Revista "Gente de Astrología"

Ao XX

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sobre Astrologa

Propietario y Director: Dionisio Adrin ArgellesRedaccin: Silvia Ceres

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Gente de Astrologa-GeA publicacin electrnica CUATRIMESTRAL. Todos los Derechos Reservados. Los editores no asumen responsabilidad alguna por cualquier consecuencia derivada por la aplicacin de los conceptos que se describen, analizan o publican. Las notas firmadas reflejan la opinin de los autores sin que ello implique solidaridad de Gente de Astrologa-GeA con su contenido. Para todos los efectos se considera que la responsabilidad por el contenido de los avisos corre por cuenta de cada anunciante. Impresa en * ABULAFIA Ediciones Digitales * Buenos Aires - Argentina.

LA ESPERANZA ES UNA OBLIGACION - Osvaldo Bayer

N 60 - Abril 2015N 60 - Abril 2015

PPUBLICACINUBLICACIN DESARROLLADADESARROLLADA PORPOR A ABULAFIABULAFIA - A - AVDAVDA. C. CALLAOALLAO 132, 2 132, 2 PISOPISO (C1022AAO) B (C1022AAO) BUENOSUENOS A AIRESIRES A ARGENTINARGENTINA

Gente de Astrologa-GeA N 60 Abril 2015Gente de Astrologa-GeA N 60 Abril 2015

EN ESTE NEN ESTE NMMERO...ERO...

LOS NMEROS EN AZUL SON ENLACES A LOS ARTTULOS

EDITORIALEDITORIAL 03

TIMEO DE PLATON Y LA ASTROLOGIA. Estudios y Comentarios (IV)TIMEO DE PLATON Y LA ASTROLOGIA. Estudios y Comentarios (IV)Celisa Beranger - Marcus Res - Lucia Xavier - Marilda GoulartRegina Celia de Souza - Sandra Fanzeres - Thereza Samuel 04

LOS CIEN AFORISMOS DE ALAN LEOLOS CIEN AFORISMOS DE ALAN LEO 15

MERCURIO INFORMAMERCURIO INFORMA 21

QU SABEMOS DE LOS COMIENZOS DE LA TRADUCCIN QU SABEMOS DE LOS COMIENZOS DE LA TRADUCCIN CIENTFICA EN LA PENNSULA ?CIENTFICA EN LA PENNSULA ?Jos Chabs. Barcelona (Espaa) 23

CONFERENCIA DE JAMES HILLMAN (1997)CONFERENCIA DE JAMES HILLMAN (1997)Traduccin de Enrique Eskenazi 26

MTODOS DE DIVISIN DE CASASMTODOS DE DIVISIN DE CASASRaul V. Martinez. San Pablo (Brasil) 37

EL REINO DEL REVS.EL REINO DEL REVS.LA TRAMA DE LOS SIGNOS Y PLANETAS INTERCEPTADOSLA TRAMA DE LOS SIGNOS Y PLANETAS INTERCEPTADOSRosa Pagano. Buenos Aires (Argentina) 54

MITOLOGA GRIEGA: DOCE DIOSES DEL OLIMPOMITOLOGA GRIEGA: DOCE DIOSES DEL OLIMPO 59

OBJECIONES A LA ASTROLOGA: DE VERAS?OBJECIONES A LA ASTROLOGA: DE VERAS?Jess Navarro. Zaragoza (Espaa) 63

SINASTRIA: UN SENCILLO MTODOSINASTRIA: UN SENCILLO MTODOSilvia Ceres. Buenos Aires (Argentina) 81

LOUIS DE WOHLLOUIS DE WOHL 85

INDICE HISTORICO DE LOS ARTICULOS PUBLICADOSEl ndice histrico de la revista se edita en un anexo que puede descargar desde nuestro Portal.

2015 Gente de Astrologa-GeA Prohibida la reproduccin por cualquier medio. Pgina 2 de 92


EDITORIALEDITORIALCelebramos el cierre del ao 20 de edicin ininterrumpida, con alegra e inmensa gratitud hacia todos los colaboradores que hicieron y hacen posible la publicacin de nuestra revista.

Estimado lector, repasemos el material que disfrutar en esta nueva entrega.

Transcribimos la interesante conferencia pronunciada en 1997, por el psiclogo James Hillman en un congreso astrolgico.

Desde Espaa recibimos un artculo de Jess Navarro argumentando sobre las falacias de las supuestas refutaciones que la Astrologa recibe peridicamente desde la mirada del conocimiento oficial. Adems de sus slidas argumentaciones, es importante sealar que el autor proviene del campo acadmico de la ciencia, razn dems para sopesar sus opiniones.

Del mismo pas proviene una nota de Jos Chabas sobre los inicios de la traduccin en la Pennsula Ibrica.

Quienes gustan de la mitologa, se deleitarn con un breve pero interesante escrito sobre les 12 dioses del Olimpo.

Proseguimos editando la cuarta entrega del texto redactado por un grupo interdisciplinario de Ro de Janeiro, sobre el Timeo de Platn.

Tambin desde Brasil, seleccionamos de la vasta obra de Ral V. Martnez, un material central y poco transitado sobre los diferentes mtodos de divisin de casas.

Alan Leo brinda a travs de sus 100 aforismos, una sinttica enunciacin de variados temas.

Rosa Pagano (Argentina) enfoca en forma exhaustiva y con gran claridad la dinmica de funcionamiento de los signos interceptados.

Igualmente desde Argentina, Silvia Ceres comparte un sencillo y eficaz mtodo de sinastra.

Para seguir conociendo la vida y la obra de los astrlogos que nos precedieron, sumamos la biografa de Louis de Whol.

Por ltimo, encontrarn informacin de eventos y bibliografa en la seccin Mercurio informa.

Siempre fieles a nuestra lnea editorial, le brindamos al lector, mltiples temas y abordajes para seguir acrecentando el conocimiento astrolgico.

Gracias por acompaarnos y volvemos a encontrarnos en agosto de 2015.



EL TIMEO DE PLATONEL TIMEO DE PLATONY LA ASTROLOGIA.Y LA ASTROLOGIA.

Estudios y Comentarios (IV)Estudios y Comentarios (IV)Celisa Beranger - Marcus Res - Lucia Xavier - Marilda Goulart

Regina Celia de Souza - Sandra Fanzeres - Thereza Samuel

2004Ro de Janeiro

N. de E. Esta es la cuarta entrega del texto, que continuar editndose en nmeros posteriores de la Revista.

La Formacin del Alma y la Msica. Regina Celia de Souza

IntroduccinTimeo o Sobre la Naturaleza, nuestro objeto de estudio, forma parte de los llamados dilogos de la vejez de Platn. Este libro que influenci grandemente el pensamiento cosmolgico medieval, es un dilogo sobre la naturaleza, ms especficamente sobre la creacin del mundo, el nacimiento y constitucin de los elementos que componen el universo (1). Los personajes de ese dilogo son: Scrates, Crtias, Timeo y Hermcrates. A pesar de que el asunto central de ese trabajo sea la idea de que haya en el universo una msica, en el Timeo no hay ninguna referencia directa sobre la "msica de las esferas" o "msica del universo". Platn, como veremos, habla solamente de "armona", que como sabemos no se restringe slo a la msica. Vale destacar, como introduccin, que uno de los temas centrales del Timeo, dice que aquello que es aprendido por la inteligencia y por la razn permanece siempre en el mismo estado y lo que es aprehendido por las sensaciones, sin ayuda de la razn, estar siempre en un proceso devenir, esto es, en un proceso de creacin. Adems de eso, todo lo que es creado debe tener un modelo bueno, bello, perfecto e inmutable (2) y, de esa forma, el mundo sensible sera una copia del mundo inteligible.

En nuestro texto, trataremos de la composicin del alma del mundo y su divisin en intervalos armnicos expuestos en el Timeo, correlacionndolos con las nociones musicales de la poca de Platn. El Timeo es bsicamente una cosmologa -o estudio de la estructura del universo, y desarrollaremos el trabajo a travs de menciones de



La Repblica de Platn y de obras de autores que hablan sobre la armona musical, msica de las esferas y armona en la naturaleza. En la obra La Repblica, libro X (615-616), Platn relata que un hroe de nombre "Er", retornando del reino de los muertos, describi ocho crculos mviles -iguales a los planetas- y que haba odo que ocho sirenas cantaban una nota musical (un sonido) para cada crculo, pero infelizmente "Er" no dio ninguna informacin sobre las notas y sus respectivos planetas.

Las obras de la mayora de los autores antiguos se perdieron, pero constatamos con placer que las obras completas de Platn se conservaron. De los filsofos anteriores a Platn quedaron slo fragmentos citados por autores posteriores, que an pudieron consultar los originales antes de la prdida generalizada de esas obras debido, en parte, al famoso incendio de la Biblioteca de Alejandria en 47 a. C. La obra de Platn es vastsima y debido al gnero literario predominantemente adoptado en su trabajo, su obra fue conocida por el nombre genrico de Dilogos de Platn. En los dilogos, hay lugar para la belleza y la verdad, exhibiendo la unin de la lgica con la poesa. Es notable la vivacidad con que los personajes se mueven en los dilogos: hablan, discuten, se contradicen, se refutan en las observaciones, mostrando el objetivo de facilitar la exposicin del tema, creando la posibilidad de conclusiones provisorias que nuevamente son exhaustivamente discutidas y debatidas para llegar a una posicin que puede no ser definitiva. En los dilogos, existe sistemticamente el despliegue de argumentos y razonamientos que van pasando por etapas no definitivas y a poco de andar, un resultado puede ser alcanzado distinto a lo que fue discutido. Los dilogos van siendo creados a medida que los argumentos son enunciados (3).

En La Repblica, el dilogo ms conocido y estudiado de Platn, cuyo tema central es la Justicia, una de las discusiones es sobre aritmtica y geometra, considerndolas como parte de la educacin (4). La aritmtica, la ciencia de los nmeros y del clculo, tiene aplicacin universal y es usada en todas las artes y ciencias (5), y en ese sentido, es una gran etapa del conocimiento de cualquier actividad.

Platn tambin nos dice que el sentido de la visin es nuestro mayor don, pues a travs de ella podemos contemplar el firmamento, el da, la noche, el cambio de las estaciones, y esta contemplacin acaba por llevar a la creacin de conceptos numricos y tambin a conceptos sobre el tiempo y sobre el ritmo. En fin, de las especulaciones sobre el universo, segn l, se llega a la filosofa (6) . La aritmtica y el clculo estn ligados a los nmeros pues su uso tanto es prctico como filosfico. La aritmtica obliga al alma a razonar sobre los nmeros (la nocin de abstracto an no existe en Platn: para l los nmeros no son materiales pero eso no los hace abstractos, como tambin son las Formas. Los nmeros serian realidades) y este tipo de conocimiento necesita de la inteligencia pura para llegar a la verdad. Para los griegos la Verdad era una divinidad alegrica, hija de Cronos para unos, o hija de Zeus para otros, era madre de la Justicia y de la Virtud; era representada por la



figura de una mujer sonriente, pero modesta; est desnuda y tiene en la mano derecha un sol que ella mira y en la mano izquierda un libro abierto con una palma; bajo uno de los pies el globo terrestre (7). Vale resaltar aqu que Platn no se limita a la mitologa de su poca, pero quiere presentar una descripcin racional para la verdad. Los filsofos critican y van ms all de los mitos.

Formacin del Alma y la msica del Universo (8)El Universo es la copia de un modelo nico, vivo, perfecto y eterno. Entendemos esta copia como siendo el universo manifestado, visible y es el ms semejante que pueda ser del modelo pero, como es copia, tendr las imperfecciones de la materia usada. Por ms que se intente excluir de la copia toda y cualquier imperfeccin, esto no ser posible. El demiurgo que es la divinidad artfice, es el constructor del mundo, es perfecto y deseaba tanto cuanto fuera posible, que todas las cosas fuesen buenas y perfectas como l mismo. El toma la materia prima escogida para ser ordenada, organizada, y armonizada de la mejor manera posible.

Platn llama el modelo de lo Mismo y lo asocia a la eternidad, la perfeccin y la inmutabilidad; la copia es llamada de lo Otro -no es eterna, es imperfecta y mutable. Esa masa a ser trabajada, est desprovista de todo reposo y orden; fue ordenada porque el orden es mucho mejor que cualquier desorden (9).

La reflexin trae la percepcin que jams surgira un todo desprovisto de inteligencia que fuese ms bello que el todo inteligente. Por lo tanto, el intelecto solo puede nacer unido al alma. As, el demiurgo, la divinidad, debera hacer que el todo tuviese tambin alma y el hace primero el alma y despus el cuerpo. El cuerpo fue creado despus del alma para que el alma, en su origen y excelencia, gobernase y ensease al ms joven -el cuerpo-. La inteligencia fue colocada en el alma y el alma fue colocada en el cuerpo. Por lo tanto, el alma fue formada primero para comandar el cuerpo y el cuerpo vino despus para obedecer al alma. Para que el alma y el cuerpo quedasen ligados uno al otro, el demiurgo compuso otro tipo de substancia llamada esencia (substancia o existencia) que comparte la naturaleza de lo Mismo y de lo Otro. El interpuso esta esencia como intermediaria entre el alma y el cuerpo para que hubiese ligazn entre lo inmaterial y lo material (10). As, podemos entender que el alma del mundo est constituida por la mezcla de tres elementos: lo Mismo, la Esencia y lo Otro (11).

Entonces el mundo se torn una criatura viviente dotada de alma e inteligencia por la providencia del demiurgo (12).

Divisin de los intervalos (13).Despus, el demiurgo tom los tres elementos creados: lo Mesmo, lo Otro y la Esencia y los combin en una forma, comprimindolos con fuerza debido a la difcil asociacin entre lo Mismo con lo Otro. Estas tres substancias fueron combinadas en



armona, haciendo de las tres una sola. Despus de esa mezcla, las dividi nuevamente en varias partes, en cuantas fuesen convenientes existir, siendo que cada una contena una aleacin de lo Mismo, de lo Otro y de la Esencia (14).El Demiurgo separ las partes del siguiente modo:

Primero separ una parte: x.Separ una segunda parte, el doble de la 1: 2x.Tercera parte, una vez y media la 2 o el triple de la 1: 3x.Cuarta parte, el doble de la 2: 4xQuinta parte, el triple de la 3: 9x.Sexta parte, el ctuple de la 1: 8x.Sptima parte, 27 veces mayor que la 1: 27x

As, el alma fue formada a partir de intervalos dobles (1, 2, 4, 8) y triples (1, 3, 9, 27). Retirando todava ms porciones de la mezcla primitiva, el Demiurgo las coloc en los intervalos de modo que en cada intervalo hubiese dos mediaciones:

la primera, de razn 2, suministra la sub serie 1, 2, 4, 8 que supera los extremos o est superada por ellas por una misma fraccin de cada una de ellas.

la segunda, de razn 3, suministra la sub serie 1, 3, 9, 27 que supera los extremos por una cantidad igual a lo que est superada por el.Portante, a serie completa ser 1, 2, 3, 4, 8, 9, 27.

De las porciones colocadas en los primeros intervalos, resultan nuevos intervalos de 3/2, 4/3, y 9/8 y fueron ocupados todos los intervalos de 4/3 con un intervalo de 9/8 completando todos los intervalos de modo armnico (15). Dejando subsistir de cada uno de ellos una fraccin tal que el intervalo restante fuese definido por la razn de los nmeros 256/243 (16).

Y as la mezcla en la cual tena efecto esas divisiones fue totalmente empleada. De esa forma la estructura matemtica torna posible mostrar que el alma del mundo est constituida de acuerdo con los principios armnicos entre lo Mismo y la Esencia y lo Otro.

Esta composicin armnica fue dividida en dos mitades en el sentido de la extensin, y el demiurgo cruz estas dos mitades, una sobre otra, formando una X y las curv formando un crculo, cuyas extremidades fueron unidas; as se produjeron los crculos de lo Mismo y de lo Otro, involucrndolos en un movimiento uniforme girando en el mismo lugar (17).

De estos dos crculos, coloc uno en el exterior, lo Mismo, orientando su movimiento, de izquierda a derecha y el otro circulo, el del interior, o de lo Otro, orientado de



derecha a izquierda. De manera que la rotacin del crculo interno gira de oeste a este y el del circulo externo gira de este a oeste.

La revolucin de lo Otro fue dividida seis veces, formando siete crculos que se mueven en sentido contrario unos de otros. Esos crculos fueron organizados segn los intervalos dobles y triples, de modo que hubiesen tres de cada especie; tres de ellos se movan a la misma velocidad (Sol, Mercurio y Venus) y cuatro (Luna, Saturno, Marte, y Jpiter) se movan con velocidades diferentes en relacin a los otros tres y en relacin a ellos mismos (18). Este modelo de organizacin astronmica corresponde a una esfera formada por varios anillos concntricos -que es el modelo de la escuela pitagrica- vigente por varios siglos hasta ser revisado en la Edad Media.

Vemos que la cosmologa propuesta en el Timeo nos muestra el universo en trminos de intervalos armnicos que pueden ser comparados con las nociones musicales de la poca de Platn. Vamos, entonces, a tratar ms especficamente la nocin de msica griega y como podemos percibirla en la descripcin cosmolgica presentada. En El Universo de los Nmeros de la Biblioteca Rosacruz AMORC leemos que:

Segn Platn, la armona es para los odos lo que la Astronoma es para os ojos. Los Pitagricos decan que la astronoma y la armona eran ciencias hermanas, como la aritmtica y la geometra y que ellas ayudaban a encontrar la verdad. (19)

Segn el opsculo La msica de las Esferas de la Sociedad de las Ciencias Antiguas (20)

Los griegos utilizaban la msica en las celebraciones de sus misterios; ellos fueron los creadores de los primeros modos de escala musical, siendo cada modo asociado a una regin diferente de Grecia y cada modo musical era compuesto por notas que evocaban los dioses patrones de cada localidad.

Como la msica ya era vista teniendo un gran poder sobre los seres vivos, las composiciones musicales tenan la capacidad y el poder de evocar las caractersticas de cada uno de los dioses homenajeados y por lo tanto no eran utilizadas libremente Estos son algunos modos musicales griegos que llegaron hasta nuestros das:

Modo Drico - asociado a Apolo; evocaba el Sol.

Modo Frigio - asociado a Ares; era fuerte y retumbante.

Modo Hipoldio - asociado a Afrodita; evocaba el amor y sus bondades.

Modo Hipofrigio - asociado a Hermes; ligado a actividades comerciales.



Modo Mixoldio - asociado a Cronos; apropiado a lamentaciones y a los cantos fnebres.

PitgorasToda la parte msical griega est basada en la Escuela de Pitgoras, que ciertamente influenci a Platn (21). Para Pitgoras, la msica no era solamente un arte ms sino una rama importante de la matemtica y dada su fascinacin por ambas, acab "combinando una con otra" (22). Pitgoras declaraba que todo tena relacin con los nmero, pues los nmeros y la matemtica tienen el carcter de las verdades inmutables. El descubri que el sonido de una nota musical depende de la extensin de la cuerda que la produce. As, correlacion los intervalos de la escala musical con relaciones numricas simples. La relacin matemtica entre la nota principal y su octava est expresada como una relacin de 1:2; tambin descubri la base matemtica de la armona musical que comprobaba su Tetrakys Sagrada con las relaciones entre los intervalos 1, 2, 3, 4 : l reconoci que la octava musical es la expresin ms simple y ms profunda de la relacin entre lo inmaterial y lo material. El "milagro de la octava", como es llamado, nos muestra que una nota musical, an dividida en dos partes audibles y perceptibles, permanece reconocible como la misma nota musical.

La Msica de las esferasPitgoras enseaba que cada uno de los siete planetas produca a travs de sus rbitas, una nota musical particular, de acuerdo con sus distancias del centro considerado, la Tierra, y como las subdivisiones tonales eran muy parecidas con las relaciones de las distancias de los planetas, esto fue "traducido y entendido" como Msica de las Esferas Celestiales (23).

En Msica y Simbolismo (24) podemos leer:"La relacin entre las matemticas y la msica y, por va de consecuencia entre la astronoma y la msica fue revelada a Pitgoras por una experiencia fortuita que, conviene interpretar correctamente; un da, pasando por una herrera, percibi que dos martillos batiendo en una bigornia sonaban con la diferencia de una octava uno del otro; otros dos martillos sonaban con la diferencia de una cuarta uno del otro y otros dos martillos sonaban con la diferencia de una quinta. Se dijo que Pitgoras pens que los martillos que sonaban en octavas vio que ellos estaban en la relacin de 1:2, los que sonaban en cuarta estaban en la relacin 3:4 y los que sonaban en quinta estaban en la relacin 2:3. Pero por lo que parece, hubo alguna confusin en la traduccin de la historia de la experiencia de los martillos, porque en griego, martillo es "sphyra " y esfera es "sphaira"; lo ms probable es que la experiencia debe haber sido hecha con esferas huecas, de volmenes diferentes, lo que acsticamente es comprensible; de ah, relacionando las esferas huecas, las relaciones de las distancias planetarias, y como las subdivisiones tonales son muy



parecidas, esto nos hace creer que fue as que surgi la expresin "Msica de las Esferas": asociando la msica inaudble a los odos humanos, realizada por el movimiento de los planetas recorriendo sus rbitas ".

As de acuerdo con Msica y Simbolismo esta pretendida experiencia qued como referencia, durante siglos, para todos los tericos de la msica hasta que en el siglo XVII, cuando qued probado que es nicamente la masa de la bigornia y no la de los martillos la que determina la altura del sonido odo en ocasin del golpe (25).

Matemtica, Msica y Aspectos AstrolgicosIntercalando los estudios de Pitgoras sobre matemtica y msica y los de Platn sobre las armonas los que prevalecern prcticamente hasta el siglo XVII, constatamos que los intervalos musicales fueron asimilados a los aspectos astrolgicos; tambin las razones de la armona unida a la geometra forman las cinco figuras slidas, los cinco poliedros regulares conocidos como "slidos platnicos" (26).

En la Edad Media la asimilacin entre trminos astrolgicos y trminos musicales era tal que astrlogos o astrnomos utilizaban con frecuencia vocablos como unsono u octava para designar la conjuncin u oposicin de los astros, y los msicos hablaban de trino o cuadrado para designar la quinta o la cuarta (27).

En la relacin de la armona musical con astrologa tenemos:

Unisono -relacin 1:1- no hay intervalo entre ellos (es la emisin simultnea de la misma nota); est asociado al aspecto astrolgico da conjuncin; los astros estn conjuntos, esto es no forman ningn ngulo o forman un ngulo de cero grados.

Octava -relacin 1:2-los astros estn en oposicin; esto es los astros forman un ngulo de 180.

Quinta justa -relacin 2:3- los astros estn en trgono; los astros forman un ngulo de 120.

Estos tres primeros intervalos representan las consonancias de toda ciencia musical y es la base actual de todo sistema de afinacin de los instrumentos musicales. Estn presentes tambin en la armona matemtica propuesta por Platn en la esfera celeste.

Otras consonancias fueron asimiladas a otros aspectos astrolgicos, siempre en razn de sus relaciones aritmticas, entre ellas:

Cuarta justa -relacin 4:3-; los astros estn en cuadratura, esto es, que forman ngulo de 90.



Tercera menor -relacin 6:5-; los astros estn en sextil, forman un ngulo de 60.

Tercera mayor -relacin 5:4-; los astros estn en quintil, forman un ngulo de 72.

Sexta menor -relacin 8:5-; los astros estn en sesquicuadratura, forman un ngulo de 135.

Sexta mayor -relacin 5:3-; los astros estn en semicuadratura, forman un ngulo de 45.

Las siete consonancias tambin fueron reconocidas en correspondencia con los siete planetas:

Consonancia Planeta Divinidad

Octava Luna Artemisa

Sexta mayor Mercurio Hermes

Sexta menor Venus Afrodita

Quinta Sol Apolo

Cuarta Marte Ares

Tercera mayor JpiterZeus

Tercera menor Saturno Cronos

En la Edad Media, los ideales de armona de Pitgoras, reforzados por Platn, inspiraron a Nicolau Coprnico a desarrollar el sistema planetario centrado en el Sol; el entusiasmo de Kepler con el nuevo sistema y su anlisis de las rbitas elpticas de los planetas mostraron una armona celestial ms sutil y profunda.

En el inicio del siglo XVII, las observaciones de Thyco Brahe sobre el movimiento aparente de los planetas permitirn a Kepler establecer las leyes de los movimientos de los planetas y a partir de la 3 ley, Kepler puede relacionar los sonidos producidos por los diversos planetas. Concluyendo que los planetas ms lejanos eran ms lentos, entendi que los sonidos producidos serian ms graves a medida que la distancia del Sol aumentaba (30).



Pero hacia el final de aquel siglo, Newton estableci el principio de la gravitacin universal deducindolo de las leyes de Kepler y de la mecnica de Galileo.

ConclusinLas escuelas filosficas platnica y pitagrica surgirn en parte de las enseanzas de los misterios rficos. Pitgoras descubri las octavas musicales e intent probar la relacin entre las notas musicales y los principios matemticos del Universo (31).

"El concepto de que las armonas musicales bsicas -de acuerdo con los conceptos pitagricos retomados en la Edad Media- corresponden a las buenas proporciones del cuerpo humano y, por lo tanto deberan ser usadas en la arquitectura, se torn la principal idea entre los Maestros del Renacimiento" (32).

El pentgono y el pentagrama mostrando el tringulo de Pitgoras y proporciones de la seccin urea pueden ser encontradas en todo en la naturaleza, en los ptalos de flores, en las vueltas de las conchas y caramujos, en el cuerpo humano y hasta en el mndala patrn de una galaxia en espiral (33).

La resonancia es el principio sonoro ms importante, no importa su forma. Ella muestra la capacidad de un cuerpo de vibrar por medio de ondas de frecuencia, a partir de vibraciones producidas por un cuerpo o por un sonido semejante (34). Ya a mediados del siglo XX, en 1952, el fsico alemn W. O. Schumann constat que la Tierra est rodeada por un campo eletromagntico poderoso, que posee una resonancia constante y es responsable del equilibrio y armona de todas las formas de vida que proliferan en ella.

Cosmlogos y bilogos estn enfatizando la tesis que la Tierra es efectivamente un super organismo vivo y que nosotros los humanos y nuestra madre Tierra formamos una nica entidad, un ser vivo que siente y piensa. Nosotros somos la Tierra y la Tierra somos nosotros.

Y no es que Pitgoras y Platn ya saban eso!

1. Consultar el texto Historia da Astrologa de Marcus Reis. 2. O Universo dos Nmeros, pgina 50.3. Enciclopedia Simpozio, captulo 2.4. A Repblica, Livro VII, 527 a-b.5. A Repblica, Livro VII, 522 a-c.6. Pitgoras, pgina 79.7. Mitologa Grega e Romana, pginas 320/32.8. Timeu, Dilogos (35 a), Vol. XI, pgina 40.9. Pitgoras, pgina 79.10.Dilogos, Vol. XI, pgina 40.11. Dilogos, Vol. XI, pgina 40.



12. O Universo dos Nmero, pgina 50. 13. Dilogos, Vol. XI, (36 a), pgina 40. 14. Dilogos, Vol. XI, pgina 40.15. Dilogos,volume XI, pgina 40.16. Timeu e Crtias, pgina 86 e Timaeus by Plato, pgina 11.17. Ver artculo "A Alma do Mundo" de Thereza Samuel. 18. "Timaeus by Plato, pgina 11.19. A Repblica, pgina 3520. A Repblica, pgina 3521. Pitgoras, pgina 58. 22. Pitgoras, pgina 58.23.Msica e Simbolismo, pgina 9.24.Msica e Simbolismo, pginas 12 e 13.25. Cf bibliografa n 15, art. "Sphere", pgina 149 e bibliografa n 66, livro 4 da

composio, proposiao IV, corolario II.26. Ver texto "Figuras dos Elementos ou Slidos de Plato " de Celisa Beranger.27. Msica e Simbolismo, pgina 16.28. Msica e Simbolismo, pgina 1429. Msica e Simbolismo, pgina 1430. "Internet: www.portaldoastronomo.org/tema, 19-4.php31. Pitgoras, pgina 79.32. O Poder dos Limites, pgina 96.33. Pitgoras, pgina 60 e O Poder dos Limites, pgina 81.34. Pitgoras, pgina 60

Bibliografa seleccionadaBIBLIOTECA ROSACRUZ. O Universo dos Nmeros. Coordenao e supervisao de Charles Veja Parucker. Curitiba: Ed. AMORC.BOFF, Leonardo. Ressonncia Schumann. Artigo publicado no Jornal do Brasil. Rio de Janeiro: 05/03/2004COTTE, Roger J.V. Msica e Simbolismo. Rio de Janeiro: Editora Cultrix.DOCZI, Gyrgy. O poder dos Limites Harmonas e Proporoes na Natureza, Arte & Arquitetura. Sao Paulo: Editora Mercuryo, 1990.PAULI, Evaldo. O Divino Platao. Enciclopedia Simpozio. Universidade Federal de Santa Catarina. Fundaao Cultural Simpozio, 1997.PLATAO. Dilogos vol XI.Timeu.Critias. O 2 Alcibades. Hpias Menor. Traduao: Carlos Alberto Nunes. Belm: Livraria e Editora da Universidade Federal do Para, 1986._______. Timeu e Crinas ou A Atlntida. Traduo, Introduao e Notas de Norberto de Paula Lima. Hemus Editora Limitada_. Timaeus by Plato. Traduao para o ingls de Benjamn Jowett. www.sacred.texts.com.PORTAL DO ASTRNOMO. As Leis de Kepler e a msica das esferas, www.portaldoastronomo.org.



RUTHERFORD, Ward. Pitgoras. Traduao Jos Antonio Ceschin. Sao Paulo: Edit. Mercuryo, 1991.


El texto aborda la biografa de Fernando Pessoa -y la de tres de sus heternimos famosos- en clave astrolgica. Para ello la autora se vali de cartas natales que el propio poeta deline para cada una de sus criaturas, sumadas al momento en que hicieron su aparicin en la vida de Pessoa. Para el lector avezado en el tema astrolgico, esta obra representa una oportunidad de ver cmo funciona su disciplina a lo largo de una vida apasionante. Bienvenidos al universo misterioso de Fernando Pessoa.

Fernando Pessoa. Poesa, heternimos Fernando Pessoa. Poesa, heternimos y Astrologay Astrologa

Pdalo en Libreras especializadas, al 4372-3030,o La Librera del Viejo AbulafiaViejo Abulafia: http://www.gente-de-astrologia.com.ar


LOS CIEN AFORISMOS DE ALANLOS CIEN AFORISMOS DE ALAN LEOLEO

https://www.pasadofuturo.com/astrologia-aforismosalanleo.htm

Los 100 aforismos de Alan Leo contienen, de forma simple y sentenciosa, el fruto de muchos aos de estudio. Estn destinados a ayudar al estudiante a comprender las enseanzas astrolgicas bsicas.

Alan Leo (1860-1917), fue un importante astrlogo britnico. Es considerado uno de los padres de la Astrologa moderna y el defensor de conceptos como el karma y la reencarnacin. Desanimado por la complejidad de la Astrologa y lo inaccesible que era para el estudiante medio, se propuso simplificarla drsticamente, a fin de facilitar su difusin, aprendizaje y prctica, lo que debemos agradecerle todos los que estudiamos esta milenaria disciplina.

1 - Las cuadraturas, denotan oposicin y discordia; los trgonos, paz y armona.

2 - La simbologa astrolgica contiene la historia de la Tierra como planeta.

3 - El Ascendente corresponde a la salida del Sol y sugiere el espritu sujeto a la materia; el Meridiano corresponde al medioda y sugiere equilibrio entre espritu y materia; el Descendente corresponde a la puesta del Sol y sugiere el triunfo del espritu sobre la materia; el Imnum Coeli o Fondo del Cielo es el gran misterio, el centro oculto.

4 - Las Casas Cardinales indican asuntos fsicos relacionados con la vida externa; las Casas Fijas indican asuntos relacionados con sentimientos y emociones, an no maduros, pero que estn madurando; las Casas Mutables indican asuntos latentes en la mente y trados de vidas pasadas.

5 - Las divisiones Cadente, Sucedente y Cardinal representan pensamiento, palabra y accin, o espritu, alma y cuerpo.

6 - Las seis Casas por encima del horizonte (XII, XI, X, IX, VIII, VII) corresponden al lado "vital" del universo, las seis de abajo (VI, V, IV, III, II, I) corresponden a su lado "formal".

7 - Existe una ntima correspondencia entre los Signos y las Casas.

8 - Las Casas se refieren a la materia fsica y etrica, y los Signos a la materia astral.



9 - La influencia de los Signos es mayor que la de las Casas y la primera predominar sobre la segunda.

10 - Las Casas son como recipientes transparentes, cada una con su propia forma; los Signos suministran el contenido de tales recipientes, dando a cada casa una sustancia, color y cualidad especiales.

11 - Las cuatro triplicidades son Fuego, Aire, Agua y Tierra; o Espritu, Espacio, Tiempo y Materia. Las tres cualidades son Cardinal, Fija y Mutable.

12 - Los Signos Cardinales rigen la cabeza y su caracterstica principal es la actividad.

13 - Los Signos Fijos rigen el corazn y la voluntad, y su caracterstica principal es la estabilidad.

14 - Los Signos Mutables rigen las extremidades, pulmones e intestinos y su caracterstica principal es la adaptabilidad.

15 - Los Signos Impares son todos signos positivos, masculinos, diurnos; los Signos Pares son negativos, femeninos, nocturnos.

16 - Los Signos Positivos se refieren al lado de la fuerza o de la vida de las cosas; los Signos Negativos a su lado de la materia o de la forma.

17 - Los Signos de Fuego en su conjunto significan energa, vitalidad y vigor. Aries el iniciador, Leo el organizador, Sagitario el ejecutante.

18 - Los Signos de Agua en su conjunto significan movilidad y sensacin. Cncer el insistente, Escorpio el apasionado, Piscis el emocional y compasivo.

19 - Los Signos de Aire en su conjunto significan expansin y mentalidad. Libra la Mujer, Acuario el Hombre Padre, Gminis el Hijo.

20 - Los Signos de Tierra en su conjunto significan consumacin y acabamiento. Capricornio el idealista prctico, Tauro el concentrador, Virgo el discriminador.

21 - Los planetas en su exaltacin ejercen una influencia ms refinada y ms poderosa que en otras partes.

22 - El Sol es el vehculo a travs del cual se manifiesta el Logos Solar; en el horscopo representa la Individualidad.

23 - La Luna es el vehculo de comunicacin entre el Sol y todo lo que vive; en el horscopo representa la Personalidad.

24 - Marte es el planeta de la fuerza concentrada y del impulso hacia el exterior.

25 - Saturno es el planeta que ata, limita y cristaliza.

26 - Saturno gobierna el Ego personal; Marte las tendencias animales.

27 - Venus y Jpiter son las contrapartes respectivas de Marte y Saturno.

28 - Venus es el planeta cuya fuerza viene desde adentro, a travs de la facultad intuitiva directa del Ego.



29 - Marte es el planeta de la generacin fsica, Venus el planeta de la creacin.

30 - Jpiter es el planeta de la expansin y gobierna el cuerpo "celestial".

31 - Mercurio es el planeta de la adaptacin y representa en cada vida el conocimiento adquirido.

32 - Urano es el planeta que representa al ego plenamente individualizado.

33 - Neptuno se relaciona con la evolucin psquica.

34 - Las Conjunciones representan simblicamente la unin y la sntesis.

35 - Las Oposiciones significan antagonismo, rivalidad y dualidad.

36 - Las Cuadraturas cristalizan, limitan alternativamente y rompen o destruyen.

37 - Los Trgonos representan progreso y armona.

38 - Al examinar los aspectos, prstese atencin a la aproximacin del planeta que se mueve ms rpidamente.

39 - Si el regente acaba de abandonar un aspecto y se acerca a otro, concdase el valor principal a la influencia que se est formando.

40 - Las influencias planetarias son primordialmente de naturaleza supramaterial y no puede expresarse exactamente con palabras.

41 - El Sol representa la Individualidad y corresponde a los Signos Fijos.

42 - La Luna representa la Personalidad y corresponde a los Signos Mutables.

43 - El Ascendente representa el cuerpo fsico y el cerebro y corresponde a los Signos Cardinales.

44 - El Ascendente se mueve ms deprisa y corresponde a la guna Rajsica (cardinal); el Sol se mueve ms despacio y corresponde a la guna Tamsica (fijo); la Luna es intermedia y corresponde a la guna Sttvica (mutable).

45 - Los Signos de Fuego ascendentes denotan buena vitalidad, los Signos de Aire menos vitalidad pero ms mentalidad, los Signos de Agua una tendencia de constitucin dbil, y los Signos de Tierra buena salud general pero no mucha vitalidad.

46 - Los Signos Fijos denotan firmeza de propsito; los Signos Cardinales energa; los Signos Mutables versatilidad.

47 - La expresin del Ascendente es modificada o acentuada considerablemente por los planetas ascendentes.

48 - Sea cual fuere el Signo Ascendente, prstese atencin especial a la casa correspondiente.

49 - Aries, Tauro y Gminis pertenecen a la Trinidad Intelectual; su tnica es el saber y el progreso a travs del intelecto.



50 - Cncer, Leo y Virgo pertenecen a la Trinidad Maternal y su tnica es la emocin y el progreso a travs de los sentimientos morales.

51 - Libra, Escorpio y Sagitario pertenecen a la Trinidad Reproductora y su tnica es el progreso a travs de la facultad de reformar y renovar.

52 - Capricornio, Acuario y Piscis pertenecen a la Trinidad Sirviente y su tnica es el servicio a la Humanidad.

53 - La influencia general de Neptuno ascendente tiende a la inversin de los motivos; la de Urano a la inversin de las ideas.

54 - Saturno ascendente denota limitacin y el lado formal del poder; Jpiter ascendente denota dignidad y la facultad interna en la que la voluntad se ejercita.

55 - Marte ascendente denota una fuerte naturaleza de deseos; Venus ascendente refina y embellece la naturaleza amorosa.

56 - El Sol ascendente refuerza la constitucin y confiere dignidad al aspecto fsico.

57 - La Luna ascendente influye en el temperamento y hace que aparezca ms claramente definida la marca de la herencia.

58 - Mercurio ascendente es muy potente y denota las facultades mentales, pero se ve gravemente afectado por la influencia de los aspectos.

59 - El Planeta Regente es o el Seor del Signo Ascendente o aquel otro planeta que es ms fuerte y ms prominente en el horscopo.

60 - El Sol bien aspectado y bien situado aporta xito en la vida.

61 - Al considerar la cuestin de la salud, tmese en consideracin el Ascendente, la Luna y el Sol.

62 - Si el Sol est afligido, la corriente de la energa vital se ver perturbada; si la Luna, el vehculo que transporta las fuerzas vitales es anormal; si el Ascendente, la salud sufrir conforme a la naturaleza de la afliccin y al Signo ascendente.

63 - El Hyleg es aquel punto del horscopo del que dependen la salud y la vida.

64 - Los Signos Positivos ascendentes tienden a dar vitalidad, los signos negativos no son tan vigorosos.

65 - El Afeta es lo que sostiene la vida, el Anareta lo que la arrebata.

66 - La relacin entre los Signos y las Casas es la de correspondencia o analoga.

67 - Al juzgar las perspectivas financieras de una natividad, estdiese la Casa Segunda en todas sus influencias.

68 - Los Signos Cardinales dan dinero a travs de la fama y el reconocimiento pblico, los Signos Fijos a travs del Gobierno o de la influencia de la autoridad, los Signos Comunes mediante el servicio y medios ordinarios.

69 - La Casa Tercera tiene una influencia definida sobre la mente y se halla analgicamente bajo la regencia de Mercurio.



70 - Al juzgar las cualificaciones mentales considrese las luminarias y Mercurio, as como tambin la Casa Tercera.

71 - La Casa Cuarta se refiere al final de la vida, al ambiente del nativo y al de los padres.

72 - Los signos en las cspides de las Casas Dcima y Cuarta, sus regentes y los aspectos entre ellos, denotarn la actitud de los padres entre s y su influencia sobre el nativo.

73 - Al considerar la cuestin de la influencia de los padres en general, inclyase el Sol y el planeta Saturno con respecto al padre y la Luna y Venus con referencia a la madre.

74 - La Casa Quinta se refiere al placer, sociedad y asuntos sociales, tambin a las emociones y sentimientos.

75 - La Casa Quinta es un ndice de las sensaciones y tendencias, y el Signo que se encuentra en la cspide indica las pasadas experiencias.

76 - Las Casas Primera, Quinta y Novena representan al hombre personal, mostrando su conciencia presente, pasada y futura simblicamente.

77 - La Casa Sexta se relaciona con el Medio Cielo y la Segunda Casa, y se refiere al trabajo, sirvientes, enfermedad y a la condicin fsica del cuerpo.

78 - La Casa Sexta indica las tendencias psquicas del nativo y es la Casa de la magia fenomenal o ceremonial.

79 - La Casa Sptima es el complemento de la primera, y representa la unificacin de todo lo que est separado o aislado en el Ascendente.

80 - La Casa Sptima significa la transmutacin de las pasiones en amor, el cambio de inteligencia por sabidura y la perfecta individualizacin del yo consciente.

81 - Cualquier planeta en la Sptima Casa describe al compaero y da la historia de cualquier unin.

82 - Desde un punto de vista ms elevado, la Casa Sptima puede considerarse como la casa de la Individualidad en contraste con la Personalidad; constituyendo la combinacin de estas dos el verdadero matrimonio.

83 - Si la Casa Sptima y su regente no ofrecen un juicio claro en un horscopo masculino, obsrvese la aproximacin de la Luna, y en un horscopo femenino, el Sol.

84 - En las descripciones del cnyuge, jzguese segn el planeta que ocupa la Sptima y el Signo en la cspide; si no hay ningn planeta en la Sptima, jzguese entonces por el Seor del Signo de la cspide y el Signo ocupado por dicho planeta.

85 - La Casa Octava es la Casa de la muerte y de todos los asuntos relacionados con ella, y tambin guarda relacin con algunas formas de mediumnidad y ocultismo.



86 - En todas las cuestiones de la muerte, debe considerarse minuciosamente el Signo que se encuentra en la cspide de la Casa Octava y los Signos que contienen la mayora de los planetas.

87 - La Casa Novena es la Casa de la filosofa, de la mente superior; la Casa de la mente subjetiva y abstracta en oposicin a la mente cerebral objetiva y concreta.

88 - La Casa Novena denota aquello que habr de constituir la revelacin de lo que es posible en el futuro.

89 - Todos los planetas en la Casa Novena tienen una vibracin ms alta que cuando se encuentran en cualquier otra casa.

90 - La Casa Novena denota todo lo inexpresado, el motivo que hay detrs del acto, el pensamiento detrs de la palabra.

91 - La Casa Dcima es la casa del honor, reputacin u ocupacin y representa la condicin pblica o posicin social del nativo.

92 - Al considerar una vocacin, obsrvese cuidadosamente a Saturno, regente de Capricornio, la Casa Dcima natural en el orden de los signos.

93 - La Casa Undcima es la de los amigos, conocidos, esperanzas, deseos y aspiraciones.

94 - La Casa Duodcima es la casa de la tristeza, la Casa de la autodesintegracin.

95 - Las luminarias que se acercan a aspectos, afectan a la polaridad ms que a los aspectos de los que se estn separando.

96 - Si el Sol est por encima de la Luna, ascendiendo o descendiendo, el carcter Individual ser ms fuerte que el Personal.

97 - Si ambas luminarias estn por debajo de la Tierra, la combinacin de ellas es ms potente y la polaridad mas complicada.

98 - Si ambas luminarias estn por encima de la Tierra, el Sol obtiene el mayor poder; si ambos estn debajo, la Luna.

99 - La polaridad es siempre ms fuerte cuando las luminarias ascienden y ms dbil cuando descienden.

100 - Si una de las dos luminarias se acerca a los benficos, la Individualidad es ms fuerte si se trata del Sol, y la Personalidad si se trata de la Luna.



MERCURIO INFORMAMERCURIO INFORMAMas all de uno mismo. Reflexiones sobre la nueva Astrologa. Alejandro C. Luna. Editorial Trenkehu, Bs. As., Argentina, 2014. 228 pginas.

El texto recopila los artculos astrolgicos publicados en la revista Uno Mismo entre los aos 2010 y 2014. A lo largo de esta obra el autor plantea un dilogo activo con el lector en un rico intercambio donde, adems de cuestionar la validez de la misma Astrologa, intenta crear un espacio de reflexin acerca del yo, el destino, el Si Mismo, la carta natal y fundamentalmente respecto a la evolucin de la consciencia.

Se trata tambin de una actualizacin de la Astrologa desde un enfoque transdisciplinario, creando lazos con la fsica cuntica, la psicologa transpersonal, el cine, los arquetipos, la psicosntesis, el enfoque integral de Ken Wilber, la Dinmica Espiral, la psicologa junguiana, la espiritualidad, etc.

Una obra que brinda un panorama de la situacin actual de la antigua Astrologa desde una nueva percepcin, una Astrologa para los inicios de la era de Acuario. Indice: El alma de la colmena. El modelo evolutivo. Cinco intuiciones. Arquetipos en pantalla grande. Donde estoy yo en la carta natal?. Con un pie en la era de Acuario. De la creencia a la experiencia sostenida. El destino y la carta natal. Dinmica espiral y Astrologa. Ms all del s mismo. El hilo mgico. Entrenamiento integral. Espirales evolutivas. De la fsica cuntica a la carta natal. Holones y evolucin. De la ignorancia a la plenitud. La cinta de Moebius. La falacia pre/trans en Astrologia. Resonancia en accin. La red de Indra. Luz de luna. Magia, lgica y misticismo. Cartografiando realidades. Acuario y la inteligencia colectiva. Matrices, genes y memes. Un misterio evidente. Neuronas y galaxias. Para que la carta natal? La cada. Posedos. Renovando arquetipos. Qu hacer si el fin del mundo del mundo no llega. Significado y evolucin. Ritmos y sincronicidades. La funcin transpersonal de Plutn. La funcin transpersonal de Neptuno. La funcin transpersonal de Urano. Ser cuerpo mente. Uniendo los puntos. El reencuentro de Urano y Gea. Verdaderamente humanos. Zodiaco, el sendero de los animales.

El autor es astrlogo egresado de Casa XI. Formado en Psicosntesis en el Instituto Conciencia sin Barreras. Consultor y profesor de Astrologa. Autor del e-book Urania y Sofa, del mazo de cartas astrolgicas Visual Zodiac (junto con el artista Nil Orange) y de artculos en medios nacionales e internacionales. Editor del sitio Astrotranspersonal.com.ar y director de la escuela Astro-sntesis. Ha sido orador en diversos congresos tanto nacionales como internacionales. Investiga las articulaciones posibles entre la Astrologa, el esoterismo, la psicologa y la ciencia, como as tambin integrando los modelos tericos de Ken Wilber y Roberto Assagioli, entre otros.



Fundamentalmente enfoca la Astrologa desde un lugar transpersonal, humanista y "vibratorio".

32 Congreso Ibrico de Astrologa. Se realizar en Barcelona, los das 12,13 y 14 de junio de 2015.Para mayor informacin: www.congresoastrologia.com



QU SABEMOS DE LOSQU SABEMOS DE LOS COMIENZOS DE LA TRADUCCINCOMIENZOS DE LA TRADUCCIN CIENTFICA EN LA PENNSULA ?CIENTFICA EN LA PENNSULA ?

Jos Chabs. Barcelona (Espaa)[email protected]

http://astrologiajoseplluesma.blogspot.com.ar

Qu sabemos de los comienzos de la traduccin cientfica en la Pennsula?Todos, o casi todos, coinciden en decir que para conocer una disciplina hay que conocer su historia. Hoy por hoy slo se tienen conocimientos parciales sobre el trabajo de traduccin cientfica en la Pennsula a partir del siglo X, pero no se dispone de una visin de conjunto en la que insertarlos: la historia de la traduccin cientfica en Espaa no se ha escrito todava. Algunos aspectos parciales han concentrado hasta el momento casi toda la atencin de los estudiosos; si se limita el estudio a esos aspectos, la imagen que se proyectar de la traduccin cientfica perder



indefectiblemente riqueza y no reflejar toda su complejidad. Es un riesgo que hay que evitar.

Nos falta, por tanto, una historia equilibrada de la traduccin de los textos cientficos. Y no es porque en Espaa haya sido escasa la actividad de traduccin, antes al contrario. Incluso ha habido pocas en que la mayora de las traducciones cientficas de Occidente se hacan en nuestro territorio. Para elaborar esa visin global de la que hoy carecemos forzosamente habr que recurrir a la historia de la ciencia.

Aqu vamos a restringirnos a uno de los perodos ms fecundos de la actividad cientfica en Espaa, los siglos XI, XII y XIII. Es una poca en la que la ciencia se escribe fundamentalmente en rabe, y en mucha menor medida en hebreo y en latn. En la Pennsula, por tanto, las traducciones se hacen a partir del rabe, primero hacia el latn y, en la segunda mitad del siglo XIII, empiezan a hacerse tambin hacia el castellano. Es claro que la traduccin de obras cientficas del rabe slo tiene sentido en los territorios cristianos, que estn por lo dems muy bien situados estratgicamente, muy cerca de al-Andalus, es decir, cerca de donde se est produciendo la ciencia y cerca de donde se dispone de las obras de la rica tradicin cientfica rabe. En los territorios cristianos, prcticamente toda la actividad cientfica se reduce a la traduccin y casi no hay produccin propia. El panorama en al-Andalus es muy otro: el nivel de produccin cientfica es muy elevado, especialmente en medicina y ciencias exactas; la comunidad cientfica cuenta con sus propias obras, escritas en su lengua, y con las adaptaciones o traducciones al rabe de los tratados cientficos clsicos. Esas traducciones ya haban sido hechas unos siglos antes en el Oriente Prximo, sobre todo a finales del siglo VIII y a lo largo del siglo IX, bajo el patronazgo de los gobernantes de Bagdad, en especial del califa al-Mamun.

Toda historia de esos primeros siglos de la traduccin cientfica en la Pennsula deber tener en cuenta varios momentos y varios colectivos.

A mediados del siglo X comienzan a traducirse obras del rabe al latn en los cenobios fronterizos. Diversos monasterios benedictinos, a los que acudieron monjes mozrabes, desempean un papel importante como vehculos de transmisin cultural de la ciencia rabe hacia el Occidente cristiano. En el siglo XII tiene lugar en la Pennsula un verdadero movimiento de traducciones cientficas. La actividad de traduccin se concentra en unos pocos focos, en torno a sabios o al amparo de mecenas. As, Hugo de Santalla trabaja en Tarazona y Platn de Tivoli en Barcelona. Pero es en Toledo donde se forma un grupo importante de traductores, bastantes de ellos procedentes de otros pases. No parece que estuviesen agrupados en una escuela de traductores, en el sentido de docencia organizada, sino que nicamente mantenan lazos de dependencia personal con un mecenas, Don Raimundo, arzobispo de Toledo (1126-1152). De ese grupo destacan los nombres de



Juan de Sevilla, Domingo Gonzlez y, sobre todo, Gerardo de Cremona, traductor al latn de las versiones rabes de obras de Euclides, Arqumedes, Menelao, Ptolomeo, entre otras. A ellos corresponde el inmenso mrito de haber transmitido a Occidente lo esencial de la ciencia clsica, y tambin de la ciencia oriental, varios siglos antes de que se tradujeran directamente del griego al latn los tratados clsicos.

La traduccin arabigohebraica cuenta en la Pennsula con profesionales de gran renombre, como Abraham Ibn Ezra (s. XII) o los miembros de familia Tibbon, constituida por cuatro generaciones de traductores cientficos, afincados en Catalua y el Languedoc, y cuyo personaje ms conocido, como traductor y astrnomo, es Jacob ben Mahir (finales del s. XIII).

En torno a Alfonso X, que rein en Castilla de 1252 a 1284, se cre en Toledo un grupo de traductores que escribieron, adaptaron o tradujeron obras literarias, jurdicas, histricas, religiosas y cientficas para el rey. Todas las obras cientficas alfonses versan sobre astronoma y astrologa (disciplinas claramente diferenciadas hoy, pero no entonces). De los quince colaboradores del rey Sabio que participaron en esas obras, cinco fueron judos y diez no judos. Los traductores judos fueron los ms activos, y entre ellos Yehuda ben Mo e Ishaq ben Sid, pues intervinieron en la redaccin o la traduccin de 23 obras. Los traductores no judos Juan d'Aspa, Egidio de Tebaldis y Bernardo el arbigo, entre otros, se ocuparon de otras 12 obras cientficas. La actividad de estos traductores, revisores, retraductores y autores al servicio de Alfonso X no tuvo tanta trascendencia, desde el punto de vista de la transmisin de saberes cientficos, como la de sus colegas toledanos un siglo antes. Su aportacin principal consiste en la elaboracin de un lenguaje astronmico en castellano a partir del rabe, cuyos ecos siguen presentes en la actualidad.

http://ec.europa.eu/translation/bulletins/puntoycoma/36/pyc365.htm


Un libro imprescindible, que aporta algunas reflexiones sobre una de las reas que ms quiebres ha padecido en los ltimos tiempos: el campo laboral. Reflexiones que surgieron del encuentro cotidiano con las inquietudes del consultantes y que se espera, sean tiles para enriquecer su actividad astrolgica.Las situaciones inditas conforman una extensa lista y la tarea que se nos impone a los astrlogos de hoy es adaptar nuestro saber al ritmo vertiginoso del siglo XXI..

Astrologa, Trabajo y CrisisAstrologa, Trabajo y CrisisGua para la orientacin vocacionalGua para la orientacin vocacional

Pdalo en Libreras especializadas, al 4372-3030,o la Librera del Viejo AbulafiaViejo Abulafia: http://www.gente-de-astrologia.com.ar


CONFERENCIA DE JAMES HILLMANCONFERENCIA DE JAMES HILLMAN (1997)(1997)

Traduccin de Enrique Eskenaziwww.tarotchile.cl/

James Hillman (1926/2011) fue un psiclogo y analista junguiano estadounidense, representante principal de la escuela arquetipal en psicologa analtica. Estudi en el C.G. Jung-Institut Zrich y desarroll la psicologa arquetipal. Escribi: El pensamiento del corazn, El Codigo del Alma, Un terrible amor por la guerra.

El cielo retiene dentro de su esfera la mitad de todos los cuerpos y los males

Paracelso

Seguramente reconoceris que el que haya venido aqu es muestra de considerable audacia. Osada, incluso. Pues ste es vuestro campo de conocimiento, no el mo; vuestra profesin, no la ma; y vuestra responsabilidad.

El que no tenga yo responsabilidad respecto a esta antiguo tema y a esta profesin durante tanto tiempo apreciada -y difamada- me permite ser irresponsable en lo que pienso y digo esta maana. Slo en virtud de tal irresponsabilidad puedo sentirme lo suficientemente libre como para decir algo que pueda ser til para vosotros.

A diferencia de vuestro compromiso para con vuestro trabajo y con la defensa de vuestro campo, mi compromiso slo es con un constante inters, incluso un amor, a la astrologa como fenmeno arquetipal, esto es: extendido, intemporal, emocionalmente potente, profundamente resonador y generativamente inventivo y tambin poderosamente peligroso. Por ello, a causa de estas cualidades, la palabra arquetipal es adecuada para el mismo campo.

Si es arquetipal, la astrologa est aqu para quedarse; porque no se ir, debe ser arquetipal. Y no se ir. El historiador de la cultura Theodore Zeldin escribe: En 1975 un grupo de 192 eminentes cientficos, incluyendo diecinueve premios Nobel, dirigidas por un profesor de Harvard, publicaron un manifiesto declarando que les preocupaba la creciente aceptacin de la astrologa en varias partes del mundo Uno de los firmantes, un profesor de astronoma en la UCLA, se quej de que un tercio de los estudiantes de sus clases profesaban creencia en la astrologa, y tambin su esposa. Zeldin informa adems de que un tercio de la poblacin en Francia e



Inglaterra admiten creer en la astrologa, y entre los franceses (donde la lucidez es una virtud nacional) el 90 por ciento conoce su signo zodiacal (Una Historia Intima de la Humanidad, Harper Collins, 1984, p. 339)

Acerca de su peligro, tendremos ms que decir ms adelante; su poder emocionalmente seductor me sorprendi hace unos 45 aos, en Zurich, cuando me hicieron mi primer tema, aunque ya haba aprendido los elementos simblicos y la grafa antes de eso. Fue tal la conviccin que vino junto a esa primera lectura que continu estudiando astrologa. Este inters permanente, esta fascinacin, este amor no me ha abandonado nunca. A la vez, tengo que aclararos que ni creo en ella, ni la practico, ni entiendo cmo funciona, aun cuando la astrologa forma una de mis lenguajes fundamentales para la reflexin psicolgica.

Sencillamente, para m la astrologa devuelve los acontecimientos a los Dioses. Depende de imgenes tomadas de los cielos. Invoca un sentimiento politesta, mtico, potico, metafrico de aquello que es inevitablemente real. Esto es lo que hace a la astrologa eficaz como un campo, un lenguaje, un modo de pensar. Es el portador para la mentalidad popular de la gran tradicin que sostiene que todos habitamos en un cosmos inteligible, proporcionando as a las preguntas humanas respuestas ms que humanas. Nos obliga a imaginar y a pensar en trminos psicolgicamente complejos. Es politesta y por lo tanto va en contra de la mentalidad dominante de la historia de Occidente.

Tomo prestada la palabra eficaz de Paracelso, que dijo, se vuelve mdico slo aqul que conoce aquello que es innominable, invisible e inmaterial, y sin embargo eficaz. Y tomo prestada la idea de las antiguas lecturas neoplatnicas de las posiciones e influencias planetarias. Los intrpretes neoplatnicos en el Renacimiento y an antes encontraron una lectura beneficiosa, eficaz, an de los planetas ms difamados, como Saturno, y de las constelaciones menos auspiciosas. Todos los Dioses desbordan beneficios; era tarea humana, la tarea del intrprete, descubrir estos beneficios. De otro modo nos perdemos las bendiciones y las confundimos con maldiciones.

En mis propios decursos, encontr los beneficios de Saturno un da en Roma hace unos aos. Estaba contemplando el viejo templo de Saturno, cerrado a los visitantes por las autoridades. Cerrado, como dicen en Roma, por restauracin. La restauracin podra durar ya quinientos aos, y podra continuar otros quinientos aos ms; pues uno de los modos en que la Iglesia puede impedir que el pasado politesta tia nuestra religin actual es mantener cercados los antiguos lugares. As que



muchos de los viejos templos estn en construccin, en restauracin, o son considerados arquitectnicamente peligrosos.

Como sea, se me ocurri al estar ah que las maldiciones que Saturno me haba infligido: frialdad y alejamiento de la intimidad humana, obsesin con ideas, oscuros humores depresivos que paralizaban la accin, preocupaciones sobre situaciones concretas que yo intentaba poner en orden, un manejo torpe de la novedad, frivolidad y artificialidad electrnica, cargas del deber, periodos de rigidez y aspereza hacia m mismo y hacia los dems- todas estas maldiciones haban sido tomadas literalmente.

No haba captado su eficacia: cmo me protegan, me mantenan en el camino, fiel al llamado, permitindome pensar y aceptar la soledad, y cmo haban permitido que el orden fuera derrotado en nombre de la ausencia y el vaco. En otras palabras, las maldiciones que atribua a Saturno eran bendiciones. Adems, aquel da en Roma me di cuenta de que somos nosotros quienes hacemos de Saturno un planeta maligno, negativo, interpretando las bendiciones que otorga slo en un sentido rgidamente opresivo, como pesadas cargas en lugar de dones de peso. Perdemos una mitad: la mitad celestial del mal. Puesto que no es el Dios quien nos maldice, somos nosotros quienes maldecimos al Dios mal interpretando su eficacia.

La astrologa neoplatnica encontr la razn de nuestra tozudez, nuestro sentimiento de victimizacin, por ejemplo por Saturno, en el hecho de que todas las almas estn atrapadas en la estupidez del naturalismo, literalismo, concretismo. Tomamos literalmente nuestros sufrimientos: aprehendemos las cosas slo tal como aparecen naturalmente; insistimos en que lo real es concreto. Estos errores de entendimiento se deben a que nuestras almas estn encerradas en hyle, la palabra griega para el material rgido. De modo que el viaje del alma, de acuerdo con la alquimia de Michael Meier, comienza en Saturno y concluye en Saturno, esto es: comienza en la opresin y la victimizacin a la vez que, escondidas en la rigidez de nuestra mente, estn las bendiciones de las metas de Saturno. Su verdadero propsito, escriban las autoridades, estaba dirigido a la iluminacin y gua del intelecto y a conducirlo al conocimiento de lo que es correcto y til.

Debis recordar aqu que eficaz no slo significa positivo. Los dones de Saturno todava pueden sentirse como opresivos y limitadores. Un don no es slo lo que literalmente parece ser: tenemos que disfrazarlo bellamente para esconder que cada don es tambin potencialmente txico; cada don (gift) es tambin un Veneno (Gift), la expresin alemana para veneno. En efecto, en algunas culturas, como la China, un don puede usarse como una maldicin subliminal; y, a menos que rpidamente se lo repare con un contra-don al benefactor, uno permanece cautivo, esto es, obligado, atado, constreido, limitado por ese don. Por ello es que cuando ms uno tarde en escribir un agradecimiento, ms se vuelve una carga: un don desprovisto de su envoltura revela su maldicin latente.



La lectura neoplatnica de un tema devuelve todas las cosas a los Dioses, pero no hace las cosas ingenuamente positivas. El modo eficaz de leer tan slo rehsa a dividir las cosas simplemente en negativas y positivas, afortunadas y desafortunadas. Una cuadratura puede volverse un Beethoven, un trgono un Forrest Gump.

As, la lectura eficaz de la otra mitad invisible que afecta a nuestros cuerpos y nuestros males, como dice Paracelso, no significa una lectura feliz de planetas felices en posiciones felices. Jpiter en Leo en la casa dos, o diez, no indica meramente optimismo, magnanimidad, calidez expansiva; sabemos que tambin invita a la exageracin, al derroche, a entusiasmo indiscriminado. Las costas lejanas a las que Jpiter empuja pueden ser venturosas y a la vez infladas y superficiales. En cada situacin debemos tomar en cuenta el sitio cultural de la persona a quien uno le habla, el portador del tema.

Quisiera acentuar esta idea de sitio. Un humano est situado; una carta est situada. El momento natal es siempre en algn sitio. Ese sitio no es slo un mero conjunto de coordenadas geogrficas, longitud y latitud. El sitio es tambin una cultura, una naturaleza, una historia, una poltica, una geografa, un lenguaje, un estilo, un carcter. El sitio no es un accidente de nacimiento, sino aquel sitio nico y particular el cual, deca el neoplatnico Plotino, el alma escoge como una de sus cuatro elecciones bsicas: los padres, el cuerpo, las circunstancias y lugar de entrada en este mundo (Ver mi Cdigo del Alma). Dnde est uno y dnde uno entre en el mundo parece importarle al alma. Y este dnde rige distintivamente sobre todas las generalidades y comunidades que los astrlogos emplean al leer un tema.

Un residente de Bay Area en la proximidad de Tiburn o Larkspur puede responder casi sin notar a un Buenos das. Una pequea inclinacin de cabeza, un pequea sonrisa de acuerdo a una convencin familiar. En Maine, Buenos das puede originar como respuesta un Ya tengo otros planes. En Manhattan, mtase en sus asuntos y en Alabama Oh, gracias, muchas gracias, y que tambin Ud. tenga un buen da, y vuelva a pasarse por aqu.

Acento estas diferencias en maneras de hablar porque manifiestan diferencias en situaciones. No es que ahora me interese destacar si estas diferentes localidades -Bay Area, Maine, Manhattan, Alabama- reflejan rasgos astrales pertenecientes a este o aqul signo zodiacal, sino que me interesa destacar la importancia del sitio en la lectura de una carta, puesto que cada sitio tiene su propio humor y su tiempo, su atmsfera y su botnica, su historia y su cultura.

Los diagnsticos psiquitricos consideran el sitio como parte del cuadro clnico. Recuerdo a uno de mis profesores psiquitricos en Suiza que adverta acerca de los diagnsticos de depresiones manacas. Asegrese de saber de dnde viene el



paciente, ya que lo que puede parecer depresin puede ser culturalmente normal en los valles cristianos y rocas escarpadas de la Suiza interior, y lo que puede parecer mana puede ser la conducta habitual en un pueblo bvaro.

Nuestro planeta tambin es un planeta y necesita nuestro reconocimiento csmico. La suavidad polinesia y el rigor espartano son ms que leyendas; son determinantes. La cvicamente cohesiva Minneapolis y la decadentemente deliciosa Nueva Orleans son sitios planetarios que comportan tanto en el carcter y el destino como los sitios de los planetas en un tema.

Al comienzo dije que, puesto que la astrologa es arquetipal, es poderosamente atractiva y por lo mismo peligrosa. Quiero ahora extenderme sobre este peligro. Es el peligro con el que he estado luchando durante muchos aos de muchas maneras en mis escritos: el literalismo. Especficamente para nosotros hoy, el literalismo astrolgico.

Dos tipos de literalismo afligen a la astrologa, de modo que la astrologa, como el psicoanlisis, puede correr el riesgo de volverse una fe fundamentalista. El primero tiene que ver con el tiempo. Llammosle el Literalismo Temporal. Se ve reforzado por clculos, tablas, exactitudes, minutos y segundos. No cuestiona suficientemente la idea de tiempo, sino que est cogido por el tiempo. Creo que es posible continuar haciendo estos clculos matemticos, pero considerarlos menos como rigurosas medidas de tiempo y ms como un servicio ritual, un conjuro tergico necesario para constelar la visin psquica, intensidad de foco, elaborar un procedimiento distanciador as como en otras artes, la medicina por ejemplo, se deben usar medidas cuidadosas y dosis exactas, y as como las curas nativas en culturas menos tcnicas usan cuidadosa precisin en sus prescripciones, o como los cocineros realizan su arte en trminos de tiempo y medidas. Pero todo esto es un ritual para enfocar la intuicin y refinar las propias habilidades, ms que para presentar los hechos verdaderos de lo que efectivamente est ocurriendo, u ocurrir o ha ocurrido ya, en una incognoscible esfera invisible, aquella otra mitad ms all de este mundo.

Dejando de lado el apego literalista al tiempo podemos tambin liberarnos de otro poder peligrosamente atractivo en astrologa: la tentacin de predecir. El segundo literalismo es la creencia en la influencia causal de los cuerpos astrales o los planetas reales. El literalismo astrolgico supone que podemos conocer esa otra mitad que reside en el Cielo y, por medio de clculos matemticos basados en la comprensin literal del tiempo, atribuir causalidad a estos poderes celestiales.

Creo que debemos deconstruir estos literalismos. Creo que la tarea que llama al astrlogo es pensar ms poticamente y metafricamente, y menos causalmente, como si la astrologa tuviera que obedecer a la ciencia newtoniana. No creo que necesitemos atribuir propiedades causales a los planetas o sus constelaciones, y por



lo mismo no necesitamos saber cmo funciona la astrologa. Ms bien podemos dejar que la carta opere como un mantra que proporciona revelaciones, una mirada en el ms all, un mapa de lo no visto, un compendio de poderes invisibles operando en conjunto. Incluso podemos hablar de estos poderes invisibles como dioses que gobiernan, como fuerzas que influencian. Sin pretender conocer dnde residen efectivamente, cmo operan, lo que intentan.

Sugerira un modo ms fenomenolgico de leer y menos metafsico o teolgico. La fenomenologa trata con las cosas tal como aparecen. Deja de lado las especulaciones sobre orgenes, causas, explicaciones, teoras. As es como trabajo en psicologa. No tengo teora de los sueos: cmo vienen, qu buscan, dnde se originan. Tampoco tengo una teora de los sntomas, de las neurosis, de la locura o de la salud mental. No conozco las fuentes primarias de ninguna de las cosas que me encuentro en la prctica. No s qu ha provocado los acontecimientos sobre los que se me informa, y no me preocupo en absoluto por sus orgenes. No atribuyo el poder literal de cuasalidad a un recuerdo paterno de abuso brutal o un recuerdo materno de descuidada crueldad. En cambio, contemplo los fenmenos. Estudio lo que se presenta: el problema, las imgenes, los dolores, los sorprendentes giros del destino -aspirando a salvar los fenmenos de las explicaciones para poder permanecer enfocado en sus rostros-. Tomo cada cosa por lo que muestra. He asimilado entre mis hbitos mentales lo que la filosofa, tanto oriental como occidental, han enseado: la causalidad en este simple sentido es ilusoria. Ms an: deviene un mtodo para huir de la confrontacin con los fenmenos que estn justo enfrente de la propia nariz.

Esto es lo que quise decir antes al afirmar que no entiendo la astrologa. Adems, no necesito ni quiero entenderla. Ya es suficiente para m ese compromiso con sus proveedoras y eficaces revelaciones.

De modo que una cuadratura Jpiter-Saturno en signos fijos, tal como yo tengo, una Luna o un Plutn aislados con slo dbiles contactos o ninguno, no son causas de problemas o errores, miserias o luchas. Estas posiciones en un tema natal proporcionan imgenes a ser ponderadas por su riqueza simblica y amplificaciones mticas. Proveen datos arquetipales, dones divinos.

Aqu intento mostrar el paralelismo entre un enfoque fenomenolgico, arquetipal, en la prctica de la psicologa y en la prctica de la astrologa. Tambin intento distinguir entre lo prctico y lo emprico. La astrologa es un arte prctico, pero no una ciencia emprica. Algunos, como Gauquelin, pueden tratar de establecer una base emprica para ella, juntando pruebas estadsticas de datos reunidos. Yo no veo la necesidad de esto. Es que acaso establecemos el valor prctico y la veracidad del arte por medio de datos estadsticos? Nuestras pruebas tanto en la terapia como en la astrologa no son de tipo cientfico sino de tipo humano: ancdota, testimonio, revelacin.



Quizs no debiera plantear esta distincin con tanto rigor, esta distincin entre prctico y emprico. Emprico original y tradicionalmente no significaba establecer una idea por medio del mtodo cientfico. Ms bien, emprico se refera originalmente a los mdicos, sanadores y practicantes que se guiaban y basaban sus prcticas en la observacin y en la experiencia ms que en la teora. Lo que digo es que no tenemos que tener una teora explicativa para las experiencias psicolgicas y/o astrolgicas a fin de practicar nuestras profesiones. Slo necesitamos dedicarnos a los fenmenos; necesitamos estudiar, cuidar, vigilar, escuchar, a fin de ser practicantes responsables de nuestros artes.

He de confesar que tomo ms bien literalmente las dos primeras palabras en la frase de Paracelso; El Cielo retiene (dentro de su esfera). Y no arguyo con l acerca de las palabras mitad y todo (mitad de todos los cuerpos y los males). No creo que haya querido decir mitad matemticamente, como cincuenta por ciento. Creo que quiso decir que uno slo consigue una media-verdad, una cura parcial, un entendimiento defectuoso si uno descuida el Cielo. Respecto a la enorme generalizacin de esa palabra todo, tengo que conceder que o bien el cosmos entero lleva los efectos del Cielo, o uno debe decidir qu partes no estn bajo su gobierno, qu acontecimientos y cuerpos pueden declararse independientes de los efectos de los Dioses.

Pero en aquellas primeras palabras El Cielo retiene he ah el misterio! Cielo, la palabra, entr en el ingls a travs del sajn, el antiguo alemn gtico. El origen ltimo de la palabra cielo(heaven), dice el diccionario, es desconocido. Se lo define como ms all del firmamento (sky); mientras que cielos, en plural, se usa para regiones, esferas, jerarquas bajo cuya ley vivimos, ms all y desconocidas, y a las cuales cada vida e incluso cada momento de la vida aspira como si fuera su fin o su meta. El Cielo connota lo divino, como cuando al probar una tarta borracha de chocolate amargo exclamamos celestial, divino. Y sptimo cielo es el mayor jbilo, y cielos arriba invoca a los Dioses y Diosas.

Ahora atendamos a lo siguiente. Paracelso dice que este cielo que rige la mitad de nuestras vidas no est slo ms all del firmamento y es invisible, externo a la esfera humana, sino que, horribile dictu, retiene, contiene, preserva, guarda, no deja ir, no se abre a esa mitad de nuestras vidas, nuestros cuerpos y nuestros males, as como a todos los cuerpos y males en la tierra.

Est Paracelso bajo la influencia de la vieja ecuacin de Dios y Saturno, un dios controlador, retentivo anal, un Dios ausente que contiene la mitad del destino en sus manos y que sin embargo es un Dios que no puede ser visto, mostrar su rostro, manifestarse?



Creo que esa visin del Cielo puede haber prevalecido en tiempos de Paracelso, tambin antes y despus, pero no creo que fuera su visin, ni que l fuera ese tipo de criatura de Saturno.

Prefiero pensar que Paracelso insiste sobre la mitad invisible de nuestras vidas, la mitad astrolgica retenida por esferas ms all de la naturaleza, de modo que esta mitad no es aprehensible directamente por ningn mtodo de la ciencia natural, ningn tipo de comprensin mundana o naturalista. Intentamos llegar a los cielos mediante las especulaciones de la teologa, el misticismo, la metafsica, la poesa, la matemtica, pero el cielo se contiene, se retiene y se resiste, y as su esfera permanece hermtica, secreta.

De modo que nosotros, humanos, conscientes de que vivimos slo de medias-verdades y vemos slo a travs de un cristal oscuro, nos volvemos a la astrologa para encontrar el camino de regreso al cielo, a la fuente invisible que afecta a nuestros cuerpos y a nuestros males. En trminos de Jung, estamos en busca del Dios en la enfermedad, no meramente esta o aquella enfermedad (disease) literalmente clasificada, sino en la inquietud (dis-ease) llamada tambin vida. El astrlogo revierte los acontecimientos a sus causas en los cielos, sacando as a la persona fuera de las circunstancias y orientndola hacia el cielo. De aqu el sentimiento revelatorio cuando se hace una interpretacin conmovedora; la puerta del cielo imprevistamente se abre, se hace la conexin entre las dos mitades, esta vida aqu y esa esfera all. La astrologa es entonces un arte divino, pero no el arte de la adivinacin, pues eso es nuevamente literalismo: un literalismo de la prediccin y del tiempo.

La tarea del astrlogo, entonces, como la del psiclogo arquetipal, es menos traer los dones del Dios a mi vida, que el dar vida a los Dioses. Cada visin, cada patologa, cada trozo de buena suerte que conecto a los planetas mantiene vivos a los Dioses. A sto los cristianos podran llamarlo un movimiento redentor. Prefiero ver esta tarea de devolver los acontecimientos a los celestes invisibles, un proceso de epistroph siguiendo la idea del Neoplatonismo, o tawil en el misticismo persa. Esta visin ve el mundo entero lleno de un innato deseo de retornar a su fuente imaginal, su esencia arquetipal, su otra mitad en el Cielo.

As, por ejemplo, aqu estoy, digamos un ascendente Gminis, en todos mis males y en mi cuerpo: las vacilaciones del carcter, la atencin distrada y dividida, la duplicidad, la divertida tortura de ver ambos lados y luchar con las oposiciones, nervioso, encantador e impaciente, a la vez la lengua presta del engao que formula la vida, como un periodista o un predicador, antes de vivirla, la intensa sensibilidad, los pequeos acuerdos, las mltiples conexiones del prestidigitador, del charlatn y del murmurador, el agotamiento que llega con la prisa y la excesiva conectividad, todas estas caractersticas pertenecen a mi carcter, esto es, el depsito celestial en mi alma, un tesoro de mercurio tornasolado, un mineral metlico o un cuerpo



planetario al cual mi vida, tal como la vivo, puede pulir y volver lustroso y til. Este pulir de los males de lo dado es lo que los escritores como Blake y Keats y Lawrence han llamado almificar (soul-making). El almificar (soul-making) devuelve a los Dioses lo que me dieron y que traje conmigo al llegar, devolvindolo ms refinado y sofisticado como dicen los alquimistas.

Cada vez que una consulta astrolgica puede devolver una caracterstica a su divino personaje (character), pulir un problema para que brille en una luz diferente, revelar al Dios en la enfermedad, dejar al cliente ver claramente por un momento aquella otra mitad celestial, el astrlogo est realizando una epistroph (conversin), devolviendo una mescolanza en lo humano a un mito en los Dioses.

Para que no concluyis que mi nfasis en los dioses, lo divino, los cielos, los invisibles, es elevado e intelectual, recordemos que los planetas residen primariamente dentro de constelaciones de animales. Los planetas estn principalmente guardados en las cuadras entre bestias. Por qu este ms all del Cielo est diseado por un mapa de formas animales, y estas formas son tan terrenales: no halcones y bhos y palomas, o ruiseores o guilas, sino serpientes y escorpiones, peces y cangrejos, carneros y cabras, caballos y toros? A qu viene esta preponderancia de animales?

Para nuestras mentes vulgares, arrogantes, recientes, occidentales, animal significa bruto, bestia, tonto, ms bajo en la escala evolutiva. Sin embargo en la mayora del mundo antes de nuestros tiempos y an hoy mismo en muchos sitios del mundo, los animales son los verdaderos maestros de la humanidad, espritus guardianes y constantes compaeros del alma. Algunas terapias intentan despertar esta conexin arcaica con el animal, pero la astrologa ya lo hace para nosotros- as de simple! Nacido en el ao del Tigre Uau! Sol en el Cangrejo- oooohhh! Marte en el Toro y Venus en Escorpio: vigilad!!!

Estas formas animales que permean la imaginacin astrolgica presentan el animal como un contenedor csmico de poderes invisibles. Los animales como formas de lo divino, que es exactamente lo que los antiguos egipcios sentan y que tambin es verdad para culturas desde el Japn Shintoista hasta la Polinesia, gran parte de frica hasta los nativos de las regiones circumpolares. La astronoma contina trabajando con espacios con forma de animales configurados por lneas entre los puntos brillantes de las estrellas. Conectad los puntos y veris lo invisible volverse un toro, un len, un par de peces.

La astrologa trabaja matemticamente, y uno normalmente supondra que los nmeros y los animales tienen poco que ver unos con otros, unos abstractos, los otros tan concretos como la sangre, los dientes, el pelo y el veneno. Pero dos pasajes bsicos en los textos de cosmologa que sustentan la cultura mitolgica occidental e islmica unen a los animales y los nmeros. El primero es el arca de No, descrita con



medidas detalladas para dar forma a la nave que puede contener todos los animales. El segundo est en el Timeo de Platn (fr. 55c). All podemos leer acerca de una figura de doce lados usada por el creador para el todo. Platn da una forma geomtrica para los cuatro elementos, y luego de esta quinta y ms comprensiva forma de todas, dice que contiene esquemas de figuras animales. Esta figura de doce lados, con forma de animal, es paralela a otro pasaje de La Repblica de Platn (589 b-c) donde presenta la imagen simblica del alma como una bestia de muchas cabezas con un anillo de cabezas domadas y salvajes.

Para la cosmologa antigua no haba necesariamente separacin entre lo geomtrico y lo orgnico; se correspondan, lo que nos dice hoy que los clculos matemticos de la astrologa no son slo necesidades rituales para enfocar la conciencia en el caso a mano y abstraerlo en una carta visible. Los nmeros tambin son modos de hacer precisas las diversas fuerzas animales, la bestia de muchas cabezas que vitaliza y conduce el alma, la vida instintiva que nos gua como nuestra compaera del alma. De nuevo el peligro del poder compulsivo de la astrologa: mientras jugamos con nmeros y reconocemos los grados, tambin estamos reconociendo la casa animal que contiene el alma, de hecho la casa animal que contiene todo el cosmos. Y no olvidemos que son los animales -incluido el animal humano- los que el Dios bblico considera la nica parte de toda la creacin merecedora de salvar, una salvacin que requiere que No tenga que hacer antes deliberados clculos matemticos.

Finalmente, entonces, si no es verdadera, ni es explicativa, si sus matemticas son ritual disfrazado y su referencia a los planetas concretas de la astronoma son metforas, por qu nosotros, gente inteligente, racional, educada y sabia, tales como vosotros y yo, nos hemos reunido aqu para volver a la astrologa? Por qu ajustados con cinturn de seguridad a un asiento en un avin que puede llevarnos directo a la muerte abrimos la revista justo en la pgina de los horscopos del mes? Por qu recogemos los consejos que se dan sobre un Mercurio retrgrado, o analizamos la conducta de nuestro amante en trmino de humores lunares, o esperamos algn cambio financiero radical en el prximo trnsito por nuestra casa dos? Incluso cuando leemos tenemos que suspender la falta de creencia, ocultando la pequea vergenza de que estamos leyendo la trivialidad de una adivina

Entonces, por qu volvemos a ello?

Qu busca el alma, qu desea, por qu nos atrae tan rpidamente? Mediante ese pargrafo de la ltima pgina regresamos a nuestro daimon-estrella individual que contiene una porcin de nuestro destino, esa otra mitad. Buscamos de nuevo la conexin con nuestro compaero primordial, ese hermano-hermana en el cielo que vive fuera de este cuerpo sujeto por un cinturn de seguridad a su asiento, y que comparte nuestra vida en cada instante -y este instante elevados en el aire que puede tambin ser el instante de la muerte- porque conecta nuestra vida con Moira,



el daimon de nuestro hado: Moira, la palabra griega que significa simplemente una parcela, la mitad de Paracelso.

Buscamos en esa pgina de atrs, esos consejos y avisos, las predicciones y asesoramiento

Revista "Gente de Astrología"

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