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iglesia evangelica la toma porrealizar su labor evangeliza-o, y teniendo en cuenta queg-lo de notable progreso inte-; el fin de que sus ministros ysean hombres que vivan ymgelio de Cristo, sino tam-'mbres familiarizados con lass la ciencia. Ahi estan esosos en donde se estudia no so-tambien ciencias, mas pro-ue las que se ensenan en nues-as piiblicas. Esos colegiosidente de lo que digo.tio poderosa antes del cris-i poder no fue verdadero, defalsos altares del saber, seDroceloso mar de los tiempos;antiguos hallaron la luz, pe-I cristianismo es el poder queras ciencias y purificar las

tmar a la politica una cien-el hombre encontrar unosblimes para gobernar y ad-leblos, que en las ensenan->el cristianismo se ban levan-formas de gobierno de nues-Poca filosofia, dice Bacon,is, y mucha filosofia nos acer-nos en cuenta que el cristia-srza en actividad, de ahi queierna no decae como suce-guas civilizaciones egipcia,:tc. Las chispas de luz querazones humanos, sea cualtodas sal tan de la fuente

iana.seguira siendo el pedestalregenerando al hombre ytaciones mejores en la vida.j 01 igen divino y cayo; se5a divina para restaurarle ya fuerza divina que restau-snsenanzade Cristo. Cristouoso, lleno de amor, entreies, enmendando defectos aando nuevos derroteros a laie ver a la civilization perso-:ina perfectamente vestida,lentaria trofeos de todos loso, poniendo su trono en los

distintos pueblos antiguos, mas, debido a laeonducta de los subditos a todos deja, ella so-la esincapaz de mejorar la eonducta de aque-llos, aparece Cristo en el escenario de la histo-ria, le da su influencia en su vida sin manchay sus ensefianzas gloriosas, y la reina sigueun nuevo rumbo de prosperidades y victorias.Asi como las corrientes de los rios vienen al

mar y de la inmensa y azulada conjuncion deaguas, se levanta al espacio el vapor que mastarde viene a refrescar y a dar vida a la na-turaleza, las corrientes de la ciencia vienen alcristianismo para de esas, conjuncion sublimede ideas, levantarselavida, lalibertad, el pro-greso, la felicidad y la salvation del mundo.

Juncos.

Politics y Poliquiteria.Por Abelardo M. Diaz.

(Fraternalmente dedicado a 'mi queridisimohermano y buen companero, Rev. Ramon VelezLopez, San Juan.)

CANSADOS estamos de oir decir: «La poli-tica no tiene entranas; la politica es la men-tira; la politica no es mas que medro perso-nal.* Oyendo estas definiciones y otras porel estilo desde mis primeros anos, llegue acreer que la politica era un arte diabolico,esencialmente inmoral. Y al aceptar losprincipios evangelicos, pense que leer perio-dicos politicos o dar mi voto era perjudicargrandemente la santidad de la vida cristianaque comenzaba a vivir y frustrar el triunfode la causa que amo tanto. En una palabra,estaba plenamente convencido que, para serun buen discipulo de Jesucristo, era absolu-tamente necesario abstenerse de la vida poli-tica.

Este raro convencimiento provenia de losdichos corrientes aplicados a la politica y,sobre todo, de mi amarga observation acercade los abuses de la misma. Insultos, calum-nias, hipocresia, la compra de votos, las fra-ses puramente efectistas de ciertos oradores,la violation de la ley, las parcialidades, lasenemistades entre los que militan en los dis-tintos bandos politicos, el despilfarro de losbienes del pueblo, el patriotismo de labios,las opiniones veleidosas de ciertos lideres y laempalagosa adulation de los oradores de pa-cotilla a la mujer puertorriquena, etc., etc.Todas estas excrecencias de la vida politicame la hicieron concebir mas fea que la carade verrugoso Mirabeau.

Estudiando mas detenidamente el asunto,ahondando mas en el problema, llegue a laconclusion de que yo y los demas estabamoseonfundiendo la politica con las falsas inter-

pretaciones que le dan los hombres. El he-cho de que haya malos poetas, (jy cuidadoque hay muchos!) no nos autoriza a decir:iLa poesia es el infierno! jLa poesia es eldisparate mayor que se conoce en el mundo!Madama Roland desde lo alto del patibuloexclama con profundo dolor: «Libertad, liber-tad, icuantos crimenes se cometen en tu nom-bre!» Mas ella no dijo, notadlobien: laliber-tad es la madre del crimen. Se queja conrazon de que los jacobinos hayan intentadojustificar lo mas nefando cogiendo de pretex-to lo mas santo. A ninguna persona sensatase le ocurrira confundir la gloriosa revolu-tion francesa con los excesos de algunos revo-lutionaries que no comprendieron su verda-dero espiritu. Los ripios, los crimenes y losexcesos son desfiguraciones o representacio-nes falsas de la poesia, de la libertad y de larevolution. No son sus hijos, sino sus ver-dugos.

Es hora ya que hagamos justicia plena alarte bendito que consiste en gobernar justay humanamente un pueblo, con el fin de quellegue al grado mas alto de cultura material,intelectual y moral. Mientras nos aferremosen confundir las verrugas con el rostro enque aparecen, contribuiremos necesariamentea la perpetuation de tres males muy desas-trosos:

1° Que la mayor parte del elemento hon-rado y mas apto para gobernar se abstienede tomar parte.en un asunto en que es tannecesaria su participation. Tan sensible abs-tention se debe a los marcados escrupulosque sienten al inmiscuirse en una cosa queconsideran desprestigiadora. Al retirarse losbuenos, se quedan, por inevitable desgracia,3os malos dirigiendo los destinos de la socie-

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dad. Y esto es, senores, como entregar lacaja de dinero con la Have a los ladrones quevienen a escalar.

2° Los jovenes que sienten interes por losasuntos publicos, por la solution de los pro-blemas sociales, al entrar en la candente are-na del combate politico oyen decir: «Aqui novence el mejor, sino el mas tunante. La pi-cardia es el secreto del exito. El pueblo,para ganarlo, es precise cogerlo con trampascomo se cogen los ratones. A la gente no sele dice lo que le conviene, sino lo que le agra-da. Los aplausos hay que conseguirlos to-cando todos los resortes de la vanidad y losvicios publicos. La cuestion es jugar sucio yno dejarse ver la puerta, porque el mal noesta en enganar, sino en permitir que se sepaque uno esta enganando.» Con estas y otrasleccioncitas parecidas, los jovenes, por aque-llo de que no se les tilde de tontos o fracasa-dos, resultan, al poco tiempo, maestros con-sumados en el vergonzoso arte de enganar ycorromper la conciencia publica. Green demuy buena fe que todas esas inmoralidadesson inherentes a la profesion.

3° Que nosotros, al bastardear el conceptode la politica, nos hacemos culpables de quelos hombres de mala fe aleguen tener razonparahacerloquehacen; que al conf undir la ca-ricatura con el retrato inconcietemente f omen-tamos el reinado del politiqueo (como Hostosllama a la politica mala), retardando asielad-venimiento de la politica verdadera.

Vindiquemos el valor moral del conceptopolitico. Digamos a todos los vientos lo quees la politica. Y cuando alguien que la hayatornado por pretexto para medrar a expensasde la ignorancia nos hable en su nombre,digamosle rotundamente: «La politica es larealization del bien; la politiqueria es la reali-

-> zaciondel mal. La politica tiene por fin el bie-t* nestar del pueblo; la politiqueria, el engrande-,,-cN'cimiento del politicastro. La politica es la,;-'vida sana; la politiqueria la enfermedad. La

politiqueria es a la politica lo que el jura-,,tffento false al verdadero, lo que la mascaraaVrostro que la lleva, lo que la escoria al me-

,*' tak"precioso.» Los politicos malos no consti->• tuy«n un argumento contra la politica, asi

cbmos; los maestros ineptos no son un argu-, jnento contra la eficacia de la pedagogia.

Seiialemos y denunciemos al politicastro

como propagador de horripilante peste moral,como un astuto ladron que, so capa de patrio-ta, extrae la sangre y la vida a la patria quedice amar tanto, como el temible enemigopublico que utiliza la astucia de los picamsy abusa de la buena fe de los credulos, comola oportunista zorra humana que adula alcandido cuervo que se llama pueblo, con elsanto, patriotico proposito de engullirse elsabroso queso del presupuesto.

Ensefiemos con claridad y valor que lospueblos dirigidos, mejor dicho, extraviadospor semejantes fariseos no parecen mas queun rebafio de mansas ovejas que llevan atrasquilar, una inmensa piara de cerdos quearrastran al matadero, y que el politicastroes el pastor que trasquila y el porquero quemata. Procuremos higienizar intelectual ymoralmente al pueblo de tal manera, que lapatria, rebosante de limpieza, aire y luz, sehaga practicamente inhabitable para talesvampiros que como la pulga se crian en elpolvo, como el murcielago salen de noche,como el zancudo se posan en lo negro y comola chinche pi can a traicion.

Cuando, sopretexto de defender a un par-tido, observemos que los indigentes de almacalumnian a los ricos de talento y virtud; quela prensa, que debe ser siempre potente focode luz, se transforma en asquerosa cloacarepleta de inmundicias; que al cacique se lellama campeon de la libertad y a los servilesbaluartes del patriotismo; que al maestro, elsabio y paciente escultor de la inteligencia,se le senala el camino del ostracismo en supropio pais, por el enorme, imperdonable de-lito de no pertenecer al mismo partido enque milita la junta escolar que le destierra;que para el correligionario generoso y fiel nohay un aplauso, y, en cambio, llueven los hi-perbolicos elogios para el descarado transfugaque, a fuerza de pertenecer a todos los parti-dos, ya no pertenece a ninguno; que antiguasamistades se rompen; que la fuerza bruta to-ma el lugar de la dulce persuasion: que el sa-grado dinero del pueblo se considera como ri-co botin de guerra; que se exalta al atrevidoy al tramposo, mientras se desprecia al que esprobo y capaz; que los decantados interesesde partido se sobreponen a los intereses delpais, y el capricho de cacique es la ley supre-ma; que la administration de los bienes comu-

nales es un despilfarro, la jdiay los derechos humanosuida; cuando vemos, oimos ;esas injusticias y simulackmenos que exclamar dolodiando a la gran heroinaFrancesa: Oh politica, jcuapoliticos vividores cometen

Eduquemos al pueblo pornanza clara y del ejemplo n<tinga perfectamente entre ]

iOh odio, cuantos males eEres un enemigo terrible

y te complaces en destruirpor tu causa germinen los cridades mas grandes que setra era cristiana.

Tu produciste el primer aciste en el corazon de Cain,mera victima cuando Cain tno Abel.

Te hiciste fuerte, y fundsla conciencia de varies herm;der a Jose, haciendole escla

Dominaste en la pervertifariseos y judios, haciendCristo, el cual derramo suppara la remision de nuestrocambio la corriente de la ciimperecedero sistema de re

Te hiciste dueno de Heroeste persiguiera y extermirlos del Cristo.

Aconsejaste al terrible yel emperador quemo a Rorra los cristianos ante el muncriminales.

Quisiste exterminar a lopara ello estableciste el tritble Inquisition;* produjisteBartolome,» en Francia, epresa de las consecuencias \o de guerras relig

Tu te ensanaste contra Cnoble y gran navegante getmorir cargado de pesadasque este dio al viejo y atr;