Resumen de Corazon tan Blancopor juanfrancastro | buenastareas.comLa novela trata la historia de Juan Ranz, narrador en primera persona, y su familia, especialmente la de su padre. ste, despus de enviudar dos veces, se casa finalmente con la hermana de su segunda mujer, que va a ser la madre de Juan. Desde el principio el narrador despierta cierta sospecha en el lector, hacindole intuir que en algn momento ocurrir algo trgico: lo consigue por anunciar su presentimiento del desastre. Los temas principales son el del matrimonio, del secreto, de la persuasin y de la sospecha, tal como lo declar el propio Javier Maras. Pero aqu el matrimonio no se presenta como esa institucin aceptada por la cultura occidental con sus valores slidos, sino que, por el contrario, cuestiona estos valores y hace entrar en crisis el reglamento de las relaciones amorosas que, tericamente, deben elegirse con libertad absoluta, sin reglas. El padre de Ranz primero se casa con una mujer cubana, en Cuba, donde conoce a la hermana, Teresa, de la futura madre del narrador, y se enamora locamente de ella. Sin saberlo, Teresa le incita a cometer el crimen que abre la posibilidad de que puedan estar juntos, esto es, matar a la mujer cubana. Cuando Teresa propone este crimen, ella no lo ve como una propuesta real sino simplemente como la afirmacin de que no podrn estar juntos, excepto en el caso de que semuriese su mujer. Ranz, sin embargo, toma su palabra literalmente y mata a su entonces esposa. De esto el lector no se entera sino en las ltimas pginas de la novela, cuando por fin se resuelve toda la intriga acumulada.

Para llegar a este descubrimiento, Maras recorre la historia familiar de los Ranz. El padre hizo fortuna como crtico de arte bajo el franquismo, una herencia que ser de Juan, y que se sentir como una herencia manchada de injusticia y malicia. Despus de matar a su esposa cubana, asfixindola, y a continuacin hacer que su piso en La Habana se incendiara mediante unos cigarrillos para as ocultar el crimen que comete sin ningn remordimiento aparente tpico que se repetir a lo largo de la novela, se casa con Teresa, la ta de Juan, y quien en teora debera haber sido su madre. Durante el viaje de novios de Ranz y Teresa, Ranz le confiesa lo que hizo, por querer compartirlo todo y demostrar su amor absoluto; paradjicamente el intento de compartirlo todo hace que al final no puedan compartir ya nada, puesto que la hermana, atormentada por su culpa, la culpa de saber, se quita la vida. Esta escena del suicidio de Teresa es el relato que inaugura Corazn tan blanco, lo que conduce al lector a especular sobre el motivo, adquiriendo as cierto papel detectivesco. A raz de su propio matrimonio, Juan tomar elmismo papel en sus investigaciones en bsqueda de la verdad, pero no para hacer justicia, sino para conocer sus orgenes. No obstante, cuando ya los conoce, se da cuenta de que hubiese preferido no conocerlos puesto que no quiere ser quien es, quien sus orgenes le hacen ser. Al emprender la investigacin no tuvo en cuenta cunto significara saber, y slo cuando ya est hecho, cuando ya no hay paso atrs, recapitula y dice que no ha querido saber, pero que ha sabido. No se puede deshacer el escuchar, ni el hacer, lo que viene a ser otro tema del libro, al que volveremos ms adelante: el I have done the deed1 (Shakespeare, 1995: 126) de Macbeth.

Despus del suicidio de Teresa, Ranz se casar con la hermana de ella, Juana. A ella, habiendo aprendido que es mejor callar, no le cuenta nada de su pasado y tendr el hijo, Juan, que es el narrador de la historia. Juan, a su vez, no ha sabido sobre su ta nunca a travs de su madre, que durante su infancia y adolescencia siempre callaba, y luego call para siempre por su muerte temprana.

En el momento de relatar la historia, Juan lleva casado apenas un ao. Se cas con una colega suya traductora, Luisa, a la que conoci durante un encuentro laboral: este mitin poltico, entre dos altos cargos, constituye una de las tramas secundarias de la novela. Son, muy probablemente, parodiasde Margaret Thatcher y Felipe Gonzlez, que conversan literalmente a travs de Juan, que hace de traductor principal, ya que es l quien pone en marcha y modifica constantemente la conversacin, al no traducir fielmente en muchas ocasiones. Es una stira en la que Maras consigue entretejer muchos elementos cmicos que denuncia las artimaas ocultas del poder. Adems, se introduce la idea de que todo el mundo obliga a todo el mundo, no tanto a hacer lo que no quiere, sino ms bien lo que no sabe si quiere, porque casi nadie sabe lo que no quiere, y menos aun lo que quiere, no hay forma de saber esto ltimo (Maras, 2010: 83). Ranz saba lo que quera? Teresa saba lo que quera? Juan lo saba?, o ms especficamente, Juan saba si quera saber? Esta idea de que todo el mundo obliga a todo el mundo estar presente durante toda la novela, y se entrelaza estrechamente con la obligacin que impone Lady Macbeth a Macbeth. Tambin es interesante ver en esta escena de la traduccin que Luisa, cuyo trabajo en esta ocasin fue el de comprobar que el otro traductor cumpla con su deber de traducir exactamente, no intervino en ningn momento. Se podra llevar a tal extremo de decir que ya el primer encuentro de los futuros cnyuges refleja sus actitudes y su capacidad de callar, de enterrar la verdad mediante el silencio.Despus de un breve noviazgo se casan finalmente los dos expertos en modificar la verdad2 y callarla, no sin que Juan reflexione de manera interesante sobre el antes y despus del matrimonio, sobre todos los elementos que se pierden cuando se da el paso de hacer real lo esperado y cuando la ilusin de la esperanza ya no es ilusin sino verdad. Ranz lo resume con las palabras Y ahora qu? (Maras, 2010: 98), que dirige a su hijo el da de su boda. A esta pregunta desequilibrante sigue un consejo que despierta la sospecha y el instinto investigador en el hijo: Cuando tengas secretos, o si ya los tienes, no se los cuentes (Maras, 2010: 109), lo que resulta un consejo raro en un da as y, adems, al indagar a qu se refiere, no contesta sino enrojece. A raz de esta advertencia ambigua, las sospechas de Juan crecen cada vez ms y finalmente ganar la curiosidad a la ignorancia-inocencia del no saber y se har cmplice indeseado.

La trama principal sigue con el viaje de novios de Juan y Luisa, el trabajo de Juan y el extraamiento que siente cada vez que vuelve a casa, a la casa de los dos, despus de uno de sus viajes. Luisa se va haciendo su cmplice en su trabajo detectivesco sobre qu pas con su ta, y cuando l vuelve un da antes de lo esperado de un viaje laboral para darle la sorpresa a su mujer (pero tambin porque en elfondo no confa en ella y quiere asegurarse de que le est siendo fiel y modifica la verdad al no contar que vuelve pronto), se queda dormido en el dormitorio. Cuando se despierta, Luisa y Ranz han vuelto a su casa y estn hablando en el saln; sin embargo, l no descubre su presencia (auditiva) y se entera de la historia verdadera del suicido de su ta que Ranz le cuenta a Luisa. Cuando ella le interrumpe y dice que no quiere saber ms ya ha pasado el momento en el que se podra esconder en la inocencia del no saber, y tiene que escuchar la historia hasta el final. Lo mismo le sucede a Juan, del que Luisa tiene plena conciencia que est escuchando, ya que entr anteriormente al dormitorio y lo vio durmiendo all. En cierto modo se retoma el tpico de todo el mundo obliga a todo el mundo: Luisa le obliga a Ranz a contar la historia, Ranz le obliga a escucharla hasta el final y Juan se obliga a s mismo a no cerrar la puerta y escucharla. Con esta adquisicin de conocimiento sobre el pasado oscuro, se hacen cmplices, y, ms importante, culpables.

Igual de culpable que lo fue Teresa, pero ella, a diferencia de ellos, no es capaz de vivir con esa culpa y hace lo nico que le parece moralmente correcto y justo: si por ella ha muerto la esposa anterior, tiene que morir ella tambin, de modo que asume su culpa y se mata a s mismacomo castigo y as se convierte en el nico personaje con verdadera grandeza.3 El padre vuelve a hacer lo mismo con los hijos (aunque conscientemente slo con Luisa) que ha hecho con Teresa, y con eso, por lo menos hipotticamente, corre el peligro de provocar el mismo destino de ella. Pero esta vez su intuicin ha sido correcta ya que los personajes reaccionan de forma absolutamente distinta que Teresa: no tienen ningn problema con vivir con su culpabilidad, porque les parece que es el pasado y no hay que darle ms vueltas. Cuando Juan y Luisa se enteran, estn obligados a reaccionar, tienen que tomar partido y eligen el silencio criminal. Este pacto de silencio lleva a una lectura poltica, en la que cabe la interpretacin de ver la novela como alegora de la transicin espaola, que sin este pacto hubiera sido imposible, asunto al que volveremos ms adelante. A pesar de que Juan afirma todo es pasado y no sucedido y adems no se sabe (Maras, 2010: 300), no es del todo cierto que no quiere recordar y que es capaz de simplemente asumir el pasado como pasado u olvidarlo, ya que el mero hecho de contar la historia, de escribirla, tiene que ver con una experiencia, con un saber acumulado. En cuanto se narra una historia, desde el punto de vista psicolgico, se entra en una especie de terapia, al narrarla se desembaraza de un pesoy de cierta forma se borra lo que ha ocurrido para escribir lo que no ha ocurrido. Sin embargo, tratndose de una narracin enfermiza, al no terminar en justicia es probable que la terapia no sea exitosa y no cure.

A la trama principal en torno a Ranz en relacin con su hijo y la reaccin de ste se aaden varias tramas secundarias, algunas ya mencionadas. La primera es la historia que cuenta Juan de su viaje de novios en Cuba. Mientras su mujer est enferma en la cama, l se va al balcn donde una mujer, desde lejos en una plaza, le confunde con su amante (secreto y casado) y as le introduce en una historia que no es ni un poco suya pero en la que de repente vemos paralelismos inquietantes con su vida, ya que la desconocida, Miriam, urge a su amante, Guillermo, a matar a su mujer para que pudiesen estar juntos. Esto nos cuenta el narrador mucho antes de saber del asesinato por parte de Ranz de su mujer, es decir, las tramas secundarias nos dan pistas sobre la trama principal y el desenlace de ella. Dentro de este pasaje tambin cabe mencionar que Juan no le cuenta a Luisa lo ocurrido y con eso acepta en cierto modo el consejo de su padre de callar los secretos que vayan apareciendo. Esta trama secundaria tambin abre el tema de la colonia y del mestizaje, ya que en teora, si no hubiese ocurrido el crimen principal, la madrede Juan sera una mujer cubana. Juan es consciente de que l es de alguna forma producto de un crimen y eso afecta a su identidad.

Corazn tan blanco, de Javier MarasLa otra trama secundaria que ocupa una buena parte de la novela es la historia de su amiga Berta, que vive en Nueva York y que l va a visitar all. Estas dos tramas secundarias estn entre ellas relacionadas, ya que el Guillermo de Cuba comparte bastantes detalles con el ocasional amante, Bill, de Berta, que ella encontr a travs de un anuncio y que la somete a perversas vejaciones. Aqu vuelve el tpico de la obligacin, ya que la obliga a hacer lo que hace y seguir su juego. Adems, como el padre, es una persona sin escrpulos ni, hasta podra decirse, sentimientos. Se puede encontrar la misma actitud en todos los personajes y situaciones de las tramas secundarias, y as remite directamente a la trama principal: Miriam intenta empujar a Guillermo al asesinato de su mujer, Bill empuja a Berta a hacer los vdeos que le pide, Lady Macbeth empuja a su marido a que mate a Duncan, Ranz empuja a Teresa a saber lo que lleva a su maldicin y empuja a Juan y Luisa a mantenerse callados.

El intertexto con Macbeth es fundamental, tan fundamental que el ttulo proviene de una cita del homnimo de Shakespeare o, con ms valor informativo, el ttulo en ingls Thetragedy of Macbeth, cuenta la historia de un noble extremadamente creativo y ambicioso que, al principio hombre honrado e ntegro, tiene como perdicin el poseer demasiada ambicin. Tomando las profecas de unas brujas demasiado en serio (y malinterpretndolas), finalmente se deja convencer por su mujer, cuando le reprocha cobarda, de matar al rey de Escocia, Duncan. Despus del asesinato su esposa deja pistas falsas para que se inculpe a otros, pero no esto, sino el saber del crimen le hace cmplice de su marido. Antes de cometerlo ninguno de los dos se plante las posibles consecuencias psicolgicas, y resultan extremadamente atormentados por su sentimiento de culpa hasta tal punto que Macbeth desea la muerte para salir de su existencia angustiosa. Lady Macbeth por su parte tiene pesadillas reales que la llevan a la locura, hasta el extremo de morirse de ella. Macduff hace justicia y Macbeth muere de su mano cumplindose as la malinterpretada profeca de las brujas.

Esto en cuanto a la historia de Macbeth, que ya slo por su trama principal recuerda mucho a Corazn tan blanco. No obstante, hay mucho ms detrs del simple coincidir de un asesinato puesto en marcha por la mujer amada. Los dos libros tratan de la culpa, de la traicin, del crimen, del silencio, del contar y del saber con todas sus consecuencias. Los dos libros tratande temas universales de la condicin humana: la ambicin y el amor loco. La diferencia que destaca principalmente es el final: en Macbeth se restaura el orden e impera el Bien; en Corazn tan blanco no hay grandeza, no hay castigo para los malos y vence la vida adulta, o quiz la masculina (Maras, 2010: 303), donde lo masculino y lo adulto se entiende como cinismo. Recordando a Marx5 podramos decir que Macbeth es una tragedia y Corazn tan blanco una farsa. Tambin se encuentra una diferencia en el crimen en s: mientras que en Macbeth se descubre y Macduff hace justicia, el crimen en Corazn tan blanco es un crimen perfecto el silencio lo convierte en tal.6

En los dos libros hay culpables que lo son sin haber hecho nada, su nico crimen es escuchar y saber; aun as, se les considera culpables porque ese saber les hace cmplices, saben y callan. En Macbeth la culpabilidad empieza en el momento que Lady Macbeth llama a su marido y l le contesta I have done the deed. Macbeth en seguida se muestra arrepentido y atormentado, no quiere volver a dejar los puales y en su lugar va Lady Macbeth, as no slo calla sino ayuda a ocultar el crimen. Esta escena trata tambin el tema de que lo hecho est hecho y no se puede deshacer, cuando su marido dice que es una visin triste contesta ella que decir que esta visin es tristedespus de haber ocurrido es necio e insiste en que no lo piense ms, ya que lo hecho est hecho.7 Cuando vuelve de dejar los puales le dice a su marido: My hands are your colour; / but I shame to wear a heart so white8 (Shakespeare, 1995: 134), frase que constituye el epgrafe de Corazn tan blanco y de ah obtiene su ttulo. Las interpretaciones posibles son varias: podra referirse, irnicamente, a un corazn limpio de un crimen, como smbolo de inocencia, o se podra interpretar blanco como la palidez del miedo, como smbolo de cobarda. Cuando Juan se refiere a esta cita tampoco resuelve la interpretacin ambigua: Como si intentara contagiarle su despreocupacin a cambio de contagiarse ella de la sangre vertida de Duncan, a no ser que blanco quiera decir plido y temeroso o acobardado (Maras, 2010: 89).

Corazn tan blanco dedica un captulo (corto) entero a la escena posterior al asesinato de Duncan de Macbeth, donde comenta las frases ya mencionadas y tambin la que pronuncia Lady Macbeth to think so brainsickly of things9 (Shakespeare, 1995: 132), con lo que recomienda a su marido dejar de pensar en lo que ha hecho, porque sabe que si piensan en sus crmenes se volvern locos: these deeds must not be thought / After these ways; so, it will make us mad10 (Shakespeare, 1995: 130). Esto lleva directamente aque Macbeth considere que despus de saber qu es lo que ha hecho o ha sido capaz de hacer sera mejor no conocerse a s mismo. Algo similar a lo que le ocurre a Juan, que se dar paulatinamente cuenta de que no quiere ser quien es, ese hijo de alguien que qued impune despus de acumular su fortuna bajo el franquismo, y que acept la vida acomodada que el padre le ofreca y que cuando sabe lo que no ha querido saber ni siquiera lo juzga.

Como apunta Caudet (2002), en Macbeth tambin entra en juego el tema del olvido, cuando Macbeth le dice al mdico con el objetivo de curar a Lady Macbeth de su enfermedad, esto es, su mala conciencia, que para raze out the written troubles of the brain no le podra dar some sweet oblivious antidote11 (Maras, 2010: 304). La dulce droga del olvido nos deja vivir, vivir tranquilos sin remordimientos y sin sentimiento de culpabilidad. Aqu es donde difieren los personajes: mientras que en Macbeth se atormentan por sus crmenes,12 en Corazn tan blanco pierden todos los valores a favor de la satisfaccin de sus caprichos y su bienestar. Slo olvidando pueden seguir su vida acomodada y fcil. El olvido no tiene en cuenta a las vctimas ni a los perdedores (aunque lo fueran injustamente), pero olvidar y encubrir los delitos y los crmenes es el camino ms fcil, ms cobarde. Esto es lo que haceRanz, y lo que harn Luisa y Juan, sin siquiera dudarlo. Ranz, adems, ha sido cmplice de otro crimen, el ocurrido en 1936, habindose beneficiado por el franquismo. Tanto l y los suyos como Macbeth y Lady Macbeth actan por sus intereses fcticos, sin pensar en los daos colaterales que dejarn.

Teniendo en cuenta todo lo anterior, surge la pregunta de quin escribe la historia, los hroes o los que slo piensan en s mismos y en sus beneficios? los perdedores o los vencedores? Normalmente son los vencedores los que la escriben, ya que tienen el poder suficiente para hacerlo, y, adems, los que empujan la rueda del tiempo son los que no quieren que se recuerde. No les conviene que alguien recuerde algo, y por tanto se recurre a ese sweet oblivious antidote. Juan propone que una de las razones por las que las cosas deben ser contadas es para por fin hacerse ficticias. Pero hay ciertas cosas que no se deberan hacer nunca ficticias, y aun as son olvidadas, o mejor dicho, oprimidas y borradas, por aquellos que estn en el poder porque les conviene, y porque sin ese olvido no podran sacar adelante lo que les beneficia personalmente.

Siguiendo esta lnea y tomando el crimen del matrimonio Macbeth como una metfora de los crmenes de estado, y como ya insinuamos anteriormente, se puede interpretar Corazn tan blancocomo una alegora de la transicin espaola. Sin el pacto de silencio no habra sido posible esa transicin, el silencio que sigue producindose hasta cierto punto en Espaa vuelve a todos los que lo comparten cmplices y culpables. La palabra es el arma como dice Miguel Hernndez tristes armas / si no son las palabras (Hernndez, 1982: 482), pero si no se usa no se puede luchar contra nada. Las clases hegemnicas de Espaa han sabido callar y no dejar que se use el arma de la palabra.13 Es un saber cnico si lo que se sabe en seguida se olvida, o en otras palabras: el triunfo final de la verdad descubierta cuando Ranz, por fin, confiesa su crimen, resulta ser un triunfo intil, ya que no se produce ningn cambio, el crimen queda olvidado. Dentro de una interpretacin poltica se puede igualar esto con la renuncia colectiva a querer saber del pasado en Espaa, y no slo de Espaa sino de Europa, y su no interferir contra el crimen cometido en 1936. Este razonamiento plantea una cuestin ms grave: si algo se basa en crmenes e injusticia, como la herencia del padre de Juan, y como la restauracin de la monarqua, se puede simplemente olvidar esa parte criminal y pasar a un estado que se basa en ella? Debe plantearse la cuestin de si estos resultados seran legtimos, es decir, la herencia de Juan, o la Espaa actual.