Post on 23-Jun-2015
CENTRO DE INVESTIGACION Y ESTUDIOS AVANZADOS DE VERACRUZ MAESTRIA EN EDUCACIÓN MATERIA: EVALUACION INSTITUCIONAL
TAREA: REPORTE DE LECTURA: LA EVALUACIÓN DE PROGRAMAS EDUCATIVOS CONCEPTOS BÁSICOS,
PLANEAMIENTOS GENERALES Y PROBLEMÁTICAS, DE RAMÓN PÉREZ JUSTE, REVISTA DE INVESTIGACIÓN EDUCATIVA, 2000,
VOL |8, N. 2 PAGS. 261-287.: CATEDRÁTICO: DR. JUAN MANUEL CARRION DELGADO ALUMNO: RAÚL HERNÁNDEZ VIVEROS XALAPA, VER. 2 DE JUNIO DE 2012
Se trata de reflexiones sobre la evaluación educativa y de sus programas. Desde las
perspectivas de mejoramiento de la interacción de académicos frente al trabajo de
investigación cualitativa. Por lo cual destacan: programa, evaluación de programas, y sobre
el examen de programas educativos. Se advierten temas críticos como la labor de
especialistas, la factibilidad de la evaluación, aspectos éticos y la comparabilidad de los
resultados.
Al mismo tiempo, existe el planteamiento de que el educador como un artista se
involucre con principios, enunciados y propuestas pedagógicas, aparte del talento y la
inspiración. Con estos saberes pueden ubicarse las regularidades, la dispersión, tendencias,
secuencias y ciclos; en forma similar a la aplicación de la creación artística, en la cual
siempre destaca la impronta de cada persona.
Dentro del método hipotético-deductivo-experimental la educación representa el
objeto de un conocimiento propio de las ciencias humanas o sociales, y parte de un saber
tecnológico, en búsqueda de una educación de calidad. Destaca el principio de
complementariedad metodológica porque vincula los métodos cualitativos y cuantitativos.
La cultura evaluativa permite el mejoramiento de los planes, proyectos, procesos y
resultados, con la misión de lograr la calidad de la educación y la creación de teoría.
La investigación evaluativa es una actividad fundamentalmente externa, pero que
requiere del rigor crítico exterior. Hay que apoyar el reconocimiento hacia la educación
permanente. Existe la preocupación por alcanzar la calidad y los resultados en ámbitos
educativos. Por lo cual está la actuación planificada organizada y sistemática de un plan de
acción que impacta en el programa, evaluación y evaluación de programas.
Donde un plan sistemático y sistémico, funciona en las metas educativas. Los
procesos toman en consideración la armonía y la coherencia. Por lo tanto, un programa
contiene metas y objetivos, debe estar especificado y detallado sin limitaciones para su
evaluabilidad. Además incorpora medios y recursos, suficientes, adecuados y eficaces, con
un sistema de apreciación de metas y objetivos.
A partir de criterios y diferencias se integran los procesos que permiten la toma de
decisiones. Los componentes de la evaluación son los contenidos a evaluar, la información
a recoger, la valoración de la misma y la finalidad de llevar a decisiones de mejoramiento.
Los criterios para valorar la información corresponden a exactitud, claridad, precisión,
profundidad y variedad. Las referencias fundamentales: normativa criterial y personalizada
o idiosincrásica. La evaluación de programas es un proceso sistemático que obtiene
información valiosa, válida, fiable, rigurosa, orientada a valorar los logros de un programa.
El grado de eficacia contempla la finalidad de la sintonía en los actos educativos, donde la
información es rigurosa, valiosa y útil en la toma de decisiones. La valoración debe ser
coherente para definir con claridad el contexto.
Por otra parte, se toma en consideración el tamaño o amplitud y la complejidad del
programa. La responsabilidad del evaluador. Las unidades de análisis, la relación entre el
programa y su evaluación, y los datos de la información. En el programa se consideran los
objetivos y metas, el proceso de implantación y desarrollo, la realidad como una nueva
aplicación, o la realidad dinámica que ofrece consecuencias sobre los contenidos
educativos. Los componentes de la evaluación del programa: funciones condicionantes,
calidad técnica, diseño de la evaluación. Métodos a utilizar, información a recoger,
momentos de recolección de datos, técnicas o instrumentos, sistema de registros, análisis,
criterios para valorar. Se elabora un formato del informe para su difusión o debate.
La evaluación representa aportaciones y optimización del programa que tiene como
finalidad la calidad, viabilidad y condiciones optimas. La función corresponde a la
anticipación de las decisiones que promuevan las potencialidades. La metodología analiza
el contenido de los momentos, estudios prospectivos y técnica Delphi*. Hay que recurrir al
juicio de expertos multidisciplinarios, y a los registros de pruebas de evaluación, con la
finalidad de recoger información.
Los criterios: calidad, pertinencia, realismo y adecuación se integran a la suficiencia
de apoyos en el logro de objetivos, principalmente en la formación, implicación y
compromiso. Destaca la factibilidad sobre planteamientos de evaluación, que se concreta
en procedimientos prácticos, viabilidad política y coste-efectividad. De esta manera se
permite desembocar en una cultura auto evaluativa y participativa. e acuerdo con
planteamientos éticos, se pueden emitir, con la participación en la toma de decisiones, y los
juicios valorativos. Acompañados por la honradez o probidad para sustentar que la * Su objetivo es la consecución de un consenso basado en la discusión entre expertos. Es un proceso repetitivo. Su funcionamiento se basa en la elaboración de un cuestionario que ha de ser contestado por los expertos. Una vez recibida la información, se vuelve a realizar otro cuestionario basado en el anterior para ser contestado de nuevo. Finalmente el responsable del estudio elaborará sus conclusiones a partir de la exploración estadística de los datos obtenidos. Es una forma de análisis lógico que conduce a conclusiones sobre el futuro de atributos tecnológicos
evaluación tuvo sustento y fundamento legal y ético. Aunque se llega al problema de la
comparabilidad de los resultados que es la manifestación de una visión globalizada con
que se pretende enfrentar las exigencias sobre los planes de estudio a nivel internacional en
centros de estudios superiores.
En este aspecto se pretende un diseño curricular base que compagine los datos de
resultados de diferentes instituciones educativas. Sin embargo, existen dificultades sobre la
homologación de títulos universitarios, principalmente en las naciones europeas. Aunque se
trata del mejoramiento basado en la superación, avance, y progreso, y ya no se trata del
campo de la competitividad. Pero se requiere del esfuerzo y respaldo decisivo por parte de
las administraciones públicas y dependencias a nivel federal y estatal, con la normativa de
las exigencias de calidad por parte de instituciones mundiales.
Conclusiónes: Por supuesto que parecieran buenas intenciones desde los organismos
internacionales que manejan las medidas adecuadas para el impulso de estos criterios de
calidad, pero la falta de recursos económicos y los recortes presupuestales han impedido
obtener una educación de calidad. A veces los objetivos y metas no se alcanzan por la falta
o cancelación de recursos, y entonces las actividades de evaluación se transforman en
ejercicios simulados.
Frente al alto crecimiento de la población y la crisis de la globalización, el rezago
educativo se acompaña con el desempleo, y con el impacto de la macroeconomía que
ofrece nada más salarios mínimos que no requieren de estudios de nivel superior. Junto a la
visión catastrofista está el espacio de los millones de jóvenes ni-nis que ni estudian ni
trabajan, que se suma a otros millones de adolescentes integrados al mercado informal y al
servicio del crimen organizado. Por lo tanto resulta bastante valioso el estudio de la
evaluación de programas educativos, y se pueda intentar plantear el rescate del bienestar
de la educación en México, a través del reconocimiento en el diagnóstico de los puntos
débiles y en las medidas para la toma de decisiones sobre la educación como una actividad
humana.