Observador Semanal N° 173 - filippetti.eu · Noviazgo y castidad “Querido Padre, me llamo Marcos...

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AÑO IV - Nº 173 - JUEVES 30 DE OCTUBRE DE 2008 fundacionsanrafael.com - mail: [email protected] OBSERVADOR SEMANAL PALABRAS DE CERTEZA Y ESPERANZA COORDINACIÓN: NATHALIA LEMIR RESPONSABLE: GUILLERMO LESMES Padre Aldo Trento La creación de Eva Noviazgo y castidad “Querido Padre, me llamo Marcos y desde hace unos años estoy de novio con María. Desde siempre mi educación ha sido muy clara en referencia al noviazgo, porque tanto mis padres como el colegio “católico” en el cual me formé incesantemente me clavaban los valores morales como imprescindibles para formarme como ciudadano y como familia quizá si un día Dios me llama a formar un hogar. Ahora por el hecho que estoy de novio me parece que esta es la modalidad mediante la cual puedo servir al designio de Dios. Pero pasando los años y debiendo postergar, por motivos de estudio, nuestro matrimonio, se pone un problema que tanto para mí como para mi novia nos está creando mucho malestar. Se trata que nos está costando vivir la castidad en nuestro noviazgo. Las tentaciones de manosearnos, de tener relaciones sexuales es cada día más fuerte y le confieso que yo no aguanto más y por eso vivimos menos aquellos principios que nos pusieron en la cabeza desde nuestra niñez, también porque ella tuvo la misma formación mía. Ambos hemos crecido en dos colegios diferentes, ella en uno femenino y yo en uno masculino, pero ambos definidos por la misma postura ética. Las caídas, los cedimientos que a veces vivimos nos están carcomiendo por dentro como el cupì´i, dejándonos amargados, tristes y a veces desesperados. Hay momentos en los cuales no queremos confesarnos por el hecho de tener que decir siempre los mismos pecados y escuchar al cura decir: “¿de nuevo, esta vez?”. Vivimos momentos de rabia, momentos en los cuales sentimos insoportable el peso de una educación moralista, de deberes, cimentada sobre la prohibición, el pecado, la estigmatización del eros y la obsesión de la castidad, de la pureza. Padre, le ruego ayudarme a salir de esta situación que nos afecta hasta psíquicamente. Queremos saber que es la castidad entre novios, ¿cómo enfrentar nuestra relación, nuestros deseos, nuestras caídas? ¿Cómo vivir santamente nuestro noviazgo para llegar castos al matrimonio, también si no lo somos ya más? (…)” No se comien- za a ser cristiano por una decisión ética (…), sino por (…) un Acontecimiento el cual, al encontrarlo, da un nuevo horizonte a la vida y, con ello, una orientación decisiva no se llega a ser hombre a fuerza de escrúpulos, porque el cambio llega de improviso, como un lindo amanecer La carta continua, pero creo que ya en este punto vale la pena pararnos porque el problema ha sido expuesto en modo claro y justo. Marcos y María exigen una respuesta razonable a la cuestión, porque serían unos idiotas si tuvieran que “portarse bien” por un deber, por una moral sin fundamento en sí, por una educación puritana, miedosa del eros, de la carne, de lo humano. Tristemente esta postura, dominante en un cierto mundo “católico” sigue dando origen a una rebeldía, rechazo y, hasta odio, hacia la Iglesia. ¡Cuántos de mis compañeros, víctimas como yo de este moralismo, han abandonado la Iglesia, llegando a odiarla. Diría que los peores enemigos de la Iglesia han sido y son los que fueron víctimas de esta mala educación que, como afirmaba el filosofo Nietzsche, ha envenenado el eros, esa energía que se encuentra en la estructura del ser humano. Bastaría, querido Marcos, que leyeras el primer párrafo de la encíclica de Benedicto XVI “Deus Caritas est” para encontrar las respuestas a tus interrogantes, a tus sufrimientos. Por eso me permito subrayar unos aspectos del pensamiento del Santo Padre: Ante todo Benedicto XVI escribía: ”. Es decir, el cristianismo no tiene nada que ver con cuanto te enseñaron. No porque los valores éticos que te han trasmitido no sean buenos, sino porque no tienen una razón que los explique, no tienen un fundamento, están faltos de una ontología. Ya muchas veces he escrito que la moral es la envoltura humana de la ontología y de la estética. (ontología) (estética) (ética o moral). Ya el escritor Camus escribió ”. Los griegos habían puesto en las pla- zas de Atenas unas placas con la frase súplica: “Padre Zeus danos la gracia del cambio” Y el cambio coincide con el deseo de encontrar aquel hombre que el filósofo cínico griego Diógenes buscaba con una linterna en pleno día por las calles de Atenas. Este filósofo suscitaba la risa a quien encontraba por la calle y escuchaba esta respuesta. Pero él lo que quería era afirmar algo que Aquel hombre que es deseo de infinito, de amor, de felicidad, de verdad, de justicia y de belleza. Sin la claridad sobre quién es el hom- bre, (el hombre es relación con el Infinito) cualquier ética es impensable y si lo fuera sería inhumana. Tristemente el influjo pro- testante, calvinista y de Gregoire ha sido terriblemente desastroso en nuestro conti- nente en el siglo XIX. Y los frutos son más que visibles hoy día en el moralismo desesperante que nos domina y que es la causa de la inmoralidad que respiramos. Dentro de esta perspectiva Benedicto XVI, siempre en la encíclica mencionada, habla de la , sostenida por la gracia divina para vivir la unidad entre la razón y la instintividad, que son los factores constitutivos del yo humano. Una unidad desbordada por el pecado original y que, para devolverla al yo humano, el Misterio eligió de encarnarse, de entrar en la historia del hombre asumiendo el nombre de Jesús de Nazareth. De esta manera al hombre le ha sido posible que la razón, sostenida por la fe, se volviera el timón que indica permanentemente a la instintividad su horizonte y su finalidad. Horizonte y finalidad que coinciden con el designio de amor con que el Padre ha formado el hom- bre, varón y mujer. sobre el yo humano masculino o femenino, sea el de formar un hogar o el de entregarse en la virginidad, como estado de vida, al Señor. Por eso podríamos definir al noviazgo un compromiso serio pero no definitivo de un muchacho con una chica destinado a verificar el designio humano que Dios quiere para ambos. Un designio que tiene sólo dos caminos históricos: el del matrimonio o el de la vida consagrada. Dos caminos pero un único fin: la gloria de Dios. Dos modalidades para responder a un proyecto divino que Dios si o si, a quien toma en serio la propia vida, revela en la paciencia de una adecuada verificación. Pero nadie puede verificar seriamente la propia vocación dentro del noviazgo sin tener abierto el corazón a las dos posibilidades: matrimonio o vida consagrada. Es la postura de quien, consciente que es Dios Aquel que decide en el respeto de la libertad humana que puede reconocer o no su designio, está preocupado de pedir al Señor que revele lo que quiere de ambos. La característica de una postura auténticamente amorosa, entonces no puede no ser la gratuidad, de la cual la castidad es el aspecto fenoménico que lo testimonia. Vivir la castidad entonces implica desear que nunca el instinto obscurezca la claridad que el otro no es mío, sino que es un don. Y si es un don la primera característica del camino es el respeto. Tener relaciones sexuales en el noviazgo o practicar cualquier forma de manoseo o cercanía que no favorezca esta claridad amorosa, esta claridad que el otro no es mío, es inevitablemente irracional e inhumano. ¿Cómo puede uno entregar su cuerpo al otro cuando aún no es claro el proyecto que Dios tiene sobre uno mismo y la persona que ama? ¿Cómo puede uno entregar su cuerpo a otra persona sin la categoría de la definitividad que acontece sólo en el sacramento del matrimonio o, para quien es pagano, en un pacto social que da definitividad a una relación? sino de una exigencia íntima de la razón que no soporta reducir a uno mismo y al otro en un objeto de placer. . Cada uno de nosotros cuando se ha enamorado de una chica o de un chico la primera cosa que ha experimentado ha sido una conmoción, un deseo mínimo de respeto, de gratuidad, ha percibido como primera intuición de estar delante de un don único e irrepetible. Tristemente por el pecado original el hombre no llego a vivir esta intensidad sino por unos instantes, porque ya entra la morbosidad de la instintividad que quiere poseer al otro, quiere usarlo. “Si me amas acuéstate conmigo”, es el estribillo diario en la boca de los enamorados, que de esta manera ya parece el eco o la raíz del árbol que, si o si, se derrumbará dejando un concierto de escombros. Es lo que diariamente tocamos con la mano porque el instinto sin la razón es como el huracán del 25 de octubre que dejo unos muertos y cientos de árboles caídos por las calles. 1. todos busca- mos: a aquel hombre que está en lo pro- fundo de nuestro yo, de nuestro ser. 2. necesidad de una ascesis, de un trabajo continuo de la libertad humana 3. El noviazgo se prevé dentro de este proyecto amoroso como hipótesis de verificación del proyecto divino 4. ¿Qué es la castidad en el noviazgo? La castidad es la conciencia que el otro no es mío, más bien un don y, al mismo tiempo, un despertador que remite a ambos al destino último. No es una cuestión de “me gusta, no me gusta” o de atracción irresistible La castidad es la característica exigida por la razón para que el instinto no obscurezca el valor de la persona, destruyéndola La castidad es el único camino para que el árbol que tiene su raíz en el reconocimiento del otro como signo del Misterio, viva, crezca y de fruto. No se comienza a ser cristiano por una decisión ética o una gran idea, sino por el encuentro con un acontecimiento, con una Persona, que da un nuevo hori- zonte a la vida y, con ello, una orienta- ción decisiva

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AÑO IV - Nº 173 - JUEVES 30 DE OCTUBRE DE 2008fundacionsanrafael.com - mail: [email protected]

OBSERVADOR SEMANALP A L A B R A S D E C E R T E Z A Y E S P E R A N Z A

COORDINACIÓN: NATHALIA LEMIRRESPONSABLE: GUILLERMO LESMES

Padre Aldo Trento

La creación de Eva

Noviazgo y castidad“Querido Padre, me llamo Marcos y

desde hace unos años estoy de novio conMaría. Desde siempre mi educación hasido muy clara en referencia al noviazgo,porque tanto mis padres como el colegio“católico” en el cual me forméincesantemente me clavaban los valoresmorales como imprescindibles paraformarme como ciudadano y comofamilia quizá si un día Dios me llama aformar un hogar. Ahora por el hecho queestoy de novio me parece que esta es lamodalidad mediante la cual puedo serviral designio de Dios.

Pero pasando los años y debiendopostergar, por motivos de estudio, nuestromatrimonio, se pone un problema quetanto para mí como para mi novia nos estácreando mucho malestar. Se trata que nosestá costando vivir la castidad en nuestron o v i a z g o . L a s t e n t a c i o n e s d emanosearnos, de tener relacionessexuales es cada día más fuerte y leconfieso que yo no aguanto más y por esovivimos menos aquellos principios quenos pusieron en la cabeza desde nuestraniñez, también porque ella tuvo la mismaformación mía.

Ambos hemos crecido en dos colegiosdiferentes, ella en uno femenino y yo enuno masculino, pero ambos definidos porla misma postura ética. Las caídas, loscedimientos que a veces vivimos nos estáncarcomiendo por dentro como el cupì´i,dejándonos amargados, tristes y a vecesdesesperados. Hay momentos en loscuales no queremos confesarnos por elhecho de tener que decir siempre losmismos pecados y escuchar al cura decir:“¿de nuevo, esta vez?”. Vivimosmomentos de rabia, momentos en loscuales sentimos insoportable el peso deuna educación moralista, de deberes,cimentada sobre la prohibición, elpecado, la estigmatización del eros y laobsesión de la castidad, de la pureza.

Padre, le ruego ayudarme a salir deesta situación que nos afecta hastapsíquicamente. Queremos saber que es lacastidad entre novios, ¿cómo enfrentarnuestra relación, nuestros deseos,nuestras caídas? ¿Cómo vivir santamentenuestro noviazgo para llegar castos almatrimonio, también si no lo somos yamás? (…)”

No se comien-za a ser cristiano por una decisión ética(…), sino por (…) un Acontecimiento

el cual, al encontrarlo, da unnuevo horizonte a la vida y,con ello, una orientación decisiva

no se llega a ser hombre a fuerza deescrúpulos, porque el cambio llega deimproviso, como un lindo amanecer

La carta continua, pero creo que ya eneste punto vale la pena pararnos porque elproblema ha sido expuesto en modo claroy justo. Marcos y María exigen unarespuesta razonable a la cuestión, porqueserían unos idiotas si tuvieran que“portarse bien” por un deber, por unamoral sin fundamento en sí, por unaeducación puritana, miedosa del eros, dela carne, de lo humano.

Tristemente esta postura, dominanteen un cierto mundo “católico” siguedando origen a una rebeldía, rechazo y,hasta odio, hacia la Iglesia. ¡Cuántos demis compañeros, víctimas como yo deeste moralismo, han abandonado la

Iglesia, llegando a odiarla. Diría que lospeores enemigos de la Iglesia han sido yson los que fueron víctimas de esta malaeducación que, como afirmaba el filosofoNietzsche, ha envenenado el eros, esaenergía que se encuentra en la estructuradel ser humano.

Bastaría, querido Marcos, que leyerasel primer párrafo de la encíclica deBenedicto XVI “Deus Caritas est” paraencont ra r las respues tas a tusinterrogantes, a tus sufrimientos. Por esome permito subrayar unos aspectos delpensamiento del Santo Padre:

Ante todo Benedicto XVI escribía:“

”. Es decir, el cristianismono tiene nada que ver con cuanto teenseñaron. No porque los valores éticosque te han trasmitido no sean buenos,sino porque no tienen una razón que losexplique, no tienen un fundamento,están faltos de una ontología.

Ya muchas veces he escrito que lamoral es la envoltura humana de laontología y de la estética.

(ontología)(estética)

(éticao moral). Ya el escritor Camus escribió“

”.

Los griegos habían puesto en las pla-zas de Atenas unas placas con la frasesúplica: “Padre Zeus danos la gracia delcambio” Y el cambio coincide con eldeseo de encontrar aquel hombre que elfilósofo cínico griego Diógenes buscabacon una linterna en pleno día por lascalles de Atenas. Este filósofo suscitabala risa a quien encontraba por la calle yescuchaba esta respuesta. Pero él lo quequería era afirmar algo que

Aquel hombre que es deseo de infinito, deamor, de felicidad, de verdad, de justicia yde belleza.

Sin la claridad sobre quién es el hom-bre, (el hombre es relación con el Infinito)cualquier ética es impensable y si lo fuerasería inhumana. Tristemente el influjo pro-testante, calvinista y de Gregoire ha sidoterriblemente desastroso en nuestro conti-nente en el siglo XIX. Y los frutos son másque visibles hoy día en el moralismodesesperante que nos domina y que es lacausa de la inmoralidad que respiramos.

Dentro de esta perspectivaBenedicto XVI, siempre en la encíclicamencionada, habla de la

, sostenida por lagracia divina para vivir la unidad entre la

razón y la instintividad, que son losfactores constitutivos del yo humano. Unaunidad desbordada por el pecado originaly que, para devolverla al yo humano, elMisterio eligió de encarnarse, de entrar enla historia del hombre asumiendo elnombre de Jesús de Nazareth.

De esta manera al hombre le ha sidoposible que la razón, sostenida por la fe, sev o l v i e r a e l t i m ó n q u e i n d i c apermanentemente a la instintividad suhorizonte y su finalidad. Horizonte yfinalidad que coinciden con el designio deamor con que el Padre ha formado el hom-bre, varón y mujer.

sobre el yo humano masculino ofemenino, sea el de formar un hogar o elde entregarse en la virginidad, comoestado de vida, al Señor. Por esopodríamos definir al noviazgo uncompromiso serio pero no definitivo deun muchacho con una chica destinado averificar el designio humano que Diosquiere para ambos. Un designio que tienesólo dos caminos históricos: el delmatrimonio o el de la vida consagrada.Dos caminos pero un único fin: la gloriade Dios.

Dos modalidades para responder a unproyecto divino que Dios si o si, a quientoma en serio la propia vida, revela en lapaciencia de una adecuada verificación.Pero nadie puede verificar seriamente lapropia vocación dentro del noviazgo sintener abierto el corazón a las dosposibilidades: matrimonio o vidaconsagrada.

Es la postura de quien,consciente que es Dios Aquel que decideen el respeto de la libertad humana quepuede reconocer o no su designio, estápreocupado de pedir al Señor que revele loque quiere de ambos.

La característica de una posturaauténticamente amorosa, entonces nopuede no ser la gratuidad, de la cual lacastidad es el aspecto fenoménico que lotestimonia. Vivir la castidad entoncesimplica desear que nunca el instintoobscurezca la claridad que el otro no esmío, sino que es un don. Y si es un don laprimera característica del camino es elrespeto.

Tener relaciones sexuales en elnoviazgo o practicar cualquier forma demanoseo o cercanía que no favorezca estaclaridad amorosa, esta claridad que el otrono es mío, es inevitablemente irracional einhumano. ¿Cómo puede uno entregar sucuerpo al otro cuando aún no es claro elproyecto que Dios tiene sobre uno mismoy la persona que ama? ¿Cómo puede unoentregar su cuerpo a otra persona sin lacategoría de la definitividad que acontecesólo en el sacramento del matrimonio o,para quien es pagano, en un pacto socialque da definitividad a una relación?

sino de una exigencia íntima de la razónque no soporta reducir a uno mismo y alotro en un objeto de placer.

.

Cada uno de nosotros cuando se haenamorado de una chica o de un chico laprimera cosa que ha experimentado hasido una conmoción, un deseo mínimo derespeto, de gratuidad, ha percibido comoprimera intuición de estar delante de undon único e irrepetible.

Tristemente por el pecado original elhombre no llego a vivir esta intensidadsino por unos instantes, porque ya entra lamorbosidad de la instintividad que quiereposeer al otro, quiere usarlo. “Si me amasacuéstate conmigo”, es el estribillo diarioen la boca de los enamorados, que de estamanera ya parece el eco o la raíz del árbolque, si o si, se derrumbará dejando unconcierto de escombros.

Es lo que diariamente tocamos con lamano porque el instinto sin la razón escomo el huracán del 25 de octubre quedejo unos muertos y cientos de árbolescaídos por las calles.

1.

todos busca-mos: a aquel hombre que está en lo pro-fundo de nuestro yo, de nuestro ser.

2.

necesidad deuna ascesis, de un trabajo continuo dela libertad humana

3. El noviazgo se prevé dentro deeste proyecto amoroso como hipótesisde verificación del proyecto divino

4. ¿Qué es la castidad en elnoviazgo?

La castidad es laconciencia que el otro no es mío, másbien un don y, al mismo tiempo, undespertador que remite a ambos aldestino último.

No es una cuestión de “me gusta, nome gusta” o de atracción irresistible

La castidad esla característica exigida por la razónpara que el instinto no obscurezca elvalor de la persona, destruyéndola

La castidad es elúnico camino para que el árbol quetiene su raíz en el reconocimiento delotro como signo del Misterio, viva,crezca y de fruto.

No se comienza a ser cristiano por unadecisión ética o una gran idea, sino porel encuentro con un acontecimiento,con una Persona, que da un nuevo hori-zonte a la vida y, con ello, una orienta-ción decisiva

“Nosotros estamos habituados a buscarcada cosa, cada cosa, y por el bien poco quepueda haber dentro y exaltarla, sentirla fra-terna, compañera de viaje. Por eso es unabrazo universal [....], ecuménico”: así lee-mos al final de la introducción del RiesgoEducativo de Don Luigi Giussani.

El Lino de Andersen es un himno deloas a la realidad entera en su positividadtotal, inclusive cuando se ha de pasar porestrecheces dolorosas.

La fábula es una gran parábola sobre lavida humana, como una escalera en cincoetapas, que inicia en la infancia hasta lavejez y la muerte; un curso por cierto fati-goso, pero que vale la pena, porqué el pano-rama se hace hacia arriba cada vez más her-moso. En cada etapa, en cada meta positivaalcanzada, pronto entra la espada del dolor,que tantos viven como objeción al camino,mientras que no es más que la condición delcamino hacia una ulterior meta “más eleva-da y mejor”. La quinta etapa es la apoteosis.

El Lino en manera transparente, vehicu-líza la concepción cristiana de la vida: no laparábola trágica, los primeros escalonesascendentes hacia la juventud, despuésmelancólicamente en manera descendentehacia la vejez y el abismo de la muerte; biensí abrazo amoroso en cada “circo-stanza”circunstancia presente, en la prospectivaúltima de la esperanza cierta, del infinito. Elalba de cada nuevo día, en cada estación dela existencia, está entonces llena de expec-tativas ¿que regalo me dará hoy el señor?¿qué sorpresa me reservará este día (porqueciertamente pasará algo bueno para mí!)?

“El Lino estaba en flor; sus flores sonazules y bellísimas, delicadas como las alasde una mariposa, y quizás más aún. El solresplandecía sobre el lino y las nubes de llu-via regaban, y esto para el Lino era muybello como, para un niño pequeño, habersido bañado y, después besado por lamadre; así todo se vuelve mas bello; tam-bién el lino se volvía más bello”.

Apertura solar, llena de colores, quecontra distingue la belleza y la feliz certezade poseer un mañana.

Esto resiste al singular estridente cinis-mo del eje barrera, la cual- muy similar alperro del Hombre de nieve – intentan disua-dirlo: “¡Tu no conoces el mundo, pero noso-tros si, se han hecho presentes los nudos delas tribulaciones!”. Pero después irrumpe elmal, el dolor, el sufrimiento. El lino acepta,recordando las cosas bellas que ha tenido,de la extraordinaria felicidad vivida: estácontento en el sufrimiento.

“Tod

o el lino, hasta la última fibra, se transfor-mó en una único remiendo”. Sorpresa paraun inicio contra el cinismo que solo sabedecir “la historia se terminó”. Sorpresa deun reconocimiento: “me he transformadoen algo “. Sorpresa feliz. Pero llega la heri-da de las tijeras, el pinchazo de la aguja.

“la tela se convirtió endoce prendas de vestir intimo,de la especie que ninguno quie-re nombrar, pero que todos loshombres deben llevar, es decirdoce prendas de aquella espe-cie”. Sorprendente reconoci-miento de un “bendito desti-no” que se realiza, y hace útil,por lo tanto feliz. Eran doceprendas distintas y también“una sola cosa una docena “:en la simbología de los núme-ros, se refiere a los apóstoles:las doce columnas que sostie-nen la compañía eclesial; esosdoce hombres humildes comoestos… innombrables prendasblancas intimas, es la caridaddel servicio que liberan – yesplendentes de gracia comoel candido tejido. Pero luegose desgastan y se conviertentrapos. Es aún un gran sufri-miento.

“Se convirtieron en unhermoso papel blanco, finísi-mo [-----] se escribieron en él las historiasmas bellas del mundo, y la gente estaba aten-ta a sentirlas porque eran verídicas y her-mosas, y convertían a los hombres massabios y mejores; aquellas palabras habíandescendido como una bendición sobre elpapel!

¡Es más de cuanto he soñadocuando era una pequeña flor delcampo! Como podría haber imagi-nado que un día habría podidodifundir alegría y saber entre loshombres! ¡No llego ni siquiera acomprenderlo! ¡Pero es propia-mente así! El Señor sabe bien queyo no he hecho nada, salvo aquelloque estaba obligada ha hacer conmis humildes capacidades, paraexistir! El en cambio me guía deuna alegría a otra, de un honor aotro; cada vez que pienso: “La his-toria ha terminado”, me sucede jus-tamente pasar a una existencia máselevada”.

El Lino esta ahora al serviciode la dimensión cultural, de

sapiencia. Vocación peculiar de los maes-tros, de los educadores. Renglones, excep-cionales en el aspecto metodológico. Elconocimiento nace del afecto.Afectus: toca-do, entonces atento. Tocado –él, el alumno-de ti educador, de tu amor por su vida: de tucoraje de contar historias “todas reales y

bellas “. Cuando la verdad se reúne en laforma de lo bello, entonces el bien salpicacomo el agua de la surgiente, sin imposicio-nes y predicas moralistas: aquellas historias(aquella Gran historia) “convertían a loshombres más sabios y mejores”. Y tu des-

ciendes sobre esa clase “como una bendi-ción” ( lo mismo vale para ti padre o abue-lo, que lees las fábulas al hijo o al nieto. Ydescubres que es la cosa más preferida paraél, al solitario consumo de la TV). Vocacióneducativa: llamados “a difundir alegría yconocimiento a los hombres!”, dóciles alSeñor que no se comienza sino para termi-nar. Es EL que hace; “me conduce deuna alegría a otra de un honor a otro”.

Ese papel fue llevado a la tipografía y sucontenido fue divulgado en “centenarios delibros”. La hoja de lino (es decir el manus-crito original) ya anciano, “respira comouna vieja abuela “, y terminó reposando enun estante en recogimiento meditativo. Yfue muy orgullosa:

“Es muy útil permanecer a contemplarlos propios hechos! –dijo el papel- Y esmuy justo que uno se recoja a meditar sobreaquello que está encerrado en nuestra pro-pia alma! Solo ahora veo claramente dentromió! El verdadero progreso está en cono-cerse a si mismos!”.

P ero un DIAel papel fue tirada a las lla-mas. Es el fin? Tenían razón los ejes de labarrera?

“Ahora voy directa al sol!”dijo una vozen las llamas, y eran como si miles devoces lo dijeran juntas[....]cada uno de losminúsculos seres invisibles decían: “la his-toria no termina nunca! Es ésta la cosa máshermosa! Yo lo sé, y por eso soy el ser másfeliz del mundo!”.

No hay razones nihilistas, por lo quetodo termina en la nada. Hemos venido almundo por un destino inmortal. Tenemosesta esperanza verdadera y cierta y es lacosa mas hermosa. Feliz el que puede hacerExperiencia.

1. La infancia:

2. La juventud

3. La adolescencia

4. La madurez y lavejez:

5. La meta

Jueves 30 de Octubre de 2008 OBSERVADOR SEMANAL2A C T U A L I D A D

EDUCAR ES UN RIESGO

Educar a reconocer la positividad total de la realidad

Una monja hindú es desnudada, maltrata-da y violada bajo la mirada de la policía localque no interviene. La hermana Meena Barwa,en rueda de prensa, cuenta: “He sido violada yla policía local en lugar de protegerme ha con-fraternizado con los delincuentes.

No quiero que me tengan lástima, quierouna investigación a nivel federal”.

La hermana, de 29 años, describió en vivoa la televisión el estupro, que cambió su vida,ocurrido hace dos meses, acusando a la policíade complicidad. El obispo de Orissa dijo: “Esuna denuncia valiente”.

El 25 de agosto pasado, ella se encontrabaen el Centro Pastoral de Nuagaon, distrito deKandhmal, pobre ciudad hindú. La hermana,que se hallaba junta al sacerdote ThomasChellan, fueron agredidos por unos cuarentafanáticos hindúes, que les golpearon, les des-nudaron, y fueron obligados a pasearse por elcentro del pueblo. Se salvaron de ser quema-dos vivos, pero la hermana fue violada por unextremista, mientras maltrataron al sacerdotepor horas. Sólo al atardecer la policía intervi-no para liberar a los dos.

La hermana cuenta: “La policía no nos ayu-dó, ni siquiera querían hospedarme en el cuar-

tel, y luego por horas intentaron convencermea no exponer la denuncia”.

En el estado de Orissa, ya desde tiempo,hay violencia contra los cristianos. Se cuentanmás de 37 “mártires” en los últimos dosmeses, y la policía sigue dejando en libertad alos fanáticos que, por motivos políticos o reli-giosos, persiguen a la pequeña comunidad cris-tiana.

Este episodio es muy importante y un ejem-plo para la Iglesia hindú. Que una mujer hayatenido el coraje de hablar, superando el pudory el miedo, sostenida por toda la iglesia hindúy por su Superiora, que la convenció a hablar,es un signo claro de cómo la fe en Cristo esmás grande que el miedo.

También, es un gesto de esperanza para elpequeño rebaño cristiano. No hay que olvidarque la voz de una persona consagrada puedehacer algo, en este país, en defensa de los cris-tianos, que todos los días arriesgan la vida porel simple hecho de amar a Cristo.

Pedimos a todos, en comunión con elSanto Padre, rezar por los cristianos persegui-dos por la propia fe, en modo especial lo queviven en Irak e India.

El odio hacia Cristo

Paolo Buscaroli

VIOLENCIA EN LA INDIA

Roberto Filippeti

Nathalia Lemir

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Escribano Público, Lic. Julio Cacéres Carrillo.Más informes (021) 661-607, con la Sra. Teresa de Ávalos

GRACIAS POR SU COLABORACION

RIFA SIN FRONTERASa beneficio de la Casa Divina Providencia

PREMIO BOLETA Nº30826 Juan Cañete29084 Jorgelina C. de Coronel190305 María Graciela Gímenez96039 Pablo Pfnnel Gatti13570 Alicia de Rivarola30365 Juan M. Carlomagno23920 Francisca San Martín18035 Olivia Melgarejo01484 Elvira de Zapag03775 Rufino López

1. Un auto Fiat Palio 0 Km.2. Un Televisor Plasma de 42"3. Un freezer vertical4. Una heladera5. Una cocina de 4 hornallas6. Un lavarropas7. Un horno microondas8. Un equipo de sonido con DVD9. Un aparato de fax10. Una Cámara Digital

R E S U L T A D O S

Como el mundo comenta, yo nopodía estar ajena a lo que marco unaHISTORIA POSITIVA en nuestropaís, me refiero al evento de

, demostrandola capacidad organizativa y la soli-daridad de los paraguayos, como ellema: “

.

Tuve la oportunidad de ser unade los 30 voluntarios de la empresaPunto farma, la única farmacia queestuvo encargado de proveer asis-tencia de primeros auxilios conmedicamentos e insumos gratuitospara la ocasión, proveer a la CruzRoja lo necesario para que hicieranuna excelente labor, una experien-cia realmente gratificante pero sor-prendente a la vez por mil motivos;por ejemplo desde un principio laapertura positiva del Arq. Sashaante mi propuesta, y al llegar ese díaa la primera que encontré fue a Ma.Rosa Gagliardone quien con su sim-patía y sonrisa que la caracteriza nosrecibió con los brazos abiertos al igualque la Sra. Ati Troche quien rápida-mente nos oriento a nuestros puestos.

Allí comenzamos el desafío del día;asistiendo a más de 2000 niños meno-res de 5 años que llegaban con la pielquemada por el sol, casi deshidratadosy sobre todo sin ningún tipo de protec-ción para la cabeza, una falta total deconciencia de sus padres, por otro ladola asistencia de mas de 3000 personasmayores de 60 años con descompensa-ción, una cifra alarmante porque en elprimer puesto de la entrada ya llegabancon falta de aire y mucha sed, que gra-cias a Agua de las Nieves de

Encarnación de la familia Velázquezrecibimos el apoyo incondicional parabrindar cientos de litros de agua gratui-ta para todos los que llegaban conalgún inconveniente de salud y sed queles impedía disfrutar 100% del evento,que también gracias a los laboratoriosamigos Indufar, Galeno, Eucerin, Asfam, Bayer, Guayaki y 3M pudimoshacer posible esta excelente asistencia.

No comprendía como podía ser quela gente antes de empezar la fila ya lle-gaban con un estado agotado, cuandotuve la oportunidad de salir a mirar a lacalle, vi asombrada miles de personasque parecían “bichos de verdad” quecuadras y cuadras caminaban rápida-

mente dirigiéndose a la rural, momen-to en que eran las 11 de la mañana yveo que nuestro chofer con otros com-pañeros rápidamente bajaban variascajas de medicamentos e insumosduplicando la inversión que teníamosprevisto para seguir brindado atencióna todos los que llegaban con entusias-mo a brindar su aporte solidario.

Nunca antes habíamos vivido unaexperiencia similar en nuestro país,quizás sea algo parecido a lo que vi dosmeses atrás en Italia en el Meeting deRimini, en donde se contaba con masde 3000 voluntarios de todo el mundopara la organización, cuando me con-taban yo por supuesto no creía, decía

que eran exagerados al tirar esacifra, pero cuando me toco estar allí,dije que se quedaron cortos con losnúmeros, ya que a diario la entradade gente contabilizada superaba los50.000.

Pero lo que vivimos el domingosorprendió al mundo porque era laprimera ves que se realizaba unmega evento solidario rompiendoun record mundial y pasar a formarparte del libro Guinness, que estoycasi segura que ni siquiera los orga-nizadores estimaban semejante éxi-to!. Con esto nos demostramos anosotros mismos que no necesita-mos ser pagados por un partido polí-tico para ser número.

Por supuesto hubiera sido aburri-do si no teníamos algunos problemi-tas clásicos que genera nuestra gen-te, que como dice el P. Trento esto esparte de nuestra cultura guaraní.

Me había causado risa la primeravez que tuvimos una reunión con la

gente de la Cruz Roja cuando pregun-te: previeron el caso de lluvia?, se que-daron en el aire, y contestaron “No!” ydije dentro mío; se que Dios no permi-tirá, porque él conoce nuestras inten-ciones

Esta experiencia es inolvidable nosolo por la fantástica iniciativa y la cre-dibilidad del Sr. Humberto Rubin y suscolaboradores de lujo, sino porquecada uno de nosotros los Paraguayostuvimos la oportunidad de demostraral mundo que somos capaces cuandonos proponemos algo y por sobre tododijimos:

“todobicho que camina”

no todo esta perdido, yovengo a entregar mi corazón”

“¡Si!, Aquí estamos paradar nuestro corazón”.

El Paraguay desafió al mundo

con una acción positiva

GRAN CENA SHOW BAILABLE

Ya es toda una tradición la Cenaorganizado por las damas voluntarias del Centro de

Ayuda a la Vida de la Fundación San Rafael,a total venefio.

La Bella Italia

A realizarse el día viernes 7 de noviembre a las 20:00hs.Residencia de la Flia. Puschkarevich

R.I. 3 Corrales 1055 esq. Facundo MachainReservas al tel.: 661 607

Nathalia Lemir

La empresa en la sociedad civil

La doctrina social de la Iglesia

La libertad de emprender

La empresa si bien es una célula econó-mica es también una célula social. Estáinmersa en la sociedad en la que se encuen-tra y a la que sirve. No sólo está vinculadacon quienes entran en contacto con ella deuna manera más o menos directa como sonsus inversionistas, trabajadores, clientes,proveedores y competidores, sino tambiéncon esa extraordinaria variedad de grupos ycomunidades como son la familia, el barrio,la escuela, la Iglesia, la profesión, el sindi-cato, el partido político, la entidad cultural,deportiva, de esparcimiento o de beneficen-cia, las instituciones colectivas superiores oel Estado mismo.

Se ha dicho que detrás de los conceptosde capital y trabajo hay hombres concretosque son los inversionistas y que son los tra-bajadores, que esperan ser tratados comopersonas y retribuidos justamente en pro-porción a sus aportes. Del mismo modo sepuede decir que detrás del público consu-midor también hay seres humanos concre-tos que esperan recibir un valor real por elprecio que pagan, que también quieren sertratados como personas y servidos razona-blemente.

No puede olvidarse que la empresa hasido creada por los hombres, para los hom-bres y que por lo tanto no puede desenten-derse de todas las dimensiones del ser huma-no. No puede vulnerar sus valores funda-mentales sino promoverlos lo más posible.La empresa, cuya misión es colaborar albienestar de la sociedad, está obligada a con-tribuir también a su bienser.

Hemos de señalar que una de las gran-des metas de la Doctrina Social Cristiana esla forma de la empresa. Una empresa en laque sus hombres, al fin reconciliados, seunan al logro de objetivos comunes. Elsociólogo Johannes Messner ha dicho que"

". Y Peter Drucker por su parteha afirmado que "

".

Es evidente que para esta indispensablereforma social, la empresa debe transfor-marse y fortalecerse. Y quienes creemos enla Doctrina Social de la Iglesia y aprecia-mos su gran valor, debemos ser los más deci-didos promotores de esta transformación yfortalecimiento.

Y tenemos que hacerlo a partir de nues-tra propia empresa. Hacerla un núcleo deauténtica eficacia productiva. Hacerla, pormedio de una inteligente participación desus integrantes, un reducto de libertad, decreatividad, y de iniciativa; una segundaescuela en la que sus hombres no sólo secapaciten sino que se formen y desarrollen;una segunda familia en la que sus hombresencuentren confianza, amistad, y afecto.

La Iglesia ofrece en su doctrina socialun conjunto de principios de reflexión, decriterios de juicio y de directrices de acciónpara que los cambios en profundidad queexigen las situaciones de miseria y de justi-cia sean llevados a cabo, de una manera talque sirva al verdadero bien de los hombres.

Los criterios y directrices, pero sobretodo los grandes principios de la DoctrinaSocial Cristiana, tienen una gran relevancia

para la economía en general y para laempresa en particular.

Se cuentan entre los últimos la dignidadde la persona humana, la solidaridad, la sub-sidiaridad, el valor y significado del traba-jo, el destino universal de los bienes y ya enel ámbito de criterios y directrices, la parti-cipación de los trabajadores de la empresa.

El principio del destino universal de losbienes y el concomitante derecho a la pro-piedad privada establece que quien es pro-pietario de bienes y desde luego de los

medios de producción es más bien un admi-nistrador de ellos.

Esta rigurosa exigencia en materia delderecho de propiedad plantea a la empresala obligación de cuidar celosamente losrecursos que se le proporcionan y en rela-ción con los trabajadores el pugnar porquede algún modo tengan acceso a la propie-dad, ya sea de la misma empresa o de otrotipo de inversiones. Y es evidente que esteconcepto de propiedad condiciona el ejerci-cio de la autoridad.

Una de las grandes metas del pensa-miento social cristiano ha sido contribuir aldiseño de una economía verdaderamente alservicio del hombre. Esto implica integrar,en el conjunto de la sociedad, las fuerzasque le dan equilibrio, firmeza y capacidadde resistencia contra las fuerzas destructi-vas externas e internas.

la cuestión social ha de resolverse en laempresa si es que ha de resolverse de algu-na manera

la solución de los proble-mas de la empresa, conformará el sistemabajo el que tendremos que vivir

Jueves 30 de Octubre de 2008 OBSERVADOR SEMANAL4

"La empresa es para el hombre y no el hombre para la empresa” (1)

Fuente principal: “

de Lorenzo Servitje Sendra

La doctrina social de laIglesia y la práctica empresarial”

"Chica: tus waffles son horrorosos, medijo una señora” el 28 de mayo de 1980, alos 15 días exactos de abrir Crepes &Waffles en un sitio del norte de Bogotá (Co-lombia)”. Con estas palabras comienza acontarnos su historia Beatriz Fernández,quien hace 25 años junto con su esposo,Eduardo Macías, abrieron un pequeñonegocio que hoy incursiona por el mundo.

Y continuo: “Se entró a la cocina sinpermiso, abría la nevera, revolvía las ollas,esculcaba en los anaqueles. Y de pronto sevolteó y me calmó con unas flemáticas pala-bras: 'Yo soy experta en waffles y voy atraerte mi receta secreta'. A los pocos minu-tos regresó, efectivamente, con la misterio-sa mezcla preparada en un frasco herméticoy su fórmula garrapateada en una hoja depapel: esa es la que todavía utilizamos hoy.La señora nunca volvió a aparecer, no supeni cómo se llamaba. Yo simplemente decía:'esa debe ser Dios'. Entre tanto, Crepes &Waffles crecía y de la señora no se sabíanada. Catorce años después, en el brunch -desayuno- de nuestro restaurante del WorldTrade Center, se acerca una mujer y medice: 'Hola chica. ¿Te acuerdas de mí?'.

“No la reconocí. Percibía algo familiar,quizás su dicción de dama de la capital,cuando ella interrumpió mi batalla contralos recuerdos: 'Te acuerdas de la receta delos waffles?', dijo. Lo único que hice fueagarrarla del brazo para que no se esfumaray allí, en medio de la barahúnda del medio-día, apenas atinaba a decirle 'Tú eres Dios',y lloraba. Estuve en shock varios segundos:no podía parar de llorar de la impresión dever aquella aparición feliz, que me decíadesde el otro lado de mi turbación: ¿No, yosoy Manuelita Durana de Gómez'.

“Entonces le respondía: “Pues si noeres Dios, Él te mando porque tú no sabesen el momento en que llegaste”.... no teníaforma de agradecer lo que ella hizo por mí.Y esa generosidad es parte de esta historia yde este éxito. No puedo decir que Dios noestá presente en esta empresa desde el prin-cipio y por eso le digo a mi gente que hayque tener amor, a Dios en nuestro corazón:Él es fuerza, luz y vida”. Lo que empezócomo una idea de dos estudiantes de sextosemestre de administración de empresasterminó en un imperio y también en unmatrimonio. Ella es el motor de C&W: underroche de energía, un ser espiritual únicoque alimenta el alma de sus empleados cadadía y que ha creado una empresa con cora-zón. Mientras su esposo es la estrategia, elcálculo, el análisis con visión empresarial,ella es el aliento y la vida.

Es una mujer que tiene claro que elpoder se fundamenta, además del amor y el

compromiso, con valores como la alegría,"en el compromiso con unos objetivos queno solamente benefician a unos pocos, sinoa todos los que hacen parte de la empresa".

Fue una aventura que empezó sin agüe-ros: el viernes 13 de mayo arrancó su sueño,cuando abrieron un pequeño negocio deventa de crepes tradicionales de ternera,Stroganoff y pollo con champiñones. "Loswaffles eran feos -recuerda hoy Beatriz-,eran como comerse un libro, pesabanmucho". Pero luego de que aquel ángel tocóa su puerta para regalarle una receta exito-sa, ella supo que su propia fórmula erainyectarle espiritualidad a la empresa; dejóvolar su imaginación y su creatividad en lasformas y la manera de servir.

Y contrató a mujeres cabeza de familiapara que, por qué ocultarlo, con todos losencantos femeninos, lograran una misióncasi imposible: que los colombianos cam-biaran sus propios platos típicos por la comi-da típica de la primavera francesa.

Sus conocimientos, sacados del cora-zón, bien pueden ser lección a cualquieraque quiera iniciar una empresa.Afirma, porejemplo, que

. Ella es consciente de que la cali-dad total de una empresa no se consigue sino hay calidad humana. Y para llegar a esameta, todos los días, a las 11:45 de la maña-na, su voz lidera un ritual organizacionalque busca una Colombia en paz, a través deun altavoz se comunica con los empleadosde la cadena y les lee un extracto de pensa-mientos profundos, pasajes de la Biblia, dereflexiones sobre la guerra y el amor.Muchas frases de Beatriz están marcadaspor las palabras Gracias y Dios. Ella sabeque la posibilidad de apoyar a los demás esobra de Dios y que sin su ayuda no seríaposible.

Todas ellas están contenidas en su libroMi Receta, que acaba de lanzar, y en el quereúne, entre líneas, todo el secreto de unéxito empresarial ciento por ciento colom-biano.

Al hablar parece que sus palabras fue-ran versos poéticos, pero no se calla nada,dice lo que le gusta y lo que no, tratandosiempre de no confundir jamás generosidadcon debilidad ni humildad con bajeza.Como líder que es, transmite su conoci-miento para que su gente entienda que amaralimenta amor y que las empresas se cons-truyen con ideas y conciencia, y que lasacaba la indiferencia.

Pero ni ella, que gobierna un imperioespiritual, ni su esposo, que lo hace con unomaterial, lograron graduarse por falta detiempo. “Sin saber y sin pensarlo, llegamoscon un rumbo no trazado.

Nunca planeamos, ni soñamos, ni nosimaginamos; no hicimos estudios de mer-cado, ni financiero, ni hicimos nada de loque nos tocaba, además, como administra-dores de empresa. Teníamos trabajo, pasiónpor lo que hacíamos y una responsabilidadenorme.

“Yo veo a C&W como un don de Dios alservicio de todos. Para servir de una maneradistinta. A nosotros nos tocó servir amortraducido en alimento. Es la forma más deli-ciosa de llegarle a la gente, para que sedeleite la sonrisa con el sabor que se le quie-re dar al paladar”.

“Nada fue planeado. Sólo actuábamosen el día a día. Simplemente descubrimos lasensibilidad que hay en ellas, que es másfácil llegarles y están mucho más compro-metidas con el trabajo por la responsabili-dad que tienen con unos hijos por los cualesson capaces de dar su vida.

Los hombres, por el contrario, son másfríos y no les gusta que los manden. Ellasson escultoras, porque lo que se hace encada plato es una obra de arte. Hacer deellas mujeres expertas en cocina es un tra-bajo duro, pero placentero.”

hacer empresa no implicasimplemente ser frescos y productores."Se necesita construir país -dice- y eso esllenar a la gente de valores que le den sen-tido a la vida, e indicarles donde está laúnica respuesta que les llene sus porqué ypara qué"

¿Para qué existe C&W?

¿Por qué los empleados de C&W son,en su mayoría, mujeres cabezas de fami-lia?

Fuente : Mi Receta

“ ”Para vencer obstáculos hay que mirar la realidad y construir a partir de ella

UNA HISTORIA DE EJEMPLO Y PROFUNDA ADMIRACIÓN (1)

DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA

Beatriz Fernández

4 Jueves 30 de Octubre de 2008OBSERVADOR SEMANAL 5

Padre Paolo Sottopietra

“El colchón de la familia”Tel.: 501 036

Tecnología Suiza

ColchonesJuegos de Living

Colón esq. Pettirossi / Telefax: (59521) 513 554 - 515 540

Fdo. de la Mora - Zona Norte / Asunción - Paraguay

Qué significado tiene parausted como cristiana mujer de fe,estar en el mundo de la política? Qué le diría a aquellos que pien-

san que la política es mala y que nodebemos meternos en ella?

El Papa Pio XII, había dichoque la política es la mejor forma devivir la caridad, es cierto?

Muchas presiones en ese temadel aborto a nivel legislativo, no soloen el Paraguay sino a nivel mundial Finalmente, el Padre Aldo

Trento le ha agradecido, que gra-cias a sus gestiones se ha concretiza-do la ayuda a la clínica San RicardoPampurri, de la Parroquia SanRafael, para enfermos terminales,una ayuda importante del estado,aprobado por el parlamento.

El mayor desafío de su vida decristiana y con esta responsabili-dad?

Es un compromiso por sobretodas las cosas, yo siempre digo,que primero estoy comprometidacon Dios, después con los hombres.Siempre actué en política, tengouna vida muy rica en esta rama, y enla política social por sobre todas lascosas. Vengo de la época estudian-til, luego he trabajado muchos añosy alejar mi profesión de abogadapara criar a mis 6 hijos y trabajé másbien con las comunidades de dere-cho humano.

Es un compromiso, con la gen-te, con la minoría, con los humildes,los enfermos, los que no tienen vozy tratando siempre de ayudar a queellos mismos se den cuenta de queson una fuerza viva en la sociedad.Trabajé mucho con la discapacidad,con quienes estoy comprometida,con la niñez, los enfermos y losancianos, por sobre todas las cosas.

Para mi es un compromiso, defe, político y trato de hacer un traba-jo que vaya más hacia lo social porsobre todas las cosas. Una anécdotaque recuerdo, es que en el 2003,cuando me presenté por primeravez a unas elecciones, en un trabajoya político partidario, que PatriaQuerida me convenció que tenia losmismos valores que yo siempresoñé y me fui un 19 de abril, un díaantes de la elecciones, yo no teníaesa experiencia política partidaria yme faltaban otras cosas también,para entrar en eso; entonces me fuial santuario de mi familia y en lacorona de la Virgen deposité unaesquelita donde pedí a la Mater queno me haga quedar en el mundo polí-tico sino estaba preparada o si per-dería el valor de la honestidad, latransparencia y el compromiso conla gente. Ya el 20, cuando supe queentré, me fui a agradecer y el com-promiso fue más grande y aúnteniendo en cuenta que provengo dela familia Schenstattiana, mira nues-tro actuar como político, entoncessumamente comprometida para

con mi iglesia y con el mundo porsupuesto.

Los políticos podemos ser malos,pero la política, no. Yo por ejemplo leconsidero a Jesucristo como el mejorpolítico, un ejemplo a seguir, porquequé es la política? es el servicio a losdemás, no servirte vos de tu puesto, detu cargo, imagínense que el Rey deReyes, llegó a lavar los pies de un serhumano, entonces lógicamente que lapolítica no es mala, sino que la hace-mos mala, las personas a tener vicios.Y yo creo que un cristiano puede con-vivir perfectamente su condición decristiana con la política. Yo tampocome puedo pegar el lujo de hacer lo quehacen otros políticos de vender miconciencia, mi voto, no puedo por elcompromiso que tengo con esa gentepobre y porque yo misma doy la comu-nión. Es más, yo dejé mi profesión deabogada porque tenía que coimear yno pude sobrellevar el peso de con-ciencia, pero Dios tenía preparadotodo, grades cosas, mi vida está mar-cada por Dios, hay cosas que noentendía, después entendí, El marcanuestras vidas. Tanto que a mi preocu-paba mi falta de disciplina y despuésentré hace 20 años en Schensttat y nosoy totalmente disciplinada, pero elcamino que me marcó este grupo, elde la disciplina y todo para tener hoyuna disciplina partidaria, con mis prin-cipios, para servir mejor a la gente.

Yo creo que si, porque como anteste dije, desde que Schoensttat me for-mó, no soy aún tan buena cristianacomo querría ser, pero procuro mejo-rar por sobre todas las cosas y meformó no para quedarme a hablar solodentro de Tuparenda, sino para prepa-rarme a enfrentar mis principios y losde la Iglesia Católica, porque es muyfácil y eso digo a todos los hermanosde todas las religiones, es fácil ence-rrarse en su mundo de iglesia, en sumundo con gente que habla el mismo

idioma, con los mismos principios, lodifícil es enfrentarse al mundo real,donde hay corrupción, maldad, es ahídonde se debe hacer valer los princi-pios que uno tiene para eso, yo creoque Dios me formó con todos misdefectos y es más, con muchos defec-tos y pocas virtudes, para que yopueda hacer este trabajo, con el cualme premió el 20 de abril con el reinte-gro nuevamente a la cámara de dipu-tados, cuando había una oferta electo-ral impresionante y yo ya era una rea-lidad probada con mi bancada, pero ala vez estaba esa oferta electoral. Perocreo que Dios y la credibilidad que yole di a la gente hizo que vuelva a entraren un momento tan importante de lahistoria.

El Papa Juan Pablo II, nombró aSanto Tomás Moro, en el jubileo del200, Patrono de los políticos y lo pusoa él, porque fue alguien que se jugópor Cristo, por la verdad, por su con-ciencia, antes que por cualquier otrotipo de manipulación de la realidad,todo los políticos debería mirar a él

Todos deberíamos mirar su vida,obras y entrega por sobre todas lascosas, yo me juego, como todos, cadaminuto de mi vida. Una de las críticasque me suelen hacer en el Parlamentoes que entro a legislar con mis princi-pios, pero no puedo separar mi cora-zón, mi mente, porque soy entera, conmis principios, con mis pocas virtu-des, y con mis luces y sombras. Yoentro a legislar con la mente clara,pero no puedo separar mis principios,cuando estoy legislando para todos,no solo para los católicos, porque losprincipios son únicos y también tecuento que me han criticado por eltema del aborto, me dicen muchos,"no hables de eso". Pero claro quehablo porque defiendo la vida y si esome va costar votos o mi banca, puesadelante, porque yo no voy a discutirel derecho a la vida, yo defiendo elderecho a la vida.

Si y aquí también hay una corrien-te muy fuerte que nos tiene que tenerlos ojos bien abiertos, el corazón y elalma por sobre todas las cosas, parasentir como dice el Padre Kentenich,fundador del Movimiento, "las vocesdel alma" porque uno puede palparcomo el tema del aborto se viene ysiempre he manifestado dentro de mipartido que yo solo legislo para lavida, por los derechos humanos. Novoy a legislar para matar conciente-mente a un niño que no tiene las fuer-zas para defenderse de la propiamadre. Desde ningún punto de vista.

Tengo 6 hijos y jamás he pensado eneso, tengo una hija madre soltera, dequien me siento orgullosa por la luchaque ella tiene como mujer y como cre-yente por sobre todas las cosas. Diosno castiga, Dios es amor, yo no soyquien para juzgar a nadie, cuando medicen que yo tan católica y tengo unahija madre soltera, pero con orgulloporque es grande, ella y mi nieta sonmuy importantes para mi y eso meayuda a seguir luchando por las mino-rías, por los enfermos, por los ancia-nos, niños y discapacitados, porquecomo siempre digo, yo trabajo para lamayoría, porque ahora mismo "lasminorías" llegamos a ser mayoría.

Siente como todo cristiano debesentir esas palabras de Cristo, "tuvehambre y me diste de comer, estuveenfermo y me visitaste", más dentrode la función legislativa

Por supuesto, porque hay gruposen la sociedad que aparentemente noexiste, como los autistas y yo hacepoco, sin estar en mi mente ese tema,pero pidiendo a Dios que me de fuer-zas para tratar de sobrellevar las cosasy me dio un carácter para eso, graciasa la preparación espiritual diaria,como el rezo diario del rosario, cosaque para algunos es un disparate, parami sin embargo es mi fuente de ener-gía, entonces si a alguno le motivaalgo, a mi me motiva el santo rosario yno tengo vergüenza para decirlo, bajoningun punto de vista. Siguiendo conel autismo, que era un tema que noexistia en mi vida hasta hace 3 meses,cuando me entero y ahora estoy estu-diando para poder comprender y porsobre todas las cosas ayudar. Y digosoy fanática de los proyectos que lle-guen a la gente, hay proyectos que nollegan a la gente, yo quiero que le lle-gue a todos.

Puedo estar equivocada, puedo noser una excelente legisladora, pero sisabrán que puse toda mi entrega parala gente humilde y olvidada de lasociedad y lo seguiré haciendo mien-tras sea legisladora.

Gente olvidada, entra en miesquema, además admiro esa obra.Acepté eso porque escuché al PadreTrento, decir que hay mucho de mila-gro de eso, porque yo soy muy tacañacon el dinero público porque tengoque rendir cuentas de mi gestión.Cuando me habló Jhonny Velázquez

del tema, yo dije "pero tantos miles demillones?", se le llenó los ojos delágrimas a Jhony al final di el dinerosin conocer, abogué por ese dinero sinconocer y cuando conocí el lugar dijeque Dios me llevó a apoyar esa causa,porque fue un momento de mi vidaque me choqueó.

La gran prueba que podría pasaren mi vida de cristiana, es hacer unvoluntariado ahí, no me animo toda-vía.

Muchos desafíos como no claudi-car nunca, somos humanos y tenemosmuchas tentaciones, pero estoy segu-ra de que teniendo el apoyo de mishermanos del movimiento y mi fami-lia, me ayuda.

El mayor desafío es saber dondeesta la verdad, miedos tengo muchos,por ejemplo el miedo de fallar a la gen-te, de fallarme a mi misma, pero sobretodas las cosas agradezco el ejemploque me dio mi padre de honestidad, demi esposo de apoyarme y también elgran ejemplo de la entereza de mimadre, que ante todos los problemas ytiene 2 hijas políticas, ante todos losproblemas que tenemos está nuestramadre de la tierra que esta siempreorando por nosotras. Esta entrevistaes una de las pocas que me hace llorarporque me remueve el alma, en el sen-tido que dije, del compromiso quetengo primero con Dios y después conlos hombres y ser un instrumento, a lomejor no como Dios quiere, porquetengo mis grandes defectos y misluces, pero Dios sabe que mi entregaes total a Él.

Vivir la fe en la políticaEntrevista a la Diputada Olga Ferreira de López, cristiana comprometida en el Movimiento deSchoensstatt, Defensora de la Vida y de proyectos de ley a favor de los más necesitados.

Pedro Kriskovich

Nombre de la madre

Esposo:

6 hijos

Nieta:

: Nena deFerreira

Lic. Domingo López,30 años de casada.

: María Laura, Ma.Silvia, Martín Antonio, Ma.Gabriela, Ma. Alejandra yMauricio Ernesto.

Ma. Sofía y muchoshijos de corazón, a quienesamo tremendamente

ENTREVISTA

La memoria de santa Teresa de Ávila, docto-ra de la Iglesia, ha sido la ocasión para una refle-xión original de Emilio (Grasso) sobre la rela-ción entre oración y matrimonio. La presencia,en la Misa vespertina, de Gustavo y Carolina,dos colaboradores comprometidos desde hacetiempo, con notable entrega, en las actividadesde la parroquia Sagrado Corazón de Jesús deYpacaraí y próximos al matrimonio, ha empuja-do a Emilio a vincular la situación de ellos, y lapreparación que están desarrollando, al recuer-do de esta figura, entre más alta de la espirituali-dad cristiana.

Una equivocación muy difundida - haobservado Emilio - es la de separar la oración dela vida cotidiana y ordinaria, que se lleva a caboen la familia, en el trabajo, en la escuela. Escomo si el momento cultual y la vida profana,más allá de la necesaria y justa autonomía, estu-viesen regulados por principios y leyes que notienen nada que ver los unos con los otros.

Por el contrario, comprender la oración esentender la vida y sus leyes más universales yprofundas.

Santa Teresa de Jesús da una célebre defini-ción de la oración: "La oración mental, para mí,no es otro que una íntima relación de amistad, unfrecuente entretenimiento, de solo a solo, conAquel que sabemos que nos ama" (

8, 5).

Esta, explicaba Emilio a Gustavo yCarolina, puede ser también una válida defini-ción del matrimonio y de su vocación. Hay querecordar, en efecto, que la de santa Teresa es unaespiritualidad nupcial. Las características pro-pias de la espiritualidad nupcial son muy oportu-nas, en el contexto cultural latinoamericano,donde una mentalidad privilegia a lamadre con respecto a la esposa: frecuentementeun hombre tiene una relación de mayor familia-ridad, confianza e intimidad con su madre quecon su esposa. También en el ámbito eclesial, seinsiste mucho en la Iglesia como Madre y menosen la Iglesia como Esposa de Cristo.

Santa Teresa, al contrario, muestra la prece-dencia y la preeminencia que el ser esposa tienesobre el ser madre. Ella fue gran madre reforma-dora porque fue esposa, así como María quien,ofreciéndose totalmente al Verbo, pudo sermadre.

Se intuye, entonces, que una espiritualidadnupcial como la de santa Teresa puede ser rica desugestiones también para la vida matrimonial.

En el matrimonio, la donación de sí tieneque ser total. En el corazón del otro, cada uno delos esposos debe ser capaz de volver a hallar yleer todas las relaciones, la historia, el universo.La cosa más hermosa que los padres pueden

decir a sus hijos que se casan esque amen al propio cónyuge másque a sí mismos. Amarlo es amartodo lo que tiene en su corazón:"Tu padre es mi padre, tu madre esmi madre". En esto, hay una ana-logía con la Iglesia, Esposa delVerbo, que necesariamente esmisionera y católica, en el sentidomás profundo, para no excluir desu seno nada de cuanto su Esposolleva en el corazón.

El amor no se limita a una cua-lidad ni tiene una explicaciónracional. No te amo por tu belleza,tu riqueza, tu inteligencia, tupoder, todas cosas ilusorias y pasa-jeras: su desaparición significaríael fin del amor, pero el verdaderoamor es eterno. Y siempre existeuna persona más linda, más rica,más inteligente, más potente y conmás dotes, pero el verdadero amores único. Te amo porque te amo,enseña san Bernardo: el amor notiene otra realidad precedente quelo justifique. No hay otro funda-mento del amor.

Para amar precisa conocer.Como dice san Gregorio Magno," : el amor esconocimiento y el conocimientoes amor. Amo porque conozco;conozco porque amo. Dos perso-nas no pueden vivir juntas sinconocerse.

Todo esto lleva a santa Teresaa hablar de la oración en términosde frecuentación. Muchos pien-san que la oración es una repeti-ción de fórmulas, en una soledadvacía, no llenada de ninguna pre-sencia. Al contrario, la oración esun encuentro. Y el encuentro conDios lleva siempre a abrazar atoda la humanidad.

Por estas razones, santaTeresa asocia al concepto de ora-ción el de amistad. La amistad esverdadera cuando es compartir,estar bien juntos; cuando, al tér-mino de la jornada, se busca lapresencia del amigo y en él sehalla la paz, sin necesidad de otrosestímulos o consuelos. En estaamistad, una función necesaria latiene el permanecer solos: "Desolo a solo". Tú y yo. Cada presen-cia extraña a esta amistad molestay tiene que desaparecer.

La oración es auténtica cuan-do es capacidad de vivir esta rela-ción de amistad con Dios, en elpermanecer solos en su presencia.

También en el matrimonio, larelación entre los esposos tieneque alimentarse de esta capacidadde permanecer solos. Muchasveces, se escuchan afirmaciones

muy ambiguas, del tipo: "Nuestro matrimo-nio ha sido salvado por los hijos". En reali-dad, tendrían que ser los padres los que "sal-van" a los hijos y les dan esperanza y amor.Los hijos son un don de Dios, que puede tam-bién no llegar, y cuya falta no puede volveruna relación matrimonial menos intensa ymenos hermosa.

Esta soledad es la intimidad, el secretodel amor, que ningún otro conoce y com-prende. Cada enamorado debe poder decirque su historia y su vocación son las más her-mosas. La belleza nos reunirá a todos, casa-dos y consagrados, y nos permitirá enrique-cernos los unos y los otros, mostrándonos laspotencialidades inagotables del amor.

El secreto no compartido con otros está ence-rrado en las palabras: "con Aquel que sabemosque nos ama" ( 8, 5). Los enamo-rados deben poder ser ciertos del amor, no pue-den aceptar un amor a la baja. Carolina no puedepreguntar a otros si Gustavo la ama. Nadiepuede entrar en este secreto y nadie puede impo-ner o comprar el amor: "Si alguien quisiera com-prar el amor con todo lo que posee en su casa,solo conseguiría desprecio" ( 8, 7).

Saber amar, pues, es saber rezar, y en la ora-ción hallamos las leyes del amor.

Libro de lavida

machista

amor ipse notitia est"

Libro de la vida

Ct

Jueves 30 de Octubre de 2008 OBSERVADOR SEMANAL6

V I D A D E I G L E S I A

CICLO DE CATEQUESIS DEL PAPA BENEDICTO XVI SOBRE EL AÑO PAULINO

Peregrinaciónal Caaró

Informes: Tel: (021) 661-607(0971) 954480

Salida: Viernes 07/11/2008Regreso: Martes 11/11/2008

Costo: Gs. 1.200.000Financiamiento a través de la

Cooperativa "Juan Pablo II" Ltda.Plazas limitadas

Visitando las RuinasJesuíticas del lado

paraguayo y brasilero

No puede haber auténtica oraciónsin la presencia del Espíritu en nosotros

Al igual que en las catequesis precedentes,volvemos a hablar de san Pablo y de su pensa-miento. Nos encontramos ante un gigante nosólo a nivel del apostolado concreto, sino tam-bién a nivel de la doctrina teológica, extraordi-nariamente profunda y estimulante. Después dehaber meditado en la última ocasión en lo queescribió Pablo sobre el puesto central que ocupaJesucristo en nuestra vida de fe, veamos hoy loque nos dice sobre el Espíritu Santo y sobre supresencia en nosotros, pues también en esto elapóstol tiene algo muy importante que enseñar-nos.

Sabemos lo que nos dice san Lucas sobre elEspíritu Santo en los Hechos de losApóstoles, aldescribir el acontecimiento de Pentecostés. ElEspíritu pentecostal imprime un empuje vigoro-so para asumir el compromiso de la misión paratestimoniar el Evangelio por los caminos delmundo. (…) Ahora bien, san Pablo, en sus car-tas, nos habla del Espíritu también desde otropunto de vista. No se limita a ilustrar sólo ladimensión dinámica y operativa de la terceraPersona de la Santísima Trinidad, sino que anali-za también su presencia en la vida del cristiano,cuya identidad queda marcada por él. Es decir,Pablo reflexiona sobre el Espíritu mostrando suinflujo no solamente sobre el actuar del cristianosino sobre su mismo ser. De hecho, dice que elEspíritu de Dios habita en nosotros y que «Diosha enviado a nuestros corazones el Espíritu de suHijo».

Para Pablo, por tanto, el Espíritu nos penetrahasta en nuestras profundidades personales másíntimas. En este sentido, estas palabras tienen unsignificado relevante: «La ley del espíritu que dala vida en Cristo Jesús te liberó de la ley del peca-do y de la muerte… Pues no recibisteis un espíri-tu de esclavos para recaer en el temor; antes bien,recibisteis un espíritu de hijos adoptivos que noshace exclamar: ¡Abbá, Padre!», dado que somoshijos, podemos llamar «Padre» a Dios.

Podemos ver, por tanto, que el cristiano,incluso antes de actuar, posee ya una interioridadrica y fecunda, que le ha sido entregada en lossacramentos del Bautismo y de la Confirmación,una interioridad que le introduce en una relaciónobjetiva y original de filiación en relación conDios. En esto consiste nuestra gran dignidad: nosomos sólo imagen, sino hijos de Dios.

Y esto constituye una invitación a vivir nues-tra filiación, a ser cada vez más conscientes deque somos hijos adoptivos en la gran familia deDios. Es una invitación a transformar este donobjetivo en una realidad subjetiva, determinante

para nuestra manera de pensar, para nuestroactuar, para nuestro ser. Dios nos considera hijossuyos, pues nos ha elevado a una dignidad seme-jante, aunque no igual, a la del mismo Jesús, elúnico que es plenamente verdadero Hijo. En Élse nos da o se nos restituye la condición filial y lalibertad confiada en nuestra relación con elPadre.

De este modo descubrimos que para el cristi-no el Espíritu ya no es sólo el «Espíritu de Dios»,como se dice normalmente en el AntiguoTestamento y como repite el lenguaje cristiano.Y no es tan sólo un «Espíritu Santo», entendidogenéricamente, según la manera de expresarsedel Antiguo Testamento, y del mismo judaísmoen sus escritos (Qumrán, rabinismo). Es propiade la fe cristiana la confesión de una participa-ción de este Espíritu en el Señor resucitado,quien se ha convertido Él mismo en «Espírituque da vida».

Precisamente por este motivo san Pablohabla directamente del «Espíritu de Cristo», del«Espíritu del Hijo» o del «Espíritu deJesucristo». Parece como si quisiera decir que nosólo Dios Padre es visible en el Hijo, sino quetambién el Espíritu de Dios se expresa en la viday en la acción del Señor crucificado y resucitado.

Pablo nos enseña también otra cosa impor-tante: dice que no puede haber auténtica oraciónsin la presencia del Espíritu en nosotros. Dehecho, escribe: «El Espíritu viene en ayuda denuestra flaqueza.

Pues nosotros no sabemos cómo pedir paraorar como conviene; mas el Espíritu mismointercede por nosotros con gemidos inefables, yel que escruta los corazones conoce cuál es laaspiración del Espíritu, y que su intercesión afavor de los santos es según Dios». Es comodecir que el Espíritu Santo, es decir, el Espíritudel Padre y del Hijo, se convierte como en elalma de nuestra alma, la parte más secreta denuestro ser, de la que se eleva incesantementehacia Dios un movimiento de oración, del que nopodemos ni siquiera precisar los términos. ElEspíritu, de hecho, siempre despierto en noso-tros, suple nuestras carencias y ofrece al Padrenuestra adoración, junto con nuestras aspiracio-nes más profundas.

Obviamente esto exige un nivel de grancomunión vital con el Espíritu. Es una invitacióna ser cada vez más sensibles, más atentos a estapresencia del Espíritu en nosotros, a transfor-marla en oración, a experimentar esta presenciay a aprender de este modo a rezar, a hablar con elPadre como hijos en el Espíritu Santo.

Michele Chiappo

www.missionerh.it

Matrimonio y oración

4 Jueves 30 de Octubre de 2008OBSERVADOR SEMANAL 7

"Para mirar a la cara toda la realidadhace falta estar acompañados”

Padre:

Le escribo desde España, me llamoVirginia, el pasado 9 de Julio he perdidouna hija de tan solo 6 meses...la encontrémuerta en la cuna a la hora de lasiesta...muerte súbita... Sin embargo hoyno quisiera hablarle del dolor que hemospasado mi marido, José Ramón, y misotros tres hijos (Pablo, Ana y Jaime) y queseguiremos pasando toda la vida con laausencia de Marta, sino de la victoria deCristo sobre la muerte: Hoy una amiga mereenviaba una carta suya en la que dice“para tener el coraje de mirarla a la cara (ala muerte) hace falta estar acompañados”.

Le escribo para afirmar con rotundidadque esto es así: bendito sea Dios que unsegundo antes de que me encontrara aMarta ya estaba allí conmigo y me suscitollamar por teléfono, inmediatamentedespués de llamar a mi marido, a dos ami-gos sacerdotes: uno de ellos, Alfonso,como un padre para mí desde hace 20 años,el otro, Jorge, sin duda mi mejor amigo ycompañía al Destino. Y a través de ellosdesde el primer grito de dolor allí estuvoCr is to conmigo abrazándome yacompañándome con mi hija reciénmuerta aún en los brazos. La experienciade estos tres meses es inenarrable ahora enunas líneas, se la iré contando si tengo lagracia de continuar una relación con Vd.

Pero se resume en unas palabras:libertad, paz y gratitud. Libertad de poner

ante estos dos amigos durante las tresprimeras horas desde la muerte, con la niñaen brazos, todo lo que soy, mi dolor, mismiedos, mis dudas, mi rabia, mi angustia,mi cansancio, mis recuerdos, mis deseos...nada quedó en un recoveco, tuve la graciade ponerlo todo allí delante de Cristo sincensurar nada y fueron las dos horas máslibres de mi vida porque todo encontrórespuesta a través de ellos: Cristo mismome dijo a través de su presencia mujer, nollores, no tengas miedo, yo estoy contigotodos los días hasta el fin del mundo...

Paz de los dos meses inmediatos,milagrosa y misteriosa, humanamenteimposible, fruto sin duda de haberexperimentado que con Él, hasta en lamuerte es posible estar de pie en la vida,entonces ¿qué temer? tan solo hay quepertenecer...

Y gratitud porque todos los días nosllegan noticias de los milagros que Diosestá obrando regenerando la fe de todo unpueblo (CL en España) conmocionado porl a m u e r t e d e M a r t a , q u e e s t áencomendándose a ella cotidianamenteporque en nuestra experiencia dolorosahan podido tocar la Misericordia: estáporque actúa.

Llevamos varios días pidiéndole alSeñor que nos desvele qué quiere ahora denuestra vocación, qué tipo de paternidad ymaternidad nos pide ahora y hoy, a lavuelta de una visita al cementerio para

rezar ante la tumba de mi hija, me heencontrado con las fotos de Victor en miemail...: habiendo visto a la muerte tan decerca no tengo miedo de mirar el dolor a lacara, pero al ver a Víctor me he echado allorar y no eran solo lágrimas de dolor antela cruz, sino de impotencia porque yo quehe sido abrazada y acogida así en el dolorquisiera poder hacerlo con Victor.

Para tener el coraje de mirar a la cara atoda la realidad es necesario estaracompañados...pensaba “ojala pudieraabrazarte para que supieras lo que es unamadre y sin embargo estoy tan lejos...”.Instintivamente

he hecho la señal de la cruz sobre la foto, enla carita, como le hacía a Marta, y en esemomento he sido consciente de que tengoun pequeño hijo en acogida a distancia...Padre Aldo, pediré todos los días porVíctor, por su descanso, para que el Señorle libre del dolor, y por Vd. que es unverdadero padre para Él y para todosnosotros, porque nos remite siempre a laverdad de la vida y nos acompaña. QueDios le siga colmando de gracia paracuidar de los que sufren.

Un fuerte abrazo, en comunión.Virginia.

Lágrimas amargas de una madreMis ojos se humedecieron por

las lágrimas al escuchar eltremendo dolor de una madre queasiste a su marido, enfermo termi-nal de sida, internado en la ClínicaDivina Providencia “San RiccardoPampuri” . “Padre, ¿puedohablarle?! “Claro que si, señora,con mucho gusto” y fuimos a lasala de pediatría donde tres niñosyacen internados desde hacemucho tiempo.

Tomamos asiento y ellacomenzó, entre lágrimas, acontarme su situación. “Padre, mimarido está ya en estadoc o m a t o s o , y o n o p u e d oabandonarlo porque me necesita.Pero hoy vino mi hijo de 15 añosllorando porque él y sus 4hermanos que viven en unacompañía de Yaguarón ya notienen nada para comer.

Padre, estoy desesperada, porfavor ayúdeme. Quiero quepermita a mi hijo de quedarse aquícon su papá y yo me voy a trabajaral mercado de abasto de noche.Allí me dan trabajo pelando maíz oporoto. De esta manera me gano2.000 Gs. por cada bolsa de maízpelado o 12.000 Gs. Por cada 50kg. de poroto pelado.Así mis hijostendrán algo que comer. Padre porfavor ¿nos das el permiso?”

Mientras ella me hablaba mi

corazón ya destrozado, mirandolos dolores de mis niños, acabo deromperse . ¿Cómo, Señor,permites estas cosas? Señormientras los diarios se ocupan dedenunciar a fulano y mengano,a q u í u n a m a d r e v i v edesamparada con un maridom o r i b u n d o y 5 h i j o sh a m b r i e n t o s … ¿ c ó m o e sposible?

¿Por qué en lugar de perdertiempo no nos arremangamos lac a m i s a y , e d u c á n d o l e ,comenzamos a crear una culturacapaz de impedir ante todo quee x i s t a n p e r s o n a s q u e ,literalmente, mueran de hambre?

Maldad humana, ceguerapolítica, egoísmo impresionante.Todos somos responsables de loschicos de esta madre. “Señora, porfavor… no tenga miedo, existe laProvidencia”. Quise darle 50.000Gs. para que pudiera compraralgunos víveres para sus hijos perose rehusó a tomarlos: “ No padre,no quiero, yo deseo ganar miplatica, quiero ganarme el pan…No padre, tenga ahí su dinero quele sirve para ayudar a otra per-sona”

Quede helado. ¡Qué dignidad!“Señora y ¿Cuándo dormirá?” “Pa-dre, no duermo, no puedo dormircuando mi marido se está

muriendo y mis hijos gritan:¡mamá tenemos hambre!”

El dialogo se acabo en 5minutos pero salí abrazándola ydiciéndole: “Señora, desde hoy enadelante la providencia no leabandonará jamás y yo seré lasmanos de la Providencia”.

Con una sonrisa en los labiosme dijo: “Gracias padre” y se fueal cuarto de su marido.

“Señor ¿Por qué tanto dolor?”Para que mi corazón se convierta ycon el mío el de todos.

T E S T I M O N I O S

¡Él no ha venido para los sanos!Querido Padre Aldo: No nos conocemos, ni nos hemos visto

nunca. Me llamo Cristina, tengo 34 años, estoy casada con Sergio ytengo 4 hijos. Recibo de amigos algunos e-mails tuyos. Son estoslos que me han obligado a escribirle.

Estoy enferma desde hace 20 años de tricotilamanía (una maníapor la cual es incontrolable la necesidad de arrancarse los cabellos).Lo que deseo compartir con Usted es que en este último año estoyempezando a mirar la enfermedad que mortifica mi feminidad (ypor esto he siempre odiado) como la ocasión para hacer memoria deque “también los cabellos de mi cabeza están todos contados”.

También yo me considero loca, pero “locamente deseosa de queÉl me posea”. Cabello tras cabello esto me es siempre más claro.Cada tanto pregunto al Buen Dios: “¡¿no estás cansado de pasarjornada tras jornada recontando mis cabellos desde el inicio? Si túme curaras Te ahorrarías un montón de tiempo!” Pero rápidamenteagrego: “pero si una espesa cabellera mía hiciera olvidarte, aunquesólo sea por un instante, toma todos, todos mis cabellos y cada pelode mi cuerpo”.

Delante al mundo yo puedo decirme ciertamente enferma.También delante a los ojos de Dios lo soy (¡lo somos todos!). Y esuna verdadera fortuna… por el resto, ¡Él no ha venido para lossanos!Yjustamente como Cristo, también mi marido, delante a estaloca manía mía, me mira como a una reina. ¡Es su presenciamisericordiosa a desamarme obstinadamente!

Ha decidido molestarse por esta pobre mujer, una nada, unanada absoluta que Él ha hecho un Todo con Él, un “TODO UNO”,justamente “UNA COSA SOLA Y ¡GRATIS!”. Pero, ¿quién eseste?... Dios mío que gratitud. Como habitualmente, el Amado mequita el respiro. Loca o desequilibrada, enferma o sana, toda Suya,Toda suya … ¡otra cosa no me interesa! Es por esto que lo sientoPadre y hermano.

Rezamos por Usted y por sus Hijos y le enviamos un fuerteabrazo por su Sí.

Esperando contra toda esperanza.Cristina

P. Aldo Trento

En los escritos delAntiguo Testamento pode-mos encontrar la actitudcon la cual la sabiduríajudaica se ha puesto fren-te a la gran interrogacióndel dolor y del mal. Siseguimos cada libro delas Sagradas Escriturasvemos que el sufrimientodel hombre tiene comoorigen el hambre, la sed,la violencia, la infelici-dad, la soledad, la nostal-gia de la patria. Pero elAntiguo Testamento no selimita a establecer el ori-gen del sufrimiento, quie-re investigar sobre las cau-sas más profundas. Israelno puede quedarse satis-fecho de pensar que sea el azar lacausa del dolor, porque para él elmundo tiene un creador, y este tieneun nombre. Él está al origen delsufrimiento.

¿Por qué Dios hace sufrir?Israel contesta: para punir y corre-gir; el dolor viene de Dios comocastigo para con el hombre y su pue-blo, a raíz de sus faltas. Pero tam-bién el hombre piadoso de Israel setopa en el sufrimiento del justo ydel inocente: Job se vuelve así elcruce de la historia del mundo, elsímbolo universal del misterio delsufrimiento, la llave que abre y cie-rra el camino para su interpreta-ción, la anticipación de Otro ino-cente que solo podrá quebrar el velodel templo detrás del cual aparece-rá, terrible a verse, el rostro mismode Dios que sufre.

Hubo una gran insistencia enmuchos testimonios literarios paraaproximar el sufrimiento y la muer-te al amor. En realidad sabemosmuy bien que esta cercanía no escausal, pero es como un eco, lejanoo cercano, de un acontecimiento enel cual el sufrimiento puede encon-trar su palabra definitiva: la expe-riencia de la Cruz.

Después de la encarnación deCristo, aún cuando se la niega, tam-bién cuando se la blasfema, es impo-sible no sentirse atraídos hacia aque-lla Cruz para buscar la clave de lec-tura del propio dolor. Unos amigospintores y periodistas a los cuales seles pedías que intitularan con lapalabra “crucifixión” algunos desus escritos y pinturas, donde dehecho ya existían una identifica-ción evidente entre el Cristo cruci-ficado y las figuras o escritos, res-pondieron: que sobre el dolorhabían pensado y plasmado aquelloque sobre lo que meditaban era laCruz.

Aún sin entrar en el valor teolo-gal de la Cruz, después de Cristo elamor y la belleza, el dolor y la Cruz,están estrechamente aparejados eincomprensiblemente no puedenexistir el uno sin el otro. Es más, esimposible. Porque la belleza sindolor es solo una superficie quepasa, y el dolor sin belleza, o sea sin

Resurrección, es una tragediar e p u g n a n t e e i n h u m a n a .Testimonio de esto lo encontramosen las páginas de dos grandes de lal i t e r a t u r a : S h a k e s p e a r e yDostoevskij. Para uno y para elotro, embebidos en siglos de histo-ria cristiana, el dolor, el mal, nacendel hombre y de su perversión. “Hu-millados y ofendidos” son paraambos aquellos hombres quesufren tribulaciones directamenteno merecidas. Mientras tanto losgrandes criminales triunfan.

Más allá del mundo de los humi-llados, aplastados por la maldad delos poderosos, encontramos enShakespeare que los justos parecenfracasar. Así Hamlet, que muerevictima de un complot organizadopor el rey, también Bruto morirá enla batalla abandonado por todos, aligual el Rey Lear, apestado por eldolor. Shakespeare supo penetrarlos laberintos del corazón del hom-bre: no sabe dar respuestas fáciles,sino más bien una luz de gran com-pasión invade siempre sus obras.

En el epilogo “La Tempestad”,Prospero trata de consolarse, deolvidar la maldad, en la magia soli-taria ¡pero se queda solo: “Ahoracarezco de espíritu que me ayude,de arte para encantar y mi fin será ladesesperación, a no ser que la ple-garia me favorezca, la plegaria queconmueve, queseduce a la mismaPiedad, que absuel-ve toda falta.

Así, vuestrospecados obtendránel perdón, y convuestra indulgen-cia vendrá mi abso-lución”. Pero qui-z á s s o l o e nDostoevskij- eldolor, el mal, elsufrimiento y elpecado, alcanzansu más alto signifi-cado.

Si en “Delito yCastigo” el sufri-miento se convierteen el signo de unapresencia, de una

mano misericordiosa quetiene piedad de aquel aquien castiga, en los “Her-manos Karamazov” elsufrimiento no es ni temi-do ni rechazado sino másbien abrazado concienzu-damente porque son sig-nos y caminos hacia unapositividad: “¿qué mepuede importar excavaren las minas por 40años?”, dice unos de loskaramazov injustamentecondenado a Siberia, “notengo miedo. Más bientengo miedo de otra cosa.Que este hombre resuci-tado se aleje de mí. Alláabajo en las minas sepuede reanimar el cora-

zón entristecido de un condenado,se puede reconducir de las tinieblasa la luz una alma grande. En nuestrodolor resucitaremos a la alegría”.

Otro gran escritor AlessandroManzoni en los “Novios” relata alfinal de la obra la posibilidad de laGran Luz: la Misericordia. La pesteafecta la ciudad de Milán. Loscarros de los socorredores llevan acualquier parte los cadáveres, elmal olor, la decadencia. Por todaparte hay muerte y dolor. Solosunos se doblegan sobre aquellahumanidad.

Entre ellos Fray Cristoforo. Élque ha pasado desde el dolor, de laviolencia del mal y del homicidio ala paz del hábito franciscano, cami-na entre los apestados en el lazaretode Milán, mientras el cielo gris sofo-ca la ciudad y anuncia la inminentetormenta. Renzo, que busca Lucia,está junto con el fraile.

En un momento dado se chocancon un apestado, don Rodrigo, yacerca de su fin, causa de tantosmales y dolores, y ahora él mismosufriente y cercano a la muerte.“Castigo, castigo” grita Renzo,mientras el fraile moviendo la cabe-za y fijándose en el apestado corri-ge: “Puede ser castigo, pude sermisericordia”.

8 Jueves 30 de Octubre de 2008

LA AVENTURA HUMANA DE LOS SANTOS

OBSERVADOR SEMANAL

LOS SUMOS PONTIFICES

115.- Teodoro II(897)

Nacido posiblemente enRoma. Gobernó la Iglesiasolo por 20 días. Durante supontificado, aparecieron enlas orillas del Tiber losrestos del papa Formoso arrojados al río durante elpapado de Esteban VI y que fueron devueltos a latumba de la Basílica de San Pedro de donde fueronexhumados para la celebración del “Concilio delcadáver”.

Convocó un sínodo en el que, formalmente, seanularon todas las decisiones de Esteban IV, sedevolvieron sus derechos a los eclesiásticosordenados por Formoso y que Esteban habíaconsiderado nulos, y se ordenó destruir las actasdel citado “concilio del cadáver”.Murió de repente, se cree de envenenamiento.

San Luis OrioneDon Orione nació en un pueblo del norte de Italia en 1872 en

una familia muy humilde. Su padre era un convencido anticleri-cal, pero la mamá tenía una fe muy viva. Don Orione recuerdaque ella le repetía a menudo: “He rezado antes por ti y luego pormí. He recibido al Señor sacramentado por ti y por mí”.

Desde joven deseaba ser franciscano, porque considerabaque era la mejor expresión de servicio al pueblo y a los máshumildes. Logró entrar al colegio de aquel cura, de Turín, al cualtodos consideraban como el apóstol de la juventud abandonada:San Juan Bosco. Cuando llegó al colegio pidió de confesarse condon Bosco. Para estar seguro de hacer una buena confesión, con-sultó unos manuales de “Como hacer una buena confesión”.

Hizo un examen de conciencia, llenando de pecados unaspáginas de su cuaderno, y esperó de rodillas su turno para confe-sarse. Mientras esperaba pensaba entre sí: “¿Qué dirá don Boscocuando lea todos mis pecados?” Llegó su momento: “entré en lapieza y mirándome y sin que yo abriera la boca, tendiendo lamano, me dijo: “dame entonces estos pecados tuyos”. Le pasé elcuaderno, lo tomó y sin abrirlo, lo destruyó. Luego me dijo que laconfesión había terminado, y me pidió de no pensar jamás en loque yo había escrito y no volver atrás mirando al pasado. Luego,me sonrió, como sólo él sabia sonreír”.

Cuando don Bosco se enfermó gravemente, durante una misasolemne, seis chicos ofrecieron la propia vida por él, y entre losseis se encontraba Luis.

Era lógico pensar que Orione se quedase entre los salesianos,Luis ya tenía todo listo para entrar en el noviciado. Mientras reza-ba le vino la duda que quizás fuese mejor entrar al seminario dio-cesano. Pasó una noche entera llorando y rezando apoyado en latumba de don Bosco, pidiéndole tres signos. Uno era muy impor-tante: la conversión de su papá. Todos los tres signos se realiza-ron. Todas las angustias desaparecieron la noche siguiente cuan-do soñó con don Bosco que lo ayudaba, con su sonrisa paterna, aponerse la sotana que tenia que llevar al seminario. Se presentóentonces al seminario diocesano. A raíz de la muerte de su padretuvo que trabajar como sacristán de la Catedral para mantenersus estudios. Junto al estudio inició a imitar a don Bosco llevandoa su casa un gran número de niños de la calle. Pero no tenía unlugar adecuado. Entonces el Obispo, que era un verdadero padre,le ofreció el jardín del obispado. El obispo observaba, ya desdetiempo, la actividad pastoral de este joven seminarista, y pensabaque todos los curas tendrían que tomar ejemplo de este joven ycrear tantos oratorios. En este jardín juntó, don Orione, variosjóvenes, que gritaban y jugaban, al mismo modo se dedicaban ala oración y al estudio.

Pero llegaron rápidamente las dificultades, y el obispo tuvoque cerrar el oratorio. Él cuenta: “Subí a mi cuarto y mirandoabajo hacia el oratorio que habían clausurado, empecé a llorar y arezar. Lloré como llora un niño y recé a la Virgen María, ponien-do en sus manos mi vida y todo el oratorio”.

Después de un hermoso sueño, entendió que tenía que abrirun oratorio más grande. Rápidamente se dio la oportunidad. Elobispo había hecho construir un seminario nuevo que se revelómuy pequeño por el gran número de seminaristas. Don Orione seofreció para abrir una especie de sucursal: un colegio donde losjóvenes más carenciados pudiesen estudiar y prepararse tambiénal sacerdocio. El Obispo dióo el permiso, pero sin estar conven-cido, porque faltaba la plata y el lugar adecuado. Entonces des-pués de unos días el Obispo llamó a don Orione para decirle queno pensar más en su proyecto. Pero él contestó que ya estaba todolisto y que era una lastima no seguir adelante. ¿Qué es lo quehabía pasado? Un amigo le había dicho que su padre alquilabauna casa fuera de la ciudad por “400 liras” anuales. Orione paróel alquiler de la casa, no teniendo el dinero diciéndole que dentrode una semana pagaría todo el alquiler.

Volviendo a su casa encontró una viejita y hablando con ellale habló sobre el colegio. Ella entusiasmada pidió que su nietofuese admitido a tal colegio y le dijo: “¿Cuánto es la cuota anual?Él contestó: “Lo que usted me puede dar”. Ella de inmediato dijo:“Le doy 400 liras, ¿por cuánto tiempo me lo tendréis?” “Por todala carrera estudiantil”, le contestó. Orione, saltando de alegría,vio eso como evidente signo de la Providencia. El obispo se dejóconvencer también porque no se atrevía más a contradecir a laProvidencia. En 1895 fue ordenado sacerdote. Y en la confianzaen la Providencia, nacieron todas las obras de don Orione: desdela “Pequeña Obra de la Divina Providencia” hasta las casas dealivio llamadas “Pequeño Cotolengo”, junto a las congregacio-nes de las “Pequeñas hermanas misioneras de la Caridad” y las“Hermanas sacramentinas ciegas”.

El sufrimiento y la literatura

Paolo Buscaroli

TESTIMONIOS LITERARIOS