REFLEXIÓN: Yo recuerdo una ocasión cuando fui perdonado... Esto fue lo que paso... Yo recuerdo... Yo recuerdo...

ORACIÓN FINAL Oremos juntos: SEÑOR, a través de nuestros errores y fracasos nos muestras tu amor constante. Que tu presencia en nuestras vidas sea un recordatorio eterno de las lecciones que nos han acercado a tu amor infinito y a tu misericordia.

Te pedimos esto en el nombre de Jesús, nuestro Salvador. R. Amén.

JESUIT RESTORATIVE JUSTICE INITIATIVE 9309 Rayo Avenue, South Gate, CA 90280

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CORDERO DE DIOS Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo:

R. ten piedad de nosotros. Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo:

R. ten piedad de nosotros. Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo:

R. danos la paz.

Éste es el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo. Dichosos los invitados a la cena del Señor. R. Señor, yo no soy digno de que vengas a mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanar mi alma.

PADRE NUESTRO Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en tentación, y líbranos del mal.

R. Tuyo es el reino, tuyo el poder y la gloria, por siempre Señor. Amén.

SIGNO DE PAZ Jesús, que dijiste a tus apóstoles: “La paz les dejo, mi paz les doy”, no tengas en cuenta nuestros pecados, sino la fe de tu iglesia y, conforme a tu palabra, concédenos la paz y la unidad.

Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. R. Amén.

La paz del Señor esté siempre con ustedes. R. Y con tu espíritu.

RITO PENITENCIAL Señor, ten piedad. Cristo, ten piedad. Señor, ten piedad. Dios todopoderoso tenga misericordia de nosotros, perdone nuestros pecados y nos lleve a la vida eterna. R. Amén.

ORACIÓN INICIAL Oremos juntos: SEÑOR, a veces nos sentimos atrapados y abandonados. Concédenos la fuerza para encontrar tu misericordia y tu perdón y que no permanezcamos en nuestros errores sino que abramos los ojos a tu amor incondicional.

Te pedimos esto por Cristo, Nuestro Señor. R. Amén.

COMUNIÓN

SABIDURÍA DESDE LAS CELDAS Por muchos años en mi juventud pensé

que el perdón estaba fuera de mi alcance. Una persona como yo, acusado de crímenes espantosos de los cuales fui encontrado culpable. Yo merecía ser castigado y no ser perdonado por mis acciones. Yo tenía una familia que todavía me apoyaba pero yo no entendía el amor que ellos me tenían porque estaba muy enfocado en la negatividad de mi alrededor. Yo quería su perdón, pero no lo podía obtener. Entonces empecé a ir a la iglesia y el tema del perdón surgió. Leímos en la Biblia el pasaje: Lucas 17, 1-10, pero el verso 3 fue lo que llamo mi atención. “Por lo tanto, ¡tengan cuidado! Si tu hermano peca, repréndelo, y si se arrepiente, perdónalo”. Yo soy el pecador que peca y estoy arrepentido de mis acciones. Todo eso viene desde lo más profundo de mi corazón . A lgunas personas no conocen ni entienden mi arrepentimiento por mis acciones pero Dios puede ver mi corazón y yo se que el conoce todo. Ahora se que puedo ser perdonado y eso trae paz a mi corazón.

- Víctor, quien está en una Prisión Estatal de California.

Cuarto Domingo de Cuaresma, Ciclo C 31 de marzo, 2019

Regresando a casa

MEDITACIÓN: PERDÓNLITURGIA DE LA PALABRA

javier había estado en una pandilla desde la edad de once años todas las noches él se la pasaba con sus amigos

papá, quisiera tener el dinero que mi abuela dejó para mis estudios voy a ir a las vegas con mis amigos

el corazón de su padre estaba entristecido desde que su madre murió javier se había convertido en otra persona

mientras pasaron los años el padre vió a su hijo distanciarse cada vez más ahora su hijo quería el dinero para ir y gastarlo sin prudencia como padre ¿qué podía hacer? no podía hacer nada así que le dio el dinero a javier

javier se vio a sí mismo como el rey del mundo con toda la diversión que estaba teniendo con todas las mujeres que él había conocido casi no había dormido

pasaron las semanas se había gastado todo su dinero en sus amigos y en todo lo que las vegas podía ofrecer

después de tres días sin comida él se dio cuenta que los trabajadores del negocio de su padre tenían suficiente comida ahora él se estaba muriendo de hambre eran las cinco de la mañana se metió en su carro y comenzó a manejar por el desierto ¿qué le estaba pasando

a su vida? ¿quiénes eran sus amigos? mientras manejaba él vio salir el sol sobre las montañas y comenzó a reflexionar sobre su vida se dio cuenta que había cometido un gran error había derrochado todo su dinero en nada que valiera la pena se arrepentía de no haberlo gastado con prudencia él siempre había querido estudiar

javier estaba solo en su carro sus ojos llenandose de lágrimas mientras pensaba sobre su madre le hacía falta ella era la única persona que lo entendía él sabía que si ella estuviera viva él no se hubiera metido a la pandilla del barrio pero cuando lo hizo había un gran vacío una falta de propósito un sentimiento de no pertenecer y mientras el tiempo pasaba parecía como si él estaba gastando su juventud

sintió una cercanía con su madre él comenzó a platicar con ella como si ella estuviera viajando con él en el auto él sintió la tibieza de su mano

ahora su madre le estaba pidiendo a él que se deshiciera de su pistola su mejor amiga la sensación de calor estaba aún presente

está bien, jefa, dijo javier bajó el vidrio de la ventana

Secunda Lectura: 2 Corinthios 5, 17-21 Hermanos: El que vive según Cristo es una creatura nueva; para él todo lo viejo ha pasado. Ya todo es nuevo. Todo esto proviene de Dios, que nos reconcilió consigo por medio de Cristo y que nos confirió el ministerio de la reconciliación. Porque, efectivamente, en Cristo, Dios reconcilió al mundo consigo y renunció a tomar en cuenta los pecados de los hombres, y a nosotros nos confió el mensaje de la reconciliación. Por eso, nosotros somos embajadores de Cristo, y por nuestro medio, es como si Dios mismo los exhortara a ustedes. En nombre de Cristo les pedimos que se dejen reconciliar con Dios. Al que nunca cometió pecado, Dios lo hizo “pecado” por nosotros, para que, unidos a él, recibamos la salvación de Dios y nos volvamos justos y santos.

Palabra de Dios. R. Te alabamos, Señor.

Primera Lectura: Josué 5, 9a. 10-12 En aquellos días, el Señor dijo a Josué: “Hoy he quitado de encima de ustedes el oprobio de Egipto”. Los israelitas acamparon en Guilgal, donde celebraron la Pascua, al atardecer del día catorce del mes, en la llanura desértica de Jericó. El día siguiente a la Pascua, comieron del fruto de la tierra, panes ázimos y granos de trigo tostados. A partir de aquel día, cesó el maná. Los israelitas ya no volvieron a tener maná, y desde aquel año comieron de los frutos que producía la tierra de Canaán.

Palabra de Dios. R. Te alabamos, Señor.

Evangelio: Lucas 15, 1-3. 11-32 En aquel tiempo, se acercaban a Jesús los publicanos y los pecadores para escucharlo. Por lo cual los fariseos y los escribas murmuraban entre sí: "Éste recibe a los pecadores y come con ellos". Jesús les dijo entonces esta parábola: "Un hombre tenía dos hijos, y el menor de ellos le dijo a su padre: 'Padre, dame la parte de la herencia que me toca'. Y él les repartió los bienes. No muchos días después, el hijo menor, juntando todo lo suyo, se fue a un país lejano y allá derrochó su fortuna, viviendo de una manera disoluta. Después de malgastarlo todo, sobrevino en aquella región una gran hambre y él empezó a padecer necesidad. Entonces fue a pedirle trabajo a un habitante de aquel país, el cual lo mandó a sus campos a cuidar cerdos. Tenía ganas de hartarse con las bellotas que comían los cerdos, pero no lo dejaban que se las comiera. Se puso entonces a reflexionar y se dijo: '¡Cuántos trabajadores en casa de mi padre tienen pan de sobra, y yo, aquí, me estoy muriendo de hambre! Me levantaré, volveré a mi padre y le diré: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti; ya no merezco llamarme hijo tuyo. Recíbeme como a uno de tus trabajadores'. Enseguida se puso en camino hacia la casa de su padre. Estaba todavía lejos, cuando su padre lo vio y se enterneció profundamente. Corrió hacia él, y echándole los brazos al cuello, lo cubrió de besos. El muchacho le dijo: 'Padre, he pecado contra el cielo y contra ti; ya no merezco llamarme hijo tuyo’. Pero el padre les dijo a sus criados: '¡Pronto!, traigan la túnica más rica y vístansela; pónganle un anillo en el dedo y sandalias en los pies; traigan el becerro gordo y mátenlo. Comamos y hagamos una fiesta, porque este hijo mío estaba muerto y ha vuelto a la vida, estaba perdido y lo hemos encontrado'. Y empezó el banquete. El hijo mayor estaba en el campo y al volver, cuando se acercó a la casa, oyó la música y los cantos. Entonces llamó a uno de los criados y le preguntó qué pasaba. Éste le contestó: 'Tu hermano ha regresado y tu padre mandó matar el becerro gordo, por haberlo recobrado sano y salvo'. El hermano mayor se enojó y no quería entrar. Salió entonces el padre y le rogó que entrara; pero él replicó: '¡Hace tanto tiempo que te sirvo, sin desobedecer jamás una orden tuya, y tú no me has dado nunca ni un cabrito para comérmelo con mis amigos! Pero eso sí, viene ese hijo tuyo, que despilfarró tus bienes con malas mujeres, y tú mandas matar el becerro gordo'. El padre repuso: 'Hijo, tú siempre estás conmigo y todo lo mío es tuyo. Pero era necesario hacer fiesta y regocijarnos, porque este hermano tuyo estaba muerto y ha vuelto a la vida, estaba perdido y lo hemos encontrado' “.

Palabra del Señor. R. Gloria a ti, Señor Jesús.

y tiró a su fiel amiga con un sentimiento de pérdida de dolor en su cuerpo

algo importante en su vida había terminado no había retorno él se sentía más ligero disfrutando la soledad él pensó si sólo yo pudiera regresar al lugar de mi padre una vez más las lágrimas se acumularon en sus ojos ¿cuántas veces su padre había tratado de hablar con él? ¿cuántas veces su padre había tratado de invitarlo a comer?

javier se arrepentía de lo mal que había tratado a su padre cuando su padre sólo quería ser amigable mientras más trataba javier más lo rechazaba hasta que finalmente javier ya no sintió responsabilidad por nadie

javier quería regresar a su padre ¿todavía podré? se preguntó a sí mismo él había hecho tantas cosas malas ¿cómo podría perdonarlo su padre?

javier recordó la primera vez que su padre lo había visitadomientras estaba encarcelado él había sentido algo especial por su padre pero cuando fue liberado javier regresó a sus viejas maneras ahora su mayor deseo era cambiar para entrar a la casa de su padre para abrazarlo y pedirle perdón

¿realmente podría su padre perdonarlo?

Salmo Responsorial: Salmo 33, 2-3. 4-5. 6-7 R. Haz la prueba y verás qué bueno es el Señor.

Bendeciré al Señora todas horas, no cesará mi boca de alabarlo. Yo me siento orgulloso del Señor, que se alegre su pueblo al escucharlo.

R. Haz la prueba y verás qué bueno es el Señor. Proclamemos la grandeza del Señor, y alabemos todos juntos su poder. Cuando acudí al Señor, me hizo caso y me libró de todos mis temores.

R. Haz la prueba y verás qué bueno es el Señor. Confía en el Señor y saltarás de gusto, jamás te sentirás decepcionado, porque el Señor escucha el clamor de los pobres y los libra de todas sus angustias.

R. Haz la prueba y verás qué bueno es el Señor.

finalmente él se detuvo frente a la casa de su padre su padre había estado esperando en la ventana salió y corrió hacia el carro cuando se acercó abrió la puerta y javier salió del carro su padre lo abrazó las lágrimas saliendo en abundancia de los ojos de javier

él había regresado a casa a diferencia de otras ocasiones

javier, esta noche quisiera sacarte a comer a tu restaurante favorito sólo los dos quiero platicar contigo para ver que debemos hacer de ahora en adelante

miré el rostro de mi padre jefe, he querido decirte esto por mucho tiempo por favor perdóname perdóname yo sé que te he causado dolor y dolores de cabeza yo quiero cambiar no quiero causarte más dolor quiero regresar a la escuela quitarme los tatuajes y encontrar un empleo

el padre de javier permaneció en silencio

javier, yo te amo más de lo que tú te imaginas por supuesto que te perdono

a javier no le importó quien estuviera mirando él dejó su asiento para abrazar a su padre