Promoción turística - La Llanuralallanura.es/llanura/La-Llanura-63.pdf · una promoción...

12
La actividad económica que ge- nera el turismo es un elemento de desarrollo que Arévalo tiene a su alcance. Ya dijimos en septiembre de 2010 que era necesario contar con un pro- yecto conjunto y global para promo- cionar Arévalo como producto turís- tico. Todos los implicados (empresas, administraciones y ciudadanos) ac- tuando conforme a un plan de actua- ción elaborado conjuntamente por to- dos ellos. Hemos incidido en ello siempre que hemos tenido ocasión. La activi- dad turística, como actividad empre- sarial, se basa en dos aspectos funda- mentales: LA DIFERENCIACIÓN Y LA FIDELIZACIÓN. Es preciso cap- tar la atención del visitante, en lo que competimos con otras localidades con este mismo objetivo, por lo que nos vemos obligados a ser mejores en esta tarea; y una vez acuden a nuestra invi- tación atenderles lo mejor que poda- mos para garantizar una continuidad en el flujo de visitas. El mayor atractivo turístico de Aré- valo se encuentra en el conjunto histó- rico y su patrimonio natural. Debemos mantener en perfecto estado el entra- mado de calles y plazas y los edificios singulares que han sobrevivido a la ac- ción del hombre y el paso del tiempo. Contamos, además, con la posibilidad real de integrar en este conjunto urba- nístico el patrimonio natural que supo- nen las riberas que circundan Arévalo, para mayor disfrute del visitante, que puede visitar una ciudad histórica al tiempo que se solaza en plena natura- leza. Sin pretender desmerecer al resto de la ciudad, hay que conseguir esa diferenciación precisamente atendien- do mejor el estado de conservación y mantenimiento de nuestro casco his- tórico, verdadero encanto con el que ganar la atención del visitante. Por ello resulta importante cuidar en extremo los detalles. Si no han cambiado las cosas, al menos públicamente nada se ha dicho, formamos parte de la asociación “No te pases Siete Pueblos”, a la que se sigue contribuyendo sin que veamos una promoción turística al menos si- milar a la que ofrecen pueblos como Cuéllar, Riaza o Ayllón. De hecho, en el canal de televisión que existe en su WEB, la última referencia a Arévalo es del pasado año 2013 con motivo de las Edades del Hombre. Otros como Olmedo, Peñafiel, Co- ca y varios pueblos de la provincia de Ávila, son competidores en ese objeti- vo de atraer turismo a sus respectivas localidades y parece, por lo que se ve en su promoción turística, que nos lle- van cierta delantera. Sería bueno saber dónde se está promocionando Arévalo para aumentar el número de visitantes. Al tiempo que sería deseable añadir a los habituales medios de promoción la WEB, pues por su inme- diatez y facilidad de llegar al consumidor final están demostrando su importan- cia en la consecución de ese objetivo de promoción turís- tica. La realidad nos muestra que nos comportamos, en conjunto, como si nadie nos visitara de lunes a viernes. Tremendo error, pues la imagen de la ciudad se ve seriamente perjudicada. Al no poder visitar esos edificios em- blemáticos que han captado su interés, como el Castillo, La Lugareja, reta- blos, imágenes y edificios singulares, los visitantes, clientes les llaman otros, se van desconsolados, desconcertados y desilusionados. Y este es el efecto contrario al que interesa y se persigue. Al visitante no hay que exprimir- le como a un limón, hay que tratarle como a un invitado al que agasajar y complacer, pues se trata de que reci- ba la mejor de las impresiones y re- grese en un futuro. Nos interesa que recomienden a sus amistades la visita a Arévalo y su comarca como una acti- vidad satisfactoria y placentera, de las que dejan un imborrable recuerdo. Así se consigue la fidelización. Estamos convencidos que no de- bemos dejar pasar más tiempo sin que las partes con intereses en el turismo, como actividad económica, pongan manos a la obra y comiencen a ela- borar un proyecto serio, riguroso y atractivo; que permita la participación de todos en su elaboración y que les implique en la consecución de esos objetivos. El turismo es un motor de desarrollo que Arévalo no se puede permitir desaprovechar. AÑO VI TERCERA ÉPOCA — NÚMERO 63 ARÉVALO — AGOSTO DE 2014 http://lallanura.es Promoción turística

Transcript of Promoción turística - La Llanuralallanura.es/llanura/La-Llanura-63.pdf · una promoción...

Page 1: Promoción turística - La Llanuralallanura.es/llanura/La-Llanura-63.pdf · una promoción turística al menos si-milar a la que ofrecen pueblos como Cuéllar, Riaza o Ayllón. De

La actividad económica que ge-nera el turismo es un elemento de desarrollo que Arévalo tiene a su alcance.

Ya dijimos en septiembre de 2010 que era necesario contar con un pro-yecto conjunto y global para promo-cionar Arévalo como producto turís-tico. Todos los implicados (empresas, administraciones y ciudadanos) ac-tuando conforme a un plan de actua-ción elaborado conjuntamente por to-dos ellos.

Hemos incidido en ello siempre que hemos tenido ocasión. La activi-dad turística, como actividad empre-sarial, se basa en dos aspectos funda-mentales: LA DIFERENCIACIÓN Y LA FIDELIZACIÓN. Es preciso cap-tar la atención del visitante, en lo que competimos con otras localidades con este mismo objetivo, por lo que nos vemos obligados a ser mejores en esta tarea; y una vez acuden a nuestra invi-tación atenderles lo mejor que poda-mos para garantizar una continuidad en el flujo de visitas.

El mayor atractivo turístico de Aré-valo se encuentra en el conjunto histó-rico y su patrimonio natural. Debemos mantener en perfecto estado el entra-mado de calles y plazas y los edificios singulares que han sobrevivido a la ac-ción del hombre y el paso del tiempo. Contamos, además, con la posibilidad real de integrar en este conjunto urba-nístico el patrimonio natural que supo-nen las riberas que circundan Arévalo, para mayor disfrute del visitante, que puede visitar una ciudad histórica al tiempo que se solaza en plena natura-leza. Sin pretender desmerecer al resto

de la ciudad, hay que conseguir esa diferenciación precisamente atendien-do mejor el estado de conservación y mantenimiento de nuestro casco his-tórico, verdadero encanto con el que ganar la atención del visitante. Por ello resulta importante cuidar en extremo los detalles.

Si no han cambiado las cosas, al menos públicamente nada se ha dicho, formamos parte de la asociación “No te pases Siete Pueblos”, a la que se sigue contribuyendo sin que veamos una promoción turística al menos si-milar a la que ofrecen pueblos como Cuéllar, Riaza o Ayllón. De hecho, en el canal de televisión que existe en su WEB, la última referencia a Arévalo es del pasado año 2013 con motivo de las Edades del Hombre.

Otros como Olmedo, Peñafiel, Co-ca y varios pueblos de la provincia de Ávila, son competidores en ese objeti-vo de atraer turismo a sus respectivas localidades y parece, por lo que se ve en su promoción turística, que nos lle-van cierta delantera. Sería bueno saber dónde se está promocionando Arévalo para aumentar el número de visitantes. Al tiempo que sería deseable añadir a los habituales medios de promoción la WEB, pues por su inme-diatez y facilidad de llegar al consumidor final están demostrando su importan-cia en la consecución de ese objetivo de promoción turís-tica.

La realidad nos muestra que nos comportamos, en conjunto, como si nadie nos visitara de lunes a viernes.

Tremendo error, pues la imagen de la ciudad se ve seriamente perjudicada. Al no poder visitar esos edificios em-blemáticos que han captado su interés, como el Castillo, La Lugareja, reta-blos, imágenes y edificios singulares, los visitantes, clientes les llaman otros, se van desconsolados, desconcertados y desilusionados. Y este es el efecto contrario al que interesa y se persigue.

Al visitante no hay que exprimir-le como a un limón, hay que tratarle como a un invitado al que agasajar y complacer, pues se trata de que reci-ba la mejor de las impresiones y re-grese en un futuro. Nos interesa que recomienden a sus amistades la visita a Arévalo y su comarca como una acti-vidad satisfactoria y placentera, de las que dejan un imborrable recuerdo. Así se consigue la fidelización.

Estamos convencidos que no de-bemos dejar pasar más tiempo sin que las partes con intereses en el turismo, como actividad económica, pongan manos a la obra y comiencen a ela-borar un proyecto serio, riguroso y atractivo; que permita la participación de todos en su elaboración y que les implique en la consecución de esos objetivos. El turismo es un motor de desarrollo que Arévalo no se puede permitir desaprovechar.

AÑO VI

TERCERA ÉPOCA — NÚMERO 63

ARÉVALO — AGOSTO DE 2014

http://lallanura.es

Promoción turística

Page 2: Promoción turística - La Llanuralallanura.es/llanura/La-Llanura-63.pdf · una promoción turística al menos si-milar a la que ofrecen pueblos como Cuéllar, Riaza o Ayllón. De

pág. 2 la llanura 63 - agosto de 2014

La estación fantasma

LA LLANURA de Arévalo.Publicación editada por:

“La Alhóndiga de Arévalo”, Asociación de Cultura y Patrimonio.

Avda. Emilio Romero, 14-B - 05200 Aré[email protected]

Número 63 - agosto de 2014 Depósito legal: AV-85-09

Director:Fernando Gómez Muriel

Redacción:Javier S. SánchezJosé Fabio López SanzJuan A. Herranz LópezJuan C. López PascualJuan C. Vegas SánchezJulio Jiménez MartínLuis José Martín García-SanchoRicardo Bustillo MartínSegundo Bragado Jiménez

En este número: Elena Clavo Martín, Luis José Martín García-Sancho, José María Mediero, Alicia Zazo Puras, Juan C. López, Cesar Martín Oviedo, Ricardo Bustillo Mar-tín, Luis López Prieto y Luis García Sancho.

Fotografías: Fernando Gómez Muriel, Luis José Martín, J. Grandes, David Rubio Ga-lindo, Pilar Canora y archivo de “La Alhón-diga”.

Diseño y maquetación: “La Alhóndiga”, Asociación de Cultura y Patrimonio.

Imprime: Imprenta Cid

Tertulias literarias en julio y agosto. El pasado 18 de julio tuvo lu-gar en la sala “Adaja” de la Posada Real “Los cinco Linajes” una nueva tertulia li-teraria dedicada en esta ocasión a la vida y obra de Julio Escobar Cubo. En torno a los actos conmemorativos del veinte aniversario de su fallecimiento tuvimos ocasión de profundizar en la obra litera-ria de este costumbrista arevalense. Los asistentes al acto pudieron recoger para su lectura algunos de los títulos de sus obras que, desde nuestra Asociación cul-tural se han ido adquiriendo en librerías “de lance”, y que forman la incipiente Biblioteca de Autores Arevalenses que estamos organizando.

Días después, el uno de agosto, tuvo lu-gar la tertulia correspondiente a este mes veraniego. En este caso el autor elegido fue el poeta zamorano Claudio Rodrí-guez cuya vida y obra tuvimos ocasión de conocer guiados de forma excepcio-nal por nuestro compañero de redacción Ricardo Bustillo.

Actos en conmemoración al ilustre Julio Escobar Cubo. A lo largo del pasado mes de julio y co-

incidiendo con el veinte aniversario del fallecimiento del escritor arevalense Julio Escobar, desde “La Alhóndiga de Arévalo” hemos realizado una serie de actos conmemorativos. Destacar la tertu-lia literaria reseñada en la nota anterior, la limpieza y resaltado de la placa a él dedicada que se encuentra en la fachada de la casa en que vivió en la calle Za-pateros y un pequeño homenaje floral y literario que se le hizo en el mausoleo en que descansan sus restos en el cemente-rio arevalense.

Por cierto, hacer notar que no estaría de más realizar algunas pequeñas obras de reparación del tejado del citado mauso-leo y así evitar que, debido a las goteras, se siga deteriorando. Teniendo en cuen-ta que dejó buena parte de su legado a nuestro Ayuntamiento, algo se podría hacer.

Al ver esa noticia en el periódico, fui corriendo a casa de Luna.

Ella estaba dándole un zumo a su hermano.

-¡¡Mira lo que he encontrado!!- gri-té entusiasmada.

Del susto, derramó la bebida enci-ma de David.

El pequeño se puso a llorar y mi amiga me miró con el ceño fruncido. Al parecer no compartía mi entusias-mo. Ignorando su mirada, leí el frag-mento que llamó tanto mi atención:

-“El dueño de la antigua estación de tren fue hallado muerto junto a las vías anoche. Se desconoce qué hacía a esas horas en una estación abandonada y cuál fue el motivo de su muerte. Han encontrado en sus manos una llave ensangrentada y un mapa. La víctima murió en circunstancias desconocidas.

La policía investigará la llave y el mapa, del que no se sabe su proceden-cia”

La cara de Luna cambió radical-

mente. Me miró atentamente, sonrien-do.

David secó sus lágrimas y se acercó hasta nosotras, como el cotilla que era.

-¡Eso es un misterio!- afirmó Luna, alegre.- Tenemos que ir allí, investigar y…

-Mamá no nos dejará- David la bajó de las nubes.

-Mamá no se enterará, enano -gru-ñó su hermana, molesta.

-Tienes razón-la apoyé- Lo hare-mos esta tarde, y a escondidas.

Dicho esto, nos preparamos para la aventura. Tras coger nuestras mochi-las, nos fuimos. Llegamos cansadas y de mal humor. David no paró de que-jarse en todo el camino. No fue difícil entrar dentro. Todas las ventanas esta-ban rotas.

Hacía demasiado frío para ser ve-rano. Aquel lugar me daba mala espi-na. Recorrimos todos los rincones. A punto de subir unas escaleras, alguien gritó:

-¡¡Alto!! No podéis entrar ahí-¿Mamá?- ¿qué hacía aquí mi ma-

dre? ¿Por qué no podíamos entrar?- ¿Y eso por qué?

-Pues…-dudó- Porque está en mal estado.

Miré hacia las escaleras. No es-taban en mal estado. Excepto por las manchas de lo que espero que no sea sangre.

Nos sacó de allí a rastras y nos pro-hibió volver. Monté en el coche y miré atrás.

Apoyado en la puerta de la esta-ción… ¡estaba el hombre muerto!

No sé si me lo imaginé. Pero lo que sí que sé es que voy a volver allí y re-solver este misterio.

Elena Clavo Martín

Actualidad

Page 3: Promoción turística - La Llanuralallanura.es/llanura/La-Llanura-63.pdf · una promoción turística al menos si-milar a la que ofrecen pueblos como Cuéllar, Riaza o Ayllón. De

ros; taller de Pintura “Ven a pintar con Amigos de Madrigal” para niños meno-res de 16 años o la conferencia “Arte en Madrigal en tiempos de los Reyes Cató-licos” a cargo de Carlos Martín Serrano.

- Martín Muñoz de las Posadas acogió el 1 de agosto la conferencia “El Greco de Martín Muñoz de las Posadas” a car-go del profesor Pedro Sáez León.

- Narros del Castillo nos sorprende cada verano con un muy completo programa cultural que podemos consultar en su pá-gina Web: http://www.alsolquemasca-lienta.es/web/. A destacar la interesante conferencia que estuvo a cargo de Án-gel Martín López titulada “Artesonados y Cubiertas Mudéjares en la comarca de La Moraña” así como las diversas conferencias, conciertos y talleres que se organizan en la localidad a lo largo de todo este mes.

- Orbita celebró el pasado 7 de agosto su II Gran Ruta Nocturna “Alrededores de Orbita”. Un buen número de participan-tes realizaron este interesante paseo en bici por los alrededores de esta localidad.

Marcha nocturna con la luna llena. El Club de Senderismo “Los Pi-nares de Arévalo” organizó el pasado nueve de agosto la primera marcha noc-turna a la luz de la Luna. La marcha que se hizo por la ruta que circunda Arévalo por ambos ríos, Adaja y Arevalillo, ade-más de por el camino de la Loma, contó con un buen número de participantes.

El Ayuntamiento derriba varios metros del pretil del puente de los Barros. Las tareas de desbroce llevadas a cabo por el Ayuntamiento de Arévalo en las cuestas del Arevalillo y del Adaja y realizadas con maquinaria pesada, además de eliminar una buena cantidad de cambroneras, arbusto espi-noso que actúa como cortafuegos natu-ral, ha dañado el pretil del puente de los Barros, ya que la misma pala utilizada para el desbroce ha derribado varios me-tros del mencionado pretil, rompiendo o deteriorando seriamente algunas de las piedras calizas que coronaban este valio-so monumento mudéjar de arquitectura civil.

Se da la circunstancia de que los daños han sido ocasionados al arrancar los es-pinos de cambronera (Lycium barbarum) que crecían junto al puente. En incendios acaecidos en las cuestas en veranos an-teriores estos arbustos espinosos se han comportado como cortafuegos naturales, no dejando que el fuego los atravesara y permaneciendo verdes después de las llamas.

Una simple comprobación, por parte de operarios o capataces, de lo que se encon-traba detrás de las cambroneras hubiera evitado el derribo del pretil del puente. Esperemos que la restauración del mo-numento no se haga esperar y no caiga en el saco roto de la inacción municipal, el mismo saco en el que han caído y si-guen cayendo importantes monumentos de nuestro más valioso patrimonio.

Verano cultural en nuestros pueblos. Como es habitual en el mes de agosto de cada año los pueblos de la Tierra de Arévalo y Moraña despliegan su actividad cultural buscando mejorar año tras año y atraer de esta forma al ma-

pág. 3la llanura 63 - agosto de 2014

Registro Civil:Movimiento de población julio/2014 Nacimientos: niños 5 - niñas 2Matrimonios: 3Defunciones: 6

yor número de visitantes.

- Pudimos disfrutar el pasado 9 de agosto en la localidad de El Bohodón del Gru-po Mayalde. En una magnífica noche del mes de agosto un pequeño pueblo de nuestra tierra da muestras de saber hacer y nos traen el Folclore tradicional, la Sa-biduría popular que Eusebio, Pilar, Lau-ra y Arturo han encontrado en las gentes humildes de los pequeños pueblos de las tierras castellanas.

- En Coca, como preludio a sus fiestas de agosto han realizado los días 9 y 10 su Mercado Romano Ciudad de Cavca MMXIV. Con esta actividad pretenden destacar del resto de poblaciones del en-torno, poniendo un sello de originalidad en la ya un tanto saturada oferta de mer-cados medievales que se realizan cada verano.

- En el programa cultural de Fontiveros destacan diversos conciertos musicales, exposiciones de pintura en el Espacio San Juan de la Cruz “Llama de Amor Viva”, la “Ruta por los secretos de Fonti-veros” o “La vida de San Juan de la Cruz a tenor de sus poesías”.

- Gotarrendura acogió el pasado siete de agosto la IV edición de “Por los ca-minos de la Reina” en la que se realiza-ron diversas representaciones de retazos relacionados con Isabel de Castilla así como de la Santa de Ávila.

- Ayuntamiento y asociaciones de Ma-drigal de las Altas Torres comparten diversas actividades culturales entre las que destacamos: Exposición de cuadros de Antonia España Cano en el Ambigú; concierto y autosacramental “El Gran Teatro del Mundo” de Pedro Calderón de la Barca a cargo del grupo “Dolce Tormento”, en el Convento de Extramu-

Page 4: Promoción turística - La Llanuralallanura.es/llanura/La-Llanura-63.pdf · una promoción turística al menos si-milar a la que ofrecen pueblos como Cuéllar, Riaza o Ayllón. De

pág. 4 la llanura nº 63 - agosto de 2014

La ciudad de Arévalo vive en este año un centenario muy especial que, aunque pase desapercibido, forma parte de la historia de la ciudad. Se-gún la tradición, ya que no hay datos escritos que lo puedan contrastar, San Francisco de Asís, en su peregrinación a Santiago, estuvo en Arévalo, villa en la que, como en otros tantos lugares de nuestra geografía, quiso dejar huella de su presencia fundando una casa para su reciente orden, lo que más tarde fue el Real Convento de San Francisco de la Observancia, iniciando la presencia de los franciscanos en nuestra ciudad, presencia que con diferentes congrega-ciones y reglas, ha estado presente en conventos y hospitales a lo largo de los siglos, y de la que ya sólo quedan las Hermanas Franciscanas del Buen Con-sejo, quienes regentan la residencia de San Miguel.

Los antiguos cronistas, en sus es-critos sobre la presencia de la Orden Franciscana en Arévalo, afirman que la capilla del convento de los Observan-tes se construyó en lo que fue la celda que utilizó el santo de Asís en su estan-cia en Arévalo. Los franciscanos han estado presentes además en el Hospi-tal de san Lázaro, regido por la regla descalza, así como por otros conventos femeninos como el de la Encarnación, ocupado por franciscanas clarisas, de la misma orden que las que vivieron en el convento de Santa Isabel o “Las Montalvas”.

El convento adquirió cierta impor-tancia durante el reinado de Juan II, gracias a una profunda renovación en sus muros realizada gracias al bene-ficio de quien fue su primera esposa, María de Aragón, aunque curiosamen-te fue el lugar en el que fueron enterra-

dos, su segunda esposa, Isabel de Por-tugal, el hijo menor de ésta, el infante Alfonso, quienes fueron con posterio-ridad trasladados a la Cartuja de Mi-raflores, así como Isabel de Barcelos, abuela materna de lsabel la Católica, y de quien no hay datos de su traslado, por lo que sus restos pueden reposar en lo que fuera la iglesia de este cenobio.

Este monasterio arevalense fue du-rante la Edad Media una de las casas más importantes de la orden en Espa-ña. Protegido por la monarquía desde su fundación, hay historiadores que in-cluso afirman que llegó a ser la sede de las Cortes de Enrique IV en 1455, aun-que este hecho no ha llegado a pasar a la historia como una sesión cortesana sino como reuniones del Consejo del Reino presididas por el propio sobe-rano, con la presencia de importantes procuradores.

El convento de San Francisco de la Observancia estuvo en activo hasta que el 23 de octubre de 1809, el últi-mo padre guardián entregara la pro-piedad y sus bienes al administrador de Bienes Nacionales. Entre sus obras de arte destaca la escultura dedicada a su fundador, realizada por Gregorio Fernández, que en la actualidad se en-cuentra presidiendo un retablo de la iglesia parroquial de Santo Domingo de Silos. Se puede admirar en estos días en la exposición que, con motivo de la efeméride de la presencia del san-to de Asís, se ha organizado en Ciudad Rodrigo.

En los restos de este convento se puede apreciar la importancia que pudo tener, tanto por su magnitud como por la fortaleza, pues 800 años después de su creación y más de medio

La Huella de San Francisco de Asís cumple ocho siglos en Arévalo

C/ Palacios de Goda, 7 (Polígono Industrial) · Arévalo

Tfno. y Fax: 920 303 254 - Móvil: 667 718 104

milenio desde aquella notable rehabili-tación auspiciada por la primera espo-sa de Juan II, se ven en sus muros los restos de una importante edificación.

Desde el mes de julio y hasta sep-tiembre de este año y durante los fines de semana se pueden visitar las Capi-llas Reales Rehabilitadas del Conven-to de San Francisco de Aréval. Su pro-pietario, Luis Alberto Antonio Martín, quien fuera alcalde entre 1987 y 1995, ha cedido este espacio para poder al-bergar una exposición en la que se muestra una parte de la obra pictórica del fallecido Francis Daubresse, un artista muy relacionado con nuestra ciudad, así como fotografías de José Miguel Negro, gracias a quien fuera pareja del pintor, Amparo López.

Fernando Gómez Muriel

Page 5: Promoción turística - La Llanuralallanura.es/llanura/La-Llanura-63.pdf · una promoción turística al menos si-milar a la que ofrecen pueblos como Cuéllar, Riaza o Ayllón. De

Aquella tarde de final de verano de-cidimos ir a dar un paseo al río.

El sol está sobre la ladera de po-niente. Dejamos el coche en la ermita. Abro el portón para que baje Blanqui-ta. Enseguida se dirige hacia el río. El camino de bajada se divide en dos. Toma el de la izquierda, nosotros el de la derecha. Enseguida oímos el trote de la perra, nos alcanza, nos adelanta. Baja hacia el río olisqueando cada dos por tres, caminando a paso rápido con el rabo alto pero ligeramente inclinado a la derecha. El camino transcurre en-tre espinosos piornos blancos, enebros y algún que otro pino joven.

La temperatura baja gradualmen-te a medida que descendemos y nos aproxímanos al cauce del río. Hay más de cinco grados de diferencia entre la llanura cerealista y el valle estrecho y profundo del Adaja. Nos asomamos al pozo abandonado, que antaño re-gara una huerta. Alguien ha arrojado troncos y ramas, tiene bastante agua. Oímos el reclamo estridente del torce-cuellos procedente de un grupo cerca-no de sauces sargatillos y chopos jó-venes, enmarañados por zarzamoras, majuelos y saúcos. Le buscamos pero es invisible, no le vemos. Ana se aga-cha un instante. Coge una hoja ater-ciopelada, se la frota entre las manos. Me las pone en la nariz. Uhmm… Qué bien huele. Es menta.

Los pinos de la ladera del ponien-te comienzan a proyectar su sombra alargada sobre el valle a medida que el sol desciende. La pradera de ribera acaba en la ladera, sólo se puede pasar siguiendo la estrecha e inclinada vere-da abierta, seguramente, por jabalíes y zorros, discurre paralela al río, al pie de las cuestas. Blanquita va delante, abriendo camino. Nos entretenemos en una zarzamora que ofrece sus frutos maduros y casi negros a todo aquel que quiera comerlas, ya sea persona, pája-ro, roedor, garduña, tejón o zorro. Es-tán en su punto, jugosas y dulces. Ana decide llevar unas cuantas a David y María que se han quedado en casa. Para que las coman solas o con zumo de naranja y azúcar.

Abajo, el río se divide en dos de-jando una isla en el centro. El brazo principal tiene corriente, el secundario es casi una charca. Debido a una cre-

cida del río por las pasadas tormentas se ha llenado de agua pero ha queda-do casi aislado del brazo principal. Un buen número de barbos de gran tamaño han quedado aislados en este cauce secundario esperando una nueva crecida o encontrar una difícil salida. Nos quedamos un buen rato, estáticos, contemplando sus idas y venidas, algu-nas veces pasan en un banco de más de diez peces.

De pronto, una forma mucho ma-yor pasa rauda persiguiendo a los bar-bos, luego otra. Se impulsan con las patas traseras y contonean el cuerpo y la cola para dirigir sus rápidos movi-mientos tras los peces.

- Son nutrias –le digo a Ana al oído en un tono casi imperceptible- Están pescando.

Miro hacia la perra. Silbo imitando al carbonero para no alterar la pesca de las nutrias. Pero no me hace caso, está olisqueando un terrón de arena unos metros más adelante. En raras ocasio-nes las nutrias, especialmente si tienen cachorros, han atacado a perros peque-ños en las aguas donde han establecido su territorio de cría. Pero no parece que Blanquita se quiera acercar a la orilla. Pasa de las nutrias, entretenida con los efluvios campestres que tanto le gus-tan.

Ana y yo nos sentamos un buen rato en la vereda que transcurre por encima del cauce. La perra va y viene. Nos mira. No nos comprende ¿Por qué interrumpimos el paseo?

Las vemos pasar varias veces por aquel brazo de río sin corriente. Has-ta que dejan de verse peces y nutrias. Permanecemos atentos. Se escucha un chapoteo sordo y el sonido de la fronda al ser agitada. Parece que han salido del agua. Miramos hacia la isla puestos en pie. La densa e intrincada vegetación de ribera nos impide ver lo que está pasando en la isla. Sólo los sonidos nos indican lo que sucede.

Unos alegres gritos entre guturales y gruñidos nos indican que pueden tener cachorros. Luego, el inequívoco rui-do que produce la carne cruda al ser masticada, nos cuenta que el éxito en la pesca está siendo compartido con la familia, formada, seguramente, por la hembra adulta, alguna de sus hijas jó-venes y la camada de cachorros que se-rán ya casi tan grandes como los adul-tos. Los ruidos del banquete cesan. Esperamos un rato a ver qué pasa. No vuelven a pescar, deben haber tenido bastante. De todas formas los barbos han desaparecido.

Decidimos dar la vuelta. Silbo a Blanquita para que nos adelante. Re-gresamos a la pradera del pozo. La ri-bera se abre y nos deja ver más cielo. Cerca del camino de subida recono-cemos la silueta de un halcón. Vuela al acecho intentando detectar alguna presa. Cuando pasamos por un gru-po de majuelos y escaramujos levan-tamos a un pito real, seguramente no haya visto a la rapaz porque, en lugar de refugiarse en la ribera, vuela lade-ra arriba. El halcón le detecta. Encoge las alas y hace un picado espectacular, en línea recta hacia donde se dirige el pito. Justo en el último instante el pájaro carpintero da un brusco giro y logra escapar de las garras del halcón refugiándose en un cerrado grupo de enebros.

Llegamos al coche aparcado en la llanura cerealista junto a la ermita, contentos. Apenas dos horas de rela-jado paseo pero que han dado mucho de sí. Con los cinco sentidos, una vez más, hemos observado algo cotidiano en la naturaleza pero que pasa desaper-cibido para la mayoría de la gente. Ya he contado en otras ocasiones que son muchos los que me dicen que no les gusta nuestra tierra tan monótona y aburrida. Bueno, hay gustos para todo. Ellos se lo pierden.

Luis José Martín García-Sancho

pág. 5la llanura nº 63 - agosto de 2014

Tarde de pesca

Page 6: Promoción turística - La Llanuralallanura.es/llanura/La-Llanura-63.pdf · una promoción turística al menos si-milar a la que ofrecen pueblos como Cuéllar, Riaza o Ayllón. De

pág. 6 la llanura nº 63 - agosto de 2014

Una vieja historia de amor y sangre en un vie-jo pueblo de La Moraña.

Se había recogido la era. El grano de sementera estaba ya seleccionado y acarreado en la troje de la panera. La paja rebosaba por los bocines en los pajares repletos. Bueyes y mulas sacaban el estiércol de los muladares esparciendo un tufo ácido sobre el rastrojo que el viento revocaba hacia la solana, lugar que ya empezaba a ci-tar a los más ancianos barruntando el invierno, al calor del cantón. Los mo-zos aguardaban impacientes el salario anual del día grande de San Miguel.

Aquél 18 de septiembre de 1859, el alcalde se preparaba para entrar plácidamente a la alcoba molido del día y las faenas, cuando alguien gritó desde la cancela: - ¡Un muerto! ¡Un muerto, en la trasera de Inocencio! A las diez ya no se veía y mandó que le sacasen un candil para alumbrarse. Junto al albañal, encontró al propio Inocencio tendido bocabajo con un moratón visible en la nuca. El cuerpo estaba aún caliente.

El chisme, que hasta entonces no había pasado de hablillas sordas en la cantina y entre los mozos al pasarse la bota en la era, se comenzó a tratar en voz alta para señalar como verdade-

ra causa del homicidio el rumoreado adulterio de la esposa del finado, Pie-dad, perpetrado con el Matías Pinto, uno de los antiguos criados de la casa que había sido despedido tiempo atrás por Inocencio, quizá por un barrunto de la afrenta, quizá por una faena mal cumplida por el mozo.

La ropa sucia se ha de lavar en la propia casa, lo que no suele impedir que el dedo colectivo señale sin dudar al que viera como ladrón de esposas, también, como autor del homicidio. Y aún, si hubiese mal año, sería, a ojos de todos, culpable de la sequía.

Matías y su primo Jeremías Pinto fueron inmediatamente conducidos al calabozo de Arévalo gracias a la te-nue declaración de un testigo que ase-guró que había visto a dos hombres agachados junto a la laguna, que él mismo les tiró un canto y que, al huir estos, creyó reconocerlos.

Matías debía de tener un nudo en las tripas estrangulando su concien-cia porque pronto pidió al carcelero que le llevase hasta el Juez para ali-viar el peso de su alma, ampliando su primera indagatoria y arrojando

claridad sobre el suceso. Matías confesó, ante Dios y la Justicia Terrena. Re-conoció, traicionando su deber de discreción como caballero, que estaba en tratos amorosos e impuros con Piedad, que no había podido evitar seguir bus-cándola aún cuando ya había sido desterrado de la casa por su amo y reciente víctima. Y que ese fuego, que sólo podía apagar la ahora viuda de Inocencio, había sido avivado por esta, con argucias propias del sexo débil, más robus-to en estos campos, para, en definitiva, empujarle a golpear mortalmente a Inocencio, único estorbo de ese irresistible idilio. Que la propia Piedad ha-ría que su marido saliese a los atrases, a través del

corral por las puertas carreteras y que en todo ello le acompañaría y asistiría su primo Jeremías Pinto que, a la sa-zón, había cumplido bien, hasta aho-ra, como alcahuete. No obstante ese día, dijo, tenía la intención de quitarle esas locas ideas a Piedad, y con ese fin, la esperó con su primo sentado en un montón de estiércol. Que en lugar de ella apareció su esposo Inocencio y queriéndose defender de una segu-ra, legítima y justa agresión de éste, tropezó con un malévolo azadón, allí olvidado, con el cual asestó el golpe. Que se asustaron al ver que no se mo-vía, abandonándole precipitadamente sin reparar en que todavía portaba la improvisada arma. Que volvieron a ver si aún podían socorrerle pero que al ver que estaba muerto sacaron el cadáver a la calle y tiró el azadón a un pozo. Que se fueron a la laguna a lavarse las manos y después a casa a ver si tenían todavía sangre.

En parecidos términos se expresó Jeremías Pinto y, por su parte, Piedad interrogada en un laberíntico careo manifestó: “Que no puede menos de confesar que son ciertos los hechos en las declaraciones por el Jeremías y Matías a su persona referentes” Frase que se erigió en la única prueba sólida de la acusación contra la infiel e ingra-ta esposa como instigadora parricida.

El caso estaba cerrado y el suma-rio concluso. Piedad, Matías y Jere-mías Pinto ya eran condenados. La noticia fue relatada con los más insig-nificantes detalles en las plazas de los pueblos, en el mercado de Arévalo, en las carretas por los caminos… La imaginación no sólo suplió los impe-dimentos del secreto de sumario sino que también satisfizo el voraz apetito del más malicioso morbo del interlo-cutor: “Le clavó una reja en el ojo y le salió por la nuca.” “Por lo visto se citaban en el pajar, cuando el marido estaba en el campo o en la era ¡y el primo vigilaba, para que no los pi-llasen!” “Pues dicen que si el chico más pequeño era del amante… Y el marido ¿ya se figuraba algo? ¡bendito mío!”

De hecho, en primera instancia la

Page 7: Promoción turística - La Llanuralallanura.es/llanura/La-Llanura-63.pdf · una promoción turística al menos si-milar a la que ofrecen pueblos como Cuéllar, Riaza o Ayllón. De

pág. 7 la llanura nº 63 - agosto de 2014

sentencia condenaba a los tres acusa-dos a morir en garrote. La Audiencia, tras dos discordias con ocho magis-trados que no se pusieron de acuerdo, hubo de reunir a once magistrados para finalmente dejar en cadena per-petua el castigo de Jeremías Pinto pero mantener la pena de muerte para los dos amantes.

Ahora bien, la declaración de Pie-dad no era válida, ni podía tenerse como confesión, y así lo expresó su excelente abogado, nada menos que el insigne don Manuel Silvela, egregio abulense muy conocido en la Corte, que aceptó su defensa como un reto a su lucidez y buen sentido. Adentrán-dose en el piélago desconocido del Derecho Penal, ya que hasta ahora era “solo” un excelente civilista y sober-bio político, acometió la ardua empre-sa estimulado por el noble propósito de sustraer un alma a la implacable máquina de la Justicia Terrenal. (Uno sólo debería ser muerto por la Madre Naturaleza o por Dios, según a quien rece cada quien)

Y el caso fue que en Arévalo había un juez interino, equilibrista malabar de la retórica cultista (la que hunde sus raíces en el curso rimado del fa-blar fermoso del mester de clerecía, aunque a sílabas non cuntadas y sin cuaderna vía) que lejos de respetar la ley 23, título XVI, partida III, que or-dena que el escribano refleje palabra por palabra cuanto diga el testigo o el reo en sus testimonios y declaracio-nes (aunque sean tacos, blasfemias y palabras malsonantes o incorreccio-nes gramaticales y errores semánticos o sintácticos. Que cada cual habla como sabe) oyó a Piedad y en lugar de las explicaciones dadas en cristia-no por ésta, dictó al escribano esta flor: “Que rodeada de cuatro seres inocentes en quienes refluir pudie-ran los yerros de los que les dieran el ser de aquí el que, sin más objeto que mirar a los mismos, nunca el de sustraerse a la acción de la Justicia, haya negado hasta hoy cuanto atesti-guan sus declaraciones prestadas en esta causa; empero que, visto fallado el objeto, no puede menos de confesar que son ciertos los hechos en las de-claraciones por el Jeremías y el Ma-tías a su persona referentes, sin tener que añadir ni quitar cosa alguna más que en el mundo libre de una pasión

tan intensa y funesta, la del amor, y ésta acrecentada por la conducta in-justamente observada por su esposo, siquiera en aras de esos hijos inocen-tes, y aunque haya tenido la desgra-cia de delinquir, no por eso habiendo dejado de ser madre, pide la clemen-cia y compasión de los tribunales en sus momentos de ofuscación y desva-río, y pide no se abandone a tan in-fortunadas criaturas, en cuyo favor únicamente alza la vista del suelo; debiendo advertir, que gran parte se debe al aburrimiento, desesperación y falta de reflexión, como mujer, al estar padeciendo por causa de las familias, desde el momento en que se enlazó con el Inocencio, según con-fesión del que le habían manifestado, no habían de cesar hasta ponerles a mal a ambos esposos, como llegó un día en que lo viera por desgracia rea-lizado; y era, en verdad tanta ojeri-za y mala voluntad, que puede citar como un hecho, que en este momento recuerda, el de haberse desafiado su malogrado esposo con el cuñado Lu-cio, cuando las cuentas del padre del primero y por efecto de haber dirigi-do insultos varios la cuñada y esposa respectiva del Lucio, Inés.”

“Yo ruego a ambas acusaciones que, con la mano puesta en el cora-zón, me digan si ese cúmulo de frases enmarañadas, de palabras retumban-tes, de giros estrambóticos, ha podido salir de la boca de la ignorante mujer a quien defiendo. Yo les ruego más aún: les ruego que me digan si al poner su firma al pie del careo Piedad Lorenzo, ha podido entender la confusa y, en muchos puntos ininteligible, arenga que ocupa el lugar que correspondía a la llana, clara y vulgar confesión de una pobre aldeana.”- Argumentó sa-gazmente don Manuel Silvela en su extenso y brillante alegato al alzarse contra la sentencia de la Audiencia. Y continuó refiriéndose al literato: “Si tuviera algo que decir contra la mora-lidad de ese letrado Juez Instructor de esta causa… desde luego le acusaría, en cumplimiento de mi deber. Mas de mis noticias resulta, que es una perso-na honrada y de buen deseo; pero una persona que tiene (y no le culpo por esto) una inteligencia limitada y una forma confusa de expresarse…”

Don Manuel Silvela anotó otras certeras observaciones como las que

hiciera acerca de los grados de ejecu-ción del delito (conspiración, tentati-va, delito frustrado y consumado) ra-zonando que para poder entender que exista inducción hay que demostrar que el inductor se apodera de la vo-luntad del inducido; siendo imposible suponer en nuestra protagonista, Pie-dad, tal control de los actos del autor del golpe de azadón, cuando el relato de hechos probados acepta como ca-sual la forma de la muerte, es decir, acepta que el azadón estaba tirado en el suelo, sin intervención de la previ-sión del propio Matías, el supuesto inducido.

Así las cosas, este notable ilus-trado, cumplió su deber profesional satisfactoriamente, logró su humani-tario y sagrado propósito: arrojar el vil garrote lejos de su defendida, sal-vando la vida a Piedad. El Alto Tribu-nal degradó la calificación inicial de inducción al delito, que la convertía en parricida, a la de una simple ins-tigación inocua penalmente (tenien-do Piedad, eso sí, que pagar condena por el, entonces tipificado, delito de adulterio) y, aunque se confirmó la pena capital para Matías Pinto, éste, finalmente, fue indultado. No refieren las crónicas jurídicas en qué paró el pretendido amor de los protagonistas de esta verídica historia, ya que esto sólo incumbe a la libre conciencia de los interesados. Que Dios (o el Cos-mos), según quien lo rece, se apiade de todos.

José María Mediero, 20 de agosto de 2010.

Page 8: Promoción turística - La Llanuralallanura.es/llanura/La-Llanura-63.pdf · una promoción turística al menos si-milar a la que ofrecen pueblos como Cuéllar, Riaza o Ayllón. De

pág. 8 la llanura nº 63 - agosto de 2014

Al principio de curso, me invitaron a participar en la revista de nuestro cen-tro. Me pareció una idea fantástica y me comprometí a escribir un artículo en el que abordaría el problema del acoso escolar. Un tema del que yo pen-saba tendría mucho que decir ya que yo fui una víctima de esa lacra, de ese maltrato inhumano al que nadie puede estar sometido.Nada más lejos de la realidad. He ido dilatando este escrito hasta casi el fi-nal del curso puesto que a pesar de que tengo tanto que decir, algo me impide expresarlo con la claridad que yo qui-siera, ya que se reabren sentimientos negativos que un día decidí borrarlos de mi vida para siempre. Por eso no profundizaré demasiado en él.Quiero dejar claro que nadie tiene el derecho a ser víctima, nadie está obli-gado a ser acosador y sobre todo y lo más importante nadie con la autoridad suficiente y siendo conocedor del pro-blema sea tan cobarde de permitir y consentir que esto pase para no querer problemas.Antes de seguir, quiero agradecer el apoyo incondicional de mis padres, mi familia, mis amigos, y sobre todo y ante todo, hacer un agradecimiento muy especial al Cuerpo de la Guar-dia Civil de Arévalo (mis Ángeles de la Guarda) que intervino y cortó este asunto.Pero visto ya el problema con la pers-pectiva del tiempo, tengo que recono-cer que de lo malo también se apren-den cosas buenas.Como consecuencia de todo lo pasado, aprendí a ser más fuerte, a reconocer quienes son los amigos de verdad, a levantarme cuando me caía y me pi-

soteaban y a plantarle cara al miedo, a ese miedo que me paralizó y me calló durante tanto tiempo.Porque me he dado cuenta de que el acosador es una persona sin recursos intelectuales, con muy baja autoesti-ma, con grandes dosis de mala educa-ción, mucha envidia y completamente carente de valores y principios.Por el contrario, sus víctimas solemos ser personas con principios adquiridos desde la más tierna infancia, que sabe-mos que no todo vale, que tenemos una serie de derechos como el de exigir una educación de calidad, el que nos respe-ten, pero también unos deberes como el de estudiar, respetar etc…, pero por desgracia, estos principios y valores básicos desde mi punto de vista son inexistentes en algunas familias, o eso me parece a mí ya que estos individuos no los conocen ni de lejos.Se agrupan en grandes “manadas” de colegas pero no tienen adquirido el concepto de amistad por que se traicio-nan y se insultan unos a otros constan-temente.El acosador suele ser el líder del gru-po, y como su inteligencia no da para más, suelen ser muy graciosos porque para ellos no hay límites, son los que

más gritan, los que más beben, los más “guays” como dicen ellos, e intentan persuadir al grupo para que aíslen a los que no les siguen su juego, no se ríen de sus soeces, a los que les molestan en clase porque quieren aprender y res-petan al profesor, porque no se com-portan como ellos porque saben que no todo vale. Lo importante cuando pasa este pro-blema, es hablar, contarlo, decir lo que te está pasando y pedir ayuda. Lo peor que puedes hacer es callarte como hice yo por miedo, (y no te dejes pa-ralizar por el miedo), porque entonces el problema lejos de solucionarse cada vez se magnifica más y puede tomar dimensiones incontroladas e imprevi-sibles.Es necesario que la sociedad entera en-tienda que esto es un grave problema, que se impliquen, se conciencien de lo que está pasando, y que actúen y sobre todo que no miren para otro lado, por-que hoy me ha tocado a mí pero cual-quiera puede ser víctima de esta lacra que cada vez se está extendiendo más porque nadie pone coto a esto, piensan que todo vale y no todo vale.

Alicia Zazo Puras. 4º de la ESO. Instituto “Adaja”

Acoso escolar

Page 9: Promoción turística - La Llanuralallanura.es/llanura/La-Llanura-63.pdf · una promoción turística al menos si-milar a la que ofrecen pueblos como Cuéllar, Riaza o Ayllón. De

pág. 9 la llanura nº 63 - agosto de 2014

No creo equivocarme pensando que puedo hablar en nombre de todos los miembros de nuestra Asociación al afirmar que nos congratulamos del he-cho de que nuestro alcalde haya deci-dido, por fin, adecentar un poco el muy degradado espacio que existe en el entorno del puente mudéjar que llama-mos del Cementerio o de Valladolid.

A lo largo de muchos, demasiados meses, hemos estado insistiendo en la imperiosa necesidad de limpiar ese in-fame estercolero en que se había con-vertido el lugar.

El puente debió construirse poco después de la repoblación, sobre el río Adaja. Edificado con mampostería, cal y canto y verdugadas de ladrillo, lo forman siete arcos de desiguales pro-porciones, ligeramente apuntados y con arquivoltas decrecientes. Los dos centrales son de mayores dimensiones, el resto parecen tener la función de ali-viadero, y tres de ellos están encuadra-dos por un alfiz.

Ya hemos visto que sobre este puente existió una de las puertas de la muralla que estaba almenada y que desapareció en el siglo XIX.

En los años 70 del pasado siglo, se construyó un nuevo puente junto a este. Sus artífices tuvieron la insólita idea de empotrar la salida del nuevo contra la cabecera norte del antiguo de Valladolid, iniciando de esta forma un proceso de destrucción que ha llevado al estado deplorable en que se encuen-tra hoy. A la salida hacia Valladolid, en su parte derecha, estaba el conocido como “Caño de la Sarna”, una popular fuente que atesoraba curiosas leyen-das y que fue entonces entregada a la piqueta demoledora. Se dice que su pileta era un sarcófago de granito de origen visigodo.

Por el grave riesgo de derrumba-miento total que sufre nuestro puente de Valladolid, del Cementerio o de San Pedro, está incluido en La Lista Roja del Patrimonio de Hispania Nostra.

En estos últimos días nos hemos acercado y, sin ánimo de crítica, sí creemos preciso poner algunos peros a las labores de limpieza realizadas. Decir que se han retirado los monto-nes de basuras y desechos que había en la parte izquierda de la carretera hacia

el cementerio. De igual forma se han retirado los sacos de ¿lana? que había a la misma salida del viejo y derrui-do puente. Pero aún permanecen en el entorno las montañas de estiércol que hay junto a las tapias de corrales y naves construidas en las laderas del Castillo y el Cárcabo; en todos estos alrededores sigue habiendo bolsas de plástico, papeles, trapos y otros des-perdicios. Y el mismo puente medieval sigue estando en un estado lamentable. Está lleno de desperdicios, casi tapado por la maleza, intransitable y ahora tie-ne muebles, algún incívico ciudadano ha tenido a bien depositar en estos días unos viejos sofás justo en la entrada al mismo.

Seguimos proponiendo que la zona debe ser adecentada de forma íntegra. Seguimos insistiendo en que se hace necesario tomar una serie de medidas que eviten que el puente del Cemente-rio siga siendo un vertedero de basu-ras, al igual que ocurre con otros espa-cios del entorno arevalense.

A modo de ejemplo y con el fin de aportar únicamente un poco de peda-gogía, nosotros pondríamos en marcha las siguientes acciones:

1. Una vez se hayan quitado com-pletamente los montones de basura y estiércol que aún están en el lugar se deberían limpiar los papeles, plásti-cos, trapos y resto de objetos que son arrastrados por el viento por todo este espacio y que llegan incluso hasta las mismas orillas del río Adaja.

2. Hacer las necesarias labores de vigilancia a fin de detectar a las perso-nas que de forma reiterada utilizan este lugar como sitio en el que arrojan sus basuras y desechos.

3. Poner en aplicación estricta el procedimiento sancionador vigente, imponiendo las multas que sean pre-ceptivas y en caso de reincidencia apli-carlas en su grado máximo.

4. Propuesta de campaña de con-cienciación ciudadana en favor de tener un Arévalo limpio.

5. Impulsar una semana de la Lim-pieza y el Medio Ambiente en la que se impliquen los diversos colectivos ciudadanos y los colegios e institutos haciendo una labor de concienciación dirigida a toda la ciudadanía.

6. Promover una serie de conferen-cias en centros escolares, institutos y otros espacios sobre la importancia de tener una Ciudad y unos entornos natu-rales limpios.

No queremos ser muy exhaustivos, queremos únicamente aportar algunas ideas que, al menos desde nuestro pun-to de vista, creemos que serían benefi-ciosas para nuestra Ciudad.

No creemos tampoco que sean ne-cesarios muchos recursos para llevar adelante estas actividades. Muchos menos, seguramente, que los que se llevan otras actividades menos útiles para el bien general.

En definitiva, señores responsables municipales, nos ponemos a su dispo-sición para promover, difundir, organi-zar y trabajar de forma seria en favor de un “Arévalo más limpio”.

Para esto sí, ¡Aquí nos tienen! Y mientras tanto nuestra Ciudad si-

gue careciendo, un mes más, de la tan necesaria Casa de la Cultura.

Juan C. López

Del puente de Valladolid y de su limpieza

Page 10: Promoción turística - La Llanuralallanura.es/llanura/La-Llanura-63.pdf · una promoción turística al menos si-milar a la que ofrecen pueblos como Cuéllar, Riaza o Ayllón. De

pág. 10 la llanura nº 63 - agosto de 2014

BAUDELAIRE Y EL AMOR

Charles quería al amorpero le quería demasiado,tanto que se le hundió en el pechocomo un puñal encarnado.Y le perforó el corazónhasta dejarle ahuecado,como un trozo de pan blancocomido por los gusanos.Charles adoraba al amorpero se sintió traicionado,cuando se postró ante sus piesy vio su mirar de rechazo.Su innata mirada de ascoante el sentir demasiado.Entonces sus ojos tan clarosse le llenaron de espanto.La rabia asomó entre sus labiosla cicuta se adentró en su sangre,sagrada como un milagro,y el sudor de sus manos se volvió agrio y amargo.Como el veneno más raroy extraordinarioque en el mundo nunca se ha dado.Por eso acabó muerto en vida“muerto entre los muertos muerto”,gritando,en el silencio y postradoen la cama todo un año.Muerto puro de amormás puro que los geranios,que en su venas florecieronllevándoselo en un sudario.Como el vómito de la vida miserableinfecta de amor el amor más raro,el alma más grandey el corazón delicado.

R. Bustillo

A mi amado, idolatrado, ado-rado BAUDELAIRE.

Nuestros poetasRomance de una Familia visto a través del humor y del AMOR.

A mi mujer

¡Qué bonito es ser tu novioy esperarte en la Alameda!¡Qué alegría tu sonrisay qué tristeza tu pena!Cómo reíamos juntospor mentiras y por veras.El mundo, ¡todo era nuestro!y la luna era más bella.Las estrellas y lucerosde brillar hacían querella.¡Qué emoción en nuestra boda!,nos casamos en Segovia,en la Fuencisla, ¿te acuerdas?¡Qué ilusión y qué contento!Y nuestro viaje de novios,¡Fue magnífico, perfecto!Zaragoza, Barcelona,Mallorca, Valencia, ¡el cielo!¡Qué bonito ser tu novio!Luego vinieron los hijoscinco chicos y una nenatodos gordos y guerreros.

Qué alegrías y qué penas¡Y lo poco que dormían!toda la noche despiertos.Sarampiones y catarros,otitis y varicelas.Todos tuvieron fracturasa causa de sus caídas,sus juegos o sus peleas.Qué fraternidad y unión¡Dios quiera que siempre dure!Qué jolgorio y buen humor¡Mal haya! quien nos lo mude.Y cuando nos reunimoslos diez, los veinte o los treintaa comernos la paella,el tostón… o lo que sea.Qué barullo y regocijo.Qué gozo, voces y risas.Qué amor el de nuestros hijos.¡Cómo quiero a mi familia!Y como fin del poemapara todo el mundo es obvioque te gritaré a la cara¡Qué bonito ser tu novio!

César Martín OviedoArévalo.

Page 11: Promoción turística - La Llanuralallanura.es/llanura/La-Llanura-63.pdf · una promoción turística al menos si-milar a la que ofrecen pueblos como Cuéllar, Riaza o Ayllón. De

pág. 11 la llanura nº 63 - agosto de 2014

Ángel García Roldán nació el 17 de diciembre de 1946 en Arévalo (Ávila), ciudad en la que vivió hasta terminar el bachillerato. Posteriormente estudió en Madrid Ingeniería Técnica de Obras Públicas y Filosofía –carrera, esta últi-ma, que no llegó a terminar-.

Ha vivido –siempre por motivos de trabajo- en Irlanda, Inglaterra e Irán, y ha pasado largas temporadas en Túnez, Marruecos, Etiopía, Ecuador, Chile, Argentina y Colombia. Una estancia en este último país, concretamente en Cali, fue la circunstancia que le mo-tivó para escribir “Las Cortes de Co-guaya”, que fue galardonada con el I Premio Internacional de Novela Plaza & Janés.

Además de haber escrito narrativa –relatos y novelas-, ha trabajado como guionista, tanto de cine como de TV, ha sido cofundador de abcguionistas.com y es en la actualidad director de “Tregolam, el país de los escritores” http://www.tregolam.com, portal de-dicado a ofrecer a escritores servicios editoriales (Informes, correcciones, promoción, edición de ebooks, aseso-ría jurídica, etc.). Ha actuado también como perito judicial en varios casos de plagios de obras audiovisuales.

BIBLIOGRAFÍA:- NOVELAS:- “Todo el peso del silencio” (Ar-

gos Vergara, 1984) (Premio Ateneo de Santander, 1984)

- “Las cortes de Coguaya” (Plaza & Janés, 1985) (I Premio Internacional de novela Plaza & Janés)

- “A boca de noche” (Plaza & Ja-nés, 1988)

- “El sueño etíope” (Tregolam, 2013)

- RELATOS:- Posee una quincena de galardones

de ámbito nacional.

- GUIONES:- Películas: - “El viaje de Carol” (2002) (Direc-

tor: Imanol Uribe)- “Bullying” (2008) (Director: Jo-

sexto San Mateo)- Telefilmes: “Pedrito Maravillas”

(2006) (Finalista en el VII Premio Pi-lar Miró)

- Series de televisión: ha escrito va-

rios capítulos de “Los ladrones van a la oficina” y de “Jacinto Durante”, ade-más de haber brindado asesorías a di-ferentes productoras nacionales y par-ticipado en la creación de varias series.

No ha perdido el vínculo con Aré-valo, adonde le gusta regresar varias veces al año para recorrer sus calles, recordar sus vínculos con la ciudad y rememorar lejanas andanzas con sus mejores amigos de infancia y juven-tud: Javier Martín Oviedo, Francisco Marcé Moreno, Jesús García Torres y Julio y Lorenzo Bustillo de Partearro-yo.

Luis José Martín García-Sancho

Ángel García Roldán

AGENDA DE ACTIVIDADES

Paseo a las estrellas. El sábado 16 de agosto de 2014 a las 22:00 horas, organizada por “La Alhóndiga” disfrutare-mos de una salida nocturna al Cerro de Cantazorras con el fin de poder contemplar algunas de las efemérides estelares y planetarias del mes de agosto. Más información en nuestra página de Internet.

Tertulia literaria. El próximo 19 de septiembre de 2014, viernes, a las 21,00 horas, tendrá lugar una nueva tertulia li-teraria en el salón “Adaja” de la Posada Real “Los cinco Li-najes” de Arévalo. En esta ocasión hablaremos sobre el poeta arevalense Segundo Bragado Jiménez.

Recital Poético “Fray Luis de León”. El próximo 21 de agosto, jueves, a las 21:00 horas, en el patio del Real Hos-pital de Madrigal de las Altas Torres, tendremos una Velada Poética conmemorando a Fray Luis de León. El acto está or-ganizado por las asociaciones “Amigos de Madrigal” y “La Alhóndiga de Arévalo”.

Caminata al “Cristo de los Pinares”. Bajo el lema “Ca-mino del Cristo” el próximo 24 de agosto de 2014 camina-remos con los amigos de la Asociación “Retor” de la vecina

Orbita, desde esta localidad hasta la ermita del Cristo de los Pinares. Queremos recordar a nuestro querido amigo Ángel Ramón Gónzalez que tantas veces recorrió estos caminos y glosó estos parajes en sus escritos. Durante el trayecto se lee-rán fragmentos de algunos de sus textos.

Ronda Poética. El próximo día 12 de septiembre y organi-zada por “La Alhóndiga de Arévalo”; Asociación de Cultura y Patrimonio, celebraremos una Ronda Poética que tendrá como marco el centro histórico de Arévalo. Pasearemos por sus calles y recitaremos poemas de escritores arevalenses del pasado y del presente.

Una mirada para Lucía. Las asociaciones de Cultura y Patrimonio “Amigos de Madrigal” y “La Alhóndiga de Aré-valo” están colaborando de manera conjunta en diversas ac-ciones que buscan propiciar la Solidaridad de los habitantes de La Tierra de Arévalo, Madrigal y La Moraña en favor de Lucía, esa pequeña que no puede ver debido a que está aque-jada por esa rara enfermedad que se llama Amaurosis congé-nita de Leber.

Ambas asociaciones han creado un video que se está distribu-yendo a través de las redes sociales, en el que se informa de la Velada Poética que se realizará el próximo 21 de agosto en Madrigal de las Altas Torres y en el que se recaudarán fondos en favor de la pequeña Lucía.

Page 12: Promoción turística - La Llanuralallanura.es/llanura/La-Llanura-63.pdf · una promoción turística al menos si-milar a la que ofrecen pueblos como Cuéllar, Riaza o Ayllón. De

pág. 12 la llanura nº 63 - agosto de 2014

Sonetos con historia

Luis López Prieto fue director de las Escuelas Graduadas de Arévalo, lo que hoy es el colegio “La Moraña”, en la década de los 50 y principios de los 60. Los que le conocieron dicen que era una persona agradable en el trato y de fácil verso, componiendo muchos poemas a lo largo de su vida a familiares y amigos.

Este soneto que traemos hoy a La Llanura se lo compuso Luis López Prieto a Luis García Sancho, mi abue-lo, por sacarle una muela y no cobrar-le nada. Quizás a alguien le suene de haberlo leído u oído. Pero el segundo poema es inédito. Es la contestación, también en forma de soneto, que el médico dentista le dedicó al maestro poeta.

Para aclarar algo la broma de las rimas, decir que mi abuelo Luis es-taba operado de estómago por haber padecido úlceras sangrantes y comía muy poco por lo que era sumamente delgado.

Clásicos Arevalenses Un mal negocio

Por sacarme una muela el otro día-que me dolía y me tenía inquieto-cuando le pregunté que le debía, García Sancho me pidió un soneto.

Que éste era el precio, yo no lo sabía,y en si es caro o barato no me meto;mas, con este alimento, yo diríaque se va a quedar hecho un esqueleto.

¿Un soneto por una muela?... ¡Poca [paga!

Pero aunque sea cosa que me duela,tampoco a mí me beneficia el trato;

y, si cada soneto que yo hagatiene que ser a costa de una muela,me pongo chulo y digo…

[¡que p’al gato!

Luis López PrietoA mi querido y bondadoso tocayo,

con un gran abrazo.Arévalo, 2-X-1959

Las cosas en su punto

a Luis López Prieto

Al sacarte una muela hace unos díasque te dolía y te tenía inquietopor no cobrar Luis Sancho predecíasque muy pronto sería un esqueleto

Como español, o médico, o dentistaal igual figurártelo has podidoya que le emplazas con muy poca vistapara aquello en que ya está convertido.

¡Vaya tirón que debe haberte dado!aunque hayas aguantado sin un gritosin duda te has quedado vacilante

y en este estado acaso habrás pensadoque en vez de un odontólogo finitote “arreaba” el tirón un elefante.

Contestación de Luis García Sancho