4.7.2. propuesta de valor

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Factores de diferenciación en los que basar tu propuesta de valor PROPUESTA DE VALOR Precio: Ofrecer el mismo producto o servicio a un precio menor puede ayudarte a alcanzar a públicos que sean muy sensibles al precio. Pero cuidado con entrar en una guerra de precios con tus competidores, si tu modelo de negocio no está preparado Es una estrategia empresarial que maximiza la demanda a través de configurar óptimamente la oferta. Selecciona y jerarquiza los elementos específicos de un producto o servicio que son más valorados por la demanda, haciéndolos asequibles y replicables según las capacidades de la empresa que los ofrece. Por ser una propuesta integral de cara al mercado, la propuesta de valor no debe ser reducida a un elemento diferenciador o una ventaja competitiva, pues estos son subconjuntos de la primera. Tampoco debe ser confundida con promociones o descuentos temporales, pues estos obedecen sólo a variaciones en los términos de intercambio, no al diseño de la oferta ni al producto. Novedad: Ofrecer una nueva forma de suplir una necesidad que los clientes ya tenían, o una necesidad nueva que ha emergido recientemente y a la que aún no se estaba dando respuesta. La nueva solución debe ser suficientemente ventajosa para el

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Factores de diferenciación en los que basar tu propuesta de valor

PROPUESTA DE VALOR

Es una estrategia empresarial que maximiza la demanda a través de configurar óptimamente la oferta. Selecciona y jerarquiza los elementos específicos de un producto o servicio que son más valorados por la demanda, haciéndolos asequibles y replicables según las capacidades de la empresa que los ofrece. Por ser una propuesta integral de cara al mercado, la propuesta de valor no debe ser reducida a un elemento diferenciador o una ventaja competitiva, pues estos son subconjuntos de la primera. Tampoco debe ser confundida con promociones o descuentos temporales, pues estos obedecen sólo a variaciones en los términos de intercambio, no al diseño de la oferta ni al producto.

Precio: Ofrecer el mismo producto o servicio a un precio menor puede ayudarte a alcanzar a públicos que sean muy sensibles al precio. Pero cuidado con entrar en una guerra de precios con tus competidores, si tu modelo de negocio no está preparado para soportarlo herirás de muerte a tu empresa.

Novedad: Ofrecer una nueva forma de suplir una necesidad que los clientes ya tenían, o una necesidad nueva que ha emergido recientemente y a la que aún no se estaba dando respuesta. La nueva solución debe ser suficientemente ventajosa para el consumidor si queremos que éste se interese en nuestro producto.

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Calidad: La calidad de tu producto debe ser percibida como superior, ya sea por el uso de materiales de producción, los acabados, el trato personalizado del servicio…

Conveniencia: Un enfoque orientando a ponernos en los zapatos del cliente y tratar de hacerle la vida más fácil. En muchas ocasiones va asociado a los hábitos de vida, costumbres, o tiempo que dedican los clientes a realizar una cierta actividad. Simplificar la realización de una actividad diaria.

Reconocimiento y prestigio social: Productos asociados a la pertenencia a un cierto grupo social, moda o tendencia. Grandes marcas utilizan esta estrategia que ataca necesidades de índole más profunda en los individuos. No se trata de ahorrarles tiempo ni de resolver un problema tangible, sino de descubrir los anhelos más íntimos de un grupo de individuos y encontrar la manera de satisfacerlos.

Desempeño y funcionalidad: Garantizar que le producto o servicio realiza las funcionalidades para las que fue concebido de un modo superior o más beneficioso a los productos de la competencia. Un buen ejemplo podrían ser los anuncios de detergentes que tratan de demostrar una y otra vez ser los que más manchas son capaces de eliminar.

Reducción de riesgos: Cuando el cliente percibe un riesgo importante al consumir un producto o utilizar un servicio, será importante conseguir ofrecer una solución que minimice dichos riesgos y genere una mayor confianza en el cliente.

Reducción de costes: Cuando el uso de nuestro producto o servicio, supone que el cliente ahorre, puesto que ya no incurre en los gastos que tenía antes de utilizarlo.

Diseño: Tan de moda en nuestros días, el diseño puede ser un elemento claramente diferenciador de una propuesta de valor y puede llevar a ciertos segmentos del público a decantarse por nuestro producto sólo porque éste les resulta más atractivo o más usable.