RESIDUOS DEL MOVIMIENTO EN EL SUROESTE LEONÉS … · ... el apara - to del Estado y prácticamente...

8
Argutorio 34 - II semestre 2015 - 41 La estadística electoral de los partidarios del Mo- vimiento Nacional hasta el año 1979 se analiza en el presente capítulo, una vez expuestas en el número precedente las líneas ideológicas de los colectivos políticos más afines a la estructura orgánica nacida en abril de 1937. Curiosamente, la experiencia elec- toral iba a comenzar aún vigentes las principales ins- tituciones del régimen anterior. Las primeras elecciones en las que tomarían parte las nuevas asociaciones políticas fueron las municipales de enero de 1976. Tales comicios, como hemos refe- rido, tenían su origen en el estatuto de Régimen Local de 1975, lo que exigía un proceso electoral apropia- do para que las citadas asociaciones participaran en la designación de los nuevos alcaldes 1 . En cualquier caso, estas elecciones iban a contar con pocos candi- datos de los incipientes partidos. De hecho, en las ciu- dades de más de cien mil habitantes, solamente 25 de los concurrentes pertenecían a alguna asociación au- torizada; de igual modo, en las poblaciones con más de diez mil almas, los afiliados de los partidos lega- lizados, que compitieron para presidir 144 alcaldías, sólo sumaban dieciocho individuos; y en los pueblos y villas más pequeños, el número de aspirantes com- prometidos políticamente tampoco fue significativo. En la provincia de León, los comicios afectaron a 112 municipios, entre ellos varios comprendidos en el área de estudio 2 , si bien no consta que fuesen elegidas relevantes personalidades de las novedosas asociaciones. El hecho de que, en aquella ocasión, los electores fueran únicamente los concejales debió de disuadir a posibles candidatos; en la ciudad de La Bañeza, por ejemplo, la alcaldía recayó directamente en el antiguo alcalde (Leandro Sarmiento), y en va- rias localidades del suroeste tampoco fue necesario efectuar votaciones, pues solamente se presentó a los comicios un solo participante 3 . La renovación del resto de cargos municipales, pre- vista para el otoño siguiente, quedó suspendida tem- poralmente por decisión del Consejo de Ministros 4 . LA CAMPAÑA DEL REFERÉNDUM DE 1976 Los pasos decisivos para la modificación integral del Estado que había iniciado su singladura en la lejana guerra civil se dieron en el otoño del 76. Primeramen- te, tiene lugar la transformación de la Organización Sindical de 1940 en un organismo autónomo, depen- diente de la Presidencia del Gobierno, y que se titu- laría legalmente Administración Institucional de Ser- vicios Socio-profesionales (AISS) 5 , una formalidad RESIDUOS DEL MOVIMIENTO EN EL SUROESTE LEONÉS (1975-1982): LA EVOLUCIÓN ELECTORAL José Piñeiro Maceiras

Transcript of RESIDUOS DEL MOVIMIENTO EN EL SUROESTE LEONÉS … · ... el apara - to del Estado y prácticamente...

Page 1: RESIDUOS DEL MOVIMIENTO EN EL SUROESTE LEONÉS … · ... el apara - to del Estado y prácticamente la ... obteniendo éxito en su particular tentativa. Sin embargo, la ... 76 y las

Argutorio 34 - II semestre 2015 - 41

La estadística electoral de los partidarios del Mo-vimiento Nacional hasta el año 1979 se analiza en el presente capítulo, una vez expuestas en el número precedente las líneas ideológicas de los colectivos políticos más afines a la estructura orgánica nacida en abril de 1937. Curiosamente, la experiencia elec-toral iba a comenzar aún vigentes las principales ins-tituciones del régimen anterior.

Las primeras elecciones en las que tomarían parte las nuevas asociaciones políticas fueron las municipales de enero de 1976. Tales comicios, como hemos refe-rido, tenían su origen en el estatuto de Régimen Local de 1975, lo que exigía un proceso electoral apropia-do para que las citadas asociaciones participaran en la designación de los nuevos alcaldes1. En cualquier caso, estas elecciones iban a contar con pocos candi-datos de los incipientes partidos. De hecho, en las ciu-dades de más de cien mil habitantes, solamente 25 de los concurrentes pertenecían a alguna asociación au-torizada; de igual modo, en las poblaciones con más de diez mil almas, los afiliados de los partidos lega-lizados, que compitieron para presidir 144 alcaldías, sólo sumaban dieciocho individuos; y en los pueblos y villas más pequeños, el número de aspirantes com-prometidos políticamente tampoco fue significativo. En la provincia de León, los comicios afectaron a 112 municipios, entre ellos varios comprendidos en el área de estudio2, si bien no consta que fuesen elegidas relevantes personalidades de las novedosas asociaciones. El hecho de que, en aquella ocasión, los electores fueran únicamente los concejales debió de disuadir a posibles candidatos; en la ciudad de La Bañeza, por ejemplo, la alcaldía recayó directamente en el antiguo alcalde (Leandro Sarmiento), y en va-

rias localidades del suroeste tampoco fue necesario efectuar votaciones, pues solamente se presentó a los comicios un solo participante3.La renovación del resto de cargos municipales, pre-vista para el otoño siguiente, quedó suspendida tem-poralmente por decisión del Consejo de Ministros4.

La campaña deL referéndum de 1976

Los pasos decisivos para la modificación integral del Estado que había iniciado su singladura en la lejana guerra civil se dieron en el otoño del 76. Primeramen-te, tiene lugar la transformación de la Organización Sindical de 1940 en un organismo autónomo, depen-diente de la Presidencia del Gobierno, y que se titu-laría legalmente Administración Institucional de Ser-vicios Socio-profesionales (AISS)5, una formalidad

RESIDUOS DEL MOVIMIENTO EN EL SUROESTE LEONÉS (1975-1982):LA EVOLUCIÓN ELECTORAL

José Piñeiro Maceiras

Page 2: RESIDUOS DEL MOVIMIENTO EN EL SUROESTE LEONÉS … · ... el apara - to del Estado y prácticamente la ... obteniendo éxito en su particular tentativa. Sin embargo, la ... 76 y las

42 - Argutorio 34 - II semestre 2015

previa a su total desmantelamiento. Y, seguidamente, el 15 de diciembre, se aprobaría por referéndum el proyecto de ley de Reforma Política6, que implicaba la introducción de partidos, libremente y sin condicio-nantes, en el sistema político español, creándose los organismos institucionales pertinentes para el ejerci-cio de la democracia parlamentaria (Congreso, Sena-do, etc.). El texto de esta norma fundamental estaba redactado en términos escuetos y pacíficos, lo que iba a permitir su aceptación íntegra por parte de la ciuda-danía, siquiera de forma incontestable. Con todo, el referéndum supuso para el neofranquismo militante que se fraccionara en dos mitades diferentes: los pro-clives a la reforma (por regla general los más jóvenes y progresistas) y los contrarios a la misma (mayorita-riamente, los más veteranos). Como es sabido, el éxi-to político sólo acompañó a los primeros, quedando la opción más tradicional postergada e infravalorada: de hecho, a partir de entonces, se emplearía habitual-mente el calificativo de “extrema derecha”7 para de-signarla en varios medios informativos.Mostraron, sobre todo, su disconformidad con la re-forma la Confederación Nacional de Excombatientes, el Frente Nacional Español y la asociación Fuerza Nueva. Si bien, sólo la primera contaba con recur-sos suficientes y una red consolidada de enlaces para afrontar con garantías una campaña electoral. Y así iba a suceder.No obstante, los demás partidos legalizados, el apara-to del Estado y prácticamente la prensa del Movimien-to habían optado por apoyar sin fisuras la respuesta afirmativa. Como botón de muestra, ha de recordarse que todos los procuradores vinculados a la comarca (Ferrero Pérez, González Álvarez, Gallegos Romero

y Palacios Rubio) votaron a favor de la reforma en el pleno previo de las Cortes8. En consecuencia, el resultado electoral era más que previsible, aunque no la debilidad que mostró en aquella ocasión la moder-na ultraderecha, pues sólo obtuvo el 2,57 por ciento de los votos emitidos. Los resultados del “no” en la provincia leonesa incluso fueron peores que la media nacional, habida cuenta que únicamente se contabili-

zaron 5 662 votos negativos, lo que significaba menos del dos por ciento del censo electoral. Pues bien, la provincia se había decantado decidida-mente por la reforma, mostrando así una tendencia más favorable al reformismo que en los territorios circundantes, donde los resultados positivos fueron menos espectaculares. Con todo, la ciudad de Astor-ga, con un 4% de “noes”, exhibía cierta inclinación hacia el inmovilismo, lo que en parte se debía a la participación de la delegación local de la Juventud en la campaña que auspiciaba la mentada confederación de los excombatientes.

aLianza popuLar en Las eLecciones de 1977

Los resultados del referéndum supondrían el ocaso del Movimiento Nacional. La institución, que ha-bía tratado de adaptarse a los nuevos tiempos con aquellas asociaciones familiares, juveniles y políti-cas, no podía sobrevivir indefinidamente en una at-mósfera de múltiples partidos en régimen de libre concurrencia. Hasta tal punto se tuvo esa sensación en el seno de la institución que su boletín informativo dejaría de publicarse en enero tras cuarenta años de vida ininterrumpida9. El finiquito definitivo lo iba a dar el decreto de 1 de abril, al recoger expresamente en su articulado la extinción de la Secretaría General del Movimiento10.Los residuos políticos del Movimiento se desperdiga-ron entonces por el nuevo mapa político… Principal-mente, por la derecha, el centro y la ultraderecha. Si bien, los ideológicos sólo recalaron en el falangismo y carlismo más tradicionales, así como en una parte

de Alianza Popular11: las primeras elecciones de junio de 1977 iban a constatar este fenómeno dispersivo de modo elocuente12. En tales comicios, la Falange y el carlismo comparecían fragmentados en varios colec-tivos y grupúsculos. Por un lado, se hallaba Alianza Nacional del 18 de Julio, constituida por Fuerza Nue-va y Falange, con la adhesión de la Comunión Tradi-cionalista; acudían igualmente a la cita electoral otras

El referéndum del 76 en las poblaciones importantes

SÍ NO BLANCO NULO ABSTENCIÓNAstorga 5954 236 160 10 16,12%La Bañeza 4350 134 173 12 14,49%Valencia de D. Juan 1868 30 50 10 13,98%Bembibre 3745 71 124 11 21,72%San Andrés del R. 7364 142 265 4 14,48%Villablino 5712 166 222 17 29,23%Ponferrada 21591 289 510 53 29,08%

Page 3: RESIDUOS DEL MOVIMIENTO EN EL SUROESTE LEONÉS … · ... el apara - to del Estado y prácticamente la ... obteniendo éxito en su particular tentativa. Sin embargo, la ... 76 y las

Argutorio 34 - II semestre 2015 - 43

entidades similares como Círculos José Antonio, FE de las JONS (auténtica), Alianza Foral de Navarra o Falange Española Independiente.En cambio, Alianza Popular ofrecía al ciudadano de orden una federación consolidada de partidos lidera-dos por mandatarios de la última época franquista: mismamente, el ex presidente Arias Navarro y el an-tiguo ministro del Movimiento Utrera Molina se pre-sentaron incluso a la Cámara alta por las listas AP, no obteniendo éxito en su particular tentativa.

Sin embargo, la federación aliancista sí logró repre-sentación parlamentaria en territorio leonés, lo mis-mo que en Zamora de la mano de Silva Muñoz. Y es que en la provincia leonesa, la federación política citada fue inicialmente gestionada por los hombres de la UDPE, siendo Sánchez-Lombas su primer presi-dente provincial13, lo que en cierta medida le daba un tono azul a la candidatura.La localidad más importante del suroeste provincial que permitió a la coalición neofranquista obtener sus mejores porcentajes fue la capital maragata, munici-pio en que la coalición de Fraga se colocó en segun-da posición, precisamente detrás de Unión de Centro Democrático, alcanzando así el 21,47 por ciento de los sufragios válidos. Como curiosidad, cabe añadir que los carteles electorales fueron fijados por conoci-dos colaboradores locales de la Organización Juvenil Española14.En los demás núcleos urbanos del sector, Alianza Popular tuvo que contentarse por regla general con la tercera posición, por detrás de un renovado y mo-derno Partido Socialista. Aún así, la villa de Valderas contabilizó un 18,08 por ciento de votos neofranquis-tas; la ciudad de La Bañeza, un 12,97; y Valencia de Don Juan, un respetable 9,69. Y es que los nuevos

líderes derechistas habían decidido visitar el área co-marcal: Federico Silva Muñoz participó en un mitin celebrado en La Bañeza el 11 de junio y el mismo Fraga Iribarne se reuniría un día después con afilia-dos y simpatizantes de la Maragatería en el motel de Pradorrey15.Como antes hemos indicado, la candidatura de Alian-za conseguiría sentar en el Congreso un diputado en representación de la provincia; en concreto, Antonio del Valle, antiguo presidente de la Diputación Provin-cial, ex procurador en Cortes y viejo consejero na-cional del Movimiento16, merced a cosechar un 12,32 por ciento de los votos emitidos. Bien es cierto que Alianza Popular no tuvo de aquélla ningún rival pro-vincial por su flanco derecho, y únicamente hubo de competir con la poderosa UCD por el control del cen-tro político. En cualquier caso, un resultado discreto, si lo comparamos con los siete escaños alcanzados por la coalición de derechas en las anteriores eleccio-nes de 1936.

La estrategia azuL en 1978-1979

Las siguientes citas electorales serían el referéndum constitucional de diciembre del 78 y las elecciones generales y municipales de 1979. La coyuntura era ya diferente a la existente en 1976-1977, pues los partidos políticos habían podido extenderse por todo el país, abriendo delegaciones en numerosos pueblos y ciudades. En el lado neofranquista, había surgido con ímpetu el grupo político de Fuerza Nueva, que no sólo eclipsaba los demás movimientos de su entorno ideológico, sino incluso las fuerzas más moderadas y conservadoras del nuevo arco institucional.

En la comarca de Astorga, la campaña del referéndum constitucional fue realizada por la agrupación piña-rista sin apenas planificación específica, lo que no fue óbice para cosechar un éxito notable, al contabilizarse el “No” en más del veinte por 100 de las papeletas es-

Page 4: RESIDUOS DEL MOVIMIENTO EN EL SUROESTE LEONÉS … · ... el apara - to del Estado y prácticamente la ... obteniendo éxito en su particular tentativa. Sin embargo, la ... 76 y las

44 - Argutorio 34 - II semestre 2015

crutadas en los distritos del centro de la ciudad, supe-rando con creces la media provincial17. El porcentaje definitivo de “noes” en el término municipal rebasaría el trece por ciento, dejando muy atrás la media nacio-nal18, que se situaría solamente en un 7,89; además, la abstención ciudadana crecería más de diez puntos, en relación con el referéndum del 76 y las elecciones del 77. Mas no fue empresa fácil, pues FN ni siquiera pudo celebrar un acto público para explicar su posi-ción particular19: la propaganda fue principalmente gráfica (carteles y octavillas), publicándose además en la prensa local algunos anuncios complementarios. Comoquiera que estos hechos son apenas conocidos, ha de precisarse que la distribución de la propaganda postulando el rechazo constitucional fue obra exclu-siva de la delegación comarcal de FN20.Conviene diferenciar, empero, el militante neofran-quista de su electorado potencial, para no caer en equívocos. Así, el simpatizante podía hallarse en los distintos segmentos de la sociedad tradicional: cató-licos, conservadores, reformistas, antiguos comba-tientes, comerciantes, trabajadores autónomos y por cuenta ajena, emigrantes… En clave sociológica, un campo también abonado para el centroderecha. No en vano las elecciones de marzo de 1979 consti-tuyeron una decepción para las expectativas de la pla-taforma azul. El esfuerzo electoral había sido superior al empleado en el referéndum de diciembre, pero las urnas rechazaron la propuesta de Fuerza Nueva, y los partidos que con ésta se coaligaron (Falange y Tradi-cionalismo)21: en la ciudad de Astorga sólo se alcanzó un pírrico 2,05%22. Con todo, estos pobres resultados mejoraron los episódicos de la coalición azul en las ciudades de León, La Bañeza y Ponferrada; y lo mis-mo puede decirse de Bembibre, San Andrés del Ra-banedo o Villafranca del Bierzo. Sea como fuere, ta-les réditos electorales demostraban que el piñarismo estaba todavía lejos de convertirse en una alternativa política provincial, pese a la mejoría observada en al-gunos términos municipales.

En cualquier caso, los votos obtenidos eran cualita-tivamente pocos, pues el número tres de la lista lo ocupaba Enrique Moreno, personaje vinculado a la ciudad desde su infancia, aunque con residencia en

la capital de España23. Ítem más, para el Senado, la candidatura unionista presentaba otros dos astorga-nos, el periodista Alberto Matías García Álvarez y el industrial Ángel García Cordero24. Bien es cierto que los resultados para la Cámara alta fueron más sa-tisfactorios, al obtener el empresario Pedro Barrios (promotor del motel de Pradorrey) más de seis mil votos por la provincia25: en cualquier caso, una suma muy inferior a la certificada por las Cortes del Frente Popular a su progenitor en las elecciones generales de 1936, cuando éste obtuvo un acta parlamentaria enrolado en las filas de la CEDA26.

Resultados del Senado por Unión Nacional en la comarca maragata--------------------------------------------------------------------

Barrios Troncoso ............................................ 274García Álvarez ............................................... 750García Cordero ............................................................... 579

Pues bien, el escaso éxito en la comarca de la candi-datura de Unión Nacional, cuando parte de los can-didatos eran de la ciudad o poseían, al menos, lazos importantes en la misma, merece una explicación. Los candidatos de 1979 se fijaron directamente desde Madrid y la capital leonesa sin apenas contar con las opiniones de los militantes, y la propaganda electoral la efectuó cada candidato por su cuenta. De hecho, el único mitin que se celebró en la ciudad no contó siquiera con la presencia de los candidatos nacidos en la misma27; en cambio, sí acudieron los representan-tes falangistas y tradicionalistas de la provincia. El lema electoral elegido por algún aspirante tampoco fue afortunado28, y las diferencias habidas entre los candidatos propuestos se airearon en la prensa local, lo que supuso cierto descrédito público. Por lo demás, la antigua polémica entre el candidato García Álvarez y Recaredo Bautista (edil del régimen anterior)29 tam-poco invitaba al optimismo local. En consecuencia, la delegación comarcal de FN infirió que se habían co-metido errores, y que debían subsanarse en el futuro30. Y lo más inmediato eran las elecciones municipales de abril. Pues bien, las buenas relaciones entabladas con los hombres de ideología cercana (ex combatien-tes, antiguos concejales, etc.) propiciaron que, bajo el rótulo de Coalición Democrática, se presentasen dos hombres con experiencia municipal, que, si bien no estaban afiliados a Fuerza Nueva, sí comulgaban íntegramente con sus postulados ideológicos31. Fue así como tres antiguos ediles del régimen franquis-ta (Merino, Bautista y Herrero) salieron elegidos de nuevo concejales en 1979. Pese al mutismo electoral de la candidatura32, la propaganda de dicha agrupa- ción fue distribuida íntegramente por los activistas de

Page 5: RESIDUOS DEL MOVIMIENTO EN EL SUROESTE LEONÉS … · ... el apara - to del Estado y prácticamente la ... obteniendo éxito en su particular tentativa. Sin embargo, la ... 76 y las

Argutorio 34 - II semestre 2015 - 45

FN, quienes colocaron los carteles de los candidatos aludidos en todos los sitios hábiles de la ciudad33. Nada había de extraño en ello, cuando el partido de Silva Muñoz (ligado al primer candidato de la lista, Alfredo Merino34) había concertado un convenio pre-liminar con determinados sectores de Unión Nacional para integrase en dicha agrupación electoral, de cara a las generales de marzo; el pacto unitario no prosperó entonces, pero no impidió que a nivel local sí pudiera fructificar35. Y, a mayor abundamiento, en enero de aquel año, se había celebrado una importante reunión de las fuerzas conservadoras leonesas en un hotel de la capital, acordándose la constitución de un frente común electoral36. En cualquier caso, el resultado en las urnas de esta candidatura astorgana iba a significar el mejor índice de votos obtenidos, en relación con las listas homó-nimas de las grandes localidades de la provincia, con casi un 16% de sufragios válidos.Mientras tanto, en el municipio de Valderas, las elec-ciones de marzo habían permitido que Unión Nacio-nal alcanzara el tercer puesto, superando al PCE e, incluso, al grupo de Fraga. El resultado de casi el 10% fue uno de los mejores del noroeste, aunque en Carrión de los Condes los votos positivos del gru-po electoral terminarían superando el 14 por 100. No obstante, el ejemplo del municipio leonés era más relevante, a los efectos de ponderar las posibilidades políticas de Fuerza Nueva, ya que en los primeros meses de la Guerra Civil las tropas sublevadas ha-bían fusilado en torno al centenar de vecinos. Pues bien, los votos valderenses de 1979 avalaban que el mensaje de FN podía ser asimilado por un electorado neutro si era explicado con corrección. No en vano, la presidencia de la delegación la ocupó Isidoro Gar-cía37, quien, tras las elecciones de abril, sería el futuro alcalde… pero por Unión de Centro Democrático38, pues FN, como tal, decidía sólo presentarse en la ca-pital del Bierzo; y eso que la junta local de Fuerza Nueva llevaba poco tiempo funcionando para pensar en resultados óptimos39. La expectación despertada por la coalición en Valde-ras fue notable, no en vano se presentaba en la lista de Unión Nacional un agricultor de la comarca, Eu-genio Carnero Ortega: incluso la prensa local se había hecho eco del interés suscitado en la comarca con el siguiente titular: “Unión Nacional en Valderas”40.En cambio, en tierras bañezanas, Unión Nacional no respondió a las expectativas, y eso que contaba con la labor persistente y continuada de Baudilio Fernán-dez, al frente del Círculo Doctrinal de José Antonio41, entidad que incluso poseía un local a propósito. Pues bien, pese a tales ventajas, las urnas depararon a la militancia azul de La Bañeza una fría realidad, de-

biendo reseñarse las municipales del 79, en las que saldría elegido el industrial Santiago Fonfría, en re-presentación del Partido Comunista, quien tres años antes había hecho acatamiento público de falangis-mo42. En 1977, Círculos José Antonio no se había pre-sentado por la provincia, pese a contar con este centro totalmente operativo.En las generales de 1979, Unión Nacional en la ciu-dad bañezana sólo obtendría 74 votos en el munici-pio (1,65%), mientras que la Falange hedillista, 27 (0,58%); y el partido carlista contabilizaría un único voto testimonial (0,02%). Un fracaso en toda regla, si no fuera por las votaciones del Senado43, pues los resultados habidos en los diferentes referéndum así parecían indicarlo: en la aprobación de la Ley para la Reforma Política, 134 electores habían optado por el “No” en la referida circunscripción (2,8%); y, en la consulta constitucional de 1978, los votos negati-vos escrutados llegaron en la ciudad vecina hasta 549 (11,59%).Además, en lo que concierne al ámbito rural, ha de indicarse una pequeña presencia electoral de la Falan-ge auténtica o hedillista –principalmente en la juris-dicción de La Bañeza- sin haberse efectuado siquiera actividad relevante en el área44, lo que puede relacio-narse con la ostentación de la denominación histórica o el aislamiento de la antigua militancia.

En cualquier caso, el contexto en que se halló el mo-vimiento neofranquista en el suroeste de la provincia precisa algún comentario adicional. Así, los resulta-dos de FN cabe relacionarlos con la mentalidad de la sociedad comarcal, que era profundamente conserva-dora, y esto afectaba negativamente a cualquier tipo de oferta ideológica. El caso de la ciudad de Astorga parece muy ilustrativo: la prensa escrita de la ciudad, que resultaba decisiva en la configuración de la opi-nión pública, mantenía una línea similar a la de El Alcázar45 (periódico de la Confederación Nacional de Excombatientes), cuyos artículos se reproducían algunas veces en El Pensamiento Astorgano. Y en

Page 6: RESIDUOS DEL MOVIMIENTO EN EL SUROESTE LEONÉS … · ... el apara - to del Estado y prácticamente la ... obteniendo éxito en su particular tentativa. Sin embargo, la ... 76 y las

46 - Argutorio 34 - II semestre 2015

lo que atañe a La Bañeza, el semanario El Adelanto Bañezano se mostraba mucho más comedido por su origen eclesiástico, aunque ello no era óbice para que permitiese determinadas colaboraciones que rezuma-ban principios archiconocidos del nacionalsindicalis-mo46. Por tanto, parecía que no era necesario propalar unas ideas políticas con énfasis, cuando ya estaban en el ambiente. Con todo, la coalición piñarista había conseguido

en 1979 representación parlamentaria, precisamente en la persona de Blas Piñar, lo que suponía un nuevo rumbo político para este colectivo minoritario.La derecha reformista en Las eLecciones de 1979

La campaña efectuada por Coalición Democrática (la agrupación liderada por Fraga para aquellos co-micios) fue intensa en el área: se visitaron numerosas localidades, gastándose por tanto abundantes recur-sos propagandísticos. Los resultados provinciales, empero, fueron bastante similares a los obtenidos en 1977, si bien resultaron insuficientes para conservar el escaño de las primeras elecciones: la coalición solamente convencería al 11,38 por cien del cuerpo electoral, disminuyendo un punto en relación con los comicios anteriores.Independientemente de la estrategia adoptada por esta nueva derecha en relación con la clásica ideo-logía franquista, y que revisaremos más adelante, el frente conservador leonés iba a sufrir una importante disensión. En plena campaña electoral dimitiría de todos sus cargos Sánchez-Lombas47, agradeciéndose-le, fría y formalmente, los servicios prestados, pero optando la federación aliancista por la nueva fórmula política de Coalición Democrática, cuya cabeza de lista la ostentaba Fernando Suárez, antiguo dirigente del SEU y de la Delegación Nacional de Juventudes, instituciones ambas del fenecido Movimiento Nacio-nal. Como es sabido, el citado había sido vicepresi-dente tercero del Gobierno y ministro de Trabajo bajo la presidencia de Arias Navarro, siendo considerado como un hombre de inclinaciones liberales en lo to-cante a la ideología del Movimiento.

No obstante, el tránsito de la nave fragista hacia aguas más templadas de carácter doctrinal aún no se había completado en la zona de estudio, ni tampoco en las tierras de Zamora, donde la naturaleza neofranquista de la coalición se advierte en determinados actos pú-blicos48, así como también en la designación de uno de sus principales representantes: el futuro senador Pinilla Turiño49.Mientras tanto, Manuel Fraga y Fernando Suárez de-

cidían viajar hasta el territorio del suroeste y la zona aneja zamorana, tratando de convencer a los electores locales de sus propuestas políticas, siéndoles las ur-nas poco favorables, pues ni siquiera se conseguiría arañar un diputado provincial. Ambas personalidades visitaron la ciudad maragata, concretamente la maña-na del 19 de febrero, celebrando una reunión infor-mativa en el motel de Pradorrey, con presencia de periodistas y numerosos simpatizantes, mostrándose Manuel Fraga partidario de que la provincia disfruta-ra de un régimen autonómico similar al de Navarra50. En dicha reunión, se criticó la política seguida por la UCD, cuyo comité local recibiría al día siguiente la visita del ínclito Rodolfo Martín Villa (otrora jefe provincial del Movimiento y también gerifalte seu-ista), quien tomaría la palabra en el teatro Gullón, junto a Fermín Zapatero, Martín Descalzo y Manuel Núñez, en un ambiente electoral más bien escéptico51. Con todo, sería la coalición centrista la que triunfaría definitivamente en la comarca.Por su parte, las elecciones municipales de abril vol-verían a ser un éxito para el grupo centrista, alcan-zando en la provincia la cifra de 940 concejales. En nuestra área de estudio y por lo que a la coalición neofranquista respecta, los resultados de los comicios pueden calificarse de mediocres, pues la derecha con-servadora únicamente obtendría representación en una docena de municipios52, a diferencia del amplio número de ediles pertenecientes a UCD o, misma-mente, a las agrupaciones independientes. De hecho, Coalición Democrática solo mejoraría el resultado de la capital maragata en tres ayuntamientos meno-res de la comarca: San Esteban de Nogales, Lucillo y

Votos de la coalición de Fraga en las localidades más representativas del sur provincial

La Bañeza Astorga Valencia de Don Juan Sahagún Valderas Sta. María

del Páramo1977 604 1390 188 300 288 77

1979 608 1082 262 242 103 120

Page 7: RESIDUOS DEL MOVIMIENTO EN EL SUROESTE LEONÉS … · ... el apara - to del Estado y prácticamente la ... obteniendo éxito en su particular tentativa. Sin embargo, la ... 76 y las

Argutorio 34 - II semestre 2015 - 47

Santiagomillas, con siete y cuatro concejales respec-tivamente, lo que a la postre le permitió presidir las alcaldías en tales localidades53.

__________________ 1 Cf. decreto 3230/1975, de 5 de diciembre, y decreto 3411/1975, de 26 de diciembre.2 Castrocontrigo, Villamejil, Luyego de Somoza, Magaz de Ce-peda, Benavides de Órbigo, La Bañeza, San Esteban de Nogales, Castrocalbón, Villazala, etc. Cf. circular nº 90, Gobierno Civil de León, Boletín Oficial de la Provincia de León, 15/XII/1975.3 Cf. “Elecciones de alcaldes en León”, La Hora Leonesa, 27/I/1976, p. 8.4 ABC, 9/X/1976, Sevilla, p. 5.5 Real Decreto-Ley de 19/1976, de 8 de octubre (BOE del 27).6 Cf. Ley 1/1977, de 4 de enero, para la Reforma Política (BOE del 5).7 Un poder acostumbrado durante 40 años, en los reflejos, a una oposición de izquierdas, tendrá que reciclarse por aguantar, des-de ahora, a una oposición de derechas. La galaxia que se mueve en torno al planeta de “Fuerza Nueva” va a ser un tábano a partir de ahora. Relativo, porque la sorpresa de las urnas ha sido que la extrema derecha, en poder de convocatoria, es un tigre de papel que se ha autocondenado a vivir en la buhardilla del país… Cf. “Actas del tiempo que llaman de la Reforma”, Pedro Rodríguez, La Hora Leonesa, 19/XII/1976, p. 2. 8 Cf. “Todos votaron Sí”, El Pensamiento Astorgano, 23/XII/1976, p. 8.9 El número último fue el 1 282, con fecha 1 de diciembre de 1976.10 Real Decreto-Ley 23/1977, de 1 de abril (BOE del 4).11 Tras las elecciones de 1977, la revista piñarista aludía a los “azules” de la federación de AP en los siguientes términos: O (…) los falangistas y tradicionalistas que todavía pacen en Alianza Popular: que han pedido el norte y, lo que es peor, su identidad… Cf. Fuerza Nueva, nº 551, p. 20.12 Aquella noche del 15 de junio de 1977, los amigos y yo deci-dimos ir a ver qué pasaba en las sedes de los distintos partidos de nuestra ciudad, León. Eran las primeras elecciones libres de nuestras vidas (…) En Alianza Popular conocíamos a mucha gente porque algunos de nosotros habíamos sido de la OJE y es-taba allí buena parte del centuriaje. Las cosas iban claramente peor que en el PCE (…) Ahora bien, llegabas a la sede de UCD, partido recién inventado por Adolfo Suárez, y corría el cham-pán por las escaleras del elegante edificio del centro de León. También allí conocíamos a mucha gente: los falangistas que no estaban en AP estaban con Adolfo… Cf. “Hágase manipulador electoral en 20 lecciones”, Incitatus (Luis Pérez Algorri), www.tiempodehoy.com, 03/11/2014.13 Diario de León, 15/02/1977, p. 10.14 Francisco Cantón Arias, comunicación personal.15 El Pensamiento Astorgano, 11/VI/1977, pp. 1 y 7.16 También había sido director de la Escuela Técnica de Minas, gobernador civil de Santa Cruz de Tenerife, director general de Política Interior y subsecretario técnico del Presidente del Go-bierno. Cf. “Nombramientos del Consejo”, ABC, 13/I/1974, p. 20.17 León: Comunicaros que en toda la provincia prosigue con fuer-za la campaña pro “No” a la Constitución…, “Noticias F.N.”, cf. Fuerza Nueva, 11/XI/1978, p. 36.18 Los grupos de alcance nacional que propugnaban el “no” al texto constitucional eran mayoritariamente “azules”: FN, FE de las JONS, CJA, CT, UNE, Acción Democrática Española, Con-federación Nacional de Combatientes, Agrupación de Antiguos Miembros del Frente de Juventudes y Liga Comunista Revolu-

cionaria.19 Astorga: no prestan el local para un acto.- Ha tenido que ser aplazado el acto de afirmación nacional previsto para el día 12 de este mes de noviembre en esta capital, ante la negativa de propietarios y responsables de los locales, que se han negado a cederlos o alquilarlos. Esto es la libertad de expresión. “Noticias F.N.”, cf. Fuerza Nueva, 11/XI/1978, p. 36.20 Francisco Cantón, antiguo delegado comarcal de FN (conver-sación particular, año 2012).21 La coalición se denominó esta vez “Unión Nacional” y estaba formada por las siguientes entidades: Fuerza Nueva, FE de las JONS, Círculos José Antonio, Comunión Tradicionalista, Agru-pación de Juventudes Tradicionalistas y Confederación Nacional de Excombatientes. La candidatura por la provincia de León se presentó públicamente en el hostal de San Marcos en una cena de hermandad amenizada por el cantante De Raymond, cf. “Noticias F.N.”, Fuerza Nueva, núm. 631, 10/II/1979, p. 36.22 Fuente: Ministerio del Interior (recurso electrónico), prensa lo-cal y archivo del Juzgado de Astorga.23 Enrique Moreno Gómez, hijo de don Eduardo Moreno, falleció en nuestra ciudad en 2012. Era un licenciado en Económicas que había impulsado, con otros sindicalistas del partido, el desarrollo de Fuerza Nacional del Trabajo, sindicato del cual, no obstante, se desligaría en 1980. FNT postulaba la producción con el fin de repartir los beneficios entre empresarios, técnicos y obreros, conformando así una entidad sindical de carácter unitario, lo que facilitaba el ingreso de los afiliados sin trabajo en las empresas de los dueños inscritos, tras unos cursillos formativos. En el otoño de 1977, la delegación asturleonesa había comenzado a organizar este peculiar sindicato, extendiéndose más tarde por el territorio nacional y obteniendo representación electoral en diversas in-dustrias. Sin embargo, el desmantelamiento de FN afectaría a su pervivencia, subsistiendo algunos restos en Valencia y Vallado-lid. Fuente: Patria en Pie, nº 2, Oviedo, 1977; Declaración Pro-gramática y Estatutos, julio, 1978/Fuerza Nacional del Trabajo, Oviedo; Fuerza Nueva, núm. 592-775, 1978-1981; Rojo y Azul, nº 12-13, Valencia, 1980; Adelante España, Fuerza Nacional del Trabajo, nº 1, Madrid, 1981; Firmes, nº 16, Valladolid, 1982. 24 Respecto a ellos, la prensa provincial precisaba que se presen-tan como independientes, ya que son afines a Silva Muñoz. Cf. “Unión Nacional también participa”, Diario de León, 21/I/1979, p. 12. De hecho, estos dos candidatos encarnarían la nota pop de la campaña, al servirse de una canción como referencia, com-puesta ad hoc por los astorganos Tony, Andindo e Iñaki (hijo del coronel Picatoste, asesinado por ETA en 1986).25 Un 2,33%, mientras que Alberto Matías García Álvarez tendría 4 214 y Ángel García Cordero (Kuky), sólo 3 824 votos positivos. En realidad, un resultado peor al cosechado por el general Martí-nez Cabrera en las elecciones de 1936, quien recibiría 9 088 votos provinciales, cf. El Pensamiento Astorgano, 22/II/1936, p. 1. 26 Pedro Barrios Caamaño tendría en el partido judicial de Astorga 9 294 votos y el desafortunado Martínez Cabrera, sólo 1 427. Fuente: El Pensamiento Astorgano, 18/II/1936, p. 1.27 El Pensamiento Astorgano, 6/III/1979, p. 7.28 Recordaba quizás a los slogans de la CEDA de 1936: “Por Es-paña, por León, por ti ¡Vótame!”. Con todo, las consignas difun-didas por la coalición sí eran aceptables: “Por lograr una España reconciliada, siempre alegre y en paz, siempre rica y justa”, reza-ba la propaganda inserta en la prensa provincial. Incluso, el lema seleccionado por los candidatos astorganos de Unión Nacional re-sultaba regionalista y moderno: “Vota a tu tierra, vota a tu gente”. 29 Consúltese, por ejemplo: “Un concejal de Astorga agrede a un periodista”, El País, 30/VII/1977, Sociedad (consulta electróni-ca).30 Fuente: testimonios de Francisco Cantón y antiguos militantes de FN.

Page 8: RESIDUOS DEL MOVIMIENTO EN EL SUROESTE LEONÉS … · ... el apara - to del Estado y prácticamente la ... obteniendo éxito en su particular tentativa. Sin embargo, la ... 76 y las

48 - Argutorio 34 - II semestre 2015

31 En la lista se encontraban algunas personas ligadas a la Falan-ge… Cf. Álvarez García, M. J. (1998): “Consultas electorales en Astorga, una aproximación a su análisis (1976-1991), Astórica, número 17, Centro de Estudios “Marcelo Macías”, Astorga, p. 53. Tanto Recaredo Bautista como Ángel Herrero habían par-ticipado en la contienda, alistados en los batallones falangistas de la provincia; coyuntura nada rara en la ciudad, cuando Luis González (futuro alcalde de UCD) también había pertenecido a las filas azules.32 La candidatura optó por no hacer ningún tipo de campaña, bajo la idea de que “aquí nos conocemos todos” (P.A. 20 de mar-zo), procediéndose únicamente a la pega de carteles... Ibídem.33 Habitualmente al amanecer.34 Caso de presentarse, encabezaría la lista de CD a título de in-dependiente y tras él irían Recaredo Bautista, Ángel Herrero… Cf. “Muchas listas en Astorga”, El Pensamiento Astorgano, 13/II/1979, p. 1.35 Semanas antes, Silva Muñoz y Fernández de la Mora habían prestado su colaboración en una edición especial sobre el 20 de Noviembre, a cargo del periódico El Álcazar. En cualquier caso, tales tanteos electorales quedaron reflejados en las páginas del ABC, El Alcázar y la revista Fuerza Nueva; Piñar se refirió al asunto en una conferencia impartida en el Hotel Meliá Castilla el 15 de marzo de 1979 (“Lecciones para unas elecciones”). Tiempo después, la prensa progresista se haría eco de los deseos de Silva Muñoz en dicho sentido: No pierde Federico Silva su esperanza de aglutinar a la derecha, y ayer expresó su esperanza de que tanto Manuel Fraga, por un lado, como Blas Piñar, por otro, ce-dan en sus posiciones para confluir con las suyas… Consúltese: “Silva Muñoz: soy víctima de la congruencia política”, El País, 28/II/1980, Madrid, última, consulta electrónica.36 En la reunión hubo acuerdo unánime de crear una coalición a nivel provincial de derecha para las elecciones generales y muni-cipales, independientemente de los acuerdos que lleguen a nivel nacional las fuerzas por ellas representadas… A la reunión fue invitada Fuerza Nueva. Cf. “La derecha se une”, Diario de León, 5/I/1979, p. 1.37 “Noticias F.N.”, Fuerza Nueva, 11/XI/1978, p. 36.38 Isidoro García Tejedor obtendría en 1979 la alcaldía de Val-deras, bajo la disciplina de la UCD, convirtiéndose además en diputado provincial. La inclusión de miembros de FN en las listas municipales de UCD no, por rara, dejó de ser conocida en sede parlamentaria: Fue en el turno de réplica de Alfonso Guerra a Arias-Salgado. El ministro se había referido a la imposibilidad de construir muchas viviendas que Alfonso Guerra reclamaba “porque los Ayuntamientos socialistas no han concedido las li-cencias”. Guerra, en su respuesta, aludió a esto también, como a casi todas las frases de Arias-Salgado, y recordó que hay Ayunta-mientos con alcaldes votados por UCD que son de Fuerza Nueva. Aludió también a “diez mil fichas” incorporadas a las filas del partido centrista. Fue el momento de las risas en el hemiciclo. El momento del saludo a la concurrencia por parte de Blas Piñar, líder de FN. Cf. “La UCD se nutre de FN”, El Imparcial, Madrid, 29/V/1980, p. 3. Este trasvase ideológico también fue advertido en la ciudad maragata: ¿Qué pinta Fuerza Nueva en Unión de Centro Democrático?, véase “La carrera hacia la poltrona”, El Pensamiento Astorgano, 17/III/1979, p. 3.39 El método ‘bastardeado’ –con antecedentes en la II Repúbli-ca- no sólo se empleó en la provincia por la derecha nacional; en la localidad palentina de Carrión de los Condes fue elegido alcalde Francisco Molina, un fuerzanovista candidato al Senado por UN pero liderando una lista de independientes. Como Unión Nacional o Falange también se obtendría algún concejal más en las provincias de Burgos, Palencia y Valladolid.40 Dentro del programa de actos organizados en nuestra provincia por Unión Nacional, se celebró el domingo un mitin en Valderas.

El mitin había despertado el consiguiente interés, congregándose con tal motivo numerosos simpatizantes de Unión Nacional en el Gran Cinema, local que vio ocupadas sus butacas, hasta el extremo de que muchas personas tuvieron que permanecer de pie, en los pasillos... Cf. El Pensamiento Astorgano, 13/II/1979, p. 341 Márquez Horrillo, D. (1977): Círculos José Antonio, Albia, Bil-bao, p. 41.42. Cf. “Falange Española de las JONS, futuro partido político”, El Adelanto Bañezano, 7/II/1976, p.5.43 Lo verdaderamente triste es que comparativamente ha sido me-jor en La Bañeza que en Astorga… Declaraciones del candidato Ángel García, cf. El Pensamiento Astorgano, 6/III/1979, p. 3.44 La única actividad que se recuerda fue la distribución por los buzones astorganos de la norma programática del partido, con la indicación de quién era su líder provincial. Con todo, en el área rural de influencia de La Bañeza esta organización política obten-dría casi los mismos votos que Unión Nacional. FE de las JONS (a) recibiría 159 votos en el partido judicial bañezano; 103 en la comarca de Astorga, y 42 en la zona de Valderas.45 El Pensamiento Astorgano exhibía el 19 de noviembre de 1977 varios contenidos ilustrativos: el editorial titulado “20-N-77”; un poema dedicado a F. Franco; un escrito de J. A. Primo de Rivera, y hasta una esquela de la Fundación Nacional Francisco Franco. Un año después, el diario maragato se adheriría a un homenaje tributado a El Alcázar en un hotel madrileño. 46 Ejemplo de lo dicho fueron algunos artículos de Mario Núñez Alonso (concejal por el tercio familiar), como el titulado “Des-pués de las elecciones” (16/VII/1977), o algunas notas editoriales posteriores: “En voz baja” (24/II/1981).47 Diario de León, 21/II/1979, p. 14.48 Cf. “Fraga: Adolfo Suárez es incapaz de aguantar cinco minu-tos de debate dialéctico”, El País, 20/II/1979, Madrid (consulta electrónica).49 Carlos Pinilla, como consejero nacional del Movimiento, aún disertaría en 1976 sobre el pensamiento de Ledesma y Primo de Rivera en el acto conmemorativo del nacimiento de FE de las JONS. Esta efeméride oficial se celebró en el teatro Calderón de Valladolid, hallándose presente una representación astorgana de la Delegación de la Juventud, en cuyas oficinas podía leerse por entonces la revista Fuerza Nueva. Fuente: La Voz de España, San Sebastián, 6/III/76, p. 6 y Francisco Cantón (comentario perso-nal).50 El Pensamiento Astorgano, 20/II/79, p. 1.51 Cenaría posteriormente en el Hostal ‘La Paz’. Cf. “Indiferente acogida al ministro”, El Pensamiento Astorgano, 22/II/79, p. 1. Dos días después hablaría en la ciudad de La Bañeza en otro mitin de UCD.52 Truchas, Castrillo de Cabrera, Encinedo, Santa Colomba de So-moza, Santa Elena de Jamuz, Val de San Lorenzo, Villamontán de la Valduerna...53 Los alcaldes serían Antonio López (S. Esteban de Nogales), Eladio Arce (Lucillo) y Florencio Centeno (Santiagomillas).