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Año XV # 177. Octubre 2017. ISSN: 2362-5287 En más de 400 unidades, técnicos, investigadores y extensionistas trabajan para resolver las demandas territoriales y promueven la articulación con múltiples actores que amplifican el impacto de las innovaciones obtenidas. De esta manera, el INTA constituye una plataforma nacional de aplicación de políticas públicas, nutrida por la acción de más de 2.000 consejeros que participan del gobierno institucional en todo el país. Líder de trabajo en red Cobertura federal Desde un laboratorio multinacional hasta una pyme con asiento local. En la medida de las posibilidades, todas las escalas resultan válidas para lograr asocia- ciones que conduzcan al desarrollo de innovacio- nes, requeridas por una gran cantidad de emprendi- mientos agroindustriales para resolver demandas productivas. La clave está en la articulación que une a una institu- ción pública con actores del sector privado en pro- yectos de alta complejidad biotecnológica. Con esta mirada, el INTA y Laboratorios Inmuner S. A. –ubi- cado en Concepción del Uruguay– desarrollaron la primera vacuna recombinante nacional para preve- nir la Enfermedad Infecciosa de la Bursa (IBD) –lla- mada también Gumboro–, que es muy contagiosa en pollos jóvenes y provoca pérdidas significativas para los productores. En este sentido, Nicora celebró el lanzamiento al mercado de este producto de origen biológico, que permitirá sustituir importaciones. “Hace 20 años, los investigadores de esta institución del Estado, que trabaja con recursos de la sociedad argentina, co- menzaron un pensamiento científico a futuro que, gracias a una alianza público-privada, se convirtió en innovación dos décadas después”. Similar fue la historia para Bioinnovo IgY DNT que, basado en inmunoglobulinas de yema de huevo de gallinas (IgY), este producto, único por su origen bio- lógico en el mundo, controla patógenos de impor- tancia productiva como la diarrea neonatal de terne- ros. Fue desarrollado a partir de la primera Empresa de Base Tecnológica (EBT), creada por el INTA y el la- boratorio Vetanco S. A. “Somos una institución que produce bienes públi- cos y, en este proceso, aparecen algunos factibles de apropiación que permiten generar instancias de vin- culación necesarias para beneficiar a la sociedad”, se- ñaló Nicora. Héctor Espina, director nacional del INTA, resaltó los avances en investigación, así como el aporte ins- titucional del área de Vinculación Tecnológica que motoriza la articulación público-privada. “En 1987, ocurrieron dos hechos históricos para el INTA: la apertura de los consejos que hoy suman dos mil par- ticipantes de la sociedad civil en el gobierno del ins- tituto, y la creación de la unidad de Vinculación Tecnológica que marca un proceso de innovación institucional”, recordó. Adolfo Cerioni, coordinador nacional de Vinculación Tecnológica del INTA, explicó que el ob- Nicora: “Nuestra misión es trabajar con los conocimientos para que se transformen en innovación en los territorios”. “Generar instancias de vinculación para beneficiar a la sociedad” Lo expresó Amadeo Nicora, presidente del INTA, en referencia al trabajo del instituto para transformar el conocimiento generado por los especialistas en innovación, es decir, en insumos estratégicos para la agroindustria. R-VAC Inmuner IBD y Bioinnovo IgY DNT, dos casos paradigmáticos de articulación público-privada con impacto concreto en el sector. Fruto del conocimiento jetivo es “acelerar la transferencia de tecnologías pa- ra consolidar un modelo de gestión que facilite los procesos de innovación”. Sobre este aspecto, destacó la acción de la plataforma INCUINTA que promue- ve la fabricación industrial de los desarrollos cientí- ficos, así como los procesos de registro de propiedad intelectual. En esta línea, Cerioni ponderó la integración de la Oficina de Vinculación Tecnológica con la empresa mixta INTeA, ya que “permite reorientar la transfe- rencia a los objetivos fundacionales y avanzar en una estrategia de comercialización directa de pro- ductos, software y servicios por parte del instituto”. Entre otros logros, fruto de un convenio entre el INTA a través del Instituto de Patobiología y la Universidad Maimónides, se inauguró una unidad para el estudio de las técnicas de desarrollo de Organismos Animales Genéticamente Modificados (OAGM). Además, buscará producir ovinos y bovi- nos genéticamente modificados, y biomoléculas de interés farmacéutico y biomédico.
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Año XV # 177. Octubre 2017. ISSN: 2362-5287
En más de 400 unidades, técnicos, investigadores y extensionistas trabajan para resolver las demandas territoriales y promueven la
articulación con múltiples actores que amplifican el impacto de las innovaciones obtenidas. De esta manera, el INTA constituye una
plataforma nacional de aplicación de políticas públicas, nutrida por la acción de más de 2.000 consejeros que participan del gobierno
institucional en todo el país.
Líder de trabajo en red
Cobertura federal
inta.gob.ar intainforma.inta.gob.ar | ria.inta.gob.ar
BREVES
Créditos para pequeños productores
Balcarce: se realizó La Nación Ganadera
Almacén para emprendedores familiares
Gerencia de Comunicación e Imagen Institucional, INTA. Chile 460 2º piso, CABA. (011) 4339-0600.Director: Máximo Bontempo - Editora responsable: Daniela Novelli - Imprenta: Erre Gé & Asoc. C. Muzilli 5420 (1440) CABA.
La Fundación ArgenINTA ofrece la línea de créditos Interris que, en casi una década de funcionamiento, benefició a más de 2.500 productores a través de un centenar de proyectos financiados por un monto total de $ 23 millones. “Esta línea surgió para atender a los productores acompañados por el INTA, que están fuera del sistema financiero formal”, señaló Augusto De Haro, coordinador de la Unidad Integrada de Apoyo a Iniciativas Rurales, área encargada de administrar el programa.
“Es una oportunidad inigualable para mostrar el trabajo de los investigadores que generan conocimiento, que llega a la gente de la mano de los extensionistas”, aseguró Amadeo Nicora, presidente del instituto, en la inauguración de la décima edición de La Nación Ganadera, llevada a cabo en el INTA Balcarce. De la apertura, participaron Leonardo Sarquís, ministro de Agroindustria de Buenos Aires; José Escribano, subdirector del diario La Nación y Esteban Reino, intendente de la ciudad.
Junto con la Fundación ArgenINTA e INTEA S. A., el instituto abrió un espacio para comercializar productos con agregado de valor, elaborados por agricultores de pequeña y mediana escala que reciben asesoramiento técnico. El local, llamado “Alma Rural”, funciona en el Mercado del Patio de Rosario. “Este proyecto tiene mucha emoción, no solamente por el trabajo de los productores, sino por el trabajo interinstitucional que implica”, remarcó Héctor Espina, director nacional del INTA.
Accedió a su rol en el INTA mediante la Asociación Civil Agrícola Nacimiento, que apoya a más de 150 pequeños productores. Ella, nacida y criada en la zo-na, continúa la labor de su abuelo –quien arribó a tie-rras sureñas en 1930 en el marco de los programas de repoblamiento– y tiene una chacra dedicada a pasturas de alfalfa.
Para Contreras, “el funcionamiento de los consejos le da transparencia al INTA”. En esta línea, aseguró: “La diversidad de voces y la participación de múlti-ples actores lo hacen rico y lo hacen fuerte”.
De vuelta en la pampa, Mauricio Sordelli recorre su cuarto año en el Consejo del Centro Regional Entre Ríos, como representante de la Sociedad Rural Argentina. Tiene 59 años, nunca trabajó en relación
de dependencia directa con el INTA, pero piensa, luego de finalizar su manda-
to, colaborar en el Consejo Local Asesor de la agencia de exten-
sión de su pueblo. “Toda la vida estuve cerca del insti-tuto, de las experimenta-les y de la tecnología que desarrolla”, aseguró.
En este sentido, Sordelli explicó que “los aportes
del consejero permiten la adopción de toda la tecno-
logía que propone el INTA; el consejero la observa, la
adopta, propone hacer una reu-nión de divulgación junto con los ac-
tores del Sistema de Extensión del instituto y la ac-ción sale potenciada con ventajas concretas para los productores”.
Para Sordelli, esta dinámica participativa “es la for-ma que tiene el INTA de llegar a la sociedad y la so-ciedad de participar en el gobierno del INTA”. “Es una de las pocas oportunidades que nos da el Estado para participar de sus estructuras”, enfati-zó, y agregó: “En general, los consejeros somos muy valorados en el interior, es un cargo de mucho prestigio y se ejerce con mucha responsabilidad y fervor”.
Desde su creación en 1956, el INTA creyó que la cooperación es la acción más efectiva
para mejorar las actividades
agropecuarias.
Control social
Un gobierno conjunto para estar más cerca de los productoresDesde su creación en 1956, el INTA creyó que la cooperación es la acción más efectiva para mejorar las actividades agropecuarias y la vida rural en las regiones del país. Por eso, incluyó dentro de su estructura al Consejo Directivo integrado por referentes del sector productivo, político y científico-técnico y, posteriormente, impulsó la conformación de consejos regionales y locales. Hoy, estos representantes suman más de 2.000 y participan en la toma de decisiones del instituto.
lo más cercano a lo que pretende un productor agro-pecuario y, para eso, impulsamos actividades de apoyo técnico que sustentan el convenio marco en-tre el INTA y Coninagro”, explicó.
En tanto, Miguel Dandulakis tiene cultivos de papa-ya y hortalizas y participa del Consejo Local Asesor de la Estación Experimental de Cultivos Tropicales de Yuto –Jujuy–, a través del Consorcio de Riego Río Colorado de Colonia Santa Rosa. Su labor represen-ta a 250 productores de la zona.
Quizás por su pertenencia de origen, sus palabras denotan el compromiso con los intereses de los agri-cultores locales al referirse a las cuestiones que lo motivan para el ejercicio de consejero. “Se trata de recoger las demandas que se observan en el territo-rio y, al mismo tiempo, el conocimiento del institu-to para compartirlo con los productores en capacita-ciones y jornadas técnicas”, señaló.
En este ida y vuelta, Dandulakis describió que los aportes de los consejeros también son solicitados en actividades de investigación. “Junto con el INTA Cerrillos –Salta– y la agencia de extensión de Orán, participamos en la realización de una cartografía y digitalización de información sobre los suelos de la zona”, relató.
Yendo al sur del país, está la experiencia de Ramona Sucena Contreras quien, con mucho entusiasmo, ejerce la presidencia del Consejo Local Asesor de la Agencia de Extensión Rural de Los Antiguos, en Santa Cruz, y fue elegida para representar a su espa-cio en el Consejo Regional Patagonia Sur.
Desde un laboratorio multinacional hasta una pyme con asiento local. En la medida de las posibilidades, todas las escalas resultan válidas para lograr asocia-ciones que conduzcan al desarrollo de innovacio-nes, requeridas por una gran cantidad de emprendi-mientos agroindustriales para resolver demandas productivas.
La clave está en la articulación que une a una institu-ción pública con actores del sector privado en pro-yectos de alta complejidad biotecnológica. Con esta mirada, el INTA y Laboratorios Inmuner S. A. –ubi-cado en Concepción del Uruguay– desarrollaron la primera vacuna recombinante nacional para preve-nir la Enfermedad Infecciosa de la Bursa (IBD) –lla-mada también Gumboro–, que es muy contagiosa en pollos jóvenes y provoca pérdidas significativas para los productores.
En este sentido, Nicora celebró el lanzamiento al mercado de este producto de origen biológico, que permitirá sustituir importaciones. “Hace 20 años,
los investigadores de esta institución del Estado, que trabaja con recursos de la sociedad argentina, co-menzaron un pensamiento científico a futuro que, gracias a una alianza público-privada, se convirtió en innovación dos décadas después”.
Similar fue la historia para Bioinnovo IgY DNT que, basado en inmunoglobulinas de yema de huevo de gallinas (IgY), este producto, único por su origen bio-lógico en el mundo, controla patógenos de impor-tancia productiva como la diarrea neonatal de terne-ros. Fue desarrollado a partir de la primera Empresa de Base Tecnológica (EBT), creada por el INTA y el la-boratorio Vetanco S. A.
“Somos una institución que produce bienes públi-cos y, en este proceso, aparecen algunos factibles de apropiación que permiten generar instancias de vin-culación necesarias para beneficiar a la sociedad”, se-ñaló Nicora.
Héctor Espina, director nacional del INTA, resaltó los avances en investigación, así como el aporte ins-titucional del área de Vinculación Tecnológica que motoriza la articulación público-privada. “En 1987, ocurrieron dos hechos históricos para el INTA: la apertura de los consejos que hoy suman dos mil par-ticipantes de la sociedad civil en el gobierno del ins-tituto, y la creación de la unidad de Vinculación Tecnológica que marca un proceso de innovación institucional”, recordó.
Adolfo Cerioni, coordinador nacional de Vinculación Tecnológica del INTA, explicó que el ob-
Nicora: “Nuestra misión es
trabajar con los conocimientos para que
se transformen en innovación en los territorios”.
“Generar instancias de vinculación para beneficiar a la sociedad”Lo expresó Amadeo Nicora, presidente del INTA, en referencia al trabajo del instituto para transformar el conocimiento generado por los especialistas en innovación, es decir, en insumos estratégicos para la agroindustria. R-VAC Inmuner IBD y Bioinnovo IgY DNT, dos casos paradigmáticos de articulación público-privada con impacto concreto en el sector.
Fruto del conocimiento
jetivo es “acelerar la transferencia de tecnologías pa-ra consolidar un modelo de gestión que facilite los procesos de innovación”. Sobre este aspecto, destacó la acción de la plataforma INCUINTA que promue-ve la fabricación industrial de los desarrollos cientí-ficos, así como los procesos de registro de propiedad intelectual.
En esta línea, Cerioni ponderó la integración de la Oficina de Vinculación Tecnológica con la empresa mixta INTeA, ya que “permite reorientar la transfe-rencia a los objetivos fundacionales y avanzar en una estrategia de comercialización directa de pro-ductos, software y servicios por parte del instituto”.
Entre otros logros, fruto de un convenio entre el INTA a través del Instituto de Patobiología y la Universidad Maimónides, se inauguró una unidad para el estudio de las técnicas de desarrollo de Organismos Animales Genéticamente Modificados (OAGM). Además, buscará producir ovinos y bovi-nos genéticamente modificados, y biomoléculas de interés farmacéutico y biomédico.
La planta del instituto ronda los 7.000 agentes –que se reducen considerablemente si sólo se cuentan aquellos con funciones directivas–, mientras que los representantes de la sociedad civil, del sistema científico-técnico y del sector productivo suman más de 2.000. Estas cifras denotan el grado de con-trol social, dado por la participación de referentes ex-ternos que, sin ser parte del INTA, representan a otras entidades en la toma de decisiones del gobier-no del instituto.
Como componente de la estructura, el Consejo Directivo –de orden nacional– nació con el instituto en 1956, cuya creación se formalizó a través del Decreto Ley N° 21.680/56. En tanto, el funciona-miento descentralizado de los consejos –regionales y locales– fue reconocido en 1987 mediante el Decreto Reglamentario 287 en pos de facilitar los procesos administrativos y orientar la gestión de la política científico-tecnológica hacia la resolución de problemáticas locales.
Ariel Scotta transita su segundo año como inte-grante del Consejo Regional Santa Fe, en represen-tación de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro). Por su trabajo con los productores y su conocimiento de la región –de gran ascendencia tambera–, fue elegido para de-sempeñar el rol, principalmente para relevar de-mandas productivas del norte de Santa Fe y de zo-nas aledañas de Córdoba.
“No es un sólo un organismo con-sultivo”, definió Scotta respecto de la actividad del consejo. “Le da la posibilidad al sector pro-ductivo, en este caso coopera-tivo, de que podamos ser un ida y vuelta entre el INTA y los productores; trasladar sus in-quietudes, escuchar sus propues-tas y colaborar en la toma de decisiones del institu-to”, amplió el técnico, quien pertenece a la Estación Experimental Agropecuaria de Rafaela.
Para Scotta, el consejo regional “es el órgano de unión entre las instituciones y los productores”. “Tratamos de que el funcionamiento del INTA sea
(cerveza+snacks)celíacos
Maridaje apto para
Con más de 400 unidades en el país,
el INTA –a través de su sistema de transferencia y extensión– lidera procesos de trabajo en red
junto con actores locales y la propia comunidad, que permiten resolver
problemáticas del territorio.
comunidadestá cerca de la
Acceso al agua
Comercialización
Actividades productivas para el desarrollo local
Tecnologías de bajo costo inspiradas en la física
Acceso al agua
Sueño cumplido para más de 1.000 familias
Agua segura
El pueblo que ?oreció gracias a seis mujeres
Villa Ocampo
La marca colectiva que revaloriza el chivito mendocino
Kume Matrü
Una máquina para cosechar sus semillas
Pasto plumerito
Piezas clave en regiones áridas
Vacas criollasMaridaje apto para celíacos (cerveza+snacks)
Arroz
Nueva variedad: una vuelta a lo natural
Estevia
Un cultivo rústico que avanza en la Argentina
Topinambur
Lugar de saberes y alimentos
Cocinas
Apoyo para 193 familias de productores
Alud en Jujuy
El control de malezas tiene nueva genética
Arrozales
Animales genética-mente modi?cados
Ovinos y bovinos
Establecimiento agroecológico en Ayacucho
Ecoganadería
Vacuna contra la enfermedad de Gumboro
Pollos
Análisis desarrollado por el INTA aplicado en todo el mundo
Semillas
De Brasil a Sudáfrica: la extensión rural se exporta al mundo
Extensión
Proyecto ganador del premio Fontagro
Apicultura
Mecanización agrícola: un sector inteligente con futuro preciso
Maquinaria
Calentamiento global: la caña de azúcar argentina emite menos gases
Calentamiento
Capacitación para jóvenes dirigenciales
INTA-CRA
Galardón de oro para Bioinnovo IgY DNT
Premios CiTA
ArgenINTA brinda acceso a pequeños productores
Créditos
Brasilia: prospectiva e inteligencia estratégica
Procisur
Convenio con el IPCVA
Carne vacuna
Una empresa al servicio del buen vino
Biovin
Tratamiento contra la diarrea neonatal
Bioinnovo
El INTA medirá gases emitidos por la ganadería
Emisiones GEI
Participación en la elaboración del próximo informe del IPCC
ONU
Con bioetanol, la Argentina reduce hasta un 65 % la emisión de GEI
Bioetanol
Renuevan convenio del INTA en Francia
Laboratorio virtual
Siembra directa en Sudáfrica
Soja
Exportan 100 mil vacunas a la India
Tristeza bovina
Desarrollo de vacuna con previo análisis de mercado
Leucosis bovina
Prueban con éxito vacuna de ADN
Herpes bovino
Diversi?cación productiva: un cultivo con identidad regional
Yacón
Productores, protagonistas de la cocina del Noreste
Mandioca
Etiqueta con las características nutricionales
Peras
Creado conresiduos de la industria quesera
Bioplástico
Llamas al servicio de la salud: diagnóstico e?caz del Rotavirus
Kit diagnóstico
Primera biblioteca de suelos de la Argentina
Suelos
Nuevas variedades ideales para canteros y macetas
Verbenas
Primera variedad para los valles de la fruta primicia
Nectarina
Primer atlas para conocer el mercado argentino
Flores
Más de 14.000 visitantes
Fericerdo
Disponibles en un mapa interactivo
Ferias del NEA
TERRITORIOMÁS ALLÁDEL AGRO
ECONOMÍASREGIONALES
ALIMENTOSREGIONALES
ARTICULACIÓNEntre otros aportes de interés social, el INTA realiza investigaciones que apuntan a revalorizar cocinas
locales y alimentos bene?ciosos para la salud. Además, su presencia en todas las regiones del país
le permite dar asistencia ante eventualidades climáticas como inundaciones,
incendios y aludes.
calidad de vidamejora tu
Producción de alimentos regionales
Avances cientí?cos en salud humana
Asistencia en contingencias climáticas
Orientado a resolver demandas de la agroindustria en sus diferentes escalas y de potenciar las cadenas de valor, el
desarrollo de innovación se logra a través de la articulación con laboratorios, empresas y organismos de Ciencia y
Técnica. A su vez, el INTA motoriza la alianza conactores del sector productivo a ?n de promover
la adopción tecnológica en los territorios de la Argentina.
futurotrabaja por el
Investigación en temas estratégicos
Productividad sostenible con el ambiente
Innovación = ciencia con llegada a la sociedad
BIO-TECNOLOGÍA
CAMBIOCLIMÁTICO
POR ELMUNDO
La articulación, dada por el trabajo conjunto del instituto con otros actores públicos o privados, es fundamental para llevar a cabo proyectos de alta complejidad tecnológica.
INNOVACIÓN Y TRANSFORMACIÓN
Infografía GERARDO MOREL >>> INTA Informa
El trabajo en red multiplica innovación
ALGUNOS LOGROS DEL 2017
Productores, cooperativas, asociaciones, empresas, laboratorios, instituciones del Sistema de Ciencia y Técnica, municipios, escuelas y organizaciones locales, entre muchos otros actores, se asocian con el INTA –a través de diferentes formas de articulación– para llevar a cabo proyectos tecnológicos y comunitarios que mejoran el desarrollo de los territorios.
Por Gustavo SantosMinistro de Turismo de la Nación
La gastronomía está ganando cada vez más protagonismo como atractivo turístico en todo el mundo. La World Food Travel Association estima que el sector turístico-gastronómico genera un impacto económico anual de 150 mil millones de dólares a escala global.
Perú es un ejemplo para seguir en Latinoamérica, porque ha logrado que su cocina sea parte esencial de su marca país. Queremos trabajar junto con Perú para consolidar la región como polo gastronómico y, en tal sentido, proyectamos crear una red de turismo gastronómico del continente americano.
Y fue desde Perú –Lima, julio pasado– que anunciamos la realización del Primer Foro de Alimentos y Cocinas Regionales de América en la Argentina, que finalmente concretamos el 30 y 31 de agosto en Buenos Aires. La agenda incluyó temas como conservación de la biodiversidad, cocinas regionales y currículas de las escuelas de cocina.
El Foro –organizado en conjunto por el Ministerio de Turismo de la Nación, el INTA y la Fundación ArgenINTA– resultó un éxito en cuanto a la convocatoria, pero, sobre todo, porque en esa cumbre de referentes de todas las áreas involucradas fueron planteados los desafíos de la región para avanzar en el camino del desarrollo sustentable.
Nos propusimos reunir en un solo foro a los protagonistas de los esfuerzos de valorización de la cocina y de las cadenas alimentarias en las diferentes regiones de la geografía continental. De igual modo, buscamos intercambiar experiencias entre especialistas capaces de identificar nuevas formas de colaboración interregional sobre el tema. Y lo logramos.
También avanzamos en discutir el papel de las instituciones públicas y privadas en la articulación de acciones que favorezcan el desarrollo local, mediante la valorización de los alimentos y las cocinas regionales en sus diferentes aspectos: agricultura, mercados, turismo, difusión internacional. Y alcanzamos esa meta.
La gastronomía representa una oportunidad para dinamizar y diversificar el turismo, ya que impulsa el desarrollo económico local, implica a sectores profesionales, diversos productores, cocineros y mercados e incorpora nuevos usos al sector primario.
Con ese rumbo cierto, seguimos avanzamos con nuestro Plan CocinAR hacia la conformación del mapa turístico-gastronómico de la Argentina. Tras una primera etapa de diagnóstico en la que nos dedicamos a establecer el estado de situación de la identidad gastronómica, el segundo paso determinó una agenda de acciones para implementar en cada territorio.
Las cocinas son una síntesis de la cultura, la capacidad productiva y la historia de las regiones, reflejan su diversidad y particularidades. Son fuentes de saberes y recursos culturales que forjan la identidad de las comunidades y representan un instrumento para poner en valor los recursos en cada zona y transformarlos en puestos de trabajo genuinos y sustentables, otro aporte insoslayable del turismo a la economía nacional.
En síntesis, nuestra gastronomía es uno de los ejes fundamentales de la estrategia turística que consideramos para mostrar la identidad de nuestro país y comunicarla al mundo en una combinación de paisajes, colores, aromas, sabores.
La Argentina está invitando a compartir su mesa y más de cinco millones de turistas extranjeros cada año aceptan el convite. La alianza estratégica entre el turismo y la gastronomía está en marcha.
Turismo y gastronomía, aliados para el desarrollo
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Por elfuturo
Año XV # 177. Octubre 2017. ISSN: 2362-5287
En más de 400 unidades, técnicos, investigadores y extensionistas trabajan para resolver las demandas territoriales y promueven la
articulación con múltiples actores que amplifican el impacto de las innovaciones obtenidas. De esta manera, el INTA constituye una
plataforma nacional de aplicación de políticas públicas, nutrida por la acción de más de 2.000 consejeros que participan del gobierno
institucional en todo el país.
Líder de trabajo en red
Cobertura federal
inta.gob.ar intainforma.inta.gob.ar | ria.inta.gob.ar
BREVES
Créditos para pequeños productores
Balcarce: se realizó La Nación Ganadera
Almacén para emprendedores familiares
Gerencia de Comunicación e Imagen Institucional, INTA. Chile 460 2º piso, CABA. (011) 4339-0600.Director: Máximo Bontempo - Editora responsable: Daniela Novelli - Imprenta: Erre Gé & Asoc. C. Muzilli 5420 (1440) CABA.
La Fundación ArgenINTA ofrece la línea de créditos Interris que, en casi una década de funcionamiento, benefició a más de 2.500 productores a través de un centenar de proyectos financiados por un monto total de $ 23 millones. “Esta línea surgió para atender a los productores acompañados por el INTA, que están fuera del sistema financiero formal”, señaló Augusto De Haro, coordinador de la Unidad Integrada de Apoyo a Iniciativas Rurales, área encargada de administrar el programa.
“Es una oportunidad inigualable para mostrar el trabajo de los investigadores que generan conocimiento, que llega a la gente de la mano de los extensionistas”, aseguró Amadeo Nicora, presidente del instituto, en la inauguración de la décima edición de La Nación Ganadera, llevada a cabo en el INTA Balcarce. De la apertura, participaron Leonardo Sarquís, ministro de Agroindustria de Buenos Aires; José Escribano, subdirector del diario La Nación y Esteban Reino, intendente de la ciudad.
Junto con la Fundación ArgenINTA e INTEA S. A., el instituto abrió un espacio para comercializar productos con agregado de valor, elaborados por agricultores de pequeña y mediana escala que reciben asesoramiento técnico. El local, llamado “Alma Rural”, funciona en el Mercado del Patio de Rosario. “Este proyecto tiene mucha emoción, no solamente por el trabajo de los productores, sino por el trabajo interinstitucional que implica”, remarcó Héctor Espina, director nacional del INTA.
Accedió a su rol en el INTA mediante la Asociación Civil Agrícola Nacimiento, que apoya a más de 150 pequeños productores. Ella, nacida y criada en la zo-na, continúa la labor de su abuelo –quien arribó a tie-rras sureñas en 1930 en el marco de los programas de repoblamiento– y tiene una chacra dedicada a pasturas de alfalfa.
Para Contreras, “el funcionamiento de los consejos le da transparencia al INTA”. En esta línea, aseguró: “La diversidad de voces y la participación de múlti-ples actores lo hacen rico y lo hacen fuerte”.
De vuelta en la pampa, Mauricio Sordelli recorre su cuarto año en el Consejo del Centro Regional Entre Ríos, como representante de la Sociedad Rural Argentina. Tiene 59 años, nunca trabajó en relación
de dependencia directa con el INTA, pero piensa, luego de finalizar su manda-
to, colaborar en el Consejo Local Asesor de la agencia de exten-
sión de su pueblo. “Toda la vida estuve cerca del insti-tuto, de las experimenta-les y de la tecnología que desarrolla”, aseguró.
En este sentido, Sordelli explicó que “los aportes
del consejero permiten la adopción de toda la tecno-
logía que propone el INTA; el consejero la observa, la
adopta, propone hacer una reu-nión de divulgación junto con los ac-
tores del Sistema de Extensión del instituto y la ac-ción sale potenciada con ventajas concretas para los productores”.
Para Sordelli, esta dinámica participativa “es la for-ma que tiene el INTA de llegar a la sociedad y la so-ciedad de participar en el gobierno del INTA”. “Es una de las pocas oportunidades que nos da el Estado para participar de sus estructuras”, enfati-zó, y agregó: “En general, los consejeros somos muy valorados en el interior, es un cargo de mucho prestigio y se ejerce con mucha responsabilidad y fervor”.
Desde su creación en 1956, el INTA creyó que la cooperación es la acción más efectiva
para mejorar las actividades
agropecuarias.
Control social
Un gobierno conjunto para estar más cerca de los productoresDesde su creación en 1956, el INTA creyó que la cooperación es la acción más efectiva para mejorar las actividades agropecuarias y la vida rural en las regiones del país. Por eso, incluyó dentro de su estructura al Consejo Directivo integrado por referentes del sector productivo, político y científico-técnico y, posteriormente, impulsó la conformación de consejos regionales y locales. Hoy, estos representantes suman más de 2.000 y participan en la toma de decisiones del instituto.
lo más cercano a lo que pretende un productor agro-pecuario y, para eso, impulsamos actividades de apoyo técnico que sustentan el convenio marco en-tre el INTA y Coninagro”, explicó.
En tanto, Miguel Dandulakis tiene cultivos de papa-ya y hortalizas y participa del Consejo Local Asesor de la Estación Experimental de Cultivos Tropicales de Yuto –Jujuy–, a través del Consorcio de Riego Río Colorado de Colonia Santa Rosa. Su labor represen-ta a 250 productores de la zona.
Quizás por su pertenencia de origen, sus palabras denotan el compromiso con los intereses de los agri-cultores locales al referirse a las cuestiones que lo motivan para el ejercicio de consejero. “Se trata de recoger las demandas que se observan en el territo-rio y, al mismo tiempo, el conocimiento del institu-to para compartirlo con los productores en capacita-ciones y jornadas técnicas”, señaló.
En este ida y vuelta, Dandulakis describió que los aportes de los consejeros también son solicitados en actividades de investigación. “Junto con el INTA Cerrillos –Salta– y la agencia de extensión de Orán, participamos en la realización de una cartografía y digitalización de información sobre los suelos de la zona”, relató.
Yendo al sur del país, está la experiencia de Ramona Sucena Contreras quien, con mucho entusiasmo, ejerce la presidencia del Consejo Local Asesor de la Agencia de Extensión Rural de Los Antiguos, en Santa Cruz, y fue elegida para representar a su espa-cio en el Consejo Regional Patagonia Sur.
Desde un laboratorio multinacional hasta una pyme con asiento local. En la medida de las posibilidades, todas las escalas resultan válidas para lograr asocia-ciones que conduzcan al desarrollo de innovacio-nes, requeridas por una gran cantidad de emprendi-mientos agroindustriales para resolver demandas productivas.
La clave está en la articulación que une a una institu-ción pública con actores del sector privado en pro-yectos de alta complejidad biotecnológica. Con esta mirada, el INTA y Laboratorios Inmuner S. A. –ubi-cado en Concepción del Uruguay– desarrollaron la primera vacuna recombinante nacional para preve-nir la Enfermedad Infecciosa de la Bursa (IBD) –lla-mada también Gumboro–, que es muy contagiosa en pollos jóvenes y provoca pérdidas significativas para los productores.
En este sentido, Nicora celebró el lanzamiento al mercado de este producto de origen biológico, que permitirá sustituir importaciones. “Hace 20 años,
los investigadores de esta institución del Estado, que trabaja con recursos de la sociedad argentina, co-menzaron un pensamiento científico a futuro que, gracias a una alianza público-privada, se convirtió en innovación dos décadas después”.
Similar fue la historia para Bioinnovo IgY DNT que, basado en inmunoglobulinas de yema de huevo de gallinas (IgY), este producto, único por su origen bio-lógico en el mundo, controla patógenos de impor-tancia productiva como la diarrea neonatal de terne-ros. Fue desarrollado a partir de la primera Empresa de Base Tecnológica (EBT), creada por el INTA y el la-boratorio Vetanco S. A.
“Somos una institución que produce bienes públi-cos y, en este proceso, aparecen algunos factibles de apropiación que permiten generar instancias de vin-culación necesarias para beneficiar a la sociedad”, se-ñaló Nicora.
Héctor Espina, director nacional del INTA, resaltó los avances en investigación, así como el aporte ins-titucional del área de Vinculación Tecnológica que motoriza la articulación público-privada. “En 1987, ocurrieron dos hechos históricos para el INTA: la apertura de los consejos que hoy suman dos mil par-ticipantes de la sociedad civil en el gobierno del ins-tituto, y la creación de la unidad de Vinculación Tecnológica que marca un proceso de innovación institucional”, recordó.
Adolfo Cerioni, coordinador nacional de Vinculación Tecnológica del INTA, explicó que el ob-
Nicora: “Nuestra misión es
trabajar con los conocimientos para que
se transformen en innovación en los territorios”.
“Generar instancias de vinculación para beneficiar a la sociedad”Lo expresó Amadeo Nicora, presidente del INTA, en referencia al trabajo del instituto para transformar el conocimiento generado por los especialistas en innovación, es decir, en insumos estratégicos para la agroindustria. R-VAC Inmuner IBD y Bioinnovo IgY DNT, dos casos paradigmáticos de articulación público-privada con impacto concreto en el sector.
Fruto del conocimiento
jetivo es “acelerar la transferencia de tecnologías pa-ra consolidar un modelo de gestión que facilite los procesos de innovación”. Sobre este aspecto, destacó la acción de la plataforma INCUINTA que promue-ve la fabricación industrial de los desarrollos cientí-ficos, así como los procesos de registro de propiedad intelectual.
En esta línea, Cerioni ponderó la integración de la Oficina de Vinculación Tecnológica con la empresa mixta INTeA, ya que “permite reorientar la transfe-rencia a los objetivos fundacionales y avanzar en una estrategia de comercialización directa de pro-ductos, software y servicios por parte del instituto”.
Entre otros logros, fruto de un convenio entre el INTA a través del Instituto de Patobiología y la Universidad Maimónides, se inauguró una unidad para el estudio de las técnicas de desarrollo de Organismos Animales Genéticamente Modificados (OAGM). Además, buscará producir ovinos y bovi-nos genéticamente modificados, y biomoléculas de interés farmacéutico y biomédico.
La planta del instituto ronda los 7.000 agentes –que se reducen considerablemente si sólo se cuentan aquellos con funciones directivas–, mientras que los representantes de la sociedad civil, del sistema científico-técnico y del sector productivo suman más de 2.000. Estas cifras denotan el grado de con-trol social, dado por la participación de referentes ex-ternos que, sin ser parte del INTA, representan a otras entidades en la toma de decisiones del gobier-no del instituto.
Como componente de la estructura, el Consejo Directivo –de orden nacional– nació con el instituto en 1956, cuya creación se formalizó a través del Decreto Ley N° 21.680/56. En tanto, el funciona-miento descentralizado de los consejos –regionales y locales– fue reconocido en 1987 mediante el Decreto Reglamentario 287 en pos de facilitar los procesos administrativos y orientar la gestión de la política científico-tecnológica hacia la resolución de problemáticas locales.
Ariel Scotta transita su segundo año como inte-grante del Consejo Regional Santa Fe, en represen-tación de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro). Por su trabajo con los productores y su conocimiento de la región –de gran ascendencia tambera–, fue elegido para de-sempeñar el rol, principalmente para relevar de-mandas productivas del norte de Santa Fe y de zo-nas aledañas de Córdoba.
“No es un sólo un organismo con-sultivo”, definió Scotta respecto de la actividad del consejo. “Le da la posibilidad al sector pro-ductivo, en este caso coopera-tivo, de que podamos ser un ida y vuelta entre el INTA y los productores; trasladar sus in-quietudes, escuchar sus propues-tas y colaborar en la toma de decisiones del institu-to”, amplió el técnico, quien pertenece a la Estación Experimental Agropecuaria de Rafaela.
Para Scotta, el consejo regional “es el órgano de unión entre las instituciones y los productores”. “Tratamos de que el funcionamiento del INTA sea
