Número 118 Pág. 91-102 EVALUACIÓN DEL RENDIMIENTO...

RESUMENEl objetivo de este estudio fue evaluar el esfuerzo físico realizado por los árbitros y árbitros asistentes de fútbol duran-te partidos de competición oficial. Para analizar la participación cinemática en el juego (distancia recorrida, velocidadde los desplazamientos, etc.) se filmaron 12 partidos del Campeonato del Mundo sub-17 del año 2003 y se analizaroncon un sistema fotogramétrico bidimensional. Para determinar la carga fisiológica se monitorizó la respuesta de la fre-cuencia cardiaca mediante el empleo de pulsómetros en árbitros (n=10) y árbitros asistentes (n=20) y se expresó en rela-ción a la frecuencia cardiaca máxima (FCmáx) individual. Los árbitros recorrieron una distancia superior (p<0.001) a lade los árbitros asistentes durante los partidos: 11,1 vs 6,1 km. El patrón de esfuerzos también fue distinto entre ambosgrupos de jueces ya que los árbitros invirtieron más tiempo (p<0.001) andando, trotando, corriendo y sprintando mien-tras que los árbitros asistentes permanecieron más tiempo (p<0.001) parados durante los partidos. Los valores relativosde frecuencia cardiaca media también fueron más altos (p<0.001) en los árbitros (83 vs 77% de la FCmáx) debido prin-cipalmente al ejercitarse durante un período temporal superior (p<0.01) con intensidades que superaban el 85% de laFCmáx mientras que fueron los árbitros asistentes los que emplearon más tiempo (p<0.01) en esfuerzos entre el 66 y75% de la FCmáx. Los resultados de este estudio sugieren que los árbitros y árbitros asistentes deben ser consideradoscomo dos poblaciones independientes de deportistas y sus programas de entrenamiento deberían prescribirse específi-camente según las demandas experimentadas durante el juego.

Palabras clave: árbitros; árbitros asistentes; análisis biomecánico 2D; frecuencia cardiaca; entrenamiento.

SUMMARYThe aim of this study was to compare the physical demands placed on association football referees and assistant refe-rees during competitive matches. To examine the kinematical demands, 12 matches from the 2003 FIFA U-17 WorldChampionship were filmed and analysed with a bi-dimensional photogrammetric video-system. To determine thephysiological workload, the heart rate of referees (n=10) and assistant referees (n=20) was monitored using heart ratemonitors and expressed as a percentage of the maximal heart rate (HRmax). The physical and physiological load impo-sed on referees when officiating exceeded the requirements of assistant refereeing. The referees covered more distance(p<0.001) than the assistant referees during the matches: 11.1 vs 6.1 km and showed a different work-rate profile asthey spent more time (p<0.001) walking, jogging, cruising and sprinting whereas assistant referees spent more time(p<0.001) standing still. The relative mean heart rate values were also superior (p<0.001) in referees (83 vs 77% HRmax)principally because they appeared to spend more time (p<0.01) at intensities exceeding 85% HRmax, while assistantreferees performed mostly (p<0.01) between 66 and 75% HRmax. The results of this study suggest that referees andassistant referees should be considered as independent populations of sportsmen and their training regimens should bespecifically prescribed according to the physical demands experienced during match-play.

Keywords: referees; assistant referees; 2D biomechanical match analysis; heart rate; training.

VOLUMEN XXIV - Nº 118 - 2007

Volumen XXIVNúmero 118

2007Pág. 91-102

Javier Mallo

José M.GarcíaAranda

EnriqueNavarro

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EVALUACIÓN DEL RENDIMIENTO FÍSICO DE LOSÁRBITROS Y ÁRBITROS ASISTENTES DURANTE LACOMPETICIÓN EN EL FÚTBOLEVALUATION OF THE PHYSICAL MATCH PERFORMANCE OF ASSOCIATIONFOOTBALL REFEREES AND ASSISTANT REFEREES

INTRODUCCIÓN

El conocimiento de las demandas físicas queexperimentan los futbolistas durante los encuen-tros ha sido un frecuente objeto de estudio en eldeporte del fútbol(1,2,3). Los trabajos centrados enla figura del árbitro han tenido un origen más tar-dío(4,5,6,7,8) y, en el caso de los árbitros asistentes,no ha sido hasta el año 2002(9) cuando se hapublicado en la literatura internacional el primerartículo que describe las exigencias físicas a lasque son expuestos durante los partidos.

La comparación entre sí de estudios que han ana-lizado las exigencias cinemáticas que soportanlos árbitros resulta complicado de llevar a cabopor la gran variedad de metodologías emplea-das(4,7,8), el distinto criterio empleado para definirlas intensidades de los esfuerzos(4,5,6,7,8), el nivelde la competición en el que se registraban losdatos(10,11), los niveles de condición física de losjueces (8,12) o el estilo de juego de los equipos(13).Aplicando una técnica experimental con la cualse filmaba al árbitro con dos cámaras de vídeo encuyos trípodes se colocaban unos potencióme-tros D´Ottavio & Castagna(7) cifraron en 11,47km la distancia recorrida por árbitros italianosdel máximo nivel. Esta distancia no se recorría auna velocidad homogénea sino que existía unpatrón intermitente en los desplazamientos.Aproximadamente, el 50% de la distancia serecorría a una baja intensidad (<13 km/h), el33% a una media intensidad (13-18 km/h) y el17% restante a una elevada intensidad (>18km/h).

La respuesta de la frecuencia cardiaca durante unpartido de fútbol se ha utilizado tradicionalmen-te como un indicador indirecto del gasto energé-tico que supone la actividad. Los valores de fre-cuencia cardiaca media (FCmed) registrados enlos árbitros durante los partidos se sitúan en elrango de las 153 a las 165 p/min (5,6,8,14,15,16). El tra-tamiento de la frecuencia cardiaca en términosabsolutos dificulta la comparación entre losresultados obtenidos en distintos estudios por ladistinta capacidad cardiaca que el deportistapudiera tener por lo que para facilitar la interpre-

tación de los valores resulta más adecuadoexpresarla en relación a la frecuencia cardiacamáxima (FCmáx) individual. El modo en que seha calculado la FCmáx en los distintos trabajosañade otro punto de controversia a la hora derealizar comparaciones entre los estudios ya quemientras que en ocasiones los valores se hanexpresado a partir de la FCmáx calculada directa-mente (8,16), en otros se estimó a partir de la fór-mula 220-edad (5,6,14).

Hasta la fecha, las demandas cinemáticas experi-mentadas por los árbitros asistentes sólo hansido descritas por Krustrup et al. (9) empleando unmétodo basado en la clasificación subjetiva delos desplazamientos, el cronometraje de su dura-ción y la posterior multiplicación por la veloci-dad media calculada a priori para cada categoríade movimientos pre-establecida. La distanciatotal recorrida por los árbitros asistentes danesesanalizados con este método fue de 7,28 km, conun 84% de la distancia recorrida a una bajaintensidad (≤12 km/h) y el restante 7% y 9% auna media (15 km/h) y elevada intensidad (≥18km/h), respectivamente. La FCmed de los árbitrosasistentes durante los partidos oscila entre las137-140 p/min (9,16).

La investigación actual se trata de la primera enla cual se han examinado simultáneamente lasdemandas cinemáticas que experimentaban losárbitros y árbitros asistentes sobre los mismospartidos. El objetivo del estudio fue comparar elrendimiento físico de cada población de juecesdurante una competición internacional de fútboljuvenil del máximo nivel organizada por laFederación Internacional de Fútbol Asociado(FIFA). Con este diseño experimental se preten-día reducir el efecto de algunos de los factoresque pueden incidir en un aumento de la varianzade las conductas motrices medidas, puesto quelos partidos se filmaron siempre en los mismosestadios, bajo unas condiciones ambientalessimilares y en un período breve de tiempo (10días), de modo que los jueces y equipos conten-dientes presentaban, en teoría, unos valoressimilares de condición física durante todo el pro-ceso de evaluación.

ARCHIVOS DE MEDICINA DEL DEPORTE

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MATERIAL Y MÉTODO

Muestra

El presente estudio se desarrolló durante elCampeonato del Mundo de categoría sub-17organizado por la FIFA y que se disputó enFinlandia en agosto del año 2003. En el citadotorneo tomaron parte 11 árbitros (33,4 ± 3,8años; 182,6 ± 7,0 cm y 80,8 ± 11,1 kg) y 22 árbi-tros asistentes (34,0 ± 2,9 años; 175,8 ± 7,3 cmy 73,3 ± 8,0 kg) todos ellos de categoríaInternacional.

Antes del inicio del Campeonato se explicó atodos los jueces la naturaleza de la investigacióny se obtuvo consentimiento escrito del Comitéde Árbitros de la FIFA y de todos los árbitros yárbitros asistentes participantes en el torneo. Elestudio fue diseñado y conducido de acuerdo alas directrices éticas reflejadas en la declaraciónde Helsinki del año 1964.

Análisis cinemático

El registro de la participación de los juecesdurante los encuentros se llevó a cabo con un sis-tema de fotogrametría2D vídeo desarrollado yvalidado en el Laboratorio de BiomecánicaDeportiva de la Facultad de Ciencias de laActividad Física y el Deporte de Madrid que per-mite el cálculo de las coordenadas (x, y) de pun-tos en el plano a partir de las imágenes obtenidasdesde una o más cámaras de vídeo (17,18). Un totalde 12 partidos de la primera fase (fase de grupos)del Campeonato del Mundo sub-17 se filmaroncon tres videocámaras JVC GY-DV500E (JapanVictor Company, Japón) que se situaban en latribuna principal de los estadios. Las cámaras secolocaban de modo adyacente sobre la gradapara conseguir filmar la totalidad del terreno dejuego. Una vez ajustadas las cámaras (enfoque,diafragma, tiempo de obturación), éstas perma-necían fijas durante toda la filmación. Antes delinicio de los encuentros se medía el terreno dejuego utilizando una cinta métrica pre-calibradade 50 m y se diseñaba un sistema de calibración

de seis puntos para cada una de las cámaras. Atodos los tríos arbitrales participantes en el even-to se les filmó al menos durante un partido y, adi-cionalmente, un trío arbitral fue filmado en unasegunda ocasión.

Para llevar a cabo el procesamiento de los datoslas imágenes obtenidas desde cada una de lascámaras se pasaban al disco duro de un ordena-dor utilizando una tarjeta capturadora de imagenFAST-FORWARD y posteriormente se sincroni-zaban, a partir de un evento común, con el soft-ware SINCRO. Cada una de las películas alma-cenadas en el ordenador eran digitalizadas con elsoftware PHOTO23D. Digitalizar consiste enmarcar con el puntero del ratón la posición deldeportista en el terreno de juego en cada fotogra-ma. En el trabajo actual se empleó un modelomecánico de un punto para cada deportista, indi-cando sobre la pantalla del ordenador la proyec-ción vertical del centro de masas del sujeto conuna velocidad de muestreo de 1 Hz. El mismoproceso se siguió con el sistema de calibracióndesarrollado para cada una de las cámaras. Lascoordenadas digitalizadas en la pantalla (enpixels) fueron transformadas a unidades reales(metros) utilizando algoritmos basados en elprocedimiento de la DLT (“Direct LinealTransformation”) (19).

El ajuste de los datos se realizó mediante funcio-nes “spline” de quinto orden siguiendo el proce-dimiento descrito por Woltring en 1985 (20). Pararealizar la interpolación y el filtrado de los datosse seleccionó el procedimiento de la “CrossGeneralized Validation” (21). Los desplazamientosy la velocidad lineal de los movimientos se cal-cularon a partir de las funciones polinómicas“spline” de quinto orden y se clasificaron en lassiguientes categorías: (a) estar parado (< 1 m/s),(b) andar (1,01-2 m/s), (c) trotar (2,01-3,6 m/s),(d) correr (3,61-5 m/s) y (e) sprintar (> 5 m/s).Además de la categorización de los desplaza-mientos en función de su velocidad lineal todoslos vídeos de los partidos fueron visualizados endiversas ocasiones para clasificar los desplaza-mientos según el sentido de la locomociónempleada por los jueces. En el caso de los árbi-tros se tuvieron en cuenta los movimientos reali-


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zados en forma de carrera de frente y de espaldamientras que en el caso de los árbitros asistentesse analizaron los movimientos en forma decarrera frontal y lateral.

La validación de la técnica experimental se llevóa cabo en diversos estudios pilotos antes de rea-lizar la adquisición de los datos. En uno de ellosse distribuyeron 40 marcadores sobre un terrenode juego similar a los que posteriormente sellevó a cabo la filmación y se comparó la distan-cia real entre dos marcadores medida directa-mente sobre el terreno de juego y aquélla recons-truida mediante la fotogrametría2D. El error enla reconstrucción de la distancia entre dos puntosfue del 1,98%. En otro estudio piloto, un depor-tista siguió por un campo de fútbol distintos cir-cuitos que simulaban los desplazamientos habi-tualmente realizados por los árbitros y árbitrosasistentes durante los partidos. No se observarondiferencias significativas (p>0.05) entre la dis-tancia real medida sobre el terreno de juego y lareconstruida a una frecuencia de 1 Hz.

Para testar la fiabilidad intra-observador de lametodología, un mismo sujeto repitió la digitali-zación de una secuencia formada por 2700 foto-gramas con un intervalo de tres meses, sin apre-ciarse diferencias significativas (p>0.05) entreambas mediciones. Tampoco se observaron dife-rencias significativas (p>0.05) cuando tres suje-tos digitalizaron la misma secuencia compuestapor 2700 fotogramas (fiabilidad inter-observa-dores).

Frecuencia cardiaca

La frecuencia cardiaca fue monitorizada en losjueces en distintos partidos del Mundial sub-17mediante el empleo de pulsómetros Polar S610(Polar Electro Oy, Kempele, Finlandia). El inter-valo en el que se llevaron a cabo las medicionesfue de 5 s. A la conclusión de los partidos losdatos eran transferidos al ordenador y procesa-dos con el software Polar Precision Performance3.0 (Polar Electro Oy, Kempele, Finlandia).Debido a que algunos jueces no estaban familia-rizados con el uso de estos equipos, algunos de

los registros obtenidos no fueron aceptadoscomo válidos, obtiéndose finalmente un total de10 registros en árbitros y 20 en árbitros asisten-tes, sobre partidos que abarcan las dos fases de lacompetición (fase de grupos y fase de eliminato-rias).

Siguiendo el criterio empleado en otros estudios(8,9,16) el valor de FCmáx para cada juez se calculó apartir del valor máximo de frecuencia cardiacaobtenido en los partidos, sesiones de entrena-miento físico intensas y pruebas de valoraciónde la condición física (prueba de carrera de los12 minutos) en la que los jueces debían utilizarlos pulsómetros. A partir de los registros obteni-dos se estimaron los valores de FCmáx individua-les y se establecieron las siguientes categorías deesfuerzo para el análisis de los datos basadas enHelsen y Bultynck (16): (a) recuperación pasiva(<65% FCmáx), (b) recuperación activa (66-75%FCmáx), (c) media intensidad (76-85% FCmáx),(d) alta intensidad (86-95% FCmáx) y (e) máximaintensidad (>96% FCmáx).

Tratamiento estadístico

Los datos antropométricos, de distancia recorri-da y de frecuencia cardiaca de los árbitros y árbi-tros asistentes se compararon mediante pruebasde tipo t para muestras independientes. Paraestudiar la evolución de la distancia recorrida yla frecuencia cardiaca a lo largo de los dos perí-odos de juego para un mismo grupo de jueces seemplearon purebas de tipo t para muestrasdependientes. En las comparaciones entre losdos grupos de jueces para obtener los perfiles delrendimiento físico de cada uno de ellos se reali-zó un análisis de la varianza (ANOVA) utilizan-do como variables independientes los dos gruposde jueces (2 niveles: árbitros, árbitros asistentes)y las categorías de esfuerzo (5 niveles: estarparado, andar, trotar, correr, sprintar) llevando acabo las medidas repetidas sobre éste último fac-tor. El mismo procedimiento se empleó paracomparar la respuesta de la frecuencia cardiaca,utilizando los 2 grupos de jueces y las 5 catego-rías de esfuerzo (recuperación pasiva, recupera-ción activa, media, alta y máxima intensidad)


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realizando las medidas repetidas sobre éste fac-tor. En el caso de detectarse diferencias signifi-cativas las medias se compararon dos a dos utili-zando el procedimiento de Bonferroni, que ajus-ta los intervalos de confianza entre las medias.El tamaño del efecto se calculó a partir delcociente de la diferencia de las medias y la des-viación estándar (22). El nivel establecido antes deiniciar la investigación de alpha fue de p<0.05.

RESULTADOS

Datos antropométricos

Los árbitros analizados durante el trabajo actualde investigación tenían una estatura y una masacorporal superior (p<0.05) a la de los árbitros

asistentes aunque no se observaron diferenciassignificativas en cuanto al índice de masa corpo-ral entre ambos grupos de jueces (árbitros: 24,13kg/m2; árbitros asistentes: 23,69 kg/m2).

Análisis cinemático

Distancia recorrida

La distancia media recorrida por los árbitros(n=12) durante los partidos fue de 11059 ± 935m. Este valor fue superior (p<0.001) a los 6137± 539 m recorridos por los árbitros asistentes(n=24), con un tamaño del efecto de 6,19. Tantolos árbitros como los árbitros asistentes recorrí-an una distancia inferior (p<0.01) durante lossegundos períodos de los partidos (Figura 1).



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FIGURA 1.Comparación de ladistancia recorrida porlos árbitros y árbitrosasistentes durante losdos períodos de juego.#Diferencia significativa(p<0.01) entre el primery segundo período.

Categorías de desplazamientos

Los desplazamientos realizados por los jueces seclasificaron en función de la velocidad lineal ydel sentido de locomoción de los mismos. En laFigura 2 se puede observar, a modo de ejemplo,la representación gráfica de velocidad lineal delos desplazamientos de un árbitro y de un árbitroasistente durante 15 min de un mismo partido.

La distribución porcentual del tiempo empleadoen las distintas categorías según la velocidadlineal de los desplazamientos es diferente para

ambos grupos de jueces (Figura 3). Tras realizarun análisis de la varianza con medidas repetidas,el factor categorías de esfuerzo mostró un efectosignificativo (F4,136=908,39; p<0.001). Tambiénse observó una interacción significativa entre losdos factores: grupo x categorías de esfuerzo(F4,136=306,95; p<0.001). Mientras los árbitrosasistentes permanecían parados un porcentajesuperior de tiempo (p<0.001; tamaño del efecto7,74) durante los partidos, los árbitros emplea-ban más tiempo (p<0.001) en las categorías“andar” (3,12), “trotar” (4,05), “correr” (5,57) y“sprintar” (3,53).

En relación a la clasificación de los desplazamien-tos en función del sentido de la locomoción –inde-pendientemente de la velocidad de los mismos- losárbitros recorrieron como término medio 1706 ±164 m durante los partidos desplazándose deespalda, lo cual suponía un 15,43% de la distancia

total del partido. En forma de desplazamiento late-ral los árbitros asistentes recorrieron el 32,15% dela distancia total (1973 ± 199 m). Ambos gruposde jueces vieron reducidos (p<0.001) estos tiposde desplazamiento durante los segundos períodosde los encuentros (Figura 4).


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FIGURA 2. Velocidadlineal de los

movimientos de un (a)árbitro y (b) árbitro

asistente durante 15 minde un partido de fútbol.

FIGURA 3.Comparación del

porcentaje de tiempoempleado en distintas

categorías de esfuerzosegún la velocidad

lineal de losdesplazamientos por los

árbitros (•) y árbitrosasistentes (�) (media ±

desviación estándar). Entodas las categorías sealcanzaron diferencias

significativas (p<0.001)entre los dos grupos de

jueces.

Frecuencia cardiaca

La FCmed lograda por los árbitros en los 10 par-tidos analizados fue de 157 ± 4 p/min, lo quesuponía el 83 ± 1 % de la FCmáx de los jueces.Los valores de los árbitros asistentes (n=20)

fueron más reducidos (p<0.001) con un prome-dio de 145 ± 8 p/min (77 ± 4% de la FCmáx). LaFigura 5 ilustra la diferencia entre la respuestade la frecuencia cardiaca del árbitro y de uno delos dos árbitros asistentes durante un mismopartido.



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FIGURA 4.Comparación de ladistancia recorrida enforma de carrera deespalda (árbitros) ycarrera lateral (árbitrosasistentes) durante losdos períodos de juego.$Diferencia significativa(p<0.001) entre elprimer y segundoperíodo.

FIGURA 5. Frecuenciacardiaca de un (a)árbitro y (b) árbitroasistente durante unmismo partido delMundial sub-17.

Los valores de FCmed registrados en los árbitrosexperimentaron un descenso (p<0.05) en lossegundos 45 min. Del mismo modo, los árbitrosasistentes veían reducida (p<0.01) su FCmed trasel descanso (Figura 6).

En la Figura 7 se compara el tiempo empleadopor los dos grupos de jueces en las distintas cate-gorías de esfuerzo en función de la FCmáx indivi-dual. El análisis de la varianza con medidasrepetidas determinó un efecto significativo delfactor categoría de esfuerzo (F4,112=76,55;

p<0.001). La interacción entre los factores grupode jueces y categoría de esfuerzo también alcan-zó un nivel significativo (F4,112=7,27; p<0.001).Los árbitros asistentes permanecieron más tiem-po durante los partidos a intensidades por deba-jo del 85% de la FCmáx mientras que los árbitrosempleaban más tiempo durante los partidos aintensidades que excedían el 85% de la FCmáx.Las diferencias entre los grupos alcanzaron nive-les significativos entre las categorías de “recupe-ración activa” y “alta intensidad” (p<0.01) y de“máxima intensidad” (p<0.001).


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FIGURA 6.Comparación de los

valores de FCmed de los

árbitros y árbitrosasistentes durante los

dos períodos de juego.*Diferencia significativa(p<0.05) entre el primer

y segundo periodo.#Diferencia significativa(p<0.01) entre el primer

y segundo periodo.

FIGURA 7.Comparación del

porcentaje de tiempoempleado en distintas

categorías de esfuerzosegún el porcentaje de

la FCmáx por los árbitros

(•) y árbitros asistentes(�) (media ± desviaciónestándar). (*) Diferencia

significativa p<0.01entre grupos. (#)

Diferencia significativap<0.001 entre grupos.

DISCUSIÓN

El presente trabajo ha permitido comparar elesfuerzo físico que realizan los árbitros y árbi-tros asistentes durante los partidos de competi-ción en el fútbol. A pesar de que los árbitros yárbitros asistentes son habitualmente tratadospor igual a la hora de programar su entrenamien-to o valorar su condición física, los resultadosobtenidos sugieren la necesidad de que sean con-siderados como dos poblaciones independientesde deportistas.

Es importante remarcar que la técnica experi-mental empleada para la adquisición de los datoscinemáticos se ha basado en procedimientos deanálisis biomecánico en dos dimensiones valida-dos previamente. La aplicación de esta herra-mienta permite un registro continuo de las posi-ciones que ocupan los 3 jueces y 22 futbolistasen el terreno de juego a lo largo de un partido defútbol, determinando las variables cinemáticasmás importantes de la prestación deportiva. Espor ello que en la investigación actual se hayalogrado un registro simultáneo de la actividaddesarrollada por los árbitros y árbitros asistentesdurante los partidos, siendo el primer estudioque, hasta la fecha, ha logrado dicho propósito.De este modo también se ha conseguido reducirla influencia de alguna variable que podría inci-dir en la respuesta cinemática de los jueces comoel nivel de los futbolistas o el estilo de juego delos equipos, puesto que las mediciones se hanrealizado en las mismas circunstancias para losárbitros y los árbitros asistentes, siendo el tiem-po real de juego idéntico en las observacionesrealizadas en ambos grupos de deportistas.

Respetando la dificultad que supone la compara-ción entre los resultados obtenidos en estudiosque han empleado técnicas instrumentales dis-tintas, la distancia recorrida por los árbitros en elMundial sub-17 fue similar a la de los árbitrositalianos del máximo nivel (7,11,12,14,23) así como losvalores de frecuencia cardiaca fueron semejantesa los descritos en los árbitros que participaron enla Eurocopa de Naciones del año 2000 (16). Encualquier caso, el análisis detallado de losesfuerzos por categorías, tanto a nivel de la res-

puesta cinemática como fisiológica, denota unaligera inferior intensidad global del arbitraje encategoría juvenil en relación a la categoría abso-luta (7,16), por la menor duración de los períodosde ejercicio a una elevada intensidad. Los datosobtenidos del análisis de la participación de losárbitros asistentes difieren de los presentadospreviamente por Krustrup et al. (9), aunque losvalores de frecuencia cardiaca sí fueron simila-res a los anteriormente publicados en partidos decategoría absoluta (9,16), por lo que las diferenciasen cuanto a la respuesta cinemática de los árbi-tros asistentes podrían estar debidas a las distin-tas técnicas experimentales empleadas para laadquisición de los datos (fotogrametría 2D vs.clasificaciones subjetivas de los desplazamien-tos) o las características intrínsecas de los pro-pios encuentros: nivel de la competición, condi-ción física de los futbolistas, estilo de juego delos equipos, etc.

La comparación de la respuesta cinemática y dela frecuencia cardiaca de ambos grupos de juecesha permitido constatar cómo los árbitros com-pletan un volumen de desplazamientos muysuperior, recorriendo aproximadamente el doblede metros durante los partidos. A pesar de que ladistancia total recorrida puede emplearse comoun indicador global de la intensidad física delfútbol (23), la cantidad de ejercicio de alta intensi-dad es un mejor indicador de los períodosdemandantes del juego (3,8,9) además de relacio-narse con la competición a un nivel más elevado(2,24,25). En este sentido, los árbitros estudiados enel presente campeonato recorrieron 4,1 km avelocidades superiores a los 3,6 m/s mientrasque los árbitros asistentes únicamente recorrie-ron 1,1 km por encima de dicho umbral. Al com-parar el tiempo empleado por ambos grupos dejueces ejercitándose a intensidades superiores al85% de la FCmáx, las diferencias también fueronnotables puesto que mientras los árbitros ocupa-ron el 41% del partido, los árbitros asistentesalcanzaron únicamente el 22% del tiempo totalde juego. Este diferente patrón de esfuerzos con-trasta con la tendencia tradicional de considerara ambos grupos como una población homogéneade jueces, puesto que sus exigencias físicasdurante el juego son muy distintas. De hecho, los



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valores de potencia y capacidad aeróbica de árbi-tros y árbitros asistentes daneses de la primeradivisión son prácticamente idénticos (8,9) a pesarde la disparidad de exigencias que deben sopor-tar durante el juego. Los requerimientos físicosde los árbitros se asemejan más a los de los fut-bolistas, a excepción de que éstos tienen la posi-bilidad de intervenir con el balón, pero mientraslos árbitros tienen valores de consumo máximode oxígeno relativos que oscilan entre los 46-51ml/kg/min (8,12,15) los futbolistas de alto nivel supe-ran los 60 ml/kg/min (26,27,28).

Al analizar la evolución de los parámetros cine-máticos y fisiológicos de ambos grupos de jue-ces durante los dos períodos de juego se pudoapreciar una tendencia hacia la disminución glo-bal del ratio de esfuerzo en el transcurso del par-tido, al decrecer en los segundos 45 minutos ladistancia total recorrida y la FCmed. Los resulta-dos que se disponen a este respecto en la litera-tura internacional son contradictorios, puestoque mientras en algunos estudios se ha observa-do una disminución en los árbitros de la distan-cia total recorrida (5,6,7,10,12,29) y de la FCmed

(30) enotros estudios ni la distancia global (4,8,14) ni laFCmed

(5,7,10,14) de los árbitros no se vio reducidatras el descanso. En el estudio llevado a cabo porKrustrup et al. (9), los árbitros asistentes sí vierondisminuida la distancia recorrida y la FCmed trasel intermedio.

Un factor adicional que corrobora este descensodel ratio de esfuerzos en las segundas partes es ladisminución de la distancia recorrida en formade carrera de espalda por parte de los árbitros yde carrera lateral por los árbitros asistentes.Estos tipos de locomoción –de espalda y lateral-son importantes para los jueces porque les per-miten adoptar una mejor perspectiva para elseguimiento del juego. Reilly & Bowen (31) cons-tataron como tanto la carrera de espalda y lateral,a velocidades entre 5 y 9 km/h, podrían requerirun gasto energético entre un 25 y 40% mayorque la carrera frontal a la misma velocidad. Deeste modo, la disminución de este tipo de despla-zamientos en el segundo período de juego podríaformar parte de una estrategia de economizaciónenergética por parte de los jueces.

Resulta complicado determinar con exactitud,sin haber realizado mediciones bioquímicasdirectas sobre los jueces, si esta disminución enla intensidad global del esfuerzo en los segundosperíodos se debe a un estado deficitiario de con-dición física por parte de los jueces o si por elcontrario responde a una respuesta adaptativa auna menor intensidad en el juego impuesta porlos futbolistas. Estudios recientes (32) han sugeri-do que el desarrollo de fatiga en los momentosfinales de los partidos de fútbol podría hallarseligado a la deplección de glucógeno en las fibrasmusculares individuales. En este sentido, paraprofundizar en los posibles episodios de fatigaque pueden experimentar los jueces en el trans-curso de un partido sería interesante analizarcinemáticamente el comportamiento de los 22futbolistas y el balón, así como monitorizar larespuesta de algún parámetro bioquímico com-plementario en los propios árbitros y árbitrosasistentes en el transcurso de los encuentros.

Los resultados obtenidos en este estudio sugie-ren la necesidad de individualizar el entrena-miento físico para cada población de jueces.Debido al elevado volumen de desplazamientosque completan los árbitros a una alta intensidadparece necesario en estos deportistas desarrollarla capacidad para desarrollar ejercicio intermi-tente de alta intensidad durante períodos prolon-gados. Recientemente se ha demostrado la efec-tividad de diversos programas de entrenamientosbasados en esfuerzos intermitentes sobre el ren-dimiento físico de los árbitros (8,33) lo cual refuer-za la pertinencia de elevar los niveles de poten-cia aeróbica de los árbitros para equiparlos conlos de los futbolistas. En el caso de los árbitrosasistentes, el distinto patrón de esfuerzos duran-te los partidos aconseja el empleo de métodosintermitentes en los que se alternen fases de ejer-cicio a la máxima intensidad con recuperacionesmás prolongadas. Esto es debido a que los árbi-tros asistentes deben permanecer siempre enlínea con el penúltimo defensor por lo que se vensometidos a esfuerzos máximos para mantenersea la altura de esta “línea del fuera de juego”. Enestos episodios deben ser capaces de correr a lamisma velocidad que los futbolistas para podermantener una visión óptima del juego y poder


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juzgar la jugada. Estos períodos de ejerciciomáximo tienen una duración determinada puestoque los árbitros asistentes sólo pueden despla-zarse por la mitad de la longitud del campo, deahí que este tipo de esfuerzos nunca sobrepasa-rán los 50-55 m. El volumen de ejercicio de altaintensidad es menor que en los árbitros lo que entérminos prácticos revela una menor densidad delas solicitaciones al tener más tiempo de recupe-ración entre los esfuerzos.

CONCLUSIONES

El conocimiento de las exigencias que la compe-tición solicita en los deportistas debe facilitar laprescripción de programas de entrenamiento

específicos a los requerimientos del juego. Este hasido el primer estudio que ha comparado el rendi-miento físico de los árbitros y árbitros asistentesde manera simultánea en un campeonato de fútboldel máximo nivel. Los resultados obtenidossugieren la necesidad de considerar a ambos gru-pos como poblaciones independientes de depor-tistas. De cara al entrenamiento, los árbitros debenmejorar la capacidad para realizar ejercicio inter-mitente de alta intensidad durante un tiempo pro-longado, respetando el ratio de esfuerzos que ocu-rren en los encuentros. Los árbitros asistentes pre-sentan un volumen e intensidad global de losesfuerzos menor aunque deben ser capaces de darrespuesta a esfuerzos de intensidad máxima, dis-poniendo de una mayor recuperación entre estosperíodos que los árbitros.



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MALLO SAINZ, J.

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AGRADECIMIENTOSEl presente estudio ha sido llevado a cabo gracias al apoyo logístico y económico proporcionado por la Comisión de Arbitraje de la

Federación Internacional de Fútbol Asociado.

Correspondencia:Javier Mallo Sainz. Urbanización Valdelagua nº 173 BIS. San Agustín del Guadalix. 28750 MADRIDemail: [email protected]

Aceptado: 14-11-2006 / Original nº 523

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