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XXX Reunió Cercle d'Economia DIVENDRES 30 | HOTEL MELIÁ SITGES | PART 1 Sesión 3. Para hacer que la economía funcione y cree ocupación Joan Rosell, Presidente de la CEOE Rossell se refirió en el inicio de su intervención a la crisis como a un fenómeno que nadie fue capaz de predecir y que no podrá considerarse superado hasta que se corrijan los graves índices de paro que ha causado. A continuación, el Presidente de la CEOE se propuso reflexionar sobre qué ha pasado antes, durante y después de la crisis en base a una serie de indicadores. En primer lugar, apuntó que entre 2000 y 2008 España experimentó un crecimiento exponencial, equivalente a 30 puntos de PIB. El conjunto de la economía mundial creció en ese mismo periodo 44 puntos. Luego, durante la crisis, España perdió 6 de esos puntos, en un periodo en que Alemania, por ejemplo, creció en 3 puntos. Consolidando estos dos periodos tan divergentes, se obtiene que sin embargo que, entre 2000 y 2013, España ha experimentado un crecimiento del 23,7%, Alemania del 17,4%, Francia del 16,9% y el conjunto del mundo del orden del 59%. Por lo que respecta a los países emergentes, China ha multiplicado cada ocho años su PIB en paralelo a una transformación política cuyo ritmo puede resultar difícil de entender desde Occidente, pero que según Rossell no debemos menospreciar. Estados Unidos ha seguido también una evolución digna de mención que ha culminado en su reindustrialización, a la que ha contribuido la actuación en ámbitos que habían lastrado históricamente su competitividad como la cuestión eléctrica. La evolución de los Estados Unidos se ha caracterizado también por su victoria en la batalla tecnológica, siendo hoy en día la avanzadilla indiscutible de la innovación. En el capítulo monetario, la Reserva Federal ha lidiado con la crisis haciendo todo lo necesario para apagar sus múltiples incendios, hasta multiplicar por cuatro sus activos a costa de embarcarse en sucesivos y diversos rescates. Sin embargo, y pese a estos factores, Estados Unidos no ha creado un gran volumen de ocupación, si bien es cierto que tampoco ha destruido empleo. A esta realidad se suman además dos problemas de su economía: su déficit presupuestario y su déficit corriente, ambos en vías de solución. Rossell también echó en falta el acometimiento de algunas reformas pendientes, pero elogió en definitiva la demostración de flexibilidad y capacidad de consenso de Estados Unidos, clave en su rápida y efectiva respuesta a la crisis. Analizada la realidad china y estadounidense, el Presidente de la CEOE centró su análisis a continuación en Europa, y, más concretamente, en el caso alemán. En 2002, Gerhard Schröder acometió al frente de una gran coalición de gobierno una serie de reformas profundas para flexibilizar la economía alemana. Su principal reto era vender más en el exterior, y su balance ha sido muy positivo: de representar un 25% del PIB en 1995, hoy las exportaciones constituyen el 50% de la producto interior bruto alemán.

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XXX Reunió Cercle d'Economia DIVENDRES 30 | HOTEL MELIÁ SITGES | PART 1 Sesión 3. Para hacer que la economía funcione y cree ocupación

Joan Rosell, Presidente de la CEOE Rossell se refirió en el inicio de su intervención a la crisis como a un fenómeno que nadie fue capaz de predecir y que no podrá considerarse superado hasta que se corrijan los graves índices de paro que ha causado. A continuación, el Presidente de la CEOE se propuso reflexionar sobre qué ha pasado antes, durante y después de la crisis en base a una serie de indicadores. En primer lugar, apuntó que entre 2000 y 2008 España experimentó un crecimiento exponencial, equivalente a 30 puntos de PIB. El conjunto de la economía mundial creció en ese mismo periodo 44 puntos. Luego, durante la crisis, España perdió 6 de esos puntos, en un periodo en que Alemania, por ejemplo, creció en 3 puntos. Consolidando estos dos periodos tan divergentes, se obtiene que sin embargo que, entre 2000 y 2013, España ha experimentado un crecimiento del 23,7%, Alemania del 17,4%, Francia del 16,9% y el conjunto del mundo del orden del 59%. Por lo que respecta a los países emergentes, China ha multiplicado cada ocho años su PIB en paralelo a una transformación política cuyo ritmo puede resultar difícil de entender desde Occidente, pero que según Rossell no debemos menospreciar. Estados Unidos ha seguido también una evolución digna de mención que ha culminado en su reindustrialización, a la que ha contribuido la actuación en ámbitos que habían lastrado históricamente su competitividad como la cuestión eléctrica. La evolución de los Estados Unidos se ha caracterizado también por su victoria en la batalla tecnológica, siendo hoy en día la avanzadilla indiscutible de la innovación. En el capítulo monetario, la Reserva Federal ha lidiado con la crisis haciendo todo lo necesario para apagar sus múltiples incendios, hasta multiplicar por cuatro sus activos a costa de embarcarse en sucesivos y diversos rescates. Sin embargo, y pese a estos factores, Estados Unidos no ha creado un gran volumen de ocupación, si bien es cierto que tampoco ha destruido empleo. A esta realidad se suman además dos problemas de su economía: su déficit presupuestario y su déficit corriente, ambos en vías de solución. Rossell también echó en falta el acometimiento de algunas reformas pendientes, pero elogió en definitiva la demostración de flexibilidad y capacidad de consenso de Estados Unidos, clave en su rápida y efectiva respuesta a la crisis. Analizada la realidad china y estadounidense, el Presidente de la CEOE centró su análisis a continuación en Europa, y, más concretamente, en el caso alemán. En 2002, Gerhard Schröder acometió al frente de una gran coalición de gobierno una serie de reformas profundas para flexibilizar la economía alemana. Su principal reto era vender más en el exterior, y su balance ha sido muy positivo: de representar un 25% del PIB en 1995, hoy las exportaciones constituyen el 50% de la producto interior bruto alemán.

También se inició una exitosa política de inversiones selectivas en países emergentes y se potenció el contrato a tiempo parcial, que representa el 27% del total de contratos del país. Al cabo de esta agenda reformista, Alemania salió realmente reforzada. En contraste, Francia negó durante mucho tiempo sus problemas de gasto público o una serie de decisiones de política económica equivocadas. Con 15 millones menos de población que Alemania, hoy tiene 50.000 millones de euros más de gasto, y por lo tanto adolece de un grave problema de competitividad. Rossell realizó un diagnóstico similar en el caso de Italia: la gran economía europea que menos ha crecido y que, ni con un gobierno tecnócrata, ha sido capaz de acometer las reformas estructurales que tiene todavía pendientes. Pese a esta suerte desigual de sus principales economías, el Presidente de la CEOE afirmó que hay que apostar por Europa. Es el mercado en el que vendemos dos tercios de nuestros productos, representa el 7% de la población mundial, el 25% del PIB y el 45% del gasto social, dato este último muy ilustrativo sobre su apuesta por un estado del bienestar que Rossell no se mostró partidario de interrumpir, pero sí de volver más eficiente. A título de curiosidad, el ponente quiso apuntar un dato adicional: la suma de parados y pensionistas dividida por la población brinda una ratio casi idéntica en la mayoría de países europeos, en que estos colectivos representan un tercio de la población. Finalizado el análisis en clave europea, Rossell abordó a continuación la situación que atraviesa España. Es evidente que se ha producido una mejoría macroeconómica con reflejo en el PIB, el empleo o la recaudación. En el caso concreto de la ocupación, pese a la dura destrucción de empleo derivada de la crisis, no debemos olvidar que el saldo durante el siglo XXI es todavía positivo: desde 2000 se han creado un millón de puestos de trabajo netos. Y además se ha conseguido en un contexto de incremento de la población sin parangón en Europa, con la llegada de 6 nuevos millones de habitantes. Por lo que respecta a las empresas, en los años del boom se crearon 334.000 compañías y la crisis ha destruido 247.000, de modo que el saldo neto 2000-2013 es todavía positivo con 86.000 nuevas empresas. Pero si analizamos qué tipo de empresas han creado empleo, Rossell apuntó un claro protagonismo de las compañías de más de 250 trabajadores, mientras que las más expuestas a la crisis han sido las empresas medianas, de entre 10 y 250 empleados. Mirando de nuevo hacia Alemania para buscar soluciones a la cuestión del empleo, el Presidente de la CEO apuntó algunas de las medidas que el país emprendió en 2009 ante la situación de crisis, como la reducción de sueldos, la reducción del número de horas de trabajo y la apuesta por la formación. La falta de flexibilidad laboral impidió a España seguir esa misma senda, y el hundimiento paralelo del mercado doméstico no dejó más alternativa a las empresas que la de la exportación.

Rossell elogió a continuación ese extraordinario comportamiento exportador, por el cual España ha pasado de tener 66.000 empresas exportadoras en 2000 a 150.000 en 2013, pero lamentó la enorme cuota que acaparan en ese capítulo las grandes empresas. Sí se han diversificación en cambio los bienes que exportamos, que hoy incluyen bienes de equipo, productos de alimentación, semielaborados químicos, etcétera. El Presidente de la CEOE no quiso obviar a continuación que se cometió un grave error colectivo al negar la crisis en 2009, y que decisiones como el acuerdo de moderación salarial entre patronal y sindicatos llegaron tarde y no lograron frenar la destrucción de empleo. Sin embargo, no debemos olvidar que esa negación no fue sólo una cuestión interna: fuera mantuvimos la triple AAA hasta septiembre de 2010. Rossell consideró a continuación que, pese a llegar tarde y a su elevadísimo coste, equivalente a 12 puntos del PIB, la reforma del sistema financiero ha empezado a dar resultados. También se ha llevado a cabo una reforma laboral en la que el ponente apostó por profundizar para alcanzar una mayor flexibilidad interna y mejorar la negociación colectiva. Menos exitosas han resultado las medidas para controlar el gasto público, que no ha corregido todavía la expansión sin freno durante los años de boom económico. Si en 2007 la suma de pensiones, prestaciones de desempleo y ayudas sociales fue de 123.000 millones de euros, en 2013 ascendió a 170.000. La permanencia de este y otros problemas imparte para Rossell la vía a seguir: la de la continuidad de las reformas. Una de las más urgentes es la simplificación administrativa, que pasa por legislar menos y mejor, pero también son necesarias la reforma fiscal, la de la educación, la de la sanidad o seguir actuando en el ámbito de la energía. En el turno de preguntas, el ponente consideró que una de las principales fórmulas para luchar contra el desempleo ha de ser la apuesta por el contrato temporal. Todos sabemos que no es la solución más deseable, pero España ha de alinearse en materia de temporalidad con Alemania u Holanda, que cuentan con un 27% y un 50% de contratos de este tipo frente a nuestro 16%. También ha de ayudar a reducir el paro la apuesta por la formación práctica ligada a la empresa. En respuesta a una pregunta sobre la cuota de responsabilidad de los sindicatos en la falta de flexibilidad del marco laboral español, Rossell descartó que estos fueran el problema de España, y alabó de hecho su colaboración con la patronal en la exitosa reformulación de algunos convenios colectivos.

Sesión 4. Nuevas tecnologías, nuevas industrias y la ambición de emprender y crecer

Ana Maiques, Cofundadora de Starlab y Directora de Neuroelectrics. Premio UE a la Mujer Innovadora 2014

Israel Ruíz, Vicepresidente del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) Javier Santiso, Fundador Start Up Spain RJ Friedlander, Fundador de ReviewPro Ginés Alarcón, Presidente de NAE. Junta Directiva Cercle d’Economia (Presidente de

la sesión) El primer ponente de la sesión, Javier Santiso, quiso desmontar en su intervención algunos de los mitos que se asocian a la economía española. Para el ponente, estos apriorismos no se ajustan a la realidad de una economía cuyo PIB per cápita ha pasado en apenas cinco décadas de 4.000 euros a más de 30.000, un periodo en que España ha generado una riqueza equivalente al PIB nominal acumulado de Suecia y de Holanda. El primer mito es el que imparte que en España no somos capaces de crear empresas internacionales, y el desmentido viene de la mano no ya de grandes compañías como Indra, sino de otras como Técnicas Reunidas, que acaba de firmar un contrato en Perú por más de 2.000 millones de euros, o Grifols, que realiza el 90% de sus ventas en el exterior. En el propio ámbito de las startups destaca el ejemplo de eDreams, una de las pocas empresas de base tecnológica europea que han cruzado la frontera de los 1.000 millones de euros para facturar anualmente de más de 4.000. Y no podemos olvidar a Zara, que demuestra que nuestras startups no han de surgir necesariamente en garajes, sino en tiendas de sastrería, talleres mecánicos, canteras de mármol… El segundo mito desmontado por Santiso fue el de la falta de ejecutivos de primer nivel, al que opuso los casos de los españoles que ocupan el primer cargo de responsabilidad en Havas o la única silla extranjera en el Comité de BMW. No es cierto tampoco que España no sea atractiva para inversores extranjeros, cuando nuestro país es de hecho el primer destino de las inversiones en Europa de los fondos soberanos. Este apetito abarca además a las empresas de base tecnológica, como acredita la entrada de capital japonés en Everis, alemán en Arsys, americano en Lets Bonus, suizo en Softonic o la reciente inversión de 30 millones a cargo del fundador de Microsoft en una startup en el sector del voto electrónico. También hemos visto como la andaluza Abengoa o la catalana Grifols han empezado a cotizar en el Nasdaq, y el ponente confió en que pronto se les podrían sumar Zed, Gowex, Privalia o Softonic. Desmentidos estos mitos, Santiso empleó el resto de su ponencia en dar un toque de atención sobre nuestras asignaturas pendientes en materia de emprendeduría.

La primera es que nuestros millennials, a diferencia de los de Colombia, Perú, Chile, Venezuela o México, no se sienten líderes tecnológicos. Eso explica seguramente por qué las matriculaciones de ingenieros industriales e informáticos han descendido en un 40% en nuestro país, pese a que entre 2014 y 2015 Europa no podrá cubrir un millón de puestos de trabajo dirigidos a estos perfiles. Por eso, Santiso indicó a continuación que España necesita un reset y descargar en su disco duro aplicaciones que mejoren su competitividad, a las que el ponente se refirió como a killer apps. Una referencia para llevar a cabo este proceso puede ser Corea del Sur: un país equivalente al nuestro en tamaño, ausencia de materias primas o cercanía geográfica respecto a economías potentes. Corea partía en 1960 de una situación de pobreza no ya peor a la española, sino también a muchos países latinoamericanos, y hoy en cambio está en el grupo de cabeza de las grandes potencias. Como nosotros, los coreanos sufrieron una gran crisis, en su caso entre 1998 y 2005 y que les condujo a entrar en acción. ¿Cómo? Incrementando sus presupuestos de innovación en un 50% y apostando por la educación, que lamentablemente son todavía dos asignaturas pendientes en nuestro caso. Hoy Corea del Sur es un polo de innovación mundial en que una única compañía como Samsung invierte en I+D una cantidad equivalente a la que destina toda España a este concepto. Antes de finalizar su intervención, Santiso elogió también el buen desempeño de Corea del Sur en el Informe Pisa y su infraestructura de banda ancha, y expresó su deseo de que España se convierta también en un país 3.0 capitalizando ventajas competitivas como nuestros imbatibles estándares de calidad de vida. Habló a continuación Israel Ruíz, quien centró su intervención en cómo la institución a la que representa, el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), está combinando educación e innovación para realizar el potencial de todo el mundo. Para Ruiz, uno de los principios más inspiradores del MIT es la vocación de sus integrantes de trascender su origen geográfico o su disciplina para concentrarse en las cosas que importan. Así lo acredita la labor del economista Paul Samuelson o de dos de sus más insignes discípulos, Ben Bernanke y Mario Draghi, que han solucionado cuestiones económicas complejas pensando fundamentalmente como ingenieros. Esta centralidad de las personas y de sus pasiones colectivas es una de las claves de una institución que, durante 153 años, ha enarbolado la bandera de la excelencia, la tecnología y el cambio para bien: desde 1960, en que contaba con un presupuesto de 63 millones de dólares, hasta la actualidad, en que cuenta con 3.400. Ruiz también vinculó las grandes innovaciones procedentes del MIT, que van del radar a la tecnología de Dropbox, a un modelo diferencial, basado en asociar la excelencia y experiencia de sus profesores con los alumnos más capacitados del mundo, que tienen ocasión de desarrollar investigación básica sobre los temas que les apasionan, pero también llevan a cabo investigación aplicada.

El ponente defendió asimismo la apuesta del Instituto por la proximidad, una de las claves de la buena salud y altísimo grado de desarrollo de su ecosistema de empresas. Consciente de la correlación entre educación y trabajo, y de que una educación universitaria satisfactoria conduce a una trayectoria con mayores prerrogativas de éxito y realización personal, MIT apostó en 2002 por su plataforma OpenCourseWare de cursos gratuitos a través de la Red. Ese proyecto fue el germen de edX, una joint venture inédita con Harvard que arrancó en 2012 para dar acceso a un volumen todavía mayor de cursos bajo un triple objetivo: expandir el acceso a la educación, mejorar la educación en su propio campo de actuación y entender mejor cómo aprende la gente. Porque, según Ruiz, en el transcurso de una ponencia como la suya resulta imposible saber si la gente está entendiendo algo o no, pero el entorno online sí permite obtener esta información. La formación online tiene además una segunda ventaja: reduce la demora tradicional de dos semanas o hasta un mes para saber si alguien ha aprendido algo mediante la corrección de un examen y vuelve ese feedback inmediato. Este nuevo terreno permite acercar a alguien oportunidades inéditas de formación y garantizar además la efectividad de su aprendizaje. El balance ha sido hasta ahora mejor del esperado, y edX cuenta hoy con 2 millones de usuarios, 40 instituciones asociadas, 90 clases y 135 cursos. Además, su espíritu pro bono ha conducido a sus promotores a compartir el código abierto de su tecnología, favoreciendo su asimilación por parte del sistema universitario francés o del World Economic Forum. Ruiz destacó asimismo que, al prestar atención a los perfiles de sus usuarios, los millennials están representados, pero también franjas de edad que hasta ahora no sabíamos qué querían estudiar. Por un lado graduados que apuestan por la educación continua, pero también jóvenes que todavía no han accedido a la universidad pero que hoy pueden prepararse para llegar a ella en todavía mejores condiciones. Las cifras de edX en España resultan para el ponente realmente alentadoras: el nuestro es el cuarto país por volumen de usuarios, con un total de 500.000. Cabría preguntarse de hecho, a la luz de este indicador, si los estudiantes españoles tienen hoy unas necesidades de conocimiento que la universidad no les está ofreciendo. En el tramo final de su intervención, Ruiz repasó algunas de las iniciativas de edX para apoyar a la educación pública en Estados Unidos y a la emprendeduría. La tercera ponente de la sesión, Ana Maiques, repasó la trayectoria de su compañía: Starlab, que, desde su base en el Observatori Fabra de Barcelona, lleva trece años tratando de trasladar la investigación al mercado. Su principal motor es que la ciencia desarrollada por un grupo de investigadores de primera nivel impacte en la sociedad, un reto en el que Starlab ha contado con grandes aliados como la Agencia Espacial Europea o el Ayuntamiento de Barcelona.

La ponente agradeció muy especialmente su apoyo al consistorio barcelonés, con el que desarrolla proyectos tan interesantes como la evaluación de la calidad del agua o la optimización de los sistemas de riego de la ciudad vía satélite. En el área de neurociencia, otra de las obsesiones de Starlab, la compañía lleva trece años descodificando las señales eléctricas que envía el cerebro, y a la vez enviando señales de vuelta para estimularlo. Este diálogo es posible gracias a un gorro con 32 canales de lectura y estimulación, que excita o inhibe la actividad neuronal y que ya se aplica para el tratamiento de patologías como la depresión, el ictus o el dolor. Algunas de las aplicaciones futuras de esta tecnología pasarán según Maiques por su empleo en tratamientos domiciliarios o por ayudar a niños hiperactivos combinando su uso con el de videojuegos. La ponente compartió también con el público la colaboración de Starlab con la compañía de realidad virtual Oculus, recientemente adquirida por Facebook, o su colaboración con otras empresas externas al sector sanitario, como Red Bull. También cifró sus ventas en un millón de euros y destacó su actividad en más de 30 países y su oficina en Boston, hitos que le han reportado, entre otros reconocimientos, la designación como startup of the week de la prestigiosa revista Wired. En la parte final de su ponencia, Maiques elogió la localización, creatividad, calidad de vida, base industrial y conexiones que convierten a Barcelona en una gran base de operaciones para el desarrollo de proyectos de base tecnológica. Sin embargo, consideró también que nuestro territorio tiene asignaturas pendientes, como una educación tecnológica o una inversión en I+D insuficientes y en ocasiones sin continuidad en el tiempo, una ausencia de cultura emprendedora o del esfuerzo, o una cierta reserva a la colaboración. El último ponente de la sesión, RJ Friedlander, consideró que, pese a ser un emprendedor tardío que fundó su startup con 44 años, jugó a su favor su origen estadounidense, un país en que la gente tiende a pensar que todo es posible. Su proyecto ilustra además que el emprendedor no sólo es un joven universitario cerrado en un garaje, sino que puede ser también un ejecutivo con experiencia en el mundo empresarial que, en un momento dato, pone ese conocimiento al servicio de un proyecto de base tecnológica. ReviewPro también demuestra que no todas las startups usan la tecnología para hacer realidad cosas impensables, sino que en ocasiones la aplican a industrias tradicionales que, como ocurre con el turismo en España, forman parte de la columna vertebral de la economía. Friedlander explicó a continuación la génesis de su proyecto. Cuando en 2008 las redes sociales empezaron a crecer exponencialmente, el ponente estaba convencido de que, además de cambiar usos y costumbres sociales, abrirían también ventanas de oportunidad para crear nuevos modelos de negocio. En el caso de ReviewPro este consistió en hacer posible en el entorno digital algo que los hoteles han hecho siempre: escuchar a sus clientes, medir su satisfacción y usar ese

conocimiento para mejorar las experiencias de sus huéspedes y, en última instancia, la rentabilidad de los propios establecimientos. De este modo, ReviewPro reúne 600 millones de menciones en redes sociales, webs de reseñas y agencias de viaje online en 45 idiomas, un inusitado volumen de big data a partir del cual genera índices e informes para que los hoteles conviertan esa business intelligence en una llamada a la acción. Este producto resulta de gran utilidad tanto a un pequeño hotel de doce habitaciones como a una cadena con más de 1.000 establecimientos, y ReviewPro ha apostado además por incorporar otras soluciones y servicios sobre esa misma base de datos. Esta diversificación le ha permitido alcanzar unas ventas de 7 millones de euros sin haber tenido que mudarse a Silicon Valley en busca de 15 millones de financiación. Durante su primer año de vida, la financiación de ReviewPro corrió de hecho a cargo del propio Friedlander, complementándose entre 2009 y 2011 con aportaciones de inversores individuales por valor de 3 millones y más adelante con una inyección de 3 millones más a cargo de un fondo de capital riesgo. Hoy, esos 6,5 millones de fondos han permitido crear una empresa con 9.000 clientes en todo el mundo, incluidas 18 de las 25 mayores cadenas españolas. Y, ante la llegada de competidores, la compañía está además ampliando su base de clientes más allá del sector hotelero, para abarcar también a consultoras o restaurantes. A modo de cierre, Friedlander repasó las ventajas e inconvenientes de operar desde Barcelona. Del lado positivo, el gran atractivo de la ciudad ha permitido incorporar a ReviewPro a empleados de hasta 22 nacionalidades que han ampliado sus capacidades de venta a países como Rusia o Brasil. También cuenta con ingenieros de primer nivel con un coste laboral bajo comparado al de Estados Unidos. Sin embargo, ReviewPro topa también con las carencias en el manejo del inglés de muchos aspirantes a formar parte de su equipo, y, en general, en la ciudad abundan los business angels y fondos públicos que brindan soporte a las startups en su fases iniciales pero se echan en falta fondos que puedan acompañarlas cuando ganan perímetro.

Sesión 6. La necesaria reforma de la democracia española. Propuestas

Josep Antoni Duran i Lleida, Presidente-Portavoz del Grupo Parlamentario de CIU en el Congreso de los Diputados

Alfredo Pérez Rubalcaba, Secretario General del PSOE Antón Costas, Presidente del Cercle d’Economia (Presidente de la sesión) Duran i Lleida inició su intervención con el análisis de los resultados de las recientes Elecciones Europeas. En el ámbito catalán, CIU ha obtenido un excelente resultado pero no ha ganado las elecciones, una circunstancia que el ponente atribuyó en parte a la penalización del electorado al partido de gobierno que se ha producido también en Francia, Reino Unido o Alemania. En clave soberanista, resulta innegable que las fuerzas partidarias a un mayor autogobierno han obtenido un resultado extraordinario que consolida y amplía la victoria de 2009. En clave española, Durán destacó la pérdida de votantes de PP y PSOE y la aparición de nuevas fuerzas políticas, que además de por otros factores se han visto beneficiadas por la circunscripción electoral única en los comicios europeos, una singularidad española que el ponente abogó por cambiar para alinearnos con los países de nuestro entorno. De un modo u otro, la irrupción de estas nuevas fuerzas favorece un escenario de mayor fragmentación del espacio político español, catalán y europeo ante la cual Duran se mostró preocupado, puesto que la democracia requiere la mayor estabilidad institucional posible. Por último, en clave europea, el ponente no lamentó tanto el aumento de la presencia de partidos euroescépticos y fascistas en el Parlamento Europeo como su toma de posiciones en sus países de origen, porque la nuestra es todavía, lamentablemente, una Europa de estados. Realizado este análisis de la reciente contienda electoral, Duran pasó a hablar de la crisis política española. El ponente no rehuyó su existencia, pero aclaró que la desafección ciudadana no es sólo culpa de los políticos… Contribuyen a la misma otras instancias, como por ejemplo los medios de comunicación. De un modo u otro, la existencia del problema vuelve necesaria la búsqueda de soluciones. Duran apuntó por ejemplo a la reforma de la ley electoral, que no debe hacerse a la ligera, pero que, dada la madurez de nuestra democracia, ya no necesita el proteccionismo que caracteriza a las listas cerradas. Son necesarios asimismo cambios en la financiación de los partidos, un ámbito en que el ponente lamentó por cierto las medidas contradictorias que el PP ha adoptado al respecto. En materia educativa, es necesaria una pedagogía que haga que el ciudadano entienda mejor cuál es su aportación a la política, así como la recuperación de un pacto social que evite la atribución de culpas discrecional de todo lo que nos pasa a Europa.

Duran abordó a continuación la actual tensión entre Catalunya y España, cuyos orígenes remontó a la LOAPA, pero que se ha agravado especialmente desde 2000 mediante una escalada anticatalanista que, en un primer momento, buscaba erosionar al PSC. Luego vendrían la OPA de Gas Natural a Endesa y la afirmación desafortunada de que la compañía sería “alemana antes que catalana”, y por supuesto la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatut y, más recientemente, la restricción del Estado de las Autonomías. En este escenario, que para Duran ha creado un problema catalán pero también otro de orden autonómico, la mayoría de las fuerzas catalanas han consensuado que la solución ha de producirse por la vía de una consulta. Para que ésta sea posible, Artur Mas pretende crear una Ley de Consultas amparada por el Estatut, y su disposición es incorporar a la votación cualquier opción alternativa que quiera promover el Estado. Sin embargo, mientras CIU o el propio Sr. Rubalcaba perciben que estamos frente a un problema político que requiere una solución política, Rajoy no comparte esa visión y no existe por lo tanto un diálogo. Habló a continuación Alfredo Pérez Rubalcaba, quien recordó que en su anterior intervención en la Reunión del Cercle d’Economia ya señaló que en España la crisis económica y social ha derivado en otras dos crisis de orden político y territorial. La crisis política parte además de una lógica elemental: los ciudadanos piden a la democracia que resuelva sus problemas, y hoy la política no es capaz de resolver sus dos principales inquietudes, que son la economía y el desempleo. La crisis económica ha colocado además una lupa gigantesca en la política, poniendo de relieve problemas que, según el ponente, no se solucionarán automáticamente una vez remonte la economía. Por lo que respecta a la crisis territorial, derivada de hecho de la política, se caracteriza la colisión entre quienes culpan de la crisis económica a las autonomías y quieren tender a una mayor centralización y los que abogan por superar la crisis marchándose. Estas fuerzas opuestas no sólo no se compensan la una a la otra, sino que se retroalimentan y están creando serias dificultades para nuestros funcionamiento cotidiano. Rubalcaba abordó a continuación el análisis de los resultados de las Elecciones Europeas, que para el Secretario General del PSOE han sido muy malos para Europa en su conjunto. El ponente coincidió con Duran en que no resulta tan preocupante la composición del Parlamento Europeo, el más poderoso de la historia de la UE y, paradójicamente, el de mayor presencia de fuerzas antieuropeas, sino la presencia de fuerzas de este tipo en países como Francia. En clave española, los comicios se han caracterizado por los malos resultados de PP y PSOE, o, en definitiva, del bipartidismo. Para Rubalcaba, esto se debe de nuevo a la crisis: en el resultado del PSOE pesa todavía que, en su última etapa de gobierno, el partido no supo resolver la crisis. Pero, mientras en el PSOE se han adoptado medidas, el PP no ha hecho nada pese a obtener unos resultados que el ponente tildó de auténtico descalabro. En Catalunya el PSC ha registrado también un malísimo resultado, debido según Rubalcaba a que paga en primera persona la crisis territorial. Y es que el PSC ha sido

históricamente el mejor representante del entendimiento entre Catalunya y España, y, por lo tanto, en un momento en que dicho entendimiento está en tela de juicio, el partido sufre. Tras el análisis electoral, el Secretario General del PSOE consideró como Duran que la desafección de Catalunya con España no es nueva. Los socialistas intentaron de hecho atajarla en la primera legislatura de Zapatero a través del Estatut, pero no sólo no lo consiguieron, sino que se produjo el efecto contrario: sus vicisitudes hicieron que la sociedad catalana dejara de sentirse representada. Ante esta situación existen únicamente dos vías de solución: o dejar que el tiempo arregle las cosas, un camino de éxito improbable que puede contribuir en cambio a aumentar la tensión, o hacer algo. Lo que propone el PSOE es admitir el problema y luchar para seguir viviendo juntos. Y como el problema afecta al máximo nivel de convivencia, no hay otra solución que la reforma constitucional. Una reforma que, además, no ha de afectar sólo a la relación Catalunya-España, sino al resto del Estado. Rubalcaba abogó por lo tanto por una reforma en sentido federal que permita por fin la comparación entre las Autonomías y los lands alemanes, que hoy es altamente imprecisa por factores como la inexistencia de un auténtico Senado en nuestro país. En relación a la postura adoptada por Artur Mas, el ponente discrepó de la afirmación del President según la cual el PP y el PSOE tienen ahora la obligación de reunirse y ponerse de acuerdo; hace falta en cambio una reunión a tres bandas para empezar a avanzar hacia una solución. En el espacio reservado al debate, Durán empezó apuntando que, aunque no sea así en el momento actual, no es descartable que un enquistamiento del problema catalán acabe teniendo un efecto perjudicial en la economía. El Portavoz del Grupo Parlamentario de CIU en el Congreso no rechazó la fórmula del cambio constitucional apuntada por Rubalcaba, pero consideró crucial determinar a qué modelo de federalismo nos ha de conducir, porque un nuevo café para todos en clave federal no arreglará las cosas. En cambio, Duran abogó por una negociación bilateral. Ante el escepticismo de su compañero de mesa hacia la opción federal, Rubalcaba defendió que el federalismo admite singularidades, y que por lo tanto sí podría plantear un buen encaje para Catalunya y su singularidad. Sin embargo, el Secretario General del PSOE defendió inmediatamente después la implicación de las 17 autonomías en el proceso de reforma constitucional, una fórmula multilateral que motivó una nueva muestra de escepticismo por parte de Duran. Los ponentes discreparon también en el rol vertebrador que puede jugar un Senado renovado en un sentido federal, puesto que Catalunya podía chocar con la oposición de los representantes de las autonomías gobernadas por el PP en cuestiones fundamentales para la reivindicación de su singularidad, como su modelo lingüístico o educativo. En el turno de preguntas Rubalcaba hizo extensiva su posición respecto a Catalunya al resto del PSOE.

Sesión 9. La revolución energética del siglo XXI. Consecuencias económicas y geopolíticas

Antoni Brufau, Presidente de Repsol y Expresidente del Cercle d’Economia Brufau inició su intervención con un pronóstico de hacia dónde va el consumo de energía en el mundo. Según las principales agencias de energía, pese al enorme reto que constituye el crecimiento exponencial de la población mundial, el mix energético entre 2035 y 2040 será muy parecido al actual salvo en algún matiz. Cabe esperar una mayor presencia del gas natural y de las renovables, pero las energías de origen fósil conservarán un peso importante de alrededor del 50%. En ese escenario de continuidad, el consumo de petróleo pasará de los 89 millones de barriles al día actuales a alrededor de 100 millones en 2035. Ese aumento, sumado al declino de los campos actuales, requerirá la incorporación de nueva producción. En concreto, Brufau indicó que, de esos 100 millones de barriles, 75 todavía no existen. Y, ¿cómo se logrará ese aumento? Según el ponente, dando continuidad a la exploración en zonas cada vez más frontera por un lado, y, por otro, mediante los hidrocarburos no convencionales. Esta última categoría, fruto de la innovación tecnológica más reciente, abarca al denominado shale oil y al shale gas, e implica ir a buscar petróleo allá donde se produce: es decir, en la roca madre. Brufau describió brevemente este revolucionario sistema, que implica pasar de buscar almacenes de gas y petróleo a ir a su fuente original y precipitar en un día un proceso que hasta ahora requería millones de años. Semejante innovación supone un cambio de paradigma del sector, pero ¿cuál ha de ser el impacto real del shale oil y el shale gas? Para el ponente, podría llegar a aportar 340.000 millones de barriles de petróleo y más de 250.000 BCMs, cifras muy notable que, sin embargo, no llegarían a garantizar la seguridad de suministro. Por lo tanto, alargarán la vida del consumo, pero ha de seguir profundizándose en otros no convencionales, como los crudos pesados del Orinoco o las arenas bituminosas de Canadá. Brufau centró su análisis a continuación en el caso específico de los Estados Unidos. Pese a su apuesta nacional por los hidrocarburos no convencionales, el ponente dudó que el país norteamericano pueda alcanzar la autosuficiencia petrolífera, aunque sí dio por descartada la del gas. Para fundamentar esta tesis, Brufau explicó en mayor detalle la técnica de producción por fracturación hidráulica, que, pese a su punta de innovación, plantea algunos

inconvenientes respecto a los pozos convencionales. Y es que si un pozo normal genera 250.000 barriles al día, uno no convencional produce en 25 años 350.000 barriles. En un escenario hipotético con rocas madre ilimitadas esto no sería un problema, pero en la actualidad en Estados Unidos sólo se conocen dos rocas madre capaces de generar shale oil. Fuera de Estados Unidos, se especula con que Rusia cuenta con el doble de shale oil que Estados Unidos pero nadie conoce en realidad la calidad de las rocas, y países como Arabia Saudí ni siquiera han iniciado todavía la senda de los no convencionales. En Europa la situación es algo peor. Las mejores estimaciones hablan de una producción de shale gas de 15.000 BCMs, una cifra espectacular pero alejada de la de otras demarcaciones. Además, se estima que el 40% está en Polonia, donde se han hecho por ahora 140 perforaciones sin éxito. Eso no obsta que puedan acabar encontrándose rocas madre productivas en Francia o España, país en que los estudios apuntan a la existencia de entre 200 y 2.000 BCMs. En relación a las causas de este sesgo entre Estados Unidos y el resto del mundo en materia de hidrocarburos no convencionales, Brufau apuntó por ejemplo la mayor flexibilidad de su economía o su elevado volumen de producción de petróleo y gas convencional, en contraste con la inexistencia de una industria petrolífera europea. Estas diferencias hacen que Estados Unidos conozca mucho mejor su subsuelo, en el que se han hecho ya 150.000 pozos verticales: quince veces más que en el resto del mundo. También juega a su favor que el propietario del subsuelo sea también el del petróleo, lo cual genera una actividad inmobiliaria con muy buena respuesta social. Y, por último, en Estados Unidos la legislación tiene un enfoque técnico que contrasta con el modelo europeo, en que pesa más el factor medioambiental. Otra derivada de los hidrocarburos no convencionales, más allá de su disponibilidad y de las especificidades de su extracción, es su efecto en los precios. En Estados Unidos ha permitido que el gas pase de los 10-12 dólares a los 2,5. En cambio, Europa paga por el Henry Hub entre 10 y 12 dólares y Asia entre 16 y 17. Este diferencial imparte naturalmente una ventaja competitiva sustancial favorable a la industria química, de refino, del acero o del aluminio de Estados Unidos, y también a los propios hogares, que disponen de electricidad y combustible más barato y de más oportunidades para emplearse en la industria, con el consiguiente incremento del PIB. Mientras tanto, Europa sigue enfrascada en si queremos o no el fracking... cuando ni siquiera sabemos si disponemos del mismo. A la pregunta de si los no convencionales van a convertir a Estados Unidos en un país petrolíferamente autosuficiente, Brufau volvió a mostrarse escéptico y confío en una cierta necesidad de garantizar su suministro al menos en los próximos 10 o 15 años. Brufau habló a continuación de algunos puntos de fricción actualmente en el ámbito de los hidrocarburos. El ponente especuló por ejemplo con un hipotético cierre del gas ruso que llega a Europa vía Ucrania, cuyas consecuencias serán catastróficas si se produjera en invierno pero asumibles si lo hiciera durante el verano.

También desmintió que el reciente acuerdo de abastecimiento entre Rusia y China no va a suponer, como se ha pretendido, el cambio de rumbo del gas destinado a Europa con destino a China. En cuanto a las medidas que Europa debería adoptar para enfrentar la compleja situación descrita a lo largo de su ponencia, Brufau abogó por la creación de un mercado único de la energía y por el aumento de la producción de hidrocarburos, las reservas estratégicas y las interconexiones. El ponente también se mostró favorable a reabrir el debate nuclear y a avanzar en el relativo al fracking, y defendió la continuidad de la apuesta por las renovables. En el frente externo, instó a Europa a unificar su capacidad de compra ante grandes proveedores para poder recibir un trato más beneficioso de sus grandes proveedores, así como a contribuir a la estabilización de una región tan crítica energéticamente como el Norte de África. En la parte final de su intervención, el Presidente de Repsol no quiso obviar la afectación en el ámbito de los hidrocarburos de las políticas de sostenibilidad y medio ambiente o del desarrollo de tecnologías actualmente en fase avanzada tales como el almacenaje de energía eléctrica para su uso en movilidad, la eficiencia de la energía distribuida, la biología sintética, la computación avanzada o el grafeno. De lo que no cabe duda es que estamos ante una revolución que ha vuelto obsoleto el concepto del peak oil, que hace diez años preconizaba poco menos que el fin del mundo y hoy vemos que no podría venir más que del lado de la demanda. Este y otros factores de raíz tecnológica amparan un relativo optimismo, pero todavía debemos recorrer un largo camino en el que será necesario derribar todavía algunas barreras sociales y en el que no deberíamos descartar de salida ningún tipo de energía.