ESCUELA SUPERIOR DE GUERRA DEL EJÉRCITOESCUELA DE POST GRADO

HISTORIA MILITAR CRITICA II

Análisis crítico de las siguientes Obras :

a) El amanecer del siglo. Howard, Michael (1999)

b) La renovación de la Historia Militar. Thomas Kühne, Benjamín.

c) La historia militar: una carencia intelectual en España, Aspizua- Cachinero-Jensen

2013

El amanecer del siglo Howard, Michael (1999).

a) Biografía del Autor

Michael Howard.- Político cuya imagen discreta de abogado, y su

ascendencia judía, representan a algunas de las razones probables para su

rápido asenso en la política, Michael Howard, líder del partido conservador

llega, pocos días antes de las elecciones parlamentarias en el Reino Unido,

es un político duro, poco carismático, y ex colaborador de los ex primeros

ministros, Margaret Thatcher y John Major.

Howard es conocido para la expansión de la historia militar más allá de las

campañas tradicionales, por incluir discusiones más amplias sobre el

significado sociológico de la guerra.

Howard ayudó a fundar el Departamento de Estudios de Guerra y el Centro

de Liddell Hart de Archivos Militares del King College de Londres. En la

actualidad es presidente emérito del Instituto Internacional de Estudios

Estratégicos, que también ayudó a establecer, y miembro de la Academia

Británica. Howard fue nombrado caballero en 1986 y fue nombrado para la

Orden de los Compañeros de Honor en 2002 y en la Orden de Mérito en

2005.Sin embargo, a pesar de todos sus esfuerzos, no está claro que su

imagen vaya en ascenso, según una encuesta publicada por el matutino

The Guardian en donde sólo el 24% lo considera un líder carismático, en

contraste con el 55% que dan esa atribución a Tony Blair.

b) Resumen critico

Este ensayo el autor expresa como en la historia de la humanidad han

existido diferentes cambios en las culturas generando ciertas

transformaciones y entre los principales cambios se menciona a los

adelantos de la ciencia y la tecnología, estas tendencias pronto fueron

socavadas, tanto por las ideologías existentes en la época pero que

principalmente que partían del pensamiento de Karl marx. Asimismo, la

aparición de una serie de inventos o creaciones como el desarrollo de las

comunicaciones que fue probablemente, el mayor impulso que recibió

aquella sociedad. La llegada del ferrocarril y del buque a vapor había

destruido la autosuficiencia de las viejas comunidades agrarias. El motor de

combustión interna hizo posible algo mucho más importante: que los

hermanos Wright llevaran a cabo el primer vuelo con motor en Kittyhawk,

Ohio, en 1903, y que Louis Blériot atravesara volando el canal de la

Mancha en 1909. Por consecuencia estos cambios se reflejaron en

desarrollo de la alta cultura europea. Estos avances en ciencia y tecnología

posibilitaron el dominio mundial europeo y crearon, a ambos lados del

atlántico, una convicción casi indiscutible en la superioridad cultural y hasta

racial respecto al resto de la humanidad.

Sin embargo en Europa ya era algo anticuada esta creencia en la pacifica

inexorabilidad del progreso. La inexorabilidad s edaba por descontada, pero

no asi su carácter pacifico. En cambio había una creencia cada vez mayor

en que el progreso tomaría la forma de conflicto, creencia que tenia sus

raíces en el pensamiento de dos gigantes de mediados del siglo XIX, Marx

y Darwin.

Karl Marx, sustento que el conflicto seria entre las clases sociales y tendría

por resultado una revolución del proletariado industrial, que derribaría el

sistema capitalista y llevaría a una sociedad sin clases en la cual se

eliminarían todas las contradicciones y en la que la humanidad se realizaría

plenamente.

Charles Darwin , el concepto darwiniano de que las especies sobreviven

adaptándose a los cambios de su medio ambiente y que solo sobreviven los

más capaces al adaptarse, había conducido, a finales del siglo a una

creencia muy extendida a ambos lados del atlántico de que esto se aplicaba

a los organismos sociales tanto como al mundo de la naturaleza.

Estas ideologías, junto al comercio y la tecnología occidentales minó los

estilos de vida tradicionales, de modo tan irresistible como lo hizo antes con

los estilos de vida de los propios europeos. Estas fuertes presiones fueron

generando mecanismos mórbidos, que dieron como resultado fenómenos

tales como el antisemitismo. el nacionalismo que fue la fuerza mas

poderosa que mantenía unidas a las trastornadas sociedades europeas.

En 1900 la nación-Estado había alcanzado su apogeo. Durante un siglo el

poder y el alcance de las autoridades estatales se habían vuelto cada vez

más intrusivos, pues la mejora de las comunicaciones les permitía

aumentar su control de la administración, el bienestar y la educación de sus

ciudadanos, así como reclutarlos para sus ejércitos. Al aumentar el poder

del Estado, el sentimiento de nación aumentó, encontró expresión por toda

Europa en desfiles y ceremonias militares, en una arquitectura neobarroca

monumental, en himnos, banderas y otros símbolos patrióticos. Los

historiadores crearon mitos patrióticos y los lexicógrafos fomentaron las

lenguas distintivas.

Es por esto que la unidad creada por el sentimiento nacional dentro de los

Estados de Europa occidental se pagó con el empeoramiento de las

relaciones entre ellos. Lo peor estaba por llegar; grandes ceremonias

nacionales eran explícitas conmemoraciones de pasadas victorias militares

y preparaciones implícitas de otras futuras. La perspectiva de otra guerra,

librada con las destructivas armas que la tecnología hacía posibles, era

terrible, tan terrible que los dirigentes europeos se reunieron en una

conferencia en La Haya, en 1899, para ver qué podía hacerse con el fin de

mitigarla, si no impedirla. Pero el resultado no fue alentador. Poco hizo para

disminuir la creencia, muy extendida, de que, incluso si la guerra era

terrible, seguía siendo la prueba definitiva de la aptitud de las naciones para

sobrevivir.

Mas tarde en Europa debido a estos cambios se libraría la mayor guerra de

la Historia de la Humanidad

c) Conclusiones finales

1. Podemos apreciar finalmente en ensayo que Howard miró cómo se

reflejan la estructura social de las naciones.

2. Howard ha hecho hincapié en la diferencia entre la historia militar

tradicional, que busca identificar las lecciones de fácil aplicación para el

presente de la historia del pasado guerras y campañas militares, y su

propio enfoque, que destaca la singularidad del pasado histórico y la

imposibilidad de derivar tales lecciones para orientar las decisiones

estratégicas y tácticas modernas.

3. Podemos apreciar que en Europa y en Norteamérica se realizaron los

descubrimientos científicos más revolucionarios e inventos que

contribuyeron con el desarrollo de la humanidad sin embargo según el

autor Una de las formas más poderosas en el nuevo cambio fue el

nacionalismo.

4. Estas teorías vertidas por el autor tienen relevancia en la vida moderna

en vista que el enfoque realizado a la manera como el desarrollo

tecnológico conjugado con el nacionalismo empoderan a las naciones y

generan los conflictos en la que en actualidad tienen como base estos

antecedentes.

La renovación de la Historia Militar

Thomas Kühne, Benjamin Ziemann.

a) Biografías de los Autores

Thomas Kuhne .- Thomas Kühne es profesor de Historia y en la actualidad

también se desempeña como Director del Holocausto y Genocidio Estudios

de Posgrado. Afiliado con el Programa y el Programa de Relaciones Étnicas

Raza y Clark en Estudios de la Mujer, que enseña historia europea y

alemana moderna, con un enfoque en el Holocausto y la Alemania nazi. Su

investigación explora la relación entre la guerra, el genocidio y la sociedad,

las tradiciones a largo plazo de la cultura política y las emociones políticas

en Europa, y el problema de la localización del Holocausto y la Alemania

nazi en las continuidades y discontinuidades del siglo 20.

Kühne ha sido especialmente interesado en la síntesis de nuevos enfoques

para la historia de la violencia masiva. De 1998 a 2001 se desempeñó

como presidente de la Asociación Histórica Alemana de Investigación de

Paz y participó en la nueva historia militar culturales (Was ist

Militärgeschichte, ¿Qué es la Historia Militar de 2000, co-editado con

Benjamín Ziemann).

Los Proyectos de investigación actuales de Kühne guardan relación con la

parte constructiva de la violencia masiva en una perspectiva histórica y

comparativa más amplia, así como con la relación entre la historiografía y la

memoria colectiva de los genocidios.

Benjamín Ziemann.- Él es un reconocido experto en la historia comparada

militar, social y cultural de la Primera Guerra Mundial, y sigue llevando a

cabo investigaciones sobre la Primera Guerra Mundial y en la violencia de

masas en el siglo XX en general. En su segunda monografía, elogiado por

un crítico como "uno de los estudios más importantes de la historia

contemporánea publicados en los últimos años, se ha analizado el proceso

de la" cientifización de lo social », teniendo la Iglesia católica en la

República Federal como ejemplo. Benjamin tiene un fuerte interés en la

teoría de la historia y en la teoría de sistemas sociológicos, y un interés

particular en la aplicación de los conocimientos derivados del 'giro

lingüístico' en la historia social y cultural. Uno de largas líneas de

investigación independientes de Benjamin es la historia de paz. Benjamín

es uno de los co-directores del Centro para la Historia de la Paz en el

Departamento de Historia, fundada en 2009.

b) Resumen critico

El texto revela desde su propio resumen que “la historia militar se ha

mantenido apartada de las principales corrientes históricas y se convirtió

básicamente en un reducto para los propios militares y eruditos que no

compartían los avances historiográficos recientes y prolongaban la tradición

positivista alemana, sin embargo en las últimas décadas la historia militar

ha establecido fructíferos diálogos con la historia social y similares ” , como

podemos apreciar destacan este hecho como el principal acontecimiento

que motivo que los intelectuales germanos estudien y analicen los hechos

sucedidos en la historia militar alemana.

Asi mismo el texto expresa que al finalizar el siglo de las guerras totales, la

violencia belica se ha convertido para la mayoría de las personas, tanto en

Alemania como en el resto de las sociedades industriales occidentales, en

algo ajeno pero que a la vez, en algo cuya presencia se sienta de cerca.

En estas circunstancias las guerras, los ejércitos y los soldados pasaron a

ser un elemento de debate por los intelectuales generando un cambio de

mentalidad de largo alcance en relación con la primera mitad del siglo XX,

cambio que los autores sustentan que en Alemania tuvo un lugar de modo

más acentuado que en otras naciones industrializadas.

Los autores proporcionan un impulso a las investigaciones sobre Historia

militar y buscan contribuir a su posicionamiento metodológico y conceptual

y plantean tres grupos de problemas según este contexto : Primero; se

esboza la relación entre los condicionamientos de interés desde la

investigación empírica y la falta de sofistificacion conceptual de la historia

militar. Segundo; se presenta a título de ejemplo dos de las grandes

narrativas sobre el ejercito, en las que se esconden implícitamente

suposiciones de gran importancia sobre sus estructuras, en Tercer lugar;

existe un debate sobre la diversidad de los enfoques metodológicos

existentes y las posibilidades de su integración.

Así mismo existen ciertos “prejuicios” con respecto al estudio de la Historia

Militar. Por ejemplo, se menciona que en 1995, el historiador israelí Omar

Bartov sostuvo una polémica con los investigadores del Instituto de

Investigación en Historia Militar, MGFA) pues la Historia Militar había

“cobrado, sobre todo después del final de la IIª Guerra Mundial, la fama de

una empresa algo dudosa, y todo aquél que se ocupase de ella era

menospreciado a menudo como un estudioso de segunda categoría, más

interesado en la descripción de heroicas batallas que en la investigación

histórica seria.” La historia militar fue considerada como “como un residuo,

poco científico, de los propios militares, cuyo interés por las guerras

pasadas residía en aprender de ellas cómo ganar las guerras futuras; o de

un público reclutado entre los militaristas incorregibles, personificados en

jóvenes entusiastas de lo bélico o en fanáticos veteranos de guerra”

Sólo de modo paulatino, y venciendo tenaces resistencias, se ha ido

reconociendo que las guerras y los soldados forman una parte constitutiva

de las sociedades modernas. La teoría de la via especial alemana tambien

era un producto característico de los axiomas basados en las teorías de la

modernización tan dominantes en la historia social y política de las décadas

de 1960 y 1970. A lo largo de esta década la guerra librada por el régimen

nazi y sus antecedentes fue un tema acerca del que algunos historiadores

del MGFA desarrollaron una Historia Militar Critica. Desde entonces era

prescindibles algunos movimientos en el cambio de la historiografía. Esta

última se concentraba temáticamente en la I guerra Mundial y

conceptualmente era deudora de la historia social.

Después de este avance es que se da partir de 1990 una importancia

mayor a la IIª Guerra Mundial, desatendida hasta entonces por los enfoques

innovadores, y particularmente la investigación sobre el Holocausto pasó a

situarse en el centro de los debates conceptuales de la disciplina. Luego,

los autores se ocupan de las “grandes narrativas” de la guerra, para

explicar el trabajo metodológico de la Historia Militar. Las investigaciones

realizadas en Alemania han sido las más influidas por esas narrativas.

Estos ‘grandes relatos’ agregan suposiciones transmitidas históricamente

acerca de la constitución interna del ejército y su poder ejercido hacia el

exterior, y que están íntimamente entrelazadas en su génesis con la

difusión social de un mito sobre este mismo ejército.

Podemos establecer entonces que con el desarrollo y el análisis de la

Historia de la vida cotidiana, la historia cultural y la historia de Genero a lo

largo de la década de 1990 se borro la distancia entre la historiografía y la

Historia Militar y la guerra como acontecimiento histórico comenzaron a

formar parte habitual del temario de seminarios y asignaturas en las

universidades alemanas, utilizándose dos vertientes de la investigación

sociológica La Sociología Militar propiamente dicha para utilizada fue

utilizada con criterios sociológico organizativa al servicio de los intereses de

su explotación militar.

Por otro lado el análisis de las “grandes narrativas” de la historia militar y

sus problemas se basan en el estudio del militarismo germano – prusiano

de los años 1871 – 1945 el cual está ligado al teorema de la vía especial

alemana que se proponía explicar los orígenes del nacionalsocialismo. Los

investigadores transmiten la manera como participó la wehrmacht en el

holocausto y cuestionan el proceso de victimización existente.

La pluralidad de los enfoques metodológicos y la cuestión del objeto de la

historia militar. Esboza una perspectiva central que sirva de elemento

integrador para la Historia Militar que pudiera contribuir en estos niveles,

mediante un autentico esfuerzo de clasificación conceptual a la

deslegitimación política y moral.

Finalmente, para los autores los enfoques procedentes de la historia de

género, la historia cultural y la historia de la técnica sustentaran el

desarrollo de una historia militar que lograría ser reconocida como una

disciplina plenamente integrada en el conjunto de ciencias históricas.

c) Conclusiones finales

1. Podemos establecer como enseñanza de los autores la importancia que

reviste para una sociedad conocer la historia militar de su nación ya que

esta íntimamente ligado a la evolución de la social, política, cultural y

económica de una nación tal como lo sucedido en Alemania desde

finales del siglo XIX.

2. Por otro lado en la actualidad es importante tener presente que el efecto

e interés que generan los desequilibrios socioeconómicos generados por

las guerras y la relación entre la economía de guerra y la sociedad en

guerra Ejm. “ Ejercito, industria y trabajadores en Alemania en 1914 a

1918” ya que un conocimiento real de la historia militar nos permitirá no

cometer errores y generar un plan prospectivo que permita en un futuro

lograr la estabilidad social entre las naciones.

3. Finalmente es importante destacar la relevancia que representa

observar como bloques separados: la “Guerra” como tema como historia

militar y por otro lado la “Sociedad” como problema de la historia general

en vista que ambos elementos tienen que estar armónicamente

integrados con la finalidad de propiciar un estudio y conocimiento real de

la evolución cultural de una nación.

.

La historia militar: una carencia intelectual en España Aspizua- Cachinero-Jensen.

a) Biografía de los Autores

Jorge Aspizua Turrion .- todo un maestro en el análisis de la información

militar nacional e internacional y un experto en desvelar y desentrañar

documentos estratégicos de Seguridad y Defensa procedentes de fuentes

abiertas. Aspizua rezumaba experiencia y conocimientos por los cuatro

costados y no tenia inconveniente en discutir largo y tendido sobre los

temas más polémicos y complejos que entonces afrontaban las Fuerzas

Armadas. Su lectura de la actualidad denotaba una visión de la Defensa

como una política de Estado y una capacidad de crítica con fundamento

que siempre debería ser tenida en cuenta

Quizá pudo parecer soberbio. No lo era, en absoluto. Era un apasionado de

la milicia, un infante de Marina retirado con una lesión que arrastró el resto

de su vida, algo que nunca le impidió seguir y desentrañar la política de

Defensa española, de los principales países de la OTAN y de las más

diversas naciones

PD Jorge Aspizua Turrión falleció el 7 de junio de 2011

Jorge Cachinero .- Posee experiencia en relaciones gubernamentales y

asuntos regulatorios, gestión de reputación y grupos de interés,

comunicaciones estratégicas, legal y ética y cumplimiento y gestión general.

Asi mismo como MBA es de Amplia experiencia internacional y profesional

en los mercados europeos y latinoamericanos. Sus especialidades son :

Relaciones Gubernamentales y Asuntos Regulatorios, Ética y Cumplimiento

y Jurídicos, Gestión de la Reputación y Stakeholders Engagement,

Innovación, Comunicación, Liderazgo y Dirección General y Desarrollo de

Talento.

Jorge Jensen .- Catedrático de Historia Militar, el profesor Jensen imparte

cursos sobre la Europa moderna, la historia militar y la España moderna. Él

es el autor de Triumph Irrational: Desesperación Cultural, nacionalismo

militar, y los orígenes ideológicos de la España de Franco (2002), que se

publicará en español en una versión revisada y ampliada, así como una

biografía de Francisco Franco (2005) y varios capítulos de libros y artículos.

También Guerra editado en Europa, 1919-1939 (2008) y co-editado (con

Andrew Wiest) Guerra en la Era de la Tecnología: Faces Myriad of Modern

Conflictos Armados (2001). Su investigación actual se centra en las

políticas de contrainsurgencia y culturales españoles en el norte de África y

la batalla de la Guerra Civil española del Ebro.

b) Resumen critico

En este artículo los autores denotan los vacios existentes en el estudio de

la historia militar en España motivados por la falta de tradición universitaria

para el estudio de la historia militar y que buena parte de las

investigaciones sobre la historia contemporánea de España ha corrido a

cuenta de historiadores extranjeros. logrando una mejora en la comprensión

de la historia de las organizaciones militares y de la realidad bélica en su

conjunto, asi mismo una de las principales razones para esta situación fue

la influencia que la censura tuvo en la investigación española durante el

franquismo.

La falta de tradición universitaria española para el estudio de la Historia

militar es consecuencia del aislamiento de la sociedad española respecto

de la política internacional. El estado integra a sus militares profesionales

en el estudio de la realidad bélica con otros grupos de investigadores,

cuando perciben un determinado riesgo de verse inmersas en una guerra

exterior. Se produce entonces la dotación de las plazas de investigación y

enseñanza civil que, en mejor o en peor coordinación con los estudiosos

militares, formalizan científicamente el análisis y el debate sobre esas

cuestiones de tanto alcance político y social.

La no existencia de cátedras de Historia militar en la Universidad española

se debe, fundamentalmente a esa lógica por lo que en España no se veía ni

utilidad ni beneficio a algo que los diseñadores de la estructura de la política

educativa del Estado consideraban bien cubierto por militares profesionales

a lo sumo, por algunos expertos en Diplomacia, Derecho y Economía

Internacional

Esa pérdida impide lograr una mejora en la comprensión de la historia de

las organizaciones militares y de la realidad bélica en su conjunto

En sentido estricto, la historia bélica de España durante los siglos XIX y XX

se formalizó prioritariamente en campañas militares inscritas en las diversas

civiles. Las campañas exteriores (independencia americana, defensa de los

Estados Pontificios, México, Conchinchina, Pacífico, conflicto hispano-

americano, Marruecos y Sáhara) son episódicas y periféricas respecto de

aquéllas. Este hecho denota que no se tuvieron en cuenta los

acontecimiento históricos paralelos desarrollados en América.

Asi mismo los autores describen que sólo entre militares profesionales se

ha producido alguna literatura española de calidad en torno a las campañas

de la guerra de Marruecos y, en especial, sobre la guerra civil de 1936-

1939.

Solo con excepciones, el resto de los historiadores -españoles o no-

todavía no ha emprendido un trabajo de análisis de aquellas campañas que

complemente esas aportaciones subsanando sus carencias temáticas.

Ciertamente, en tanto la enseñanza universitaria de Historia militar no

permita abordar tal tarea masivamente, cualitativamente tampoco se podrán

inscribir las conclusiones que se extraigan en el conjunto de las

aportaciones que sobre Historia militar se hicieron fuera de España desde

perspectivas comparadas.

Por otro lado, para hacer la Historia militar de la España contemporánea,

los investigadores no pueden recurrir a una sistematizada colección de

fuentes. Esto se debe a una carencia difícilmente a ser superada y es que

las fuentes entre 1808 hasta 1920 están dispersas entre las dependencias

del Archivo Histórico Nacional, del Archivo de la Administración Pública, de

los archivos corporativos de las Fuerzas Armadas españolas y de los

archivos personales que han sobrevivido. Para el período posterior a 1920,

existe una interdicción casi absoluta a la consulta, no de los fondos

existentes, sino a la simple averiguación de qué colecciones documentales

han sobrevivido. Existen, cierto es, fondos documentales abiertos al público

sobre la guerra de Marruecos, la guerra civil y la inmediata posguerra, de

indudable interés, aunque sub explotados para la investigación. Pero no es

menos cierto que no existen catalogación de los archivos que por ley han

de mantener los diversos organismos de la administración militar.

Esta situación está agravada por una práctica común de los gestores y

funcionarios públicos españoles al patrimonializar los documentos en los

que consta su intervención personal. En el caso de la Administración militar,

se ha constatado la desaparición total o parcial de las hojas de servicio de

personajes muy significativos, con proyección pública o no. Además,

depositados o no en los organismos pertinentes.) y aparte de los de Franco,

existen muchos fondos documentales privados constituidos en buena parte

por documentación pública sobre los que pesan condiciones de acceso a la

consulta que no garantizan la libertad y la igualdad de oportunidades en el

ejercicio de la labor investigadora

Finalmente puedo destacar que no solo se trata de un desinteres total por el

estudio de la historia militar en España sino de una desorganización

generalizada en todos los actores de la sociedad española por la búsqueda

del conocimiento y la investigación por el desarrollo de su cultura.

c) Conclusiones finales

1. Puedo destacar que la desorganización y el desinterés por el conocimiento de

la historia militar en una nación puede borrar el sustento histórico, científico,

antropológico , político y económico de un estado lo que generaría un vacio que

perjudicaría la evolución de la sociedad en viasta que nos e contarin con

fuentes de confianza y se correría el riego de cometer errores pasados.

2. Estos hechos no permiten que se realicen estudios comparativos del

Ejercito de una nación con los Ejecitos del entorno geohistorico, para

que de esa forma se puedan abordar estudios que permitan poner en

relación la demanda militar de un Estado contemporáneo con el

desarrollo del aparato productivo de una nación.

3. En actualidad es muy importante tener sustentadas las investigaciones

históricas de carácter universalista, ya que nos permitirá comparar

procesos históricos sobre el sujeto de análisis Estado- Nación. Estas

fuentes históricas nos permitirán lograr una mejora en la comprensión de

la historia de las organizaciones militares y de la realidad bélica en su

conjunto.