sbado 27 de junio del 2015 el comercio .A27

Opinin

cities o su variante, las free cities. Son territorios pe-queos que han estableci-do su propio estatuto legal, independiente del de un Estado o pas convencional. La idea es que un territorio pequeo requiere de un gobierno pequeo y asegura un mayor nivel de libertad al que los individuos se afilian voluntariamente en lo que sera casi un contrato. En ocasiones estas organizaciones son funda-das desde un origen como tales. En otras, como ha ocurrido con varios municipios de California, estos se transforman en ciudades indepen-dientes de manera posterior. Un ca-so notable ha sido el de Hong Kong. Hay experiencias similares en Chi-na y son parte de la explicacin de su crecimiento econmico espec-tacular.

Y este fenmeno no es tan lejano. Honduras aprob, mediante una reforma cons-titucional, un sistema de charter cities (bajo el nom-bre de Zona de Empleo y De-sarrollo Econmico ZE-

DE) en el que las empresas puedan desarrollar ciudades con su propio sistema poltico, judicial, econ-mico y administrativo. Su lgica se orienta al libre mercado, buscando atraer inver-sin y generar empleo en zonas poco pobla-das. Adems un mu-nicipio puede con-vertirse en una

El Comercio abre sus pginas al intercambio de ideas y reflexiones. En este marco plural, el Diario no necesariamente coincide con las opiniones de los articulistas que las firman, aunque siempre las respeta.

Liberlandciudades modelo

- alfredO bullard -Abogado

mirada de fondo

V t Jedlika es un ciuda-dano checo que ha apa-recido tmidamente en las noticias en los lti-mos meses. Bien podra pasar a la historia o al olvido. Es el fundador de Liberland.

Liberland es un micropas (de so-lo 7 kilmetros cuadrados) situado en un territorio en la frontera entre Croacia y Serbia no reclamado por ninguno de los dos pases. Fue pro-clamado por el propio Jedlika co-mo un nuevo pas el 13 de abril del 2015.

En los hechos, Liberland an no existe. Es un territorio deshabitado y no est claro si tendr reconoci-miento internacional. Uno se hace liberlandiano llenando una aplica-cin y afilindose a sus principios (si quiere aplicar, puede entrar a la siguiente pgina: https://liberland.org/en/main/). Eso s, no se acep-tan ni comunistas, ni nazis ni otros. Hay ms de 300.000 aplicaciones para ser ciudadanos. Si todos se mu-daran a Liberland, no est claro si entraran en su territorio.

El gobierno sera mnimo (ten-dra entre 10 y 20 miembros elegi-dos por votacin electrnica). No habra restricciones migratorias ni aduanas. Fomentara la competen-cia libre de monedas (no habra un Banco Central ni nada parecido). Su lema es: Vivir y dejar vivir. Es un pas sin regulaciones ineficientes ni impuestos, en el que el gobierno est prohibido, por la Constitu-cin, de endeudarse.

A pesar de que sue-ne curioso, Liberland no es el primer caso de microestado autoproclama-do libre. Exis-ten diversas experiencias de las llama-das charter

ZEDE mediante un referndum en el que vote la poblacin.

En realidad, las free cities, char-ter cities, ciudades modelo, ZEDE, o como se les quiera llamar, parten de un principio que funciona en los mercados y que no tendra por qu no funcionar con las organizaciones polticas: la competencia. Estas or-ganizaciones pueden competir por atraer ciudadanos y empresas.

Adems, como en los mercados, crean diversidad. Usted

puede elegir entre distintos telfo-nos celulares, con ms o menos

tecnologa y adita-mentos, a una varie-

dad de precios. Una diversidad de ciudades como las descritas pueden ofrecer marcos legales y organiza-ciones polticas diferentes. Usted podr escoger vivir en una ciudad ambientalmente amigable o indus-trializada, sin impuestos pero con menores servicios o con impuestos altos y muchos servicios pblicos. Puede decidir, si consigue con quien juntarse, vivir en un estado comu-nista. O puede escoger el ms liberal de los mundos. Ser la calidad de vi-da y sus propias preferencias las que decidirn. Ya no ser tan importan-te votar con votos, sino con sus pies. As como puede cambiar de marca

de reloj, si donde vive no le gusta, siempre podr mudarse a

un lugar distinto.

opcionesLas ciudades modelo compiten

para atraer a ciudadanos y empresas con su propio sistema poltico, judicial,

econmico y administrativo.

ilustracin: vctor aguilar

Director General: FRANCISCO MIR QUESADA C.

Director Periodstico: FERNANDO BERCKEMEYER OLAECHEA

Directores fundadores: Manuel Amuntegui [1839-1875] y Alejandro Villota [1839-1861] Directores: Luis Carranza [1875-1898] -Jos Antonio Mir Quesada [1875-1905]

-Antonio Mir Quesada de la Guerra [1905-1935] -Aurelio Mir Quesada de la Guerra [1935-1950] -Luis Mir Quesada de la Guerra [1935-1974] -scar Mir Quesada de la Guerra [1980-1981]

-Aurelio Mir Quesada Sosa [1980-1998] -Alejandro Mir Quesada Garland [1980-2011] -Alejandro Mir Quesada Cisneros [1999-2008] -Francisco Mir Quesada Rada [2008-2013]

-Fritz Du Bois Freund [2013-2014]

habla culta

Corretear. Este obvio derivado frecuentativo de correr significa en la lengua general andar de lugar en lugar, correr en varias direcciones por juego o diversin. Pero en el Per y otros pases americanos corretear es tambin equivalente de perseguir, acosar; su postverbal es correteo. Vase este ejemplo de Jaime Bayly, antao impublicable: Treinta y cinco aos sacndome la entreputa [sic] en La Prensa, firme en mi trinchera, correteando comunistas (Los ltimos das de La Prensa, Barcelona 1996, p. 161).

- martha hildebrandt -