litigios. Silos arquitectos estuvieran arruinados y nocontaran con seguros, rara vez serian demandados.Otra desafortunada consecuencia de la marea creciente dejuicios esla practice cada vez mas generalizada del disefio de-fensivo y del exceso de documentacion -Ia creacion de unrastro de papel- que presuntamente protege al arquitectocontra la amenaza siempre presente de los tribunales. Peroesto induce a losarquitectos a ser menos innovadores, a que-darse con 1 0 probado y seguro, y a dedicar mas tiempo a lapseudoabogacia que al disefio, Si se quiere evitar el campominado de las responsabilidades legales y los tribunales, en-tonces lapractica arquitect6nica es terre no inseguro a menosque uno se mantenga como empleado para siempre.

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    En el plano financiero existe un riesgo aun mayor que el deser demandado por negligencia profesional: el riesgo de norecibir elpago por los servicios prestados y verse en la necesi-dad de emprender acciones legales para cobrar los honora-rios. Potencial mente, el arquitecto puede sufrir perdidas deingresos y de tiempo, a 10cual puede agregarse la tensionde probar elcasoya que, en calidad de demandante, elarqui-tecto debe asumir la carga de la demostracion. En este caso.los verdaderos ganadores son los abogados.

    Desilus;6nLos obstaculos en el camino, los riesgos y las incertidumbresya identificadas producen frustracion y desilusion -acaso elmayor riesgo global de convertirse en arquitecto. Cuando elarquitecto ha satisfecho los requerimientos de la preparacionprofesional, ha pagado sus tributos proverbiales, ha conjun-tado sus talentos, y s e encuentra despues con sus aspiracio-nes e ideales en entredicho 0 con el rechazo de sus ideas,puede sobrevenir la desilusion. Por 10 general ni siquieraexiste el consuela cornpensatorio de haber conseguido mu-cho dinero. De hecho, los arquitectos manifiestan que en oca-siones se sienten como rameras, trabajando en una profesionen la que es un lugar corruin la prostitucion de las metas ynormas personales. Una vision en verdad sombria.Los arquitectos periodicamente se sienten explotados 0 usa-dos. En ocasiones proporcionan servicios por poca 0 ningunapaga, con la esperanza de conseguir algo en el futuro peroterminando con las manos vacias. Muchos yen su carreracomo una gigantesca concesion, a la que Ie han dado mas de10que obtienen y de la que han aceptado menos de 10quemeredan. Que diferente, se dicen a si mismos en retrospecti-va, de 10que imaginaron laprimera vez que pusieron ellapizsobre el papel en el taller de diseno. Algunos aceptan estacondicion como parte del negocio de laarquitectura. Encuen-tran retribuciones suficientes para compensar las desilusio-nes, 0 incluso pueden ser capaces de hacer caso omiso de losproblemas en su conjunto. Otros abandonan la profeskin enbusca de terre no mas firme.

    Una cosa es cierta: para cualquiera que considere haceruna carrera de arquitectura 0 acabe de iniciarla, no hay nin-guna forma de predecir adonde conducira la eleccion. Sinlugar a dudas, habra tanto recompensas como frustraciones,momentos de complacencia y de depresion. Elarquitecto enpotencia s610puede esperar que lasuma de los actives exce-da la suma de los pasivos para tener al final un balance netopositive.