A veces tienes que romper con todo, perderte, arriesgarte por

tus sueños… dejarte llevar por tu corazón

Una mirada al amor juvenil, una novela fresca y ágil llena de

momentos inolvidables

A la venta el 23 de enero

PVP: 19.90€

480 páginas

Una mirada al amor juvenil, de tono romántico, pero a la vez

una novela fresca, ágil y llena de momentos muy “hot”. En

Estados Unidos se ha convertido en un auténtico fenómeno

de ventas y es el libro de moda entre los jóvenes,

¡el que todas quieren leer!

El mensaje que transmite es muy claro: a veces tienes que

romper con todo, arriesgarte por tus sueños y dejarte llevar

por tu corazón, porque el amor te estará esperando en el

lugar que menos imagines.

Un libro que nos invita a vivir con intensidad, a buscar lo mejor de la vida, a atreverse, y que nos recuerda que la vidaes bella, que ser joven es maravilloso y que hay que

vivir el momento. Un canto al carpe diem y al amor.

Camryn tiene veinte años. Está a punto de entrar en una nueva etapa de su vida. Se

muere de ganas de ser ella misma, de ser completamente independiente, de dejar de

ser una niña para ser mujer de su destino. Ha acabado sus estudios y le espera un

trabajo, la ciudad y compartir piso con su mejor amiga Natalie. Camryn se siente

segura dando los primeros pasos de su vida adulta hacia su futuro. Es evidente que

está yendo en la dirección correcta. ¿No es eso lo que todo el mundo hace? Aunque a

veces duda y le gustaría vivir una aventura, algo diferente, y más desde que Ian, su

gran amor, falleciera en un accidente.

Pero justo antes de su primer lunes de mujer adulta algo raro y horrible sucede y todo

cambia de repente: Natalie ya no es su amiga, no contesta a sus llamadas y ella deberá

seguir viviendo con su madre, sus planes se han roto. Enseguida se da cuenta de que

no está viviendo la vida que quiere y por eso toma una decisión drástica: va a la

estación de autobuses y sin ni tan siquiera proponérselo, se sube al primero que sale.

Apenas lleva un bolso con lo mínimamente necesario. Camryn está de camino hacia las

sorpresas de la vida. Su intención es ir de autobús en autobús hasta dar con el camino

que aún desconoce.

En uno de los autobuses conoce a Andrew, de veinticinco años, que se dirige a ver a su

padre que está muriendo a causa de un tumor cerebral. A medida que el camino

avanza, charlan, ríen, se conocen y se dan cuenta de que son más parecidos de lo que

creen. Nace una intensa amistad que los impulsará a tomar la carretera sin rumbo

predeterminado, un coche y a viajar siguiendo el ritmo del sol y las estrellas. Juntos

descubren la importancia del momento, cómo vivir el presente, y ser mucho más que

cómplices para sentir el amor con todo cuanto implica estar plenos y vivos, con dolor y

felicidad. Sólo ese amor podrá desafiar sus temores y vencerlos más allá de la vida y la

muerte.

El autobús es el punto de inicio de un viaje que dejará una huella imborrable en las

vidas de Camryn y Andrew. Él va a visitar a su padre al hospital, pues se está muriendo,

y a pesar de que el viaje en bus es tan largo que se arriesga a que su padre haya

fallecido cuando llegue, necesita esas horas para él mismo, para pensar y reflexionar

acerca de todo lo que su progenitor le ha enseñado de la vida.

Camryn también necesita iniciar este viaje. Su vida se ha vuelto del revés y siente la

necesidad de marchar sin rumbo y encontrarse a sí misma, aunque a Andrew le explica

que va camino a Texas para visitar a su hermana.

A medida que pasan los quilómetros y las horas en el autobús, los dos jóvenes se van

acercando. La atracción entre ambos ha surgido, pero Camryn no quiere ni novios ni

ligues y Andrew, aunque no le importaría tener algo con ella, no quiere forzar la

situación. Así que los quilómetros a bordo del bus continúan sucediéndose y ellos van

intimando y confesándose aspectos que nunca habrían imaginado que contarían a

alguien a quien prácticamente acaban de conocer.

Finalmente, llegan al final del recorrido juntos y se despiden. Andrew se va al hospital y

Cam debe cambiar de autobús. Cuando está esperando para hacer el transbordo, un

hombre que la ha estado espiando en el autobús intenta forzarla y Andrew aparece en

el momento justo para liberarla.

Aún con el miedo en el cuerpo, ambos deciden continuar juntos un viaje sin rumbo

definido, pero no en autobús, si no en un coche antiguo. Así que después de visitar al

padre de Andrew en el hospital, empiezan la aventura. Ambos sienten la fragilidad de

la vida y cómo les tiemblan las manos, pero han decidido vivir el momento, dejar de

lamentarse por el pasado y no planificar el futuro.

Cada vez se sienten más cerca el uno del otro. Se han hecho muy buenos amigos y las

horas de viaje pasan solas entre confidencias, secretos compartidos y mucha

complicidad. Se suceden días y noches en habitaciones separadas de motel, compran

ropa, hablan sobre música y callan la evidente atracción del uno hacia el otro.

A Cam le cuesta cada vez más no confesar lo que siente por Andrew, hasta que todo

resulta inútil y acaban juntos en la misma habitación, haciendo el amor con tal dulzura

e intensidad que sienten que la vida es eterna.

Los dos jóvenes deciden hacer un parón en New Orleans y pasar allí unos días. Andrew

y Camryn son felices y se dedican a vivir su amor. Van a conciertos, se atreven a cantar

en público, hacen turismo… Además, Natalie le ha pedido disculpas a Cam por teléfono

y vuelven a ser amigas.

Pero Andrew no puede evitar preocuparse cuando piensa en el futuro, y aunque no ve

razón para no ser feliz ahora, hay algo que le impide continuar al lado de Camryn. Así

que decide acabar con la relación a menos que Cam se entregue emocionalmente. Es

entonces cuando la chica deja caer de una vez por todas los muros que había

levantado tras la muerte de Ian y se entrega completamente a él, a pesar de que

continúa sin decirle que le quiere.

El viaje continúa hasta Texas, la ciudad donde vive Andrew, y allí Cam conoce tanto a la

madre como a los amigos de su chico. Entrar en su entorno le hace ver que Andrew

tiene un secreto, sabe que hay algo que él no le ha contado y eso la inquieta.

El misterio sale a la luz el día que Andrew sufre un desmayo y lo ingresan en el

hospital. Al igual que se padre, tiene un tumor cerebral, pero no ha querido hacerse

pruebas ni tratarse, pues estaba convencido de que moriría igualmente. Andrew entra

en coma y le deja una triste carta de despedida a su chica diciéndole que siempre se ha

sentido amado por ella y que siente mucho no haberle explicado antes el grave

problema que tenía. Cam se siente desfallecer y ya no recuerda nada más de aquel día.

Dos meses después, Camryn se encuentra delante de la tumba con el apellido Parrish,

el de Andrew, grabado en la lápida. Pero él está a su lado, cogiéndola por la cintura. El

proceso de recuperación del chico había impedido que hasta ahora hubiesen visitado a

su padre.

Camryn está instalada en Texas y no tiene ninguna intención de marcharse. La familia

de él la ha acogido como a una más y la pareja tiene miles de planes de futuro: ella

está embarazada y van a casarse.

De los Rolling Stones a los The Civil Wars pasando por Muse, Pink o Would, esta novela

está plagada de música. Los dos protagonistas oyen sus canciones favoritas casi a

todas horas e incluso discuten sobre sus grupos de culto, ya que los gustos musicales

de ambos son muy diferentes.

Cabe destacar la canción “Barton Hollow” de

The Civil Wars, que suena en uno de los

momentos más especiales de la historia de

amor entre Camryn y Andrew. De hecho, a

lo largo de la novela, la protagonista destaca

en más de una ocasión que The Civil Wars es

su grupo favorito.

El grupo, en plena efervescencia en Estados

Unidos, fue telonero de Adele en su última

gira.

El éxito de Nadie como tú en Estados Unidos

también ha contribuido al incremento de la

fama de este dúo de cantautores que en

2012 ganó el premio Grammy al Mejor Dúo

/ Grupo Performance Country y al Mejor

Álbum Folk.

«¡5 estrellas Plus! Éste es uno de los MEJORES LIBROS QUE HE LEÍDO NUNCA».

Maryse’s Book Blog

«¡5 estrellas! ¡wow! ¡Un viaje inesperado y una lectura fantástica! Este libro

cuenta una maravillosa historia sobre la amistad y el amor, sobre vivir el

momento, vivir al máximo, ser fiel a uno mismo y no tener miedo de conseguir

tus sueños… ¡Me encantó y se lo recomiendo a todo el mundo!»

Aestas Book Blog

«Me encantó este libro. Adoro a Andrew y Camryn. Es uno de mis libros

favoritos. ¡Todo el mundo debería leerlo! »

Jazmin González, Goodreads

«Este libro es perfecto. No pude parar de leer. »

MVP. Amazon

«Uno de los mejores viajes que he hecho en mi vida.»

DJ Morgan, Amazon

«Este libro es increíble, me hizo llorar y reír… ¡Sé que lo volveré a leer! »

Alma Castillas, Amazon

«Pensar y hacer planes es una gilipollez. Si piensas en el pasado, no avanzas. Si pasas demasiado tiempo haciendo planes para el futuro, no haces más que retroceder o

quedarte estancado en el mismo sitio toda tu vida»

«¿Qué nos empuja a hacer las cosas que hacemos cuando en el fondo una parte de nosotros solo

quiere romper con todo eso?»

«Por primera vez en mucho tiempo siento que mi vida vuelve a estar encarrilada,

sólo que va por un camino muy diferente, uno que no sé adónde me llevará»

«Lo que llevas importa poco. Lo que importa es a dónde te diriges y qué haces

mientras lo llevas»

«Vive el momento, donde todo es como debe ser, tómate tu tiempo, pon freno a tus malos recuerdos y llegarás adondequiera que vayas a llegar mucho más deprisa y topándote con

menos baches en el camino»

«Sin destino, sin objetivo, sin más meta que encontrarme en este viaje que jamás imaginé que me atrevería a emprender. Y tengo miedo. Pero he de hacer esto. Debo

hacerlo, porque necesito pasar este tiempo a solas, lejos de todo lo que me ha

traído hasta aquí»

«Cuando llevas con alguien tanto tiempo te acostumbras a él, ¿sabes? Es cómodo. Y

una vez que nos instalamos en la comodidad, intentar dejarla aunque todo en ella sea horrible y enfermizo es como intentar que un gordo que no mueve el culo del sofá salga del salón lo bastante

para que haga otra cosa»

«El corazón, a pesar de ser temerario y suicida siempre se sale con la suya»

«Deberías decir lo que sientes siempre que tengas la necesidad de hacerlo. Puede

que decirlo sea exactamente lo que necesitas»

«Coincidencia no es más que la forma convencional de designar al destino»

J. A. Redmeski (1975) vive en North

Little Rock, Arkansas, con sus tres hijos y

un gato maltés. Apasionada de la

televisión y de los libros, sus obras

aparecen regularmente en las listas de

los más vendidos del The New York

Times, USA Today y Wall Street Journal.

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