EXCURSIÓN A ZALATAMBOR El día 27 de septiembre de 2010 visitamos el castillo de Zalatambor. Fuimos en el bus que va de Abárzuza a Estella. Tuvimos que andar un buen rato desde la estación de autobuses hasta la iglesia de Santa María Jus del Castillo que es una iglesia que está justo debajo del castillo y que fue una antigua sinagoga. Nos contaron historias sobre la ciudad de Estella, que fue una ciudad medieval que reunía todas sus características: está asentada junto a un río (Ega) y es paso del Camino de Santiago. Comenzamos la larga caminata a la cima; mientras íbamos subiendo, Iciar(que era nuestra guía) nos iba explicando los sucesos que ocurrieron en aquella zona. Nos explicó que aquel castillo era un castillo roquero, lo que significa que su base no era de tierra si no de piedra. Ese castillo en el siglo XII se llamaba Lizarrara y posterior mente se amplió y le cambiaron el nombre a Zalatambor. El castillo de Zalatambor no era el único de la zona también estaba el castillo de Belmecher y la torre de Lizarrara. Nos encontrábamos ya en la mitad de la pendiente con la bodega del castillo. Fue tallada en la misma roca. Entramos en ella y nos dimos cuenta de que se estaba muy fresco. Luego nos asomamos por un mirador desde donde se veía muy bien la iglesia de San Pedro de la Rúa que estaba en obras y se veía también mucho zumaque que era un árbol que lo trajeron los árabes y lo usaban los curtidores. Ahí nos hicieron un pregunta y el que la acertara se ocupaba de llevar la bandera del castillo de Zalatambor hasta la cima. Seguimos ascendiendo, nos contaron la historia de Teobaldico (que era el hijo del rey):”Un día Teobaldico estaba jugando con su niñera, cuando se cayó de la peña abajo, la niñera gritó:¡OH NO, TEOBALDICO SE HA DESPEÑADO! Y pensando que le iban a culpabilizar a ella, decidió despeñarse también. Iciar , nos contó que la reina le mandó hacer una bañera al mejor carpintero de Estella. Como ya sabéis, la madera no es impermeable ¿no? Entonces lo que hacían para impermeabilizarla era mezclar clara de huevo, polvo de ladrillo y caldo de pescado y conseguían un betún especial. Nos paramos en un zona donde nos dejaron coger restos de cerámica y de huesos de animales que comían en la Edad Media. Todos salimos con huesos y cerámicas que nos llevamos al colegio, de recuerdo .

Ascendimos un poco más hasta llegar al aljibe que es un lugar donde se almacenaba el agua de la lluvia. El aljibe tenía forma de bóveda y para impermeabilizarlo hacían lo mismo que en la bañera de la reina; además echaban barbos para que se comieran las bacterias del agua. Desde el aljibe observamos Estella y los alrededores. ¡Por fin llegamos a la cima! Allí había una gran bandera del castillo. Se contemplaban unas maravillosas vistas. Nos contó Iciar cómo se comunicaban de un castillo a otro. Asía lo hacían con el castillo de Villamayor de Monjardin y con el de Lerín por medio del humo, con espejos y, a la noche, con el fuego. A la bajada los pies no podían parar así que todos bajábamos corriendo pero a Miguel se le olvidó la mochila en la cima y nuestra tutora Mª Carmen subió con él a recogerla. Abajo, cogimos nuestros almuerzos y ¡A COMER! la guiá sacó un paracaídas gigante e hicimos un juego. A las 12:30 fuimos a la parada del autobús que está en frente del ayuntamiento. A las 13:00 el autobús nos recogió y a las 13:15 ya estábamos en Abárzuza y nuestras madre esperándonos. ¡Y ASÍ TERMINÓ LA EXCURSIÓN!