¿Cómo me relaciono a partir de mi Smartphone?Lo que quisiera compartir con ustedes es una opinión sobre nuevas formas que han tomado las relaciones humanas en nuestros tiempos. Tiempos que, como mencionaba mi colega en el post anterior, está teñida de un imperativo de inmediatez, en donde todo lo más rápido es lo que conviene, lo mejor o más recomendable.

Puede revisar el post anterior en el siguiente link:

https://colectivoeress.wordpress.com/2015/08/28/el-problema-de-las-soluciones-rapidas-para-problemas-complejos/

Esto se puede ver en la múltiple cantidad de productos que se ofrecen en los diversos medios. "Rápido y sin esfuerzo" puede ser el eslogan que domina a la generación actual. Esto se encuentra en medicamentos, rutinas de ejercicio, planes de estudio, tratamientos médicos o psicológicos, etc. La lista parece ser interminable y a donde mire uno siempre se encuentra una opción de hacerlo rápido y con un menor esfuerzo.

Esto corresponde a un sistema económico capitalista el cual tiene notables implicaciones en la manera en que las personas se relacionan entre sí. Por ejemplo, en los comerciales de vitaminas siempre muestran a personas que son "muy productivas y felices" porque realizan un sinfín de labores durante el día, donde la idea de fondo puede ser que si tu no haces tantas actividades no tendrás ese grado de satisfacción. Es como si existiera un ansía de vivir, de vivir a prisa.

Ante esto que observo día a día me pregunto ¿Cuáles son las implicaciones de esto en la forma que se relacionan las personas? ¿Qué tipo de vínculos se puede establecer considerando estas demandas sociales? Para intentar resolver estas preguntas consideré un elemento muy particular en donde, a mi parecer, convergen y se materializan estas demandas: el smartphone y el uso de éste.

Me parece que el smartphone es un parteaguas y/o el estandarte de este tipo de productos que se nos ofrecen, que nos permite hacer las cosas más rápidas y más sencillas. Estos dispositivos que si bien pueden ser una herramienta de trabajo, comunicación y entretenimiento, han generado una nueva configuración dentro de las relaciones interpersonales.

Considero que estos dispositivos han influido tanto en nuestras vidas que incluso han reemplazado, en alguna medida, nuestro sistema perceptivo o funciones cognitiva. Me explico. Es menos frecuente que la gente mire u observe un fenómeno con sus propios ojos, actualmente lo hace a través del lente de su celular y mirando su pantalla (sentido de la vista), la gente ya no se fía de su memoria, actualmente se toman fotografías con la intención

de guardar ese momento importante o significativo, guardar un dato importante sin el uso de otro recurso como apuntar en una libreta, para hacer alguna cuenta aunque sea de pocos dígitos es necesario sacar el celular, no recordamos números de teléfonos, en ocasiones ni el propio, dependemos de la capacidad de memoria del celular, y un sinfín de etcéteras.

Pero todo esto que nos ofrece un smartphone: comunicación, productividad y entretenimiento se conjuga con algunas ilusiones personales, y eso son, ilusiones que en la mayoría de las veces la realidad las contrasta.

La idea de comunicación resulta llamativa porque se nos vende una idea de cercanía con los seres queridos a través de tu celular, al grado de generar un malestar, de todos conocido si olvidas tu celular o te quedas sin batería. Hemos generado una dependencia, como si al no tenerlo nos faltara algo de nosotros mismos. Las telefonía saben de estas ilusiones y nos ofrecen más minutos y megas para mantenerte siempre en contacto. La realidad es que la gente tiene menos contacto con las personas, ahora se mensajean ya ni siquiera se llaman. Es muy común ver a la gente con sus audífonos para no escuchar a los demás. O ver a familias o grupos de personas que pueden estar juntas pero cada uno checando algo en su celular. No importa donde estés, siempre y cuando haya internet existe la posibilidad de no estar o de estar en otro lado. Incluso he llegado a observar casos en donde los padres van con sus hijos y cada uno viendo algún tipo de dispositivo y sin cruzar una sola palabra.

Es en este punto en donde encuentro la convergencia de las demandas sociales y las formas de relacionarnos. Ante esta ansía de ser “muy productivos”, siempre hay prisa, se está de forma física pero se encuentran pensando en el próximo movimiento, lo que se tiene que hacer, incluso, se hacen al mismo tiempo. No resulta sorprendente el uso de términos como “multi-task” para aludir a esta cuestión.

Considero que la función que sí ha tenido el uso de los smartphones es la de entretener, función que cumple y de la cual se ha abusado en muchos casos. Música, videos, videojuegos, redes sociales, etc. Esta función “entre-tener” o “tener entre” es una más de las demandas de la sociedad. Nuevamente se observa el no tener tiempo entre actividades, saturar a la persona, aislarla, no dejar que tenga tiempo para pensar otras cosas. El asunto es que la gente se la pasa demasiado tiempo entretenida, al grado de renunciar a actividades compartidas, incluso, al renunciar a necesidades básicas como dormir a tiempo.

Aunque suene un tanto nostálgico, uno puede recordar la forma en que la gente se relacionaba antes del surgimiento de los smartphone y el uso del internet y tendrá una clara idea de lo que quiero transmitir. La gente se reunía y platicaba, no chateaba, se daba el tiempo para escribir una carta o hacer una

llamada telefónica, veía a través de sus ojos, usaba y desarrollaba sus propios recursos y herramientas para las necesidades que surgían día a día, hacia cálculos mentalmente, incluso si tomaban fotos, uno tenía que darse el tiempo para ir a revelarlas, y así un sinfín de aspectos que se han hecho a un lado porque ahora todo lo tenemos, literalmente, al alcance de nuestras manos.

No quisiera dar una connotación de bueno o malo, simplemente me parece importante resaltar estas diferencias en las formas que interactuamos con las personas y, al mismo tiempo, reconocer las implicaciones que tiene para nosotros estas demandas sociales y la manera en que cada persona puede sortearlas.

Por último, agrego un link en el cual podrán encontrar algunas ilustraciones que ejemplifican mi opinión al respecto. https://www.facebook.com/mott.blog/posts/1083341781689848

Roberto Carlos Arellano Jiménez, Colectivo ERESS