ALONDRAS Y RUISEÑORES Nº 4

27
Cofradía Servita de Mª Stma. de los Dolores Revista Anual de la Cofradía Puente Genil - Semana Santa 2011 Número 4

description

Edición digital de la revista oficial de la Cofradía Servita de María Santísima de los Dolores de Puente Genil (año 2011)

Transcript of ALONDRAS Y RUISEÑORES Nº 4

Cofradía Servita de Mª Stma. de los DoloresRevista Anual de la Cofradía

Puente Genil - Semana Santa 2011Número 4

3Cofradía Servita de MªStma. de los Dolores

Revista anual de la Cofradía Servita de Mª. Stma. de los Dolores

de Puente Genil

a anual de la Cofradía Servita de Mª. Stma. de los Dolores

Alondras y Ruiseñores

3

Puente Genil

día Servita de M . Stma. de los Dolores

3Cofradía Servita de Abril - 2011

Sumario

Saluda del Cofrade MayorFructuoso del val de la Torre

La CofradíaLorenzo Estepa Mohedano

Recuerdos del PregoneroJavier Villafranca Muñoz

Viernes de Dolores 2010José Ángel Chacón de la Torre

Pasado, Presente y FuturoJesús Chacón de la Torre

La Virgen de los Dolores

en nuestra Lírica PopularJuan Ortega Chacón

04

05

08

15

23

06Cofrade Mayor

Fructuoso del Val de la Torre

Hermano Mayor

Lorenzo Estepa Mohedano

Vicecofrade Mayor

Javier Torres Carmona

Secretario

Sergio Mª Velasco Albalá

Vicesecretario

Antonio Manuel Torres García

Tesorero

Alberto de la Rosa Velasco

Vicetesorero

Sergio Velasco Estrada

Mayordomos

Francisco Serrano Rodríguez

Manuel Angel Rivas Márquez

Vocal de Cuarteles

Fernando Chacón Giménez

Vocal de Procesión

Francisco Chacón Rivas

José Mª Martínez Chía

Cofrade Mayor

Junta Directiva

Edita

Cofradía Servita de Mª Stma de los

Dolores

Imprime

Gráficas Membiela

Diseño y Maquetación

Alberto de la Rosa Velasco

Número 4 - Abril, 2011

Miguel Romero

sigue con nosotrosFrancisco Jiménez García

13

Orfebre y MananteroLa Cofradía

21

Alondras y Ruiseñores4444

Saludadel Cofrade MayorFructuoso del Val de la Torre

Queridos hermanos,

Cuando esta revista llegue a vuestras manos estaremos ya en la antesala de nuestra Semana Santa. Con la misma ilusión que un niño espera sus regalos la víspera de Reyes, nosotros esperamos estos días. Quien sea ajeno a todo esto puede pensar que es un año más; lo mismo que se repite. Pero nada más alejado de la realidad. Cada triduo, cada función y, sobre todo, cada Viernes Santo son distintos, nuevos, un regalo que nuestra Madre de los Dolores da a todos sus hijos y que, con la misma ilusión que un niño, recibimos gustosamente.

Para mí, de forma particular, es un año muy especial, ya que en Mayo se cumplen mis cuatro años de cofrade mayor. Decir que ha sido un honor sería quedarse corto porque lo que realmente ha sido es un regalo que, a través de todos vosotros, María me ha querido conceder. Llegué a esta Cofradía siendo un adolescente y empecé a trabajar en ella con un único objetivo: acercar a todos el amor infinito de María. Y llegué para quedarme. Cuando se está convencido en una única fe y en su camino, el estar cerca de nuestra Madre te hace ver y entender cosas que, de otra forma, la mente humana no podría llegar a aceptar. Mi devoción a María Santísima de Dolores en estos cuatro años se ha reforzado y afianzado tanto que acrecienta mi inicial convencimiento de que llegué para quedarme. En esta Cofradía hay que estar, al igual que hicieron otros Cofrades Ilustres y Eternos, y el compromiso ha de ser firme y para toda la vida. Nuestra fe y amor a María tiene que ser tan fuerte que nos sirva de ayuda y sostén para superar las pruebas que su Hijo nos ponga en la vida. Y siempre poder llegar con el corazón limpio a sus pies, besar su mano lleno de Amor y Fe, sintiéndonos dignos hijos de Madre tan grande.

Permitidme que, de una forma especial, dé las gracias a Alberto de la Rosa, quien ha dedicado a esta revista durante estos cuatro años muchas horas, esfuerzo y conocimiento. Pero, sobre todo, mucho cariño. Cuando las cosas se hacen con tanto cariño y amor, no queda más remedio que salgan bien, muy bien.

Muchas gracias a todos los colaboradores. Estas palabras que aquí se reflejan son nuestro testimonio y sentimientos para generaciones futuras, a las que estamos obligados a dejar nuestro mejor legado. Y gracias también a las firmas colaboradoras, que con su aportación económica hacen que toda esta ilusión sea una realidad.

Os invito a leer Alondras y Ruiseñores con mucho cariño, a vernos estos días en el triduo, a compartir un rato de oración a los pies de María el Viernes de Dolores, a felicitarla el día de su onomástica depositando un beso en su mano. Y, sobre todo, a acompañarla el Viernes Santo. No hay mejor compañía que la de María, ni Amor más grande que el que su Hijo nos dio.

Le pido a nuestra Madre que nos mantenga en la fe, nos siga concediendo la ilusión de un niño y las fuerzas para trabajar siempre por Ella a través de su Cofradía.

María Santísima vestida de Hebrea.

Abril - 2011Cofradía Servita de MªStma. de los Dolores 555555555

Lorenzo Estepa MohedanoLorenzo Estepa Mohedano

La Cofradía

Nuestra Cofradía ha pasado por un proceso importante de transformación en el último cuarto de siglo. Durante muchos años transitó al abrigo casi exclusivo de la familia Chacón y del fervor incondicional de su pueblo. Rafa Chacón Villafranca, cuando era Cofrade Mayor, vio clara la necesidad de una mayor participación en la Cofradía. Entre otros, se fijó en un grupo de niños que, por entonces, ponían en marcha su cuartel de Semana Santa, Los Poderes de Jesús, y les transmitió el Amor a la Virgen de Los Dolores.

La incorporación de nuevos hermanos activos y la combinación de juventud y veteranía en los órganos de gobierno ha cambiado de manera positiva a la Cofradía, dotándola de un mayor dinamismo y vitalidad. Han sido numerosos los hombres y mujeres que han contribuido y contribuyen de una u otra forma a engrandecerla.

Mi experiencia en este proceso es un tanto singular. Me incorporo a la Cofradía de la Virgen de los Dolores coincidiendo con mis primeros años de Cuartel, de manera que, en esos primeros años de Semana Santa, bebía de ambas fuentes. De hecho, para mí han sido dos procesos que se han ido retroalimentando de manera virtuosa e inseparable, de tal manera que no existe el uno sin el otro.

Como he mencionado antes, Rafa Chacón, a través de su ejemplo y cercanía, nos transmitió el Amor a la Virgen y la entrega incansable al hermano. Los años que compartió con nosotros fueron muy fecundos en cuanto a vivencias de Semana Santa y a descubrimientos de una vida adulta que se nos venía encima inevitablemente. He de decir que Rafa fue una influencia

fundamental en esa etapa de mi vida; al mismo tiempo, creo no equivocarme si digo que también lo fue para la consolidación del Primero de los Dolores.

En esa época aprendí que ser hermano de la Virgen de los Dolores conlleva ciertos deberes y derechos más allá de los que los estatutos mencionan. Deber y derecho de Amar a la Virgen de Los Dolores y ejercerlo de manera ejemplarizante. La Virgen, como Madre nuestra, siempre está esperando la llamada de alguno de sus hijos. Ejerzamos de verdaderos hijos y acudamos a Ella, es la mejor manera de amarla.

Deber y derecho de vivir en Hermandad. Como hijos que somos de una misma Madre, no nos queda más remedio que vivir como verdaderos hermanos. La Cofradía ha de ser una escuela de vida en Hermandad y la Virgen, la Maestra. Apliquémonos.

Después, con el paso de los años, he aprendido más cosas pero ninguna tan importante como ésta.

Quiero agradecer a todas las mujeres y a todos los hombres que han trabajado y trabajan para hacer realidad esta Cofradía. Su dedicación y entrega les hace mejores personas.

¡Viva la Virgen de los Dolores!

Lorenzo Estepa con su Corporación. Viernes Santo 2010

Lorenzo junto a su padre

Alondras y Ruiseñores6666

Mis primeros recuerdos en torno a la Cofradía de la Virgen de los Dolores han ido siempre de la mano de mis primos Chacones. La relación de íntima y fraterna amistad de mis padres con Luís Fernando Chacón Villafranca y Mª Pili Giménez Reina hicieron que desde muy niño, fraguase parecida amistad entre sus respectivos hijos. Y la presencia de la Virgen de los Dolores era, y es, una constante muy viva en la vida diaria de Mariano, Fernando y Jorge (también en las de sus hermanos Jesús, Belén y Pilar, aunque con éstos, por razones de edad, no intimé hasta años más tarde). Con el correr del tiempo, quiso la vida cruzar en mi camino a Jesús y Fco Javier (Pampi) Chacón Almeda. También ellos, desde muy niños, mantenían con la Virgen una relación íntima, muy especial, casi cotidiana. Desde luego uno de los caracteres principales de esta Cofradía es su familiaridad, su sencillez y cercanía, de forma que en su seno, la transmisión intergeneracional de creencias, de fe, de valores, se ha hecho siempre de la mano de María Santísima.

De esta forma, con dieciséis o diecisiete años, comencé a asistir más o menos regularmente, a la tradicional comida de Hermandad que todos los Viernes de Dolores era cita obligada para sus más fieles cofrades. Por los estrechos lazos que unían a los congregados, eran aquéllos unos encuentros cercanos, familiares, con lo de bueno y malo que ello conlleva, pero desde luego absolutamente distinto a todo cuanto había conocido hasta la fecha. Lo cierto y verdad es, que para alguien que entonces comenzaba a transitar los senderos de la Semana Santa, aquellas comidas en La Espina, en el Degüello o en el cuartel de las Cien Luces, fertilizaron un terreno, mi alma, al que sólo faltaba dejarle caer una semilla. Y esa semilla fue, desde luego, el haber sido testigo del magnífico tándem que formaron, que siguen formando, el Primero de los Dolores y Rafael Chacón Villafranca. De forma que estoy absolutamente convencido de que el Cuartel del Primero de los Dolores no sería hoy el mismo, sin los abrazos, sin el amor y el compromiso de su eterno Cofrade del Cielo. Y de la misma forma, sé que Rafa fue absolutamente feliz señalando el camino a unos niños que, con el correr de los años, se convirtieron en sus más queridos hermanos.

Esas vivencias infantiles, de juventud y madurez, me han acercado a la Virgen y a su Cofradía. Me ha enamorado, y lo sigue haciendo, cómo ésta se ha convertido en una Cofradía sazonada con dos ingredientes que difícilmente casan bien en un guiso, juventud y sabiduría; me emociona ser testigo de cómo, aun habiéndose producido un cambio absoluto en su seno, los más mayores siguen reconociéndose indefectiblemente en ella; me colma de satisfacción el comprobar que no ha perdido ni un ápice de su carácter familiar, cómo los encierros de la Virgen congregan bajo su manto a niños pequeños, madres con hijos en brazos, maridos que, brazo en hombro, abren con sus esposas el camino al más hermoso de los pasos pontanos… y cómo los más mayores buscan un rinconcito apartado para mirar a su Virgen a los ojos. Sólo su sonrisa y un ligero temblor de labios, denotan que siguen encontrando en Ella lo que siempre habían buscado.

Hoy la Cofradía luce pujante gracias al esfuerzo de muchos hermanos en los que se entremezclan canas y voces aflautadas. Y es, sin embargo, ejemplo de convivencia, de transmisión de anécdotas, de valores, de una manera propia y especial de entender, no ya la Cofradía o la Semana Santa, sino la vida toda. La generosidad y la confianza que un día los más mayores depositaron en Rafa, es la misma que luego él utilizó para dar paso a una Cofradía renovada en el Primero de los Dolores, y es la misma generosidad y confianza que hoy los más jóvenes devuelven envueltos en afecto y gratitud a los más veteranos.

En definitiva, la vida ha seguido su paso y hoy la Cofradía recoge la siembra de los últimos veinticinco o treinta años. Y es buena la cosecha. Y la amistad, la fe y la sonrisa, todo de la mano, siguen siendo su más preciado patrimonio.

Con el ruego a la Virgen de que estas notas sigan siendo el fundamento cofradiero y vital de los Siervos de María, quiero terminar enviando a los hermanos de la Virgen de los Dolores, a la Cofradía toda, lo que siempre recibí de ella, una sonrisa de afecto y un fuerte, cariñoso y sincero abrazo.

Javier Villafranca MuñozozJavier Villafranca Muño

Recuerdos del Pregonero

Abril - 2011Cofradía Servita de MªStma. de los Dolores 7777

A la Virgen de los Dolores

Entre varales y ciriosy bajo un palio de cielo

se viste de Lirios.De amor y consuelo.

Blancas manos extendidasazucena, que Dios te envía.

Siete puñales de plata, atraviesan tus heridas.Y con lágrimas en tus mejillas

el viernes santo amanece,de dolor y pena, María.

Bendice señora mía,esta santa cofradía

pues tu corazón de oro,se llena de agonía

entre plegarias y salmoscon las primeras sinfonías.

Entre el vaivén de los candeleros,en penitencia, tus hermanitos

alumbran de sentimientos,las calles de tu pueblo,al son de tus lamentos.

Manolo Chacón

Alondras y Ruiseñores8888

Juan Ortega ChacónJuan Ortega Chacón

La Virgen de los Doloresen nuestra Lírica Popular

En años anteriores hemos caminado, juntos, al encuentro y valoración documental de nuestro extraordinario e inestimable patrimonio. Tanto del material, desde un punto de vista artístico y de su intrínseca riqueza, como de los elementos ornamentales que lo conforman. Y, como no, del inconmensurable patrimonio sacro-devocional de nuestra Imagen bendita considerando su inevitable evolución estética e histórica a través de los tiempos desde sus oscuros orígenes, tal vez modestos, hasta el soberano esplendor con que hoy la contemplamos, venerándola a diario en su altar, o en su radiante hermosura magnificente caminando por nuestras calles cada Viernes Santo.

Pero existe otro patrimonio, inapreciable, lírico y sentimental, indeclinablemente humano, también legado del tiempo, pero fecundado del numen popular y con raíz en el corazón. Son los cantos piadosos y vibrantes; las fervientes plegarias; los poemas más sentidos; los alados romances de versos cálidos; los piropos encendidos y devotos; las saetas estremecedoras; los vivas entusiastas… que, salidos del alma, nos han llegado heredados de un ayer inmortal o como retazos de una literatura, romántica, con aromas de leyenda pero de prodigiosa fidelidad. De ayer y de hoy. Unas veces anónima y otras con nombres y apellidos de inspirados músicos; juglares devotos o poetas, cultos o populares, que tuvieron a la Virgen de los Dolores como fuente de inspiración de su lira y que constituyen un auténtico relicario para la Cofradía y para todo nuestro frondoso acervo cultural.

A todo ello vamos a dedicar, de manera antológica – habida cuenta de su extensión – unos artículos como pequeña aportación a su disperso rescate. Lo hacemos, juntando recuerdos, desde el infinito cariño con el que desde niños nos cobijamos a sus divinas plantas. Reduplican su valor en este siglo tan aficionado a lo flamante, a lo material y uniforme.

Cronológicamente, el primer eslabón – de oro – es el gran poeta pontanés MIGUEL ROMERO, de cuyo fundamental libro “Semana Santa en Puente Genil” se cumple en este 2011, justamente un siglo. Miguel no solo fue un ferviente devoto de nuestra Virgen sino un hermano predilecto de su Cofradía. Él la llamaba, por antonomasia “La Madre de Jesús” y en campechana hipérbole decía que era para La

Es este 2011, que abre ya la segunda década del siglo XXI, el cuarto año consecutivo que, brillantemente, ve la luz “ALONDRAS Y RUISEÑORES”: Una revista cofrade que, de ser un sueño sutil y tener un ámbito cerrado, se ha erigido, por méritos propios, en un preciado exponente de nuestra literatura semanantera, siempre desde la perspectiva de exaltar las Glorias de nuestra excelsa Madre, MARÍA SANTÍSIMA DE LOS DOLORES y de su fervorosa Cofradía Servita.

Fotografía (I)

Abril - 2011Cofradía Servita de MªStma. de los Dolores 999999999

Puente lo que la Macarena para los sevillanos, exaltándola en continuas e inspiradas alabanzas. En su triste “destierro” fue una de sus más punzantes añoranzas el recordar su activa presencia tanto el Viernes de Dolores como el Santo. He aquí algunos testimonios elocuentes: “…vistiendo la túnica azul y cinturón granate y oro, insignia gloriosa de la Hermandad”; (…)” invocando su santo nombre postulé para la ayuda del riquísimo manto”; “…cuatro años consecutivos fui honrado con el hermoso título de “Hermano Mayor”” (1).

Es decir que Miguel Romero – el más laureado emblema de nuestra lírica popular y semanantera – fue un hermano principal y su testimonio constituye un timbre de honor para nosotros y el que hoy le sigamos glosando en todos los círculos de la “Mananta”.

Bellísimos son los versos con los que como un preludio piadoso dedica a nuestra Madre en el día de su onomástica – antes fiesta grande y de inmenso “tronío” – en el entonces Santuario de Jesús Nazareno, alejado del centro vital del pueblo. Suena como una dulce égloga, esta décima:

“Nombre misterioso y santo símbolo de la tortura,

que al alma presta dulzura y del alma arranca llanto.

Nombre que aleja el quebranto cual trino de ruiseñores;

mezcla de espinas y fl ores,de tristeza y de alegría.

¡Nombre que hoy toma María por sus benditos DOLORES!”

El poeta se dirige a la Virgen en la espléndida hermosura de su altar en aquella Función solemnísima de la mañana – hoy trasladada a la tarde por motivos laborales – en la que desde niño le escuché referir a nuestros mayores que para ellos era un día tan grande que para asistir puntualmente, se paraban totalmente todas las faenas agrícolas – entonces absolutamente predominantes en los hermanos, tanto en los hacendados como en los jornaleros – considerándolo como día de “huelga”, retribuido, para que pudieran asistir. ¡Aquellos Viernes de Dolores con repiques de campanas y cohetes desde la amanecida, de fastuosa Función y saetas y cantos esparcidos hasta la madrugada siguiente tras el tradicional almuerzo de Hermandad! Era el preludio más entrañable de la Semana Mayor.

De todos los poemas de Miguel Romero, en nuestra modesta opinión, el más dramático rozando el patetismo existencial; el del sentimentalismo más radical; el más expresivo del amor al pueblo de sus amores y el de más descarnada amargura ante su triste sino es el que dedicó “A las Autoridades Judaicas”. Además de su

depurado lirismo y elevada calidad literaria, Miguel desnudó su alma, entre espinas y abrasada por ascuas de añoranza, clamando, con ardientes lágrimas, por todo lo que eran sus entrañas heridas por la lejanía. Y en ese “tropel” está bien presente nuestra Madre. La “maldición” de su triste destierro Romero la simboliza en su desolación, en una doble pérdida maternal con versos sublimes:

“¡A mi tierra querida, rica y hermosa, que al cerrarme las puertas de mi ventura, me alejó de dos madres: MI DOLOROSA

y mi madre del alma, que allí reposa brindándome un pedazo de sepultura!”

Miguel soñaba, en la distancia, con la meta de su eterno descanso en el blanco cementerio por entonces anexo a la Ermita, custodiado por el Bendito Nazareno y cobijado en el manto azul de su Virgen de los Dolores. Es lacerante, como una perpetua herida abierta, considerar que este deseo del poeta no sólo no pudo verificarse sino que, muerto en Alcaracejos donde ejercía como veterinario y donde fue enterrado, sus restos mortales se perdieron en la Guerra Civil. Hoy se ha erigido una lápida a su memoria en dicho lugar.

Fotografía (II)

Fotografía (III)

Alondras y Ruiseñores11100010

En el ápice emocional del poema, Miguel Romero, nos invoca y nos convoca, en su agónico deseo a ese momento de la Diana en que, vivos y muertos, contemplamos el más allá. Y junto al Nazareno, la Madre de los Dolores:

“Y al vibrar en la Cumbre la campanita y el Redentor asome con el Madero…

…Y a su lado su MADRE. ¡Madre Bendita!...Y el pueblo entre bengalas suba a su Ermita…

¡No olvidaros del pobre… MIGUEL ROMERO!”

Él renuncia en favor de Aguilar y Cano a la descripción de ese momento y nos vuelve a situar, emocionadamente, en el encuentro con la Madre en la pétrea explanada: “…como un esbelto y empavesado buque anclado entre el oleaje de un mar de corazones que, incesantemente, la aclaman (…) y con los ojos del alma la besan”.

Era entre dos luces. En el escalofrío mágico de esta celestial alborada sacra cuando tenía lugar una de las emociones más intensas de cada Viernes Santo. Con lágrimas y el vello de punta hemos escuchado, tantas y tantas veces, evocar a los hermanos más ancianos y venerables de la Cofradía, como una visión sublime, aquella sobrecogedora estampa que ya, privilegiados, podrán contemplar en el Cielo: El hermano Antonio Montero Muñoz “CANGILONES” – ejemplar e histórico “cruceta” de la Hermandad y depositario de un apodo singular; toda una personalidad en Puente Genil por su bonhomía; extraordinario saetero y de aquilatada afición flamenca – se erguía, enfundado en su túnica azul y, desde una escalera sostenida, aupado en hombros por enfervorizados hermanos e incluso algunos años de rodillas, con la voz sollozante y quebrada, en el temblor indeciso del silencio conmovido y con el gesto desgarrado, a la luz naciente del alba “echaba” la inolvidable Plegaria de Miguel Romero que estremecía, al desgranarla, hasta las mismas piedras:

“¿Dónde vas tierna Paloma, Viernes Santo de mañana;

tan hermosa y dolorida vertiendo un raudal de lágrimas?

¿Por qué lloras…? ¿A quién buscan tus celestiales miradas?...¿Por qué desde tus altares

hasta el fi n del pueblo bajas…?”

La brisa aromada de la incipiente mañana acariciaba el azul y plata de las bambalinas del palio inundando su gótica arquitectura con el ángel centinela en la cúspide, sin llegar a apagar las velas. En mágico contraluz. Y allí la voz arcana, mojada y cálida, de “Cangilones” proseguía, con solemne majestad, como un seráfico pregón en voz de pueblo. Con un nudo en la garganta derramando su dulcísima cantinela:

“…¡Míranos bajo tu manto como indefensa bandada de polluelos; al abrigo

de tus purísimas alas…!”

Las deprecaciones más tiernas y los fervores más aquilatados se entremezclaban con la miel de los piropos y requiebros más dulces en una especie de arrope piadoso, sublime y amoroso, en la nuncia mañana, transida e hiriente, de sensaciones puras. De remembranzas infinitas:

“…¡Mirad su boca entreabierta por el dolor, pura y santa, que para todos sus hijos

suspiros de amor se escapan!”

Fotografía (IV)

Abril - 2011Cofradía Servita de MªStma. de los Dolores 11111111

La emoción se derramaba en todos los ámbitos empapando en húmedos suspiros las aristas duras del empedrado. La cercanía del cementerio, cuyos cipreses – flechas de eternidad – oscilaban como almas vivas, elevando la tensión en el patético y estremecedor final del largo poema con un aldabonazo sobrecogedor al grito de fe y de suprema esperanza:

“…¡Por nuestros llorados muertos que en esas tumbas descansan

en cuyos fúnebres lechospronto un sitio nos aguarda!”

Y “Cangilones”, con la voz y el alma destrozadas, clamaba con los brazos abiertos:

“Y cuando las negras puertasde la Eternidad, se abran y den paso a mi cadáver tras la losa funeraria…

Y no pueda ver tu Imagentan hermosa ¡Virgen Santa”!…

Ni escuche tu campanitaViernes Santo de mañana…

Entonces, de las miserias del mundo, salva mi alma

y vuele contigo al Cielo como vuela mi plegaria…”

Vivas estentóreos. Llantos incontenidos. Abrazos efusivos. Sacudidas del alma… Y una calma, honda y espiritual, en el silencio rotundo. La misma Virgen, contemplando a sus hijos en Hermandad, dibujaba una tenue sonrisa. Todos los que se fueron parecían revolotear con las atrevidas golondrinas en los recovecos del palio, en esos instantes sublimes de la vida, que muy pocas veces llegamos a vivir, en que – derrotada la razón – se funden la tierra y el Cielo…

Fue “Cangilones” toda una institución en la Cofradía y en la Semana Santa y esta plegaria una cumbre sentimental. Luego vinieron tiempos oscuros y Viernes Santos de prohibiciones. De forzados encierros en los que, como la propia Diana, la plegaria se enclaustró en el templo. Con más lágrimas. Con más rabia. Con amenazada y prisionera devoción… Después de la Guerra que se llevó tanto y, sobre todo, a tantos… “Cangilones” se inmortalizó como “cruceta”, cantando sus saetas y con su sentida plegaria, ya en Miragenil donde se repuso en el “encuentro”. Cuando murió, en 1953, heredó el cargo de cruceta y su vocación saetera su hijo Francisco Montero Serrano – que la Virgen nos guarde por muchos años – y sus hijos, yernos, nueras y nietos que, aunque vivan lejos, tornan cada Viernes Santo.

Por eso, en el ambiente intimista y familiar de la Hermandad, cada Viernes de Dolores, cuando ya el fervor y los brindis ponían en los almuerzos su punto álgido, se repetía, una y otra vez, con inmenso cariño uno de esos vivas, triviales y entrañables, que caracterizaban a nuestras cofradías y corporaciones:

“¡Viva la Virgen de los Dolores: Madre de los Chacones;

tía de “Mones”y abuela de “Cangilones”!”

Este “viva”, tan trivial, nos puede dar idea del cariño entrañable con que nuestros antepasados trataban estas cosas. Y es que las familias y algunos hermanos emblemáticos eran el mayor patrimonio de nuestras Hermandades en tiempos menos grandilocuentes pero más afectivos. Por ello, junto a la familia Chacón y al popularísimo “Cangilones” aparece otro de los más firmes pilares: el inolvidable “Mones”, apodo cariñoso con el que era conocido un excepcional cofrade y benefactor, devoto de la Virgen e incondicional de la Cofradía: Jesús Morales Pontes. Fue hermano afectísimo y de gran entrega siendo Secretario de la misma durante muchísimos años y en un periodo turbulento. Era hombre culto y buen cantor. A él le debemos las actas conservadas en el primer libro que arranca en 1917. Tenía un acreditado comercio de tejidos en la calle Santa Catalina que fue asaltado e incendiado en los sucesos Fotografía (V)

Alondras y Ruiseñores11122212

revolucionarios del Julio de 1936, aunque logró salvar su vida falleciendo, en 1937, a la temprana edad de cuarenta y nueve años.

En próximos años, si la Virgen lo quiere y nos sigue guiando, aportaremos otros retazos líricos con los que poetas, músicos y cantores populares la engrandecieron. Sea por siempre a AM.DG. et. B.V.M.

Fotografía (VI) Antonio Montero “Cangilones” Fotografía (VII) Jesús Morales Pontes “Mones”

JUAN ORTEGA CHACÓN

(1) “Semana Santa en Puente Genil”-1911- MIGUEL ROMERO- Imp. Baldomero Giménez- Edición original-

RESEÑAS FOTOGRÁFICAS

I.- Paso de la Virgen en el puente. El hermano corpulento (con túnica y bigote) se identifi ca con Miguel Romero (primeros años del siglo XX).

II.- Plaza del Calvario. Aparecen la antigua santería y el Cementerio (Hacia 1920).

III.- Encuentro en Miragenil, donde se declamó la plegaria (1948).

IV.- Hermanos y niños ante el paso en calle Don Gonzalo. En el ángulo derecho “Cangilones” hijo, con el bastón de cruceta (1950).

V.- Con el palio nuevo, aparecen llevando a la Virgen, tres miembros de la familia “Cangilones”: Antonio y Manolo Montero y su cuñado Miguel Berral “el cantaor”. Delante aparece, niño de unos seis años, el inolvidable Rafael Chacón Villafranca.

VI y VII.- Respectivamente: Jesús Morales Pontes “Mones” y Antonio Montero “Cangilones”.

Abril - 2011Cofradía Servita de MªStma. de los Dolores 1311133333333

Miguel Romero sigue con nosotros

Con estas palabras comenzaba nuestro querido y aclamado hermano Miguel Romero Carmona su libro “ Semana Santa en Puente Genil” en 1.911, persona que tuvo el honor de ser Hermano Mayor de nuestra querida y amada Madre Dolorosa durante cuatro años de su vida.

Vaya por delante el sentirme totalmente identificado con el prólogo escrito, ya que pienso y considero muy difícil hablar de una de las personas que fueron, son y serán guía y bandera de nuestra Semana Mayor.

Por todo lo dicho anteriormente, no pretendo, más, que seguir recordando y manteniendo viva la llama de amor, cariño y entrega que este gran Poeta y amante de su Pueblo nos dejó, para que así conste y se mantenga por los siglos de los siglos.

Cuenta también Miguel Romero en su libro una de las múltiples vivencias que tuvo con nuestra Cofradía y que a continuación cito, ya que nos hace ver el amor que le tenía a nuestra Bendita Madre:

Francisco Jiménez García

Reconozco lealmente mi inutilidad y me declaro vencido antes de emprender la tarea, que me propongo, de copiar una de las más hermosas páginas de la vida de mi soñado y querido pueblo…

¡¡No olvidaré jamás tiempos que ya pasaron y que para mí fueron tan felices, viéndome rodeado en mi modesto hogar de dignos hermanos de su directiva, invitándome a la función, formando parte de la selecta comitiva, asistiendo a todos sus actos y celebrar entre ellos el fraternal almuerzo del Viernes de Dolores: dónde en medio del entusiasmo general, improvisaba alguna saeta o modesta poesía a nuestra Hermosa Titular!. Muchos años me conté en el número de estos mis queridos hermanos asistiendo a la gran procesión del Viernes Santo de mañana vistiendo la túnica azul y cinturón granate y oro, insignia gloriosa de la Hermandad; no pocos, invocando el

Nombre de la Madre de Jesús postulé para ayuda del riquísimo Manto que hoy lleva, y cuatro años consecutivos fui honrado con el hermoso título de Hermano Mayor, hasta que, errante peregrino, con todo el dolor de mi alma, dejé quizá para siempre, la tierra bendita de mis amores, a la que NO olvidaré mientras aliente un soplo de vida.

Alondras y Ruiseñores11144414

Entre nubes de incienso benditoLlegué a tus altares,

Para unir a tu duelo infi nitoMis tristes pesares.

Allí oré, a tus pies, reverentePostrado de hinojos,

Tus Dolores nublaron mi frenteTu llanto mi ojos.

De tu imagen Divina, un momentoMiré la hermosura.

Y a mi alma levó el pensamientoTu inmensa ternura.

No miré en tu dolor, el de la muerteQue engendra el espanto;

Tu dolor vi más grande, más fuerte,Más dulce, más santo,

Tu dolor sacrosanto no infundeTerror ni venganza,

Es el iris que al orbe difundeAmor y esperanza.

Tu dolor es el llanto fecundoQue esparce la aurora

Y a su sabia fl orece en el mundoLa fe redentora.

Tu dolor es la endecha del aveQue canta en la umbría;

Tu dolor llega al alma, suaveCual tierna poesía.

Tu dolor es el canto sublimeDel orbe cristiano:

Caridad que consuela y redimeAl género humano.

Tu dolor puso luz en el díaPerfume en las fl ores…

¡Oh benditos mis veces, MaríaTus Santos Dolores!

¡¡¡Viva la Virgen de los Dolores y Viva Miguel Romero!!!

Miguel Romero

Abril - 2011Cofradía Servita de MªStma. de los Dolores 1511155555555

Jose Angel Chacón de la Torre

Cena de fin de cultos en Honor a María Santísima de los DoloresSemana Santa 2010

Josse Angel Chacón de la Torre

Viernes de Dolores

La Cena de la Cofradía del Viernes de Dolores de 2.010 se celebró en el cuartel de La Corona de Jesús, al que pertenece el Hermano Mayor de este año: Francisco Javier Chacón Almeda, cariñosamente conocido por todos como Pampi. La Corona, además, conmemoraba su XXV Aniversario. El imponente óleo de la Virgen de las Angustias presidía la mesa principal, en la que estaban sentados Angel Esojo, representando al Cristo de la Misericordia; Víctor Reina, del Imperio Romano; Juan Ortega Chacón, Manantero Ejemplar 2.010; Fructuoso del Val, nuestro Cofrade Mayor; D. Francisco Roldán, Párroco de la Parroquia del Carmen y oficiante de los Cultos, y el Hermano Mayor de la Virgen de los Dolores.

Fructuoso inauguró las intervenciones agradeciendo a D. Francisco, el joven párroco, que anduviera de Triduo en Triduo para poder celebrar nuestros siempre concurridos cultos; dió gracias también a las camareras de la Virgen: Mª Jesús Chacón, Rosi Serrano , Angelita de la Torre y Chica López, por su preparación de la Imagen para los cultos; y a Rafi Herrador por sus plegarias en la Función Religiosa.

“Espero que se canten muchas saetas a Nuestra Madre”, terminó Fructuoso, animando a los presentes. Tras bendecir la mesa D. Francisco, Fructu entonó la temprana “Alondras”.

Jesús Chacón Almeda, hermano del Hermano Mayor, apuntó: “Que alguien de La Corona sea Hermano Mayor de los Dolores es algo que enaltece nuestro XXV Aniversario. ¡Llevas un año disfrutando, hermano, un año de recuerdos y de alegría! ¡Una copa por Nuestra Madre que siempre nos ha empujado mucho!”. El Hermano Mayor, Pampi, le contesta con una cuartelera a medias con su padre, Rafael Chacón Chacón, quien, como siempre y en este día más que nunca, nos dejó repletos de saetas de “su enciclopedia”, como le felicitó Ángel Chacón, mi padre.

Sergio Velasco se levantó de su asiento y agradeció a Fructu su manera de recopilar y engrandecer el patrimonio artístico y sentimental de la Cofradía. Felicitó al Hermano Mayor y a La Corona por sustentar la Cofradía. Dio gracias al cuartel del Primero de los Dolores, infatigable; a Juan Ortega por su presencia y a Alberto de la Rosa por ser “motor” de esta revista que cumple ya su cuarta edición. Recordó también a los mayores que ya no están

Alondras y Ruiseñores11166616

con nosotros. Para terminar recitó: “Nunca tenga mi lira más encanto que cuando cante, Madre, tus Dolores…”.

Jesús Pérez y Rafa Rivas compartieron la cuartelera “En la calle la Amargura…”. Pampi y su padre continuaron con “Lágrimas de María” como si de un duelo de fervorosas voces se tratara.

Fructuoso, nuestro Cofrade Mayor, presenta al Mantero ejemplar Juan Ortega

Chacón, en su día Secretario de la Cofradía y al que acompañaban dos de sus hijos en la comida. “Sabes que es “Tu” Cofradía, dirígete a ella”, le dijo Fructuoso.

Juan comenzó aclarando: “Llevo muchos años sin estar en esta comida por compromisos en otros sitios, exaltando saetas, etc, donde me iba tras besarle la mano a la Virgen, pero a kilómetros de distancia me acordaba de Miguel Romero, el hermano más ilustre que ha tenido esta

Cofradía y que presumió de ello en sus poemas. Tengo enormes alegrías que contar: esta savia nueva junto con los hermanos decanos que tanto han aportado.

En 1.972, siendo Paco Chacón Cabello Cofrade Mayor, era yo Secretario, la Comida era en el Cuartel del Imperio Romano, donde Antonio Rivas “rey de los riparios”, hombre de una gracia especial, hacía inolvidable. El Viernes Santo de mañana, donde Jesús Nazareno se llevaba todo el protagonismo, esta Cofradía era “chiquita pero muy a una”, donde nos llamábamos primos pero no era un círculo cerrado de Chacones: Miguel Romero (antaño), Jesús Morales Pontes (“Mones”) que fue un gran secretario, y “Cangilones”, representaban entre otros la variedad de personas y apellidos que la han conformado. La máxima familiar era: “Niño: no dejes nunca a la Virgen, que ella no te dejará a ti”. También me acuerdo de Paco Chacón Cabello que tenía mucha mano izquierda, “el hermano diplomático” le llamábamos porque intervenía cuando la cosa se calentaba en la Comida por esas diferencias que hoy ya se han eliminado, y cuando se subía ante la Virgen ya se arreglaba todo. Con Rafa Chacón Villafranca y con Ángel Chacón Martínez conseguimos abrir la Cofradía a todo el pueblo.”

“¡Sois caballos de tiro!”, dijo Juan a los integrantes del Primero de los Dolores, concluyendo su intervención “histórica” sobre la Cofradía. “Como está aquí Frasquito” , prosiguió Juan, “ y a mí me gusta el flamenco (porque “Ortega” era Caracol y “Chacón” Don Antonio), me voy a despedir emulando una famosa soleá de Triana que dice: “Cuatro son los puntalitos que sostienen mis fervores: Las Angustias, la Santa Cena, La Columna y Los Dolores”.

Interviene Paco Chacón Cabello: “Éste es un día de Acción de Gracias, porque en este mundo de defectos nos encontramos algunas cosas buenas: un plantel de amigos

Viernes de Dolores, Besamanos.

Mesa Presidencial

Abril - 2011Cofradía Servita de MªStma. de los Dolores 1711177777777

con una Madre, la Virgen. Aquí se comprende todo, y se da cariño a lo poco que haya hecho uno. Esta transición es mejor que fue la nuestra: parece que a los del Primero los conozco de toda la vida. Tenías muchos valores de Secretario, Juan, igual que tú, Antonio (Chacón Cáceres). Aún recuerdo a tío Pepe Chacón Crespo, padre de Ángel , y a tío Joaquín.”

Juan Ortega anima a Frasquito (al que merecidamente han puesto su nombre en una nueva calle de Puente Genil), que se arrancó con la saeta:

“Ay Virgen mía de los Dolores, tienes por palio la luna llena.Miradla por donde va, la soberana de la pena con mi saeta clavá”

Rafael Chacón Chacón dejó su sello con la saeta “De los siete puñales clavaos a traición”.

Una representación de la Schola Cantorum con Julio Ortiz se reunió para entonar el “Viva Jesús Nazareno y la Virgen de los Dolores”. Acto seguido, el Hermano Mayor lanzó al aire la cuartelera “Eres corona del cielo” que fue secundada por sus hermanitos de cuartel Fernando Chacón y Perico Rivas.

Jesús Chacón Velasco, del cuartel de los Apóstoles y tío de Manolo Chacón Berral integrante de La Corona, se levantó y paseando por el pasillo imitando a Chiquito de la Calzada puso la nota de humor de la Comida. Sacó un papel y relató cómo a su hijo pequeño le preguntaron en un examen de Religión “¿Quiénes son los Apóstoles?” y el niño contestó:”Los Apóstoles son Chiquito

Rivas, el Balilla y Miguelón” y suspendieron a su hijo en religión “sin ton ni son”. Seguidamente recitó un original soneto de su hermano, Manuel Chacón Velasco, padre de Manolo:

“Túnica rebatera, lúdica manantera, compañera inseparable, testigo de cuarteleras, y diálogos interminables. Tú que soportas

abrazos y manchas de cera, vino de todos grados y rebates de dura piedra. ¡Cómo añoro tu compañía! Mi fi el túnica rebatera, llevarte puesta es mi orgullo, cuando comienza la Cuaresma.

¡Sé que ahora estás dormida! Entre bolitas de alcanfor, y ansiosa esperas otro año que nos juntemos los dos. Seremos testigos de

uvitas, misereres, Stabat Mater y abrazos de amor.”

El hermano de La Corona Javier Reina intervino explicando que en Logroño, ciudad en la que vive, las Cofradías son de gente mayor y aquí sólo con el empuje de un joven saldría un paso. Otra vez Rafael Chacón adornando cada intervención con una saeta, canta:

“De Angustias, penas y puñales, lleva el corazón herido,La Virgen de los Dolores (bis), por el Hijo que ha perdido”

Javier Torres, Vicecofrade, se levanta alabando al Cofrade Mayor, Fructuoso, por cómo lleva el timón de la Cofradía. Narró lo mucho que Antonio Chacón Cáceres, su suegro, ha hecho por la Semana Santa: perteneció al Coro y fue Secretario y Tesorero de la Virgen de los Dolores. “Es un hombre modelo que vive por y para Cristo, con sus 86 años sigue haciendo labores sociales con los pobres”. Por todo ello, su nieto le impone la Medalla de Oro de la Cofradía. Javier escogió unas estrofas de Hierro en “El cuartel y el manantero”: “Manantero es el que lleva la ilusión de una flor nueva y su oración hacia la cruz (…). Antonio: ¡para nuestra Cofradía eres un orgullo!”. Irremediablemente, Antonio Chacón interviene: “¿”Pa” qué me voy a dar publicidad? Pero sabed que en los tiempos difíciles íbamos por las casas a pedir dinero para la Cofradía que junto con lo que daba la lotería y los recibos anuales se iba tirando. Agradezco el homenaje que me habéis dado y

Antonio Chacón Cáceres recibiendo la medalla de oro.

Francisco Baena “Frasquito”

Jesús Chacón Velasco

Alondras y Ruiseñores11188818

“¡Viva la Virgen de los Dolores!”.

Seguidamente, Rafael Chacón entona otra saeta con garra que relataba “El amargo trance del Viernes Santo”.

Jesús Chacón Almeda interviene por segunda vez recordando a los difuntos que nos estarán viendo desde el “Cuartel del cielo” y recordó a los estudiantes ausentes, como su sobrino Marcos (hijo de Rafa Chacón Almeda), que quería haber estado brindando con su tío Pampi y no ha podido. Se brinda por él con una uvita.

Pepe Gálvez, de la Virgen de la Amargura, cantó su tradicional saeta de: “…como perlas preciosillas”, aludiendo a las lágrimas de la Virgen.

Sergio Velasco recuerda a Miguel Velasco, fallecido recientemente, hermano samaritano y del Cristo de la Misericordia, recordado en los Cultos, “hombre con el q Todos los días se está entregando a sus hermanos de Corporación y espero que este Viernes Santo extiendas el manto de la Virgen a todos los pontaneses”.

El Hermano Mayor en un emocionado discurso comenzó

diciendo: “¡Se me ha escapado el cura, yo que quería darle un beso chupao!” recordando con cariño a D. Antonio Liébana, sacerdote que lo bautizó y quien había fallecido el día anterior. Felicitó a D. Francisco Roldán, el predicador, que en sus homilías recalcaba “los Dolores de la Virgen”, quien sufrió lo indecible al lado de lo que sufrimos nosotros en nuestra vida cotidiana. “Estoy este año muy “disfrutón” porque me están permitiendo disfrutar todo el mundo que me ha ayudado”. Animó al Primero de los Dolores a ser la Cruz de Guía y a seguir unidos. Se acordó de la labor de su suegro q.e.p.d., Rafael Chacón Villafranca, por la Cofradía. Brindó por el chófer de la Virgen que está debajo y no se le ve, pero que permite que la Virgen recorra todo Puente Genil. Reconoce ser un “recuperado” para el Viernes Santo gracias al Primero de los Dolores. Agradece a Fructuoso su trabajo y ¡nos espera el Viernes Santo con Nuestra Madre!

El Coro acompaña al Hermano Mayor dedicándole:

“A la sombra mortal de un madero, de María en el suave regazo, yace muerto el Divino Jesús en la cima del Monte Calvario y los cielos se tornan de noche. ¡Vibra el mundo temblando de

espanto y los velos que guardan el Arca como frágil cristal se han rasgado!(…)

Niega el Sol con tristeza sus rayos y la Luna se asoma y parece …. Esa gota de sangre llorando. ¡Oh María qué grande la

Angustia viendo el sino del Hijo Sagrado!¡Oh María protege a los hombres que a tus pies se arrodillan rezando!

Sopla el viento su canto de muerte niega el Sol con tristeza sus rayos y la Luna se asoma y parece que esa gota de sangre

llorando”.

Y otra nueva letra de saeta de Rafael, “la enciclopedia” de la Cofradía, que nos recuerda aquella de: “…donde pisan tus pies, Madre, nacen las azucenas”.

Antonio Chacón Cáceres

Francisco Chacón Almeda, Hermano Mayor 2010

Abril - 2011Cofradía Servita de MªStma. de los Dolores 1911199999999

Fernando Chacón Giménez rememora la comida del 4º Sábado de Romanos y brinda con el Hermano Mayor: “Estamos disfrutando de verte la cara”, le dijo.

Jesús Pérez comienza potente el solo de la coreada:

“Tras el Hijo del Padre cargado…” y todos le acompañamos con nuestras voces emocionadas.

Padre e hijo, Rafael y Pampi, cuartelera a medias: “Eres la flor más temprana (…)”.

Bosco Delgado, integrante de la Schola Cantorum y cuñado del Hermano Mayor, canta junto a Jesús Pérez de nuevo:

“María subió a los cielos, llena de angustia y de pena, a cambiar su manto azul por otro negro de seda por el luto de Jesús“.

Rafa Rivas, con su garra habitual, nos puso el vello de punta con su saeta:

“Madre de los Dolores, eres tú como ninguna cuando sales a la calle.

Baja a posarse la Luna en tu pañuelo de encaje”.

Por fin se levanta Rafael Chacón Chacón, el padre del Hermano Mayor, de quien decía: “Es mi niño”, y añadió: “¡Dios me mantenga otras 58 comidas más, como las que llevo, rodeado de mis hijos y mis nietos!”

Pedro Sillero nos guardó una sorpresa para el final: una saeta tremenda, compleja y muy flamenca, que trataré de plasmar aquí aunque no hay palabras que consigan definirla:

“El corazón lo llevas (bis), hecho pedazos ¡Aayy!Tus Dolores no tienen comparación, porque Tu Hijo lo llevas

agonizante en el maderoLleno de sangre y sudor, y pidiendo clemencia al cielo.

¡Aayy! Miradla ¡Aayy! Miradla como lo lleva, lleno de sangre y sudor y pidiendo clemencia

Al cielo, y como eres Madre del alma y la misma Reina soberana, Estrella del fi rmamento y

Lucero de la mañana.”

Con cariño a mi Cofradía.Puente Genil, 26 de Marzo de 2.010.

Alondras y Ruiseñores22200020

Viernes de Dolores de 1931La celebración del Viernes de Dolores de 1931, 3 de abril, ha dejado para

el recuerdo una fotografía de varios de los hermanos de la Cofradía, entonces Hermandad. Fue realizada en el estudio fotográfico de Marycel.

Esta imagen pertenece al archivo familiar de Jesús Chacón Velasco, a quien agradecemos, junto a su sobrino Manuel Chacón Berral, su aportación.

Fila de arriba, de izquierda a derecha: Pedro Chacón Yerón, José Bedmar “El Seco” y Miguel Baena;

Segunda fila, de izquierda a derecha: Francisco Chacón Yerón, Manuel Chacón Crespo, Joaquín Chacón Crespo y Jesús Morales Pontes;

Tercera fila, de izquierda a derecha: Francisco Gómez Porras, Joaquín Chacón Yerón, Francisco Chacón Rivas y Francisco Chacón Crespo.

Con la campanita de Jesús, sentado en el suelo, Pascual Cuadra y, a su lado, Antonio Moreno Muñoz (cruceta de la Virgen, apodado “Cangilones”)

Viernes de Dolores de 1931

Abril - 2011Cofradía Servita de MªStma. de los Dolores 2122211111111

La CofradíaLa Cofradía

Orfebre y Manantero

Tenía sólo 8 años cuando Jesús María Cosano realizó su primera canastilla y respiradero con chapón recortado para el paso de la Virgen de la Piedad, que iba a ser procesionada el Día de la Cruz. “Mi hermano fue quien los dibujó y mi madre nos hizo el palio de croché”, recuerda con inmenso cariño el orfebre pontanés. Ahora, treinta años después, esas mismas manos están terminando la nueva candelería del paso de Ntra. Señora de los Dolores, compuesta por 40 piezas de distintos tamaños. En septiembre del año pasado, con motivo de la celebración de los Siete Dolores Gloriosos de Nuestra Señora, la Virgen estrenó una réplica de la Corona expoliada en los sucesos de 1936, también obra suya.

“Desde que inicié los candelabros, mi vínculo con la Virgen de los Dolores y con su Cofradía es cada vez mayor”, comenta Jesús María. “Me siento muy orgulloso de haber realizado la candelería, la corona y el escapulario que luce la Virgen. Agradezco, además, a la Cofradía el haber confiado en mí para este proyecto tan importante, tanto en coste económico como estético. He puesto lo mejor de mí en todo momento del proyecto desde el boceto hasta que se han puesto las piezas en el paso”.

Su buen hacer en la orfebrería es vocacional. Veía a su hermano trabajar como restaurador y escultor y decidió que aquello era lo suyo. Tras terminar en Sevilla los estudios de Artes y Oficios en la especialidad de vaciado (moldes, escayolas,...), decidió ampliarlos con la especialidad de metalistería (más conocida como orfebrería). “Mi hermano me pidió que le realizase un trabajo de orfebrería para completar uno suyo de escultor. Ahí me entró el gusanillo, estaba en el taller todas las horas que podía. Tengo la suerte de poder trabajar en mi hobby”.

Fue en 1998 cuando realizó sus primeros trabajos como orfebre profesional: unas cantoneras (o remates de una cruz) para Santisteban del Puerto (Jaén) y un Libro de Reglas para la Hermandad del Gran Poder de Montellano, Sevilla. “En Puente Genil, sin embargo, mi primer trabajo llegó un año después con el Libro de Reglas para la Hermandad del Calvario”.

El nuevo trono del paso de Nuestro Señor del Lavatorio y la Corona de la Virgen del Consuelo pontaneses, la Corona de la Virgen de Gracia de Benamejí y otras muchas piezas han sido realizadas artesanalmente por Jesús María. Cofradías y particulares de toda España, desde Ceuta hasta Valladolid, pasando por Málaga, Sevilla, Granada, Córdoba solicitan sus trabajos. “La candelería del paso de la Virgen de los Dolores y la nueva Corona son algunos de los trabajos más importantes que he realizado hasta el momento en mi vida profesional”, concluye el orfebre.

Cada momento del trabajo tradicional que realiza nuestro paisano es importante, desde el primer boceto hasta que la pieza está

Jesús María Cosano en su taller.

Alondras y Ruiseñores22222222

totalmente terminada. Todo es creatividad, donde “queda plasmado hasta tu propio estado de ánimo. Es un trabajo muy satisfactorio, porque, primero, puedes realizar con tus manos lo que, previamente, has ideado y dibujado. A esto se le une el que, después, puedes ver la pieza que ha salido de mi cabeza y mis manos en un paso de Semana Santa, satisfacción que se agranda si es en tu propio pueblo donde generaciones venideras podrán verlo también”.

Latón, lacre, punteado, cinceles, baño de plata o de oro... elementos imprescindibles en su trabajo. Nada es sencillo ni industrial, todo es artesano. “Realizar un candelabro de tamaño medio del paso de la Virgen de los Dolores supone dos semanas de trabajo completas”.

Estos días previos a nuestra Semana Mayor, Jesús María está terminando un encargo muy especial: 40 custodias de mano para la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) que tendrá lugar en Madrid el próximo mes de Agosto con la presencia de SS Benedicto XVI. Realizadas siguiendo el diseño del orfebre pontanés, tienen basamento circular en el que va grabado, además del emblema del encuentro y el escudo del Pontífice, el lema “Arraigados y edificados en Cristo, firmes en la fe”.

Previo a la JMJ, Su Santidad recibirá la primera custodia en el Vaticano. Tras la Jornada Mundial, está previsto que Benedicto XVI regale el resto de las custodias a otras tantas zonas desfavorecidas de todo el mundo: “Voy a firmar las custodias incluyendo el nombre de Puente Genil. Así nuestro pueblo estará en manos del Pontífice y, después, en todo el mundo. Como cristiano católico y pontanés, es una suerte y un orgullo poder realizar estas custodias”.

Pero, además, Jesús María, hombre sencillo y gran amante de la Mananta, tiene otra gran ilusión: “que mi hijo saque a la Virgen de la Piedad el Día de la Cruz... espero volver a ver ese paso, de nuevo, en la calle”.

Abril - 2011Cofradía Servita de MªStma. de los Dolores 2322233333333

Jesús Chacón de la TorreJesús Chacón de la Torre

Pasado, Presente y Futuro

Queridos Hermanos;

Me he animado a escribir este año, ya que el año que viene es el aniversario de El Primero de Los Dolores, cuartel del que me siento muy orgulloso de pertenecer.

Al mirar atrás, y recordar nuestros primeros años, me da alegría ver lo que éramos y lo que ahora somos. Hemos pasado de ser, unos niños con ganas de jugar, a unos padres con la mirada puesta en nuestros hijos, como el futuro de la Cofradía.

El año que viene, hace ya 25 años, que empezaron nuestras andadas y devoción a nuestra Madre de Los Dolores.

En aquella época, eran nuestros padres, los que nos tenían que acompañar, mientras

nosotros alumbrábamos a Nuestra Virgen, y ahora, somos nosotros esos padres, y son nuestras esposas e hijos, los que nos acompañan.

Da alegría ver, como cada año, va aumentando el número de Hermanos, y cada vez, son más, los pequeños que se visten, y aunque ahora sea, por hacer lo mismo que su papá, me gustaría pensar, que lo que estamos haciendo, es labrar e inculcar, nuestras creencias y devoción por nuestra Madre de Los Dolores.

Incluso, yo este año, puedo sentirme orgulloso de decir que he aportado un nuevo miembro a la Cofradía , mi hijo Enrique, y que al igual que mi madre Angelita, nos dio nuestras primeras ropas, cuando todavía éramos unos niños, ahora con la misma ilusión de hace 25 años, prepara la túnica para mi hijo, el cual, si Dios quiere, nos acompañará, vestido de azul, esta Semana

Santa, que será la primera de muchas.

Aprovechando el enorme privilegio, que es escribir en ésta, nuestra revista, y que cada año, puede observarse, las ganas que nuestro Hermano Alberto y todos los Hermanos colaboradores, ponen al editarla, quiero dar las gracias a todos nuestros padres, que nos acompañaron en aquellos días y las gracias a nuestras mujeres (sobre todo a mi esposa Lupe) que nos acompañan en estos, y a las cuales, les pido, que sigan así, como mínimo, otros 25 años más.

Alondras y Ruiseñores22244424

Imágenes para el Recuerdo

Abril - 2011Cofradía Servita de MªStma. de los Dolores 2522255555555

Alondras y Ruiseñores22266626

arvdiseño: