Suñer Enrique - Los Intelectuales Y La Tragedia Española

7/23/2019 Suer Enrique - Los Intelectuales Y La Tragedia Espaola

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Dr. Enrique Suer

Los intelectuales

y latragedia espaola


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ndice

Al lector, 5A mi fraternal amigo Teobaldo Busto,9

Captulo I

Orgenes de la catstrofe actual. Institucin ibre de !nse"an#a. $us fundadores % &ros'litos ms destacados. (ecadencia del&rinci&io de autoridad. Inacti)idad de los miembros de la Iglesiacatlica,**

Captulo II

a +unta &ara Am&liacin de !studios. elaciones culturales

e-traneras. /abilidades del $ecretario. !l sistema de becas %&ensiones0 efectos de ca&tacin. a esidencia de !studiantes,1*

Captulo III

$ntesis e)oluti)a de la Institucin. 2esimismo % o&timismo. !stado &araltico de los gobernantes frente a la obra de losinstitucionistas. Ino&ia de cons&icuos &olticos. !l e'rcito de laesidencia. !l Ateneo, centro cons&irador % anar3ui#ante,4*

Captulo IV

$an arlos0 su re&resentacin ideolgica % romntica. 6ue)ascostumbres &oco edi7cantes. !sfuer#os e-cesi)os de losinde&endientes en la atmsfera de los claustros de la 8ni)ersidad deadrid,:4

Captulo V

Accin demoledora de la 8ni)ersidad. Introduccin en la misma de&rofesores indeseables. Algunos t&icos eem&lares. Acti)idades&aradicas de los elementos sectarios. acional e-&licacin de sudesconcertante conducta,54

Captulo VI
http://www.filosofia.org/aut/ite/1938p005.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p009.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p011.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p011.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p011.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p011.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p021.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p021.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p021.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p031.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p031.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p031.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p031.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p043.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p043.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p043.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p043.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p053.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p053.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p053.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p053.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p005.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p009.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p011.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p011.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p011.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p021.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p021.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p021.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p031.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p031.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p031.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p043.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p043.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p043.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p053.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p053.htmhttp://www.filosofia.org/aut/ite/1938p053.htm


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O&osiciones a ctedras de adrid. aneos institucionistas. !scndalos intolerables &or &arte de las ;uestes. !3ui)ocacionesdel 2oder &


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ada de la (ictadura. !l nue)o obierno no res&ondi a los&eligros 3ue rodeaban a la 6acin. enace la inGuencia de losinstitucionistas. $e crea una ctedra &ara ?ernando de los os. 6ue)os onseeros de Instruccin &

Captulo XIII

!stado de la onar3ua en *94F % *94*. InGuencia de las ideas@bolc;e)i3ues. $iembra de la indisci&lina % de la rebelda. os@sucesos de $an arlos,*49

Captulo XIV

onsecuencias de un artculo. !l laustro de la ?acultad deedicina % el olegio de 'dicos de adrid. /omenae en el /otel6acional. os aciagos *1 % *: de abril de *94*. @!l caos &oltico% social. 6oc;e angustiosa. Incendio en las iglesias. omien#a ladestruccin de la ri3ue#a artstica. Hengan#as re&ublicanas. om&ortamiento de algunos @amigos,*55

Captulo XV

(educciones de las &ginas anteriores. !l &r-imo enacimientodebe ser ms 3ue una &romesa,*=5

Al lector

!s&a"a sufre la ms ;orrenda de las catstrofes de su /istoria.os de sangre corren &or todos los mbitos de la 2ennsula,aGu%endo en caudal tan inmenso, 3ue bastaran &ara formar un)erdadero mar. A cuntos metros c


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derramado de los )asos ;eridos de nuestros ;ermanosJ !s&anta lasim&le ;i&tesis de una concreta )aloracin.

/a% en esta sangre &erdida &rocedencias mu% diferentes0 enunos casos los menos )iene de conscientes criminales, autores de

las ;ecatombes 3ue &adecemosK en otros, de )iles brutos, coninstintos &eores 3ue los de las 7erasK en muc;os, de ;idalgos &ec;oses&a"oles militares % milicianos, )enes generosos, llenos deabnegacin % de ;erosmo tan inmensos, 3ue sus ;eridas los ele)an ala altura de los semidioses de las le%endas ;el'nicas. /a% sangre,tambi'n, de muc;os mrtires, sacri7cados )illanamente &or su amor% lealtad a la 2atria, a la eligin, a la mera decencia de un )i)ir;onesto. 6o nos 3ueremos ol)idar tam&oco del L=M li3uido &erdido&or muc;os de nuestros enemigos, )ctimas del )eneno inoculado en

su es&ritu, incom&rensi)o de la )erdad, &or los taimados dirigentes3ue los conducen, como corderos, a las lneas de fuego. N toda estaes&antosa mortandad ;a de 3uedar sin el usto castigoJ... 6uestroes&ritu se rebela contra una &osible im&unidad de los des&iadadoscausantes de nuestra tragedia. 6o es &osible 3ue la 2ro)idencia % los;ombres deen sin castigar tantos asesinatos, )iolaciones,crueldades, sa3ueos % destrucciones de la ri3ue#a artstica % de losmedios de trabao. !s menester, con la ms santa de las )iolencias,urar ante nuestros muertos amados la eecucin de las sanciones

merecidas. Dui'nes son los m-imos res&onsables de tantos dolores% de tantas desdic;asJ 2ara nosotros no cabe la duda0 los &rinci&alesres&onsables de esta inacabada serie de es&elu#nantes dramas sonlos 3ue, desde ;ace a"os, se llaman a s mismos, &edantescamente,@intelectuales. !stos, los intelectuales % &seudo intelectualesinteriores % e-traneros, son los 3ue, tena# % contuma#mente, a"otras a"o, ;an &re&arado una cam&a"a de corru&cin de los ms&uros )alores 'ticos, &ara concluir en el a&ocal&tico desenlace a 3ueasistimos, como negro e&logo de una infernal labor anti&atritica

3ue, &or serlo, &retenda desarraigar del alma es&a"ola la fe deristo % el amor a nuestras legtimas glorias nacionales. (eseo, conestas &ginas, descorrer una &arte del )elo encubridor de los autorestrgicos 3ue nos ;an lle)ado L>M al caos en 3ue )i)e una gran &artede !s&a"a0 busco el se"alarlos con el dedo, delatando con todo )alor,duramente, sin eufemismos ni atenuaciones, sus turbias acti)idades% los &lanes de 3ue se )alieron. i calidad de &rofesor en


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con)i)encia con ellos en los entros de ense"an#a, me ;a &ermitidoconocer su &sicologa % descubrir muc;os nudos de la trama con 3ueen)ol)ieron a la sociedad es&a"ola.

Oala sir)an estas &ginas de leccin &ara el futuroK 3ue ellas

&ermitan a7rmar la absoluta necesidad en 3ue estamos, si 3ueremos)i)ir con ;onor, de eliminar de nuestro suelo &atrio a los cul&ables.6o son, las del &resente, ;oras de bene)olencia, sino de radicales %en'rgicas medidas defensi)as.

(estruida &or los roos la documentacin &ersonal 3ue ;abaacumulado sobre la materia de la cual escribo, ;e tenido 3ue con7ara mi memoria la relacin de los ;ec;os fundamentales. !llo meobliga a no seguir siem&re una rigurosa marc;a cronolgica. as

esto 3u' im&ortaP

o esencial es 3ue el alma es&a"ola, )ibrante de indignacin % decorae, se&a tambi'n recoger en la memoria las 7guras e-ecrables delos agentes de nuestro da"o, &ara 3ue no 3ueden ol)idadas a la ;oraen 3ue deba tener lugar una usticia tan im&lacable como el &eruicio3ue nos ;an causado.

A mi fraternal amigo Teobaldo Busto(esde el lugar donde mora tu alma &ura, en)uelta &or la lu#

inmaterial de unos sentidos in7nitamente ms &erfectos 3ue los de laterrena )ida, contem&lars con la serena indignacin del usto estatragedia es&a"ola. 6unca ;ubiera &ensado en dirigirme a tiin)ocando tu es&ritu incom&arable con tan terrible moti)oK &ero los


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acontecimientos, 3ui#s no igualados en la /istoria 8ni)ersal, 3ue sesuceden en !s&a"a, me im&ulsan a buscar la comunicacin contigo,aun cuando ;a%as deado esta )ida material &ara aloarte en el einode la eterna Herdad, en donde estn los elegidos de (iosK &or3ueesta &obre inteligencia ;umana no &uede &ermanecer sincomunicacin tele&tica con los ;abitantes de la regin ignota cu%ae-istencia a7rmamos los mortales cre%entes. !n ese &asdesconocido, sueto a &er&etuo silencio &ara el ;ombre terrenal, esdonde tu alma &ura e-iste. A ella me dirio, &or3ue slo t


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Captulo I$umario0 Orgenes de la catstrofe actual. Institucin ibre de

!nse"an#a. $us fundadores % &ros'litos ms destacados. (ecadencia del &rinci&io de autoridad. Inacti)idad de losmiembros de la Iglesia catlica.

os orgenes de la catstrofe 3ue e-&erimentamos son mu%remotos % com&leos. 6os &erderamos tal )e# en )arios siglos sibuceramos en las causas leanas de esta desdic;a. 6o &retendollegar a tantoK ni si3uiera esto% &re&arado en conocimientos

;istricos &ara deducir los )ieos &rinci&ios de este &roceso.A&elando al lenguae m'dico, dir' 3ue ;e de se&arar las @causas&redis&onentes % los @factores constitucionales Qsi bien es cierto3ue no &ienso des&oseerme del todo de tales elementos de uicioR,&ara ocu&arme de la @etiologa determinante % ocasional, &or a;orala de ms inter's &rctico.

a Institucin ibre de !nse"an#a, en el curso de una labormedio centenaria, ;a ido creando una legin de ade&tos, entre los

cuales se encuentran los &rinci&ales agentes re)olucionarlos. !lamor a L*1M la e-actitud me obliga a decir 3ue don ?rancisco inerde los os fue un es&ritu sincero, de inclinacin &roselitaria, dotadode dotes sugesti)as, a&ro&iadas &ara la con)ersin a su causa de los)enes alumnos, sobre los cuales eerca una inGuencia decisi)a.2ersonas merecedoras de entero cr'dito me ;an descrito a @(on?rancisco como una &ersonalidad edi7cante en el orden moral, deatraccin intensa en sus relaciones sociales. Indudablemente, la obrade (. ?rancisco iner no ;ubiera &odido reali#arse sin una fuer#a

&s3uica e-traordinaria. As se e-&lica el sello im&reso en el carcterde los 3ue fueron sus disc&ulos. !s &robable tambi'n 3ue 7neslgicos, res&etables, le induesen a una labor de ca&tacin de altura,3ue, desgraciadamente, ca%, des&u's de su muerte, en las mslamentables aberraciones. ual3uiera 3ue sea el uicio 3ueformulemos sobre la obra de don ?rancisco iner, aun en este&erodo de contrarios % naturales a&asionamientos &or los resultados


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de sus acti)idades, faltara a mi conciencia si %o atacase la&ersonalidad &rofunda del fundador de esa Orden laica 3ue se llamala @Institucin en el lenguae corriente. 2or desdic;a, los resultadosde su labor fueron fatales &ara !s&a"a, % esto &or dos moti)os0 el&rimero, &or3ue al arrancar del alma del ni"o la creencia en (ios,destru% el &rinci&io de toda moralidad, en la )ida &rctica, demuc;os de los 3ue siguieron ms tarde las ense"an#asinstitucionistasK el segundo, &or3ue fund una secta L*4M 3ue,sim&lemente &or serlo, ;a da"ado inmensamente a la 2atria. aInstitucin lo mismo 3ue todas las agru&aciones ;umanas egostasactu ms tarde con inter's &ersonal e ;i&crita, disimulando bao elcali7cati)o de altos % di)ersos ideales, esencialmente culturales, un&roteccionismo a los a7liados de carcter esencialmente masnico,con ol)ido absoluto del )aler de los ad)ersarios. ?ormaba &arte del&rocedimiento el cubrir con a&ariencias de im&arcialidad los)erdaderos 7nes @de &resa, % as, de )e# en cuando adscriba a susobras, siem&re en minora e-traordinaria, alguno 3ue otro rarore&resentante de la Iglesia o del derec;ismo. !n ocasiones, estoselementos derec;istas estaban con3uistados de antemanoK otras)eces, noK &ero, en estos casos aislados, la )igilancia &erfecta % eldominio de los resortes de la organi#acin % del mando ;aca de ellos&ersonas inofensi)as, %, en todo caso, su actuacin libraba, ante oosignaros, a la Agru&acin as constituida del cali7cati)o, &erudicial

&ara ella, re)elador de sus 7nes &roselitarios, de alcance material %moral e)idente.

a @Institucin, en los


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7rme con)iccin, ;a sido uno de los ms terriblemente funestos 3ue;a )isto nacer !s&a"a.

omo no son 'stas ;oras de ocultaciones, ni de )eladuras denombres o de conce&tos, estam&o a3u el de este colaborador de los

fundadores de la @Institucin ibre0 +os' astilleo (uarte,catedrtico de (erec;o romano en la 8ni)ersidad entral. $erae3ui)ocado % contrario a la )erdad el negar una gran inteligencia aesta &ersonaK inteligencia encaminada al da"o moral % material denuestra ra#a % de nuestro &as. aal a menudo deca de 'l 3ue @eramu% listo, &or3ue, en su trato frecuente en los tiem&os en 3uenuestro gran es&a"ol fue 2residente de la +unta de Am&liacin de!studios, en la 3ue astilleo actuaba como secretario, tu)oocasiones re&etidas % frecuentes de conocerlo. !s astilleo smbolo

de la astucia 3ue &erdi a los ;ombres, % esta a7rmacin la ;ago&or3ue ;e &odido conocerle en las '&ocas de con)i)encia 3ue con 'ltu)e, con moti)o de ;aber ser)ido untos en tres 8ni)ersidadeses&a"olas.

As como las doctrinas de arlos ar- tu)ieron L*5M necesidad dees&erar muc;os a"os &ara encontrar en enin el ;ombre adecuado&ara &onerlas en &rctica, del mismo modo los ideales &edaggicosde iner ;allaron, aun3ue in7nitamente ms &ronto eran de accin

ms limitada en astilleo el agente 3ue les diese realidad. N 3u'realidad ms funesta &ara nosotrosP !l &lan tctico comen#, en este


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Institucin, los fundadores % sus &redilectos disc&ulos, ;an ado&tadosiem&re la m-ima del @similia similibus, ;asta el e-tremo 3ue elmodo de ;ablar, de andar, el saludo % la ntima &sicologa de lacon)ersacin dan muc;o &arecido a los ;ombres t&icos L*=M de laInstitucin con las maneras de algunas Srdenes religiosas.

$i la memoria no me es in7el, astilleo no fue, al menos en suinfancia % adolescencia, alumno de la Institucin. $u formacinanterior, sin embargo, le facilit en gran manera la ada&tacin a lascostumbres de los maestros % &ont7ces de a3u'lla.

Due el ;ombre a;ora estudiado dedic como agente de lasnue)as ideas su acti)idad a las mismas, con menoscabo de su labordocente uni)ersitaria, lo &rueba la &ar3uedad en el n


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reali#ar sus funcionesK una &oltica de tertulia o de encruciada seinter&ona en el camino de todo el 3ue eerca un cargo designi7cacin err3uica, % el &restigio &ersonal no era su7ciente enla ma%ora de los casos &ara inter)enir con la debida energa. 8na&rensa demoledora, &ersonal, egosta, al ser)icio de intereses defamilia o de em&resa, actuaba, desgraciadamente, con la su7cientee7cacia en la destruccin o limitacin de los &ro&sitos meorconcebidos.

2or eso &udo darse el caso, en este ambiente de corru&telas, de3ue un &rofesor, buscando el retru'cano, maltratase cruelmente a unse"or res&etable, 3ue, adems de ser el inistro, al 3ue debaconsideracin, unto con el res&eto, era un ;ombre ;onorable, bienintencionado, 3ue ;aba &retendido dar t'rmino a gra)es

irregularidades de la Administracin &


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2atria % la eligin catlica, me L*9M &ro&orcion el con)encimientode 3ue el clero regular es&a"ol no es menester decir 3ue el secularni &or curiosidad se asomaba a este &roblema no se daba cuenta del&eligro.

!ra la del clero una )erdadera inacti)idad, funesta &ara el&or)enir, como los acontecimientos ulteriores se ;an encargado,desgraciadamente, de &robar. Todo &or seguir, &or una % otra &artede las ;uestes, con el sistema del @similia similibus, aun cuando esmenester, en usticia, reconocer 3ue, &or el lado de la Institucin, elsimilia era meramente formal0 la accin se ;aca con calculadaacti)idad contrariaK en tanto 3ue &or &arte del clero al menos, estoes lo 3ue &areca e-istir entonces, % tristemente se demostr en elfuturo e-ista un desinter's suicida &or el &roblema &rctico, sin

duda &or3ue el &ensamiento de la in)ulnerabilidad de la Iglesia ;acaa los sacerdotes &ensar en la inutilidad del esfuer#o contrario,ol)idando a3uella casti#a m-ima del0 @A (ios rogando % con el ma#odando.

Captulo II$umario0 a +unta &ara Am&liacin de !studios. elaciones

culturales e-traneras. /abilidades del $ecretario. !l sistemade becas % &ensiones0 efectos de ca&tacin. a esidencia de!studiantes.

a +unta &ara Am&liacin de !studios fue una de lasfundamentales bases de la inGuencia institucionista, aun3ue dee)olucin un tanto lenta. a mano 3ue gui siem&re, ;asta el 7nal,dic;a +unta, fue la de su &rimer secretario, astilleo. uando,transcurridos muc;os a"os de accin inmediata, directa, sobre ella,

la tras&as a otra &ersona, el es&ritu de es&ec7ca naturale#a estababien arraigado en los colaboradores. !l timn 3ue se soltaba &odacon7arse %a a otro &ilotoK &ues no ;aba temor alguno de 3ue la na)eencallase ni )ariase de rumbo0 tan seguras eran las cartas martimasde na)egacin, tan e-&ertos los tri&ulantes, formados en el curso dems de )einticinco a"os de tena# &ro&aganda, como conocidas %tran3uilas eran las aguas, las costas, los )igilantes, en 7n, todos los


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elementos 3ue inter)enan en el '-ito de esta labor. 2or eso, L11Mentonces el iniciador &udo dear la direccin de la +unta, &araenfocar sus acti)idades &or otros derroteros, % &articularmente &orel de las @elaciones culturales con el !-tranero. laramente se )eel &ro&sito del @gua. on la @Am&liacin de !studioscon3uistaban el territorio interiorK con las @elaciones culturales,la fuer#a internacional. 6o era su7ciente el formar una masa dentrodel &as, obediente a las normas de la masoneraK era, adems,indis&ensable la &roduccin de un ambiente e-terior fa)orable a loselementos &rotegidos % con3uistados &or la Institucin, dentro de!s&a"a0 &or eso fund nue)as organi#aciones dentro de la +unta %a&ro)ec; ms tarde otras situadas fuera de ella. a +unta deAm&liacin de !studios en)iaba constantemente &ensionados al!-tranero con todas las a&ariencias de la legalidad. os solicitanteseran sometidos a informe de &ersonas cali7cadas, a )eces e-tra"as alorganismo. !n la ma%ora de las ocasiones, los informantes, si erandesafectos a la Institucin, no lograban )er satisfec;os sus uicioscon la eleccin del candidato &ro&uesto. il recursos, estrictamentelegales, &ermitan al $ecretario maniobrar a su antoo. (e )e# entarde era &ensionado alguno de los antiinstitucionistas. !sto se ;acacon la misma 7nalidad 3ue ;a 3uedado e-&uesta en el &rimerca&tulo al referirme a la ace&tacin &ara el trabao de &ersonas noafectas, &ero cu%a )igilancia las ;aca inofensi)as. !l en)o de alguno

3ue otro &ensionado de la @acera de enfrente no sola L14M&erturbar los &ro&sitos de los dirigentes. !n alg


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asentimiento a las ;abilidades del $ecretario tena su e-&licacin enel temor de &erder en el futuro un &ingUe cargo, de &osiblese&aracin ministerial, cuando las inGuencias gubernamentales;ubieran sido contrarias. (e este modo &udo el astuto agente tantas)eces mencionado sortear las di7cultades de los @siete a"osdictatoriales, gracias al conocimiento &rofundo de la &sicologa delos ;ombres, de la e-cesi)a &rudencia de 'stos &ara e)itar los&eruicios, o de la cndida incom&rensin de los la#os tendidos &or ela)entaado taumaturgo. L1:M

!l resultado de estas andan#as fue 3ue, al lado de unos &ocos)enes de buena fe, 3ue no )ariaron de sentimientos ni decreencias, la +unta mand al !-tranero una nube de &artidarios,muc;os de los cuales, des&u's del bene7cio logrado % de la

&edantera ad3uirida durante su estancia o estancias en &asese-traneros, ingresaban como ne7tos, o eerciendo el &a&el decom&arsas, en los recintos de la Institucin, &or la &uerta de las&ensiones % de las becas. o ms sensible de todo este sistema ;asido 3ue la consecucin de los &ro&sitos fundacionales, denaturale#a esencialmente &artidista, se ;a logrado con el dinero del!stadoK 3ue los enemigos de la 2atria, de la eligin, de lainde&endencia ciudadana, ;an )isto reali#ado su triunfo, )igori#adasu em&resa mal'7ca, a e-&ensas del dinero de los contribu%entes,

&erudicados en sus ideologas. !sto era lo mismo 3ue alimentar,aloar, defender al enemigo 3ue nos &ri)ar de la )ida % de la;aciendaV*W.

a estancia de )enes en el !-tranero, cuando no &oseen en suanterior formacin un arraigado sentimiento cristiano, una&re&aracin cultural o social, costumbres no tartufescas, mas deslida moralidad, indefectiblemente lle)a, &or la libertad de 3ue sego#a % el incenti)o de los &laceres sensuales, a una relaacin de los

;bitos familiares, a L15M una disminucin de la disci&lina de laconciencia, a un rebaamiento de la fe religiosa. laro est 3ue, ale-&resar estos uicios, ;ago la sal)edad de 3ue no los re7ero a todos,ni tal )e# a la inmensa ma%oraK aun3ue ra#ones e-isten &ara admitirun &redominio de los &ensionados a los cuales cabe im&utar losanteriores defectos.
http://www.filosofia.org/aut/ite/1938p021.htm#kn01%23kn01http://www.filosofia.org/aut/ite/1938p021.htm#kn01%23kn01


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as consecuencias &rcticas de estos &untos de )ista, nacidos dela obser)acin % del anlisis crtico, son 3ue, conforme aumentaba el)olumen de los becarios % de los &ensionados, creca el de losindiferentes en materia religiosa % el de los &erturbadores del orden% del !stado, los cuales iban a beber, &ara sus reali#acionesanar3ui#antes, en las turbias fuentes de los superhombresdirectoresdel mo)imiento en fa)or de nue)os % ms @ci)ili#ados sistemassociales.

A &esar del tan decantado inter's &or el funcionamiento de las2ensiones en el !-tranero, del conocimiento de las organi#aciones&edaggicas de fuera de !s&a"a, no &ensaron nunca los fundadoresde la +unta en a&licar un sistema de )igilancia de los )enes&ensionados, en el cual, con una ra#onable libertad, se im&idieran

los desrdenes &osibles en las edades de los en)iadosK un m'todo enel 3ue no se &erdiese el amor a la 6acin, % donde la con)i)encia condignos com&atriotas mantu)iese este sagrado sentimiento. 2aralograr este efecto ;ubiese bastado co&iar lo %a ;ec;o &or nuestro&ro&io &as, bao la gloriosa bandera nacional % el L1=M santo&atrocinio de la eligin catlica, en el colegio de $an lemente, deBolonia. $i era &reciso modi7car, corregir o &erfeccionar laorgani#acin %a e-istente, ;aberlo ;ec;o en buen ;oraP $i se3ueran tomar otros modelos ms fciles, a; se tena el sistema

a&on's, con el al3uiler de edi7cios corrientes, cu%as ;abitaciones sedan en )entaosas condiciones a ;onorables familias del &ase-tranero, en las cuales se colocan los &ensionados a&oneses unopor unoK esto es, aislados dentro de cada ;ogar, &ara el meora&rendi#ae del idiomaK &ero con la obligacin de reunirse &ara lacomida de la noc;e en el &iso inferior, donde la cocina, criados %ambiente son los del +a&n. Todo esto era &referible al abandono dela u)entud en &as e-tranero, con los &eligros consiguientes almismo, algunos de los cuales ;e se"alado en anteriores &rrafos.

Tal necesidad de )igilancia &atritica, antianar3ui#ante, seo&ona a las ideas de libertadde los organi#adores de la +untaJ !s3ue la )ida alocada, &ro&ia de la u)entud sin freno, fa)oreca elrelaamiento de los )nculos religiosos, % &ermita, &or causa mismadel desorden moral, la @con)ersin al re)'s ;acia las doctrinas % las&rcticas institucionistasJ $i el &ensamiento nunca e-isti tan


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agudamente intencionado en la realidad, los resultados fueron comosi el &lan ;ubiese sido el 3ue e-&ongo.

omo &rueba de la )erdad de estos asertos, citar' la o&inin de(. ?rancisco de Ass aballero, L1>M nsul general de !s&a"a en

unic;, 3uien, des&u's de ;aber estado luengos a"os en Alemania,donde reali# casi toda su carrera, deca 3ue, salvo muy contadasexcepciones, nuestros &ensionados en Alemania ;acan una )ida mu%distante de la 3ue con)ena a los futuros intereses del &as. !s decir,3ue el !stado es&a"ol gastaba in


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la de )arones, con edi7cio &ro&io, situado en los Altos del /i&dromocon lo cual no 3uiero signi7car 3ue la de se"oritas no tenga tambi'nun marcado )alor &ara el e-amen de la causa nacional.

!n este edi7cio se disfrutaba de una )erdadera comodidad de

)ida0 am&lias ;abitaciones, buenos recursos ;igi'nicos, sana comida% con)eniente libertad, &or un &recio de estancia con el cual eraim&osible, fuera de este local, obtener tama"os bene7cios, graciastodo ello a la a%uda econmica del !stado. !sto ;ubiese resultado&lausible si en ese sitio no se ;ubiese ;ec;o una &ro&agandatendenciosa ;acia los 7nes de la secta.

!n &rimer t'rmino, ;a% 3ue ad)ertir 3ue, a la entrada@es&iritual de la esidencia estaba un buen % e-&erto cancerbero,

encargado, como los ;biles legosE&orteros de los con)entos, decernir % seleccionar el material ;umano 3ue llegaba con el deseo dead3uirir un &uesto.

untas facilidades encontraban los L19M recomendados &or los@amigos de la Institucin, % 3u' di7cultades los &rocedentes deotros sectores aleados de 'staP No fui testigo &ersonal, directo, delos obstculos 3ue se &onan &ara el ingreso de los sos&ec;osos decualidades refractarias a la con)ersin. laro 3ue, en este as&ecto,

como en todos los dems, la (ireccin obraba dando de )e# encuando notas o&ortunistas de im&arcialidad, )i)os alegatos &aratodos los tiem&os de la ecuanimidad % rectitud de los &rocedimientosseguidos.

8n elemento, tal )e# el ms im&ortante, de sugestin atea %re)olucionaria de la Institucin, era el eem&lo de las &ersonalidadesde &tima re&resentacin de estas ideas instaladas en la esidencia,donde con)i)an % se relacionaban con los estudiantes. All &asabantem&oradas, en in)ierno como en )erano, los ms cons&icuosre&resentantes de la doctrina, 3uienes, con sus con)ersacionesntimas %, sobre todo, con su )ida, iban con)irtiendo a la causa atodos a3uellos ne7tos. Due algunos resultaran incon3uistables, noofrece dudaK &ero tam&oco la ofrece el resultado e7ca# de estos;biles maneos.


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os efectos de la obra, al cabo de unos a"os de e-istencia, no se;icieron es&erar. a esidencia era un cuartel albergador de miliciasde)otas a la o&inin directora, % @dis&uestas a todo &ara defenderlas em&resas institucionistas % ser)irlas con obediencia ciega. !stases&eran#as no tardaron en reali#arse, como es&ero contar en el&r-imo L4FM ca&tulo, en el 3ue se describir alg


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Captulo III$umario0 $ntesis e)oluti)a de la Institucin. 2esimismo %

o&timismo. !stado &araltico de los gobernantes frente a laobra de los institucionistas. Ino&ia de cons&icuos &olticos. !l

@e'rcito de la esidencia. !l Ateneo, centro cons&irador %anar3ui#ante.

!n el 7nal del anterior ca&tulo ;e &retendido &robar cmo lae)olucin ;istrica en el curso de cincuenta a"os de )idainstitucional, ;aba logrado &asar en la &ro&aganda0 *Y, &or una fase7los7ca % &seudo a&ostlica con )erdadero @suaviter inmodoK 1Z,&or una accin acti)a reclutadora de combatientes, %, 4Z, &or laformacin de unas masas dis&uestas a eercer el im&erio de lafuer#a. Na estaban las ;uestes &re&aradas &ara contribuir a la obrare)olucionaria. !l cuartel con las milicias, sin 3ue a 'stas les faltaseincluso un !stado a%or directi)o, era la esidencia. As, de modogratuito % &'r7do, se labraba, con el dinero del !stado, la ruina deese mismo !stado, tan a%uno de ;ombres &ers&icaces o de lealesconseeros 3ue &usieran a las altas &ersonas situadas en la cumbredel 'gimen L41M constituido, en guardia contra el &eligro 3ue lamarc;a de los @intelectuales organi#ados en)ol)a &ara todanuestra sociedad. A este &ro&sito, &ermtaseme una digresin 3ueestimo de o&ortunidad en estos momentos. !s mu% frecuente ennuestro &as or ;ablar, con &oco sentido crtico, de o&timismo % de&esimismo. 6aturalmente, ambos estados de nimo obedecen confrecuencia a una frmula ;umoral, @endocrina, como &odramosdecir em&leando el lenguae de la &rofesin m'dicaK &ero cuntas)eces los &untos de )ista satisfactorios o amargos se deri)an de lamanera de &ensar, de la &erfeccin o im&erfeccin del cerebroP No no;e encontrado toda)a un medio imb'cil, o corto de inteligencia, conel resto de sus )sceras sano, 3ue no sea o&timistaK ni tam&oco un;ombre de talento claro, &rofundo, % de es&ritu sincero, 3ue no ;a%a

a&reciado con dolor las com&rometidas situaciones &or las 3ue,desde 3ue tengo uso de ra#n, ;a &asado nuestra 2atria.

on )erdadera se)eridad, ra%ana en la acrimonia, ;i#o (.arcelino en'nde# % 2ela%o la @diseccin de muc;os &ersonaesins&iradores de iner, entre ellos el 7lsofo im&ortador de la


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doctrina [rausista, $an# del o. !n estos uicios del eminente&olgrafo, no rebosa la amarguraJ $in duda 3ue muc;os lectorescali7carn sus o&iniones de @&esimistas. +oa3un osta fue el msfuerte declamador de lo 3ue se &udiera ;aber denominado @Delendaest Hispaniae. $us acentos tremebundos, L44M )erdaderos rugidosde len enaulado, no sonaban con e-&resin &esimistaJ ?rancisco$il)ela, es&ritu 7no, ;ombre de cultura e-tensa % ordenada, notraduca con a3uella frase de la @falta de &ulso, a tra)'s de unconce&to 3ui#s e-agerado, la realidad de una sociedaddescom&uesta &or tantos factores noci)osJ

6adie 3ue sea usto se atre)er a negar 3ue los mencionadoseran es&ritus selectos, cerebros cumbres de la cultura es&a"ola.

Al ;ombre de gran inteligencia % una de las &ro&iedades de losgrandes intelectos es la &erce&cin aguda de lo &resente % de lo)enidero las se)eras realidades, como las felices )enturas, no le&asan desa&ercibidas % )en lo 3ue no )e la masa mediocre de losmortales. $olamente cuando la falta de integridad, de )alor o deamor a la )erdad se ausentan, &ueden a&arecer sentimientos mu%distintos a los 3ue en lo &rofundo de su conciencia encierran.!ntonces se cali7ca de @con)eniencias lo 3ue en el fondo no es otracosa 3ue cobarda o inter's im&uro. omo esos defectos del es&ritu

;umano son, &or desgracia, tan frecuentes, ello e-&lica la escase# delos ;ombres sinceros. A;ora s 3ue )iene de &erilla recordar a3uellos)ersos de Due)edo 3ue dicen as0

@6o ;a de ;aber un es&ritu )alienteJ$iem&re se ;a de sentir lo 3ue se diceJ6unca se ;a de decir lo 3ue se sienteJ L4:M

Toda esta digresin ;a ido encaminada a facilitar la com&rensindel @estado &araltico en 3ue se ;allaban los ;ombres rectores de la&oltica nacional frente a la obra de la Institucin. a conocanJ, es3ue la ignorabanJ $eguramente ;aba de todo en la )i"a del $e"orK&ero es incom&rensible 3ue algunas de las ms re&utadasinteligencias no ;a%an inter)enido en contra con ms decisin oe7cacia. $in duda, &ara ciertos comentaristas, esta indeterminacin&ara actuar de las &ersonas 3ue &or su autoridad o7cial o social


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estaban ms obligadas, debe ser ac;acada al &lacentero &unto de)ista 3ue tomaban &ara mirar al &as. Tenan colocadas delante delos oos gafas de color de rosa, lo 3ue les ;aca )er las cosas cones&ritu alegre % con7ado.

!l o&timismo en los &olticos gobernantes era, en la ma%ora delos casos, desconocimiento &rofundo de la signi7cacin 3ue tenanlos acontecimientos. As &udo suceder 3ue (. el3uades \l)are# mediese, all &or el mes de mar#o de *94*, contestando al &eligro, &orm e-&uesto, de la &osible im&lantacin de un r'gimen comunista en!s&a"a, % de las maniobras re)olucionarias en este sentido lle)adas ala &rctica &or los directores de la guerra ci)il e internacional, ;o%claramente con)ertida en tragedia, @3ue ni una ni otra cosa &odansuceder en nuestro &as, donde nunca la masa &o&ular ace&tara las

ideas comunistas, ]c., ]c. $u triste 7n a manos de los bolc;e)i3ueses&a"oles, L45M cmo le ;ara recti7car en los


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esca&an, les mantenan retrados del 2oder, o no alcan#aban en lasbre)es eta&as de mando a &roducir en el &as el ansiado bene7cio.

!ra, &ues, unas )eces, la falta de &re&aracin o la escase# dedotes &ersonales lo 3ue esterili#aba el &aso de nuestros ministros

&or las &oltronasK otras, los @obstculos tradicionales 3ue %oconsidero no slo como e-&resin en el sentido corrientemente dadoa esta frase, sino como smbolo del escaso desarrollo de la disci&lina% cultura sociales se o&onan al '-ito de los gobernantes. Al lado detodas las causas mencionadas, con relie)e es&ecial, a&arecan lasconcu&iscencias, la falta de amor )erdadero a la 2atria % ;asta la@locura senil, &or3ue slo &or este moti)o, caritati)amente&ensando, &uede e-&licarse la triste actuacin, en el desarrollo delos acontecimientos actuales, de don +os' $nc;e# uerra, &oltico

3ue, a mi uicio, deber &asar a la /istoria como uno de los ;ombresms funestos 3ue ;a tenido !s&a"a, % &ara el cual est ;aciendomuc;a falta la &ublicacin de un dictamen m'dico autori#ado, 3ue&ermita ante la &osteridad atenuar, si no su&rimir, el uicio ad)ersode los 3ue escriban las crnicas de los siete a"os M

omo sntesis de lo e-&uesto, resulta 3ue el o&timismo de lainmensa ma%ora de nuestros ;ombres &


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fue lan#arse, &or im&erio de la )iolencia, a la con3uista de lasctedras ms im&ortantes, es&ecialmente las de adrid % Barcelona.8na de las &rimeras batallas se libr algunos a"os antes de ladictadura de 2rimo de i)era con moti)o de la &ro)isin de una)acante de 2atologa m'dica en la


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!stos % otros desmanes 3ue a continuacin narrar' lograroncrear dentro de la )ida uni)ersitaria, con e-tensin a otros entrosdocentes ms aleados de la 8ni)ersidad, un ambiente deintran3uilidad, desasosiego e indisci&lina 3ue ;acan difcil %a, ;acialos a"os 1F, 1* % 11, el desen)ol)imiento normal de los cursos, elmantenimiento de la autoridad en los Tribunales % el &restigio deesta misma autoridad en los rectores % decanos. Indudablemente, seestaba creando una atmsfera re)olucionaria en los laustros, a la3ue no eran aenos, ciertamente, bastantes &rofesores, a%udados &oralgunos directores de im&ortantes entros acad'micos. 2ara sercom&leto en la e-&osicin de los ;ec;os, dir' 3ue en la conductaescolar ;aba una gran &arte de buena fe, con sobra deinconsciencias. os )enes, de la esidencia o de fuera de ella,obedecan a la clara sugestin 3ue sobre la masa ;an eercido entodas las '&ocas de la /istoria los 3ue ;an sabido en)enenarla.

e%es de &sicologa colecti)a e-&lican el com&ortamiento de lasmultitudes ilusionadas o alucinadas. !l @tono moral de lascolecti)idades &resas de la ira como dice 2a%ot, es, casi siem&re,su&erior o inferior al 3ue corres&onde a la )erdad % a la usticia. a@masa, dicen otros &siclogos, L:FM modi7ca desfa)orablemente lassoluciones e3uitati)as. 2or eso e-&lcase la &osibilidad de 3ue unindi)iduo aeno a la mentira cuando se &roduce en el aislamiento,

difame, inurie % calumnie, en contacto con una multitud enfurecida.!s as como se ;a creado siem&re el @es&ritu re)olucionario en lasagru&aciones numerosas. 2or eso )ol)emos a decir 3ue la @&sicologade esta re)olucin es&a"ola se ;aba im&lantado %a en la '&oca a3ue aludimos, % aun antes de ella, en la 8ni)ersidad madrile"a.

6o era solamente en la 8ni)ersidad donde esta @&erturbacin delos es&ritus se reali#aba. oincidente con ella, en otras &artes setrabaaba ardientemente en el mismo sentido. /ombres mu%

inteligentes, aun3ue gra)emente dese3uilibrados, como 8namuno %Halle Incln, en $alamanca % en adridK otros, en todas &artes de!s&a"a, inter)enan constantemente con discursos, conferencias,con)ersaciones o libros demoledores. !n el recuerdo de muc;osestn las diatribas, incluso personales, contra los monarcas, de8namuno. !n la @cac;arrera del Ateneo se &oda or a Halle Incln&reconi#ar, ante un gru&o bastante nutrido de o%entes, la necesidad


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de ;acer un @degUello de las &ersonas reales. !sta institucin elAteneo ;aba deado de ser, &or la '&oca del 1*, un centro cultural,&ara con)ertirse en un club de agitacin &oltica de la &eor es&ecie.a masonera, con todos sus &recedentes, aleda"os % subsiguientes,se ;aba a&oderado del saln de conferencias % de los &asillos &araL:*M intrigar % cons&irar contra lo constituido. All acudan los;ombres del @caos, con)ertido en catastr7ca realidadK all&ululaban los A#a"as unto con los 3ue estu)ieron des&u's @alser)icio de la e&


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ocasin &ro&icia &ara desatar la ofensi)a, 3ue ;ubiese logrado, tal)e#, de un modo inmediato, sus 7nes, si no ;ubiese a&arecido la&ro)idencial 7gura de a3uel buen es&a"ol 3ue se llam (. iguel2rimo de i)era.

Captulo IV$umario0 $an arlos0 su re&resentacin ideolgica % romntica.

6ue)as costumbres &oco edi7cantes. !sfuer#os e-cesi)os de losinde&endientes en la atmsfera de los claustros de la 8ni)ersidadde adrid.

!n el a"o *91* ;ice mis o&osiciones a la ctedra de 2ediatra dela ?acultad de edicina de adrid. Tu)e la fortuna de obtener el&uesto deseado, &or ;aber sido a3uella !scuela de $an arlos la 3ueme ;aba formado en mi &rofesin, % en la 3ue ;aba reali#ado todosmis estudios. $an arlos re&resentaba sigue re&resentndolo, a


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&esar de su


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sugesti)os en la clase m'dica madrile"a, %, ms tarde, tambi'n en lade &ro)incias. o &rimero 3ue el (r. ecas'ns ;i#o en la &rofesin,fue establecerse con un boato e-cesi)o % no acostumbrado en lasanteriores '&ocas. asa, tren automo)ilstico, criados con casaca,7estas de magnate, e-;ibiciones % &ro&agandas, &asaban la sencille#austera 3ue ;aban usado en su desen)ol)imiento social % &rofesionalsus &redecesores en la ctedra. (elicado es ;ablar de la )ida&ri)ada, % no ;e de ser %o 3uien tenga el mal gusto de entrar endetalles sobre la del (r. ecas'nsK &ero no &uede negarse 3ue el;ombre con funciones de carcter &


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ilcitas com&etencias, de luc;as crueles, de di)isiones, % de todos losmales 3ue consigo L:>M lle)an las di7cultades econmicas &roducidas&or todo sistema des&ro)isto de sencille# % modestia. As, con &asor&ido, ;asta alcan#ar los tiem&os de la e&


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sino de bastantes au-iliares % a%udantes. $e notaba, &or cierto, la&aradoa de 3ue a3uellos 3ue se decan ms amantes de los &artidos&roletarios, e-&ositores frecuentes de sus sim&atas ;acia las clases;umildes, eran no slo los 3ue se &rocuraban meores comodidades,sino los 3ue mantenan una )ida 3ue &asaba, con muc;o, de la;olgura. 6o tu)e noticia de 3ue ninguno de ellos re&artiera, comoTolstoi, su fortuna entre los menesterosos % se fuera a &racticardesinteresadamente el bene7cio de su sabidura entre los &obres,abandonando el &rofesional negocio. on los ;bitos descritos, la?acultad ;aba &erdido sus se)eras % eem&lares costumbresantiguas. 8na necesidad de comerciar % de ganar dinero su&lantaba,en gran &arte, al es&ritu cordial % &uro de los )erdaderos ;ombresde ciencia. L:9M !l @tem&lo de la sabidura ;aba cado en manos delos mercaderes % un ;lito udaico &areca em&uar a losre&resentantes de la !nse"an#a m'dica en busca del oro. !n todaslas latitudes % sectores de las sociedades ;umanas, cuando eles&ritu se mercantili#a % el ideal sucumbe ante el groseromaterialismo, sucede siem&re 3ue el inter's conduce a formas deasociacin incom&atibles con la &ure#a de las costumbres. 8na de las&rimeras % esenciales, en la defensa de los bene7cios metlicos, es eltrust. !sta organi#acin se ;aba &roducido, %o creo 3ue de modoes&ontneo, entre un gru&o de a3uellos &rofesores. 8nidos, %recomendndose rec&rocamente en la &rctica &rofesional,

sal)aguardaban meor sus ingresos. !s claro 3ue esta unin &ara lomaterial era com&atible, % ;asta se ;aca &reciso 3ue fuesea&areada con la del ideario. $obre 'ste no ;aba duda. os del gru&oeran ateos &rofesionales. on frecuencia % o&ortunidad ;acanmanifestaciones delante de sus disc&ulos de su atesmo 3ui'n sabesi en el fondo alguno de ellos no estara demasiado con)encido delmismo, de igual modo 3ue en la @acera de enfrente muc;os;i&critas se mani7estan &oseedores de una fe catlica en la cual nocreenP. !l @negocio, &rinci&almenteK la ideologa, en segundo

lugar, eran los motores, a mi &arecer, 3ue les im&ulsaban adefenderse mutuamente % a establecer combinaciones crematsticas,o de otra naturale#a no e-tra"a a la ;ermen'utica. As &uedee-&licarse la L5FM sim&ata de ese gru&o de &rofesores, cu%osnombres no ;ace falta estam&ar, &or ser bien conocidos, con lasorgani#aciones masnicas e institucionistas. Tal m'todo de )ida,


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dirigido &or los ms cons&icuos entre los catedrticos sectarios de la8ni)ersidad me re7ero en este momento a todas las ?acultades,dentro de lo &oco enaltecedor del mismo, ;ubiese resultado lgicocon la &sicologa de los eecutantes si no a&areciese en &ugna con laad;esin a una labor &oltica destructora del ;ogar, de la ri3ue#a, dela cultura % del bienestar, como ;a sido la &atrocinada &or estos %otros @sabios causantes de la destruccin de la 2atria.

!l cuadro 3ue describo, a&licado a;ora solamente a $an arlos,da idea a&ro-imada a la )erdad de lo 3ue este laustro ;a sidodurante los &asados a"os de mi con)i)encia como &rofesor dentro desu seno. om&r'ndese bien 3ue toda as&iracin moral a una )idacorrecta, del ti&o sacerdotal antiguo, ins&irado &or nuestro 2adre/i&crates, tena for#osamente 3ue sufrir un inmenso 3uebrantoK

&or3ue donde deba ;aberse encontrado amistad &ura, )ocacin&rofesional, seriedad en la conducta % deseos de meoramientouni)ersitario, se ;allaba agitacin de negocio, )alores entendidos,intrigas &ara obtener cargos o &uestos, des&otismo, orgullo % escasaeducacinK defectos, todos los mencionados, &roductores de malestare interno disgusto &ara 3uien llegaba, como %o lo ;aca, ;enc;ido debuena fe.

(esde la &rimera de las @+untas de ?acultad a L5*M 3ue asist,

;ice la obser)acin de la ra&ide# % ligere#a con 3ue se trataban losasuntos ms interesantes &ara la !nse"an#a. Tambi'n not' cmo lasdeterminaciones, lo mismo 3ue las designaciones, &ara &uestos %;onores, )enan resueltas de antemano &or los @del gru&o. $usacuerdos se tomaban, indudablemente, fuera del recintouni)ersitarioK de tal modo, 3ue la minora resultaba &rcticamenteeliminada en la direccin de los asuntos acad'micos. !n loscomien#os de la )ida &rofesional de un nue)o catedrtico, si &orcasualidad 'ste no era de los &re)iamente sometidos a los

@gobernantes de la asa, &rocuraban introducirle en algunaomisin o &uesto ms o menos signi7cati)o, a 7n de atraerle a sucam&o con la @dedadita de miel. A3uello era una &romesa demeores atenciones, siem&re 3ue se &ortara como @ni"o dcil a susmandatosK 3ui'n sabe si ;asta &oda llegar a ser miembro den


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del @silencio. a cons&iracin tcita se eerca en torno de su&ersona, % con el mecanismo de la @m3uina neumtica, se&rocuraba enrarecer la atmsfera en su alrededor. Du' esfuer#ostena 3ue reali#ar &ara defenderse de esos bois de silenceestablecidos &or la secta, desde el momento 3ue el es&ritu deinde&endencia se rebelara contra el caci3uil conunto de losdirecti)os de $an arlosP ?alto de la com&lacencia de los magnates,el mesurado o ardiente L51M elogio interesado, dentro del cncla)e,de los a%udantes de cada catedrtico, el &rofesor no dis&uesto acometer la indignidad de someterse a los uasesde los @asociadostena necesidad de contar con la &roduccin de un trabao&edaggico % &rofesional cuatro )eces ma%or 3ue el de susa&ro)ec;ados colegas. !n este ambiente duro, de trabao fuerte,conoc a estimables com&a"eros 3ue, &or falta de )oluntad o deenerga &ara la luc;a, sucumbieron. !n cambio, los 3ue su&ieronresistir % a&retar, a &esar de los sufrimientos del esfuer#o, tu)ieronocasin de com&robar lo e-acto de a3uel aforismo niet#sc;eano0@Ten &or cierto 3ue, en los combates de la )ida, el enemigo 3ue no tedestru%e te ;ace ms fuerteK &ensamiento mu% &arecido al denuestro en'nde# % 2ela%o0 @os caracteres se tem&lan en el %un3uede la ad)ersidad.


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Captulo V$umario0 Accin demoledora de la 8ni)ersidad. Introduccin en la

misma de &rofesores indeseables. Algunos t&icos eem&lares. Acti)idades &aradicas de los elementos sectarios. acionale-&licacin de su desconcertante conducta.

(ado el es&ritu dominante en los laustros de la 8ni)ersidad deadrid ;acia el a"o *91* % siguientes, de tendencias francamentelibertarias % destructoras, no &uede e-tra"ar 3ue los elementosdirecti)os sectarios &rocurasen, sir)iendo las ins&iracionesinstitucionistas % masnicas, un reclutamiento en el &rofesorado,como en todos los &uestos de labor intelectual, consonante con sus&ro&sitos &olticos. (e a3u la descon7an#a 3ue a&areca en losmangoneadores ante el sim&le anuncio de un &osible catedrtico 3ueno fuera de sus ideas ni &resentara Ge-ible la cer)i# &ara inclinar la

cabe#a ante los @due"os de a3uellos entros % or&oracionesacad'micos. 6o era necesario 3ue el candidato ;ubiese manifestadoclaras ideas derechistasK bastaba con 3ue su conducta anterior fueseL5:M inde&endiente o @neutra, &ara ins&irar serios recelos. os@intelectuales de la 8ni)ersidad seguan el conocido lema0 @3uienno est conmigo, est contra m. !n la '&oca a 3ue me re7ero, losaltos &oderes re)olucionarios tenan %a decretada la absorcin totalde los entros de ense"an#a. $e daban cuenta de la &oderosa&alanca 3ue signi7caba un &rofesorado sectariamente unido,

eerciendo su inGuencia moral % obeti)a sobre una masa de )enesalumnos fciles de en)enenar con lugares comunes de &'r7da accinsobre sus ingenuos cerebros. 6o se des&erdiciaba lugar ni ocasin&ara )erter la &on#o"a de la incredulidad sobre la eligin, laonar3ua, la ?uer#a &


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actuantes llegaba al e-tremo de no consentir sin &rotesta lae-&resin de la &alabra @(ios. ecuerdo 3ue, en mi &rimera )isita auno de a3uellos colegas, como en el curso de la con)ersacinsurgiera un tema de inter's &ara la ?acultad, con cu%o moti)o %odiera0 @/abr 3ue &edirle a (ios 3ue eso no suceda, el aludidodoctor me contest r&idamente0 @!l &edirle a (ios lo ;ar usted,&or3ue %o no suelo re#arle ni acudir a `l &ara nadaP !sta &ersonaes la misma 3ue a;ora Qenero *94>R )iste a sus ;ios en ?rancia conemblemas nacionales, &ara disimular su i#3uierdismo rabioso.

ontinuando con el relato de la busca de L55M catedrticos engeneral, de todo el &ersonal docente descredos % anar3ui#antes,&or &arte de los elementos dirigentes de la 8ni)ersidad, dir' 3ue,&ara lograrlo, no re&araban en di7cultades ni obstculos. !l saber, la

moralidad, los antecedentes de la &ersona elegida, signi7caban &araa3u'llos lo de menosK lo im&ortante era 3ue el candidato estu)iesee-&uesto a coo&erar decidida % fanticamente en la tcticare)olucionaria o&ortunista, con toda la )iolencia destructora &ara el'gimen, obeti)o &rimordial en la mente de los 3ue ;aban %a&laneado la disolucin de !s&a"a.

8n caso ar3uet&ico de este modo de &roceder en elreclutamiento del &rofesorado, es el del doctor 6egrn, &ersonae

desconocido en nuestro &as ;asta 3ue la guerra euro&ea lo arrosobre las costas &eninsulares, &ara fatalidad de nuestros intereses.(e origen canario, el (r. 6egrn no era, seg


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Institucin, el a&o%o % los alientos con)enientes &ara &ermanecer enadrid, en donde la irre&arable &'rdida de a3uel gran maestro de?isiologa 3ue se llam me# Oca"a, ocurrida en el )erano de *9*9de un modo ines&erado, de )acante su ctedra, tras&asada, o;)eleidades aciagas de la ?ortunaP, desde las lim&ias manos % ele-3uisito cerebro del ilustre &rofesor fallecido, a las sucias dela)enturero 6egrn, 3uien en a3uel momento reali#aba %a el &rimerode los @sa3ueos formidables, ms tarde &rodigados &or 'l mismo,as como &or sus amigos % com&inc;es los rusosde fuera % dentro de!s&a"a.

6ing


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iudad 8ni)ersitariaK di&utado a ortes introducido en la omisinde /acienda, ntimo amigo de Indalecio 2rieto, e instrumentoa&ro&iado &ara efectuar, de acuerdo con el


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tienen un forro cutneo resistente, el (r. 2ittaluga &osee unae&idermis moral toda)a ms im&enetrable. 2or eso, las leccionesdelicadas no se ;an ;ec;o &ara 'l, atento continuamente a sacar&artido de nuestra bendita tierra, inocente ;asta el &eligro, aladmitir ;ombres de la cala"a moral de este vivoe- italiano.

!n el momento en 3ue escribo estas &ginas, el (r. 2ittaluga,unido a otros muc;os intelectuales institucionistas esca&ados de la!s&a"a roa, esa #ona tan admirada % elogiada &or ellos, % de la cual)oluntariamente se eliminan, organi#an en 2ars reuniones &aradesacreditar a los defensores ;onrados de la 2atria. !n ellas, lasdiatribas llenas de soeces calumnias las mismas 3ue em&leabancontra el general 2rimo de i)era se &rodigan contra los ;ombresre&resentati)os de la nue)a !s&a"a, &retenden escribir una

@!nciclo&edia, medio 3ue el udasmo les brinda como &rete-to &araa%udarles econmicamente, al tiem&o mismo 3ue con ella seaumenta la le%enda negra es&a"ola, %a 3ue L=FM en sus &ginas se;arn relatos denigrantes &ara nosotros, 3ue se es&arcirn des&u's&or el mundo entero, % con cu%a obra &odrn decir nuestrosa)is&ados enemigos0 @/e a3u una labor cultural 3ue se ;a &odidoefectuar gracias a la e-&atriacin de estos ;ombres de un solar %ambiente mefticos.

6o es &osible dudar un instante0 estas gentes son incom&atiblescon nosotros. !stn entregadas a los &eores enemigos de !s&a"a &ormoti)os inconfesables, % su conducta fala# obliga a creer en lo 3ueinformaciones res&etables a7rman, 3ue al lado de sus relacionesmasnicas tienen otras 3ue se &ueden incluir bao el e&grafe0 @Alser)icio del !-tranero.

$i no fuese as, cmo &odan ;aber laborado tanto en nuestroda"oJ

on inusitada frecuencia ;e odo de labios de &ersonas dedi)ersas erar3uas sociales la misma &regunta0 es com&rensible3ue estos intelectuales, la ma%or &arte &rofesionales 3ue ;an sabidosituarse en &osiciones econmicas en)idiables, nos ;a%anconscientemente lle)ado a una desgracia como la 3ue actualmentesufrimos, sin re&arar en la &'rdida de esos &ersonales intereses


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materiales 3ue con tanto a;nco se ;an &rocurado, sin 3ue su modode )i)ir autorice a considerarles dis&uestos a entregarlos enbene7cio de las clases &obres de la sociedad, 3ue a&arentementetrataban de meorarJ

!s im&osible admitir una norma de altruismo en su conducta,&or3ue el e-amen de la misma nos L=*M ense"a lo contrario. Du'aliciente u obeti)o social, doctrinal, &rctico, de accin, ;a lle)ado aestos intelectuales &or un camino tan noci)o &ara nuestro &asJ aignorancia de un t'rmino 7nal tan trascendente como desastroso, se&odra difcilmente ace&tar &ara alg


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sociedades internacionales secretas &uede ;acerse no slo de unmodo directo, como a7liado de n


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o&osiciones a la ctedra de 2atologa general de la ?acultad deedicina de adrid.

(os o&ositores conocidos en !s&a"a se &resentaronK &ero el 3uetu)o desde el &rimer momento el a&o%o de la o&inin sectaria, % no

sectaria, fue el (r. 6o)oa $antos, a la sa#n catedrtico de la mismadisci&lina en la 8ni)ersidad de $antiago de om&ostela. /ombre defama merecida &or su des&eada inteligencia, autor de algunas obrasim&ortantes, entre ellas un Tratado de la asignatura a 3ue o&ositaba,iba &recedido su cr'dito cient7co de un conce&to, uni)ersalmentee-tendido, de @;ombre mu% de i#3uierdas. (esde luego, en L==Malgunos de sus escritos, %, como ms tarde &udo )erse, enconferencias % discursos, a&areca el citado doctor como carente enabsoluto de toda idea religiosa. !l atesmo su%o no era sim&lemente

&asi)o, sino, &or el contrario, de accin. ara )e# la blasfemia,en)uelta en el ro&ae su&erculto de una oratoria fcil % cient7ca,;abr ra%ado ms alto 3ue lo estu)o en los labios del &rofesor 6o)oa.AM e'rcito de asistentes a losdi)ersos actos de la luc;a, no de forma acad'mica, sino fero#mentere)olucionaria. 2rensa, estudiantes, amigos, &aisanos, sin ol)idarentre 'stos a los de&endientes % mo#os de las @2escaderas


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oru"esas, fueron &uestos en combate con ardor % es&ritu casiin)encibles.

!s menester se"alar en este relato 3ue, a las sim&atas de lossectarios % al maneo de las ;uestes escolares, encuadradas &or las

milicias de la @esidencia, se una el @galleguismo en forma decualidad sim&tica &or lo 3ue tiene de @amor a la tierrucaK &ero, a)eces, como lo fue en esta ocasin, terriblemente inusta. !l (r.6o)oa $antos contaba con la inter)encin de sus &aisanos, % con lare&resentacin de los mismos dentro del laustro, de modoincondicionalmente fer)oroso.

Todas estas circunstancias crearon, desde los das anteriores alcomien#o de los eercicios, un ambiente de &asin, im&ro&io &ara la

serenidad necesaria en una luc;a donde la usticia seca debiera;aber sido la


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!n mis conseos al efe del inisterio, le indicaba la con)enienciade no transigir. /acale la consideracin de la )entaa &ara el&restigio de la Autoridad, de no dear a los contumaces agitadores laconsecucin de sus )iolentos a la &ar 3ue taimados &ro&sitos. e;ablaba del usto castigo merecido &or los dirigentes % actuantes entan intolerables &erturbaciones. !l fracaso en la obtencin de lactedra, a&la#ada su &ro)isin sine die, era, a mi L=9M entender, lasolucin 3ue merecan. 6aturalmente, se necesitaba &ara 3ue esta


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necesitada reforma, ace&tar la solucin de urgencia, a la &ar 3uee7ca#, de mi &ro&uesta. a realidad, no obstante, a&areci demanera mu% distinta, e incom&atible, seg


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Bueno es ;acer constar 3ue la muerte de a3uella )enturosa,aun3ue &asaera, eta&a de la )ida es&a"ola no fue, en de7niti)a, otracosa 3ue el resultado de estas dos causas0 la actuacin sola&ada,im&lacable de las organi#aciones de i#3uierda intelectuales, % eldesgaste fsico % moral 3ue en el organismo del (ictador se &roduo&or el e-cesi)o trabao a 3ue se someti, 3ui# sin el entrenamientodebido % el m'todo necesario.

o anteriormente relatado con ocasin de las o&osiciones a lactedra de 2atologa general de la ?acultad de edicina de adrid,fue una de las &rimeras % ms &rofundas im&resiones 3ue ;e tenidodurante mi )ida &


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(ebemos deducir de estas consideraciones, sacadas de la realobser)acin de ;ec;os % de &ersonas, la consecuencia &esimista dela inutilidad de luc;ar contra el malJ

i tem&eramento no me &ermite ace&tar esta conclusin tan

&oco estimulante. 6oK el ;ombre ;onrado % recto debe forar lasarmas del combate en un %un3ue &oderoso, a &rueba dead)ersidades. Al 7n % al cabo, la raigambre de nuestro amor a la L>:M2atria % a la eligin es la 3ue nos ;a &ermitido )encer en lacontienda entablada en la &resente ;ora contra nuestros enemigose-teriores e interiores. 8na labor en'rgica, aun aislada, resulta a la&ostre de e7ca# resultadoK &or3ue los conce&tos emitidos % las&alabras lan#adas en la luc;a, dean una im&resin en bastantescerebros 3ue es obeto de rumiacin ulterior % de elaboracin en los

o%entes de una con)iccin fa)orable a la causa. 6i el bien ni el mal,7los7camente ;ablando, son ine7caces en el mundo. $i el mal causatan enormes estragos, el bien corrige, e)ita % restaura muc;os de losmismos. (e a3u la deduccin de 3ue mi com&ortamiento como&residente del mencionado tribunal de o&osiciones, si no logr losideales efectos, consigui ad)ertir a muc;as &ersonas sobre el&eligro de ciertas tcticas. as lo 3ue se &uso claramente de relie)efue el &oder de las sectas % la debilidad suicida del obierno, situadomu% leos de la com&rensin de cunto signi7caba &ara su )ida la

im&osicin del &oder faccioso, % el &eligro amena#ador 3ue en)ol)ael triunfo de la demagogia.

6o 3uiero terminar este ca&tulo sin a7rmar de una manerarotunda 3ue cuanto a3u digo, tanto sobre la inusticia, como sobre ele3ui)ocado desenlace del acto acad'mico &or mi descrito, en nadaafecta al fondo de la cultura meramente cient7ca ni a la inteligenciadel o&ositor agraciado, sino a la inadmisible &oltica seguida &or losfamosos intelectuales re)olucionarios.


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Captulo VII$umario0 i e-&eriencia como onseero de Instruccin &


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aludidos e-tremaban sus ata3ues contra el efe del obierno, susministros % los ciudadanos insumisos a sus mandatos % o&iniones. !nla intimidad tomaban resoluciones @contem&ori#adoras, &ero,siem&re con alguna discul&a ms o menos afortunada, &rocurabanco;onestar sus a&etitos, concu&iscencias % torcidas intenciones conla &ure#a de los &rinci&ios democrticos % los mandatos de la @igade los (erec;os del /ombre. uando ara"n fue encarceladocomo consecuencia de cons&iraciones, sus com&a"eros de intrigas&olticas redactaron un famoso documento, en el 3ue en los msele)ados tonos e-&resaban el amor a la libertad % los im&erati)os dela conciencia ;umana. !l habeas corpuses&arca en latn su urdicoorigen, rector de las ci)ili#adas organi#aciones de la )ida &oltica %social. as cuando el &eligro bolc;e)i3ue, &re)isto &or unos cuantoses&a"oles, entre los cuales tengo la ;onra de contarme, dio lugar alas matan#as de ;ombres, mueres % ni"os, insu&eradas en la L>>M;istoria de los &ueblos brbaros, cu%o t'rmino no &uede &re)erse enla fec;a 3ue escribo estas lneas, ninguna de a3uellas )estales deltem&lo de T;emis tu)o la ocurrencia de &rotestar en la misma formaante los )erdugos. ?ue lo contrario lo 3ue ;icieron0 7rmardocumentos de ad;esin a la causa de los roos, &ronunciarconferencias &or radio enaltecedoras de un obierno de asesinos %ladrones, mandar [ilom'tricas cartas de ad;esin, como las en)iadas&or el (r. r3ue# a la &rensa e-tremista dominante, % dear correr

la es&ecie de 3ue todo eso ;aba sido ;ec;o &or temor a lasre&resalias % bao el im&erio de la fuer#a. omo si la cobarda&udiese ser una usti7cacin de )illanas conductas, ni ser)ir dee-cusa ante los ;onorables conciudadanos ni frente al uicio de la/istoriaP

o e)idente fue 3ue los &rotestantes &eri&at'ticos de entonces setransformaron en los mansos corderos de a;ora, % 3ue todas a3uellasretricoEurdicas manifestaciones de los tiem&os dictatoriales se

con)irtieron en sumisiones )ergon#osas o en re&ulsi)os artculosllenos de &er)ersidad, como el a&arecido bao el ttulo de @austicia Qmes de agosto de *94=R 7rmado &or Ossorio % allardo 7gura re&ugnante 3ue &asar al futuro como la e-&resin del msoriginal ti&o de farsante trgico, en un &eridico madrile"o,incitando a las milicias roas al asalto de la Audiencia, lo 3ue;icieron al siguiente luctuoso da, en el 3ue dignos magistrados


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&erdieron su )ida, Tribunales ;onorables L>CM desa&arecieron, % ensu lugar se instalaron otros con ma%ora de ueces 3u' sarcasmoP&o&ulares, &resididos &or la 7gura )il de un catedrtico de Halencia,ariano me#, al ser)icio de la anar3ua % del crimen.

!n los tiem&os de 2rimo de i)era, estas &ersonas,&robablemente dolidas de la &'rdida de su inGuencia, as como de losbene7cios 3ue )enan disfrutando en los anteriores a"os de losobiernos constitucionales, se mesaban &9M

a cam&a"a &ara sacar a ara"n de la rcel odelo, se ;i#o

seg


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&ersona, se ocultaba una cam&a"a &ara el descr'dito de la(ictadura.

!n el Instituto lorente, encontrndome a la sa#n en com&a"adel (r. eas Q(. +ernimoR, entr uno de los a%udantes de ara"n

con la LCFM instancia sub)ersi)a, % all solicit nuestra 7rma. omonos negsemos a estam&arla &or la e-istencia de &rrafos inuriosos&ara los ministros, % es&ecialmente ofensi)os &ara el &residente delobierno, el &ortador a &esar de ;aberle dado la noticia de micoo&eracin a la demanda de libertad de la ?acultad de edicina, se)ol)i con tonos airados % nos amena# con re&resalias en el&or)enir, &or el delito de @lesa maestad de no someternos a losdictados de una im&osicin incorrecta e ino&ortuna.

!l caso del castigo de ara"n dio moti)o &ara conocer una )e#ms la e-istencia de una asociacin de @fuer#as intelectuales,numerosas, acti)as, &erfectamente organi#adas, 3ue e-tendan, a laorden de los su&eriores, sus tentculos &or los mbitos del Ateneo,8ni)ersidades, aboratorios, /os&itales % tertulias ms o menos&rofesionales. 2re)ali'ndose estas organi#aciones del caritati)osentimiento de los es&a"oles inde&endientes % nobles, de la suicidatendencia de nuestro carcter a ir en contra de los &rinci&iosautoritariosK culti)ando el egosmo o la cobarda de los 3ue crean

)er el triunfo de los anar3ui#antes cerebros de los ;ombres cultos,integradores del mo)imiento contrario al eneral dictador, losagentes de las conocidas em&resas lograron &roducir ruido % ;aceruna &ro&aganda no contrarrestada &or fuer#as anlogas % contrarias,ni &or la energa debida en los ;ombres del obierno.

a (ictadura, sir)a esto a modo de digresin, LC*M &ec en )ariasocasiones, aun ;abiendo &rocurado al &as grandes bene7cios. 8node los defectos ms gra)es en 3ue incurri fue, a uicio mo, el no

;aber sabido obrar, cuando las o&ortunidades se &resentaron&ro&icias, con m'todos @dictatoriales en los 3ue la usta re&resinalcan#ara el grado necesario. 6o obstante el sistema de multas,destituciones % otras medidas &arecidas, el noble cora#n de 2rimode i)era mostrse d'bil &ara derramar sangre. /ubiera entoncesbastado con la &'rdida de )idas de uno de los das actuales, &ara 3ueel im&erio de la le% % el res&eto sagrado a las autoridades ;ubiesen


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sido ;ec;os tangibles. on unas cuantas docenas de &enas ca&italesim&uestas a los de arriba, % las necesarias de&ortaciones %e-&ulsiones del territorio nacional, muc;os de los energ


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8na e-ce&cin es necesario establecer con la LC4M ilustre&ersonalidad, tan combatida &or los enemigos de la 2atria, delgeneral artne# Anido. !ste )erdadero es&a"ol, con mirada certera% &ers&ica#, trat, desde el &rimer momento, de contrarrestar, nocon crueles, sino con ustas medidas, la actuacin ine3u)oca de losintelectuales agitadores.

Tu)o la necesaria asistencia de los ;ombres de gobierno 3uecon 'l colaborabanJ e &ermito dudarloK &ues, si as ;ubiese sido, lae-&eriencia segura % el atinado criterio de este ilustre generalseguramente ;ubiesen &uesto coto a las descaradas inter)encionesde los enemigos.

8na le%enda negra, continuadora de la nacida en Barcelona, &or

accin de los comunistas, anar3uistas, atracadores % asesinos 3ue&ululaban a su antoo &or las calles de la gran ciudad es&a"ola,causando incesantes )ctimas, cu%o t'rmino se debi a la e7ca# %en'rgica labor del general artne# Anido, se comen# a es&arcirtambi'n &or los mentideros madrile"os.

uando la difamacin, la insidia % la calumnia se desen)uel)ensin 3ue nadie les &onga obstculo, el efecto es siem&re fatal. Assucedi en este caso. (ebilidades % com&lacencias, es&eismos de

ca&tacin % bene)olencias insanas, &ermitieron 3ue la obra dedesgaste continuase sin t'rmino ni freno. !ntonces se form laatmsfera irres&irable en 3ue se ;aba de as7-iar la (ictadura.

XXX

V1WDueremos aludir con el recuerdo de esta frase ;istrica a las&rotestas contra la &oltica de los roos ;ec;as &osteriormente %a destiem&o &or los &rimates de la intelectualidad causantes dela tragedia, en las 3ue re#uma el moti)o egosta del inter's

&ersonal com&rometido &or las L>9M /ordas roas, 3ue antes de lacontrarre)olucin eran &ara ara"n, Ortega % asset, 2're# deA%ala % tantos otros el legtimo &rogreso % la )erdadera libertad.(galo, si no, la Asociacin de Amigos de los $o)iets, en la 3uea&areca alguno de los nombres citados.
http://www.filosofia.org/aut/ite/1938p075.htm#kp02%23kp02http://www.filosofia.org/aut/ite/1938p075.htm#kp02%23kp02


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Captulo VIII$umario0 am&a"as contra la (ictadura de 2rimo de i)era. !ntrada en acti)idad de la ?8!. !l $deario espa#olde ani)et %sus aciertos en el enuiciamiento del &or)enir de nuestra 6acin. 6uestra /istoria, fuente de conocimiento de las condiciones&sicolgicas de la ra#a ;is&ana.

/acia *91>, el ambiente en torno de la (ictadura de 2rimo dei)era se iba enrareciendo. os agentes causantes de esta inGuenciaeran los mismos de siem&re. a 8ni)ersidad de adrid tom una

&artici&acin de &rimer orden en las constantes re)ueltas, % losclaustros de la misma fueron, al &rinci&io cautelosamente, ms tardede modo descarado, asiento de escndalos % disturbios escolares,cada )e# de carcter ms gra)e. !ste desasosiego e intran3uilidadculminaron en la cada de la (ictadura, en la formacin del obiernoBerenguer, eem&lo &erenne de accin des3uiciadora del !stado, %,


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7nalmente, en el ;undimiento del 'gimen tantas )eces secular,de7niti)o triunfo de las fuer#as re)olucionarias, &recedido delconocido artculo de Ortega % asset @Delenda est %onarchia. LC=Ma e-teriori#acin de la sentencia son a un gol&e de aldaba&ro&inado a la &uerta &rinci&al del 2alacio de Oriente.

?ue en esta '&oca cuando la ?8! em&e# a ad3uirir carta denaturale#a, o &or lo menos en este tiem&o se ;i#o lo su7cientemente)isible &ara no dudar del rumbo 3ue tomaba. omo se ;abr )isto&or las anteriores &ginas, la incubadora de esta organi#acinescolar fue la esidencia de !studiantes. (e ella sacaron loselementos directi)os % &ro)ocadores. a acti)idad de estos M #ona im&ortante de la sociedad es&a"ola, en la 3ue obraron conacti)idad e7ca# las logias. uando un ambiente de &asin se crea entorno de las &ersonas o de las Instituciones, es mu% difcil disol)erlo.$e necesita una )ista &ers&ica# &ara se&arar la &arte moti)adora dela reaccin en contra, % una mano dura dis&uesta a cortar

&rontamente el camino a la rebelinK &ero, &or desgracia, esto no se;i#o &or el obierno. uando se intent su reali#acin, era %a tarde,%, adems, se usaban m'todos e3ui)ocados, acrecentadores de laconfusin e-istente. !n resumen, el fracaso &roducido,&robablemente, &or no e-istir arriba un claro conce&to de losorgenes del mal, % de lo necesario 3ue era &oner en &rctica unatera&'utica etiolgica, result cosa e)idente e irremediable, como


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&udo )erse en los a"os 3ue &recedieron al 7n de la (ictadura, &ortantos otros e-tremos gloriosa &ara !s&a"a.

Indudablemente tiene ra#n ani)et cuando, en su $dearioespa#ol, se"ala las escasas a&titudes de nuestra ra#a &ara la

disci&lina colecti)a. !n el indi)idualismo, en las guerrillas, &odemosra%ar a gran altura, como lo demuestra la luc;a actual, asombro delmundo. as donde se e-ige unidad de accin, a&o%o moral %, sobretodo, disci&lina interior, anmica, &sicolgica, a&arece enseguida eles&ritu cabile"o, la disgregacin de nuestros esfuer#os, las rencillas&ersonales, los celos &e3ue"os % las me#3uinas &asiones. !llo se&resta a considerar como indis&ensable &ara nuestro &rogreso elculti)o de la LCCM @c'lula social, %, tal )e#, la federacin de&e3ue"os organismos autnomos, lo 3ue, en cierto modo, e-&lica la

facilidad con 3ue el caci3ue se desen)uel)e % )i)e en nuestra benditatierra. 2or eso, el efe 3ue mande a la 6acin es&a"ola ;a de reunircondiciones &ro)idenciales, debe saber elegir &ocos % buenoscolaboradores, 3ue fomenten el sentimiento de inde&endencia denuestra alma, unido a una base de usticia % dignidad. $obre estos&rinci&ios ;a% 3ue im&lantar la @disci&lina de ;ierro ca&a# demantener suetos a los arri)istas, a los cnicos, % a los &caros, tanabundantes ;o% como lo eran en los siglos HI % HII, seg


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encu'ntrase sometida a los embates, rencillas, egosmos e;i&ocresas de las dems cualidades naturales, %, &or lo tanto, resultanecesitada de una )igorosa a%uda, as como de un esmerado culti)oen los tiem&os normales % &ac7cos &ara 3ue &ueda o&oner el&re)isor frente de combate, fuerte % tena#, en el resguardo de la6acin.

O;, si los es&a"oles tu)i'semos, al lado de las mara)illosasintuiciones % del feli# ingenio &ara la im&ro)isacinK unto a la )irilcondicin de los )enes, la tenacidad en las em&resas % lacoordinacin en los esfuer#os de las ra#as saonas, el dominio delmundo no ;ubiese ams &asado de nuestras manos a las aenasP ases difcil destruir las condiciones innatas de un &ueblo0 resistentena#mente a las &ruebas e intentos, &or en'rgicos 3ue sean, de

modi7cacin. As se )e cmo, en la )anguardia, la luc;a &or nuestrae-istencia, 7a al combatiente cara al enemigo, sin 3ue el nimodesfalle#ca, % al &ro&io tiem&o, en la retaguardia, surgen lasdi)ergencias entre los buenos &atriotas, en lugar de im&edir, unidos,la llegada a los &uestos de mando de los )i)idores, egostas %farsantes.

Basta oear la /istoria nacional, &ara con)encerse de 3ue entodos los tiem&os ocurri lo mismo. /ernn ort's, con un &u"ado

de ;ombres, con3uista el ms grande % temible de los Im&erios L9FMamericanos. onsagrado su triunfo, tiene 3ue defenderse de losmismos es&a"oles, decididos a malograrloK 2i#arro muere a mano desus com&atriotas, des&u's de ;aber escrito las &ginas msinconcebibles de )alor % astucia guerreraK % el general 2rim cae baoel trabuco de sus correligionarios de a%er, cuando ;aba dado a!s&a"a das de gloria en los combates africanos, &ocas )ecessu&erados.

$in 3ue suene a &aradoa, de la cual so% enemigo, aun3ue slosea &or el abuso 3ue de ella ;i#o 8namuno con el da"o consiguiente,creo, a &esar de lo 3ue acabo de e-&oner, en la &osibilidad de unacontencin de las defectuosas condiciones de nuestro modo deactuar en la )ida &


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cifra en estos momentos en el eneralsimo ?ranco. 6unca se dio enla /istoria la e-istencia de un efe &r-imo a ser consagrado &or lams grande de nuestras e&o&e%as. (e su )ida de&ende sencillamenteel &or)enir de !s&a"a. (ios se la conser)eP `l, como caudillo de la2ro)idencia, a%udado de buenos % 7eles &atriotas colaboradores,&odr ;acer &or esta !s&a"a de nuestros amores el milagro deencau#arla % remediarla en sus defectos. 2atriotismo, conocimientode la &sicologa nacional, % energa bien administrada, son, a nuestro&arecer, los elementos indis&ensables.

Hol)iendo a la ;istoria de los @intelectuales, % L9*M de suinter)encin en los tiem&os de la (ictadura, ;e de referirme a;ora altristemente famoso estudiante $bert. ?ue ;acia el a"o *91>V^W, sin3ue las ra#ones e-&uestas &or m en el &rlogo me &ermitan

garanti#ar la fec;a, cuando se descubri la e-istencia de este&ersonae de ocasin, con moti)o de una )isita del general 2rimo dei)era a la !scuela de Ingenieros agrnomos de la oncloa. on lasim&ata % buena educacin caractersticas del (ictador, )isitaba'ste las instalaciones de a3uel centro docente, cuando, una comisinde alumnos, a la cabe#a de los cuales estaba $bert, &idi &ermiso&ara e-&onerle unos deseos. !l eneral, bondadoso, accedi a orlos.le) la )o# cantante el ms 3ue maduro estudiante, 3uien se dirigial +efe del obierno con maneras % &alabras incon)enientes en

solicitud de una )ulgar e inadmisible concesin. Al rec;a#arla el&rimer ministro, res&ondi $bert con una tal falta de res&eto, 3ue no%a el general 2rimo de i)era, sino cual3uier ciudadano en &osesinde autoridad, se ;ubiera obligado a tomar una determinacin. !stafue dura, como mereca la &ersona % el acto inconcebible. $bert3ued in;abilitado durante )arios a"os &ara seguir cual3uiera clasede estudios o7ciales. /a de ad)ertirse 3ue el fuga#mente famosoestudiante ;aba sido un @cataEcaldos de di)ersas carreras, enninguna de las cuales sobresali lo ms mnimo, como los tiem&os

&osteriores lo ;an demostrado cum&lidamente.

a actitud del alumno de la !scuela de L91M Ingenierosagrnomos fue es&ontneo &roducto de un cerebro le)antisco %re)olucionario, o escena &re&arada de antemano en conni)encia conlos agitadores de fuera, &ara &roducir un escndalo desfa)orable&ara el sistema gobernanteJ /o% no cabe dudar0 las concomitancias
http://www.filosofia.org/aut/ite/1938p085.htm#kn*%23kn*http://www.filosofia.org/aut/ite/1938p085.htm#kn*%23kn*


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de $bert con los elementos noci)os &ara !s&a"a, sus relaciones cone-tremistas, catalanistas, se&aratistas % roosK su escasa inteligencia,com&letamente &robada a posteriori, lo mismo en el cam&o de losconocimientos t'cnicos 3ue en el de la &olticaK incluso la absurdafalta de '-ito en su res&uesta a los entusiasmados estudiantes 3uefueron a recibirle a su entrada en adrid con solemne e inmerecidaa&oteosisK toda su &ersonalidad, en suma, ;a demostrado, de unamanera &almaria, 3ue este indi)iduo no &udo ser ms 3ue un@desa&rensi)o, un mani3u al3uilado &or los )erdaderos directi)osde la e)olucin anr3uica, 3ue les sir)i &ara &ro)ocar un incidentelleno de estridencias % resultados &erudiciales &ara la ilustre 7gura&uesta al frente de los destinos de !s&a"a.

!fecti)amente, a;ogados &or la &rensa enemiga de la (ictadura

3ue era la casi totalidad de la e-istente los moti)os detallados de laactitud del eneral, difciles de e-&oner, &or otra &arte, % ;ec;aatmsfera en tertulias % cenculos &or las co;ortes re)olucionariasen todos los mbitos de la ca&ital de !s&a"a, 3ued Gotando en elambiente, con moti)o del asunto en cuestin, &or un lado, la L94Mnatural &eticin de un escolar, e-&uesta con la )i)e#a ms o menosafortunada de la u)entud, %, &or otra &arte, la intem&erancia s&era,casi tirnica, del ;ombre 3ue, &or su cargo, edad % autoridad,debiera ;aber tenido el gesto sim&tico de &erdonar el arrebato

u)enil.

$e e-&lot, una )e# ms, la le%enda del absolutismo dictatorial %los &eligros de )erse sometidos los es&a"oles a un &osible gestoneurtico o a)inagrado del ;ombre re&resentante del 2oder. amultitud mediocre, la interesada &'r7damente, % algunos ;ombrescultos, liberales de buena fe e inde&endientes, mal informados,sugestionados &or los ruidos calleeros ;bilmente &roducidos,cre%eron, sinceramente algunos, falsamente muc;os, 3ue el eneral

no tena ra#n % 3ue lo cometido con el estudiante de la !scuela deIngenieros agrnomos ;aba sido sim&lemente un atro&ello.

os comentarios ;ec;os durante muc;o tiem&o sobre el incidentede la oncloa, &erudicaron enormemente al cr'dito &


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de)ol)'rselas a los &obres &oseedores de las &a&eletas del onte de2iedad, tu)ieran el efecto de neutrali#ar % ;acer desa&arecer el da"ocausado &or lo 3ue se cali7caba de una intem&erancia intolerable.

!n este caso la e-&eriencia &osterior bien lo ;a con7rmado,

&recisamente, 2rimo de i)era L94M dio &ruebas de una magn7caintuicin en el conocimiento de la &sicologa del @agente&ro)ocador. 2ercibi toda la bae#a moral de la intriga 3ue se le;aba tendido, % reaccion como corres&onda a su es&ritu noble %)aliente. as las armas de la noble#a % del )alor estaban en a3uellaocasin re"idas con las de la astucia ;i&crita de los directoresocultos de la innoble intrigaK &or eso el eneral &is en falsoK fue acolocar su robusto cuer&o sobre una alfombra ta&i#ada de Gorida%erba, 3ue ocultaba el &on#o"oso re&til 3ue ;aba de morderle, %

ol)idando el &rudente adagio latino @latet anguis in herba, sufri,sin &oderlo e)itar, la &icadura de la )bora inmunda.

XXX

V^W !n realidad el incidente de Antonio ara $bert assanetQ2alma de allorca *9F* E '-ico *9CFR con el general iguel2rimo de i)era, en la !scuela de Ingenieros Agrnomos deadrid, tu)o lugar el *5 de ma%o de *915. L6ota del 2?!.M
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Captulo IX$umario0 os &rofesores enemigos de la (ictadura e-&lotan el @caso

$bert. Acti)idades de los re&resentantes de la masonerainternacional. laustros e-traordinarios0 signi7cacin

antidictatorial de los mismos. !l onseo de Instruccin&


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consignas secretas &or 'l eecutadas. oincidieron suse-traordinarias actuaciones con la consecucin una &rueba ms delcarcter masnico del astuto italianode su nombramiento como(elegado de !s&a"a en el omit' de /igiene de la $ociedad de6aciones, ;ec;o &or gestin de los sos&ec;osos elementos directoresdel organismo ginebrino. !n las mallas de la e3u)oca di&lomaciae-tranera 3ued &rendido nuestro obierno, res&etuoso ;asta laL9>M candide# absoluta con las indicaciones e-teriores, odesconocedor del &eligro 3ue en)ol)a &ara nuestra causa lare&resentacin de 2ittaluga, el menos indicado, &or su falta desentimientos &atriticos % &or su origen, &ara lle)ar la )o# de nuestranoble !s&a"a.

Ino&ias, traiciones... 3ui'n sabe lo 3ue fuePK el ;ec;o es 3ue

2ittaluga result &ro&uesto, conforme a las indicaciones e-traneras./o% da, el mundo conoce bien la inGuencia de la masonera en la$ociedad de 6acionesK &ero en la fec;a de estos sucesos, el general2rimo de i)era no crea en el &oder de las logias, % se sonrea decuanto se contaba de ellas, como si se tratase de mitos fantsticos ode fbulas orientales.

6o suceda lo mismo con el a)isado, &rctico % e-&ertosubsecretario de obernacin, el general artne# Anido, 3uien,

conocedor de la gente del ;am&a, de los cons&iradores % escondidosenemigos de toda la%a de nuestro &as, tena de 2ittaluga el conce&to3ue este trnsfuga de nacionalidades mereca. $i la memoria no mees in7el, ;asta creo 3ue dese e-&ulsarle de !s&a"a, des&ondole desu nacionalidad &osti#a. as el astuto a)enturero, a&o%ado &or lasfuer#as secretas, &or los interesados en sus negocios % &or lostontos, tan abundantes en todas las latitudes, se defendi bien,argu%endo ra#ones 3ue ;ubiesen tenido fundamento en el caso delegtimos es&a"oles, no de e-traneros arri)istas % cnicos. !l ;ec;o

fue 3ue el &ro&sito de artne# Anido L9CM se des;i#o ante )etossu&eriores, % 3ue todo se termin &or una ins&eccin e in)estigacinen Barcelona de los turbios maneos 3ue el Gorentino en cuestinreali#aba en la iudad ondal % aun en toda atalu"a. $e design&ara esta in)estigacin al onde de imeno, ;ombre de grandesalcances, buen es&a"ol, &ero falto de la resolucin necesaria &araado&tar &osiciones ;eroicas, e inclinado, &or su anterior educacin


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&oltica, a los arreglos &oco edi7cantes. !l 7nal de la actuacin delonde fue uno de tantos @&asteles meor o &eor confeccionados, delcual sali inclume la &ersonalidad del a)enturero, no sin 3ue en sufuero interno estu)iese imeno con)encido de la real signi7cacindel e- italiano.

!n atalu"a, bao la &roteccin de 2i % $u"er, de Bellido % deotros anlogos &ersonaes, 2ittaluga tena inter)enciones ms omenos &rofesionales % bene7ciosas &ara 'l, en el sentidocrematstico. A cambio de los bene7cios obtenidos &ara sus gastos,un &oco ele)ados, &or lo )isto, ser)a a la causa autonmica con )isoso seguridades se&aratistas. Todos estos obscuros mo)imientoscom&endiaban una accin indi)idual necesitada de ser &uesta enclaro. A esto


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)alenta no era, &or fortuna o &or desgracia, atributo de losconsumidores de turnos de elocuenciaK &ero Gotaba en el ambiente %se encerraba en el es&ritu de los discursos.

6unca &ercib un caudal a&reciable de ideas felices sobre las

reformas d

Suñer Enrique - Los Intelectuales Y La Tragedia Española

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