Poemas Variados Desde Pizarnik Hasta Cortazar

download Poemas Variados Desde Pizarnik Hasta Cortazar

of 6

Transcript of Poemas Variados Desde Pizarnik Hasta Cortazar

  • 7/25/2019 Poemas Variados Desde Pizarnik Hasta Cortazar

    1/6

    No deca palabras,

    acercaba tan slo un cuerpo interrogante,

    porque ignoraba que el deseo es una pregunta

    cuya respuesta no existe,

    una hoja cuya rama no existe,un mundo cuyo cielo no existe.

    La angustia se abre paso entre los huesos,

    remonta por las venas

    hasta abrirse en la piel,

    surtidores de sueos

    hechos carne en interrogacin vuelta a las nubes.

    Un roce al paso,

    una mirada fugaz entre las sombras,

    bastan para que el cuerpo se abra en dos,

    vido de recibir en s mismo

    otro cuerpo que suee;

    mitad y mitad, sueo y sueo, carne y carne;

    iguales en figura, iguales en amor, iguales en deseo.

    Aunque slo sea una esperanza,

    porque el deseo es una pregunta cuya respuesta nadie sabe.

    Luis Cernuda -

    Qu fcil callar, ser serena

    y objetiva con los seres

    que no me interesan verdaderamente,

    a cuyo amor o amistad no aspiro.

    Soy entonces calma, cautelosa,

    perfecta duea de m misma.

    Pero con los poqusimos seres

    que me interesan

    All est la cuestin absurda: soy una convulsin.

    De all proviene mi imposibilidad

    absoluta para sustentar mi amistad

    con alguien mediante unacomunicacin profunda y armoniosa.

    Tanto me doy, me fatigo,

    y me desgasto que no veo instante

    de liberarme de esa prisin tan querida.

    Y si no llega mi propio cansancio,

    llega el del otro,

    hastiado ya de tanta exaltacin

  • 7/25/2019 Poemas Variados Desde Pizarnik Hasta Cortazar

    2/6

    y presunta genialidad,

    y se va en busca de alguien

    que sea como soy yo con la gente que no me interesa.

    Alejandra Pizarnik

    El deseo de la palabra - Alejandra Pizarnik

    La noche, de nuevo la noche, la magistral sapiencia de lo oscuro, el clido roce de la muerte, un

    instante de xtasis para m, heredera de todo jardn prohibido.

    Pasos y voces del lado sombro del jardn. Risas en el interior de las paredes. No vayas a creer que

    estn vivos. No vayas a creer que no estn vivos. En cualquier momento la fisura en la pared y el

    sbito desbandarse de las nias que fui.

    Caen nias de papel de variados colores. Hablan los colores? Hablan las imgenes de papel?

    Solamente hablan las doradas y de sas no hay ninguna por aqu.

    Voy entre muros que se acercan, que se juntan. Toda la noche hasta la aurora salmodiaba: Si no

    vino es porque no vino. Pregunto. A quin? Dice que pregunta, quiere saber a quin pregunta. T

    ya no hablas con nadie. Extranjera a muerte est murindose. Otro es el lenguaje de los

    agonizantes.

    He malgastado el don de transfigurar a los prohibidos (los siento respirar adentro de las paredes).

    Imposible narrar mi da, mi va. Pero contempla absolutamente sola la desnudez de estos muros.

    Ninguna flor crece ni crecer del milagro. A pan y agua toda la vida.

    En la cima de la alegra he declarado acerca de una msica jams oda. Y qu? Ojal pudiera

    vivir solamente en xtasis, haciendo el cuerpo del poema con mi cuerpo, rescatando cada frase

    con mis das y con mis semanas, infundindole al poema mi soplo a medida que cada letra de cada

    palabra haya sido sacrificada en las ceremonias del vivir.

    Un pequeo gran homenaje de Julio Cortzar para Alejandra Pizarnik:

    Alejandra

    Puesto que el Hades no existe, seguramente ests all,

    ltimo hotel, ltimo sueo,

    pasajera obstinada de la ausencia.Sin equipajes ni papeles,

    dando por bolo un cuaderno

    o un lpiz de color.

    Acptalos, barquero: nadie pag ms caro

    el ingreso a los Grandes Transparentes,

    al jardn donde Alicia la esperaba.

    Octubre 1972

  • 7/25/2019 Poemas Variados Desde Pizarnik Hasta Cortazar

    3/6

    Alejandrsima:

    No ests enojada conmigo por este largo silencio. Tambin los silencios atan y yo he visto ms de

    cuatro paquetes de masitas atados con hilo negro; basta desmoronar el moito para que aparezcan

    los merengues, los relmpagos y las religiosas, sin contar los horribles (3 fr. 25 les 100 gr.). Cosas

    as todos los das.

    Bicho lejano, la semana pasada fuimos a Montmachoux a cenar con Laure y Philippe, y todo el

    mundo habl tanto de vos que yo traje otra silla y la puse por las dudas. Gracias a mi sistema de

    espionaje me he enterado tambin de que las socias del Club de las Piantadas (1) se renen en los

    cafs para acordarse de su amiguita de la calle Montesdeoka. Tu popularidad secreta (sic.) puebla

    las terrazas del barrio latino. Hay un pintor que firma Piza; otro, Arnik. Hay un cocktail que se llama

    Alexandra. Un infame plagiario llamado Hesiodo ha publicado un libro que se titula Los trabajos y

    los das. En el patio de casa, debajo de la pawlownia, juega una gatita negra que imita tu manera

    de abrir grandes los ojos. Ya ves que no te pudiste ir.

    (Carta de Julio Cortzar a Alejandra Pizarnik)

    Las trampas del tiempo

    Sentada de cuclillas en la cama, ella lo mir largamente, le recorri el cuerpo desnudo de la cabeza

    a los pies, como estudindole las pecas y los poros, y dijo:

    Lo nico que te cambiara es el domicilio.

    Y desde entonces vivieron juntos, fueron juntos, y se divertan peleando por el diario a la hora del

    desayuno, y cocinaban inventando y dorman anudados.

    Ahora este hombre, mutilado de ella, quisiera recordarla como era.

    Como era cualquiera de las que ella era, cada una con su propia gracia y podero, porque esa

    mujer tenia la asombrosa costumbre de nacer con frecuencia.

    Pero no. La memoria se niega. La memoria no quiere devolverle nada ms que ese cuerpo helado

    donde ella no estaba, ese cuerpo vaco de las muchas mujeres que fue.

    Eduardo Galeano - Bocas del Tiempo

  • 7/25/2019 Poemas Variados Desde Pizarnik Hasta Cortazar

    4/6

    As como no podemos

    sostener mucho tiempo una mirada,

    tampoco podemos sostener mucho tiempo la alegra,

    la espiral del amor,

    la gratuidad del pensamiento,

    la tierra en suspensin del cntico.No podemos ni siquiera sostener mucho tiempo

    las proporciones del silencio

    cuando algo lo visita.

    Y menos todava

    cuando nada lo visita.

    El hombre no puede sostener mucho tiempo al hombre,

    ni tampoco a lo que no es el hombre.

    Y sin embargo puede

    soportar el peso inexorable

    de lo que no existe.

    Roberto Juarroz

    Entre pedazos de palabras

    y caricias en ruinas,

    encontr algunas formas que volvan de la muerte.

    Venan de desmorir.

    Pero no les bastaba con eso.

    Tenan que seguir retrocediendo,

    tenan que desvivirlo todo

    y despus desnacer.

    No pude hacerles ninguna pregunta,

    ni mirarlas dos veces.

    Pero ellas me indicaron el nico camino

    que tal vez tenga salida,

    el que vuelve desde toda la muerte

    hacia atrs del nacer,

    a encontrarse con la nada del comienzo

    para retroceder y desnadarse.

    Robert Juarroz

    Hay das en que el aire no existe.

    Mineros de la desolacin,

    respiramos entonces sustancias escondidas.

  • 7/25/2019 Poemas Variados Desde Pizarnik Hasta Cortazar

    5/6

    Y a punto de asfixiarnos,

    vagamos con la boca abierta

    y no encendemos ningn fuego,

    para no consumir el poco oxgeno que nos resta

    como un pedazo de pan del da anterior.

    No recordamos ya el nombre de nuestra calle,ni la medida de nuestra ropa,

    ni el sonido de nuestra voz,

    ni la sensacin de nuestro cuerpo.

    Pero de pronto,

    como si tambin se hubieran quedado sin aire,

    se vacan a la vez la memoria y el olvido

    y encontramos entonces

    la mnima densidad posible,

    las partculas sabias donde entran en contacto

    el vaco y la vida.

    Roberto Juarroz

    Es muy difcil no ser idiota en una carta, cuando uno es lo que es y nada ms. Hace aos que me

    revienta convertir una carta en una especie de resea para uso privado del autor. A lo mejor todo lo

    que me da tu libro es preferible insinuarlo con palabras sueltas o con dibujos. Dibujos no s hacer;

    palabras sueltas s:

    Cafard

    mandrgora

    farol

    unicornio

    polilla

    hueco (tan lleno, tan lleno)

    Me doli tu libro, es tan tuyo, sos tan vos en cada lnea, tan reticentemente clara, tan por debajo y

    por adentro. Conocs el sistema que consiste en hojear un libro e ir citando versos o pasajes, con

    algn comentario o elogio o censura? A m no me gusta. Pero te voy a decir: lo que siento es lo

    mismo que frente a algunos (muy pocos) cuadros o dibujos surrealistas: que estoy del otro lado por

    un segundo, que me han hecho pasar, que soy vos, que estoy colgando de la punta de la tela como

    una de esas araas rojas que hay en la Provenza y que tienen, parece, alianza con lo Oscuro.

    Ahora s (ya lo saba, pero ahora lo s de alguien que est vivo, cuya mejilla he besado alguna

    vez) que todo o casi todo puede ser dicho en muy pocas palabras. Cada poema tuyo es el cubo de

    una inmensa rueda. Otros hacen la rueda entera, y hay que ver cmo se atasca en las cunetas; vos

    dejs que la rueda sea otra cosa, algo que unos pocos ven dibujarse mucho ms all de la pgina.

    Y entonces Ben Hur gana con sus ruedas de aire que dejan atrs todas las ruedas de roble y

    bronce. Tus poemas me parecen pequesimos grabados, o mejor todava cilindros babilnicos, y

  • 7/25/2019 Poemas Variados Desde Pizarnik Hasta Cortazar

    6/6

    un da cuando vengas a ocupar esa silla que puse para vos y que siempre pondr en casa y en

    todas las casas y hasta en los mnibus y en los pararrayos, entonces te llevar al Louvre para

    mostrarte un cilindro que descubr hace poco, en la sala etrusca, y que no es en absoluto un

    cilindro etrusco entre otras razones porque los etruscos nunca tuvieron cilindros esos atrasados de

    mierda, pero el conservador o el radical del Louvre lo ha puesto en la sala de los etruscos de puro

    cronopio que es, o porque no queda lugar entre los cilindros babilnicos. Y te lo mostrar, y darsgrandes saltos.

    Carta de Julio Cortzar a Alejandra Pizarnik/