Post on 20-Mar-2016
description
SISTEMATIZACIÓN DE EXPERIENCIA DE DIAGNÓSTICO
CULTURAL EN LOS RESGUARDOS DE JAIKERAZABI, CIACORO,
IBUDO Y LA COMUNIDAD DE COQUERAS DE LOS MUNICIPIOS DE
MUTATÁ Y APARTADÓ EN LA REGIÓN DEL URABÁ ANTIOQUEÑO.
“Niño indio si estás cansado, tú te acuestas sobre la tierra
Y lo mismo si estas alegre, hijo mío juega con ella…”Gabriela Mistral
CONVENIO DEPARTAMENTO PARA LA PROSPERIDAD SOCIAL -DPS Y
SECRETARIADO DE PASTORAL SOCIAL - SEPAS
2013
INDICE
1. Presentación 2. Aspectos generales
2.1 Marco institucional
2.2 Proyecto fortalecimiento cultural indígena con enfoque psicosocial
2.3 Los protagonistas de la experiencia. 2.3.1 Los protagonistas de la experiencia 2.3.2 Contexto de la experiencia 2.3.3 Caracterización de actores del proyecto
2.4 Proyecto de sistematización 3. Proceso de adecuación de la estrategia
3.1 Estrategia y componentes 3.2 Ajustes a la propuesta inicial 3.3 Hallazgos o resultados
4. Desarrollo de la experiencia (Etapa inicial, Proceso de la
experiencia) 4.1 Marco Legal 4.2 Comunidad de Ciacoro, pueblo Embera Chamí, Senú y Katio 4.3 Comunidad indígena Coquera 4.4 Comunidad Jaikerazabi 4.5 Comunidad Ibudo, Las Palmas 4.6 Etapa actual
5. Lecciones aprendidas y recomendaciones
1. PRESENTACION
La realización de un proyecto requiere ubicar un punto de partida o línea
de base, de modo que una vez realizada la intervención, puedan
identificarse los indicadores que permiten ver los resultados obtenidos
en el escenario elegido para el proyecto.
Este ejercicio responde a la necesidad planteada anteriormente de fijar
consensos sobre los puntos de partida para el desarrollo de la
propuesta, fortalecimiento indígena convenio DPS- SEPAS 2013, desde
una perspectiva cultural, partiendo de la sistematización de la
experiencia de la construcción de un ejercicio de diagnóstico cultural con
el pueblo indígena de Jaiquerazabi, comunidad Embera Katio del
municipio de Mutatá; comunidad de Coqueras, Emberas Katio;
resguardo Ciacoro, comunidad Chamí, Senú y Katío, así como el
resguardo Ibudó playas, comunidad Emberas Katio del municipio de
Apartadó.
El diagnóstico tuvo como propósito fundamental, obtener una
caracterización de las dinámicas de las comunidades, en cuanto a los
aspectos psicosociales, culturales, económicos, organizativos y
participativos, entre otros, mediante la aplicación de la metodología
Investigación Acción Participante (IAP), que incluyó los siguientes
instrumentos: cartografía social, red de relaciones y línea de tiempo,
método etnográfico y revisión documental de censos para la
caracterización. Lo que permitió establecer un punto de partida para
orientar el accionar de cada una de las líneas del proyecto a partir de las
necesidades, potencialidades y prospectivas de las comunidades.
Igualmente, en este documento se intenta visibilizar algunas
problemáticas que están vinculadas con el fenómeno del desplazamiento
en las comunidades y que generan una fractura de las relaciones
comunitarias y el tejido social.
La metodología utilizada está planteada desde un enfoque participativo;
mapas sociales, línea de tiempo, diálogos participantes y revisión
documental que nos permitió abrir un espacio de discusión importante
con los actores de la comunidad en el territorio. Los ejes de análisis
abordados posibilitaron hacer una lectura de las dimensiones
mencionadas anteriormente en las cuales están insertas las personas y
la comunidad sobre las cuales tejen su cotidianidad.
Los instrumentos utilizados para la recolección de la información se
plantearon en relación a los objetivos y los enfoques de la metodología y
a través de la cartografía social se posibilitó comprender la relación de
las personas con el territorio, entendiendo éste más allá de la estructura
geográfica y física. De la misma manera, aportó elementos que dan
cuenta de la percepción que tiene la comunidad de su espacio físico y
relacional. La línea de tiempo profundizó en el análisis de la construcción
histórica de las relaciones familiares y de cómo éstas fueron afectadas
por el fenómeno del desplazamiento y el conflicto armado, así como
también, la proyección a futuro para el restablecimiento de las
condiciones iniciales en la vida comunitaria indígena Embera, Katío,
Chamí y Senú. El método etnográfico o investigativo de observación y
descripción incluyó entrevistas directas, observación participante y
directa en las visitas a la comunidad, como también permitió conocer los
elementos culturales relacionados con el espacio y su gobernabilidad, su
cohesión comunitaria y familiar entre otros. Las visitas a las
comunidades posibilitaron, además, un acercamiento inicial con el
territorio, sus líderes y algunos elementos de contexto relevantes a
tener en cuenta en el momento de estructurar la propuesta de
acompañamiento.
El número de comunidades y familias a acompañar durante el proceso
se ha definido de acuerdo a las comunidades atendidas; proyectos
liderados por el DPS en los municipios de Apartadó y Mutatá con
comunidades indígenas.
En suma, a partir de este ejercicio de documentación de experiencia
diagnostica se establecerá un punto de partida que define el plan de
formación y que fundamenta las acciones de intervención a seguir en
cada una de las comunidades desde el proyecto de fortalecimiento
cultural indígena. Y permite que la institucionalidad de los municipios de
Mutatá y Apartadó que atienden a la población indígena conozca el
estado actual de las comunidades.
2. ASPECTOS GENERALES
2.1 MARCO INSTITUCIONAL
El Departamento para la Prosperidad Social –DPS- hace parte de la
estrategia integral del Gobierno Nacional, que se desarrolla a través de
diversas entidades y programas, para atender a la población más pobre
y vulnerable del país, por su situación de desplazamiento, violencia,
pobreza y presencia de cultivos ilícitos, en el marco del plan nacional de
desarrollo 2010-2014: prosperidad para todos.
Dentro de la estructura del Departamento para la Prosperidad Social -
DPS-, se encuentra la dirección de programas especiales, la cual tiene
entre sus funciones la de aunar esfuerzos a la formulación de políticas,
planes, estrategias y proyectos en la sostenibilidad y puesta en
funcionamiento de los pueblos indígenas, que permita principalmente el
acceso a los servicios sociales del estado y la consolidación territorial.
Es así como en estos pueblos coexisten y se complementan las
tradiciones culturales de los pueblos indígenas y la oferta de servicios
sociales “occidentales”. En la actualidad se adelantan dos intervenciones
a pueblos indígenas Jaikerazabi con la comunidad Embera – Eyabida en
el municipio de Mutatá, y Ciacoro con la comunidad Embera – Chami,
Katio y Senú, en el municipio de Apartadó.
Si bien estos pueblos tienen como referencia la intervención en la Sierra
Nevada, en este caso el fortalecimiento al retorno, reubicación y
estabilización de las familias indígenas es el objetivo, haciendo énfasis
en temas como: generación de ingresos, acceso a los servicios sociales
y el mejoramiento de sus viviendas. El trabajo está encaminado al
restablecimiento de las condiciones de seguridad y de los derechos
constitucionales de las comunidades intervenidas, como son el respeto
por los derechos humanos, salud, educación y reconstrucción del tejido
social y familiar.
Gracias a los resultados positivos obtenidos en la experiencia
anteriormente mencionada, el DPS, considera pertinente ampliar este
modelo de intervención como parte de su oferta institucional,
proponiendo un programa dentro de un enfoque de atención integral
que se coordina al interior de la entidad, con las áreas que cuentan con
la experiencia en las intervenciones específicas, con el propósito de
atender los mandatos que establece la Constitución Política de Colombia
en los artículos 1, 2, 7, 86, 176, 239 y 330 entre otros, que indican que
el Estado reconoce y protege la diversidad étnica y cultural de la Nación Colombiana. Es así como en el principio de “diversidad étnica y cultural”,
quedó establecido el estatus especial para las comunidades indígenas, el
cual se manifiesta en el ejercicio de los derechos dentro de su área
territorial en coincidencia con sus propios valores culturales (Art 246),
de la autogestión mediante poderes propios dentro de sus usos y
costumbres (Art. 330) y el ejercicio de la propiedad sobre resguardos y
territorios.
El Plan Nacional de Desarrollo 2010 - 2014 - Prosperidad para Todos,
dentro de los objetivos de inclusión social tiene la necesidad de
adelantar políticas y programas diferenciales, teniendo en cuenta que
estas poblaciones sufren particularmente de importantes condiciones de
vulnerabilidad. En el capítulo IV Igualdad de oportunidades para la
prosperidad social, sección ( C ) Políticas diferenciadas para la inclusión
social, punto 1 Grupos Étnicos, que tiene como objetivo incorporar como
lineamiento estratégico el enfoque diferencial en las acciones de la
política pública, orientadas a generar las condiciones para la igualdad de
oportunidades y el desarrollo social integral, considerando las
diferencias poblacionales, regionales y características específicas de la
población de los diferentes grupos étnicos, de tal manera que se
garantice su pervivencia como culturas y la atención oportuna, eficiente
y pertinente.
Es importante mencionar que el Auto 004 del 26 de enero de 2009, de
la Sala Segunda de Revisión de la Corte Constitucional, ha generado un
nuevo escenario en el que se reconoce que los indígenas se encuentran
en peligro de ser exterminados cultural y físicamente por el conflicto
armado, y han sido víctimas de graves violaciones de sus derechos
fundamentales, individuales y colectivos.
Una de las actividades de esta propuesta es el fortalecimiento a las
organizaciones indígenas entendido como una actividad transversal y
prioritaria en la ejecución de este programa. Entre las principales
dificultades que existen para la superación de las condiciones de
vulnerabilidad de las poblaciones indígenas, la constituyen la integración
de la visión occidental con las tradiciones culturales de los pueblos
indígenas. A través del programa se fortalecen las organizaciones
indígenas y se acrecienta la presencia del Estado. La mejor forma de
garantizar que las intervenciones del Estado respeten y se articulen con
las tradiciones culturales de los pueblos indígenas; es que sean las
mismas poblaciones, a través de organizaciones propias, quienes sean
los ejecutores de estas intervenciones.
Finalmente, el objetivo de esta actividad es lograr que las
organizaciones indígenas identifiquen sus necesidades y dificultades y
que a futuro sean las gestoras de su propio desarrollo, en este sentido
se busca la capacitación en temas relacionados con la sostenibilidad de
las intervenciones y fortalecimiento a liderazgos colectivos e individuales
que faciliten la interlocución directa con las diferentes autoridades
locales y nacionales.
El secretariado de pastoral social – SEPAS- en la línea de promoción
social busca promover acciones para el desarrollo social de las
comunidades campesinas, afrocolombianas e indígenas; desde el
fortalecimiento de la organización comunitaria, de la misma manera
línea de fortalecimiento cultural genera procesos que acompañan
acciones para el fortalecimiento de la identidad étnico cultural y la
defensa del territorio de los pueblos indígenas y afrocolombianos en
reconocimiento a su dignidad para la gestión , la participación y la
inclusión social. Iluminados por la Palabra de Dios, el magisterio y la
Doctrina Social de la Iglesia enmarcado en la teología de la liberación
(Concilio Vaticano ll y la conferencia de Medellín, realizada en 1968) que
nos da una nueva interpretación de la fe cristiana por el sufrimiento, la
lucha y la esperanza de los pobres.
2.2 PROYECTO FORTALECIMIENTO CULTURAL INDÍGENA CON
ENFOQUE PSICOSOCIAL
La propuesta de fortalecimiento cultural indígena, implementa una
estrategia que reconstruya el tejido social, a través del enfoque
psicosocial en las comunidades víctimas del desplazamiento forzado en
el municipio de Apartadó, en las comunidades de Playas, Palmas y
Coqueras, además del pueblo indígena de Jaikerazabi, en el municipio
de Mutatá.
Este proyecto permite la reflexión permanente sobre el papel que
cumple la cultura en la reconstrucción del tejido social, que según la
UNESCO se considera “como un conjunto de rasgos definitivos que
caracterizan una sociedad o un grupo social, ella engloba además las
artes, las letras y los modos de vida, los derechos fundamentales del ser
humano, los sistemas de valores y las tradiciones y creencias”. Puesto
todo ello como insumo principal para la construcción de escenarios de
convivencia comunitaria y resolución de crisis y conflictos en las
comunidades indígenas que permite la reconstrucción de identidad que
da al sujeto sentido de pertenencia con el territorio, desde donde cada
uno se relaciona con el mundo.
A partir del análisis de realidad cultural en las comunidades y el
establecimiento de la caracterización de las manifestaciones culturales y
el patrimonio tangible e intangible, se proyectará una estrategia de
fortalecimiento cultural apropiada por las comunidades participantes,
que parte de la reflexión y pasa a la acción para llegar nuevamente a la
reflexión, desde donde la cultura se constituye en un aprendizaje
permanente que se nutre y es vital.
El enfoque de intervención psicosocial de la Pastoral Social permiten la
construcción de procesos focalizados en los individuos, lo colectivo y lo
comunitario propendiendo por adelantar acciones tendientes a integrar
lo emocional y lo relacional con una comprensión desde el contexto. La
perspectiva psicosocial permite comprender, así, la particularidad de la
población víctima, re-conocer sus múltiples contextos sociales,
culturales y políticos como ámbitos en los que se construye y
reconstruye la identidad, el mundo emocional y relacional, los cuales
son constituyentes de la realidad que se vive. Todo esto para las
comunidades indígenas adquiere sentido en las prácticas y rituales
culturales y en la comprensión de los hechos desde su cosmovisión.
En este marco, consideramos que el acompañamiento psicosocial tiene
como objetivo construir un proceso reflexivo entre la población indígena,
su red social e institucionalidad que los rodea, que contribuya a la
superación de los efectos sociales y emocionales de la violencia y del
desplazamiento a través de la re-significación de la identidad y del
reconocimiento de recursos personales y sociales, como sujetos de
derechos y sujetos culturales.
2.3 PROTAGONISTAS DE LA EXPERIENCIA
2.3.1 LOS PROTAGONISTAS DE LA EXPERIENCIA:
Esta experiencia de diagnóstico cultural se desarrolla respetando la
cosmovisión de los pueblos indígenas que participan del proyecto de
fortalecimiento cultural en los resguardos de Ibudó, comunidad Embera
Katío; resguardo Ciacoro, comunidad Embera Chamí, Embera Katío y
Senús y comunidad indígena Coqueras, Embera Katíos del municipio de
Apartadó. Además, se suma el pueblo indígena de Jaiquerazabi,
comunidad Embera Katío del municipio de Mutatá.
El 89 %, de un total de 40 actividades realizadas, se ejecutaron en los
resguardos y algunas de estas acciones fueron adelantadas por el
SEPAS, previas a la firma del convenio para el fortalecimiento cultural
indígena con enfoque psicosocial.
PUEBLO EMBERA KATÍO
Nombre alterno: catio, katio, embena, eyabida
Este pueblo indígena se localiza en los departamentos de Córdoba sobre
los ríos Sinú, Esmeralda y Rioverde; en el noroccidente de Antioquia,
donde se concentra el mayor número de su población; en el Choco,
sobre la carretera Quibdó - Medellín; también se encuentran en los
departamentos de Caldas y Putumayo. Parte de su territorio ancestral
coincide con el Parque Nacional Natural del Paramillo, en los límites de
los departamentos de Córdoba y Antioquia. Su población es de 32.899
personas y su lengua nativa pertenece a la familia lingüística Chocó
Los Embera - Katío se asientan en caseríos y sus características
culturales son similares a las encontradas para los Embera. En general
los Embera se consideran como hombres de río (Embera Dobida) y
como hombres de montaña (Embera Eyábida), a estos últimos
pertenecen los Embera - Katio, los Chami y los indígenas Embera del
Alto Andagueda. El río, a lo largo del cual construyen sus tambos, es
además parte importante de su cosmovisión.
El eje de la organización social es la familia nuclear, siendo el padre
quien ejerce la autoridad central en los aspectos domésticos y
familiares. El parentesco es bilateral, es decir, por la línea materna y
paterna. La comunidad está dividida en grupos locales de parientes y
vecinos, habitantes de viviendas cercanas, quienes participan de
actividades sociales comunes como migas (trabajos colectivos) y fiestas.
El sistema de trabajo puede ser individual para el cultivo en sus parcelas
o comunitario.
Al igual que en el pueblo Embera, el Jaibaná desarrolla una labor de
gran importancia en la organización social. Su conocimiento de los “jai”
o esencia de los seres y las cosas, le permite tener un reconocimiento
que se extiende ampliamente en la región. A diferencia de otros grupos
no se nace siendo Jaibaná. Para ejercer sus funciones se requiere de un
proceso de aprendizaje en el que otro Jaibaná enseña los cantos, la
construcción de los bastones y las formas de comunicación con los
espíritus.
Su organización política se basa en los cabildos mayores y menores,
agremiados en la Organización Indígena de Antioquia (OIA).
Su economía está sustentada en el cultivo del maíz, seguido por el
plátano. Del maíz extraen la harina que llaman “Monía”. También se
destacan por ser buenos cazadores, labor desarrollada por los hombres,
mientras las mujeres se dedican al cuidado del hogar, la pesca, la
huerta casera y cría de especies menores. Los perros son empleados en
la cacería.
Fuente: Arango y Sánchez. Los Pueblos Indígenas de Colombia, en el
umbral del nuevo milenio.
PUEBLO EMBERA CHAMÍ
La mayor parte de su población, habita en el alto río San Juan, en los
municipios de Pueblo Rico y Mistrató, ubicados en el departamento de
Risaralda. El segundo núcleo de población Chamí se encuentra en los
ríos Garrapatas y Sanquinini, municipio de Dovío y Bolívar,
departamento del Valle del Cauca y en el resguardo de Cristianía,
municipios de Jardín y Andes en el departamento de Antioquia. También
se encuentran asentamientos Chamí en los departamentos de Quindío,
Caldas, el Valle del Cauca y en el Caquetá. Pertenecen a la familia
lingüística Chocó y su población se estima en 5.511 habitantes.
Los Chamí comparten la historia prehispánica y colonial de los Embera,
caracterizada por su continua resistencia a las incursiones
conquistadoras hasta el siglo XVII, cuando la mayoría de los pueblos
huyeron hacia las selvas. En el proceso de asentamiento en su actual
territorio, han estado en permanente contacto con poblaciones mestizas
y afrocolombianas con las que comparten su área de ocupación, así
como con otros actores de la sociedad mayoritaria que han configurado
la dinámica social y económica de sus asentamientos.
Durante las últimas décadas han enfrentado el problema de la reducción
considerable de sus territorios debido a la expansión de la frontera
agrícola así como el deterioro de sus suelos; estos fenómenos han
propiciado transformaciones en su patrón de residencia y explotación del
medio ambiente.
Este grupo se destaca por la dispersión de sus asentamientos ubicados
sobre las cuencas de los ríos, en donde han desarrollado por cientos de
años una cultura adaptada a los ecosistemas de selva húmeda tropical.
Habitan en tambos rectangulares construidos en guadua, separados
entre sí y ocupados por varias generaciones de una familia extensa.
Actualmente los planes de vivienda impulsados por las entidades
gubernamentales y religiosas, han propiciado la nucleación de sus
asentamientos. Hoy en día son comunes las veredas conformadas por
varias viviendas, una casa comunal (donde está el cepo) y una escuela.
La parentela, base de la organización social, está integrada por el padre,
la madre, los hijos de la pareja y sus respectivas familias. La autoridad
la ejerce el jefe de familia, generalmente una persona mayor. Su
organización política recae en el cabildo, figura que a pesar de ser
esencial para las relaciones externas de la comunidad, no ha desplazado
el poder de las autoridades tradicionales para establecer formas de
control social. Al igual que para los demás grupos Embera, el Jaibaná,
hombre o mujer, tiene una función de gran importancia en el manejo de
la vida mágico-religiosa del grupo.
El sistema de producción se basa en la agricultura de selva tropical, en
parcelas donde cultivan café, cacao, chontaduro, maíz, frijol y caña de
azúcar, entre otros productos. Además, practican la caza, la pesca, la
recolección y en menor medida, la extracción de madera y oro.
Fuente: Arango y Sánchez. Los Pueblos Indígenas de Colombia, en el
umbral del nuevo milenio.
PUEBLO INDIGENA SENÚ
Escritura alterna: Zenú
El pueblo se localiza en los resguardos de San Andrés de Sotavento,
Departamento de Córdoba y en El Volao, en el Urabá Antioqueño. Hay
numerosos asentamientos, parcialidades y propietarios individuales en
Córdoba, Sucre, Antioquia y Choco. La mayor parte de la población
habita en el resguardo de San Andrés de Sotavento. En el municipio de
Tolú Viejo, departamento de Sucre, en el Alto San Jorge, departamento
de Córdoba existen comunidades que están en proceso de
reconstrucción, las cuales si bien no mantienen continuidad territorial,
se encuentran unificadas en el Cabildo Mayor del Resguardo de San
Andrés de Sotavento. La población estimada alcanza las 34.566
personas y no conservan su lengua aborigen.
El caribe colombiano fue sitio de paso obligado para los pobladores de
América del Sur y durante el periodo colonial, para los múltiples grupos
étnicos que convivieron en la provincia de Cartagena. Antes de la
conquista, la sociedad Senú estaba organizada en 103 cacicazgos
distribuidos en el territorio en tres provincias: Fincenú, Pacenú,
Zenufana, entre las que se mantenía un constante intercambio
económico. El sector de los Finzenú, ubicado sobre el rio Sinú, estaba
dedicado al tejido y la cestería; los Pancenú, localizados sobre el rio San
Jorge, producía los alimentos, y los Zenfana, ubicados entre los ríos
Cauca y Nechi, trabajaron la orfebrería. Las provincias estaban a cargo
de un cacique, hombre o mujer, quien ejercía un control sobre todos los
aspectos de la sociedad.
La cultura Senú se destacaba por su excelente manejo de la ingeniería
hidráulica, como lo evidencia la construcción de un sistema eficiente de
canales que por casi dos mil años, llego a cubrir 600.000 hectáreas. Su
extensa red de canales artificiales entre los ríos San Jorge, Sinú, Cauca
y Magdalena, permitieron controlar el régimen de inundaciones entre los
ríos, conduciendo el excedente de sus aguas a sus salidas naturales,
aprovechando el sedimento y tejiendo una gran red de comunicaciones
fluviales. De acuerdo a los cronistas, la unidad política de la sociedad
Senú se había perdido en el siglo XVIII surgiendo las ciudades que hoy
se extienden en la región. A partir del siglo XIX la dinámica económica y
social de la zona se caracterizó por la llegada de las misiones, el
surgimiento de grandes haciendas ganaderas y sucesivas explotaciones
de recursos en el territorio indígena.
Dentro de las creencias actuales de los Senú, la devoción a los santos
ocupa un lugar preponderante. San Simón Blanco, San Simón de Ayuda
y San Simón de Juego, son objeto de grandes fiestas anuales en las que
los hombres se disfrazan de mujeres. Otros santos, los “santos de
piedra” permanecen en urnas de madera a las que se les hace ofrendas
permanentes.
Los asentamientos de los Senú poseen en su mayoría, una plaza central
alrededor de la cual se disponen las viviendas, semejantes al tipo
campesino de la región, construidas con caña y palma, rodeadas de un
patio. Estos caseríos se forman a partir de los lazos matrimoniales entre
dos o tres familias que comparten un territorio. En las casas vive
generalmente una pareja, las hijas solteras y los hijos varones con sus
respectivas familias.
La organización social Senú tiene un acento matrilineal, reflejado en la
predominancia del apellido materno, más la herencia se realiza de forma
bilateral. Tradicionalmente el matrimonio se hacía mediante el rapto de
la novia. En cuanto al compadrazgo, este juega un papel preponderante
dentro de las relaciones de la comunidad.
Hasta hace algunos años existía la figura del Capitán, a cargo de las tres
parcialidades en las que se dividía el resguardo, hoy en día se halla
organizado en cabildos locales. Se destacan las regiones de Sucre y
Córdoba donde las comunidades se encuentran organizadas alrededor
del Cabildo Mayor del Resguardo de San Andrés de Sotavento y en
cabildos menores, en el Alto de San Jorge. En cuanto a las necesidades
con mayor grado de organización, se caracterizan por estar vinculadas a
la Organización Indígena de Antioquia. Es de resaltar la lucha por la
tierra como una constante de sus demandas.
Los Senú se dedican la ganadería, agricultura y producción de
artesanías. En esta última actividad son famosos por la elaboración del
sombrero “vueltiao”, actividad de la cual derivan parte de su sustento,
especialmente las mujeres. Existe la división del trabajo por sexo y
edad, de acuerdo a la cual los niños son los encargados de conseguir el
agua para uso doméstico, mientras las mujeres dedican su labor a las
actividades del hogar, ayudan en los cultivos y trabajan la artesanía. Por
su parte, el hombre es el responsable de la agricultura, de construir las
viviendas y cuando posee poca tierra o carece de esta, también se
dedica a las artesanías. Otra forma de ingreso la derivan al emplearse
como jornaleros en las fincas terratenientes de la vasta región donde se
mueven. De los productos cultivables sobresalen el plátano, yuca, frijol,
ñame, cacao. También practican la cría de especies menores.
Fuente: Arango y Sánchez. Los Pueblos Indígenas de Colombia, en el
umbral del nuevo milenio.
2.3.2 CONTEXTO DONDE SE REALIZÓ LA EXPERIENCIA
En la actualidad el Municipio de Apartadó cuenta con 2 resguardos,
resguardo de Ibudo comunidad Embera katío, resguardo Ciacoro
comunidad Embera Chami, Embera Katio y Senú y comunidad indígena
Coqueras Embera Katio; y en el municipio de Mutatá está ubicado el
primer pueblo indígena para el departamento de Antioquia, Jaiquerazabi
comunidad Embera katio.
UBICACIÓN GEOGRÁFICA
Municipio de Mutatá: La población indígena de Mutatá se encuentra
ubicada en los resguardos indígenas de Jaikerazabi, Chontadural Cañero
y Coribi Bedadó, con una extensión territorial que sobrepasa las 42.000
hectáreas, integradas por 13 comunidades: Jaikerazabi, Bedó Encanto,
Sabaleta, Mutatácito, Primavera, Cañaduzales, Surrambay, Porroso,
Mongaratatadó, Mungudó, Chontadural Cañero, Chontaduralito y
Cacaos.
Los resguardos indígenas de Mutatá son territorios colectivos que se
encuentran ubicados al noroccidente del departamento de Antioquia
(Urabá antioqueño), la mayoría sobre la Serranía de Abibe que
comprende un sistema de colinas y montañas, con una gran riqueza en
recurso boscoso e hídrico y grandes valores ecológicos, ambientales,
económicos y culturales que se constituyen en un bastón para la
conservación de la biodiversidad tanto de Flora y Fauna, así como un
ecosistema estratégico para el municipio, la región, el departamento y el
país.
La mayoría de las comunidades indígenas que integran el resguardo
Jaikerazabi, las podemos encontrar a lo largo de la Serranía de Abibe en
la parte oriental del municipio, en una topografía pendiente, limitada al
este por la misma Serranía y al oeste por las planicies y potreros.
Municipio de Apartadó: Apartadó está localizado en la subregión del
Urabá en el departamento de Antioquia. Su cabecera municipal está a
336 kilómetros de Medellín y posee una extensión de 600 kilómetros
cuadrados.
El nombre Apartadó en dialecto indígena Embera traduce Río del Plátano.
En jurisdicción del corregimiento de San José de Apartadó, ubicado al
nor-oriente de la cabecera urbana del municipio de Apartadó se
encuentra el resguardo indígena de Ibudó las Playas.
El resguardo de Ciacoro se encuentra ubicado aproximadamente a 6
kilómetros de la cabecera municipal de Apartadó, en la vía que conduce
al municipio de Carepa, desviándose a 3 kilómetros de la carretera
principal.
La comunidad de La Coquera, perteneciente al Resguardo de Ciacoro,
se encuentra ubicada en el corregimiento de Churidó aproximadamente
a 8 kilómetros de la vía principal.
2.3.3 CARACTERIZACIÓN DE LOS ACTORES DEL PROYECTO:
La población indígena en el país según datos DANE del censo de 2005 es
de un total de 1.378.884 personas, el 33% de la población del país;
repartido de acuerdo con datos de la ONIC en 102 pueblos indígenas.
La caracterización demográfica de las diferentes comunidades
participantes del proyecto se hizo basada en 4 grupos de edades: de 0-4
años, 5-17, 18-59 y 60 en adelante.
Los participantes directos del proyecto son la población perteneciente a
la comunidad de Jaikerazabi en el municipio de Mutatá y las
comunidades de Ciacoro, Ibudo y La Coquera en el municipio de
Apartadó, con la siguiente distribución etaria:
Tabla 1: Distribución por sexo y grupos etarios
El comportamiento de los grupos etarios se evidencia en la siguiente
grafica de manera comparativa entre las comunidades intervenidas.
COMPARATIVO POBLACIONAL DE
COMUNIDADES 80
70
60
50
40
30 HOMBRES
20
10
MUJERES
0
0 - 4
5-17
18-5
9
6 0 y m a s C O Q U E R A 0 - 4 5 - 1 7 1 8 - 5 9 6 0 y m a s P A L M A S 0 - 4 5 - 1 7 1 8 - 5 9 6 0 y m a s L A S P L A Y A S 0 - 4 5 - 1 7 1 8 - 5 9 6 0 y m a s J A I K E R A Z A B I
Se observa en la gráfica comparativa que el mayor grupo poblacional
hace referencia a los adultos entre 18 y 59 años de edad con un
porcentaje del 42% de la población total, seguido por los niños y
jóvenes entre 5 y 17 años.
Del total de la población beneficiaria, 559 son hombres y 527 son
mujeres, representadas en la gráfica así: hombres 51% del total de la
población y mujeres 49% del total de la población
POBLACION A ATENDER
TOTAL H TOTAL M
49% 51%
De acuerdo a información suministrada por las alcaldías municipales, la
población infantil de las comunidades intervenidas tiene acceso al
sistema educativo. En el municipio de Apartadó se encuentran
matriculados en el sistema educativo, específicamente en el CER
Indigenista Bagara, 203 niños en edad escolar, la comunidad con mayor
población matriculada es el resguardo de Las Palmas con 100 niños en
el sistema educativo. Por su parte, la población en edad escolar
matriculada en la comunidad de Jaikerazabi del municipio de Mutatá son
46 niños en las secciones de preescolar y primaria.
En general, la mayoría de la población perteneciente a las comunidades
intervenidas se encuentra afiliada al régimen subsidiado con la IPS
Asociación Indígena del Cauca; a menos que no cumplan con los
requisitos legales para la afiliación como documentos de identidad entre
otros. En el municipio de Apartadó se encuentran 800 personas afiliadas
al régimen subsidiado de salud, pertenecientes a grupos indígenas.
2.4 PROYECTO DE SISTEMATIZACIÓN:
¿Cuáles son las transformaciones culturales de los pueblos indígenas de
los resguardos de Ibudo, comunidad Embera Katio, resguardo Ciacoro
comunidad Embera Chami, Embera Katio y Senú y comunidad indígena
Coqueras Embera Katio del municipio de Apartadó y el pueblo indígena,
Jaiquerazabi comunidad Embera Katio en el municipio de Mutatá, a
causa del conflicto armado y el desplazamiento forzado?
JUSTIFICACIÓN
La violencia sociopolítica y el conflicto armado interno en Colombia han
producido en las víctimas y en la sociedad en su conjunto, una serie de
daños producto de la pérdida de millares de seres humanos, pérdida de
los referentes organizativos de la sociedad (valores democráticos, ética
de la vida en común, solidaridad, bien común, etc.), secuelas sobre la
salud física y mental de las víctimas, sobre la economía, sobre las
instituciones y relaciones sociales, y sobre la cultura y sus diferentes
manifestaciones. Esto hace necesario que frente al desarrollo de un
nuevo proyecto con las comunidades indígenas, se genere un
diagnostico que consulte con las mismas el estado de las relaciones
sociales, la economía, la espiritualidad, la organización propia y las
manifestaciones culturales; que nos permita establecer un punto de
partida que direccione de manera efectiva el desarrollo del proyecto de
fortalecimiento cultural indígena.
HIPÓTESIS
Después del desplazamiento la lucha de las comunidades indígenas fue
por el restablecimiento del derecho a la tierra, desde su cosmovisión y
cosmogonía étnica y cultura, un territorio les permitiría la reconstrucción
del tejido social, y sus dinámicas sociales y comunitarias ancestrales,
establecidas antes del hecho victimizante. Desde esta misma
perspectiva se planteó la respuesta institucional y se centraron las
demandas de las organizaciones defensoras de derechos humanos, ello
como mecanismo que garantizará efectividad de derechos a la población
indígena víctima de desplazamiento.
OBJETIVO GENERAL
Determinar las afectaciones del sistema cultural indígena en los
resguardos de Ibudo, comunidad Embera Katio, resguardo Ciacoro
comunidad Embera Chami, Embera Katio y Senú y comunidad indígena
Coqueras Embera Katios del municipio de Apartadó y el pueblo indígena,
Jaiquerazabi comunidad Embera Katio en el municipio de Mutatá a causa
del desplazamiento forzado y el conflicto armado.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
Analizar la práctica de la medicina tradicional como dimensión
cultural de las comunidades indígenas focalizadas
Analizar la composición familiar y la organización social y de gobierno
propio de las comunidades indígenas en el contexto actual
Analizar las prácticas artísticas de las comunidades indígenas
Analizar la relación con el territorio
Analizar los procesos de relación intercultural entre las comunidades
indígenas y la comunidad campesina y urbana.
MARCO TEÓRICO
Enfoque sistémico: Un enfoque sistémico de lo que sea implica
considerar eso que sea como un conjunto de elementos en relación, y a
la vez en relación con un contexto. No es lo mismo que la teoría de
sistemas porque en este último marco es difícil escaparse de sistemas
discretos, cuya utilidad como modelo para estudios de lo cultural debe
relativizarse.
El enfoque sistémico de la comunicación y la cultura es un punto de
vista particular sobre las relaciones sociales y hu-manas al interior de
grupos y con sus entornos en general. Considera, uniendo los
postulados a priori incompatibles de Saussure y Shannon, que la
materia mis-ma de la comunicación es todo lo que une a los seres vivos
entre sí y con su entorno, y que esa materia es originariamente amorfa
y continua. Las relaciones, y más allá, el proceso mal llamado de
socialización ‑ pero correctamente considerado como extensible a la
duración de cada vida‑ van concretando más o menos unos límites, unas
normas, unos códigos. Éstos se construyen sobre aquella materia
esencial aportando relaciones de signifi-cación sobre el sentido vital que
viene dado de origen.
CRONOGRAMA DE ACTIVIDADES
ETAPA ACTIVIDAD S1 S2 S3 S4 S5 S6 S7 S8
Presentación del proceso de X X
sistematización
PLA
NIFIC
AC
IO
N Identificación de equipo X X
Definición de objetivos, general y X
específicos
Proceso de adecuación de la X
estrategia.
Definición de ejes temáticos de X
sistematización
Ajustes de la propuesta inicial X
Realización de cronograma X
Realización del presupuesto X
RE
CO
LE
CC
IO
N Y
OR
GA
NIZA
CIÓ
N
IN
FO
RM
AC
IO
N Procesos de etnografía comunitaria X X X X X X X X
Realización de mapas sociales X X X
DE
Realizaciones de líneas de tiempo X X X
Diálogos participantes X X X X
Realización del contexto X X
Revisión y organización de X X
documentos
AN
ALIS
IS
DE
LA
Revisión y organización de X
IN
FO
RM
AC
IO
N Información recolectada
Análisis de información recolectada X
Análisis de la información desde el X
objetivo del proyecto de
fortalecimiento indígena
Identificación de hallazgos, X
conclusiones, recomendaciones y
lecciones aprendidas
SO
CIA
LIZ
AC
IO
AP
RE
ND
IZ
AJE
S
Desarrollo de proyecto de
fortalecimiento indígena
N D
E
Elaboración de cronograma de X
actividades, implementación
propuesta fortalecimiento indígena
Diseño de una propuesta de
socialización de experiencia
NOTA: Las actividades que no se ejecutaron en el marco de la experiencia serán
incluidas en las actividades para el desarrollo del proyecto de fortalecimiento cultural
indígena con enfoque psicosocial.
3. PROCESO DE ADECUACIÓN DE LA ESTRATEGIA
3.1 PROPUESTA INICIAL
METODOLOGÍA IAP
INVESTIGACIÓN ACCIÓN PARTICIPACIÓN: Los planteamientos de
la Investigación Acción Participativa – IAP, iniciada en 1970 por el
sociólogo barranquillero Orlando Fals Borda junto con otros sociólogos y
antropólogos, inciden en la mirada del investigador y el conocimiento
científico. La IAP se implementó inicialmente en Colombia y a finales de
los años setenta ya se había difundido en varias partes del mundo.
La IAP tiene las reglas de una ciencia rigurosa y pertinente, la cual se
interesa en el conocimiento de las gentes del común. Se cuestiona los
relatos excluyentes, por lo cual se transforma el lenguaje técnico y
especializado hacia un lenguaje cotidiano. Mediante nuevas
construcciones pedagógicas se plantea hacer investigación colectiva con
grupos locales, por el propósito de suministrarles bases para ganar
poder. Se articulan los discursos con experiencias prácticas y
observaciones concretas en el terreno.
“… Llegamos a declarar que las gentes del común merecen conocer más
sobre sus propias condiciones vitales para defender sus intereses, que
aquellas otras clases sociales que han monopolizado el saber, los
recursos, las técnicas y el poder mismo, es decir que debemos prestar a
la producción del conocimiento tanto o más atención que a la producción
material. Así podíamos inclinar la balanza en pro de la justicia para los
grupos desprotegidos de la sociedad…”
Finalmente, la IAP es una práctica democrática, como un complejo de
actitudes y valores y como un método de trabajo que da sentido a la
praxis en terreno.
TÉCNICAS DE INVESTIGACION DESARROLLADAS EN EL MARCO
DE LA METODOLOGIA AIP
MAPAS SOCIALES: Por Mapa Social entendemos una representación
gráfica de los grupos, organizaciones y colectivos de un territorio
concreto y de las relaciones que se dan entre ellos. “Siguiendo el esquema de la investigación - acción participativa que
hace VILLASANTE (1993:37), el sociograma tiene por misión
representar gráficamente las relaciones de distinto tipo, que están
presentes en un momento determinado, entre un conjunto de actores.
Aquí el sociograma (lo instituyente) se enfrenta al organigrama (lo
instituido, lo cristalizado) de manera que aporta a la investigación una
perspectiva de lo que está pasando en el momento presente y por
dónde deciden los implicados que han de desarrollarse las propuestas de
actuación.
Finalmente tendremos en cuenta su cualidad sólo descriptiva, siendo
conscientes de ella y completando los mapas sociales con informes
explicativos.
LÍNEA DE TIEMPO: Se conoce también como mapas parlantes, son
instrumentos técnicos metodológicos que permiten la organización y
comunicación de las decisiones del medio comunal, a través de la
diagramación de escenarios (pasado, presente y futuro) en mapas
territoriales, posibilitan además conocer las tendencias de ordenamiento
grupal. En éste instrumento se les propuso a las comunidades diagramar
sus territorios, iniciar con la ubicación del lugar que se está
interviniendo, para conocer la apreciación que tienen sobre su entorno,
territorio, espacialidad, el conocimiento del mismo, entre otros, ya que
existen elementos que no pueden ser observados fácilmente, por lo
tanto se manejan o tienen distintas percepciones para hacer luego
comparaciones entre grupos y conocer el pasado, el desplazamiento y el
presente. Esto nos permite saber cuáles son las percepciones de los
espacios vividos.
DIÁLOGOS PARTICIPATIVOS: Los diálogos participativos son uno de
los instrumentos para la realización de la participación ciudadana que se
enmarca en el eje de la gestión pública participativa, descrito en la
agenda de pro-participación ciudadana.
Promueve la conversación entre actores sociales e institucionales, se
busca generar una cultura de escucha y decisión activa, incorporando
criterios de co-responsabilidad con el fin de ampliar la base de
legitimidad de las mismas. Es un proceso donde la ciudadanía canaliza
inquietudes, propuestas y soluciones en materias específicas de políticas
públicas.
Los diálogos participativos posibilitan: ● Maximiza las oportunidades de la participación de cada persona. ● Asigna responsabilidad a los participantes, estimula la confianza, el
liderazgo compartido y el compromiso a todo lo largo del proceso. ● Involucra activamente a un gran número de personas. ● Permite generar acuerdos.
EJERCICIOS DE ETNOGRAFÍA: La etnografía es uno de los métodos
de la investigación social que ha evolucionado tanto en las últimas
décadas que ha pasado de una herramienta de poder, de obtención de
información, de sustantivación de un quehacer, a un verbo, un proceso,
determinado por la actitud del indagador.
La etnografía desde una perspectiva clásica es “el estudio descriptivo y
clasificatorio de las civilizaciones (costumbres, creencias, prácticas
religiosas, instituciones, estructuras políticas y económicas, técnicas,
artes, etc.), en particular en las arcaicas, lo que supone trabajo y
observación 'sobre el terreno' [...] “(Morfoux, 1985: 116).
La etnografía depende menos de instrumentos de registro y medición
que otras formas técnicas de investigación, aquí el investigador está en
el centro, de su formación depende todo, la diferencia entre novato y
experto es enorme y definitiva.
En última instancia la etnografía desde una perspectiva analítica, es un
proceso que va del entender, criticar, contrastar hasta el incorporar en
la unidad dialéctica, sujeto- observador / sujeto - observado. Estos
pasos no siguen una linealidad, son azarosos e inquietos, algunas veces
simultáneos y otras secuenciales; se articulan de manera permanente
en el proceso de investigación. El etnógrafo se aproxima al escenario, se
deja capturar y así busca construir la escena en la cual configurará sus
primeras aproximaciones. Quiere entender, aprehender la lógica
interna del discurso (cuerpo, mirada) de los otros en su contexto. Pero,
este etnógrafo no es impermeable, su historia le antecede. Así que para
ir más allá de lo evidente, compara, relaciona, busca posibles nexos,
comienza un proceso de extraer generalidades (síntesis) significaciones
individuales y grupales que realmente interesen al sujeto/objeto
investigado. En este ejercicio de criticar, él pone en relación su
experiencia y discurso, con aquello que ve y escucha (el discurso y la
experiencia de los otros). Estas relaciones internas, (con la
escena/escenario específico) y externas (con otros contextos históricos
vivenciados), proporcionan una nueva posibilidad, la construcción de
otro mundo posible donde está implicado como observador. Cuando se
relacionan los discursos que entendemos y criticamos con otras
dimensiones y experiencias, podemos decir que se llega a la
contrastación. De esta forma comparamos los discursos con la
experiencia en la realidad, en una lógica que busca los alcances y
limitaciones de aquello que hacemos, es la posibilidad de ir del discurso
(entender/criticar), a la experiencia (contrastar). Poco a poco, en algún
momento, el menos esperado de este proceso, incorporamos, hacemos
propio, volvemos cuerpo esas relaciones que hemos establecido con los
otros.
3.2 AJUSTES EN LA PROPUESTA INICIAL:
La propuesta inicial del proceso de sistematización de experiencia para
el diagnóstico cultural en las comunidades indígenas de Jaikerazabi,
Coqueras, Ibudo y Ciacoro al ser socializada con las comunidades no
surtió ningún cambio; ya que en el proceso de socialización comunitaria
se reconoció la vigencia que para las comunidades indígenas tiene este
tipo de propuesta.
3.3 HALLAZGOS O RESULTADOS
RELATOS Y MEMORIA - RESGUARDO DE JAIKERAZABI, PLAYAS Y
COMUNIDAD COQUERA, EMBERA KATIO
Metodología: Mapa sociales Actividad 1
Se desarrollaron dos actividades de metodología de mapas sociales en
los resguardos de Jaiquerazabi, Ibudo, Ciacoro y comunidad La Coquera
en el municipio de Mutatá y Apartadó; en la actividad uno de
metodología de mapas sociales se indago sobre las relaciones entre
hombres y mujeres en la comunidad, la composición familiar, la relación
con el territorio y el gobierno propio previo al desplazamiento. La
actividad dos de aplicación de esta metodología con la comunidad,
indaga por los mismos ejes temáticos en el contexto actual.
ASI TRANSCURIO LA ACTIVIDAD 1: Después del primer acercamiento con la comunidad para la socialización de la
propuesta de sistematización de experiencia de diagnóstico cultural, se
convoca a la comunidad a participar del primer ejerció de sistematización que
se denomina “Pintando recuerdos de los caminos en la memoria”, esta
convocatoria se adelanta a través del cabildo local de cada comunidad.
Matriz de análisis 1:
FAMILIA MUJERES HOMBRES JÓVENES
Seguridad
Territorio
Definición de
alimentaria y la
Movilidad
roles
autonomía
Siembra desde la La cultura y la
Suficiencia en la sabiduría ancestral, aprensión de la
Seguridad
producción de
y las posibilidades sabiduría
alimentaria que brindaba el ancestral en
alimentos territorio para la
medicina
caza y la pesca tradicional
Legitimidad de las
Legitimidad de
autoridades en las
Legitimidad de
Gobierno/
comunidades, dada
las autoridades
las autoridades
organización
por
los
en las
en las
social
conocimientos
comunidades.
comunidades.
ancestrales de la
cultura
El territorio: Con el territorio se establecían vínculos de familiaridad y
respeto, la tierra no solo era proveedora de alimentos, la medicina y la
vivienda; la tierra es la madre, la hermana, el referente próximo de la
existencia de la comunidad. Ancestralmente se enseñaba el respeto
por la tierra y lo que ella contenía, la tierra maternizadora del pueblo
indígena estaba cargada de simbología en la que se materializaba la
relación armónica hombre - naturaleza.
En la comunidad nacían los niños y los muertos y se enterraban en un
lugar sagrado.
Se reconocía la propiedad privada inserta en el territorio colectivo, no
era necesario nombrar límites ni establecerlos mediante alambrado,
“…nadie robaba nada a nadie, se daba y se compartía..”. Se establecía
como norma intrínseca el respeto por lo del otro y se enseñaba desde la
infancia a reconocer lo que era propio, sobre lo que se podía decidir y
sobre lo que no.
Los tambos estaban ubicados de manera dispersa en el territorio,
alejados unos de los otros, estos eran construidos por los hombres y los
materiales que utilizaban era la madera y la palma de iraca.
Elementos de la espiritualidad en relación con el territorio:
- Todo lo que habita en la tierra tiene espíritus, con quienes se
debía contar a través de rituales para adelantar cualquier acción
en la búsqueda de un beneficio alimentario, de vivienda o salud.
- Había que dejar descansar la tierra.
-
- La tierra es sabia madre protectora.
Ancestralmente la tierra proveía de todo lo que la comunidad necesitaba
para la subsistencia, “… se podía ir por el campo a cazar, se podía
pescar en el rio, el Embrea vivía tranquilo…”. La pertenencia a la
comunidad definía al Embera y la Embera, le posibilitaba un lugar en el
mundo, anclado cómodamente a una red que lo sustentaba y desde
donde se relacionaba con el otro mundo (occidente), que en ocasiones
no le era significante y que no lograba entender.
Seguridad alimentaria: Se evidencia que la seguridad alimentaria está
estrechamente ligada a la soberanía alimentaria, los indígenas podían
definir en sus territorios el tipo de alimentación que componían sus
dietas y garantizar permanentemente la existencia de estos productos
en la comunidad.
Los cultivos transitorios los realizaban conjuntamente mujer y hombre,
siendo la limpia1 responsabilidad exclusiva del hombre.
Los cultivos transitorios son el maíz y el arroz y los permanentes eran
de plátano y yuca, además el Embera siempre podía contar con especies
menores para su consumo o venta.
Su subsistencia no dependía de la relación con culturas occidentalizadas
y cuando se daban por lo general era con campesinos o afrocolombianos
en el territorio para hacer intercambios de productos.
Se accedía con facilidad a la medicina tradicional y los tratamientos de
plantas que estos requerían para garantizar la curación, este servicio se
compensaba con el intercambio de productos agrícolas con los que se
bastaría el Jaibaná para su subsistencia.
Gobierno y organización: las comunidades mantenían la figura de
consejo de ancestros mayores que era un grupo de hombres de la
tercera edad, en ellos se reconocía toda la experiencia dada por la vida
en la comunidad y su sentido de pertenencia cultural; los consejeros por
lo general tenía conocimientos de medicina tradicional y era
1 Disposición del terreno para el cultivo
quienes orientaban a la comunidad y dirimían los conflictos a partir de la
consejería y la aplicación de justicia.
La figura de consejo de ancestros mayores se le delegaba a los
hombres, la mujer podía participar en los ejercicios de gobierno y de
toma de decisión con vos y si poder de decisión, y esta no se entendida
como excluida, asumía el rol cultural que le delegaba poder de decisión
en lo privado (en el tambo) nunca en los espacios públicos. Las decisiones del consejo de ancestros mayores no se cuestionaban y
eran la respuesta a todo en la comunidad.
Los hombres no tenían una preparación especial dentro de la comunidad
que les otorgara el poder para pertenecer al consejo, este era un talento
natural que el hombre iba mostrando a lo largo de su vida.
El embrea Katio, reconocía y respetaba sus figuras de autoridad y
construye su vida a partir de la orientación que estos dan.
RELATOS Y MEMORIA - REGUARDO PALMAS COMUNIDAD
EMBERA CHAMI
Metodología: Mapas sociales Actividad 1
En esta comunidad existe un conflicto étnico-territorial entre las etnias
Chami, Katio y Senú, lo que dificulta el desarrollo de las actividades. A
pesar de ello se logra en este ejercicio contar con la representación de
cada una de las etnias y es relevante la dinámica que se genera dado
que los participantes reconstruyen, a partir de la metodología de mapas
sociales, la historia de su pueblo étnico y la comparten en plenaria sin
que esto resultara agresivo para alguno de los y las participantes.
El pueblo Chami, que habita el resguardo recuerda que sus familias eran
indígenas campesinos provenientes del departamento de Quindío, que
labraban la tierra con algunas costumbres muy occidentalizadas por las
condiciones de desarraigo cultural que les había tocado vivir a esta etnia
desde la colonización, ademas sus territorios estaban muy cerca de los
caseríos y centros urbanos.
La necesidad por mantener vigente la unión familiar y la cultura los
motivo a identificar el territorio donde hoy está ubicada la comunidad y
a partir de la gestión de líderes indígenas con el apoyo de la
Organización Indígena del Antioquia (OIA) se logró la resolución de
resguardo para el pueblo Chami, asentado en el municipio de Apartadó;
con la solidaridad que le caracteriza al campesino, los indígenas Chami
convocaron a algunas familias de la etnia Senú que se encontraban en el
municipio en condición de desplazamiento y recibieron de la misma
manera 5 familia de la etnia Embera Katio desplazados por bombardeos
y masacres de la vereda Los Mandarinos en el municipio de Apartadó.
La única referencia histórica que se logra encontrar en esta comunidad
tiene que ver con la adquisición del territorio y la llegada de las otras
etnias a este.
RELATOS Y MEMORIA - REGUARDO PALMAS COMUNIDAD SENÚ
Metodología: Mapas sociales Actividad 1
Se conoce que el pueblo Senú como etnia indígena sufrió procesos de
aculturización desde los tiempos de la colonización, causando la perdida
de referentes históricos y de su patrimonio cultural, hecho que en el
contexto de las organizaciones indígenas y en los territorios le ha
generado señalamientos, hecho que los pone en una permanente
reflexión sobre su origen y sus proyectos de vida futuros que les
permitan reconstruir su historia retomando aspectos culturales
ancestrales y valorando como patrimonio de la etnia las practicas
artesanales.
Anteriormente las personas de la etnia Senú vivían en comunidades muy
unidas en San Andrés de Sotavento, las familias eran extensas y
difícilmente se separaban, eran artesanos y agricultores, se reconocía la
propiedad privada pero la solidaridad primaba en sus relación
comunitaria.
Gobierno propio: Su gobierno tradicional, era de capitanía, el capitán
era una persona con gran sabiduría sobre su cultura y tradiciones
ancestrales, en general personas de la tercera edad, ellos representaban
respeto y confianza. La medicina tradicional se desarrollaba a partir de
la figura del curandero que se beneficiaba de las hierbas para la
elaboración de medicamentos. “para ser curandero era necesario
realizar un sacrificio real con el hijo más querido”.
HITOS DE LA HISTORIA, RESGUARDO INDIGENA CIACORO
Metodología: Línea de tiempo
FECHA HITO HISTORICOS
1950 Desplazamiento del departamento de Quindío al municipio de
Apartadó
1990 Se presentan vulneraciones a los derechos humanos e
infracciones al derecho internacional humanitario en contra de
la comunidad y sus lideres
1993 Se establecen en el territorio palmas (baldío) cinco familias
de la etnia Chami
1999 Emana la resolución número 003 del 11 de Mayo, POR PARTE
DEL INCOER del territorio como resguardo.
2012 Se incluye el resguardo en el proyecto pueblos indígenas del
Departamento para la prosperidad social (DPS).
2012 Se inicia la construcción de obras en el marco de la
intervención del DPS, a la comunidad.
Los indígenas Chamí a su llegada al municipio de Apartadó, se
emplean como trabajadores bananeros
Se desintegran las familias, se presentan muertes y
desplazamientos
A partir de la intervención del Departamento para la Prosperidad
Social hay nuevas expectativas comunitarias en la búsqueda de
alternativas de solución a la problemática.
HITOS DE LA HISTORIA COMUNIDAD INDIGENA COQUERA
Metodología: Línea de tiempo
FECHA HITOS HISTORICOS
1999 Desplazamiento forzado de familias indígenas
1999 Proceso de reubicación a las familias desplazadas en la
comunidad
2003 Se elige el gobierno indígena
2000 Se nombran maestros para la escuela
Existe la necesidad de un territorio propio.
La mujer asume la manutención familiar.
Hay liderazgo comunitario de los jóvenes de esta comunidad en el
municipio.
Hay compromiso para la preservación cultural y del patrimonio por
parte de los miembros de la comunidad.
HITOS DE LA HISTORIA, RESGUARDO IBUDO
Metodología: Línea de tiempo
FECHA HITO HISTORICOS
1935 Llegada al Municipio de Apartadó
9970 Nace la organización campesina en la región de Urabá
1980 Nace la organización indígena en el país
1985 Nace la organización indígena en el Departamento de
Antioquia
1990 Se desplaza la comunidad hacia la escuela del resguardo
1999 Se da la resolución 0029 del 31 de mayo de 1999 por parte del
INCODER
La comunidad se encuentra en medio del control territorial de
actores del conflicto
Se fortalece el gobierno propio en medio del conflicto
Se mantiene la neutralidad activa por pate de la comunidad, en
defensa de la vida y el territorio
Se mantienen arraigadas prácticas culturales
HITOS DE LA HISTORIA, RESGUARDO INDIGENA JAIQUERAZABI
Metodología: Línea de tiempo
FECHA HITOS HISTORICOS
1990 Desplazamiento de la comunidad
2000 Se adelanta proceso de reubicación en la comunidad
Las relaciones entre hombres y mujeres se dan en condiciones
par tanto en los espacios púbicos como en los espacios privados
La cultura se encuentra en proceso de readaptación de acuerdo a
las necesidades que plantea el contexto
Se está en proceso de construcción comunitaria con una dinámica
propia que permita la autonomía y la auto determinación, como
pueblo indígena.
RE SIGNIFICANDO LA PALABRA
Metodología: Diálogos participantes
Este ejercicio se desarrolló en los espacios naturales en las
comunidades, (la casina, la casa, el rio y el espacio urbano donde se
comercializan los productos agrícolas y artesanales). Las mujeres
mostraron mayor disposición para entablar conversaciones espontaneas
sobre la cotidianidad familiar, los hombres por su parte mantienen
ciertas reservas en este tipo de temas y remataban los diálogos hacia temas políticos y organizativos (la escuela, los grupos de danza, y
música, los equipos deportivos, el cabildo, etc)
Las mujeres nos permitieron adentrándonos en algunos aspectos
como la vida familiar, sus sueños y deseos. Ellas dejaban ver en los
ejercicio que demandan una normatividad interna que las proteja de la
violencia intrafamiliar (violencia física), las mujeres asumen un rol de
protectoras en la familia pero identifican la necesidad del
acompañamiento de los padres en los procesos de crianza de los hijos
especialmente en lo relacionado con la manutención.
Algunas mujeres de las comunidades indígenas focalizadas, reflejan en
sus diálogos cierta inconformidad con respecto a su vida en pareja,
expresan que los hombres, son quienes determinan en que se gasta el
dinero producto del trabajo de ellas, de la misma manera como son
violentadas y abandonadas con los hijos por parte de sus compañeros
permanentes.
En los diálogos participantes las mujeres muestran cierta timidez
cuando hablan de ellas, sus cuerpos, sus necesidades y sus sueños,
hecho que no es distinto generacionalmente.
De la misma manera las mujeres indagaron por aspectos de nuestra
vida familiar en relación con la de ellas, lo que permitió que el ejercicio
se diera en dinámica de pares, sin embargo algunos temas como las
enfermedades que están relacionadas con lo sexual se expresaron en
lengua indígena, lo que nos pareció un hecho natural en tanto se
reconoce que existe sinergia entre el equipo local y las mujeres, pero
que genera las condiciones para que la mujer verbalice sus asuntos más
íntimos aunque no puedan ser comprendidos.
Cuando se habla de los hijos este tema se agota en la protección desde
la manutención. De los hijos e hijas mayores, en la mayoría de los casos
solo se sabe que tienen conformadas familias, en algunos casos no se
sabe el lugar exacto donde están viviendo.
Con los hombres de las cuatro comunidades el dialogo fue fluido, en
cuanto a su deseo de que existan espacios deportivos e implementos en
la comunidad, expresan su preocupación por lo que ellos llaman la
perdida cultural de la relación con la institucionalidad, hacen énfasis en
sus conocimientos de la jurisprudencia indígena, de los procesos en los
que participan, pero no se abordaron temas sobre sus miedos, sueños,
sus cuerpos, ni sobre enfermedades; cuando se habla de la familia el
hombre por lo general remite estos temas a su compañera sentimental.
DIARIO DE CAMPO
Metodología: Etnografía
La mujer
La mujer indígena de las etnias Katia y Chami de las comunidades de
Jaiquerazabi, Ibudo y Coqueras Chami, delega su proyecto de vida a los
a las decisiones de vida de sus compañeros sentimentales y
culturalmente necesitan sentirse acompañadas, aunque por las
condiciones el contexto actual sea ella quien asume la responsabilidad
de la protección y la generación de recursos para la familia. Es distinto
para la mujer de la etnia Senú, quien ha estado mayormente permeada
por las culturas occidentalizadas, ellas asumen su condición de mujeres
desligadas de la familia y hablan de sus vidas sueños, cuerpo, deseos,
de igual manera como reconocen sus limitaciones y miedos.
El territorio
Se evidencia en las comunidades la manera como se ha transformado la
relación con el territorio, como se ha mencionado antes este fenómeno
es multicausal aunque se reconoce que la mayor responsabilidad de esto
es el desplazamiento forzado, causado por el conflicto armado, todo ello
afecta de manera directa la seguridad de las comunidades y la
estructura organizativa y familiar.
Sin embargo es importante mencionar que aún se mantiene, hasta en
las generaciones más jóvenes de las comunidades, el respeto por la
por la tierra en el sentido espiritual.
Relación institución – comunidad
Se ha generado dependencia con la institucionalidad para la solución de
problemáticas comunitarias y hay incidencia de algunas organizaciones
(comunidad de hermanas Laura), en el acompañamiento a procesos en
la vida comunitaria y en la educación de los resguardos, que no leen la
realidad desde la objetividad necesaria para acompañar procesos
propios de transformación cultural y adaptación al contexto.
La dinámica propia de la cultura en la adaptación al contexto ha
generado que paulatinamente en las comunidades de Ciacoro y
Jaiquerazabi se genere algún sentido de propiedad y cuidado con las
construcciones existentes tales como la escuela, el centro de salud, y el
auditorio de reuniones entre otros para el caso del de la comunidad de
Jaiquerazabi.
Tejido social
En las comunidades en la mayoría de los casos se carece de la
solidaridad familiar y comunitaria frente a la calamidad, como una
condición aprendida de la globalización cada uno persigue sus intereses
sin que se dé tiempo para acompañar a los otros y otras que no son de
su grupo familiar cercano hasta la segunda generación.
Cada uno debe resolver sus propias problemáticas, en esta lógica lo
colectivo y lo comunitario se convierten en el escenario para el beneficio
personal, hecho que se aprovecha por algunos líderes quienes
implementan en sus procesos prácticas de corrupción que le quitan
legitimidad a su ejercicio de gobierno en las comunidades.
Encuentros comunitarios:
La práctica deportiva de futbol es lo que genera el mayor encuentro
comunitario, tanto los hombres como las mujeres practican este
deporte, y su mayor deseo es por participar permanentemente en
torneos competitivos de las miamama manera como las artesanas, la
danza y la música se han venido constituyendo como elementos de la
cultura que posibilitan los encuentros comunitarios.
4. EL DESARROLLO DE LA EXPERIENCIA
4.1 MARCO LEGAL AUTO 004
2.4. Procesos socioeconómicos que, sin tener relación directa con el
conflicto armado, resultan exacerbados o intensificados por causa de la
guerra.
El anterior cuadro de factores bélicos opera sobre la base de una serie
de situaciones y procesos pre-existentes que aquejan a las comunidades
indígenas del país y que resultan claramente exacerbados por virtud del
conflicto armado y sus manifestaciones, a saber:
2.4.1. La pobreza y sus consecuencias. 2.4.2. La inseguridad alimentaria y sus consecuencias; agravada por
apropiación, destrucción por conflicto armado, restricciones de
movilidad.
2.4.3. Condiciones de salud deterioradas que se agravan por el conflicto
armado; en particular, mortalidad infantil alta, y altas tasas de
enfermedades prevenibles.
2.4.4. La invisibilidad preexistente por censos y estadísticas divergentes.
El desplazamiento forzado y la desintegración étnica y cultural
resultantes del conflicto armado hacen aún más difícil el registro preciso
sobre el panorama étnico del país.
2.4.5. El debilitamiento étnico y social y la aculturación prevalecientes.
3. La tierra como factor común subyacente a la afectación de los
pueblos indígenas por el conflicto.
Los pueblos indígenas están especialmente expuestos, en indefensión, al
conflicto armado y al desplazamiento, principalmente por su situación
ante la tierra.
La titulación formal de tierras y la constitución de resguardos en la
práctica no garantizan la posesión material por las comunidades; de
hecho sus territorios, sean o no parte de resguardos, son apropiados por
grupos armados ilegales, delincuentes/narcotraficantes, colonos, y
agentes movidos por interese económicos. O bien, el conflicto armado
ha exacerbado conflictos territoriales preexistentes, en los cuales las
partes no indígenas se han aprovechado de, o aliado con, las actividades
de los grupos armados ilegales, en detrimento de los grupos étnicos.
El interés de los actores no indígenas sobre la tierra se deriva de varios
factores: por recursos naturales, por su valor militarmente estratégico,
por su valor económico, y por la distancia de centros urbanos. Las
partes interesadas pueden ser actores armados o no armados, legales e
ilegales, y a menudo se entrelazan. Los conflictos territoriales se
resuelven violentamente, en detrimento de los indígenas, con graves
violaciones de derechos humanos y del DIH, por su incorporación a un
conflicto que no les pertenece. Esta variedad de manifestaciones se
deduce del anexo al presente auto.
Simultáneamente, para los pueblos indígenas la importancia de sus
territorios para sus culturas y su subsistencia e integridad étnicas, hace
más lesivos tanto los factores causales del desplazamiento como el
desplazamiento en sí mismo.
Según la ONIC, en comunicación de junio de 2006: “En todos los casos
de desplazamiento estudiados por la ONIC, existen territorios no
legalizados o en disputa. Las zonas de mayor presión por el control y
uso de tierras a través del desplazamiento, corresponden a los
territorios colectivos de nuestros pueblos indígenas. Las zonas de
colonización y de aplicación de políticas de fumigación presentan
igualmente elevados índices de expulsión referidos a conflictos por el
uso y dominio de la tierra. En este sentido, el patrón de confluencia de
tierra y recursos naturales en manos de grupos étnicos o en posesión de
colonos, sumados a la expectativa de valorización de la tierra en los
últimos cinco años coincide con las áreas críticas de expulsión de la
población. [Consultoría para los derechos humanos y el desplazamiento
CODHES, Boletines Trimestrales 37-44, 1999-2003]. // La persistencia
del desplazamiento de aquellos municipios con resguardos indígenas
pendientes de titulación, es demasiado alta como para desestimarla en
tanto factor de alta incidencia en la explicación de estos procesos. (…) Estudios recientes [CODHES/Corporación Opción Legal, 2004] muestran
que en el año 2002 sólo 8 (5.29%) de los 151 municipios que tenían
resguardos en trámite no reportaron cifras de población indígena
desplazada; es decir, el 94.7% de los municipios con resguardos en
trámite expulsaron población. Mientras que en el año 2003, el 93.37%
de los municipios con resguardos en trámite expulsaron población y el
porcentaje de los que no expulsaron representó sólo el 6.62%.”
El problema de la tierra también causa conflictos interétnicos que
afectan los derechos fundamentales individuales y colectivos de los
pueblos indígenas, e incide en el impacto del desplazamiento sobre las
respectivas etnias.
4. Impacto diferencial del conflicto armado sobre los grupos indígenas,
reflejado principalmente en los alarmantes patrones de desplazamiento
forzado
Como se describe en la presente providencia, los pueblos indígenas
están atrapados en medio del conflicto, sin que ninguna de las partes
respete su no involucramiento ni su especial protección ni reconozca su
particular vulnerabilidad y fragilidad.
El conflicto armado en general empeora la situación preexistente de
muchos pueblos indígenas, y desemboca en desplazamiento forzado. El
conflicto genera desintegración comunitaria y familiar por la muerte de
los líderes, amenazas, señalamientos, reclutamiento de miembros. Se
desmiembran las organizaciones y se lleva a las comunidades a
situaciones de alta vulnerabilidad. Colombia ya tenía varios pueblos en
riesgo de extinción por factores socioeconómicos; pero ahora el conflicto
armado ha introducido varios pueblos nuevos en la lista de quienes
padecen este riesgo, generando situaciones de urgencia que no han
recibido una respuesta estatal acorde a su gravedad.
El conflicto armado genera la imposibilidad de movilizarse por el
territorio, afectando el trabajo colectivo y las estructuras culturales que
dependen de él. Afecta la educación por ocupación de escuelas y
asesinato o intimidación de maestros. Los bloqueos, confinamiento,
amenazas y señalamientos impiden el acceso para prestación del
servicio de salud, y también impiden la realización de prácticas
medicinales propias. La situación causa la pérdida de confianza entre
miembros de la comunidad, afectando la integración comunitaria y las
prácticas socioculturales propias.
El conflicto armado y sus procesos económicos conexos generan
asimismo daño ambiental, disminuyendo la caza y la pesca y causando
inseguridad alimentaria; pérdida de la posibilidad de auto sostenimiento
con prácticas propias así como incremento de las muertes por
desnutrición, sumadas a desnutrición e inseguridad alimentaria por
confinamientos y bloqueos, como se describe en el anexo respecto de
algunos pueblos indígenas.
Las violaciones de derechos humanos que ocurren en el marco del
conflicto armado tienen repercusiones colectivas muy fuertes en las
comunidades indígenas, porque causan desequilibrios y traumas
culturales, rupturas étnicas, y afectación de la memoria cultural del
pueblo.
Para la Corte Constitucional, en fin, es claro que la afectación diferencial
de los pueblos indígenas por el conflicto armado constituye un proceso
destructivo de la diversidad étnica y cultural del país, que es invisible
para la sociedad y el Estado colombianos.
4.2 COMUNIDAD DE CIACORO, PUEBLO EMBERA CHAMÍ, SENÚ Y KATIOi
El resguardo Ciacoro es plurietnico, se encuentra habitado por indígenas
Chami, quienes fueron los fundadores del resguardo, indígenas Senú y
Katio, que a causa de la violencia llegaron al territorio con el visto bueno
de las familias indígenas Chami que lo habitaban.
La comunidad fue reconocida como resguardo en el año de 1998, elige
gobernadores cada año.
La comunidad recibe aproximadamente veinte nueve millones en
recursos provenientes del sistema general de participación.
Gobierno indígena
De acuerdo a la constitución política de 1991 que otorga a las
comunidades indígenas autonomía para ejercer sus gobiernos propios, el resguardo de Ciacoro, cuenta con un cabildo local, quien durante
un año periodo electoral cumple con funciones de autoridad
gubernamental en el territorio y ejerce las funciones de ordenador de
gasto de los recursos provenientes del sistema general de participación, de la misma manera como gestiona recursos del sector publico
Municipal y Departamental; el gobierno propio también está
conformado por una guardia indígena que tiene las funciones de
mantener el orden en la comunidad, defender el territorio y aplicar
justicia, esta institución organizativa ancestral indígena, no hace uso de
la fuerza armada en concordancia con su principio de neutralidad y paz,
el poder de su función está dada por la legitimidad comunitaria y el uso
de un bastón.
Se pudo identificar en la etapa inicial de este proceso de sistematización
de experiencia diagnostica cultural, que el gobernador actual de la
comunidad pertenece a la etnia Chami, es una persona joven, que
demuestra disponibilidad para el desarrollo del proyecto en su
comunidad, mantiene buena relación con la institucionalidad, habla el
español como segunda lengua de manera adecuada de la misma manera
como habla su lengua materna, conoce la jurisprudencia indígena, las
rutas para el restablecimiento de derechos a la población indígena
víctima del conflicto, identifica la historia de su comunidad lo que hace
que demande reconocimiento de propiedad del territorio del pueblo
Chami, sobre el pueblo Katio y Senú, ejerce un liderazgo autoritario,
carece de legitimidad comunitaria para orientar la salida negociada de
conflicto de convivencia que se presentan en la comunidad y se muestra
resistente a transformar practicas propias del tipo de liderazgo que
ejerce.
Lo anterior genera en la comunidad un debilitamiento en su
organización, y la carente participación en el proceso del total de los y
las habitantes del resguardo, de la misma manera como obliga a que las
decisiones para el desarrollo del proyecto y todo el proceso diagnostico
se den en escenarios asamblearios comunitarios con presencia del
equipo local como garante de la participación autónoma del pleno de la
comunidad, y que la información final sobre las decisiones sea la
construida en el espacio de participación generado.
La justicia se imparte a través de asambleas comunitarias, la pena se
impone a criterio del gobernador siendo la guardia indígena la instancia
comunitaria que garantiza la aplicación de la sanción impartida, de la
misma manera como también participan de actividades comunitarias
asumiendo la preparación de alimentos y la repartición de estos; cuando
se presenta la ausencia del cabildo y su suplente en la comunidad algún
miembro de la guardia indígena asume la responsabilidad en la
comunidad sobre todo si se tiene prevista la visita de la institucionalidad
o el sector salud.
En la comunidad existe un comité deportivo, su representante adelanta
con el visto bueno del gobernador, gestión para la consecución de
implementos deportivos y capacitación en futbol y micro futbol,
permitiéndoles el fortalecimiento competitivo de los equipos de mujeres,
niños y hombres conformados en la comunidad.
Se cuenta con un comité de mujeres, quienes hacen apoyo en las
actividades de limpieza comunitaria y en las actividades de la escuela.
Protección de creencias
El 80% de la población indígena del resguardo Ciacoro de las etnias que
habitan el territorio profesan fe cristiana, no necesariamente escrita está
a la iglesia católica o protestante, pero si en el reconocimiento de la
existencia de Dios, esto se debe en gran medida a la influencia que han
ejercido la comunidad de hermanas Lauras en el territorio desde los
procesos formativos en la escuela, desde hace más de 10 años
aproximadamente.
La comunidad Chami y Katia mantienen su creencia en los espíritus que
habitan todo lo que existe (Jai), de esta manera las enfermedades y los
problemas son atribuidos a estos como determinantes de la mala
voluntad de un vecino o enemigo que busca hacer daño; por ello las
enfermedades, cuando se cuenta con los recursos económicos, son
consultadas preferencialmente con el Jaibaná de la comunidad. No es de
esta manera cuando la persona enferma es de la etnia Senú, quienes a
razón del mestizaje y la pérdida cultural ancestral mantienen arraigadas
prácticas de medicina occidental.
En la comunidad la etnia Chami de acuerdo a sus posibilidades
económicas celebra rituales de gemene a las niñas que se encuentran en
etapa de pubertad; así como también se han realizado rituales de canto
de jai con el total de la comunidad debido a la problemática de espíritus
que enfrentan.
No se conoció de la práctica de otros rituales propios de las etnias Katio,
Chami y Senú, como preparación de la tierra, ombligada, protección de
cuerpos entre otros.
Libertada de culto
La comunidad cuenta con infraestructura para el desarrollo de
actividades que corresponden a la espiritualidad propia de cada una de
las etnias que habitan el territorio y aunque cada día, para los indígenas
Chami y Katios, es más difícil por los recursos económicos el acceso a
médicos tradicionales la comunidad cuenta con dos Jaibonas.
Protección de género
Las mujeres expresan su deseo de adelantar acciones que permitan la
reconstrucción del tejido social en la comunidad y la necesidad de
buscar salidas a las problemáticas que enfrentan. También expresan la
necesidad de establecer acuerdos que garanticen mayor compromiso
por parte de los hombres en la crianza de los hijos, el respeto a su
integridad como mujeres y la eliminación de la violencia física como
elemento cultural que las afecta.
Los hombres de la comunidad están identificado su papel en este nuevo
contexto territorial y familiar, que ha puesto en lo público y en la toma
de decisiones también a la mujer. El hombre por las condiciones propias
del territorio ya no ejerce su papel de protector territorial y de la familia,
no es el único proveedor para la familia, pero si es quien mejor
establece relación con la institucionalidad, los hombres de la comunidad
aunque se invisibilizan en los escenarios culturales, también han
apropiado nuevos roles, como el de la preparación de alimentos para
actividades comunitarias y el aseo de espacios comunes.
Tierra y el territorio
Las problemáticas sociales y comunitarias además de las generadas por
el conflicto armado lograron que la comunidad no expresara apropiación
territorial, esto también se evidencia en la escuela que no tiene en sus
espacios elementos propios de la cultura. En el colectivo se mantiene la
idea de estar de paso en el territorio. No hay sinergia entre las etnias
que habitan el territorio para el desarrollo de actividades comunitarias
en beneficio de todos y todas
Etno educación
La escuela cuenta con dos educadoras indígenas, quienes hablan lengua
Chami y Katia. En este proceso no se revisó la maya curricular, debido a
que se requiere una autorización de la secretaria de educación para
indagar sobre todo los temas correspondientes al proceso formativo en
la escuela del resguardo. Se evidencio que los conceptos educativos
impartidos son desde occidente
Expresiones artísticas propias de la cultura
En la comunidad no se tiene conformados grupos de danza y música ni
se cuenta con un espacio de reconocimiento de las plantas medicinales y
curativas de la medicina tradicional. Las mujeres elaboran bisutería en chaquira checa como practica ancestral para el uso propio
y para la venta, práctica que cada vez más esta permeada por la
culturización, debido a que ancestralmente estos elemento
comunicaban a través de las imágenes que se plasmaban en ellas, ahora
las imágenes que se plasman en el tejido corresponde a escudos de
equipos de futbol, imágenes de caricaturas que expresan amor, entre
otras que no corresponden a la cultura propia y ancestral, por ello estos
elementos en la actualidad no comunican y son solo artesanías para la
subsistencia; de la misma manera sucede los tejidos en fibra de la
cultura Senú que aunque guardan las figuras propias de la cultura en las
esteras, los sombreros y los canastos esta etnia ha perdido de vista el
significado que comunican las figuras.
En el resguardo Ciacoro las mujeres más jóvenes de las etnias Chami,
Katio y Senú se visten desde los referentes occidentales, solo el 1% del
total de 64 que suman las mujeres adultas de la comunidad utilizan
como prenda de vestuario la paruma, sin embargo ningún grupo
generacional de los hombres de la comunidad no conserva el vestuario
tradicional y los jóvenes no tienen muchos referentes de este.
Las bebidas propias como la chicha de maíz, panela o arroz no resultan
atractivas para las festividades en la comunidad o por fuera de esta,
solo en los rituales de gemené y canto de jai se hace uso de esta
bebida.
Seguridad alimentaria
La comunidad compra más del 90% de los productos que consume en
sus dietas, no tienen semillas propias, sin embargo por familia intentan
mantener cultivos de especies de plátano debido que este producto es el
que compone mayoritariamente la dieta de las comunidades.
Patrimonio cultural de la comunidad
La caseta comunitaria, la escuela, el centro de salud, el jaibaná y la
cancha.
La lengua indígena Chami y Katia
No se logró establecer con claridad en este ejercicio, si la lengua
materna de los pueblos Katíos y Chamí es vigente en la comunidad,
porque hay personas dentro de la comunidad que afirman que en este
territorio estas lenguas como la Senú, están perdidas y que quienes
dicen hablarlas solo pronuncian palabras, lo que no significan que
hablen en lengua materna.
PROCESO DE LA EXPERIENCIA
Desde el proceso de sistematización de experiencia de diagnóstico
cultural, fue fundamental incorporar en el resguardo Ciacoro, el sentido
afirmador y diferenciador de identidades, que se expresa en tradiciones,
creencias, valores morales y espirituales, costumbres, practicas, formas
y estilos de vida, que le permitan a cada etnia presente en el territorio
reconocerse y de esta manera cada una de
estas pueda comprender el mundo desde su cosmovisión y establecer
acuerdos que les permitan la construcción de vida comunitaria desde la
diferencia étnica, identificando también la importancia de pertenecer a
esta, ya que según Beristian la vida en comunidad, da identidad, ayuda
a mantener la seguridad emocional, la capacidad de acción, mediante la
toma de conciencia de las situaciones que viven las personas, de ahí la
importancia de pertenencia a un grupo o una comunidad.
Cada espacio de reflexión en el resguardo estuvo orientado a esto, al
reconocimiento propio en función de lo colectivo, de lo comunitario,
reconociendo la existencia de los otros, del otro que es diferente en
costumbres y prácticas a mí, pero con quien comparto el territorio e
intereses; por ello la diferencia no debe ser entendida valorativamente
como buena o mala, si no como la oportunidad desde la diversidad para
la construcción de la común unidad (comunidad que comparte intereses
comunes).
El nivel de participación en las actividades fue de un 50% del total de la
población, aunque no se trabajó de manera diferenciada por género y
generacional, la diferencia más que étnica en esta comunidad, es de
género y esto se evidencia en la manera como se organizan para
trabajar por grupos, como se distribuyen el espacio para las discusiones
plenarias. El apoyo a la concertación o el disenso por lo general lo hacen
entre pares de género. Aunque estos espacios estuvieron marcados por
la discusión, los comentarios y señalamientos, tales como falta de
compromiso, responsabilidad de la problemática actual en la comunidad,
entre otros, se pudo leer que en el punto donde todos y todas están de
acuerdo es que hay que revisar la manera como se vive en comunidad
en el resguardo y que se deben adelantar acciones urgentes en la
apropiación étnica y cultural de los grupos que conviven en el territorio,
para generar mayor apropiación de este y garantizar la permanencia de
los distintos grupos étnicos en el resguardo.
“…Estamos perdiendo la cultura, ya no hay animales de caza y los más
jóvenes ya no quieren parecer indígenas...” Mujer de la comunidad
Se identificó mayor apropiación de la experiencia por parte de las
mujeres de la comunidad, y la necesidad de abrir espacios de
fortalecimiento étnico en el resguardo, como parte de su proyecto de
vida actual.
4.3 COMUNIDAD INDIGENA COQUERA
Esta comunidad está habitada por personas víctimas del desplazamiento
forzado, en el año de 1999, llegaron más de 20 familias en busca de una
comunidad receptora que los resguardara del conflicto, de esta manera
se asentaron en la caseta comunal, en la vía de la ladrillera, en el corregimiento el reposo. Luego de tres meses logran una
concertación con el resguardo de las Palmas quienes le cedieron
algunas hectáreas de tierra para que se asentaran mientras definían su
situación. De este hecho han transcurrido aproximada mente 15 años y
la comunidad ha generado vínculos con el territorio que habitan, no
pasa lo mismo con el resguardo en tanto las familias de la comunidad
indígena Coqueras, se identifican como resguardo autónomo no adscrito al reguardo de Palmas, debido a que las familias de la comunidad son
de la etnia Katio y las familias del reguardo las Palmas son
mayoritariamente Chami y Senú
La comunidad no recibe por si sola recursos provenientes del sistema
general de participación, los recursos se perciben por medio del
resguardo de Palmas y se ha mencionado por parte de los líderes de la
comunidad de Coquera, que no se destinan partidas de este por parte
del cabildo de el reguardo de Palmas para la Comunidad.
Gobierno indígena
La comunidad indígena de Coquera, cuenta con un cabildo local
reconocido por el ente territorial, quien participa con vos y voto en los
escenarios propios de participación de los representantes de las
comunidades indígenas, tal es el caso de la elección del representante
al cabildo mayor del municipio de Apartadó. Además de asumir
funciones propias de su cargo hace lobi institucional para la consecución
de recursos que mejoren las condiciones de habitad y seguridad
alimentaria en la comunidad y hace de representante deportivo del
equipo de futbol femenino ante el IMDER municipal.
El cabildo local cuenta con el respaldo de su comunidad, tiene un
importante poder de convocatoria comunitaria, es dinámico, tiene un
enorme deseo de aprender y es respetuoso de las decisiones que se
toman en la comunidad, en algunos momentos y en el afán de encontrar
aliados que le resuelvan la problemática territorial a la comunidad, este
ha participado de escenarios político partidistas que según él le han
dejado frustraciones.
La justicia se imparte en a través de asambleas comunitarias, la pena se
impone a criterio del gobernador, la guardia indígena es la instancia
comunitaria que garantiza la aplicación de la sanción impartida, la
comunidad cuenta con un sepo, y el proceso se adelanta para casos
reincidentes por ejemplo, en la violencia contra la mujer las tres
primeras veces mediante amable compasión, si después de esto la
persona reincide en el hecho, se le aplica la sanción.
En la comunidad existe un comité deportivo de los dos equipos de futbol
conformados, cada equipo tiene su representante. Quien es el
encargado de participar de las reuniones del torneo al que se inscriben y
garantizar la participación de su equipo además de hacer la colecta para
el pago de arbitraje y demás actividades que demandan costo en este
disciplina de acuerdo al torneo en el que participen.
Protección de creencias
En la comunidad indígena Coqueras, la espiritualidad indígena está
atravesada por la teología indígena, donde la mitología apropia el
cristianismo católico, de esta manera se profesa una fe en DIOS, desde
la ancestralita,
“Caragabi2 es único Dios, él tiene familia que le ayuda, mi papá enseño
así, y yo creo así” mujer indígena de la comunidad Coquera.
Esto de alguna manera obedeció a que la iglesia católica en los
principios de la evangelización de los pueblos indígenas tuvo algunos
obispos y sacerdotes que lucharon por la evangelización de estos grupos
poblacionales ya que la iglesia no se encontraba preparada para
2 El mito de Caragabi: Cuenta la leyenda embera que Caragabi fue el encargado de ordenar la tierra en el principio de sus días. En el principio de los días Caragabi fue el dios hijo de la saliva de Tatzitzetze, dios creador del universo y de las cosas. En términos generales este fue el primer hijo de la mitología Embera – Catía, una de las tribus indígenas que habitaron en otrora el territorio antioqueño. Una vez firme y convertido en hombre, Caragabi comenzó a arreglar el mundo. Tomó las estrellas y las puso en el universo y decoró con premura el cielo con un sol y pájaros luminosos con sus alas extendidas. Insatisfecho con su labor el primogénito de Tatzitzetz decidió irse a caminar la tierra para ordenar las cosas y ponerles un nombre, decisión en la que no estuvo de acuerdo ni su padre, ni otros dioses antiguos. Empeñado en hacer del mundo un lugar diferente al que existía, Caragabi se levantó en contra de los dioses y comenzó a recorrer la tierra. Cuentan los indígenas que mientras Caragabi caminaba, iba preguntando a quienes se encontraban en el camino: - “¿Qué estás haciendo?” Y estos respondían: - “Sembrando maíz” - “Recogiendo piedras” Conforme avanzaba y escuchaba los nombres iba bautizando cada parte del universo. Sin embargo, a pesar de que Caragabi tenía gran parte del mundo ordenada, había algo que hacía falta: el agua. Hasta el propio dios ordenador del universo sentía la necesidad de este líquido preciado. Como una premonición tuvo tres sueños en los que aparecía un mundo con agua, pero no detectaba en dónde, así que envío a sus servidores a recorrer todas las partes del mundo pero estos tampoco encontraron agua. Un día Caragabi adoptó la forma de un pájaro mientras soñaba y vio como Gentzera, una indígena, tenía en sus manos unos peces. Resulta que Gentzera había encerrado el agua en la pena para castigar a unos pescadores que se negaron a darle un pescado. Mientras soñaba, Caragabi pudo ver el lugar en donde la indígena escondía el agua. Sin pensarlo, fue hasta aquel lugar, era una piedra escondida, y llamó por varias ocasiones a Gentzera, cuando ella le respondió él le pidió agua pero la indígena se la negó. Como Castigo, Caragabi ingresó al palacio de agua y convirtió a Gentzera en una hormiga negra, grande y venenosa. Para que el mundo tuviera en su memoria este desagravio, Caragabi ordenó que aquella primera Gentzera y todas sus descendientes deberían de cargar una gota de agua en su boca, así que todas las hormigas congas que existen en nuestros días provienen de aquella primera Gentzera. Cuando el dios ordenador derribó la puerta de aquella gruta, el agua se derramó por toda la tierra formando los mares, los ríos y los arroyos.www.medellin.co, 28/0872013
enfrentarse a una diferencia étnica, de credo y de lenguas. Por ello el
sometimiento a los indígenas, los bautizos y la evangelización que en
algunos momentos estuvieron atravesados por la espada, permeo la
mitología recreando la espiritualidad de los pueblos indígenas; algunas
etnias fueron más vulnerables que otras, el pueblo Embera Katio y
Chami por ejemplo.
Sin embargo tras el conflicto armado al que se han visto enfrentados los
pobladores de la comunidad de Coqueras, la espiritualidad es un
elemento para la resistencia que se encuentra en el sentido que se le da
a la vida. Un Dios padre y madre, que protege, creador y formador de
un universo lleno de vida donde todo lo existente tiene espíritu (jai), y
hombres y mujeres que no se enfrentan a la naturaleza porque son
parte de ella, finalmente un Dios Caragabi que tiene familia que le
ayuda.
Libertada de culto
La comunidad se cree en la existencia de enfermedades propias de jai,
por ello consultan al jaibana de la comunidad cuando se cuenta con los
recursos económicos para esto.
“…Esta enfermedad es propia embera…” mujer de la comunidad
Protección de género
Aunque se ha evidenciado que en conflicto armado, las mujeres y las
niñas son las personas mayormente afectadas, también se conoce que
la mujer es quien asume la responsabilidad de la manutención y
protección familiar muy a pesar de la feminización de la pobreza en las
comunidades, dado que las mujeres cuentan con menores herramientas
para enfrentar las demandas del mundo occidental, al que se tienen que
ver enfrentadas a causa de su nueva situación y contexto.
Las mujeres indígena de la comunidad, por lo general las más
adultas, no tuvieron mucha relación con las personas no
indígenas en su infancia, además no asistieron a la escuela lo que
no les permitió el aprendizaje del español como segunda lengua.
No existen fuentes de empleo para la mujer indígena en la
Región de Urabá, mucho de esto obedece al imaginario colectivo
que las estigmatiza (desaseadas, perezosas e ignorantes), y las
discrimina en razón de su raza.
Por esta razón la mujer indígena se ve abocada a la venta de
productos agrícolas desde la informalidad (yuca, maíz y limón),
también comercializan productos propios de la cultura como la tinta
de la jagua 3 y elementos artesanales como collares, manillas, entre
otros elaborados con chaquira checa. Los recursos
que perciben a través de esta actividad económica se
constituyen en las únicas entradas que posibilitan el sustento
para sus familias, además de capitalizar el negocio a través de la
ampliación y compra de elementos para mantenimiento de
cultivo.
En la situación de derechos de las mujeres indígenas, encontramos
limitado el acceso a la salud de ellas y sus familias, en la mayoría de los
casos solo acceden al médico en momentos de extrema gravedad,
sobretodo porque se entiende que muchas de las patologías que se
3 Tintura natural extraída del árbol de jagua, que se utiliza para la pintura facial de las mujeres indígenas
Emberas
presentan en la comunidad están relacionadas con espíritus (jai), en
especial las enfermedades del aparato reproductivo, y como no se
cuenta con los recursos suficientes para acudir al médico tradicional,
ellas plantean compás de espera mientras pueden ahorrar el dinero
necesario para acudir a la consulta con el jaibana, hecho que las pone
en vulnerabilidad frente al manejo oportuno de enfermedades como la
tuberculosis, el VIH y demás ITS, ya que se evidencia alto riesgo en la
comunidad para estas patologías, debido a la práctica creciente del
acceso a los servicios de trabajadoras sexuales y la promiscuidad con
mujeres indígenas y no indígenas de la mayoría de los hombres de la
comunidad.
También se constituyen en barrera de acceso para el restablecimiento
de los derechos de las mujeres indígenas el lenguaje, y los tramites
propios que demanda esta actividad. Las mujeres no logran diferenciar
entre una institución y la otra, los documentos de identidad no son una
prioridad en sus vidas, porque los hijos nacen en las comunidades y
muchas veces son enterrados en las comunidades; las fechas y lugares
de nacimiento son irrelevantes a la hora de la reconstrucción de la
historia personal, la atención en el proceso de crianza de los hijos e
hijas esta puesta en la transferencia de conocimiento sobre el desarrollo
de roles de la mujer y el hombre, lo que constituye las competencias
necesarias para asumir la familia y la vida en la comunidad.
Las pautas que marcan el crecimiento de los niños y niñas indígenas no
están dadas partir de fechas, estas se marcan por los cambios biológicos
que van presentando en su proceso de crecimiento y por las
responsabilidades que va a sumiendo al interior de la familia que se
diferencian de acuerdo al género, a las niñas por ejemplo les compete el
cuidado del tambo y de los niños pequeños en el hogar, mientras que el
niño desarrolla labores en el cultivo.
En los espacios de participación y toma de decisión la mujer establece
dialogo de pares con los hombres en la comunidad, asumiendo su
responsabilidad como sujeta de derechos y deberes, sin embargo se
evidencia que las mujeres mantienen la práctica cultural de delegar en
los hombres la representatividad, en especial cuando se trata de
espacios que implican la relación con el mundo occidental representado
en la institucionalidad territorial.
Las mujeres mantienen viva la lengua materna y hacen transferencia en
los procesos de crianza de la lengua y cultura a sus hijos e hijas.
Los hombres de la comunidad están identificado su papel en este nuevo
contexto territorial y familiar, que ha puesto en lo público y en la toma
de decisiones también a la mujer. El hombre por las condiciones propias
del territorio ya no ejerce su papel de protector territorial de la familia y
aunque en el territorio la relaciones hombre - mujer son cordiales, los
hombres están alejados de la responsabilidad de la preservación cultural
ancestral, sus vestuario y su modo de vida esta permeado por
referentes occidentales.
Para los hombres la trasformación del contexto territorial y la
fragmentación del tejido social ha generado la perdida de espacios
propios para el desarrollo cultural desde los roles que él debe cumplir
como protector y cazador. Este grupo poblacional ha sido afectado de
manera directa y sistemática por los actores del conflicto, quienes los
han sometido a la humillación pública a partir del desplazamiento de sus
territorios heredados ancestralmente, han aportado como grupo
generacional el mayor número de muertos, persecuciones,
reclutamiento, señalamiento, entre otras prácticas propias del conflicto
armado colombiano, en su comunidad. Lo que hace que se vea al
hombre indígena paralizado frente a su rol en la familia y enfrentando
patologías psicológicas y de comportamiento como el alcoholismo y el
tabaquismos entre otras.
Todo lo anterior, ha generado en ellos estados de vulnerabilidad
psicosocial, relacionados con la fragilidad que ellos han mostrado para
enfrentar las responsabilidades familiares y comunitarias tras los hechos
del conflicto, vulnerabilidad política, para asumir la defensa del territorio
y la cultura, en el establecimiento de medidas preventivas de nuevas
acciones de vulneración de derechos y medidas para el restablecimiento
del tejido social y comunitario.
Los hombres acceden con mayor facilidad al aprendizaje de la lengua
español, y se relacionan con asuntos políticos de la organización desde
temprana edad lo que les da mayor facilidad para incluirse en la cultura
occidental.
Tierra y el territorio
La relación con la tierra y el territorio es de apropiación a pesar de ser
ocupantes de buena fe en el territorio avalados por el resguardo de
Palmas; los indígenas de la comunidad de Coqueras expresan como
prioridad la necesidad de “una tierra propia”, que les permita
constituirse en resguardo, habitar y establecer ahí su vida en comunidad
de manera digna.
En el territorio tienen establecidos cultivos de pan coger, plátano, yuca y
maíz; también se cuenta con una escuela y un centro comunitario. Los
tambos están distantes uno del otro de acuerdo a las posilbilidades que
les da el territorio. Tienen animales domésticos y caballos, la comunidad
está atravesada por un rio que les provee del agua necesaria para las
labores domésticas y de cuidado personal.
La entrada a la comunidad se hace atravesando potreros ganaderos que
limitan con la puerta de entrada al resguardo. En general la relación con
el territorio es buena.
Etno educación
La escuela cuenta con un educador indígena y su esposa quien es
capunia pero habla la lengua materna, garantizando de esta manera que
los conocimientos impartidos en el proceso formativo desde la escuela
sean coherentes con la cosmovisión y cosmogonía propia del pueblo
indígena. Preocupación que ha mantenido el educador de la comunidad,
debido a su inquietud permanente por generar procesos que fortalezcan
la etnia desde la recreación de lo ancestral para la apropiación de las
nuevas generaciones de la cultura Embera Katio, que permita desde
esto resinificar la vida en comunidad como pueblo indígena.
Expresiones artísticas propias de la cultura
En la comunidad tienen conformados grupos de danza, música y tejido;
hay un gran interés por fortalecer estas prácticas como elementos que
fortalecen la cultura Embera Katio en la comunidad, de alguna manera
también se identifica el deseo de visibilizar la cultura propia en los
escenarios posibilitados desde la casa de la cultura municipal. La escuela
también se constituye como respaldo de estas
prácticas culturales ancestrales y abre espacios de formación que les
permitan a los niños y jóvenes garantizar el tiempo para la práctica de
estas.
Seguridad alimentaria:
La comunidad compra más del 90% de los productos que consumen en
sus dietas, no tienen semillas propias, sin embargo por familia intentan
mantener cultivo de especies de plátanos debido que este producto es el
que compone mayoritariamente la dieta de las comunidades.
Patrimonio cultural de la comunidad:
La caseta comunitaria, la escuela.
La lengua indígena Katia
En la comunidad se mantiene vigente el uso de la lengua materna
indígena Katio y en los espacios generados por la experiencia de
diagnóstico cultural se posibilito el uso permanente de esta para
garantizar una mayor compresión de los ejercicios por parte de todos los
miembros de la comunidad. En el uso de esta, se les observa cómodos,
el total de la comunidad genera mayor compresión de palabras la lengua
indígena Katio que el español, lo que dinamiza las actividades y
garantiza mayor participación de la comunidad en el proceso.
PROCESO DE LA EXPERIENCIA
En el proceso de sistematización de experiencia de diagnóstico cultural
en la comunidad de Coqueras, fue fundamental incorporar ejercicios que
permitieran la reflexión sobre las afectaciones individuales y colectivas
provocadas a causa del conflicto armado, que generan
afectaciones del orden psicosocial que se evidencian en la vulnerabilidad
política y cultural de las personas y la comunidad de manera no
consiente.
En la memoria de las familias aún se mantiene el recuerdo de los hechos
victimizaste, las mujeres por ejemplo no nombran al actor que provoco
el desplazamiento y cuando se aborda el tema estas expresan timidez
que en algunos momentos, puede ser leída como temor a enfrentar
estos hechos y temor a que se repitan.
Sin embargo, la cultura se constituye en el vehículo a partir del cual se
canalizan estos temores, favoreciendo la resiliencia comunitaria y la
adaptación al nuevo contexto territorial.
4.4 COMUNIDAD JAIQUERAZABI
Esta comunidad está habitada por personas víctimas del
desplazamiento, provenientes de diferentes veredas de Mutatá, quienes
se establecieron en el reguardo de Jaiquerazabi en el municipio de
Mutatá en el departamento de Antioquia.
En este nuevo territorio tuvieron que hacer resistencia a la vulneración
de sus derechos por parte de los actores armados, debido a que el
territorio donde se encuentra ubicado el resguardo reviste por su
ubicación gran importancia para la táctica de control territorial. Las
familias permanecieron pese a ello en el territorio.
Gobierno indígena
El resguardo indígena de Jaiquerazabi, cuenta con un gobierno propio
representado por el cabildo local, cargo que en la actualidad lo sustenta
una de las mujeres de la comunidad, hija de uno de los líderes históricos
de la comunidad quien fue asesinado por actores del conflicto en
compañía de su esposa.
El cabildo local tiene asiento en el cabildo mayor de Mutatá, la
gobernadora adelanta y direcciona acuerdos en la comunidad.
Protección de creencias
En la comunidad indígena, la espiritualidad esta permeada por la
teología cristina. En gran medida corresponde esto al acompañamiento
que realiza la comunidad de hermanas Lauras en la vida comunitaria.
Además también se evidencia que están influenciados por culturas, que
aunque no logran entender, apropian elementos en las prácticas
tradicionales aprendidas, tal vez a través de la televisión o la relación
con la población no indígena vecina del resguardo. El Jaibaná de la
comunidad combina para los cantos de jai 4 elementos propios como
plantas y cadenas, con cristos e imágenes de la santa Laura y un buda
en plástico, lo que constituye el altar para el ritual.
Otro de los cambios en el ritual es el consumo de aguardiente y cerveza
en vez de chicha como correspondería a la práctica tradicional, lo que
incrementa el costo del ritual y ha ido generando en la comunidad poca
demanda de este tipo de servicio debido a la carencia de recursos, esto
obliga que la persona indígena deba consultar la medicina occidental
aunque en su ser, ellos identifiquen que las enfermedades que padecen
son tradicionales relacionadas con espíritus y poco es lo que puede
hacer la medicina occidental en su proceso de sanación, sin embargo
cuando las patologías son asintomáticas, las personas ahorran el dinero
requerido para que se les haga sanación en un canto de jai.
Una mujer comentaba que si su cuerpo resistía a la serpiente que se
come los hijos que ella engendraba y los dolores que le producían esto
en su pelvis ella viviría para el momento en que su marido consiguiera el
recurso necesario para hacer el canto del Jai, “médico no cura serpiente,
y si no hay plata para comprar las cosas para jaibaná, puedo morir”.
Libertada de culto
En la comunidad se cree en la existencia de enfermedades propias de
jai, por ello consultan al jaibaná de la comunidad cuando se cuenta con
los recursos económicos para esto.
4 Ritual de sanación
Protección de género
Los hombres y las mujeres en este resguardo mantienen relaciones de
par en los espacios de toma de decisión y conservación para el
desarrollo de actividades comunitarias, la mujer participa en igualdad de
condiciones que los hombres y sus aportes y orientaciones en el que
hacer comunitario son respetados por los hombres.
No se mencionó en los ejercicios realizados, en especial cuando se
indago por el papel de la mujer, que se presentaran hechos de violencia
física a la mujer a manos de sus compañeros permanentes y se observa
que hay mayor compromiso de los hombres en los procesos de crianza
de los hijos, aclarando además que el Embera de este resguardo
abandona con frecuencia a la familia que tiene conformada por constituir
una nueva familia casi siempre con mujeres mucho más jóvenes que su
compañera actual y que ellos. Esto hace que el fenómeno de madre
solterísimo sea muy común entre las mujeres de la comunidad,
constituyéndose en la actualidad en una problemática porque en otrora,
el acceso a los alimentos era más fácil y existía una relación comunitaria
que se solidarizaba con las necesidades de las mujeres, además que la
mujer abandonada por su compañero pronto conseguía un nuevo
compañero que la asumía con su grupo familiar, todo ello no significaba
que la mujer no trabajara para garantizar los alimentos, lo que si es que
había un nuevo hombre protector en el tambo.
Otros hallazgos en esta temática son:
Las mujeres conocen la jurisprudencia indígena y son
empoderadas en la defensa de sus derecho
Consolidan grupos de trabajo artesanal a partir de un capital
semilla entregado por el DPS y el acompañamiento de Artesanías
de Colombia, en el que mantienen un importante nivel de
prodición artesanal que es comercializada en dos puntos de venta
uno ubicado en el resguardo de Jaiquerazabi cerca de la vía
Urabá - Medellín y participan de la feria organizada por esta
última institución en la ciudad de Bogotá. Los hombres de la
comunidad se incluyen en estas labores desde hacer las
artesanías hasta la comercialización.
Los hombres de este resguardo son personas muy empoderadas en el
conocimiento de la jurisprudencia indígena y están permanentemente
ligados a procesos generados desde el ente territorial participando
activamente de las actividades propuestas por el cabildo mayor. Se
constituyen como consejeros de procesos.
Sin embargo, la comunidad de hermanas Lauras hacen énfasis en lo que
ellas han llamado la pérdida de valores, prácticas corruptas en el
manejo de recursos por parte de los hombres de la comunidad que
asumen el espacio de liderazgo; también indican que hay una creciente
problemática de consumo de sustancias psicoactivas por parte de los
hombres jóvenes de la comunidad y que además se mantiene algún tipo
de control en la comunidad por parte de actores armados del conflicto.
La relación institucionalidad – reguardo se da en ambientes de
cordialidad, sin embargo la comunidad ha insistido que existen disenso
en temas como la incidencia de la institucionalidad en las decisiones
relacionadas con el manejo comunitario, y la falta de implementación de
enfoque diferencial en los procesos de apoyo que se gestan en la
comunidad, en especial en los relacionados con los cultivos porque,
nombran ellos, se debe sembrar como tradicionalmente el Embrea Katio
siembra, desarrollando los rituales propios preparatorios de la tierra y
contando con el permiso de los espíritus que la habitan, también es muy
importante respetar los tiempos para la siembra que están marcados
por los cambios de la luna.
La comunidad reconoce la importancia de la respuesta en el
restablecimiento de derechos que ha hecho el gobierno nacional y
plantean la necesidad de proyectar acciones que les permitan dialogo de
pares entre la cultura y las políticas públicas, que generen mayor
impacto en los proyectos que se desarrollan en este resguardo.
Tierra y el territorio
La apropiación territorial para los y las habitantes del resguardo es un
proceso paulatino que pareciera lento, pero es un proceso natural de las
culturas enfrentadas a transformaciones involuntarias de prácticas por
las condiciones del contexto. Hace poco tiempo que estas familias
habitan el territorio, por lo que aún está vigente en la memoria colectiva
el recuerdo del territorio anterior al desplazamiento y de alguna manera
esta idealizado debido a que este territorio cumplía con las condiciones
para el desarrollo de las cultural del indígena katio; por ello reconstruir
el tejido social desde una perspectiva de urbanidad implica para Embera
Katio nuevos retos (manejo de residuos, pago de servicios públicos,
comercialización de artesanías, manejo de iniciativas productivas, abono
de cultivos) para los cuales no se encontraba preparados como cultura.
La infraestructura de la comunidad corresponde a la planificación
urbanística de la propuesta de pueblo indígena que además fue
concertada con la comunidad. Se cuenta con una infraestructura para la
escuela, el CAI para la atención de la primera infancia, una casa de
gobierno, un puesto de salud, un auditorio, una cancha para micro
futbol, dos parque infantiles, una pescadería, tiene establecidas zonas
verdes y zonas para el cultivo.
Etno educación
El cuerpo de educadores lo componen dos religiosas de la comunidad de
religiosas de la madre Laura y dos educadores mestizos, quienes no
hablan lengua materna. No se indago en este ejercicio por la maya
curricular de la institución, pero en un de los ejercicios se nombró que el
Jaibaná de la comunidad todos los viernes tiene dos horas de formación
cultural con los niños y las niñas de la escuela.
Expresiones artísticas propias de la cultura
En el resguardo se desarrolla un proyecto de rescate de las artesanías
como elemento que comunica la cultura propia, de esta manera se han
adelantado procesos de investigación que les permiten a los y las
artesanos identificar los significados de los símbolos que se plasman en
las artesanías y cargar de significado esos elementos que aunque se
comercializaran, se constituyen en representativos de la cultura.
Seguridad alimentaria
La comunidad compra más del 90% de los productos que consumen en
sus dietas, no tienen semillas propias, sin embargo por familia intentan
mantener cultivo de especies de plátano, debido que este producto es el
que compone mayoritariamente la dieta de las comunidades.
Aunque reconocen que no se hizo el aprovechamiento esperado de los
insumos para cultivos entregados por el DPS en otros momentos, la
comunidad mantiene el cultivo de peces y se propone reiniciar el
proceso de cultivo de especies menores y el establecimiento de trojas y
eras para la siembra de hortalizas y verduras.
Una de las problemáticas que afecta esta iniciativa en la comunidad es
el manejo de los animales domésticos que se comen los cultivos sin que
se encuentre una salida rapida a este asunto por parte de la comunidad.
Patrimonio cultural de la comunidad
Jaibana, la memoria histórica comunitaria y cultural y los cantos del JAI.
La lengua indígena Katio
En la comunidad se mantiene vigente el uso de la lengua materna
indígena Katio y en los espacios generados por la experiencia de
diagnóstico cultural se posibilito el uso permanente de esta para
garantizar una mayor compresión de los ejercicios por parte de todos los
miembros de la comunidad. En el uso de esta se les observa cómodos,
al total de la comunidad genera mayor compresión de los conceptos en
la lengua indígena Katia que en el español, lo que dinamiza las
actividades y garantiza mayor participación de la comunidad en el
proceso
PROCESO DE LA EXPERIENCIA
En el proceso de sistematización de experiencia de diagnóstico cultural
en el resguardo Jaiquerazabi, estuvo transversalizado por las preguntas
que implican para este grupo poblacional esta nueva relación territorial.
En los ejercicios se mostró confianza y se habló claramente de las
condiciones generadas por el conflicto que motivaron el desplazamiento,
de la misma manera como se reflexionó con respecto a las
problemáticas actuales que enfrentan en la comunidad, de los deseos y
sueños en el territorio.
Es importante anotar que se expresa mucha nostalgia cuando se
abordan temas de seguridad alimentaria y protección familiar porque
estos nuevos retos a los que se enfrenta el Embera Katio, hacen que se
sienta vulnerable frente a una situación que no sabe cómo manejar y
delegue mucha responsabilidad del direccionamiento comunitaria al
acompañamiento de la comunidad de las hermanas Laura.
4.5 REGUARDO IBUDO LAS PLAYAS
Esta sufrió un desplazamiento interno causado por el conflicto armado,
además de encontrarse en zona de riesgo debido la presencia de actores
del conflicto en el territorio.
Gobierno indígena
La comunidad tiene gobierno propio, representado por un cabildo
menor, quien da cumplimiento al reglamento interno y adelanta
gestiones para la concesión de recursos en la comunidad, el cabildo
cuenta con la legitimidad comunitaria para orientar a la comunidad en la
resolución de conflictos y toma de decisiones.
Protección de creencias
Esta comunidad reflexiona permanentemente la cultura y fortalece las
prácticas tradicionales de Jaibanismo, música y danza, en las asambleas
comunitarias, la comunidad reconstruye desde la oralidad la historia del
pueblo Katio en el municipio de Apartadó.
Libertada de culto
En la comunidad se mantiene las creencias propias de la cultura, se
practican y se transmiten mayormente los conocimientos de la medicina
tradicional.
Protección de género
Los hombres y las mujeres en este resguardo mantienen relaciones de
par en los espacios de toma de decisión y conservación para el
desarrollo de actividades comunitarias, la mujer participa con igualdad
de condiciones que los hombres y sus aportes y orientaciones en el que
hacer comunitario son respetados por los hombres.
La familia sigue siendo responsabilidad de la mujer y se mencionó en el
ejercicio que se ha venido problematizando en la comunidad el maltrato
físico a la mujer, pero el abandono por parte de los hombres a los hijos
continuó como práctica tradicional.
Las mujeres hablan el español como segunda legua pero presentan
dificultad para entender algunos conceptos: ellas cultivan plátano, crían
gallinas y cerdos para el sustento familiar, de la misma manera como
cultivan la yuca, el sapote y el mango para la comercialización, además
algunas viven de la venta de artesanías en las calles del municipio de
Apartadó.
Los hombres de este resguardo son personas empoderadas en el
conocimiento de la jurisprudencia indígena y están permanentemente
ligados a procesos generados desde el ente territorial y participan
activamente de las actividades propuestas.
Tierra y el territorio
Esta comunidad presenta mayor apropiación territorial y cultural de esa
manera su relación con elementos de la cultura occidental es desde su
cultura, cuidando especialmente no permear las prácticas culturales
propias. Sin embargo por la escases de la palma, la vivienda es una de
los elementos que ha debido transformarse porque, según lo relatan, las
casas en zinc duran más tiempo y eso resulta mejor para su economía.
Etno educación
La comunidad cuenta con docentes de la etnia Embera Katio, quienes
hablan la lengua materna del pueblo Katio, pero esto no es garantía de
que la educación impartida en la institución corresponda a procesos
etnoeducativos debido a que las demandas en el sistema educativo
establecen procesos formativos homogéneos que alcancen las
competencias en la evaluación de procesos.
Expresiones artísticas propias de la cultura
En el resguardo se desarrollan proyectos culturales, tradición oral y
artesanías que mantienen vigente la cultura en el territorio,
conformaron también el grupo musical ADICHICI (grillo), que es fusión
de música Embera Katio con percusión afrocolombiana, grabaron su
primer sencillo en el año 2010 con el apoyo de la alcaldía Municipal y la
ciudadela educativa y cultural “Puerta del Sol”.
Seguridad alimentaria
La comunidad ha crecido demográficamente, sin que se halla hecho
ampliación de resguardo por lo que se ha manifestado la necesidad de
adelantar este proceso debido a que la tierra para el cultivo ya es poca y
la que se tiene destinada para esta función es improductiva por que
según la tradición indígena ya se encuentra cansada.
En esta comunidad la dieta es variada y se adiciona carbohidratos y
vitaminas provenientes de las frutas por el fácil acceso que tienen a las
cosechas tradicionales de mango, zapote, guayaba entre otras especies
frutales.
Patrimonio cultural de la comunidad
Conocimiento de la medicina tradicional, de plantas curativas, la
memoria histórica del municipio de Apartadó.
La lengua indígena Katio
En la comunidad se mantiene vigente el uso de la lengua materna
indígena Katio, en los espacios generados por la experiencia de
diagnóstico cultural se posibilito el uso permanente de esta para
garantizar una mayor compresión de los ejercicios por parte de todos los
miembros de la comunidad. En el uso de esta se les observa cómodos, y
esto genero mayor compresión de los conceptos del ejercicio al total de
la comunidad.
PROCESO DE LA EXPERIENCIA
La comunidad identifico este ejercicio, como propio debido a los espacios
de reflexión comunitaria que se han generado en el resguardo en torno
a la cultura y lo nutrió con los resultados obtenidos en la comunidad.
En la memoria oral de los y las participantes del proceso se identificó
que tiene con precisión las fechas y los hechos de la historia de la
comunidad, este nivel de apropiación del ejercicio por parte de la
comunidad, nos pone en el lugar de facilitadores del proceso quienes
además de proponer la metodología recogen y sistematizan la
experiencia.
Se suscitaron algunas propuestas para impulsar el gusto por la música
propia e incentivar los jóvenes a que compongan y graven discos con la
música embreara Katio.
4.7 ETAPA ACTUAL
Este ejercicio de sistematización diagnostica permito, que se identificara
la necesidad de generar espacios para la reflexión comunitaria
potencializadores de la cultura, que permitan el restablecimiento del
tejido social, enfrentar las pérdidas a causa del conflicto en vía de la
construcción de un plan de vida que marque los lineamientos que les
permitan comenzar a resolver las problemáticas territoriales que
enfrentan en la actualidad en la búsqueda de establecerse en un
territorio que pueda ser nombrado como propio y a partir del cual
puedan construir comunidad.
Se propone el siguiente cronograma de actividades:
5. LECCCIONES APRENDIDAS Y RECOMENDACIONES
La reflexión de la cultura en comunidades indígenas víctimas del
conflicto implica, revisación del el hecho victimizante y valorar el daño
ocasionado. La cultura para los pueblos indígenas participantes de la actividad
implica el todo, es el elemento que trasversaliza la vida en las
comunidades. Darle lugar a lo sicosocial permite considerar aspectos desde lo
subjetivo que se mantiene silenciados en lo colectivo y que es
necesario evidenciar para enfrentar las problemáticas que afectan al
individuo a las vez a lo colectivo
Las dinámicas comunitarias de las comunidades en principio no dejan
ver las diferencias que se dan por género y generacionales que se
presentan en los territorios, pero cuando se establece relación con la
comunidades es sencillo identificar la necesidad de indagar los diferentes puntos de vista, debido a que la motivación de los hombres
en ocasiones dista de la motivación de las mujeres para participar de
este tipo de ejercicios