Ojitos de corazon

download Ojitos de corazon

of 5

Transcript of Ojitos de corazon

Tema del cuento: La integracin.

Ojitos de Corazn era un duendecito al que llamaban as, justamente porque sus ojitos tenan forma de corazn, pero como el nombre es un poco largo lo llamaremos simplemente Ojitos. Nuestro duendecito tena un hermano gemelo quien, para todos los duendes, era igualito a l. Ojitos saba mucho acerca de igualdades y diferencias. El saba que por ms que todo el mundo lo confundiera con su hermanito, l tena la nariz un poquitn ms respingada y el dedo gordo de su mano derecha era ms gordo que el la manito de su hermano. Estaba demostrado que no haba dos personas iguales y dos duendes tampoco.

Sin embargo, Ojitos no se fijaba en las diferencias que haba entre los duendes. No es que no se diera cuenta que todos somos diferentes en alguna forma, pero sus ojos vean a todos iguales. Parece raro, pero no lo es. El vea ms con el corazn que con la vista, y mirando as, es fcil darse cuenta que todos somos iguales en nuestro interior. En la aldea de los duendes no todos tenan las mismas capacidades, algunos cantaban mal, otros no eran buenos deportistas, algunos no vean, otros no escuchaban o caminaban con dificultad, etc.

Ojitos pensaba que todos deban tener las mismas posibilidades de hacer cosas en la vida, pero en su aldea, como en tantas otras partes, no todos lo entendan as.

Haba escuelas donde los duendecitos a los que les costaba ms estudiar, no podan asistir, muchos duendes adultos no conseguan trabajo porque no podan escuchar o hablar y todas estas cosas apenaban el corazn de Ojitos. Un da, una gran tormenta se desat en la aldea. Llovi como nunca antes, el viento arras con lo que tuvo a su alcance y el granizo complet el triste trabajo de destruir el pueblo casi por completo. Una vez que la tormenta pas, se reunieron todos los duendes para ver cmo comenzaban a reconstruir su pequeo mundo. Alguien tena que dirigir las obras de reconstruccin, pero nadie quera hacerse cargo de semejante tarea. Ni siquiera la autoridad mxima de la aldea, Grun, un duende que por todo se enojaba.

Ojitos se ofreci a hacerse cargo de las obras. Pens que sta sera una oportunidad de hacer algo mucho ms grande que la

reconstruccin de un pueblo.

Y Ud. jovencito cree que est capacitado para semejante tarea? Esto no es un juego de nios. Le dijo el Grun con tono muy serio.

Jams pens que lo fuera. Contest Ojitos un poquitn asustado. Se que no es fcil, pero si todos colaboramos, seguramente se podr.

Ud. sabe mejor que yo jovencito, que no todos en la aldea estn capacitados para ayudar.

Se equivoca seor. Todos podemos hacer algo y se lo voy a demostrar. Ojitos tena un plan. Comenz por organizar distintos grupos, cada cual con su tarea bien definida. A los duendes que les costaba escuchar o que no escuchaban nada, les encomend el clavado de las maderas para construir las nuevas casas. Quienes no podan hablar, se ocuparon del sembrado de todos los jardines. Aquellos que no podan ver fueron los encargados de cantar hermosas canciones para que los duendecitos que estaban muy asustados en los refugios pudieran dormir tranquilitos.

A los que siempre estaban sentaditos en sillas de ruedas, les pidi que cocieran cortinas, sbanas, manteles y toda la ropa que se

haba volado con el viento. Todos ayudaron, y cuando digo todos, es porque realmente eran todos. Ojitos se haba propuesto algo ms importante an que sacar a su aldea de las ruinas y era que los dems duendes se diesen cuenta que todos podan hacer algo. Que todos -pero todos- tenan el mismo derecho, no slo de estudiar o trabajar, sino de hacer algo por los dems, de sentirse como lo que eran: un duende ms del pueblito. Y realmente lo logr. En menos tiempo del que tenan pensado la aldea estuvo reconstruida. Cuando el trabajo estuvo terminado, Grunn se acerc a Ojitos y le dijo: Me ha sorprendido jovencito! Jams pens que lo lograra y menos habiendo pedido ayuda a duendes que no pueden hacer algunas cosas. Todos podemos hacer algunas cosas y otra no. Lo importante es pensar en lo que s se puede y no en aquello que no nos es posible no le parece? Yo puedo morderme mi codito si quiero y Ud.?

Grun empez a enojarse. Al principio no entendi mucho que tena que ver el codo con todo esto. Dems est decir que no se lo poda morder, pero eso es otra historia. Luego entendi lo que ojitos haba querido decir. La aldea nunca volvi a ser la misma. No se vea igual, se vea mejor. Haba algo muy diferente en ella. Seguramente no era el color de la pintura, las maderas recin lustradas o las nuevas floren que sembraron, sin duda era que en el corazn de todos los que la formaban algo haba cambiado para siempre. Sus habitantes haban entendido que todos podemos hacer cosas y que nadie puede negarnos el derecho de hacerlo. Empez a haber escuelas para todos, maestros que se dedican ms a los duendecitos que tardaban ms en aprender y todos sin excepcin tenan trabajo y posibilidades de crecer.

Todos haban aprendido a ver el interior de cada persona, a fijarse no en las diferencias, sino en las igualdades. A partir de ese entonces, cada vez eran ms los duendes cuyos ojitos tenan forma de corazn. Esos ojitos que tenan la misma forma con la que ellos miraban a los dems. Fin

FUENTE:

http://www.encuentos.com/cuentos-cortos/ojitos-de-corazon-

escritores-argentinos-autores-de-literatura-infantil-pagina-de-cuentos/

Sugerencias pedaggicas: Para pensar y conversar con pap y mam: - Qu actitud tomara frente a una persona con algn tipo de discapacidad? - Tiene algn amigo o conocido con alguna discapacidad? - Les das la oportunidad de integrarse a tu vida y a la vida de los otros? - Te das cuenta que por ms que alguien tenga alguna limitacin, puede hacer un montn de otras cosas y que nadie debe quitarles la oportunidad de hacerlo?