Rünge esfera de colores 1810

5/14/2018 R nge esfera de colores 1810 - slidepdf.com

http://slidepdf.com/reader/full/ruenge-esfera-de-colores-1810 1/9

I \

Philipp Otto RUNGE

ESFERA DE COLORES

(1810)

Farbenkugel; en: Ph. O. Runge, Briefe und Schriften, ed. cit., pp. 245·257.

APARATO DE LAS RELACIONES DE TODAS LAS MEZCLAS DE COLOR

Y DE SU AFINIDAD INTEGRA; CON UN ENSAYO ADICIONAL SOBRE

LA ARMONIA EN LA COMBINACION DE LOS COLORES

Preliminares

Las figuras de este Iibrito I,que tienen la funcion de hacer visi-ble el aparato de relaciones de la esfera, culminan con la esfera mis-rna en el grabado al cobre, en el que, coloreada, se presenta en dosalzados en perspectiva y dos secciones. Esta lamina, como el resto,no tiene otra mision que la de servir de ayuda a la comprension, yno se Ieexigira, por tanto, que muestre todas las mezclas con la mis-rna concision y c1aridad can que se tratan en el aparato explicativo;ai'iadamos ademas que, en caso de que no hubiese sido imposible, sihubieramos realizado una iluminaci6n mas minuciosa, la edicion s6-10se habria retrasado y encarecido; y, si bien el haber asentado loscolores en sus diferentes mezclas y matices segun el aparato explicati-vo en una esfera real y en diversas secciones habria podido beneficiarla claridad de la cornprension, se entendera, no obstante, mejor 1 0

que pensamos par media de las planchas aqui presentes.Para las combinaciones cromaticas de la otra ilustracion se apli-

IEste escrito fue publicado en Hamburgo en 1810, acompanado de las ilustracio-nes que aqui senombran. Esel art iculo mas importante de Runge sobre teoria del co-lor, pero no el unico. Casi todos sus escri tos sobre el color pueden encontrarse en ell ibro editado por Julius Hebing: Ph. O. Runge, Die Farbenkugel und andere Schriften

zur Farbenlehre, Stuttgart, 1959. Es especialmente interesante la correspondencia quemantuvo con Goethe sobre este tema. Aunque integro, incluimos en esta antologia tansolo este escrito sobre teoria del color; existen, no obstante, estudios bastante ampliossobre las teorias de Runge en elcontexto de la fisica de los siglos XVIII YXIX que pue-den ser uti les a quien este interesado en este tema especifico: H. Matilde, D i e F a rb e n-lehre Ph. O. Runges. Ein Beitrag zur Geschichte der Kiinstlerfarbenlehre, Bern, 1973.H. Schmidt, Di e Farbenlehre Ph. Otto Runges und inre Bildgestalt , Kiel, 1924.AmbosIibros son tesis doctorales y secentran en la aplicacion pictorica de la teoria del color.

- - - -- --~=--=--~-~.



148" FRAGMENTOS PARA UNA TEORIA ROMANTICA DEL ARTE

caro? deli~eradame~te colores opacos 0 de fondo, si bien por otrornedio h~blesen POdl?O?btenerse colores identicos mas brillantes; pe-ro, habna que prescindir completamente de las diferencias de mate-r~aly aten,der unicamente a la relacion de la impresion crornatica ens~y para SI;e.stono podria darse enpropiedad siIa variedad del mate-nal sele hubleseopuesto. Si, pese a ello, quisieran experimentarse losefectos con mayor vivacidad podria optarse por cintas de tafetan 0

de raso en lugar de papeles coloreados.Ex:lugar de intercalar en su pasaje respectivo cada una de estas

cornbinaciones en el contexto de mi escrito, convino presentarlas si-multaneamente. como resu~ta~o conjunto en un solo cuadro, ya quecuanto se examlll~ en las distintas secciones responde en imagen unay otra vez a una figura, Las molestias que, no obstante causara di-cha sinopsis del conjunto cuando quiera contemplarse un efecto ais-~ado, severan r~sueltas gracias a que, a diferencia del resto, seha de-jado elcuadro sin encuadernar,lo que permite utilizar ellibro mismopara tapar las partes que resulten molestas en su caso.

Al ensayo de mi amigo Steffens 2 debemos una ojeada en unaa~undante seri; de las visiones mas hermosas de la naturaleza y, pormi parte, creen~ ~?ber conseguido mi meta si mi obrita pudiese'apor-tar algo a una vISIOnsosegada de todos esos interesantes fen6menos.

§ 1. Por obvio, 0 incluso por indispensable que parezca acudira la teoria de la luz 0del origen del color para comparar y examinarlos resultados. constantes que Haman la atencion de nuestra vista almez~lar matenas ~olo,r~ntes,y derivar de los teoremas 0hipotesis unateor~a, un curso cientifico para elyintor, de la que mas tarde podriansurgirreglas provechosas, es sabido en que medida dicha ciencia nobrmd? .ayuda alguna al artista cuando las relaciones de sustanciascromat~cas provocaron efectos que era imposible aclarar par la merarefraccion del rayo luminico.

§ 2. ' Siseconsidera que junto a un conocimiento correcto de lasformas del cuerpo humano y de sus reJaciones de masa es necesariap~ra el pintor la cornprension de la perspectiva, por Ia que se deter-mma_Iafigura en ~111l:ens16nlugar segun su posicion, no menos ne-

cesano es elconocimiento de la direccion de los rayos de luz asi co-m~ de su refraccion y. reflexion, para que sea posible prese~tar loso?Jetos en redondo y dispuestos en relacion espacial; se une asi inme-dlata~ente a las demas la observacion de que todas las casas t ienentam~)1ensus colores, y que en ciertas combinaciones los colores im-presionan agradablernente yen otras ofrecen, sin embargo, la irnpre-

2 ~,:.nrik Steffens (1773-1845), naturalista y fil6sofo. Escribio un articulo «Sobreel s ignificado de los colores en la naturaleza» para este l ibro.

LA REPRESENfACION. EL SIMBOLO 14 9

sion contraria, Ytambien, par ult imo, que por medio de mezclas loscolores 0 bien producen otros, 0 bien desaparecen.

§ 3. En la ciencia del dibujo se unen elconocimiento de la for-ma, de la proporcion y de las relaciones de perspectiva y de ilurnina-cion de los objetos; mas, puesto que descansa fundamentalmente enel descubrimiento de leyes, por las que los objetos sehacen percepti-bles a la vista, y de ningun modo en el conocimiento del cuerpo y de

.sus forrnas en S 1 Ypara S 1 , queremos entonces, al concentrar ahoranuestra atencion en los cotores, aplicarnos a estudiar igualmente lasrelaciones de los colores dados entre si, tanto en su pureza como apartir de la leyde la que parecen provenir sus mezc1as, para dar canlas Impresiones concretas que sus combinaciones causan en nosotrosy con las transformaciones que surgen de sus mezclas, y poder refle-

[arlas a cada ocasion con nuestro material.

§ 4. De ahi que tales nociones hayan de ser tratadas completa-mente aparte de la ciencia por la que se forman los colores a partirde la luz, ya que, por elcontrario, queremos entender elcolor comouna manifestaci6n propia, independientc, Yobservarlo en relacion ala luz y a la tiniebla, a 10 claro y a 10 oscuro, al blanco y al negro.Si, f inalmente, pese a partir de un punto de vista tan opuesto, consi-guiesemos por esta via practica un resultado acorde al del maestro dela teoria de la luz J, mayor aun seria el provecho.

§ 5. Es revelador que elconjunto delos colares puros, por Yconlos cuales es posible la combinacion, constituyan tambien la suma delos elementos de todas Ycada una de las mezclas. Estos elementos soncinco: bianco, negro, azul, amarillo, raja; f'uera de ellos es imposible

imaginar una tinta completamente pura,

§ 6. Separamos, sin embargo, el blanco y el negro de los otrostres colores (a los que denominamos propiamente colores) y los COIO-camos en una clase diferente, digamos opuesta a los colores; puestoque la contraposicion concreta que expresan el blanco y el negro (lade claro y oscuro 0 luz y tiniebla) no solo aparece como tal en nuestraimaginacion, sino que tarnbien se presenta como 10 claro y 10 oscuropropiamente dicho entodas y cada una de las mezclas, tanto con los

colores como con los colores compuestos, en cuanto sean en mayora menor medida blanquecinos 0 negruzcos; con 10 cual, respecto alos colores, se dan como claros y oscuros propiamente en una reia-cion general, y distinta a la que conocen los colores misrnos entre S 1 .

§ 7. Aunque sehayan quedado ententat ivas, sehan dado dist in-tos empefios de presentar en forma de cuadro sinoptico la relacion

3 Sir Isaac Newton.



150 FRAGMENTOS PARA UNA TEORIA ROMANTICA DEL ARTE

del conjunto de las mezclas entre sf. La figura por la que ha de ser

expresado ahora el nexo de todas las relaciones no podra ser arbitra-

ria, debera ser mas bien la relacion misma, en cuanto que ha de resul-

tar necesariamente de la inclinaci6n y de la enemistad naturales que

unos elementos expresan para con los otros.

§ 8. De querer imaginar en su estado puro cada uno de los tres

colores, azul, amarillo, raja, pretenderemos que el azul carezca delmas minima afiadido de amarillo a de rojo, exigiremos igualmenteal amarillo que ni tire al azul ni al raja en la minima medida, y 10

mismo al raja, que no lucira can tonos amarillentos a azulados, Co-

moquiera que no puede disponerse de un material cromatico en el que

haya realmente una ausencia total de cualquie r tipo de mezcIa, y aun

cuando reconozcamos todavia mezcIa y diversidad en los colores deque disponemos, cabria, al menos en teoria, el abstraernos de ella y

admitir como una unidad absoluta cada uno de los elementos, y asiestos puntas de color constituidos sin mezcla mostra ran una analogia

can los puntas matematicos adimensionales. Y, puesto que la calidad

de cad a uno de los tres colores se diferencia can similar individuali-dad de la calidad de los otros dos restantes, equiparo la diferencia

entre los mismos y surgen asi tres puntos: azul, amarillo, raja; y si

expreso iguales diferencias con !ineas iguales, aparecera un trianguloequilatero como expresion figurativa (no desconocida) de la relaci6nentre estas tres fuerzas naturales puras.

B

Fig. 1

§ 9. Es sabido que de Ia mezcla del azul y del amarillo se obtiene

el verde, del amarillo y del raja el anaranjado, y del rojo y el azul

el violeta, pero tambien que si, par ejemplo, el azul operase con ma-

yor intensidad que el amarillo, el verde tenderia al azul, y si fuese el

amarillo el mas intenso, el matiz serfa hacia el amarillo, y, gradual-

mente, al final se perderia del todo en el. Alga similar ocurre can el

anaranjado que tiende y se pierde en amari llo y rojo, y 10 mismo lesucede a l violeta en rojo y azul. Tal movilidad del verde, el anaranja-

LA REPRESENTACION. EL SIMBOLO 151

eI violeta se encontraria ahara en oP?sici6~ a I~s tres puntos cro~

~aiiCOS fijos B,? y R (azul, amarillo, roio), ~~~~~~i~ng~re~~~fou~etos puros como interactivos se expresara su

los tres lados del triangulo ,

Fig. 2orange

. 10 Aun cuando en oposici6n a la unidad de cada uno de los§ . B G YR se'a una pluralidad cada una de las tres mezclas,

tres puntas '. d "oleta y se den estas en innumerables grados en-verde, anaranja 0, VI , . 10 el verdetre cada dos colores, aparecera, no obstan~e"p~r ejempi ,

. . B G operan con identica fuerza 0 se mez-como un color prop~? s~e l~ linea BG y se mostrara can identica in-

cll~n e~, el Pluanztuolmyeall~mari11Ocon identica diferencia (que se=:c inacion a . 1") L . rna ocurnravierte en indiferencia en esta especial re acionr. 0 mrs 1 d

n el anaranjado y tam bien can el violeta. Y, puesto que. ever e,

cloanaranJ' ado y el ~ioleta se encuentran en estos punt.os medics a abs-e ..' t B G y R y tienen que ser co-tractos en ident ic a diferencia respec 0a., ' . ., I de di-locados en los lados del triangulo tambien a. ~lstan~las igua ~sd' t ica

a ues en su relacion reciproca en I en

~fe~~~~~o;, :~/~~~~~~a~:r' :, ull :' triangulo equilatero que se dispon-

dna en la mitad interior del pnmero.

:B

d.~~

.ti ~

f$ ~V Gr

. . . . ~~ - : q . / ~;~ . . . . ~~ :.

lt ...,. G .TOt li li ch 0 gelbhch

Fig. 3




§ II. Pero, puesto que tanto los tres puntas de mezcla puros Gr,

o y V (verde, anaranjado, violeta), como las distintas tendencias de

Gr ent re B y G, de 0 entre G y R, y de Ventre R y B resultan de

sendas interacciones de dos colores puros, estas mezclas han de estar

completamente lib r es de toda tendencia a un tercer color 0de cual-

quier otra tinta.

§ 12. Acordamos determinar mas arriba que todos los coloresy mezclas de colo res puros se encuentran en una relacion general conel blanco y con e1negro (con el blanco como aclaramiento y debilita-

cion, con el negro, como oscurecimiento y enturbamiento) y son sen-

sibles a su influjo. Asi pues, tanto los tres puntos Gr, 0 y V como

todos los que se encuentran entre ellos, y las mezclas simples presen-

tes entre los puntos B, G y R, hallaran diferencias identicas respecto

al blanco, de un lado, y respecto al negro, de otro (como opuestos

antiteticos), y con ello estaran todos a la misma distancia del blanco

y del negro a la que los tres puntos B, G y R se encuentran respecto

a los mismos (a saber, del blanco y del negro), puesto que hemos acep-

tado como regia expresar iguaJes diferencias entre fuerzas naturales

par media de !ineas iguales (distancias).

§ 13. Pero no podemos percibir estas distancias generales cons-tantes respecto ados puntos externos par medio de otra figura, sino

conviniendo en construir una circunferencia perfecta para la totali-dad de todos los colores puros y sus mezclas simples (a saber, los trespuntos B, G y R, asi como Gr, 0 y V junto a todas sus tendencias

a los colores simples); los dos triangulos equilateros BGR y GrOY for-

man juntos ahora un hexagon a regular en el interior de] circulo, res-

pecto al cua1 eI blanco y el negro, 0 los puntos W y S, se comport an

como polos dispuestos fuera de Ia superficie y cuya distancia WS ha

de entenderse como una linea (eje) que pasa por el cent ro del cfrculo.

w

Fig. 4

§ 14. Si determinamos, por tanto, las mismas dimensiones para

el segundo triangulo GrOY que para el primero BGR, podra repre-


sentarse ahora la totalidad de las mezclas verdes,. anar~,njadasy vio-letas en su verdadera orierrtaci6n, esto es, como SI el tnangulo GrOY

se moviese en torno al eje WS, oscilando entre los puntos B, G y R,

Y formando as! el circulo completo.

B

Fig. 5 o

§ 15. Ambos triangulos, 0 el hexagono regular propuesto mas

arriba (fig. 4), comprenden los llamados c?lor~S del ar~o ms en la se-rie: azul, verde, amarillo, anaranjado, rojo, violeta, siempre Y cua~-

do aceptemos el violeta como color desd?blado a ~mbos lado~del ar-

co iris en una variante azulada y otra rojiza. La clrc~nferencla .com-

pleta contiene as! en todas sus gradaclOnes y extension el conjunto

de las mezclas de colores puros y los colores puros rmsmos.

§ 16, Del mismo modo que, por la mezcla del azul con el amari-

llo, se produce el verde, resulta el gris de la mezc1a del blanco ~on

el negro, que puede graduarse a su vez segun tienda a 10 blanquecino

o a 10 negruzco a 10 largo de la linea entre ambos puntas. y se perdera

hacia un lado en el blanco y hacia el otro en el negro. ~n el.medl~,donde en su accion reciproca ambas fuerzas operan con igual mt ,e".sl-

dad se situara este color como un gris completamente neutro en iden-

ticadiferencia y can igual tendencia en relacion al negro y al blanco;dicho punto, de conformidad con nuestro esquema, es exactamente

el mismo en el que la Hnea WS toea Y traspasa el circulo de los colo-

res.

§ 17 En el circulo de los colo res estan presentes, como hem os

mostrado, los tres puntas abstractos, verde, anaranjado y violeta, que

forman el triangulo GrOV y son productos ~e cada dos colo:es ele-

mentales, que en estos puntos se unier.on e I,mpregnaron recrproca-

mente con intensidades identicas. Pero SIanadimos al verde ~uro, pro-

ducto del amarillo y del azul, un poco del tercer color, el rojo, obser-

varemos que este solo estropeara y ensuciara Ia sere~a, Imagen del verde

sin transmitirle un matiz colorado. El verde sereducira , pues, en cuanto




aumentemos la presencia del rojo en Ia mezcJa, a una inmundicia sin

. color 0a gris, y si seguimos afiadiendo rojo solo conseguira un matiz

colorad? Tal reduccion de cualquier manifestacion crornatica es con-

~ecue~cla de la i!l~eraccion simultanea de los tres colores puros canmtensl~ades equilibradas, Igualmente, pues, si mezclasernos azul can

anaranJ.ado se diso.l~erfan ambos en eI gris acrornatico, yexactamen-

te 10 m~sm.o ocurnna can el a!llarillo y el vioIeta. Un verde rojizo,un anaranjado azulado < ? un violeta amaritlento son tan poco imagi-

nabl~s como un oeste onental 0 un norte meridional. De actuar con

la m~sma fuerza, la~ tr~s.cualidades individuaIes puras B, 0 Y R pier-

den J~ntas toda su m~lvldualidad y se disuelven entonces en una ge-

neraltdad absoluta. Sin embargo, las individualidades B, 0 YR apa-

recen en to~as las mez~Ias simples can perfecta efectividad a 1 0 largo

de toda la circunferencia de colores; asi pues, tanto estas mezclas sim-

ples como los tres colores puros, se encontraran en [a misma diferen-

cia respecto ala generalidad absoluta del pun to sin color que estara

par ta~to, situad~ a i~ual distancia de todos y cada uno de los punto~

de l~ ClrcunferencI~.' siendo elpunto medio del circulo. En dicho punta

se disuelven tambien todos los colores y las mezclas diametralmenteopuestos, en tanto que los tres colores actuan a la vez en todo diame-

tro del circulo. Si, por ejemplo (fig. 6), el punto Or se aproximase

a 0.' y en ellad~ opuesto el rojo (R) se inclinara al violeta rojizo (0

hacia B), B sufnna un retroceso hacia el rojo identico a la perdida

de azul de Or.

Figs. 6 y 7 o

B

o

. , A su vez, hemos de considerar aqui tambien que la misma rela-

elo~ 9ue B, G y R guardan entre si, presentandose en un trianguloequilatero en euyo punta medio se disuelven, se repite en el tompor-

tarniento de cada tres mezclas que obtengan juntas uno de los trian-

gulos equilateros posibles en la circunferencia. Entonces Or y ° en

los que? actu~ en identica medida con By can R, se tr;nsforma~anen un gns amanllento al mezclarse, que se comportara respecto al ama-


rillo (0) como el punto a (fig. 7) respecto al punta media g. EI punta

a no es solo el punto medio de la linea Gg, sino tarnbien el lugar de

la mezcla de Or y 0, en la que la cualidad G se halla en cantidad 0

fuerza doble a las de B y R, respeetivamente. Si a Or y ° se afiade

entonces Y, se restituira el equilibria de B, 0yR. Esto mismo ocurri-ra con todo triangulo equilatero que sea posible adaptar al peri metro;

el producto sera siempre la eompleta disolucion de toda manifesta-

cion crornatica.

§ 18. Deducimos entonees que, puesto que el blanco (W) se en-

cuentra en identica diferencia respecto a los tres colo res B, G y R,

y experimenta la misma tendencia hacia los tres, y, puesto que el ne-

gro (S) se halla en la misma relacion, habra, pues, un punta de ten-

dencia reciproca entre ambos polos en la linea WS, y habrernos decolocar tambien el punto medio g cabalmente en esa lInea, situado

al tiempo en identica diferencia respecto a cada uno de los tres pun-

tas crornaticos B, 0 y R, y con la misma tendencia hacia los tres.

§ 19. Puesto que los tres colores B, 0 y R se hallan en identica

diferencia respecto a W y a 5 y can la misma tendencia hacia ellos,

el punto media g del plana de color, en el que alactuar los tres simul-

taneamente sacrifican su individualidad, debe situarse con la mismatendencia bacia W y bacia S, y en identica diferencia respecto a los

mismos . .Por consiguiente, dado que los dos puntos g (el punto mediode WS y el punta medio del triangulo BOR) ya coinciden matemati-

camente hablando, se trata ahara de que ambos solo pueden ser unoy el mismo, contando incluso can la misma tendencia hacia los cinco

elementos segun una efectividad regular de todos elias en este punto;

y de identica diferencia resultara igualmente perfecta indiferencia, en

la cual todas las cualidades individuales habran de disolverse, y resta-

ran solo como una surna las meras cantidades en su sustancia mate-

rial.

§ 20. Este punto ha de entenderse entonces como el punta me-dia universal, puesto que se encuentra en identica diferencia respecto

a los cinco elementos.

Fig. 8 s I

I

I II




§ 21. Todas las mezcIas que resultan de la tendencia de cualquier

punta de la circunferencia de color hacia el blanco 0 hacia el negro

(tendencia que es comun a todos esos puntas) se perderan, en grada-

ciones sucesivas, en W yen S, y deberan concebirse como libres de

toda mezcla con un tercer color (puesto que cada una de ellas es pro-

ducto de dos colores puros y tiende como taJ exclusivamente hacia

el blanco 0 hacia el negro). Se dan, pues, en todos los puntas de sutendencia, en identica diferencia respect a al punto medio g como efecto

conjunto de Ires colores (0, mejor , como no-manifestaci6n de la indi-

vidualidad expresa de los elementos, en oposicion a la nitidez del efec-

to conjunto y de la manifestacion de las mezclas antes tratadas). De

ahi 9ue surjan hacia los polos W y S curvas a cuadrantes, puesto que

las diferencias respecto a g de todos los puntas en su tendencia (hacia

W a hacia S) forman radios de esfera. Las relaciones comunes de es-

tos cinco elementos configuran entonces una esfera perfecta, cuya su-

perfic ie contiene los cinco elementos y las mezcIas de los mismos, que

ahi se manifiestan en su tendencia amistosa entre sf, y que se disueI-yen en un gris completamente neutro en la gradaci6n regular de todos

los matices hacia el punto media. Tales relaciones se distinguiran porel modo en que los distintos elementos operen entre sf, sea a partes

iguaIes 0 desiguales, Como, de par sf, en toda formacion la dimen-

sion resuIta de la diferencia y la forma de la tendencia de los elemen-

to s entre sf.

§ 22. Si se irnagina llena la esfera de colores (para cuya concep-

ci6n en superficie quieren servir las vistas desde los polos blanco y

negro), esto es, penetrada des d e la superficie hasta el punta media,

se estara en condiciones de reconocer las dos planchas que aparecen

impresas ala vez: una seccion par el ecuador (plancha de colores) y

otra que corta los polos y en direcci6n aI rojo y alverde (-Ry Or-

que constituyen los extremos del diarnetro del ecuador). Estoy seguro

de que podra pensarse can facilidad como una gradacion eompletaeste esquema arbitrariamente dividido en doce segmentos.

§ 23. Puede deducirse sin dificultades que, en caso de lIevar a

cabo una seccion paralela al ecuador, este present aria siempre en la

misma relacion un punto medio de color negro-gris, si se diese en elhernisferio del negro, y seria de color blanco-gris en caso contrar io.

§ 24. Del igual modo, cuantas secciones cortasen ambos polos

presentando dist intos diametros, experimentarian la disoluci6n de los

colores en gris, cuando estos se encontraran en la linea WS.~

§ 25. En la misma medida en que no podra pensarse en cuales-

quiera matices que hayan de surgir de la mezcla de los cinco elemen-

tos, que no descansen a no esten contenidos en esta relaci6n, tampo-co podra imaginarse otra figura correcta y cornpleta para el conjunto

LA REPRESENT ACION. EL SIMBOLO 157

de esta relaci6n. Y, puesto que cada matiz se dispuso al mismo tiem-

po en su correcta relacion con los ~lem~ntos puros y co~ las m,ezclas,ha de entenderse la esfera como smopsis global, que ~nentar~ s.obre

el nexo del conjunto de los colores a aquel que necesite de .d~stmtos

cuadros sinopticos para sus asuntos. Ellector atento advertira ahora

que no puede ofrecerse una sinopsis completa de tod~s las rnezcIas

en una superficie plana, ya que la reJaci6n solo se deja expresar,envolumen.

Apendice

UN ENSAYO QUE PROCURA CONFORMAR CON EL ESQUEMA

ANTES DESARROLLADO LAS IMPRESIONES SENSIBLES

DE LAS DlSTINTAS COMBINACIONES CROMATlCAS

I, Al observar la plancha que presenta una ~ecci6n de Ia esf'era

de colores por el ecuador, y en la que se recordara que cuantos colo-

res se hallan en el rnismo grade unos enfrente de otros han de ser to-

rnados por fuerzas que se oponen entre sf y se. destruven po; su mez-

cIa agrisandose, se tendra que advertir que Sl, se pU~l~ran Juntos en

una superficie estos colo res opuestos, se lograna precisarnente el ~on-

traste mas vivo de todos. Pero, a su vez, este contraste proporciona

una sensaci6n muy agradable. Comparense en el cuadro de colores

adjunto: 1. azul can anaranjado , 2. amarillo con vio/eta, 3. rojo con

verde. ..' .2. La tmpreslon sera, sin embarg.o, I?uy dlstmt~ 51 se poner:.

4. el azul junto al amarillo, 5. el amarillo Junto al rojo ; y ? el rojo

junto al azul. Tales combinacio~es, antes que otorgar el rrnsmo pla-

cer excitaran y exhortaran el OJO.

'3. Si se agrupasen ahora rojo y violeta, vio~etay azul, etc., a

7. los colores que se siguen en la plancha (en el c ir cu l o d _ ec o _ lo re s 0,tambien, en el area iris), resultaria, pese a lahermosa vivacidad del

color, una monotonfa 0 uniformidad de tono.. .4. La primera cembinaci6n de colo res opuestos ha de denorni-

narse armonica. .5. La segunda combinaci6n, la de los tres colores puros, mar-

monica. I . , d I6. La tercera combinacion. la de los colores en a sucesion e

cuadro crornatico 0 del arco iris, monotona. . ,7. En el primer caso tiene que habe~ ,una relacion ~~n aquello

par 10que todos los colo res estan en relacion; y esta relaclOn, de cada

dos col ores con ese uno, al que es comun la correspondenCla de to-

dos, es la armenia. ,. .' id I8. En el segundo caso ha de tener lugar una actividad indivi ua




de des fuerzas completamente distintas entre sf; tal es la disonancia.9. Yen el tercer caso habran de estar en relacion unicamente los

dos colores dispuestos en proximidad sin la relacion general, 10 que

es monotonia.10. Si se colocan tres colores 0 campos coloreados uno junto al

otro de modo quese sigan, 8. como azul, gris, rojo, ha de concebirse

el gris como una interpolacion que conexiona y amaina los dos opues-tos azul y raja, puesto que gris es el punta can el que estan en identi-

ca relacion todos los colores del conjunto de la circunfereneia.

11. Pero, si se colocan en sucesion, 9. azul, amarillo, rojo, el ama-

rillo, concebido como interpolacion 0conexion, estara tan aislado en

.su actividad individual como el azul 0el rojo. Se diria que cada una

de estas tres fuerzas busca la gradacion por la cual querrfa entrar en

conexion con su vecino; el conflicto solo aumenta y permanece asi

el efecto inarmonico.

12. Y si se dispone la serie 10. azul, violeta, rojo, se relacionan

entonces tanto el azul como el rojo con la interpolacion, ya que eJ

violeta comprende ambos en si mismo. EIvioleta es unicarnente pun-

ta de relaci6n de los otros dos, pero no de todo el resto de los colores,

y solamente concentra en sf a aquellos, en lugar de dejar intuir eI puntode relacion general. Tal efecto es, por eso mismo, monotone. ,

13. Recuerdese que si se colocan juntos dos colores, en caso de

ser mezcIados, 0bien se comportan hostilmente uno para con el otro,

o bien t ienden uno a otro amigablemente; 0, tercero, se unen produc-

tivamente y se pierden ambos en su producto.

14. El primero es el caso del rojo y el verde, que declinan en gris

por su union.

I5. El segundo serla el del rojo y el anaranjado, que se atraen

y tienden uno a otro en la mezcla.

16. EI tercero el del rojo y el amarillo, que producen anaranja-

do al mezc1arse y pierden en el sus caracter fsticas individuales.

17. Por medio de la interpolacion del gris, que es la generalidad

misma y el contrario de toda individualidad, se lograra una union ar-monica, .puesto que, en tanto la individualidad de cada uno de los co-

lores puros 0 de sus mezclas esta en contras te con el, la individuali-

dad se manifestara mas serena y con mayor fuerza, sin que todos ellos

dejen de estar al tiempo en la misma relacion can la generalidad.

18. Si, par el contrario, contamos con la union del rojo y el azul

en el violeta, ambos se presentaran tan solo como los dos lados del

violeta, puesto que tanto el raja como el azul no estan en relacion

con el violeta como el gris, s ino que seencuentrarrefectivamente uni-

dos en el violeta, y como tal tambien aparecen. Rojo y azul habran

de sacrificar su apariencia individual y su fuerza en un estado inter-

medio de violeta.

19. Cada cual habra advertido ya por sf mismo el hecho de que


dos superficies de color que se colocan una junto a la, ~ tra, vista~ a

cierta distancia, se entremezclan ell :el limite de s,eparaclOn. La mejorexperiencia podra hacerse con mosaicos 0con tapices de I_Ilallas,_puesto

que en ellos se crean las mezclas a partir de puntos 0 hneas alsla~os

'y contiguos, que se entremezc1an a distanc.ia .. (No tratamos aqui el

problema de si esto acontece a cau~a .del arre interpuesto entre am-

bos,0

bien porque los rayos de los distintos colores se cruzan en nues-tro ojo al penetrar en e1 .), . . .'.

20. Por esta interpenetraclon surge una interporacion por si rrns-

rna. Es facil de observar que, si se colocan tangencl~ln:ente un ca~1Poazul y otro amarillo, de la interpenetracion en el limite resultara un

borde verde. .21. Si se juntasen el verde y el rojo apar~ceria .el gns en el.b?rde,

(Esto puede evidenciarse con la mayor clandad SI las superf~cles se

incIinan una a otra en angulo, de modo que un color se r~fleJ~ en el

otro. Si un vestido es verde y rojo changeant, Y sus par~es llu~m~das

se muestran rojas, las sombras, empero, verdes, un phegue ilumina-

do producira reflejos grises en la sombra de otro.) ,22. Puesto que el gris que se muestra a~ora en~re el rojo y el ver-

de no es una individualidad, sino la disoluclon ~on~unta de dos fUf~r-zas opuestas, la armenia se halla, pues, ya por SI I_Illsmaen .e,1conflic-

to entre dos colores opuestos, esto es, la arrnorua 0 relacion con la

generalidad.23. La gradacion verde, que se ha colocado e~t:e el ~zul y el ama-

rillo, contaria, sin embargo, como una nueva mdlvlduahd~d, ~l.efec-

to tanto del azul como del amarillo, en cuanto que tod~ su individua-

lidad es absorbida en funci6n de su producto. Necesanamentre debe-

ra desatarse entonces cierto desasosiego en ambos colores puros, puesto

que el verde (en el que insisten amarillo y azul con to~a s~ ,fuerza)

no aparece concretado; y dicho desasosiego por la comb~naclOn es,en

realidad una disonancia que hay que deshacer por me?~o d.e una in-

terpolacion concreta. (Para un sentimient~ en tal relacion s~empre se

escogieron dichas combinaciones inarm6mcas, cuando debia llamar-se la atencion del ojo y excitarlo antes que dar~e placer, como, por

ejemplo, en uniformes, banderas, blasones, narpes, etc.)

24. Piensese que todos los colo res que se disuelven en un t~n?

completamente gris al mezclarse forman un ~ontraste Vl~O Y arrnoru-

co; que los colores puros, al combinarse, estlmul~? el OJOcomo u~a

disonaneia; las gradaciones monotonas d.e l ar~o ins son las que m~s

reposado dejan el sentido; podra, pues, Imagll~arse que un':l combi-

nacion de colo res brillantes sensatamente escogida, cuya ser~e no sea

necesario interrumpir con colores grises y sucios, sera apropiada pre-

eisamente por esas caracteristicas, Y susceptible de engranarse en el

significado Y 1a i rnpresion de una obra de arte; como los tonos de la

rmisica en el sentido y el espiritu de un poema.

j



160 FRAGMENTOS PARA UNA TEORrA ROMANTrCA DEL ARTE

25. Del mismo modo que el alcance del contraste armonico pue-

de aumentar aun si una de las partes tiende a 10 oscura mientras 1 0

otra tiende a Jo claro sin que, pese a ella, su efecto reciproco deje de

estar en reJaci6n can el punto media (gris), hay tarnbien en tales can-

trastes gradaciones en las que la relacion can eJ punta medio tiende

a algiin otro color. Como 11. anaranjado con verde, a 12. can viole-

ta, a tarnbien 13. violeta con verde, en tanto que la mezcla de anaran-jado con verde dada un gris amarillento, rojizo Ja de anaranjado oen

violeta, y azulado la de violeta can verde. Esto se demostro en la cons-

truccion de la esfera de coJores por la septima figura.

26. Si se unen hasta cierto punta 0 se amainan dos colo res puros

. por medio de una interpolacion gris, en cuanto que esta aparece co-

mo 10 general del color en contraste con la individualidad de aque-

1I0s , y los contiene en.su completa actividad, la interpolacion llenara

un hueco y separara ambos colores, pera no aportara una relacion

propiamente armonica, puesto que en ella se ha liquid ado toda indi-

vidualidad y, POf tanto, toda manifestaci6n activa.

27. Por el contrario, ya que anaranjado y verde forman juntes

un contraste arrnonico, en la serie 14. azul, anaranjado, verde, rojopodran ligarse propiamente en armonia dos colores puros por medio

de la interpolacion de un contraste arm6nico (anaranjado y verde),

siempre que el verde se coloque junto al rojo, y el anaranjado junto

aJ azul. Dicho acorde contiene la actividad individual completa de los

tres colores; la disonancia se ha liquidado y la monotonia ha sida evi-

tada. Lo mismo sucede si cambian a 15. amarillo, violeta, anaranja-do, azul, y 16. rojo, verde, violeta, amarillo.

28. Si, observando estas tres series, volvemos ahora a la septima

figura de la construccion de la esfera de colores, percibiremos con gran

satisfacci6n que el orden en que aqui se disponen cada dos colores

y dos mezclas es un resultado constante de la relaci6n conjunta del

disco. Pues contamos aqui con dos colores puros (ejernplo 14. azul

y raja), y la nocion del tercero se despierta en el contraste par me-

dio del cual se ligan aquellos. De Ja mezcla de anaranjado y verde

resultaria un gris amarillento (esto es, la tendencia del punta me-

dio universal a un tercer color, el amarillo); la mirada nos deja asi

a merced del amarillo, como caracter comun del anaranjado y el

verde.

29. Quien sepa en que modo la disonancia, la armonia y la mo-

notonia pertenecen a la obra de arte en cuanto que el sentido de la

compos ion las exige, apreciara que can estas pocas observaciones yo

solo buscaba el punta de partida de aquellas para mostrar en que for-

ma la estructura obligada de la esfera pone en nuestras manos estas

y aun otras relaciones. De igual modo, la aparente tr ivialidad de estas

observaciones solo podria valer realmente ante la pretensi6n de que

aqui hubiera de ofrecerse una teoria completa de la armonia pictori-

LA REPRESENTACION. EL SIMBOLO ·161

ca, que no es el caso, como tampoco que pensa~a publicar mi articulo

'on la intencion de presentar una nueva teona del COI?f. bDado que la esfera es, pese a todo, la figura n~cesana para a ar-

.ar la estructura cornpleta de las re1~ciones .de los cI.n~oelementosd

mf~

Icriales: blanco, negro, azul, amarillo, rojo, l~s vl~lOnes puras e

naturaleza interidr se esta manifestacion ~uerran deJ.arse e~presar ~on. '0

n en 10 sucesivo par medic de est a figura mventa a.mayor precisi



6t~.444."_"'.

§r~

4/.£ 7-4 d4..'iI

Rünge esfera de colores 1810

Documents

Transcript of Rünge esfera de colores 1810