Tomando como referenciala información suministra-da por el MAPA, durantelos años 2003 y 2004, el

mercado español de cargadorastelescópicas ‘inscritas como agrí-colas se mantuvo alrededor delas 300 unidades; esto es, aproxi-madamente, el 10% del mercadofrancés, y algo más de la mitaddel mercado italiano.

Si tenemos en cuenta que elmercado español de tractores esde unas 18.000 unidades poraño, que el francés prácticamen-te lo duplica, y que el italiano esun 50% mayor que el español,se ve claramente que no semantiene la misma proporciónen todos los países, lo que indu-ce a pensar que hay razones denaturaleza agrícola y económicaque explicarían estas diferencias.

Por otra parte, el empleo decargadoras frontales en los trac-tores continúa siendo lo habitual.Difícilmente se encuentra unaexplotación agrícola, y menos sitiene orientación ganadera, sinun tractor equipado con pala. Esmás, muchos tractores antiguosse conservan para utilizarlos oca-sionalmente con la pala, pero apesar de esto, con bastante fre-cuencia, se adquieren nuevostractores con pala montada enorigen, o bajo la responsabilidaddirecta del concesionario.

Esto no sólo sucede en Es-paña, sino en mercados como elfrancés; aunque no hay estadísti-cas precisas sobre el mercadode palas para tractor, se estimaque en Francia se venden entre

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LAS CARGADORASTELESCÓPICAS

Cada vez con más frecuencia, los grandes fabricantes detractores se interesan por el mercado de las cargadorastelescópicas adaptadas a la agricultura. Al igual que pasó en elnegocio de las palas cargadoras para tractor, buscan mantenersu cliente dándole un servicio completo, por lo que incluyen ensu oferta, bien directamente, o mediante acuerdo con losespecialistas, las cargadoras telescópicas para usos agrícolas,participando de esta manera en un mercado interesante, aunquecon una demanda que no aumenta en la misma proporción quela oferta. Seguidamente se analizan las particularidades de lascargadoras telescópicas para la Agricultura, y las mejoras queéstas pueden ofrecer en comparación con la pala cargadorafrontal, tradicionalmente utilizada en los tractores agrícolas.

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10.000 y 11.000 unidades poraño, lo que sería equivalente auna pala por cada cuatro tracto-res nuevos matriculados, con in-dependencia de las más de3.000 cargadoras telescópicasvendidos para usos agrícolas.

Las limitaciones en laspalas para tractor

El mercado de las palas fron-tales para tractor ha estado do-minado, durante muchos años,por empresas de tipo medio,verdaderos especialistas del pro-ducto, que atendían este merca-do, bien directamente o comoproveedores de los fabricantesde tractores.

La normativa de homologa-ción de ‘tipo’ para tractores agrí-colas ha enrarecido las relacio-nes entre los fabricantes de trac-

tores y los de palas, ya que, en elcaso de que ésta se instale en eltractor de manera permanente,se considera que forma parte delvehículo, por lo que tiene que re-señarse en la tarjeta ITV; si sepuede desenganchar con facili-dad, es un ‘apero’ más, y no mo-difica, desde una perspectiva le-gal, las características del tractor.

Esto afecta indiscutiblementeal diseño de los elementos de an-claje de la pala, y a veces hace ne-cesaria la modificación de algunosde los elementos estructuralesdel tractor, lo cual no es del agra-do de los fabricantes de tractores,ya que puede afectar a la resisten-cia estructural de los mismos.

Esto explica que, progre-sivamente, los fabricantes detractores intenten quedarse conel negocio de las palas, ofrecien-do, en el momento de la compradel tractor, una pala integrada enel mismo, sobre la que se dala misma garantía que al trac-tor, y para la que se asegurael cumplimiento de toda lanormativa vigente, aunque nosiempre pueden competir enprecio con el ‘especialista’, so-bre la base de similares presta-ciones y calidad del productoofrecido.

También, para competir enun mercado difícil, en el que lascargadoras telescópicas buscan

su parte, las palas de tractor hanevolucionado tecnológicamente.La introducción del paralelogra-mo en los brazos, la facilidad pa-ra el cambio de herramienta conenganche rápido de los circuitoshidráulicos, la inclusión de unatercera y hasta una cuarta fun-ción, con manejo integrado delconjunto utilizando los propioscontroles del tractor, y la suspen-sión para amortiguar los movi-mientos de subida y descenso,han convertido a las palas carga-doras modernas en una equipoeficiente y fácil de manejar.

Por otra parte, la incorpora-ción de los bastidores comple-tos, o los semi-bastidores, en el

diseño de los tractores agrícolasmodernos, distanciándose del

concepto de monobloque, quesiempre pueden dar proble-

mas cuando el conjuntose somete a esfuer-

zos antero-poste-

riores, como los que induce uncargador frontal, ha permitido in-tegrar los elementos de anclajede la pala en esta estructura re-sistente longitudinal del tractor,con un dispositivo de engancherápido que facilite la retirada ycolocación de todo el conjunto, yno sólo de la cuchara, pero sobretodo, evitando que el tractoristapierda visibilidad.

A pesar de la evolución tec-nológica del conjunto tractor/palafrontal, siempre hay que contarcon que el diseño del tractor, consu reparto de masas entre rue-das delanteras y traseras, no es-tá pensado para mover cargascolocadas en la parte frontal. Lascargas sobre la pala producenuna reducción del peso en lasruedas del eje trasero y una so-brecarga en las del delantero,que hay que compensar con uncontrapeso posterior para asegu-rar la estabilidad, pero siempre lavelocidad de desplazamiento es-tá limitada por la sobrecarga quese induce en unas ruedas delan-teras de menor tamaño, y por elreparto de masas resultantes enun vehículo que, por diseño, estáconcebido para soportar la trans-ferencia de carga desde delantehacia atrás, que es lo que suce-de durante los trabajos de trac-ción.

A pesar de estos inconve-nientes, cuando el manejo de

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Bastidor de unacargadora

telescópicadiseñado paramotor trasero.

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cargas no es la actividad principaldel tractor, el recurso de la palafrontal parece que resulta el másventajoso, ya que es la opciónque eligen de la mayoría de losusuarios. Sin embargo, a medidaque el manejo de cargas cobramayor importancia, lo cual suce-de en algunas explotaciones enlas que la ganadería toma un pa-pel preponderante, se considerainteresante pasar de la opcióntractor+pala a la de pala+tractor,o sea un vehículo diseñado paramanejar cargas, que pueda des-plazarse por superficies irregula-res, como las que impone el me-dio agrícola, y que, en cierto mo-do, pueda cumplir, aunque nocon la misma eficacia, los demástrabajos que se encargan al trac-tor. En resumen, un vehículo agrí-cola ‘tractor cargador’.

Esto no quiere decir que altractor con pala frontal pierda in-terés, ya que incluso los que op-tan por la cargadora telescópica,mantienen en el equipo mecáni-co de su explotación algún trac-tor con pala frontal.

Cargadorastelescópicas para laagricultura

El manejo de las cargas enalmacenes o en la edificación,cuando se combinan los despla-zamientos con la elevación, serealiza con las conocidas comocargadoras telescópicas, vehícu-los especialmente diseñadoscon este fin. La altura de eleva-ción necesaria y la masa de las

cargas considerada ha llevado anumerosos modelos y variantes,aunque, en principio, consideran-do que son vehículos que se mo-verían por un suelo firme, singrandes irregularidades ni pen-dientes, situación bastante dife-rente de la que se encuentra enuna explotación agropecuaria.

En todos los casos, una vigacentral telescópica articulada so-bre el bastidor en las proximida-des del eje trasero, es la que seencarga de elevar la herramientaque soporta la carga (cuchara,pinza, horquilla, etc.) y de despla-zarla hacia delante distanciándo-la de la posición que ocupa el ve-hículo cargador.

En un determinado momen-to, y dada la demanda de algunasexplotaciones agrícolas que utili-zaban estas cargadoras telescópi-cas ‘industriales’, empezaron a fa-bricarse cargadoras telescópicaspara usuarios agrícolas, adaptán-dose a las particularidades de es-te segmento de mercado. Indis-cutiblemente, el usuario, acos-tumbrado a trabajar con palacargadora frontal en un tractoragrícola, que prueba una cargado-ra telescópica queda sorprendidopor su maniobrabilidad y por la ra-pidez con la que puede desplazar-se, lo que redunda en una mejorade la productividad. Pero, cuandose entera del coste del equipo,muy por encima del de un tractor

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EL TRACTORISTA QUEPRUEBA UNACARGADORA

TELESCÓPICA QUEDASORPRENDIDO

POR SUMANIOBRABILIDAD YPOR LA RAPIDEZ CON

LA QUE PUEDEDESPLAZARSE

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agrícola de igual potencia, es difí-cil convencerlo de la rentabilidadde la nueva inversión.

Para que el cliente potencialacepte que el nuevo vehículo po-drá sustituir al tractor agrícola enotras funciones diferentes a lade cargar, los fabricantes hanmodificado el diseño de las car-gadoras telescópicas industria-les, poniendo en el mercado lasversiones ‘agrícolas’, que, sinperder su capacidad para el ma-nejo de cargas, se adaptan a lanueva situación, tomando enconsideración dos aspectos im-portantes: por una parte, los pe-sos de las cargas y las alturasmáximas habitualmente requeri-das en el medio rural, por otra, laadaptación al movimiento sobresuelos irregulares, dándole la po-sibilidad de accionar y arrastrardeterminadas máquinas agríco-las, e incluso dotándolos de en-ganche tripuntal y toma de fuer-za normalizada, con lo que pue-den trabajar como lo hace untractor. Así, en determinadosmodelos, se admite la homolo-gación como ‘tractor’.

Caracterización de laoferta

Analizando la oferta de carga-doras telescópicas ‘industriales’se encuentran modelos cuyas al-turas de elevación pueden sobre-pasar los 20 metros, y el alcancemáximo llegaría a superar los 17;en estos casos, la cargadora utili-za soportes de apoyo, de maneraque se asegura la estabilidad.Otros modelos ofrecen la posibili-dad de maniobrar en recintos pe-queños, o incluso adaptarse paraser transportadas en camión co-mo auxiliares de carga-descarga.

Sin embargo, en los modelos‘agrícolas’ se da preferencia aldesplazamiento sobre suelosirregulares, adecuando los ele-mentos de propulsión y guiado aestas circunstancias, incluyendoun despeje de las de 40 cm; a lavez se limitan las alturas y las car-

gas, siendo dos los niveles másrepresentativos: 6 y 7 m de alturade elevación, con 2.500-3.000 kgde capacidad de carga máximaen la posición más cercana de lacuchara, hasta una altura algo in-ferior a la máxima de elevación.En cuanto al alcance, algo menorde 4 metros, con la consiguientereducción de la carga máxima enla posición de máximo alcancepara asegurar la estabilidad. To-das máquinas con masa de refe-rencia de unas 7 toneladas.

En todas las cargadoras te-lescópicas, la viga central robus-ta es la base a partir de la cual sediseña la estructura y se integranlos diferentes componentes. Ar-ticulada en el bastidor puede gi-rar hasta un ángulo de más de60º respecto a un eje horizontal,admitiendo algunos modelostambién un pequeño ángulo deoscilación con respecto al planomedio del cargador.

Esta viga central la compo-nen dos elementos, de maneraque el que se sitúa en el interiorse desplaza con respecto al exte-rior, apoyándose en cuatro pati-nes delanteros (fijos) y cuatro tra-seros situados en el elementomóvil. El material de estos pati-nes de apoyo da lugar a notablesdiferencias con respecto al tipode mantenimiento y lubricaciónque necesitan. Así, algunos fabri-

cantes, que utilizan como mate-rial el teflón, aconsejan no lubricarlos apoyos, mientras que otrosrecomiendan realizar la limpiezacon gasóleo, o bien, en algunoscasos hay que utilizar un productocon características especiales.

Las características del medioagrícola hacen recomendable cui-dar el estado de estos elementosque se pueden degradar con lapresencia de materiales tan abra-sivos, como las partículas de pol-vo, habituales en el trabajo decampo. Algunos fabricantes acon-sejan, incluso, no engrasar estospatines para evitar que las partí-culas con el lubricante pueda ace-lerar el proceso de desgaste.

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Carga (t) Elevación (m) Alcance (m)

CARGADORAS TELESCÓPICAS ‘AGRÍCOLAS’(Características de los modelos en la clase 30/7/4)

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Los motores y suposición

Normalmente se uti-lizan motores diésel decuatro cilindros conuna cilindrada entre 4 y5 litros, suministrandouna potencia entre 90 y120 CV. La posición del motorcon respecto al eje central de lamáquina marca notables dife-rencias entre fabricantes y mo-delos.

La necesidad de colocar laviga telescópica en el centro dela máquina obliga a situar el mo-tor fuera de la línea central, porlo que sólo caben dos posibili-dades: en uno de los laterales oen la trasera de la máquina, pordetrás del punto de articulaciónen el bastidor de la viga telescó-pica. Cada fabricante tiene suspreferencias.

Así, con el motor trasero se busca:• Dar más contrapeso a la cucha-

ra, ya que se aumenta el brazode palanca.

• Reducir la distancia entre ejespara conseguir mayor manio-brabilidad.

• Facilitar los trabajos de manteni-miento del motor, al que se pue-de acceder por ambos lados.

• Reducir el nivel de ruido y elcalor que llegaría a la cabinasólo con alejamiento.

• Situarlo en una posición en laque llega el aire con menospartículas en suspensión, loque ayudaría a mantener máslimpios los radiadores.

Como argumento comercialcomplementario, también se in-dica que, si se utiliza una trans-misión mecánica entre el motory los ejes, la posición trasera ylongitudinal del tractor permiteun accionamiento más ‘directo’,aunque esto no es tan significati-vo, dada la gran eficiencia que sepuede conseguir con transmisio-nes en ángulo bien diseñadas, ocuando se utilizan trasmisioneshidrostáticas, opción que eligenalgunas marcas.

El principal inconveniente pa-ra el motor situado en posicióntrasera es la pérdida de visibili-dad hacia atrás, lo que hace quese llegue a perder la posibilidadde utilizar la cargadora telescópi-ca en trabajos agrícolas de trac-ción, como lo hace el tractoragrícola convencional.

En consecuencia,otro grupo de fa-bricantes pre-fieren colocarlateralmenteel motor, bienen posición lon-gitudinal, bien trans-versal, o incluso for-mando un pequeño ángulocon el plano medio del basti-dor.

Como argumentos que sir-ven para defender la posición la-teral del motor, se ofrecen los si-guientes:• Mejorar la visibilidad hacia

atrás, lo que da más posibilida-des para que la cargadora pue-da ser utilizada como tractoragrícola.

• Aumentar la longitud de la vigatelescópica sin que lo haga lalongitud total de la máquina.

• Aumentar la distancia entreejes, lo que hace a la máquinamás estable transportando car-gas a mayor velocidad.

• Dejar más espacio para au-mentar el radio de giro de lasruedas.

• Conseguir un mejor equilibriotransversal, al situar el motoren el lado opuesto a la cabina.

Con los motores en posicióntrasera es el depósito de com-bustible, en posición lateral, elque forma parte del contrapeso,pero el equilibrio de modifica enfunción del nivel de llenado.

Los mayores inconvenientesque se derivan de la situación la-teral del motor son consecuenciade las dificultades para acceder ala parte interna del mismo, deaquí que algunos fabricantes pre-fieren situarlo en posición trans-versal o ligeramente inclinado,pero sobre todo que en esta si-tuación hay que reforzar el siste-ma de refrigeración, por encon-trarse el motor más cerrado, ytambién en una zona en la que laspartículas de polvo colmatan conmás facilidad los radiadores.

Para eliminar este inconve-niente algunos fabricantes

instalan el radiador en un

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Motor lateral con transmisiónhidrostática.

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compartimento separado, y elventilador con un dispositivo deinversión que garantiza que lasrejillas se mantengan limpias, demanera similar a como se haceen las cosechadoras.

Las transmisiones

Las cargadoras telescópicasdisponen de cuatro ruedas motri-ces, que reciben el movimientode sus ejes dotados de diferencia-les que pueden incluir dispositivosautoblocantes, al menos en el ejedelantero. Entre el motor y losejes se pueden utilizar transmisio-nes mecánicas o hidrostáticas.

En las transmisiones mecáni-cas se utiliza, junto con el cambiode marchas (4, 5 ó incluso 6 rela-ciones), un convertidor de parque permite multiplicar al par mo-tor en las etapas de trabajo en lasque se requiere un esfuerzo su-plementario, como en el procesode llenado de la cuchara por em-puje frontal. Este con-vertidor se comple-menta con una cajade ‘cambio en car-ga’, tipo powers-

hift, aunque en algunos modelosse utilizan cajas sincronizadas,más sencillas, que mediante laelectrónica se hacen compatiblesen su funcionamiento con el con-

vertidor de par.Los fabricantes queoptan por la transmi-sión hidrostática argu-mentan que con ellase consigue una ma-

yor precisión en el pro-ceso de aproximación en carga

y descarga, ofreciendo el cambiocontinuo de velocidad con buenaprecisión en las maniobras. Tam-bién el empleo de conduccioneshidráulicas da mas facilidadespara el posicionamiento del mo-tor en el bastidor.

Algunos fabricantes combi-nan la transmisión hidrostáticacon una caja mecánica de dos re-

laciones (alta y baja) para mejo-rar la eficiencia energética en losdesplazamientos a mayor veloci-dad, mientras que otros no utili-zan caja mecánica intermedia.

Hay un punto crítico en lastransmisiones hidrostáticas que

conviene valorar y es el de la re-novación periódica del aceite,que puede incrementar los cos-tes de mantenimiento con res-pecto a los de una cargadora queutilice caja mecánica con conver-tidor de par.

El sitema hidráulico

Constituye un elemento esen-cial de la cargadora telescópica, yaque es el que se encarga de ali-mentar los cilindros que producenlos movimientos de la viga teles-cópica, la cuchara y todos los dis-positivos que se acoplan a ella.

Algunos fabricantes prefie-ren utilizar bombas hidráulicasde caudal constante, normal-mente de engranajes, mientrasque otros utilizan las de pistonescon caudal variable. En algunoscasos el sistema de regulaciónde la presión en el circuito hi-dráulico es del tipo load-sensing(con control de carga), aunque labomba sea de caudal constante;en estos casos el distribuidorpermite accionar varias funcio-nes simultáneamente.

En los sistemas en los quese utiliza las bombas de pistonesde caudal variable, el caudal de labomba a bajo régimen es máselevado, aunque no se incre-mente el caudal máximo queproporciona. En estos casos elsistema load-sensing se incorpo-ra en la propia bomba, que modi-fica el caudal de aceite impulsa-do en función de la demanda delcircuito.

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DOS ALTERNATIVASCOMPITEN: LATRANSMISIÓNHIDROSTÁTICA

FRENTE A LAMECÁNICA CON

CONVERTIDOR DEPAR

Motor lateral contransmisión mecánica

y convertidor.

Motor posteriory transmisión

mecánica yconvertidor.

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En el circuito hidráulico quealimenta el cilindro de elevacióndel brazo central se incorporansistemas de amortiguación quefacilitan los desplazamientos dela máquina con carga en la herra-mienta, incluso a alta velocidad.

Controles y conducción

El mando más característicode las cargadoras telescópicases un joystick para el control delbrazo telescópico. En él se inclu-yen las funciones proporcionalesde elevación descenso del brazoy carga descarga de la herra-mienta.

El desplazamiento telescópi-co del brazo y las complementa-rias (cuarta y quinta) varían enfunción del fabricante, de mane-ra que bien ofrecen controlescon todo abierto / todo cerrado,o de proporcionalidad de paso. Elcontrol proporcional para la ex-tensión del brazo telescópico fa-cilita algunos trabajos de preci-sión, como el de apilar pacas.

Se suele dar como opción lainclusión de una válvula de con-trol que permita alimentar encontinuo un motor hidráulico si-tuado en la herramienta, como el

que precisaría el rotor de un de-sensilador.

Con independencia a lo quese relaciona con el conjunto decontroles para el manejo del bra-zo, las cargadoras telescópicasincluyen los mandos convencio-nales de cualquier máquina mó-vil, como volante de dirección,acelerador, frenos, etc. y para elcontrol de la transmisión en fun-ción de sus características.

En el caso de la dirección,normalmente las cuatro ruedasson directrices, aunque desde eltablero de control se pueden se-leccionar tres posibilidades: di-rección sólo en las ruedas del ejedelantero, aconsejada en trans-porte, dirección en las cuatroruedas, que giran en diferentesentido (delanteras–traseras) pa-ra aumentar la maniobrabilidad, yla opción ‘cangrejo’, con ruedasdelanteras y traseras que giranen el mismo sentido, para ma-niobras de aproximación y parael desplazamiento lateral antelos obstáculos.

En algunos modelos de car-gadoras telescópicas para la agri-cultura se utiliza la articulacióncentral como sistema de direc-ción. En estos casos, la cabina,con el puesto de conducción, sesitúa en posición central, lo quereduce la longitud del brazo te-lescópico, y la máquina toma laapariencia de las cargadoras in-dustriales, lo que la llevaría a unsegmento de mercado diferente.

En cuanto a la cabina de lascargadoras telescópicas, sus di-mensiones son menores de lasque habitualmente se utilizan en

los tractores, ya que solo puedenocupar la mitad de la anchura dela máquina. Al igual que en lostractores, deben de proteger alconductor en el caso de vuelco(ROPS), pero también se estimanecesaria su resistencia a la caídade objetos (FOPS), establecién-dose varios niveles de resisten-cia, en función de las característi-cas de las cargas que se mane-jan. Están discusión la normativaque se debe de aplicar para el en-sayo de las estructuras de protec-ción frente a la caída de objetos,ya que se pretende compatibili-zarla con la de protección en elvuelco para los tractores, másaún cuando algunas de las carga-doras telescópicas se homologancomo tractores agrícolas deacuerdo con las Directivas CE.

Aptitud de lascargadoras parafuncionar comotractores

Varias empresas de las quefabrican cargadoras telescópicashan desarrollado modelos que ha-cen posible el trabajo en campo,en condiciones similares a comolo hace un tractor convencional.Para ello, en máquinas que por sudiseño ofrecen buena visibilidadhacia atrás, se monta el corres-pondiente enganche tripuntal nor-malizado y una toma de fuerzacon régimen 540/1.000 rev/min, ala vez que se instalan en la cabinalos controles correspondientes.

De esta manera el usuariodispone de una cargadora teles-cópica que puede trabajar comotractor; cuando dentro de las ac-tividades de su empresa el ma-nejo de cargas es importante, yel trabajo de campo es necesa-rio, aunque subordinado al ma-nejo de cargas, se le ofrece unanueva alternativa: la cargadoratelescópica frente al tractor agrí-cola con pala frontal.■

� LUIS MÁRQUEZ

DR. ING. AGRÓNOMO

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