Revista Semana Santa 2015

Semana Santa 2015 Del 29 de marzo al 5 de abril

P[rroqui[ S[nto Toms @pstol P[rroqui[ S[nto Toms @pstol P[rroqui[ S[nto Toms @pstol P[rroqui[ S[nto Toms @pstol S[nto Tom

Coordina:Coordina:Coordina:Coordina: Luis Cordn Corts Miembros del Consejo Pastoral

Diseo y elaboracin:Diseo y elaboracin:Diseo y elaboracin:Diseo y elaboracin: Roco Garca Jdar

Pgina 3 Parroquia Santo Toms Apstol - Santo Tom

Sumario

Saludo del Seor Obispo ............................................................................................... Pgina 4 Origen y teologa del Viacrucis ...................................................................................... Pgina 5 Critas de Santo Tom informa .................................................................................... Pgina 8 Reflexiones y lectura ....................................................................................................... Pgina 9 El diario de Mara ............................................................................................................ Pgina 10 Cmo rezar el rosario ...................................................................................................... Pgina 12 Nuestra Semana Santa en Imgenes .......................................................................... Pgina 14 La esperanza cristiana ................................................................................................... Pgina 16 Semana Santa en Argentina .......................................................................................... Pgina 17 Vida-muerte o muerte-vida ............................................................................................. Pgina 18 V Centenario del nacimiento de Santa Teresa de Jess .............................................. Pgina 20 La mujer en tiempos de Jess ....................................................................................... Pgina 22 Rabino .............................................................................................................................. Pgina 25 Yo no soy Charlie ............................................................................................................. Pgina 26

Queridos fieles diocesanos: En el da del Mircoles de CenizaMircoles de CenizaMircoles de CenizaMircoles de Ceniza, 18 de

febrero, pongo en vuestras manos unas breves reflexiones sobre los grandes misterios de nuestra fe que anualmente preparamos y celebramos los cristianos.

1.1.1.1. Ha llegado el tiempo cuaresmal.tiempo cuaresmal.tiempo cuaresmal.tiempo cuaresmal. La

liturgia de la Iglesia nos presenta el recorrido de estos cuarenta das como un retiro ininterrumpidoretiro ininterrumpidoretiro ininterrumpidoretiro ininterrumpido de toda la comunidad cristiana, junto con Jesucristo, en el desierto.

Es tiempo de conversin para unirnos y

vivir de forma nueva el misterio pascual de la Pasin, Muerte y Resurreccin de Cristo Jess. Tiempo para sembrar en abundancia la Palabra de Dios en nuestros corazones, fijar nuestros ojos en Nuestro Seor Jesucristo, orar con l y socorrer a los hermanos necesitados con nuestras limosnas. Esta visin del nuevo Pueblo de Dios en marcha hacia la Pascua, no deja de ser un espectculo desconcertante para personas de nuestro entorno. El Concilio Vaticano II nos ensea y recuerda: Por el Bautismo los hombres son injertados en el misterio pascual de Jesucristo; mueren con l, son sepultados con l y resucitan con l (SC, 6).

2. La alegra de la Pascua:2. La alegra de la Pascua:2. La alegra de la Pascua:2. La alegra de la Pascua: Este trmino

significa etimolgicamente trnsito. Es el paso de Cristo desde su vida mortal a la vida gloriosa, a travs de su Muerte y Resurreccin.

Reflexionemos desde el silencio, en este

tiempo, que el Seor Jess con su muerte destruy nuestra muertedestruy nuestra muertedestruy nuestra muertedestruy nuestra muerte, al ofrecer su vida voluntariamente a Dios Padre para reparar la ofensa de la humanidad y satisfacer por ella. En su Resurreccin se convirti en Autor de la nueva vida.Autor de la nueva vida.Autor de la nueva vida.Autor de la nueva vida. Es el nuevo Adn que restaur del pecado del Paraso (cf. Gn 3, 1-24). Cristo, levantado sobre la tierra en la Cruz, atrajo hacia s a toda la humanidad por su Resurreccin (cf. Jn 12, 32).

3.3.3.3. Es tiempo para Dios, para ti y para Es tiempo para Dios, para ti y para Es tiempo para Dios, para ti y para Es tiempo para Dios, para ti y para

m.m.m.m. Dios se nos presenta, en nuestro camino actual y concreto, como amigo que quiere compartir su vida con nosotros. Quiere abriros su corazn. Mira, nos dice a cada uno, subo a Jerusaln, mi ltimo viaje. All los

enemigos me esperan para prenderme y a r r eba t a rme l a v i d a . Y , no s pregunta: Quieres compartir conmigo estas Quieres compartir conmigo estas Quieres compartir conmigo estas Quieres compartir conmigo estas jornadas?jornadas?jornadas?jornadas?, Cmo?. La respuesta es personal, pero de ella depende nuestra preparacin y vivencia para la celebracin pascual de este ao.

Es tiempo para ti y para m. Con

frecuencia detenemos nuestro pensamiento en noticias, en sucesos, en proyectos, viajes y podemos incurrir en el error de olvidarnos de nosotrosolvidarnos de nosotrosolvidarnos de nosotrosolvidarnos de nosotros, no dedicar tiempo para pensar en el hijo que soy de Dios, que es mi Padre, que me mira con misericordia, me escucha y me espera. No me queda tiempo para or en silencio la respuesta de Dios a mis plegarias que ms de una vez son un monlogo siendo as que el Seor est cerca, junto a m. No me importa apenas la situacin en que viven otros hermanos. 4.4.4.4. Es precisamente sobre esta

indiferencia hacia los dems, en donde se fija el Santo Padre, el Papa Francisco, en el Mensaje Cuaresmal para este ao. Comenta el Papa: Ocurre que cuando estamos bien y nos sentimos a gusto, nos olvidamos de los dems no nos interesan sus problemas y sufrimientos, ni las injusticias que padecen Entonces nuestro corazn cae en la indiferencia". Dios, sin embargo, no es indiferente al

mundo, ni a nuestras vidas, escribe el Santo Padre, sino que nos ama hasta el punto de dar a su Hijo por la situacin de cada hombre, por eso, necesitamos or en cada Cuaresma el grito de los profetas que levantan su voz y nos despiertan. El Dios misericordioso que, durante estas semanas, se acerca a cada uno de nosotros y a la comunidad eclesial, que conoce nuestras enfermedades y nos proporciona la medicina espera rompamos nuestra indiferencia, porque si un miembro sufre, todos sufren con l (1 Cor 12, 26) Este es el camino que nos seala el

Papa para fortalecer nuestros corazones (cf. Sant 5, 8) durante la Cuaresma: Tiempo de misericordia, tiempo de salvacin. Con mi saludo y bendicin

+ Ramn del Hoyo Lpez+ Ramn del Hoyo Lpez+ Ramn del Hoyo Lpez+ Ramn del Hoyo Lpez Obispo de JanObispo de JanObispo de JanObispo de Jan

Saludo del Seor Obispo Saludo del Obispo

Semana Santa 2015 Pgina 4

Saludo del Seor Obispo Origen y teologa del Viacrucis

El Va crucis o camino de la cruz es una de las piedades populares ms importantes y arraigadas en nuestros pueblos, principalmente en tiempos de Cuaresma Y Semana Santa.

Consiste en recorrer el camino de

Jess, desde que instituye la Eucarista, hasta el Domingo de Resurreccin. Todo lo que le acontece al Hijo de Dios, en estos momentos tan difciles, de pasin, dolor y sufrimiento humano, no olvidemos que Jess es verdadero Dios y verdadero hombre. En el Va crucis se resalta la humanidad del Hijo de Dios.

Representa situaciones y

acontecimientos dolorosos de la pasin de Jess, en catorce estaciones o acontecimientos, que a lo largo de la historia han ido cambiando de nmero y acontecimiento ocurrido al Seor. Muchos santos han transmitido esta devocin al pueblo cristiano, como S. Alfonso Mara de Ligorio.

El origen est en Jerusaln, Tierra

santa, en concreto, los lugares exactos donde ocurri la pasin del Seor. Muchos peregrinos, desde el s. IV de la era cristiana, recorran estos lugares cerrando y viviendo desde la fe , la pasin del Seor.

Como muchos peregrinos no podan

trasladarse a Tierra Santa, comienzan a aparecer capillas y lugares para rezar con la pasin del Seor, sobre todo desde el s. XIII y ya se extiende por toda la cristiandad, desde el s. XIV, que comienzan a colocarse en las iglesias, pequeas tablas que recuerdan la pasin del Seor.

Fue la orden de mendicantes, los

franciscanos, quienes extendieron esta devocin popular por todo el mundo, en concreto en el s. XVII.

Cules fueron los momentos

escogidos, de entre la pasin del Seor para

rezar y meditar? La tradicin cristiana los sita en CATORCE ESTACIONESCATORCE ESTACIONESCATORCE ESTACIONESCATORCE ESTACIONES, con distintos momentos de la pasin del Seor. A lo largo de la historia, los pontfices, han ido cambiando, los ms populares y tradicionales. Vamos a descubrir el sentido teolgico y cristiano de las mismas. Son:

PR IMERA ESTAC IN : J ESS PR IMERA ESTAC IN : J ESS PR IMERA ESTAC IN : J ESS PR IMERA ESTAC IN : J ESS

SENTENCIADO A MUERTE.SENTENCIADO A MUERTE.SENTENCIADO A MUERTE.SENTENCIADO A MUERTE. Poncio Pilato condena a muerte a

Jess, la muchedumbre lo acusa como reo de muerte y una muerte de cruz. Es un juicio injusto y rpido, hay que quitar a Jess de en medio, ya que incomoda, especialmente a los sumos sacerdotes y miembros del Sanedrn. Esta historia se repite una y otra vez, cuando criticamos, juzgamos y calumniamos a los dems, sobre todo, a los que nos incomodan. Aqu subyace el mal de nuestra sociedad, LA HIPOCRESA. Los mismos que el Domingo de Ramos lo reciben con vivas y ramas de olivo; aqu los vemos acusando y condenando.

SEGUNDA ESTACIN: JESS CARGA SEGUNDA ESTACIN: JESS CARGA SEGUNDA ESTACIN: JESS CARGA SEGUNDA ESTACIN: JESS CARGA

CON LA CRUZ.CON LA CRUZ.CON LA CRUZ.CON LA CRUZ. La cruz era el instrumento ms duro

de tormento y de muerte, slo se realizaba con personas que no tenan la ciudadana romana. Ya se utilizaba en el S. IV a. C. por los asirios y persas.

Algunos reos se pasaban das agonizando en la cruz. Pero es curioso, en la cruz los cristianos y la humanidad ha sido redimida. Es el smbolo de la religin cristiana. Los santos padres ven en esta estacin, como la cruz es el pecado del mundo y es Cristo quien carga con nuestros pecados para redimirnos.

Todos llevamos nuestra cruz, la enfermedad, los problemas, el paro, la droga.. Jess nos ensea que es posible llevarla, aunque cueste. Con la oracin, la Palabra de Dios y la Eucarista podemos llevar la cruz del da a da, la que la vida nos prepara; y la que nosotros nos regalamos o imponemos, los unos a los otros.


SEGUNDA ESTACIN: JESS CARGA SEGUNDA ESTACIN: JESS CARGA SEGUNDA ESTACIN: JESS CARGA SEGUNDA ESTACIN: JESS CARGA CON LA CRUZ.CON LA CRUZ.CON LA CRUZ.CON LA CRUZ.

La cruz era el instrumento ms duro de tormento y de muerte, slo se realizaba con personas que no tenan la ciudadana romana. Ya se utilizaba en el S. IV a. C. por los asirios y persas. Algunos reos se pasaban das agonizando en la cruz. Pero es curioso, en la cruz los cristianos y la humanidad ha sido redimida. Es el smbolo de la religin cristiana. Los santos padres ven en esta estacin, como la cruz es el pecado del mundo y es Cristo quien carga con nuestros pecados para redimirnos.

Todos llevamos nuestra cruz, la enfermedad, los problemas, el paro, la droga.. Jess nos ensea que es posible llevarla, aunque cueste. Con la oracin, la Palabra de Dios y la Eucarista podemos llevar la cruz del da a da, la que la vida nos prepara; y la que nosotros nos regalamos o imponemos, los unos a los otros.

TERCERA ESTACIN: JESS CAE, POR TERCERA ESTACIN: JESS CAE, POR TERCERA ESTACIN: JESS CAE, POR TERCERA ESTACIN: JESS CAE, POR

PRIMERA VEZ, BAJO EL PESO DE LA CRUZ.PRIMERA VEZ, BAJO EL PESO DE LA CRUZ.PRIMERA VEZ, BAJO EL PESO DE LA CRUZ.PRIMERA VEZ, BAJO EL PESO DE LA CRUZ. Es difcil cargar con la cruz del da a

da, somos humanos y difciles. Aqu vemos la humanidad del Hijo de Dios. Jess cae, la cruz pesa. Cuantos obstculos en la vida, cuantas zancadillas. Jess nos ensea que hay que levantarse de la cada, la fortaleza la tenemos en Dios. La fe nos ayuda, no nos puede la cruz, Dios es ms grande y ms poderoso. Todo lo puedo, en aquel que me conforta nos dir S. Pablo.

CUARTA ESTACIN: JESS SE CUARTA ESTACIN: JESS SE CUARTA ESTACIN: JESS SE CUARTA ESTACIN: JESS SE

ENCUENTRA CON SU MADRE.ENCUENTRA CON SU MADRE.ENCUENTRA CON SU MADRE.ENCUENTRA CON SU MADRE. Qu escena ms tierna, pero a la

vez tan dura. Que dra Mara, qu pensara, al ver a su Hijo de esa manera. Cuantas madres se encuentran en esta situacin, cuantas madres lloran a sus hijos. Pero el corazn de madre puede ms, mucho ms. Ah est la madre, junto a su hijo. Mara acompaa a esta Iglesia nuestra que peregrina al cielo. Ella es intercesora y abogada nuestra. Colaboradora en la historia de la salvacin. Es la madre de JESS Y MADRE DE LA IGLESIA, QUE SOMOS TODOS LOS BAUTIZADOS. Acudamos a Ella desde la oracin, que Ella

nos presente a su Hijo Jess. QUINTA ESTACIN: EL CIRINEO QUINTA ESTACIN: EL CIRINEO QUINTA ESTACIN: EL CIRINEO QUINTA ESTACIN: EL CIRINEO

AYUDA AL SEOR A LLEVAR LA CRUZ.AYUDA AL SEOR A LLEVAR LA CRUZ.AYUDA AL SEOR A LLEVAR LA CRUZ.AYUDA AL SEOR A LLEVAR LA CRUZ. Que buena persona el Cirineo,

diramos en el lenguaje coloquial. Una persona que entra en escena para ayudar a un reo y desconocido para l. La ayuda, el implicarse ante los problemas ayudando a los dems. A pesar de lo que vivimos en nuestra sociedad y mundo de hoy, an quedan cirineos que ayudan y se interesan por los dems. Un valor humano y cristiano lo que haces con stos mis hermanos, conmigo lo hacis dice el seor. Porque tuve hambre y me diste de comer, estuve enfermo y me visitaste, desnudo y me vestiste, en la crcel o enfermo y me visitaste Cristo se manifiesta en cada uno de nosotros, aunque seamos pecadores.

SEXTA ETACIN: LA VERNICA SEXTA ETACIN: LA VERNICA SEXTA ETACIN: LA VERNICA SEXTA ETACIN: LA VERNICA

ENJUGA EL ROSTRO DE CRISTO.ENJUGA EL ROSTRO DE CRISTO.ENJUGA EL ROSTRO DE CRISTO.ENJUGA EL ROSTRO DE CRISTO. Otro gesto solidario. Vernica una

juda, acude en ayuda del Seor. Quiere hacer algo; coge un trozo de lino y limpia el rostro del Seor ensangrentado. He aqu que el rostro de Cristo se queda en el lienzo grabado, milagro? Cuntos rostros de Cristo estn grabados realmente en las crceles, hospitales, residencias, en la guerra, en el bola, sida, hambre. Cristo quiere que lo veamos en estas personas y en estas circunstancias de la vida del S. XXI. Esos rostros de dolor y desesperacin son Cristo aqu y ahora.

SPTIMA ESTACIN: JESS CAE POR SPTIMA ESTACIN: JESS CAE POR SPTIMA ESTACIN: JESS CAE POR SPTIMA ESTACIN: JESS CAE POR

SEGUNDA VEZ.SEGUNDA VEZ.SEGUNDA VEZ.SEGUNDA VEZ. No importa el nmero de las cadas,

hay que levantarse, la cruz no nos puede vencer. Es mayor la fortaleza y el nimo que viene de Dios: FE ESPERANZA y FROTALEZA.

OCTAVA ESTACIN: JESS CONSUELA OCTAVA ESTACIN: JESS CONSUELA OCTAVA ESTACIN: JESS CONSUELA OCTAVA ESTACIN: JESS CONSUELA

A LAS MUJERES DE JERUSALN.A LAS MUJERES DE JERUSALN.A LAS MUJERES DE JERUSALN.A LAS MUJERES DE JERUSALN. Es el reo, el que est sufriendo quien

consuela a un grupo de mujeres que lloran y se lamentan por Jess. Es la compasin y la misericordia divina quien habla por medio de la boca de Jess.


Has el ltimo momento Jess se compadece del que sufre. Todo el que acude a l no queda defraudado. Pero cuntas personas nos dan ejemplo de fe y fortaleza, desde el lecho del dolor y sufrimiento. Que ejemplo para todos.

NOVENA ESTACIN: JESS CAE POR NOVENA ESTACIN: JESS CAE POR NOVENA ESTACIN: JESS CAE POR NOVENA ESTACIN: JESS CAE POR

TERCERA VEZ.TERCERA VEZ.TERCERA VEZ.TERCERA VEZ. De nuevo cae el Seor, a causa del

peso de la cruz. Nuestros pecados hacen caer a Jess, pero el amor vence al odio y al pecado. Vuelve a levantarse, todava no ha llegado a la meta. Que ejemplo de FORTALEZA.

DCIMA ESTACIN: JESS ES DCIMA ESTACIN: JESS ES DCIMA ESTACIN: JESS ES DCIMA ESTACIN: JESS ES

DESPOJADO DE SU TNICA.DESPOJADO DE SU TNICA.DESPOJADO DE SU TNICA.DESPOJADO DE SU TNICA. A Jess lo desnudan y se juegan a

suerte su tnica. Cuntas personas son despojadas de su divinidad; mujeres vejadas y maltratadas. Los desahucios injustos, ancianos solos y abandonados; los emigrantes, el problema de Melilla que quieren cruzar desde frica para conseguir una oportunidad. Los nios vejados y utilizados para la guerra, el aborto, la eutanasia, A todos les estn despojando de su divinidad. Este es el sentido de la tnica de Jess. La dignidad que Dios nos regala, el hombre la pisotea injustamente.

DCIMO PRIMERA ESTACIN: JESS DCIMO PRIMERA ESTACIN: JESS DCIMO PRIMERA ESTACIN: JESS DCIMO PRIMERA ESTACIN: JESS

ES CLAVADO EN LA CRUZ.ES CLAVADO EN LA CRUZ.ES CLAVADO EN LA CRUZ.ES CLAVADO EN LA CRUZ. Mirarn al que traspasaronMirarn al que traspasaronMirarn al que traspasaronMirarn al que traspasaron Jess

clavado en la cruz es el acto ms grande de amor y entrega para con la humanidad. Este es el motivo de su nacimiento en Beln, para entregar su vida voluntariamente a favor del hombre y de la mujer. Ha obedecido hasta el final, su sufrimiento ha sido el comienzo de una nueva humanidad y una nueva etapa dentro de la historia de la salvacin. Ha obedecido voluntariamente y con su obediencia hemos aprendido a amar a Dios de otra manera. El camino es Jess.

DCIMO SEGUNDA ESTACIN: JESS DCIMO SEGUNDA ESTACIN: JESS DCIMO SEGUNDA ESTACIN: JESS DCIMO SEGUNDA ESTACIN: JESS MUERE EN LA CRUZ.MUERE EN LA CRUZ.MUERE EN LA CRUZ.MUERE EN LA CRUZ.

Si el grano de trigo no cae en tierra y Si el grano de trigo no cae en tierra y Si el grano de trigo no cae en tierra y Si el grano de trigo no cae en tierra y muere queda infecundo, pero si muere da muere queda infecundo, pero si muere da muere queda infecundo, pero si muere da muere queda infecundo, pero si muere da mucho fruto.mucho fruto.mucho fruto.mucho fruto.

Jess muere confiando en Dios, su

Padre. En l confa hasta el final. Como hombre muere y como Dios muere. Ahora podemos decir que Dios nos ha salvado, ya que ha muerto en la cruz. Su muerte no ha sido en vano, ha dado su fruto, el cristianismo se fundamenta en la muerte u resurreccin del hijo de Dios.

DCIMO TERCERA ESTACIN: JESS ES DCIMO TERCERA ESTACIN: JESS ES DCIMO TERCERA ESTACIN: JESS ES DCIMO TERCERA ESTACIN: JESS ES

PUESTO EN LOS BRAZOS DE SU MADRE.PUESTO EN LOS BRAZOS DE SU MADRE.PUESTO EN LOS BRAZOS DE SU MADRE.PUESTO EN LOS BRAZOS DE SU MADRE. La madre de Jess toma en sus brazos

el cuerpo muerto de su hijo. Se ha cumplido la profeca de Simen y a t una espada te y a t una espada te y a t una espada te y a t una espada te atravesar el alma.atravesar el alma.atravesar el alma.atravesar el alma.

Mara no desespera, confa en Dios como en el momento de la Anunciacin. La muerte no debe de tener la ltima palabra. La vida de Dios y Dios mismo es ms fuerte que la propia muerte. Mara abra sus abrazos a la humanidad y a la Iglesia, Ella es madre todos los renacidos por el agua del Bautismo a la Iglesia cristiana.

DCIMO CUARTA ESTACIN: JESS ES DCIMO CUARTA ESTACIN: JESS ES DCIMO CUARTA ESTACIN: JESS ES DCIMO CUARTA ESTACIN: JESS ES

ENTERRADO.ENTERRADO.ENTERRADO.ENTERRADO. El grano de trigo tiene que ser

enterrado para dar fruto. Jess como hombre es enterrado en el sepulcro, como la costumbre juda.

Jess desciende al mundo de los muertos para vencer a la muerte y destruirla para siempre. Nos ha rescatado del morir eterno. La muerte va a ser vencida.

Y AL TERCER DA RESUCIT DE ENTRE LOS MUERTOS. ES LA RESPUESTA DE DIOS PADRE ANTE EL DOLOR Y LA MUERTE DE SU HIJO EN LA CRUZ. LA VIDA. DIOS ES AMOR Y ES VIDA.

EN LA VIDA Y NEN LA MUERTE SOMOS DEL SEOR, PARA ESO MURI Y RESUCIT CRISTO, PARA SER SEOR DE VIVOS Y DE MUERTOS.

Luis Cordn CortsLuis Cordn CortsLuis Cordn CortsLuis Cordn Corts

Prroco Santo Toms Apstol Prroco Santo Toms Apstol Prroco Santo Toms Apstol Prroco Santo Toms Apstol Santo TomSanto TomSanto TomSanto Tom


El grupo de critas parroquial de nuestro pueblo y comunidad parroquial, estando a la cabeza, nuestro prroco el Rvdo. Sr. D. Luis Cordn Corts, como mximo responsable; queremos agradecer la colaboracin, manifestada en la entrega de alimentos y mantas de abrigo que hemos recibido por parte de todos, entre los meses de septiembre y febrero para paliar las necesidades de los emigrantes, transentes y algunos miembros de nuestro pueblo, ante la necesidad en estos tiempos tan difciles en los que estamos viviendo. No hay caridad y amor ms grande que se pueda hacer, que dar cobijo y un plato de comida a los que carecen de los mismos, ya que estos das son para compartir, aunque slo sea un poquito de amor y esperanza, que en nuestro caso, gracias a Dios, ha sido mucho ms. A TODOS MUCHAS GRACIAS. SIGAMOS AS. DIOS SE MANIFIESTA EN A TODOS MUCHAS GRACIAS. SIGAMOS AS. DIOS SE MANIFIESTA EN A TODOS MUCHAS GRACIAS. SIGAMOS AS. DIOS SE MANIFIESTA EN A TODOS MUCHAS GRACIAS. SIGAMOS AS. DIOS SE MANIFIESTA EN ESTOS ACTOS SOLIDARIOSESTOS ACTOS SOLIDARIOSESTOS ACTOS SOLIDARIOSESTOS ACTOS SOLIDARIOS PARA CON LOS MS POBRES Y NECESITADOSPARA CON LOS MS POBRES Y NECESITADOSPARA CON LOS MS POBRES Y NECESITADOSPARA CON LOS MS POBRES Y NECESITADOS.

D. Ramn Ruiz Alguacil D. Ramn Ruiz Alguacil D. Ramn Ruiz Alguacil D. Ramn Ruiz Alguacil ( En nombre del grupo de Critas parroquial)

Saludo del Seor Obispo Critas de Santo Tom informa:


Reflexiones y lectura

que de la abundancia del corazn habla la lengua.

He elegido estas palabras para iniciar mi escrito este ao, porque aunque falle la inspiracin, lo que nunca falta es la voluntad de expresar en estas pginas lo ms puro, hermoso y sincero que emerge de mi humilde y flaco ingenio.

En las noches de insomnio, en el silencio cuando el hombre se reencuentra consigo mismo, se sumerge en esa oracin profunda y transcendental que revisa los actos del da que finaliza. En esta evaluacin continua que es la vida, me hayo entre la autocrtica y la insatisfaccin, que creo que es como debatirse entre el examen de conciencia y la desesperacin He obrado bien? Podra haberlo hecho mejor? En mi pensamiento se agolpan fragmentos de las Sagradas Escrituras. Cmo he gestionado los talentos que Dios me ha dado? Qu me pide Dios, mi familia y la sociedad?

En mi mente se dibuja un camino de exigencias, compromiso y perfeccin que me abruma, incluso me hace desfallecer.

Preocupado me refugio en la lectura, desatenta al principio, pero conforme avanzo con las fantsticas historias que se relatan en este maravilloso libro, mi alma se alegra, mi espritu se deleita y como este libro aparte de entretener, ensea. De la boca de uno de sus personajes, el siguiente razonamiento:

la esperanza, que siempre nace juntamente con el amor

A lo que yo aad que con ambos, la esperanza y el amor nace y se desarrolla la fe.

Con agrado comprob que este razonamiento vala tanto para las relaciones

humanas como divinas y que a pesar de su sencillez, reuna todos los ingredientes que necesita el hombre para realizarse. El cansancio, el sueo y la paz interior hicieron el resto. A l a ma an a siguiente me levante con una mirada serena y clara.

Gracias a los libros y a sus autores que nos ensean los eternos valores de la vida y gracias a la capacidad que Dios nos ha dado de interpretarlos.

No quiero censurar ninguna lectura, pero cuando nos acerquemos a un libro debemos de tener una actitud que nos permita diferenciar lo digno de lo indigno, lo loable de lo reprobable, lo bueno de lo malo. En definitiva el bien del mal.

Premiemos las virtuosas y buenas letras, para despedirme este prrafo:

porque letras sin virtud son perlas en el muladar.

Fernando Medina Martos.Fernando Medina Martos.Fernando Medina Martos.Fernando Medina Martos. 12 de febrero de 2015.12 de febrero de 2015.12 de febrero de 2015.12 de febrero de 2015.

Nota: El libro que estoy leyendo, mejor dicho releyendo es Don Quijote de la Mancha, al que pertenecen los fragmentos incluidos en las lneas anteriores.


El diario de Mara

Qu pasara por vuestras mentes si alguno de vuestros hijos estuviese al borde de la muerte?, qu diras a ese hijo?, cmo expresaras eses dolor? Difcil, verdad?.

Se dice que esto fue lo que les ocurri a los autores annimos de esta cancin que vengo a presentaros. Unos padres misioneros argentinos la escribieron en un hospital, al ver que su hijo iba a morir. Pusieron a este en manos de la Virgen Mara y compusieron as este tema inspirndose en el mismo dolor que sinti la Virgen al ver a Jess en la cruz.

Esta emotiva cancin lleg a las

manos del cantautor Martin Valverde por el ao 1999, el cual realiz los arreglos oportunos y escogi a la cantante Mnica Arroyo para que lo acompaara a sus giras e interpretara este tema. Para Mnica este tema represent un antes y un despus en su vida como cantante catlica, e hizo que se le reconociera en multitud de pases. El diario de Mara ha sido versionada posteriormente en muchas ocasiones y es muy comn escucharla en Semana Santa en cualquier parroquia. Por mi parte, tuve el gusto de poder cantarla algunos aos, y es, sin duda, una de las canciones que ms me ha gustado y me he emocionado al cantar.

Ha da de hoy, esta cancin ha tenido tanta repercusin en Amrica Latina que incluso se cre el musical "El Diario de Mara", el cual est actualmente en plena gira por Mxico. Si tienen oportunidad, les animo

a buscar el tema en internet para escuchar la versin original de Mnica Arroyo, y puedan as disfrutarla. Y si no, simplemente lean su letra, la cual les pongo a continuacin. Son las palabras y pensamientos de la Virgen Mara en el momento en que estn crucificando a su hijo, Jess, y que nos sirven de reflexin en estos das de cuaresma.

Imagen de Mnica Arroyo cantando El Diario de Mara en concierto. https://www.youtube.com/watch?v=Wjz2yjLRGGk


Te miro a los ojos , y entre tanto llanto, parece mentiras que te hallan clavado, que seas el pequeo al que he acunado y que se dorma tan pronto en mis brazos el que se rea al mirar el cielo y cuando rezaba se pona serio.

Sobre este madero veo aquel pequeo

que entre los doctores hablaba en el templo

que cuando pregunte respondi con calma

que de los asuntos de Dios se encargaba

ese mismo nio, el que est en la cruz

el Rey de los hombres se llama Jess

Ese mismo hombre ya no era un nio cuando en esa boda le ped mas vino que dio de comer a un millar de gente

a pobres y a enfermos los miro de frente rio con aquellos a quienes mas quiso y lloro en silencio al morir su amigo

Ya cae la tarde, se nublan los cielos pronto volvers a tu padre eterno

durmete pequeo, durmete mi nio que yo te he entregado todo mi cario

como en Nazaret aquella maana he aqu tu sierva he aqu tu esclava

Roco Garca JdarRoco Garca JdarRoco Garca JdarRoco Garca Jdar

Escena del musical El diario de Mara


Cmo rezar el rosario

1. Empiece el Rosario santigundose con la seal de la cruz y despus decir el credo Apostlico.

2. Contine con un Padre Nuestro, 3 Ave

Maras por un aumento de fe, esperanza, y caridad, y tambin una Gloria al Padre en cada cuenta del rosario como lo indica el diagrama de arriba.

3. Diga el primer misterio, por ejemplo,

El primer misterio gozoso es la Anunciacin. Rece un Padre Nuestro, 10 Ave Maras, una Gloria al Padre y la Oracin de Ftima (O Jess Mo) mientras medita acerca de este misterio.

4. Repite esto por cada misterio

sucesivo. 5. Al final de cada rosario del da, se

dice una Salve y las ultimas oraciones concluyentes.

Hacemos la fuerte recomendacin que se recen diario todos los 15 misterios del Rosario.

Nuestra Seora insisti una y otra vez

en sus mensajes de Ftima lo importante que es el rezar el Rosario todos los das. Hasta llego a decir que antes que Francisco entrara al cielo l tena que rezar muchos rosarios ms. El rezar todos los 15 misterios del Rosario cada da puede lograrse de varios mtodos. Sin embargo, ser ms fcil a muchos poder rezarlo diario dividiendo parte del rosario en distintos tiempos del da, por ejemplo, rezando los misterios gozosos por la maana, los misterios dolorosos a medio da, y los misterios gloriosos por la tarde. La Salve solo se necesita rezar al final del todo el rosario dicho en el da.


Oraciones del Rosario La Seal de la CruzLa Seal de la CruzLa Seal de la CruzLa Seal de la Cruz Con la mano derecha, haga una cruz to-

cando su frente, luego el pecho, del hombro izquierdo hacia la derecha mientras dice las palabras: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espritu Santo. Amn.

El Credo ApostlicoEl Credo ApostlicoEl Credo ApostlicoEl Credo Apostlico Creo en Dios, Padre Todopoderoso, Cria-

dor del cielo y de la tierra, y en Jesucristo, su nico Hijo, nuestro Seor, que fue concebido por el Espritu Santo, y naci de Santa Mara Virgen. Padeci debajo del poder de Poncio Pilato. Fue crucificado, muerto y sepultado. Descendi a los infiernos, y al tercer da re-sucito de entre los muertos. Subi a los cie-los, y est sentado a la diestra de Dios Padre Todopoderoso. Desde all ha de venir a juz-gar a los vivos y a los muertos. Creo en el Espritu Santo, la Santa Iglesia catlica, la comunin de los Santos, el perdn de los pecados, la resurreccin de la carne, y la vi-da perdurable. Amn.

El Padre NuestroEl Padre NuestroEl Padre NuestroEl Padre Nuestro Padre nuestro que ests en los cielos,

santificado sea el tu nombre, venga a nos tu reino, hgase tu voluntad, as en la tierra co-mo en el cielo. El pan nuestro de cada da dnosle hoy, y perdnanos

nuestras deudas, as como nosotros per-donamos a nuestros deudores; y no nos de-jes caer en la

tentacin, ms lbranos del mal. Amn. El Ave MaraEl Ave MaraEl Ave MaraEl Ave Mara Dios te salve, Mara, llena eres de gra-

cia, el Seor es contigo, bendita t eres en-tre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre Jess. Santa Mara, Madre de Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amn.

Gloria al PadreGloria al PadreGloria al PadreGloria al Padre Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espritu

Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amn.

Oracin de FtimaOracin de FtimaOracin de FtimaOracin de Ftima O Jess mo, perdona nuestras culpas,

lbranos del fuego del infierno, lleva a todas las almas al cielo especialmente a las ms necesitadas. (William Thomas Walsh, Our Lady of Fatima [Nuestra Seora de Ftima], edicin inglesa, Doubldeday, 1990, p. 200)

La SalveLa SalveLa SalveLa Salve Dios te salve, Reina y madre de miseri-

cordia, vida, dulzura y esperanza nuestra; Dios te salve. A ti

llamamos los desterrados hijos de Eva, a ti suspiramos, gimiendo y llorando en este valle de lgrimas. Ea, pues, Seora, abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos mi-sericordiosos; y despus de este destierro mustranos a Jess, fruto bendito de tu vien-tre. Oh clementsima! Oh piadosa! Oh dulce siempre Virgen Mara! Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios, para que seamos dig-nos de alcanzar las promesas de nuestro Se-or Jesucristo. Amn.

Oremos. Os pedimos, oh buen Jess, por los quince misterios de vuestra vida, pasin, muerte y gloria y los mritos de vuestra Santsima Madre, que convirtis a los peca-dores, auxiliis a los agonizantes, libertis a las almas del purgatorio y nos deis a todos vuestra gracia para bien vivir y morir y vues-tra gloria para veros cara a cara y amaros durante la eternidad. Amn.

Isabel M GazquezIsabel M GazquezIsabel M GazquezIsabel M Gazquez


Nuestra Semana Santa en imgenes


Las personas por propia naturaleza siempre estamos a la espera de algo. Por ejemplo, podemos tener esperanza de encontrar un buen trabajo, de obtener buenos resultados en los estudios, de encontrar la persona amada o de alcanzar la plena realizacin de nuestras vidas. Por tanto diferentes tipos de esperanza inspiran nuestra vida diaria.

Desde el punto de vista cristiano, el

hombre no puede ni debe vivir sin esperanza. Negarse a vivir sin ella supondra vivir en el vaco, en una profunda nostalgia del corazn humano que nos llevara a la desesperacin y la angustia. La esperanza cristiana, da a da debe ser regada mediante la oracin para hacernos cada vez ms fuertes ante las desavenencias y confiarnos en Dios y su voluntad para dar respuesta a nuestros propios miedos.

Nosotros, los cristianos de este mundo

debemos apoyarnos en la esperanza junto a la propia fe. Cuando sta decaiga ante las diversas circunstancias adversas que nos arrebata la vida terrena, es cuando debemos acercarnos a esa virtud teologal, que nos hace estar confiados ante Dios como mtodo de auxilio que nos prometi.

En ocasiones tenemos la tendencia de

sustituir dicha esperanza cristiana que Dios nos ha ofrecido, por expectativas y anhelos ms pequeos. Este hecho en s mismo no es malo, pero no debemos sustituirlo por la grandeza que supone el poseer este don divino que nos debe llevar a la vida eterna como nuestro fin ltimo.

A veces cuesta mantener la esperanza

a toda costa. Pero la oracin con Dios nos ayudar a combatir los impulsos de desaliento que estorban nuestro camino cotidiano hacia la perfeccin evanglica. Esta fuerza callada inspirada en Dios, debe darnos nimo para afrontar las debilidades humanas, el abatimiento y el cansancio que finalizan en el pesimismo y el desaliento, y que no son otra cosa que la carencia de la

virtud de la esperanza. Por otro lado, no debemos considerarnos autosuficientes en todos nuestros actos. La esperanza cristiana se basa esencialmente en la confianza que recibimos de Dios abandonndonos en su voluntad y en que a su vez sepamos infundir en los dems esa

serenidad que en ocasiones necesitan quienes estn a nuestro lado.

La esperanza no deja margen al

cristiano, lo compromete con todas sus fuerzas a perseverar en el camino designado por Dios en cada momento de nuestras vidas.

Debemos tener presente que para un

cristiano, la esperanza es espera, una espera ferviente, por el cumplimiento ltimo y definitivo del misterio del amor de Dios en el que vivimos. Y es espera de alguien que est por llegar: es Cristo el Seor que se acerca siempre ms a nosotros, da tras da, para ofrecernos su plenitud y su paz.

Monchy Marn LopezosaMonchy Marn LopezosaMonchy Marn LopezosaMonchy Marn Lopezosa

La esperanza cristiana no es mero optimismo, sino luz para el mundo La esperanza cristiana no es mero optimismo, sino luz para el mundo La esperanza cristiana no es mero optimismo, sino luz para el mundo La esperanza cristiana no es mero optimismo, sino luz para el mundo (Papa Francisco)(Papa Francisco)(Papa Francisco)(Papa Francisco)

La esperanza cristiana


Buenos Aires es una metrpolis, una ciudad muy grande, donde vivimos apilados y el transito en horas pico tiene largas colas de espera, una ciudad donde rene gente de muchos credos, predomina el catlico, pero tambin, encontramos una gran comunidad juda, protestante, evanglica y varias ms. Podemos decir que Semana Santa es aqu, all y donde se encuentre un catlico, y si me permiten ahora les contare como vivimos nosotros la Semana Santa.

Todos los viernes de cuaresma, nos

reunimos por las noches a leer la biblia y a estar en oracin y ayuno que dura todo el viernes.

Comenzamos la Semana Santa el domingo de Ramos, bendicin de los mismos y una misa llena de canciones y oracin.

El aroma de pescado, tomate y

verduras gritan por las calles: ES JUEVES SANTO, comenzamos el ayuno de carne que dura hasta el viernes inclusive, las mujeres recorremos 7 iglesias a pie, pero claro, la ventaja de vivir en una metrpolis hace que si bien caminamos mucho, no tanto tampoco, las iglesias estn a cinco o mximo 8 calles de distancia entre s, aproximadamente. Desde que somos nias nuestras madres nos llevan a caminar ese jueves. Me parece escuchar an la voz de mi madre:

- Vamos Adrianita, vamos en busca del Seor.

Ese era el fin, ir en busca del Seor,

seguramente para advertirle, si lo veamos, que lo iban a traicionar! Ese jueves, hacemos el viacrucis por la plaza que siempre est frente a las iglesias o casi siempre, pero claro, cuando yo vi las procesiones en Mlaga, cre que tocaba el cielo con las manos de alegra y emocin. Nunca me hubiese imaginado algo as.

Nuestras procesiones son mucho ms

humildes que las vuestras, los Santos son pequeos y los tronos los llevan mximo 8 personas. El Va Crucis es igual que aqu, y la fe, tambin y eso es lo importante!!!! Llega sbado de gloria y con l la misa de resurreccin, una misa donde predomina la oracin el canto de alabanza y alegra!!! La iglesia a oscura, la ilumina la entrada del cirio pascual y detrs, el pueblo con velas. Se ilumina la iglesia y el Espritu Santo se hace presente! El domingo de Pascua el pueblo se rene en la misa y luego cada uno a su casa a festejar la resurreccin del Seor, comemos en familia o amigos, otros aprovechan el puente y se marchan de vacaciones, pero tambin celebran la pascua. Y para la alegra de los ms pequeos llegan los postres, los roscos de Pascuas y el tan aorado huevo de chocolate!!! Cuenta la historia, que en los comienzos de Amrica, un continente muy joven, los granjeros en la cuaresma no solo se guardaban de comer carne sino tambin del huevo, era as que ellos los pintaban con grasa oscura paran que no se echen a perder y los escondan para no verlos y tentarse!!! Los ponan debajo de la hierba, en los graneros y por cualquier lado, pero claro al llegar el domingo de pascua, comenzaba la bsqueda de los mismos y era toda una gran fiesta. Fue as quedando la tradicin, y entonces cuando se termina de comer, los nios comienzan a buscar los famosos huevos de chocolate por toda la casa! Tradiciones o costumbres que recuerdo con tanto cario! Como vern no tenemos tanta diferencia de costumbre con vosotros y los ms importante! Y ahora, si me permiten les voy a repetir unas palabras de nuestro sacerdote Luis: Gracias Seor que has resucitado! Porque gracias a la Pascua existe la navidad y la fe Catlica Apostlica!

Adriana Delprato Adriana Delprato Adriana Delprato Adriana Delprato

Semana Santa en Argentina


Por fin, dejamos esos das de intenso frio, noches precoces y oscuras, viento ruidoso que arrasa tierras, calles, pieles. Por fin dejamos atrs esas toses, fiebres, dolores de garganta. Por fin empieza el reinado del sol de la luz, la alegra que sin darnos cuenta va entrando en nuestro cuerpo, arrinconando la tristeza del invierno y al mismo tiempo nos hace salir de nuestras cuevas, como lo hace el oso en la naturaleza y perdn por la comparacin. Por fin ruido al rastrear los pies por esos costaleros que lo mismo llevan a un crucificado que a un San Juan, que un Cristo yacente respondiendo a las voces de sus capataces y taido de una campana de sonido melanclico y alegre en unos ensayos que preconizan lo que ha de venir: olor a incienso en las calles, tambores, cantos, saetas.

Empieza la poca del ao en la que

colisionan vivencias opuestas, vida y muerte, o mejor, muerte y vida, pues es aquello en lo que creemos, dos experiencias contrapuestas y complementarias, pues no es posible la vida sin la muerte como culminacin. Me pregunto, es posible una muerte como principio de una vida.? Menuda pregunta, la respuesta es complicada pues es una respuesta sin evidencia fsica o cientfica, mas en unos tiempos do de hay personas que se empean en demostrar la falsedad de nuestra fe. Pero no soy quin para demostrar la veracidad de lo ocurrido en Jerusaln hace 2000 aos ni tengo los medios ni los suficientes conocimientos para hacerlo. Si puedo decir que nos creemos a pie juntillas lo que pas en las

Termpilas mucho antes o incluso como desaparecieron los d inosaur ios muchsimo antes todava.

En esta dicotoma como mdico, que

soy, si tengo experiencia en uno de los puntos claves pues lucho en una guerra en la que podemos ganar algunas pequeas batallas, pero la guerra de entrada est perdida, inclusive mi propia guerra. La experiencia que transmite la muerte es triste pues se pierden trocitos de mi esencia de mi persona, amigos, familiares, conocidos, pacientes, todos forman parte de mi vida y la falta de ellos supone una merma de mi mismo. Todos hemos visto alguna vez una persona fallecida, os llama algo la atencin?, a m si, la paz. Todas las personas en este modo inspiran paz. Resulta soez pensar que esta es la situacin ideal y mucho mas que puede sentir una persona cuando abandona este cuerpo.

Vida-Muerte o Muerte-Vida


Resulta esta incertidumbre aquello a lo que mas tememos una vez llegada nuestra hora, porque como humanos el no tener una planificacin es lo que mas inseguridad nos transmite y la inseguridad nos da miedo porque es como ir caminando en un lecho de rio con aguas removidas que no deja ver el fondo lo que nos obliga en cada paso a tener miedo y no saber qu vamos a pisar. Pero porqu verlo como una situacin nefasta. Lo primero es una situacin en la que somos los protagonistas, mas que en ninguna situacin de la vida, en la que van a recordar lo que fuimos, lo que dejamos y el vaco que se queda. No lo vemos, pero es algo que se queda planificado y que debe quitarnos el miedo, aunque para protagonista mejor de una gran pelcula. Superada o no esta incertidumbre nos queda paz, sosiego, relax infinito y una gran esperanza, la de volver a encontrarnos con los nuestros en el mas all: paraso, cielo, gloria y esa es la paz que el cuerpo nos transmite y es paz de la gran luz.

Vamos a salir de la divagacin y nos

vamos a desplazar a la realidad, estamos en la puerta de la Iglesia, nos adentramos en soledad, habis sentido miedo alguna vez?, en el pasillo de la izquierda est Jess clavado en la cruz, a la derecha enfrente est yacente, la cara plena de paz y serenidad y si seguimos caminando vemos la luz a Cristo Resucitado y como dije al principio porqu no creer lo que vemos con nuestros ojos, o como dije porqu darle mas credibilidad a las heroicidades de Lenidas en el paso de las Termpilas. Luego el final de nuestros das debe estar lleno de esperanza y esa esperanza es la que nos da la tranquilidad de que todo tiene que tener un sentido y para conseguirlo debemos basar nuestra vida en el amor a los dems

entendido como norma de vida de todos los hombres y que se basa en ayudar a los que nos rodean o no y no daarlos con nuestras acciones.

En definitiva debemos de cambiar nuestro concepto de la muerte y tomarlo como una nueva etapa de transicin llena de luz y de esperanza de poder a volver a estar todos juntos. Hay que eliminar de la muerte ese halo de tristeza que rodea a la muerte cambiarla de un adis a un hasta pronto, pero no porque acabe todo, sino porque en la Resurreccin volveremos a abrazarnos para nunca mas separarnos, y aunque sea fcil de escribir, mas que cumplir, contemplarla como una etapa mas, de esa cadena que es nacimiento, vida, muerte y al final una NUEVA VIDA.

Dedicado a todos los que se fueron y volveremos a ver.

Manuel Delgado MoraManuel Delgado MoraManuel Delgado MoraManuel Delgado Mora

Marzo de 2015Marzo de 2015Marzo de 2015Marzo de 2015


El lema del V Centenario"Para Vos Nac", est tomado de una de sus poesas del Libro de la vida, cuyos dos primeros versos dicen as:

"VUESTRA SOY, PARA VOS NAC:

QU MANDIS HACER DE M?"

Existi una mujer que viva un tiempo en el que, an ms que ahora, los varones controlaban la historia, empujados por una insaciable sed de poder que les llevaba a enfrentarse en innumerables guerras, a explotar pueblos inocentes. Vivi tras los muros de un convento de clausura, y, all, le llegaron tristes noticias que hablaban de enfrentamientos incluso entre los que profesaban su misma religin, de personas que moran sin conocer al Dios que ella amaba.

Toc, as, todo el dolor del mundo, todo

el dolor de un tiempo, lo contempl mientras le pareca que no poda hacer nada, porque era mujer y slo por serlo ya era sospechosa, porque apenas le dejaban pronunciar una palabra, porque quienes habran de escucharla no la tenan en consideracin.

Esa mujer se llam Teresa de Jess y el

28 de marzo de 2015 se cumplirn 500 aos de su nacimiento. Como nosotros ahora, tambin ella supo que la historia la manejaban unos pocos, pero nunca crey que no podra cambiar nada. Esa es, quizs, la principal diferencia entre nosotros y ella.

Puesta frente a Dios, le conoci como

Amigo y Maestro, como Libro Vivo en el que comprender su propia verdad y la verdad del mundo. En Cristo, su Amado, Dios se le revelaba preocupado por la historia, preocupado por los hombres y mujeres de todos los tiempos, preocupado por ella.

Santa Teresa supo que, dando su vida

por todos, Jess le haba marcado un rumbo y le peda que siguiera sus huellas y que, andando junto a l, tambin ella podra contribuir a cambiar la historia, a transformar la ciudad terrena en ciudad de Dios, a dibujar sobre este mundo el Reino. Y se puso en camino.

Fund pequeas comunidades de

mujeres empeadas en demostrar al mundo que el amor puede cambiar el rumbo de la historia.

1515-2015 Para vos nac

V Centenario del nacimiento de Santa Teresa de Jess


Celebrar el V Centenario es, sobre todo,

lanzarnos a descubrir que entre las cenizas de este mundo an caldean las brasas de otro mundo posible, mucho ms justo y ms humano.

Recordarla tiene el poder de hacernos

conscientes de cunto podemos hacer para que cambien las cosas, si nos decidimos a cambiar nosotros mismos, a optar por una vida ms simple y ms comprometida, ms de acuerdo con el Evangelio de Jess, el Evangelio del amor.

De esta manera, se conseguir que el

Centenario no sea una simple "celebracin arqueolgica", ni una huida romntica a un pasado glorioso, y conseguiremos convertirlo en un tiempo de renovacin y reactivacin espiritual, de rejuvenecimiento.

La celebracin del Centenario es una

invitacin a un encuentro profundo con Teresa, poniendo su historia personal como un camino de experiencia para todos, como una gua para la aventura interior que nos lleva al pleno encuentro con Dios.

La consideracin de Ao Jubilar por el

Nacimiento de Santa Teresa ha dado lugar a encuentros durante 2015, configurando un programa especial para facilitar el acceso a los lugares teresianos, las rutas y caminos que los unen, as como acciones que sirvan de atractivo cultural a todos los que participen de este ao tan especial.

A lo largo de su vida, camin por toda

Espaa fundando conventos dentro de la Orden del Carmelo Descalzo. La idea de la vida como camino, como peregrinaje, incluso como "misin", est por tanto ntimamente ligada a su vida y a su personaje.

Se trata de realizar una

peregrinacin, "CAMINO DE LUZ", que parte de vila el da 15 de octubre de 2014 , y recorre el mundo por los lugares teresianos en los cinco continentes, hasta llegar a vila el 28 de marzo de 2015, dando comienzo oficial al ao de celebraciones. A partir de ese da, la peregrinacin comienza el camino por Espaa, durante un mes. Atravesar 30 pases y llevar el bastn original de la S a n t a e n s u v i a j e .

En agosto de 2015, hay "UN En agosto de 2015, hay "UN En agosto de 2015, hay "UN En agosto de 2015, hay "UN ENCUENTRO EUROPEO DE JVENES", ENCUENTRO EUROPEO DE JVENES", ENCUENTRO EUROPEO DE JVENES", ENCUENTRO EUROPEO DE JVENES", organizado por la Conferencia Episcopal, organizado por la Conferencia Episcopal, organizado por la Conferencia Episcopal, organizado por la Conferencia Episcopal, la Dicesis de vila y la Orden del Carmelo la Dicesis de vila y la Orden del Carmelo la Dicesis de vila y la Orden del Carmelo la Dicesis de vila y la Orden del Carmelo Descalzo.Descalzo.Descalzo.Descalzo. Bibliografa: Bibliografa: Bibliografa: Bibliografa: www.500STJ, pgina oficial del V Centenario del Nacimiento de Santa Teresa de Jess e informacin sobre el programa Oficial de actividades.

Mara Victoria Carrascosa Uceda Mara Victoria Carrascosa Uceda Mara Victoria Carrascosa Uceda Mara Victoria Carrascosa Uceda


La mujer en tiempos de Jess

Al hacer un recorrido por el pasado, hay que tener en cuenta la mentalidad de una poca que no se corresponde con la nuestra, por lo tanto hay que hacerlo con los ojos del pasado, an sabiendo que se hace desde el horizonte del presente.

En ste caso, antes de ver la

importancia y repercusin que tuvo la figura de Jess en su trato con las mujeres, se hace necesario hacer un breve repaso por la vida social de la poca y de cul era el lugar que ocupaba la mujer.

La mujer hebrea en la poca de Jess

de Nazaret contaba poco en la sociedad, al ser sta una sociedad patriarcal y machista (llevada a los extremos); desde la cuna hasta el sepulcro, la mujer estaba dominada por un hombre, primero por su padre, luego por su marido y en caso de que enviudase, por un hermano del marido o pariente cercano, y finalmente por su hijo. La mujer no tena derecho a disponer ni poseer absolutamente nada, todo perteneca al padre o al marido, dependiendo con quin estuviese. El matrimonio era impuesto por el padre, acontecimiento que tena lugar cuando la chica era mayor de edad (12 aos y medio) pasando entonces a la potestad del marido.

Si algo poda tener a su favor, era que,

como madre era respetada y reverenciada, porque traer hijos al mundo era un regalo y una bendicin, y en especial si stos eran varones, por no considerarse a la mujer a la altura del hombre. Haba un dicho entre los judos que deca: Bienaventurado aquel cuyos hijos sean varones, ay! de aquel cuyos hijos sean hembras.

Cuando la mujer sala a la calle, deba

llevar la cabeza y la cara tapadas para que no se la reconociera; segn la ley era preferible no hablar con mujeres en pblico o a solas por el bien del alma. Y a la mujer casada ni mirarla ni saludarla.

Si la mujer tena relaciones con otro hombre, era considerada como adltera y poda ser lapidada, esto si an no estaba casada, porque si lo estaba, se le reservaba el castigo de estrangulamiento. Sin embargo para el hombre no haba castigo. En la mujer vean superficialidad, sexo y peligro y trataban de guardarse de ella. Tambin se consideraban impuras durante la menstruacin y no se las poda tocar. No poda ser testigos en un tribunal ya que consideraban su testimonio carente de valor por su induccin a la mentira.

Tampoco reciban instruccin religiosa,

ya que se supona que eran incapaces de comprenderla y las escuelas eran slo para varones, los escribas no tenan discpulas. En el templo hombres y mujeres estaban rigurosamente separados. Y en el servicio litrgico se limitaban nicamente a escuchar. Aunque s estaba obligada a cumplir con todas las prescripciones de la ley religiosa siendo sometida a todo el rigor de la legislacin civil y penal.

La sentencia de un rab deca:Ms vale

quemar la Tor que transmitirla a una mujer, y cuando rezaban daban gracias por no haber nacido gentil, extranjero o mujer.

Teniendo en cuenta todos estos

precedentes, se valorar y comprender la dimensin revolucionaria de Jess en cuanto que marc un cambio definitivo en la dinmica social, poltica y religiosa para todas las personas marginadas de la poca, incluyendo sin duda alguna, a la mujer. La propuesta de Jess era una propuesta de amor y misericordia de un Dios que no quiere la exclusin de ningn ser humano.

Esto lo vemos reflejado en los

encuentros de Jess con las mujeres narrados en los cuatro Evangelios:


En la mujer sirofenicia (Mc 7,24-37; Mt

15, 21-38) se ve cmo Jess escucha las splicas de una mujer que an siendo tres veces marginada, por ser mujer, pagana y extranjera, se le acerca a l movida por la desesperacin de la enfermedad de su hija a pedirle misericordia, Seor, Hijo de David, ten misericordia y a la vez retndolo y discutindole para que los gentiles como ella pudieran participar de la mesa y el anuncio del Evangelio. Jess la escucha y sana a su hija, Mujer grande es tu fe, que suceda como dices y su hija qued curada.

En la casa de Simn el fariseo (Lc 7, 36

-50) Jess defiende y antepone a una mujer pecadora al propio Simn en la misma casa de ste. Jess perdona en pblico a una mujer pecadora arrepentida, dejndose ungir y tocar por ella, gesto escandaloso para cualquier fariseo de la poca; Jess argumenta: Se le perdona mucho a quien ama mucho.

Otra iniciativa contra cultura incluye a

la mujer encorvada y que Jess cur en sbado en la sinagoga (Lc 13, 10-17). Al poner sus manos sobre ella para sanarla rompe con los escrpulos de la supuesta impureza sexual femenina. Al hacerlo en sbado y en la sinagoga desafa el

monopolio masculino sobre los medios de gracia y acceso a Dios. Y al llamarla hija de Abraham se le otorga status en la comunidad igualndola en condiciones con los hombres. Con estos gestos libra a la mujer del patriarcalismo y el elitismo religioso masculino a los que haba sido sometida la mujer.

Otro de los gestos es cuando

reclama la doble moral a los seguidores de la ley (escribas y fariseos) cuando le presentan a una mujer sorprendida en adulterio. Y con doble intencin le preguntan a Jess qu hacer con ella apelando a la misma vez a sus leyes (Lv 20-10; Dt 22-22), al no pensar que ellos mismos como varones haban cado en adulterio y por lo tanto ellos tambin eran parte del problema en cuestin. El que est libre de pecado que tire la primera piedra. Y Jess defiende y perdona a la mujer de sus pecados. El encuentro con la samaritana nos

muestra cmo una mujer tres veces marginada, por ser mujer, extranjera y por su vida matrimonial (casada varias veces), se convirti en instrumento escogido para la transformacin de su pueblo, ya que muchos samaritanos creyeron en Jess por


Otros textos dan testimonio de cmo Jess rechaza la ley que exclua a la mujer, como cuando cur a la suegra de Pedro (Mt 8, 14-15), el caso de Marta y Mara, cuando critica a Marta y elogia a Mara por escoger la parte mejor, la de seguirle y escuchar sus enseanzas (Lc 10, 38-41)

Muchas fueron la s mujeres que lo acompaaron, que fueron sus seguidoras desde Galilea; todas, adems de amigas eran discpulas, interesadas en la causa del Reino de Dios, cuya esencia era la igualdad, la solidaridad y fraternidad. Lo acompaaron camino del calvario impotentes frente a la injusticia que estaban cometiendo con su maestro, y su modo de protesta era con sus lamentos y lgrimas. Tambin en el momento de la crucifixin lo acompaaron en su dolor. Pero Jess no se olvid de ellas y les dio la mejor de las noticias: El amigo por el que haban llorado, estaba vivo y comparta con ellas su alegra y las quera convertir en anunciadoras para el mundo de sta noticia (Mc 16,1ss; Mt 28, 9-10; Lc 24, 1-8; jn 20, 11-18)

Para ello escogi a Mara Magdalena,

una mujer de la que haban sido expulsados siete demonios (Lc 8, 1-3). Fue una seguidora suya desde el mismo momento en que es sanada. Perteneciente al grupo que sigue a Jess desde Galilea compartiendo su camino, aprendiendo lo que significaba ser seguidor suyo y asumiendo las mismas actitudes que los hombres.

Presente en los momentos ms

definitivos de Jess, la muerte, la sepultura y la resurreccin; destacando que son precisamente stos momentos los que se confiesan en el credo primitivo (1Cor 15, 3-5)

Segn el Evangelio de Juan y Marcos es ella la primera en ver a Cristo resucitado y la encargada de anunciar la resurreccin. He visto al Seor (Jn 20,18). Con estas palabras Mara Magdalena simboliza la fe en al resurreccin de Cristo. Fue ste el

primer sermn sobre la resurreccin y fue predicado por una mujer. Jess le dijo que lo hiciera (Jn 20, 17-18). Santo Toms de Aquino calific a Mara

Magdalena como apstol de los apstoles y aadi: As como una mujer anunci al primer hombre palabras de muerte, as tambin una mujer anunci a los apstoles palabras de vida.

Con la muerte y resurreccin de Jess

se levant a la mujer de un estado cado y la restaur a su lugar correcto en el Reino de Cristo.

Muchas son las mujeres a las que

Jess con sus actos da importancia, pero no podemos olvidar el significado de Mara, su madre, para la comunidad primitiva. Qued bien recogido en las expresiones de Lucas:Algrate, llena de gracia, el Seor est contigo (lc 1,28), la plenamente amada por Dios.

En Mara todas las mujeres quedan

redimidas y dignificadas.

Mara Beln Trillo RomeroMara Beln Trillo RomeroMara Beln Trillo RomeroMara Beln Trillo Romero


Jn 20,11-17..ella le dice: Rabboni!(que significa Maestro).

Juan utiliza la palabra Rabooni para

mostrarnos que Jess es el nico maestro que debemos seguir nosotros los cristianos.

Para entender el amplio significado de

dicha palabra aplicada a Jess y conocer su origen y su significado debemos recurrir al Antiguo Testamento.

En el judasmo, el rabino era la persona

calificada en virtud de ordenacin para ensear la TorahTorahTorahTorah, aplicar la halaj halaj halaj halaj y dirigir una comunidad religiosa juda. El ttulo de rab o rabino (literalmente, mi maestro) se aplicaba a los maestros de Israel que haban recibido la imposicin de manos o semij semij semij semij . Era normal que el estudio de la Tor estuviera unido a algn trabajo o profesin prctica ya que aceptar alguna recompensa por la enseanza se consideraba una profanacin del Nombre Divino o Jilul Jilul Jilul Jilul HaShem.HaShem.HaShem.HaShem.

Tor (literalmente, gua, instruccin,

enseanza) suele traducirse como ley aunque ese trmino apenas se acerca a toda la riqueza del vocablo original. En sentido estricto est formado por los cinco libros de Moiss o Pentateuco, aunque, ms ampliamente, puede servir para designar todo el Antiguo Testamento o la ley oral.

El Pentateuco est formado por: 1-Gnesis: Libro de los Orgenes 2-xodo: Libro de la salida de Egipto 3-Levtico: Libro de los levitas,

sacerdotes de la tribu de Lev 4-Nmeros: Libro del los censos del

pueblo de Israel 5-Deuteronomio: Libro de la segunda

ley Este bloque de libros fundamentales

significa la ley, pero contiene mucho ms que normas y leyes.

Ciertamente se conservan muchas

leyes desde la ms importante a la ms insignificante, que marcaron las etapas del pueblo de Israel y pusieron las bases de su organizacin. Pero se conservan tambin relatos sobre los orgenes, recuerdos entraables de familia, grandes acontecimientos histricos, oraciones, actos de culto, etc...ste otro conjunto de elementos es el que da el sentido a las leyes, porque tienen como marco una Historia de Salvacin.

Halaj:Halaj:Halaj:Halaj: Es la decisin jurdica obtenida

tras la discusin de diversas opiniones emitidas por distintas autoridades. Es decir, es la ley, el sistema jurdico del judasmo y la ley oral.

Jess a lo largo de su vida, demostr

conocer perfectamente la ley Mosaica o de Moiss, pero fue l el que le dio verdadero sentido a la misma. l le dio vida a una ley muerta. Distinguiendo los autnticos de los falsos maestros, como podemos ver en algunos textos del Nuevo Testamento: (Mt 23, 8-12) Uno slo es vuestro Maestro. (Lc 11, 46) Ay! de vosotros maestros que abrumis a la gente con cargas insoportables.(Ef 4,11) ha constituido a unos maestros (2P 2, 1-22) Los falsos maestros

En San Mateo 23, 1-12 nos viene a

decir que padres, maestros y consejeros puede haber muchos, pero slo uno que de la Vida, que ensee la Verdad, que aconseje lo mejor: Jesucristo a disposicin de todos.

Lourdes Melgarejo MarnLourdes Melgarejo MarnLourdes Melgarejo MarnLourdes Melgarejo Marn

Rabino


Yo no soy Charlie

Durante los ltimos das, hemos escuchado calificar a los periodistas vilmente asesinados del pasqun Charlie Hebdo, de mrtires de la libertad de expresin. Tambin hemos asistido a un movimiento de solidaridad pstuma con los asesinados, mediante proc lamas inasumibles del estilo: Yo soy Charlie. Y llegados a la culminacin del dislate, hemos escuchado defender un sedicente derecho a la blasfemia. Sirva este artculo para dar voz a quienes no se identifican con este cmulo de paparruchas hijas de la debilidad mental.

El pasqun Charlie Hebdo adems de

publ icar st iras provocadoras y gratuitamente ofensivas contra los musulmanes, ha publicado en reiteradas ocasiones caricaturas aberrantes que blasfeman contra Dios, empezando por una portada que mostraba a las tres Personas de la Santsima Trinidad sodomizndose entre s. Por esta basura sacrlega y gratuitamente ofensiva que publicaba el pasqun Charlie Hebdo es por lo que me hace decir que Yo no soy Charlie.

Debemos condenar este vil asesinato;

debemos rezar por la salvacin del alma de estos periodistas que en vida contribuyeron

a envilecer el alma de sus compatriotas; debemos exigir que las alimaas que los asesinaron sean castigadas como merecen; debemos exigir que la patologa religiosa que inspira a esas alimaas sea erradicada de Europa.

Ninguna persona que conserve una brizna de sentido comn, as como un mnimo temor de Dios, puede mostrase solidaria con tales aberraciones que nos conducen al abismo.

Y no olvidemos que algunos gobiernos

occidentales han financiado en diversos pases a los islamistas que han masacrado a miles de cristianos, mucho menos llorados que los periodistas de Charlie Hebdo.

Por eso pido a Dios, a ese Dios

misericordioso, que en estos das vuelve a entregar su vida en redencin a nuestros pecados, cargue sobre su Cruz tantas ofensas a su divinidad como ignominiosa y constantemente, est cometiendo el gnero humano.

Lucky Mora RicoLucky Mora RicoLucky Mora RicoLucky Mora Rico


DOMINGO DE RAMOS

12:00 Bendicin de Ramos en la Plaza de

Espaa Procesin con pal-mas y ramos; y Euca-

rista

LUNES SANTO 10:00 Limpieza del templo y Centro parroquial

Preparacin de los tronos

MIRCOLES SANTO

23:00 Va Crucis por las calles del pueblo

JUEVES SANTO 10: 00 Oracin de la

maana 19:00 Cena del Seor

y procesin 23:00 Hora Santa

VIERNES SAN-TO

10:00 Oracin de la maana ante la Cruz 17:00 Pasin y

Muerte de N. Seor y Procesin

23:00 Procesin de la Virgen de la Soledad

SBADO SANTO 10:00 Oracin de la

maana 23:00 Vigilia Pascual

DOMINGO DE RESURREC-

CIN 10:00 Eucarista

Bautismos 11:30 Procesin.

Semana Santa 2015Semana Santa 2015Semana Santa 2015Semana Santa 2015 Santo Tom

24, 25 y 26 de Marzo24, 25 y 26 de Marzo24, 25 y 26 de Marzo24, 25 y 26 de Marzo

19:00 Triduo Virgen de los Dolores (Da 26-Confesiones)

28 de Marzo 28 de Marzo 28 de Marzo 28 de Marzo

19:30 Eucarista y Viacrucis de costaleros-as

DOMINGO DE RAMOSDOMINGO DE RAMOSDOMINGO DE RAMOSDOMINGO DE RAMOS 11:30 Bendicin de Ramos en la Plaza de Espaa

Procesin con palmas y ramos; y Eucarista

LUNES SANTOLUNES SANTOLUNES SANTOLUNES SANTO 10:00 Limpieza del templo y Centro parroquial

21:00 Preparacin de los tronos

JUEVES SANTOJUEVES SANTOJUEVES SANTOJUEVES SANTO 20:00 Cena del Seor y procesin

23:00 Hora Santa con Jess Sacramentado

VIERNES SANTOVIERNES SANTOVIERNES SANTOVIERNES SANTO 18:00 Pasin y Muerte de N. Seor Jesucristo y

Procesin del Santo Entierro 23:00 Procesin de la Virgen de la Soledad

SBADO SANTOSBADO SANTOSBADO SANTOSBADO SANTO

23:00 Vigilia Pascual

DOMINGO DE RESURRECCINDOMINGO DE RESURRECCINDOMINGO DE RESURRECCINDOMINGO DE RESURRECCIN 10:30 Eucarista Bautismos 11:30 Procesin del Resucitado

Revista Semana Santa 2015

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