Primeras Grandes Civilizaciones - Héctor Herrera Cajas

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LECCION II

LAS

PRIMERAS GRANDESCIVILIZACIONES

uperar el nivel de las sociedades primitivas -respondiendo a un

incentivo que anime a encontrar el camino hacia una civilizaci6n-

es un proceso que se ha dado pocas veces sobre la tierra. Innume-

ros han sido, en cambio, los pueblos que, a 10 largo del tiempo, han

permanecido en niveles que hacen de elIos representantes autenticos de laEdad de la Piedra 0de los Metales, en momentos en que ya, en algunos

puntos del globo, se habia entrado de lleno en la Historia.

Identifiear civilizaci6n e historia propiamente tal parece licito, ya que

en la civilizaci6n nos encontramos con testimonios mucho mas abundan-

tes y precisos -generalmente literarios-- que nos permiten un conoci-

miento mas completo de ellas y, sobre todo, penetrar en su espfritu; en las

civilizaciones reconocemos personalidades actuando en la historia, de

quienes, a menudo, sabemos su nombre, podemos establecer los arios en

que vivieron y estudiar las obras que realizaron. Estos hombres le dan a la

historia, que hasta ahora habia sido una acci6n an6nima, una dimensi6npersonal. De entonces en adelante, la historia dara cuenta de los distintos

tipos de relaci6n entre algunos hombres, 0 de un solo hombre, con sus

contemporaneos.

Lospasos iniciales que conducen a la civilizaci6n exigen a los respecti-

vos primitivos toda su capacidad para enfrentar exitosamente situaciones

a las que no estaban acostumbrados; impliea que estan dispuestos a correr

riesgos insospechados al introducir cambios en sus costumbres tradiciona-

les. Se trata de momentos emocionantes en la historia de la Humanidad

porque de esos hombres, de esas generaciones, dependeria que se conti-

nuase en niveles primitives de cultura 0que, por el contrario, con elIos seiniciase la ininterrumpida peregrinaci6n de la Humanidad que llega hasta

nuestros dias,

. La incitaci6n al cambio la motiv6, en muchos cases, una profunda

alteracion en el clima imperante; en otros, la presencia de pueblos con

culturas diferentes; y, a veces, la inquietud espiritual que sentian algunos

hombres y que les hada imponerse mayores exigencias. No hay, pues,

una causa unica y general que explique la genesis de las civilizaciones, ni

tampoco una garantia que asegure que dandose causas similares surgira

una civilizaci6n. La historia procede de una manera muy distinta a como

semueve lanaturaleza; en lahistoria predomina 10 imprevisto, porque ellaes el reino de la libertad propia del hombre.

La respuesta positiva frente a alguna de estas incitaciones abre, pues,



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el camino hacia la civilizaci6n. En laMesopotamia, formada por el Tigris y

el Eufrates; en los terrenos que las inundaciones del Nilo gana al desierto;

en el valle del Indo con su espacioso delta; yen las llanuras fluviales de

China -paisajes todos en que los rios enriquecen el suelo con fertiles

limos, y que, por ende, pueden transformarse en vergeles, siempre que eltrabajo tesonero y organizado del hombre sepa conquistarlos a una natu-

raleza exuberante- surgen las primeras civilizaciones. En este enfrenta-

miento con la naturaleza, los hombres estan ahora mas preparados que el

hombre del paleolitico; ya son muchos los adelantos con que cuentan y los

pueblos pueden movilizarse para tareas de mucha mayor envergadura.

Con todo, parece increible -proyectado sobre la inmensidad del pasa-

do-- cuan corto tiempo se requiere para lograr avances sorprendentes en

variados campos del quehacer cultural, aunque corresponda a varias ge-

neraciones. El resultado es tan impresionante, tan magnifico, si compara-

mos -por ejemplo-> los imponentes monumentos que caracterizan a

estas civilizaciones con las rudimentarias construcciones de los pueblos

vecinos que han quedado al margen del nuevo dinamismo, que este

constituye elocuente testimonio de la organizaci6n admirable que han

alcanzado. El dominio de sistema de canalizaci6n y riego dio a estas

civilizacionesuna poderosa base agricola; un temprano desarrollo urbano,

adecuado al crecimiento de la poblaci6n =-dadas las mejores condiciones

de vida- y a su aglomeraci6n para hacer frente a las diversas actividades

que se cumplen simultanearnente. es tarnbien una de sus notas caracteris-

ticas. Todas estas civilizaciones muestran. pues, un dorninio sabre la

naturaleza y tambien sobre el hombre; una y otro, ala larga, son sujetos a

artificiosos mecanismos de control para mantener funcionando el nuevo

nivel alcanzado. La conmoci6n que significa la presencia de otros pueblos

-ya visualizados como barbaros. par ser de culturas inferiores- se trata

de evitar recurriendo, bien a su conquista y sometimiento, bien levantan-

do barreras que los contengan; ambos sistemas pueden emplearse simul-

tanearnente. En todo caso, aqui tenemos los componentes del concepto de

imperio: un sentimiento de superioridad, en gran parte, afianzado por

sentirse parte de un mundo ordenado y en paz, al que corresponde

defender, y, para ella, amenudo, 10 mejor es tamar laofensiva. El Imperio

ya constituido --como mundo cerrado-> tiende a expandirse, a hacerse

coexistente con el mundo habitado por los vecinos; en su perspectiva, essiempre universal. .

De todos los logros conseguidos par estas civilizaciones, tal vez el

mas significativo para ellas mismas, consistia en el orden que habfan sido

capaz de imponer en un extenso territorio y sabre millares de personas.

Este orden, beneficia so para todos, aunque en grado distinto, era el que

pennitia y garantizaba la vida aqui y tambien despues de la muerte: su

importancia era tan grande, que resultaba natural pensarlo como reflejo

del orden celestial sobre la tierra; de allf,el cuidado puesto en su conserva-

cion. El orden implicaba el mantenimiento de la jerarquia social, de las

tecnicas que habian hecho posible las grandes empresas realizadas, de los

rituales que permitian el contacto con los dioses, de las artes que magnifi-

.caban ese orden de dioses y reyes.



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Lentamente, tras la fecunda y poderosa etapa de la creacion de lacivilizacion, sigue una etapa que tiende a canonizar los grandes logros de

1acivilizacion, estableciendolos como modelos inmutables, validos para laeternidad. Comparado con el nivel primitive desde donde las civilizacio-

nes se habian iniciado, el ascenso era inmenso; pero, a la larga, en ese

nuevo nivel las dvilizaciones tenderan a estancarse. Elmundo todavia no

estaba preparado para la Historia can todas sus exigencias.

Correspondera, bastante mas tarde, a una rama de los indoeuropeos,

los griegos -todavia desconocidos en el mundo de los grandes impe-

rios-, hacer ese aporte decisivo: dar un nuevo y trascendental paso en la

Historia.

ECIPTO

Para los viajeros de la Antiguedad, Egipto era un don del Nilo y todavia

ahara -veinticinco siglos mas tarde- el rio Nilo sigue siendo fundamen-

tal para la vida de los millones de hombres que habitan sus riberas. Pero no

fue un don gratuito: los primitives habitantes del valle tuvieron que

conquistarlo en tenaz y prolongada lucha con la naturaleza, 10 que oblig6 a

los hombres a organizarse -aceptar un mando comun y colaborar ordena-

damente- para poder controlar las aguas del rio. Un complicado sistema

de canalizaci6n repartia el preciado liquido con su fertil Iimo a 10 ancho del

valle; mas alla de donde a1canza su efecto, el desierto reina en su inmensi-

dad inhumana.

Conocimientos inmernoriales, conservados celosamente por los

sacerdotes, estaban en la base de 1a civilizacion egipcia; entre los logros

mas significativos estan: el disefio de un calendario, verificable para la

segunda mitad del quinto milenio a.Ci: las tempranas e imponentes obras

de ingenieria, tales como canales, tumbas, palacios; 1a elaboraci6n de

complicados rituales para la propiciaci6n de las misteriosas fuerzas de la

naturaleza: una sabia administracion dirigida por un monarca divino, el

fara6n.

Los faraones, desde los legendarios de la primera dinastfa, unifican el

territorio ya alrededor del 3.200 a.C. y los de la IV dinastia ya sorprenden

par sus monumentales tumbas: las piramides de Cheeps. Chefren y Mice-

rinos, Sucesivas capitales del Egipto antiguo fueron: Menfis, en el valle;Tebas, Sais, en el delta.

Tempranos contactos con la civilizacion que estaba gestandose en la

Mesopotamia, 0, posteriormente, con otros pueblos del Cercano Oriente

-hicsos,hititas- no alteraron el estilo que caracterizara por milenios toda

creacion cultural delmundo egipcio. Predomina en el, el caracter hieratico

---€sto es, sagrado-- y monumental. El hombre queda disminuido, casi

insignificante, en ese mundo de dioses de los mas variados tipos: de forma

humana algunos, de forma animal muchos, hfbridos otros.

Los grandes templos ~omo los de Luksor 0 Abidos- con sus

colosales estatuas de faraones, excavados varios en la misma roca de los

acantilados que bordean el valle; las soberbias tumbas piramidales, algu-



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nas que sobrepasan los dos millones de bloques de piedra de mas de dos

toneladas cada uno, en su tiempo revertidas de capas de marmot yguardando para 1aeternidad la momia del faraon, en medio de un riquisi-

rno menaje; todo habla -hasta nuestros dias----de la grandiosidad del

Egipto antiguo, que a partir del 3.500 a.c. y hasta la conquista romana

(sigloIa.C.), mantuvo casi inalterable su estilo.Solo desde e1siglo pasado tenemos un conocimiento mas amplio de

Egipto gracias al desciframiento de su escritura, conocida desde la Anti-

guedad como jeroglificos: esto es, signos sagrados; en verdad, se trata de

. signos ideograficos grabados en los muros 0en las columnas de templos ypalacios 0en los muchos roUos de papiro, que 1asequedad del clima ha

permitido conservar. Fue el frances Champollion quien encontro 1aclave

para leer y traducir estos textos; expediciones arqueo16gicas organizadaspor distintos paises han ido revelando la riqueza increible, los conocimien-

tos amplios y profundos que sobre muchos campos del saber -la medici-

na, por ejernplo--- poseian los egipcios.El Museo de ElCairo, junto con ElLouvre en Paris, elVaticano 0 elBritanico en Londres, atesoran cantidad

de objetos-que permite formarse una imagen aproximada de 10 que fue una

de las primeras grandes civilizaciones de la Historia.

MESOPOTAMIA

Aproximadamente hacia lamisma epoca en que en elvalledel Nilo se llega

a las primeras expresiones de una organizaci6n superior, en laMesopota-

mia, que forman los rios Tigris y Eufrates, aparecen los mas tempranostestimonios de vida urbana. Seran los sumerios, en la parte sur de la

Mesopotamia, los que iniciaran una actividad creadora -en centros como

Ur, Uruk, Lagash- que constituira la base de toda la civilizaci6nmesopo-

tamica, que se prolonga hasta avanzado del siglo VI a.C.; en que todo el

Cercano Oriente pasa a manos de los persas.

Los sumerios, a partir de fines del cuarto milenio a.C, ~seguidos par

los acadios=-, fuertes en sus ciudades, enriquecidas por el comercio, van

perfeccionando su sistema de gobierno, con una administraci6n y justicia

promulgada en codigos, registrados en su escritura cuneiforme. Son los

grandes dioses cosmicos, representados antropomorficamente, los queconceden el poder a los reyes, de los cuales Sargon el Antigua, gracias a

sus conquistas, es el fundador de un Imperio que controla las grandes

rutas que del Golfo Persico conducen hasta el Mediterraneo: su sucesor

podra proclamarse altivamente "senor de las cu atro regiones del mundo",Grandes construcciones -que no tendran la garantfa que la piedra

confiere a losmonumentos egipcios- muestran, en sus palacios, el pode-

rio, y, en los temples, la piedad de los reyes; elemento tipico de 1a

arquitectura en adobes de Mesopotamia es el ziggurat , elevada torre de

base cuadrangular con rampas laterales que conducen a un templete que

corona la construccion. Esculturas de fino acabado nos conservan el tipohumano de estos reyes.

Con el comienzo del IImilenio se inicia la grandeza de Babilonia (la

,.



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INDIA

"Pu eria de los Dioses"), que alcanzara su apogeo bajo el fey Hammurabi

(1790-1750), quienvolvio a engrandecer aMesopotamia bajo su autoridad

y la de Marduk, dios bondadoso que propiciaba el bienestar de los subdi-

tos del Imperio. Expresi6n de estos sentimientos de justicia es el famoso

c6digo de Hammurabi de 282 articulos, con 10que este fey pasa a contarse

entre los grandes legisladores de la Antiguedad. Una inmensa bibliotecaformada por millones de tabletas de arcilla escritas en cuneiforme, reunia

la sabiduria ya milenaria del Cercano Oriente, yes testimonio del arnor

que escribas y sacerdotes sentian por las mas diversas expresiones de Iacultura.

La presencia de grupos guerreros indoeuropeos -hititas y casitas-

vino a alterar profundamente la situaci6n en el Cercano Oriente; ala larga,

emergi6 una nueva potencia: Asiria, ubicada en la parte norte de la

Mesopotamia, con Ninive como capital.

Los asirios, que se caracterizaron por la crueldad utilizada en sus

permanentes campanas guerreras - de 1 0 que queda testimonio en abun-dantes relieves petreos de fuerte realismo -llegaron a su apogeo en

tiempos de AsurbanipaJ (668-626), quien se apodero de Babilonia. Con

todo, fue justamente la cultura babilonica 1aque mas influy6 en Asiria, de

10 cual da cuenta la grandiosa biblioteca de medio mill6n de tablillas que

Asurbanipal patrocin6. Ninive cay6 el 612, en medio del regocijo general

de los pueblos vecinos, y su Imperio se desmembr6.

A finales del siglo VI a.c., estos territorios fueron conquistados por

los persas, pueblo indoeuropeo establecido en la meseta del Iran. Los

persas habian iniciado una brillante etapa en la historia antigua, dirigidos

por el famoso rey Ciro, fundador de la grandeza de la dinastia Aquemeni-da y organizador de uno de los mayores Imperios de laAntiguedad, el que

se extendi6 -en los moment os de su mayor expansi6n- desde el Nilo

hasta el Indo y desde el Danubio hasta el oceano Indico. EI poderoso

imperio persa de los Aquemenidas durara hasta finales del siglo IV a.c.,

momenta en que sucumbe, bajo el golpe de las campanas del joven rey de

Macedonia, Alejandro Magno.

Tarnbien en el valle del Indo, y, mucho mas tarde, en las llanuras fluviales

de China, civilizaciones originales surgieron del fondo milenario de las

culturas primitivas.

En la India, ya antes de la invasi6n de los indoeuropeos, habia

ciudades en cuyos restos se descubre huellas de a1cantarillado (II milenio

a.c. ). Con la llegada de los invasores arios (indoeuropeos), se organiza

una nueva sociedad dividida en cas tas , que pervive hasta hoy. La casta delos sacerdotes 0brahmanes cultiv6 una tradicion religiosa y sapiencia1que

se conserva en sus libros sagrados -los V e d a s ~ escritos en 1a lengua

sanscrita: en la corte de los principes guerreros, que formaban la segunda

casta, floreci6 la epopeya.

En el siglo VI a.C.; aparece un reformador religioso, Buda, con un



LAS PRIMERAS GRANDES CIVILIZACIONES 23

gran sentido espiritual, ascetico y rnisional: de hecho elbudismo se rropa-gara -despues de extenderse por toda India- por el Asia Centra hasta

China yJapan; y, por mar, hasta elAsia suroriental e Indonesia. Hoy dia es

una de las grandes religiones de la Humanidad y cuenta con unos 150

millones de fieles.

En India se dio tambien una extraordinaria arquitectura monumen-tal, con exuberante escultura en que esta representada infinidad de dioses

y demonios.

CHINA

Lahistoria arcaica de China es totalmente legendaria y solopara fines del II

milenio a.C. hay alguna precision. Habia una cantidad de principados

practicamente independientes del poder central. En uno de ellos, en el

sigloVIa.c., viveConfucio, elgran legislador y sabio, quien formulara unadoctrina del orden social de alta moralidad; esta doctrina tiene en el

emperador, Hijo del Cielo, su centro, y en los letrados -los conocedores

de la doctrina- a sus eficientes funcionarios. De heche, este orden durara

hasta comienzos de este siglo, a,pesar de las muchas crisis que China tuvo

que enfrentar, provocadas especialmente por la invasion de barbaros del

norte: turcos y mongoles. Para defenderse de elIos, en el siglo HI a.C.; seinicio la construccion de la Gran Muralla, que serpentea por montes yquebradas a 10 largo de 2.450kms; pero laGran Muralla no siempre fue unbastion infranqueable; par eso, muchas veces se penso que era mejor

ahogar la fuerza de los barbaros en su mismo origen y se organizabanconquistas y expansiones qt:.ehicieron del Celeste Imperio el gran coloso

del LejanoOriente. Tarnbien en China florecieron las artes monumentales

y artesanales. Hacia los siglos v Y VI d.C.logran una escultura con figuras

idealizadas de gran belleza y finura.

Desde China hubo una marcada influencia civilizadora sabre el Ja-

pan, a partir del siglo VI de nuestra era, donde, sobre fundamentos

culturales muy antiguos, florecio una civilizacion de gran refinamiento yde fuerte espiritu militar: la de los "samurai" .

AMERICA

Tambien en el continente americano -poblado a partir de antiquisimas

corrientes migratorias provenientes del Viejo Mundo- algunos pueblos

alcanzaron el nivel de altas civilizaciones, florecientes al momenta del

descubrimiento de estos territorios por Colon.

Estas civilizaciones se ubican -ya no en valles fluviales- sino en

mesetas de la America Central.. los may as en el Yucatan, a partir del Imilenio a.C. yen pleno apogeo hacia el1.200 d.C.; en Mexico, los az tecas ,

quienes, en los tres siglos anteriores a la llegada de los espanoles, ejercie-ron una cruenta dominacion sabre los pueblos circundantes; en el alto

Peru, tuvo BU centro el imperio de los incas 0 Tiahuantinsuyo, esto es de



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las "Cuatro regiones del Mundo", y que igualmente vio su historia interrum-

pida con la conquista espanola; este imperio, que extendi6 sus conquistas

por el sur, hasta el rio Maule, mantenia una red caminera, centrada en el

Cuzco, su capital.

Sorprende que estas civilizaciones, que, en algunos aspectos, alcan-

zaron metas dignas de admiraci6n -como sus c6mputos astron6micos----no conocieran la rueda ni contaran con el caballo.

Al igual que las grandes civilizaciones del Viejo Mundo, las del

Nuevo Mundo se empefiaron en la construcci6n de imponentes monu-

mentos petreos: temples, como el de Chichen Itza -rescatado hoy a la

voraz selva del Yucatan- con su caracteristica piramide maya; 0 el de

Tenochfitlan, tambien piramidal. enclavado en el centro de la capital

azteca, y donde se celebraban sanguinarias ceremonias -con sacrificios

humanos-> para aplacar a sus dioses; 0 el templo al Sol en Tiahuanaco,

donde se encuentra un preciso calendario de base astron6mica. Asombro-

sos complejos urbanos, algunos -como Cuzco-- han continuado jugan-do un papel hasta nuestros dias; otros, como Machu Picchu -imponente

fortaleza encumbrada en los Andes, a 3.000 metros de altura- recien

descubierta a comienzos de este siglo.

El conocimiento de estas civilizaciones descansa fundamentalmente

en la arqueologia y en las cr6nicas de los europeos, puesto que sus

sistemas de escritura fueron en general, rudimentarios; la excepci6n son

los jeroglificos mayas, s610 en parte descifrados hasta hoy.

Estas tres civilizaciones precolombinas quedaron dentro de los terri-

torios conquistados por la Corona espanola, y -desde entonces- si bien

sus organizaciones fueron desarticuladas, su presencia pervive, al igualque la de muchos otros pueblos indfgenas de niveles primitivos: testimo-

nio irrefutable son los rasgos etnicos de los pueblos hispanoamericanos y

la supervivencia de lenguas aborigenes en extensas zonas del continente.

Incorporada a la historia del Occidente Cristiano, Hispanoamerica

constituye hoy dia una de las grandes reservas para el futuro de la Huma-

nidad.

D05 cantores y 1m fla utista , de una tum ba de

S aq qa mn , v d in as tia .

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