Revista Verbo y acción

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Número 12

Transcript of Revista Verbo y acción

  • Mirevistadigital.es y Democracia Nacional as como Lucio Peacoba en calidad de director de este medio, no se hacen responsables de las opiniones, contenidos e informaciones de los artculos que

    cada redactor o colaborador publique, siendo cada uno de ellos responsables de sus diferentes publicaciones.

    En nombre del equipo de VyA quiero agradecer a nuestros lectores la buena acogida de nuestro primer nmero, que nos anima an ms a seguir superndonos.

    En este nmero contamos con nuevos colaboradores que engrosan un equipo humano comprometido y brillante. No puedo dejar de agradecer especialmente a la Asociacin Cultural Espaa en la Memoria su compromiso de enriquecer VyA con sus artculos de historia.

    En fin, muchas novedades para este segundo nmero que espero que resulten intere-santes, pero sobre todo que inviten a pensar y a estar preparados para lo que est por venir, porque siendo realistas el rgimen actual se desmorona y sus principales institu-ciones se resquebrajan a marchas forzadas.

    El prestigio de la Corona se encuentra bajo mnimos, la Carta Magna ha sido sobrepa-sada y amenaza ruina, los nacionalismos perifricos apuestan abiertamente por el secesionismo y el poder judicial perdi hace tiempo todo rastro de independencia carece de credibilidad.

    La extrema izquierda campa a sus anchas a pie de calle, cometiendo ilegalidad tras ilegalidad, mientas es mimada desde los cargos pblicos de la izquierda y es presenta-da como vctima en los medios de comunicacin cuando la polica acta contra ellos intentando defender los restos de la legalidad.

    Malos tiempos estos en que el pedir el cumplimiento de la ley convierte a cualquiera en un radical y la persecucin del delincuente se llama represin.

    Los enemigos de Espaa acechan como lo haran los buitres que desde su atalaya ven-tean la muerte inminente de su prximo almuerzo. Y no hablo slo de los enemigos internos sino tambin de los enemigos externos: los tiburones financieros encuentran en Espaa una presa fcil con un gobierno dbil, unas instituciones decrpitas y una sociedad fragmentada. Ya slo falta que nuestro enemigo del sur piense que es el momento de arrancarnos un pedazo de territorio cual hiena ante un animal herido. Tiempo al tiempo.

    Solo una reaccin de los espaoles puede salvarnos, quiz sea mucho esperar de un pueblo que se ha empeado en suicidarse, un pueblo que eleccin tras eleccin ha decidido respaldar a los partidos que lo estn destruyendo. Y a esto lo llaman voto til... til para quin ,se pregunta uno al ver el resultado?

    El tiempo se termina y ya nadie se re de nosotros, como hacan antao, cuando hablbamos de la desintegracin de Espaa. Han entendido, esperemos que no dema-siado tarde, que tenamos razn.

    Como empec diciendo, hay que estar preparados para lo que pueda venir. El sistema se resquebraja y en medio de la cada a la que asistimos slo una cosa parece cierta, la Espaa de las ltimas dcadas no se parecer en casi nada a lo que est por venir: ser una nacin regenerada ms fuerte, ms cohesionada o no ser nada y desaparecer definitivamente para convertirse en un mero apunte en los libros de Historia. La accin o la inaccin de los que aun nos consideramos espaoles decidirn el resultado.

    Lucio Peacoba Director de VyA

    DIRECTOR: LUCIO PEACOBA

    SUBDIRECTOR: ANTONIO DE LA PEA

    REDACTORES:

    LUCIO PEACOBA MAX ROMANO

    ANTONIO GARCA PEDRO CHAPARRO

    VICENTE ESTARELLES ANTONIO DE LA PEA

    COLABORACIONES:

    UNTERSS LENI

    MANUEL CANDUELA JUAN PABLO VITALI

    FOTOGRAFA & DIBUJOS:

    FUENTES DIVERSAS

    MAQUETACIN:

    ANTONIO DE LA PEA

    EL EQUIPO

    PUBLICACIN: 05-10-12 N PUBLICACION: 2 AO: 1 PGINAS: 38

    PUBLICACIN

    A FONDO

    GOLPEA A UNO PARA CASTIGAR .... 5

    IVA LA ESTAFA SILENCIOSA ............ 27

    ACTUALIDAD

    FALLECE SANTIAGO CARRILLO ....... 32

    ECONOMA

    ORGANIZANDO LA RESISTENCIA .... 13

    LA LUCHA

    EN LA HISTORIA

    DON PELAYO ................................... 34

    LA EXTRAA PRIMAVERA ARABE ... 9 LA DIADA ........................................ 17

    PENSAMIENTO INCORRECTO

    MS QUE PALABRAS

    11-S LA MENTIRA DE LA DIADA ...... 23

    EL TABLN...................................... 20

    TABLN DEL LECTOR

    DN RECLAMA TRABAJO DIGNO ...... 16

  • 1

    GOLPEA A UNO PARA EDUCAR A CIEN LA OCUPACIN FEMINISTA DE LA JUSTICIA

    Entre tantos payasos, cobardes, lame ovarios y gilipollas domesticados, merece nuestro mximo

    respeto un hombre que ha elegido mantenerse de pie y no agachar la cabeza, pagando un alto

    precio por su rectitud y atrayendo sobre s el odio de la jaura.

    uiz algunos lectores conozcan el caso del juez

    Serrano, desde hace tiempo en el punto de mira

    de la lobby feminista por sus crticas a las leyes

    de gnero, es decir contra el varn, implantadas en

    Espaa. Especficamente en referencia a los perversos

    efectos de la injusta Ley de Violencia de Gnero, este juez

    ha denunciado el condicionamiento de la justicia por la

    lobby feminista, que ha llevado a una prctica judicial

    ideolgica, sectaria y antimasculina por principio.

    En una palabra, la lobby le tena muchas ganas a este

    magistrado por atreverse a intentar impartir justicia de

    manera correcta e imparcial, en vez de hacerlo

    sistemticamente en contra del varn.

    Y al final naturalmente han conseguido encontrar el

    pretexto para quitarle de en medio, con una acusacin de

    prevaricacin. El motivo? haber extendido en una

    situacin puntual el rgimen de visitas de un nio con su

    padre -un da y medio- para que el hijo pudiera asistir a

    una cofrada. Por este motivo se solicit su inhabilitacin

    como juez.

    El lector decidir si esta es una falta que justifique

    inhabilitar a un juez y truncar su carrera, aun suponiendo

    que no obrase correctamente. Evidentemente se trata de

    un pretexto para quitarle de en medio y la verdadera razn

    es otra, inconfesable, la que he apuntado antes.

    El mismo hecho de que un pretexto tan risible haya dado

    pie a solicitar un castigo tan grave indica claramente cun

    profunda es la degradacin de la justicia. En un pas donde

    toda clase de gentuza goza de la mayor indulgencia, puede

    parecer curioso este rigor, pero al contrario es totalmente

    lgico. En toda tirana que se precie los criminales polticos

    son tratados mucho ms severamente que los criminales

    comunes, y hoy en da es un crimen ideolgico oponerse a

    la ideologa de gnero y al feminismo, como ha hecho el

    juez Serrano.

    Q

  • 6

    El magistrado ya recibi en su da advertencias por su

    actitud, comportamientos que revelan la arrogancia y

    prepotencia de quienes ya ni se preocupan por esconder

    que, para ellas, la Justicia es un coto privado que van a

    defender con uas y dientes. Ahora se han salido con la

    suya y han conseguido truncar la carrera de este juez:

    absuelto por dos tribunales en sucesivos grados de

    apelacin, finalmente el Tribunal Supremo le ha

    condenado a diez aos de inhabilitacin, lo cual supone en

    la prctica su expulsin de la carrera judicial.

    Aunque lo han golpeado duramente, no han conseguido

    doblegar a este hombre recto e ntegro ni su voluntad de

    justicia. Ahora pasar a ejercer la abogaca. Sus amargas

    palabras, dignas, orgullosas, retratan la situacin actual de

    la justicia en nuestro pas:

    Prefiero ser un abogado libre a un juez esclavo del miedo

    y la presin poltica.

    El inters y motivo que realmente

    subyace en este procedimiento, ante

    su absurdo, incoherencia y

    desproporcin, ha sido desde el

    principio el de pretender expulsarme

    de la carrera judicial por ser un juez

    molesto al lobby de gnero.

    "Ese lobby ya anunci que pediran al

    Consejo mi expulsin de la carrera

    judicial por mi parcialidad en el

    ejercicio profesional, y que estudiaran

    si presentaban una denuncia por

    prevaricacin".

    El juez Serrano recurrir al Tribunal

    Constitucional y al de Estrasburgo para

    agotar todos los recursos posibles

    contra este atropello, pero

    seguramente es consciente de sus

    escasas posibilidades pues la secta

    feminista est anidada en todas partes,

    impone su ley a cualquier nivel.

    Para saber qu se puede esperar del

    TC baste recordar que en su momento

    no consider inconstitucional esa

    aberracin que es la Ley de Violencia

    de Gnero, especficamente diseada

    para castigar al varn. Por otro lado, la

    justicia de Estrasburgo es dudoso que

    sirva para algo, pues todas las instituciones europeas estn

    infectadas y dominadas por la correccin poltica, y la

    correccin poltica tiene en su ADN entre muchas otras

    inmundicias- el odio al varn y a la masculinidad. De todos

    modos deseamos la mejor fortuna al juez Serrano en sus

    recursos.

    Este es el legado en nuestro pas del miserable perodo de

    Zapatero, el enemigo del varn que ha llevado la dictadura

    feminista en Espaa a niveles de fanatismo inconcebibles.

    Golpea a uno para educar a cien. La antigua mxima de

    Confucio recuperada y siniestramente pervertida por los

    comunistas chinos, adoptada por las Brigadas Rojas en

    Italia, que disparaban a las piernas de periodistas y

    personajes pblicos que deban ser educados, o los

    mataban para educar a los dems. Los mtodos en la

    Espaa de hoy son diferentes, menos sangrientos, pero la

    lgica y la mentalidad que hay detrs son las mismas.

  • 7

    En el caso del juez Serrano la leccin impartida por las

    educadoras es sencilla y elemental, para que todos la

    entiendan: no se admiten crticas a los abusos de la secta, a

    cualquiera que se atreva a levantar la cabeza se la cortan.

    Entre tantos payasos, cobardes, lame ovarios y gilipollas

    domesticados, merece nuestro mximo respeto un hombre

    que ha elegido mantenerse de pie y no agachar la cabeza,

    pagando un alto precio por su rectitud y atrayendo sobre s

    el odio de la jaura.

    Las implicaciones de este episodio son claras, la

    advertencia para los dems magistrados inequvoca. Los

    jueces se pueden dar por educados. Para no ser expulsado,

    para tener una vida tranquila y no ver arruinada la propia

    carrera, no hay que ponerse en contra de las feministas.

    Si se permiten ya esta arrogancia tan abierta, debemos

    llegar a la conclusin de que la ocupacin de la

    magistratura est ya en un punto muy avanzado. Que cada

    vez ms los magistrados a quienes se permitir impartir

    justicia en nuestro pas y los que llegado el caso nos

    juzgarn, estarn a favor de la ideologa feminista o si no,

    estarn condenados a ser esclavos del miedo y la presin

    poltica.

    En otras palabras, o impartirn (in)justicia antimasculina

    por conviccin o lo harn por miedo y presiones polticas.

    El resultado al final es el mismo. No es un futuro que nos

    amenaza sino un presente que ya est aqu.

    Max Romano Septiembre 2012

    DE PIE SOBRE LAS RUINAS

    Cuando toda esta miseria se termine Nosotros estaremos aqu De pie Sobre las ruinas. Cuando no haya sol Y llueva polvo Y llueva sangre Nosotros estaremos aqu De pie sobre las ruinas. Cuando los rboles No reconozcan a su sombra Ni los hombres recuerden a sus dioses, Nosotros estaremos aqu De pie sobre las ruinas. Cuando sean tan negras las banderas Que se vuelvan Una sola cosa con la noche Nosotros, como sombras furtivas del pasado Estaremos de pie sobre las ruinas. Cuando los muertos hablen nuevamente Con smbolos y voces de victoria Nosotros los estaremos esperando Atentos y de pie sobre las ruinas. Cuando los dioses nos devuelvan A cada camarada perseguido Nosotros como carne de su carne En un espritu comn All estaremos De pie sobre las ruinas. Cuando los mejores vuelvan Con su cara de luz Sobre caballos de fuego Nosotros estaremos esperando Justo en el centro de este laberinto Donde el corazn secreto de los tiempos Nos sostiene de pie, siempre de pie Sobre las ltimas ruinas De la vieja Europa combatiente.

    Juan Pablo Vitali

  • 8

  • 1

    LA EXTRAA PRIMAVERA RABE Una vez ms asistimos a un cctel sorprendente: Estados Unidos, adalid mundial de Israel, se-

    cundado por sus perritos falderos de la OTAN, est de nuevo a punto de culminar el derroca-

    miento de un gobierno que no le era hostil, y lo har aliado con Al Qaeda.

    a muerte de Chris Stevens, embajador de los Esta-

    dos Unidos en Bengasi, ha conmocionado a la opi-

    nin pblica occidental que empieza a asumir que

    tras la primavera rabe ha llegado el otoo rabe, preludio

    de un fro invierno que helar la sangre de los ms despre-

    venidos.

    Pobres ciudadanos occidentales, condenados a no enten-

    der nada a causa de la premeditada ausencia de informa-

    cin veraz, o de lo que es peor, de las toneladas de infor-

    macin intoxicada vertida por sus medios de comunica-

    cin. No entienden qu ocurre y es comprensible que as

    sea. Se preguntan Por qu? Por qu despus de la pri-

    mavera rabe y la tan celebrada cada de los tiranos de

    Oriente Medio, los rabes se encuentren inmersos en un

    acelerado proceso de islamizacin, con fuertes dosis de

    odio a Occidente y a Israel?

    Y no lo entienden porque las revueltas que los medios bau-

    tizaron con el romntico nombre de primavera rabe se

    nos vendieron como protagonizadas por jvenes coordina-

    dos a travs de las redes sociales, deseosos de un proceso

    democrtico y de una modernizacin de sus pases. Cada

    nueva cada era celebrada en nuestros telediarios como

    una conquista de la libertad; sus luchadores eran hroes y

    all donde fue necesario se les prest tanto apoyo como

    pudieran necesitar.

    Occidente no ha intentado siquiera guardar la apariencia

    de neutralidad, se amenazaba con juzgar a los ya derroca-

    dos lderes, se impusieron sanciones internacionales, se

    enviaron asesores, dinero y armas. Y cuando todo esto no

    fue suficiente se intervino militarmente, como en el caso

    libio.

    Ahora descubrimos que Tnez, el que fuera el pas ms

    occidentalizado del mundo islmico, est gobernado por

    un partido islamista y los salafistas se han hecho los due-

    os de la calle ante la pasividad de la polica. Han atacado

    hoteles donde se serva alcohol, han asaltado eventos cul-

    turales que consideraban contrarios al Islam y han llegado

    L

  • 10

    a asesinar en un campus universita-

    rio a un joven por pasear de la mano

    con su novia.

    Descubrimos que Egipto, el eterno

    mediador en la zona, el ms fiable

    de los aliados que Occidente tena

    en el mundo rabe, ese Egipto que

    durante dcadas presumi de un

    gobierno laico y de su modelo de

    convivencia entre la mayora islmi-

    ca y las minoras como los cristianos

    coptos, se ha trasformado tras la

    primavera rabe y est gobernado

    por los hermanos musulmanes; las

    hordas islamistas extienden el terror

    entre la minora cristiana a la vez

    que prometen mano dura para con

    los turistas y destruyen mercados de

    libros. Al Khafagy, director de las

    Juventudes de Justicia y Libertad en

    Giza declaraba recientemente: Los

    indecentes trajes de bao y la mez-

    cla de sexos en la playa son cosas

    que van en contra de nuestra tradi-

    cin. No es slo una cuestin de

    religin. Cuando voy a la playa, yo

    no quiero ver la desnudez.

    Ante estos cambios cmo no van a

    preguntarse nuestros mal informa-

    dos ciudadanos qu demonios ha

    ocurrido? Sentados frente al televi-

    sor ven atnitos las embajadas occi-

    dentales sitiadas por enfurecidos

    musulmanes y la muerte del emba-

    jador de Estados Unidos en Libia...

    No habamos derribado a los ma-

    los? No habamos ayudado a los

    defensores de la libertad? Y sobre

    todo Pero no haban ganado la

    guerra los nuestros? Por qu nos

    agradecen as la ayuda prestada?

    Los medios de comunicacin inten-

    tan explicarnos la situacin diciendo,

    bsicamente, que es una lstima que

    la primavera rabe finalmente haya

    sido rentabilizada por el islamismo

    radical, pero que nosotros hicimos lo

    que debamos hacer: apostar por los

    luchadores de la libertad. La cues-

    tin es que los apodados defensores

    de la libertad por la prensa occiden-

    tal nunca lo fueron y lo que es peor,

    la prensa occidental lo saba y nos

    minti desvergonzadamente.

    Que los insurgentes eran unos radi-

    cales islmicos era, desde el primer

    momento, algo tan evidente que

    slo dos cosas pueden justificar ese

    tono de preocupacin y asombro

    con el que ahora se nos estn na-

    rrando los acontecimientos: o bien

    nuestros periodistas son unos abso-

    lutos incompetentes, o bien son

    unos manipuladores natos que si-

    guieron al pie de la letra instruccio-

    nes de no desvelar quin se encon-

    traba detrs de la tan elogiada pri-

    mavera rabe hasta que ya fuera

    inevitable la victoria de los insurgen-

    tes gracias, por supuesto, al apoyo

    militar econmico y logstico de las

    potencias occidentales.

    Poco parece haber importado a

    quienes nos vendan las bondades

    de la primavera rabe que los lderes

    del Islam ms radical apoyaran des-

    de el principio dichas revueltas, co-

    mo el nmero dos de Al Qaeda, Ay-

    man Al Zawahiri, que llam abierta-

    mente a los musulmanes a levantar-

    se contra Gadafi, o que el influyente

    clrigo musulmn Yusuf al-

    Qaradawi, lder de los Hermanos

    Musulmanes de Egipto, emitiera

    J. Christopher Stevens

  • 11

    desde la cadena Al Jazeera una fatua

    por la que cualquier soldado libio

    pudiera disparar y matar al acosado

    lder Muamar Gadafi. Tampoco pa-

    reci importar a los medios de co-

    municacin la emisin de un vdeo

    en el que el libio Abu Yahya al Libi,

    un importante lder de Al Qaeda,

    instaba a sus compatriotas a conti-

    nuar e intensificar la lucha contra

    Gadafi... No, ni estas ni otras muchas

    noticias similares han importado,

    haba que presentar a los rebeldes

    como luchadores por la libertad y

    punto.

    Tampoco importaba la presencia de

    miembros de Al Qaeda dirigiendo las

    unidades militares rebeldes, como

    Abdelhakim Belhadj, a quien las

    autoridades rebeldes han confiado

    el mando militar de la capital del

    pas. Belhadj es el antiguo emir del

    Grupo Islmico Libio de Lucha (LIFG,

    por sus siglas en ingls), incluido en

    la lista de organizaciones terroristas

    tras los atentados del 11-S en Nueva

    York. O Abu Laith al-Libi, responsa-

    ble de campos de entrenamiento de

    terroristas y enlace entre Al Qaeda y

    el movimiento talibn, segn el dia-

    rio Asharq Alawsat. O Abdelkarim al-

    Hasadi y Abu Sufian bin Qumu, ex

    prisioneros de Guantnamo y ac-

    tualmente importantes comandan-

    tes de los sublevados.

    No, nada de esto importaba, para

    nuestras televisiones eran luchado-

    res por la libertad y ahora claro,

    despus de tal campaa de intoxica-

    cin informativa, la poblacin no

    entiende los asaltos a embajadas.

    Ya ni las mentes ms cndidas pue-

    den creer que hemos asistido a una

    serie de revueltas espontneas pro-

    movidas por jvenes con aspiracio-

    nes. Lo cierto, y fcilmente consta-

    table, es que hemos estado ayudan-

    do al islamismo ms radical a derro-

    car, uno tras otro, a gobiernos laicos

    y prooccidentales; o al menos si no

    prooccidentales como el caso de

    Libia, s aliados frente al fundamen-

    talismo islmico, algo que, todo sea

    dicho, seguimos haciendo con Siria:

    de la misma forma en que se denun-

    ci que miembros de Al Qaeda esta-

    ban peleando en Libia contra las

    tropas de Gadafi, hoy se est denun-

    ciando que son las milicias de Al

    Qaeda las que estn peleando en

    Siria.

    De hecho el actual lder de Al Qaeda,

    Aymn al Zawahir, ha pedido a los

    musulmanes del mundo rabe que

    apoyen a los rebeldes que buscan

    deponer al presidente sirio Bashar Al

    Assad. En su comunicado pidi a los

    musulmanes en Irak, Jordania, Lba-

    no y Turqua que se unan al levan-

    tamiento en contra del "pernicioso,

    canceroso rgimen" de Assad. El

    vdeo de ocho minutos fue publica-

    do en pginas extremistas de Inter-

    net.

    Bashar Al Assad

  • 12

    Cmo han reaccionado los Estados

    Unidos ante este apoyo explcito y

    manifiesto de Al Qaeda a los insur-

    gentes en Siria? Pues de la misma

    forma en que lo hicieron en el caso

    libio. La secretaria de Estado, Hillary

    Clinton, ha prometido hacer llegar

    ms ayuda a la oposicin en Siria y

    coordinar con Turqua medidas con-

    cretas, incluidos aspectos de espio-

    naje y militares, mientras que Barack

    Obama ha firmado una orden que

    autoriza operaciones encubiertas de

    la CIA y otras agencias para apoyar a

    los rebeldes sirios en su lucha por

    acabar con el rgimen de Bachar al

    Asad, segn han revelado la CNN y la

    agencia Reuters.

    Una vez ms asistimos a un cctel

    sorprendente: Estados Unidos, ada-

    lid mundial de Israel, secundado por

    sus perritos falderos de la OTAN,

    est de nuevo a punto de culminar

    el derrocamiento de un gobierno

    que no le era hostil, y lo har aliado

    con Al Qaeda. Al menos en esta oca-

    sin no tendremos que asistir, al

    espectculo bochornoso de ver a

    nuestro ejrcito del brazo de las

    fuerzas qatares, un pas con un

    rgimen pseudo medieval en el que

    aun sobrevive alguna forma se es-

    clavitud, como sucedi con Libia,

    involucrndonos en una guerra en

    defensa de "la libertad y la demo-

    cracia" que segn nos decan se

    encontraban encarnadas en los ex-

    tremistas islmicos que formaban el

    grueso de los rebeldes libios.

    La pregunta del milln sin duda es

    Por qu? Por qu Estados Unidos

    ha empleado tanto tiempo, esfuerzo

    y dinero en derrocar los regmenes

    que no eran un peligro para Occi-

    dente? Y lo que es ms sorprenden-

    te Por qu lo ha hecho a sabiendas

    de que ayudaba a islamistas radica-

    les, enemigos acrrimos de Occiden-

    te y de Israel, a hacerse con el nuevo

    gobierno?

    Un general sirio encargado de las

    operaciones en el oeste de Alepo ha

    dicho a la agencia de noticias AFP

    que los europeos muestran una

    ceguera con el apoyo a los rebel-

    des contra el rgimen del presidente

    Bashar al-Assad. Expres con incre-

    dulidad No entienden que somos

    la ltima presa que est frenando el

    flujo de islamistas hacia Europa?

    Qu ceguera! remach.

    Cualquiera dira que lejos de estabi-

    lizar la zona, lo que Estados Unidos

    est haciendo es crear la tormenta

    perfecta. Quiz en el invierno rabe

    que se avecina a alguien le interese

    una nueva guerra rabe-israel a

    gran escala Tiene otro sentido todo

    cuanto est ocurriendo?

    En la poltica, nada sucede por ac-

    cidente. Si sucede, usted puede

    apostar que as se plane.

    Franklin Delano Roosevelt

    Lucio Peacoba Septiembre 2012

    Familia Al Assad en los 70

  • 13

    ORGANIZANDO LA RESISTENCA Tiempos difciles nos ha tocado vivir, pero no por ello menos apasionantes. Los nacio-

    nalistas Espaoles, bajo el movimiento poltico Democracia Nacional, continan orga-

    nizando la resistencia con la intencin de crear una lite revolucionaria capaz de tomar

    en muy poco tiempo las riendas de la situacin.

    n verano movidito dejamos atrs, los Draghi

    y las Merkel, los Monti y las Lagarde han sido y

    siguen siendo los protagonistas del aniquila-

    miento total del ltimo resquicio de soberana econmica

    que tena la nacin Espaola antes de estar orientada a la

    intervencin monetaria. La quiebra econmica de Espaa

    es inminente y durante este pasado verano 2012 los me-

    dios de comunicacin no han cesado de transmitir en sus

    informativos la gran mentira de lo terrible y excesivo del

    gasto econmico que todos los Espaoles hemos venido

    haciendo durante los aos de bonanza econmica.

    Las noticias de alerta financiera han inundado ms que

    nunca los noticiarios, en un verano en el que mientras

    quemaban a la poblacin con sus grandes mentiras sobre

    economa, tambin lo hacan nuestros bosques, en nume-

    rossimos incendios forestales, bajo la pasividad de unas

    autoridades execrables, demostrando as que el pueblo

    Espaol est direccionado a la catstrofe natural, moral,

    econmica y social por culpa de una casta al servicio del

    poder que, lejos de hacer poltica, tan slo quiere vivir de

    ella.

    Tiempos difciles nos ha tocado vivir, pero no por ello

    menos apasionantes. Los nacionalistas Espaoles, bajo el

    movimiento poltico Democracia Nacional, continan

    organizando la resistencia con la intencin de crear una

    lite revolucionaria capaz de tomar en muy poco tiempo

    las riendas de la situacin.

    Uno de los principales objetivos del movimiento poltico

    Democracia Nacional es buscar la frmula adecuada que

    conjugue el verbo y la accin para resistir los envites que

    el sistema y sus cmplices lanzan a la poblacin occiden-

    tal.

    Es por ello que cada ao Democracia Nacional realiza, en

    torno al periodo estival, reuniones de los mximos diri-

    gentes del partido, adems de ciclos de conferencias para

    U

  • 14

    sus militantes, con el fin de mejorar

    la disciplina de la organizacin y su

    formacin poltica e intelectual.

    Este evento que se lleva realizando

    durante diecisiete aos son las co-

    nocidas UNIVERSIDADES DE VERA-

    NO.

    Todos los aos, congregados en

    algn punto estratgico de la geo-

    grafa nacional, Democracia Nacional

    organiza la resistencia y hace balan-

    ce de toda la problemtica que ge-

    nera en Espaa y el resto de Europa

    este nuevo proceso al que nos so-

    meten y que se denomina globaliza-

    cin.

    En esta ocasin la XVII edicin de la

    Universidad de Verano se realiz

    entre las jornadas del 16 al 18 de

    septiembre en la ciudad de Barcelo-

    na, bajo el ttulo: La unidad nacio-

    nal y el nacionalismo la nica salida

    a la crisis.

    Para esta ocasin, y como nos tiene

    acostumbrados los cursos de verano

    de DN, las conferencias que tuvieron

    lugar durante la jornada del Sbado

    18 fueron de un carcter extensa-

    mente formativo, cubriendo los

    principales pilares que el neolibera-

    lismo y el marxismo cultural estn

    rompiendo con una celeridad pre-

    ocupante, la economa social, la

    unidad nacional y los principios cris-

    tianos y tradicionales.

    La universidad de verano cont con

    unos oradores de excepcin, Rober-

    to Fiore, Lucio Peacoba y Manuel

    Canduela.

    Roberto Fiore, secretario nacional

    del movimiento nacionalista italiano

    FORZA NUOVA, fue el encargado de

    abrir el ciclo de conferencias de la

    universidad, realizando una brillante

    conferencia cargada de proyeccin

    ideolgica ante las decenas de mili-

    tantes, dirigentes y simpatizantes

    que abarrotaban el saln de actos.

    En su alocucin Fiore transmiti la

    importancia de responder firme-

    mente a la concepcin internaciona-

    lista, liberal y marxista que los ene-

    migos de Occidente han creado de

    nuestra madre Europa, por ello los

    patriotas Europeos debemos lanzar

    con fuerza la nica concepcin que

    existe de nuestra madre patria, la

    concepcin nacional europea, social

    y cristiana.

    Durante la conferencia Roberto

    explic asuntos muy interesantes

    referentes a la enorme crisis finan-

    ciera que han creado las lites in-

    ternacionales y las cuales estn

    atacando parte de Europa, espe-

    cialmente los denominados PIGS

    por los financieros internacionales

    (Portugal, Italian, Greek, Spain, PIGS

    = CERDOS).

    Roberto explic el fuerte crecimien-

    to que los movimientos nacionalis-

    tas estn obteniendo en numerosos

    pases de Europa. As como nume-

    rosas acciones que su movimiento

    est llevando a cabo en toda la bota

    italiana.

    Tras la brillante intervencin de Ro-

    berto fue Lucio Peacoba, responsa-

    ble de formacin de Democracia

    Nacional y codirector de la revista

    VyA, quien comenz su conferencia

    bajo el ttulo La Guerra Ideolgica,

    explicando la situacin poltica en la

    que vivimos inmersos, e identifican-

    do la actual lnea de frente ideolgi-

    co, situada entre aquellos que de-

    fienden Occidente y las naciones

    que lo componen y aquellos que

    desean su destruccin.

    En su intervencin Lucio hizo una

    gran disertacin sobre cmo entre

    los neoliberales y los socialdemcra-

    tas ya no existe ningn tipo de dife-

    rencia ideolgica, ni diferentes vi-

    siones de interpretar el mundo. Sin

    lugar a duda Lucio volvi a demos-

    trar en esta conferencia el potencial

    ideolgico que s tienen los Dem-

    cratas Nacionales y el frente comn

    que junto a nuestros amigos nacio-

    nalistas Europeos se est llevando a

    cabo.

    Quien puso el toque final a esta

    magnfica jornada de idealismo y

  • 15

    formacin fue Manuel Canduela,

    Presidente de Democracia Nacional.

    El lder nacionalista Espaol, en una

    intensa intervencin, explic lo que

    se nos viene encima a los Espaoles

    de no reaccionar ante el chantaje de

    los polticos; Canduela hizo referen-

    cia a la ltima manifestacin de los

    separatistas que se dieron cita en

    Barcelona pidiendo la destruccin de

    Espaa el pasado once de septiem-

    bre en la Ciudad Condal y de cmo

    los medios de comunicacin trans-

    mitieron este triste acontecimiento

    con total normalidad como si se

    tratase de una cabalgata de Disney

    Manuel denunci claramente al

    gobierno del partido popular por no

    tomar medidas para defender Espa-

    a de los enemigos externos e inter-

    nos de la nacin, dejando claro que

    no lo hace porque es un gobierno

    traidor y anti-Espaol.

    Por ltimo, Manuel cerr la jornada

    animando a los asistentes a respon-

    der al gobierno y sus cmplices se-

    paratistas en el prximo da de Es-

    paa, el doce de Octubre en Mont-

    juic, Barcelona, en el mitin que se

    lleva celebrando estos ltimos vein-

    ticinco aos el Da de la Hispanidad.

    En un momento en el que Espaa

    est herida de muerte y necesita

    ms que nunca de sus hijos para que

    la sanen y la defiendan, se encuen-

    tra un nutrido grupo de idealistas

    guiando el despertar del pueblo

    Espaol.

    Se llama Democracia Nacional.

    Para terminar nos quedamos con

    una frase en clave de ancdota que

    Roberto Fiore cit al trmino de su

    intervencin.

    Espaa es as, siempre despierta

    dos das ms tarde, pero cuando lo

    hace, son dolores para todos

    Pedro Chaparro Septiembre 2012

  • 16

    DN RECLAMA TRABAJO DIGNO

    PARA TODOS LOS ESPAOLES

    l pasado da 29 un nutrido grupo de militantes y

    simpatizantes de Democracia Nacional recorri las

    calles de Valladolid reclamando la prioridad nacio-

    nal. Algo tan elemental que, en un pas que no haya perdi-

    do el norte, no debera hacer falta pedirlo. Pero en Espaa

    s, y con los efectos de la crisis, cada da ms.

    Una madre que no est desnaturalizada alimentar prime-

    ro a sus hijos, y luego, si puede, a los de los dems. Slo

    una mala madre dejar que sus hijos pasen hambre para

    alimentar a los de otros. Y as es como se est comportan-

    do Espaa con muchos de nuestros compatriotas, como

    una mala madre que les niega el pan y la sal para drsela

    a los hijos de otras tierras que, en muchos casos, incluso

    entraron ilegalmente.

    Es razonable que en un pas con ms de cinco millones

    de parados se consienta que existan algunas grandes em-

    presas con ms de un 80% de mano de obra inmigrante?

    Es razonable que se nieguen ayudas escolares y de todo

    tipo a familias espaolas necesitadas mientras que dichas

    ayudas son concedidas a ciudadanos extranjeros?

    Creemos que no, y nuestros militantes salieron a la calle

    para gritarlo.

    As mismo, durante la marcha, se hizo sentir el desacuer-

    do de nuestra militancia con la poltica que el actual go-

    bierno mantiene con respecto a la banca. El nico negocio

    del mundo cuyos beneficios son privados y se los reparten

    sus dueos, pero que cuando tienen prdidas, stas son

    sufragadas por todos.

    Quin no deseara tener un negocio as!

    Son muchos los frentes en los que hay que luchar en la

    Espaa actual. Y Democracia Nacional ha demostrado,

    una vez ms, que est dispuesta a dar la batalla en todos

    ellos.

    E

  • 9

    Muerto Franco, los herederos del Rgimen bailaron al son de los traidores y los cantos de sirena

    de los polticos europeos. El Rey debi de dar un golpe de timn, s, el Rey, que jur Los Princi-

    pios del Movimiento Nacional y sobre el que descansaban entonces las ltimas decisiones en tan

    pesados menesteres.

    untas reflexiones sobre tantos y tantos te-

    mas que me preocupan tengo pendientes de

    trasladar al papel! Cuntos pensamientos

    que bullen en mi cabeza se quedan en el tintero por falta

    de tiempo para transcribirlos! Cuntas ideas dejo or slo

    en mis discursos y charlas y se pierden sin remedio!

    Eso se va a acabar, desde ahora voy a utilizar esta seccin

    que me ceden desde la direccin de VERBO y ACCION

    para que conozcis mi humilde opinin sobre esos asuntos

    que me preocupan, y creo que tambin preocupan a los

    buenos ciudadanos de este pas, antes llamado ESPAA, y

    que por tan obvia a veces para mi razn, dejo de expresar

    en negro sobre blanco; problemas en general, problemas

    masivos, problemas e inquietudes al cabo de la calle, pro-

    blemas al fin y al cabo que creo que mis compatriotas su-

    fren como yo, en silencio y que a travs de estas lneas

    quiero tener la valenta de reflejar, sobre todo, para que el

    lector que se identifique con lo escrito, reconozca su opi-

    nin en la ma y se d cuenta que no est solo en el proce-

    loso ocano de la duday de la lucha

    Se acab Este es mi primer artculo y no ser el nico en

    estas pginas.

    En esta ocasin os voy a hablar sobre la DIADA de CATA-

    LUNYA, ese nefasto acto que se celebr el pasado once de

    septiembre y cuya masiva asistencia los polticos catala-

    nes catalanistas no cejan de blandir contra el dbil gobier-

    no de la Nacin para con ello, exultantes, proclamar que el

    Pueblo Cataln est con ellos y que, mal que les pese a los

    partidos centraloides, Catalunya ha sido y ser una Naci,

    sin ms El nclito Artur Mas estuvo con ellos en espritu

    y dej bien claro que, desde las instituciones oficiales cata-

    lanas (y oficiosas, Bara incluido club de mis amores-) se

    apoya con firmeza el acto popular puesto que, segn

    ellos mismos, dicho clamor refleja la inquietud de los cata-

    lanes hacia este proyecto de nueva nacin dentro de Eu-

    ropa que debe comenzar con la independencia fiscal tan-

    tas veces demandada a los (des)gobiernos de Madrid,

    C

  • 18

    puesto que sta independencia fiscal

    no es sino el primer paso para con-

    seguir las estructuras nacionales que

    Catalunya necesita para instaurarse

    como naci. Usan la ambigedad

    del s pero no para hacer creer a

    los dbiles de espritu que esta fisca-

    lidad a la catalana no es ms que el

    dinero cataln se queda en Catalu-

    a. Pero no es as, y as se le escapa

    a algn figurn de la poltica el argu-

    mento contrario a poco que le pre-

    gunte un periodista catalanistaEl

    dinero cataln para Cataluay lo

    dicen como si nada.

    El problema cataln, y el vasco, y el

    gallego nacen juntitos de la mano,

    en parto triple malparido de la ne-

    fasta Constitucin que nos dimos

    los espaoles all por los SETENTA y

    que se estudia en Derecho y en las

    oposiciones a funcionario como el

    que debe leerse La Regenta para

    elaborar un comentario de texto

    sin reflexin.

    Maldita Constitucin est que desde

    el da en que se aprob NO hace a

    TODOS LOS ESPAOLES iguales ante

    la Ley, pues da dos vas (dos art-

    culos distintos, no recuerdo de me-

    moria cuales algn ciento treinta

    y algo?) para que las autonomas

    histricas y las provincias y regio-

    nes que no lo son adquieran su

    carta estatutaria de modo distinto.

    Qu triste! Una constitucin que

    nos damos como primera papilla

    democrtica y que comete tan craso

    error! Y de aquellos polvos vienen

    estos lodos Como si un seor de

    Guadalajara, castellano viejo l, fue-

    ra un mindundi, un cualquiera, com-

    parado con un hidalgo vizcano, o un

    cataln de pura cepa. Como si un

    valenciano o un extremeo, muy

    seores ellos, no fueran ms que los

    limpiabotas del noble galego que

    tuvo antao todo un reino! Y qu

    fueron sino Castilla, o Valencia, sino

    Reynos de las Espaas? Pues tal

    fue la ceguera de aquellos polticos

    transicioncitas que consideraron

    como moderados a los naciona-

    lismos vasco, cataln y gallego y les

    dieron carta de recomendacin les

    dieron ttulo nobiliario ante el resto

    de la Espaa que quedaba, as, como

    un sin papeles cualquiera, compues-

    ta y SIN DEMOCRACIA

    Y SE LLAMAN PADRES DE LA PA-

    TRIA!... semejantes traidores, con el

    Rey por padrino, aquellos que per-

    petraron tal crimen contra la Unidad

    de la Nacin.

    Traidores a la Patria y vendidos al

    Poder. Algunos analistas muy sesu-

    dos ellos, dicen que poco se pudo

    hacer, que haba que darle paso a las

    inquietudes nacionalistas dentro de

    la Constitucin para que se encauza-

    sen por los caminos de la democra-

    cia. Leche! Pero qu mal sali el

    experimento! GRAPO, ETA, ERPGC,

    TERRA LLIURE Qu pasa? Que

    eran democrticos y no lo saba-

    mos? Que mataban por la demo-

    cracia? Seguro que CiU, PNV y

    BNGA no han sacado ningn rdito

    poltico en treinta aos de constitu-

    cin de sus moderadas posturas

    nacionalistas?

    Siempre he criticado la falta de cin-

    tura de S.M. El Rey en momentos

    como aquellos de la transicin

    hubiera sido tan fcil o no Pero

    yo tena una idea ya, que como va-

  • 19

    lencianista, anhelaba de un Borbn,

    heredero de Felipe V, y era bien

    sencilla.

    Siempre me he preguntado por qu

    el Rey no aprovech la circunstancia

    de proclamar una Constitucin Es-

    paola, tras la muerte del General

    Franco, donde se empezase con

    tabla rasa.

    Muerto Franco, los herederos del

    Rgimen bailaron al son de los trai-

    dores y los cantos de sirena de los

    polticos europeos. El Rey debi de

    dar un golpe de timn, s, el Rey,

    que jur Los Principios del Movi-

    miento Nacional y sobre el que des-

    cansaban entonces las ltimas deci-

    siones en tan pesados menesteres.

    SIEMPRE he pensado Qu hubiera

    sido de ESPAA si el Rey, al acceder

    al trono muerto el Caudillo, hubiese

    derogado EL DECRETO DE NUEVA

    PLANTA? Qu hubiera sido de los

    nacionalismos histricos si S.M.,

    de un plumazo, en las jornadas pre-

    vias a las sesiones de las Cortes

    Constituyentes, devuelve a los anti-

    guos reinos, en fin, a TODA ESPAA,

    aquellos fueros que derog su reta-

    tarabuelo? Cmo se lo hubieran

    tomado los nacionalismos histri-

    cos que, de golpe, dejan de ser

    nacionalismos e histricos? Tendr-

    an hoy por hoy las competencias

    concedidas que, desmembradoras,

    nos hacen desiguales a los ciudada-

    nos, y nos dan o quitan derechos

    segn en qu lugar de Espaa resi-

    damos?

    No soy dado a la poltica ficcin ni a

    imaginar como sera si, pero creo

    que los hechos hablan por s mismos

    y tambin creo firmemente que, de

    haber sido como propongo, no habr-

    a hoy sorbiendo la savia de Espaa

    unos nacionalismos centrfugos que

    viven de nuestra debilidad como

    nacin y se reafirman en nuestra

    estulticia.

    En fin, poco podemos hacer ya, o

    eso creemos los espaolitos de a

    pie; o mucho, todo depende del

    empeo que pongamos en ello. To-

    do depende de quin DEJEMOS que

    nos gobierne, cada cuatro aitos,

    prometiendo cambiarlo todo, sin

    cambiar nunca nada y as nos va,

    como en el mito de la caverna, slo

    que las sombras que vemos pasar

    son lo poco que queda de la ESPAA

    que tras nuestros usos polticos nos

    viene quedando y as, engaados,

    vivimos y pensamos como quieren

    que vivamos y pensemos. VIVA LA

    DEMOCRACIA! Y acabo como m

    admirado Forges dicindolo todo

    con una sola palabra, slo que sin su

    arte: PAIS!

    Vicente Estarelles

  • LA MARCA ESPAA

    El otro da mientras me duchaba pens que...

    ... pocas cosas deberan provocar tanto rechazo a

    un pueblo como que sus gobernantes? decidan

    hacer de ellos una "marca".

    En el colmo del delirio neoliberal la "Marca Espaa"

    convierte a nuestro pas, a nuestra nacin, a nues-

    tro pueblo entero en una especie de mercanca sus-

    ceptible de qu... de ser vendida a precio de saldo

    al mejor postor? Tan avanzado est el estado de

    degeneracin, tan atrofiados los espaoles, que ni

    siquiera intentan disimularlo?

    No debe quedarnos duda de que tras esta repug-

    nante charada se esconde lo de siempre: comisio-

    nes millonarias, cargos de "responsabilidad" asig-

    nados a dedo, promotores incompetentes y ejecu-

    tores miserables que se venden por las eternas

    treinta monedas de plata.

    La "Marca Espaa" no es ms que otra abyecta idea

    ms engendrada en los "think tanks", esos vertede-

    ros morales financiados multimillonariamente des-

    de donde se dirigen los proyectos de ingeniera so-

    cial destinados a reventar Occidente.

    A nuestros inmundos gobernantes hay que decirles

    que su sagrado deber y obligacin es mejorar Espa-

    a, y mejorar Espaa no se consigue con iniciativas

    vacas de contenido, ni etiquetas, ni bonitos logos,

    ni sonoros lemas, ni imbecilidades de "marcas".

    Una Espaa mejor se consigue con trabajo, esfuerzo

    y honradez, algo de lo que nuestra clase poltica ha

    demostrado carecer.

    Una marca identifica un producto comercial, e in-

    cluso ese bar de carretera del farolillo rojo puede

    ser una marca. Pero un pas, no, un pueblo, no.

    Desde aqu os pido que cada vez que oigis hablar

    de la "Marca Espaa" respondis al cretino de turno

    que se meta la marca por la etiqueta y le digis alto

    y claro que ESPAA Y LOS ESPAOLES NI SE COM-

    PRAN NI SE VENDEN.

    Leni

  • 7

    11-S LA MENTIRA DE LA DIADA El gran embuste que los nacionalistas han construido alrededor del 11-S ha provocado que sean muchos los catalanes que no celebren el da de la Diada, ya que la participacin en dicha fiesta supone la perpetuacin de una mentira.

    esde hace 32 aos, desde un 1980 que marc el principio de un independentismo exacerbado, cada 11 de septiembre se celebra la Diada de Catalua.

    En esta fecha aquellos que desean la independencia de Catalua conmemoran la rendicin de Barcelona a las tro-pas borbnicas, dirigidas por el Duque de Berwick, durante la guerra de sucesin Espaola y que sucedi en 1714.

    Fue sin embargo mucho antes, a finales del XIX, cuando esta fecha fue elegida por el nacionalismo alejndose to-talmente de la realidad histrica pasando a lo mstico y casi sin planterselo de la realidad a la ficcin.

    Festividad llena de actos que ocultan su peculiar verdad hospedada en una mentira han hecho creer a las nuevas generaciones sus medias verdades nacionalistas celebradas ao tras ao. Una de esas medio verdades es la ofrenda floral a Rafael Casanova y Comes Conseller en Cap de la ciudad de Barcelona y mxima autoridad militar y poltica de Catalua durante el sitio borbnico de Barcelona. Pre-sentado como mrtir fallecido en la cada de Barcelona es algo ms que un hroe para las nuevas legiones de cacho-rrillos independentistas que creen a pies juntillas lo que sus amos les cuentan. Sin embargo nada ms alejado de la realidad, Rafael Casanova fue herido en la batalla final del 11 de septiembre de 1714 pero en ningn caso ni muri ni fue mrtir. Fue exonerado de sus cargos polticos y milita-res y volvi a ejercer la abogaca, su profesin, hasta poco antes de su muerte en 1743 en su domicilio de Sant Boi de Llobregat. Mantuvo el contacto con varios de los que hab-an sido dirigentes de la ciudad durante el sitio, as como con los exiliados en el imperio austraco, y se le atribuye la autora de un opsculo austracista publicado en 1736. Su figura se ha convertido en un icono del catalanismo, que le rinde tributo como a uno de sus grandes patriotas. Esta instrumentalizacin es duramente criticada por quienes lo consideran un mero austracista, partidarios del Archiduque Carlos de Austria como candidato a la Corona de Espaa en la Guerra de Sucesin Espaola. Esta manipulacin la histo-ria se ha prolongado hasta nuestros das convirtindose en una descarada mentira al servicio de los independentistas que la mantienen como una realidad para mantener sus pilares. La ciudad de Barcelona le dedic en 1863 una calle, y en 1888 erigi una estatua en su memoria. Convertido en

    D

  • 24

    referente catalanista, los homenajes en su honor fueron prohibidos du-rante las dictaduras del Miguel Pri-mo de Rivera y Francisco Franco, cuando la estatua fue asimismo reti-rada. Desde su restitucin en 1977, el monumento a Casanova es esce-nario de los homenajes florales de las principales instituciones y asocia-ciones catalanas durante la Diada de Catalua.

    El simple hecho de la eleccin del 11 de septiembre como la fiesta na-cional de Catalua demuestra su guerra abierta contra el estado al escoger el da de una supuesta de-rrota de la Catalua independiente. Y estos barbaros no cesaran hasta

    que esa imaginaria Catalua inde-pendiente resurja como el ave Fenix de sus cenizas.

    Para los que apoyan el independen-tismo sus enemigos son los descen-dientes polticos de aquellos que un da de 1714 asediaron Barcelona, cuando en realidad fueron las auto-ridades catalanas las que traiciona-ron los pactos firmados con Felipe V para aliarse con Inglaterra llevando destruccin y guerra a Catalua, a su propia tierra.

    Fue la clase poltica que veneran la que entro en guerra jugndoselo todo y sin un ejrcito, confiando en que sus aliados lo resolvieran todo.

    Catalua fue arrasada por ejrcitos de media Europa durante diez aos mientras sus polticos se sentaban a esperar para poder recoger lo que sus aliados quisieran dejarles. Todo acabo un fatdico 11 de septiembre con una carnicera que cost la vida de 16000 personas entre ambos mandos.

    Eso es lo que celebran los Catalanes cada 11 de septiembre la masacre de 16000 inocentes que su traicin provoco.

    Curiosamente se al que hoy los separatistas van a poner flores cada 11 de septiembre como caudillo independentista contra Espaa, a las tres de la tarde de ese mismo da del ao 1714 y con la intencin de con-vocar a los barceloneses a defender las murallas de su ciudad por ltima vez escribi:

    "Se hace tambin saber que siendo la esclavitud cierta y forzosa, en obligacin de sus empleos explican, declaran y protestan a los presen-tes, y dan testimonio a los venide-ros, de que han ejecutado las lti-mas exhortaciones y esfuerzos, pro-testando de los males, ruinas y de-solaciones que sobrevengan a nues-tra comn y afligida patria, y del exterminio de todos los honores y privilegios, quedando esclavos con los dems espaoles engaados, y todos en esclavitud del dominio francs; pero se confa, con todo, que como verdaderos hijos de la patria y amantes de la libertad acu-dirn todos a los lugares sealados a fin de derramar gloriosamente su sangre y vida por su rey, por su honor, por la patria y por la libertad de toda Espaa.

    Este es el ese verdadero indepen-dentista al que hoy homenajean los catalanes que quieren ver rota Es-paa. Palabras similares a las que dejo para el recuerdo el comandan-te del ejrcito de Catalua Antonio de Villarroel y Pelez.

    Estatua erigida en honor a Rafael Casanova en Barcelona (1888)

  • 25

    Este es el groso de la historia pero he de hacer unas pequeas puntua-lizaciones que magnifican ms aun la mentira que se ha extendido por el tiempo.

    En primer lugar dejar claro que no solo los barceloneses resistieron a las tropas borbnicas muchos caste-llanos tambin lo hicieron, incluyen-do Madrid. Importante recalcar esto por varios motivos pero el principal evitar la suspicacia de aquellos que en nombre de la independencia se empean en sacar punta a las ver-dades que les escuecen.

    Los independentistas siempre han vendido la guerra como una guerra de secesin sin embargo la guerra no fue de secesin, sino de suce-sin. En dicha guerra dos preten-dientes se jugaban el acceso al trono de la Corona de Espaa tras la muer-te sin descendencia del Rey Carlos II: por un lado Felipe DAnjou, francs, y por otro el Archiduque Carlos de Habsburgo, austriaco, en lo que fue una autntica guerra eu-ropea.

    No fue una guerra de secesin fue una guerra civil espaola entre

    partidarios de dos pretendientes a suceder en la corona de Espaa a un rey muerto sin descendencia.

    Felipe V rein sin oposicin interna entre 1700 y 1705. Tras ser corona-do, se desplaz a Barcelona donde residi 6 meses, jurando el 4 de oc-tubre de 1701 sus leyes y constitu-ciones, otorgando nuevos privilegios a las instituciones catalanas, los ms generosos en 100 aos. Pero los dirigentes catalanes parecan no estar conformes nunca con el poder que se les otorgaba. Antoni Peguera y Domnec Parera, en representa-cin de la Diputacin de Barcelona, fueron quienes rompieron los pactos institucionales unilateralmente pac-tando en secreto con Inglaterra de-clarando la guerra a Felipe DAnjou, dejando entrar tropas extranjeras. Fue en el pacto de Gnova, en el cual Catalua entraba en guerra junto a los aliados, indicando que el objetivo era que Carlos III de Austria se convierta en rey de TODOS los dominios que entonces conforma-ban Espaa.

    Los seguidores de Carlos de Habs-burgo en Catalua defendan la uni-dad de Espaa. Trataban de imponer su candidato al conjunto de todo el pas recelosos de la influencia fran-cesa; lejos, pues, de cualquier aspi-racin secesionista o desmembrado-ra. Los soldados que fueron derrota-dos el 11 de septiembre de 1714 frente a las tropas de Felipe V esta-ban mandados por el general Anto-nio de Villarroel, que en su ltima arenga les record: estis luchando por nosotros y por toda la nacin espaola.

    El final de la guerra supuso el final de tres siglos de decadencia de Cata-lua y el inicio de su resurgimiento econmico. El siglo XVIII, lejos de ser un periodo de declive en Catalua, result ser una etapa de particular esplendor y auge demogrfico, agr-cola, comercial e industrial, benefi-ciado por el proteccionismo de la Corona.

    Constituciones catalanas juradas por Felipe V de Castilla en 1702

  • 26

    El denominado decreto de Nueva Planta, llamada en realidad Cdula Real de Nueva Planta de la Real Au-diencia del Principado de Catalua, organizaba las instituciones judicia-les en Catalua, respetando las Constituciones y prcticas previas, estableciendo que los letrados fue-sen expertos en legislacin y lengua catalana. Fijaba el castellano mera-mente como lengua jurdica y elimi-naba los privilegios por nacimiento en un territorio determinado.

    El da del asalto final de las tropas borbnicas, Casanova estaba dur-miendo y tras ser avisado se pre-sent en la muralla con el estandar-te de Santa Eulalia para dar nimos a los defensores. Herido de poca gra-vedad por una bala en el muslo. Ca-sanova fue trasladado al colegio de la Merced donde se le practic una primera cura. Tras caer la ciudad en manos de las fuerzas borbnicas, quem los archivos, se hizo pasar por muerto y deleg la rendicin en otro consejero. Huy de la ciudad disfrazado de fraile y se escondi en una finca de su hijo en Sant Boi de Llobregat. En 1719 fue amnistiado y volvi a ejercer como abogado hasta retirarse en 1737. Muri en Sant Boi de Llobregat en el ao 1743. Treinta y dos aos despus de la rendicin y de haber salido corriendo en vez de aguantar hasta las ltimas conse-cuencias. De nuevo un villano se convierte en un hroe cataln auspi-ciado en las mentiras.

    La primera vez que en nombre de la unidad de Espaa se gano la partida al independentismo. Parece que los sectores independentistas fueron capaces de sacrificar, traicionar y vender su tierra y su gente por dine-ro y aun as hoy en da pretenden hacerse pasar ante aquellos que se dejan lavar el cerebro por mrtires y victimas cuando ellos fueron los que vendieron a su gente.

    Antonio De La Pea Septiembre 2012

    Antonio de Villarroel y Pelez

    militar espaol al servicio de Feli-

    pe V hasta 1710 durante la Gue-

    rra de Sucesin Espaola. Tras la

    cada en desgracia del duque de

    Orleans, se pas a la causa aus-

    tracista y se le mantuvo el grado

    de teniente mariscal. En 1713 fue

    nombrado general comandante

    del Ejrcito de Catalua.

    Era hijo de un militar acomoda-

    do, procedente de la localidad

    gallega de Vilanova dos Infantes

    (actual provincia de Orense), y de

    madre asturiana. Ingres joven

    en el ejrcito, y en 1697 defendi

    Barcelona contra los franceses. Al

    comenzar la Guerra de Sucesin,

    form parte del ejrcito de Felipe

    V. Sin embargo, al caer en des-

    gracia el duque de Orleans

    march a Galicia, donde se ad-

    hiri a los aliados antiborbnicos.

    Fue nombrado teniente mariscal

    por el archiduque Carlos.

    Nombrado comandante supremo

    de las fuerzas austracistas por los

    Tres Comunes de Catalua, fue el

    encargado de organizar la defen-

    sa de Barcelona. Formalizado el

    sitio de la ciudad por las tropas

    del duque de Populi, que la bom-

    barde para atemorizar a los

    habitantes, Villarroel hizo replicar

    con la artillera. Pero los ataques

    borbnicos abrieron nuevas bre-

    chas, lo que indujo a Villarroel a

    convocar un consejo de guerra el

    da 1 de septiembre, a espaldas

    de los consejeros de la ciudad, en

    el cual sugiri, en vista del estado

    desesperado de las defensas, la

    conveniencia de capitular y de

    aceptar el ofrecimiento del duque

    de Berwick.

    Pero Casanova y el resto de los

    consejeros se opusieron, y Villa-

    rroel intent dimitir. Pero, ante el

    asalto decisivo del 11 de septiem-

    bre, prepar su columna y prosi-

    gui la defensa de la ciudad. Fi-

    nalmente, fue herido y qued

    fuera de combate. Habiendo ca-

    do herido tambin Rafael Casano-

    va, el coronel Ferrer, apoderado

    del lugarteniente de Mallorca, fue

    a ver a Villarroel, quien expuso

    que era de la opinin de capitular

    antes de la noche, para ahorrar a

    la ciudad los horrores del comba-

    te. Entonces tom la decisin,

    bajo su responsabilidad, de que

    tocaran a capitulacin. Pese a las

    seguridades dadas en esta, los

    veinticinco lderes militares de la

    defensa de Barcelona, entre los

    que se encontraba el mismo Villa-

    rroel, herido, fueron encarcela-

    dos.

    "Seores, hijos y hermanos: hoy

    es el da en que se han de acor-

    dar del valor y gloriosas acciones

    que en todos tiempos ha ejecuta-

    do nuestra nacin. No diga la

    malicia o la envidia que no somos

    dignos de ser catalanes e hijos

    legtimos de nuestros mayores.

    Por nosotros y por la nacin es-

    paola peleamos. Hoy es el da

    de morir o vencer. Y no ser la

    primera vez que con gloria in-

    mortal fuera poblada de nuevo

    esta ciudad defendiendo su rey,

    la fe de su religin y sus privile-

    gios".

    Antonio De Villaroel y Pelez

    VILLAROEL Y EL EJERCITO DE CATALUA

  • 7

    IVA Y SICAVS,

    LA ESTAFA SILENCIOSA n las primeras horas de la maana del pasado

    lunes, da 3 de septiembre, al igual que otros

    muchos millones de espaoles, tuve la

    oportunidad de comprobar por m mismo cmo el caf

    (solo y con hielo como a m me gusta en cualquier poca

    del ao), cuesta ahora un euro cuarenta en mi cafetera

    habitual. Para los nostlgicos, doscientas treinta y tres de

    las antiguas pesetas. Es decir, lo que hace menos de

    quince aos hubiese sido aproximadamente el precio de

    dos cafs y un paquete de chicles matadores del aliento.

    La Nacin entera era consciente en su vuelta al trabajo

    tras las vacaciones de que no haba tenido un mal sueo:

    el Gobierno de Mariano Rajoy acababa de subir los tipos

    reducido y general del Impuesto sobre el Valor Aadido.

    Dos y tres puntos porcentuales, respectivamente.

    En noviembre pasado, cuando los espaoles dieron su

    confianza en las urnas a la derecha de saln, sta voceaba

    a los cuatro vientos poseer el blsamo de Fierabrs que

    habra de salvar la economa nacional en un breve plazo

    de dos aos. Menos de diez meses despus ha

    traicionado las reglas ms elementales de su ideologa

    econmica subiendo los impuestos. Matizo: subiendo los

    impuestos INDIRECTOS en el contexto de una economa

    en RECESIN, lo cual ya son palabras mayores. Cierto es

    se trata de una medida de urgencia contra el dficit

    pblico. Pero no es menos cierto que la teora neoliberal

    (en lo que posiblemente sea su nica aportacin til a

    esta ciencia intil que es de por s la economa), defiende

    que la relacin ingreso pblico - tipo impositivo no es una

    funcin exponencial (a mayor tipo, mayor recaudacin),

    sino una campana de Gauss con un punto ptimo en el

    cual se da una recaudacin mxima. Si los tipos exceden

    de ese determinado punto, el impacto en el ingreso de la

    Hacienda Pblica pasar a ser negativo. Es lo que se

    denomina el efecto Laffer, una modelizacin algebraica

    de lo que en mi tierra se llama sentido comn. Su autor,

    Arthur Laffer, no especific cul es ese punto exacto,

    porque no existe un ptimo universal. Se supone que ste

    variar dependiendo del pas, del contexto

    macroeconmico y de una serie de factores ajenos al

    modelo con escasa influencia relativa sobre aqul. Yo

    personalmente no conozco cul es el tipo de IVA ptimo

    para Espaa en este momento concreto de la Historia. Lo

    que s s es que mi decisin como homo oeconomicus

    que elige alternativas racionales fue, ante el aumento

    de precio, sacar a partir de ahora el caf de la mquina

    del trabajo, que me sale gratis (y hasta dispongo de hielo

    dentro del congelador, con lo cual nada tengo que

    perder). Est feo decirlo, pero mi renta mensual es ms

    elevada que la de mis compatriotas en trminos medios,

    y aun as he tomado esta resolucin sobre un producto

    que consumo a diario. Ello me induce a pensar que

    individuos con rentas ms bajas pronto tomarn

    decisiones similares o incluso ms drsticas. Y, por

    consiguiente, que los nuevos tipos de IVA exceden el

    ptimo de Laffer, de modo que la medida del ejecutivo

    rajoyista ha sido un error con potenciales consecuencias

    desastrosas.

    Pero esto no debera extraarnos en un pas en el que la

    casta poltica se encuentra tan lejos de la realidad

    cotidiana como es Espaa. Nuestros polticos creen que el

    caf en la calle vale 80 cntimos (aproximadamente,

    eso s, concedmosles un margen de error) Qu cabe

    esperar de una Nacin en la que existe un palmario

    divorcio entre la lite poltica y la sociedad civil cada da

    ms acentuado? Si los polticos verdaderamente

    representaran al pueblo, no nos mentiran diciendo que

    no haba alternativa a subir el IVA. Las haba, y muchas

    (empezando por una reestructuracin del Estado de las

    Autonomas). Pero quiero centrarme en algo que a mi

    modo de ver es un escndalo sin precedentes en la

    historia de la fiscalidad espaola. Se trata de las

    Sociedades de Inversin de Capital Variable, ms

    conocidas como las Sicavs, o donde meten el dinero

    los ricos. Esta figura, importada por Espaa a principios

    de la dcada de 2000 procedente de otros Ordenamientos

    europeos, es un ente de incierta naturaleza jurdica,

    hbrido entre una sociedad annima y un fondo de

    inversin. Para su constitucin se requiere un capital

    mnimo de 24 millones de euros, y al menos

    E

  • 28

    menos 100 partcipes. La

    principal ventaja que hace

    atractiva para las grandes

    fortunas a esta forma

    societaria respecto de otras

    opciones es que sus

    beneficios anuales tributan

    al 1% en el Impuesto de

    Sociedades, mientras el tipo

    general de gravamen para el

    resto de empresas es del

    30%. Hasta hace bien poco,

    tenan la ventaja adicional

    de poder reducir capital

    (desinvertir), sin tener que

    tributar por las plusvalas

    obtenidas. Es decir, se

    aplicaba la fictio iuris de que

    los fondos retirados por los

    socios era lo que haban

    invertido inicialmente, de

    forma que la plusvala era

    lo ltimo que sala de la

    Sicav. Se consegua diferir

    as la tributacin de la

    plusvala hasta el momento de la liquidacin definitiva de

    la sociedad. Una especie de analoga con el mtodo first in,

    first out que emplea el Plan General Contable para la

    valoracin de almacenes. Afortunadamente, gracias a un

    ataque de lucidez mental transitoria de Elena Salgado, este

    segundo chollo fiscal vio su fin hace dos aos, en

    noviembre de 2010, y el diferimiento de la tributacin de

    plusvalas ya no es posible.

    Sin embargo, a da de hoy siguen campando a sus anchas

    estos grandes capitales, propiedad (entre otros) de Alicia

    Koplowitz, Emilio Botn, la familia Del Pino (duea de la

    constructora Ferrovial), la familia Polanco (del Grupo

    Prisa), Juan Abell (ex socio de Mario Conde), y una larga

    lista de inversores extranjeros (indios y rabes, en su

    mayora), que eluden ao a ao la tributacin general del

    Impuesto de Sociedades mediante el depsito de su

    fortuna en estos reductos de impunidad. Slo el 1% de su

    beneficio llega a ingresar en las arcas pblicas. Veintinueve

    puntos porcentuales menos que el bar de abajo o la

    panadera de la esquina.

    Los espaoles de la calle, los ciudadanos de a pie, no

    podemos seguir tolerando este tipo de atropellos. Hasta

    cierto punto es razonable que se pretenda incentivar la

    inversin por parte de los grandes capitales mediante un

    trato fiscal ms favorable, pero de un 1% a un 30% hay una

    amplia horquilla donde situar el tipo. Lo que no es normal

    es que se recurra a una subida del IVA (el nico impuesto

    que afecta a TODOS los espaoles), mientras que estas

    fortunas continan tributando a un 1%. No es tico, no es

    lgico, no es digno y, por no ser, ni siquiera es eficaz. Como

    colofn, las posibilidades de supervisin a las Sicav por

    parte de la Agencia Tributaria son muy reducidas, y las

    actuaciones inspectoras precisarn, en su caso, de la

    aprobacin por parte de la Comisin Nacional del Mercado

    de Valores. La legislacin sobre inversin colectiva as lo

    establece, en lo que fue una iniciativa (2005), de CiU,

    respaldada por los dos principales partidos del arco

    parlamentario. Los mismos partidos que prefieren subir los

    impuestos indirectos para ver cmo el poder adquisitivo de

    los espaoles se reduce y el pas empieza a pasar hambre.

    Los mismos que anteponen el mantenimiento del modelo

    autonmico, la financiacin pblica a partidos y sindicatos,

    la salvacin de la banca, del euro y de la sociedad

    multitnica y multicultural a las necesidades reales del

    pueblo espaol.

  • 29

    Los mismos que tratan de convencernos de que si les

    subimos el impuesto a las Sicav, se irn del pas. Mienten.

    La fuga de capitales con la que se nos atemoriza no es tan

    sencilla, una vez montada una sociedad en Espaa. Para

    empezar, los accionistas que quisieran desmantelar una

    Sicav quedaran radiografiados ante Hacienda, ya que

    para trasladar el patrimonio al exterior es preciso liquidar

    la entidad. Las plusvalas de los socios-personas fsicas

    deberan tributar entonces al 21% en el IRPF. El traslado de

    ese patrimonio fuera del pas estara sometido a fuertes

    controles, ya que existe una directiva comunitaria (la

    2011/16) que obliga a los pases a enviar informacin fiscal

    o a aplicar una retencin a las inversiones de aquellos que

    depositen los ahorros en su territorio. Las Sicav no se irn

    de Espaa aunque les suban el Impuesto de Sociedades.

    Con la vigente normativa societaria y fiscal, no tendran

    forma de hacerlo sin tributar primero aqu por todas las

    ganancias obtenidas (lo cual, dicho sea de paso, supondra

    un ingreso considerable para el erario pblico). Es una de

    las mltiples falacias convertidas en verdades en el

    inconsciente colectivo. Lo nico que se precisa es una clase

    poltica independiente de los poderes econmicos, que

    devuelva la soberana real al pueblo espaol, y que no

    tenga duda alguna de que la funcin de la economa es

    servir a la Nacin, y no a los intereses de una minora que

    juega al padel los domingos con el club Bildeberg.

    Antonio Garca

    Septiembre 2012

  • FALLECE

    SANTIAGO CARRILLO

    l pasado 17 de Septiembre, Santiago

    Carrillo, histrico dirigente del Parti-

    do Comunista de Espaa (PCE), falle-

    ci en Madrid, a los 97 aos de edad. Para

    muchos lder del comunismo en Espaa, para

    otros una pieza clave de nuestra transicin y

    para muchos el responsable del genocidio de

    Paracuellos del Jarama en el que ms de

    5000 personas perdieron la vida. En estos

    das en el que toda la clase poltica se empe-

    a en hablar de su bondad, nosotros simple-

    mente dedicamos estas pginas a sus vcti-

    mas.

    Entre el 7 de noviembre y el 4 de diciembre

    de 1936 siendo consejero de Orden Pblico

    Santiago Carrillo, con el conocimiento de la

    junta de defensa de Madrid y con la instiga-

    cin y el respaldo expreso del Ministro de la

    Gobernacin del gobierno de la repblica

    cerca de 5000 hombres, mujeres y nios fue-

    ron sacados de las distintas crceles de Ma-

    drid con la excusa de su traslado a otros luga-

    res siendo su destino final la muerte en Ara-

    vaca, Paracuellos y Torrejn de Ardoz. Fueron

    asesinados por las milicias a las ordenes de

    Santiago Carrillo y su subordinado Serrano

    Poncela. Para todos ellos nuestra ms senti-

    da admiracin prestando una muy especial

    atencin a los jvenes que perdieron la vida

    en esta sin razn y cuyos nombres figuran a

    continuacin.

    E

  • 7

    DON PELAYO En esos meses la gente andaba alborotada por la excesiva presencia de musulmanes en la zona.

    Pelayo se dirigi a ellos animndoles a la sublevacin mientras invocaba a los ancestros y a sus

    sentimientos de vida en libertad sin sometimiento a ningn yugo extranjero.

    l iniciador de la Reconquista naci en Cosgaya, un lugar ubicado en las montaas cntabro-asturianas. Hijo de Favila y primo del rey Rodrigo, se convirti en jefe de su guardia personal. Luch con bravura

    en Guadalete y escap a Toledo, donde se mantuvo un tiempo hasta la llegada de los musulmanes. De la vieja ca-pital visigoda sali con sus hombres escoltando a Urbano, arzobispo de Toledo, quien custodiaba las sagradas reli-quias cristianas, adems de otros tesoros eclesisticos.

    En 716, los musulmanes establecidos dbilmente por el norte peninsular chocaron con los intereses de los pobla-dores autctonos. El rabe Munuza se instal en Gijn co-mo walid, o gobernador provincial del emirato cordobs, cometiendo el grave error de pretender a la hermana del noble Pelayo; acaso en el afn de estrechar lazos de amis-tad con los desconfiados astures. Empero, el ambicioso mahometano se top con el rechazo del visigodo, y a fin de quitarse el problema de encima, envi a ste como rehn a Crdoba para conseguir el pago de impuestos. Un ao ms tarde de su llegada a la flamante capital andalus, el rebel-de astur consigui burlar a sus captores huyendo en un viaje lleno de peripecias y avatares que le condujo a su tierra natal.

    Su entrada en el territorio asturiano coincidi con una reu-nin de lugareos celebrada en Cangas de Ons para deba-tir asuntos de importancia. En esos meses la gente andaba alborotada por la excesiva presencia de musulmanes en la zona. Pelayo se dirigi a ellos animndoles a la sublevacin mientras invocaba a los ancestros y a sus sentimientos de vida en libertad sin sometimiento a ningn yugo extranje-ro. Paradjicamente, aqul que representaba al antiguo invasor godo, se convirti en el lder de unos rudos monta-eses deseosos de combatir cualquier signo autoritario ajeno. La faccin insurgente comenz a ser famosa en los contornos negndose a pagar tributo para luego protago-nizar algunas escaramuzas militares.

    Se baraja el 718 como ao en el que se decide por aclama-cin el caudillaje de Don Pelayo. Algunos historiadores apuntan que, posiblemente, fue proclamado rey. Otros

    E

  • 35

    ms conservadores piensan que slo fue elegido lder guerrero de los resistentes. En todo caso, se produjo una unin popular dispuesta a pre-sentar combate a la fuerza ocupan-te. Su nmero era apenas represen-tativo, ya que no superaba unos pocos cientos de combatientes ap-tos para enfrentarse a una columna militar punitiva encabezada por Al-qama, un lcido militar experimen-tado en la guerra y dispuesto a com-placer las necesidades del emir cor-dobs. Desde el sur llegaron unos 20.000 hombres a todo punto sufi-cientes para aplastar los gritos de aquellos 300 asnos salvajes, como les denominaron los cronistas ra-bes.

    En las estribaciones del gran macizo de los Picos de Europa se encontraba el monte Auseva, y en l una oque-dad denominada por las crnicas la Cova Dominica, futura Covadonga, sitio ideal donde se ocultaron buena parte de los rebeldes astures. Don Pelayo dispers a dos tercios de su hueste por las laderas, riscos y acan-

    tilados cercanos a su guarida, mien-tras que con otros 105 soldados se parapetaba en la propia cueva, o en un fortn situado unos metros ms arriba, a la espera de los musulma-nes. Cuenta la leyenda que a Don Pelayo se le abrieron los cielos mos-trando el antiguo pendn bermejo de los godos, un estandarte perdido en la batalla de Guadalete. Tras la visin tom dos palos de roble y los uni formando una cruz que enar-bol en la posterior refriega resuelta en triunfo. La victoria para los nor-teos fue total siendo engordada durante siglos por los cronistas cris-tianos. En cambio, para los rabes la escaramuza de Covadonga result insignificante. En todo caso, las noti-cias del desastre llegaron a Gijn, donde se encontraba el desolado Munuza. ste decidi abandonar la ciudad dirigiendo sus tropas berebe-res hacia Len. Sin embargo, el con-tingente fue interceptado por los cristianos, los cuales diezmaron al enemigo matando a muchos, inclui-do el propio Munuza.

    Don Pelayo, crecido por la reciente victoria, baj a Cangas de Ons para recibir los vtores de sus paisanos. En poco tiempo vio orgulloso cmo miles de voluntarios se sumaban a su ejrcito, gentes de toda condicin llegadas de Galicia, Cantabria, Viz-caya Con 8.000 infantes y 150 ca-ballos, sali de Cangas dispuesto a tomar Len, empresa que hoy en da es difcil precisar si se consigui o no. Ms bien parece que ese mrito debemos atriburselo a Don Alfonso, yerno de Don Pelayo, hijo del duque Don Pedro de Cantabria y futuro rey de Asturias. El bravo hroe de los cristianos dedic el resto de su mandato a organizar el incipiente reino. Durante aos consolid las fronteras de Asturias desde su capi-tal, Cangas de Ons. Posteriormente, se cas con Gaudiosa y tuvo dos hijos: Ermesinda y Favila. ste ltimo le sucedi a su muerte, acaecida en 737. El primer adalid de la Reconquista espaola fue enterrado junto a su mujer en la iglesia de San-ta Eulalia de Abamia, prxima a Co-vadonga, aunque ms tarde sus res-tos reposaran en la propia cueva que le vio nacer como mito...

    Recuerda tu historia. No olvidarla

    te hace ms fuerte. Conocerla te

    reafirma en tu identidad espaola

    Asociacin Cultural

    Espaa en la memoria

    http://enlamemoria.cz.cc/