Otto Niemann. Seleción de textos 1911-1916

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1 48 Otto Niemann. Selección de Textos. 1911-1916 Introducción y selección a cargo de Gerardo Garay.

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Selección de textos del pedagogo Otto Niemann en su etapa juvenil, revista "Educación Sociológica" e "Infancia"

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    Otto Niemann.

    Seleccin de Textos. 1911-1916

    Introduccin y seleccin a cargo de Gerardo Garay.

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    Presentacin...........................................................................513 de Octubre...............................................................17Hacia la paz universal................................................... 18Necesidad de la Escuela Moderna............................19La aspiracin de la humanidad.............................21Hacia nuestro perfeccionamiento..............................22Deslinde de trminos................................................23Educacin razonada....................................................24Preparemos al hombre educado al nio....................27Qu hacer?..................................................................30Los nios en la fbrica y en el taller...................31Escuela paga o gratuita?.........................................33La intervencin del Estado en el malestar del pueblo.....34Proteccin a los pobres................................................36Palabras de apertura..................................................36Los textos escolares y la enseanza laica..37Los anarquistas y el racionalismo.........................38Cmo se prepara la guerra, en el hogar, la escuela, .el periodismo y la poltica................................................39La Escuela religiosa.....................................................41Al dejar la redaccin....................................................42La obra del pueblo y para el pueblo.........................42Ferrer y los racionalistas.......................................43

    INDICE

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    Los que hemos admirado la obra de Ferrer cmo vamos a olvidarsu trgico fin? Eso no es posible. Pero lo que es posible, es dejar deacordarse una sola vez al ao de la necesidad del racionalismo.

    Es necesario empaparse con esas ideas, y orientarse con ellas.

    Entre el pueblo simpatizante a nuestra obra, se duda y se dudarsobre la eficacia del racionalismo, mientras los racionalistas no seancapaces de presentar hechos para la comparacin.

    Todas nuestras miras, pues, deben dirigirse a la escuela, lo msperfecta posible, y perfeccionndose continuamente.

    Compaer@;

    Salud!

    Gracias por suscribirte nuevamente (o por primera vez) a laBiblioteca Anarquista del Cerro. Lo primero que creemos ne-cesario comentarte es esta nueva modalidad de la suscripcin.Hemos reducido a la mitad el costo de la misma y ampliado a100 ejemplares la tirada (antes no haciamos ms de 40). Estanueva modalidad est impulsada por el deseo de que mscompaer@s puedan adquirir el material sin que el dinero seauna limitacin.Te recordamos que esta suscripcin tiene una doble finalidad,por el lado econmico pretende poder solventar una parte delos gastos del alquiler del local de la Biblioteca Anarquista delCerro que ya lleva nueve aos con sus puertas abiertas, y porotro lado ser un aporte a la cultura anarquista local. En esesentido continuamos con el ciclo iniciado ya hace dos aos so-bre anarquistas que han actuado en el Uruguay. En tal sentidono necesariamente quiere decir que compartamos los particu-lares puntos de vista de cada uno de los anarquistas de quienpubliquemos textos o reseas biogrficas, pero igualmente nosparece improtante que l@s compaer@s conozcan a l@sdistint@s compaer@s que han actuado antes en este territo-rio, ya que consideramos que los puntos de vista, afines, opues-tos, diversos, enriquecen la creacin de una visin propia de larealidad. El anarquismo es un campo diverso donde confluyendistintas ideas y prcticas heterogneas e incluso en ocasionescontradictorias, sto lejos de ser una carencia o una limitacindel movimiento, es su riqueza, no existe una forma nica de

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    todos sus detalles prcticos de cada da, cada una de las tareas que se hapropuesto realizar.

    Estas pocas palabras son suficientes para comprender que la LigaInternacional recin iba a empezar a pulir y coordinar las ideas, lo mismoque a encarrilar una accin intensa y eficaz.

    Con el asesinato de Ferrer no sufri la idea de la renovacin de laescuela, cuya necesidad se siente cada vez ms; pero la solidaridadracionalista internacional qued rota, hasta ahora por lo menos.

    Desechos momentneamente los lazos internacionales, hemosquedado diseminados por el mundo, los racionalistas, dispuestos aemprender una cruzada victoriosa en pro de la educacin e instruccinracional de la infancia: de la regeneracin de la especia humana.

    Esto es lo que hacemos y seguiremos haciendo los racionalistas. Eseso tambin lo que haca Ferrer. El punto de vista de l, no era lapersonalidad de nadie: slo el ideal lo orientaba, y slo con hechospositivos quera hacer comprender al mundo la superioridad de laenseanza racionalista sobre la oficial, atea y religiosa.

    Nuestra propaganda tiene como base la verdad y el razonamiento.Sin embargo muchos necesitan el pretexto de Ferrer para justificarse,tocando ms al sentimiento que a la razn, y esperan impacientes la llegadadel 13 de octubre para conmemorar su desgracia. Muchos creyerontambin que la muerte de Ferrer era una necesidad para la difusin delracionalismo.

    Pero no creis que l deseaba ese fin. El deseaba, s, que elracionalismo se impusiera, pero al calor de la idea y de los resultadosmismos.

    Una idea no triunfa por la cantidad de mrtires que haya tenido,sino por la cantidad de verdades que le dan fuerza y vigor.

    Ferrer debera vivir an, y por largo tiempo. A esta hora losracionalistas de todo el mundo tendran una slida organizacininternacional que facilitara no slo la propaganda, sino tambin elfuncionamiento de escuelas muy superiores a las existentes.

    Entre nosotros, fracasada la propaganda hueca de los idlatras enlos primeros momentos despus de la tragedia, se constituy sin embargola Liga Popular para la Educacin Racional de la Infancia -que hoy organizaeste acto- precisamente entre los elementos que dejaron a un lado elfetichismo y creyeron ms prctico continuar con tesn la tarea por larenovacin de la escuela que se haba iniciado con la actividad de Ferrer.

    entender la anarqua ni las prcticas anarquistas, lo importan-te es que cada compaer@ encuentre la suya y sea consecuen-te con ella.

    En esta ocasin contamos con una recopilacin e interesanteresea biogrfica del amigo Gerardo Garay, quien est suscriptoa la Biblioteca y agradecemos su participacin activa en la mis-ma. Gerardo Garay viene trabajando hace tiempo tanto el temade la pedagoga libertaria, como el pensamiento de algunosreferentes anarquistas como lo han sido Rafael Barrett y LuceFabbri y es docente de la Facultad de Humanidades y Cienciasde la Educacin.

    Esperemos sea del agrado de tod@s.

    Salud y Anarqua.

    Montevideo Marzo de 2015.

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    Otto Niemann,Seleccin de Textos, 1911-19161

    La figura de Otto Niemann (Buenos Aires, 1888 - Montevideo, 1958)es relativamente conocida para el magisterio uruguayo, la labor pedaggicaque ejerci como maestro director en la Escuela Agrcola de Flores (1918-1922) y en la Escuela Libre de Experimentacin de Progreso, en Canelones(1924-1928) marcaron una poca, si bien no lo suficiente como para serretomada y profundizada por el sistema estatal de enseanza. Estasexperiencias fueron inmortalizadas en dos publicaciones, (Niemann Alba,1983 y Rosello 2007).

    Lo que nos motiva aqu, sin embargo, a presentar esta seleccin detextos, es, por una parte, el desconocimiento que se tiene sobre esteperiodo del autor, prolfico, en el que particip activamente en dosimportantes revistas: Educacin Sociolgica (en adelante ES, 7 nmeros:octubre de 1911, abril de 1912) e Infancia, (40 nmeros: enero de 1912,agosto de 1916). Tiempo de fuerte influencia terica del anarquismo,centrada en una concepcin pedaggica decididamente antiautoritara yantiestatal.

    La segunda razn tiene su fundamento en la coincidencia epocal dela actividad de Niemann con la de una institucin, la Liga Popular para laEducacin Racional de la Infancia. Este colectivo respondi a los impulsosdel movimiento internacional suscitado a propsito de la propagacin dela educacin racionalista en el mundo a principios de siglo XX. En Uruguay,nucle a diferentes personalidades anarquistas, socialistas ylibrepensadores en una trama que urdi aciertos y desaciertos; estosconflictos pueden servir, si saben leerse, como importante reactivo parainterpretar los conflictos de nuestro tiempo: las dificultades de la praxiscolectiva, las opciones estratgicas del movimiento libertario, los vnculosentre educacin y poltica, los riesgos de la educacin estatal, entre otros.Niemann viene a encarnar cierto prototipo humano que tuvo que moverseentre el ideal de realizacin y la estrechez de las posibilidades materialesexistentes monopolizadas en el Uruguay por el estado batllista. Estasituacin, lejos de ser una simple ocasin histrica, continua alimentandoel debate sobre las posibilidades de accin del movimiento libertario enpocas de instituciones estatales benefactoras.

    1 Agradezco especialmente el apoyo de los investigadores Daniel Vidal, PascualMuoz y Michel Antony; como dice un proverbio rabe del cual tengo noticias graciasa la lectura de Eliseo Reclus : una higuera mirando a otra higuera aprende a dar frutos

    que ella est formada por esas individualidades, y es tambin la fielexpresin de stas.

    Y por esto, repito, con esa obra daba Ferrer comienzo a unarevolucin eficaz de transformacin social.

    Al poco tiempo de fundada la Escuela Moderna de Barcelona,funcionaban ya en Espaa una cantidad de escuelas sostenidas, en sumayor parte, con la cooperacin de Ferrer.

    Se dirigi luego a los hombres ms inteligentes de Europa quesimpatizaban con la renovacin de la escuela y consigui, con elementosselectos, formar el Comit Internacional de Iniciativa y Direccin.

    Este primer comit, que funcionaba en Pars, lo formaban: porEspaa, Francisco Ferrer, como presidente; por Francia, C. A. Laisant, comovice presidente; por Blgica, J. F. Elslander; por Alemania, Ernesto Haeckel;por Inglaterra, William Heaford; por Italia, Giuseppe Sergi; por Suiza, H.Roorda van Eysinga. Estos ltimos como vocales y la seorita HenrietteMeyer, como secretaria.

    Despus de estos trabajos preliminares, apareci en Bruselas,(capital de Blgica), la revista L Ecole Renove que tena por objeto laelaboracin de un plan de educacin moderna. Esta revista se siguipublicando luego en Pars. Despus apareci el Boletn de la EscuelaModerna de Barcelona en su segunda poca. Ms tarde apareci en Roma,(capital de Italia), La Scuola Laica, revista internacional de propagandaracionalista. Estas tres importantes publicaciones fueron fundadas tambinpor Francisco Ferrer.

    Paralelamente a esta obra, publicaba peridicamente muchos librosde reconocida importancia, que casi todos conocemos por habersedifundido profusamente en los pases de habla castellana.

    A consecuencia de esta actividad, surgieron en muchas partes deEuropa y Amrica, asociaciones para la propaganda del racionalismo.

    Con lo que he expuesto, aunque muy superficial, se destaca Ferrercomo el hombre de accin e iniciativa en esa colosal tarea.

    Sin embargo no era slo eso lo que l poda dar; su verdadera obrano la hemos llegado a conocer. Pocos meses antes de ser fusilado, el Comitpresidido por l, publicaba, en el primer nmero del Boletn de la LigaInternacional, las siguientes lneas:

    Como toda obra nueva, nuestra Liga acaba de pasar un perodoun poco vacilante de tanteo y de ensayo. En 1909 ha de entrar en el perodode actividad precisa, de trabajo metdico y paciente; debe abordar en

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    El pretexto Ferrer

    El pensamiento pedaggico de Niemann no puede entenderse sinla influencia que ejerci en el Ro de la Plata la propaganda racionalistallevada adelante por anarquistas y librepensadores. Segn Sol I Gussinyer,Por lo menos en Argentina, la irrupcin de escuelas racionalistas y elconocimiento de las directrices pedaggicas ferrerianas es anterior alestallido pasional desencadenado en muchos pases del globo aconsecuencia de los sucesos de la Semana Trgica en Catalua, surepresin y, muy especialmente, el fusilamiento de Ferrer Guardia; (SolI Gussinyer 2010: 234). Podemos afirmar lo mismo para el casouruguayo?, no lo sabemos con precisin, en opinin de Albano Rosell,no se habl aqu de racionalismo ni entre los anarquistas sino despusdel caso Ferrer, (Rosell, El Anarquista N 6, 28/6/1913). Este juicio, sinembargo, no fue compartido por otros sectores del movimiento anarquistauruguayo.

    Otto es el mayor de nueve hermanos, nace en el seno de unamodesta familia obrera en Buenos Aires; cuando alcanz la edad detrabajar, consigui como primer empleo un puesto en la impresora LaUruguaya (Buenos Aires), en la que, desde inicios de siglo se venapublicando un boletn mensual: Escuela Moderna; su director: JulioBarcos, una de las figuras ms notorias de la corriente que propiciaba unaenseanza racional y cientfica en la vecina orilla, (Niemann Alba 1983:27). Este trabajo, adems de brindarle el oficio de tipgrafo, tarea querealizar hasta que se recibe de maestro, en Montevideo en 1918, leproporcionar las lecturas y contactos tan deseados por sus exigencias deautoformacin. En 1910 trabaja como tipgrafo en la imprenta de Orsini-Bertani, lugar emblemtico de difusin de la cultura montevideana; ensus oficinas, concurren asiduamente Jos Enrique Rod, Emilio Frugoni,Francisco Vazquez Cores, Jos Pedro Belln, Javier de Viana, Julio Herreray Reissig, Delmira Agustini, Roberto de las Carreras y Rafael Barrett, entreotros, (Niemann Alba 1983: 28).

    En este tiempo madura su pensamiento y compromiso pedaggicoque busca ocupar los puestos de lucha que dej la muerte de Ferrer iGuardia, segn nos dice en el primer nmero de Educacin Sociolgica,revista que dirigi durante su corta existencia, (Niemann, 13 de octubre,ES, Ao I, N 1, 10/1911: 2). Este lugar terico no consiste, sin embargo,en idolatrar su figura, no es suficiente para la causa del racionalismopedaggico rememorar su muerte una vez al ao, fetichismocaracterstico, a su juicio, de buena parte del movimiento anarquista local,Nuestra propaganda tiene como base la verdad y el razonamiento. Sinembargo muchos necesitan el pretexto de Ferrer para justificarse,tocando ms al sentimiento que a la razn, y esperan impacientes la llegada

    ese orden por el cual el gobierno constituido tiene la obligacin de velar.As que, como consecuencia, la cultura popular del Estado, depende delsistema de gobierno que rige; y esa cultura es tambin la base de esesistema: es su sostn.

    Los pueblos progresistas no son pues los que confan y esperan laevolucin estatal, que nunca puede llegar a ser lo suficientemente ampliay racional. Los pueblos progresistas son aquellos que notando deficienciasy estrecheces, activan, luchan y realizan la cultura que niegan por otrolado las exigencias equilibristas de la sociedad.

    En qu parte del mundo la obra del pueblo para el pueblo esinnecesaria? Qu gobierno es el que se encarga de divulgar la verdadentera y libre en contra de las mentiras que lo sostienen?

    La obra del pueblo por el pueblo es una necesidad a tal punto, quede ella depende la verdadera interpretacin de los problemas socialesque hoy agitan al mundo hacia su solucin.

    Ferrer y los racionalistasOctavio Tamoine, Infancia, Ao V, N 39, junio de 1916: 3-5.

    Compaeros; Describir, aunque sea superficialmente, la obrarealizada por Francisco Ferrer en pro del racionalismo.

    Ferrer no ha sido el creador del racionalismo. Fue el que recopilandolo ms racional y cientfico que haban escrito los pedagogos y socilogos,fund una escuela en Barcelona, con el fin de dar forma prctica a tantasideas hermosas que desde haca tiempo se vean exponiendo en teora.

    La importancia de su obra no consisti en fundar esa escuela, lacual, si no hubiese carecido de eficacia, por lo menos no habra tenido laresonancia que tuvo.

    El propsito de Ferrer fue el de hacer con el racionalismo una accininternacional, lo que constitua emprender la ms grande y eficazrevolucin de transformacin social. Creo que nadie dudar que el hombreeducado sin prejuicios y con una inteligencia clara, es el nico capaz derazonar sinceramente por el bien comn. Por lo menos a mi los hechosme han demostrado que ni las represiones, ni las miserias, ni la imposicina que los hombres se despedacen mutuamente en una brutal guerra, sonelementos suficientes, por s solos, para provocar el odio hacia el actualorden de cosas e incitar a los pueblos a transformar la sociedad. Si lainstruccin y la educacin no han hecho primero la transformacin de losindividuos, stos de ninguna manera podrn hacer la de la sociedad, desde

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    del 13 de octubre para conmemorar su desgracia; pero una idea notriunfa por la cantidad de mrtires que haya tenido, sino por la cantidadde verdades que le dan fuerza y vigor, (Octavio Tamoine, Ferrer y losracionalistas, Infancia, Ao V, N 39, 6/1916: 4).2

    Una bsqueda sincera de la verdad marcar su accin, su optimismose apoya en la confianza que deposita en la razn, en la discusin de ideas,escapando a los nombres que sirven de etiquetas para momificar lacomprensin de la realidad. Hacia 1910, despus de su trabajo comotipgrafo, vuelve a su casa y en hojas desechadas por la imprenta,confecciona sus propios cuadernos. En ellos escribe:A veces me siento comunista porque creo que ah se hace obra. Pero nosoy comunista, hay cosas que no las comparto. No puedo aparecer comosocialista, porque el socialismo con sus medios de lucha me enerva y matami espritu revolucionario. El anarquismo lo encuentro contradictorio aveces, no puedo ser anarquista. No hay duda que si no me defino, tomoaspecto de tmido. Ms bien que buscar un rtulo, dedicar todas misfuerzas a estudiar el problema social y actuar para tener conciencia yexperiencia propias, (en Niemann Alba, 1983: 34).

    Este prrafo es toda una definicin, ms all de que el contexto depolarizacin ideolgica mostrara esta libertad de pensamiento como unadebilidad. En este fragmento tambin podemos ver claramente dilucidadoun proyecto: el compromiso de buscar comprender el problema socialy actuar en consecuencia; una accin que se define como revolucionaria,buscando sus propios derroteros.

    Sus bsquedas sin embargo, estn muy entrelazadas en este perodocon las del pensamiento anarquista, muchos de sus amigos lo eran, deellos aprecia cuando stos son sinceros e inteligentes porque desean eltriunfo de la verdad y la justicia por encima de todos los ismos, (enNiemann Alba, 1983: 34). Un referente, sin duda, es el espaol RicardoMella, quien es citado y reproducido ampliamente tanto en EducacinSociolgica como en Infancia. En una seccin bibliogrfica de esta ltima,al comentar el artculo La bancarrota de las creencias del anarquistaespaol, dice: es una justificacin de la propaganda que los racionalistassinceros del mundo entero estamos realizando como nica ruta que hade seguirse para la completa emancipacin (On, 1912, Cuestionessociales, Infancia, Ao I, N 12, 12/1912: XLVIII).

    2 Otto Niemann firm muchas veces sus artculos, en otras tantas, utiliz losseudnimos: Octavio, Octavio Tamoine, O.N, Oene; (Niemann Alba 1983:29).

    Al dejar la redaccinOtto Niemann, Infancia, Ao IV, N 37, abril y mayo de 1915: 2.

    Tenemos como norte un grande y amplio ideal, sin fronterasintelectuales ni materiales. Encaminamos las acciones por el sendero denuestras convicciones y de ellas nos responsabilizamos en todo momento.

    Al dejar el boletn Infancia, que he atendido siempre con cario,porque en l iba impreso mi manera de sentir en pro de la infancia y de laregeneracin humana, tengo especial inters en hacer constar que meresponsabilizo de todo lo publicado desde el N 29 al 36.

    Abandono la redaccin completamente satisfecho por lo que en lhe podido hacer, y satisfecho tambin por la nueva redaccin encargadaen continuar, que sabr sostener con altura la campaa en pro de laeducacin razonada y cientfica en que est inspirada la Liga Popular parala Educacin Racional de la Infancia.

    Mi retiro no significa el alejamiento de los asuntos de educacin nisiquiera de las actividades de la Liga. Por el contrario, La Revista de losNios y mi participacin en la tarea de cultura popular que patrocina laLiga, ocuparn mis horas de descanso. Mi completa despreocupacin porInfancia ser tambin imposible.

    Mi renuncia tiene a la vez una virtud importante: la de poner enactividad a un buen compaero de nuestras ideas.

    La obra del pueblo y para el puebloOn, Infancia, Ao IV, N 37, abril y mayo de 1915: 3.

    La capacidad progresista de un pueblo slo puede juzgarse por la cantidadde obras de cultura intelectual que l mismo sostiene.

    El Estado, en mayor o menor escala, en todos los pases, es el quese encarga de la administracin econmica e intelectual de los interesesde sus ciudadanos. Los gobiernos tienen la obligacin de ese trabajo, desdeel momento que el pueblo contribuye pecuniariamente, por obligacintambin. Pero dado que esa administracin no tiende -en las democracias-a hacer favor a ideas ni intereses determinados, forzosamente tiene quehacer una labor conciliadora -entre ideas e intereses opuestos!-; ypodando aqu, y agregando all, todo se reduce inevitablemente a sostener

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    Estado y evolucin

    Su optimismo racional, lo afianza en la conviccin de que lahumanidad marcha, si se lo propone, hacia un perfeccionamientoilimitado, porque el pueblo cesar de ser ignorante; quin lo duda?,(On, Proteccin a los pobres, Infancia, Ao I, N 12, 12/1912: XLVII). Enesta conviccin podemos identificar, como seala Alba Niemann laantigua fe en la bondad natural del hombre, reavivada en occidente porel Renacimiento y recogida de la Ilustracin por el anarquismo; estaconviccin, har de Niemann y sus coetneos fervientes defensores de lainfancia, no slo porque la consideren una etapa de la vida humanavaliosa -por ser idea tan cara a Rousseau-, sino porque intuyen que elladetermina la posterior vida adulta, (Niemann Alba 1983: 28).

    Su opinin sobre el clima pre-blico europeo es decididamenteclasista y pacifista, las campaas militares de los pases europeos en Africason catalogadas de simples ambiciones burguesas, imposicin de unbrbaro sistema de usurpacin. La guerra es expresin de estasambiciones, un efecto de patriotismo reconcentrado, y por lo tanto,un mal que hay que purgar, (Octavio Tamoine, Hacia la paz universal,ES, Ao I, N 1, 8/1911: 6).

    No obstante su optimismo de 1911, que lo llev a sostener que laactitud belicista a nivel mundial est en retroceso por un efecto desaturacin, las previsiones de una conflagracin de enormes dimensionesse llevaron a cabo con el comienzo de la denominada Gran Guerra. Eneste contexto, Niemann denuncia la actitud hipcrita de quienes hoy serasgan las vestiduras ante la escandalosa crueldad del conflicto, sin asumirsu cuota de responsabilidad: Hoy se lamentan de la guerra los padres ylas madres, los maestros, los periodistas, los polticos Se lamentan desu propia obra! Y la continan, (Octavio Tamoine, Cmo se prepara laguerra, Infancia, Ao III, N 30, 9/1914: 1).

    Es interesante notar que el juicio de Niemann a esta coyunturaengloba a un sistema mundial regido por un modo de produccincapitalista, sustentado por la clase poltica y al amparo del Estado. Lospolticos, los que sencillamente no debieran existir, son responsablesde esta situacin absurda ya que se encargan de la fabricacin de cadenaspara impedir que el pueblo se mueva ms de lo que es necesario paratrabajar y sostener esa pesada plancha de plomo llamada Estado. Perono menos responsables son los padres, que han enviado sus hijos a laescuela del Estado, y por tanto, han cooperado en la educacinmilitarista y patriota, la educacin estatal, tambin en nuestras tierras,en lugar de servir para la preparacin de los nios para la vida, sirve a unaeducacin de cuartel y ah para la guerra, (Octavio Tamoine, Cmo seprepara la guerra, Infancia, Ao III, N 30, 9/1914: 2).

    -verdicos o no, -las masacres y destrucciones a granel, ejecutadas pormillones de hombres que no saben lo que hacen.

    Los polticos, los que sencillamente no debieran existir, son los quese encargan de la fabricacin de cadenas para impedir que el pueblo semueva ms de lo que es necesario para trabajar y sostener esa pesadaplancha de plomo llamada Estado. Esos polticos son los que luego sueltanal pueblo al circo y lo contemplan como se destroza contra sus propiosintereses. Y los polticos modernos, por medio de la persuasin y elsometimiento voluntario, consiguen que los trabajadores siganremachando sus cadenas, soportando el peso exorbitante del Estado y laexplotacin despiadada del capitalismo

    Es as, cmo desde nio hasta hombre, se prepara al ser para elsostenimiento de este inicuo estado de cosas. Y es as, como la guerraintil puede llevarse a cabo.

    Cabe pues la responsabilidad de todas las guerras a los que en elhogar, en la escuela, en la vida periodstica y poltica la preparan y maduran.

    La Escuela religiosaOtto Niemann, Infancia, Ao III, N 32, noviembre de 1914: 3.

    Lo peor que ha existido sobre la tierra para la enseanza y educacin,ha sido la escuela religiosa. En ella se embota al nio con cosas que elprofesor mismo no entiende. La prueba de que los profesores religiososno entienden lo que ensean es el hecho de que impongan creencias sinpermitir que se dude y se discuta; y para que esa imposicin resulte, y laduda y la discusin ni por asomo se intente, se usa y abusa de la tortura yel temor, cuando la resignacin a base de hipocresa no da resultado.

    En la escuela religiosa, en esos claustros fros y misteriosos, se dejanslo al nio los ojos para ver, los odos para or, la nariz para oler, las piernaspara caminar, y se les extrae el cerebro para que no puedan pensar nireflexionar. En esos antros, en una palabra, se anula al ser humano y se leconvierte en instrumento de hombres falsos y sin dignidad.

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    Con respecto a los problemas sociales, Niemann cree que los sereshumanos, en ltima instancia, compartimos un nico punto de vista: todosluchamos por un bienestar que nos permita vivir en armona. Los rtulos,sin embargo, son la principal causa que da lugar a que sean tan contadoslos individuos que razonan sin temor a desertar del limitado criterio deuna idea determinada, (Niemann, Hacia nuestro perfeccionamiento,ES, Ao II, N 5 y 6, 2-3/1912). Siente horror por las ideas hechas porquevan en contra del desarrollo de la naturaleza,Todo evoluciona, nada es estatal, y por lo tanto es imposible decir que lasociedad futura, la sociedad de la felicidad humana, ser de esta o de otramanera; slo podemos decir: es necesario que una sociedad nuevasuplante a sta, y que como base de toda accin tenga, el hombre, elrazonamiento y el apoyo mutuo. Lo que ms debe interesarnos, no es elsaber si la verdad la posee el anarquismo, el socialismo o cualquier otroismo, sino el saber cul es esa verdad, nada ms, (Niemann, Hacia nuestroperfeccionamiento, ES, Ao II, N 5 y 6, 2-3/1912).

    El Estado, como las religiones, hace obra de caridad, creainstituciones que slo tienen la misin de acariciar las heridas producidaspor la misma sociedad, (Niemann, Los nios en la fbrica y en el taller,Infancia, Ao I, N 9, 9/1912: 65), comienza a tomar bajo su responsabilidaduna parte de las vctimas del actual rgimen con el objeto de aliviarlas penas, (Niemann, La intervencin del Estado en el malestar delpueblo, Infancia, Ao I, N 12, 12/1912: 93). No hay verdadera salida alos problemas sociales si no se extirpan de raz los males moraleslegislados como impunes, el derecho de propiedad en primer lugar, ahradica principalmente la lucha por la vida: es intil que tratemos dealiviar la suerte del nio y del hombre mientras subsista la propiedad quetuerce la felicidad humana y produce la explotacin, la tirana, ladegeneracin, la ignorancia, sus leyes slo estn para recoger a losheridos y muertos producidos por un mal nico que no se quiere estirpary que, por el contrario, se protege a fuerza de ejrcitos y policas,(Niemann, Los nios en la fbrica y en el taller, Infancia, Ao I, N 9, 9/1912: 65-66).

    La conclusin cae por su propio peso: el Estado, que existe paramantener en vida esos males que le dan poder y fuerza, no puede deninguna manera, ser el protector del desheredado. Desde el momentoque debe proteger la propiedad individual, protege forzosamente al quela disfruta, (Otto Niemann, La intervencin del Estado en el malestardel pueblo, Infancia, Ao I, N 12, 12/1912: 94). Sera un contrasentidoesperar una evolucin estatal, (On, La obra del pueblo y para elpueblo, Infancia, Ao IV, N 37, 4-5/1915: 3), slo hay lugar para la lucha,el pueblo debe abrir sus propios caminos; la cultura y la educacin sonpara ello, lugares privilegiados:

    anulando las causas que pueden ser origen de odios y desigualdades, esosson los locos los ciudadanos fuera de la ley. Como dicen los legalitariosde toda especie

    Hoy se lamentan de la guerra los padres y las madres, los maestros,los periodistas, los polticos Se lamentan de su propia obra! Y lacontinan.

    Los padres y madres, han dado por juguetes a sus nios, soldaditos,gorros militares, clarines, sables y fusiles, y conversan con la mayornaturalidad delante de esas tiernas criaturas sobre guerras, batallas,triunfos y derrotas militares, sobre herosmos y condecoraciones a losguerreros Han enviado a sus hijos la escuela del Estado, y han cooperadoen la educacin militarista y patriota, aprovechando el festejo deaniversarios que chorrean sangre

    Los maestros y maestras, los que debieran tener la misin exclusivade despertar y orientar la inteligencia del nio, ejercen el papel deprincipales deformadores del tierno cerebro infantil. En la escuela preparanal alumno, no para la vida, sino para el cuartel y ah para la guerra.

    Hacen ciudadanos, lo que significa hacer hombresexclusivamente para el pas en que han nacido, debiendo estar preparados,en todo momento, para defender a su patria, contra cualquier pas quequiera cambiarle el nombre, o contra cualquier patria que su gobiernoordene, no importa por qu razones. Los maestros, asalariados del Estado,ensean que el hombre que mata a otro por una causa cualquiera, es uncriminal y pretenden desviar del nio, futuro hombre, esas malasinclinaciones; y ellos mismos glorifican las batallas, donde se masacran amillares, sin ms causa que el honor patrio; donde se matan entrehermanos, entre hijos y padres, entre amigos, entre desconocidos; y eso,eso es hermoso, eso hay que ensearlo y recordarlo todos los das parahacer hombres valerosos, ciudadanos dignos y heroicos!... para inclinarloshacia la matanza colectiva e intil, sin conciencia como instrumentos; ypara barrer a esos locos (sublime locura la de los cerebros sanos!) sialgn da quisieran acabar con tanta inmundicia, con tanta esclavitud,tanta autoridad, tanto odio!

    El periodismo, que debiera ser un foco de luz, un vehculo de idealesregeneradores, es un pantano que corrompe el ambiente con susemanaciones pestilentes. Siempre falta espacio para asuntos que interesana la clase trabajadora en sus reivindicaciones contra el Capital y el Estado;pero sobra cuando se trata de asuntos polticos y comerciales. Cuatrorenglones ocupan los descubrimientos cientficos, el desarrollo del arte, ylas cuestiones sociales que agitan al mundo entero; y pginas enteras,diariamente, se llenan relatando minuciosamente con todos los detalles,

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    Por lo menos a mi los hechos me han demostrado que ni lasrepresiones, ni las miserias, ni la imposicin a que los hombres sedespedacen mutuamente en una brutal guerra, son elementos suficientes,por s solos, para provocar el odio hacia el actual orden de cosas e incitara los pueblos a transformar la sociedad. Si la instruccin y la educacin nohan hecho primero la transformacin de los individuos, stos de ningunamanera podrn hacer la de la sociedad, desde que ella est formada poresas individualidades, y es tambin la fiel expresin de stas, (OctavioTamoine, Ferrer y los racionalistas, Infancia, Ao V, N 39, 6/1916: 3).

    Un callejn sin salida

    Dada as las cosas, es impensable para Niemann delegar en el Estadola responsabilidad de educar o instruir al pueblo, en ningn Estado, nisiquiera el batllista, a pesar de alguna opinin que se hizo escuchar a lainterna del movimiento obrero: La importancia real de la Escuela Modernano es bien conocida hasta por sus mismos simpatizantes. Se ha llegado adecir que en este pas ella no tiene objeto, pues la escuela del Estado llenaya su misin en gran parte, (Octavio Tamoine, Necesidad de la EscuelaModerna, ES, Ao I, N 2, 11/1911: 3). Niemann reafirma los postuladoslibertarios de que las escuelas del Estado reproducen la lgica de lasescuelas confesionales, imponiendo un programa nico y uniforme, endonde el maestro es una autoridad y el alumno un sbdito obediente,atrofiando de esta manera su espontnea curiosidad:En las escuelas del Estado no se desarrollan los sentimientos solidarios ydesinteresados. En todo momento, aprovechando una leccin por ejemplo,se inculca la vanidad, la superioridad del uno sobre el otro. Se inculcatambin el respeto y sumisin al gobierno, al adinerado, al galoneado,que equivale a que unos estn en el mundo para obedecer y otros paramandar. () En fin, de la escuela del Estado, solo pueden salir obedientes,pero no hombres libres, (On, Escuela paga o gratuita?, Infancia, AoI, N 11, 11/1912: XLI).

    Niemann defiende los pricipios pedaggicos y las prcticas de lasescuelas modernas, tal como las practic Ferrer, en las que se buscasatisfacer todas las curiosidades de los alumnos, respetando los gustos ylos tiempos individuales, sin sujetarse a un programa y sin limitar laslecciones ni determinar con anterioridad los momentos en que han deverificarse, (Octavio Tamoine, Necesidad de la Escuela Moderna, ES, AoI, N 2, 11/1911: 3).

    No parece quedar del todo claro, sin embargo, en este plan, los lmitesentre la educacin racional, los descubrimientos que el alumno vaalcanzando a propsito de su entendimiento y la influencia del maestro,ms an si el educador, ser siempre un amigo y nunca una autoridad,

    Ser por esto, por esa amplitud de miras que caracteriza a losanarquistas, que se encuentre ente ellos la mayor parte de los elementoscapaces de dar vida a la obra racionalista; son tal vez los nicos que notemen poner en manos de la infancia todo lo bueno, los nicos que deseanel triunfo de la verdad y la justicia por encima de todos los ismospropagados.

    S, es por esto que los ms activos propagadores del racionalismoson anarquistas. El no hacer del nio autmatas, con ideas inculcadashechas, aprendidas de memoria, slo deba encontrar el mayor porcentajede entusiastas y activos cooperadores, entre el elemento poltica ysocialmente ms desinteresado.

    Naturalmente que al hablar aqu del propagandista anarquista,tomamos al tipo sincero e inteligente; no podemos, para este caso, teneren cuenta esas anormalidades que tambin se llaman anarquistas. Losejemplares defectuosos existen en todas las ideas y partidos, y muchasveces se corrigen a travs del tiempo al contacto de los buenos, en lalucha, en el estudio y con la auto-educacin.

    Todos los amantes a una humanidad nueva, deben cooperar, sindistincin de ideas sociales, a la preparacin racional de la infancia para laformacin del hombre- gobierno del hombre- voluntad. Y los anarquistasdeben continuar siendo activos en la propaganda y accin racionalista.Nunca sern suficientes los esfuerzos que se realicen por esa obra de tantatrascendencia.

    Cmo se prepara la guerra, en el hogar, la escuela, elperiodismo y la poltica.

    Octavio Tamoine, Infancia, Ao III, N 30, setiembre de 1914: 1-2.

    Lamentase en todas formas y por todos, la actual guerra europea.Los mismos que la han preparado, horrorzanse de su obra destructora eintil, sin creerse responsables.

    Cuando los verdaderos amantes de la paz y la fraternidad universalpropagan sus ideales de amor, ese amor an desconocido en la prcticapor imposible, actualmente, con la organizacin social que nos rige yencadena, entonces, a esos hombres buenos de corazn y desinteresadosse les tilda de enemigos del orden, y se les persigue, se les encarcela,deporta y tortura o fusila.

    Los que en tiempo de paz luchan, no para que la guerra no seefecte, sino para preparar a todos los seres en la prctica del bien,

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    (Otto Niemann, Educacin razonada, Infancia, Ao I, N 6, 6/1912: 41).El problema empieza con las ejemplificaciones:La Escuela Moderna no justificar nunca un acto de violencia. Si el alumnopregunta: por qu hay guerra en tal pas? el maestro dir: es por laambicin de los capitalistas que con el fin de satisfacer sus convenienciasparticulares, sacrifican a millares de seres que nunca han hecho mal algunoa los que ellos llaman sus enemigos. Y si el alumno luego pregunta: porqu entonces siendo las matanzas entre hermanos tan inhumanas, selevantaron en revolucin los obreros de ese pas en guerra? el maestrono podr hacer a menos que decir: esos obreros no quieren la guerra ysi ahora se levantaron en armas es porque otros, en las mismascondiciones, queran obligarlos a que fueran a matar a otros hombresque no cometieron ms delito que el de haber nacido al otro lado de unafrontera. Y agregar: la violencia es siempre abominable, pero en laforma que la ejercen esos obreros no es ms que un acto de defensa: lomismo hara todo hombre por su instinto de conservacin cuando se vieraatacado por una fiera. As que esos obreros han preferido, antes que ir amatar a quienes nunca les haban hecho nada, defenderse de esoshombres-fiera que los acometan y eran los verdaderos enemigos de lapaz, (Octavio Tamoine, Necesidad de la Escuela Moderna, ES, Ao I,N 2, 11/1911: 3).

    El problema que se le haba presentado a Ferrer y sus colaboradoressigue vigente: en la descripcin de cualquier dato positivo,especialmente los que refieren a las acciones humanas, siempre haycompromisos asumidos previamente; reconocerlos, ponerlos en discusiny ser consciente de las limitaciones que pueden provocarnos a la hora decomprender la realidad, sera el camino ms sano; pero la epistemologa,en este tiempo, recin estaba madurando estos temas.

    Es clara la intencin de estos pedagogos de que la Escuela Modernano debe fabricar adeptos a ninguna secta religiosa, poltica o social,(Octavio Tamoine, Necesidad de la Escuela Moderna, ES, Ao I, N 2,11/1911: 3), su misin es preparar al nio para la vida y en eso, unespritu sectario, poco tiene que ver con el ideal que se persigue, lasociedad nueva necesita hombres y mujeres que no se acostumbren a verla verdad en un rincn fijo, (Otto Niemann, Educacin razonada,Infancia, Ao I, N 6, 6/1912: 41). Pero el lmite entre lo que es razonabley lo que no lo es, no parece fcil de establecer; con el estallido de la PrimeraGuerra Mundial se demostr que este criterio no puede dejrseleexclusivamente a la ciencia.

    El reconocimiento de una autoridad en educacin siempre trajodificultades en la tradicin de la pedagoga libertaria, a pesar de la lcidasentencia de Bakunin que concibi a la educacin como un proceso quedebe transitar desde la mxima autoridad en su comienzo, hacia el mximode libertad en el final. Para Bakunin, la autoridad es el bastn que ayuda

    Estado: el laicismo! Poca cosa; por cierto. Es verdad que a pesar de esostextos, se puede hacer obra laica, demostrando el poco fundamento delas religiones. Pero esa no es obra que se pueda hacer entre nios de 6 a8 aos con resultados satisfactorios. Qu necesidad hay que en los libroslean una cosa y luego el maestro explique otra? Es necesario que hayaarmona para obtener los frutos que se desean.

    A pesar de las muchas contradicciones que se manifiestan, para uncriterio cientfico, hay algo que ha de haber cohibido al maestro ms deuna vez, si es que tiene un poco de criterio: Gracias a Dios he terminadobien mis estudios -dice el nio en una de las composiciones.

    La obra del maestro, del que se ha esforzado para que el discpuloadquiera los conocimientos necesarios, queda anulada; y se da gracias aDios, a algo imaginario, que no se palpa y que ya no se admite comohiptesis!

    Que el maestro tenga la misin de instruir y educar a la infanciapara hacerla apta en la vida no ha de significar que l deba ser un resignado,sin voz para reclamar el cumplimiento de lo establecido, a fin de poderen algo adaptarse a la poca.

    Los anarquistas y el racionalismoOctavio Tamoine, Infancia, Ao III, N 29, mayo junio de 1914: 33.

    Racionalistas pueden serlo todos sin distincin de ideas; y mscuando el racionalismo es aplicado a la educacin para el completodesarrollo de la infancia.

    Pueden ser racionalistas todos aquellos que tienen ideas que sonel fruto de una investigacin y estudio consciente: los que no temen ladiscusin ni la crtica.

    Los anarquistas son los ms implacables crticos de la sociedadpresente; y del mismo modo que critican los errores para afirmar supensamiento, no rehyen la discusin: antes bien, la desean para divulgarsu filosofa; tanto es el amor a la verdad que ellos profesan, que, alreconocer un error, no vacilan en manifestarlo, aceptando y propagandolas nuevas conclusiones que hubieren llegado. Sin exagerar, y a pesar deque todos dirigen sus esfuerzos a una misma causa, los anarquistas, entreellos, son los que ms discuten los medios para llegar a su finalidad ideal;son los que siempre, continuamente, quieren estar acompaados de loms nuevo, lo ms exacto, sin oponerse al perfeccionamiento humanohasta en lo insignificante; en estos casos el mayor obstculo que ellospresentan, consiste en no detenerse y llamar a los que quedan: eso espoco, ms adelante!

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    a caminar pero que no tiene otra finalidad que la de ser abandonado parapoder conducirse con autonoma. Pero como ha sealado Garca Moriyn,esta afirmacin es verdadera slo parcialmente, ya que toda relacinpedaggica es intrnsecamente una relacin de desigualdad, todava ms,slo es posible en la medida en que se da esa desigualdad (GarcaMoriyn 2014: 6).

    Es sabido que Arendt y Meirieu profundizaron este punto; tal comoseala el filsofo francs, todos, en mayor o menor medida, queremoshacer algo de alguien; no podemos renunciar, aunque queramos, a educaral otro (Meirieu 1998: 19). Es ms, el nio debe beneficiarse delapuntalamiento del adulto, ya que no puede construirse a s mismomentalmente al margen de las reclamaciones de su entorno: es eseentorno el que, en muy gran medida lo construye (Meirieu 1998: 24, Cf,Arendt, 1997).

    Ahora bien, Influir implica en cierto modo subordinar, porqueel deseo del agente es que el efecto que ejerce sobre su objeto,modifique su comportamiento y permanezca en su ausencia. Por esto,buena parte de grupos anarquistas y librepensadores abogaron por unaneutralidad en la enseanza. Para el anarquista espaol Ricardo Mella,por ejemplo, educar es inculcar en los nios un modo especial deconducirse, de ser y de pensar y a su juicio, en ello estriba el principalobstculo para la realizacin de una enseanza integral; (Mella, 1910: 7).

    Esta dicotoma entre abstencin pedaggica y fabricacin de laniez estuvo fuertemente presente en el pensamiento pedaggicoanarquista. Si en todo proceso de enseanza-aprendizaje es intrnseco unvnculo de autoridad, la primera opcin slo es posible concebirlatericamente, es inviable desde el punto de vista emprico. La segunda,expresa el deseo oculto o manifiesto, de todo pedagogo: acceder alsecreto de la fabricacin de lo humano (Meirieu 1998: 41); comocontrapartida, lo que muestra su carcter paradojal, es que usualmentelos seres ideados por los hombres para servirles, no se dejan dominarfcilmente (Meirieu 1998: 45). Meirieu expresa esta paradoja,parafraseando a Alexandre Kojve, diciendo que la educacin es uncallejn sin salida existencial, ya que o bien uno obliga a otro y renunciaa que sea libre, o bien asume el riesgo que su libertad implica,abandonando toda garanta de triunfo de nuestras preferencias (Meirieu1998: 47-48).

    Lucha de influenciasEl joven Niemann, al igual que sus coetneos, entendi de un modo

    demasiado fcil el proceso educativo, ste es un defecto que la pedagogaracionalista imit, sin saberlo, del discurso pedaggico dominante: no esposible encontrar las condiciones en las que la influencia de un educadory la conciencia de un sujeto (al que se supone poseedor de un terreno

    necesidad de un procedimiento amplio y libre en la educacin de sus hijos,lo segundo no dara resultados.

    El nio, de por si, no es capaz de crear una moral; l lo adquieretodo del ambiente, y ese ambiente lo forman los padres, los que, dado elcontacto que han tenido durante su desarrollo, son la lnea de conducta.

    Los padres, pues, deben percatarse de la superioridad delrazonamiento sobre todos los medios coercitivos, para que ellos sientanla necesidad de que lo hagan con sus hijos.

    La escuela racionalista no puede ser obra de unas cuantas reuniones;para que cumpla debidamente su misin ha de desempear un rolsumamente delicado.

    La LIGA, por esto, desde su fundacin, ha credo lgico realizar unapropaganda constante de cultura y, aparte, crear un fondo especial parala instalacin de una Escuela, no con un nombre distinto a las otras, sinouna Escuela que, por su material, su profesorado y su comodidad, se puedacolocar a la altura de la enseanza y educacin que ha de dar.

    Vemos ya, con entusiasmo, que la propaganda racionalista vatomando cuerpo, que individuos y asociaciones van ofreciendo suconcurso. No hay duda que la seriedad y correccin observadas por laLIGA influyen poderosamente en esa desinteresada cooperacin.

    Hace tiempo que venimos sembrando, y es lgico que comencemosa recoger frutos como pago de una labor hecha con conviccin y cario.

    Los textos escolares y la enseanza laicaOtto Niemann, Infancia, Ao II, N 18, junio de 1913: XXV.

    La enseanza laica, en el Uruguay, no existe. Es una triste afirmacinque no me hubiera atrevido a hacer hasta hace poco, antes de oir laconferencia del profesor Laureano D Ore, dada en el local de la Escuelaintegral. Como aspirante a maestro nunca sospech que los libros detexto que deba usar luego con mis discpulos estaran tan repletos dereligin... y de otras cosas que dicen poco en favor de la pedagogamoderna, razonada y cientfica. Se ocup el profesor de dos libros de losms usados para nios de 6 a 8 aos, citando las respectivas pginas enque se encontraban las lecciones religiosas. No repito aqu todo lo que enesos textos se lee: bien lo sabrn los maestros. No puedo creer que todoel magisterio sea religioso: se de buenos elementos ateos.

    Y que no haya una voz que reclame, no una transformacin, sinosimplemente el cumplimiento de lo establecido para las escuelas del

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    virgen), se enfrenten en un cara a cara reconocible y poder as, sustituirla influencia de los dems, por la propia, sobre ste.

    Esta lucha de influencias, tal como la denomin Phillipe Meirieu(2001), se percibe ante todo en la proclamacin de la misin educativa dela Liga Racional como una obra regeneradora de la humana especie, enla que su proyecto se estructur como ideal salvfico que pretendirefundar la humanidad con la educacin de la niez. Esta propuesta noescap a la lgica que llev a disputarle a las instituciones religiosas y alEstado el derecho a educar a los nios segn patrones diferentes y aorganizar instituciones que permitieran ese cometido. El problema pareceestar en una lucha de influencias desigual, en la que el monopolio delEstado, autoproclamado nico representante legtimo de la actividadeducativa, ejerce su influencia en una direccin precisa, con el dinero delconjunto de la sociedad:La educacin razonada y cientfica, exenta de todo privilegio religioso omoral, y de todo fanatismo social, es un bello ideal que cuesta muchossacrificios poner en prctica hoy. La escuela religiosa y la escuela patriticaes la que tiene en sus manos a todos los nios del pas, y es la que preparaa su gusto las futuras generaciones. La escuela patritica del Estado, dadoque ofrece enseanza gratuita, es la que acapara la mayor cantidad dealumnos. Y a esta escuela del Estado es a la que actualmente no podremosvencer porque con los mismos recursos que extrae del pueblo (el pueblopartidario o no) da desinteresadamente la instruccin que se le antoja,en beneficio exclusivo de la autoridad, la explotacin y el militarismo;(La Liga Racionalista frente a las escuelas del Estado, Infancia, Ao III,octubre de 1914, N 31: 1).

    El tema econmico no fue menor, durante los casi cinco aos que laLiga Racional inici su actividad de propaganda y concientizacin dela sociedad uruguaya, slo pudo fundarse un centro educativo, la Escuelaintegral de Montevideo, y por un lapso de ao y medio (enero de 1913-julio de 1914). Entre las principales dificultades se valor la falta deconciencia por parte de los trabajadores sobre la importancia que tienela educacin de sus hijos, como el escaso compromiso en asumir el costode la matrcula y preferir la educacin que ofreca el Estado, una educacingratuita, pero, a sus ojos, tan dogmtica como la religiosa.

    Niemann asume la direccin de la revista Infancia en este momentoparticularmente difcil, mayo de 1914, posteriormente afirm que eraresponsable de todo lo que en ella se public (desde el N 29 al 36, mayode 1914- marzo de 1915, Niemann, Al dejar la redaccin, Infancia, AoIV, N 37, 4-5/1915: 2). Entre otros cometidos de su gestin le toc hacerun balance de la actuacin de la Liga, a ms de tres aos de vida. Estainstitucin se haba propuesto contribuir a dos objetivos al mismo tiempo:demostrar la superioridad del razonamiento sobre todas las demsformas de enseanza y educacin para el desarrollo de la inteligencia

    Proteccin a los pobresOn, Infancia, Ao I, N 12, diciembre de 1912: XLVII.

    La gente rica, esa gente que diariamente desperdicia uno o varioskilos de alimento -porque les sobra- ha resuelto reunir, una vez por ao,un kilo para los pobres que nunca alcanzan a satisfacer sus necesidades yse desarrollan raquticos y enfermos.

    Dgase luego que los ricos no tienen tambin un corazn y que noson caritativos!

    Cuntas de esas damas que se presentan a la recoleccin del kilo,demostrando con ello, su buen corazn, tienen como sirvientas a infelicescriaturas a quienes maltratan, hacen trabajar con exceso y alimentan consobras como a los perros!...

    Y el pueblo, que tiene un corazn ms puro, y prcticamente sabelo que significa la miseria, contribuye generosamente. Pero ay! y cuandoel pueblo piense del porqu de esas desigualdades? Entonces tal vezacaben los que tienen demasiado y los que no tienen nada. Ese da llegar:el pueblo cesar de ser ignorante; quin lo duda?

    Palabras de aperturaOtto Niemann, Infancia, Ao II, N 14, febrero de 1913: 13.

    Dado que la escuela racionalista tendr que imponerse algn dacomo cosa indispensable en un ambiente ms puro, y dado que laenseanza actual no es satisfactoria por los frutos malos que produce, eslgico que la LIGA POPULAR PARA LA EDUCACIN RACIONAL DE LAINFANCIA tenga que ir tomando cuerpo a medida que se vaya conociendosu importancia.

    Antes de realizar cualquier obra de beneficio colectivo, hay quepreparar el ambiente, hay que demostrar a los que sern beneficiados, laverdad del bien por el cual se trabaja, si es que ella ha de ser duradera yslida.

    Por esto es que la LIGA antes de fundar la Escuela, viene haciendouna sana propaganda, con la cual realiza dos objetos a un tiempo:demuestra la superioridad del razonamiento sobre todas las dems formasde enseanza y educacin para el desarrollo de la inteligencia infantil y,tambin va elaborando, paralelamente, una moral pura entre los adultosde hoy.

    Y si no hiciera la LIGA estas dos propagandas desde su revistaINFANCIA y por cuantos medios le sea posible, no hara obra completa. Sino se tratara de preparar al padre al mismo tiempo que se le habla de la

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    infantil y elaborar () una moral pura entre los adultos de hoy, (OttoNiemann, Palabras de apertura, Infancia, Ao II, N 14, 2/1913: 13). Laocasin del cierre de la Escuela integral demostr indudablemente que elambiente no era propicio, una compleja trama de razones econmicas,personalismos y rivalidades ideolgicas coadyuvaron a hipotecar elproyecto desde el inicio. No obstante, desde Infancia, se valor entre lasprincipales dificultades que impidieron el desarrollo de esta experiencia,la falta de conciencia por parte de los trabajadores sobre la importanciaque tiene la educacin de sus hijos, como el escaso compromiso en asumirel costo de la matrcula y preferir la educacin que ofreca el Estado, unaeducacin gratuita, pero tan dogmtica como la religiosa:

    Nuestras escuelas sern poco eficaces porque los padres no hanpensado seriamente en la educacin de sus hijos; no se hanpreocupado de qu clase de enseanza se da en las escuelas. Laindiferencia a este respecto es general, apenas si hay algunasexcepciones. Es verdad que entre las escuelas que predominan nohay diferencia de importancia: en una se ensea ms religin queen otra; patriotismo se inculca en todas por igual () Los queestn de acuerdo con este ideal pretextan de que ellos envan asus hijos donde les cobran menos; (La Liga Racionalista frente alas escuelas del Estado, Infancia, Ao III, octubre de 1914, N 31:1).El cambio en la direccin de la revista reactiv el entusiasmo por

    la tarea propagandstica de la Liga Racional. Efectivamente, el cierre de laEscuela Integral () lo nico que demuestra es la falta de ambiente y devoluntad para convertir en hechos nuestras teoras y esto slo puedejustificar la continuacin de la Liga Racionalista y la constante propagandaen que est empeada ahora ms que nunca; (Fracaso?; Infancia,Ao III, octubre de 1914, N 31: 4).

    La tarea de hacer ambiente, no consista en otra cosa que insistiren la estrategia que se vena desarrollando hasta el momento, generarsensibilidad en los adultos sobre la importancia de una educacinrazonada, al margen de todo dogmatismo:

    Por ahora y en primer trmino, nos tenemos que concretar a hacerpropaganda, una extensa propaganda, sin descanso, empezandopor divulgar nuestras ideas con este peridico, con conferencias,folletos, veladas, etc. siguiendo luego con lecciones popularesdonde se har conocer nuestro sistema de enseanza. En unapalabra, nuestra accin ser dirigida por entero a los adultos sinlos cuales no la podremos dedicar directamente a la infancia. Perocomo al dirigirnos a los adultos lo hacemos en favor de los nios,stos son los beneficiados; (La Liga Racionalista frente a lasescuelas del Estado, Infancia, Ao III, 8/1914, N 31: 1).

    menores partes, satisfacer, en cantidad que no es suficiente, lasnecesidades de la vida.

    Como los que legalmente tienen derecho a la satisfaccin de todassus necesidades son los menos, y los que estn propensos a la desgracialos ms, naturalmente tiene que producirse el triste espectculo diariode los hechos que se catalogan en las crnicas policiales cuando violan lasprescripciones de orden y que se silencian cuando el desgraciado se robay se asesina a s mismo...

    Pero como las ideas de humanidad se difunden y en unos semanifiesta la necesidad de rebelarse y en otros se expresa un gesto delstima por los que sufren, el Estado -que nunca hace ms que legislarsobre lo que ya es una necesidad penetrada en el pueblo despus decruentas luchas, (cuando no las contradice) -se ve en el deber de aminorarel mal- no anularlo- y es cuando crea instituciones que recojan a lasvctimas sumisas, resignadas a arrastrar su esqueleto hasta su ltimamorada, pues para los que no se amoldan y no roban y matan de acuerdocon lo que establece la ley, existe la crcel, el suplicio.

    Es en ese sentido que el Estado protege y puede proteger, lo cualslo retarda la marcha hacia la supresin del derecho de propiedad y comoconsecuencia del dinero: supresin indispensables para que reine laigualdad de derechos sobre todas las cosas para la satisfaccin de todaslas necesidades materiales y morales.

    Con esta obra nueva del Estado -que cuando se manifieste un pocoms su fracaso tal vez no encuentre otra de su especie que la suplante- lagente del pueblo, que carece de instruccin suficiente para razonar ydeducir sobre las cosas, tiene siempre la esperanza de poder pasar susltimos aos, llegados antes de tiempo, comiendo sopa caliente ydurmiendo bajo techo, o la esperanza de no soportar del todo la carga delos hijos, ya sea en la alimentacin, en el vestido, en la instruccin o en laenfermedad.

    Siempre el Estado, cuando sus servicios ofrece, no hace ms quelavar las heridas producidas por una causa que ella protege y queforzosamente producir otras y otras.

    Hace acaso otra cosa?-o-

    Y ahora, apartndonos de todas las causas y efectos:Qu derecho tiene un hombre o un grupo de hombres, constituidos engobierno o por gozar de todas las comodidades, de ofrecer una migaja alos hambrientos o un hospital a los enfermos?

    Quin ha dado a unos hombres el derecho de vivir con holganzay abundancia, mientras otros trabajan precisamente para mantenerlosen ese estado, careciendo ellos de lo ms indispensable?

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    La centralidad de la propaganda en esta tarea denota la importanciade ganar espacios en esta lucha de influencias, pero en este ejemplar,puede notarse un cambio de tctica respecto a este punto. La bsquedade concientizacin de los adultos, especialmente los padres, sobre laimportancia que tiene la educacin de sus hijos en un sistema deenseanza racional, libre de dogmatismos, tiene como finalidad tambin,no ya crear centros educativos autnomos de la influencia del Estado,sino contribuir a generar opinin y fuerza para hacer evolucionar hacianuestras concepciones a las propias escuelas del Estado estancadas por larutina de los maestros y la indiferencia del pueblo en general; (La LigaRacionalista frente a las escuelas del Estado, Infancia, Ao III, 8/1914, N31: 2). Este cambio consisti en trabajar para influir dentro de la estructuradel Estado, que antes se reconoca, por definicin, como incapaz de generaruna educacin verdaderamente emancipadora. El intento est volcadoahora a propiciar espacios de autonoma que no se percibieron comocontrarios al funcionamiento estatal:

    Tal vez, si el pueblo toma en serio estos asuntos vitales, se puedallegar a la autonoma de la escuela dentro de las funciones delEstado, y hasta la autonoma de cada una que ser orientada deacuerdo con los maestros y padres; (La Liga Racionalista frentea las escuelas del Estado, Infancia, Ao III, 8/1914, N 31: 2).

    Propsito ambicioso sin duda, pero que muestra un intento deactualizar el discurso y las prcticas para dar respuestas a los incesantescambios que se venan dando en la sociedad y el Estado, especialmente elreposicionamiento de ste ltimo frente a la denominada cuestinsocial.

    El presunto desinters por parte de los trabajadores no fueinterpretado como una incapacidad por parte de los miembros de la LigaRacional en captar las necesidades de los trabajadores, antes bien, frentea la pregunta de si el cierre de la Escuela integral signific un fracaso paralos propsitos de la Liga, se responde negativamente y sealando a losresponsables, declaran:

    El que ha fracasado de verdad ha sido el pueblo, incapaz desostener una escuela libre sin la intromisin autoritaria del Estadoy los clculos especulativos de una empresa, con maestros sin amor,que ejercen el oficio por necesidad; (Fracaso?; Infancia, AoIII, octubre de 1914, N 31: 4).

    No conocemos mucho ms el contexto, a la distancia, este juicioparece ms bien una excusa que ahorra reflexin y autocrtica profunda.Sin duda, despus de este momento de la vida de la Liga ya nada serigual. En 1918 Niemann se recibe de maestro y asume inmediatamentecomo director en una escuela rural en Flores y ms tarde en Progreso;

    galoneado, que equivale a: que unos estn en el mundo para obedecer yotros para mandar. No se inculca, no, que un ser debe respetar a otroporque todos tienen el mismo derecho, y sin embargo esto, lo que no seensea en esas escuelas, es lo que nosotros creemos ms indispensableen todo el curso y en todos los momentos de la vida.

    En fin, de la escuela del Estado, solo pueden salir obedientes perono hombres libres ().

    La intervencin del Estado en el malestar del puebloOtto Niemann, Infancia, Ao I, N 12, diciembre de 1912: 93-94.

    Deca yo en el artculo anterior, publicado en el nmero 9, que elEstado comienza a tomar bajo su responsabilidad, una parte de las vctimasdel actual rgimen, creando por su propia cuenta instituciones con elobjeto de aliviar las penas.

    Como la sociedad sigue desarrollndose sobre su misma base: lapropiedad individual, y la maquinaria va simplificando el trabajo, dejandobrazos sin actividad con una mayor produccin, y los capitalesreconcentrndose cada vez ms y ms, por la necesidad de sobrevivir,forzosamente tiene que ir en aumento el malestar. Este malestar semanifiesta luego de muchsimas maneras. El hombre produce ladegeneracin: desarrollando los vicios y debilitando el fsico de la raza.En la parte moral el hambre y la miseria degradan: haciendo hipcritas,criminales, ladrones. Y no son precisamente los que han cado en ladesgracia los ms temibles en esos efectos: los peores son los que temenllegar a padecer los males de la miseria.

    La lucha por la vida est hoy lgicamente cimentada en malesmorales legislados como impunes. Qu es sino la ley que justifica, conmiles de hombres armados, el derecho de propiedad, la explotacin delhombre por el hombre en todas las actividades de la vida productiva?Qu es sino la ley que justifica la guerra y el encierro caprichoso al queno obra de acuerdo con ella?

    Y el Estado, que existe para mantener en vida esos males que le danpoder y fuerza, no puede de ninguna manera, ser el protector deldesheredado. Desde el momento que debe proteger la propiedadindividual, protege forzosamente al que la disfruta; y como el que no ladisfruta, para vivir necesita de esos elementos que no estn a su alcance,no puede ser amparado, salvo el caso de que resignadamente abone contrabajo por ocupar un lugar que legalmente es de otro o por tenernecesidad de disfrutar de lo que l ha producido habiendo obtenido delacaparador slo una parte en metal que le permite, en muchas muy

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    pasado el tiempo escribir: Reconozco que mi labor no respondeampliamente al ideal que acaricio. Elevarla ms de lo prudente, me llevaraal fracaso. El tiempo me permitir ampliar el radio de accin. Tengo encuenta el factor ambiente; contemplo la cultura media de los habitantesy la fuerza ideolgica de los maestros que me acompaan; (en NiemannAlba 1983: 52).

    Habr optado Niemann por el mal menor ante la lgicahistrinica del todo o nada, al decir de Luce Fabbri? (1959). Que el lectorjuzgue por su cuenta.

    Bibliografa:

    Arendt, Hannah (1997); Entre el pasado y el futuro, Ed. Pennsula, Barcelona.Garca Moriyn, Flix (2014); El profesor libertario, Ponencia presentada enel I Congreso de la Federacin de Enseanza de la CGT, Valladolid, 1996;documento digital disponible en http://www.cgt.org.es/sites/default/files/IMG/pdf/El_profesor_libertario.pdf, ingreso 07/09/14

    Meirieu, Philippe (1998); Frankenstein educador, Laertes S. A., Barcelona.

    Meirieu, Philippe (2001); La opcin de educar. tica y pedagoga, Octaedro,Barcelona.

    Rclus, Eliseo (2013); Evolucin y revolucin, Alter, Montevideo.

    Niemann, Alba (1983) Otto Niemann, un maestro sin fronteras. (La educacindemocrtica en el Uruguay. Su significacin en la primera mitad de este siglo),Editorial Penlope, Mxico.

    Rosello, Clica (2007) Otto Niemann, maestro de maestros, La Paz.

    Fabbri, Luce, (1959); Lanarchismo. Principi di sempre- Problemi doggi, Extractodel n 9, Volont, Edizioni RL- Nervi, ao XII, Gnova.

    Mella, Ricardo (1910), El problema de la enseanza, (primera parte), AccinLibertaria, N 5, 16 de diciembre de 1910, Gijn.

    Sol i Gussinyer, Pere. Los grupos del magisterio racionalista en Argentina yUruguay hacia 1910 y sus actitudes ante la enseanza laica oficial, en Historiade la Educacin, [S.l.], v. 1, mar. 2010. ISSN 0212-0267. Disponible en: . Fecha de acceso: 11oct. 2014.

    Pero los continuos fracasos de la legislacin como medio de subsanaresos males, han hecho, o por lo menos se tiende a ello, que el Estadotome gran parte de la responsabilidad, creando por su propia cuentainstituciones que, encargndose del nio ya dbil por el hambre u otrasanormalidades, traten de recuperarle la salud para arrojarlo luegonuevamente en la corriente de los males. Esto ser tema para otro artculo.

    Escuela paga o gratuita?On, Infancia, Ao I, N 11, noviembre de 1912: XLI- XLII.

    Habamos postergado para este nmero el tan discutido y pococomprendido asunto de si la escuela a fundarse deba ser gratuita o paga.

    Prometimos demostrar lo ms ampliamente posible, loinsignificante que se cobrar frente a lo gratuito de las escuelas del Estadoy tambin la imposibilidad de la escuela gratuita.

    Los padres que envan sus hijos a las escuelas pblicas habrnobservado que si bien no se les cobra mensualmente una cuota, al fin delao, entre libros, cuadernos, lpices, lapiceras, plumas, gomas, exmenes,fiestas patrias, y otras mil cositas que es engorroso enumerar, resultangastos que exceden de los clculos.

    Lo que pasa en las escuelas pblicas respecto a los textos, es algoque no podr pasar en las nuestras; primero porque obramos con mayorsinceridad y con la vista fija en un ideal de regeneracin; y segundo, porqueen nuestra obra no nos gua un fin comercial ni de ambiciones personales.En las escuelas gratuitas, de tanto en tanto se cambian los libros de texto,no mirando, en la mayor de las veces, la importancia de uno a otro, sinosegn las personas que componen el Consejo Nacional de Educacin osegn la amistad o renombre del autor.

    Sobre esto nos puede hablar una persona que simpatiza con nuestraobra y que present a la Direccin un importante libro de texto, muysuperior a los que aqu circulan. Se le contest que no era aceptado. Almismo tiempo eran aprobados otros que son una calamidad frente a losencillo y racional del otro.

    Y luego si tenemos en cuenta la superioridad de la educacinracional, que no har obra aislada, sino que har en lo posible una obraconjunta entre el hogar, la sociedad y la escuela, se comprender tambinque el tiempo ser aprovechado con resultados efectivos en los cortosaos escolares de que generalmente dispone el hijo del trabajador.

    En las escuelas del Estado no se desarrollan los sentimientossolidarios y desinteresados. En todo momento, aprovechando una leccinpor ejemplo, se inculca la vanidad, la superioridad del uno sobre el otro.Se inculca tambin el respeto y sumisin al gobierno, al adinerado, al

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    13 de octubreOtto Niemann, Educacin Sociolgica, Ao I, N 1, octubre de 1911: 2.

    Esta fecha, al igual a la del 1 de Mayo y otras, cada vez que sepresenta, nos recuerda un hecho, por el cual debemos luchar para vengara los cados.

    Cmo vengar a los cados por la tortura, la horca y el plomohomicida de los tiranos encumbrados en la ignorancia de los ms? No espor cierto palabreando, ni llorando, ni formando dolos con los restos delas vctimas, sino ocupando sus puestos.

    El 13 de octubre se recuerda la muerte de Francisco Ferrer Guardia,fundador de la Escuela Moderna en Espaa.

    El clero, de brazo con el gobierno espaol, se vieron enceguecidospor la luz de una educacin nueva, capaz de descubrir todos los erroresque en la obscuridad de la ignorancia imperaban, y creyeron prudente,con el pretexto de que Ferrer haba tomado parte en la revolucin deJulio, apagar la luz que pareca tender a ser inapagable... y asesinaron aldirector de la Escuela Moderna. El cuerpo cay, pero la idea permaneciintacta, se fortific; la sangre del mrtir cubri la faz de la tierra y germincon centenares de nuevos amantes a la educacin racional que al conocerla grandeza del ideal que abrazaba Ferrer, gritaron a los tiranos su crimencometido, y dispuestos a todos los sacrificios que la imbecilidad fanticaimponga, se colocaron en el lugar ms adecuado para continuar la obrahasta su triunfo completo...

    Nada de idolatras; ni una lgrima! Altivas las frentes; fuertes lospuos!

    Qu la verdad impere y la verdad ilumine!Ferrer ya no existe, nada valdra pensar en l, pues no se le

    resucitara. La idea existe an, ya est definida, es bella, es grande; perono se ha puesto debidamente en prctica; lo que hasta hoy se ha hechono ha sido ms que un principio. La obra de Ferrer debe servirnos deejemplo solamente: l ha dado su vida por esa noble causa; seamosnosotros tambin como l, y triunfaremos.

    Ferrer no fue odiado por profesar ideas modernas sobre instrucciny educacin; que conocan esas ideas haba muchos en Espaa. Pero lfue el nico que dedic toda su fortuna, todas sus energas y conocimientospara practicar la obra. Ese fue su delito!

    Levntese en cada pas una escuela racionalista, aunque sea comosimple muestra de otras muchas que se impondrn por el inevitableimperio de la razn, y esa ser tal vez la ms grande bofetada que sepodr dar a los cobardes ultimadores de Ferrer.

    estragos dolorosos contra la posibilidad de una armnica labor entre todosy para todos los seres humanos, a pesar de eso, repito, se empieza areconocer que el nio es el futuro hombre y que del nio mal educado ysujeto a privaciones, tiene forzosamente que salir un hombre perverso,egosta y enfermo.

    Es intil que yo higienice mi vivienda mientras alrededor de ella seextienden enormes charcos que emanan los miasmas que producen lasenfermedades... Y es tambin intil que tratemos de aliviar la suerte delnio y del hombre mientras subsista la propiedad que tuerce la felicidadhumana y produce la explotacin, la tirana, la degeneracin, la ignorancia.

    Muy fcil es decir: el nio no debe poblar ms la fbrica y el tallerhasta que no haya cumplido los 14 aos; durante los cuales est obligadoa ir a la escuela.

    Pero, por qu se mandan los nios a esos lugares de explotacin?Acaso los padres tienen el placer de que sus hijos se corrompan y dejenentre las mquinas su juventud bajo la mirada desptica del encargado opatrn?

    En las familias pobres, cuando los hijos son an muy pequeos, elhombre trabaja desde la maana a la noche y a veces desea trabajaralgunas horas ms despus del horario comn para sacar un jornalsuperior; la mujer trabaja todo el da, para ganar una miseria, planchando,cosiendo u otra tarea cualquiera, y mientras hace todo eso tiene quepreparar las comidas, lavar, hacer limpieza, atender a las criaturas...

    Y en esta situacin, los resolvedores de los problemas sociales enlas bancas parlamentarias, rodeados de todas las comodidadesimaginables, vanaglorindose de su filantropa, proponen leyes para queimpere la higiene, leyes para que el hombre y la mujer trabajen ochohoras, leyes para que los nios concurran a las escuelas hasta los 14 aosmuy limpios y educados, leyes para hacer ms hospitales, y leyes, leyes yms leyes, para recoger a los heridos y muertos producidos por un malnico que no se quiere estirpar y que, por el contrario, se proteje a fuerzade ejrcitos y policas...

    Cuando una familia en las condiciones indicadas tiene un hijo de 10aos lo mandan a trabajar de cualquier cosa, y si se les observa que por elmsero jornal que gana no vale la pena sacrificarlos, le le contestan a uno:por lo menos va ganando para los botines que gasta Qu responder aesos padres agobiados por el peso de su trabajo, que parece se vieranaliviados de la carga, aunque el hijo se destruya por slo un par de zapatos?

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    Continuemos la obra! Cooperemos todos al triunfo de la escuelaque tiene por misin formar hombres que dependan de s mismos...

    Detrs de la negra montaa del prejuicio, despunt ya el sol dejusticia. Es el triunfo de la razn sobre la fuerza!

    Hacia la paz universalOctavio Tamoine, Hacia la paz universal, Educacin Sociolgica, Ao I,

    N 1, octubre de 1911: 6.

    Casi todos los pases europeos estn hoy metidos en los de simplesambiciones burguesas.

    Alemania, Francia, Espaa, Inglaterra, Italia y Turqua provocan, entrelos tranquilos africanos la explotacin descarnada de los pases civilizadosy, so pretexto de reprimir las justas rebeldas de los que se niegan a serobreros modernos, se precipitan sobre esos indefensos seres con las armasms monstruosas y mortferas imponindoles su tambin brbaro sistemade usurpacin y una transformacin brusca en sus costumbres.

    Las guerras son an efecto de patriotismo reconcentrado y, comolos gases, cuantas ms veces explote, tanto ms ir perdiendo de poder,hasta que esa concentracin se debilita al punto de no poder experimentarel menor efecto. Por esto, hasta cierto punto, son saludables estastentativas de guerra y, hoy por hoy, hasta las guerras mismas lo son. Es unmal terrible, que hay que purgar.

    Vamos viendo y cada vez con ms claridad, que hay ya entre el pueblomuchsimos enemigos de la guerra y que continuamente aumenta elnmero de ellos. Se han dado ya cuenta -toda la historia habla en esesentido que las guerras no benefician a los productores, sino a loscapitalistas que, por ese medio, ensanchan sus mercados, aumentan susganancias, mientras el trabajador sigue siendo siempre el mismo: unamquina de producir para luego disfrutar la peor y menor parte.

    Cada vez que se anuncia una guerra, o se preparan los para llegar aellas, los hombres de sentimientos humanos se agitan; unos porque lescausa horror y otros porque estn convencidos de su inutilidad. Y cuantoms a menudo se producen estos hechos, tanto ms pronto se apagar elespritu patritico y por consiguiente, la posibilidad de una guerra, anteel fantasma de otra guerra interna, ser menos realizable.

    Los movimientos contra los gobiernos para hacer cesar las guerras,y todos los actos pblicos que se realizan para demostrar la inutilidad deellas, educan a los hombres en un sentido adverso a esas masacrescaprichosas entre seres que tal vez nunca se han conocido ni ofendido.

    Y esta idea de paz que se va arraigando cada vez ms en los pueblos,permite que las nuevas generaciones se desarrollen en un medio cada

    Los nios en la fbrica y en el tallerOtto Niemann, Infancia, Ao I, N 9, setiembre de 1912: 65-66.

    Indudablemente, debido a la agona de las religiones que educabanpara que nos resignsemos a sufrir todos los males en la tierra y luegogozar en el cielo, es que la humanidad empieza a preocuparse en lanecesidad de vivir la vida lo ms amplia y racionalmente posible en ellugar que se habita, olvidando ya las futuras penas o delicias que se puedangozar en lo desconocido...

    Pero, precisamente los que cuentan con ms recursos pecuniariospara intentar una regeneracin en las costumbres, son los que equivocanel medio de hallar la solucin. Tal vez no se quiera hallarla.

    Lo que se hace es obra de caridad. La caridad -he ledo hace tiempoen un artculo -es como la Cruz Roja: recoge heridos y cadveres; no evitala guerra. No hay comparacin ms acertada.

    Los hospitales, son para curar enfermos; el manicomio, para aislar alos dementes; los asilos, para recoger a los ancianos desamparados y niosdbiles, sin tutores; el Buen Pastor para enclaustrar a las jvenes queson madres, sin haber pedido permiso a sus padres y sin estar inscriptasen el registro civil; largos encierros tienen que soportar las mujeresignorantes que matan sus hijos al nacer para que sus padres no se enterende la falta o por resultarles un estorbo para poderse ganar la vida.

    Qu se ha hecho para evitar esa enorme cantidad de enfermosque llenan los hospitales? Qu para evitar tantos dementes? Qu paraque los nios no se encuentren desamparados, raquticos y poblandotalleres y fbricas antihiginicas al comps de un trabajo forzado yexcesivo? Qu para evitar esa terrible plaga de las enfermedadescontagiosas? Qu para evitar los criminales ladrones y dems? Qu parano tener una mujer que mate a su hijo por ser incapaz de sobreponerse ala crtica ante la prdida del honor o por temor a que su ama la despiday no poder ganar el sustento para s y el nuevo ser?

    Nada, absolutamente nada, han hecho en ese sentido los creadoresde esas instituciones, que -como dijo bien otro articulista- tienen la misinde acariciar las heridas producidas por la misma sociedad.

    A pesar de todas las incongruencias anotadas, que demuestran lano intencin de coordinar acciones y opiniones, de una manera imparcial,para tratar de extirpar la causa o causas de esos males que, a pesar de losremedios a los efectos, continan haciendo, y aumentando cada vez ms,

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    vez ms fraternal y con ms bros para luchar, por la paz universal, contratodas las tiranas y opresiones.

    Necesidad de la Escuela ModernaOctavio Tamoine, Educacin Sociolgica, Ao I, N 2; noviembre de

    1911: 3-4.La importancia real de la Escuela Moderna no es bien conocida hasta

    por sus mismos simpatizantes. Se ha llegado a decir que en este pas ellano tiene objeto, pues la escuela del Estado llena ya su misin en granparte. Este error es grave: tan grave, que es necesario desvirtuarlo a finde que una lamentable confusin no haga aun ms lenta la evolucin dela escuela.

    La escuela denominada laica (de la religiosa ni nos acordemos) nollena su misin porque, sin tener en cuenta el carcter ni inclinaciones delmaestro ni de cada uno de los alumnos, impone un programa uniforme.

    En las materias que se ensean diariamente, dichos programas noobservan la influencia que puede ejercer la temperatura sobre los alumnosy las dificultades que ello pueda presentar para el estudio de ciertasmaterias. La curiosidad de un alumno -en esas escuelas nunca la hay, puesel maestro es una autoridad y el alumno un sbdito obediente- no puedesatisfacerse hasta que llegue el momento indicado en el programa. Lasexplicaciones sobre la atmsfera y todo lo concerniente a ella, como laslluvias, vientos, heladas y muchas otras cosas, no se hacen cuando loshechos se suceden, sino cuando el diario preparado con anterioridadlo permita. Se habla de heladas en das de calor; de calor en das de fro;de lluvias en das secos... y de amor a sus semejantes despus de haberjustificado una guerra de un pueblo contra otro por simples ambicionesde gobierno.

    Esto es un simple detalle que puede muy bien aplicarse al conjuntodel sistema de enseanza practicado en la mayor parte de las escuelas.

    La Escuela Moderna tal como la conciben muchos pedagogosinteligentes y tal como la practicaba Ferrer en sus escuelas, no admiteprograma determinado, no limita las lecciones, ni determina conanterioridad los momentos en que han de verificarse. Las lecciones debendarse aprovechando las oportunidades o la curiosidad de uno o variosalumnos, y debe haber tal familiaridad y amor entre ellos y el maestroque, cuando uno se siente fatigado, puede retirarse del aula y dedicarse alo que ms le agrade: a lo que en ese momento le atrae. De este modo elmaestro va conociendo, poco a poco, las inclinaciones y aptitudes de cadaalumno en beneficio de ambos, siendo el resultado siempre ms seguro,con menos fatiga y economa de tiempo.

    Y digamos con Vigil: Olvidamos al nio y encarcelamos alhombre.

    Qu hacer?On, Infancia, Ao I, N 9, setiembre de 1912: XXXIV.

    Existen dos opiniones sobre cmo debe regirse la escuela prximaa fundarse bajo los auspicios de la Liga y es necesario que nosotrostratemos de explicar, lo ms claramente posible, por qu y cmo creemosdebe llevarse a cabo la obra.

    La escuela debe ser gratuita, dicen unos.La escuela debe ser paga, dicen otros.Los que opinan en la primera forma, demuestran la necesidad de

    que esa enseanza se difunda con especialidad entre los hijos de lostrabajadores y, como estos son generalmente los que carecen de medios,si se les cobra, sera como excluirlos de dicha enseanza y educacin.

    Los segundos, porque conocen el presupuesto indispensable parael funcionamiento normal de una escuela racionalista en todos susaspectos, opinan que las cotizaciones de individuos y sociedades no sonsuficiente garanta para darle la vida necesaria. Las sociedadesespecialmente, que son las que ms podran cotizar, dejaran de hacerlo,por cualquier crisis o desaparicin: ellas no son estables.

    Este es, por cierto, un asunto que hay que ponerlo en limpio antesy no despus de la instalacin de la escuela.

    Nosotros, antes que nada, afirmamos la necesidad de fundar laescuela. Despus opinamos que, entre dos cosas por hacer, hay quepracticar lo que permita asegurar la estabilidad de la obra.

    La escuela gratuita es, por el momento, una cosa irrealizable. Y yaque no podrn ir a ella como nosotros desearamos- todos los hijos delos trabajadores faltos de recursos, irn slo los que puedan pagar: muchospadres, conociendo la importancia de la obra, harn un esfuerzo para quesus hijos concurran, y algunos centros, sociedades o individuos, cooperarndirectamente para que otros asistan a la escuela. O es preferible no hacernada?

    En el prximo nmero demostraremos cmo lo que se cobrarser insignificante frente a lo gratuito de las escuelas del Estado.

    Tambin demostraremos, con nmeros, la imposibilidad de laescuela gratuita y los beneficios que se gozarn en nuestra escuelaracionalista.

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    La Escuela Moderna no tiene por objeto hacer adeptos a ningunasecta religiosa, poltica o social; su misin es preparar hombres para lavida: para una vida armnica entre todos los seres, haciendo comprendercuales son los males para que mejor distingan lo bueno.

    La Escuela Moderna no justificar nunca un acto de violencia. Si elalumno pregunta: por qu hay guerra en tal pas? el maestro dir: espor la ambicin de los capitalistas que con el fin de satisfacer susconveniencias particulares, sacrifican a millares de seres que nunca hanhecho mal alguno a los que ellos llaman sus enemigos. Y si el alumnoluego pregunta: por qu entonces siendo las matanzas entre hermanostan inhumanas, se levantaron en revolucin los obreros de ese pas enguerra? el maestro no podr hacer a menos que decir: esos obreros noquieren la guerra y si ahora se levantaron en armas es porque otros, enlas mismas condiciones, queran obligarlos a que fueran a matar a otroshombres que no cometieron ms delito que el de haber nacido al otrolado de una frontera. Y agregar: la violencia es siempre abominable,pero en la forma que la ejercen esos obreros no es ms que un acto dedefensa: lo mismo hara todo hombre por su instinto de conservacincuando se viera atacado por una fiera. As que esos obreros han preferido,antes que ir a matar a quienes nunca les haban hecho nada, defendersede esos hombres-fiera que los acometan y eran los verdaderos enemigosde la paz. Y el alumno, en su inocencia infantil, pero con la franqueza quepermitira siempre el maestro, podra preguntar: cuando vemos unsoldado por la calle, no tenemos que hacerle nada? No, -contestar elbuen educador, no hay que hacerle absolutamente nada; lo que debishacer es cultivar entre vosotros el amor; tratad de poneros siempre deacuerdo sin haceros dao, y cuando alguien os haga algo que vosotroscreis malo, tratad de hacerle comprender con buenos modos el mal quehace. Pero, cuando seis hombres, y se os quiera llevar a la fuerza aexterminar a vuestros hermanos o se os ataque con armas cuando luchispor vuestros derechos, defendeos!, es cuanto os puedo decir.

    Habis observado qu interesante leccin se puede dar a losalumnos, teniendo como nico programa la curiosidad de ellos... De lacuriosidad comienzan todos los estudios; y con la satisfaccin de lacuriosidad ellos se completan o se perfeccionan.

    El principal objeto, pues, de la Escuela Moderna, es satisfacer todaslas curiosidades de los alumnos de una manera razonada para que cadauno madure sus inclinaciones y sea algn da algo til para s y para lahumanidad, cosa que no puede suceder si a todos se le da una enseanzauniforme, sin observar los distintos gustos y capacidades.

    En la mayora de los casos, ese hombre, en relacin a su edad y losconocimientos que debi haber adquirido, comete ms faltas que el nioinocente e inexperto; y casi siempre, en vez de hombres tenemos niosgrandes. El nio tiene la disculpa de ser inocente en casi todos sus actos.El nio al nacer no conoci lo bueno ni lo malo; si obra mal es porque loque le rodea es as; es al ejemplo a quien sin poderlo evitar, tiene queseguir.

    Hoy por hoy la mayora de los padres castigan a sus hijos. Lo quese ha podido conseguir -sin leyes- es de que los extraos no castiguena los nios de los dems. El nio de ayer, -como el de hoy- ha recibido yrecibe una deficiente educacin moral; y adems l ha visto castigar a sushermanos, el ha soportado castigos; ha visto tambin como los demspadres castigan igualmente a sus hijos; ha escuchado conversaciones entrelos padres, en que se reprochaba a otro que no haba castigado a su hijohabiendo l cometido una falta, tildndolos de no saber educar, de notenerles cario, de encaminarlos por el mal camino...

    A un padre que tiene la desdicha de ser ignorante, de ser incapazde entrar en razones y conquistar el corazn de su hijo a quien quiere, sele pretende corregir con multas y con prisiones! Resulta hasta cierto puntoingenuo este procedimiento, y me extraa que Constancio C. Vigil, despusde haber pensado ms de un ao sobre este punto, no haya llegado aotras conclusiones ms humanas y capaces de remediar el mal.

    Y no se crea que los castigos corporales son los peores: para torturara un ser no es necesario ver la sangre o los moretones delatores del brutalproceder.

    Los nios son maltratados de muchsimas maneras que poco a pocovan formando un modo de ser. Los insultos, engaos, privaciones, etc.tambin martirizan.

    El hombre de hoy es el nio que se ha desarrollado en un ambientede egosmos en que todo lo que hace es por inters; ha perdido lasnociones de humanidad, se ha vuelto seco, todo lo juzga del mismo modoque lo juzgaron con l las circunstancias para abrir paso y mantener envida a su cuerpo: siendo hipcrita; el sincero no puede vivir; no es stesu reino. La voluntad de un hombre est sujeta a la voluntad del conjunto,y ese conjunto no est a la altura para reprochar los actos individuales yde los que l mismo es causa.

    Si frente a la prostitucin moral que predomina, no se levanta unavoz de reproche y cada uno observa slo por s, diciendo: esos no sonmis hijos, son suyos y tiene derecho a hacer lo que le parece cmoimponer una ley brusca de esa naturaleza que no es ms que el castigocontra el castigo, de idntico modo como el padre castiga la falta delhijo?

    Se ha abusado demasiado del castigo: en l est basada la defensade nuestra sociedad.

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    La aspiracin de la humanidadOtto Niemann, Educacin Sociolgica, Ao I, N 3;

    diciembre de 1911: 3-4.

    Ningn criterio sereno y reflexivo es capaz de afirmar: tal idea esla nica que libertar a la humanidad.

    Toda la humanidad, aunque de muchas maneras distintas y conmayor o menor eficacia, lucha por su libertad, aspira a una vida mejor.

    El republicano que lucha por sustituir al gobierno monrquico, comoel socialista que lucha por sustituir al republicano, aspira a unmejoramiento: al mejoramiento que han alcanzado a comprender.

    El obrero que se declara en huelga por conquistar unos cntimosms, o por reducir su jornada de trabajo, el que protesta por la carestade la vida y pide leyes que regulen ese estado de cosas, como el quepropaga y practica el sabotaje o la huelga general revolucionaria, todosquieren algo distinto, mejor, de lo que les rodea.

    Tanto los revolucionarios mejicanos que piden tierra para elcampesino, como los chinos que quieren la repblica, y como los obrerosde la Argentina que exigen constantemente en silencio y con hechos, laderogacin de la ley social, anhelan das mejores ms de acuerdo conel pensamiento de la poca en los respectivos lugares.

    Entre el mismo pueblo uruguayo, dividido en dos partidostradicionales, hay la creencia de que un partido gobernar mejor que otro.

    Afirmar pues, ante esta diversidad de hechos frente a una solaaspiracin que una determinada accin es el nico impulsor hacia un mejorvivir, es errneo, es pecar de fanatismo.

    Las ideas modernas no son ms que una perfeccin, unacontinuacin de otras anteriores. De la forma autocrtica se pas a lademocracia, y como sta aun no llena la misin o la aspiracin de loshombres, se lucha por otro sistema de gobierno: el socialismo; y como,por los fracasos que han tenido las formas de gobierno hasta hoypracticadas, se provee tambin un fracaso en la forma socialista, se haconcebido que al ser hay que prepararlo para que pueda gobernarse a smismo, formando comunidades regidas solo por la afinidad que sesolidarizarn siempre con los dems para todo aquello que fuera de intersgeneral, como la proteccin mutua para las necesidades de la vida y contralos efectos bruscos de la naturaleza.

    Todo evoluciona inevitablemente. Una idea nueva es el efecto deuna idea anterior que en la prctica ha demostrado ser mala o incompleta.Pero, se habr notado que las nuevas formas no se han practicado nuncaa medida que se iban interpretando, sino recin cuando se concibieronotras superiores. Parece que fuera necesario que una parte, los msatrevidos e inteligentes, tuvieran que subir a la mayor altura posible para

    Art.