Todos los ecosistemas están sujetos a un régimen de disturbios naturales y antrópicos, la combinación de éstos establece una dinámica espacial y temporal en los paisajes (Pickett & White 1985, Collins 1987). Por ejemplo, algunos ecosistemas presentan un régimen de disturbio complejo que incluye fuego, pastoreo y disturbio del suelo por animales; cada uno de los cuales difiere en escala, frecuencia e intensidad. Los principales disturbios naturales son: deslizamientos, vulcanismo, huracanes, tormentas, lluvias y vientos fuertes, inundaciones, heladas, disturbios producidos por animales y fuegos naturales. Disturbios antrópicos se relacionan con ganadería y agricultura, minería, deforestación, quemas, la construcción de obras civiles (embalses, oleoductos y carreteras), explotación de especies, siembra de especies forestales exóticas, invasiones biológicas. La tabla 1 presenta los disturbios antrópicos y naturales más frecuentes en los ecosistemas colombianos.
Tabla 1. Principales disturbios antrópicos y naturales en los ecosistemas de Colombia.
Disturbios antrópicos Ecosistemas terrestres Ecosistemas de agua dulce Ecosistemas costeros
Deforestación
Sistemas de producción extensiva e intensiva
(agricultura y ganadería)
Potrerización
Sistemas productivos forestales no sostenibles
Invasiones biológicas
Cultivos ilícitos
Quemas
Desecación de turberas
Minería
Contaminación
Sobreexplotación de recursos biológicos
Desarrollo industrial y urbanístico
Modificación de regímenes hidrológicos
Sedimentación
Pesca con dinamita y/o red de arrastre
Disturbios naturales
Huracanes
Terremotos y maremotos
Fuegos
Inundaciones
Deslizamientos
Vulcanismo