Sarmiento Derqui, Mitre Gr 33 Por Jose Roque Perez

8/9/2019 Sarmiento Derqui, Mitre Gr 33 Por Jose Roque Perez

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Nota a esta edicin:

Reproducimos el Discurso pronunciado en asamblea masnica por JosRoque Prez (1860) al conferirse el grado 33 a Domingo Faustino Sarmiento,

Santiago Derqui, Bartolom Mitre, Justo Jos de Urquiza y Juan Andrs Gelly yObes.

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Grandes Dignatarios de la Orden; Soberanos Principes

Rosa Cruces; Ilustres Venerables;

Masones todos que asists esta grande Asamblea!!

Una fausta nueva es la que tengo que comunicaros.

Un grande acontecimiento nos rene y agrupa en este lugar, donde tantosgoces y dolores nos hicieron reunir en otras ocasiones. Ese acontecimiento, esla presencia del Presidente de la Repblica Arjentina, del Primer Majistrado deBuenos Aires, y del Gobernador de Entre-Ros, que vienen tomar un asientoentre nosotros, no en la calidad de majistrados, sino en la de hermanos y fielessostenedores de nuestra orden.

Si en pocas no lejanas, ellos han representado ideas polticas diverjentes; sien el campo de la lucha han chocado sus espadas, la hidalgua de suscorazones y la altura de sus ideas, les han hecho concebir, que esas sonluchas estriles para los pueblos, de que la humanidad solo recoje lgrimas ydespojos. Solo la concordia, la fraternidad y la libertad en el orden, han podidoproducir bienes perpetuos. Y abrazando con f sus leyes y principios, esoshombres y sus adictos, se presentan nuestros ojos como los verdaderosmasones, como los obreros decididos de la paz y los reconstructores de lasociedad.

Felices vosotros, hermanos mios, que podis presenciar el abrazo de losbuenos dentro de los reducidos muros de nuestros talleres! Felices vosotros,que tendris en apoyo de vuestras obras sus luces, su dedicacin y su civismo,para la exaltacin de nuestros pensamientos y la realizacin de un voto pblicopresentido por nosotros antes que nadie, y en poca en que los polticos aunno haban soltado la palabra de Union Nacional, como programa definitivo ynico de la solucin de nuestras eternas y deplorables guerras intestinas!S: felices vosotros que al fundar la masonera en este pais, dabais suprimera Ljia el nombre de Union del Plata, y su hija primojnita el deConfraternidad Arjentina. Estos dos nombres simbolizan ya lo que veis hoyrealizado, despus de cinco aos de lucha desgarradora; y esas dos Ljias,

que desde un principio manifestaban nuestros votos por la Union Nacional, aunexisten vivas y florecientes para recibir en su seno, la una al Gefe de laRepblica Union del Platala otra los dos guerreros que cruzando susespadas en el campo de batalla, firmada la paz se daban el abrazo dehermanos, y condujeron la Repblica al estado de felicidad en que hoy seencuentra, estableciendo la verdadera Confraternidad Arjentina. Es que amboseran hermanos al ligar sus esfuerzos para derrocar la espantosa tirana queoprima los Arjentinos, y para alzar en alto el pendn de la ley, de la libertad,del progreso y del orden, en la sociedad que les confiara sus destinos.

El hecho es digno de vuestra severa atencin. Es nuevo tambin y digno del

mas alto encomio, porque muestra la hidalga condicin del corazn Arjentino.Fiero en la lucha; exaltado en la pasin; terco en el propsito, es jeneroso y


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noble cuando sus fibras son pulsadas por el instinto de lo grande y de lo bueno;cuando se apela todo lo que tiende establecer la fraternidad y la concordia.Cesando la lucha se dieron el abrazo de paz.

La poltica en sus infinitas combinaciones; los partidos en sus diversas

pretensiones, pueden juzgar de ese abrazo como plazca sus miras susclculos: pero entre nosotros, l siempre ser mirado como la espresion francadel caballero, como la emanacin del hombre honrado, como la demostracinhumanitaria del hombre intelijente y del verdadero patriota. Para qu servirala mentira ante corazones sencillos, ante obreros modestos de la paz y delorden social?

El acto de hoy tiene, pues, un alcance y una importancia solemne, que dandorealce nuestra institucin, nos obliga ser fieles cooperadores de la obracolosal de sellar para siempre la revolucin de nuestros pueblos, y de mantenerelevado y puro el pendn de nuestros padres, su creencia y su f poltica, al

crear una grande y poderosa Repblica, unida por el vnculo indisoluble de laConstitucin Nacional.

Nos impone antes que todo, el deber de acallar nuestras pasiones, de nodesmentir en ninguna ocasin los principios profesados por el verdaderomasn; de trabajar con constancia para conseguir el imperio de la ley, de lalibertad y de la concordia, sin el cual toda sociedad es un caos; todo derecho,una mentira absurda; todo ascenso un favoritismo repugnante, en que sesacrifica la virtud y el mrito, la adulacin y ala bajeza.

Y si toda esa importancia tiene para nosotros, la tiene mucho mas paravosotros, nuevos hermanos, que poderosos en la tierra, podis hacer el bien devuestros conciudadanos, de nosotros todos, hundirnos en la miseria, enespantosa anarqua, y desgarrar la patria al solo impulso de pasiones ciegas yrencorosas.Unidos en propsitos, fieles vuestros deberes, consagrados los altosprincipios que proclama la buena y sana poltica, llevareis, no lo dudo, lacumbre de la dicha pueblos y hombres, que solo piden paz, proteccin parasu industria, respeto sus derechos, y que en recompensa os levantarn unaapoteosis digna de vuestras virtudes y de vuestro civismo. Solo as seconquista la gratitud de los pueblos; solo asi se hace su felicidad y su dicha.

Nosotros no os pediremos mas. Los vnculos fraternales que nos unen y quejuris respetar, no han de servir no, para que dejis impunes las faltas delitosde vuestros hermanos. No queremos ni aceptamos eso, porque seria quebrarla ley de la igualdad, que es el primer deber del majistrado. Pero os pediremoss, que en medio de las ajitaciones de la vida profana, guiis nuestros pasospara el bien, y que contis con nuestra decidida cooperacion para restablecerel brillo de la antigua Repblica Arjentina, cuando luchaba para obtener sulibertad y establecer el triunfo difinitivo de su independencia. Quin devosotros os negar su apoyo para la ejecucin de tan grande obra?

La lucha de la libertad aun no est terminada: estaralo cuando se hayacimentado la verdadera libertad civil, poltica y religiosa; cuando se haya


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trasado definitivamente nuestra carta constitucional; cuando todos los puebloshayan organizado su administracin; cuando se hayan definido todos losderechos, y fijado todos los deberes. Obra lenta y penosa, en que muchoscombates habr que dar al oscurantismo, al espiritu ciego de partido, alegosmo fri y calculador; pero obra cierta, que es preciso emprender, y cuya

cabeza debis estar! Afrontadla con f, apoyndoos en los pueblos, que elloshan de responderos con entusiasmo.Y cuando fatigados de los Vctores de laplaza pblica, querrais recojer los perfumes de corazones agradecidos, venidaqu, este pequeo crculo, de hombres de todos climas, de todas creenciasreligiosas y polticas, de todas condiciones sociales, recibir el aplausoentusiasta de sus almas, y deponer el ceo del gobernante y hombre poltico,para recibir el sculo fraternal de los obreros pacficos del orden, que os hancolocado su cabeza, para que hagis su bien, y para que empuando la reglay el comps, los dirijis, como los pueblos que presidis, con mesura yequidad.La corona del triunfo pertenece entre nosotros al que mayoresbienes haga la humanidad.

He aqu un campo abierto vuestras nobles aspiraciones!

Las Logias de la Repblica Argentina os saludan hermanos.

A m obreros de la paz; m por el signo y una triple bateria bien sentida!Gloria al Dios de las alturas! Gloria sus hijos predilectos, que buscan lasinspiraciones de sus almas, en sus grandes creaciones, y que segundan susobras maravillosas!!!

A MI MIS HERMANOS

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