Tormenta

Todo se despierta con una tormenta en mi

interior, inicia con una suave brisa que toca

los arboles y que hace que las ramas se

resquebrajen, y las hojas vuelen al chocarse

unas con otras. Todo crece continuamente

hasta que aquella fuerza contenida sale y

los relámpagos y rayos iluminan aquel cielo

gris, y su sonido retumba en mis oídos,

como lo hace mi corazón, cuando estoy a tu

lado, y ahí, es donde encuentro la libertad,

aquella que es encontrada por la lluvia y el alivio que siente esa nube cargada de

esperar el momento exacto. Todo va

fluyendo cono lo hace el agua de los ríos y

las quebradas, siguiendo el camino que ha

sido trazado; y va desapareciendo la

oscuridad que con si, trae la luz, esta entra

en mi vida y me da la fuerza para

mostrarte ese paraíso que se esconde,

tras el bosque de mi inseguridad, difícil de

cruzar, pero tu voz es el mejor camino a

seguir, esa dulzura, me da la capacidad de

olvidar tantos malos recuerdos en mi mente y me atrevo, me atrevo a abrir mi boca

y mi corazón para que escuches todas las

palabras estas palabras contenidas por mucho

tiempo como la lluvia, pero al fin libres por el

desencadenante de tus ojos, el color rojo como

una rosa de tus labios y el brillo deslumbrante de

tu cabello; y me doy cuenta que después de la

tormenta llega la calma, que me da cada uno de

tus besos, tus abrazos y todos los momentos en

que toco las estrellas cuando estoy a tu lado.