Las elecciones de 1940 fueron sangrientas y
desencantaron a muchos. El general Manuel Ávila
Camacho había sido impulsado por Lázaro Cárdenas
como candidato del Partido de la Revolución
Mexicana contra Juan Almazán, quien fue derrotado
en una jornada electoral llena de irregularidades y con
un saldo final de decenas de muertos y centenares de
heridos.
En 1940 el 64% de la población mexicana era analfabeta
con una esperanza de vida de 41 años
aproximadamente, el país era un terreno fértil para los
contrastes y las contradicciones, por ello la búsqueda deuna unidad.
Durante su administración, el discurso oficial fue a favor
de la unidad nacional y el modelo socialista fue olvidado.
El gobierno fue apoyado por organizaciones de diversos
ámbitos.
El hecho de reunir en un mismo evento a éstos
personajes, quienes tenían profundas diferenciasideológicas, llevaba a la intención de hacer público el
logro de la unidad nacional y de que tal acontecimiento
sirviera de ejemplo para quienes persistían en la discordia.
Como una muestra
de que la Unidad
Nacional pretendía
erradicar los
divisionismos
políticos, el 15 de
septiembre de
1942, Ávila Camacho
convocó una
asamblea de
acercamiento
nacional a la que
fueron invitados todos
los ex-presidentes.
Para el mes de junio de
1942, por consecuencia del
hundimiento de un barco
mexicano por un submarino
alemán, declara la guerra a
las potencias del eje
(Alemania, Italia y Japón).
México lucha al lado de los
aliados en la segunda
guerra mundial (1939-1945).
La guerra impulsó la
economía de México, la
industria nacional crece un
38% ante la escases de
algunos productos
importados y l a demandainternacional de otros.
Ésta época fue conocida como la ‘época de la Unidad
Nacional’, fue una etapa en la que hubo crecimiento
económico y estabilidad política. Hubo un considerable
impulso a la educación, al desarrollo de la industria y al
crecimiento de la población. El PRI vio la luz del día yesto marcaría por mucho la historia política nacional.
A partir de 1940 México inicio una etapa llamada el
milagro mexicano, esta etapa se caracterizó por ser de
un crecimiento sostenido y fue el cambio hacia la
formación de una nación moderna e industrializada.
La segunda guerra mundial dio un gran estímulo al
crecimiento de la economía mexicana. De 1940 a 1956se da en México un período decrecimiento hacia
afuera, basado en el dinamismo del sector primario.
Esta política puede definirse como crecimiento sindesarrollo, ya que el número de industrias del país
aumentó, pero sin la base sólida que es la libre
competencia, que le permitiera desarrollarse
económicamente. Durante el mandato de Ávila
Camacho (1940-1946) se observó una notable
estabilidad política y un crecimiento económico. Entre
1940 y 1945, el PIB creció a un ritmo de 7.3 por
ciento, índice nunca antes alcanzado en la etapa
postrevolucionaria.
Crecimiento hacia afuera
Los regímenes presidenciales de Manuel Ávila Camacho y
Miguel Alemán Valdés proporcionaron los medios para
alentar el crecimiento económico, la consolidación del
mercado interno y la inserción de México en la economía
mundial. La actividad industrial registró un vigoroso
crecimiento. La tasa de crecimiento del PIB (Producto
Interno Bruto) alcanzó entre 1947 y 1952 un promedio anual
del 5.7%, con un gran crecimiento en la producción de la
energía eléctrica y el petróleo y también de la industria
manufacturera y de construcción.
Crecimiento hacia dentro
De 1956 a 1970 la economía mexicana gira ciento
ochenta grados creciendo hacia adentro,, vía lasustitución de importaciones; es decir, México debía
producir lo que consumía. La economía mexicana
estuvo basada en el dinamismo del sector industrial,
contrayendo la estabilidad de precios y ajustándose a
los problemas productivos y financieros por los que pasó
el país.
El crecimiento industrial en el período 1940 -1970 mantuvo
un ritmo de crecimiento sostenido, aunque basado en un
mercado cautivo que le proporcionaba la política
proteccionista diseñada por el Estado, situación que trajo
como consecuencia el desarrollo de empresas sin
competitividad con el exterior, que les impidió consolidarse
a través de la exportación hacia mercados extranjeros;
condición que impediría la creación de una verdadera
industrialización moderna e independiente que
contribuyera el desarrollo social del México
posrevolucionario.
En la década de los setenta el presidente Luis Echeverría
implementó el último intento por revitalizar el estado
populista. En lo económico las reformas estaban
destinadas a sustituir el modelo de estabilización; el
estado debía fortalecer su función de intervención pararegular las desigualdades económicas y sociales
derivadas del desarrollo. La realización de dichas
reformas exigía la integración vertical de procesos
sustitutivos de importaciones estimulando la producción
de bienes de capital e intentando resolver el déficit
crónico de la balanza de pagos que era una de la
características inherente al modelo. Este modelo se
denominó "Desarrollo Compartido" y la pretensión era
que mediante un gasto público enorme y creciente sealcanzara una mayor justicia social.
En 1971 el país entraba en recesión. Se resquebrajó el
sistema monetario de Estados Unidos y era el momento
adecuado para la libre rotación del
peso, lamentablemente se dejó pasar esa oportunidad
por temores inflacionarios. El PIB dejaba aquellas tasas
de crecimiento espectacular. La posibilidad de revueltas
sociales por los problemas políticos y ahora por la
situación económica estaba latente; había que virar la
política económica usada.
El presupuesto público creció como nunca con la
esperanza de revitalizar la economía. El destino fuegasto de capital pero sobre todo, gasto corriente. Se
observaron altas tasas de crecimiento en el gasto
gubernamental, de 21% en 1972, y en la cantidad de
dinero en circulación. Estas reformas se aplicaron
cuando la economía había recuperado ya eldesempeño ascendente, de esta manera muchos
indicadores no se vieron alterados. La inflación fue de
3% y el PIB aumentó 8%
Los programas que se adoptaron cubrían una enormegama de actividades. Existía, por ejemplo, la Comisión
Nacional de las Zonas Áridas. Estos proyectos fantásticos
y, como se puede suponer, de completa inutilidad,
costaban grandes cantidades al erario. Si se suman los
recursos desperdiciados en comisiones, institutos,secretarías de estado, empresas paraestatales y
programas fallidos que emprendió la banca de
desarrollo, se llega a la debacle financiera con la que
cerró el sexenio de Echeverría. La ingeniería social
manejada por la burocracia es una forma sumamenteineficaz de atacar cualquier problema social,
particularmente la pobreza. Las instancias que han
fracasado son muchísimas y todas ellas han conllevado
un elevado costo para la sociedad.
De la Madrid llegó al poder en
una de las épocas más difíciles
del país, mucho debido a su
antecesor José López
Portillo, quien nacionalizó la
banca tres meses antes de salir
del poder tras dos sexenios de
gastos excesivos. Como
resultado, la inflación subió a un
promedio de 100% cada año, el
empleo informal creció a 20%
entre 1983 y 1985 y hubo caídas
drásticas en producción, sobre
todo en industrias
gubernamentales, ya para ahí
entoncesanticuadas, crecimiento del PIB
fue erróneo con altibajos y
disminuyó el poder adquisitivo.
Para resolver tales problemas, emprendió la
Renovación Moral de la sociedad, elaboró un Plan
Global de Desarrollo, estableció a nivel constitucionalun sistema de planeación democrática y más
importante, inició con la apertura económica, la
desregularización y descentralización así como la
privatización de empresas estatales, algo que seguiría
bajo su sucesor; durante su administración, el númerode paraestatales se redujo de 1155 en 1982 a 413 en
1988
Ante la severa crisis económica
(donde se alcanzó el 3100 % de
devaluación del peso), se
establecieron los Pactos de
Crecimiento Económico con los
diversos sectores
sociales, mediante los cuales el
gobierno subsidiaba parte de los
precios de los productos básicos
y los productores/distribuidores se
comprometían a no
aumentarlos. En enero de
1986, aproximadamente tres
años de negociaciones, México
logra ser admitido
al GATT, siendo el punto másfuerte de esta administración.
En 1982 el pago anual por pago de intereses de la deuda
externa era de 14 000 millones de dólares, entre 1983 y
1988 se destinó casi el 7 por ciento del PIB para su pago, el
monto de lo destinado era casi el equivalente a lo
destinado en salud y educación para todo el país, para
inicio del sexenio de Salinas el monto de la deuda era del
45 por ciento del PIB, lo cual hacia necesario una
reducción de esta deuda para lograr un crecimiento
económico
El sexenio de Carlos Salinas marcó
un claro parte aguas respecto de
las gestiones priistas
previas, especialmente las de Luis
Echeverría Álvarez y José López
Portillo, en la medida que rompió
con el discurso y la ideología
del nacionalismo
revolucionario que todavía
con Miguel de la Madrid trató de
presentarse como el soporte
ideológico del priismo.
Zedillo y Salinas se culparon
mutuamente de la crisis. Carlos
Salinas, responsabilizó al
llamado error de diciembre, en
diciembre de 1994, que fue la
táctica de libre flotación de la
paridad peso-dólar, la cual había
estado controlada en el sexenio de
Salinas. La libre flotación causó una
fuga masiva de divisas ante la
situación política del país: además
del levantamiento del Ejército
Zapatista de Liberación
Nacional, asesinato deColosio, problemas financieros, etc.
La presidencia de Ernesto Zedillo estuvo marcada por
una de las crisis financieras del siglo con repercusionesinternacionales llamada Efecto Tequila.
Y es que lo que vivimos en
el 2000 no fue la
transición, sino laalternancia, que a su vez se
inscribe dentro del proceso
de transición, aunque sin
completarlo. Y es que
aunque, ya por segundosexenio consecutivo, la
Presidencia de la República
fue ocupada por un
funcionario emanado de
Acción Nacional, el grueso
del andamiaje político e
institucional sigue siendo el
mismo del priato.
Aquella noche del 2 de julio, cuando las cadenas
televisivas dieron a conocer el triunfo del panistaVicente Fox Quezada, parecía que habíamos
alcanzado por fin la transición política, sin embargo, a 9
años de distancia hemos comprobado que dichos
pronósticos eran demasiado optimistas y que aún falta
mucho por andar antes de desarticular por completo lasestructuras del viejo régimen.
Y ahora les ha sido devuelta la silla de una forma
meramente burocrática, pues parece que nunca se les
fue arrebatada.