Post on 09-Mar-2016
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Me gustara que furamos capaces de elaborar pensamiento con el corazn y los pies metidos en los quilombos/caracoles/comii nidades/cabildos y no tan dependiente del pensamiento eurocntrico. Obi encontramos una poderosa tradicin rebelde, no codificada en libros y tesis de doctorado, pero muy fecunda si somos capaces mi slo de pensarla con la cabeza sino sentirla con el cuerpo, d e ja r a permear por la rabia que emana de esas resistencias.
- Ral Zibechi
-miAmaioiSAi Ral ZIBECHI
Latiendo ResistenciaG u e rra s de Despojo
_______ . i n O S
Ral Zibechi
Latiendo Resistencia. M undos Nuevos y Guerras de Despojo.
Edicin Cero. 2015
Revisado po r COLEPI
Editado y m aquetado po r la Cooperativa El Rebozo
Diseo de tapa: D octeur Caca
Ilustracin: Uriel Barragn (Bouler) y D octeur Caca
Este libro es fruto de la colaboracin entre diferentes
colectivos y el autor. Nos darem os la tarea de ponerlo en
com n en distintas geografas del territo rio mexicano. Las
conversaciones y el intercam bio nu trirn la prim era edicin de
esta herram ienta.
copyleft
Invitamos a copiar, reproducir, intercambiar y distribuir por
cualquier medio que sea posible. Amplifiquemos y multipliquemos
los esfuerzos autnomos a travs de redes abiertas de compartencia y
apoyo mutuo.
Ral ZIBECHI
Latiendo Resistencia
PALARA EDITORIAL
In d ic e
VI.
Vil.
VIH
XII.
XIII. Los Sin Techo de Baha: La utopa del buen vivir 131
XIV. D efendernos colectiva y com unitariam ente 141
XV. V ida material, capitalismo y cam bio social 145
XVI. Elogio de la dispersin 149
XVII. Las escuelitas de abajo 155
XVIII. La respuesta somos todos 159
Anexo - La IV Guerra M undial
Subcom andante Insurgente M arcos (1999) 163
Presentacin 7
Entrevista a Ral Zibechi p o r Veredas Autnom as 11
M ovim ientos antsistm icos y descolonizacin 41
Cm o piensa la clase dom inante 55
La violencia estatal y el discurso
de los derechos hum anos 59
Mxico: U n estado fallido planificado 67
N o hay diferencia entre narco, burguesa y lites 73
La m asacre como form a de dom inacin 77
M adres de Mayo: Los lm ites de la
dem ocratizacin del Estado genocida en Brasil 81
De la C iudad M aravillosa a la C iudad Negocio 91
G enocidio en Hait: la responsabilidad
latinoam ericana 101
Liberar el m undo nuevo que late en el corazn
de los m ovim ientos 111
Bolivia: un nuevo triunfo de la gente com n 121
PRESENTACIN
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Este es un libro que camina y que todava no ha llegado. Es un
mole al que le faltan varias horas a fuego lento. Es una palabra
que se suelta y que espera, en escucha, el rebote. Son algunos
espejos para mirarnos y entendernos en el otro, en las otras, y formu-
lar nuestros propios relatos de lo que estamos viviendo.
Este libro se concibi en el latir del corazn colectivo que devel
Ayotzinapa, entre la impotencia, rabia y la sensacin de poder final-
mente nombrar y gritar todos los dolores que en los ltimos aos han
lacerado este pas, desde cuando lo anunciaba el finado Sub Marcos
en diciembre de 2007 Quienes hemos hecho la guerra sabemos re-
conocer los caminos por los que se prepara y acerca, dijo Marcos.
Las seales de guerra en el horizonte son claras. La guerra, como el
miedo, tambin tiene olor. Y ahora se empieza ya a respirar su ftido
olor en nuestras tierras.
Al escuchar esas palabras en ese entonces, no imaginbamos
todava que bamos a sufrir esa guerra en toda la geografa mexi-
cana, que iban a masacrar a nuestros familiares que iban a secues-
trar y violar a nuestros amigos, asesinar a nuestras compaeras,
que nos iban a torturar y encarcelar. Que bamos a tener miedo.
En todos estos aos, lxs que estamos participando en este libro cola-
borativo, desde nuestros pequeos lugares, como muchos y muchas
otras en diferentes geografas, hemos intentado no mirar para otro
lado sino mirar la realidad de frente para cambiarla. Y en este cami-
no el escucharnos y preguntarnos entre diferentes nos ha ayudado a
entender nuestro presente y abrir nuevas veredas para caminar en el
pantano buscando terrenos firmes. Entre las muchas miradas con-
vertidas en palabra hemos encontrado en la del compa Ral Zibechi,
en diferentes momentos, un viento que clarifica el horizonte, no para
pintarlo de azul, sino para verlo como es.
El pasado Noviembre, mientras nos preparbamos para ir a escu-
char la palabra de los padres y madres de los ausentes Ayotzinapa y
los pueblos del Congreso Nacional Indgena, invitamos a Ral a una
actividad rumbo al primer Festival de las Resistencias y las Rebeldas
contra el Capitalismo, a que nos compartiera su mirada de Mxico en
el contexto latinoamericano. Su anlisis nos pareci importante para
reflexionarlo ms a fondo y en ms lugares y fue as que juntos empe-
zamos a pensar un libro que pudiera describir cuales son las nuevas
formas de dominacin y los retos que estamos y estn enfrentando
las distintas resistencias.
Ese libro que imaginamos no era algo que ya estuviera escrito, as
que junto a Ral empezamos a reunir y seleccionar diferentes tex-
tos suyos que fueran armando el rompecabezas. Buscamos hilar los
textos con preguntas, pero sobre todo, imaginamos la primera ruta
de reflexin que el libro, junto con su autor, iba a caminar. Y la cola-
boracin entre distintos comps que se van tejiendo en las diferentes
geografas de esta ruta es tambin lo que permite que este libro se
haya podido imprimir y est en tus manos.
Y es as que sale esta edicin cero. La dignidad de la lucha de
Ayotzinapa permiti, entre muchas otras cosas, que el Norte y el Sur
de Mxico, se miraran a los ojos y se encontraran como hermanos
bajo el mismo fuego. Este libro busca ayudar a mirarnos entre dis-
tintas geografas del Norte y del Sur, vernos en el espejo de Nuestra
Amrica para nombrar esos dolores que a veces no sabemos entender,
esos miedos que nos sabemos enfrentar. Busca ayudarnos a entender
la guerra que hemos estado viviendo, as como iluminar los caminos
de abajo en donde laten otros mundos. Esperamos que de esta ruta de
reflexin salga ya la primera edicin, con los apuntes de las compar-
aciones colectivas que surgirn alrededor de los textos y del dilogo.
Esperamos que donde ests o estn leyendo, este libro sea una herra-
mienta ms del morral que nos llevamos para seguir luchando abajo.
Veredas Autnomas
Sin - COMUNARR
COLEPI
Nodo Soldale
La Comunitaria