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del libro “Streets alread- Design Council & Royal Tour Planning Institute”Gran Bretaña

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Seleccionando y ubicando el equipamiento urbano.Por Alfred A. Wood y otros.

“No se trata de lo que haces, sino del modo en que lo haces” es probablemente la regla fundamental en el equipamiento de nuestros espacios urbanos. Tan necesario como el equipamiento doméstico, el equipamiento urbano es, casi siempre, lo último en lo que se piensa en nuestro entorno urbano. Solo raramente (a juzgar por lo que vemos en nuestro alrededor) éste recibe el mismo trato amoroso en la selección y ubicación que tendría el equipamiento en nuestro hogar. Más aún, suelen ser seleccionados u especificados por un grupo de personas (raramente diseñadores) e instalados por otro. Los espacios urbanos son livings exteriores, y su selección, y en particular el modo en que son ubicados, son elementos mayores en el éxito o el fracaso visual de nuestros alrededores.

El desarrollo del equipamiento urbano desde las señales de distancia en Km., indicadores de trenes, columnas de alumbrados hasta los variados elementos que hoy vemos, brindan una historia fascinante sobre el uso de materiales y su efecto en la escena urbana. Señales de dirección de tránsito, barras para limpiarse el barro de las botas, relojes y faroles de alumbrado excéntrico son todos básicamente utilitarios, pero también funcionan como marcas de atención visual en la escena urbana y por lo general agregan riqueza y calidad a espacios que de otra forma se verían descoloridos. La exuberancia de la fundición de hierro Victoriana o los arabescos de los soportes de faroles en hierro forjado (vistos por los transmutes como una suerte de caligrafía contra el cielo), fueron y son agradables incidentes en nuestra vida cotidiana. La relativa desnudez de mucha arquitectura corriente en nuestras calles enfatiza la necesidad de prestar mayor atención al mejoramiento de su calidad visual por una cuidadosa selección y ubicación del equipamiento urbano.

Las exigencias de mayor información visual para conductores, los Standard técnicos más exigentes en lo que se refiere al alumbrados, etc, han conducido a la proliferación de equipamiento urbano de todo tipo, parte razonablemente bien diseñado, pero en su totalidad mal considerado en relación a la escena urbana. La coordinación es un punto, pero de hecho una empresa muy difícil y compleja que involucra a muchas agencias en el gobierno central y local y que llamaremos empleados y contratistas. Reglas para la ubicación y especificación del alumbrado de las calles emitidas por el Departamento de Transporte tienen que ser interpretadas por las autoridades locales; las paradas y refugios de ómnibus son levantadas por operarios de transporte pero hay muchas mas organizaciones involucradas en el proceso. Si “todo el mundo es un escenario y los hombres y mujeres meramente son ejecutantes”, la instalación del equipamiento urbano es complicada por el hecho de que los ejecutantes individuales tienen distintos textos, y a veces no hay forma de asegurarse que estén juntos en la misma obra. La coordinación técnica es el trabajo más difícil del mundo, como podrá apreciar cualquier observador de la predilección Británica de cavar hoyos en la calle. Tan pronto se ha depositado una capa de pavimento en un hoyo que otra persona excavará y después (sin duda) reinstalará el pavimento pero no del mismo modo en que lo hicieron antes. Pero la dificultad de coordinación técnica no es razón para aceptar el desorden visual de nuestras ciudades, pueblos y campo, y es vital que las autoridades locales ejerzan mayor vigilancia en coordinar las actividades de otras agencias que erigen equipamiento y desarrollar considerablemente mas sensibilidad en llevar adelante sus operaciones.

Universidad Nacional de Córdoba-FAUD-Diseño Industrial Diseño Industrial II Adjunto: arquitecto Luis Coccato

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La sensibilidad al entorno en el que el equipamiento urbano será instalado, y un buen juicio estético en la selección de los componentes son cualidades esenciales en aquellos encargados de instalarlo. Pero demasiado seguido hay un vacío entre quienes seleccionan el quitamiento urbano y quienes ubican e instalan los elementos. Este vacío es una de las razones por las cuales encontramos esas pequeñas señales de estacionamiento rectangulares de color azul (muy bien diseñadas en si mismas) fijadas a las columnas galvanizadas en el borde de la acera en lugar de estar fijadas a un edificio: da demasiado trabajo conseguir la apropiación del dueño del edificio y una opción suave es erigir un poste separado. El trabajo de equipar las calles es claramente considerado por muchas autoridades locales como un trabajo de poco nivel e importantes consideraciones estéticas y prácticas son dejadas en manos de quien no tiene sensibilidad para la tarea, o no se les permite alejarse de los métodos definidos por los superiores, que para hacerlo mas sencillo, proponen soluciones Standard para todas las ocasiones. Un ejemplo común de rigidez insensible es el uso de señales enormes de “no entre” en Áreas de Conservación. El departamento de transporte aceptaría con agrado carteles a la mitad del tamaño en esas ubicaciones, bajo ciertas condiciones, pero las autoridades locales involucradas raramente parecen buscar esta dispensa ya que involucra un proceso administrativo y francamente es complicado.

Existen por lo menos cinco criterios para ser considerados y el proceso de selección y éstos –conveniencia, escala, materiales, fijación y costos- incluyen la adecuación para la función que se requiere. Muchos de éstos son suficientemente obvios pero no siempre son tenidos en consideración.

La adecuación a la función es claramente un factor crucial. ¿el equipo de alumbrado llega a niveles de iluminación correctos? ¿es la señal suficientemente grande o demasiado grande para su función? ¿el asiento es cómodo además de verse bien?

El tamaño y la escala no son siempre suficientemente considerados cuando se selecciona equipamiento urbano: elegir un artículo de un catálogo puede ser peligroso y sería conveniente probar diferentes unidades en el lugar, aunque esto es obviamente cansador; sin embargo el tiempo dedicado al reconocimiento rara vez es tiempo perdido. Los materiales y su impacto psicológico son importantes. Un asiento de hormigón seguramente se verá más pesado que uno de madera, aun cuando su tamaño sea el mismo. Existen también consideraciones de tamaño en la selección del material: postes de acero, hormigón o madera para propósitos similares tienen distintas medidas que pueden afectar su adecuación visual. El mantenimiento es sin dudas un factor fundamental y, desafortunadamente en Gran Bretaña existe la necesidad de hacer ciertas piezas del equipamiento urbano para ciertas áreas a prueba de vandalismo. Las uniones y las fijaciones precisan considerarse ya que su uso múltiple y su flexibilidad pueden mejorar la versatilidad de las unidades individuales, reducir los soportes en número y variedad- el diseño de fijación y uniones de señales e iluminación debieran preferentemente ser parte del concepto visual global. Por ejemplo, hay lugares donde el soporte debe evitarse y donde la señal se puede aplicar a l pared. Del mismo modo habrán casos en que el diseño general de una familia de fijaciones dependerá fuertemente de fijaciones simples para incrementas el atractivo visual y la versatilidad.

Elegir equipamiento urbano, y en particular elementos de iluminación, para áreas históricas o con una característica particular, es siempre un proceso difícil: permanentemente existe la tentación de seleccionar elementos que tienen algún eco del pasado en la esperanza de que van a encajar en el carácter general de la calle. Esto conlleva el peligro de un objetable buen gusto, y por lo general es mejor elegir elementos simples, atemporales, que no tengan ninguna fecha en particular estampada en ellas por su diseño. También pueden usarse con faroles nuevos. La compatibilidad de escala, materiales y formas son factores obvios para tener en cuenta en estas circunstancias, del mismo modo que lo es la necesidad de una operatividad correcta. La familiaridades también un elemento importante en la selección: un tacho de basura que parezca un tacho de basura es más probable que sea usado que uno de los ejemplos sobre diseñados que pueden encontrarse en varios catálogos de fabricantes.

La consideración por los usuarios del equipamiento urbano también debe enfatizarse. En particular los requerimientos de los discapacitados, especialmente los ciegos, tienden a ser evitados. En el pasado las placas con los nombres de las calles, por ejemplo, están hechas por lo general en hierro fundido, con las letras en sobre relieve y al menos en áreas suburbanas estaban al alcance de la mano. A parte del hecho de que aquellas placas empleaban por lo general tipografías de estilos que eran elegantes por si mismas, eran extremadamente útiles para los ciegos: con seguridad sería posible, usando fundición de aluminio o plástico, proveer versiones modernas que serían a la vez atractivas y útiles.

Ha surgido una tendencia generalmente bien aceptada hacia una menor cantidad de artefactos de alumbrado, en particular sobre postes altos. Aunque en algunos casos uno grande puede ser mejor que cuatro pequeños (no es siempre el caso). En áreas de pequeña escala puede ser más fácil de manejar el impacto visual de varias unidades pequeñas y, siempre y cuando la función no se vea afectada, puede considerarse el agrupamiento. Loas artefactos de iluminación pueden dar cohesión a una calle si están bien manejados: del mismo modo una disposición descuidada puede generar un agujero visual en un espacio que de otro modo sería agradable.

La ubicación del equipamiento urbano es tan difícil, y ciertamente más complejo que el proceso de selección. Criterios funcionales para señales están ilustrados en la Circular 7/75. Esta publicación sugiere un rango de


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soluciones para problemas de dimensiones y ubicación que no tienen nada que ver con los ejemplos esteriotipados y poco imaginativos que encontramos en nuestras calles. Obviamente existe una necesidad de instaladores y selectores de equipamiento urbano, no solo para estudiar y comprender las normas concernientes al uso de señales y otros elementos, sino más específicamente para brindar el consejo que permite una interpretación inteligente del modo criterioso y que pueden elevar a aplicaciones creativas que producen esquemas en armonía con el entorno.

El equipamiento urbano puede influir en la sensación que se tiene de un lugar, en particular como lo percibe el peatón, y es crucial que la altura de la visión juegue un papel apropiado en la disposición de los elementos. La altura de la visión determina mayormente la base de la escala de una calle y es vital que el impacto del equipamiento esté relacionado con las necesidades de espacio como lo ven las personas que lo usan.

Una caminata por cualquier pueblo inevitablemente revela una necesidad de mayor cantidad de asientos en muchas áreas –y lo que es más importante es que sean cómodos. Auque los asientos sin respaldo se ven bien, la mayor parte de las personas prefieren respaldos y apoyabrazos; hay mucho por decir sobre asientos individuales, tal como se usan en el sistema peatonal del centro de Munich. Las arreadse asiento debieran estar protegidas de las principales rutas pedestres a quienes prefieren la sombra. También deben permitir a sus ocupantes disfrutar una de las actividades humanas favoritas, ver pasar a la gente; al homo sapiens le gusta mirar a sus pares y lo encuentran particularmente agradable si su asiento esta levemente por encima del nivel del área circundante. Un planeamiento sensible y sensato puede agregar también una cuota de relax, y puede ayudar a crear una sensación de oasis tan importante en el centro de las ciudades. Es importante distribuir los asientos, no pensando en las ordenanzas municipales tanto como en la manera en que las personas van a disfrutarlos. Un espacio público recientemente “mejorado” en una ciudad de Milán tiene casi todos los asientos orientados hacia el norte al Ayuntamiento mientras que la visión más interesante (y soleada) está exactamente en dirección opuesta.

El equipamiento urbano puede ser también defensivo. En áreas predominantemente libres de tránsito, pero que ocasionalmente son usadas por ómnibus o camiones, el equipamiento urbano puede servir para proteger al peatón del tráfico inesperado. El sistema de pavimento también debe considerarse como parte del proceso de ubicación, en particular en áreas peatonales. Materiales elegidos correctamente pueden ser la matriz unificatoria que une los distintos elementos del equipamiento en un todo coherente. Los materiales del pavimento también pueden usarse para dirigir vehículos que ocasionalmente tienen que usar un área que en otro momento está vedada al tránsito vehicular, ayudando a enfatizar las zonas en las que el tránsito peatonal predomina y diferenciándolas de aquellas en donde el tráfico es irrestricto.

Con los asientos, existe una necesidad real de comprender el comportamiento humano al disponer otros elementos del equipamiento urbano, en particular los tachos de basura. Son una permanente fuente de discusión: unos piensan que los tachos de basura, en particular cuando están llenos (siempre parecen estar llenos) GENERAN basura desagradable en lugar de ser la cura para los problemas creados por los que todos reconocen como la nación más creadora de basura del mundo. Aún más, algunos municipios han, con cierto éxito, retirado los tachos de basura de los márgenes de las rutas principales sobre l base que su ausencia hace que las personas lleven la basura a sus casas. Sin embargo, en los entornos urbanos los tachos de basura estuvieron ubicados en lugares arbitrarios en una calle peatonal tendería a propiciar los tiros mal calculados que terminan depositando la basura en el piso. La regla obvia es ubicar los tachos cerca de los puntos de producción en posiciones en que puedan integrarse otros elementos del equipamiento urbano y en donde puedan ser vaciados con facilidad.

Los artefactos del alumbrado son probablemente los más difíciles de seleccionar y ubicar. Aunque hay una gran variedad para elegir, esta es más aparente que real. En especial en el caso de artefactos de grupo b que no ofrece las alternativas requeridas para el uso en las áreas más sensibles donde deben coexistir personas y vehículos. Las técnicas de postes altos de iluminación han avanzado, así como lo han hecho los diseños del grupo a, y debiera ser posible seleccionar y ubicar satisfactoriamente a partir de lo existente. En las zonas de menor escala que requieren artefactos del grupo b, la falta de posibilidad de elegir de lo estándar puede requerir la fabricación de artefactos para satisfacer las necesidades del entorno: esto no necesariamente implica un gasto mucho mayor.

Ha habido una serie de esquemas de iluminación satisfactorios producido para el nuevo rol de las calles

peatonales pero esto se ve desequilibrado por la cantidad de frustrados esquemas que fallan al no poder explotar el potencial de la situación. Factores importantes a considerar son: la escala del sistema de iluminación, la necesidad de destacar los riesgos del equipamiento urbano para el peatón y las posibilidades que existen de enfatizar las calidades arquitectónicas de la calle tato por arriba como por debajo de las vidrieras. La apariencia del equipamiento tanto de día como de noche, y simples fijaciones, preferentemente a los edificios son también puntos cruciales. Es posible iluminar profusamente determinados edificios de la escena de modo de reemplazar el alumbrado convencional en algunos sectores. En zonas donde deben coexistir vehículos y peatones, artefactos con postes pueden usarse cuidando que no confundan a los conductores. Un modo relativamente económico de agregar placer y magia a nuestras ciudades, el alumbrado debe considerarse con cuidado como uno de los elementos básicos del equipamiento urbano.


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El éxito de los espacios urbanos depende por lo general de la relación entre la escala del área y del hombre. Un factor crucial es seleccionar el equipamiento urbano con cuidado para enfatizar el nuevo rol a escala humana de la calle peatonal. Los materiales del pavimento, por lo general las más simples son los mejores, necesitan relacionarse a los edificios y a la gente. Los elementos usados en espacios abiertos deben ser usualmente un poco más grandes que aquellos usados en interiores: por ejemplo los escalones externos deben ser de alrededor de 200 mm de altura.

La adecuación a la función debe ser un factor principal y por lo general hay mucho para decir de la simplicidad. Muchas veces es sensato recuperar y usar el viejo granito y materiales similares. El propósito debiera ser mejorar y complementar las estructuras existentes más que exhibir un virtuosismo visual, que a veces puede empeorar la escena existente.

Lo “hecho en casa” tiene un lugar en nuestro entorno debiera cuidarse para no sobrecargar la ciudad. El color natural de los materiales es en general más exitoso pero siempre es importante la calidad.

Aunque los desniveles son una de las estrategias urbanas más efectivas, son muchas veces dejados de lado al crear calles peatonales. Escaleras, plataformas, terrazas y rampas permiten que las personas tengan distintas visiones de la escena y les permite una sensación cinética placentera. Sin embargo, se debe prestar atención a los accesos, en particular para los discapacitados y personas en sillas de ruedas. Siempre debe haber un camino fácil alternativo cuando se emplean desniveles.

Como en muchos otros elementos, la simplicidad es usualmente la más efectiva disciplina al organizar las plantas, en particular los canteros, maceteros y similares. Las plantas de hoja son más exitosas que las de flores; lo verde tiende a complementar la profusión de color que suele estar presente en las vidrieras u en la ropa de la gente. Si ocurre vandalismo es mejor reemplazar las plantas faltantes y no publicitar los daños. Sin embargo, una atención frecuente puede ser necesaria para quitar la basura que se arroja en los canteros.

Elementos que incluyan agua pueden ser efectivos en climas cálidos, pero tienden a ser usados en exceso y quedan relativamente fuera de lugar en las frías y húmedas latitudes del norte. Si se los emplea, el movimiento y el sonido agradable del agua que cae son elementos valiosos para la escena urbana, y el agua moviéndose tiende a ser relativamente auto-limpiante. Puede parecer obvio señalar que los elementos que incluyan agua debieran ser ubicadas donde las fuentes y los chorros de agua no se vean afectados por vientos fuertes que pudieran desviar el agua y mojar a los transmutes, pero sucede mas de una vez.

Cuando se quita el tráfico vehicular de una calle, la basura que antes era empujada al borde del cordón por los autos se vuelve un elemento demasiado evidente. De ahí que sea necesaria una limpieza más frecuente.

Es imprescindible permitir un acceso fácil para auto-bombas, policía, ambulancias, equipos de construcción y otros. Normalmente eso puede hacerse proveyendo suficiente ancho (un mínimo de tres metros) entre los componentes del equipamiento, asegurando que el recubrimiento del pavimento sea adecuado para el peso de los vehículos, y considerando alternativas al uso de escalones cuando hay desniveles.

Muchas personas obtienen gran satisfacción de notar, aunque de un modo medianamente consciente, los detalles que ven en sus viajes cotidianos por sus pueblos y ciudades. Aunque vivimos en un tiempo que es en muchos aspectos visualmente empobrecido, sin embargo hay señales de mejorías en el diseño de equipamiento urbano y su ubicación. Uno de los elementos mas esperanzadores ha sido una mejoría en la calidad de pensamiento y de consejos que surgen de los departamentos estatales, en particular del Departamento de Transporte y del Departamento de Medio Ambiente. Ahora existen pocas excusas para sus agentes, las autoridades locales y los contratistas, para hacer un desorden de nuestro entorno por la aplicación indebida de equipamiento urbano. Los componentes están allí, se propicia la flexibilidad para su aplicación; todo lo que requerimos es sensibilidad en la selección y ubicación del equipamiento urbano para resaltar los valores de la escena urbana.

Nota. El texto presentado es particularmente importante por lo minucioso, sencillo y prolijo, está propuesto para la selección y colocación de equipamiento urbano por parte de los funcionarios que deben hacer las compras y ubicarlos, pero en realidad define con claridad condicionantes, requerimientos y premisas que pueden trasladarse al diseño, define a todos los usuarios (desde el usuario real que lo va a usar al colocador y al que debe hacer el mantenimiento) y cuestiona cierta idea del hacer sin contemplaciones equipamientos que serán basura o que colaborarán con ella. Permite programar en todos los entornos del producto.

El subrayado es nuestro. LC.


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Equipamiento urbano: ¿Qué pasa en la práctica?Investigación realizada por Chris Swann y Francis BridgemanUniversidad de Bath, Gran Bretaña

Fabricante --------------------Materiales y terminaciones Listones de madera natural fijados con bulones cabeza

tanque a estructuras de acero con recubrimiento plástico, tomada al concreto debajo del recubrimiento del pavimento.

Estado Intacto y en servicio aunque no impecable.Daños y desgaste Cabezas de bulones oxidadas. Musgos en los asientos en

lugares sombreados. Recubrimiento plástico roto y desprendiéndose en algunos, exponiendo la estructura a la oxidación. Algunas soldaduras de la estructura se soltaron y se re-soldaron, exponiéndola a la oxidación. En algunos casos las fijaciones asomaban de las bases.

Integración Las líneas modernas encajan bien, aunque colores más brillantes podrían haber mejorado el entorno, en su mayoría hormigón. Las bases están bien tomadas al pavimento aunque no siempre de un modo prolijo. Las zonas de asientos están efectivamente definidas por un cambio en el pavimento de ladrillos.

Performance Muy populares con el público. Casi todos los encontraron confortables para lo que son los asientos duros. Buena selección de lugares soleados y sombreados como asimismo tranquilos o activos.

Una cantidad de consideraciones generales surgieron y vale la pena reformularlas, teniendo en cuenta que diferentes lugares y presupuestos determinarán la selección inicial del equipamiento. Tomando cada componente por separado, aquí están los comentarios más frecuentes.

Superficies:A mayor tráfico, mayor dureza de las superficies que deben resistirlo. Los bloques de hormigón deben tener

el color incorporado al material (no pintado). Pavimentos mal colocados eran lo habitual y la grava se dispersaba fácilmente con el mal tiempo. El canto rodado, contrario a lo que se esperaba, juntaba basura, pero no le gustaba a los peatones. Se preferían superficies oscuras cerca de los asientos y preferentemente papeleros grandes. Superficies blandas debían proveerse en zonas de juego, en particular bajo ciertos juegos con altura. Las líneas amarillas para evitar el estacionamiento eran vistas a veces como problema y visualmente entremetidas, algunos hallaban las líneas de cinta efectivas, otros preferían la pintura. Los bloques de recubrimiento requerían una colocación rigurosa y cuidadosa. Un nivel muy alto de arena debajo de ellos había sido la causa de problemas en un lugar. El mantenimiento requería mayor supervisión en muchos casos: por lo general los niveles de las zonas reparadas no coincidían con los originales.

Asientos-los asientos y bancos eran las piezas del equipamiento más vulnerables (con la posible excepción de los

papeleros). Las tapas plásticas faltaban de estructuras huecas de acero, haciendo que se oxiden. Los listones de madera pintada resistían menos que, por ejemplo, una madera dura aceitada. Los recubrimientos plásticos también resultaron vulnerables. En general se consideraba que empotrar los asientos era estéticamente desagradable, pero los bulones permitían sacar los asientos para su reparación o renovación. Se apreciaba la ubicación en zonas con y sin sol, y cuando había algo que mirar, aunque fueran otros transmutes. Plantas en las cercanías, y papeleros relativamente a mano (aunque no exactamente al lado de los asientos) también eran apreciados.

AlumbradoLa proliferación de columnas de luz y señales era un problema usual. Un color gris medio parecía se un buen

color para esconder los graffiti de los postes. Por lo general, donde esto era posible, los artefactos de iluminación se tomaban a la pared a una altura considerable, esto era molesto durante el día y cumplía bien con su trabajo por la noche. Los carteles de acceso sobre columnas de hormigón eran el blanco del os vándalos. En Brignton, las columnas de acero resultaron tener una corta vida en una atmósfera con sal, y el acero con una capa de aluminio requería pintura cada dos otros años. Por otro lado el aluminio anodinado duraba más de doce años sin deteriorarse. Las bases abisagradas fueron útiles para mantenimiento cuando no había acceso para camiones.

Señales de dirección de tránsitoLos postes de acero con recubrimientos plásticos pronto se veían deslucidos, y postes de hormigón con una

textura definida duraba mucho más. Se usaron exitosamente para denotar rutas para vehículos ocasionales a través de las calles semi-peatonales. Un detalle es que deben colocarse en relación a su entorno a una altura de diseño correcta. Esto significa, en primer lugar, elegir un tamaño correcto de señal.


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PapelerosLa basura siempre presenta dificultades, aun cuando esta dentro de los papeleros. Los de hormigón

mostraban manchas alrededor de los agujeros de sus bases, y muchas veces había huecos entre los canastos de alambre y su alrededor. Se pueden usar bolsas de plástico para mantener los interiores limpios, pero muchas veces están mal agarradas al borde del papelero, percibiéndose como desprolijos por esta causa. Los papeleros frágiles duraban poco tiempo, pero los que estaban montados a la pared parecían ser menos vulnerables que los que aparecían solos o tomados a una columna. Las bandas de fijación se oxidaban fácilmente. Las tapas eran pocas veces eficientes para mantener a los insectos alejados del contenido de los papeleros. Los mas grandes parecían usarse mas que los chicos y o los amarillos eran mas fáciles de visualizar-quizás demasiado en algunas áreas. Parece haber poca necesidad de poner papeleros en zonas residenciales.

SeñalesDe nuevo los postes son el problema. Muchas señales eran responsabilidad del departamento de ingeniería;

otros pertenecían a las rutas, que por lo general preferían iluminación interna, a pesar de algunos problemas de mantenimiento y resistencia al agua. La fijación a los muros parecía ser preferible, especialmente para pequeñas señales, con postes compartidos como segunda opción. Por otro lado, los postes debían ser suficientemente fuertes cuando carteles grandes eran necesarios.

Canteros y plantasAdemás de contener plantas y arbustos, los canteros se tornaban imprevistos asientos y basureros. Peor

aún, algunos modelos acumulaban basura alrededor de sus bases y eran difíciles de limpiar. La ciudad de Exeter usó canteros hechos de ladrillos para ese fin (con puntos de riego incluidos en niveles bajos) con algunos puestos en posiciones donde debían ser corridos por cambios en las rutas del tráfico. Los bordes angulosos eran tanto peligrosos como expuestos a la rotura. Las plantas en sí requerían mucha atención, en particular en las primeras etapas. Una vez establecidas, el vandalismo y otros daños parecían menos probables. Algunos árboles parecían más vulnerables que otros. El transplante de árboles que eran demasiado grandes y fuera de época eran causas comunes de fracasos.

Barandas y vallasLos galvanizados estaban sorprendentemente dañados, causando la oxidación de los caños de acero. Una

capa extra de pintura perecía ayudar. Las secciones cuadradas desalentaban a los niños de usar los caños como improvisadas hamacas y estructuras para trepar. Las barandas y los pasamanos deben estar puestos como para poder ser repintados fácilmente. Brighton tiene una política de reciclar las barandas de los suburbios y usarlas como recambios para las reparaciones en el centro de la ciudad.

Afiche y propagandaLas unidades de soporte de afiches estaban por lo general en buenas condiciones y bien mantenidas. Los

paradores de ómnibus que incluían avisos también funcionaban bien aunque había problemas de mantenimiento en un área. Un planteamiento cuidadoso fue necesario para asegurar que toda la información relevante era incluida desde un principio. Las opiniones de los usuarios variaban sobre el atractivo o lo efectivo que eran los afiches en los shoppings pero acordaban que le agregaban color a algunas áreas.

Otros elementos decorativosLa arquitectura y las vidrieras no fueron incluidas en esta investigación, salvo en la medida en que formaban

el entorno contra el cual el equipamiento era usado. Sin embargo dos áreas incluyeron facetas artísticas municipales. El éxito de estas era difícil de juzgar; muchas personas estaban más intrigadas que inspiradas o impresionadas. Quizás algo con un sabor más local hubiera sido más exitoso.

Casi siempre las primeras impresiones de los planos son las mas fuertes, y el mantenimiento y la consistencia juegan una parte importante en esto. Áreas sucias y sin coordinación eran en parte resultado de un planeamiento poco claro y una mala elección del producto. Tan seguido como esto parecía ser un intento de producir mejoras a medias que no se habían completado y cuidado suficientemente quizás porque el mantenimiento ha sido subestimado de entrada.

Este texto es minuciosos, cuando el diseñador no define y detalla la totalidad del proyecto el resultado es casual y generalmente deficitario. No puedo olvidar el pavimento, los anclajes, la iluminación, la relación con otros elementos, el uso y la necesidad de que sea estable en las condiciones reales de uso compartido, dominio público, clima y acción de otros agentes externos, usuarios fijos y eventuales, conflictos sociales de expresión espacial urbano, vandalismo, referencias concretas sobre estabilidad, protección al usuario, visibilidad, mantenimiento, reposición y cambio, etc. Prefiero redundar sobre lo obvio porque no me debo olvidar de ello. Estas consideraciones parecen elementales pero están presentes en cualquier proyecto, con cualquier propuesta, idea, concepto y es mejor tenerlas claramente a mano.


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