2.Esta Todo Por Hacer

6

Click here to load reader

Transcript of 2.Esta Todo Por Hacer

Page 1: 2.Esta Todo Por Hacer

Introducción

Todo empieza una noche en la queestás intentando dormir y entonces,sin esperarlo, te viene a la cabezaesa idea que crees que va a cambiarel mundo... o al menos tu vida. Asíempezaron grandes y pequeñas cosasque transformaron muchas vidas yasí se solucionaron grandes proble-mas de la física o la tecnología:durante una noche en la que unapersona insomne decidió encender laluz y escribir eso que se le habíapasado por la cabeza. Algunos escri-bieron diez páginas en un fantásticoordenador portátil; otros, una notaen un post-it que a la mañana

siguiente se encontraron pegado enla mesita de noche; y otros simple-mente lo anotaron en esa Moleskinesin estrenar que habían titulado“cosas que quiero hacer”.En este libro, Pau García-Milà expli-ca cómo recorrer el camino desdeesa primera idea que nos asalta unanoche de insomnio hasta el momen-to en que llega la hora de ocuparnosde no “morir de éxito”. Para ello,debemos encontrar la manera dereinventarnos, saber cómo aprove-char las críticas en beneficio propioo elaborar nuestra propia definicióndel éxito y del fracaso. En definiti-va, se trata de prepararnos adecua-damente ante las diferentes situa-ciones que tendremos que afrontar

Título del Libro: Está todo por hacer

Autor: Pau García-Milà

Fecha de Publicación: 1 de Febrero 2011

Editorial: Plataforma

Nº Páginas: 114

ISBN: 9788415115281

Contenido

Introducción.

Pag 1

El principio de una idea.

Pag 2

Trabajar sobre la idea.

Pag 2

Critícame... pero no tanto.

Pag 3

El éxito y el fracaso.

Pag 4

El primer día después de laidea.

Pag 4

El dinero para pagar la idea.

Pag 5

Conclusión.

Pag 5

EL AUTOR: Pau García-Milà creó, a los 17 años, junto con Marc Cercós,las bases de eyeOS, un innovador sistema operativo que, años mástarde, se convertiría en el fenómeno del cloud computing.Fue expulsado de la carrera de Ingeniería informática y recibió añosmás tarde la primera beca del ESADE Entrepreneurship Institute, ade-más de haber sido alumno de Ignite'08 en el Centre for EntrepreneurialLearning de la Universidad de Cambridge en 2008.En sus primeros cinco años como emprendedor, ya ha sido distinguidocon prestigiosos premios, como el premio del Príncipe de Asturias yGirona "IMPULSA Empresa 2010" o el Premio Nacional de Comunicaciones2009, otorgado al proyecto eyeOS.

Está Todo por Hacer

Leader Summaries © 2011. Resumen autorizado de: Está todo por hacer, por Pau García-Milà, Plataforma © 2011.

Page 2: 2.Esta Todo Por Hacer

Está todo por hacer

al iniciar un nuevo proyecto comoemprendedores.Pau habla sin complejos de su fraca-so universitario (estaba matriculadoen Ingeniería informática). Y es quecon 17 años apenas tenía tiempopara pisar las clases, ya que por esosaños ideó con un amigo las bases delsistema eyeOS, pionero en el des-arrollo del denominado cloud com-puting, por el que los usuarios pue-den acceder a sus archivos almace-nados en un sitio al que se puedeacceder desde cualquier terminalconectado a Internet.Hoy en día, eyeOS se usa en 65 paí-ses, está considerado como el mayorproyecto de software libre creadoen España y compite con algunos delos principales gigantes de la infor-mática, como Google o Microsoft.Telefónica e IBM han confiado eincorporado para sus clientes lasaplicaciones de eyeOS.Pau ha sido galardonado con elPremio Nacional de Comunicaciones2009 y el “IMPULSA Empresa 2010”,otorgado por la Fundación Príncipede Girona, y su libro está prologado(hecho insólito en el panorama edi-torial) por el príncipe de Asturias yel expresidente catalán Jordi Pujol;el epílogo, asimismo, corre a cargodel expresidente del Gobierno espa-ñol Felipe González.El libro Está todo por hacer lleva unclaro mensaje en la portada:“Cuando el mundo se derrumbe,hazte emprendedor”. Con un len-guaje sencillo y directo, alejado delacademicismo, Pau aborda sus pro-pias inquietudes como emprendedory da una serie de consejos paraquienes tienen el coraje de conver-tirse en emprendedores.

El principio de una idea

En numerosas ocasiones, las dudasiniciales interfieren en el proceso dela creatividad o impiden calibrar concierta objetividad el valor de unaidea que sí puede funcionar. Casicualquier cosa puede empezarse encualquier lugar y pensar que tu ideaestá fuera de los “casi” muy proba-blemente reflejará más el miedo afracasar y la búsqueda de una excu-sa para no empezar, que la propiarealidad.

Hay dos situaciones comunes querepresentan un impedimento para lainnovación y el emprendimiento.Una es la de la persona que dice quenunca tiene ideas, una afirmaciónfalsa. La otra es la de la persona quedice que siempre tiene ideas...,pero este mismo exceso le impidellegar a desarrollar ninguna. Ambassituaciones tienen los mismos resul-tados: parálisis e inmovilidad; peroambas tienen una solución que llevaa la formulación correcta de la idea.Quienes dicen que no tienen ideasson, en realidad, personas que no sedetienen a pensar en lo que piensan:es como si les diese miedo hacerlo.Por otro lado, quien proclama quetiene muchas ideas y no sabe porcuál empezar, realmente tieneideas, pero acaba por no llevar nin-guna adelante. Por este motivo, esimportante dedicar un espacio deldía a pensar —un rato que sirva tam-bién para desconectar de todo aque-llo que te preocupa en el día a día,como el trabajo, la familia, etc.—.Un tiempo para reflexionar y anotarlas ideas. Esta es la manera de llegara hacernos emprendedores cuandonormalmente no podríamos hacerlo.Si dedicas un tiempo a pensar cadadía y vas leyendo y releyendo tusideas, puedes ir descartando aque-llas que no son buenas o son redun-dantes. Y así hasta que quedan cincoideas finalistas. En este momentohay que decirse: “Voy a intentarexplicar estas idea”; y el trabajo apartir de entonces consistirá en bus-car las palabras adecuadas paraexpresar esas ideas de manera claray sencilla. Al hacer este ejercicio desíntesis y explicarlo en cualquiercontexto entra en juego la mentecolectiva. Cuando uno empieza yúnicamente se puede permitir unainversión mínima, el hecho dehablar y explicar el proyecto es degran ayuda y puede ahorrar unainversión inicial. Esto facilitará unsegundo filtro.Cuando expones tu idea en un grupopequeño, todas esas personas sepondrán a pensar si esa idea ya exis-te, y lo pensarán con ganas, porque,quizá, estarán buscando como seaalgo para desacreditarla.Probablemente te dirán lo malo dela propuesta, con lo que ya tendráselementos para mejorarla mucho.Todo este proceso te ayuda a des-

cartar ideas, porque el objetivo esquedarte con una o dos cosas. Elpaso siguiente es empezar.Si ves la montaña demasiado empi-nada, quizás una de las mejoressoluciones sea hacer un curso dealpinismo. Y se puede aprender esealpinismo bien en institucionescomo ESADE o IESE —si tenemosposibilidades económicas— o, sim-plemente, buscando información enInternet o pidiendo ayuda a alguienque conozca el tema. Quizás hacerla primera declaración del IVA puedaimponer, pero siempre conocerás aalguien que ya sepa cómo hacerlo ypueda enseñarte la mecánica… O, sencillamente, puede pareceruna montaña el hecho de registraruna marca comercial… Cuando elautor de este libro quiso poner enmarcha su proyecto eyeOS, a él y asu socio les pedían 1000 euros porlos servicios de un profesional pararegistrarles la marca, cuando el pre-cio de hacerlo directamente estáalrededor de 125 euros. Su respues-ta fue buscar qué había que hacer,qué formularios había que rellenar yadónde había que ir. En varias oca-siones estuvieron a punto de tirar latoalla y llamar al gestor, pero, porsuerte, era agosto y estaba de vaca-ciones, de modo que acabaron resol-viéndolo por su cuenta sin ningúnproblema.Cuantas más cosas hagas tú mismo(tanto burocráticas como las especí-ficas de tu emprendimiento), másestarás aprendiendo —tanto para timismo, como para los otros, porque,aumentando el conocimiento perso-nal y conociendo la mecánica, pro-bablemente se la explicarás a otrosemprendedores que te vengan a pre-guntar cómo lo lograste—. Además,en el caso de un potencial fracaso,cuanto más hayas hecho por timismo, tanto más te servirá, porqueya tendrás todo este conocimientopara ocasiones futuras.

Trabajar sobre la idea

Una idea es como un virus: puedecambiarlo todo. Y hay que darle esaimportancia. Cuando Angie Rosalesdecidió crear su propia ONG —Papallupas, que luego se convirtióen la principal organización que

Page 3: 2.Esta Todo Por Hacer

Está todo por hacer

lleva payasos a los hospitales—,nunca habría imaginado que llegaríaa tantos niños. Ni Dídac Lee, cuandodecidió dejar de estudiar paraempezar su empresa en contra de loque le recomendaba su entorno y,gracias a eso, diez años más tarde,cumplió su sueño de convertirse endirectivo del Barça —mientras suempresa ya daba empleo a más de250 personas—.Cuando tenemos una idea y trabaja-mos en ella durante un tiempo, aveces puede ocurrir que deja deparecernos tan atractiva como cuan-do la tuvimos y nos preguntamos sisigue siendo buena. Pensar de nuevoen la idea es un primer paso pararedefinirla, ajustarla, mejorarla y,en definitiva, reinventarnos creandonuevas ideas. Estaremos, en estecaso, haciendo I+D, investigación ydesarrollo sobre esa idea. El ejem-plo típico son las empresas de soft-ware, que crean un producto y tie-nen que ir reinventándose constan-temente si quieren vivir de ese pro-ducto. Al empezar a trabajar conclientes, se refina la idea.En relación con ese refinamiento, loque acostumbra a suceder es que,tarde o temprano, llegan los prime-ros clientes, que empiezan a pedir-nos cosas que ni habíamos pensado,de modo que esto nos ayuda a mejo-rar el desarrollo de la idea. Cuandoaumenta mucho el número de clien-tes puede ocurrir también que elgrueso de estos frene la investiga-ción y el desarrollo, que se comanuestra capacidad de innovar, por-que no se les puede ir diciendo:“Espera, que estoy desarrollandoesto o perfeccionando lo de másallá“. Y esto puede suceder en sec-tores tan dispares como la tecnolo-gía o los zapatos de diseño.Imagínate que creas unos zapatosimpermeables con un diseño atracti-vo e innovador. Estos zapatos pue-den tener mucho éxito, porque evi-tan que los días de lluvia tengas quellevar otro par de zapatos en labolsa para sustituir las botas deplástico cuando llegas a la oficina.Ahora bien, si mientras estás tenien-do éxito no dedicas parte de tutiempo a innovar para hacer evolu-cionar la idea, en cualquier momen-to llegará otro fabricante que pro-ducirá los mismos zapatos y los ven-

derá a mitad de precio. En estemomento, si no has pensado en unaversión mejorada o en una segundaversión, tu empresa fracasará.En pleno auge —cuando más estásvendiendo—, más te lo crees, y esprecisamente en esta situacióncuando menos te das cuenta de queno te estás reinventando. La solu-ción pasa por separar las cosasdesde el primer día, ya sea dividien-do el tiempo de las personas o dife-renciando equipos por tareas: hayque dedicarse a probar cosas, ainventar y a reinventarse. Es lo queGoogle denomina Google Labs y quemuchos grupos llaman simplementelabs, ‘laboratorio de ideas’. De estemodo, cuando la gente deje dehablar de ti porque ya te has queda-do obsoleto, tendrás la posibilidadde presentar lo nuevo, que es lo queestán esperando. Esta es la situaciónideal.El truco para poder dedicarnos areinventar —aunque cuesta conse-guirlo, acaba siendo lo mejor— esescoger al cliente y lograr que esecliente pague por hacer algo quesea, precisamente, lo que tú habríasacabado haciendo gratis por tucuenta. Si te diriges más o menos altarget de cliente que desea justa-mente lo que estás desarrollando,incluso puedes planteárselo abierta-mente: “Te haré un descuento muyimportante si pagas por el desarrollodel producto que buscas”. O simple-mente: “No pagues y dentro de unaño lo tendrás”. Luego será posiblecomercializar y difundir ese nuevoproducto.

Critícame... pero no tanto

Las críticas aparecen el primer día,luego menguan, pero vuelven a apa-recer cuando se presentan versionesnuevas de la idea. Las críticas ini-ciales son las que te intentan disua-dir de que empieces. Si no hay unmercado para el producto, las críti-cas pueden ser cariñosas (de fami-liares o de tu entorno cercano) ypretenden buenamente o bien evitarque te estrelles o bien que tires tuversión a la basura. Pero tambiénestán las críticas de personas a quie-nes les daría rabia que triunfases o,

incluso, las de compañeros que pre-fieren verte trabajando tranquila-mente a tener éxito.Una vez que ya has puesto en prác-tica tu idea, por ejemplo, conseguircrear unos zapatos impermeables,empezarás a enseñarlos y es posibleque alguien te diga: “Oye, son muyfeos”. Seguramente la persona quehace este comentario no habrá estu-diado moda, no habrá viajado paraver pasarelas en varias ciudades delmundo... Sencillamente, esta serásu percepción. Puedes tomártelo dedos formas: o pensar que esta perso-na “no sabe o no entiende” y seguiradelante; o, la alternativa, creerque esta persona nunca se compra-ría tus zapatos y que quizá tampocolo hagan otros centenares de usua-rios: al fin y al cabo, esta persona esun usuario potencial. En el mundodel software sucede lo mismo queen el caso de los zapatos. Cuandoalguien prueba un programa nuevo ydice que no le funciona o no loentiende, puedo pensar que estapersona no tiene conocimientos deinformática ni de usabilidad, y yo síporque he estudiado... Ahora bien,si él va a ser el usuario de este pro-grama, quizá merece la pena escu-char lo que dice.Las críticas suelen ser beneficiosaspara la empresa y hay que aprendera aprovecharlas en beneficio propio.Cuando encuentres a un grupo deusuarios de quienes te fíes y que tecritiquen de manera constructiva,cuídalo. Los llamados early adopters(‘primeros usuarios de un producto’)son quienes se darán cuenta de losdefectos antes que nadie, y estascríticas te resultarán enormementevaliosas para mejorar. Es a estacomunidad a la que merece la penaescuchar. Cuanto más tecnológicosea nuestro proyecto, más posibili-dades tendremos de crear unacomunidad en Internet; cuantomenos tecnológico sea, será másfactible crear una comunidad anuestro alrededor.En Internet siempre contamos conherramientas muy potentes parapoder conocer la opinión de losusuarios; las principales son los for-mularios y los foros. La gente suelepreferir los foros, porque no sabenadónde va a parar la información delformulario, ni si lo leerá alguien o

Page 4: 2.Esta Todo Por Hacer

Está todo por hacer

no. Con los foros sucede algo pareci-do a los restaurantes. En el caso deun restaurante vacío, no quieresentrar porque desconfías, pero, siestá demasiado lleno, tampoco, por-que te harán esperar mucho. En elcaso de un foro, si nadie comentapensarás que no vale la pena porquenadie le hace caso a ese proyectopero, en cambio, si ves cierta activi-dad, participas. Es decir, que losforos son muy útiles, pero tienes quepreocuparte de irlos renovando,para que haya mensajes, pero queno sean excesivos.

El éxito y el fracaso

Un aspecto importante, una vez quedecides poner en marcha tu idea, esdefinir cuándo considerarás que hasalcanzado el éxito y organizartepara ello. Hay varias maneras demedir el éxito, y eso depende delproyecto y de cada uno. “Éxito”puede ser, sencillamente, ganarsuficiente dinero para poder pagartetu nómina o hacer un viaje para daruna conferencia. El éxito, lo quemarca el triunfo de una idea o unaempresa, es algo que cada uno tieneque definir según su perspectiva.El éxito no siempre depende deldinero inmediato, ni debe ser obli-gatoriamente el objetivo final.Puede ser un error pensar que eldinero inicial debe convertirse enuna fábrica de más dinero. Quizápara conseguir más dinero tengasque dar siete pasos sucesivos y lainversión inicial te sirva para dar elprimero. Un ejemplo de ello es des-tinar una inversión inicial a crear unprograma informático que, poste-riormente, regalarás a todo elmundo. Si resulta que se hace sufi-cientemente conocido en su ámbito,es bien aceptado y se convierte enun referente, entonces tendrá senti-do crear una empresa que se dedi-que exclusivamente a ofrecer servi-cios alrededor de este proyecto. Eléxito, en este caso, llegaría despuésde haber decidido el tipo de progra-ma que quieres crear, después deinvertir para crearlo y después dellevar a cabo la promoción necesariapara que sea conocido; quizá eléxito sea que se hable de tu progra-ma en una revista especializada o

que un determinado número de per-sonas confíen en él. Antes de eso,solo pierdes dinero.Es muy recomendable irse pregun-tando periódicamente qué significatriunfar para uno mismo, porque elconcepto cambia o se modifica conla edad, con las experiencias y amedida que se va avanzando en elproyecto. Si eres joven, al principiopuede consistir en tener muchodinero, crear Google o ser turistaespacial. Puede ser muy fácil enten-der el valor de triunfar tratando detomar como modelo a alguien quepara ti ha triunfado. Por ejemplo,Mark Shuttleworth, el creador delsistema operativo Ubuntu, fue elsegundo turista espacial del mundoy el primero de África; uno de susobjetivos era ganar suficiente dine-ro para poder viajar al espacio.Quizá si hoy en día alguien se ponecomo meta ir al espacio, requerirámucho menos esfuerzo, porque éltuvo que pagar millones de dólares yhacer un curso de entrenamiento enRusia, mientras que actualmenteVirgin está planteando viajes espa-ciales por 143 000 dólares.Quizá triunfar es lo que logróRichard Stallman, el creador delmovimiento GNU de software libreque, según dicen, no es rico, no sealoja en hoteles sino en la casa delas personas que lo acogen, es extro-vertido y le gusta cantar. O, en elotro extremo, quizá sea lo que halogrado Amancio Ortega, el creadordel imperio de ropa Zara, una perso-na con una enorme fortuna y que, encambio, prácticamente no se dejaver en público. Con el tiempo la ideade triunfar cambia. Llega unmomento en que dejas de pensar endinero y te dices, por ejemplo:“Para mí, triunfar es llegar a qui-nientas personas que se hayantatuado mi marca y me hayan man-dado una fotografía”. Seguramente,cuando muchas empresas conocidasempezaron su andadura, no se podí-an imaginar la posibilidad de quealguien pudiera llegar a tatuársela.Sin embargo, la legendaria marca demotocicletas Harley-Davidson es,probablemente, una de las mástatuadas del mundo.Gestionar el éxito tiene dos facetas:la de hacerlo en el día a día y la demorir de éxito. Un indicio de queestás empezando a morir de éxito es

que el discurso de tu cliente actualcambia en relación con el primercliente. Si, además, no te importaque se marche un cliente, esta esuna señal inequívoca; es el punto deinflexión antes de estrellarte. Uncliente contento atraerá a cuatroclientes más, pero uno enfadadodejará de recomendarte a veintepersonas.

El primer día después de laidea

El primer día después de la idea, esdecir, cuando nos ponemos manos ala obra, hay tantas cosas por hacerque quizá lo más complicado es elhecho de ponerse a trabajar. Es con-veniente empezar por lo que requie-ra menos, pero que tenga mayorrepercusión. Por ejemplo, es relati-vamente sencillo hacerse una páginaweb. Hoy en día, es posible hacerlosin ningún tipo de conocimiento enprogramación y su repercusiónpuede ser muy elevada. Hacer unapágina web te obliga a crear conte-nidos, a definir tus objetivos, a defi-nir quién eres y qué quieres, demodo que también te obliga a ir pro-fundizando en tu proyecto. Sin dartecuenta, escribiendo y pensando,estarás haciendo un estudio de mer-cado o un análisis de la competen-cia, un estudio DAFO, o un businessplan. De esta manera, iniciar unapágina web es una manera de empe-zar a orientar el proyecto.Hay varios elementos que nos pue-den ayudar en el futuro. Explicadala importancia de tener una páginaweb, también hay que contemplarlas ayudas públicas, no para llevar acabo un proyecto, sino para partici-par en concursos públicos de planesde negocio del Gobierno local, oconcursos privados o semiprivados.Es importante por dos motivos: pri-mero, porque su importe económicopuede suponer una ayuda nada des-preciable al capital inicial del quedisponíamos; pero, además, está elhecho de poder poner en la páginaweb “Ganador de...”. Aunque no setrate de un premio muy conocido,significa que, por lo menos, el pro-yecto ha sido valorado por personasexternas y eso ya da confianza.Aparte de premios y becas a la inno-

Page 5: 2.Esta Todo Por Hacer

Está todo por hacer

vación, hay créditos a un interésmuy bajo o nulo para jóvenesemprendedores, ayudas delGobierno, el Instituto de CréditoOficial, el Neotec... No se debenperder oportunidades por no quererpasarse unas horas rellenando losformularios.En relación con los inicios del pro-yecto, tienes la opción de empezarla casa por los cimientos o por eltejado. Aunque suele ser más reco-mendable comenzar por los cimien-tos, en ocasiones puede ser másinteresante hacerlo al revés. Porejemplo, si te pasas once mesesconstruyendo una aplicación infor-mática, es posible que Google Labspresente algo semejante justo unasemana antes de que lances tu pro-ducto. En cambio, si has lanzado tuproducto y, posteriormente, GoogleLabs lo perfecciona, conseguirás quelos artículos expliquen que GoogleLabs partió de tu idea.Probablemente en el segundo caso,la potencia de Google acabaráhaciéndote sombra, pero tu posiciónte permitirá iniciar un nuevo pro-yecto con el punto de apoyo del pro-yecto anterior. Excepcionalmente, situ proyecto es excelente, la empre-sa mayor te comprará.En el mundo de la tecnología, quieninventa una idea normalmente no esquien acaba teniendo éxito con ella;el éxito suele ser para el que consi-gue hacer llegar esa idea a un públi-co mayor, lo que los expertos llamanalcanzar la masa crítica. Entonces,¿es mejor empezar la casa por eltejado? Una solución a esta pregun-ta sería empezar primero por lo másvisible de cara al consumidor/usua-rio (es decir, empezar por el tejado)y, cuando la gente ya esté hablandodel proyecto y empiece a tenerlo encuenta, detenerte en seco mientrassiguen hablando de ti para preparartodo lo que no tienes (los cimientos)y dar solidez al proyecto. Se trata deencontrar el momento ideal mien-tras hablan de ti para dejar deincluir funcionalidades nuevas ydedicarte a pensar en la arquitectu-ra de la idea.Es más útil mirar a las grandesempresas de Silicon Valley y decir:“Seremos el nuevo Google o el nuevoMicrosoft”, que ir con la idea“Google me comprará“. En este últi-mo caso se acaban tomando decisio-

nes inadecuadas, porque se tiene unobjetivo muy improbable que desvia-rá del rumbo del éxito. Google tieneuna política fantástica que permiteque todos sus miles de trabajadoresdestinen un 20% de su tiempo aexperimentar en proyectos que cadauno desee, entendiendo que luegoesos proyectos serán de Google. Eneste sentido, no se puede olvidarque el proceso de selección de per-sonal de Google es uno de los másduros que se conocen, de modo queel personal está enormemente cuali-ficado. Por todo ello, es difícil que tuproyecto no pueda haber sido pensa-do y experimentado por ese gigante.Cuando te has quitado de la cabezaesta idea de si te compran o no,curiosamente es cuando empiezas adesarrollar el modelo de negocio queen realidad querías, empieza a fun-cionar el proyecto... y es cuando, enestas circunstancias, alguien se inte-resa; entonces sí, puedes poner losceros que quieras, porque ya nonecesitas que te compren. Esto esválido para cualquier proyecto, nosolo para los tecnológicos.Un punto relacionado con el éxito esel de la “suerte”. La suerte se cons-truye. Te puedes crear un escenarioen el que es más fácil que tengassuerte. Para entendernos, si juegasa la ruleta, puedes jugar a “rojo” o“negro”, o bien puedes apostar al“32 rojo”; lógicamente, tendrás mássuerte en la primera opción. Sinembargo, cuanto menos dejes quete influya el factor suerte, muchomejor. Esto se consigue no dejandoespacio para factores externos. Sipuedes vender veinte, no te propon-gas vender doscientos, pon diez. Esla manera de darte cuenta de cómovas progresando y, al final, permitir-te a ti mismo ser optimista con losresultados reales en contraposicióncon los esperados.

El dinero para pagar la idea

Hay gastos que pueden reducirse oeliminarse y otros que no. La dedi-cación personal, la “nómina”, esalgo que puede eliminarse, porqueinicialmente uno invierte su propiotiempo en el proyecto. Al principio,si no tenemos oficina ni presupuestopara ella, es posible empezar el pro-

yecto en casa de uno de los socios.Ahora bien, hay unos recursos mate-riales básicos que son imprescindi-bles para desarrollarlo y varían enfunción de la naturaleza del proyec-to. Cuando se dispone de ese presu-puesto ajustado —los gastos que nopueden suprimirse—, llega elmomento de buscar fuentes definanciación.Acostumbra a haber tres grandesopciones para obtener estos recur-sos. Una primera aproximación es lade las tres f, por las iniciales inglesasde family, friends y fools. La familia,los padres, son las personas que másconfían en uno y, normalmente,quienes menos retorno de la inver-sión pedirán. La segunda opción es elbanco. El banco reclama unos intere-ses al cabo de un tiempo. La ventajaes que el proceso está regulado e,incluso en tiempos de crisis, no tepedirán más del 10 u 11 % anual. Laúltima opción es el inversor. Aunquemuchas personas opinan que damenos miedo un inversor que unbanco, en la práctica eso no deberíaser así. Si un banco deja diez, puedepedirte catorce al cabo de cuatroaños; pero un inversor puede pedircuarenta. Evidentemente, si tearruinas, un banco te obligará adevolvérselo y un inversor, no.Se distinguen dos tipos de inversor,el business angel y el venture capi-tal. El business angel es una personapróxima o alguien que se ha enri-quecido con otro negocio. No tepedirá dinero de una manera direc-ta, pero se quedará con una partede la empresa —cosa que no hace elbanco— y exige bastante retorno. Elventure capital es la opción másdura; está mucho más serializado,aunque te atará mucho más concláusulas conocidas como “de arras-tre” o de “acompañamiento”, quedan miedo incluso sin saber de quévan. La buena noticia es que presio-narán y harán todo lo posible para,en poco tiempo, vender su parte conmucho retorno y beneficio. Esto sig-nifica que harán todo lo que puedanpor hacer crecer el negocio demanera exponencial.

Conclusión

Ser emprendedor es una cuestión de

Page 6: 2.Esta Todo Por Hacer

Está todo por hacer

actitud y no de profesión, mientrasque ser empresario es más una pro-fesión. Para un emprendedor el fra-caso es tan sencillo como “guardo elproyecto en el cajón y empiezootro”. Un emprendedor sabrá que esempresario el día que se enfrente ahablar con la gente sobre qué noslleva a despedir a tantos trabajado-res. En cualquier caso, al final, loimportante es tener la concienciatranquila para poder dormir bien encualquiera de los dos casos.Quizá llegue un momento en el quetengas que escoger entre seremprendedor o empresario, y si loque te gusta es emprender, tendrásque optar por que alguien te dirijala empresa: tiene su parte positiva,porque es una persona que llevará laparte de gestión, pero terminasponiéndote un jefe por encima. Pormuy bien que marche todo, lo ciertoes que algún día se producirá unchoque entre ambos y, cuando seproduzca este choque, tienes quetener muy claro que tú escogisteque fuera tu jefe y, por tanto, debesrespetarlo, es decir, has de pensarbien hasta qué punto estás dispues-to a que alguien sea tu jefe.Si no quieres tener un jefe, puedesoptar por ser tú mismo el empresa-rio, en caso de que te guste sufi-cientemente hacerlo. En este senti-do, existen numerosas opciones paraadquirir conocimientos básicos oavanzados, muchos cursos e inclusobecas. Quizá no sea necesario hacerun curso o, cuando lo necesites,estés tan atareado que no tengastiempo para dedicarte a eso. Sea

como sea, lo que sí es importante esprepararse, aunque sea leyendolibros sobre el tema.A veces el éxito de la empresa con-lleva un reconocimiento públiconotable en forma de premio. Este esun aliciente importante, un buenespaldarazo a la idea convertida enproyecto y, finalmente, en empresa.Ahora bien, ganar un premio impor-tante significa, también, tener queadministrar la humildad y ser cons-ciente de la necesidad de seguirinnovando para que esa idea inicialtenga futuro por delante. En ocasio-nes te dan simplemente un logo quepuedes colocar en tu página web;otras veces, los premios consistenen dinero. Según el momento en elque se encuentre el proyecto, tepodrá convenir más una cosa o laotra. Hay que saber que habitual-mente, un premio lleva al otro,esencialmente porque lo difícil eslograr el primer reconocimiento auna labor nueva y, además, porqueal pasar el tiempo, el proyecto vaadquiriendo mayor calidad. Cadavez que te dan un premio, seamenor o no, lo importante es cómote sientes, la sensación que te pro-voca. Y siempre tiene que serbuena.Para que el proyecto funcione, paraque la empresa se expanda y seaconocida, es importante poderhablar en público con propiedad,dando una imagen determinada,transmitiendo unas emociones con-cretas. Hablar lo es todo. En cual-quier situación y momento, la genteúnicamente sabe quién eres y cómo

eres, cómo de fuertes son tus ideasy cómo de débil eres tú, por tuspalabras. Cada vez que abres laboca, sin importar si te diriges a unasola persona o a cuatrocientas mil,todo puede cambiar. El mejor conse-jo posible aquí es que no te dejesaconsejar. Cada persona tiene unamanera diferente de hablar y, alfinal, intentar copiar a alguien sola-mente lleva a no ser original.Se puede emprender un proyecto acualquier edad. Y si tienes la suertede estar en las franjas de edades“raras“ (cuando la gente se sorpren-de por tu edad antes de que empie-ces a hablar), es decir, o menos deveinte o más de sesenta, aprovécha-lo. Debes ser tú el que cuente queuna vez te dijeron: “Antes de que túnacieras yo ya hacía lo que túhaces” o “Hubo un día que esperan-do a que empezara el No-Do...¿Sabéis qué es el No-Do, hijos?”. Asíya nadie se planteará desacreditartepor tu edad.Hay una frase que dijo Gandhi (aun-que seguramente no la dijera pen-sando precisamente en start-upstecnológicas) y que fácilmentepodemos aplicar a nuestro nuevoemprendimiento. Esta frase es laque más nos puede ayudar cuandoveamos a grandes empresas que noshacen la competencia:“First they ignore you, then theylaugh at you, then they fight you,then you win”.

Mahatma Gandhi