TESIS DOCTORAL EFECTIVIDAD DE LA PSICOTERAPIA BREVE EN …

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UNIVERSIDAD DE ALMERÍA DEPARTAMENTO DE PSICOLOGÍA TESIS DOCTORAL EFECTIVIDAD DE LA PSICOTERAPIA BREVE EN EL TRATAMIENTO DE LOS TRASTORNOS MENTALES COMUNES EN LOS SERVICIOS PÚBLICOS DE SALUD MENTAL: ENSAYO CLÍNICO CON DISEÑO DE DOS GRUPOS ALEATORIZADOS CON EVALUACIÓN PRE Y POST TRATAMIENTO. Marco Antonio Luengo Castro Almería, 2014

Transcript of TESIS DOCTORAL EFECTIVIDAD DE LA PSICOTERAPIA BREVE EN …

UNIVERSIDAD DE ALMERÍA

DEPARTAMENTO DE PSICOLOGÍA

TESIS DOCTORAL

EFECTIVIDAD DE LA PSICOTERAPIA BREVE EN EL

TRATAMIENTO DE LOS TRASTORNOS MENTALES COMUNES EN

LOS SERVICIOS PÚBLICOS DE SALUD MENTAL: ENSAYO

CLÍNICO CON DISEÑO DE DOS GRUPOS ALEATORIZADOS CON

EVALUACIÓN PRE Y POST TRATAMIENTO.

Marco Antonio Luengo Castro

Almería, 2014

UNIVERSIDAD DE ALMERÍA

DEPARTAMENTO DE PSICOLOGÍA

TESIS DOCTORAL

EFECTIVIDAD DE LA PSICOTERAPIA BREVE EN EL

TRATAMIENTO DE LOS TRASTORNOS MENTALES COMUNES EN

LOS SERVICIOS PÚBLICOS DE SALUD MENTAL: ENSAYO

CLÍNICO CON DISEÑO DE DOS GRUPOS ALEATORIZADOS CON

EVALUACIÓN PRE Y POST TRATAMIENTO

AUTOR: Marco Antonio Luengo Castro

DIRECTOR: Dr. José Manuel García Montes

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

I

“Las cosas son imposibles hasta que dejan de parecerlo”

A Miguel, Ismael, Nicolás y Marga porque son el centro de mi mundo y este es el fruto

del trabajo del tiempo que no les dediqué.

A mis padres Isabel y Benjamín, a hermanos Alejandro y Borja, a demás familia y a mis

amigos pasados y presentes, porque solo puedo explicarme a mi mismo por ellos.

A los que sufren y les hacemos creer que su trastorno mental cae del cielo. Vaya aquí

una aportación para que les ayudemos a mirar de frente, hacia atrás, alrededor y hacia

dentro y no esperar al mana también caído del cielo.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

II

AGRADECIMIENTOS

A Javier Fernández, amigo, coordinador del grupo de investigación y verdadero

artífice de este proyecto.

Al resto del equipo de investigación, Andrés Cabero, Begoña Braña, Juan García,

Lola González, Marcelino Cuesta y Pedro Caunedo.

A los pacientes que participaron en la investigación, porque altruistamente nos han

dado su tiempo y nos han cedido el acceso periódico a su mundo.

A la Unidad de Coordinación de Salud Mental del Principado de Asturias (Javier

Montejo, Beatriz Camporro, Margarita Eguigaray, Julio Fernández y los que fueron

llegando) por su apoyó a la investigación y la financiación del trabajo de María

Ursuguía.

A las compañeras y compañeros de los Centros de Salud Mental, a Ricardo Onís y a

los médicos de familia que de una u otra forma han participado en la investigación.

A Pepe García Montes, mi director de Tesis, por haber hecho posible la plasmación

de un trabajo clínico en una Tesis Doctoral y por ver soluciones donde otros ven

problemas.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

III

INDICE

1. ABSTRACT / RESUMEN........................................................................................... 1

2. PRESENTACIÓN ........................................................................................................ 5

3. MARCO CONTEXTUAL DE LA INVESTIGACIÓN............................................... 8

3.1 Epidemiología de los trastornos mentales comunes ............................................... 8

3.2 Abordaje actual de los trastornos mentales comunes ........................................... 10

3.3 Ensayos clínicos convencionales que avalan la efectividad de los tratamientos psicológicos en los trastornos mentales comunes....................................................... 13

3.4 Los ensayos clínicos en los Servicios públicos de salud mental ......................... 17

3.5 Ensayo clínico con evaluación post tratamiento................................................... 21

4. PERSPECTIVA TEÓRICA DE LA INTERVENCIÓN............................................ 24

4.1 El Programa de Psicoterapia Breve ...................................................................... 24

4.2 Fundamentos teóricos y psicoterapéuticos ........................................................... 26

5. OBJETIVOS E HIPÓTESIS DEL ESTUDIO .......................................................... 36

6. MÉTODO................................................................................................................... 37

6.1 Diseño metodológico............................................................................................ 37

6.2 Análisis de los datos ............................................................................................. 40

6.3 Participantes ......................................................................................................... 41

6.3.1 Pacientes.................................................................................................... 41

6.3.2 Terapeutas ................................................................................................. 48

6.4 Variables e instrumentos de medida..................................................................... 49

6.4.1 Resultado clínico-administrativo............................................................... 50

6.4.2 Estado Clínico según el paciente............................................................... 50

6.4.3 Grado de discapacidad según el paciente ................................................. 52

6.4.4 Satisfacción del usuario respecto al tratamiento ...................................... 52

6.4.5 Consumo de psicofármacos ....................................................................... 53

6.4.6 Índice de Recuperación ............................................................................. 53

6.5 Tratamientos ......................................................................................................... 54

6.5.1 El Programa de Psicoterapia Breve del Grupo Experimental .................. 54

6.5.2 Descripción empírica del tratamiento de Terapia Breve (Ver tabla 4) ..... 60

6.5.3 Descripción Empírica del Tratamiento Habitual ...................................... 63

6.6 Procedimiento....................................................................................................... 66

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

IV

6.7 Análisis de los sujetos participantes en la investigación y los que cumpliendo criterios de inclusión no lo hicieron ........................................................................... 67

6.8 Análisis de los sujetos que completaron el tratamiento frente a los que no lo completaron (Ver tabla 5)........................................................................................... 68

6.9 Análisis de los sujetos que participaron en los seguimientos psicométricos en cada momento temporal frente a los que no lo hicieron ..................................................... 69

7. RESULTADOS .......................................................................................................... 74

7.1 Comparación entre-grupos de resultados a los 6 meses (Ver Tabla 6) ................ 74

7.2 Comparación entre-grupos de resultados al año (Ver tabla 7) ............................. 78

7.3 Comparación entre-grupos de resultados a los 2 años (Ver tabla 8) .................... 82

7.4 Comparación entre-grupos de resultados a los 3 años (Ver tabla 9) .................... 86

7.5 Comparación entre-grupos de resultados al final del tratamiento (Ver tabla 10). 88

7.6 Evolución intra-grupo de ambos grupos de tratamiento a lo largo de los 3 años. 94

7.7 Análisis del resultado de las personas que fueron Alta (Ver tabla 11)............... 107

7.8 Análisis del Resultado de las personas que Abandonaron (Ver tabla 12) .......... 111

8. CONCLUSIONES.................................................................................................... 115

8.1 Análisis entre-grupos.......................................................................................... 115

8.2 Análisis Intra-grupo............................................................................................ 116

9. DISCUSIÓN............................................................................................................. 119

9.1 Comprobación de Hipótesis iniciales ................................................................ 119

9.2 Interpretación de los resultados .......................................................................... 121

9.3 Nuestros resultados a la luz de la literatura científica ........................................ 126

9.4 Limitaciones del presente estudio....................................................................... 128

9.5 Implicaciones de los resultados del estudio........................................................ 133

10. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFÍCAS ................................................................... 137

ANEXO 1. TABLAS.................................................................................................... 152

Tabla 1. Casos excluidos y casos perdidos............................................................... 153

Tabla 2. Características socio-demográficas de la muestra...................................... 154

Tabla 3. Características clínicas pre-tratamiento...................................................... 156

Tabla 4. Descripción empírica de los tratamientos................................................... 159

Tabla 5: Comparación de los sujetos que completaron tratamiento y los que no .... 163

Tabla 6. Comparación entre-grupos de resultados a los 6 meses ............................. 168

Tabla 7. Comparación entre-grupos de resultados al año......................................... 171

Tabla 8. Comparación entre-grupos de resultados a los 2 años................................ 174

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

V

Tabla 9. Comparación entre-grupos de resultados a los 3 años................................ 177

Tabla 10. Comparación entre-grupos de resultados al final del tratamiento ............ 179

Tabla 11. Análisis de resultados de las Altas de ambos grupos ............................... 181

Tabla 12. Análisis de resultados de los Abandonos de ambos grupos ..................... 185

Tabla 13. Resumen de Resultados en las Variables más representativas en los distintos momentos temporales. ............................................................................... 190

Tabla 14. Resumen de las Diferencias y Significación estadística en los distintos momentos temporales. .............................................................................................. 191

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

VI

INDICE DE FIGURAS

Figura 1. Diseño de la Investigación ............................................................................. 38

Figura 2. Edad al inicio del tratamiento ......................................................................... 44

Figura 3. Tiempo de evolución del trastorno previo al inicio del tratamiento ............... 45

Figura 4. Distribución de los Diagnósticos agrupados en ambos grupos....................... 47

Figura 5. Distribución de las puntuaciones en la Escala de Gravedad de la Impresión Clínica Global antes de iniciar el tratamiento ................................................................ 48

Figura 6. Estructuración temporal de la Terapia Breve.................................................. 57

Figura 7. Esquema de Diferenciación............................................................................. 58

Figura 8. Esquema de Componentes .............................................................................. 58

Figura 9. Plantilla de Revisión de Tareas ....................................................................... 60

Figura 10. Número de sesiones de tratamiento hasta los 3 años .................................... 61

Figura 11. Duración del tratamiento hasta los 3 años..................................................... 62

Figura 12. Tipo de tratamiento aplicado en cada grupo ................................................. 63

Figura 13. Duración de los Tratamientos ....................................................................... 65

Figura 14. Situación Clínico-Administrativa a los 6 meses ........................................... 75

Figura 15. Escala de Cambio ICG-C a los 6 meses........................................................ 76

Figura 16. Escala SDI a los 6 meses............................................................................... 77

Figura 17. Situación Clínico-Administrativa al año....................................................... 79

Figura 18. Escala de Cambio ICG-C al año ................................................................... 80

Figura 19. Escala SDI al año .......................................................................................... 81

Figura 20. Situación Clínico-Administrativa a los 2 años.............................................. 83

Figura 21. Escala de Cambio ICG-C a los 2 años .......................................................... 84

Figura 22. Escala SDI a los 2 años ................................................................................. 85

Figura 23. Situación Clínico-Administrativa a los 3 años.............................................. 87

Figura 24. Número de sesiones hasta los 3 años ............................................................ 89

Figura 25. Dosis-Efecto de Tratamiento Experimental .................................................. 91

Figura 26. Dosis-Efecto de Tratamiento Habitual.......................................................... 92

Figura 27. Evolución de la situación Clínico-Administrativa durante los 3 años .......... 95

Figura 28. Evolución de la Tasa de Retornos durante los 3 años................................... 96

Figura 29. Evolución ICG-C “Mejoría Sustancial” durante los 2 años.......................... 97

Figura 30. Evolución ICG-C “Igual o peor” durante los 2 años..................................... 98

Figura 31. Evolución SCL-90 durante los 2 años........................................................... 99

Figura 32. Evolución SDI durante los 2 años............................................................... 100

Figura 33. Evolución de las Tasas de Recuperación durante los 3 años ...................... 101

Figura 34. Evolución Consumo de Psicofármacos durante los 3 años......................... 102

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

VII

Figura 35. Evolución en Consumo de Psicofármacos de sujetos que llegaron al CSM consumiéndolos ............................................................................................................ 103

Figura 36. Evolución en Consumo de Psicofármacos de sujetos que llegaron al CSM sin consumirlos................................................................................................................... 104

Figura 37. Cantidad media de consumo de Antidepresivos durante los 3 años ........... 106

Figura 38. Cantidad media de consumo de Benzodiacepinas durante los 3 años ........ 106

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

VIII

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

1

1. ABSTRACT / RESUMEN

Abstract

There are effective treatments for common mental disorders (affective,

anxiety and adaptation disorders), but with little validation in terms of application

in the Public Health Services. The aim of this Doctoral Thesis is to study the

effectiveness of a Brief Psychotherapy Program and compared it with Standard

Treatment of Common Mental Disorders at the Public Mental Health Centers of

Asturias.

In this Multicentre Randomized Controlled Trial participate 144 adult

subjects who consulting for the first time on 5 Mental Health Centers of the

Asturias Public Health Service and were diagnosed of depressive, anxiety and / or

adaptation disorders. They were randomly assigned to two treatment groups, the

Experimental group (Brief Psychotherapy Program) and Control group (Standard

Treatment mainly pharmacological basis). There were evaluations in pretreatment

and at 6, 12, 24 and 36 months after the treatment started. Both groups were

compared in clinical status variables, psychosocial function and health indicators

of treatment and use of services. To collecting the data there were using different

psychometric instruments, the medical records and several registers of the

Services. To measure the symptoms we have used the Guy´s Severity Scale of

Clinical Global Impression (ICG-G), the Change Scale of the Clinical Global

Impression (ICG-C) and Derogartis´s Symptom Check List-90-R (SCL-90-R). To

measure the performance level in different areas of everyday life we have used the

Sheehan Disability Inventory (SDI) and for patient satisfaction the Moré and

Muñoz Satisfaction Questionnaire.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

2

The Brief Psychotherapy group had an average of 7 sessions and lasts for 7

months compared to 6.17 sessions and 11th months of the Standard Treatment. At

6 months the Standard Treatment -in 70% of cases was solely

psychopharmacological treatament- obtain better goals than the Brief

Psychotherapy program in clinical and symptomatic improvement according to

ICG and SCL-90-R scales and similar in disability levels and discharge rates. In

successive follow the progression of improvement is not maintained. At the first

year the Control group suffered clinical deterioration according ICG-C and SCL-

90 scales. At second year the level of disability worsens in the Control Group at

similar levels of baseline. The Brief Psychotherapy Program has a pattern of

continued improvement from the first sessions and in subsequent monitoring. In

the beginning his recovery is slow and more modest, but from the year and

beyond will show more effective than Standard Treatment in the different

improvement criteria used: released rates, symptoms improvement, diminishment

of extent of disability and not needing treatment. The level of user satisfaction

was similar in both groups.

After analyzing the data it can be concluded that the Brief Psychotherapy

Program has proven to be a viable and effective option. At two and three years

obtained recovery rates close to 80% of subjects. Standard Treatment obtained

recovery rates between 49-54%. Although short-term -the first 6 months until the

first year- the results are quite similar in both groups, medium and long-term -at

two and three years-, the Brief Psychotherapy Program is more effective, more

lasting effects and with less resource use than the Standard Treatment for

Common Mental Disorders in the Public Mental Health Centers.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

3

Resumen

Existen tratamientos efectivos para los trastornos mentales comunes

(afectivos, de ansiedad y adaptación), pero con escasa validación en condiciones

de aplicación de los Servicios Públicos de Salud. El objetivo de la presente Tesis

Doctoral es estudiar la efectividad de un Programa de Psicoterapia Breve y

compararla con el Tratamiento Habitual de los trastornos mentales comunes

(TMC) en los Centros de Salud Mental (CSM) públicos de Asturias.

Para ello se realiza un Ensayo Clínico Aleatorizado Multicentro en el que

participan 144 sujetos mayores de 18 años que consultaban por vez primera en 5

CSM de los Servicio de Salud del Principado Asturias y que fueron

diagnosticados de trastornos depresivos, de ansiedad y/o adaptativos. Se asignaron

aleatoriamente a dos grupos de tratamiento, el Experimental (Programa de

Psicoterapia Breve) y el Control (Tratamiento Habitual, de base principalmente

farmacológica). Se realiza una evaluación en el pre-tratamiento y a los 6, 12, 24 y

36 meses del inicio del tratamiento. Se comparan ambos grupos en variables de

estado clínico, funcionamiento psicosocial e indicadores sanitarios de tratamiento

y uso de servicios. Además de recoger variables clínico-administrativas y de

tratamiento que constan en la historia clínica y en el Registro de los Servicios, se

han usado diferentes instrumentos psicométricos. Para medir la sintomatología

presente se han utilizado la Escala de gravedad de la Impresión Clínica Global

(ICG-G), la Escala de cambio o mejoría de la Impresión Clínica Global (ICG-C)

de Guy y el SCL-90-R (Symptom Check List-90) de Derogatis. Para medir el

nivel funcionamiento en las diferentes áreas de la vida cotidiana el Inventario de

Discapacidad de Sheehan (SDI) y para la satisfacción de los pacientes con el

tratamiento el Cuestionario de Satisfacción de Moré y Muñoz.

El Grupo de Psicoterapia Breve ha tenido una media de 7 sesiones y una

duración de 7 meses frente a las 6,17 sesiones y 11 meses de duración del

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

4

Tratamiento Habitual. A los 6 meses el Tratamiento Habitual -que en el 70% de

los casos fue exclusivamente psicofarmacológico- obtiene mejores resultados que

el Programa de Psicoterapia breve en mejoría clínico-sintomatológica según

escalas ICG-C y SCL-90-R y similares en nivel de discapacidad y tasa de altas.

En los seguimientos sucesivos no se mantiene la progresión de la mejoría. A partir

del año el Grupo Control sufre un empeoramiento clínico-sintomatológico según

las escalas ICG-C y SCL-90. El nivel de discapacidad de este grupo empeora a los

dos años hasta situarse en niveles similares al inicio del tratamiento. El Programa

de Psicoterapia Breve tiene un patrón de mejoría continuada desde el primer

seguimiento y en los sucesivos. En el inicio su mejoría es más modesta, pero a

partir del año y en adelante se va mostrando más efectivo que el Tratamiento

Habitual en los distintos criterios de mejoría utilizados: tasa de altas, mejoría

clínico-sintomatológica, disminución del grado de discapacidad y no

requerimiento de tratamiento. El nivel de satisfacción de los usuarios es similar en

ambos grupos.

Una vez analizados los datos se puede concluir que el Programa de

Psicoterapia Breve ha resultado ser una opción viable y efectiva. A los dos y tres

años obtiene tasas de recuperación cercanas al 80% de los sujetos. El Tratamiento

Habitual obtiene tasas de recuperación de entre el 49-54%. Aunque a corto plazo -

los primeros 6 meses y hasta el año- los resultados son bastante similares en

ambos grupos, a medio y largo plazo –a los dos y tres años- el programa de

Psicoterapia Breve resulta más efectivo, con efectos más duraderos y con menor

utilización de recursos que el Tratamiento Habitual para los Trastornos mentales

comunes en los Centros de Salud Mental públicos.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

5

2. PRESENTACIÓN

Esta Tesis Doctoral se enmarca en una línea de investigación más amplia

desarrollada por un grupo de profesionales de Salud Mental del Servicio de Salud

del Principado de Asturias (SESPA) desde hace una década. El objetivo

fundamental de esta línea es la mejora de la Atención que se está realizando a las

personas que presentan trastornos mentales y que acuden a los Servicios Públicos

de Salud.

Es una realidad que en nuestro país la práctica diaria en los Servicios de

Atención Primaria (A.P.) y de Salud Mental siguen una inercia que no se

corresponde con las Recomendaciones de las Guías de Clínicas Internacionales, y

sobre todo en lo referido a plantear tratamientos efectivos que no sean

farmacológicos, especialmente los tratamientos psicológicos.

Por ello nuestra línea de investigación centra su trabajo en el estudio de los

Tratamientos Psicológicos, la adaptación de los mismos a la práctica diaria en los

Centros de Salud Mental y el análisis de su efectividad, costes, eficiencia y

viabilidad. Y todo ello tomando como referente para la comparación la atención

que actualmente se está realizando en los Servicios Públicos.

El trabajo que se desarrolla en esta Tesis Doctoral es un eslabón más en ese

proceso y se centra en el estudio de la efectividad de un modelo concreto de

Psicoterapia Breve a través de un Ensayo Clínico.

A continuación se realiza un breve resumen de cómo se distribuye el

contenido de la Tesis Doctoral.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

6

La primera parte está dedicada a exponer el estado de la cuestión en

relación a los trastornos mentales comunes, su epidemiología, el abordaje que

actualmente se está haciendo de los mismos y las recomendaciones clínicas

respecto a los tratamientos indicados. También en este capítulo se exponen los

resultados previos que habíamos obtenido en un Ensayo Clínico anterior. A

continuación se plantean los objetivos e hipótesis del estudio.

Los contenidos de la segunda parte se centran en la Metodología. Se

explica el diseño metodológico, las características de los participantes y las

variables e instrumentos de medida. También se exponen los fundamentos

teóricos del tratamiento de Psicoterapia Breve y se realiza una descripción de este

tratamiento Experimental y del Tratamiento Habitual con el que se compara. Por

último en este capítulo se plantean unos primeros análisis para asegurar la validez

del estudio. Dado que no todos los sujetos que cumplían criterios de inclusión

participaron, ni todos los que iniciaron tratamiento lo completaron, o que hubo

muchos sujetos que no participaron en los diferentes seguimientos psicométricos

que se realizaron, se hizo necesario realizar un análisis de estos sujetos

comparándolos con sus opuestos y también comprobando si había diferencias en

ambos grupos de tratamiento que indicaran que no eran equivalentes para la

comparación de resultados.

La tercera parte está dedicada a los Resultados. Se realiza una

comparación de resultados entre-grupos en los distintos momentos de evaluación:

a los seis meses, al año, a los dos años y a los tres años. Después se hace un

análisis de la evolución intra-grupo durante los tres años y finalmente se analizan

y comparan los resultados de los sujetos que fueron Alta y los que fueron

Abandono en ambos grupos de tratamiento.

La última parte está dedicada a presentar las conclusiones del estudio,

comprobar las hipótesis iniciales, reflexionar sobre el presente de la atención a las

personas con Trastorno Mental Común y analizar las implicaciones de nuestros

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

7

resultados en relación a las posibles líneas estratégicas futuras en los Servicios de

Salud Mental públicos.

Dado el elevado número de variables de resultado estudiadas en cada

momento temporal son decenas los análisis realizados. Para facilitar un

acercamiento más detallado a los mismos hemos optado por incluir como Anexo

las Tablas con los análisis más importantes.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

8

3. MARCO CONTEXTUAL DE LA INVESTIGACIÓN

3.1 Epidemiología de los trastornos mentales comunes

En lo referido a los trastornos mentales en general debemos señalar en

primer lugar que se trata de una cuestión cuya dimensión es enorme. En su

conjunto constituyen la causa más frecuente de carga de enfermedad en Europa,

por delante de las enfermedades cardiovasculares y del cáncer (Andlin-Sobocki &

Rössler, 2005). La depresión unipolar figura como tercera causa de carga de

enfermedad, detrás de la isquemia coronaria y de los accidentes cerebro-

vasculares (Olesen & Leonardi, 2003).

La investigación ha tratado de determinar el alcance que estos trastornos

suponen en términos no solo de sufrimiento y malestar, también de incapacidad,

comorbilidad, riesgo de muerte o costes económicos. Los trastornos mentales

producen gran desajuste personal en el área del trabajo, las relaciones sociales, las

actividades cotidianas o las relaciones íntimas (Kessler et al. 2003). En lo referido

al coste económico no existen suficientes datos para valorar de manera precisa lo

que esta carga de enfermedad supone en Europa, pero se estima que está entre el 3

y el 4% del PIB, por encima de los 182.000 millones de euros anuales, de los

cuales el 46% corresponde a costes sanitarios y sociales directos, y el resto a

gastos indirectos debidos a la pérdida de productividad, asociada

fundamentalmente a la incapacidad laboral (Andlin-Sobocki & Rössler, 2005). En

España se estima que solo el gasto anual en depresión es de 5.005 millones de

euros (Valladares, Dilla, & Sacristán, 2008), lo que representa un coste medio por

paciente deprimido de 3.042,45 euros al año. Un coste alto que duplica el gasto

medio sanitario por habitante en España, que según cifras de la OCDE es de

1713,5 euros (Casajuana & Romea, 2009).

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

9

Los trastornos del estado de ánimo (distimia y episodio depresivo mayor

unipolar) y los trastornos de ansiedad (trastorno de ansiedad generalizada,

trastorno de pánico, trastornos fóbicos y trastorno por estrés postraumático) que

no requieren habitualmente la intervención de más de un profesional son

denominados Trastornos Mentales Comunes (TMC) (Ministerio de Sanidad y

Consumo [MSC], 2007). El European Study of the Epidemiology of Mental

Disorders (ESEMeD) es un importante estudio de base poblacional sobre los

trastornos mentales comunes realizado en seis países europeos, incluida España.

En este estudio se determinó que la tasa de prevalencia-vida en Europa para los

trastornos mentales comunes era del 25% y la de prevalencia-año del 9,6%

(ESEMeD, 2004). Según este mismo estudio la prevalencia anual de los trastornos

mentales en España se sitúa en el 8,48% y la vital en el 19,46%. En nuestro país

son los trastornos del humor y de ansiedad los que presentan una mayor

prevalencia anual, el 4,3 y 5,1% respectivamente (Haro et al. 2006). Esto queda

constatado en que entre un 18% y un 39% de los problemas atendidos en Atención

Primaria (AP) en España están relacionados con la salud mental (MSC, 2007),

pero es que además los TMC suponen entre el 52-67% de los casos nuevos

atendidos en los Centros de Salud Mental (CSM) (Belloso & Espín, 2007;

Montilla, González, Retolaza, Dueñas, & Alameda, 2002; Servicio de Salud del

Principado de Asturias [SESPA], 2000).

Los datos de actividad en Atención Primaria en Asturias en el año 2008

revelan que el 26,22% del total de población de la Comunidad Autónoma ha

consultado por problemas psicológicos y/o enfermedades mentales. Esto supone

cerca de 280.000 personas y generó 348.877 consultas. En el año 2009 la

Incidencia de personas adultas atendidas por vez primera en los Servicios de

Salud Mental del Principado fue de 10.770 casos y la Prevalencia de 47.182 casos

(4,5% de la población de Asturias). Los trastornos neuróticos y del humor

suponen el 60% de todos los diagnósticos (Consejería de Salud y Servicios

Sanitarios del Principado de Asturias, 2011). Las cifras mantienen una tendencia

de crecimiento los siguientes años. En 2012 la incidencia se sitúa en 12.526 casos

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

10

y la prevalencia en 50.246 de los cuales más del 60% se corresponden a TMC

(Unidad de Coordinación de Salud Mental de la Consejería de Salud del

Principado de Asturias, 2013).

3.2 Abordaje actual de los trastornos mentales comunes

El abordaje actual que se está realizando de los TMC en España es casi

exclusivamente la prescripción de tratamiento farmacológico tanto en Atención

Primaria como en los Servicios de Salud Mental (Mata, 2009; Retolaza, 2009a).

Los datos reflejan que en nuestro país más del 80% de los trastornos mentales se

tratan en Atención Primaria y solo el 10% son derivados a Atención Especializada

(Moreno & Moriana, 2012; Vázquez-Barquero et. al., 1997) y la herramienta casi

exclusiva que se utiliza para su abordaje es el tratamiento psicofarmacológico.

Ello a pesar de que ya hay tratamientos psicológicos que se han mostrado más

eficaces y eficientes que los tratamientos convencionales en el contexto de

Atención Primaria, por ejemplo para el abordaje de la depresión (Cano, Salguero,

Mae, Dongil & Latorre, 2012). Esta realidad sobre cómo se están tratando los

TMC en España son muy similares al resto de países con Sistemas Nacionales de

Salud (Goldberg, 2003).

Centrándonos en el abordaje psicofarmacológico de los trastornos

mentales, su dimensión es tal que partiendo de que el gasto en farmacia

corresponde al 19% del presupuesto sanitario (Minan, González, Ramos &

Gaztambide, 2004), los psicofármacos son los medicamentos más recetados en

España destacando especialmente los antidepresivos y las benzodiacepinas

(Carrasco, Astasio, Ortega, Jiménez & Gil, 2001; Codony el al., 2007). .

Analizando la realidad concreta del Principado de Asturias, el 13,8% de

las personas mayores de edad (9,3% de los hombres y 17,8% de las mujeres) que

respondieron a la II Encuesta de Salud de Asturias en 2008 (Consejería de

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

11

Sanidad y Servicios Sanitarios del Principado de Asturias, 2008) declaraban haber

tomado medicamentos "para los nervios" en las dos semanas anteriores. Entre las

personas que se encontraban en la franja de 14-18 años, habían consumido

psicofármacos el 5,4% en el último mes. Este mismo estudio encuentra que una de

cada tres mujeres mayores de 65 años está consumiendo psicofármacos de manera

habitual. En la III Encuesta de Salud de Asturias, año 2012, el 12% de las

personas encuestadas declaraban haber tomado tranquilizantes en los últimos 15

días (7,5% de los hombres y 16,1% de las mujeres) y el 6,7% antidepresivos

(2,9% de los hombres y 10,2% de las mujeres) (Consejería de Sanidad del

Principado de Asturias, 2013a). En el año 2012 el consumo de los psicofármacos

en Asturias creció un 15% siendo ya casi los ansiolíticos por si solos los fármacos

más vendidos con 1.849.334 envases (el primer lugar lo ocupan los protectores

gástricos con 1,9 millones de envases vendidos). Si a los ansiolíticos se le suman

los antidepresivos son 2.856623 envases al año en una población de poco más de

un millón de habitantes. En doce meses el incremento ha sido de 428.493 envases

(Consejería de Sanidad del Principado, 2013b), posiblemente relacionado con la

respuesta dada a las situaciones derivadas de la actual crisis económica en España.

Si se analiza específicamente la población atendida en los Centros de Atención

Primaria (AP) de Asturias y no la población general, los datos son aún más

alarmantes. Secades et al. (2003) encuentran que el 37.9% de los pacientes

atendidos en los Centros de Salud (44.6% de las mujeres y 27.4% de los varones)

habían tomado psicofármacos en el mes anterior.

Los datos ponen de manifiesto que la estrategia para abordar los trastornos

mentales comunes está siendo exclusivamente psicofarmacológica, y más si se

trata de mujeres. Así el último dato disponible en Asturias revela que el 16,7% de

la población estuvo en el año 2010 con un tratamiento completo (es decir, no

puntual) con psicofármacos (Observatorio de Salud en Asturias, 2013). Se

corresponde a 180.000 personas en una región con 1.080.289 habitantes. En

España los datos son muy similares (MSC, 2007). Esto a priori no es algo

negativo si se revelara como un abordaje eficiente. Pero en este sentido estudios

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

12

que tratan de ir más allá de las investigaciones financiadas por la Industria

farmacológica arrojan resultados de eficacia bastante dudosos. Irving Kirsch

(2008) realizó un meta-análisis sobre fármacos antidepresivos donde incluye tanto

ensayos clínicos publicados como no publicados1 que están registrados en la Food

and Drugs Administration (FDA). El análisis concluye que estos fármacos

(mayoritariamente Inhibidores Selectivos de la Recaptación de la Serotonina) no

tienen más efecto que los placebos en personas que sufren una depresión leve y sí

son ligeramente más eficaces en las depresiones profundas. En estudios

posteriores donde se utilizaron Placebos activos (que producen efectos

secundarios) estás diferencias en las depresiones más severas entre los fármacos

antidepresivos y los placebos desaparecieron (Kirsch, 2010).

El propio Ministerio de Sanidad y Consumo (2007) en la Estrategia en

Salud Mental del Sistema Nacional de Salud advierte que la respuesta que se está

dando al problema es la sobreutilización de psicofármacos en casos no indicados

y donde se requerirían intervenciones psicoterapéuticas específicas. Retolaza

reflexiona sobre ello:

“Lo importante es hasta qué punto estamos utilizando

bien los recursos sanitarios, sociales y comunitarios de

que disponemos, y hasta qué punto las respuestas de los

profesionales de la salud mental pueden a veces llevar a

la desatención de una crisis aparentemente menor que

puede acabar en un trastorno mayor, y otras veces,

nuestro celo lleva a facilitar un estatuto de enfermo que

incapacita a la persona para asumir su vida” (Retolaza,

2009, p. 10).

1 Recordemos que la mayoría de los ensayos clínicos que no arrojan resultados positivos sobre la eficacia de los psicofármacos no son publicados (Turner, Matthews, Linardatos, Tell, Rosenthal, 2008).

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

13

Otro fenómeno que se constata, y que está poco recogido en las

investigaciones de eficacia2, es la elevada duración de los tratamientos

psicofarmacológicos, la alta tasa de recaídas y, por tanto, de retornos a los

servicios de salud. En el año 2009 de las 17.850 personas adultas que son

derivados a los CSM del Principado de Asturias, 7080 son retornos. Es decir, el

40% de las personas que se derivaron ya habían recibido tratamiento en el CSM

(Consejería de Salud y Servicios Sanitarios del Principado de Asturias, 2011).

La Estrategia de Promoción de la Salud y Prevención en el Sistema Nacional

de Salud (Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, 2014) señala que el

tratamiento farmacológico de los desórdenes emocionales presenta una alta tasa de

abandono y de recaídas, tiende a cronificarse, produce una enorme hiperfrecuentación

de las consultas de AP, produce discapacidad y genera altos costes económicos,

sociales y psicológicos.

3.3 Ensayos clínicos convencionales que avalan la efectividad de los tratamientos psicológicos en los trastornos mentales comunes

Durante los últimos años diferentes estudios científicos han puesto de

relieve la efectividad de los tratamientos psicológicos tanto para los trastornos

neuróticos3 como para la depresión (Chambless & Ollendick, 2001; Roth &

Fonagy, 2005) y corroboran los primeros meta-análisis clásicos sobre eficacia en

psicoterapia realizados por Smith, Glass & Miller (1980), Saphiro & Saphiro

(1982) o Luborsky, Crits-Christoph, Mintz & Auerbach (1988). Según el estudio

2 Los ensayos que se realizan sobre eficacia de los psicofármacos suelen hacer una evaluación a corto plazo, sobre los efectos los primeras semanas o meses, pero no realizan seguimientos a medio plazo. 3 La Clasificación Internacional de Enfermedades Mentales versión 10 (CIE 10) engloba dentro de los Trastornos Neuróticos, secundarios a situaciones estresantes y somatomorfos (F 40 a F49) las fobias, el trastorno de pánico, trastorno de ansiedad generalizada, trastorno mixto ansioso-depresivo, trastorno obsesivo-compulsivo, trastorno adaptativo, reacción a estrés grave, etc.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

14

de referencia, la eficacia encontrada va del 70% de sujetos recuperados en los más

bajos a superar el 90% en los más altos.

No sorprende entonces que en los últimos años, en la medida que se van

conociendo los resultados arrojados por las distintas investigaciones y meta-

análisis, las guías de recomendación clínicas señalen los tratamientos psicológicos

como tratamientos de elección en el abordaje inicial de los trastornos mentales

comunes y también en los siguientes niveles de intervención (NICE 2009, 2011a,

2011b; Pérez, Fernández, Fernández & Amigo, 2003).

Otra cuestión importante, y más cuando se trata de valorar su viabilidad

en los sistemas públicos de salud, es la duración de los tratamientos psicológicos.

En su revisión de ensayos clínicos aleatorizados, Hansen, Lambert y Forman

(2002) encuentran que las psicoterapias tienen 12,7 sesiones de media, y que para

conseguir una mejoría significativa en al menos la mitad de los pacientes pueden

ser suficientes unas 13-18 sesiones.

Dentro de las más de 400 formas de psicoterapia que existen, nosotros nos

centrarnos en las Psicoterapias breves que según Garske y Molteni (1988) tienen

las siguientes características en común:

o Pocas sesiones y duración limitada en el tiempo.

o Se centran en problemas específicos y bien delimitados.

o Los objetivos son restringidos y modestos, no se pretende “reconstruir la

personalidad” o “curar la enfermedad mental”.

o El terapeuta es activo, flexible y mantiene una conciencia clara del tiempo.

o El paciente participa activamente en el tratamiento y realiza gran parte del

trabajo entre sesiones y fuera de la terapia para experimentar y practicar

conductas nuevas.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

15

Pues bien, las diversas investigaciones indican que las psicoterapias breves

(entre 6 y 12 sesiones) de diferentes enfoques teóricos son efectivas en los

trastornos depresivos y de ansiedad (Barkham & Shapiro 1999; Dimidjian et al.,

2006; Dowrick et al., 2000; González, Fernández, Pérez & Amigo, 2006; Guthrie

et al., 1999; Harvey et al., 1998; Koss & Shiang, 1994; Mynors-Wallis, Gath, Day

& Baker, 2000 ; Pérez et al., 2003; Ward et al., 2000). Además, existen evidencias

empíricas acerca de que los pacientes esperan recibir pocas sesiones (Martínez et

al., 1997; Pekarik, 1996), que las mejorías suelen ocurrir en las primeras sesiones

(Howard, Kopta, Krause & Oelinsky, 1986) y que la mayoría de los pacientes en

contextos reales acuden de hecho a pocas sesiones (una media de 4,3 y una

mediana de 3 según Hansen et al., 2002). En definitiva, se puede decir que los

tratamientos psicológicos con apoyo empírico suelen ser relativamente breves,

que las psicoterapias autodenominadas breves son efectivas y los pacientes suelen

preferir tratamientos breves (Pekarik, 1996). Si nos centramos en los resultados de

los tratamientos psicológicos a largo plazo, los estudios encuentran que los niveles

de funcionamiento alcanzados inmediatamente después del tratamiento se

mantienen en el período de seguimiento para la mayoría de los trastornos mentales

(Andrews & Harvey, 1981; Lambert & Bergin, 1992; Lambert, Hatch, Kingston

& Edwards, 1986; Landman & Dawes, 1982; Nicholson & Berman, 1983).

Ahora la cuestión a responder es si los tratamientos psicológicos pueden ser

una alternativa viable, efectiva y eficiente para los TMC en los servicios públicos

de salud caracterizados por una alta demanda y unos recursos limitados.

En esta línea y coincidiendo temporalmente con nuestro estudio, en el año

2007 el gobierno británico inicia una política estratégica en materia de salud

mental que denominó Improving Access to Psychological Therapy (IAPT)

(Turpin,, Richards, Hope & Duffy, 2008). Consistió en la puesta en marcha de

Servicios Clínicos de Psicología para implementar y garantizar el acceso de la

población a los tratamientos psicológicos basados en la evidencia que

recomiendan las Guías Clínicas del National Institute for Health and Clinical

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

16

Excellence de Reino Unido (NICE) para el abordaje de los Trastornos Mentales

Comunes. Esta estrategia partió de un estudio presentado por la London School

of Economics titulado “THE DEPRESSION REPORT. A New Deal for

Depression and Anxiety Disorders” (Layard, 2006) donde se analizaban los costes

directos e indirectos de los trastornos mentales constatando que el tratamiento

insuficiente (ya sea por no tratamiento o por tratamiento exclusivamente

psicofarmacológico) salía mucho más caro al sistema. Una de las principales

conclusiones fue que a corto plazo el tratamiento psicológico es tan efectivo y

eficiente como el tratamiento psicofarmacológico y más que el no tratamiento, y

que a largo plazo es más efectivo y eficiente que los psicofármacos. A partir de

ahí se desarrolla un plan con dos estudios piloto en dos distritos diferentes de

Inglaterra, Doncaster y Newham, para valorar la viabilidad y eficiencia de los

tratamientos psicológicos que las Guías Clínicas de la NICE recomendaban para

el abordaje de los Trastornos de ansiedad y depresión, pero aplicándolos en un

contexto de atención desde los Servicios Públicos de Salud (Clark et al., 2009;

Clark, 2011; Richards & Suckling, 2009). Los primeros resultados indicaron un

nivel de recuperación significativa del 55-56% a los 10 meses del alta. El número

medio de sesiones para los sujetos que completaron el tratamiento se situó

alrededor de 5, con un intervalo entre sesiones de 12 días y una duración media de

tratamiento de 8 semanas.

Se siguieron las recomendaciones de las Guías NICE donde se plantea

escalonar los tratamientos (steped-care) en función del nivel de intensidad

requerida. Así hay un primer nivel de tratamientos de baja intensidad donde el

peso fundamental recae sobre los pacientes y hay pocos contactos con el

profesional. Se trabaja fundamentalmente a través de guías de autoayuda,

psicoeducación y terapias cognitivo-conductuales asistidas por ordenador. En el

siguiente nivel estarían los tratamientos de alta intensidad donde las sesiones son

presenciales, individuales e inicialmente con una frecuencia semanal.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

17

A partir de los estudios iniciales, entre el año 2008 y 2011 se formó a 3600

psicólogos en la aplicación de las Terapias Cognitivo-Conductuales recogidas en

las Guías de Recomendaciones Clínicas de la NICE para el tratamiento de las

Depresiones leves, moderadas y severas, y para los distintos Trastornos de

Ansiedad. Un 60% para realizar los tratamientos de alta intensidad y un 40% los

de baja intensidad. Actualmente el programa IAPT está plenamente implantado y

se están evaluando los resultados. Estas son algunas de las características del

programa (Clark, 2011):

o La iniciativa de derivación es principalmente del Médico de Atención

Primaria, pero también puede ser del paciente u otro profesional

o La evaluación se centra en trabajar con la persona la identificación de

los principales problemas que requieren tratamiento y su contexto

social y personal.

o Tanto los objetivos como el plan de tratamiento son acordados

conjuntamente entre paciente y terapeuta.

o El modelo de atención es escalonado. Si el trastorno no se considera

grave se realiza un tratamiento de baja intensidad. Las personas con

trastorno más grave o que no mejoran suficientemente se les ofrece

tratamientos más intensos.

o Todos los tratamientos que se ofrecen deben ser en línea con las

recomendaciones de NICE.

o Si el empleo es un problema se asigna también un orientador laboral.

3.4 Los ensayos clínicos en los Servicios públicos de salud mental

La mayoría de los Ensayos Clínicos Aleatorizados (ECA) se realizan en

contextos y condiciones difícilmente extrapolables a los servicios públicos de

salud: muestras muy selectivas, homogeneidad en la aplicación de los

tratamientos y mayor disponibilidad de tiempo son las más destacables. Respecto

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

18

a la muestra seleccionada se llegan a excluir hasta el 70% de los casos y muchos

lo son por presentar comorbilidad, cuando ésta es muy frecuente en la práctica

real (Westen & Morrison, 2001). Respecto a los tratamientos éstos se seleccionan

a priori y se intentan aplicar con la máxima homogeneidad posible seleccionando

a posteriori los profesionales que los aplicarán. En relación al tiempo (una de las

cuestiones clave en los tratamientos psicológicos), en los ensayos clínicos existe

una mayor disponibilidad del mismo, tanto para cada sesión, como para la

duración total del tratamiento o los intervalos entre sesiones que pueden ser

incluso semanales. Por contraposición, una característica muy importante en los

servicios públicos es la obligatoriedad de atender el espectro completo de

trastornos que se producen en la comunidad a la que da cobertura el servicio y por

tanto la imposibilidad de seleccionar pacientes. La población atendida presenta

gran heterogeneidad tanto en la iniciativa y los motivos de la demanda como

desde el punto de vista clínico donde además existe una elevada tasa de

comorbilidad de diagnósticos del eje I, II y códigos Z. Las plantillas de

profesionales que configuran los Servicios ya están formadas y cada facultativo

puede tener un modelo de intervención diferente, luego a corto plazo no se puede

seleccionar el tratamiento que se quiere aplicar primero y luego los profesionales

que mayor capacitación tienen para desarrollarlo. Otra característica importante

es la elevada presión asistencial que permite un escaso margen de maniobra con el

tiempo dedicado en cada sesión, el intervalo entre sesiones o la duración total del

tratamiento. La conclusión de esta comparación es que los resultados de esos

ensayos clínicos no son generalizables directamente por no ser las muestras, los

tratamientos y profesionales asignados, ni las condiciones de aplicación de los

tratamientos similares al contexto de asistencia en el sistema de salud público.

Desde el punto de vista metodológico existe una elevada validez interna de estos

ECA, pero los resultados son difícilmente generalizables a contextos de atención

de los Servicios Públicos en donde las condiciones de aplicación son mucho más

heterogéneas y limitadas y por tanto cabe la duda de que se mantenga su

efectividad o incluso que sea viable su aplicación.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

19

Se hace necesario entonces que desde los Servicios de Salud Públicos se

realice un trabajo de investigación continuado sobre la efectividad de los

tratamientos que tal vez ya han demostrado su eficacia en contextos ideales, pero

aplicándolo en las condiciones que impone la Atención a los trastornos mentales

en el sector público. En este sentido se puede considerar el Improving Access to

Psychological Therapy (IAPT) un ejemplo de buena práctica. Parte del análisis de

ensayos clínicos sobre tratamientos eficaces, de los estudios económicos y de las

recomendaciones de las Guías Clínicas para desarrollar una estructura

organizativa y profesional dirigida a implementar específicamente esos

tratamientos, es decir adapta las estructuras a los tratamientos y desde ahí estudia

su eficacia y eficiencia.

Son escasos en la literatura científica los ECA donde se estudie la

efectividad de los tratamientos psicológicos en un contexto comunitario. En este

sentido destacamos el estudio de Dowrick et al. (2000) en el que participó el

Hospital Universitario Marqués de Valdecilla y que fue el primer ECA multi-

centro internacional de intervenciones psicológicas para la depresión en población

general. En este estudio se comparan dos tipos diferentes de tratamiento para la

Depresión con otro grupo de no intervención. Para seleccionar la muestra se hizo

un screening de potenciales casos en la población general a través del Inventario

de Depresión de Beck (Beck & Steer, 1993) y se asignaba aleatoriamente a cada

grupo. El primer tratamiento consistía en un paquete de 6 sesiones individuales de

Resolución de Problemas (Hawton & Kirk, 1989) que tenía tres fases: relacionar

los síntomas con problemas de la persona, definir operativamente los problemas y

desarrollar estrategias para resolver tales problemas. La duración media de las

sesiones era de 45 minutos. El segundo era un tratamiento grupal psicoeducativo

(no terapéutico) que en 12 sesiones de dos horas abordaba temas relacionados con

la depresión, relajación, pensamiento positivo, actividades placenteras y

habilidades sociales (Lewinsohn, 1989). Al tercer grupo no se le aplicaba ningún

tipo de intervención. Se evaluó el estado clínico a través del Inventario de

Depresión de Beck y el nivel de funcionamiento subjetivo a través de la escala

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

20

SF-36 (Stewart, Hays & Ware, 1998). Se hizo medición al inicio, 6 y 12 meses.

Este ensayo concluyó que el tratamiento de Resolución de Problemas conseguía a

los seis meses mejores resultados que el grupo Control en niveles de

sintomatología y de discapacidad. El tratamiento de Prevención de la depresión

fue efectivo en mejorar el nivel de funcionamiento de la persona, pero no hubo

diferencias a nivel de sintomatología. A los 12 meses la sintomatología depresiva

había disminuido en los tres grupos y no se encontraron diferencias significativas

entre ellos, y solo el grupo de Resolución de Problemas mantenía una diferencia

significativa positiva en el nivel subjetivo de funcionamiento.

En España aunque no hemos encontrado ECA similares al nuestro sobre

tratamientos psicológicos realizados en contextos de servicios de salud públicos sí

se han realizado trabajos de investigación sobre eficacia de los tratamientos

psicológicos. Hay diferentes ensayos clínicos sobre terapias cognitivo-

conductuales que han demostrado ser tratamientos breves y efectivos (Echeburúa,

Salaberría, Corral, Cenea & Berasategui, 2000; García-Palacios et al., 2002;

Sánchez, Elvira, Llompart, Flores & Bados, 2000). Existen también en nuestro

país otros ensayos no controlados que sugieren la utilidad de la terapia sistémica

(Beyebach et al., 2000; Rodríguez-Arias, Otero, Venero, Ciordia & Fondó, 2004)

y psicodinámica (González-Pinto, 1987; Tizón, 1994).

El único referente que nos consta de ECA sobre eficacia de tratamientos

psicológicos para los Trastornos Mentales Comunes comparándolos con los

tratamientos habituales en los Servicios Públicos de Salud Mental en España es

nuestro primer estudio que tenía un diseño experimental con evaluación post-

tratamiento (Fernández et al., 2010a, 2010b). Los resultados de este primer ensayo

clínico se describen más adelante.

En relación a los estudios piloto que se desarrollaron sobre el Improving

Access to Psychological Therapy, al no tener el diseño de ensayo clínico y no

realizar comparación formal con grupos control (solo se analizaron los resultados

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

21

de los sujetos que recibieron el programa de tratamiento psicológico), plantean a

sus autores la duda en relación a la mejoría que se hubiese producido por remisión

espontánea (Clark, 2011). Tampoco pudieron comparar si los programas

psicológicos aplicados eran más eficaces y eficientes que el resto de tratamientos

existentes y que se aplican en los Servicios Especializados de Salud Mental

ingleses.

3.5 Ensayo clínico con evaluación post-tratamiento

En el año 2010 se han publicado los resultados de un primer ensayo clínico

aleatorizado que realizamos y donde se estudia la efectividad del mismo Programa

de Psicoterapia Breve en comparación con los tratamientos habituales que se

utilizan para el abordaje de los Trastornos Mentales Comunes en los CSM del

Principado de Asturias (Fernández, et al., 2010a, 2010b). La diferencia de ese

primer ensayo respecto al actual reside en que el diseño de grupos aleatorizados

era de evaluación post-tratamiento lo cual aumentaba la validez externa del

estudio, pero disminuía ligeramente la interna. En ese estudio participaron 141

sujetos (76 asignados a un Grupo Experimental que era el Grupo de Psicoterapia

Breve y 65 al Grupo Control de Tratamiento Habitual). El Grupo de Psicoterapia

Breve resultó ser más efectivo que el Tratamiento Habitual pues obtuvo mayor

tasa de altas, los sujetos mostraron mayor nivel de mejoría en el estado clínico y

discapacidad y también mayor satisfacción. Estas diferencias se dieron tanto a los

seis meses como al año y a los dos años de iniciarse los tratamientos (Fernández

et al., 2010b).

A los seis meses las diferencias ya eran significativas, la tasa de altas en el

Grupo de Tratamiento Psicoterapia Breve era de 46,1% frente al 24,6% del

Tratamiento Habitual. Los abandonos 25% vs. 15,4% y seguían a tratamiento el

28,9% del Grupo Experimental frente al 58,5% del Control. El 43,4% de los

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

22

sujetos del Grupo de Psicoterapia Breve refirieron encontrarse mucho o bastante

mejor frente al 12,9% del Control.

Al año ambos grupos mejoraban, pero los resultados marcaban la misma

tendencia, la tasa de altas del Grupo Experimental se situó en 56,6 % y la del

Control en el 33,8% y seguían a tratamiento el 14,5% / 44,6% respectivamente.

Refirieron estar mucho o bastante mejor el 55,2% del Grupo Experimental frente

al 33,3% del Control y algo mejor el 24,1% vs. 42,9% respectivamente. La tasa

de sujetos Recuperados al año fue de 65,5% en el Grupo de Psicoterapia Breve

frente a 23,7% en el de Tratamiento Habitual.

A los dos años la tasa de altas del Grupo Experimental fue del 67,1 % y la

del Control del 49,2%, seguían a tratamiento el 3,9% frente al 21,1% y retornaron

el 9,6% de los sujetos del Grupo Experimental y el 10% del Control. Refirieron

estar mucho o bastante mejor el 82,6% de los sujetos del Grupo Experimental

frente al 43,8% del Control y algo mejor el 17,4% vs. 25% respectivamente. La

tasa de sujetos Recuperados a los dos años se situó en el 66,7% frente a 40,4%.

A los tres años las altas, abandonos, retornos y sujetos recuperados son

muy similares a los dos años.

El nivel de discapacidad expresado por los pacientes fue en todos los

momentos temporales menor en el Grupo Experimental y también la cantidad

media de psicofármacos consumidos.

Además el programa también demostró su viabilidad y eficiencia porque

aunque el número medio de sesiones fue similar en ambos grupos (6,7 el Grupo

Experimental y 6,6 el Control a los dos años), el tratamiento Experimental duró

mucho menos tiempo, 124 días de media frente a los 287 del Grupo Control

(Fernández et al., 2010b) y el consumo de psicofármacos fue también

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

23

significativamente menor en los distintos momentos temporales (Fernández et al.,

2010, julio).

En el Ensayo Clínico que se presenta ahora se ha tratado de fortalecer aún

más la validez interna y por eso además de la evaluación post tratamiento de ese

primer ensayo se realiza una evaluación pre-tratamiento para garantizar la

equivalencia de ambos grupos y poder analizar mejor la evolución intra-grupo.

Además en el primer ensayo clínico en el Grupo Control ni el terapeuta ni los

pacientes tenían conocimiento de su participación en la investigación hasta que al

paciente se le solicitaba permiso para su participación al alta o a los seis meses de

tratamiento4. Esto podría dar lugar a sesgos en el tratamiento y explicar en parte la

gran diferencia entre ambos grupos. En el ensayo clínico actual debemos

renunciar a esta condición más ecológica en el Grupo de Tratamiento Habitual

(ahora se introduce un sesgo en el terapeuta del Grupo Control como puede ser

una mayor motivación a la hora de implementar el tratamiento), pero por otro lado

conseguimos una equivalencia mayor entre el Grupo Control y el Experimental.

4 Al no suponer ninguna modificación en relación al tratamiento que iban a recibir no era necesario recabar el consentimiento informado al inicio dado que lo único que se hizo fue recabar información a posteriori una vez autorizado por el paciente.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

24

4. PERSPECTIVA TEÓRICA DE LA INTERVENCIÓN

“Lo importante no es (solo) lo que han hecho conmigo,

sino lo que yo hago con lo que han hecho conmigo”.

J. P. Sartre

4.1 El Programa de Psicoterapia Breve

En nuestro estudio, a la hora de optar por un programa de tratamiento, no

se ha pretendido implantar sin más una serie de protocolos de psicoterapia con

apoyo empírico, sino desarrollar una guía general para definir y estructurar el

tratamiento psicoterapéutico desde un modelo flexible que se ajuste a la variedad

e inespecificidad de las demandas y la heterogeneidad de los terapeutas en los

Servicios de Salud Mental. Lo que se busca es comprobar la viabilidad, utilidad y

efectividad de una intervención psicoterapéutica mínima en los Servicios públicos

y que sea accesible a la mayoría de las personas con Trastornos Mentales

Comunes. A la luz de las investigaciones y atendiendo a dos razones

fundamentales, la viabilidad y la efectividad, hemos optado por un Modelo de

Psicoterapia Breve.

Como antecedente de nuestra guía para estructurar el tratamiento está la

desarrollada por Rodríguez-Arias y Venero (2006) que, aunque se centra en unos

modelos más concretos como son la Terapia de Familia Breve, y especialmente la

Terapia Centrada en Soluciones, resulta una propuesta muy útil para estructurar la

intervención y evaluar los resultados.

En el diseño de nuestro Programa de Psicoterapia Breve se ha tomado

como referencia inicial un modelo más amplio, el modelo Zelandés (Rijnders,

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

25

2004) que se aplica desde los años 80 en algunos dispositivos públicos de los

Países Bajos por presentar una serie de características entre las que destacan la

asistencia por pasos (inicialmente se ofrece una asistencia mínima que se

considera suficiente para la mayoría de los casos y, si no funciona, se pasa a otra

modalidad más compleja y costosa para el sistema y para el paciente) y la

coordinación estrecha con AP. El peso fundamental recae sobre la psicoterapia,

pero no se descarta el uso de la farmacoterapia. Desde el punto de vista teórico

toman como referencia un modelo de equilibrio competencia-vulnerabilidad

fundamentado en la Hipótesis de la Desmoralización de Jerome Frank (Frank &

Frank, 1991). En un momento dado de la vida y ante unas circunstancias

concretas las competencias y recursos de afrontamiento de la persona no son

suficientes para hacer frente a los retos que se le presentan. La desmoralización

hace referencia al sentimiento de la persona de pérdida de capacidad para dirigir

sus condiciones de vida y su forma de comportarse en ese momento. Puede ocurrir

que las competencias del sujeto estén bloqueadas o que ante nuevas circunstancias

se requieren competencias diferentes y las anteriores no son adaptativas. Es en

este contexto donde aparecería la sintomatología y la persona se vería impelida a

solicitar ayuda terapéutica. Por tanto en este modelo la sintomatología y las quejas

se entienden como consecuencia de unas circunstancias que la persona está

teniendo dificultades para gestionar con sus estrategias y modo de funcionamiento

habitual y, por ende, generan un bloqueo y la desmoralización. Todo ello se puede

resumir en la siguiente fórmula:

Como puede apreciarse este es un esquema muy general donde caben

teorías de diferentes modelos explicativos y por tanto según el encuadre y donde

pongan el foco el terapeuta y la persona podrán implementarse estrategias

sistémicas, conductuales, cognitivas, interpersonales, etc.

QUEJA=CIRCUNSTANCIAS+FUNCIONAMIENTO PERSONAL

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

26

En el capítulo 6 se describe el programa de tratamiento, sus fases,

objetivos, instrumentos y técnicas, pero a continuación se exponen los

fundamentos teóricos y psicoterapéuticos donde nosotros hemos querido sustentar

este modelo inicial que tomamos de referencia. Debemos de ser honestos y

admitir que en la medida que determinados principios están interiorizados en

nuestra forma de entender los problemas y la psicoterapia, esto ha determinado la

manera en que aplicábamos un tratamiento que por otro lado es muy general y

daría pié a múltiples enfoques.

4.2 Fundamentos teóricos y psicoterapéuticos

En nuestro caso a la hora de concretar la terapia hemos optado por

desarrollar una fuerte perspectiva contextual y de acción. Los modelos

contextuales -tanto de la psicología como de la psiquiatría- tratan de situar los

trastornos mentales precisamente en el contexto biográfico de la persona y sus

circunstancias. Es un modelo ideográfico e interpersonal, que pretende ver el

sentido funcional del trastorno en las circunstancias de la persona. Por

contraposición al modelo contextual, el modelo médico -que también puede

seguirse desde la psicoterapia- parte de una perspectiva internalista, suponiendo

mecanismos internos disfuncionales (biológicos o psicológicos) y siguiendo una

perspectiva nomotética que se guía fundamentalmente por la etiqueta diagnóstica

y los síntomas. Aun está por comprobar que los tratamientos psicológicos

funcionen por ajustarse a un diagnóstico concreto de trastorno mental y no por

abordar las circunstancias vitales y afrontamiento personal de los problemas que

presentan los sujetos. Tal vez por esta razón una misma terapia funciona para

diagnósticos diferentes -como trataremos de analizar en este estudio- y distintas

terapias funcionan para un mismo diagnóstico (González & Pérez, 2007).

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

27

A continuación se señalan algunos referentes teóricos relativos a la

epistemología, la psicopatología, la psicología evolutiva o la psicoterapia que

implícita o explícitamente hemos incorporado en esta visión contextual y que en

el modelo general inicial, no necesariamente se conceptualizan de esta manera. Se

trataría de encuadrar conceptos complejos como son el funcionamiento personal,

la psicopatología, el proceso terapéutico o las vías de solución de los problemas.

Estos conceptos se podrían interpretar de manera muy distinta según el modelo

que tomemos como referencia. A día de hoy no se puede obviar que la

complejidad que supone el funcionamiento del ser humano y también sus

problemas de salud mental no pueden ser recogidos fácilmente en un solo modelo,

pero esto no es óbice para plantear una serie de premisas teóricas que a nuestro

entender son fundamentales para el entendimiento psicológico y psicopatológico

de las personas y que suponen una opción teórica y práctica frente a otras bien

distintas.

En lo referido a la concepción de la Psicopatología y los Trastornos

mentales señalaremos brevemente algunas cuestiones clave. Consideramos

fundamental la concepción de la persona como SUJETO activo y propositivo

frente a la idea de paciente pasivo al que le ocurren cosas o hay que solucionarle

problemas. Como señalan Ezama, Alonso y Fontanil (2010):

“los problemas que atienden los psicoterapeutas son el

producto de la actividad psíquica de los sujetos, de modo

que los sujetos son agentes de esos problemas, por más

que sufran por ellos. Y, consecuentemente, el papel que

tiene en la terapia la persona que consulta no es, en modo

alguno, el de un suministrador ingenuo de información o

el de un receptor pasivo de tratamientos, sino el de sujeto

activo cuyas preferencias, propósitos, conocimientos y

acciones son determinantes”. (Ezama et al., 2010, p. 294).

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

28

Las quejas y el sufrimiento no aparecen como consecuencia de un

“Trastorno mental”, de una “enfermedad”. El trastorno mental es solo una

descripción de un conjunto de síntomas, conductas, pensamientos o emociones,

pero no la explicación de los mismos. Los síntomas y el sufrimiento aparecen

cuando se reitera un fracaso de las estrategias del sujeto en la consecución de

metas importantes para él, en la resolución de tareas vitales o la adaptación a

nuevos retos y circunstancias. En este sentido la etiqueta diagnóstica no es la que

guía el tratamiento, sino los propósitos que tiene la persona y los fracasos en su

consecución. La consecución de las metas o el fracaso tendrán que ver con el

contexto y lo que la persona está haciendo en ese contexto. En el contexto

incluimos lo que está pasando, pero también y sobre todo a las otras personas,

qué es lo que están haciendo y qué es lo que esperan de la persona protagonista de

la queja.

Las quejas y el sufrimiento no se relacionan solo con los fracasos y

sucesos iniciales que los originan, también lo hacen con todas las acciones que la

persona y su entorno emprenden para solucionarlo y que también fracasan (Ezama

et al., 2010). Por norma general las personas acuden a consulta no cuando

aparece el malestar, el sufrimiento, sino cuando no son capaces de resolverlo por

sus propios medios. En este sentido los síntomas pueden ser entendidos como

consecuencia del fracaso de estrategias de afrontamiento de tareas vitales y

también como estrategias para intentar solucionarlo.

Otro elemento central en el modelo general de psicoterapia que tomamos

como referencia, y que merece extenderse mínimamente es el de desarrollo y

funcionamiento de la persona. La concepción que se tenga de lo que es la

personalidad o el funcionamiento psicológico de una persona o como se forma su

autoimagen o autoestima será determinante a la hora de encauzar la psicoterapia

en una u otra dirección. Las teorías posibles pueden ir de posiciones innatistas a

ambientalistas pasando por las mixtas, es decir, una mezcla de ambas. Cloninger

sería el máximo exponente de este modelo mixto y plantea que las personas

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

29

comienzan su vida con unas disposiciones o cualidades generales, innatas, y que

la interacción de esas cualidades con factores externos formarán los rasgos

estables del sujeto (Cloninger, Svrakic & Przybeck, 1993). El problema de este

tipo de modelos –que por otro lado son los predominantes- es que no acaban de

explicar muy bien como tiene lugar esa “mezcla” y sobre todo donde está el sujeto

en todo el proceso. La persona es más bien un objeto, un producto de lo innato y

el ambiente, pero no se vislumbra el sujeto como el elemento central y que

construye durante su propio desarrollo. En nuestro caso optamos por modelos que

explican la evolución filogenética y ontogenética de los organismos -y los seres

humanos en particular- desde un constructivismo epistemológico que hunden sus

raíces en la filosofía Kantiana y en el trabajo del psicólogo norteamericano James

Baldwin. Los conceptos de Selección orgánica y de Reacción circular- también

llamado Efecto Baldwin- aportan claves para el entendimiento de la evolución y

el desarrollo situando a los organismos como verdaderos Sujetos del proceso

(Baldwin, 1917; Fernández, 1988; Fernández & Sánchez, 1990; Loredo &

Sánchez, 2006).

Llevado al campo específico de la Psicología Evolutiva el mejor

exponente de este modelo es Lev Semiónovich Vygotsky, que es capaz de

elaborar una teoría socio-histórico-cultural del desarrollo de las funciones

mentales superiores basada en la interacción del sujeto y su medio “social”

(Riviere, 1984; Vygotsky, 1977; Vygotsky, 1979). Otro autor que tomamos como

referencia a la hora de entender el desarrollo psicológico, concretamente las

dimensiones emocional y social, es Jonh Bolwlby y su Teoría del Apego que

ayuda a entender la génesis y desarrollo de los patrones de interacción y de

vínculo o conceptos tan fundamentales como confianza y seguridad en uno mismo

o en los otros (Bolwby, 1986, Bolwby, 1989).

Dentro de la Psicología Evolutiva también consideramos referente el

Modelo del Ciclo Vital, muy importante si queremos entender a que

“circunstancias” se enfrenta una persona en un momento dado de su vida y donde

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

30

están las dificultades para su buen afrontamiento. Este modelo platea que en cada

sociedad existen unos patrones normativos de desarrollo. Cada estadio de

desarrollo tiene una serie de “tareas evolutivas normativas” que serán tomadas

como señal de que las cosas van bien en ese bebe, niño, adolescente, adulto joven

o anciano. Para un buen afrontamiento de las tareas evolutivas se requieren una

serie de habilidades como pueden ser realizar cambios instrumentales, creación

de nuevos repertorios de habilidades -de comunicación, de resolución de

problemas, de crianza-, el manejo de procesos emocionales potencialmente

difíciles, el replanteamiento del contrato relacional básico, especialmente las

pautas de distancia e intimidad, etc. (Baltes, Freund & Li, 2005; Havighurst,

1972).

Por último dentro de la Psicología evolutiva queremos hacer referencia al

modelo de Psicopatología Evolutiva. Este enfoque enlaza con el modelo del ciclo

vital y también con nuestra concepción de la psicopatología. Propone entender al

sujeto, su desarrollo normal o las patologías dentro del momento del ciclo vital en

que se encuentra. Los fracasos en las tareas evolutivas de cada momento

aumentarán la vulnerabilidad al desarrollo de psicopatología. A la vez la

psicopatología y las estrategias para solucionar el atascamiento podrán determinar

fracasos en otras áreas diferentes de aquella con la que se relaciona su origen

(Cicchetti & Cohen, 1995).

En lo relacionado con nuestra manera de entender la Psicoterapia

destacamos genéricamente varias premisas importantes:

La primera tiene que ver precisamente con el mismo planteamiento que

hacemos en el área de la psicopatología, concebir a la persona –también a la que

acude a la consulta- como un SUJETO. Este sujeto activo-propositivo es alguien

que hace cosas y quiere cosas relacionadas con su problema y con la solución del

mismo. Esta concepción se contrapone a la idea de un paciente al que “le pasan

cosas” producto de los genes, el sistema nervioso central, los neurotransmisores,

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

31

sus pensamientos, su familia o la sociedad sin que él como sujeto tenga nada o

poco que ver ahí. En el entendimiento de la persona y en el trabajo terapéutico

adquiere máximo sentido la afirmación de Jean-Paul Sartre “lo importante no es

(solo) lo que han hecho conmigo, sino lo que yo hago con lo que han hecho

conmigo”.

En la psicoterapia se parte además de que la persona tiene capacidades y

competencia para desenvolverse en la vida. Normalmente cuando alguien llega a

consulta durante toda su vida previa ya ha estado afrontando y superando multitud

de retos. Aprender a hablar, caminar, separarse de sus figuras de apego, establecer

relaciones sociales con iguales, superar cursos académicos, defenderse de los

ataques de los demás y competir, conseguir un trabajo, convivir con una pareja,

criar un bebe, la separación o muerte de seres queridos, enfermedades, accidentes,

etc. Un sinfín de tareas que podríamos comparar con andar en bicicleta o

conducir, en cuanto aprendemos a hacerlo se nos olvida lo difícil que fue

conseguirlo, la cantidad de estrategias que tuvimos que poner en marcha para su

consecución y más aun la ayuda que nos tuvieron que dar para lograrlo. No es de

extrañar que ante situaciones nuevas o muy difíciles en un momento dado de la

vida fracasemos en su resolución por distintos motivos: los procedimientos que

usábamos hasta el momento no son suficientes, no sabemos qué estrategias son las

adecuadas, nos falta apoyo, la situación es muy difícil, etc. Como expusimos

anteriormente con la Hipótesis de Desmoralización de Frank cuando ese fracaso

es reiterado se genera un sentimiento de pérdida de capacidad para manejar su

vida y es posible que la persona deje también de afrontar otras tareas que estaba

logrando solucionar con éxito. Pero todo eso no debe hacer olvidar al terapeuta las

competencias y capacidades que esa persona tiene y que le han ayudado a

desenvolverse en la vida hasta ese momento. Por eso la psicoterapia pretende

ayudar al consultante a comprender la naturaleza de su sufrimiento y su bloqueo,

para facilitar entonces la recuperación del Control haciendo uso de sus

capacidades y desarrollando si es necesario nuevas estrategias. Se trata de ayudar

a la persona a que vuelva a hacerse cargo de su vida.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

32

Otra premisa fundamental de nuestra manera de entender la psicoterapia es

la importancia esencial de la Relación Terapéutica como elemento clave tanto del

proceso como del resultado. Si consideramos al consultante como un sujeto

activo-propositivo, él será quien más poder tiene sobre su vida y por tanto solo a

través de una relación de confianza y colaboradora se dejará ayudar y se atreverá a

hacerse cargo del problema y las soluciones en un momento en que no tiene fe en

sí mismo. No es de extrañar por tanto que los estudios encuentren la variable

Relación Terapéutica como una de las más importantes a la hora de predecir el

éxito del tratamiento por encima de otras como el diagnóstico o las técnicas

concretas (Castillo & Poch, 1991). Por tanto consideramos fundamental en el

proceso terapéutico tener en cuenta el tipo de Relación terapéutica que se

establece, como manejarla y en la medida de lo posible construir una Alianza

Terapéutica. Bordin (1994) desgrana los componentes fundamentales de la

Alianza Terapéutica: el acuerdo entre consultante y terapeuta respecto a los

objetivos a alcanzar en la psicoterapia y las tareas propias para conseguirlo, y todo

ello en un vínculo emocional entre ambos caracterizado fundamentalmente “por el

aprecio, la confianza, el respeto mutuo, y por la percepción de que existe un

compromiso común y una recíproca comprensión de las actividades

psicoterapéuticas».

Otra cuestión muy importante en nuestra manera de entender la

Psicoterapia es tener en cuenta aquellos factores relacionales, económicos,

laborales o sociales que rodean al sujeto. La concepción de la persona como

sujeto activo, competente y que tiene que hacerse cargo del cambio, no debe

confundirse con quitar importancia a las circunstancias externas que le afectan. El

profesional no debe caer en el Error Fundamental de Atribución descrito por Lee

Ross (1977) consistente en sobrestimar la importancia de los factores

disposicionales y subestimar la importancia de los factores situacionales o

relacionales a la hora de explicar la conducta. Esta psicologización o actitud

centrada en explicar la situación de una persona poniendo el punto de mira en sus

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

33

características individuales, tendría en contextos de conflicto social la función de

control social, homogeneización y sumisión (Leyens, 1987). No es nada

infrecuente, más bien lo contrario, que las personas que acudan a Salud Mental

estén viviendo o hayan vivido una situación de mal-trato o injusticia en su entorno

familiar, laboral o social. Paykel (1971) encontró que las personas depresivas

refieren tres veces más de Acontecimientos Vitales Estresantes que la población

normal. Son acontecimientos vitales estresantes una enfermedad, una pérdida

parental, falta de cuidados, maltrato, abusos, desempleo, falta de soporte social,

malas condiciones de vivienda, etc.

Existen ciertas causas estructurales que generan sufrimiento en las

personas y que por tanto requieren poner la responsabilidad y el foco de la

solución más allá del individuo que las padece. Eso no quiere decir que a la vez

no se deba trabajar con la persona en el manejo de sus circunstancias particulares

y no esperar a que la causas que generan el malestar dejen de existir (Luengo,

2009).

En lo relativo al planteamiento del modelo general y su propuesta de

entender lo que ocurre en relación a las circunstancias y el funcionamiento de las

personas, nos apoyamos fundamentalmente en una concepción Sistémica. La

idea central es que la persona forma parte de un sistema donde los miembros no

solo interrelacionan, sino que son interdependientes. El desarrollo evolutivo de la

persona está dialécticamente relacionado con las personas que rodean al sujeto,

pero además no se puede entender lo que la persona hace, lo que le preocupa o

porqué fracasa sin tener en cuenta el sistema donde eso se da. Dentro de la

corriente sistémica destacamos varias escuelas que han sido referentes a la hora de

concretar la terapia que aplicamos.

La Escuela de Palo Alto considera que los problemas son de naturaleza

interaccional y su máxima es que “la solución es el problema”. Por tanto se

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

34

centran en bloquear o invertir el intento de solución que las personas y sus

familias desarrollan para solucionar el problema (Fisch, Weakland & Segal, 1985)

La Terapia familiar breve Centrada en Soluciones de Steve De Shazer

(1997) tiene como idea central que las personas que acuden a terapia por muy mal

que estén o muy grave que sea el problema tienen recursos para resolver sus

quejas y ayudarse a sí mismos. Se centran en las soluciones eficaces que emplean

o han empleado para resolver sus problemas y cuáles son las situaciones en que

hay excepciones y el problema no aparece. El objetivo terapéutico es encontrar y

ampliar los aspectos satisfactorios del funcionamiento de los clientes en el área

del problema y fuera del mismo con el fin de desarrollar el sentido de capacidad y

resolución de éstos.

La Terapia Estratégica plantea la necesidad de estudiar los síntomas

psicopatológicos a la luz de su funcionamiento y efecto en el contexto social más

cercano de la persona. Los síntomas tienen un sentido estratégico en las relaciones

interpersonales, una utilidad y una función que es clave a la hora de entender el

problema y las vías alternativas de solución (Haley, 1980).

La Escuela de Milán va más allá en este planteamiento y se centra en la

familia como un sistema cibernético autorregulado, en el que todos sus elementos

están interconectados y donde el problema que se presenta a consulta cumple una

determinada función dentro de la lógica interna del sistema y no solo para la

persona (Selvini-Palazzoli, Cirillo, Selvini & Sorrentino, 1990).

Los desarrollos actuales de la sistémica se centran más en la epistemología

y en los modelos constructivistas donde cobra máxima relevancia los significados

compartidos por el sistema. La terapia se centraría en la deconstrucción de la

historia y generar nuevas narrativas donde la persona deje de estar atrapado en la

definición previa del problema y de las soluciones. (Anderson & Gehart, 2006;

Anderson & Goolishian, 1988; White & Epston, 1993).

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

35

Hasta aquí la descripción sintética de los fundamentos y premisas que

hacemos nuestras para entender al sujeto psicológico, sus problemas y la

psicoterapia, y que por otro lado subyacen transversalmente al programa de

tratamiento que hemos aplicado y puesto a prueba.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

36

5. OBJETIVOS E HIPÓTESIS DEL ESTUDIO

La presente investigación se plantea como objetivo principal evaluar la

viabilidad y efectividad de un Programa de Psicoterapia Breve en comparación

con los tratamientos habituales que se utilizan para el abordaje de los Trastornos

Mentales Comunes en los CSM del Principado de Asturias. Para ello se ha

realizado un diseño de investigación que pretende mantener el rigor metodológico

y la validez interna de los ensayos clínicos aleatorizados, pero a la vez maximizar

la validez externa, y más en concreto la validez ecológica, que será lo que permita

realmente valorar si este programa de Psicoterapia Breve es viable y efectivo para

atender los trastornos mentales comunes en los servicios públicos de salud.

De inicio se plantean las siguientes hipótesis a verificar:

o Que la Psicoterapia es al menos tan efectiva como las Intervenciones

Habituales medido en términos de altas, estado clínico, nivel de

discapacidad, satisfacción, consumo de psicofármacos y uso de recursos

en el tratamiento de los TMC.

o Que es viable la implantación de un Programa de Psicoterapia Breve como

tratamiento de elección para una gran parte de los pacientes de los Centros

de Salud Mental.

o Que el programa de Psicoterapia Breve resulta más eficiente que los

tratamientos habituales aplicados en los Centros de Salud Mental en los

TMC.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

37

6. MÉTODO

6.1 Diseño metodológico

Para este estudio se ha desarrollado un diseño de ensayo clínico

aleatorizado de dos grupos, con evaluación pre y pos-tratamiento realizado en 5

Centros de Salud Mental públicos y seguimiento a los 6, 12, 24 y 36 meses. En la

Figura 1 se puede observar el diseño de la investigación, las distintas fases del

proceso y las variables que se registraron en cada momento.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

38

Figura 1. Diseño de la Investigación

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

39

En el Grupo Experimental se ha aplicado el Programa de Psicoterapia

Breve y en el Grupo Control el Tratamiento Habitual.

El diseño metodológico de esta investigación es de tipo experimental y trata de

maximizar la validez interna a través de las cuatro vías fundamentales:

o Selección aleatoria de la muestra.

o Asignación al azar a los grupos de tratamiento.

o Control de las variables socio-demográficas y clínicas pre-tratamiento.

o Comparación formal de dos tratamientos.

Otros factores con los que se ha tratado de potenciar la validez interna son:

o El tamaño muestral (142 sujetos).

o Evaluación en 5 momentos temporales.

o Seguimiento durante tres años.

o Control a través de más de 200 variables socio-demográficas y clínicas.

o Utilización de diferentes criterios de efectividad (clínico-administrativos,

sintomatológicos, uso de servicios, etc.) y de fuentes de información:

(terapeuta, paciente, registro del Servicio de Salud del Principado de

Asturias, etc.).

o Colaboración de becario-encuestador externo a la investigación.

o Control de sujetos que no quisieron participar o que se excluyeron.

o Comparación de los sujetos que fueron alta en ambos grupos y de los

sujetos que fueron abandono.

o Seminarios de formación específica en el modelo de tratamiento a los

terapeutas del Grupo Experimental.

Por otro lado se ha pretendido maximizar la validez externa y ecológica mediante

el desarrollo de la investigación y de los tratamientos en el contexto clínico real:

o Los pacientes no son preseleccionados, si no los que acuden a un Servicio

de Salud Mental público.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

40

o Los criterios de inclusión son muy amplios y recogen la heterogeneidad de

diagnósticos y comorbilidad presente en la práctica diaria, (el 87,44 %

cumplieron criterios de inclusión).

o Los terapeutas de ambos grupos pertenecen a los propios Servicios y cada

uno tiene formación previa diferente.

o Las condiciones para desarrollar los tratamientos son limitadas y acorde

con los recursos, el tiempo y la presión asistencial de los Servicios

Públicos.

o La comparación del tratamiento de Psicoterapia Breve se hace con los

tratamientos reales que se están aplicando en el día a día de los Servicios.

o Se utilizan criterios de resultado ligados a la práctica clínica y de gestión

(sintomatología y discapacidad, criterios clínico-administrativos -altas,

abandonos, siguen, retornos- , satisfacción, uso de recursos en atención

especializada y en atención primaria, uso de tratamientos

psicofarmacológicos durante y después del tratamiento en el Centro de

Salud Mental, etc.).

Otros factores que potencian la validez externa son:

o El tamaño muestral.

o Un seguimiento a medio-largo plazo de 3 años.

o Financiación de la investigación exclusivamente con recursos públicos de

los propios servicios de salud mental.

6.2 Análisis de los datos

Los análisis estadísticos se realizaron mediante el programa SPSS

(Statistical Package for the Social Sciences) versión 15.0. Además de los análisis

descriptivos, se utilizó la prueba Chi cuadrado (χ2) para la comparación de

variables categóricas y la t-Student para la comparación de variables cuantitativas

de ambos grupos de tratamiento.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

41

En el Anexo 1 están recogidas las tablas donde se detallan los resultados

del estudio. En cada una de estas tablas se desglosan las variables, los valores en

las mismas de cada grupo y los análisis estadísticos. Además del estadístico de

contraste pertinente para cada tipo de variables ( Chi cuadrado (χ2) o t de

Student), se recoge la p o nivel de significación y la V de Cramer para valorar el

tamaño del efecto en las variables categóricas y la correlación R de Pearson para

las variables cuantitativas.

6.3 Participantes

6.3.1 Pacientes

La muestra fue seleccionada al azar de entre las personas derivadas por

Atención Primaria a cinco Centros de Salud Mental (4 urbanos y 1 rural) de los

Servicios de Salud del Principado de Asturias durante un periodo de 18 meses.

Una vez a la semana personal de los Centros ajeno al grupo de investigación

seleccionaba al azar dos sujetos y los asignaban aleatoriamente a los dos grupos

de tratamiento. Posteriormente se solicitaba el consentimiento para participar en la

investigación y se realizaban las mediciones pre-tratamiento por parte de una

persona contratada por los Servicios de Salud Mental y ajena también al grupo de

investigación.

Los criterios de inclusión que se siguieron fueron los siguientes:

o Ser mayor de 18 años.

o Acudir por vez primera a ese CSM (aunque podía tener antecedentes de

tratamiento en otros CSM).

o No ser diagnosticado según criterios CIE-10 de trastorno mental orgánico,

psicosis, adicciones, trastorno de la conducta alimentaria, retraso mental,

trastorno del desarrollo psicológico o trastorno grave de la personalidad

(Paranoide, Esquizoide, Disocial y de Inestabilidad emocional).

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

42

o No haber realizado un intento autolítico grave los seis meses previos5.

o Requerir atención especializada (se excluyeron aquellos casos que no

requerían tratamiento).

o Acudir al menos a una consulta al CSM.

o Aceptar participar en la investigación.

Se puede constatar que los criterios de inclusión son muy amplios, solo se han

descartado los casos supuestamente más graves. El 87,4% de los sujetos

seleccionados al azar de entre los que acudieron al Centro de Salud Mental

cumplieron criterios clínicos de inclusión. Lo que se pretende es que la muestra

con la que se realice el estudio sea representativa de la heterogeneidad clínica

presente en los Servicios Públicos de Salud Mental resultando así más válida la

generalización y posterior aplicación de los resultados.

Se seleccionaron 215 casos, 114 en el Grupo Experimental y 101 en el

Control. Se seleccionaron más en el Grupo Experimental ante la posibilidad de

que la pérdida muestral pudiera ser mayor que en un Grupo Control. De los 215,

44 fueron casos perdidos, es decir, no entregaron el consentimiento para

participar o no acudieron a la primera consulta. Otros 18 fueron excluidos por

diagnóstico y 9 por no requerir tratamiento. Los casos excluidos por diagnóstico

se distribuyeron de la siguiente manera: psicosis (4 casos), trastorno orgánico (1),

toxicomanía (4), trastorno grave de la personalidad (4), trastorno de la conducta

alimentaria (3), retraso mental (1) e intento autolítico (1). Finalmente fueron 144

sujetos los que cumplieron criterios de inclusión y participaron en la

investigación, 72 en el Grupo Control y 72 en el Experimental. En la Tabla 1

(página 153) se recogen y desglosan los datos de casos seleccionados, los

excluidos y los perdidos tanto en el Grupo Experimental como en el Control.

5 Los casos donde ha habido un intento autolítico grave recientemente se excluyen de los ensayos clínicos pues reciben tratamientos muy protocolizados y desde la perspectiva legal genera muchas dudas su asignación aleatoria a un grupo de tratamiento. En nuestro estudio, de los 215 casos seleccionados al azar solo uno tuvo que ser excluido por este motivo.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

43

Dado que la investigación se realizó en los propios Servicios de Salud Mental,

que los terapeutas tenían que seguir realizando la atención normalizada al resto de

pacientes, el tamaño de la muestra tuvo que determinarse en función del número

de casos que los terapeutas podían asumir para la investigación (1 por semana)

para no alterar el funcionamiento normal de los servicios ambulatorios ni

abandonar el resto de actividades. También se acordó un tiempo límite al proceso

de inclusión que fue de un año y medio.

En la Tabla 2 (p. 154) se recogen las principales características socio-

demográficas de la muestra (edad, sexo, estado civil, formación, ocupación, etc.)

así como los análisis estadísticos descriptivos y las diferencias entre ambos

grupos. Comparando el Grupo Control y el Grupo Experimental, la única variable

que presenta una diferencia estadísticamente significativa6 es la edad, 37 años de

media en el Grupo de Psicoterapia Breve frente al 42,6 en el Habitual (t (142)= -

2,013; p=0,046). En la Figura 2 se recoge la distribución de la edad en ambos

grupos.

6 En nuestro estudio tomamos como referencia un Nivel de Confianza del 95% y por tanto ponemos el punto de corte de la significación estadística en p<0,05.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

44

Grupo de tratamientotto habitualexperimental

Ed

ad a

l in

icio

de

l tr

ata

mie

nto

80

60

40

20

Figura 2. Edad al inicio del tratamiento

Las variables clínicas pre-tratamiento de la muestra se describen en la

Tabla 3 (p. 156). Se recoge antecedentes asistenciales, estado clínico,

sintomatología, nivel de discapacidad, consumo de psicofármacos, diagnóstico,

etc. El 50% de los sujetos no tenía antecedentes asistenciales y el 59% tenía un

tiempo de evolución de la sintomatología inferior a 6 meses.

En la Figura 3 se recoge el tiempo de evolución (meses) de la

sintomatología en ambos grupos antes de acudir al Centro de Salud Mental. La

media en el Grupo Experimental es de 15 meses y en el Control de 12, la mediana

(que debido a la distribución es más representativa) se sitúa en 5,14 y en 4,5

meses respectivamente7. Las diferencias no son significativas (t (141)= 0,593;

7 Para facilitar la lectura e interpretación de los resultados, en todas las comparaciones realizadas a lo largo del texto el orden de presentación de los datos será siempre el mismo, primero los datos referidos al Grupo Experimental y luego los referidos al Grupo Control. Por ejemplo, “la mediana

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

45

p=0,554), pero a la hora de interpretar los resultados debe de tenerse en cuenta que

existe evidencia de que la Recuperación Espontánea con el paso del tiempo es

mucho más alta en los trastornos afectivos y neuróticos que tienen menos de 6

meses de evolución que los que tienen más (Catalan, Gath, Edmonds, & Ennis,

1984; Clark et al., 2009; Kendri et al., 2006; Spijker et al., 2002; Tennant, Hurry,

& Bebbington, 1981). En nuestro estudio, en el Grupo Experimental hay un

44,4% de casos que llegan al CSM con más de 6 meses de evolución de la

psicopatología frente al 38% en el Grupo Control.

Grupo de tratamientoGrupo ControlGrupo Experimental

Perí

odo d

e tie

mp

o c

on s

into

ma

tolo

gía

(m

ese

s)

50

40

30

20

10

0

Figura 3. Tiempo de evolución del trastorno previo al inicio del tratamiento

se sitúa en 5,14 y en 4,5 meses respectivamente”, el primer dato se refiere al Grupo Experimental y el segundo al Control.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

46

El 70% de los sujetos tiene prescritos ya psicofármacos cuando llegan al

CSM, el 65,3% en el Grupo Experimental y el 75,4% en el Grupo Control (χ2

(1)=2,15 ; p=0,14). La diferencia, aunque no sea estadísticamente significativa, sí es

relevante y por tanto debe de tenerse en cuenta en las comparaciones entre e intra-

grupo que se realizarán.

Tomando como referencia la Clasificación Internacional de Enfermedades

(CIE-10) de la Organización Mundial de la Salud (1992) los trastornos

adaptativos (F 43.2), el resto de los Trastornos neuróticos, secundarios a

situaciones estresantes y somatomorfos (F40-F49) y los Trastornos depresivos

(F32-F39) suponen el 93% de los diagnósticos de la muestra. Aunque hemos

agrupado diagnósticos, por su alta prevalencia hemos diferenciado los trastornos

adaptativos del resto de trastornos neuróticos (fobias, ansiedad, trastorno

obsesivo-compulsivo, reacción a estrés grave, trastornos disociativos y

somatomorfos). En la Figura 4 se recoge la distribución de diagnósticos de ambos

grupos. En el Grupo Experimental hay más trastornos depresivos y menos

trastornos neuróticos respecto al Grupo Control, pero no se constatan diferencias

significativas.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

47

16,7%

44,4%

30,6%

8,3%

9,7%

47,2%

37,5%

5,6%

Grupo Experimental Grupo Control

DIAGNÓSTICOS AGRUPADOSTrastorno Depresivo Tras. Adaptativo Trast. Neurótico Otros

Figura 4. Distribución de los Diagnósticos agrupados en ambos grupos

Respecto a la gravedad, en la escala de Impresión Clínica Global (ICG-G)

según paciente (Guy, 1976) el 72% de los sujetos están entre leve-moderado-

marcadamente enfermos. El índice global de severidad de la escala SCL-90

(Derogartis, 1977) da una media de 1,51 sobre 4. El nivel de discapacidad global

(laboral, social y familiar) recogido en la escala SDI (Sheehan, 1996) es de 16,3

sobre 30.

Comparando ambos grupos de tratamiento, la única variable clínica

relevante donde hay diferencias estadísticamente significativas en el pre-

tratamiento es en la distribución de las puntuaciones ICG-G ( χ2 (3)=12,387; p

=0,006; V=0,323). . En el Grupo Experimental hay más casos no enfermos (12,9% vs

3,5%), hay menos casos leves o al límite de la enfermedad (25,8% vs. 52,6%),

más casos moderada o marcadamente enfermos (51,6% vs. 42,1%) y también hay

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

48

más casos gravemente enfermos (9,7% vs. 1,8%). En la Figura 5 se puede

apreciar la distribución de cada grupo en la ICG-G.

Figura 5. Distribución de las puntuaciones en la Escala de Gravedad de la Impresión Clínica

Global antes de iniciar el tratamiento

Aunque desde el punto de vista clínico el Grupo Experimental presenta un

estado ligeramente más grave, se considera que en términos generales ambos

grupos son equivalentes y es factible una comparación formal entre ellos.

6.3.2 Terapeutas

Las características de los 6 terapeutas del Grupo de terapia breve fueron

las siguientes: 5 psicólogos clínicos y un psiquiatra. De los 72 casos de este grupo,

55 (76,4%) tuvieron psicólogo clínico como terapeuta de referencia y 17 (23,6%),

psiquiatra. Los terapeutas tuvieron una edad media de 42,15 años, con 16 años de

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

49

experiencia y una media de 745 horas de formación en psicoterapia. Hay 4

varones y 2 mujeres. La orientación teórica predominante es sistémica-ecléctica.

Antes de iniciarse la investigación se formó a los terapeutas-investigadores en el

guión de psicoterapia a través de seminarios y sesiones de supervisión de casos

con una duración de 45 horas.

Los casos del Grupo Control fueron atendidos por todos los terapeutas de

los CSM donde se realiza la investigación. En total fueron 7 psicólogos clínicos y

15 psiquiatras (4 de los psicólogos y uno de los psiquiatras también fueron

terapeutas en el Grupo Experimental). 16 casos (21.6%) tuvieron psicólogo

clínico como terapeuta de referencia y 58 (78,4%), psiquiatra. Aunque no

disponemos de datos suficientes sobre otras características de los terapeutas del

Grupo Control, si se puede afirmar que de media tenían mayor edad y experiencia

clínica y menor formación en psicoterapia que los terapeutas del Grupo

Experimental.

6.4 Variables e instrumentos de medida

Las variables pre-tratamiento registradas fueron 10 de tipo socio-

demográfico (Tabla 2, p. 154), pero también otras 25 clínicas relacionadas con

antecedentes asistenciales, tiempo de evolución hasta llegar al Centro de Salud

Mental, motivo de consulta, estado clínico y de discapacidad (ICG-G, SCL-90-R,

SDI), tratamiento farmacológico y diagnóstico (Tabla 3, p. 166).

Las variables de resultado o dependientes son más de 20 y fueron

registradas en cada momento temporal de seguimiento. Analizan el resultado

clínico-administrativo, el estado clínico y de discapacidad, tratamiento en

Atención Primaria, situación laboral, consumo de psicofármacos, satisfacción, etc.

A continuación se describen las fundamentales y los instrumentos de medida

utilizados:

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

50

6.4.1 Resultado clínico-administrativo

Describe el estatus del paciente respecto al tratamiento en el centro de Salud

Mental a los 6, 12, 24 y 36 meses del inicio del tratamiento tomándola del sistema

de Registro Acumulado de Casos Psiquiátricos del Principado de Asturias y de la

Historia Clínica en Salud Mental. Esta variable consta de las siguientes categorías:

o Continúa a tratamiento con el terapeuta inicial.

o Alta: El paciente ha sido dado de alta por su terapeuta de referencia, lo que

implica que a su juicio no requiere más atención por parte del CSM

(aunque puede continuar con tratamiento psicofarmacológico).

o Abandono: El paciente interrumpe el tratamiento contra la opinión del

terapeuta o sin haberlo consultado con este. Para que un caso se considere

abandono, deben haber transcurrido 4 meses desde la última consulta

programada a la que acudió, faltando a una cita posterior, sin haber sido

dado de alta ni teniendo otra cita programada.

o Otros motivos por los que un sujeto puede no continuar el tratamiento son:

por solicitar cambio de terapeuta, cambiar de CSM, fallecimiento, suicidio

y derivación a otro servicio de salud mental. Se dio un caso de cambio de

terapeuta y uno de fallecimiento.

o Retorno: Caso que vuelve a solicitar consulta en CSM tras haber sido dado

de alta o haber cumplido criterios de abandono.

6.4.2 Estado Clínico según el paciente

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

51

Ha sido evaluado mediante tres escalas:

o Escala de gravedad de la Impresión Clínica Global de Gravedad (ICG-G;

Guy, 1976; García-Portilla et al., 2008) aplicada al paciente antes de

iniciar el tratamiento. Consta de un único ítem donde el paciente valora el

grado de gravedad teniendo 7 alternativas: no enfermo; al límite de la

enfermedad; levemente enfermo; moderadamente enfermo; marcadamente

enfermo; gravemente enfermo; extremadamente enfermo.

o Escala de cambio o mejoría de la Impresión Clínica Global de Cambio

(ICG-C; Guy, 1976; García-Portilla et al., 2008) aplicada al paciente en

entrevista telefónica realizada al mes, a los 6 meses y a los 12 meses de ser

alta o abandono o, si el paciente seguía a tratamiento en el CSM, a los 6,

12 y 24 meses de la primera consulta. Posteriormente se agrupó esta

información según se tomara en el primer semestre, el segundo semestre y

el cuarto semestre desde el inicio del tratamiento. Consta de un único ítem

en el que se le pregunta al paciente cómo ha cambiado su estado en

relación al inicio del tratamiento, ofreciéndole 7 alternativas de respuesta,

puntuables de 1 a 7 (mucho mejor, bastante mejor, algo mejor, sin

cambios, algo peor, bastante peor, mucho peor). Para el análisis y

presentación de resultados hemos agrupado los valores de la siguiente

manera: “Mucho o bastante mejor” (1 o 2); “algo mejor” (3), “sin

cambios” (4), “peor” (5, 6 o 7).

o Symptom Check List-90 (SCL-90-R; Derogatis, 1977; González de Rivera

et al., 1989). Es un inventario que evalúa la existencia de síntomas

psicopatológicos y su nivel de intensidad. Consta de 90 items puntuables

de 0 a 4. Se obtienen 3 índices globales:

• Índice global de severidad (GSI): combina el número de síntomas

presentes con la severidad de los mismos. Es el mejor indicador

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

52

para resumir tanto la intensidad como la cantidad de

sintomatología. El rango teóricamente posible de este índice va de

0 a 4.

• Total de síntomas positivos (PST): estima el número de síntomas

presentes independientemente de la intensidad de los mismos. El

rango de la puntuación en este índice va de 0 a 90.

• Índice positivo de malestar (PSDI): mide la intensidad media solo

de los síntomas que están presentes. El rango de puntuación va de

0 a 22,5.

Los pacientes responden la escala SCL-90-R en los mismos momentos

temporales que a la ICG-C.

6.4.3 Grado de discapacidad según el paciente

Se ha evaluado mediante el Inventario de Discapacidad de Sheehan

(Sheehan Disability Inventory, S.D.I; Sheehan, Harnett-Sheehan & Raj, 1996;

García-Portilla et al., 2008). Evalúa la Discapacidad con tres ítems puntuables de

0 a 10: trabajo, vida social y vida familiar: La suma de las puntuaciones

proporciona un índice de discapacidad global. Se ha recogido en los mismos

momentos temporales que la ICG-C.

6.4.4 Satisfacción del usuario respecto al tratamiento

Evaluada mediante ítems seleccionados del Cuestionario de Satisfacción

de Moré y Muñoz (2000) sobre nivel de Beneficio percibido sobre el tratamiento y

grado de Satisfacción con la ayuda recibida. Se recogió en la primera evaluación

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

53

de seguimiento (al mes del alta o abandono o a los 6 meses si seguía a

tratamiento) o posteriormente si la persona no participó en aquella.

6.4.5 Consumo de psicofármacos

Se registran en distintos momentos temporales los sujetos que tienen

psicofármacos prescritos, el tipo de fármaco y la cantidad del mismo (antes de

iniciar el tratamiento, los primeros 2 meses, a los 6, 12, 24 y 36 meses). Dado que

la tasa de psicofármacos antipsicóticos, hipnóticos u otros ha sido muy baja, solo

se analizarán los fármacos antidepresivos y las benzodiacepinas. Las cantidades

se han estandarizado según la equivalencia de cada medicación con el fármaco de

referencia de cada grupo (Equivalencia en miligramos de Imipramina en el caso

de los antidepresivos y en miligramos de Lorazepam en el de las

benzodiacepinas).

6.4.6 Índice de Recuperación

Esta variable se ha construido a partir de una combinación de datos obtenidos

de la Historia Clínica de Salud Mental y la de Atención Primaria, privilegiando

los que serían indicadores objetivos de uso de servicios y tratamientos. Así, hemos

considerado casos recuperados aquellos que:

o No siguen a tratamiento en el CSM ni toman psicofármacos.

o No han tenido más de una consulta en AP en los últimos 6 – 12 meses por

motivos de Salud Mental.

o No han tenido ni un solo día de baja por problemas de salud mental en los

últimos 6 – 12 meses.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

54

Se puede observar que las variables de resultado implican tres tipos de

criterios o fuentes de valoración: el del terapeuta (resultado clínico), el del

paciente (Estado Clínico, Grado de Discapacidad, Satisfacción) y el derivado del

uso efectivo de servicios y tratamientos (Recuperación). El tener en cuenta

diferentes fuentes de valoración es un elemento central en nuestro estudio pues

asegura una mayor fiabilidad de los resultados obtenidos. No debemos obviar que

los tamaños del efecto de los tratamientos aplicados en una investigación suelen

ser más bajos cuando los tasa el paciente que cuando los tasa el clínico, aun sin

dejar de estar altamente correlacionadas (Lambert, Hatch, Kinston & Edwars,

1986). Si además le añadimos como criterio el uso objetivo de servicios y

tratamiento podemos asegurar una mayor fiabilidad.

6.5 Tratamientos

Los participantes recibieron dos tipos de tratamiento: el Tratamiento

Habitual y el de Psicoterapia Breve. Los asignados al Grupo Control recibieron el

Tratamiento y las intervenciones habituales dispensados en los CSM del

Principado de Asturias. La descripción más exacta de estas intervenciones se

realizó a posteriori, una vez registradas de facto las variables que describen el

tipo de intervención (Tabla 4, p. 159). Son más de 50 variables relacionadas con

la duración del tratamiento, el número de sesiones, el intervalo entre las mismas,

el tipo de intervenciones que se realizan y los profesionales que intervienen.

6.5.1 El Programa de Psicoterapia Breve del Grupo Experimental

Los sujetos asignados al Grupo Experimental recibieron Psicoterapia

Breve, combinada o no con psicofármacos. Aunque el modelo acepta el

tratamiento combinado, solo 6 casos comenzaron tratamiento psicofarmacológico

una vez iniciada la psicoterapia, estos suponen el 24% de los sujetos del grupo

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

55

que llegaron al CSM sin prescripción psicofarmacológica. La mayoría de los que

recibieron tratamiento combinado fue porque ya llegaban al CSM con los

psicofármacos pautados. Téngase en cuenta que el 65% de los sujetos de este

grupo estaban recibiendo tratamiento psicofarmacológico previo al inicio del

tratamiento en el Centro de Salud Mental.

No se establece con antelación el número de sesiones; nos adscribimos al

lema "las menos posibles y tantas como sean necesarias" (Rodríguez-Arias,

Fontecilla, González & Ramos, 1996). Este programa de Psicoterapia Breve no

prescribe técnicas de intervención concretas, estas dependen de las características

del caso y del criterio del terapeuta. Lo que se hace es seguir un guión general

para estructurar el tratamiento y en el que cabe la utilización de técnicas de

diferentes modelos teóricos, funcionando como un marco general al que

terapeutas de diferentes orientaciones teóricas podrían ajustarse. Para ello, los

terapeutas que lo apliquen deben tener una formación sólida en algún modelo

concreto de psicoterapia. En esta investigación en concreto y dado que la mayoría

de los terapeutas tenían formación y orientación sistémica, la psicoterapia ha

seguido principalmente las técnicas de la Terapia Sistémica Breve (Rodríguez-

Arias & Venero, 2006; Watzlawick & Nardone, 2000) complementadas con

técnicas cognitivo-conductuales. En definitiva, la psicoterapia se ha aplicado con

un formato previsiblemente viable en los servicios públicos (en particular

ajustándose a la heterogeneidad de pacientes y terapeutas) y siguiendo un modelo

ecléctico (como de hecho hacen la mayoría de los psicoterapeutas en contextos

aplicados). Al mismo tiempo, el uso de una guía general supone una definición y

estructuración del tratamiento psicoterapéutico que consideramos útil y necesaria

de cara a la definición de prestaciones y organización de servicios, dada la

indefinición y variedad de las psicoterapias. Es decir, se trata de un modelo de

trabajo práctico: sin demasiada generalidad que lo haga indefinido y sin

demasiada concreción que lo haga poco realista (Fernández et al., 2010a).

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

56

Algunas notas características del modelo de psicoterapia aplicado serían las

siguientes:

o Define y explica los problemas con hipótesis globales, sencillas, no

invalidantes y prácticas entendidas como construcciones plausibles y

orientadas a la solución y no como explicaciones objetivas. Se basa en

conceptos generales como vulnerabilidad, competencia, circunstancias

ambientales y funcionamiento personal. Se enfatiza una perspectiva

interaccional y contextual versus otras centradas en las características

individuales o en las ambientales.

o Se entiende que las quejas y las demandas de ayuda aparecen cuando las

personas se sienten incapaces de gestionar sus vidas, pierden la

perspectiva y se desmoralizan (Frank & Frank, 1991).

o Se trabaja con objetivos limitados, alcanzables y concretos. A corto plazo

se trata de superar un atascamiento o estado de desmoralización y

recuperar la sensación de autoeficacia. En algunos casos a largo plazo se

trata de reducir la vulnerabilidad personal trabajando sobre el estilo de

funcionamiento.

o Se promueve la colaboración activa del paciente y el terapeuta en un

trabajo conjunto y de negociación acerca del problema, de los objetivos y

de las estrategias de solución.

o Se enfatizan las posibilidades de desarrollo y las competencias de los

pacientes.

o El terapeuta se muestra activo (reactiva los recursos o competencias, co-

construye el problema); directivo (organiza el proceso, propone tareas para

casa); didáctico (da explicaciones, hace re-encuadres); y en general se

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

57

atiene a las reglas generales de la relación terapéutica (mostrar empatía,

proporcionar seguridad y apoyo, etc.).

o Se enfatiza más la acción y la experiencia que el insight: es el paciente el

que debe trabajar, entre sesiones, para resolver los problemas. En este

sentido se considera fundamental un intervalo temporal corto entre

sesiones (ver tabla 3).

o En fin, se entiende la psicoterapia como una tarea de resolución conjunta

de problemas en el contexto de una relación personal y no como un

conjunto de técnicas que se aplican a los pacientes según su diagnóstico.

La psicoterapia se ha aplicado siguiendo un guión de tratamiento general que

describe las tareas generales a llevar a cabo: definición del problema y los

objetivos, planteamiento de estrategias, etc. Su formato temporal tiene tres fases

que se describen en la Figura 6.

FASE

TAREAS/OBJETIVOS

DURACIÓN

DE LAS

SESIONES

INTERVALO

ENTRE-

SESIONES

1ª TEORÍA

CONJUNTA

Construcción del problema, acordar

objetivos y plantear estrategias

generales.

45-60 min.

7-10 días

2ª CAMBIO

CONDUCTUAL

Propuesta de tareas concretas y

reevaluación continua.

30 minutos

2-3 semanas

CONSOLIDACIÓN

Refuerzo de progresos y prevención

de recaídas.

20-30 min.

2-3 meses

Figura 6. Estructuración temporal de la Terapia Breve

La fase de “Teoría Conjunta” suele llevar entre 1 y 3 sesiones de entre 45-

60 minutos de duración y un intervalo entre sesiones corto, entre 7 y 10 días. En

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

58

esta fase se exploran las quejas, el contexto donde aparecen, la historia de la

persona y su funcionamiento. A partir de ahí se construye la definición del

problema poniendo en relación las quejas con las circunstancias de la persona y

su funcionamiento personal (Queja= Circunstancia+ Funcionamiento personal).

Para ello se utiliza el “Esquema de diferenciación” (Figura 7) que básicamente es

un esquema de trabajo que ayuda a tener una visión general del problema.

Descripción Objetivos Estrategia/acciones Tiempo

PROBLEMA/QUEJAS

CIRCUNSTANCIAS

FUNCIONAMIENTO

PERSONAL

Figura 7. Esquema de Diferenciación

Otra herramienta que se utiliza es el “Esquema de Componentes” (Figura

8), que partiendo de acontecimientos relevantes en cada etapa de la vida de la

persona ayuda a reflexionar sobre su manera de reaccionar, la de su entorno, qué

imagen iba construyendo de sí mismo y de los demás, y las competencias que

desarrolló.

FASE Acontecimiento Comportamiento Entorno Cognición Competencia

Temprana

Intermedia

Reciente

Futura

Figura 8. Esquema de Componentes

Una vez construida y aceptada la definición del problema lo siguiente es

acordar los objetivos a trabajar y las estrategias para alcanzarlos en cada una de

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

59

las tres áreas: los problemas, las circunstancias y el funcionamiento personal.

Todo ello se reflejará en el Esquema de diferenciación. Otras técnicas útiles serán

los registros observacionales, el genograma, la pregunta milagro, los re-encuadres,

las metáforas, la psicoeducación, etc. En esta fase es fundamental el

establecimiento de la Alianza terapéutica, la empatía, la aceptación, la detección

de los puntos fuertes de la persona, la recuperación de la perspectiva, la definición

de las metas y las personas de apoyo.

La fase de “Cambio Conductual” dura entre una y seis sesiones de 30

minutos y el intervalo entre sesiones puede ser de entre 2 y 3 semanas. En ella se

lleva a cabo la implementación del plan de trabajo diseñado en la fase anterior. A

base de implementar sus estrategias la persona va recuperando la competencia,

aumentando el autocontrol y el manejo de las circunstancias y los problemas. En

esta fase se pueden poner en marcha todo tipo de técnicas terapéuticas que tengan

coherencia con la definición realizada tanto del problema como de las soluciones.

Para el control de los síntomas pueden ser propicias técnicas tan diversas como la

relajación, el ejercicio, la activación conductual, la exposición, trabajo con

excepciones, prescripciones paradójicas, la aceptación y compromiso, la

medicación, etc. Para el manejo de las circunstancias puede ser adecuada la

terapia de pareja o familia, la toma de decisiones, la solución de problemas, apoyo

familiar y de amistades, etc. En lo relativo al funcionamiento personal tras trabajar

inicialmente la toma de conciencia y la comprensión del funcionamiento, las

vulnerabilidades y los puntos fuertes, se pueden aplicar técnicas como los

experimentos conductuales, las excepciones, los re-encuadres, el entrenamiento en

habilidades sociales, etc. La clave de las técnicas que se escojan estará en la

coherencia que tengan dentro del planteamiento de trabajo co-construido por el

terapeuta y los consultantes. Todas las sesiones en esta fase comienzan con la

revisión de una plantilla de seguimiento de las distintas tareas realizadas entre

sesiones y los efectos que las mismas han tenido (Figura 9).

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

60

TAREA PACTADA RESULTADOS

Respecto al Problema

Vinculados al Problema

Respecto a las Circunstancias

Vinculados a las Circunstancias

Respecto al Funcionamiento

Personal

Vinculados al Funcionamiento

Personal

Figura 9. Plantilla de Revisión de Tareas

La última fase, de “Consolidación”, es de una o dos sesiones de treinta

minutos de duración y con intervalo de 2 ó 3 meses. En esta fase se definen los

objetivos a largo plazo de la persona, se refuerzan los cambios realizados y se

trabajar la prevención de recaídas.

6.5.2 Descripción empírica del tratamiento de Terapia Breve (Ver tabla 4, p. 159)

A continuación se pasan a describir los datos de la Psicoterapia Breve en las

variables de tratamiento que hemos registrado en la investigación.

o En el periodo de tres años de seguimiento los pacientes de este grupo

tuvieron una media de 6,24 sesiones con su terapeuta de referencia

(Desviación típica (Dt)=3,73; Mediana (Md)=5; Moda (Mo)=5). Hubo 18 casos

(el 25%) que tuvieron al menos una sesión con otro facultativo del CSM,

siendo el nº de sesiones total con cualquier facultativo del CSM de 7

sesiones (Dt=4,76; Md=5,5), un Rango de entre 1-28 y con un intervalo

medio entre sesiones de 34,29 días (Dt=17,67; Md=31,37). El 75% de los

sujetos recibieron 9 sesiones o menos. En la Figura 10 se presenta la

distribución del número total de sesiones en el CSM de cada grupo de

tratamiento.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

61

Grupo de tratamientoGrupo ControlGrupo Experimental

Se

sio

ne

s d

e tra

tam

iento

en

CS

M h

asta

3 a

ños

30

20

10

0

Figura 10. Número de sesiones de tratamiento hasta los 3 años

o El 41% tuvieron además más de una consulta con sus médicos de Atención

Primaria (MAP) en el primer semestre.

o La duración media del tratamiento a los 3 años fue de 7 meses (Media

(M)= 213 días; Dt=223; Md=170). En el 75% de los casos duró menos de

8 meses. En la Figura 11 se muestra la duración del tratamiento en cada

uno de los grupos medido a los tres años de iniciarse este.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

62

Grupo de tratamientoGrupo ControlGrupo Experimental

dura

ció

n h

ast

a 3

os

(en

dia

s)1.200

1.000

800

600

400

200

0

Figura 11. Duración del tratamiento hasta los 3 años

o Se ha considerado que recibieron psicoterapia los que cumplieron un

criterio mínimo: asistir a 3 sesiones o menos si fueron alta, pues se

entiende que la intervención hecha en una sola consulta puede ser útil y

suficiente (Ramos, 1995; Rodríguez-Arias et al., 1996). Así, el 81,9% de

los casos recibieron un mínimo de psicoterapia, con 4,57 sesiones de

media. El 37,1% del grupo recibió solo psicoterapia y el 60% también

psicofármacos. 2 pacientes (2,9%) solo tuvieron tratamiento

farmacológico. De los pacientes que llegaron sin tratamiento

psicofarmacológico, al 24% se les prescribió una vez comenzaron

tratamiento en el CSM. El 61,1% consumió psicofármacos en algún

momento del tratamiento. El 7,2% de los sujetos tuvieron al menos una

sesión con personal de enfermería. En la Figura 12 (Ver p. 63) se muestra

el número de casos que recibieron solo tratamiento psicológico, solo

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

63

tratamiento farmacológico y los que recibieron tratamiento combinado,

tanto en el Grupo Experimental como en el Grupo Control.

TIPO DE TRATAMIENTO APLICADO

3%

67%

60%

21%

37,1%

11,9%

0%

10%

20%

30%

40%

50%

60%

70%

80%

Grupo Psicoterapia

Breve

Grupo Tratamiento

Habitual

% d

e C

aso

s Solo tratamiento psicológico

Solo tratamientoPsicofarmacológico

Tratamiento Combinado

Figura 12. Tipo de tratamiento aplicado en cada grupo

6.5.3 Descripción Empírica del Tratamiento Habitual

o Tuvieron 5,68 sesiones de media con su terapeuta de referencia (Dt=5,65;

Md=3,5). El 6% tuvo además consulta con otros facultativos del CSM y el

39,7% al menos dos sesiones con MAP. El nº medio de sesiones total con

cualquier facultativo del CSM a los tres años fue de 6,17 (Dt=6,48;

Md=3,5; Mo==1). El rango se situó entre 1-30 sesiones, con un intervalo

medio entre ellas de más de dos meses (M=63,47 días; Dt=39,42; Md=59).

El 75% recibieron 8 sesiones o menos (Ver Figura 6, p. 57). En la Figura

se constata que la distribución de sesiones es diferente en cada grupo,

mientras que en Grupo de Psicoterapia Breve sigue una distribución

normal con un valor central entorno a 5 sesiones, el Grupo de Tratamiento

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

64

Habitual sigue una distribución asimétrica donde destaca que el 26,4% de

los casos del grupo recibieron una sola sesión.

o La duración media del tratamiento a los 3 años fue de 11 meses

(M=327,24 días; Dt=405; Md=116). En el 75% de los casos duró 15 meses

o menos (Ver Figura 11, p. 61).

o Recibieron un mínimo de psicoterapia el 22,2% de los casos, con una

media de 3,87 sesiones; el 11,9% recibió solo sesiones de psicoterapia, el

67.2% solo intervenciones farmacológicas y el 20,9% tratamiento

combinado (ver Figura 12, p. 63). El 83,1% tomó psicofármacos durante

algún momento del tratamiento, casi todos pautados por psiquiatra. De los

pacientes que llegaron sin tratamiento psicofarmacológico, al 47,1% se les

prescribió una vez comenzaron tratamiento en el CSM. De los sujetos

asignados a psicólogo ninguno de los que llegaba sin psicofármacos se les

pautó posteriormente. El 10% de los sujetos tuvieron al menos una sesión

con enfermería.

En la Figura 13 se compara la media de ambos grupos en Nº de Sesiones,

Duración del tratamiento e Intervalo temporal entre sesiones.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

65

7 7,1

4,9

6,17

10,9

9,1

0

1

23

4

5

6

7

89

10

11

12

Nº Sesiones Duración

Tratamiento

(meses)

Intervalo entre

sesiones

(semanas)

Grupo Psicoterapia Breve

Grupo Tratamiento Habitual

Figura 13. Duración de los Tratamientos

La descripción más detallada de los tratamientos, la comparación entre

ambos y los análisis estadísticos están recogidos en la Tabla 4 (p. 159). Hay

diferencias estadísticamente significativas entre los dos grupos en las siguientes

variables importantes de tratamiento:

o En el Grupo Experimental predominan las intervenciones

psicoterapéuticas en el 85,5% y en el Grupo Control la psicofarmacológica

en el 58,3% (χ2 (6)= 65,47; p =0,000; V=0,681). Esta diferencia también se

refleja en el número de sesiones de psicoterapia y psicofarmacología que

recibe cada grupo (Ver Figura 12, p. 63).

o Respecto al consumo de fármacos durante algún momento del tratamiento

en el CSM toman psicofármacos el 61,1% de los sujetos del Grupo

Experimental vs. 83,1% del Control (χ2 (1)=8,58; p =0,003; V=0,245).

o Nº de sesiones en CSM: hay casi una sesión más de media en el Grupo

Experimental, 7 vs 6,17 (t (142)=0,879; p =0,381).

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

66

El Intervalo medio entre sesiones es menor en el Grupo Experimental:

34,29 días vs 63,47 días en el Grupo Control (t (120)=-5,016; p =0,000;

R=0,447).

La duración del tratamiento es de 213 días de media del Experimental frente

a 327, 7 meses frente a 11 (t (142)= -2,084; p =0,039) (ver Figura 13, p. 65).

A pesar de que el 25% de los sujetos del Grupo Control solo tienen una

consulta en el CSM, la media de sesiones es similar en ambos grupos y la

duración mayor de 100 días en relación al Grupo Experimental.

Se observa que el tratamiento de ambos grupos es diferente, en el Grupo

Experimental el peso recae sobre el tratamiento psicológico y en el Grupo Control

lo hace sobre los psicofármacos. En lo referido al consumo de psicofármacos se

constatan grandes diferencias entre ambos grupos a pesar que el porcentaje de

sujetos que ya están tomando psicofármacos antes de iniciar el tratamiento en

CSM es de 70,8% (65,3 vs 76,4%). También es de destacar que en el Grupo

Control existe mucha diferencia entre los tratamientos aplicados por psicólogos

clínicos y los aplicados por psiquiatras. En realidad los casos del Grupo Control

que no toman fármacos tienen como responsable de caso a psicólogos en más del

95% de los casos.

6.6 Procedimiento

Antes de iniciarse el estudio se contó con las autorizaciones oportunas de

los responsables de Servicios de Salud Mental implicados y del Comité de Ética

de Investigación Clínica de Asturias.

El procedimiento general está recogido en la Figura 1 (p. 38). Los sujetos

se seleccionaron de entre los pacientes derivados a 5 Centros de Salud Mental (4

de zona urbana y 1 de zona rural) por los cauces habituales. De los casos

derivados desde Atención Primaria en determinado período temporal (variable en

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

67

cada CSM, pero en todo caso entre Junio de 2005 y Noviembre de 2006), se

seleccionó una muestra al azar que se asignó también de manera aleatoria al

Grupo Experimental o al Grupo Control. La selección y asignación de casos fue

realizada por personal de los CSM ajeno al equipo de investigación (auxiliares,

enfermeras o trabajadoras sociales especializadas en salud mental). A

continuación y con la información disponible en el informe de derivación del

médico de AP, de la entrevista de recogida de datos básicos y de la primera

consulta en el CSM se descartaba a los sujetos que cumplían criterios de

exclusión, al resto se les solicitó el consentimiento para participar en la

investigación.

Antes de iniciar el tratamiento se realizó una evaluación psicométrica

previa del estado clínico y de discapacidad (Escala de gravedad del ICG-G, SCL-

90-R y Escala de Discapacidad SDI). Además se recogieron variables socio-

demográficas, antecedentes clínicos y de derivación. Estas evaluaciones, así como

la recogida del resto de datos para la investigación fueron realizadas por una

persona becada dependiente de Unidad de Coordinación de Salud Mental de

Asturias. En algunos casos del grupo Experimental la psicoterapia no resultó

aplicable, pero se han mantenido igualmente en el grupo asignado por “intención

de tratamiento”, no por seguir el tratamiento completo. Una vez iniciado el

tratamiento, se aplicaron los cuestionarios al mes, a los 6 meses y a los 12 de ser

alta o abandono o, si el paciente seguía a tratamiento en el CSM, a los 6, 12 y 24

meses de la primera consulta. Posteriormente se reagrupó esta información junto

con el resto de variables de resultado según se tomara en el primer semestre, el

segundo semestre y el cuarto semestre desde el inicio del tratamiento. A los 3

años también se recogieron variables de resultado exceptuando las pruebas

psicométricas.

6.7 Análisis de los sujetos participantes en la investigación y los que

cumpliendo criterios de inclusión no lo hicieron

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

68

Comparando en 23 variables socio-demográficas y clínicas pre-

tratamiento al grupo que participó en la investigación (n = 144) con aquellos que

cumpliendo criterios de inclusión no aceptaron participar y consta información

(n=16), solo hay diferencia estadísticamente significativa en tiempo con

sintomatología, que es mayor en el grupo de casos perdidos, y en motivo de

consulta, más casos del grupo de casos perdidos de “solicitud de consejo o

informe”. Comparando los casos perdidos del Grupo Control (7) y del

Experimental (9) sus puntuaciones en gravedad clínica son similares.

6.8 Análisis de los sujetos que completaron el tratamiento frente a los que no

lo completaron (Ver tabla 5, p. 163)

En las investigaciones de eficacia de los tratamientos psicológicos se suele

analizar por separado la muestra de intención de tratamiento (los que iniciaron los

tratamientos) y los sujetos que completaron el tratamiento (los que asistieron a un

número mínimo de sesiones). En nuestros Servicios de Salud Mental los

tratamientos no tienen una duración predeterminada, sino que continúan hasta que

el facultativo da el alta o el paciente abandona. El tratamiento psicológico usado

en la presente investigación tampoco tiene un número de sesiones

predeterminado. Por ello, hemos considerado que completaron el tratamiento los

sujetos que asistieron al menos a 3 consultas en el CSM con un facultativo (el de

referencia u otro) o a menos si el terapeuta les dio el alta (lo que implica que

consideró que no requerían más tratamiento en el CSM). Es decir, que no

completaron el tratamiento los que abandonaron tras la primera o segunda sesión.

Se aplicó el mismo criterio a ambos grupos. Con este criterio, encontramos que

119 sujetos completaron los tratamientos, el 82,6% de los que lo iniciaron: 64

(88,9%) en el Grupo Experimental y 55 (76,4%) en el Control.

La comparación entre el grupo de los sujetos que completaron el

tratamiento y los no completadores se recoge en la Tabla 5 (p. 163). Analizando

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

69

las diferencias, en el grupo de los no completadores hay muchos más sujetos con

diagnóstico de trastorno adaptativo (68%) y menos con trastorno depresivo o de

ansiedad que en el grupo de los completadores. Por definición hay más abandonos

y el periodo de tiempo a tratamiento es menor. Además en este estudio los no

completadores también han registrado menor consumo de psicofármacos y menos

consultas con MAP. En el cuestionario de satisfacción, el 90% de los sujetos que

no completaron el tratamiento refieren que el tratamiento ha resultado beneficioso

y están satisfechos con la ayuda recibida.

Una posible explicación a estos resultados podría ser que en el sistema

público de salud español no se establece un número fijo de sesiones y por tanto si

el sujeto se encuentra mejor al principio y todavía no ha establecido una relación

de confianza con el terapeuta simplemente deja de asistir. En relación con lo

anterior y viendo el mayor porcentaje de diagnóstico de trastornos adaptativos,

también podría ser que presentan problemas más circunstanciales que tienden a

resolverse primero. Es más lógico que aquellas personas que no se sienten todavía

bien continúen a tratamiento.

6.9 Análisis de los sujetos que participaron en los seguimientos psicométricos

en cada momento temporal frente a los que no lo hicieron

Para la mayoría de variables de resultado clínico, uso de recursos y

consumo de psicofármacos, se dispone prácticamente de la totalidad de la

información de los participantes en los diferentes momentos temporales. Sin

embargo la tasa de sujetos que han realizado las pruebas psicométricas (ICG-C,

SCL-90-R, SDI) a los 6, 12 y 24 meses es significativamente inferior máxime en

los seguimientos sucesivos. Han realizado algún seguimiento psicométrico tras el

inicio del tratamiento en CSM el 55,6% de los sujetos. Por momentos temporales

participan en el seguimiento psicométrico el primer semestre 57 sujetos (39,6%),

el segundo semestre 56 sujetos (38%) y el segundo año 36 sujetos (25%).

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

70

Los datos de participación en cada momento temporal por grupos se

exponen en a continuación:

GRUPO

EXPERIMENTAL

GRUPO

CONTROL

TOTAL

SI NO SI NO SI NO

1er

semestre

29

(40,3%)

43

(59,7%)

28

(38,9%)

44

(61,1%)

57

(39,6%)

87

(60,4%)

semestre

31

(43,1%)

41

(56,9%)

25

(34,7%)

47

(65,3%)

56

(38,9%)

88

(61,1%)

2º año 21

(29,2%)

51

(70,8%)

15

(20,8%)

57

(79,2%)

36

(25%)

108

(75%)

En algún

momento

41

(56,9%)

31

(43,1%)

39

(54,2%)

33

(45,8%)

80

(55,6%)

64

(44,4%)

Tabla. Participantes en los seguimientos psicométricos

Aunque la pérdida de datos psicométricos no es infrecuente en estudios a

medio plazo, se hace necesaria una comparación en los diferentes momentos

temporales entre los sujetos que participaron en los seguimientos psicométricos y

los que no participaron en distintas variables pre-tratamiento, de tratamiento y de

resultado (en total más de 100 variables) para analizar posibles diferencias entre

ambos grupos que pudieran estar interactuando con los resultados y afectaran a la

generalización.

o Comparación de los participantes y los no participantes en el seguimiento

del primer semestre: ambos grupos están compuestos a partes iguales por

sujetos del Grupo Control y del Experimental. Los no participantes tienen

una media de edad menor (37,8 años vs. 43,2 ; t (141)= -2,405; p=0,017) ,

hay más solteros (el 29,9% de su grupo frente al 12,3% en el otro χ2

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

71

(4)=11,17 p= 0,025 y V=0,279), menor tasa de ILT (el 19,2% de su grupo frente al

35,3% del otro χ2 (1)=4,180 p= 0,041 y V=0,180) y más diagnósticos de trastorno

adaptativo (el 49,4% de su grupo frente al 40,4% del otro χ2 (3)=8,913 p= 0,030

y V=0,249). En relación al tratamiento, la duración es menor entre los que no

participaron en el seguimiento (209 días vs. 341; t (100)= -0,293; p=0,024).

Analizando resultados se constata que el grupo de no participantes tiene

una tasa de abandonos superior a los 6 meses (35,6% vs. 12,3% χ2 (2)=9,794

p= 0,007 y V=0,261), al año (43,7% vs. 21,1% χ2 (2)=8,716 p= 0,013 y V=0,246), a los

dos años ( 44,28% vs. 21,1% χ2 (3)=10,195 p= 0,017 y V=0,266), y a los 3 años

(44,8% vs. 21,1% χ2 (3)=10,747 p= 0,013 y V=0,273 ). También tienen menor

consumo de psicofármacos al iniciar el tratamiento (el 35,6% de su grupo

frente al 16,1% del otro χ2 (1)=6,47 p= 0,011 y V=0,213) y a los 6 meses (el

51,2% de su grupo frente al 23,2% del otro χ2 (1)=10,957 p= 0,001 y V=0,280). No

hay diferencias estadísticamente significativas en otras variables de

resultado.

o Comparación de los participantes y los no participantes en el seguimiento

del segundo semestre: no hay diferencias en variables socio-demográficas

o clínicas pre-tratamiento. Hay mayor tasa de abandonos entre los no

participantes en el seguimiento del segundo semestre (39,8% vs. 5,4% χ2

(2)=22,387 p= 0,000 y V=0,394), al año (47,7% vs. 14,3% χ2 (2)=17,839 p= 0,000 y

V=0,352), a los dos años ( 47,7% vs. 16,1% χ2 (3)=16,324 p= 0,001 y V=0,337), y a

los 3 años (47,7% vs. 16,1% χ2 (3)=16,117 p= 0,001 y V=0,335). También tienen

una duración menor del tratamiento (202 días vs. 355; t (141)= -2,783;

p=0,006) y menor número de sesiones (4,78 vs. 7,54; t (141)= -3,987;

p=0,000). No hay diferencias en otras variables de resultado.

o Comparación de los participantes y los no participantes en el seguimiento

del segundo año: Hay mayor tasa de abandonos entre los no participantes

en el seguimiento a los 6 meses (32,4% vs. 8,3% χ2 (2)=8,120 p= 0,017 y

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

72

V=0,237), al año (41,7% vs. 13,9% χ2 (2)=10,002 p= 0,007 y V=0,264), a los dos

años ( 41,7% vs. 16,7% χ2 (3)=8,409 p= 0,038 y V=0,242), y a los 3 años (41,7%

vs. 16,7% χ2 (3)=9,828 p= 0,020 y V=0,261). La duración media del tratamiento es

menor entre los que no participaron en este seguimiento (228 días vs. 362;

t (141)= -2,159; p=0,033) y también es menor el número de sesiones (5,32

vs. 7,47; t (141)= -2,696; p=0,008). También tienen menos consultas en

Atención Primaria y consumen menos psicofármacos.

En resumen, los sujetos que no participan en los seguimientos psicométricos

de los 6, 12 y 24 meses se distribuyen en la misma proporción en ambos grupos

de tratamiento (Control y Experimental). La tasa de abandonos es superior entre

los no participantes en los seguimientos y por tanto la duración del tratamiento y

el número de sesiones es menor. También tienen un menor consumo de

psicofármacos. La hipótesis que podría explicar estas diferencias es que los

sujetos que se encuentran mejor y abandonan el tratamiento (especialmente los

6 primeros meses) luego también participan menos en los seguimientos, como es

lógico. Y esas variables (mejoría y abandono) podrían ser las que expliquen la no

participación y además medien en las diferencias entre participantes y no

participantes.

Por tanto no se constata que los sujetos que no participaron en los

seguimientos psicométricos en alguno de los tres momentos temporales se deba a

que se encuentren peor que los que participaron. Más bien parece que en términos

generales participaron menos las personas que se encontraban mejor y

abandonaron.

No podemos obviar que la mayoría de ensayos clínicos hacen seguimiento a

corto plazo y que en nuestro estudio estamos llegando a los dos años. Obviamente

cuanto mayor sea el periodo temporal de seguimiento menos sujetos participarán

en las evaluaciones psicométricas.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

73

De todas formas, de cara a la generalización de los resultados debe de tenerse

en cuenta esta excesiva pérdida de casos en los seguimientos psicométricos que en

esta investigación se ha tratado de compensar utilizando otros criterios para medir

los resultados (situación clínico-administrativa, uso de otros recursos, consumo de

psicofármacos, etc.). Lo que sí es muy importante constatar es que los

participantes y no participantes en los seguimientos se distribuyen por igual en el

Grupo Control y en el Experimental, por lo que esa variable no está mediando las

posibles diferencias a la hora de comparar los resultados del Tratamiento Habitual

con el de Psicoterapia Breve.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

74

7. RESULTADOS

A continuación se compararán los resultados obtenidos por el Grupo

Experimental y el Control en diferentes momentos desde el inicio del tratamiento:

a los 6, 12, 24 y 36 meses (comparación entre-grupos). Posteriormente se realiza

un análisis de la evolución de los resultados dentro de cada grupo de tratamiento

(comparación intra-grupo). Finalmente se comparan los resultados de los sujetos

que fueron dados de alta en ambos grupos de tratamiento y también de los que

abandonaron.

7.1 Comparación entre-grupos de resultados a los 6 meses (Ver Tabla 6, p.

168)

Resultado clínico-administrativo

Se refiere a la proporción de casos que fueron dados de alta por su

terapeuta, los que abandonaron y los que siguen a tratamiento. A los 6 meses en el

Grupo de Psicoterapia Breve hay un porcentaje ligeramente mayor de altas que en

el Grupo de Tratamiento Habitual (31.9% vs. 25%). El número de abandonos fue

menor en el Grupo de Psicoterapia Breve (22,2% vs 30,6%) y siguen a

tratamiento un porcentaje cercano al 45% en ambos grupos (Ver Figura 14, p.

75). Estadísticamente no hay diferencias significativas (n.s.) entre ambos grupos

(χ2 (2)= 1,408; p=0,495).

El número de consultas con el médico de atención primaria (MAP) este

primer semestre es similar en ambos grupos: 1,82 de media en el Grupo

Experimental y 1,72 en el Control.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

75

SITUACIÓN CLINICO ADMINISTRATIVA

A LOS 6 MESES

32%

22%

46%

25%

31%

44%

0%

5%

10%

15%

20%

25%

30%

35%

40%

45%

50%

Alta Abandono Sigue a

Tratamiento

% d

e C

aso

s

Grupo Psicoterapia Breve

Grupo Tratamiento Habitual

Figura 14. Situación Clínico-Administrativa a los 6 meses

Estado clínico y sintomatológico

En la Escala de Cambio de la Impresión Clínica Global (ICG-C) en el

Grupo Experimental hay un 48,1% de sujetos que refieren estar sustancialmente

mejor frente al 57,7% del Grupo Control; “algo mejor” refieren estar el 29,6%

frente al 30,8%. Teniendo en cuenta la distribución global agrupada (Mejora

sustancial-Algo mejor-Sin cambios-Peor), no hay diferencias significativas (χ2 (3)=

6,13; p=0,106), pero si analizamos solo aquellos casos que refieren encontrarse

“peor” que al iniciar el tratamiento, son un 18,5% del Grupo Experimental y

ninguno en el Control (χ2 (1)= 5,36; p=0,021; V=0,317). En la Figura 15 (p. 76) se

pueden ver los datos más desglosados.

En la escala SCL-90-R el Índice global de severidad (GSI) se mantiene

similar al pre-tratamiento en el Grupo Experimental 1,55 y se reduce a 1,03 en el

Grupo Control (t (49,51)=2,68 ; p= 0,011; R=-0,339). Respecto al total de síntomas

positivos PST no hay diferencia estadísticamente significativa (t (53)=1,79; p

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

76

=0,079), pero es relevante clínicamente: 54,18 de media en el Experimental vs

44.93 del Control. En Índice de malestar positivo PSD obtienen 2,23 vs 1,90

respectivamente (t (54)=1,99; p =0,052).

ESCALA DE CAMBIO ICG A LOS 6

MESES

26%

4%

31%

0% 0% 0%

22%

30%

11%

7%

0%

27%

31%

12%

0%

5%

10%

15%

20%

25%

30%

35%

Much

o mejo

r

Basta

nte m

ejor

Algo m

ejor

Sin ca

mbio

s

Algo p

eor

Basta

nte p

eor

Much

o peor

% d

e C

aso

s

Grupo Psicoterapia Breve

Grupo Tratamiento Habitual

Figura 15. Escala de Cambio ICG-C a los 6 meses

Grado de discapacidad según el paciente

Aunque el Grupo Experimental partía de niveles ligeramente más elevados

de discapacidad global (17,25 vs 15,34), a los 6 meses ambos grupos presentan

índices similares: 13,17 el Grupo Experimental vs 13,39 el Grupo Control (t (40)=-

0,071; p =0,944) (Ver Figura 16, p. 77).

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

77

Figura 16. Escala SDI a los 6 meses

Consumo psicofármacos

Tras las primeras semanas de iniciar el tratamiento en el CSM ya se

marcan diferencias significativas en el porcentaje de sujetos que toman fármacos

en ambos grupos 61,1% del Experimental vs 83,1% del Control (χ2 (1)=8,58; p

=0,003; V=0,245). No hay diferencias estadísticamente significativas en la cantidad

de antidepresivos ni ansiolíticos aunque las medias de consumo de antidepresivos

son 48,98 vs 66,03 (t (124)=-1,43; p =0,155) y de ansiolíticos 0,42 vs 0,53 (t (124)=-

0,608; p =0,544) respectivamente.

A los 6 meses persisten diferencias significativas en el porcentaje de

sujetos que toman fármacos 50,7% en el Grupo Experimental vs 69,6% en el

Grupo Control (χ2 (1)=5,18; p =0,023). No hay diferencias estadísticamente

significativas en la cantidad de antidepresivos ni ansiolíticos aunque las medias de

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

78

consumo son 52,14 vs. 63,08 (t (130)=-0,886; p =0,377) y 0,59 vs. 0,74 (t (130)=-0,66;

p =0,51) respectivamente.

En resumen, a los seis meses no hay diferencias significativas entre ambos

grupos según criterios del terapeuta ni a nivel de discapacidad. Sin embargo a

nivel de sintomatología informada el Grupo de Tratamiento Habitual obtiene

mejores resultados que la Psicoterapia Breve y hay más sujetos que perciben

mejoría. Hay un mayor porcentaje de sujetos que consumen psicofármacos en el

Grupo Control y también la cantidad global de consumo es superior.

7.2 Comparación entre-grupos de resultados al año (Ver tabla 7, p. 171)

Resultado clínico-administrativo

En el Grupo de Psicoterapia Breve hay más altas que en el Grupo Control,

54,2% frente a un 33,3% (χ2 (1)=6,35; p =0,012; V=0,21). Los abandonos son

similares, el 33,3% en el Grupo Experimental y 36,1% en el Control. Al año

siguen a tratamiento menos sujetos en el Grupo de Psicoterapia Breve, 12,5% de

los sujetos frente al 30,6% en el Grupo de Tratamiento Habitual (χ2 (1)=6,95; p

=0,008; V=0,22). Ese primer año retornaron el 3,8% de los sujetos que fueron alta o

abandono en el Grupo Experimental y el 6% de los del Control (χ2 (1)=0,431; p

=0,512), que en relación a la muestra total de cada grupo suponen el 2,77% y el

4,16% respectivamente. (Ver Figura 17).

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

79

SITUACIÓN CLINICO ADMINISTRATIVA AL AÑO

54%

33%

13%3%

33%36%

31%

4%

0%

10%

20%

30%

40%

50%

60%

Alta Abandono Sigue a

Tratamiento

Retornos

% d

e C

aso

s

Grupo Psicoterapia Breve Grupo Tratamiento Habitual

Figura 17. Situación Clínico-Administrativa al año

El porcentaje de sujetos que tienen más de una consulta con su MAP por

problemas de salud mental el segundo semestre es del 13,1% en el Grupo

Experimental frente al 17,6% en el Control, las diferencias no son significativas

(χ2 (1)=0,504; p =0,478).

Estado clínico y sintomatológico

En la Escala de Cambio de la ICG-C ambos grupos se igualan pues el

Grupo Experimental tiende a la mejoría y el Control empeora ligeramente

respecto a la medición de los seis meses. Refieren estar “Algo o sustancialmente

mejor” el 80,5% del Experimental vs. 75% del Control. Sin cambios el 11,1% vs

20,8% ; y peor 7,4% vs. 4,2%. Las diferencias no son significativas (χ2 (3)=1,51; p

=0,679). En la Figura 18 se desglosa el ICG-C.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

80

Figura 18. Escala de Cambio ICG-C al año

El Índice global de severidad (GSI) de la escala SCL-90-R también tiende

a igualarse entre los dos grupos. La media es 1,30 en el Grupo Experimental y

1,08 en el Control (t (45)=1,07; p =-0,149). La misma tendencia se da en el Índice

Total de Síntomas positivos 50,9 vs. 46,73 (t (50)=0,725; p =0,472) y en el Índice de

Malestar Positivo 2,01 vs. 2 (t (50)=0,075; p =0,941). No hay diferencias

estadísticamente significativas entre ambos grupos en ninguna de estas subescalas.

Grado de discapacidad según el paciente

El Índice Global de Discapacidad (discapacidad laboral, social y familiar)

es muy similar en ambos grupos: 11,72 en el Grupo de Psicoterapia Breve vs

12,56 en el Grupo de Tratamiento Habitual (t (41)=-0,284; p =0,778) (Ver Figura

19).

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

81

ESCALA SDI AL AÑO

3,6 4,3 3,9

5,4

11,7

6,24,6 4,8

3,2

4,9

12,6

5,4

0

2

4

6

8

10

12

14

Discap

acid

ad L

abora

l

Discap

acid

ad V

ida S

ocial

Discap

acid

ad V

ida Fa

mili

ar

Estré

s Per

cibid

o

Discap

acid

ad G

lobal

Apoyo

Socia

l Perc

ibid

o

Me

dia

Grupo Psicoterapia Breve Grupo Tratamiento Habitual

Figura 19. Escala SDI al año

Consumo psicofármacos

Al año hay menos sujetos del Grupo Experimental consumiendo

psicofármacos, 29,4% frente a 52,9% del Control (χ2 (1)=7,82; p=0,005; V=0,238). No

hay diferencias estadísticamente significativas en la cantidad de psicofármacos

que consumen aunque las medias de consumo de antidepresivo son 27,52 en el

Experimental vs. 43,28 en el Control (t (124)=-1,432; p =0,155), y las de

benzodiacepinas 0,28 vs. 0,48 respectivamente (t (124)=-1,29; p =0,200).

Tasas de recuperación

El porcentaje de sujetos que cumplen criterios de Recuperación (no estar

recibiendo ningún tipo de tratamiento psicoterapéutico o psicofarmacológico ni en

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

82

Centro de Salud Mental ni en Atención Primaria y no estar en situación de baja

laboral) es más elevado en el Grupo Experimental 52,3% frente al 44,3% del

Control, aunque las diferencias no son estadísticamente significativas (χ2 (1)=0,87;

p=0,351).

En Resumen, al año el Grupo de Psicoterapia Breve es más efectivo en

tasa de altas y siguen menos sujetos a tratamiento. También hay mayor porcentaje

de sujetos que cumplen criterio de Recuperación aunque las diferencias entre

ambos grupos no son estadísticamente significativas. A nivel de sintomatología

informada por los pacientes ambos grupos se igualan y a nivel de discapacidad

tampoco hay diferencias significativas. Respecto al consumo de psicofármacos

sigue siendo menor en el Grupo Experimental.

7.3 Comparación entre-grupos de resultados a los 2 años (Ver tabla 8, p. 174)

Resultado clínico-administrativo

El Grupo de Psicoterapia Breve continúa siendo superior al Grupo de

Tratamiento Habitual en el porcentaje de altas 62,5% vs 40,3% (χ2 (1)=7,11; p

=0,008; V=0,222) y siguen menos sujetos a tratamiento 4,2% vs 20,8% (χ2 (1)=9,143;

p =0,002; V=0,252). Hay más retornos de los sujetos que fueron alta o abandono en

el Grupo Experimental frente al Control 8,7% vs. 1,7%, que en el acumulado de

los dos años supone el 11,6% vs 6,9% (χ2 (1)=0,813; p =0,367). En total están a

tratamiento en Centro de Salud Mental el 15,3% del Grupo de psicoterapia frente

al 26,3% del Grupo de Tratamiento Habitual (Ver Figura 20).

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

83

SITUACIÓN CLINICO ADMINISTRATIVA A

LOS 2 AÑOS DE INICIAR EL TRATAMIENTO

63%

33%

4% 11%

40% 38%

21%

5%0%

10%

20%

30%

40%

50%

60%

70%

Alta Abandono Sigue a

Tratamiento

Retornos

% d

e C

aso

s

Grupo Psicoterapia Breve

Grupo Tratamiento Habitual

Figura 20. Situación Clínico-Administrativa a los 2 años

El porcentaje de sujetos que tienen más de una consulta con su Médico de

Atención Primaria por problemas de salud mental el segundo año es menor en el

Grupo Experimental: 6,6% frente al 20,9% en el Control (χ2 (1)=5,43; p =0,020;

V=0,206)

Estado clínico y sintomatológico

En la escala de Cambio de la ICG-C el Grupo de Psicoterapia Breve

presenta mejores resultados que el de Tratamiento Habitual. Refieren “Mejoría

sustancial” el 78,9% de los sujetos del Grupo Experimental frente a un 46,7% del

Control (χ2 (1)=3,825; p =0,051). “Sin cambios o peor” están el 21,1% del Grupo

Experimental frente al 40% del Grupo Control. Los sujetos del Grupo Control

empeoran respecto a su estado a los 6 meses y al año de iniciar el tratamiento

(Ver Figura 21).

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

84

ESCALA DE CAMBIO ICG A LOS 2 AÑOS

0%

16%

0%

13% 13%

47%

32%

5%

0%

13%

33%

13%

0% 0%0%

5%

10%

15%

20%

25%

30%

35%

40%

45%

50%

Mucho

mejor

Bastante

mejor

Algo

mejor

Sin

cambios

Algo peor Bastante

peor

Mucho

peor

% d

e C

aso

s

Grupo Psicoterapia Breve Grupo Tratamiento Habitual

Figura 21. Escala de Cambio ICG-C a los 2 años

En las puntuaciones del SCL-90-R sigue constatándose una mejoría

progresiva en los sujetos del Grupo de Psicoterapia Breve y leve empeoramiento

del Control, pero no hay diferencias estadísticamente significativas entre ambos

grupos. El Índice Global de Severidad (GSI) es 1,16 en Grupo Experimental y

1,23 en el Control (t (30)=-2,262; p =0,795). El Índice Total de Síntomas positivos en

los Grupos de Psicoterapia Breve y Tratamiento Habitual es de 43,6 frente a

44,43 (t (30)=0,101; p =0,920) y el Índice de Malestar Positivo 1,91 frente a 2,25

respectivamente (t (30)=-1,279; p =0,211). Todo ello a pesar que el consumo de

psicofármacos sigue siendo muy considerable en el Grupo Control.

Grado de discapacidad según el paciente

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

85

Hay un grado de discapacidad laboral, social y familiar menor en los

sujetos del Grupo de Psicoterapia Breve. El Índice Global de discapacidad es de

10,47 en el Grupo Experimental frente al 15,80 en el Control (t (28)=-1,307; p

=0,202). Mientras que el grupo Experimental sigue mejorando, lo más destacado es

que el Grupo Control empeora sustancialmente (Ver Figura 22).

Figura 22. Escala SDI a los 2 años

Consumo psicofármacos

A los dos años hay menos sujetos del Grupo Experimental consumiendo

fármacos: 17,2% frente a 45,6% del Control (χ2 (1)=12,258; p =0,000 V=0,305). No

hay diferencias estadísticamente significativas en la cantidad de psicofármacos

que consumen aunque las medias de consumo de antidepresivo son 21,12 en el

Experimental vs. 38,53 en el Control (t (121)=-1,569; p =0,073), y las de

benzodiacepinas 0,15 vs. 0,44 respectivamente (t (109)=-1,81; p =0,157).

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

86

Tasas de recuperación

Tras los 2 años la tasa de Recuperación Objetiva fue del 75,8% con el

Programa de Psicoterapia Breve frente al 49,3% con el Tratamiento Habitual (χ2

(1)=9,74; p =0,002; V=0,273).

En Resumen, el Grupo Experimental es más eficaz según los cinco

criterios utilizados. Hay más altas y menos sujetos a tratamiento (incluso menos

sujetos tratados por el MAP); mejor estado sintomatológico y en discapacidad;

más sujetos recuperados y menos consumiendo fármacos. Además de la

comparación entre grupos, lo más destacado es la tendencia tan diferenciada de la

evolución de cada grupo.

7.4 Comparación entre-grupos de resultados a los 3 años (Ver tabla 9, p. 177)

Resultado clínico-administrativo

Se mantienen las diferencias y ya hay pocos cambios respecto a los 2 años.

El Grupo de Psicoterapia Breve sigue siendo superior al Tratamiento Habitual en

el porcentaje de altas 62,5% frente a 44,4% (χ2 (1)=4,717; p =0,030; V=0,181). La tasa

de abandonos es de 33,3% en el Grupo Experimental y de 37,5% en el Grupo

Control (χ2 (1)=0,335; p =0,563). Continúan menos sujetos a tratamiento en el Grupo

de Psicoterapia Breve 4,2% vs 16,7% del Grupo Control (χ2 (1)=5,759; p =0,016;

V=0,201). La tasa de retornos este tercer año de los sujetos que fueron alta o

abandono es de 2,77% vs 5,55%, y en el acumulado es 14,7% vs 13,1% (χ2

(1)=0,068; p =0,795). A los 3 años están a tratamiento en Centro de Salud Mental el

18,1% de sujetos del Grupo Experimental frente al 27,8% del Control (Ver

Figura 23, p. 87).

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

87

No hay diferencias significativas en el número de consultas con el MAP

por problemas de salud mental el tercer año, son una media de 0,44 en el Grupo

Experimental y 0,75 en el Control (χ2 (1)=-1,239; p =0,218).

SITUACIÓN CLINICO ADMINISTRATIVA

A LOS 3 AÑOS DE INICIAR EL

TRATAMIENTO

63%

33%

4% 14%

44%38%

17%11%

0%

10%

20%

30%

40%

50%

60%

70%

Alta Abandono Sigue a

Tratamiento

Retornos

% d

e C

aso

s

Grupo Psicoterapia Breve

Grupo Tratamiento Habitual

Figura 23. Situación Clínico-Administrativa a los 3 años

Consumo psicofármacos

A los tres años hay menos sujetos del Grupo Experimental consumiendo

psicofármacos: 17,3% frente a 38,7% del Control (χ2 (1)=6,298; p =0,012; V=0,235).

No hay diferencias estadísticamente significativas en la cantidad de psicofármacos

que consumen aunque las medias de consumo de antidepresivo son 19,9 en el

Experimental vs. 28,29 en el Control (t (108)=-0,769; p =0,444), y las de

benzodiacepinas 0,12 vs. 0,33 respectivamente (t (108)=-1,355; p =0,187).

Tasas de Recuperación

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

88

Tras los 3 años, la tasa de Recuperación Objetiva fue del 79,4% con el

programa de Psicoterapia Breve frente al 53,7% con el Tratamiento Habitual (χ2

(1)=9,529; p =0,002; V=0,271).

En resumen, el Grupo de Psicoterapia Breve sigue siendo más efectivo

según criterios del terapeuta, en consumo de psicofármacos y criterios de

recuperación objetiva (los criterios de sintomatología y discapacidad del paciente

no se recogieron a los tres años).

7.5 Comparación entre-grupos de resultados al final del tratamiento (Ver

tabla 10, p. 179)

Número de sesiones y duración del tratamiento

El número medio de sesiones del Grupo de Psicoterapia Breve ha sido de

casi una sesión más que el Grupo de Tratamiento Habitual, 7 vs 6,17 (t (142)=0,879;

p =0,381). Analizando la mediana también se constata menos sesiones del Grupo

Control, son 5,5 vs 3,5. La mitad de los sujetos del Grupo Experimental tuvieron 5

sesiones o menos y el 75% 9 sesiones o menos. En el Grupo Control destaca que

más de una cuarta parte de la muestra tuvo solo una sesión y el 75% 8 sesiones o

menos. La distribución que siguen ambos grupos es diferente, el Grupo de

Psicoterapia tiene una distribución normal cuyo centro se sitúa en 5 sesiones y un

rango que va de 1 a 28 sesiones. El Grupo de Tratamiento Habitual tiene una

distribución muy asimétrica donde la moda es una sesión y el rango va de 1 a 30

sesiones (Ver Figura 24, p. 89).

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

89

La duración del tratamiento es de 213 días de media en el Grupo

Experimental frente a 327 en el Control (t (142)= -2,084; p =0,039), es decir, 7 meses

frente a 11.

El Intervalo medio entre sesiones es menor en el Grupo Experimental:

34,29 días vs 63,47 días en el Grupo Control (t (120)=-5,016; p =0,000; R=0,447).8

Sesiones de tratamiento en CSM hasta 3 años3028252321191817161513121110987654321

Núm

ero

de c

asos

20

15

10

5

0

Distribución del número de sesiones

Grupo ControlGrupo Experimental

Grupo de tratamiento

Figura 24. Número de sesiones hasta los 3 años

Dosis-Efecto del tratamiento

8 Recuérdese que dado que este enfoque de Psicoterapia Breve enfatiza la asunción de un rol activo por parte del paciente y da gran importancia a la acción y la experimentación, los intervalos entre sesiones deben de ser ajustados a este trabajo entre-sesiones.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

90

Se ha realizado un análisis de dosis de tratamiento-efecto. Como dosis de

tratamiento hemos considerado el número de sesiones que ha tenido cada caso y

como efecto tres criterios, un criterio del facultativo (haber sido alta), un criterio

del paciente (referir estar mucho o bastante mejor que al inicio de tratamiento

según ICG-C) y el criterio de recuperación objetiva. Se han cruzado los datos de

qué sujetos fueron alta con el número de sesiones que recibieron; qué sujetos

refirieron estar mucho o bastante mejor y el número de sesiones que tuvieron; y lo

mismo con la recuperación objetiva, qué sujetos no seguían a tratamiento en el

CSM, no tomaban psicofármacos, no habían tenido más de una consulta en AP

por problemas de Salud Mental ni una baja laboral por ese motivo cruzado con el

número de sesiones que recibieron esos sujetos. Hemos tomado como referencia

temporal los 2 años ya que el tercer año no hubo mediciones psicométricas y era

demasiado escasa la muestra de sujetos que seguían a tratamiento y las sesiones,

especialmente en el Grupo Experimental9. Además nos encontramos con un efecto

“techo” en ambos grupos, es decir, que al llegar a un determinado número de

sesiones los efectos de mejoría aumentaron muy poco para el grupo de sujetos que

continuaban a tratamiento (probablemente relacionado en gran medida con las

características concretas de esos casos).

Análisis de la relación Dosis-Efecto de tratamiento en el Grupo

Experimental: se constata que el 51% de los sujetos fueron dados de alta tras 10

sesiones o menos, el 54% dijeron estar mucho o bastante mejor tras 9 sesiones o

menos y el 50,7% estaban recuperados después de 7 sesiones o menos. El techo

del efecto se sitúa en torno a un 75% de recuperación y con una dosis de 12-13

sesiones (ver Figura 25).

9 El tercer año seguían a tratamiento 3 sujetos del Grupo Experimental y 15 del Control. Hubo una media de 0,19 sesiones en el Grupo de Psicoterapia y 0,88 en el del Tratamiento Habitual.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

91

DOSIS-EFECTO DE TRATAMIENTO EXPERIMENTAL

0

10

20

30

40

50

60

70

80

90

100

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19

Nº de Sesiones

% d

e C

aso

s R

ecu

pe

rad

os

Criterio del Facultativo Criterio del Paciente Criterios Objetivos

Figura 25. Dosis-Efecto de Tratamiento Experimental

Análisis de la relación Dosis-Efecto de tratamiento en el Grupo Control:

tras 19 sesiones de máximo se alcanza una tasa de altas del 40,3% y de

recuperación del 49,3%. El 50% de los sujetos dijeron estar mucho o bastante

mejor tras 14 sesiones o menos. El techo del efecto se sitúa alrededor de un 50%

de recuperación y con una dosis en torno a 11 sesiones (ver Figura 26).

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

92

Figura 26. Dosis-Efecto de Tratamiento Habitual

En las Figuras se constata que los tres criterios (del Facultativo, del

Paciente y los Objetivos) siguen tendencias similares entre sí, lo cual

consideramos que da mayor robustez a los datos. Y comparando ambas Figuras se

observa claramente como el patrón de la Dosis-Efecto es muy diferente. Destaca

como el Efecto en el Grupo Experimental tarda más en arrancar, pero tiene una

mejoría constante que se denota en la tendencia de la pendiente. Sin embargo el

Efecto en el Grupo Control es inmediato, pero luego la tendencia de mejoría es

menor y el techo que alcanza es bastante bajo.

Situación clínico-administrativa

A los tres años han sido alta en el Grupo Experimental 62,5% vs 44,4% en

el Grupo Control (χ2 (1)=4,717; p =0,030; V=0,181). La tasa de abandonos es 33,3%

vs. 37,5% (χ2 (1)=0,335; p =0,563) y siguen a tratamiento desde el inicio el 4,2% vs

16,7% (χ2 (1)=5,759; p =0,016; V=0,201). Retornaron el 14,7% vs 13,1% de los sujetos

que habían sido alta o abandono (χ2 (1)=0,068; p =0,795). Sumando los que siguen y

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

93

los retornos, están a tratamiento en el CSM a los 3 años el 18,1% vs 27,8% del

Grupo Experimental y del Control respectivamente. (Ver Figura 23, p. 87).

Consultas con MAP

La media de consultas con el MAP durante los tres años ha sido de 3,53

los sujetos del Grupo de Psicoterapia vs. 4,31 los del Tratamiento Habitual (t

(125)=-1,14; p =0,313). Durante el tratamiento han tenido prácticamente las mismas

(2,13 vs 2,24), pero tras el alta o abandono han tenido menos consultas con MAP

el Grupo Experimental, 1.45 vs 2.48 (t (84,11)=-1,874; p =0,064; R=0,176), ello a pesar

que la duración de su tratamiento ha sido mucho menor a los tres años (211 vs 312

días).

Satisfacción con el tratamiento

Evaluada generalmente al mes del alta o abandono o a los 6 meses si la

persona seguía a tratamiento. El nivel de satisfacción en ambos grupos ha sido

elevado. El porcentaje de sujetos que refieren que el tratamiento ha sido

beneficioso es del 87,8% en el Grupo Experimental y 88,1% en el Control.

Respecto al porcentaje de sujetos satisfechos con la Ayuda recibida ha sido del

92,9% en el Grupo de Psicoterapia Breve frente al 85,7% en el Grupo de

Tratamiento Habitual. No hay diferencias estadísticamente significativas. De

cualquier forma con estos datos debemos ser cautos ya que la satisfacción fue

recogida a los 6 meses aproximadamente, y no hubo medición posterior.

Consumo de Psicofármacos

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

94

Durante algún momento del tratamiento toman fármacos el 61,1% de sujetos del

Grupo Experimental vs. 83,1% de los sujetos del Grupo Control (χ2 (1)=8,578; p

=0,003; V=0,245).

Analizando por grupos, el 40% de los sujetos asignados a psicólogo del Grupo

Control y el 98,2% de los sujetos asignados al psiquiatra tomaron fármacos en

algún momento durante los 3 años (χ2 (1)=33,13; p =0,000; V=0,683). En el

Grupo Experimental el 60% de los asignados a psicólogo tomaron fármacos en

algún momento de los 3 años frente al 82,4% de los asignados a psiquiatra (χ2

(1)=2,863; p =0,091; V=0,199)

7.6 Evolución intra-grupo de ambos grupos de tratamiento a lo largo de los 3

años

Una vez realizada la comparación entre los dos grupos en los distintos

momentos temporales, a continuación se describirán los aspectos más

significativos de la evolución de cada grupo de tratamiento desde el inicio hasta

los tres años en las distintas variables de resultado registradas.

Evolución Clínico-Administrativa

En el Grupo de Psicoterapia Breve se consiguen resultados muy

significativos al año. En ese momento solo siguen el 12,5% de los sujetos. El

porcentaje de personas que retornan al CSM es del 2,77% el primer año, 8,3% el

segundo año y 2,77% el tercero. En total están a tratamiento a los 3 años el 18,1%

de los casos.

En el Grupo de Tratamiento Habitual la evolución de las altas es más lenta

y a los tres años llega al 44,4% de los sujetos. La tasa de abandonos es alta desde

el principio y los sujetos que siguen a tratamiento se reducen más lentamente. Al

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

95

año hay un 4,2% de retornos, el segundo año 1,4% y el tercero 5,5%. A los tres

años han retornado un 13% de sujetos que fueron alta o abandono y en total están

a tratamiento el 27,8% de los casos. En la Figura 27 (p. 95) se representa la

evolución en el porcentaje de altas, abandonos y sujetos que siguen a tratamiento

durante los tres años.

Figura 27. Evolución de la situación Clínico-Administrativa durante los 3 años

En la Figura 28 se refleja la evolución de la Tasa de Retornos:

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

96

EVOLUCIÓN DE LA TASA DE RETORNOS

2,8%

8,3%

2,8%

13,9%

4,2%

1,4%

5,5%

11,1%

0,0%

2,0%

4,0%

6,0%

8,0%

10,0%

12,0%

14,0%

16,0%

Primer año Segundo año Tercer año Total

% d

e C

aso

s

Grupo Psicoterapia Breve Grupo Tratamiento Habitual

Figura 28. Evolución de la Tasa de Retornos durante los 3 años

Evolución de la sintomatología y el nivel de discapacidad

A continuación se presenta la evolución de cada grupo en distintas

variables que han sido recogidas mediante cuestionarios (ICG, SCL-90 y SDI). Al

respecto debemos señalar que aunque los resultados son coherentes con el resto

de criterios utilizados (criterios clínico-administrativos y de tratamientos

recibidos) y que la comparación realizada entre los sujetos que participan en los

seguimientos psicométricos frente a los que no lo hacen sugiere que son sub-

muestras equivalentes, debemos ser cautos con los resultados de los cuestionarios

dada la pérdida de muestra en los seguimientos psicométricos que se ha analizado

en un epígrafe previo de este trabajo.

En la Escala ICG de Cambio el porcentaje de sujetos del Grupo de

Psicoterapia Breve que refieren estar “Bastante” o “Mucho mejor” que al inicio

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

97

del tratamiento aumenta con el paso del tiempo a la vez que disminuyen los que

dicen encontrarse “Igual” o “Peor”.

En cambio en el Grupo de Tratamiento Habitual en las sucesivas

mediciones disminuye el porcentaje de sujetos que refieren estar “Bastante” o

“Mucho mejor” que al inicio del tratamiento y aumentan los que dicen

encontrarse “Igual” o “Peor”. Estas tendencias se ilustran en las Figuras 29 y 30.

Evolución ICG "Mejoría Sustancial"

30

40

50

60

70

80

90

100

6 meses 1 año 2 años

% s

uje

tos

qu

e r

efi

ere

n e

star

“B

asta

nte

” o

“Mu

cho

me

jor”

qu

e a

l in

icio

de

l tra

tam

ien

to

Grupo Psicoterapia Breve Grupo Tratamiento Habitual

Figura 29. Evolución ICG-C “Mejoría Sustancial” durante los 2 años

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

98

Evolución ICG "Igual o peor"

0

10

20

30

40

50

60

6 meses 1 año 2 años

% s

uje

tos

qu

e r

efi

ere

n e

star

“Ig

ual

” o

“P

eo

r” q

ue

al in

icio

de

l tra

tam

ien

to

Grupo Psicoterapia Breve Grupo Tratamiento Habitual

Figura 30. Evolución ICG-C “Igual o peor” durante los 2 años

La Escala SCL-90 mide 90 posibles síntomas psicopatológicos que la

persona puede presentar y la sub-escala de Índice Global de Severidad es la que

recoge la proporción entre cantidad e intensidad de esa sintomatología y su rango

de puntuación va de 0 a 4. Pues bien, lo que se observa es que en el Grupo de

Psicoterapia Breve es a partir de los seis meses cuando comienza a reducirse

progresivamente la sintomatología, hasta entonces incluso aumenta levemente.

Sin embargo en el Grupo de Tratamiento Habitual pasa lo contrario, la

sintomatología disminuye muy considerablemente los seis primeros meses, pero a

partir de entonces comienza a aumentar de manera lenta, pero progresiva hasta los

últimos registros a los dos años (ver Figura 31, p. 99).

La puntuación en las otras dos sub-escalas del SCL-90, Total de Síntomas

Positivos (PST) e Índice Positivo de Malestar (PSDI) siguen la misma coherencia

que la IGS.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

99

En términos generales el Grupo Experimental tiene una tendencia continua

de mejora progresiva de la sintomatología medida mediante ICG-C y SCL-90

hasta la última medición a los dos años, aunque los primeros meses es muy leve.

Evolución del Índice Global de Severidad

(SCL-90)

0,0

0,2

0,4

0,6

0,8

1,0

1,2

1,4

1,6

1,8

2,0

0 6 meses 1 año 2 años

Grupo Psicoterapia Breve Grupo Tratamiento Habitual

Figura 31. Evolución SCL-90 durante los 2 años

El Grupo Control obtiene la mayor tasa de mejoría a los seis meses, pero a

partir de entonces y sobre todo del año, va empeorando progresivamente.

Nivel de discapacidad informada por el paciente según SDI

El Grupo Experimental tiene un descenso continuado en las puntuaciones

de discapacidad hasta la última medición a los dos años.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

100

El Grupo Control mejora en las mediciones de los 6 meses y hasta del año,

pero a los dos años empeora significativamente hasta niveles del inicio del

tratamiento (Ver Figura 32).

Evolución del Grado de Discapacidad

Global SDI

89

1011121314151617181920

0 6 meses 1 año 2 años

Grupo Psicoterapia Breve Grupo Tratamiento Habitual

Figura 32. Evolución SDI durante los 2 años

Tasa de recuperación

En el Grupo Experimental el porcentaje de sujetos Recuperados es de

52,3% al año y sigue aumentando hasta el 75,8% a los dos años y 79,4% a los tres

años. En el Grupo de Tratamiento Habitual la tasa de recuperación es del 44,3% el

primer año y progresa hasta el 49,3% el segundo y 53,7% tras tres años (Figura

33).

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

101

52%

76%79%

44%49%

54%

0

10

20

30

40

50

60

70

80

90

100

1 AÑO 2 AÑOS 3 AÑOS

% d

e C

aso

sEVOLUCIÓN DE LAS TASAS DE

RECUPERACIÓN

Grupo Psicoterapia Breve Grupo Tratamiento Habitual

Figura 33. Evolución de las Tasas de Recuperación durante los 3 años

Consumo de Psicofármacos

El 70,8% de los sujetos tomaban psicofármacos antes de acudir al CSM,

son el 65,3% del Grupo Experimental y 76,4% del Grupo Control. Tras las

primeras semanas de iniciar el tratamiento en CSM el porcentaje de sujetos del

Grupo de Psicoterapia Breve que toman psicofármacos disminuye un 4% mientras

que en el Tratamiento Habitual aumenta casi un 7%, hasta el 83,1%, siendo ya

estadísticamente significativa la diferencia entre ambos grupos (χ2 (1)=8,58 ; p

=0,003; V=0,245). En los siguientes momentos temporales se mantienen las

diferencias, pero en ambos grupos disminuye progresivamente el número de

personas que toma psicofármacos. A los dos años ya se redujo casi un 75% el

número de personas con psicofármacos en el Grupo de Psicoterapia Breve, frente

a una reducción del 50% a los 3 años en el Grupo de Tratamiento Habitual (Ver

Figura 34, p. 102). El porcentaje de sujetos del Grupo de Psicoterapia Breve que

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

102

consumen psicofármacos a los tres años se mantiene en el 17%, una proporción

muy similar a la población general.

Figura 34. Evolución Consumo de Psicofármacos durante los 3 años

Aunque no fuera estadísticamente significativa la diferencia entre el

porcentaje de sujetos que tomaban psicofármacos antes del inicio del tratamiento

en ambos grupos (65,3% en el Grupo Experimental y 76,4% en el Grupo Control;

χ2 (1)=2,152; p =0,142), se ha realizado un análisis de la evolución del consumo

de psicofármacos solo de estos sujetos que llegaron al CSM consumiendo

psicofármacos y se constatan diferencias estadísticamente significativas entre los

dos grupos a los 2, 12, 24 y 36 meses. Al año menos de un 37,8% de los sujetos

del Grupo Experimental que consumían psicofármacos antes de iniciar el

tratamiento lo siguen haciendo frente a un 59,3 % del Control (χ2 (1)=4,531; p

=0,033; V=0,214). A los 2 años los porcentajes son del 23,8% vs. 50,9%

respectivamente (χ2 (1)=7,255; p =0,007; V=0,276) (Ver Figura 35).

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

103

Figura 35. Evolución en Consumo de Psicofármacos de sujetos que llegaron al CSM consumiéndolos

Analizando la evolución del consumo de psicofármacos de aquellos

sujetos que llegaron al CSM sin medicación pautada se siguen constatando

diferencia en la tendencia de ambos grupos; lo comenzaron a tomar en los dos

primeros meses en el CSM el 24,4% del Grupo de Psicoterapia y el 47,1% en el

de Tratamiento Habitual (χ2 (1)=2,411; p =0,120; V=0,240) (Ver Figura 36, p.

104). Las diferencias son más relevantes a los dos años donde el 4,5% del Grupo

Experimental (un solo sujeto) está tomando psicofármacos frente al 26,7% del

Control (4 sujetos) (χ2 (1)=3,734; p =0,053; V=0,318).

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

104

Figura 36. Evolución en Consumo de Psicofármacos de sujetos que llegaron al CSM sin

consumirlos

El 80% de los sujetos que llegan sin medicación en el Grupo Experimental

y son asignados a psiquiatra inician tratamiento frente al 10% de los que son

asignados a psicólogo. En el Grupo Control los porcentajes son similares al

Experimental en lo referido a esta diferencia entre psiquiatras y psicólogos.

En lo relativo al consumo de psicofármacos tras el alta o abandono, en el

Grupo de Psicoterapia Breve los consumieron el 29 % de los sujetos tras el

tratamiento en el CSM frente al 68,3% de los sujetos del Grupo de Tratamiento

Habitual (χ2 (1)=19,934; p =0,000; V=0,393).

En el Grupo Control de aquellos cuyo referente es psicólogo clínico el

23,1% tomaron fármacos tras el alta o abandono; de aquellos cuyo referente es

psiquiatra lo hicieron el 80,9% (χ2 (1)=15,708; p =0,000; V=0,512). Esto debe de

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

105

interpretarse con prudencia dado que si bien en el Grupo Experimental los sujetos

se asignan al grupo y no hay una adecuación paciente-terapeuta, en el

funcionamiento normal de los CSM los pacientes frecuentemente se asignan a un

terapeuta determinado según las características del caso (por ejemplo si ya

tomaban medicación previamente o por diagnóstico) y en el Grupo Control se

seleccionan al azar los casos, pero se respetó que se asignaran al terapeuta que en

el Centro se considerara más idóneo dado que esas son las condiciones reales que

se encuentran los pacientes en los CSM. Es decir, en teoría hay una mayor

adecuación en la asignación de los pacientes a un terapeuta en el Grupo Control

que en el Grupo Experimental donde en cada CSM todos recaen en el terapeuta

del centro que desarrolla el tratamiento Experimental.

En el Grupo Experimental apenas hay diferencias, el 28,8% de los

asignados a psicólogo y el 29,4% de los asignados a psiquiatra toman fármacos

post tratamiento (χ2 (1)=0,002; p =0,964).

En lo referido a las cantidades de psicofármacos pautados, y más en

concreto a los antidepresivos, en todos los momentos temporales esta cantidad es

inferior en el Grupo de Psicoterapia Breve aunque las diferencias no son

estadísticamente significativas. El pico máximo de consumo es en ambos grupos a

los 6 meses (una media de 52,15 miligramos de Imipramina o equivalente en el

Grupo Experimental y 63,08 en el Control), pero el Grupo Experimental al año ya

consume una cantidad menor que en el pre-tratamiento. El Grupo Control tarda

dos años en conseguir reducir la cantidad a cifras similares al pre-tratamiento

(Ver Figura 37, p. 106).

Respecto a las benzodiacepinas ocurre lo mismo, la cantidad siempre es

menor en el Grupo Experimental, pero en este caso al año los dos grupos

consumen cantidades inferiores al pre-tratamiento (Ver Figura 38, p. 106).

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

106

Figura 37. Cantidad media de consumo de Antidepresivos durante los 3 años

Figura 38. Cantidad media de consumo de Benzodiacepinas durante los 3 años

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

107

Resumen Evolución general de ambos grupos durante los 3 años

Como resumen respecto a la evolución general de ambos grupos durante

los 3 años se constata que la Psicoterapia breve obtiene mejora continua y

resultados duraderos incluso terminada la terapia. Resultó eficaz para el 80% de

los sujetos a los 3 años considerando los diferentes criterios. Del otro 20%, el 4%

siguieron de continuo en el CSM y el 14% fue retorno. En lo que respecta al

Tratamiento Habitual obtiene sus mejores resultados los seis primeros meses y su

eficacia no se mantiene en el tiempo, especialmente a partir del año. Considerando

los diferentes criterios podría deducirse que este tratamiento fue eficaz a los 3

años para el 50-55% de los pacientes. Cabe destacar que a los 3 años el 38,7% de

los sujetos de este grupo continúa con tratamiento psicofarmacológico aunque no

acuda al CSM.

7.7 Análisis del resultado de las personas que fueron Alta (Ver tabla 11, p.

181)

Dado el posible sesgo de los terapeutas del Grupo Experimental a la hora

de dar el alta, se considera importante analizar en detalle el estado de los pacientes

que son dados de alta en ambos grupos para comprobar si realmente está

relacionado con una mejoría. Posteriormente también se realiza el mismo análisis

con los sujetos que abandonaron.

Variables clínico-administrativas

En total fueron alta en el Grupo de Psicoterapia Breve el 62,5% de los

sujetos (45 personas) y en el de Tratamiento Habitual el 44,4% (32 personas).

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

108

Contactos con MAP

El número de contactos con MAP durante el tratamiento en el CSM es

ligeramente superior en el Grupo Experimental 2,20 vs. 1,86 (t (62)=0,447; p

=0,656). Si tomamos como referencia los tres años la media de sesiones con MAP

fue de 3,34 en el Grupo Experimental vs. 4,69 en el Control (t (62)=-1,193; p

=0,238). En el número de sesiones con MAP después del alta las diferencias son

significativas, la media es de 1,23 en el Grupo Experimental vs. 2,86 en el

Control (t (62)=-2,32; p =0,024; R=0,283)

Estado clínico y sintomatológico

Participaron en algún seguimiento psicométrico ICG el 64% de las altas

del Grupo Experimental y el 50% de las del Control. No hay diferencias

estadísticamente significativas en las puntuaciones, aunque el 69% de los sujetos

de alta del Grupo Experimental refieren estar mucho o bastante mejor frente al

53,3% del Grupo Control (χ2 (1)=1,04 ; p= 0,307). También destaca el dato de que el

20% de las altas del Grupo Control refieran encontrarse sustancialmente peor que

al inicio del tratamiento.

Participaron en algún seguimiento del SCL-90 el 60% de los sujetos que

fueron alta en el Grupo Experimental y el 56,25% del Control. Si tenemos en

cuenta el último test recogido, no hay diferencias estadísticamente significativas,

pero el grupo de sujetos de alta del Grupo Experimental presentan un Índice

global de severidad (GSI) ligeramente superior. Sobre una puntuación máxima de

4, las puntuaciones son 1,17 vs 0,93 (t (43)=0,947; p =0,349).

Grado de discapacidad según el paciente

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

109

No hay diferencias significativas en ninguna subescala aunque las

puntuaciones son levemente mejor en el Grupo Experimental. El SDI global es

10,15 en el Grupo de Psicoterapia Breve vs. 13,17 en el del Tratamiento Habitual

(t (36)=-0,805; p =0,426)

Consumo de Psicofármacos

Las diferencias son significativas, en el Grupo Experimental hay menos

sujetos que toman fármacos al inicio, 6, 12, 24 y 36 meses. A los 3 años la tasa es

de 18,2% vs 50% en el Grupo Experimental frente al Grupo Control (χ2 (1)=6,743;

p= 0,009; V=0,338). Destaca en los datos el alto porcentaje de sujetos del Grupo

Control que tras el alta siguen tomando tratamiento farmacológico, son el 83,9%

de las altas del Grupo Control frente al 26,7% de las del Experimental (χ2

(1)=24,026 ; p= 0,000; V=0,562)

Respecto a la cantidad de antidepresivos y ansiolíticos que toman ambos

subgrupos, siempre es menor en las altas del Grupo Experimental aunque no de

manera estadísticamente significativa.

Retornos

No hay diferencias estadísticamente significativas, son el 9,1% de las altas

del Grupo Experimental vs. 13,9% de las altas del Control (χ2 (1)=0,396; p= 0,529).

La media de consultas con el Facultativo tras retorno es la mitad en el grupo de

altas del Experimental 3 vs 6,3 en el Control (t (3)=-0,586; p =0,599). El tiempo

medio hasta el retorno es menor en las altas del Grupo Experimental 12 meses vs.

20,75 en el Control (t (6)=-1,203; p =0,274)

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

110

Tasa de Recuperación

La tasa de recuperación objetiva es mayor en las altas del Grupo

Experimental en los tres periodos temporales, aunque solo es estadísticamente

significativa la diferencia en el último.

Al año la tasa de recuperación objetiva de las altas es de 57,5% en el

Grupo de Psicoterapia Breve vs 39,3% en el Tratamiento Habitual (χ2 (1)=2,186 ;p=

0,139). A los dos años 75,7% vs 53,6% (χ2 (1)=3,478; p= 0,062) y a los 3 años 78,9%

vs 51,9% (χ2 (1)=5,299; p= 0,021; V=0,286).

Destaca en el Grupo Control que alrededor de la mitad de los sujetos en los

distintos momentos temporales siguen necesitando tratamiento a pesar de haber

sido alta.

Satisfacción

No hay diferencias entre ambos grupos. Consideran que fue beneficioso el

tratamiento el 93,1% de los sujetos que fueron alta en el Grupo Experimental y el

87,5% en el Control (χ2 (1)=0,400; p= 0,527). Están satisfechos o muy satisfechos con

la ayuda recibida el 89,7% vs. 76,5% respectivamente (χ2 (1)=1,44; p= 0,229).

En Resumen, los sujetos que han sido alta en el Grupo Experimental

presentan un estado clínico global ligeramente mejor y un menor grado de

discapacidad que los del Control; consumen menos psicofármacos y requieren

menos atención posterior. El nivel de satisfacción es similar en ambos subgrupos.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

111

Es importante haber comprobado que los sujetos del Grupo Experimental

fueron dados de alta por una mejoría real y no por acortar la duración del

tratamiento al estar incluidos en la investigación. En los sujetos que fueron alta en

el Grupo Control llama la atención como a pesar de que el tratamiento en el CSM

dura más, tras el alta la mayoría de los sujetos tienen que continuar con

tratamientos psicofarmacológicos.

7.8 Análisis del Resultado de las personas que Abandonaron (Ver tabla 12, p.

185)

Variables clínico-administrativas

En total fueron abandono en el Grupo de Psicoterapia Breve el 33,3% de

los sujetos (24 personas) y en el de Tratamiento Habitual el 37,5% (27 personas).

De los abandonos hay registrado algún seguimiento psicométrico ICG en el 29,4%

de los casos, del SCL-90 en el 33,3% y del SDI en el 27,4%. Por tanto hay que ser

muy cautos con las generalizaciones que se puedan hacer de los datos

psicométricos.

Contactos con MAP

El número de contactos con MAP durante el tratamiento en CSM es

ligeramente superior entre los abandonos del Experimental con una media 1,45 vs.

0,81 en el Grupo Control (t (46)=1,14; p =0,262). La media de sesiones con MAP a

lo largo de los tres años fue de 3,32 en el Grupo Experimental vs. 3 en el Control

(t (45)=0,262; p =0,794) y tras el abandono 1,86 vs. 2,15 respectivamente (t (46)=-

0,322; p =0,749). Las diferencias no son estadísticamente significativas.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

112

Estado clínico y sintomatológico

En el último ICG-C registrado el 66,7% de los abandonos del Grupo

Experimental decían estar mucho o bastante mejor frente al 50% del Control (χ2

(1)=0,417; p= 0,519). Referían estar igual el 0% vs. 16,7% (χ2 (1)=1,607; p= 0,205); y

peor el 22,2% vs. 0% (χ2 (1)=1,538; p= 0,215).

En el SCL 90 si tenemos en cuenta el último test recogido, el índice global

de severidad es similar en ambos subgrupos y bastante bajo (1,37 sobre una escala

de 0-4).

Grado de discapacidad según el paciente

Aunque no hay diferencias estadísticamente significativas porque la sub-

muestra es mínima, los abandonos del Grupo Experimental perciben menor

discapacidad laboral, social, familiar. El SDI global es 12,63 en este Grupo vs

21,83 en el Control (t (12)=-1,72; p =0,112).

Consumo de Psicofármacos

No hay diferencias estadísticamente significativas en la tasa de sujetos que

toman psicofármacos aunque siempre es menor en el Grupo Experimental

exceptuando al año. Tras el abandono toman fármacos el 33,3% vs. 55,6% (χ2

(1)=2,534; p= 0,111). A los tres años toman fármacos el 11,1% vs. 8,7% (χ2 (1)=0,067;

p= 0,796). Llama la atención que entre los sujetos que abandonan son muchos

menos los que toman psicofármacos que los sujetos que fueron alta. En el Grupo

Experimental no es tan grande la diferencia a los 3 años (18,2% las altas vs.

11,1% los abandonos), pero en el Grupo Control es muy importante (50% vs.

8,7%).

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

113

Retornos

Los sujetos que abandonan del Grupo Experimental tienden más a retornar

al CSM que los del Control, 25% vs 14,8% (χ2 (1)=0,836; p= 0,360).

Tasa de Recuperación

Al año hay menos sujetos con recuperación objetiva entre los abandonos

del Tratamiento de Psicoterapia Breve. Son un 50% de abandonos los que están

recuperados en el Grupo Experimental vs 76,9% en el Control (χ2(1)=3,77; p= 0,052).

A los dos años se invierte, es el 86,4% de los abandonos del Grupo de

Psicoterapia Breve vs 72% del Tratamiento Habitual (χ2(1)=1,44; p= 0,230). A los 3

años se reducen las diferencias 90% de recuperados en el Grupo Experimental y

84% en el Control (χ2(1)=0,502; p= 0,479).

Es de destacar que en el Grupo de Psicoterapia Breve las tasas de

recuperación objetiva son bastante parecidas entre altas y abandonos, pero en el

Grupo de Tratamiento Habitual son muy superiores entre los abandonos. En parte

se debe a que para hablar de recuperación los sujetos no tienen que estar tomando

tratamiento psicofarmacológico, y son muchos los sujetos de alta del Grupo

Control que lo siguen tomando.

Satisfacción

No hay diferencias entre ambos grupos. Consideran que fue beneficioso el

tratamiento el 80% de los sujetos que fueron abandono en el Grupo Experimental

vs el 83,3% en el Control (χ2(1)=0,041; p= 0,840). Están satisfechos o muy

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

114

satisfechos con la ayuda recibida el 100% vs. 91,7% respectivamente (χ2(1)=0,958;

p= 0,328). Esto lo que nos indica es que abandono no es sinónimo de insatisfacción.

En Resumen, no hay diferencias importantes en variables clínicas, ni en

consumo de psicofármacos, ni en retornos, ni en satisfacción entre los abandonos

de ambos grupos. Parece que abandono no es sinónimo de que el sujeto se

encuentre mal clínicamente o que necesite un tratamiento más intenso, más bien al

contrario. Es de destacar que en el Grupo Control en muchas variables los sujetos

que abandonaron obtienen mejores resultados que las altas del mismo grupo.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

115

8. CONCLUSIONES

A continuación se presentan las principales conclusiones tanto en lo referido a

la comparación de ambos grupos en cada momento temporal como de la

evolución de cada grupo durante los tres años. En la Tabla 13 (p. 190) y la Tabla

14 (p. 191) se recoge un resumen de la comparación de ambos grupos en las

principales variables en los distintos momentos temporales.

8.1 Análisis entre-grupos

En lo referido a la comparación de ambos grupos en cada momento temporal a

la vista de los resultados se concluye que:

o A los seis meses los sujetos del Grupo Control obtienen una mejoría

sintomatológica mayor. El nivel de discapacidad es semejante en ambos

grupos. Aunque en el Grupo Experimental hay más altas, el mayor

número de abandonos del Grupo Control hace que sigan a tratamiento un

número similar de personas.

o Al año el Programa de Psicoterapia Breve obtiene mejores resultados a

nivel de altas y de recuperación, y son similares a nivel sintomatológico y

grado de discapacidad.

o A los 2 años la Psicoterapia Breve resulta más efectiva según todos los

criterios evaluados exceptuando el nivel de sintomatología recogida en el

SCL-90 donde no hay diferencias estadísticamente significativas.

o A los 3 años en las variables registradas se mantienen las diferencias a

favor del Grupo Experimental.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

116

8.2 Análisis Intra-grupo

Tomando como referencia la evolución de cada grupo durante el periodo de

tratamiento y seguimiento los tres años se concluye lo siguiente:

o La duración del tratamiento en el CSM es un 35% menor en el Grupo

Experimental, aunque tenga casi una sesión más de tratamiento. El

intervalo entre sesiones es la mitad que en el Grupo Control (Ver Figura

13, p. 65). Eso aun partiendo de la dudosa premisa de que un sujeto deja

de estar a tratamiento aunque siga tomando psicofármacos, solo por el

hecho de que no sea en el CSM, como es el caso de la mayoría de los

sujetos del Grupo Control al alta.

o La tasa de altas es mayor en el Grupo Experimental y por tanto hay menos

sujetos que siguen a tratamiento en el CSM en los distintos momentos

temporales. La tasa de abandonos es similar en ambos grupos y los

retornos también (Ver Figura 20, p. 83 y Figura 23, p. 87).

o En el Grupo Experimental el nivel de mejoría subjetiva expresado por los

sujetos a través de la ICG-C comienza a disminuir de manera más lenta

que en el Grupo Control, pero a lo largo de los dos años que se midió

mejoró significativamente.

En lo referido al número e intensidad de la sintomatología recogido en el

SCL-90 los primeros seis meses apenas hay mejoría, aunque luego

disminuye de manera constante.

En el Grupo Control la mejoría subjetiva es mayor los 6 primeros meses y

luego comienza a disminuir. Respecto al número e intensidad de los

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

117

síntomas, estos se reducen mucho los 6 primeros meses, pero al año y a los

dos años empeoran moderadamente.

o El nivel de discapacidad se reduce de manera constante y desde el inicio

del tratamiento en el Grupo Experimental hasta niveles muy inferiores.

En el Grupo Control se produce una reducción del nivel de discapacidad

durante el primer año, pero empeora significativamente a los dos años

hasta niveles previos al inicio del tratamiento.

o La evolución general de cada Grupo a lo largo de los tres años es diferente.

La Psicoterapia Breve obtiene una mejoría continua durante todo el

proceso y sus resultados son duraderos incluso una vez terminada la

terapia. Resultó efectiva para el 80% de los sujetos (Ver Figuras 25 a 33,

p. 91-101).

El Tratamiento Habitual obtiene sus mejores resultados los seis primeros

meses, pero luego no se mantienen en el tiempo y empeoran. Tras tres

años resultó efectiva para el 50-55% de los pacientes.

o En lo referido al tratamiento psicofarmacológico en el Grupo que realiza el

Programa de Psicoterapia Breve hay menos sujetos consumiendo fármacos

en todos los momentos temporales, pero no solo durante el tratamiento,

sino también una vez finalizado este. Respecto a la cantidad de

antidepresivos y benzodiacepinas esta también es menor en el Grupo de

Psicoterapia Breve durante los 3 años (Ver Figuras 34 a 38, p. 102-106).

o Respecto a los sujetos que han sido alta, en el Grupo Experimental

presentan un estado clínico global mejor y un menor grado de

discapacidad; consumen menos fármacos y requieren menos atención

posterior que las altas del Grupo Control.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

118

o En lo referido a los sujetos que abandonaron el tratamiento, no hay

diferencia entre ambos grupos. Además parece que abandono no es

sinónimo de que el sujeto se encuentre mal clínicamente o que necesite un

tratamiento más intenso.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

119

9. DISCUSIÓN

9.1 Comprobación de Hipótesis iniciales

La principal hipótesis de la que se partía es que el Programa de

Psicoterapia Breve es al menos tan efectivo10 como las Intervenciones Habituales

en el tratamiento de los TMC. Según los resultados obtenidos se puede entender

parcialmente confirmada la hipótesis. Así, según se ha visto los primeros seis

meses el Tratamiento Habitual ha resultado más efectivo en la reducción de los

síntomas psicopatológicos, pero en el resto de variables la Psicoterapia Breve ha

sido al menos tan efectiva esos primeros meses. A partir del segundo semestre la

Psicoterapia Breve ha sido más efectiva que el Tratamiento Habitual en las

distintas variables de resultado utilizadas excepto en la cantidad e intensidad de

síntomas psicopatológicos que es similar en ambos grupos. En términos generales

los datos señalan que con el Programa de de Psicoterapia Breve se han recuperado

el 80% de los sujetos frente al 55% del Tratamiento Habitual. Por tanto aunque a

corto plazo el nivel de efectividad es similar en ambos grupos, a partir de los 6

meses el Programa de Psicoterapia Breve resulta ser más efectivo que el

Tratamiento Habitual y esa efectividad se mantiene a medio-largo plazo.

La segunda Hipótesis que se pretendía analizar en este estudio es si resulta

viable la implantación de un Programa de Psicoterapia Breve como tratamiento de

elección para una gran parte de los pacientes de los Centros de Salud Mental. En

este sentido tanto el proceso mediante el cual se ha implementado el Programa de

Psicoterapia Breve así como los resultados obtenidos confirman la hipótesis de la

10 La efectividad la hemos medido en términos de duración de los tratamientos, situación clínico-administrativa, estado clínico y sintomatológico, nivel de discapacidad, satisfacción, consumo de psicofármacos y uso de recursos durante tres años, y teniendo en cuenta distintas fuentes de información (terapeutas, pacientes y registros de uso de recursos y servicios).

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

120

viabilidad. Los terapeutas que desarrollaron el Programa de Psicoterapia Breve

pertenecen a los propios Servicios de Salud Mental y el número de horas

requeridas para la formación específica en el Programa fue de 45 horas11. La carga

de trabajo, el número total de pacientes atendidos (no solo los de la investigación)

y los tiempos dedicados a la consulta de los terapeutas que aplicaban el Programa

de Psicoterapia Breve no sufrió modificaciones durante el tiempo que duró la

investigación. No se realizó ninguna modificación en el funcionamiento habitual

del CSM. El único cambio que sí tuvieron que hacer los terapeutas del Grupo

Experimental respecto a su funcionamiento normal fue organizar la Agenda de tal

manera que pudieran asegurar la periodicidad de revisiones adecuadas, es decir,

una semana tras la primera sesión y entre dos y tres semanas hasta la

consolidación del cambio en el proceso terapéutico. Por lo demás el CSM siguió

funcionando igual y el número de casos y sesiones durante esos años de estos

terapeutas fue similar a cuando no estaban desarrollando la investigación. Por otro

lado el 85% de los casos que llegaron al CSM cumplieron criterios para aplicar

este Programa y el número medio de sesiones por paciente fue de 7, algo menos

de una sesión por encima de los Tratamientos Habituales. Además la duración del

tratamiento en el CSM fue de 213 días, un 35% menos que la media de los

Tratamientos Habituales. En resumen, el Programa de Psicoterapia Breve se ha

aplicado en un contexto real de alta presión asistencial y sin unas condiciones de

implementación privilegiadas, con pacientes que presentaban sintomatología y

problemáticas heterogéneas, con un número de sesiones y una duración

razonables. Además el Programa admite la posibilidad de un tratamiento

psicofarmacológico si se considerara necesario.

Con estos datos se confirma que la implementación del Programa de

Psicoterapia Breve es perfectamente viable y contradice la argumentación muchas

veces esgrimida de que los Tratamientos Psicológicos aun siendo efectivos, son

11 Recordemos que este Programa funciona como un marco general en el que terapeutas de diferentes orientaciones teóricas podrían ajustarse, pero para ello estos terapeutas deben de tener formación sólida en algún modelo concreto de psicoterapia. En este estudio los terapeutas del Grupo Experimental contaban un una media de 745 horas de formación previa en Psicoterapia.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

121

inviables en los Servicios Públicos por sus requisitos de aplicación, su duración y

la cantidad de sesiones que requiere.

La última Hipótesis que este estudio pretende contrastar es que el

Programa de Psicoterapia Breve resulta más eficiente que los tratamientos

habituales aplicados en los Centros de Salud Mental en los TMC. Los datos de los

que disponemos no permiten aun confirmar globalmente esta hipótesis ya que

para ello se requiere un estudio de costes complejo. Si es cierto que con los datos

actuales podemos intuir una mayor eficiencia del Programa de Psicoterapia Breve.

Por un lado su efectividad es mayor y por otro la mayoría de variables que se

relacionan con costes así lo indican exceptuando el numero de sesiones con

facultativo de referencia: la duración del tratamiento es menor, el número de

sesiones con MAP durante los tres años también, el número de personas que

consumen psicofármacos y la cantidad también es menor. Pero aun no se ha

realizado un estudio de costes exhaustivo donde se refleje los tiempos de trabajo

de los profesionales y el gasto en psicofármacos.

9.2 Interpretación de los resultados

En nuestro estudio se constata que el tratamiento de los Trastornos

Mentales Comunes en AP en Asturias es fundamentalmente psicofarmacológico.

El 70,8 % de los sujetos tomaban psicofármacos cuando llegaron al CSM. Estos

datos reflejan una realidad similar al resto de España y que en la propia Estrategia

en Salud Mental del Sistema Nacional de Salud (MSC, 2007) se analiza con

preocupación, máxime si se tiene en cuenta que el 85% de los casos con trastorno

mental son tratados exclusivamente en AP.

También queda reflejado en el estudio que el Tratamiento Habitual de los

trastornos mentales comunes en los Centros de Salud Mental de Asturias es al

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

122

igual que en AP fundamentalmente psicofarmacológico: un 67% frente al 11,9%

de tratamiento exclusivamente psicológico y un 21% de tratamiento combinado.

Por otro lado y aunque el objetivo fundamental de nuestro trabajo era el

estudio de la efectividad de la Psicoterapia Breve, una de las principales

conclusiones se refiere a la efectividad de los tratamiento psicofarmacológicos y

como esta no se mantienen en el tiempo. Los datos apuntan a algo muy relevante

y poco investigado, y es que el efecto positivo de los psicofármacos desaparece

progresivamente a partir de los seis meses aunque esto habitualmente no queda

recogido en los estudios sobre la efectividad de los tratamientos

psicofarmacológicos y psicológicos porque la mayoría de ellos se centran en los

resultados a corto plazo y no realizan seguimiento posterior (González & Pérez,

2007; Smith, 2005).

En nuestro estudio el seguimiento a tres años hace ver una evolución

cualitativamente distinta en ambos grupos. El Tratamiento Habitual

(fundamentalmente psicofarmacológico) consigue sus mejores resultados los

primeros meses y centrándose en la reducción de los síntomas psicopatológicos.

Sin embargo el Grupo Experimental no es tan eficaz en disminuir la

sintomatología en los inicios del tratamiento, pero con el paso del tiempo iguala e

incluso mejora levemente al Grupo Control. Pero en lo referido al nivel de

Discapacidad los resultados son diferentes, el Grupo Experimental ya consigue

mejorar la situación inicial desde las primeras semanas y el Grupo Control lo

hace en menor medida.

Esto puede relacionarse con las bases y premisas que sostiene cada tipo de

tratamiento, el tratamiento psicofarmacológico pone especial hincapié en los

aspectos biológicos y sintomatología como causa y objeto de tratamiento y ahí

centra sus resultados. Nuestra Psicoterapia es de tipo contextual y en lo referido

al modelo causal y al objeto de trabajo pone el acento en las circunstancias que

está viviendo el sujeto y como las está manejando. La idea de guiar el tratamiento

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

123

de un trastorno mental como la depresión independientemente de los

determinantes psicosociales y como el sujeto los maneja no resulta lo más eficaz

(Golbert, Bridges, Cook, Evans & Grayson, 1990). La sintomatología se considera

en parte como consecuencia de las dificultades de adaptación del sujeto a unas

circunstancias. Por eso se hace hincapié en que el sujeto desarrolle estrategias de

afrontamiento adaptativas en las distintas áreas vitales y en la resolución de

problemas ya sean interpersonales como individuales. No es de extrañar entonces

que en el Grupo Experimental disminuya desde el inicio el nivel de discapacidad

de las personas en las distintas áreas vitales (familiar, social, laboral) y que a

medio plazo los sujetos siguen mejorando a pesar de no estar recibiendo ya

Psicoterapia (Andrews & Harvey, 1981; Lambert & Bergin, 1992; Lambert et al.,

1986; Landman & Dawes, 1982; Nicholson & Berman, 1983; Rodriguez-Arias,

Otero, Venero, Ciordia & Fondó, 2004). Este efecto es denominado por algunos

autores como “patrón de incubación” y se da especialmente en los tratamientos

psicológicos contextuales donde el sujeto aprende o fortalece esas estrategias de

afrontamiento adaptativas en las distintas áreas vitales y en la resolución de

problemas que incorpora a su vida (Clarke, Kingston, Wilson, Bolderston &

Remington, 2012).

Esto encajaría complementariamente con un resultado muy significativo de

nuestra investigación, y es que el porcentaje de sujetos del Grupo de Psicoterapia

Breve que consumen psicofármacos a los tres años es del 17%, una proporción

muy similar a la población general que según el último estudio realizado en

Asturias sobre el tratamiento con psicofármacos es del 16,7% en la población

general adulta (Observatorio de Salud en Asturias, 2013). La premisa del modelo

es que la sintomatología mejora una vez las circunstancias del sujeto y su

funcionamiento permitan una mayor adaptación de la persona en su medio, de ahí

que la sintomatología tarde un tiempo en empezar a reducirse, pero que luego esa

mejoría se mantenga y se incremente. Esta visión también nos serviría para

entender porqué en muchos casos la mejoría conseguida con el tratamiento

psicofarmacológico no se mantiene. Si con el paso del tiempo la persona no

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

124

consigue manejar de manera más adaptativa sus circunstancias vitales y estas no

cambian significativamente, lo lógico es que la mejoría sintomatológica se diluya.

Esto podría estar explicando en parte dos fenómenos muy significativos, la

duración de los tratamientos psicofarmacológicos y la elevada tasa de Retornos de

pacientes a los Servicios Públicos de Salud Mental. Respecto a lo primero en

nuestro estudio hemos considerado como periodo de duración del tratamiento el

tiempo que la persona ha acudido al CSM, cuando en realidad son muchos los

sujetos del Grupo Control que siguen tomando tratamiento psicofarmacológico

aunque no acudan ya al CSM, incluso más entre aquellos que han sido alta que los

abandonos. El 83,9% de los sujetos del Grupo Control consumían psicofármacos

en el momento del alta. Si tenemos en cuenta en global las personas que tomaron

fármacos después del alta o abandono del CSM, fueron el 29 % de los sujetos del

Grupo de Psicoterapia Breve vs. 68,3% de los sujetos del Grupo de Tratamiento

Habitual. Esto quiere decir que el tratamiento farmacológico se plantea en la

mayoría de los casos como la principal estrategia de afrontamiento, pero es que ni

a pesar de que la persona siga tomando el tratamiento los resultados se

mantienen, lo cual en teoría no tiene sentido, pues a mayor dosis y tiempo de

tratamiento tendría que haber mejores resultados.

El otro fenómeno relacionado con el tipo de solución que se está

planteando desde los modelos que se centran exclusivamente en la sintomatología

es el de los RETORNOS de los pacientes a los Servicios Públicos de Salud

Mental. Más allá de la casuística de nuestro estudio que es limitada en el periodo

temporal y en el tamaño de la muestra, analizaremos la verdadera dimensión del

fenómeno acudiendo al registro de casos de los Servicios de Salud Mental de

Asturias. En el año 2009 el porcentaje de personas que RETORNAN al CSM

después de haber estado a tratamiento previamente es desorbitado, solo un 27%

más pequeño que el número de casos nuevos. En el Área Sanitaria Central de la

región hubo ese año 3.299 casos nuevos y 2.404 retornos, es decir, ya habían

estado a tratamiento previamente en los Servicios de Salud Mental del Principado

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

125

(Unidad de Coordinación de Salud Mental de la Consejería de Salud del

Principado de Asturias, 2000). Esto puede estar relacionado con la manera en que

los sujetos aprenden a definir sus problemas y las estrategias para solucionarlos.

Hay otra cuestión a analizar en lo referido al 70,8% de los casos de AP

que llegan al CSM con tratamiento psicofarmacológico pautado y del 67,2% del

Grupo Control que solo tienen como tratamiento psicofármacos. Si médicos de

AP ya utilizan habitualmente fármacos en el tratamiento de los TMC y derivan a

los CSM los casos que con sus herramientas no pueden resolver, ¿qué es lo que

deben aportar los CSM? Con los resultados que ya tenemos podemos concluir que

proporcionar Psicoterapia es más efectivo que prescribir más fármacos, pero en

cualquier caso en investigaciones futuras sería deseable poder comparar las

distintas modalidades de tratamiento posibles, y además desde que la persona

solicita ayuda en los Servicios de Salud. Por ejemplo, en el caso concreto de la

Depresión la investigación científica resalta que hay evidencia de que los

tratamientos combinados (que incluye tratamiento psicológico y farmacológico)

pueden ser más efectivos que el tratamiento psicológico por si solo únicamente a

corto plazo, pero no a largo plazo (Cuijpers, Van Straten, Warmerdam &

Andersson, 2009).

En lo referido a la aplicación de un Programa de Psicoterapia Breve

debemos plantear que aunque esta resulta viable y el número de sesiones que se

ha necesitado no difiere de las que se necesitan en el Tratamiento Habitual (7 vs.

6,17), lo que sí se considera importante y creemos que ha sido una cuestión que

influye en los resultados del Grupo Experimental es el intervalo entre sesiones. En

los tratamientos psicológicos se necesita un intervalo entre sesiones corto,

(especialmente al inicio del tratamiento) porque se requiere un análisis y

definición de los problemas, construir un plan de intervención, desarrollar en la

vida cotidiana formas diferentes de manejar las circunstancias e ir revisándolo. Si

esto se hace con una periodicidad demasiado larga el proceso de cambio se diluye

en la vida cotidiana del paciente. Para los tratamientos psicofarmacológicos no

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

126

tiene porque ser así ya que la medicación requiere unos periodos temporales para

hacer sus efectos y por otro lado el compromiso del paciente se centra

mayoritariamente en tomar la pauta de medicamento prescrito lo cual no implica

un nivel de compromiso personal que requiera un seguimiento más continuo.

Respecto a la Tasa de Recuperación, esta se situó a los dos años en 76% en

el Grupo Experimental y en el 49% en el Control. Si bien el concepto de

recuperación no es asimilable, cabe recordar aquí que Eysenck (1952) en sus

investigaciones encuentra una tasa de remisión espontánea a los dos años del 72%

-la más alta de los estudios realizados- y los autores proponen tomar como

referencia esa tasa para valorar si un tratamiento es o no eficaz. Así Burgaleta y

Rodriguez-Arias (2003) plantean que se podrá considerar efectiva aquel

tratamiento que demuestre alguna ventaja sobre la remisión espontánea: mayor

porcentaje de casos de mejoría, y/o menor tiempo para conseguir ésta, y/o

beneficios constatables más amplios que la desaparición de los síntomas -efecto

irradiación-. En nuestro estudio carecemos de un grupo de no tratamiento para

comparar la evolución. Lo más parecido es la evolución de las personas que

abandonaron, que no fue peor que las altas, especialmente en el Grupo de

Tratamiento Habitual. Sin ser asimilables, los resultados parecen ir en la misma

dirección que el estudio de Dowrick et al. (2000) donde la evolución del grupo sin

intervención también es positiva y solo lo supera el grupo que recibió Tratamiento

Psicológico de Resolución de Problemas.

9.3 Nuestros resultados a la luz de la literatura científica

Los resultados de nuestro estudio realizado en un contexto “natural” y

adaptado a la realidad asistencial de los servicios públicos de salud mental de

España, están en consonancia con los obtenidos por otros estudios y meta-análisis

de carácter internacional y de alto rigor metodológico que llegan a las mismas

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

127

conclusiones y que ya han sido mencionados previamente (Chambless &

Ollendick, 2001; Hunsley, 2003; Roth & Fonagy, 2005).

Importantes ECA y meta-análisis centrados en la depresión y que

comparan el efecto de los tratamientos psicológicos, farmacológicos y

combinados para la depresión coinciden en señalar que, si bien ambos

tratamientos muestran resultados similares a corto plazo, los tratamientos

psicológicos presentan mejores resultados a largo plazo, con una menor tasa de

abandonos y recaídas (Cano, Salguero, Mae, Dongil & Latorre, 2012; De Maat,

Dekker, Schoevers & De Jonghe, 2006; Imel, Malterer, McKay, & Wampold,

2008). Por otro lado de los diferentes tratamientos psicológicos estudiados los que

se han demostrado más efectivos son los denominados bona fide o fiables, los

cuales reúnen los siguientes criterios (Spielmans et al., 2011; Spielmans, Pasek, &

McFall, 2007): que el terapeuta haya sido entrenado para proveer la psicoterapia y

tenga formación específica, que exista una relación terapéutica cara a cara e

individualizada (no sólo una aplicación estandarizada de los procedimientos), y

que los tratamientos cuenten con un manual como guía y se dirijan a modificar

componentes psicológicos específicos. Estas características en términos generales

son comunes a nuestro programa de tratamiento.

Mención especial nos merece por su relevancia, novedad e implicaciones

los estudios y programas que se han puesto en marcha en Inglaterra en relación al

Improving Access to Psychological Therapy (IAPT) (Turpin et al., 2008). El

informe del Centre for Economic Performance´s Mental Health Policy Group

(2006) concluía que “aunque la eficacia a corto plazo de determinados

tratamientos psicológicos era equivalente a la de los psicofármacos, a largo

plazo resulta más eficaz y con efectos más duraderos”.

En los estudios prospectivos que han realizado sobre la eficacia de los

tratamientos psicológicos que han implementado estos años ya no hay

comparación con los tratamientos psicofarmacológicos, pero sí resultados sobre

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

128

eficacia (Clark et al., 2009; Clark, 201; Richard & Suckling, 2009). Estos

primeros resultados que ya hemos mencionado previamente alcanzaron un nivel

de recuperación significativa del 55-56% a los 10 meses del alta con un número

medio de sesiones para los sujetos que completaron el tratamiento cercano a 5 y

una duración media de tratamiento de 8 semanas. Algunas de las diferencias

respecto a nuestra investigación es que en esos estudios solo analizaron los sujetos

que habían sido alta y no todos los que seguía a tratamiento cuando realizaron la

evaluación. De haber introducido a todos los sujetos en la investigación es

probable que la duración total del tratamiento fuera más parecida. Lo que no cabe

duda es que el número de sesiones necesarias para realizar un tratamiento

psicológico siguen demostrándose como razonables y viables también en esos

estudios. En relación a la recuperación, aunque la hemos medido de distinta

manera, son muy similares los porcentajes de 55-56% de los estudios de Clark y

Richard, con los nuestros del 52,3% de recuperación en el Grupo Experimental al

año de tratamiento. A los tres años el Grupo de Psicoterapia Breve de nuestra

investigación alcanza un 80% de recuperación, pero no se puede comparar con los

estudios de Clark y Richard porque ellos no realizaron seguimiento más allá de

los 10 meses desde el alta.

9.4 Limitaciones del presente estudio

La maximización de la validez externa ha sido un elemento prioritario en el

diseño de nuestra investigación dado que ya existen estudios de alta calidad

metodológica que demuestran la eficacia de las psicoterapias breves en

condiciones ideales, pero que difícilmente se pueden generalizar esos tratamientos

y resultados a contextos reales. Nos parecía importante avanzar en el estudio de la

efectividad de los programas de Psicoterapia Breve implementados en contextos

reales y en servicios públicos respetando en la medida de lo posible la rigurosidad

metodológica, pero esta opción de aumentar la validez ecológica y la limitación

de recursos con los que hemos contado para el desarrollo de la investigación ha

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

129

limitado en cierta medida la validez interna del estudio. Estos son algunos de los

factores del estudio que repercuten negativamente en la validez interna:

o Los tratamientos, especialmente el Tratamiento Habitual no está bien

definido. En realidad estamos denominando Tratamiento Habitual a un

conglomerado heterogéneo de intervenciones que al menos se podrían

agrupar en dos o tres tipos de tratamientos diferentes: tratamientos

psicofarmacológicos, tratamientos psicológicos y tratamientos

combinados. Cerca de un 67,2% de los caso de este grupo recibieron

exclusivamente tratamiento psicofarmacológico, un 20,9% tratamiento

combinado y un 11,9% solo tratamiento psicológico. Analizándolos por

separado, en muchas variables los resultados de los sujetos que recibieron

solo tratamiento psicológico o combinado del Grupo Control son más

parecidos al Tratamiento de Psicoterapia Breve que al resto de su grupo.

Por ejemplo, a nivel psicofarmacológico se constata un consumo muy

reducido de psicofármacos entre los casos del Grupo Control asignados a

psicólogo clínico. Estos datos pueden llevar a la reflexión sobre si este

Programa de Psicoterapia Breve tiene unos efectos específicos por encima

de otros tratamientos psicológicos contextuales o si por el contrario su

nivel de eficacia es similar. Esto último no sería descabellado si se tiene en

cuenta que el Programa de Psicoterapia Breve aplicado, más que un

protocolo de tratamiento ha sido una manera de estructurar las terapias

contextuales que ya se aplican ajustándolas a las características de los

Servicios Públicos.

Precisamente en lo referido a la Psicoterapia Breve y la validez interna

cabría cuestionar precisamente que no es un programa protocolizado en lo

relativo a las técnicas de intervención a aplicar en cada sesión, es más, ni si

quiera se estructura la intervención y las técnicas en función del

diagnóstico sino en función del Esquema de Diferenciación (Figura 7, p.

57) que construyen el paciente y el terapeuta. Pero es que la esencia de

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

130

este Programa de Tratamiento es lo contextual, el sujeto y sus

circunstancias. Si se protocolizara el contenido, los objetivos y las técnicas

a aplicar en cada sesión, entonces ya sería un tipo de terapia

cualitativamente distinta a la aquí aplicada.

o Otra limitación de este ensayo clínico es que la mayoría de los pacientes

ya acuden al Centro de Salud Mental con un tratamiento

psicofarmacológico pautado y por tanto el Grupo de Psicoterapia Breve ya

tiene que integrar forzosamente el tratamiento psicofarmacológico que de

mano no es inherente a este Programa. De no ser así y teniendo en cuenta

que desde el inicio del Programa de Psicoterapia Breve en el CSM se

reduce la prescripción farmacológica, es posible que el consumo de

psicofármacos pueda ser aun menor si el programa de primera elección

fuera la Psicoterapia Breve y no se planteara solo tras el fracaso del

tratamiento psicofarmacológico en AP. Además habría menos confusión

en relación a qué efectos del tratamiento son debidos al trabajo

psicoterapéutico y cuáles a la medicación. ¿Qué hubiera pasado en nuestro

estudio si en vez de llegar al CSM con medicación el 70,8% de las

personas, se las hubiera derivado sin medicación, al menos al Grupo

Experimental? Para responder a estas cuestiones se requieren nuevos

estudios en los que se compare claramente la efectividad de la

psicoterapia y los fármacos solos y en combinación en condiciones reales

y controlándolo ya desde su recepción en Atención Primaria. También

sería sumamente interesante, aunque complicado de realizar por cuestiones

éticas y de selección, incluir un Grupo Control de la población general que

con similares características clínicas, no estuviera recibiendo tratamiento

en CSM ni AP.

o En el Programa de Psicoterapia Breve, que en teoría es más estructurado

que el Tratamiento Habitual, no se ha comprobado la adhesión de los

terapeutas y pacientes a los tratamientos. No hemos tenido unos criterios

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

131

objetivos ni una comprobación externa para asegurarnos que cada

profesional seguía el Programa o en qué medida los pacientes mantenían

una adhesión a los tratamientos.

o Los diagnósticos no han sido contrastados con criterios objetivos o

externos, se ha tomado como referencia el diagnóstico que consta en la

historia clínica y que realizó cada facultativo responsable del caso.

En lo referido a la validez externa, aunque en menor medida, también hay

factores que la limitan:

o Los terapeutas de ambos grupos son conocedores de que casos que ellos

comienzan a tratar participan en la investigación. Esto puede estar

influyendo indirectamente en el tratamiento aplicado ya que aunque en el

estudio se mantiene el anonimato de los facultativos de referencia, sí

tenían constancia que sus resultados serían evaluados. De cualquier forma

una mayor motivación del profesional no debe de ser considerada un

problema grave máxime cuando ambos grupos de tratamiento se

encontraban en las mismas condiciones.

o Los terapeutas del Grupo Experimental forman a la vez parte del equipo de

investigación en el cual se enmarca esta línea de estudio que hemos

desarrollado. En este sentido se corre el riesgo de ser a la vez juez y parte.

Para paliar dicho efecto se han tenido en cuenta distintas fuentes de

información (Historias Clínicas, Registros de información de los Servicios

de Salud Mental y de Atención Primaria, y los cuestionarios respondidos

por los propios pacientes), y la persona que ha recogido toda esta

información estaba integrada en los Servicios Centrales de Salud Mental y

era externa al grupo de investigación.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

132

o Durante los seguimientos Psicométricos ha habido mucha pérdida muestral

y por tanto debemos ser cautos en lo relativo a la generalización de los

resultados de estos cuestionarios. En total han participado en algún

seguimiento psicométrico a lo largo de los tres años el 55,6% de los casos,

pero es que en el primer semestre lo hicieron el 39,6%, en el segundo

semestre el 38,9% y en el segundo año solo el 25%. Por eso se ha tenido

que realizar un análisis estadístico de participación o no a los 6, 12 y 24

meses de cara a controlar variables extrañas que afecten a la

generalización de los resultados. No obstante comparando las

puntuaciones psicométricas con los otros criterios de resultado utilizados

en la investigación se constata que son coherentes entre ellos y todos

mantienen la misma tendencia, lo cual creemos que otorga mayor robustez

a los resultados. La diferencia más destacable en este análisis que compara

las personas participantes y no participantes en los seguimientos

psicométricos de cada momento temporal es que entre los no participantes

hay más personas que abandonaron el tratamiento y que se encontraban

bien. Lo que también es importante es que los participantes y no

participantes en los seguimientos psicométricos se distribuyeron por igual

en el Grupo Control y en el Experimental, lo que permite comparar las

posibles diferencias en los resultados del Tratamiento Habitual y de la

Psicoterapia Breve.

o Otra limitación de nuestro estudio es que en realidad no deberíamos

calcular el periodo de tratamiento por el tiempo que un sujeto ha estado en

el CSM sino por el tiempo e intensidad del tratamiento que reciba

independientemente que sea en CSM o AP. Si se hiciera así entonces la

duración real del tratamiento de los sujetos del Grupo Control aumentaría

aun más. En un sistema de salud público donde se garantiza la continuidad

de cuidados y donde la atención debe de estar organizada en función del

proceso de tratamiento del paciente y no de los dispositivos, tiene más

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

133

sentido hacer este análisis en función de todo el proceso del sujeto y no

solo del tiempo que está en el CSM.

9.5 Implicaciones de los resultados del estudio

Los resultados de nuestro estudio nos llevan a la misma conclusión que el

National Institute for Health and Clinical Excellence (2011b) cuando recomienda

que:

“Las intervenciones psicológicas deben ofertarse a todas

las personas que padezcan trastornos depresivos o de

ansiedad, pues si bien su eficacia a corto plazo es

equivalente a la de los fármacos, a largo plazo resulta

más eficaz y con efectos más duraderos”.

En el contexto actual de crisis económica, recortes en presupuestos y

dudas sobre el modelo social, no es fácil de justificar el mantener los elevados

gastos en psicofármacos habiendo otras fórmulas de atención a los TMC más

efectivas y eficientes. Además los recursos disponibles se pueden aprovechar

para atender mejor otros trastornos mentales que por su gravedad requieren de

intervenciones más intensas, complejas y prolongadas en el tiempo.

Los distintos Análisis y Planes Estratégicos para el Desarrollo de los

Servicios de Salud Mental de Asturias y a nivel nacional ponen de manifiesto que

la duración de la atención a los TMC es demasiado elevada en relación a su curso

teórico y en comparación con los trastornos más graves (Consejería de Sanidad

del Principado de Asturias 2011; MSC, 2007; Servicio de Salud del Principado de

Asturias, 2000). En esos documentos se señala que los TMC demandan una

atención que está desbordando los recursos tanto del nivel primario como del

especializado y que a su vez esto está repercutiendo en una disminución de la

calidad de la atención que se presta tanto a esos problemas como a los trastornos

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

134

mentales severos: listas de espera, aumento de carga asistencial, de intervalo entre

consultas y duración total de los tratamientos, dificultades para aplicar los

tratamientos de forma adecuada, incremento de los gastos sanitarios directos –

consultas, fármacos, etc.- e indirectos –incapacidades laborales temporal, bajo

rendimiento, etc.) y que en definitiva disminuye la efectividad y eficiencia de la

atención. Esto se confirma si se tiene en cuenta que en la última década la

incidencia de TMC en los CSM se ha estabilizado y sin embargo la prevalencia ha

seguido creciendo, es decir, “entran más casos de los que salen”. Y todo ello a

pesar del aumento constante de recursos y gasto sanitario hasta el año 2010. A

esto se le añade el fenómeno ya analizado de los Retornos. Todo esto obliga a

hacer una reflexión sobre lo que está fallando en la atención a estos trastornos.

La actual coyuntura de cuestionamiento de los Servicios de Salud Públicos

debiera de servir precisamente para revisar la atención que se está realizando

(también a los trastornos mentales) y optar por fórmulas más eficientes en vez de

plantear recortes indiscriminados. En este sentido y con la puesta a en marcha de

las Unidades de Gestión Clínica, se abre una vía para canalizar los cambios. O eso

o un riesgo de desmantelamiento del sistema de garantías socio-sanitarias tal y

como lo entendíamos hasta ahora en las sociedades europeas del bienestar. Como

se reconoce en la Estrategia en Salud Mental del Sistema Nacional de Salud

(MSC, 2007) los resultados de la investigación no son reconocidos e

implementados por las Administraciones sanitarias con la agilidad que sería

deseable. En demasiadas ocasiones la inercia ha sido más fuerte que la

maximización de la efectividad y la eficiencia. Además en ocasiones se carece de

una perspectiva general centrada en los procesos completos de atención a los

pacientes y cada parte del sistema solo ve su parcela. ¿A caso preocupa en los

Servicios de Salud Mental el gasto farmacéutico y la atención que precisan los

pacientes una vez dados de alta del CSM? Desgraciadamente siempre ha

prevalecido la tendencia a adaptar la atención que se presta a los ciudadanos a los

recursos y estructuras de funcionamiento existentes y no viceversa.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

135

Por tanto consideramos que este y otros estudios donde se investiga la

efectividad y eficiencia de los tratamiento en Salud Mental no repercutirán en una

mayor calidad en la atención a las personas con trastornos mentales de no haber

un camino de vuelta donde se recoja el feedback y se adapte la organización para

aplicar tratamientos más efectivos y eficientes en los Servicios Públicos de Salud

Mental.

Creemos que el modelo de Tratamiento Psicológico analizado en esta

Tesis Doctoral ha demostrado ser viable en los Servicios Públicos de Salud

Mental y efectivo para el abordaje de los TMC y por tanto podría ser una de las

alternativas sobre las que reflexionar y construir, pero también debe aclararse que

no se trata un Paquete de tratamiento al uso. La intervención y las técnicas no se

estructuran en función del diagnóstico. Se trata por el contrario de un modelo

terapéutico contextual. Lo que guía el entendimiento del problema y la aplicación

de soluciones es el sujeto y sus circunstancias; se define entonces como un

modelo ideográfico e interpersonal cuya esencia queda plasmada

fundamentalmente en el Esquema de Diferenciación de la Terapia (Figura 7, p.

57). Al encuadrar la sintomatología de la persona en su contexto histórico y

relacional, en sus estrategias y en sus propósitos, no ha lugar a tratamientos donde

el contenido, los objetivos y las técnicas a aplicar en cada sesión están

predeterminadas en un “paquete” de tratamiento. Trabajando con matrices tan

complejas no se puede definir de antemano las técnicas a aplicar. Por eso es tan

importante que el terapeuta domine un amplio abanico de técnicas y que aplique

aquellas que se ajustan al sujeto y sus circunstancias presentes. Los estudios sobre

eficacia de los distintos Tratamientos Psicológicos aplicados en contextos reales

demuestran que la capacidad del terapeuta para establecer la relación terapéutica y

ajustar al paciente la contextualización del problema y las técnicas a aplicar, es al

menos tan relevante como el ajuste teórico de la técnica concreta al problema o

síntoma a abordar. Sigue siendo relevante al respecto la pregunta que Gordon

Paul hacía en 1967: “¿Qué tratamiento, por quién, es más eficaz en este individuo

con estos problemas específicos y bajo qué conjunto de circunstancias?”.

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

136

Por tanto no cabe en lo relativo a los TMC simplificar lo complejo y

convertir al terapeuta en un mero dispensador ya sea de fármacos, de técnicas, de

información, etc. El programa de Psicoterapia Breve aquí analizado lo que facilita

es que terapeutas con formación sólida en algún modelo de psicoterapia puedan

implementar este esquema de organizar la intervención psicoterapéutica adaptado

a las características de los Servicios Públicos de Salud Mental siempre que

mantengan esa perspectiva contextual y de ajuste y se enfatice la asunción de ese

rol de sujeto activo por parte del paciente a través de las toma de decisiones

conjunta y la acción en su vida.

En el entendimiento del sufrimiento de las personas y su cristalización en los

Trastornos Mentales hacemos nuestro el planteamiento que para la comprensión

del ser humano sentencia Ortega y Gasset (1914), “Yo soy yo y mis

circunstancias”.

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

137

10. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFÍCAS

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Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

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ANEXO 1. TABLAS

Glosario de símbolos y abreviaturas utilizadas en las Tablas

Significación estadística

* Significación estadística con un nivel de confianza del 95%

** Significación estadística con un nivel de confianza del 99%

Medidas de tendencia central y dispersión

M: Media: M

Md: Mediana: Md

Mo: Moda: Mo

DT: Desviación típica: DT

Estadísticos de contraste

χ2: Chi Cuadrado (para variables nominales)

t : T de Student (para variables cuantitativas)

Tamaño del efecto

V: V de Cramer (para variables nominales)

R: Correlación de Pearson (para variables cuantitativas)

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

153

Tabla 1. Casos excluidos y casos perdidos

Variable

Valores

Grupo

Experimental

nº Sujetos/ %

Grupo

Control

nº / %

Total

nº / %

Casos

Seleccionados

114(100%)

101 (100%)

215 (100%)

Cumplían criterios

de inclusión

97 (85,09%)

91 (90,1%)

188 (87,44%)

Incluidos

participantes

72 (63,16%)

72 (71,29%)

144 (66,98%)

Completan

tratamiento

Casos que completan tratamiento de

los incluidos que participaron

64 (88,9%)

55 (76,4%)

119 (82,6%)

No participaron

42 (36,84%)

29 (28,70%)

71 (33,02%)

Total

17 (14,92%)

10 (9,9%)

27 (12,56%)

Por diagnóstico

13 (11,4%)

5 (4,9%)

18 (8,37%)

Excluidos en

sentido estricto

Por no requerir tratamiento

4 (3,51%)

5 (4,9%)

9 (4,19%)

Total

25 (21,93%)

19 (18,81%)

44 (20,46%)

Por no acudir a la 1ª consulta

5(4,39%)

9(8,91%)

14(6,51%)

Por no entregar el consentimiento

informado

3 (2,63%)

0 (0%)

3 (1,39%)

Por negarse a participar

12 (10,53%)

2 (1,98%)

14 (6,5%)

Casos Perdidos

Otros y sin aclarar

5 (4,39%)

8 (7,92%)

13 (6,05%)

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

154

Tabla 2. Características socio-demográficas de la muestra

Variable Valores Experimental N=72 nº Sujetos / %

Control N=72 nº / %

Total N=144 nº / %

Resultados

análisis

Edad al inicio del tratamiento *

14-85

M=37,5 Md=36,80 DT=14,62

M=42,32 Md=42,88 DT=12,84

40,06 Md=40,33 DT=13,90

t (142 )=-2,013 p =0,046 R= 0,165

Hombre

22 (30,6%)

28 (38,9%)

50 (34,7%)

Sexo

Mujer

50 (69,4%)

44 (61,1%)

94 (65,3%)

χ2 (1 ) = 1,103 p =0,294 V= 0,088

Soltero

18 (25%)

15 (20,8%)

33 (22,9%)

Casado

42 (58,3%)

45 (62,5%)

87 (60,4%)

Viudo

1 (1,4%)

1 (1,4%)

2 (1,4%)

Divorciado

5 (6,9%)

3 (4,2%)

8 (5,6%)

Estado civil actual

Convivencia con pareja sin estar casado

6 (8,3%)

8 (11,1%)

14 (9,7%)

χ2 (4) = 1,162 p=0,884

V=0,090

Con la familia de origen

16 (22,2%)

13 (18,1%)

29 (20,1%)

Con familia propia

49 (68,1%)

55 (76,4%)

104 (72,2%)

Con otras personas u otros familiares

2 (2,8%)

0 (0%)

2 (1,4%)

Solo.

5 (6,9%)

3 (4,2%)

8 (5,6%)

Convivencia

No consta

0 (0%)

1 (1,4%)

1 (0,7%)

χ2 (4) =4,156 p =0,385 V=0,170

No

47 (65,3%)

38 (52,8%)

85 (59%)

25 (34,7%)

34 (47,2%)

59 (41%)

Hijos a su cargo

Nº hijos

M=0,56 DT=0,87

M=0,69 DT=0,85

M=0,63 DT=0,86

χ2 (1) =2,326 p =0,127 V=0,127

Sin estudios

1 (1,4%)

8 (11,1%)

9 (6,3%)

Primer ciclo de enseñanza

40 (55,6%)

31 (43,1%)

71 (49,3%)

Segundo ciclo de enseñanza

23 (31,9%)

26 (36,1%)

49 (34%)

Titulados medios

6 (8,3%)

4 (5,6%)

10 (6,9%)

Nivel de instrucción

Titulados superiores

2 (2,8%)

3 (4,2%)

5 (3,5%)

χ2 (4) = 7,369 p =0,118 V=0,226

Profesiones técnicos o similares

1 (1,4%)

5 (6,9%)

6 (4,2%)

Ocupación principal

Directivos y gerentes de empresas

3 (4,2%)

1 (1,4%)

4 (2,8%)

χ2 (8) =10,367 p =0,242 V=0,268

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

155

Administrativos y similares

6 (8,3%)

11 (15,3%)

17 (11,8%)

Hostelería y otros servicios domésticos.

10 (13,9%)

8 (11,1%)

18 (12,5%)

Agricultores, ganaderos y pescadores.

3 (4,2%)

4 (5,6%)

7 (4,9%)

Trabajadores de la producción no agrarios.

14 (19,4%)

19 (26,4%)

33 (22,9%)

Otras ocupaciones no bien especificadas.

9 (12,5%)

9 (12,5%)

18 (12,5%)

Profesionales de las Fuerzas Armadas.

2 (2,8%)

0 (0%)

2 (1,4%)

Sin profesión.

24 (33,3%)

15 (20,8%)

39 (27,1%)

Trabajando

25 (34,7%)

26 (36,1%)

51 (35,4%)

Parado, habiendo trabajado antes

4 (5,6%)

3 (4,2%)

7 (4,9%)

Retirado, jubilado, pensionista

3 (4,2%)

6 (8,3%)

9 (6,3%)

Escolar o estudiante

10 (13,9%)

3 (4,2%)

13 (9%)

Labores del hogar

14 (19,4%)

13 (18,1%)

27 (18,8%)

Situación laboral

Incapacidad laboral temporal (ILT)

16 (22,2%)

21 (29,2%)

37 (25,7%)

χ2 (5) =5,644 p =0,342 V=0,198

Rural

31 (43,1%)

31 (43,1%)

62 (43,1%)

Medio de residencia

Urbano

41 (56,9%)

41 (56,9%)

82 (56,9%)

χ2 (1) = 0 p =1 V=0

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

156

Tabla 3. Características clínicas pre-tratamiento

Variable Valores Experimental N=72 nº Sujetos / %

Control N=72 nº / %

Total N=144 nº / %

Resultados

análisis

Exclusivamente MAP

18 (25%)

28 (38,9%)

46 (31,9%)

Atención ambulatoria especializada pública.

5 (6,9%)

7 (9,7%)

12 (8,3%)

Atención ambulatoria especializada privada

10 (13,9%)

4 (5,6%)

14 (9,7%)

Sin antecedentes asistenciales

39 (54,2%)

33 (45,8%)

72 (50%)

χ2 (3) = 5,579 p = 0,134 V= 0,197

Antecedentes asistenciales

Período de tiempo con sintomatología (meses)

M=15,18 Md=5,14 DT=24,04

12,82 Md=4,50 DT=23,63

14,01 Md=4,93 DT=23,79

t(141 )=0,593 p=0,554 R=-0,50

De 1 a 3 meses

28 (38,9%)

34 (47,9%)

62 (43,4%)

De 3 a 6 meses

12 (16,7%)

10 (14,1%)

22 (15,4%)

De 6 a 12 meses

11 (15,3%)

15 (21,1%)

26 (18,2%)

De 12 a 18 meses

5 (6,9%)

1 (1,4%)

6 (4,2%)

De 18 a 24 mese

4 (5,6%)

2 (2,8%)

6 (4,2%)

Sintomatología agrupada

Más de 24 meses

12 (16,7%)

9 (12,7%)

21 (14,7%)

χ2 (5) =5,133 p =0,400 V=0,189

MAP pre-tratamiento

Sesiones con Médico de Atención Primaria pre-tratamiento por problemas de Salud Mental

M=2 Md=1,77 DT=1,17

M=2,4 MD=1,98 DT=1,66

2,21 Md=1,87 DT=1,45

t(115,3)=-1,574 p =0,118 R=0,138

Porcentaje de casos con al menos 1 día ITL

17 (27,9%)

16 (23,5%)

33 (25,6%) χ2 (1) = 0,318

p =0,573 V= 0,050

ITL pre-tratamiento

Días de baja pre-tratamiento

M=13,44 Md=1,11 DT=37,39

M=7,96 Md=0,91 DT=22,56

M=10,55 Md=1 DT=30,48

t (127)= 1,021 p =0,309 R= -0,90

No enfermo (1)

8 (12,9%)

2 (3,5%)

10 (8,4%)

Al límite o levemente (2)

16 (25,8%)

30 (52,6%)

46 (38,7%)

Moderada o marcadamente (3)

32 (51,6%)

24 (42,1%)

56 (47,1%)

Estado Clínico pre-tratamiento según el paciente Recodificado (ICG-G) **

Grave o extremadamente (4) 6 (9,7%)

1 (1,8%)

7 (5,9%)

χ2 (3)=12,387 p =0,006 V= 0,323

Estado Clínico pre-tto. Según el paciente (SCL-90).

Índice Global de Severidad (0-4)

M=1,53 Md=1,60 DT=0,71

M=1,49 Md=1,38 DT=0,66

M=1,51 Md=1,53 DT=0,68

t (123) = 0,367 p =0,714 R=-0,033

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

157

Total Síntomas Positivos (0-90)

M=56,72 Md=59,4 DT=18,01

55,82 Md=56 DT=16,8

56,29 Md=58,33 DT=17,38

t (123) = 0,290 p =0,772 R=-0,026

Índice Malestar Positivo (0-4)

2,29 Md=2,4 DT=0,64

2,30 Md=3,26 DT=0,55

2,30 Md=2,32 DT=0,60

t (123) =-0,102 p =0,919 R= 0.009

Trabajo (0-10)

5,65 DT=3,86

5,02 DT=3,60

5,34 DT=3,74

t (124)= 0,944 p =0,347 R=-0,084

Vida social (0-10)

5,83 DT=3,20

5,59 DT=2,83

5,71 DT=3,02

t (124)= 0,445 p =0,657 R=-0,040

Vida familiar (0-10) *

5,74 DT=2,90

4,70 DT=2,71

5,24 DT=2,84

t (124)= 2,063 p =0,041 R=-0,182

Estrés percibido (0-10)

6,24 DT=2,99

5,38 DT=3,33

5,87 DT=3,18

t (124)=1.706 p =0,09 R=-0,151

Apoyo social percibido (0-100%)

65,08 DT=28,4

62,38 DT=32,65

63,77 DT=30,44

t (124)=0,496 p =0,621 R=-0,045

Grado de discapacidad (SDI) pre-tratamiento según paciente

Discapacidad Global (0-30)

17,25 DT=7,88

15,34 DT=7,87

16,33 DT=7,9

t (124)=1,355 p =0,178 R=-0,121

No

25 (34,7%)

17 (23,6%)

42 (29,2%)

Toma psicofármacos pre-tratamiento (puntual))

47 (65,3%)

55 (76,4%)

102 (70,8%)

χ2 ( 1) = 2,151 p = 0,142 V= 0,122

Antidepresivos Puntual

28,32 DT=51,20

39,08 DT58,28

33,77 DT=54,97

t (140 )= -1,168 p =0,245 R=0,098

Psicofármacos pre (puntual)

Benzodiacepinas

0,33 DT=0,64

0,52 DT=1,29

0,43 DT=1,02

t (128)= -1,073 p = 0,285 R=0,094

Ordinaria

63 (87,5%)

63 (87,5%)

126 (87,5%)

Tipo de consulta.

Preferente 9 (12,5%)

9 (12,5%)

18 (12,5%)

χ2 (1) = 0 p = 1 V= 0

Problemas de relación social

1 (1,4%)

0 (0%)

1 (0,7%)

Problemas familiares

16 (22,2%)

8 (11,1%)

24 (16,7%)

Problemas laborales

7 (9,7%)

4 (5,6%)

11 (7,6%)

Aparición primeros síntomas de patología

23 (31,9%)

29 (40,3%)

52 (36,1%)

Motivo de consulta

Agravación o descompensación de sintomatología previa

22 (30,6%)

28 (38,9%)

50 (34,7%)

χ2 (5) =5,897 p =0,316 V=0,202

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

158

9. Solicitud de orientación, consejo, etc.

3 (4,2%)

3 (4,2%)

6 (4,2%)

Trastorno Depresivo

12 (16,7%)

7 (9,7%)

19 (13,2%)

Trastorno Adaptativo

32 (44,4%)

34 (47,2%)

66 (45,8%)

Trastorno Neurótico

22 (30,6%)

27 (37,5%)

49 (34%)

Diagnóstico reagrupado

Otros

6 (8,3%)

4 (5,6%)

10 (6,9%)

χ2 (3) = 2,287

p = 0,515 V= 0,126

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

159

Tabla 4. Descripción empírica de los tratamientos

Variable Valores Experimental N=72 nº Sujetos / %

Control N=72 nº / %

Resultados

análisis

Psicoterapia Breve

72

Programa Intervención

Tratamiento Habitual

72

Evaluación.

2 (2,8%)

9 (12,5%)

Farmacología

7 (9,7%)

45 (62,5%)

Cuidados de enfermería.

Seguimiento.

Pautas / orientación

Peritaje / Informes.

0 (0%)

4 (5,6%)

Psicoterapia

63 (87,5%)

14 (19,4%)

Intervención social

Otras.

Intervención acordada ** (Nº de casos en que la intervención acordada fue…)

Intervención acordada más frecuente (moda)

Mo=7

Mo=2

χ2 (3)=67,41 p =0,000 V=0,684

Nº de casos en que la intervención predominante fue Evaluación.

2 (2,9%)

5 (6,9%)

Nº de casos en que la intervención predominante fue Farmacológica . .

6 (8,7%)

42 (58,3%)

Nº de casos en que la intervención predominante fue Cuidados de enfermería.

0 (0%)

2 (2,8%)

Nº de casos en que la intervención predominante fue Seguimiento.

1 (1,4%)

7 (9,7%)

Nº de casos en que la intervención predominante fue Pautas / orientación.

1 (1,4%)

2 (2,8%)

Nº de casos en que la intervención predominante fue Peritaje / Informes.

0 (0%)

1 (1,4%)

Nº de casos en que la intervención predominante fue Psicoterapia individual. .

59 (85,5%)

13 (18,1%)

χ2 (6)= 65,47 p =0,000 V=0,681

Tipo de Intervención predominante ** (más frecuente)

Intervención más frecuente (Moda)

Psicoterapia individual

Farmacología

No

13 (18,1%)

56 (77,8%)

Psicoterapia ** (si recibió un mínimo de psicoterapia)

Sí (3 sesiones o alta en menos) 59 (81,9%)

16 (22,2%)

χ2 (1)= 51,45 p =0,000 V=0,598

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

160

No

28 (38,9%)

12 (16,9%)

Toma fármacos al inicio**

44 (61,1%)

59 (83,1%)

χ2 (1)=8,58 p =0,003 V=0,245

No

19 (76%)

9 (52,9%)

Comienza fármacos en CSM (solo de entre los que no tenían previamente fármacos 25/17 sujetos)

Sí ( no tenían fármacos previamente y se los han puesto después) Si psicólogo iniciaron tto el 7,4% de sujetos Si psiquiatra iniciaron tto el 80% sujetos

6 (24%)

8 (47,1%)

χ2 (1)= 2,421 p =0,120 V=0,240

Solo psicoterapia

26 (37,1%)

8 (11,9%)

Solo fármacos

2 (2,9%)

45 (67,2%)

Características tratamiento

Tto. Combinado

42 (60%)

14 (20,9%)

Antd1acp (antidepresivos tras 1ª consulta SM)

48,98

66.03 t (124)=-1,43

p =0,155 R=0,128

Bzn1acp (Benzodiacepinas)

0,43

0,53 t (124)=-0,608

p =0,544 R=0,055

Hipn1acp (Hipnóticos)

0,02

0,06

Anps1acp (neurolépticos)

0

0,76

Cantidad fármacos inicio

Cant1acp (cantidad otros psicofármacos)

14,75

0,76

No

35 (49,3%)

21 (30,4%)

Fármacos 6 meses *

Sí (puntual a los seis meses) 36 (50,7%)

48 (69,6%)

χ2 (1)=5,19 p =0,023 V=0,192

No

28 (38,9%)

12 (16,9%)

Toma fármaco durante tto **

Sí tomo fármacos durante algún momento del tratamiento

44 (61,1%)

59 (83,1%)

χ2 (1)= 8,578 p =0,003 V=0,245

Duración 3 años *

Duración tratamiento CSM hasta 3 años (días/meses) Meses= Días/30,4 días

M=213,64 (6,03 meses) Md=170 (5,59 meses) DT=223,23

M=327,24 (10,26 meses) Md=116,15 (3,82 meses) DT=405,01

t (110,49)= -2,084

p =0,039 R=0,172

No

8 (11,1%)

17 (23,6%)

Completa tto. *

64 (88,9%)

55 (76,4%)

χ2 (1)=3,92 p =0,048 V=0,165

Nº de interv. de evaluación.

M=1,04

M=0,82

Nº de interv. de farmacología **

M=1,15

M=3,70 t (98,16)=-4,73

p =0,000 R=0,384

Nº de cada Tipo de intervenciones

Nº de cuidados de enfermería.

0,61

0,32

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

161

Nº de interv. De seguimiento.

1,82

3,10

Nº de pautas / orientación.

1,04

0,81

Nº de peritajes / informes.

0,64

0

Nº sesiones psicoterapia individual

4,06

1,18

Nº ses. Psicoterapia familiar.

0,08

0,06

Nº ses. Psicoterapia grupo.

0,03

0

Nº ses. Psicoterapia pareja.

0,17

0

Nº total ses. Psicoterapia **

M=4,32

M=1,24 t (140,16)=6,53

p =0,000 R=-0,48

Nº de intervenciones sociales.

0,01

0,06

Intervenciones de Enfermería

1,72

0,92

Interv. Psicólogo Clínico

6,24

1,47

Intervenciones por Psiquiatra

2,43

7,43

Nº de Intervenciones por Rol profesional

Interv. Trabajadora Social

0

0

Nº total de interv. Hasta ser alta o abandono

9,51

9,82

Nº total de interv. Durante los 1ros. 6 meses

7,64

6,32

Nº total de interv. Durante los 2os 6 meses

1,47

1,65

Nº Total intervenciones

Nº total de inter. Durante el segundo año

0,49

1,85

Nº de sesiones de tratamiento en CSM a los 2 años *

M= 6,68 Md=4,50 Dt=4,13 Q25=4 Q50=5 Q75=9

M=5,29 Md=3,50 Dt=4,77 Q25=1 Q50=3,5 Q75=8

t (142)=2,035 p =0,044 R=-0,168

Nº sesiones tratamiento en CSM hasta los 3 años . .

M= 7 Md= 5,5 Dt=4,76 Q25=4 Q50=5 Q75=9

M=6,17 Md=3,5 Dt=6,48 Q25=1 Q50=3,5 Q75=8

t (130,4)=0,79 p =0,381 R=-0,074

Nº sesiones de tratamiento el tercer año*

M= 0,19 Md=0 Dt=1,134

M=0,88 Md=0 Dt=2,207

t (106)=-2,327 p =0,022 R=0,192

Nº sesiones con facultativo referente a los 2 años

M=5,94 Dt=3,09

M=4,89 Dt=4,27

t (129,6)=1,69 p =0,093

Sesiones

Nº sesiones con facultativo referente a los 3 años

M=6,24 Md=5 Dt=3,3,73

M=5,68 Md=3,50 Dt=5,66

t (123)=0,696 p =0,488 R=-0,058

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

162

Nº sesiones con otro facultativo a los 2 años*

0,66 (25%) Dt=1,36

0,24 (6%) Dt=1,11

t (134,6)=2,05 p =0,042

Nº sesiones con otro facultativo a los 3 años

M=0,76 Md=0 Dt=1,67

M=0,43 Md=0 Dt=1,74

t (142)=1,17 p =0,244

Nº sesiones de 30 minutos con facultativo (media)

1,58

3,18

Nº de sesiones de 45 minutos con facultativo (media)

5,37

2,03

Intervalo medio entre sesiones hasta 2 años) **

M= 33,92 Md=31,37 Dt=17,19

M=63,01 Md=56,15 Dt=39,69

t (67)=-4,99 p =0,000 R=0,446

Intervalo medio entre sesiones hasta los 3 años **

M= 34,29 Md=31,37 Dt=17,67

M= 63,47 Md=59 Dt=39,42

t (68,05)=-5,016 p =0,000 R=0,447

Nº sesiones con enfermería

0,06 (5,6% de los sujetos tuvieron al menos 1 sesión)

0,10 (11,1%)

Nº sesiones de grupo con enfermería

0,39

0,35

1. Psicólogo

55 (76,4%)

16 (22,2%)

Rol del terapeuta de referencia**

2. Psiquiatra

17 (23,6%)

56 (77,8%)

χ2 (1)= 42,26 p =0,000 V=0,542

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

163

Tabla 5: Comparación de los sujetos que completaron tratamiento y los que no

Variable Valores Grupo

Completadores nº Sujetos/ %

No

Completadores nº Sujetos/ %

Resultados

análisis

Psicoterapia Breve

64 (53,8%)

8 (32%)

Programa Intervención *

Tratamiento Habitual

55 (46,2%)

17 (68%)

χ2 (1) = 3,921 p = 0,048 V= 0,165

Trast. Depresivo

17(14,3%)

2 (8%)

Trast. Adaptativo

49 (41,2%)

17 (68%)

Trast. Neurótico

45 (47,8%)

4 (16%)

Diagnóstico reagrupado

Otros

8 (6,7%)

2 (8%)

χ2 (3) = 6,8 p = 0,079 V= 0,217

Alta

40 (33,6%)

0 (0%)

Abandono

14 (11,8%)

24 (96%)

Situación6meses **

Sigue

65 (54,6%)

1 (4%)

χ2 (2) = 75,505 p = 0,000 V= 0,724

Alta

62 (52,1%)

1 (4%)

Abandono

26 (21,8%)

24 (96%)

Situación12meses **

Sigue

31 (26,1%)

0 (0%)

χ2 (2) = 50,154 p = 0,000 V= 0,590

Alta

73(61,3%)

1 (4%)

Abandono

27 (22,7%)

24 (96%)

Sigue

18 (15,1%)

0 (0%)

Situación2 años **

Fallecimiento

1 (0,7%)

0

χ2 (3) = 48,563 p = 0,000 V=0,581

Alta

76 (63,9%)

1 (4%)

Abandono

27(22,7%)

24 (96%)

Sigue

15 (12,6%)

0 (0%)

Situación3años **

Fallecimiento

1 (0,7%)

0

χ2 (3) = 48,559 p = 0,000 V= 0,581

No

94 (92,2%)

21 (84%)

Retorno 2años

8 (7,8%)

4 (16%)

χ2 (1) = 1,156 p = 0,211 V= 0,111

No

92 (88,5%)

19 (76%)

Retorno 3años

12 (11,5%)

6 (24%)

χ2 (1) = 2.607 p = 0.106 V= 0.142

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

164

Nº de Consultas con MAP primer semestre *

M=1,91 DT= 2,230 (n=107)

M=1,269 DT= 1,269 (n=22 )

t (52)=-2,36 p =0,022

No

59 (55,1%)

18 (81,8%)

Más de una consulta con MAP primer semestre*

Sí 48 (44,9%)

4 (18,2%)

χ2 (1)= 5,398 p = 0,020 V= 0,205

Nº Consultas con MAP 2º semestre

M=0,81 DT= 1,60 n=106

M=0,73 DT= 1,27 n=22

t (126)=-0,22 p =0,82

No

90 (84,1%)

19 (86,4%)

Más de una consulta con MAP el 2º semestre

Sí 17 (15,9%)

3 (13,6%)

χ2 (1) = 0,071 p = 0,790 V= 0,023

Nº Consultas con MAP 2º año *

M=0,87 DT= 1,71 n=102

M=0,33 DT= 0,73 n=21

t (71,25)=-2,32 p =0,023

No

90 (84,1%)

20 (95,2%)

Másde1consMAP2año

17 (15,9%)

1 (4,8%)

χ2 (1) = 1,798 p = 0,180 V=0,119

Nº de Consultas con MAP durante tercer año

Media=0,60 D T= 1,4 n=102

Media=0,65 D T= 1,46 n=20

t (120)=0,15 p =0,88

No

93 (88,6%)

19 (90,5%)

Másde1consMAP3año

12 (11,4%)

2 (9,5%)

χ2 (1) = 0,064 p = 0,800 V= 0,023

No

77 (72,6%)

15 (68,2%)

Baja laboral primer semestre (baja1o6m) dicotomizada

29 (27,4%)

7 (31,8%)

χ2 (1) = 0,179 p = 0,672

V=0,37

No

96 (91,4%)

20 (90,9%)

Baja laboral segundo semestre dicotomizada

Sí 9 (8,6%)

2 (9,1%)

χ2 (1) = 0,006 p = 0,937 V=0,007

No

100 (95,2%)

21 (100%)

Baja laboral segundo año dicotomizada

Sí 5 (4%)

0 (0%)

χ2 (1) =1,041 p = 0,308 V=0,091

No

100 (98%)

19 (95%)

Baja laboral tercer año dicotomizada

Sí 2 (2%)

1 (5%)

χ2 (1) = 0,644 p = 0,422 V=0,073

No

63 (55,8%)

7 (31,8%)

Recuperación objetiva el primer año*

50 (44,2%)

15 (68,2%)

χ2 (1) = 4,225 p = 0,040 V=0,167

No

46 (41,8%)

4 (19%)

Recuperación objetiva el 2º año *

Sí 64 (58,2%)

17 (81%)

χ2 (1) = 3,874 p = 0,049 V=0,172

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

165

No

42 (38,5%)

2 (9,5%)

Recuperación objetiva el tercer año **

Sí 67 (61,5%)

19 (90,5%)

χ2 (1) = 6,617 p = 0,010 V=0,226

No de acuerdo

7 (9,7%)

3 (27,3%)

Satisfacción con el beneficio alcanzado

De acuerdo o muy de acuerdo

65 (90,3%)

8 (72,7%)

χ2 (1) = 2,774 p = 0,096 V=0,186

No satisfecho

8 (11%)

1 (9,1%)

Satisfacción con la ayuda recibida

Satisfecho o muy satisfecho

65 (89%)

10 (90,9%)

χ2 (1 )=0,035 p = 0,852 V=0,020

No satisfecho

10 (13,9%)

1 (9,1%)

Satisfacción con el servicio

Satisfecho o muy satisfecho

62 (86,1%)

10 (90,9%)

χ2 (1) = 0,191 p = 0,662 V=0,048

Mejora sustancial

26 (54,2%)

2 (40%)

Algo mejor

15 (31,3%)

1 (20%)

Sin cambios

3 (6,3%)

1 (20%)

ICG-C hasta el sexto mes

Peor

4 (8,3%)

1 (20%)

χ2 (3) = 2,150 p = 0,542 V=0,201

Mejora sustancial

28 (56%)

1 (100%)

Algo mejor

11 (22%)

0 (%)

Sin cambios

8 (16%)

0 (%)

ICG-C al año

Peor

3 (6%)

0 (%)

χ2 (3) = 0,774 p = 0,856 V=0,123

Mejora sustancial

22 (66,7%)

0 (%)

Algo mejor

2 (6,1%)

0 (%)

Sin cambios

5 (15,2%)

0 (%)

ICG-C a los dos años

Peor

4 (12,1%)

1 (100%)

χ2 (3) =5,976 p = 0,113 V=0,419

Mejora sustancial

42 (63,6%)

2 (40%)

Algo mejor

12 (18,2%)

0 (0%)

Sin cambios

6 (9,1%)

1 (20%)

Ultimo ICG-C disponible

Peor

6 (9,1%)

2 (40%)

χ2 (3) =5,830 p = 0,120 V=0,287

IGS hasta el sexto mes

M=1,28 DT= 0,79 n=50

M=1,42 D T= 0,75 n=6

t (54)=0,39 p =0,70

IGS al año

M=1,2 DT= 0,75 n=49

M= DT= n=0

No hay casos

suficientes (ncs) IGS a los 2 años

M=1,12 DT= 0,74 n=31

M=3,18 DeT= n=1

(ncs)

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

166

Hasta los 6 meses

M=13,42 DT= 9,59 n=38

M=11,75 DT= 14,57 n=4

t (40)=-0,37 p =0,75

Al año

M=12,07 DT= 11,04 n=29

M= DT= n=0

(ncs)

Grado de discapacidad Global (SDI)

A los dos años

M=15,55 DT= 11,04 n=29

M=30 DT= n=1

(ncs)

No

32 (27,1%)

8 (32%)

Toma fármacos inicio

Sí 86 (72,9%)

17 (68%)

χ2 (1) =0,244 p = 0,621 V=0,041

Cantidad antidepresivos al inicio

M=59,05 DT= 64,79 n=106

M=51,87 D T= 79,29 n=20

t (124)=-0,44 p =0,66

Cantidad benzodiacepinas al inicio

M=0,52 DT= 0,94 n=106

M=0,28 DT= 0,50 n=20

t (124 )=-1,11 p =0,27

No

42 (35,6%)

14 (63,6%)

Toma fármacos 6meses *

76 (64,4%)

8 (36,4%)

χ2 (1) = 6,076 p = 0,014 V=0,208

Cantidad antidepresivos a los 6 meses**

M=65,34 DT= 72,87 n=112

M=14,37 DT= 35,65 n=20

t (52,9)=-4,84 p =0,000

Cantidad benzodiacepinas a los 6 meses**

M=0,77 D T= 1,38 n=112

M=0,07 DT= 0,23 n=20

t (130)=-4,96 p =0,000

No

63 (54,3%)

18 (81,8%)

Toma fármacos 1 año *

53 (45,7%)

4 (18,2%)

χ2 (1) = 5,772 p = 0,016 V=0,205

Cantidad antidepresivos al año **

M=41,59 DT= 65,28 n=106

M=5 DeT=22,36 n=20

t (88)=-4,53 p =0,000

Cantidad benzodiacepinas al año **

M=0,44 DT= 0,92 n=106

M=0,1 DT= 0,30 n=20

t (91,28)=-3,03 p =0,003

No

73 (65,2%)

17 (85%)

Toma fármacos 2 años

39 (34,8%)

3 (15%)

χ2 (1) = 3,073 p = 0,080 V=0,153

Cantidad antidepresivos a los 2 años**

M=35,27 DT= 66,57 n=104

M=5 DT=22,36 n=20

t (90,48)=-3,68 p =0,000

Cantidad benzodiacepinas a los 2 años *

M=0,35 DT= 1,01 n=104

M=0,08 DT= 0,26 n=20

t (113)=-2,27 p =0,025

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

167

No

64 (66,7%)

17 (94,4%)

Toma fármacos 3 años *

32 (33,3%)

1 (5,6%)

χ2 (1) = 5,686 p = 0,017 V= 0,223

Cantidad antidepresivos a los 3 años **

M=28,27 DT= 60,67 n=92

M=5,55 DT= 23,57 n=18

t (68,22)=-2,70 p =0,009

Cantidad benzodiacepinas a los 3 años **

M=0,28 DT= 0,88 n=92

M=0 DT=0 n=18

t (91 )=-3,12 p =0,002

Duración **

M=311,82 DT= 340 n=119

M=23,68 DT= 48,48 n=25

t (135,67)=-8,82 p =0,000

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

168

Tabla 6. Comparación entre-grupos de resultados a los 6 meses

Variable Valores Experimental

Control

Total

Resultados

de análisis

VARIABLES CLINICO-ADMINISTRATIVAS

Alta

23 (31,9%)

18 (25 %)

41 (28,5%)

Abandono

16 (22,2%)

22 (30,6%)

38 (26,4%)

Situación a los 6 meses

Sigue

33 (45,8%)

32 (44,4%)

65 (45,1%)

χ2 (2)=1,408 p =0,495 V=0,099

No

49 (68,1%)

54 (75%)

103 (71,5%)

Altas a los 6 meses

Sí 23 (31,9%)

18 (25 %)

41 (28,5%)

χ2 (1)=0,85 p =0,356 V=0,077

No

56 (77,8%)

50 (69,4%)

106 (73,6%)

Abandonos a los 6 meses

Sí 16 (22,2%)

22 (30,6%)

38 (26,4%)

χ2 (1)=1,129 p =0,257 V=0,098

No

39 (54,2%)

40 (55,6%)

79 (54,9%)

Siguen a tratamiento a los 6 meses

33 (45,8%)

32 (44,4%)

65 (45,1%)

χ2 (1)=0,028 p =0,867 V=0,014

Consultas con MAP el primer semestre

Consultas con MAP 1ºsemestre por problemas de salud mental

M=1,82 (62,3% al menos una entrevista con MAP) DT=2,40

M=1,72 (70,6% al menos una entrevista con MAP) DT=1,83

M=1,77 (66,7%) t (127)=0,265

p =0,792 R=-0,023

No

36 (59%)

41 (60,3%)

77 (59,7%)

Más de una consulta con MAP el primer semestre.

25 (41%)

27 (39,7%)

52 (40,3%)

χ2 (1)=0,022 p =0,889 V=0,013

Días de baja los primeros 6 meses desde el inicio del tratamiento

M=28,95 DT=59,80

M=14,99 DT=37,83

M=21,53 t (97,34)=1,55

p =0,113 R=-0,141

Días de ILT el primer semestre

18 (30%)

18 (26,5%)

36 (28,1%) χ2 (1)=0,196

p =0,658 V=0,039

VARIABLES PSICOMÉTRICAS

Participantes en seguimiento a los 6 meses

Participación en seguimiento a los 6 meses

29 (40,3%)

28 (38,9%)

57 (39,6%) χ2 (1)=0,029

p =0,865 V=0,014

No evaluado

Mucho mejor

7 (25,9%)

8 (30,8%)

15 (28,3%)

Bastante mejor

6 (22,2%)

7 (26,9%)

13 (24,5%)

Algo mejor

8 (29,6%)

8 (30,8%)

16 (30,2%)

Escala Cambio ICG de paciente el primer semestre N=53 (27/26)

Sin cambios

1 (3,7%)

3 (11,5%)

4 (7,5%)

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

169

Algo peor

3 (11,1%)

0 (0%)

3 (5,7%)

Bastante peor

2 (7,4%)

0 (0%)

2 (3,8%)

Mucho Peor

0 (%)

(%)

(%)

Media y Mediana de los evaluados

M=2,74 Md=2,50

M=2,23 Md=2,20

M=2,49 Md=2,34

Estado más frecuente (Moda)

Mo= 3

Mo= 1 y 3

Mo=3

Mejora sustancial

13 (48,1%)

15 (57,7%)

28 (52,8%)

Algo mejor 8 (29,6%)

8 (30,8%)

16 (30,2%)

Sin cambios

1 (3,7%)

3 (11,5%)

4 (7,5%)

ICG-C el primer semestre reagrupado

Peor *

5 (18,5%)

0 (0%) 5 (9,4%)

χ2(1)= 5,36 p =0,021 V=0,317

χ2 (3)=6,13 p =0,106 V=0,34

Índice Global de Severidad (0-4) *

M=1,55 DT=0,86

M=1,03 DT=0,58

M=1,30 t (49,5)=2,68

p =0,011 R=-0,339

Total Síntomas Positivos (0-90)

M=54,18 DT=20,81

M=44,93 DT=17,30

M=49,64 t (53)=1,79

p =0,079 R=-0,239

SCL-90 el primer semestre N=56 (29/27)

Índice Malestar Positivo (0-4)

M=2,23 DT=0,72

M=1,90 DT=0,49

M=2,07 t (54)=1,99

p =0,052 R=-0,261

Discapacidad Trabajo (0-10)

M=4,33 DT=4,3

M=3,44 DT=3,31

M=3,95 t (40)=0,29

p =0,47 R=-0,114

Discapacidad Vida social (0-10)

M=4,21 DT=3,99

M=5,56 DT=3,47

M=4,79 t (40)=-1,14

p =0,259 R=0,178

Discapacidad Vida familiar (0-10)

M=4,63 DT=3,66

M=4,39 DT=3,87

M=4,52 t (40)=0,202

p =0,841 R=-0,032

Estrés percibido (0-10)

M=4,79 DT=3,56

M=5,22 DT=3,44

M=4,98 t (40)=-0,393

p =0,696 R=0,062

Apoyo social percibido (0-100%)

M=58,75 DT=38,37

M=48,33 DT=42,46

M=54,29 t (40)=0,832

p =0,41 R=-0,130

SDI el primer semestre N=42 (24/18)

Discapacidad Global (0-30)

M=13,17 DT=10,61

M=13,39 DT=9,27

M=13,26 t (40)=-0,071

p =0,944 R=0,011

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

170

VARIABLES PSICOFARMACOLÓGICAS

No

35 (49,3%)

21 (30,4%)

56 (40%)

Toma fármacos a los 6 meses *

Sí 36 (50,7%)

48 (69,6%)

84 (60%)

χ2 (1)=5,18 p =0,023 V=0,192

Antidepresivos

M=52,15 DT= 65,75

M=63,08 DT=75,73

M=57,62 t (130)=-0,886

p =0,377 R=0,077

Benzodiacepinas

M=0,59 DT=1,16

M=0,74 DT=1,43

M=0,66 t (130)=-0,66

p =0,51 R=0,058

Hipnóticos

M=0,053

M=0,1

M=0,07

Neurolépticos

M=0,30

M=1,51

M=0,91

Cantidad Psicofármacos a los 6 meses

Otros psicofármacos

M=2,20

M=16,42

M=9,26

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

171

Tabla 7. Comparación entre-grupos de resultados al año

Variable Valores Experimental

Control

Total

Resultados

de análisis

VARIABLES CLINICO-ADMINISTRATIVAS

Alta

39 (54,2%)

24 (33,3%)

63 (43,8%)

Abandono

24 (33,3%)

26 (36,1%)

50 (34,7%)

Sigue

9 (12,5%)

22 (30,6%)

31 (21,5%)

χ2 (2)= 9,103 p =0,011 V=0,251

Cambio de CSM 0 0 0 Fallecimiento 0 0 0 Derivación 0 0 0

Situación al año *

Cambio terapeuta 0 0 0

No

33 (45,8%)

48 (66,7%)

81 (56,3%)

Altas al año *

39 (54,2%)

24 (33,3%)

63 (43,8%)

χ2 (1)=6,35 p =0,012 V=0,210

No

48 (66,7%)

46 (63,9%)

94 (65,3%)

Abandonos al año

Sí 24 (33,3%)

26 (36,1%)

50 (34,7%)

χ2 (1)=0,123 p =0,726 V=0,029

No

63 (87,5%)

50 (69,4%)

113 (78,5%)

Sigue a tratamiento al 1año **

9 (12,5%)

22 (30,6%)

31 (21,5%)

χ2 (1)=6,95 p =0,008 V=0,220

No (solo altas y abandonos del primer año)

61 (96,83%)

47 (94%)

108 (95,3%)

Retornos el primer año

Sí 2 (3,17%)

3 (6%)

5 (4,42%)

χ2 (1)=0,431 p =0,512 V=0,058

Consultas con MAP el 2º semestre

Consultas con MAP 2ºsemestre por problemas de salud mental

M=0,78 DT=1,66

M=0,81 DT=1,58

M=0,80 t (126)=-0,89

p =0,929 R=0,008

No

53 (86,9%)

56 (82,4%)

109 (84,5%)

Más de un consulta con MAP el 2ºsemestre

8 (13,1%)

12 (17,6%)

20 (15,5%)

χ2 (1)=0,504 p =0,478 V=0,063

Días de baja el segundo semestre desde el inicio del tratamiento

11,80 DT=34,89

2,91 DT=19,35

7,04 t (87,67)=1,74

p =0,086 R=-0,159

Días de ILT 2º semestre

Sí *

9 (15,3%)

2 (2,9%)

11 (8,7%) χ2 (1)=6,05

p =0,014 V=0,218

No

31 (47,7%)

39 (55,7%)

70 (51,9%)

Recuperación objetiva al año

Sí 34 (52,3%)

31 (44,3%)

65 (48,1%)

χ2 (1)=0,87 p =0,351 V=0,080

VARIABLES PSICOMÉTRICAS

Participan en el seguimiento al año

Participación en seguimiento a los 12 meses

31 (43,1%)

25 (34,7%)

56 (38,9%) χ2 (1)=1,05

p =0,305 V=0,085

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

172

No evaluado

Mucho mejor

5 (18,5%)

7 (29,2%)

12 (23,5%)

Bastante mejor

10 (37%)

7 (29,2%)

17 (33,3%)

Algo mejor

7 (25,9%)

4 (16,7%)

11 (21,6%)

Sin cambios

3 (11,1%)

5 (20,8%)

8 (15,7%)

Algo peor

1 (3,7%)

1 (4,2%)

2 (3,9%)

Bastante peor

1 (3,7%)

0 (0%)

1 (2%)

Mucho Peor

0 (%)

0 (%)

0 (%)

Media y Mediana (sin contar los no evaluados=0)

M=2,56 Md=2,41

M=2,42 Md=2,27

M=2,49 Md=2,36

Escala Cambio ICG-C el 2º semestre N=51 (27/24)

Estado más frecuente (Moda)

Mo= 2

Mo= 1 y 2

Mo= 2

Mejora sustancial

15 (55,6%)

14 (58,3%)

29 (56,9%)

Algo mejor

7 (25,9%)

4 (16,7%)

11 (21,6%)

Sin cambios

3 (11,1%)

5 (20,8%)

8 (15,7%)

ICG-C el 2º semestre reagrupado

Peor

2 (7,4%)

1 (4,2%)

3 (5,9%)

χ2 (3)=1,51 p =0,679 V=0,172

Índice Global de Severidad (0-4)

M=1,30 DT=0,87

M=1,08 DT=0,59

M=1,20 t (45,53)=1,07

p =0,289 R=-0,149

Total Síntomas Positivos (0-90)

M=50,90 DT=21,75

M=46,73 DT=18,66

M=49,13 t (50)=0,725

p =0,472 R=-0,102

SCL-90 el segundo semestre N=52 (30/22)

Índice Malestar Positivo (0-4)

M=2,01 DT=0,65

M=2 DT=0,61

M=2 t (50)=0,075

p =0,941 R=-0,011

Discapacidad Trabajo (0-10)

M=3,56 DT=3,73

M=4,56 DT=3,82

M=3,98 t (41)=-0,854

p =0,398 R=0,132

Discapacidad Vida social (0-10)

M=4,28 DT=3,28

M=4,83 DT=3,31

M=4,51 t (41)=-0,543

p =0,590 R=0,085

Discapacidad Vida familiar (0-10)

M=3,88 DT=3,71

M=3,17 DT=3,45

M=3,58 t (41)=0,640

p =0,526 R=-0,099

Estrés percibido (0-10)

M=5,44 DT=3,12

M=4,89 DT=2,59

M=5,21 t (41)=0,612

p =0,544 R=-0,095

SDI el 2º semestre N=43 (25/18)

Apoyo social percibido (0-100%)

M=61,80 DT=35,73

M=54,44 DT=43,95

M=58,72 t (41)=0,605

p =0,549 R=-0,094

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

173

Discapacidad Global (0-30)

M=11,72 DT=9,37

M=12,56 DT=9,74

M=12,07 t (41)=-0,284

p =0,778 R=0,044

VARIABLES PSICOFARMACOLÓGICAS

No

48 (70,6%)

33 (47,1%)

81 (58,7%)

Toma fármacos a los 12 meses **

Sí 20 (29,4%)

37 (52,9%)

57 (41,3%)

χ2 (1)=7,82 p =0,005 V=0,238

Antidepresivos

M=27,53 DT=53,78

M=43,28 DT=68,06

M=35,78 t (124)=-1,432

p =0,155 R=0,128

Benzodiacepinas

M=0,28 DT=0,78

M=0,48 DT=0,94

M=0,39 t (124)=-1,29

p =0,200 R=0,115

Hipnóticos

M=0,02

M=0,07

M=0,04

Neurolépticos

M=0,33

M=0,76

M=0,55

Cantidad de Psicofármacos a los 12 meses

Otros psicofármacos

M=25,11 (3suj)

M=0

M=13,11

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

174

Tabla 8. Comparación entre-grupos de resultados a los 2 años

Variable Valores Experimental

Control

Total

Resultados

de análisis

VARIABLES CLINICO-ADMINISTRATIVAS

Alta

45 (62,5%)

29 (40,3%)

74 (51,4%)

Abandono

24 (33,3%)

27 (37,5%)

51 (35,4%)

Sigue

3 (4,2%)

15 (20,8%)

18 (12,5%)

Cambio de CSM

0

0

0

Fallecimiento

0 (0%)

1 (1,4%)

1 (0,7%)

Derivación

0

0

0

Situación a los 2 años **

Cambio terapeuta

1 (1,4%)

0 (0%)

1 (0,7%)

χ2 (3)=12,636 p =0,005 V=0,296

No

27 (37,5%)

43 (59,7%)

70 (48,6%)

Altas a los 2 años **

Si 45 (62,5%)

29 (40,3%)

74 (51,4%)

χ2 (1)=7,11 p =0,008 V=0,222

No

48 (66,7%)

45 (62,5%)

93 (64,6%)

Abandonos a los 2 años

Sí 24 (33,3%)

27 (37,5%)

51 (35,4%)

χ2 (1)=0,273 p =0,601 V=0,044

Siguen a tratamiento a los

No

69 (95,8%)

57 (79,2%)

126 (87,5%) χ2 (1)=9,143

p =0,002 Sí

3 (4,2%)

15 (20,8%)

18 (12,5%)

No (solo las altas y bajas )

63 (91,3%)

57 (98,3%)

120 (94,5%)

Retornos el segundo año

Sí 6 (8,7%)

1 (1,7%)

7 (5,5%)

χ2 (1)=2,941 p =0,0,086

V=0,152 No

61 (88,4%)

54 (93,1%)

115 (90,6%)

Retorno a los 2 años Si

Nº retornos 8 (11,6%)

4 (6,9%)

12 (9,4%)

χ2 (1)=0,813 p =0,367 V=0,080

Consultas con MAP el 2º año

Consultas con MAP 2º año por problemas de salud mental

M=0,5 DT=1,20

M=1,03 DT=1,87

M=0,78 t (113,8)=-1,92

p =0,057 R=0,166

No

57 (93,4%)

53 (79,1%)

110 (85,9%)

Más de una consulta con MAP el 2º año *

4 (6,6%)

14 (20,9%)

18 (14,1%)

χ2 (1)=5,43 p =0,020 V=0,206

Días de baja durante el segundo año de tratamiento

5,2 DT=20,63

0,33 DT=2,69

2,61 t (59,73)=1,802

p =0,077 R=-0,170

Días de ILT el 2º año

4 (6,8%)

1 (1,5%)

5 (4%) χ2 (1)=2,301

p =0,129 V=0,135

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

175

No

15 (24,2%)

35 (50,7%)

50 (38,2%)

Recuperación objetiva a los 2 años **

47 (75,8%)

34 (49,3%)

81 (61,8%)

χ2 (1)=9,74 p =0,002 V=0,273

VARIABLES PSICOMÉTRICAS

Participantes en los seguimientos el 2º año

Participación en seguimiento el segundo año

21 (29,2%)

15 (20,8%)

36 (25%) χ2 (1)=1,33

p =0,248 V=0,096

No evaluado

Mucho mejor

9 (47,4%)

2 (13,3%)

11 (32,4%)

Bastante mejor

6 (31,6%)

5 (33,3%)

11 (32,4%)

Algo mejor

0 (0%)

2 (13,3%)

2 (5,9%)

Sin cambios

3 (15,8%)

2 (13,3%)

5 (14,7%)

Algo peor

1 (5,3%)

2 (13,3%)

3 (8,8%)

Bastante peor

0 (0%)

0 (0%)

0 (0%)

Mucho Peor

0 (0%)

2 (13,3%)

2 (5,9%)

Media y Mediana (sin contar los no evaluados=0)

M=2 Md=1,67

M=3,33 Md=2,86

M=2,59 Md=2,08

Escala Cambio ICG-C el 2º año N=34 (19/15)

Estado más frecuente (Moda)

Mo=1 y 2

Mo=2

Mo=2

Mejora sustancial

15 (78,9%)

7 (46,7%)

22 (64,7%)

χ2

(1)=3,825 p =0,051 V=

Algo mejor 0 (0%)

2 (13,3%)

2 (5,9%)

Sin cambios

3 (15,8%)

2 (13,3%)

5 (14,7%)

ICG-C el 2º año reagrupado

Sustancialmente peor

1 (5,3%)

4 (26,7%)

5 (14,7%)

χ2

(1)=3,061 p =0,080 V=0,300

χ2 (3)=6,529 p =0,089 V=0,438

Índice Global de Severidad (0-4)

M=1,16 DT=0,84

M=1,23 DT=0,82

M=1,19

t (30)=-2,262 p =0,795 R=0,048

Total Síntomas Positivos (0-90)

43,67 DT=20,81

44,43 DT=21,4

44 t (30)=,0,101

p =0,920 R=0,019

SCL-90 el 2º año N=32 (18/14)

Índice Malestar Positivo (0-4)

M=1,91 DT=0,75

M=2,24 DT=0,71

M=2,06 t (30)=-1,279

p =0,211 R=0,227

SDI el 2º año N=30 (15/15)

Discapacidad Trabajo (0-10)

M=3,13 DT=3,74

M=5,47 DT=4,39

M=4,30 t (28)=-1,567

p =0,128 R=0,284

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

176

Discapacidad Vida social (0-10)

M=3,53 DT=3,66

M=5,27 DT=3,99

M=4,40 t (28)=-1,24

p =0,225 R=0,228

Discapacidad Vida familiar (0-10)

M=3,53 DT=3,66

M=5,07 DT=3,94

M=4,30 t (28)=-1,105

p =0,279 R=0,204

Estrés percibido (0-10)

M=3,73 DT=3,41

M=4,80 DT=3,65

M=4,27 t (28)=-0,827

p =0,415 R=0,154

Apoyo social percibido (0-100%)

M=62,33 DT=40,57

M=80,67 DT=24,63

M=71,50 t (28)=-1,496

p =0,146 R=0,272

Discapacidad Global (0-30)

10,47 DT=10,08

15,80 DT=12,17

13,13 t (28)=-1,307

p =0,202 R=0,40

VARIABLES PSICOFARMACOLÓGICAS

No

53 (82,8%)

37 (54,4%)

90 (68,2%)

Toma fármacos a los dos años **

Sí 11 (17,2%)

31 (45,6%)

42 (31,8%)

χ2 (1)=12,258 p =0,000 V=0,305

Antidepresivos

M=21,12 DT=57,55

M=38,53 DT=66,01

M=30,39 t (121,99)=-

1,569 p =0,119 R=0,139

Benzodiacepinas

M=0,15 DT=0,68

M=0,44 DT=1,11

M=0,30 t (109,51)=-

1,81 p =0,073 R=0,157

Hipnóticos

M=0,02 (1suj)

M=0,07

M=0,4

Neurolépticos

M=0,43 (1suj)

M=2,10

M=1,32

Cantidad Psicofármacos a los 2 años

Otros psicofármacos

M=20,96 (3suj)

M=3,78

M=11,82

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

177

Tabla 9. Comparación entre-grupos de resultados a los 3 años

Variable Valores Experimental

Control

Total

Resultados

de análisis

VARIABLES CLINICO-ADMINISTRATIVAS

Alta

45 (62,5%)

32 (44,4%)

77 (53,5%)

Abandono

24 (33,3%)

27 (37,5%)

51 (35,4%)

Sigue

3 (4,2%)

12 (16,7%)

15 (10,4%)

Cambio de CSM

0

0

0

Fallecimiento

0 (0%)

1 (1,4%)

1 (0,7%)

Derivación

0

0

0

Situación a los 3 años *

Cambio terapeuta

0

0

0

χ2 (3)=8,771 p =0,032 V=0,247

No

27 (37,5%)

40 (55,6%)

67 (46,5%)

Altas a los 3 años *

Sí 45 (62,5%)

32 (44,4%)

77 (53,5%)

χ2 (1)=4,717 p =0,030 V=0,181

No

47 (67,1%)

45 (62,5%)

92 (64,8%)

Abandono3años

24 (33,3%)

27 (37,5%)

51 (35,4%)

χ2 (1)=0,335 p =0,563 V=0,049

No

67 (95,7%)

60 (83,3%)

127(89,4%)

Siguen a tratamiento a los 3 años *

3 (4,2%)

12 (16,7%)

15 (10,4%)

χ2 (1)=5,759 p =0,016 V=0,201

No (solo las altas y bajas)

67(97,1%)

57 (93,4%)

124(95,3%)

Retornos el tercer año

Sí 2 (2,9%)

4 (6,6%)

6(4,7%)

χ2 (1)=948 p =0,330 V=0,086

No

58 (85,3%)

53 (86,9%)

111(86%)

Si Nº de sujetos que retornaron

10 (14,7%)

8 (13,1%)

18 (14%)

χ2 (1)=0,068 p =0,795 V=0,023

Tiempo desde el alta al retorno

M=14,30 DT=7,75

M=18,86 DT=9,94

M=16,18 t (15)=-1,064

p =0,304 R=0,265

Sesiones facultativo

2,40 DT=1,52

5,67 DT=5,35

4,18 t (5,94)=-1,427

p =0,204 R=0,40

Retornos a los 3 años

Sesiones enfermería

0,83

0

0,45

Consultas con MAP el tercer año

Consultas con MAP el tercer año por problemas de salud mental

0,44 DT=1,16

0,75 DT=1,58

0,61 t (120)=-1,239

p =0,218 R=0,112

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

178

No

56 (91,8%)

56 (86,2%)

112 (88,9%)

Más de una consulta con MAP el tercer año

5 (8,2%)

9 (13,8%)

14 (11,1%)

χ2 (1)=1,017 p =0,313 V=0,090

Días de baja durante tercer año

M=1,29 DT=9,57

M=1,17 DT=8,42

M=1,23 t (117)=0,072

p =0,943 R=-0,003

Días de ILT el tercer año

1 (1,8%)

2 (3,1%)

3 (2,5%) χ2 (1)=0,206

p =0,650 V=0,042

No

13 (20,6%)

31 (46,3%)

44 (33,8%)

Recuperación objetiva a los 3 años **

50 (79,4%)

36 (53,7%)

86 (66,2%)

χ2 (1)=9,529 p =0,002 V=0,271

VARIABLES PSICOFARMACOLÓGICAS

No

43 (82,7%)

38 (61,3%)

81 (71,1%)

Toma fármacos a los tres años *

Sí 9 (17,3%)

24 (38,7%)

33 (28,9%)

χ2 (1)=6,298 p =0,012 V=0,235

Antidepresivos

M=19,9 DT=47,04

M=28,29 DT=63,68

M=24,55 t (108)=-0,769

p =0,444 R=0,074

Benzodiacepinas

M=0,12 DT=0,72

M=0,33 DT=0,87

M=0,24 t (107,83)=-

1,355 p =0,187 R=0,127

Hipnóticos

M=0,02

M=0,04

M=0.03

Neurolépticos

M=0

M=2.28

M=1.26

Cantidad de Psicofármacos a los 3 años

Otros psicofármacos

M=17,16

M=3,28

M=9,46

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

179

Tabla 10. Comparación entre-grupos de resultados al final del tratamiento

Variable Valores Experimental

Control

Total

Resultados

de análisis

VARIABLES CLINICO-ADMINISTRATIVAS

Alta

45 (62,5%)

32 (44,4%)

77 (53,5%)

Abandono

24 (33,3%)

27 (37,5%)

51 (35,4%)

Sigue

3 (4,2%)

12 (16,7%)

15 (10,4%)

Cambio de CSM

0

0

0

Fallecimiento

0 (0%)

1 (1,4%)

1 (0,7%)

Derivación

0

0

0

Situación a los 3 años *

Cambio terapeuta

0

0

0

χ2 (3)=8,771 p =0,032 V=0,247

No

27 (37,5%)

40 (55,6%)

67 (46,5%)

Altas a los 3 años *

Sí 45 (62,5%)

32 (44,4%)

77 (53,5%)

χ2 (1)=4,717 p =0,030 V=0,181

No

47 (67,1%)

45 (62,5%)

92 (64,8%)

Abandonos a los 3 años

Sí 24 (33,3%)

27 (37,5%)

51 (35,4%)

χ2 (1)=0,335 p =0,563 V=0,049

No

67 (95,7%)

60 (83,3%)

127(89,4%)

Siguen a tratamiento a los 3 años *

3 (4,2%)

12 (16,7%)

15 (10,4%)

χ2 (1)=5,759 p =0,016 V=0,201

No

58 (85,3%)

53 (86,9%)

111(86%)

Si Nº retornos

10 (14,7%)

8 (13,1%)

18 (14%)

χ2 (1)=0,068 p =0,795 V=0,023

Tiempo desde alta

M=14,30 DT=7,75

M=18,86 DT=9,94

M=16,18 t (15)=-1,064

p =0,304 R=0,265

Sesiones facultativo

M=2,40 DT=1,52

M=5,67 DT=5,35

M=4,18 t (5,94)=-1,427

p =0,204 R=0,40

Retornos en los 3 años

Sesiones enfermería

M=0,83

M=0

M=0,45

Nº total de consultas con MAP

Nº de Consultas con MAP por problemas de salud mental durante los 3 años

M=3,53 Md=2,27 DT=4,11

M=4,31 Md=2,64 DT=4,51

M=3,94 Md=2,45 DT=4,33

t (125)=-1,014 p =0,313

No

25 (41,7%)

27 (40,3%)

52(88,9%)

Más de una consulta con MAP en tres años

35(58,3%)

40 (59,7%)

72 (11,1%)

χ2 (1)=0,25 p =0,876 V=0,014

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

180

Días de baja durante el tercer año

M=1,29 DT=9,57

M=1,17 DT=8,42

M=1,23 t (117)=0,072

p =0,943 R=-0,003

Días de ILT el tercer año

1 (1,8%)

2 (3,1%)

3 (2,5%) χ2 (1)=0,206

p =0,650 V=0,042

No

13 (20,6%)

31 (46,3%)

44 (33,8%)

Recuperación objetiva a los 3 años **

50 (79,4%)

36 (53,7%)

86 (66,2%)

χ2 (1)=9,529 p =0,002 V=0,271

VARIABLES PSICOFARMACOLÓGICAS

No

43 (82,7%)

38 (61,3%)

81 (71,1%)

Toma fármacos a los tres años *

Sí 9 (17,3%)

24 (38,7%)

33 (28,9%)

χ2 (1)=6,298 p =0,012 V=0,235

Antidepresivos

M=19,9 DT=47,04

M=28,29 DT=63,68

M=24,55 t (108)=-0,769

p =0,444 R=0,074

Benzodiacepinas

M=0,12 DT=0,72

M=0,33 DT=0,87

M=0,24 t (107,83)=-

1,355 p =0,187 R=0,127

Hipnóticos

M=0,02

M=0,04

M=0.03

Neurolépticos

M=0

M=2.28

M=1.26

Cantidad Psicofármacos a los 3años

Otros psicofármacos

M=17,16

M=3,28

M=9,46

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

181

Tabla 11. Análisis de resultados de las Altas de ambos grupos Periodo Variable / Valores Experimental

Control

Total

Resultados

de análisis N= 77 (45/32)

N=45

N=32

N=77

Mucho mejor

4 (28,6%)

0 (%)

4 (23,5%)

Bastante mejor

4 (28,6%)

0 (%)

4 (23,5%)

Algo mejor

3 (21,4%)

3 (100%)

6 (35,3%)

Sin cambios

3 (21,4%)

0 (%)

3 (17,6%)

Algo peor

0 (%)

0 (%)

0 (%)

Bastante peor

0 (%)

0 (%)

0 (%)

Estado Clínico pos-tratamiento de los sujetos al alta (ICG-C). N=17 seguimientos psicométricos (14/3)

Mucho Peor

0 (%)

0 (%)

0 (%)

Mucho mejor o bastante mejor

20 (69%)

8 (53,3%)

28 (63,3%)

χ2 (1)=1,04 p= 0,307 V=0,154

Algo mejor

4 (13,8%)

3 (20%)

7 (15,9%)

χ2 (1)=0,285 p= 0,594 V=0,080

Sin cambios 4 (13,8%)

1(6,7%)

5 (11,4%)

χ2 (1)=0,498 p= 0,480 V=0,106

Estado Clínico pos-tratamiento de las altas tomando como referente el último ICG-C recogido (reagrupado). N=44 (29/15)

Peor

1 (3,4%)

3 (20%)

4 (9,1%)

χ2 (1)=3,277 p= 0,070 V=0,273

χ2 (3)=4,04 p= 0,257 V=0,303

Índice Global de Severidad (0-4)

M=1,43 Dt=0,91

M=1,35 Dt=0,63

M=1,41

Total Síntomas Positivos (0-90)

M=51,07 Dt=22,09

M=51,67 Dt=9,07

M=51,18

Estado Clínico pos-tratamiento al alta (SCL-90-R) N=17 (14/3)

Índice Malestar Positivo (0-4)

M=2,25 Dt=0,72

M=2,26 Dt=0,72

M=2,25

Índice Global de Severidad (0-4)

M=1,17 Dt=0,85

M=0,93 Dt=0,72

M=1,07 t (43)=0,947

p =0,349 R=-0,162

Al mes del alta

Último SCL-90 recogido de los sujetos que fueron alta. N=45 (27/18)

Total Síntomas Positivos (0-90)

M=49 Dt=22,56

M=37,53 Dt=19,41

4M=4,36 t (46)=1,915

p =0,062 R=-0,272

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

182

Índice Malestar Positivo (0-4)

M=2 Dt=0,69

M=1,84 Dt=0,68

M=1,94 t (47)=0,98

p =0,332 R=-0,142

Discapacidad Trabajo (0-10)

M=4 Dt=4,53

M=3,67 Dt=3,83

M=3,89

Discapacidad Vida social (0-10)

M=4,46 Dt=3,33

M=4,83 Dt=4,21

M=4,58

Discapacidad Vida familiar (0-10)

M=3,46 Dt=3,66

M=3,17 Dt=4,31

M=3,37

Estrés percibido (0-10)

M=5,15 Dt=3,18

M=4,17 Dt=4,66

M=4,84

Apoyo social percibido (0-100%)

M=49,23 Dt=42,52

M=55 Dt=44,16

M=51,05

Discapacidad pos-tratamiento tras el alta (SDI) N=19 (13/6)

Discapacidad Global (0-30)

M=11,92 Dt=10,32

M=11,67 Dt=11,88

M=11,84

Discapacidad Trabajo (0-10)

M=3,04 Dt=3,94

M=4,25 Dt=4,29

M=3,42 t (36)=-0,857

p =0,397 R=0,155

Discapacidad Vida social (0-10)

M=3,31 Dt=3,47

M=4,83 Dt=4,15

M=3,79 t (36)= -1,183

p =0,244 R=0,182

Discapacidad Vida familiar (0-10)

M=3,65 Dt=3,65

M=4,08 Dt=4,14

M=3,79 t (36)= -0,323

p =0,749 R=0,070

Estrés percibido (0-10)

M=4,27 Dt=3,40

M=4,58 Dt=4,1

M=4,37 t (36)= -0,248

p =0,806 R=0,031

Apoyo social percibido (0-100%)

M=55,8 Dt=38,83

M=65,83 Dt=40,55

M=59,05 t (35)= -0,725

p =0,473 R=0,097

Último SDI recogido de los sujetos que fueron alta. N=38 ( 26/12)

Discapacidad Global (0-30)

M=10,15 Dt=9,95

M=13,17 Dt=12,29

M=11,11 t (36)= -0,805

p =0,426 R=0,204

Al año

23 (57,5%)

11 (39,3%)

34 (50%) χ2 (1)=2,186

p= 0,139 V=0,179

A los 2 años

28 (75,7%)

15 (53,6%)

43 (66,2%) χ2 (1)=3,478

p= 0,062 V=0,231

Tasa de Recuperación objetiva de los sujetos que fueron alta

A los 3 años *

30 (78,9%)

14 (51,9%)

44 (67,7%) χ2 (1)=5,299

p= 0,021 V=0,286

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

183

Satisfacción de las altas (Puntuación cuestionario)

M=30,34 Dt=6,24

M=28,67 Dt=9,86

M=29,70 t (29,68)=0,64

p =0,523 R=-0,102

Muy en desacuerdo

0 (0%)

0 ( 0%)

0/ 0%

En desacuerdo

1/ 3,4% 0/ 0% 1/ 2,2%

Dudoso

1/ 3,4% 2/ 12,5% 3/ 6,7%

De acuerdo

17/ 58,6% 5/ 31,3% 22/ 48,9%

Satisfacción con los beneficios del tratamiento N=45 (29/16)

Muy de acuerdo

10/ 34,5% 9/ 56,3% 19/ 42,2%

No de acuerdo

2, (6,9%)

2 (12,5%)

4 (8,9%)

Satisfacción con los beneficios dicotomizada N=45 (29/16)

De acuerdo o muy de acuerdo

27 (93,1%)

14 (87,5%)

41 (91,1%)

χ2 (1)=0,400 p= 0,527 V=0,094

Muy insatisfactoria

0 (0%)

0 (0%)

0 (0%)

Insatisfactoria

3 (10,3%)

4 (23,5%)

7 (15,2%)

Satisfactoria

14 (48,3%)

4 (23,5%)

18 (39,1%)

Satisfacción con la Ayuda recibida

Muy Satisfactoria

12 (41,4%)

9 (52,9%)

21 (45,7%)

No satisfactoria

3 (10,3%)

4 (23,5%)

7 (15,2%)

Satisfacción con la Ayuda recibida Dicotomizada N=46 (29/17)

Satisfactoria o muy satisfactoria

26 (89,7%)

13 (76,5%)

39 (84,8%)

χ2 (1)= 1,44 p= 0,229 V=0,177

Muy insatisfecho

0 (0%)

0 (0%)

0 (0%)

Insatisfecho

2 (6,9%)

3 (18,8%)

5 (11,1%)

Dudoso

2 (6,9%)

1 (6,3%)

3 (6,7%)

Satisfecho

16 (55,2%)

6 (37,5%)

22 (48,9%)

Satisfacción con el Servicio

Muy Satisfecho

9 (31%)

6 (37,5%)

15 (33,3%)

No satisfecho

4 (13,8%)

4 (25%)

8 (17,8%)

Satisfacción 1con el Servicio dicotomizada N=45 (29/16)

Satisfecho o muy satisfecho

25 (86,2%)

12 (75%)

37 (82,2%)

χ2 (1)=0,886 p= 0,347 V=0,140

Contactos con MAP durante los 3 años

M=3,34 Dt=4,25

M=4,69 Dt=4,67

M=3,97 t (62)=-1,193

p =0,238 R=0,150

Contactos con MAP durante el tratamiento

M=2,20 Dt=3,54

M=1,86 Dt=2,20

t (62)=0,447 p =0,656

R=-0,057

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

184

Nº de Contactos con MAP post tratamiento *

M=1,23 Dt=1,83

M=2,86 Dt=3,65

t (62)=-2,32

p =0,024

R=0,283 No

16 (35,6%)

8 (25%)

24 (31,2%)

Toman Psicofármacos pre-tratamiento

Si

29 (64,4%)

24 (75%)

53 (68,8%)

χ2 (1)=0,971 p= 0,324 V=0,112

No

19 (42,2%)

4 (12,9%)

23 (30,3%)

Psicofármacos inicio tratamiento **

Si 26 (57,8%)

27 (87,1%)

53 (69,7%)

χ2 (1)=7,476 p= 0,006

V=0,314 No

21 (46,7%)

7 (22,6%)

28 (36,8%)

Psicofármacos 6 meses *

Si 24 (53,3%)

24 (77,4%)

48 (63,2%)

χ2 (1)=4,57 p= 0,032

V=0,245 No

31 (73,8%)

12 (38,7%)

43 (58,9%)

Psicofármacos 1 año **

Si 11 (26,2%)

19 (61,3%)

30 (41,1%)

χ2 (1)=9,077 p= 0,003 V=0,353

No

34 (87,2%)

16 (51,6%)

50 (71,4%)

Si

5 (12,8%)

15 (48,4%)

20 (28,6%)

Psicofármacos 2 años **

χ2 (1)=10,706 p= 0,001

V=0,391 No

27 (81,8%) 13 (50%)

40 (67,8%)

6 (18,2%)

13 (50%)

19 (32,2%)

χ2 (1)=6,743 p= 0,009

V=0,338 Antidepresivos a los 3 años

M=20,16 Dt=48,48

M=27,76 Dt=48,53

t (55)=-0890

p =0,558 R=0,079

Psicofármacos a los 3 años **

Benzodiacepinas a los 3 años

M=0,16 Dt=0,90

M=0,35 Dt=0,56

t (55)=-0,890

p =0,377 R=0,119

No

33 (73,3%)

5 (16,1%)

38 (50%)

Toma psicofármacos tras el alta **

Sí 12 (26,7%)

26 (83,9%)

38 (50%)

χ2 (1)=24,026 p= 0,000

V=0,562 Nº de altas que retornaron a los 3 años

4 (9,1%)

4 (13,8%)

8 (11%) χ2 (1)=0,396

p= 0,529 V=0,074

Tiempo medio entre alta y retorno (en meses)

M=12 Dt=10,296

M=20,75 Dt=10,275

M=16,38 t (6)=-1,203

p =0,274 R=0,441

Sesiones con facultativo tras retorno

M=3 Dt=1,41

M=6,33 Dt=7,57

M=5 t (3)=-0,586

p =0,599 R=0,32

No

21 (60%)

21(72,4%)

42 (65,6%)

ITL dicotomizada

Si

14 (40%)

8 (27,6%)

22 (34,4%)

χ2 (1)=1,083 p= 0,298 V=0,130

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

185

Tabla 12. Análisis de resultados de los Abandonos de ambos grupos

Periodo Variable / Valores Experimental

Control

Total

Resultados

de análisis N= 51 (24 +27)

N=24

N=27

N=51

1. Mucho mejor

(%)

(%)

2. Bastante mejor

1 (100%)

(%)

3. Algo mejor

(%)

(%)

4. Sin cambios

(%)

(%)

5. Algo peor

(%)

(%)

6. Bastante peor

(%)

(%)

Estado Clínico pos-tratamiento de los sujetos que abandonaron (ICG-C) N=1 (1/0)

7. Mucho Peor

(%)

(%)

Mucho mejor o bastante mejor

6 (66,7%)

3 (50%)

9 (60%)

χ2

(1)=0,417 p= 0,519 V=0,167

Algo mejor 1 (11,1%)

2 (33,3%)

3 (20%)

χ2

(1)=1,11 p= 0,292 V=0,272

Sin cambios

0 (0%)

1 (16,7%)

1 (6,7%)

χ2

(1)=1,607 p= 0,205 V=0,327

Último ICG-C recogido (reagrupado). N=15 (9/6)

Peor

2 (22,2%)

0 (0%)

2 (13,3%)

χ2

(1)=1,538 p= 0,215 V=0,320

χ2 (3)= 3,89 p= 0,274 V=0,509

Índice Global de Severidad (0-4)

M=0,42

M=0,73

M=0,57

Total Síntomas Positivos (0-90)

M=33

M=38

M=35,5

Estado Clínico pos-tratamiento de los abandonos (SCL-90-R) N=2 (1/1)

Índice Malestar Positivo (0-4)

M=1,15

M=1,74

M=1,44

A los 5 meses de la última consulta

Último SCL-90 recogido de los abandonos N=10 (10/7)

Índice Global de Severidad (0-4)

M=1,37 Dt=1,20

M=1,37 Dt=0,66

M=1,37 t (15)=-0.011

p =0.991 R=0,003

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

186

Total Síntomas Positivos (0-90)

M=41,89 Dt=23,58

M=55,67 Dt=19,62

M=47,4 t (13)=-1,181

p =0,259 R=0,311

Índice Malestar Positivo (0-4)

M=2,04 Dt=

M=2,04 Dt=

M=2,04 t (16)=-0,017

p =0,987 R=0,004

Discapacidad Trabajo (0-10)

M=0 Dt=-

M=6,50 Dt=4,95

Discapacidad Vida social (0-10)

M=0 Dt=-

M=9,50 Dt=0,707

Discapacidad Vida familiar (0-10)

M=0 Dt=-

M=7,50 Dt=3,54

Estrés percibido (0-10)

M=1 Dt=-

M=9 Dt=1,41

Apoyo social percibido (0-100%)

M=80 Dt=-

M=80 Dt=14,14

Discapacidad pos-tratamiento de los abandonos (SDI) (1+2)

Discapacidad Global (0-30)

M=0 Dt=

M=23,5 Dt=9,19

Discapacidad Trabajo (0-10)

M=4,13 Dt=4,12

M=6,17 Dt=2,79

M=5 t (12)= -1,04

p =0,318 R=0,288

Discapacidad Vida social (0-10) *

M=4,67 Dt=4,34

M=8,67 Dt=1,51

M=6,36 t (9,1)= -2,44

p =0,037 R=0,530

Discapacidad Vida familiar (0-10)

M=3,88 Dt=4,42

M=7 Dt=2,36

M=5,21 t (11,1)=-1,7

p =0,117 R=0,411

Estrés percibido (0-10)

M=4 Dt=3,85

M=7,17 Dt=2,71

M=5,36 t (12)= -1,71

p =0,113 R=0,443

Apoyo social percibido (0-100%)

M=82,5 Dt=16,69

M=68,3 Dt=35,45

M=76,43 t (12)= 1,001

p =0,336 R=-0,278

Ultimo SDI de los abandonos N=14 (8/6)

Discapacidad Global (0-30)

M=12,63 Dt=12,06

M=21,83 Dt=5,74

M=16,57 t (12)= -1,72

p =0,112 R=0,444

Al año

11(50%)

20(76,9%)

31 (64,6%) χ2 (1)=3,77

p= 0,052 V=0,270

Tasa de Recuperación objetiva de los abandonos N=48 (22/26)

A los 2 años 19 (86,4%)

18 (72%)

37 (78,7%) χ2 (1)=1,44

p= 0,230 V=0,175

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

187

A los 3 años

20 (90,9%)

21 (84%)

41 (87,2%) χ2 (1)=0,502

p=0,479 V=0,103

Satisfacción de los abandonos cuestionario (10+7)

M=29,5 Dt=6,8

M=26,29 Dt=6,13

M=28,18 t (15)=0,997

p =0,335 R=-0,249

Muy en desacuerdo

0 (%)

0 (%)

0 (%)

En desacuerdo

1 (10%)

1 (8,3%)

2 (9,1%)

Dudoso

1 (10%)

1 (8,3%)

2 (9,1%)

De acuerdo

3 (30%)

7 (58,3%)

10 (45,5%)

Satisfacción con los beneficios del tratamiento de los sujetos que abandonaron N=22 (10/12)

Muy de acuerdo

5 (50%)

3 (25%)

8 (36,4%)

No de acuerdo

2 (20%)

2 (16,7%)

4 (18,2%)

Satisfacción con los beneficios del tratamiento de los sujetos que abandonaron dicotomizado N=18 (8/10)

De acuerdo o muy de acuerdo

8 (80%)

10 (83,3%)

18 (81,8%)

χ2 (1)=0,041 p= 0,840 V=0,043

Muy insatisfactoria

0 (%)

0 (%)

0 (%)

Insatisfactoria

0 (%)

1 (8,3%)

1 (4,3%)

Satisfactoria

7 (63,6%)

8 (66,7%)

15 (65,2%)

Satisfacción con la Ayuda recibida de los sujetos que abandonaron N=23 (11/12)

Muy Satisfactoria

4 (36,4%)

3 (25%)

7 (30,4%)

No satisfactoria

0 (%)

1 (8,3%)

1 (4,3%)

Satisfacción con la Ayuda recibida de los sujetos que abandonaron Dicotomizada N=23 (11/12)

Satisfactoria o muy satisfactoria

11 (100%)

11 (91,7%)

22 (95,7%)

χ2 (1)=0,958 p= 0,328 V=0,204

Muy insatisfecho

0 (%)

0 (%)

0 (%)

Insatisfecho

0 (%)

0 (%)

0 (%)

Dudoso

0 (%)

2 (16,7%)

2 (8,7%)

Satisfecho

7 (63,6%)

8 (66,7%)

15 (65,2%)

Satisfacción con el Servicio de los sujetos que abandonaron N=23 (11/12)

Muy Satisfecho

4 (36,4%)

2 (16,7%)

6 (26,1%)

No satisfecho

0 (%)

2 (16,7%)

2 (8,7%)

Satisfacción con el Servicio de los sujetos que abandonaron Dicotomizada N=23 (11/12)

Satisfecho o muy satisfecho

11 (100%)

10 (83,3%)

21 (91,3%)

χ2 (1)=2,008 p= 0,156 V=0,295

Contactos con MAP por problemas de salud mental en los 3 años

M=3,32 Dt=3,76

M=3 Dt=4,46

M=3,15 t (45)=0,262

p =0,794 R=-0,039

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

188

Contactos con MAP durante el tratamiento

M=1,45 Dt=2,58

M=0,81 Dt=1,23

t(46)=1,14 p =0,262

R=-0,165 Contactos con MAP después de abandonar el tratamiento

M=1,86 Dt=2,19

M=2,15 Dt=3,7

t (46)=-0,322

p =0,749

R=0,047 No

9 (37,5%)

8 (29,6%)

17 (33,3%)

Toman Psicofármacos pre-tratamiento

Si

15 (62,5%)

19 (70,4%)

34 (66,7%)

χ2 (1)=0,354 p= 0,552 V=0,083

No

9 (37,5%)

7 (25,9%)

16 (31,4%)

Psicofármacos inicio tratamiento

Si 15 (62,5%)

20 (74,1%)

35 (68,6%)

χ2 (1)=0,791 p= 0,374

V=0,125 No

14 (60,9%)

13 (52%)

27 (56,3%)

Psicofármacos 6 meses

Si 9 (39,1%)

12 (48%)

21 (43,8%)

χ2 (1)=0,383 p= 0,536

V=0,089 No

17 (73,9%)

20 (76,9%)

37 (75,5%)

Psicofármacos 1 año

Si

6 (26,1%)

6 (23,1%)

12 (24,5%)

χ2 (1)=0,060 p= 0,807 V=0,035

No

19 (86,4%)

19 (79,2%)

38 (82,6%)

Si

3 (13,6%)

5 (20,8%)

8 (17,4%)

Psicofármacos 2 años

χ2 (1)=0,414 p= 0,520

V=0,095 No

16 (88,9%)

21 (91,3%)

37 (90,2%)

Si 2 (11,1%)

2 (8,7%)

4 (9,8%)

χ2 (1)=0,067 p= 0,796

V=0,040 Antidepresivos puntual a los 3 años (17/23)

M=11,76 Dt=33,21

M=2,89 Dt=13,89

t (20,16)=

1,036 p =0,312 R=-0,184

Psicofármacos a los 3 años

Benzodiacepinas puntal a los 3 años (17/23)

M=0,059 Dt= 0,242

M=0,043 Dt=0,21

t (38)=0,215

p =0,831 R=-0,035

No

16 (66,7%)

12 (44,4%)

28 (54,9%)

Toma psicofármacos tras el abandono

Sí 8 (33,3%)

15 (55,6%)

23 (45,1%)

χ2 (1)=2,534 p= 0,111

V=0,223 Nº de abandonos que retornaron a los 3 años

6 (25%)

4 (14,8%)

10 (19,6%) χ2 (1)=0,836

p= 0,360 V=0,128

Sesiones con facultativo tras retorno (n.s.) N=6 (3/3)

M=2 Dt= 1,73

M=5 Dt=3,6

M=3,5 t (4)=-1,30

p =0,264 R=0,545

Tiempo medio entre abandono y retorno (meses)

M=15,83 Dt=6,11

M=16,33 Dt=11,05

M=16 t (7)=-0,090

p =0,931 R=0,034

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

189

No

14 (70%)

18 (72%)

32 (71,1%)

ITL dicotomizada

Si

6 (30%)

7 (28%)

13 (28,9%)

χ2 (1)=0,022 p= 0,883 V=0,022

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

190

Tabla 13. Resumen de Resultados en las Variables más representativas en los distintos momentos temporales.

GRUPO

TRATAMIENTO 6 MESES 1º AÑO 2º AÑO 3º AÑO

Psicoterapia Breve 31.9 54.2 62.5 62.5 ALTAS %

Tratamiento Habitual 25 33.3 40.3 44.4

Psicoterapia Breve 22.2 33.3 33.3 33.3 ABANDONOS %

Tratamiento Habitual 30.6 36.1 37.5 37.5

Psicoterapia Breve 45.8 12.5 4.2 4.2 SIGUEN %

Tratamiento Habitual 44.4 30.6 20.8 16.7

Psicoterapia Breve - 2.8 11.1 13.9 RETORNOS %

Tratamiento Habitual - 4.2 5.5 11.1

Psicoterapia Breve 45.8 15.3 15.3 18.1 A TRATAMIENTO EN CSM %

Tratamiento Habitual 44.4 34.8 26.3 27.8

Psicoterapia Breve 48.1 55.6 78.9 - ICG-C (Mejoría sustancial) % Tratamiento Habitual 57.7 58.3 46.7 -

Psicoterapia Breve 1.55 1.30 1.16 - SCL-90 (Índice Global Severidad) Media

Tratamiento Habitual 1.03 1.08 1.23 -

Psicoterapia Breve 13.2 11.7 10.5 - SDI (Discapacidad global) Media

Tratamiento Habitual 13.4 12.6 15.8 -

Psicoterapia Breve 87.8 - - - SATISFACCIÓN (beneficios) % Tratamiento Habitual 88.1 - - -

Psicoterapia Breve 50.7 29.4 17.2 17.3 PRESCRIPCIÓN PSICOFÁRMACOS %

Tratamiento Habitual 69.6 52.9 45.6 38.7

Psicoterapia Breve - 52.3 75.8 79.4 TASA RECUPERACIÓN %

Tratamiento Habitual - 44.3 49.3 53.7

Efectividad de la Psicoterapia Breve en los Trastornos Mentales Comunes

191

Tabla 14. Resumen de las Diferencias y Significación estadística en los distintos momentos temporales.

6 MESES 1º AÑO 2º AÑO 3º AÑO

ALTAS Psicoterapia Breve Psicoterapia Breve Psicoterapia Breve Psicoterapia Breve

ABANDONOS Psicoterapia Breve O O O

SIGUEN O Psicoterapia Breve Psicoterapia Breve Psicoterapia Breve

RETORNOS - O Tratamiento Habitual

O

A TRATAMIENTO EN CSM O Psicoterapia Breve Psicoterapia Breve Psicoterapia Breve

ICG-C (Mejoría sustancial)

Tratamiento Habitual

O Psicoterapia Breve -

SCL-90 (Índice Global Severidad)

Tratamiento Habitual

Tratamiento Habitual

O -

SDI (Discapacidad global) O O Psicoterapia Breve -

SATISFACCIÓN (beneficios) O - - -

PRESCRIPCIÓN PSICOFÁRMACOS Psicoterapia Breve Psicoterapia Breve Psicoterapia Breve Psicoterapia Breve

TASA RECUPERACIÓN - Psicoterapia Breve Psicoterapia Breve Psicoterapia Breve

O No hay diferencias entre ambos grupos de tratamiento Psicoterapia Breve Diferencias a favor de Grupo Psicoterapia Breve, pero NO Estadísticamente significativas. Psicoterapia Breve Diferencias a favor del Grupo de Psicoterapia Breve estadísticamente SIGNIFICATIVAS Tratamiento Habitual Diferencias a favor de Grupo del Tratamiento Habitual, pero NO estadísticamente significativas. Tratamiento Habitual Diferencias a favor del Grupo de Tratamiento Habitual estadísticamente SIGNIFICATIVAS

Marco A. Luengo Castro Tesis Doctoral

192