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VIDA ORANTE DE SANTA

CLARA DE ASÍS

Para Santa Clara de Asís su

vida de oración se plasmó

en el diario vivir, ya que ella

fue una mujer que puso en

práctica las enseñanzas

adquiridas por su madre y el

Seráfico Padre San Francisco

de Asís, cuya formación

espiritual se la debía a él;

porque para Clara y sus

hermanas eran una

“plantita” de Dios.

Es allí en donde se da inicio a la espiritualidad de las hermanas que florecieron en la Edad Media. En donde prometieron obediencia a Francisco y reciben de Él su

forma de vida. Aunque era un poco parecida a los franciscanos, Clara la vivió con más profundidad, ya que

no solo quería vivir al estilo de Francisco sino que buscaba una vida sin propio es decir como damas pobres.

Este hecho para aquella época era inaudito, porque si hacemos un poco de Historia, encontramos a una Clara que pertenecía a una familia de

caballeros, su padre además de poseer castillos en la región, moraba en una casa señorial y su madre era de la nobleza; es decir Clara tuvo

oportunidad de vivir una adolescencia feliz y rica, con la posibilidad de muchas otras cosas más, pero algo más allá de esto la inquietaba y allí

nace su vocación.

Dar lugar a este horizonte, es abrir el misterio en el que nos sumerge la vida y al que no podemos dar respuesta directa, ni analizar científicamente; sin embargo ha habido a lo largo de la historia hombres y mujeres que han descubierto en su vida, la existencia de ese Misterio y entre ellas encontramos a Santa Clara de Asís que desde el siglo XIII fue despertando su realidad personal, social, religiosa y se dejó interpelar por lo que sucedía a su alrededor.

Frente a esto, algunas personas en el mundo de hoy, son un entorno reducido a lo inmediato, a lo palpable y a lo demostrable, se pasa desapercibido el llamado de Dios que hace al hombre, no hay respuesta.

Es importante resaltar en Santa Clara, una mujer fuerte, creativa y dotada de extraordinario amor y misericordia con los más necesitados de su época, no tenía miedo de acercarse a los leprosos, estaba siempre abierta al amor y voluntad de Dios.

Su testimonio de vida, debe ser un estímulo y una oportunidad para revisar nuestro encuentro con Dios, consigo mismo y con el hermano.

Ahora bien, cabe preguntarnos ¿cuál sería los desafíos que Clara nos hace hoy? Pues el testimonio que nos muestra Santa Clara es su gran amor a la Iglesia por eso en el # 5.3.5 del documento de Aparecida nos dice: Los consagrados y consagradas, discípulos misioneros de Jesús Testigo del Padre deben:

• Insertarse en las Iglesias locales y vivir la interdependencia con otras formas de vida cristiana en comunión con los Pastores, las comunidades religiosas y laicos como exigencia de una eclesiología de comunión y favorecer la creación de comunidades nuevas más sencillas, orantes, fraterna y cercanas con el pueblo.

Vivir una espiritualidad como fuerza unificadora de la vida consagrada, una espiritualidad encarnada, inculturada que va a las fuentes de toda la vida espiritual, es decir la palabra de Dios, la Eucaristía y la oración.

Formar una vida fraterna relacional de apertura y tolerancia, aceptación e inclusión de relaciones afectivas que afrontan la conflictividad, superan los obstáculos y hacen frente a toda cerrazón ideológica o afectiva.

Por ende, la vida íntegra de Santa Clara, por la acción del Espíritu Santo, está centrada en Cristo. Su pensamiento y su corazón están radicados en Él. Para Francisco y Clara la Eucaristía era el lugar de encuentro con Cristo y ella “gozaba mucho escuchando la Palabra de Dios”, la vivía “se miraba en ella como en un espejo” se dejaba transformar por ella y la irradiaba a sus hermanas y al mundo, consciente de que esta era la misión de las Damas Pobres en el mundo. (Testamento de Clara 21)

Cuando llegamos a conocerla mas de cerca quedamos impresionados por la personalidad de Santa Clara, no solo somos nosotros sus contemporáneos también quedaron impresionados y lo hicieron constar: El autor de la leyenda se entusiasmo con ella, los testigos del proceso dejaron impresiones asombrosas en su canonización y transparenta claramente un inocultable entusiasmo. Es fácil entrever como el Poverello de Asís, quedo marcado por su presencia.

Santa Clara Lectio Divina

Mira y Observa (ejercicio de los sentidos) Lectura

Considera ( ejercicio de la mente) Meditación

Contempla (ponerse bajo la acción de Dios) Contemplación

Arde en deseos Consolación

De imitar (preparando la acción) Discernimiento

Síguele (compromiso activo) Decisión

Clara de Asís es un ejemplo para

las mujeres de hoy, acercarse a ella

que no poseía una voluntad de

sospecha ni de desconfianza sino

una voluntad de encuentro, de

acogida, de escucha, de confianza

y de servicio. Acercarse a Clara es

ponerse en contacto con una

personalidad singular, llena de

misterio, de fascinación y de

transparencia. Acercarse a Clara es

encontrarse con un ideal humano y

cristiano difícil de imitar Aún más

patente se muestra la conciencia

femenina de Clara en la regla de la

Orden. Por primera vez en la

historia una mujer escribe una regla

para mujeres.

Colocar alma, corazón y mente, en Cristo hasta transformarse

En imagen de su divinidad.(CF3CtaCl 13)

Bibliografía

• Uribe. F. (2006). Leer a Francisco y Clara de Asís sus escritos. Santiago de Cali: colección Karisma 1.

• Familia franciscana. Clara de Asís, versión femenina del carisma franciscano. Bogotá Colombia.

• Herranz, Julio y otros los escritos de Francisco y Clara de Así, ediciones Capuchinas Fosmi. Bogotá