Trasímaco y El Derecho Del Más Fuerte

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TRASMACO Y EL DERECHO DEL MS FUERTENicols ZavadivkerPublicado en Libro: Laaccinylosvalores, Asociacin Argentina de Investigaciones ticas -Regional Tucumn. Tucumn, 2003El presente trabajo tiene como objetivo la reconstruccin de la teora sobre la naturaleza de la justicia sostenida por Trasmaco de Calcedonia, notable sofista del siglo V antes de Cristo. Dicha tarea permitir adems ampliar nuestro conocimiento de las ideas antropolgico-polticas que circulaban en la tan reivindicada Atenas de su tiempo. La investigacin encarada se fundamenta en dospuntos: el valor intrnseco delas ideas de Trasmaco y, como contrapartida, la escasa atencin que suscitaron entreloshistoriadoresdelafilosofaantigua;y,principalmente,laactualidaddelpensamiento deestesofista,quesemanifiesta notanto enlosdiscursoscirculantes cuanto en lasprcticas polticas. La principal fuente con que hoy contamos para reconstruir las ideas de Trasmaco es LaRepblica de Platn, ms concretamente su Libro Primero. Como en todos los dilogos platnicos, LaRepblica est protagonizado por Scrates representante de la posicin del propio Platn-, quien va dialogando y discutiendo con los dems personajes que aparecen en escena. En el Libro Primero el principal contrapunto se produce entre Scrates y el sofista Trasmaco, ante un numeroso y expectante pblico. El eje de la discusin gira en torno a cul es la naturaleza de lajusticia.SobreestepuntolaposicindeTrasmacosesitaenlasantpodasdelaplatnica.Paraelsofistalojustonoesotracosaqueloqueconvienealms fuerte1.Trasmaco aclara que los ms fuertes o poderosos son quienes gobiernan las ciudades. En la poca en la que se desarrolla el dilogo, toda persona de edad haba vivido bajo distintos gobiernos e incluso bajo diferentes formas de gobierno, como1. Platn;La Repblica, Instituto de Estudios Polticos, traduccin de JosManuel Pabn y ManuelFernndez Galiano, Madrid, 1949, p. 23.la tirana, la aristocracia y la democracia. Segn Trasmaco, cada gobierno establece las leyes de su ciudad en vistas de su propio provecho, y declara que tanto stas como todo lo que a ellos les conviene es lo justo2. Consecuentemente, califican de injusto a quien contraviene las leyes y locastigan severamente. Escuchemos la exposicin ms completa que hace Trasmaco de sus ideas:[...] la justicia y lo justo es en realidad un bien ajeno, conveniencia para el poderoso y el gobernante y dao propio del obediente y sometido; y que la injusticia es lo contrario, y que gobierna a los que son de verdad sencillos y justos, y que los gobernados realizan lo conveniente para el que es ms fuerte, y sirvindole, hacen a ste feliz, pero de ninguna manera a s mismos. Hay que observar, candidsimo Scrates, que al hombre justo le vapeor entodas partesqueal injusto.Primariamente, enlas asociacionesmutuas, dondeuno se junta con otro; nunca vers que, al disolverse la comunidad, el justo tenga ms que el injusto, sino menos. Despus, en la vida ciudadana, cuando hay algunas contribuciones, eljusto conlos mismos bienescontribuye ms; elsegundo menos. Ycuando hay querecibir, el primero sale sin nada; el segundo, con mucho. Cuando uno de los dos toma el gobierno, al justo le viene, ya que no otro castigo, el andar peor por causa del abandono en sus asuntos privados, sin aprovechar nada de lo pblico por ser justo, y sobre ello, el seraborrecido de los allegados y conocidos cuando no quiera hacerles favor alguno contrajusticia; con el injusto todasesas cosas sedan en sentido contrario.Me refiero,en efecto, a aquel mismo que ha poco deca, al que cuenta con poder para sacar grandes ventajas: fjate,pues, en l si quieres apreciar cunto msconviene a su propio inters ser injusto que justo. Y lo conocers con la mxima facilidad si te pones en la injusticia extrema, que es la que hace ms feliz al injusto y ms desdichados a los que padecen la injusticia y no quieren cometerla. Ella es la tirana que arrebata lo ajeno, sea sagrado o profano, privado o pblico,pordolooporfuerza,noyaenpequeaspartes,sinoenmasa.Siuncualquieraesdescubierto al violar particularmente alguna de estas cosas, es castigado y recibe los mayores oprobios; porque, en efecto, se llama sacrlegos, secuestradores, horadadores de muros, estafadores o ladrones a aquellos que violan la justicia en alguna de sus partes con cada uno de estos crmenes. Pero cuando alguno, adems de las riquezas de los ciudadanos,2. Al respecto dice Trasmaco: ...cada gobierno establece las leyes segn su conveniencia: la democracia, leyes democrticas, la tirana, tirnicas; y delmismo modo los dems. Al establecerlas, muestran los que mandan que es justo para los gobernados lo que a ellos conviene, y al que se sale deesto lo castigan como violador de las leyes y de la justicia. Ibd, p. 24.

los secuestra a ellos mismos y los esclaviza, en lugar de ser designado con esos nombres de oprobio es llamado dichoso y feliz no slo por los ciudadanos, sino por todos los que conocen la completa realizacin de su injusticia; porque los que censuran la injusticia no la censuran por miedo a cometerla, sino a sufrirla. As, Scrates, la injusticia, si colma su medida, es algo ms fuerte, ms libre y ms dominador que la justicia; y como dije desde elprincipio,lojustosehallaserloconvenienteparaelmsfuerte,yloinjustoloqueaprovecha y conviene a uno mismo.3. En este largo prrafo se encuentran desarrolladas las ideas centrales de Trasmaco. Para comprenderlo es menester aclarar primero a quien se refera el calcedonio mediante la palabra injusto y a quien mediante la palabra justo. Porinjusto Trasmaco entiende a aquel que busca obtener ventajas sobre todos los dems, es decir, al hombre egosta, el que quiere todo para s y se vale de los otrospara alcanzar su propio beneficio. El justo, en cambio, es aquel rige su conducta de acuerdo a la ley, nobuscandoobtenerventajaspersonales.Loquelocaracterizaessuobediencia,elsometerse a la ley dictada por el ms fuerte y el hecho de que pese a que padecen la injusticia no quierencometerla. El hombre justo es lo contrario del hombre egosta, ya que no desea obtenerventajassobrelosdems.Secaracterizaporsusencillez(queconnotarapeyorativamentemediocridad,ingenuidadyfaltadeambiciones)yporlacomplacencia que exhibe ante las pretensiones impuestas por los otros. En otraspartes del texto se sugiere que el justo lo es, en parte, debido a su debilidad. Realizadas estas caracterizaciones, comenzaremos por la interpretacin delprrafoantes citado.La justiciaparece serunmedio delcual sevale elquemandaparaobtenerprovechodelqueobedece,esdecir,dequienactadeacuerdoalaspautas impuestas por el poderoso. El obediente o justo trabaja as en pos de intereses ajenos, abandonando los propios.3. Platn;Ibid, p. 34-35. Si bien Glaucn pretende retomar y ofrecer una exposicin ms adecuada de laposicin defendida porTrasmaco, me pareceque existen diferencias significativas entreambas posturas, de modo tal que notomar los dichos de Glaucn comoparte de las ideas delcalcedonio que sern analizadas.

La superioridad de ser injusto a ser justo queTrasmaco defiende- se percibe en el hecho de que las relaciones mutuas entre ellos siempre benefician al primero en detrimento del segundo. Esta asimetra se verifica por caso- en las asociaciones comerciales, donde la persona con menos escrpulos se queda con la mejor tajada cuando sta se disuelve. De modo similar, el injusto siempre sale ms beneficiado que el justo en toda circunstancia, por ejemplo eludiendo en la medida de lo posible las contribuciones exigidas por el Estado y acaparando los beneficios que pueden obtenerse de ste. De las ideas precedentes puede deducirse que la figura del injusto no slo incluye a los gobernantes (y, como veremos, no a todos ellos), sino tambinacualquiersbdito,yaquenotodosellossonjustosniestndispuestosasubordinarse en todo al Estado. Tambin una persona que no intenta aprovecharse de las dems sino serimparcial y beneficiar al conjunto puede llegar a la administracin del Estado. Pero el destino que le espera al poltico honesto no es de los mejores. Por un lado dejar sucargoconmenosdineroqueantes,puestoquesupreocupacinporlaadministracin pblica le llevar a descuidar su propia economa. Por el otro, sus amigos y parientes menos dispuestos a fines altruistas - se sentirn traicionados porno haberlos favorecidos valindose de su posicin. El poltico injusto que alcanza el gobierno, en cambio, no hace ms queliberarsedesusescasasrepresionesadquiridasaregaadientesypormeraconveniencia- y amplificar su egosmo sobre la base del nuevo poder alcanzado. Elparadigma del hombre injusto quealcanza el poder esel del tirano quien, carente de todo escrpulo moral, se vale de todos los medios a su alcance -fraude, ejercicio dela violencia, etc.- para realizar sus metas. Estas no son otra cosa que la apropiacin de los bienes y fortunas del Estado y de los particulares, sin las sutilezas que caracterizaran a un gobernante injusto enun grado menor. Es probable que todo ateniense que escuchase estas ideas haya tenido una referencia emprica de los tipos depersonajes de los queTrasmaco estaba hablando, as como la tenemos tambin hoy en da. Al parecer estas ideas eran bastante populares por esetiempo (el texto platnico lo sugiereconstantemente), lo que en s mismo es muestra de una profunda crisis simblica del universo griego tradicional y del sistema de legitimacin de las acciones, cuya consecuencia visible era un marcado individualismo en las conductas sociales. Nada cuesta establecer toda serie de paralelismos con el mundo que hoy nos toca vivir, con la significativa diferencia de que la crisis griega hizo posible el surgimiento de algunos de los ms grandespensadores de toda la humanidad. Pero volvamos a Trasmaco. El calcedonio reconoce que nada bien le va a laspersonas claramente injustas quelogran ser atrapadas.Los delincuentes sonun casoparticular de hombresinjustos, puesto quebusca su propiobeneficio sin someterse a la ley. Por ello, en la medida que son capturados, son pblicamente castigados y denostados por todos. Pero al que logra ser injusto en un grado ms elevado, es decir, quien adems de injusto llega a ser muy poderoso, el destino que le espera es muy diferente. Trasmaco alude al tirano que adems de apropiarse de los bienes de los ciudadanos los esclaviza: ste no slo no es denostado sino que se lo mira como un hombre que alcanz la felicidad, an a sabiendas de los crmenes en que incurri. Y remata diciendo que las condenas morales contra la injusticia en realidad no son otra cosa que un intento por protegerse de ella, es decir, por disuadir a los dems de que la cometan porque se teme ser su vctima. Lostemores de ser productor de injusticia, en cambio, noatormentaran al moralista de turno. En esta cosmovisin el hombre es percibido como un ser egosta posedo poruna sed de poder. La satisfaccin de sus intereses depende en gran medida de su habilidad y de su fuerza para triunfar. As el hombre egosta puede resultar, porejemplo, un ladrn de poca monta o un jefe de gobierno. Existen tambin hombres con menores pretensiones, dispuestos a someterse al injusto de turno o a las reglas de los poderosos: son para Trasmaco los eternos perdedores de todos los regmenes y de todas las relaciones humanas.El orden jurdico es visto como un intento de los poderosos por mantener a raya a sus dominados a la vez que obtener provecho de ellos, mientras que la moralidad es percibida como una forma de hipocresa, o bien de conformismo del hombre simple, carente de aspiraciones.LA JUSTICIA COMO CONVENIENCIA DEL MS FUERTEA veces no se advierte el carcter metatico que, segn creo, posee la definicin de justicia dada por Trasmaco (lo justo no es otra cosa que lo que conviene al ms fuerte). El sofista no est diciendo al menos primariamente- que lo que beneficia al ms fuerte es verdaderamente justo. Lo que est queriendo decires que lo que suele considerarse justo no es otra cosa que lo que la autoridad instituda es decir, el fuerte- declar como tal, y en vistas de sus propios intereses. sta ltima no es la definicin de un valor, sino una afirmacin fctica sobre lo que socialmente suele considerarse justo. Que esto es as se advierte en el hecho de que Trasmaco sostiene que los autnticos gobernantes son injustos y que las leyes por l dictadas le permiten desplegar su injusticia 5. El calcedonio no podra sostener esto mismo a la vez que declarar que todas lasleyes son verdaderamente justas. Es altamente probable que el mismo Trasmaco no tuviera clara la distincin sealada entre lo que hoy llamamos nivel tico y nivel metatico, y que no hiciera mayores diferencias entre la afirmacin descriptiva segnla cual solemos considerarjustoaloquelosgobernantesdefinencomotal,yelenunciadovalorativode4 En este punto considero quela posicin de Trasmaco es sustancialmente diferente de la expuesta en elLibro II de LaRepblica por Glaucn, segn la cual la ley tiene por objeto la mutua defensa de los ciudadanos frente a los peligros de la anomia. La ley, en la posicin expuesta por Glaucn, acta en beneficio de los sbditos; no en su perjuicio.5 Si se creyera encambio que la definicin de Trasmaco explicita lo que paral realmente es justo, resultara que los poderosos son justos yno injustos. Sin embargo, el autor afirma reiteradas veces lo contrario. Acuerdo al cual todo lo que prescribe una autoridad es realmente justo6. Pero la distincin puede hacersefcilmente.Nadie acusara a Marx, por ejemplo, de defender elcarcter justo de las leyes en el marco de una sociedad de clases cualquiera. Y sin embargo Marx sostena, de modo similar a Trasmaco, que las ideas dominantes en cualquier poca no han sido nunca ms que las ideas de la clase dominante7. De modo que esta misma afirmacin descriptiva puede ser usada tanto para cuestionar a las ideas dominantes como para defenderlas, lo que prueba que ella misma no est adherida a una valoracindeterminada.TraduciendolaposturadeTrasmacoalaexpresinmarxista, lo que el sofista habra sostenido sera que las ideas dominantes dejusticiaylasnormasjurdicasencualquierpocanohansidonuncamsquelasideas impuestas por los gobernantes. El cinismo de Trasmaco tampoco ofrece dudas sobre su propia posicin axiolgica ante el hecho de que el fuerte sea el que pone las reglas: el sofista da sobradas muestras de no tener ninguna objecin moral a tal proceder. Pero eso no significa necesariamente que defienda, como a veces se ha credo, que lo justoDebe conveniralpoderoso,enelsentidonormativodelverbodeber.NoesqueTrasmaco apoye el derecho del ms fuerte en el sentido estricto de derecho, como algo que puede ser reivindicado ante determinada instancia-, sino que sencillamente no presenta objeciones morales ante el hecho deque la fuerza sea la causa motoradelas cosas. En rigor, para Trasmaco no hay ningn conflicto entre el derecho y la fuerza, puesto que para l loque suele llamarse derecho no esotra cosa que la fuerza institucionalizada. Caracterizar, finalmente, la concepcin de la justicia como conveniencia del msfuerte.Talopininimplicaelcarcterrelativodelajusticia:loqueseconsiderar justo depender eventualmente de la voluntad y del inters del gobierno de turno. No existe algo as como la Idea de Justicia, sino que este valor es definido en base a los cambiantes intereses humanos, particularmente de los ms poderosos. Se trata asimismo de una concepcin formal de la justicia, puesto que su contenido no es fijo sinoque vara en funcin de dichos intereses. 6 De hecho, como veremos, Trasmaco no parece creeren la existencia de algo realmente justo, ms all delo instituido por el hombre, por loque su definicin de justicia nopretendera ser valorativa.7.Karl Marx; ManifiestodelPartidoComunista , p. 47. Marx inclua dentro de las ideas dominantes a las valoraciones morales yjurdicas.8. Enrigordeverdad,paraTrasmacolojustonoexiste: loquesuele considerarse tal no es ms que una de las formas en que la injusticia se manifiesta. Dicho de otra manera: cuando la injusticia del poderoso se manifiesta a travs de las leyes, se lallama justicia. Para concluir, y anticipando algunos comentarios que este trabajo podrasuscitar,permtasemerecordarquerechazarunaideadebidoaquesusconsecuencias pudiesen resultar nocivas es un procedimiento legtimo y hasta inevitable- slo si es realizado desde un punto de vista moral o poltico, es decir, si se analizan las cosas a partir de la que pregunta por el qu debemos hacer. Desde el punto de vista del conocimiento, en cambio, donde lo que est en juego es la verdad, este mismo rechazo el negar una idea por sus consecuencias indeseables-constituye una falacia.As,porejemplo,resultarainsensatocuestionaraungelogoquehapredichounfuerteterremoto paraelao2020,sloporquenoqueremos sufrirese terremoto. Las mismas precauciones tnganse entonces- para con las ideas de Trasmaco.8 La nica existencia positiva de lo justo sera, noobstante, como propiedad o caracterstica de cierta tipologa de hombres, a los queTrasmaco desprecia.