Nº 295/21-II-2002 SEMANARIO DE INFORMACIÓN RELIGIOSA …al cardenal Van Thuân, Presidente del...

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EDIC. NACIONAL SEMANARIO DE INFORMACIÓN RELIGIOSA Nº 295/21-II-2002 ¿ ¿ C C a a m m i i n n a a m m o o s s j j u u n n t t o o s s e e n n l l a a I I g g l l e e s s i i a a ? ?

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EDIC. NACIONALSEMANARIO DE INFORMACIÓN RELIGIOSANº 295/21-II-2002

¿¿¿¿CCCCaaaammmm iiiinnnnaaaammmmoooossssjjjjuuuunnnnttttoooossss

eeeennnn llllaaaa IIIIgggg lllleeeessss iiiiaaaa????

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Etapa II - Número 295Edición Madrid

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Edita:Fundación San Agustín.Arzobispado de Madrid

3/7Sínodos

diocesanos:Una fiesta de la fe.

Esquemade los sínodos.

Los cristianoslaicos son Iglesia

18/19

Ante la inminenteaprobación de la

fecha decanonización del

Beato Escriváde Balaguer, el

prelado del OpusDei habla para Alfa

y Omega:

«Sin su estar en laIglesia,

el Opus Dei sedesharía»

26-27

Entrevista al cardenal VanThuân,Presidente del Consejo Pontificiode Justicia y Paz y ex arzobispode Hanoi:

No hay un pueblosuperior a otro

8 La foto

9 Criterios

10 Cartas

Aquí y ahora

11 Ver, oír y contarlo.

12 La educación necesita mejora.

13 Educar, para la vida, en la fe

Iglesia en Madrid

12 XVIII Jornada Diocesana

de Enseñanza

13 La voz del cardenal arzobispo

14 Testimonio

15 El Día del Señor

16-17 Raíces

Iconos rusos:

Miradas desde la madera

Mundo

20 Dolor por Hispanoamérica:

Argentina, Venezuela y Colombia.

21 El Papa crea cuatro diócesis

en Rusia

22-23 La vida

Desde la fe

24-25 El pequealfa.

28 Habla el Superior General

de la Orden de los Trinitarios.

29 Libros.

30 Con ojos de mujer.

31 No es verdad

32 Contraportada

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Casi un tercio de las diócesis dela Iglesia en España, desde laterminación del Concilio Vati-

cano II hasta ahora, han celebrado yconcluido su respectivo sínodo dioce-sano. En concreto –de entre las 67 dió-cesis más el Arzobispado castrense–,son solamente 19 en total.

Los sínodos diocesanos han sido yson en la Iglesia un modo excelentedel gobierno comprendido en el mi-nisterio pastoral del obispo y, por eso,un momento significativo para la vi-talidad de cada Iglesia particular.«Desde los primeros siglos de la Igle-sia –dice el Decreto Christus Domi-nus, 39–, los obispos, puestos al fren-te de las Iglesias particulares, movi-dos por la comunión de la caridadfraterna y por amor a la misión uni-versal conferida a los apóstoles, au-naron sus fuerzas y voluntades paraprocurar el bien común y el de lasIglesias particulares. Por este moti-vo se constituyeron los sínodos o con-cilios provinciales y, por fin, los con-cilios plenarios, en que los obisposestablecieron una norma común quese debía observar en todas las Igle-sias, tanto en la enseñanza de las ver-dades de la fe como en la ordenaciónde la disciplina eclesiástica». En con-tinuidad con esta tradición y en re-novación de la misma institución si-nodal, el Concilio Vaticano II reco-mendó la convocatoria de sínodos yde concilios provinciales, para que,con nuevo vigor, se provea con mayor

«eficacia al incremento de la fe y ala conservación de la disciplina enlas diversas Iglesias, según los tiem-pos lo requieran».

Hasta el Concilio Vaticano II, endiócesis que celebraban sínodo, sóloparticipaban los clérigos con su obis-po. Después del Concilio, y especial-mente una vez promulgado el Códigoactual, el sínodo diocesano ha pasadoa ser «una asamblea de sacerdotes yde otros fieles escogidos de una Igle-sia particular, que prestan su ayuda alobispo de la diócesis para bien de to-da la comunidad diocesana», confor-me a lo allí establecido (can. 460).Desde entonces, los laicos, los reli-giosos laicales y las consagradas queparticipen en las sesiones sinodalestienen el mismo voto consultivo quelos presbíteros a la hora de que el obis-po, el único legislador en el sínododiocesano, suscriba las declaraciones

y decretos del sínodo, que pueden pu-blicarse sólo en virtud de su autoridad(can. 466).

Hasta el Concilio Vaticano II, lossínodos venían preparados por comi-siones de sacerdotes con documentosya hechos, que se presentaban y seaprobaban en muy pocos días. Encambio, después del Concilio los sí-nodos duran, desde su convocatoriaen la que ya empieza el trabajo hastasu clausura, como mínimo, dos o tresaños, y en algunos casos hasta seis osiete; la preparación de los cuestio-narios para una consulta a toda la dió-cesis necesita largo tiempo y la reali-zan comisiones preparatorias integra-das por una amplia representación depersonas e instituciones del pueblo deDios en cada Iglesia diocesana. Lasrespuestas a esa consulta originarán asu vez los documentos abiertos, quese llevarán a las sesiones sinodales,

celebradas generalmente en fines desemana también durante varios me-ses. En ellas se debaten y se incorpo-ran sugerencias nuevas y enmiendasy, en su caso, se votan –con voto con-sultivo– para ser sometidas al final a laaprobación, si procede, del obispo dio-cesano. No podrían ser decretos y de-claraciones sinodales si no estuvieranaprobadas por el obispo, pero tampo-co lo serían aquellos textos que no ha-yan sido aprobados en el sínodo deforma reglamentaria. Esto muestra có-mo obispo y sínodo están imbricadosmutuamente. Sin obispo no habría sí-nodo, pero tampoco sin sinodales.

Sínodos celebrados

Ordenados por año de la aproba-ción de las constituciones, y según lanumeración (en muchos casos ciertay en algunos probable) en la respec-tiva diócesis estos han sido los Sínodoscelebrados:

1973, VII de Sevilla, llamado Hispalense, cardenal BuenoMonreal.

1986, XXIII de Zaragoza, arzo-bispo Yanes.

1987, XL de Valencia, arzobispoRoca.

1988, II de Santander, obispodel Val.

1988, XXVII de Tortosa, obispoCarles.

1989, XXXIV de Pamplona, ar-zobispo Cirarda.

En portada Alfa y Omega 21-II-2002 3

Sínodos diocesanos:una fiesta de la fe

Es un hecho comprobable que las diócesis que han celebradosínodo se han sentido agraciadas, y por eso felices y contentas,del trabajo y esfuerzo que les ha supuesto, incluso cuando ha

durado mucho tiempo, porque todos, más que mirarse de frente,han mirado en la misma dirección, han caminado juntos (que eso

significa sínodo) y han vivido, con la gracia del Espíritu, unaexperiencia eclesial singular, en Cristo Jesús, para respondergenerosa y fielmente a las llamadas de Dios y a las exigencias

de la nueva evangelización en este nuevo tiempo

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1989, XI de Salamanca, obispoRubio Repullés.

1990, III de Granada, arzobispoMéndez y su coadjutor Sebastián.

1991, XXV de Toledo, cardenalGonzález Martín.

1992, IX de Canarias, obispoEcharren.

1992, XV de Badajoz, llamadoPacense, obispo Montero.

1995, XXI de León, obispo Vi-laplana.

1996, XI de Osma-Soria, con-vocado por el obispo Rodríguez Plaza,concluido por el obispo Pérez Gonzá-lez.

1998, VIII de Ávila convocadopor el obispo Cañizares, concluido porel obispo González Montes.

1998, XXIII de Burgos, arzobis-po Martínez Acebes.

1998, I de Tenerife, obispo Fer-nández García.

1999, IV de Almería, obispo Ál-varez Gastón.

2000, IX de Cádiz y Ceuta, obis-po Ceballos.

2001, XVIII de Mallorca, obispoÚbeda.

En tres diócesis más están convo-cados sus respectivos sínodos y en dis-tintas fases de desarrollo: por el obis-po Búa, el XXXII de Calahorra y LaCalzada-Logroño, desde 1999; por elobispo López Hernández, el X de Pla-sencia, a partir de 2001; y, reciente-mente, por el cardenal Rouco, el IIIde Madrid, desde la Epifanía de 2002.

En esta lista, estadística y crono-lógica, destaca la archidiócesis de Se-villa como la primera que celebró sí-nodo diocesano, tan sólo ocho años

después de la terminación del Conci-lio y trece años antes de que comen-zara la serie, ya continuada, de las dió-cesis que le han seguido en la mismaexperiencia.

El Sínodo de la diócesis de Teneri-fe es el primero en su historia, desdeque fue erigida en 1819, separada de lade Canarias.

La diócesis de Tortosa es la únicaen España que en estos años ha cele-brado sínodo diocesano y también haparticipado en un concilio provincial.

La última Iglesia particular en laque se ha convocado sínodo, Madrid,de un poco más de un siglo de vida,ya va por su tercer sínodo (los otrosfueron en 1909 y 1948), y así ha al-canzado a diócesis de tanta solera co-mo Burgos, que desde el siglo XVI nohabía celebrado sínodo más que en

1905; Calahorra, que desde 1698 ce-lebró otro también en 1905; León, des-de 1893; Pamplona, que desde 1815celebró sínodo en 1958; Toledo, quedesde 1682 (a la que pertenecía Ma-drid) sólo había celebrado otro en1941; Tortosa, desde 1696; Valencia,que desde 1687 celebró el anterior en1952; y Zaragoza, que desde el ante-penúltimo de 1698 celebró el penúl-timo en 1943.

Concilios provincialesy otras asambleas

Las cinco diócesis de la provinciaeclesiástica de Santiago de Compos-tela celebraron concilio provincial,concluido en 1982, y las siete de laprovincia eclesiástica tarraconense,más el Arzobispado de Barcelona, en1995; trece en total. En algunas de es-tas diócesis hubo después asambleaspara aplicar las determinaciones delconcilio provincial. Además, en otrasIglesias particulares se han organiza-do y desarrollado asambleas con cier-ta metodología sinodal, aunque, con-forme a derecho, no son propiamentesínodos. Por supuesto, en todas lasdiócesis de la Iglesia en España se hanorganizado otras asambleas y reunio-nes diocesanas para afrontar las res-ponsabilidades pastorales en la evan-gelización y en nuestro tiempo, tantocon motivo de la elaboración de losplanes diocesanos de pastoral –paracada trienio, cuatrienio o lustro, mu-chas veces en conformidad con losplanes de acción pastoral de la Con-ferencia Episcopal a partir de 1983–,como con la oportunidad de la prepa-ración y celebración del Jubileo delaño 2000.

Participación sinodal

Los hechos, en este caso, ilustranlos derechos. Por ejemplo, en los re-cientes sínodos tomaron parte comosinodales: 227 en Toledo, 247 en Gra-nada, 284 en Tortosa, 301 en Cádiz,347 en Burgos, 468 en el Pacense, 488en Valencia, 556 en Canarias y 580

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en Zaragoza. Con la siguiente pro-porción: en el de Zaragoza, 105 sa-cerdotes, 29 religiosos, 49 religiosas y394 seglares; en el de Valencia (3 obis-pos), 212 sacerdotes, 81 religiosos yreligiosas y 192 laicos; en el Pacen-se, 174 sacerdotes, 60 religiosos y re-ligiosas y 324 laicos; en el de Grana-da, 78 sacerdotes, 28 religiosos, 30 re-ligiosas y 111 seglares; en el de Tor-tosa, 84 sacerdotes, 14 religiosos yreligiosas y 186 laicos; y, en el de To-ledo, 124 sacerdotes, 5 religiosos, 24religiosas y 97 seglares.

Entre los sinodales hay algunos queson natos, otros designados por elobispo y muchos elegidos en la for-ma que establece el Derecho y quepuede, en algunos casos, concretar elobispo diocesano; pero no son com-promisarios de nadie, aunque proven-gan de la elección de algún grupo, si-no que, en el sínodo, todos y cada unoa quien representan con el obispo esa toda la Iglesia diocesana.

Previamente, en todos los sínodosdel postconcilio, durante la fase pre-paratoria y en la consulta a toda ladiócesis, tomaron parte, en gruposestablecidos en las parroquias o de-pendientes directamente de la Secre-taría General, numerosos fieles cris-tianos, cuantos lo desearon confor-me al reglamento establecido. Porejemplo, en diócesis de población co-mo Salamanca se constituyeron 300grupos, en Canarias 700, y en dióce-sis como Burgos, Cádiz, Granada,Valencia o Zaragoza hasta 1.000 ymás grupos. Cada uno de éstos se es-tablecía con un número de personasentre diez, como mínimo, y treintade máximo, aunque también hubo ex-cepciones en algunos integrados has-ta por cincuenta. De esta forma, encada una de estas diócesis, han supe-rado la cifra de diez mil las personasque tomaron parte activa en los gru-pos de consulta y en la elaboraciónde la primera redacción de sugeren-cias y propuestas, y, en algunas, has-ta más de veinte mil. Hasta ahoramismo la vivencia de un sínodo hallegado a más de doscientos mil ca-

tólicos de toda edad y estado, voca-ción, profesión y misión que han par-ticipado directamente en ellos. Entreinta años, pues, la experiencia si-nodal postconciliar ha llegado a máspersonas, en sólo esas diócesis de laIglesia en España, que en cuatro si-glos desde el Concilio de Trento entoda España.

Declaraciones y decretos

El Código actual habla de Decla-raciones y decretos del sínodo dioce-sano, aprobadas por el obispo. No obs-tante, en la redacción última de algu-nos sínodos, a esas declaraciones ydecretos se les denomina con el tér-mino –por otra parte tradicional en la

historia de los sínodos– de Constitu-ciones sinodales, y ésta es la formu-lación más común, aunque, en otros, aesas conclusiones del Sínodo aproba-das se las ha puesto bajo el título de:Disposiciones, Propuestas, Compro-misos, Exigencias, Documentos sino-dales y propuestas operativas, etc.

De las Constituciones sinodalesque he podido consultar en la Confe-rencia Episcopal Española, pues «elobispo diocesano ha de trasladar eltexto de las declaraciones y decretossinodales al Metropolitano y a la Con-ferencia Episcopal» (can. 467), la ma-yoría de estos sínodos encierran susrespectivas declaraciones y decretosen cinco o seis Constituciones sino-dales, en algunos hasta diez, que con-tienen disposiciones o propuestas engran número, desde las 126 en Sala-manca, 139 en Cádiz, 216 en Sevilla,229 en Badajoz, 257 en Tortosa, 289en Ávila, y las 416 en Burgos ó 444en León, hasta las 740 en Canarias,855 en Valencia, 1.091 en Toledo ó1.356 en Granada.

Líneas convergentes

Llama la atención –porque, másacá de los números y más allá de losparticipantes, la experiencia sinodalrealizada siempre en un ámbito cele-brativo cuenta con los dones del Es-píritu Santo– la convergencia que, denorte a sur y de este a oeste, aparece entodos estos sínodos en unas líneas defuerza, que no anulan, sino que po-tencian las singularidades.

La palabra más repetida en todosellos es la evangelización, con la re-ferencia fundamental a la Evangeliinuntiandi de Pablo VI, en 1975, y ala reiterada convocatoria a la nuevaevangelización del Papa Juan Pablo IIdesde 1983. Por contraste con los sí-nodos anteriores al Concilio, que seceñían a la normativa eclesial y a laactividad pastoral, proveniente del hi-to que supuso en la Iglesia la reformadel Concilio de Trento, estos sínodos,marcados todos con el cuño del Vati-cano II, miran a la misión de la Iglesia

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y no sólo se fijan en la actitud pastoral,de los que están y de los que son, sinotambién a la actividad misionera yevangelizadora hacia los que son pero,por diferentes causas, no están, y a losque tampoco han estado nunca. Es de-cir, abordan la secularización externaen la sociedad e interna dentro de lamisma Iglesia, la escasez de vocacio-nes consagradas y al sacerdocio mi-nisterial, la participación de los laicosen la vida de la Iglesia y su presencia,precisamente, en los ambientes dondeviven y trabajan y no solamente en laparroquia o en los movimientos a losque pertenecen. Aparece también lapreocupación por el diálogo entre lafe y la cultura, tanto en ambientes in-telectuales como en los medios de co-municación.

Una de las consideraciones queocupa buena dedicación sinodal es lafamilia en su situación actual y susposibilidades de educación en la fe.En todos ellos se contempla a los ni-ños, adolescentes y jóvenes de la ge-neración sinodal, para tratar de ana-lizar su situación, programar las acti-vidades pastorales especiales paraellos y con ellos, e incluso suscitarnuevas vocaciones de especial consa-gración. En ninguno falta la conside-ración, y amplia, sobre la atención ca-ritativa y social de la Iglesia ante lasnuevas pobrezas.

Se aprecia en todos ellos un es-fuerzo enorme de creatividad. Así co-mo los sínodos desde el siglo XVI alXX, por decirlo de un trazo, se limi-taban a repetir las claves doctrinales ydisciplinares de Trento, los postconci-liares del Vaticano II, inspirándose ensu espíritu pastoral, tratan de suscitarcon imaginación, en la propia Iglesiaparticular, un movimiento de auténticaconversión en todas las personas que laintegran, en orden a avizorar los re-cursos y las potencialidades para elanuncio del Evangelio y la transmi-sión de la fe. Ya desde el principio, elprimer capítulo o introducción en cadauno de ellos es como una conciencia-ción comunitaria sobre la situación dela diócesis, como un examen de con-ciencia o revisión de vida eclesial, en

En portadaAlfa y Omega6 21-II-2002

El esquema más común de un Sínodo mira al triple mi-nisterio y función eclesial: la Palabra y la catequesis,

culto y de la santificación, y la atención del cuidado pastoralcon una significación especial en la caridad. Éstos son lostítulos de las Constituciones sinodales –o capítulos prin-cipales–, en que se agrupan las diferentes disposiciones:

Sevilla: Exigencias (evangelización, educación inte-gral, liturgia, acción temporal), personas (ministerio je-rárquico, vida religiosa, laicado, unidad y corresponsa-bilidad), estructuras (ámbitos territoriales, organismosdiocesanos), recursos (bienes materiales, recursos y ne-cesidades, gestión administrativa).

Zaragoza: Una Iglesia comunión, comunidad res-ponsable, evangelizadora y misionera, campos o áreas deevangelización (niños, juventud, matrimonio y familia,marginados, pastoral rural, sanitaria), sacramentos y evan-gelización.

Valencia: Iglesia de Dios, escucha y proclama la Pa-labra, celebra el misterio de Cristo, sirve con amor a loshermanos.

Santander: La Iglesia anuncia y evangeliza en la me-dida que es Iglesia de comunión y mira a todas las Iglesiasy al mundo, catequesis, presencia militante de los cristia-nos en las estructuras, la parroquia como centro evange-lizador, la Iglesia expresa el amor a todos los hombrescon preferencia a los más pobres, educación y enseñanza,convivencia social y política, matrimonio y familia, laIglesia vive desde lo que ella misma es, la Iglesia procla-ma, anuncia y celebra el Evangelio, dialoga con el mundo,tiene preocupación especial por la juventud.

Tortosa: Iglesia, pueblo de profetas, pueblo sacerdotal,pueblo de servidores, pueblo establecido como una so-ciedad.

Pamplona: Somos comunidad de los seguidores deJesucristo en la sociedad navarra actual en comunión contoda la Iglesia, queremos ser mensajeros de la esperanzacomo comunidad que escucha y anuncia la Buena Noticia,pueblo que vive la alegría de la liberación como comu-nidad que celebra la fe, Iglesia de Jesucristo que testimo-nia el amor, comunidad comprometida con los problemasy esperanzas de nuestro mundo, comunidad toda ella al ser-vicio de los hombres y mujeres de hoy con planes con-juntos y con ministerios y servicios específicos y corres-ponsables.

Salamanca: Iglesia de Dios, Iglesia que anuncia elEvangelio, que celebra los sacramentos, que da testimo-nio del amor cristiano.

Granada: Urgencia y amplitud de nuestra renova-ción, el ministerio de la Palabra, celebración del miste-rio de Cristo, el servicio del amor fraterno, el pueblo deDios: las personas, instituciones eclesiales, comunión y ca-tolicidad de la Iglesia.

Toledo: Iglesia diocesana: personas e instituciones,misión profética de la Iglesia: anunciar a Jesucristo con lapalabra y con las obras, la Iglesia que celebra y vive losmisterios de su fe, la Iglesia diocesana en su expresiónde caridad.

Canarias: Iglesia, misterio de comunión, enviada porel Señor a evangelizar, la misión y la comunión en el tri-ple ministerio.

Badajoz: Anunciar la Palabra, celebrar la fe, vivir encomunión, servir a los hombres.

Ávila: La evangelización, los misterios de la fe, laevangelización de la juventud, la evangelización de la fa-milia, las formas de presencia evangelizadora de los cris-tianos en la sociedad.

León: Iglesia evangelizadora, Iglesia pueblo de Dios,Iglesia y sociedad.

Osma-Soria: Evangelización, celebración, misión dela Iglesia en el mundo, comunión eclesial.1

Burgos: Ser hoy buena noticia para todos, Iglesia sa-maritana y solidaria, comunidad diocesana en camino,celebramos el misterio de la fe.

Tenerife: Iglesia de Tenerife, ¿qué dices de ti misma?identidad cristiana: quién es un fiel cristiano y formas deexistencia cristiana, fundamento, exigencias y expresionesde la comunión eclesial, el anuncio de Cristo y su mensaje,el servicio eclesial a los pobres y el compromiso cristianoen la vida pública, la celebración del misterio de Cristo:fuente y cumbre de la existencia cristiana, la piedad po-pular, respuesta pastoral al desafío de las sectas, la fami-lia, comunidad evangelizada y evangelizadora, laIglesia y los jóvenes.

Almería: la Iglesia del Señor que está en Al-mería (el pueblo de Dios, estructuras diocesa-nas, comunión y responsabilidad), la Iglesia con-vocada por la Palabra de Dios, celebra los mis-terios de Cristo, la pastoral caritativa y social enuna Iglesia evangelizadora.

Cádiz y Ceuta: La Iglesia y los pobres, laevangelización de los alejados, la promoción delos laicos, la evangelización de los jóvenes, lacelebración de la fe y la pastoral de los sacra-mentos, la evangelización de la religiosidad po-pular.

Mallorca: La Iglesia enviada al mundo, pe-regrina en Mallorca en el umbral del siglo XXI,la Iglesia que anuncia el Evangelio, que celebrala salvación en Jesucristo, comunión de creyen-tes en Cristo: el laicado, la familia, los ministe-rios ordenados, la vida consagrada, la Iglesiaservidora y fraterna, evangelizadora de los po-bres, la Iglesia católica de Mallorca, abierta alas otras Iglesias, misionera y acogedora.

Esquema de los sínodos

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orden a clarificar la tensión entre loque es la Iglesia en... y se coloca siem-pre el nombre de la respectiva diócesis,y lo que habría de ser.

Los frutos

En las diócesis que han celebradosínodo, tanto durante su preparacióncomo en el tiempo de su celebración y,después, en la recepción del sínodo,que es fase principalísima para queéste no se quede en la biblioteca o elarchivo, sino que pase a la vida capilarde toda la Iglesia diocesana, han va-lorado con gozo todos estos y todavíamás frutos:

La constatación sobre la situa-ción de la Iglesia particular como unatoma de conciencia comunitaria, defe y no sólo sociológica. Un examensobre la situación a la vez que un exa-men de conciencia personal y comu-nitario.

La experiencia gozosa en ámbi-to de celebración y oración, tanto enlas celebraciones comunitarias dioce-sanas como en los grupos pequeñosde participantes, para confrontarsesiempre con la Palabra de Dios, el Ma-gisterio de la Iglesia, significativa-mente con el Concilio Vaticano II yla rica tradición eclesial de la propiadiócesis.

El aumento del sentido de per-tenencia eclesial en los participantes yen la misma diócesis de la que fluye elsínodo, y refluye después otra vez enella con las gracias recibidas de Diosa través también de todos los miem-bros de la Iglesia, laicos, consagrados,diáconos, presbíteros y obispo.

La ocasión de mayor comuniónentre parroquias y arciprestazgos y de

mejor comunión entre estas realida-des e instituciones pastorales y los mo-vimientos, asociaciones y comunida-des eclesiales que también participanen las tareas del sínodo.

Los encuentros generales de to-da la comunidad diocesana donde to-dos se ven, se hablan y escuchan, y sesienten gozosos de ser y vivir en laIglesia particular.

El crecimiento en la actitud dediálogo a través de las distintas fases ygrupos mirando todos el bien de laIglesia para servir a Jesucristo, el Se-ñor, en la situación que atraviesa ladiócesis.

La asimilación de un lenguajecomún que haga más fácil la com-prensión de las distintas actitudes den-tro del seno eclesial.

El compartir criterios en la pas-toral que deshagan diferencias y ten-siones en distintos ámbitos de la evan-gelización y de la misión de cada fiely de todas las instituciones de la dió-cesis.

La incorporación de nuevas per-sonas a la misión de la Iglesia dioce-sana según su propia vocación, pro-fesión y estado, es decir, una mayorasunción de responsabilidades de loslaicos, consagrados y sacerdotes en lacomunión de la Iglesia diocesanaabierta a la Iglesia universal.

La aplicación del Concilio Va-ticano II a la situación de cada Igle-sia particular con documentos propiosque marcan las orientaciones y las di-rectrices para el próximo futuro.

Joaquín Martín AbadVicario Episcopal

para la Vida Consagrada. Madrid

En portada Alfa y Omega 21-II-2002 7

Los cristianos laicos son Iglesia

La expresión somos Iglesia, que en sí mismapodría y debería ser afirmación consciente de

pertenencia al Cuerpo místico de Cristo, está co-brando, en nuestros días, acordes inquietantes enel lenguaje eclesial. Utilizada como nombre propiopor un movimiento contestatario, se tiene la im-presión de que, en ciertos ambientes, se está des-lizando a una pretensión de exclusividad, casi co-mo si se estuviera diciendo somos la Iglesia. Com-prendo que esta interpretación mía de la fórmulapuede incluso suscitar reacciones de indignación enquienes simpatizan con ese movimiento. Pero creoque el problema es real.

Ya el modo con que, a veces, se ha leído laConstitución dogmática Lumen gentium del Con-cilio Vaticano II no ha estado carente de ciertosequívocos. Concretamente, como señaló el Síno-do extraordinario de 1985, se ha tenido la tentaciónde interpretar el tema de la Iglesia como Pueblode Dios de su capítulo 2 en un sentido sociológico,olvidando que la Iglesia es, ante todo, un miste-rio de comunión, que, al hablar de Pueblo de Dios,se hace referencia a un pueblo estructurado y queno es lícito confundir simplemente la realidad en-globante del Pueblo de Dios, que es la Iglesia, conlos cristianos seglares que constituyen una parte deél. La intención del Concilio fue anteponer en el ca-pítulo 2 lo que es común a todos los miembros dela Iglesia, para pasar después a lo que es propio

de categorías específicas dentro de ella: jerarquía(capítulo 3) y seglares (capítulo 4), para retomar laperspectiva de universalidad eclesial al abordar,en el capítulo 5, el tema de la vocación de todos enla Iglesia a la santidad, vocación tanto de los quepertenecen a la jerarquía como de los seglares.

La apelación a que somos Iglesia en los am-bientes a los que aludo, se hace sugiriendo que lajerarquía no puede tomar decisiones sin contarcon la base que también es Iglesia, con la secretaesperanza de que una minoría organizada y rui-dosa, potenciada por los altavoces de los medios,puede, en la práctica, pesar como si fuera mayoría.

Sin embargo, los posibles abusos de una fór-mula correcta no deben en modo alguno invalidarsu verdadero sentido. Mucho menos cuando apli-cada a los cristianos seglares ha significado unprogreso en la conciencia eclesial; y menos aúncuando se trata de una fórmula consagrada por eluso de los Papas.

En efecto, uno de los fenómenos más positivosde la historia de la Iglesia en el siglo XX consiste enlos jalones que marcan una creciente conciencia, porparte de los seglares, de la necesidad de superar unainterpretación de su papel en la vida eclesial como pa-sivo. El magisterio papal, antes y después del ConcilioVaticano II, los exhortó incansablemente a ello. Adistancia de algo más de 50 años, estas palabras de PíoXII, con las que afirma que los cristianos seglares

«deben tener conciencia, cada vez más clara, no só-lo de pertenecer a la Iglesia, sino de ser Iglesia» con-servan toda su frescura y actualidad. Naturalmente,porque no se trata de un ser en exclusividad como sisólo ellos lo fueran. La vocación seglar, como cual-quier otra vocación en la Iglesia, tiene que vivirse encomunión con todos aquellos que son sujeto de lasotras vocaciones que se dan en ella: la vocación alministerio ordenado y la vocación a la vida consa-grada. Sólo esta armonía contribuye al buen ser de laIglesia.

Poseyendo el sacerdocio regio que todo cristia-no recibe en el bautismo y cuya finalidad es «ofrecervíctimas espirituales aceptables a Dios por Jesucris-to» (1 Pe 2, 5), participando con la totalidad del Pue-blo de Dios del carisma de infalibilidad en la propiafe, la cual ha de ser continuamente meditada y pro-fundizada (cf. Lumen gentium, 12; Dei Verbum, 8),los cristianos seglares no olvidarán ulteriormente que«se encuentran en la línea más avanzada de la vida dela Iglesia; por ellos la Iglesia es el principio vital dela sociedad humana»(Pío XII). Son ellos quienespueden contribuir «a la santificación del mundo co-mo desde dentro, a modo de fermento» (Lumen Gen-tium, 31). Sin ellos, la misión que Jesús confió a suIglesia sería irrealizable.

Cándido Pozo S.I.

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El dibujante Giannelli lo ha resumido inme-jorablemente en la viñeta que ha publicadoen el diario italiano Corriere della Sera, yque aquí reproducimos: ¡Fuera máscaras!,y, al quitársela Milosevic, no se ve otra cosaque la realidad de la muerte. La muerte vio-lenta, el asesinato, de cada ser humano, notiene justificación alguna; no digamos el ge-nocidio. Impresiona esa otra foto de una jo-ven viuda en el cementerio de Sarajevo.Más de 11.000 fueron las víctimas en la ca-pital de Bosnia, entre 1992 y 1995. Impre-siona no menos esa otra foto de la señoraviuda, superviviente de la masacre de Sre-brenica, que, avergonzada y doliente, ni mi-ra siquiera a la televisión en la que el ge-nocida Milosevic trata de justificar lo injusti-ficable.

La otra foto la publicó ABC el jueves 14 defebrero, y también impresiona lo suyo. Enella se ve al hoy catedrático Francisco Le-tamendía, tristemente de actualidad por elintolerable asunto de la cátedra de CienciaPolítica arrebatada a doña Edurne Uriarte,en la Universidad del País Vasco; se le ve enuna imagen de archivo de 1978, cuando,puño cerrado en alto, defendía la alternati-va KAS, en el Congreso de los Diputados.Son de señalar, de manera especial, las ca-ras del entonces Presidente del Congreso yde los dos conserjes que lo flanquean, es-pecialmente el de la izquierda. Son carasque lo dicen todo. ¿Es tolerable aprove-charse de la democracia para destruirla?

La fotoAlfa y Omega8 21-II-2002

¡Máscaras fuera!

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Juntarse para hablar y para vivir esuna exigencia radical de los sereshumanos. No hemos nacido para

estar solos, sino para ser un pueblo.Eso justamente es la razón de ser de laIglesia (ekklesia se traduce asamblea),la familia, el pueblo de los hijos deDios. Un pueblo formado de todos lospueblos, que estamos en camino, conla provisionalidad del peregrino, pe-ro inconmovibles en la unidad. Poreso un sínodo, cuyo significado es ha-cer juntos el camino, forma parte de lomás hondo de la vida de la Iglesia.

El Papa Juan Pablo II acaba de cre-ar en Rusia cuatro nuevas diócesis.Hasta ahora sólo tenían rango de Ad-ministraciones apostólicas, y estable-cer en aquel inmenso territorio la nor-malidad eclesial, tras décadas de pa-ciente espera, ha provocado un fuerterechazo en los ortodoxos. Son los ava-tares del camino, pero la Iglesia, es-parcida por toda la tierra, y viviendo encada lugar como el peregrino que seadapta a toda situación, no puede de-jar de caminar hacia la Patria definiti-va, con la certeza, al mismo tiempo,de que su vida es verdadera riquezapara toda la Humanidad.

«Los cristianos –dice la preciosaCarta a Diogneto, del siglo II– no sedistinguen de los demás hombres, nipor el lugar en que viven, ni por sulenguaje, ni por su modo de vida. Vi-ven en ciudades griegas y bárbaras,según les cupo en suerte, siguen lascostumbres de los habitantes del país, tanto en el vestir como en todo suestilo de vida y, sin embargo, danmuestras de un tenor de vida admira-ble y, a juicio de todos, increíble. Ha-bitan en su propia patria, pero comoforasteros; toman parte en todo comociudadanos, pero lo soportan todo co-mo extranjeros; todo tierra extraña espatria para ellos, pero están en todapatria como en tierra extraña. Igualque todos, se casan y engendran hi-jos, pero no se deshacen de los hijos

que conciben. Tienen la mesa en co-mún, pero no el lecho. Viven en la car-ne, pero no según la carne... Para de-cirlo en pocas palabras: los cristianosson en el mundo lo que el alma es en elcuerpo». De este modo, a lo largo dedos milenios se ha ido humanizandoEspaña, el resto de Europa, y Rusiaha celebrado ya hace años su primermilenio cristiano, mirando con espe-ranza la evangelización de su inmen-so territorio, donde los católicos de-portados por Stalin, en medio de per-secuciones terribles, han mantenido

la fe cristiana, y con ello la posibili-dad de una humanidad verdadera.

Todo esto, sin duda, contrasta conese hecho del que tanto hablan estosdías los medios de comunicación, apropósito de la niña marroquí que, pa-ra ir a clase aquí, en España, no quie-re renunciar al velo que cubre su ca-beza. Se han dicho muchas cosas, yno todas razonables, ciertamente. En-tre las discusiones sobre la diferenciade culturas y la necesaria adaptaciónde los inmigrantes a las costumbres ynormas del país que los acoge, llama laatención la muy reveladora insisten-cia en rechazar el polémico velo por-que «es un signo de discriminacióncontra la mujer», porque se vulnera el«derecho universal a la igualdad en-

tre hombres y mujeres»... Es decir, hayque discriminar ¡en nombre de la nodiscriminación! Pese a la dosis decomprensión, de humanidad, que, gra-cias a Dios, sigue generando entre no-sotros la fe cristiana, ha quedado sinembargo en evidencia ese tic de la cul-tura dominante en nuestro mundo ci-vilizado y tolerante, que «filtra el mos-quito y se traga el camello», según lamáxima evangélica que tan gráfica-mente retrata a los fariseos. No se pue-den aceptar símbolos discriminatorioscomo éste del velo –se ha dicho– «porel bien de la niña». Bien está que sequiera defender la dignidad de la mu-jer, pero convendría recordar que elbien no se impone, se propone, y queresulta obligado preguntarse cuálesson los símbolos alternativos de nues-tras sociedades avanzadas: ¿la mira-da limpia, o el botellón?; ¿el amor ver-dadero, o la promiscuidad sexual y elderecho al aborto?

Va siendo hora de que los hijos dela Iglesia recuperemos esa humanidadnueva que genera la fe cristiana, paravivirla más plenamente en la etapa delcamino en la que estamos, llena de in-certidumbres para el mundo, pero lle-na de luz y de esperanza para cuantosno peregrinamos solos. Esto es un sí-nodo. A muchos quizás les suene aaburrimiento y aguafiestas. Nada máslejos de la realidad; se trata de una au-téntica fiesta, la fiesta de la fe, que estodo lo contrario de la permanente einútil lamentación.

Hay muchos motivos por los queluchar y caminar juntos, pero es mejorsiempre luchar por algo que contra al-go. Como acaba de interpelar en Fran-cia Noel Copin, «¿por qué, en lugarde preguntarnos cómo nos ven los de-más, no nos preguntamos cómo losvemos nosotros a ellos?; y ¿por qué, envez de preocuparnos tanto por si nosquieren o dejan de querer, no nos pre-guntamos si queremos nosotros y có-mo queremos?»

Criterios Alfa y Omega 21-II-2002 9

Díaspenitenciales

Todos los fieles, cada uno a sumodo, están obligados por ley

divina a hacer penitencia; sin em-bargo, para que todos se unan enalguna práctica común de peniten-cia, se han fijado unos días peni-tenciales, en los que se dediquenlos fieles de manera especial a laoración, realicen obras de piedad yde caridad y se nieguen a sí mis-mos, cumpliendo con mayor fide-lidad sus propias obligaciones y, so-bre todo, observando el ayuno y laabstinencia, a tenor de los cánonesque siguen.

En la Iglesia universal, son dí-as y tiempos penitenciales todos losviernes del año y el tiempo de Cua-resma.

Todos los viernes, a no ser quecoincidan con una solemnidad, de-be guardarse la abstinencia de car-ne o de otro alimento que haya de-terminado la Conferencia Episco-pal; ayuno y abstinencia se guarda-ran el Miércoles de Ceniza y elViernes Santo.

La Ley de la abstinencia obli-ga a los que han cumplido catorceaños; la del ayuno, a todos los ma-yores de edad, hasta que hayancumplido cincuenta y nueve años.Cuiden, sin embargo, los pastoresde almas y los padres de que tam-bién se formen en un auténtico es-píritu de penitencia quienes, por nohaber alcanzado la edad, no estánobligados al ayuno o a la abstinen-cia.

La Conferencia Episcopalpuede determinar con más detalleel modo de observar el ayuno y laabstinencia, así como sustituirlosen todo o en parte por otras formasde caridad y prácticas de piedad.

Código de Derecho Canónico, can 1249-1253

ΑΩ Un pueblo en camino

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Enseñanza,mi problema

Los últimos acontecimientos en el mundo es-tudiantil me dejan boquiabierto. No sólo me

resulta sorprendente observar por los medios decomunicación lo que ocurre, sino que tambiénvivo alguno de ellos y me apeno.

Primero fue la LOU. Asistí a un par de ma-nifestaciones, para luego darme cuenta, porotras fuentes, de que estaba en un error. Dehecho, dejé de participar en las actividadesdel sindicato y fui muy criticado por ello an-te y por mis compañeros de universidad.Creo que perdí el punto de partida: los sin-dicatos están entre otras cosas para denun-ciar los abusos y reivindicar la calidad de laenseñanza, pues es nuestro derecho. Y me-jor no hablar de los partidos políticos quebasan su campaña mediática en la defensade lo irracional. Hacer política de esto nocumple con ninguna función social y menosrepresentativa.

Ahora es la revalida. Sevilla deja de ser unamaravilla. La generación que me sigue tieneun problema que también a mí me compete. Yotra vez esos partidos lo convierten en argu-mento político para hacer campaña. Dejemos

claro que ellos cometieron el error que estánpagando ahora mis hermanos pequeños. Pue-de que la lectura fuera del horario escolar me-jore su capacidad de abstracción. Porque me hedado cuenta de que, a más educación, máscapacidad crítica.

Tomás Azcona Lequericacorreo electrónico

Confianza ciega

La Agrupación de Telespectadores y Radio-yentes (ATR), haciéndose eco de un gran

número de Asociaciones de espectadores, ma-nifiesta su protesta más enérgica por el pro-grama Confianza ciega, de Antena 3 de tele-visión, que tiene como objetivo en juego la po-sible seducción de parejas. Entre los partici-pantes existen cotilleos y, desde su inicio, en elprograma se han producido diferencias y ten-siones. ATR considera inmoral la dinámica delprograma al tentar el valor de la fidelidad, pro-vocando morbo entre los telespectadores, ydenuncia que este programa es un atentadocontra la intimidad.

Agrupación de Telespectadores y Radioyentes

CartasAlfa y Omega10 21-II-2002

Las cartas dirigidas a esta sección deberán ir firmadas y con DNI, y tener una extensión máxima de 20 líneas. Alfa y Omega se reserva el derecho de resumir su contenido

El botellón

Me llamo Carlos y soy uno de esos jó-venes de la generación del botellón.

Os pregunto: ¿y por qué no? Por supuestoes mucho más divertido. Quizás algunome diréis aquello de que es posible di-vertirse a tope sin drogas, de acuerdo: atope, pero ¿por qué sin drogas?; ¿pen-sáis que soy un superficial y que la vida esmás que pasárselo bien? Estupendo, pe-ro siembra vientos y... ¿Me habéis ense-ñado vosotros a pensar? ¿O más bien mehabéis llenado de clases de informática, in-glés, contabilidad, judo, guitarra y una lis-ta interminable de cosas imprescindiblespara ser alguien en la vida, al tiempo queme robábais las clases de filosofía, reli-gión y ética por ser inútiles?; pues ¿sirveel bien, la verdad o Dios para tener unbuen futuro, como decís vosotros, es de-cir, pasta y nivel de vida?

Gracias a Dios yo conocí una maneradiferente de vivir a tope –también la mar-cha del fin de semana–, y no consiste enir a jugar al fútbol en polideportivos noc-turnos, sino en una razón que da sentidoa mi vida, que me llena de alegría tantoel viernes como el lunes cuando voy a cla-se. Pero mi secreto no es políticamentecorrecto y no prosperará tan fácilmente,porque no se consigue con ningún pro-grama social que consista en cambiar elbotellón de cerveza por otro de horchata,sino que supone una revolución radical–cultural, educativa y, sobre todo, espiri-tual–, y ¡no es para tanto!, porque Españava bien, ¿verdad?

Carlos Ruiz SáizMadrid

Familia

La Asociación Institución familiarha hecho acopio de algunas re-

flexiones emitidas por diversas fa-milias, que ha enviado a la Conse-jería de Asuntos Sociales de la Co-munidad de Madrid, con motivo delanteproyecto de ley de protección ala familia, y como preparación a lapróxima Jornada de trabajo.

España es un Estado democráti-co, laico y aconfesional. En las se-ñas de identidad de un Estado de-mocrático figura: «Acoger la voluntadde la mayoría, sin despreciar a lasminorías, ni la mayoría de las volun-tades». El Estado laico y confesio-nal no se identifica con Estado ateo,sino que acoge todas las confesio-nes. Las familias cristianas, en nú-mero, somos mayoría y, sin embar-go, nuestra voluntad se ve atacadapor las leyes vigentes, y no goza de la difusión y la acogida debida, por parte del poder es-tablecido, que «ampara más a la minoría, que acoge a la mayoría». Las familias cristianasen el trato y en la opinión nos sentimos injustamente marginadas, con una violación clara denuestros derechos, que dificulta la vida de la familia y la educación de nuestros hijos.

Las familias cristianas queremos ser consideradas, sin que nuestro apellido, nos margi-ne de la opinión pública y de los medios de comunicación. La condición de cristianos no esalgo sólo religioso, que se pueda limitar a la vida privada y a la iglesia, si no que, inevita-blemente, informa la vida de los ciudadanos, desde la mañana a la noche, y hemos de su-frir los agravios sociales, con los que de forma desproporcionada e injusta nos atacan.

Las familias cristianas estamos compuestas por ciudadanos libres, que pagan sus im-puestos y colaboran, con su prolífica paternidad, estabilidad de la familia y valores humanos,a enriquecer el orden establecido. Nos congratulamos de esta iniciativa de la Consejería, yen ella ponemos nuestra esperanza de equidad y justicia, contra la marginación de hecho quesufre la familia. Esperamos que nuestras opiniones sean tenidas en cuenta, para el bien dela familia y del país.

Asociación Institución familiar

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José Francisco [email protected]

Fígaro en el pasado, en el pre-sente y en el futuro. Escribió enLa Revista Española, el 26 de

enero de 1835, aquello de que, «si he-mos de hablar de razón, si sólo se hade escribir la verdad, si no se ha dedecir lo que de cierto se sabe, con-vengamos en que todo está dicho enun papel de cigarro. Los adelantos ma-teriales han ahogado, de un siglo a es-ta parte, las disertaciones metafísicas,las divagaciones científicas y la razón;lo que se clama por todas partes haconquistado el terreno de la imagina-ción, si es que hay razón en el mun-do que no sea imaginación. Los he-chos han desterrado las ideas».

La costumbre de traer a esta pági-na lo que hemos leído, oído y visto, ypublicado, no nos exime del sano ejer-cicio intelectual de dar voz a los queno la tienen, o la tienen secuestradapor muchos de los imponderables, pro-bablemente más físicos que metafísi-cos. A saber. Primer ejercicio físico ymetafísico, en el caso de la niña Fáti-ma Ledrisse y el hiyab: leer el librodel catedrático de Literatura árabe, Se-rafín Fanjul, Al Andalus contra Es-paña, editorial Siglo XXI.

Segundo ejercicio: ofrece el Bo-letín Informativo del Centro Ecumé-nico «Misioneras de la unidad»,Http://www3.planalfa.es/mu/, la si-guiente información en su último nú-mero: «El análisis de los profesoresJonathan Adelman y Agota Kuper-man, expertos islamistas, publicadoen el Denver Post, pone en evidencia lapaulatina desaparición del cristianismoen tierras de Oriente Medio, debido ala constante presión del islamismo (...)Por lo que respecta a Arabia Saudí,cuna del Islam y su guardián, todoslos ciudadanos deben ser musulma-nes; es ilegal importar, fabricar o po-seer objetos devocionales o inclusoornamentales cristianos, y a los queconfiesan esta fe se les persigue, en-carcela, castiga o deporta. En Sudán,se ha mantenido una guerra civil em-prendida por los musulmanes contralos cristianos y los africanos negrosanimistas, con un saldo de destruccióny muerte de dos millones de personas.Del estudio se puede bien deducir queel Islam y sus seguidores tienen unadoble medida: una para ellos mismos,frente a Occidente y frente a los nomusulmanes, exigiendo derechos hu-manos y sociales; y otra en sus paísesy en sus zonas de influencia, negán-dolos y abiertamente persiguiéndolos.

La libertad religiosa y los derechos

humanos en Arabia Saudí, fuente yguardián del Islam: ¿puede un católi-co celebrar misa en territorio de Ara-bia Saudí, al igual que un árabe asistiral rezo de cualquier mezquita en Oc-cidente? La respuesta es sinceramen-te negativa. Pero esto, que nos parecetan elemental en nuestras sociedadesdemocráticas y basadas en los dere-chos humanos y sociales, no lo es enotras áreas geográficas y humanas quetratan de beneficiarse del desarrollo ylibertades que el entorno democráti-co occidental genera. En Arabia Sau-dí, fuente del Islam, para que un sa-cerdote católico pueda celebrar misatiene que ocultarse como un delin-cuente, porque corre un grave peligropersonal, sin que este hecho sea de-nunciado con claridad y persistenciapor las organizaciones defensoras delas libertades individuales y colecti-vas (ONU, Amnistía Internacional,ONGs., etc.)

El periódico americano The NewYork Times se hace eco del drama quesupone para un hombre religioso el

tener que ocultar su condición en pú-blico y, una vez en locales ocultos,transmutarse para poder realizar ac-ciones espirituales que necesitan yrequieren de un acondicionamientoespecial en objetos, ropas y usos. Elsecreto con que se hace todo es enor-me, pues la policía acecha a aquellosde los que sospecha pueden ser deotra confesión religiosa no musul-mana. El periódico neoyorquinoconstata el enorme valor y fe que de-be poseer quien quiera ser testigo fielde su fe en medio de una teocraciacon una constitución basada en el Co-rán y en las enseñanzas de Mahoma.Todo gesto puede ser interpretado co-mo proselitismo y condenado con lacárcel; la conversión de un musul-mán a otra religión es apostasía, quese castiga incluso con la muerte; ylos no musulmanes que lleven a caboactividades religiosas y/o espiritua-les de cualquier índole pueden ser de-tenidos, encarcelados, castigados ydeportados.

El Departamento de Estado de los

Estados Unidos, en el último informesobre la libertad religiosa en el mundo[año 2001], constata la total ausenciade libertad religiosa en Arabia Saudí,con situaciones graves, cuando no do-lorosas, para aquellas personas que noson árabes o musulmanes, en especialpara los militares norteamericanos des-tacados en ese país que tienen que re-cibir atención religiosa en privado».

Tercer ejercicio: la FERE ha emi-tido un comunicado de prensa en elque dice: «Ante las noticias aparecidasen los medios de comunicación rela-tivas a la no escolarización de unaalumna marroquí en un centro con-certado de la localidad de San Loren-zo de El Escorial, FERE-Madrid, ins-titución en la que se halla integrado elcentro Inmaculada Concepción, ma-nifiesta:

1º-. Que la no escolarización de di-cha alumna en el centro concertado sedebió, única y exclusivamente, a lavoluntad del padre de la niña que, ha-ciendo uso del derecho que la Ley lereconoce, se opuso desde el primermomento a la escolarización de su hi-ja en un centro católico, habiendo pla-zas disponibles en el centro público.

2º-. Que, en ningún momento, laDirección del centro concertado pusoinconveniente en la escolarización dela niña, y mucho menos obstáculosbasados en el uso del uniforme o delvelo. De hecho, en la entrevista ini-cial con el padre de la alumna, se in-formó acerca de la existencia del uni-forme, junto con otros aspectos orga-nizativos del centro (horarios, insta-laciones, alternativa a la Religión...)sin que suscitara controversia algunasobre este particular. Es más: el centroofreció el uniforme gratuitamente,además de otro tipo de facilidades.

3º-. Por último, denuncia la mani-pulación realizada desde determina-das instancias, consistente en volcarla responsabilidad de la no escolari-zación en la actitud mantenida por laDirección del centro concertado, cuan-do ésta dio todo tipo de facilidades,como se ha señalado anteriormente.

FERE-Madrid concluye deman-dando que se respete el derecho a laintimidad de los menores que se en-cuentren en estas circunstancias, per-mitiendo así que sus procesos de es-colarización e integración discurrancon la normalidad imprescindible.

Asimismo, demanda respeto a lasdecisiones que adoptan los centros,sus comunidades educativas y sus con-sejos escolares en el ámbito de Auto-nomía organizativa que tienen legal-mente reconocido».

Aquí y ahora Alfa y Omega 21-II-2002 11

y contarlooír...Ver

Tres ejercicios elementales

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Aumenta la demanda de la asignatura de Re-ligión en la diócesis de Madrid: llega a unpromedio global del 78 por ciento. Educa-

ción integral «es aquella que recoge, no sólo unoscontenidos intelectuales, éticos, estéticos, etc., sinotambién la apertura a la trascendencia. Toda educa-ción supone un modelo de persona, de hombre y demujer, de sociedad y de vida en el que Dios es fun-damental», dijo el Delegado diocesano de Ense-ñanza, don Avelino Revilla.

Estas Jornada diocesana de Enseñanza es cadaaño, un lugar de encuentro y diálogo para todas laspersonas involucradas en el ámbito de la enseñanza,un foro para debatir, en el que se ha tratado como te-ma fundamental la ley de calidad de la enseñanza.Don Avelino Revilla insistió en la importancia de laimplicación de los tres sectores –familia, escuela ysociedad–, porque, «si no se implican los tres sec-tores, la ley de calidad nacería muerta». Duranteestos días, profesores, padres de familia, equiposdirectivos, sacerdotes y todos los implicados en laeducación de niños han recordado la responsabili-dad y compromiso cristiano en la escuela y la cul-tura.

Se iniciaba la Jornada el pasado sábado 16 con laconferencia de don Alfredo Mayorga, Presidentedel Consejo Escolar del Estado, sobre El estado ac-tual del sistema educativo español. Tras el recono-cimiento de los logros conseguidos, puso de mani-fiesto los retos que, en materia educativa, nuestrasociedad española debe afrontar no sólo en el futu-ro inmediato, sino también en el momento presente.

La Delegación diocesana de Enseñanza señalócómo la asignatura de Religión necesita tener un es-tatuto digno, como las demás asignaturas, y que la al-ternativa a la misma pueda goza del mismo rango. Aeste respecto, se pronunció doña Isabel Couso, Se-cretaria General de Educación y Formación Profe-sional, que acudió el pasado lunes día 18 al Semi-nario de Madrid, en lugar de la ministra de Educa-ción, Cultura y Deporte, quien se excusó de asistirpor encontrarse compareciendo en el Parlamento.Doña Isabel Couso leyó, en su nombre, el discursode la señora ministra, que exponía las líneas funda-mentales que inspiran el proyecto de reforma delactual sistema educativo elaborado por su equipoministerial, así como las medidas que se quieren po-ner en práctica para mejorar la calidad educativa.Para este fin, el Ministerio de Educación está escu-chando a todas las instituciones, organizaciones,asociaciones y sectores sociales implicados en elmundo de la educación. La ministra se refería así ala situación actual de la asignatura de Religión: «Eneste encuentro sé que estoy hablando a profesores deReligión en su mayoría de la escuela pública, y séque están muy preocupados por el deterioro cre-ciente de esta enseñanza en muchos centros de edu-cación Primaria y Secundaria, tanto por su insatis-factoria estructura académica actual como por losproblemas derivados de la posible alternativa para losalumnos que no deseen seguir la formación religio-

sa, los problemas de evaluación, del profesorado,etc... He leído y creo que entiendo el mensaje que elseñor cardenal les ha enviado como preparación a es-tas jornadas. Nuestro proyecto es lograr un exactocumplimiento de los Acuerdos con la Santa Sedesobre esta materia, como bien conoce el señor car-denal. Es deber de los poderes públicos poner to-dos los medios a su alcance para lograr un rigurosocumplimiento de nuestro ordenamiento jurídico. Esun mandato constitucional.

En el marco del Convenio de Colaboración entrela Comunidad de Madrid y la Provincia Eclesiásti-ca de Madrid, de marzo de 1999, el pasado 8 de fe-brero se firmaron ocho convenios entre el DirectorGeneral de Centros docentes y los responsables de

ocho centros de Educación Infantil de la región, conel fin de financiar centros privados del Primer Ci-clo de Infantil, que atienden a niños entre 0 y 3 años,de poblaciones marginales. Con esta firma –que su-pone una ayuda de unos 867 mil euros cada año pa-ra financiar por primera vez centros privados sinánimo de lucro de Primer Ciclo–, un total de 549niños pertenecientes a poblaciones marginales y aalumnos necesitados de enseñanza compensatoria,podrán ser escolarizados. Estos convenios son uninstrumento determinante para la igualdad de opor-tunidades, así como para la integración, socializacióny prevención del fracaso escolar.

Alfa y Omega

Iglesia en MadridAlfa y Omega12 21-II-2002

XVIII Jornadas diocesanas de Enseñanza

78 % de los padres piden parasus hijos enseñanza religiosa

Radio María

La Asociación Radio María es una entidad privada sin ánimo de lucro que trabajaba en elcampo de la radiodifusión promoviendo el conocimiento del mensaje evangélico de go-

zo y esperanza a favor de la familia y de los enfermos según el espíritu y la enseñanza dela Iglesia católica.

En razón de esta actividad, la Asociación ha recibido recientemente del Arzobispado deMadrid las debidas licencias, asumiendo por su parte el compromiso de seguir las orienta-ciones del obispo diocesano en todo lo referente a la formación y educación católica que serealice a través de la emisora. Últimamente, el señor arzobispo ha nombrado al padre Ju-lio Sáinz Torres, claretiano, como Director de Programación de Radio María.

Nota de la Vicaría General de Madrid

Un momento de la Jornada, de izquierda a derecha, don Avelino Revilla, monseñor Romero Pose, obispo auxiliar de Madrid, car-denal Rouco, Doña Isabel Couso, Secretaria General de Educación y Formación, y don Alfredo Mayorga, Presidente del ConsejoEscolar del Estado

Los pasados 16 y 18 de febrero ha tenido lugar en Madrid la XVIII Jornada diocesana de Enseñanza, bajo el lema Calidad educativa:apuesta de futuro. Se ha reflexionado sobre cómo la calidad de enseñanza no consiste en tener más medios,

sino en fijar un horizonte, un modelo de persona y de sociedad

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La Jornada diocesana de Enseñanzanos brinda una nueva oportunidadpara tomar conciencia de nuestra

responsabilidad educativa y compromisocristiano en los ámbitos de la escuela y lacultura.

El Concilio Vaticano II nos recordóque el derecho a educar incumbe, prima-ria y preferentemente, a los padres, por loque a ellos corresponde elegir el tipo deeducación para sus hijos que mejor se aco-mode con sus convicciones morales y re-ligiosas. De ahí la necesidad de explici-tación de los objetivos del proyecto edu-cativo que debe ofrecer todo centro, con elfin de que los padres puedan ejercer deforma responsable su libertad de eleccióneducativa.

El lema de la Jornada –Calidad educa-tiva: apuesta de futuro– guarda relacióncon la calidad que debe acompañar a la ta-rea de educar. Hay que resaltar una vezmás que la educación se presenta comouna de la apuestas más prometedoras quetiene una sociedad para encarar su futuro.Si durante los últimos años, desde las dis-tintas Administraciones educativas, se halogrado la escolarización total y gratuitade la etapa obligatoria, y prácticamente ple-na en los niveles no obligatorios, pareceurgente, una vez conseguido este objetivo,que los esfuerzos se orienten hacia la con-solidación de la calidad en la acción edu-cativa. Lo reclama, por otro lado, el mo-mento tan problemático por el que atravie-sa la escuela en su configuración pedagó-gica y en su funcionamiento didáctico.

La educación de calidad no puede de-sentenderse de los objetivos propios de unproyecto educativo que, quiérase o no, ha-ce siempre referencia a fines y valores úl-timos, pues toda educación se orienta poruna determinada visión de la persona hu-mana. La Iglesia reconoce que «la escue-la es un medio privilegiado para la forma-ción integral del hombre en cuanto queella es un centro donde se elabora y setransmite una concepción específica delmundo, del hombre y de la Historia» (Laescuela católica, 8). De ahí la importan-cia que cobra la tarea de todo educadorcristiano como testigo de una visión delhombre que, teniendo como referencia ymeta a Cristo, trata de comunicarla a susalumnos. Lo que da la medida plena deuna lograda calidad educativa no es sóloni primeramente el criterio de la perfec-ción instrumental y técnica, aunque seaimportante, máxime en la actual sociedad,tan marcada por el desarrollo tecnológi-co, sino, antes bien, el de la formación ín-tegra de la persona, contemplada y valo-rada en toda la dignidad que le es propia

por su condición transcendente en cuantoimagen de Dios, llamada a la filiación di-vina.

Una clara identidad

La calidad educativa, vista desde unaclara identidad católica, habrá de dejarseguiar, además, por un modelo teórico ypráctico que no olvide los múltiples ros-tros de las nuevas pobrezas que padecentantos alumnos (fracaso escolar, deses-tructuración familiar, falta de valores, ig-norancia religiosa, etc.), tratando de in-corporarlos a los caminos formativos delos mejor dotados y de los más afectuosa-mente cuidados y queridos. En la personade los pobres, dice Juan Pablo II, hay unapresencia especial de Cristo, que impone ala Iglesia una opción preferencial por ellos.Nuestros jóvenes, los de la litrona y el bo-tellón, son frecuentemente el nuevo expo-nente de la mayor indigencia que se pade-ce hoy en la sociedad.

Desde una comprensión de la educa-ción como la consecución del pleno desa-rrollo de la personalidad humana, es de re-saltar la importancia que cobra la forma-ción religiosa en la escuela para tratar deresponder a las preguntas radicales queacompañan al alumno, al tiempo que leofrece un conjunto de verdaderos valoresque se traducen en formas concretas deexistencia, convivencia y opciones de vida.La renuncia a la enseñanza religiosa, o supostergación académica, equivale a olvidar

uno de los aspectos más fundamentales dela misión de la escuela. La enseñanza de laReligión descubre y pone de relieve, a laluz del Evangelio, con rigor teológico yen toda su verdad, el valor de la persona,objeto del amor de Dios, con una misión enla Historia y un destino inmortal.

Deseo que os llegue mi invitación a to-dos los que estáis implicados en el mundode la escuela (alumnos, padres de familia,educadores cristianos, profesores de Re-ligión, escuela católica, sacerdotes...), pa-ra promover la colaboración y la vida co-munitaria escolar a partir de la peculiarresponsabilidad de cada uno de vosotros.Participad también activamente en el de-bate que se acaba de abrir en torno a lanueva reforma educativa, aportando la luzque viene del Evangelio y de la doctrinade la Iglesia en esta materia. Está en juegoel futuro del nuestros hijos y, consiguien-temente, el de la sociedad. Su bien perso-nal, temporal y eterno, es el objetivo y lamedida primera de toda reforma educativa.Luego vendrán los puntos de vista y loslegítimos intereses sociales y políticos.

Quiera Dios ayudarnos a todos los queestamos implicados en tareas educativasa dar razones de nuestra esperanza antelos múltiples retos que nos esperan muypronto en el campo de la educación. Que lacompañía de Santa María de la Almudenanos ayude a abrirnos con confianza e ilu-sión apostólica al futuro.

+ Antonio Mª Rouco Varela

Iglesia en Madrid Alfa y Omega 21-II-2002 13

La voz del cardenal arzobispo

«Calidad educativa:apuesta de futuro»

Con ocasión de la XVIII Jornada diocesana de Enseñanza, nuestro cardenal arzobispo ha escrito esta exhortación pastoral

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B. R. M.

La Confederación católica de Padres de Alum-nos CONCAPA, implantada en todo el terri-torio nacional, tiene el firme convencimiento

de que «la situación actual del sistema educativoadolece de una serie de males, que demandan desdehace mucho tiempo cambios radicales: el índice defracaso escolar, la falta de calidad del sistema edu-cativo, etc.» Cree que ya era hora de que un Go-bierno afrontara su obligación de poner remedio a es-te problema de una forma decisiva. La CONCAPAha demandado desde hace mucho tiempo la reformade la LOGSE, con la que «no hemos estado de acuer-do desde sus inicios». Ahora esperan que se tratede un paso para conseguir la tan deseada calidad deenseñanza y terminar de una vez con el fracaso es-colar, que CONCAPA siempre ha denominado y en-tendido como fracaso del sistema educativo.

Para esta organización de padres de alumnos, lareforma para mejorar la calidad educativa debe pa-sar por recuperar el nivel de exigencia educativa a losalumnos, y del esfuerzo personal como modo deconsecución de metas. Con este fin, «deben adop-tarse medidas que refuercen y mejoren los conoci-mientos del alumno, y su evaluación –asegura CON-CAPA–. Plantear el debate solamente desde la con-veniencia o no de la Prueba General de Bachillera-to (PGB) nos parece ridículo y tendencioso. La PGBes una medida más del conjunto que conformará laLey de calidad, como también lo es la supresión dela promoción automática, el establecimiento de iti-nerarios o la función directiva».

Esta organización, que cuenta con una afiliaciónde tres millones de padres en las 17 ComunidadesAutónomas, «está plena y totalmente de acuerdocon que el Ministerio lleve adelante, como es suobligación, el conjunto de medidas que se nos avan-

zan dentro de la Ley de calidad; pero también soli-cita la incorporación real y efectiva de los padres ymadres al proceso educativo, o la potenciación dela función tutorial. Exige, asimismo, que el Minis-terio contemple, en el desarrollo de esta Ley, la gra-tuidad en el tramo 3-6 años.

Respecto a la PGB como prueba objetiva externa,CONCAPA «considera que es positiva como cul-minación de todo un proceso, y que servirá tantopara calibrar el nivel de conocimientos de los alum-nos como para homologar, en nuestras ComunidadesAutónomas, pero también en todo el territorio de laUnión Europea, el nivel para el acceso a la Univer-sidad». CONCAPA se muestra dispuesta a colabo-rar en todas aquellas mejoras del sistema educativoque puedan y deban realizarse, puesto que «somosfirmes partidarios de que los problemas educativosdeben ser resueltos con la participación y el con-senso de todos los sectores sociales implicados. Lla-mamos a un gran pacto por la educación».

La Confederación de centros Educación y ges-tión –patronal mayoritaria en la enseñanza privadaconcertada– valora positivamente que el Ministeriode Educación afronte la reforma del sistema educa-tivo, y pide que, entre las modificaciones que inclu-ya la futura Ley de calidad, se contemple un cambiosustancial de la función directiva. Educación y Ges-tión demanda nuevos requisitos para acceder a lafunción directiva, cauces de formación permanente,mecanismos para poner fin al sistema asambleario vi-gente, y que se tengan en cuenta los incentivos per-sonales.

Educación y gestión es partidaria de introduciritinerarios diferenciados en el segundo ciclo de laESO, con el fin de adaptarse mejor a los ritmos edu-cativos de los alumnos, siempre que el título finalsea igual para todos y que se limite la opción poste-rior al itinerario seguido, aunque exista un sistema

flexible que permita siempre cambiar. Consideraimprescindible que se habiliten los presupuestos ne-cesarios para que los centros privados concertadospuedan ofertar el máximo de opciones posibles, ytener unas ratios amplias que permitan escolarizar atodos los alumnos, evitando la segregación. En-tiende así que estas y otras modificaciones, necesa-rias de abordar en la ESO y en el Bachillerato, debenir acompañadas de una ley de financiación que cuan-tifique y temporice el coste de las mismas. Educacióny gestión apoya también la supresión de la promociónautomática, porque desmotiva a alumnos y profe-sores, y considera que es injusto que al final el re-sultado sea el mismo tanto para el alumno que seesfuerza como para el que no lo hace. La evalua-ción debe hacerse por cursos, no por ciclos comoocurre ahora. Educación y Gestión está a favor deuna evaluación objetiva objetiva y externa que sirvapara homologar y verificar unos mínimos.

La Federación de Religiosos de la Enseñanza(FERE) expuso en rueda de prensa sus considera-ciones respecto a la futura Ley de calidad, que seespera para el próximo mes de marzo, así como sudesacuerdo frente a la normativa sobre admisión dealumnos, sobre los procesos de integración de mi-norías que se lleva a cabo en los centros concertados,su recurso a la nueva orden sobre jornada escolar; ysu lucha por conseguir la concertación total de laeducación infantil.

El Secretario General de FERE, don Manuel deCastro, ha manifestado su apoyo a la ley de calidadcomo reforma anunciada por el Ministerio de Edu-cación, ya que considera que mejora la calidad delsistema educativo e incentiva las posibilidades demotivación e integración de los alumnos. FERE, querepresenta a casi dos millones de alumnos, consi-dera que la prueba externa o reválida, que se quiereponer como paso indispensable para conseguir eltítulo de bachiller, «puede ser un instrumento ade-cuado para la mejora de la calidad de educación,dado que sirve para homologar a todos los centros ypuede ayudar a incentivar el mayor esfuerzo y ren-dimiento de los alumnos. Para ello es necesario quelos centros, tanto los públicos como los de iniciati-va social, intervengan en la elaboración de dichaspruebas».

Respecto a la supresión de la promoción automá-tica, don Manuel de Castro «no niega la buena inten-ción de la LOGSE de recuperar a los alumnos queno han conseguido los objetivos mínimos del curso ociclo. Pero la realidad es tozuda y termina imponién-dose. Un alumno con dificultades, y a pesar de lasayudas extra que se le otorguen, puede no llegar a re-cuperar el atraso acumulado en el curso anterior, yconseguir, al mismo tiempo, los objetivos mínimosdel curso en el que se encuentra matriculado».

Una ley de financiación

FERE considera «un deber reconocer que unode los logros más significativos de la LOGSE ha si-do el de extender la enseñanza obligatoria hasta los16 años. Pero pretender que todos aquellos que an-tes abandonan el sistema escolar, por falta de moti-vación o de capacidad, sigan estudiando exacta-mente lo mismo que aquellos otros alumnos intere-sados en proseguir sus estudios con una carrera uni-versitaria, parece una pretensión loable, pero pocorealista; lo único que viene consiguiendo es una ba-jada general del nivel educativo». Por eso FEREconsidera una medida acertada la creación de itine-rarios en el segundo ciclo de la ESO, y el adelantarlos programas de diversificación curricular al pri-mer ciclo. Por último, FERE cree que «es impres-cindible que se financie adecuadamente el coste dela implantación de esta reforma del segundo ciclode la ESO, de forma que todos los centros sostenidoscon fondos públicos puedan ofertar la totalidad de lositinerarios».

Aquí y ahoraAlfa y Omega12 21-II-2002

CONCAPA, Educación y Gestión, y FERE ante la reforma y la nueva Ley de calidad

La educaciónnecesita mejorar

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Aquí y ahora Alfa y Omega 21-II-2002 13

Benjamín R. Manzanares

En la presentación del Plan de acción para eltrienio 2002-2004, monseñor Antonio Cañi-zares Llovera, arzobispo de Granada, Presi-

dente de la Comisión episcopal de Enseñanza y ca-tequesis, señala cómo «el nuevo milenio que aca-bamos de comenzar es un reto para la Iglesia y es, es-pecialmente, para la enseñanza y la catequesis dondelas nuevas generaciones recibirán las primicias delamor de Dios, la salvación de Jesucristo y la vidadel Espíritu». Este nuevo Plan invita a la comuni-dad educativa a «interrogarse sobre su renovación,para asumir con nuevo ímpetu su misión evangeli-zadora».

Este Plan pretende ser también un servicio a lasdiócesis, en concreto a las Delegaciones de Ense-ñanza y catequesis, a la hora de programar sus pro-pios objetivos y acciones. El principal aspecto deeste Plan es querer ser un servicio a la fe y la confi-guración plena del ser humano. En él se habla delanuncio de Jesucristo a todos los hombres, y la res-puesta personal que éste le da, para pasar a ver des-pués la fundamentación y maduración de la fe. «Elservicio de la fe –dice el Plan de acción– se centraen Cristo mismo. Es éste el mayor servicio al hom-bre que hoy debemos aportar en su camino de bús-queda de identidad y plenitud».

El objetivo general en la enseñanza es incentivarla acción evangelizadora de la enseñanza religiosa yayudar a los profesores a asumir su identidad evan-gelizadora y eclesial. Entre los objetivos específi-cos y líneas de acción, se destacan:

Estudiar la problemática educativa españolay la aportación específica de la educación católica,desde su acción evangelizadora y fundante de valo-res, actitudes y vida.

Cooperar desde la acción educativa en la es-cuela al proyecto marco de iniciación cristiana, cla-rificando y coordinando las acciones comunes y es-pecíficas de enseñanza y catequesis.

Continuar y fomentar la reflexión y revisiónde la acción de la escuela católica, a fin de que laevangelización sea el centro efectivo que dé razón desu ser en la educación.

Fomentar el compromiso evangelizador delos cristianos, padres, profesores y alumnos en laescuela pública como servicio a la formación in-tegral.

Proporcionar medios e instrumentos adecuadospara la formación teológica, pastoral y espiritual delos profesores de Religión y para fortalecer su res-ponsabilidad en la misión que la Iglesia les enco-mienda.

Desarrollar y aplicar el nuevo currículo de Re-ligión, clarificando sus fines y objetivos, ampliandola síntesis cristiana en cada etapa y proporcionan-do medios para una adecuada educación en los va-lores compartidos y propios de la fe cristiana.

En cuanto a la catequesis, el objetivo general esofrecer orientaciones para que cada diócesis puedaelaborar un proyecto global de catequesis al serviciode la iniciación cristiana que, en relación con toda lapastoral educativa, y vertebrado por los sacramentosde la iniciación, propicie una profesión de fe viva, ex-plícita y operante, en quienes han dado su primeraadhesión al Evangelio. Entre los objetivos y líneas de

acción de la catequesis, están: Promover en la comunidad cristiana una mayor

conciencia sobre el verdadero significado de la ca-tequesis en la Iglesia, en toda su riqueza e identi-dad, situada en relación con el conjunto de la pastoraleducativa.

Proseguir los esfuerzos para la implantación dela catequesis de iniciación cristiana, como actividadbásica de la pastoral catequética. Llevar a cabo esta im-plantación de modo adecuado a las diversas edades, yclarificar y coordinar los cometidos de las distintasinstituciones y ámbitos que deben intervenir.

Impulsar la instauración del catecumenado co-mo institución catequética para los no bautizados, ypunto de referencia para quienes necesitan comple-tar su iniciación cristiana.

Proseguir el proyecto de elaboración de nuevoscatecismos conforme al encargo del episcopado es-pañol y continuar impulsando la recepción del Ca-tecismo de la Iglesia católica.

Intensificar la formación de catequistas al ser-vicio de la iniciación cristiana.

Transmisión de la fe

La Comisión episcopal de Enseñanza y Cate-quesis realizó los pasados 7 y 8 de febrero, en ElEscorial, un simposio sobre la Transmisión de la fe,en el que Vicarios y Delegados de Enseñanza y Ca-tequesis llevaron a cabo un estudio sobre la trans-misión de la fe y sus dificultades. Este simposio seha celebrado con el fin de dar un «un nuevo impul-so a nuestro compromiso espiritual y pastoral».

Este impulso viene del mandato del Señor resu-citado: Id y haced discípulos a todas las gentes.Conscientes de las dificultades en orden a la trans-misión de la fe, la Iglesia no se cansa de entregareste don recibido que responde a lo que en definiti-va todos buscamos.

El estudio realizado señala cómo evangelizar«era, y es, conocer y amar a Cristo, mostrar a Cris-to, vivir y educar en Cristo». Ante una cultura que,en muchos casos, presenta antivalores erigidos comonuevos ídolos o referentes vitales para el desarrollode niños y adolescentes, nuestros maestros en la

educación de la fe han de ser testigos del Señor consu palabra y su vida, que luchan contra corrienteconfiando siempre en la acción de la gracia. La pre-sentación del acontecimiento de Jesucristo, anun-ciado por la Iglesia, se presenta contra corriente yexige una respuesta personal y comprometida.

La enseñanza y la catequesis se enfrentan hoy asimilares y nuevos retos en la transmisión de la fe alas nuevas generaciones. Lo que se nos pide es quela catequesis y la enseñanza, en esta nueva evange-lización, no sean sólo hablarles de Cristo, sino encierto modo hacérselo ver, hacérselo creíble, quetiene que ver con la vida cotidiana de cada uno. Eneste sentido, la fe y la razón deben ir unidas al testi-monio, a fin de que la transmisión de la fe pueda serpersonalizada y, por tanto, vivida. Del Evangelioemerge el rostro de Cristo que hoy debemos trans-mitir con la humildad y disponibilidad de aquel quesabe que el hecho revelado y recibido en la comu-nidad de creyentes es gracia que viene del Padre.

Hoy se percibe, cada vez más, la necesidad de unapropuesta de la fe que se mueva en el horizonte de estagran tarea: la integración entre la fe y la vida, el diálogoentre la fe y la cultura, y el logro de una nueva síntesis cre-ativa de la fe que lleve a mostrar su fuerza humaniza-dora. Para ello la prioridad de la Iglesia debe centrarse enel anuncio de Cristo, mostrándolo con múltiples meto-dologías y peculiares carismas. Dios continúa comuni-cándose en la Historia a través de lo humano, con rostrosde hombres y mujeres, que son llamadas de encuentrocon Él. Aquí radica la originalidad imprevisible de lapretensión cristiana: Cristo se presenta ante el corazón yla libertad de todos como una compañía humana que sepuede ver, tocar y escuchar, y que nos recuerda que la vi-da tiene un sentido y nos llama a descubrir nuestra dig-nidad de hijos de Dios. La transmisión de la fe requierela renovación de la fe de los cristianos, redescubrir lasencillez del mensaje de la fe y conquistar la verdaderalibertad cristiana en un mundo que quiere imponer sus va-lores. La oración es elemento fundamental, pues expre-sa la experiencia de la fe, que queremos transmitir, comorelación con Dios. Orar es la fe en acto. Éste es un mo-mento de gracia para la misión. Duc in altum (Remamar adentro)

Plan de Acción de la Comisión episcopal de Enseñanza y Catequesis:

Educar, para la vida, en la feLa Comisión de Enseñanza y Catequesis, de la Conferencia Episcopal Española, ha presentado su Plan de acción para el trienio

2002-2004, en el que se ofrece una reflexión y una serie de objetivos y acciones a realizar, con el fin de llevar,a través de la enseñanza y la catequesis, la Buena Nueva encontrada, que, como todo don recibido, es para darlo

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Querida esposa: en esta fecha tan importante ymaravillosa de nuestra vida, déjame que teexprese mi profunda gratitud por estos cin-

cuenta maravillosos años de nuestra vida. Como lavida misma, no fue un camino de rosas, sino lleno dedificultades, que tú salvaste con cariño y entrega.En ese año existía el racionamiento de alimentos, ytú, como buena esposa y excelente administradora,lo superaste a pesar de las dificultades propias. Alos diez meses de matrimonio me diste el don, el re-

galo más hermoso: nuestra hija. Fueron momentosmuy dolorosos para ambos, pero sobre todo para ti,por tu parto tan prolongado: casi dos días. Hubo in-tervención quirúrgica, y tú no pudiste amamantar ala niña; hubo que buscar, de farmacia en farmacia, laleche artificial, porque escaseaba. ¿Te acuerdas? Yono consentía que te levantaras dos veces por la nochepara darle el alimento, y se lo daba yo; lo recuerdocon emoción; cada vez que estoy triste pienso enesos momentos tan maravillosos, y el corazón se

alegra. Por cierto, fiel a su costumbre, nuestra hija nise despertaba: comía bien y dormía mejor.

Mejoró nuestra situación, como la de todos losespañoles, pasados varios años, pero fueron unosaños difíciles; tú, con tu entrega y sacrificio, lo su-peraste, y nuestra hija fue creciendo, su persona y susestudios, ya que fue muy buena estudiante, muy res-ponsable en todos sus actos, hasta acabar la carreracon notas muy buenas.

Por todo, y hasta llegar a este casi final de la eta-pa de nuestra vida, doy gracias, muchas, a Dios, porhaberte puesto en mi camino, ayudando con tu buenánimo a superar las dificultades y a vivir tu alegría enlos buenos momentos.

Ahora, ya en el declive de nuestra vida, quieroyo ser tu apoyo y tu compañía, compensarte en algotus desvelos, tu sacrificio, tu verdadero amor; para míes como si tú fueras una nueva hija, pues así quieroque terminen nuestros días. Aún recuerdo hace muypocos días, cuando, como cada día, te despertaba yte decía lo mucho que te quiero, tú, que apenas ha-blas un monosílabo, me dijiste: «Yo te quiero contoda mi alma». Miré hacia el cielo, pues me parecíaque estas palabras venían de allí.

Quiero, querida hija Pilarín, darte las gracias poreso, por ser una magnífica hija, a lo largo de tusaños, pero en especial por estos últimos años de laenfermedad de mamá, por tu comportamiento.

Quiero asimismo dar las gracias a todos: veci-nos, amigos, conocidos, porque habéis tratado a miesposa como lo que es ahora, una niña, con vuestrocariño generoso. Y a ti, Señor, te dejo el último, porser el más importante: por tu generosidad con esta fa-milia. Pongo en las manos de tu Madre, que es tam-bién mi Madre: mi gratitud, mis oraciones, todosmis sacrificios, para que te lo ofrezca, porque meencuentro indigno de ofrecértelos directamente.

Y una última petición, Señor, concédemela: tepido que me des aunque solamente sea un día más devida, te lo pido angustiado, porque quiero yo cui-darla hasta que cierre sus preciosos ojos. Señor, con-cédemelo.

Gracias a todos los que estáis aquí por vuestragenerosa ayuda y cariño; todo lo que habéis hechopor Maruja es más que si lo hubierais hecho por mí.Gracias, mil gracias, y que Dios os lo pague.

Os quiero.

TestimonioAlfa y Omega14 21-II-2002

Carta abierta a mi esposa:

«Te quiero con toda mi alma»

Carta de un hijo a todos los padres del mundo

No me den todo lo que les pido, a veces sólo pido para ver hastacuánto podré tomar. No me griten, los respeto menos cuando me

gritan y me enseñan a gritar a mí también, y yo no quisiera gritar.No me den siempre órdenes y más órdenes, si a veces me pidie-

ran las cosas yo lo haría más rápido y con más gusto. Cumplan suspromesas, buenas o malas. Si me prometen un premio, quiero reci-birlo y también si es un castigo.

No me comparen con nadie (especialmente con mi hermano); si mepresentan como mejor que los demás, alguien va a sufrir y, peor, seré yoquien sufra. No cambien de opinión tan a menudo sobre lo que debohacer, decídanse y mantengan esa decisión. Déjenme valerme por mí mis-mo. Si hacen todo por mí nunca podré aprender. Corríjanme con ternu-ra.

No digan mentiras delante de mí, ni me pidan que las diga por us-tedes, aunque sea para sacarlos de un apuro. Está mal. Me hacesentir mal y pierdo la fe en lo que ustedes dicen. Cuando hago algomalo, no me exijan que les diga el porqué lo hice; a veces ni yo mis-

mo lo sé. Si alguna vez se equivocan en algo, admítanlo, así se ro-bustece la opinión que tengo de ustedes y me enseñarán a admitir mispropias equivocaciones. Trátenme con la misma amabilidad y cor-dialidad con que veo que tratan a sus amigos, ¿es que por ser fami-lia no significa que no podamos ser también amigos?

No me pidan que haga una cosa y ustedes no la hacen, yo apren-deré a hacer todo lo que ustedes hacen aunque no me lo digan, pe-ro difícilmente haré lo que dicen y no hacen.

Cuando les cuente un problema mío, aunque les parezca muy pe-queño, no me digan: «No tenemos tiempo ahora para esas boba-das»; traten de comprenderme, necesito que me ayuden, necesito deustedes. Para mí es muy necesario que me quieran y me lo digan, ca-si lo que más me gusta es escucharlos decir: «Te queremos».

Abrázame. Necesito sentirlos muy cerca de mí. Que ustedes no seolviden que yo soy, ni más ni menos que un hijo.

Marita Abraham De El apóstol de San Pedro

Han pasado cincuenta años y su amor ha ido aumentando día a día, es la conclusiónque se deduce de esta bellísima carta de amor. Esta semana, Alfa y Omega ofrece aquíel sincero testimonio de fidelidad y amor verdadero de un matrimonio cristiano

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El Día del Señor Alfa y Omega 21-II-2002 15

En el camino cuares-mal hacia la Pascua,la liturgia nos pre-

senta la Transfiguración. Laescena del Tabor –con la delJordán y el Calvario– es unmomento decisivo en el mi-nisterio de Jesús. Tiene lu-gar en el monte mientrasoraba, después de haberanunciado su pasión, de ha-ber hablado de su caminohacia la muerte. Únicamen-te desde la cercanía, desdela oración, se contempla laTransfiguración, se puedever a Dios.

Algunos de sus discípu-los sienten el desconciertoy el desánimo ante el anun-cio de la Cruz. El Señor nolos deja en el abandono dela tristeza, sino que «cum-ple en los tiempos novísi-mos la promesa» (san Ire-neo). Es entonces cuando elMaestro se les muestratransfigurado, ante dos gran-des testigos: Moisés y Elí-as. Al participar de la trans-figuración, los temores de-saparecen, y la Luz de laGloria les confirma que Élera el Mesías, el Salvador:«La gloria del cuerpo queiba a ser reino se mostró alos apóstoles, pues el Señorapareció en el modo de sutransfiguración gloriosa,manifestando la gloria de sucuerpo real» (san Hilario).La Gloria y la certeza de es-tar con el Mesías les hacevivir una nueva realidad:«Los apóstoles quedaron

deslumbrados por el res-plandor de su luz» (Gregoriode Elvira). El anuncio de laCruz les había entristecidoy desanimado, y les restabavigor para seguirle. «Triste-za que procedía de ignorarla fuerza de la palabra deDios» (san Juan Crisósto-mo). La Transfiguración esanticipo de la resurrección;es el don de los seguidoresdel Señor para poder llegarhasta el final.

Al lado de Jesús, y con

los suyos, aparecen Moisés yElías; «para acrecentar la fede los apóstoles, les da unsigno venido del cielo... Asíse manifiestan la ley y losprofetas, cuyas voces anun-cian frecuentemente la pa-sión y resurrección del Se-ñor» (san Jerónimo). Losque Él había llamado, juntoal lago, necesitan el testi-monio de las Escrituras. Lostres discípulos estaban fal-tos de una experiencia fuer-te para llegar a Jerusalén. «A

estos tres se les manifestó elSeñor en el monte notificán-doles la gloria de su reino»(san Agustín). Cruz y Rei-no, muerte y Gloria es la vi-da del Mesías y de los quele siguen. Bien lo supo ex-presar la santa de Ávila:«Dadme Calvario o Tabor,/desierto o tierra abundosa».Los que participaron de laTransfiguración y escucha-ron la voz, los que, «incapa-ces de soportar los esplen-dores del Verbo, se humilla-ron bajo la poderosa manode Dios» (Orígenes), se sin-tieron consolidados en la fe,bien dispuestos para abrazarla Cruz y preparados paraacoger la Gloria.

Era menester seguir elcamino hacia Jerusalén. Poreso el Señor les anima a quesigan en la peregrinacióniniciada con la memoria delTabor. Un discípulo que noolvida el acontecimiento dela Transfiguración pone susojos en la meta, y puede sen-tir en lo más hondo de símismo las palabras del Se-ñor: «Desciende, Pedro.Querías descansar en lamontaña, pero desciende,predica la palabra...; trabaja,suda, sufre algunos tormen-tos, para poseer en la cari-dad, por el candor y la be-lleza de las buenas obras, losimbolizado en las blancasvestiduras del Señor» (sanAgustín).

+ Eugenio Romero Pose

II Domingo de Cuaresma

Luz para la Cruz y la GloriaEvangelio

En aquel tiempo, Jesústomó consigo a Pedro,

a Santiago y a su hermanoJuan y se los llevó aparte auna montaña alta. Se trans-figuró delante de ellos y surostro resplandecía como elsol y sus vestidos se vol-vieron blancos como la luz.Y se les aparecieron Moi-sés y Elías conversando conél. Pedro, entonces, tomóla palabra y dijo a Jesús:«Señor, ¡qué hermoso esestar aquí! Si quieres, harétres chozas: una para ti, otrapara Moisés y otra para Elí-as». Todavía estaba ha-blando cuando una nube lu-minosa los cubrió con susombra, y una voz desde lanube decía: «Éste es mi Hi-jo, el amado, mi predilec-to. Escuchadlo.» Al oírlo,los discípulos cayeron debruces, llenos de espanto.Jesús se acercó y tocándo-los les dijo: «Levantaos, notemáis». Al alzar los ojosno vieron a nadie más que aJesús, solo.

Cuando bajaban de lamontaña, Jesús les mandó:«No contéis a nadie la vi-sión hasta que el Hijo delhombre resucite de entrelos muertos».

Mateo 17, 1-9

Por designio divino, la santa Iglesia está organizada y se gobierna sobre la base de una admirable va-riedad. «Pues a la manera que en un solo cuerpo tenemos muchos miembros, y todos los miembros

no tienen la misma función, así nosotros, siendo muchos, somos un solo cuerpo en Cristo, pero cadamiembro está al servicio de los otros miembros». Es común su dignidad, que deriva de su regeneraciónen Cristo; común la gracia de la filiación; común la llamada a la perfección: una sola salvación, única la es-peranza e indivisa la caridad. No hay, de consiguiente, en Cristo y en la Iglesia ninguna desigualdad porrazón de la raza o de la nacionalidad, de la condición social o del sexo, porque «no hay judío ni griego, nohay siervo o libre, no hay varón ni mujer. Pues todos vosotros sois uno en Cristo Jesús».

Si bien en la Iglesia no todos van por el mismo camino, sin embargo todos están llamados a la santidad.Aun cuando algunos, por voluntad de Cristo, han sido constituidos doctores, dispensadores de los misteriosy pastores para los demás, existe una auténtica igualdad entre todos los fieles en orden a la edificación delcuerpo de Cristo. Pues la distinción que el Señor estableció entre los sagrados ministros y el resto del pue-blo de Dios lleva consigo la solidaridad, ya que los pastores y los demás fieles están vinculados entre sípor recíproca necesidad. Los pastores, siguiendo el ejemplo del Señor, pónganse al servicio los unos delos otros y al de los restantes fieles; éstos, a su vez, asocien gozosamente su trabajo al de los pastoresy doctores. De esta manera, todos rendirán un múltiple testimonio de admirable unidad en el cuerpo de Cris-to. Pues la misma diversidad de gracias, servicio y funciones congrega en la unidad a los hijos de Dios, por-que todas... estas cosas son obra del único e idéntico Espíritu.

Constitución Lumen gentium, 32

Esto ha dicho el ConcilioEsto ha dicho el Concilio

La Transfiguración sucedió aquí

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Inés Vélez

Ha sido una exposición excep-cional. Más de cien mil visi-tantes han contemplado una

selección de 52 iconos rusos de granformato sobre tabla, de entre los si-glos XIV y XVII, procedentes de lagalería Tretiakov, de Moscú, el mu-seo más importante de arte ruso delmundo. Según don Antoni Serra, Pre-sidente de la Fundación Caixa Cata-lunya, la muestra ha sido excepcionalpor «la importancia, rareza y dificultadde circulación de estos iconos», re-presentativos de los principales cen-tros artísticos rusos, como Nóvgorod,Moscú, Yaroslav, Pskov y Tver, asícomo por «el impacto cultural que, sinduda, supone la contemplación de unaiconografía religiosa prácticamentedesconocida entre nosotros».

El icono es mucho más que unasimple obra de arte o una imagen re-ligiosa pintada sobre tabla. El iconoes un objeto de arte sagrado. «En elmomento actual –dice don Jean Ha-ni, profesor honorario de la Universi-dad de Amiens–, en Occidente se ig-nora todavía lo que es el arte sagrado.Se clasifica con este nombre toda obrapictórica, escultórica o arquitectóni-ca de tema y uso religioso; pues bien,hay que saber que el tema y el uso re-

ligioso no pueden por sí solos conferira un objeto el carácter sagrado. Laobra de arte sagrado tiene por únicoobjeto revelarnos, o al menos sugerir-nos tanto como pueda, un reflejo delo divino y, con ello, contribuir a con-ducirnos a Dios. El icono es una mi-rada que cae sobre nosotros y nos pe-netra. El icono es el lugar, o el sopor-te, si se prefiere, de una auténtica pre-sencia divina».

Las imágenes religiosas, pintadassobre tabla, de las iglesias cristianasorientales tienen como objetivo fun-damental tender un puente entre elmundo sensible y el mundo espiritual.Los iconos de Cristo, la Virgen y lossantos están siempre representados decara. Esta frontalidad es un rasgo esen-cial del arte iconográfico; pretende

que el que contempla el icono entreen comunión directa con el personajerepresentado, en una contemplacióncara a cara. Si bien es cierto que losvisitantes de esta exposición han mi-rado los iconos, éstos han contempla-do a su vez a los visitantes.

El hombre se convierte en el temafundamental del icono, pero no el hom-bre terrenal, sino el hombre redimido;de ahí su representación luminosa, ar-mónica, ligera y equilibrada. Aparecesin sombras, representado en su fron-talidad sin perfiles. Se aleja así de laidea del retrato, pues no pretende mos-trar el rostro cotidiano del hombre, si-no su rostro glorioso y eterno. Asimis-mo, el icono representa a Cristo resu-citado, en la Transfiguración en el mon-te Tabor, es decir, en la luz y en la

RaícesAlfa y Omega16 21-II-2002

Iconos rusos

Miradasdesde la madera

Más de cien mil visitantes han disfrutado de la excelente exposición de iconos rusos de la Galería Tretiakov, de Moscú, que la FundaciónCaixa Catalunya ha organizado en Barcelona. La muestra cerró sus puertas el pasado 17 de febrero dejando una profunda huella

de belleza y de espiritualidad en la Ciudad Condal

Virgen de Yaroslav (siglo XV)

Todas las criaturas te glorifican (siglo XVI) Última cena (siglo XVI)

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Raíces Alfa y Omega 21-II-2002 17

belleza divinas. Lo mismo ocurre conlos iconos de los santos representadosen el Paraíso, en esa inmensa luz a me-nudo expresada mediante el color do-rado de los fondos. En los iconos elcuerpo aparece liberado de las leyes dela materia, del tiempo y del espacio. Elicono transmite una fuerza beatifica.La mirada, la visión, es un modo de co-nocimiento directo e intuitivo, y poreso puede convertirse en el canal pri-vilegiado de la iluminación espiritual.

«La mayoría de las veces, el ico-nógrafo era un monje que se prepara-ba para pintar con un tiempo de ayunoy oración –dice Jean Hani–; ayunocorporal, pero también ayuno del pen-samiento, de los ojos, y silencio. Re-cibía la bendición de un sacerdote eimploraba al Espíritu Santo que le ins-

pirase el tema de su obra, que guiara sumano. Es Dios quien firma el icono,nunca el artista, que se eclipsa ante elobjeto trascendente que ejecuta. Igualque algunos santos han referido susexperiencias espirituales en relatos,otros las han traducido en imágenes;existen santos iconógrafos cuyo arteestá considerado por la Iglesia orien-tal como un testimonio evidente desantidad». Es decir, el artista pintabarenunciando a su propia personalidadartística, siguiendo la inspiración di-vina. Por ese motivo, la mayoría delos iconos son anónimos, pues para elartista su talento no era más que unvehículo a través del cual se hacíantangibles las ideas trascendentales.

Tradicionalmente, el icono en unatabla de madera era pintado sobre la

que se pegaba una tela. El fondo delos iconos se elaboraba con yeso y co-la de pescado, se aplicaba en variascapas y se pulía minuciosamente conun diente de oso. El primer esbozo delcuadro se realizaba sobre el fondo dedos maneras: mediante pincel y tintanegra rebajada, o trazando las líneascon una aguja fina. A continuación sedoraba el fondo, un proceso que con-sistía en aplicar oro en hojas sobre ju-go de ajo. Finalmente, se aplicabanlos colores. En general, las pinturaseran de procedencia mineral, tierrasde variados colores y piedras trituradasmezcladas sobre una base de yema dehuevo y kvas, una bebida refrescanteque se hacía a partir de pan fermenta-do. La mayor dificultad y responsabi-lidad en la creación del icono recaíasobre los rostros. Sobre una primeracapa de pintura se aplicaban sucesi-vas capas de ocre, y el proceso culmi-naba con unas pequeñas pinceladas deblanco que representaban la luz.

Para todos aquellos que no han po-dido visitar la bellísima exposición deiconos rusos en la Sala de Exposicionesdel Centro Cultural Caixa Catalunya,en Barcelona, gracias a las imágenesque ilustran estas páginas, Alfa y Ome-ga ofrece la posibilidad de adentrarseen la mirada de los iconos, una miradaviva y eterna, desde la madera.

os rusos

adasa madera

n de iconos rusos de la Galería Tretiakov, de Moscú, que la Fundaciónó sus puertas el pasado 17 de febrero dejando una profunda huellaalidad en la Ciudad Condal

No me llores, madre. Reverso de la VirgenGran Panagia (siglo XVI)

na (siglo XVI) Dormición de la Virgen (siglo XV)

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Cien años después de su nacimiento, la fi-gura del Beato Escrivá sigue teniendo elatractivo de la fidelidad y la coherencia a

la misión. Pero también sigue siendo malenten-dida interesadamente por algunos. ¿Cuá-les son los rasgos del perfil delBeato Escrivá que siguen te-niendo hoy más atracti-vo?

Sí, cien años des-pués de su nacimientoJosemaría Escrivá esuna figura histórica-mente cercana, queatrae por su vigor hu-mano y cristiano.Bien sabemos –laHistoria, concreta-mente la historia dela Iglesia, es maes-tra– que los hom-bres que caminan alpaso de Cristo sonsembradores de pazy de alegría, y tam-bién signos de con-tradicción. A mí mellegan todos los días no-ticias –por escrito o de pa-labra– de muchos quetocan la paz y la ale-gría de Dios, alacoger loque

Él nos quiere decir con estos amigos suyos que sonlos santos, entre ellos el Beato Josemaría.

¿Rasgos que más atraen? Quizá que ha conta-giado a millones de personas el gozo de ser cristia-

nos, de saberse hijos de Dios. En medio detantas algaradas banales o doloro-

sas depresiones, pienso que lasalmas sienten la necesidad de

tener a su lado la sonrisa dequien vive como discípu-

lo de Cristo para servir alos demás.

¿Qué es lo esencialque el Opus Dei quie-re dejar como resul-tado de esta celebra-ción centenaria, tan-to en el ámbito de lodoctrinal-eclesiológi-co como en lo mate-rial-obras?Ha escrito y repetidomuchas veces el BeatoJosemaría que «es de

Cristo de quien tenemosque hablar, y no de noso-

tros mismos». Por eso, yoespero que los actos de ce-

lebración del centenario delBeato Josemaría aviven en

muchos hombres y mujeres laconciencia de que Cristo debe

estar en el corazón de nuestra his-toria individual, a través de un con-tinuado encuentro con Él, precisa-

mente en las circunstancias ordi-narias de la vida; y en nuestra

historia colectiva, por me-dio de la paz, de la

justicia y del per-dón. La ca-

lamidadmás

triste de un pueblo es marginar a Jesucristo, como siÉl, que ha entregado su vida por salvar la nuestra,fuera un intruso. Sería un estupendo legado del Cen-tenario volver a descubrir, y ayudar a descubrir, esehorizonte de acción que el Beato Josemaría resu-mía así: «Conocer a Jesucristo. Hacerlo conocer.Llevarlo a todos los sitios».

En el plano de las obras, el compromiso cristianoante las necesidades de los demás –al que tanto ur-gía el Beato Escrivá– está llevando a muchos a pro-mover nuevos proyectos de cooperación social y decarácter educativo, tanto en naciones del tercer mun-do como en focos de marginación localizados enpaíses desarrollados. En Nigeria, por ejemplo, se hainaugurado recientemente una escuela profesionalpara jóvenes de Lagos con pocas posibilidades delograr un trabajo. Y se iniciaron otras iniciativas se-mejantes en diversos países. Me ha causado alegríaver, durante el reciente congreso en Roma, el afán demuchos hombres y mujeres de impulsar nuevas ta-reas, yendo al fondo de urgentes necesidades, desdeel Congo a Colombia, en Asia y en Europa.

¿Desde el punto de vista jurídico y pastoral,la Prelatura personal está definitivamente con-solidada y aceptada en la Iglesia?

El Opus Dei fue erigido como Prelatura perso-nal hace casi veinte años. Pienso que es un tiempo su-ficiente para hablar de un firme asentamiento de es-ta figura jurídica, que se ha demostrado perfecta-mente adecuada a la realidad teológica y pastoraldel Opus Dei. Desde el punto de vista práctico, laconfiguración del Opus Dei como Prelatura personalha permitido mejorar la inserción de la Obra en lapastoral orgánica de la Iglesia, tanto a nivel univer-sal, como en el ámbito de las Iglesias locales.

A oscuras, sin la luz de Cristo

¿Qué diría el Beato Escrivá ante los principa-les problemas de la Humanidad: el terrorismo,la familia, la bioética...?

Siempre evitaba imponer su opinión sobre losproblemas humanos, por su delicado respeto a laslibres opciones de las personas que acudían a suconsejo, atraídas por su celo de buen pastor. Sóloquería hablar de Dios, el gran amor de su vida. Y,precisamente por esto, tenía una sensibilidad muy fi-na para descubrir los frutos de la presencia o de la au-sencia del espíritu cristiano en los hechos y situa-ciones históricas. Ante las cuestiones que se planteanactualmente, pienso que el Beato Josemaría volve-ría a recordarnos, en primer lugar, que sin la luz deCristo nos quedamos a oscuras; y que sin el amorde Cristo no sabríamos romper con nuestro egoísmo.E invitaría a considerar la dignidad del ser humanoen su condición de hijo de Dios; la necesidad depromover una paz estable entre los pueblos, sobreunas bases sólidas de justicia y de solidaridad; laimportancia de la familia, fundada en el matrimonioindisoluble, para la sociedad y para la Iglesia. Lue-go bendeciría las rectas soluciones que cada cristia-no aportara en esos puntos, de acuerdo con su crite-rio personal y su responsabilidad como fiel de laIglesia y como ciudadano.

EspañaAlfa y Omega18 21-II-2002

Ante la inminente aprobación de la fecha de canonización del Beato Escrivá de Balaguerel Prelado del Opus Dei habla para Alfa y Omega

«Sin su estar en la Iglesia, el Opus Dei se desharía»

Todo parece indicar que en el Consistorio de cardenales, que el Papa Juan Pablo IIpresidirá el próximo día 26, será aprobada la fecha para la canonización del Fundadordel Opus Dei, Beato Josemaría Escrivá de Balaguer; tal vez, según las últimasprevisiones, el 22 de septiembre. Con este motivo, Alfa y Omega ha mantenidoesta entrevista con el Prelado del Opus Dei, monseñor Javier Echevarría

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España Alfa y Omega 21-II-2002 19

¿Es creciente el papel de la mujer dentro delOpus Dei?

Bueno, yo diría que dentro y fuera. Ya desde elprincipio de las actividades del Opus Dei dirigidas amujeres, el 14 de febrero de 1930, el Beato Jose-maría afrontó esta labor en toda su amplitud. El men-saje fundacional fue expresado exactamente en losmismos términos a mujeres y a hombres, sin nin-gún tipo de diferencia. Por eso, dejando aparte elsacerdocio ministerial –reservado en la Iglesia, pordisposición divina, a los varones, como es sabido–,en el Opus Dei las mujeres han tenido y tienen res-ponsabilidades de igual importancia que los hom-bres, ni más ni menos. Cada una, en y desde su tra-bajo profesional, procura llevar la luz de Cristo alambiente en el que se mueve. Hoy, indudablemente,es grande el desafío que una mujer cristiana tienepor delante; una tarea para llenar de entusiasmo,porque cada una de ellas juega, si quie-re, un papel trascendental en la vidasocial y en la vida de la Iglesia.

¿Cuál es su relación con los nue-vos movimientos y asociaciones enla Iglesia, y con la vida religiosa?

Cuando rezo el Credo, me gusta pa-ladear cada una de las notas que defi-nen a la Iglesia: Una, Santa, Católica yApostólica. La Iglesia es intrínseca-mente una, no un conglomerado de ele-mentos dispersos. Es un organismo, uncuerpo, el Cuerpo Místico de Cristo,en el que los diferentes miembros, consu enriquecedora diversidad, se nece-sitan unos a otros. Todo el valor delOpus Dei reside en que es parte de laIglesia: sin ese estar en la Iglesia, elOpus Dei se desharía. Por eso, cual-quier otra luz que se enciende para ser-vir a Jesucristo me resulta cercana, al-go propio, expresión de la iniciativadel mismo Espíritu, del empeño poranunciar a Cristo. En el plano prácti-co, el Opus Dei procura mantener unarelación fraterna con todas las realida-des de la Iglesia. Y cuenta con el apo-yo de la oración y el cariño de tantaspersonas: por mencionar sólo un ejem-plo, más de quinientas comunidadescontemplativas son cooperadoras delOpus Dei.

¿Cuáles son las principales ac-ciones apostólicas del Opus Dei enEspaña, en el marco de la nuevaevangelización?

Como en otros países, pienso quela principal aportación de los fieles delOpus Dei a la nueva evangelización enEspaña es su apostolado personal, lalabor que cada uno desarrolla para dara conocer a Cristo en su propio am-biente. La Prelatura se ocupa de trans-mitir una formación espiritual, cristiana, viva, noteórica o intemporal, sino sensible a las circunstan-cias y desafíos del momento y a las prioridades evan-gelizadoras que proponen el Papa y –en el ámbito delas diferentes Iglesias particulares– mis hermanoslos obispos. Luego, cada uno debe procurar transmitirese mensaje en su familia, en su ambiente laboral, en-tre sus amigos, en las asociaciones a las que perte-nezca. El efecto multiplicador es grande y no se pue-de reducir a la ya amplia existencia de iniciativasde carácter educativo, social, asistencial, etc. Lo queopera Dios en el alma que se decide a seguir a Cris-to, esto es lo verdaderamente fecundo. No tendríaningún inconveniente en hacer una enumeración delas labores apostólicas, pero pienso que son de sobraconocidas.

Opus Dei, fe y cultura

¿Sobre qué bases se debe desarrollar el diá-logo fe-cultura? ¿Cuál es la principal contribu-ción de los miembros del Opus Dei al apostoladodel pensamiento?

El Beato Josemaría describió las bases de estediálogo en uno de sus libros:

«Amplitud de horizontes, y una profundizaciónenérgica, en lo permanentemente vivo de la ortodo-xia católica;

afán recto y sano –nunca frivolidad– de reno-var las doctrinas típicas del pensamiento tradicio-nal, en la filosofía y en la interpretación de la His-toria...;

una cuidadosa atención a las orientaciones dela ciencia y del pensamiento contemporáneos;

y una actitud positiva y abierta ante la trans-

formación actual de las estructuras sociales y de lasformas de vida» (Surco, 428).

Poco tengo que añadir a esas palabras. Una feque no se hace cultura está apagada, y una cultura sinfe carece de alma, de aliento para el hombre y parala sociedad.

¿Qué considera más importante: la espiritua-lidad, o la proyección social de la espiritualidad?

Tal vez exista alguna espiritualidad puramenteintimista, sin ningún tipo de proyección sobre el en-torno; y cabe también algún tipo de actividad socialsin ningún sustrato espiritual. A ninguna de las dosposibilidades se puede reducir el cristianismo. Enla Iglesia, hasta las formas más puras de vida con-templativa tienen un reflejo inmediato –riquísimo–en los demás, a través de la comunión de los san-tos; y cualquier iniciativa social está alentada nece-

sariamente por la fe, por el descubri-miento de Cristo en el rostro del nece-sitado. No veo ninguna disyuntiva en-tre espíritu y acción social. Puede haberacentos más marcados en uno u otrosentido, pero importantes –más aún,necesarias– son tanto una cosa comola otra. Jesucristo pasaba largos ratosretirado en oración, pero también tra-bajó muchos años en Nazaret, recorriótoda su tierra predicando, curando aenfermos, comiendo con amigos...,amando siempre.

En una España escindida esqui-zofrénicamente entre la fe y la vida,el testimonio de la vida ordinaria delos miembros influyentes socialmentedel Opus Dei, ¿cómo se nota?He aprendido del Beato Josemaría avalorar la unidad de vida como carac-terística fundamental de la existenciacristiana. Coincido en calificar de en-fermiza la escisión entre la fe y la vida,que no es un fenómeno exclusivamenteespañol: no siempre resulta fácil sercoherente con la fe, y no causa extra-ñeza, por tanto, que en el acontecersocial los hombres –todos– corramosel riesgo de ceder tantas veces ante lassugestiones del poder, del prestigio...,o simplemente de la comodidad. Perocada persona –yo me incluyo, comoes lógico– dará un día cuenta a Diosdel uso que haya hecho de sus talentos,del empeño que haya puesto en prac-ticar y transmitir la fuerza de la fe ydel amor cristiano a su alrededor.

Sé que en España hay personas delOpus Dei, conocidas por la opinión pú-blica, de las que es notorio que procu-ran promover ese sentido cristiano en elejercicio de su actividad. Pero no sequeda sólo en algo de unos pocos: tam-bién quienes desempeñan una tarea sin

un relieve público o notorio están llamados a ser le-vadura de Cristo en su propio ambiente, a vivificartodas las estructuras humanas, desde la base, con elespíritu cristiano.

A este estupendo descubrimiento –la verdad deque no hay trabajo pequeño si se hace en unión conCristo– se referían varios intelectuales de nivel in-ternacional, en el reciente congreso de Roma, so-bre la grandeza de la vida ordinaria. No es un des-cubrimiento reservado a gente excepcional. Diríaque Dios lleva siglos tratando de ayudarnos a com-prender, a todos los hombres y mujeres, que estámuy cerca de nosotros.

Alfa y Omega

Monseñor Echevarría, Prelado del Opus Dei, en uno de sus encuentros con miembros de la Prelatura

La Iglesia es intrínsecamenteuna, no un conglomeradode elementos dispersos.

Es un organismo, un cuerpo,el Cuerpo Místico de Cristo,

en el que los diferentesmiembros, con su

enriquecedora diversidad,se necesitan unos a otros

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Jesús Colina. Roma

Juan Pablo II acaba de exhortar aldiálogo nacional –que «excluye laviolencia»– y a un serio examen

de conciencia, como condiciones in-dispensables para que Argentina su-pere la crisis actual, que, en último tér-mino, es moral, aseguró.

Al encontrarse con los obispos ar-gentinos, que concluían su quinque-nal visita ad limina Apostolorum, a lasede de Pedro, el Pontífice hizo un aná-lisis de la coyuntura argentina con pa-labras de esperanza y, al mismo tiem-po, de realismo. «Vuestro país –aña-dió– atraviesa en estos momentos unaprofunda crisis social y económica queafecta a toda la sociedad y, además,pone en peligro la estabilidad demo-crática y la solidez de las institucionespúblicas, con consecuencias que vanmás allá de las propias fronteras pa-trias. En muchos hogares falta hastalo más básico e indispensable, po-niendo a tantas personas ante un futu-ro lleno de riesgos e incertidumbres».

Esta situación –aseguró el Papa–«debe llevar a un serio examen de con-ciencia sobre las responsabilidades decada uno y las trágicas consecuenciasdel egoísmo insolidario, de las con-ductas corruptas que muchos denun-cian, de la imprevisión y mala admi-nistración de los bienes de la nación».Según el Papa, «en la raíz de esa pe-nosa situación hay una profunda crisismoral», y por ello el primer paso quedeben dar los argentinos es el del «cul-tivo de los valores morales». En espe-cial –indicó–, «la austeridad, el sen-tido de la equidad y de la justicia, la

cultura del trabajo, el respeto de la leyy de la palabra dada».

En la situación actual, el Pontíficeexplicó que a la Iglesia no le corres-ponde indicar las recetas económicasque pueden servir para que Argenti-na salga de la crisis. Ahora bien –su-brayó–, «ello no impide que ofrezcasu colaboración para favorecer un diá-logo nacional entre todos los respon-sables, a fin de que cada uno puedacooperar activamente a la superaciónde la crisis».

La Iglesia católica en Argentina seha convertido en garante, junto a lasNaciones Unidas, del proceso de diá-logo nacional lanzado por el Presidenteargentino Eduardo Duhalde, el 14 deenero pasado, en respuesta a la crisis.En este proceso de diálogo, la Iglesiaaporta el ámbito de debate y sus buenosoficios, mientras que la ONU ofreceasistencia técnica.

«El diálogo excluye la violencia en

sus diversas expresiones –advirtió JuanPablo II–, como son muertes y saque-os, y ayuda a construir un futuro máshumano con la colaboración de todos,evitando de ese modo un radical em-pobrecimiento de la sociedad. Es opor-tuno recordar que la situación socialno mejora tan sólo aplicando medidastécnicas, sino también, y sobre todo,promoviendo reformas con una basehumana y moral, que tengan presenteuna consideración ética de la perso-na, de la familia y de la sociedad». ElPapa, que acaba de donar 100 mil dó-lares a Cáritas para alentar el com-promiso a favor del país sudamerica-no, pidió a los católicos atender «a losjubilados, los desempleados, y a losque lo han perdido todo en las revuel-tas».

Otras noticias de dolor nos vienende otro país hispanoamericano. Se tra-ta de Venezuela. Como ha afirmadoel representante venezolano ante el

Vaticano, don Ignacio Quintana, endeclaraciones al diario caraqueño ElUniversal, «en la Santa Sede hay do-lor. Así me lo han expresado las másaltas autoridades de la Secretaría deEstado». Uno de los últimos gestos delos ataques contra la Iglesia fue cuan-do el centro de Caracas amaneció em-papelada con carteles en los que se re-clamaba una Iglesia al servicio de lospobres, y se calificaba a la jerarquíacatólica de fariseos e hipócritas. Setrata de las mismas acusaciones que,en días pasados, hizo públicas el man-datario venezolano. Recientemente elPresidente Chávez había pronuncia-do durísimas acusaciones contra losobispos venezolanos, por no formarparte de su revolución. Atacó tambiénen público al Nuncio Apostólico, elarzobispo André Dupuy, quien le ha-bía pedido prudencia en sus declara-ciones públicas.

El gobernante, que dice ser católi-co practicante, calificó de tumor a laIglesia, y dijo que los obispos «no an-dan por el camino de Dios», por nosumarse a su política. «Los recientesactos, juicios y expresiones denigran-tes del Presidente y de algunos miem-bros del Gobierno resultan totalmenteinadmisibles», declaró en un comuni-cado la Conferencia Episcopal Vene-zolana. Tras los ataques, los obisposvenezolanos rechazaron reunirse conel Presidente Hugo Chávez.

Representantes de la Iglesia católica han aplau-dido el acuerdo logrado entre el Gobierno y

las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colom-bia (FARC), que permite continuar con el proce-so de paz alcanzado recientemente. El Alto Co-misionado para la paz, Camilo Gómez, ha anun-ciado que el Gobierno de Andrés Pastrana y lasFARC han alcanzado un acuerdo para continuar elproceso de paz y prorrogar la zona desmilitariza-da de los rebeldes. Por su parte, el Presidente co-lombiano, Andrés Pastrana, ha anunciado una pró-rroga de la zona de distensión (área desmilitari-zada sede de los diálogos de paz) hasta el próximo10 de abril, tres días después de que se firme elacuerdo de alto el fuego, según el documento sus-crito por el Gobierno y las FARC. El mandatario

anunció también que, mientras se llega al alto elfuego definitivo, el Gobierno espera alcanzaracuerdos parciales que eliminen el secuestro, laextorsión, el reclutamiento de menores de edad yotros temas que perjudican directamente a la po-blación civil.

A la reunión también asistieron, como facilita-dores, los diez embajadores de los países amigos,el enviado especial de la ONU, James Lemoyne, y elarzobispo Alberto Giraldo, Presidente de la Confe-rencia Episcopal Colombiana. Monseñor Giraldoanunció su respaldo al cronograma de trabajo, yagradeció a la comunidad internacional, a los paísesamigos del proceso y a la ONU su valioso aportepara que se pudiera dar este acuerdo. «El Papa dijouna vez: Habrá paz sólo cuando todos entendamos

que todos somos una gran familia. Esta experien-cia de encuentro de la gran familia internacionalaquí en el Caguán, ha sido un anuncio de la necesi-dad de reconciliación de toda la familia colombiana»,estimó, reafirmando el propósito de la Iglesia deacompañar el proceso y de buscar la paz en Colom-bia. De no haberse logrado el compromiso, el ejér-cito colombiano habría entrado por la fuerza en unenclave de 42.000 kilómetros cuadrados (equiva-lente a dos veces el tamaño de El Salvador), contro-lado por la guerrilla. Se temía un baño de sangre. Des-de hace tres años tienen lugar intermitentes negocia-ciones de paz entre el Gobierno y las FARC, con el ob-jetivo de acabar con 38 años de una guerra internaque ha acabado con la vida de más de 40.000 personasen la última década.

Colombia: El Gobierno y las FARC aprueban un programa para alcanzar el alto al fuego

La Iglesia apoya el proceso de paz

MundoAlfa y Omega20 21-II-2002

La colecta de este domingo estará destinada a ayudar a Argentina

Dolor por HispanoaméricaComo respuesta a la dolorosa situación en Argentina, el próximo domingo, la Conferencia Episcopal Española y Cáritas España

llevarán a cabo una campaña para ayudar al pueblo argentino. Por este motivo, la colecta dominical en todas las iglesias de Españaestará destinada a ayudar a nuestros hermanos en aquel país tan querido para España. Asimismo Cáritas ha preparado

unos materiales con el fin de sensibilizar a la sociedad española, y tiene abierta una cuenta bancaria

Cáritas por ArgentinaCuenta corriente BSCH:

0049/0001/51/2710079979Teléfono habilitado: 902339999

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Mundo Alfa y Omega 21-II-2002 21

J.C. Roma

La decisión de Juan Pablo II deelevar a diócesis las Adminis-traciones apostólicas de Rusia

ha provocado ataques sin precedentesdel Patriarca Alejo II contra Roma. Ellíder de la Iglesia ortodoxa rusa conel mayor número de fieles del mundoha calificado este gesto nada menosque como «un desafío a la Ortodoxia».

Para el Papa, una visita pastoral aMoscú queda ahora más lejos de Ro-ma, pues Vladimir Putin y él mismoestán convencidos de que un viaje deesas características sólo puede serfructífero con la bienvenida de la Igle-sia ortodoxa.

Si se razona con lógica occidental,la furia del Patriarcado parece incom-prensible. En realidad, para la Iglesiacatólica en Rusia no cambiará nada:se trata de una cuestión de normaliza-ción jurídica, formal. Los cuatro obis-pos católicos ya habían sido consa-grados desde hace años y no aumen-tará, al menos por este motivo, el nú-mero de sacerdotes ni de estructuraspastorales. El territorio pastoral per-manecerá inalterado.

El Patriarca de Moscú y el SantoSínodo se escandalizaron en un co-municado oficial de protesta (sor-prendentemente plagado de erroreshistóricos y jurídicos) por la creaciónde una archidiócesis católica en la ca-pital rusa, considerando que esta rea-lidad no existía ni siquiera en muchospaíses católicos. Nadie en el Patriar-cado, antes de redactar el texto, habíaleído el Derecho Canónico de la Igle-sia católica para darse cuenta de que larealidad de una archidiócesis (sedemetropolitana) es totalmente normaly obligada, algo muy diferente al con-cepto ortodoxo de arzobispo metro-politano, que equivale más bien a loque los católicos consideraban antescomo el primado.

El comunicado patriarcal conteníaerrores históricos mucho más graves,que han sido rebatidos, punto por pun-to, por el nuevo arzobispo católico deMoscú, monseñor Tadeusz Kondru-siewicz. Alejo II decía que nunca exis-tieron diócesis católicas en el territo-rio de la Iglesia ortodoxa rusa. Un su-perficial repaso de la historia de Rusiasirve para darse cuenta de que la pri-mera diócesis católica en Rusia se creóen 1773. Curiosamente, aquella dió-cesis no surgió por deseo del Papa, si-no por voluntad de la emperatriz Ca-talina II. Las cuatro nuevas diócesisen Rusia son: la archidiócesis metro-politana, de la Madre de Dios, deMoscú, la diócesis de San Clemente,en Saratow, la diócesis de la Transfi-guración, en Novosibirsk, y la dióce-sis de San José, en Irkutk.

El centro de los ataques del Pa-triarcado ortodoxo se concentra en lafamosa acusación de proselitismo. LaIglesia ortodoxa rusa, tras el terribledesgaste de las décadas comunistas ycon una práctica religiosa que no lle-ga al 3%, ve con pavor la presencia desacerdotes católicos. En realidad, loscatólicos no son más que 1.300.000bautizados. Por otra parte, tan sólo unainstitución católica, Ayuda a la IglesiaNecesitada, ha donado en estos últi-mos diez años al Patriarcado de Mos-cú 19.479.775 euros, que sirven parapagar los sueldos de los sacerdotes or-todoxos, muchos de ellos casados yen situaciones que rayan en la mise-ria.

En realidad, la protesta del Patriar-cado plantea más bien una cuestiónde fondo: la libertad religiosa. La Igle-sia rusa se acoge al principio del te-rritorio canónico, según el cual uncristiano en tierras rusas sólo debe serortodoxo. En virtud de este principio,el Patriarcado niega la libertad reli-giosa de los católicos rusos. Por estemotivo, el Vaticano, como respuesta

a los ataques, planteó una pregunta:¿acepta el Patriarcado la libertad deculto, conciencia y religión?

Roma ha recordado que el Patriar-cado de Moscú cuenta con diócesis enpaíses que ellos consideran como te-rritorio canónico católico (Austria,Bélgica, Francia, etc.) y que nunca hapedido su permiso a Roma, ni Romaha discutido este derecho.

Razones

Sigue en pie una pregunta de fon-do. Si el Papa ya sabía cuál iba a serla reacción ortodoxa ¿por qué ha da-do este paso? La respuesta hay queencontrarla en una comida que man-tuvo el Pontífice hace algo más de unaño con obispos de Rusia y Ucrania.Los católicos (en particular los de ri-to oriental) le hicieron llegar al Papael sentimiento de que se sentían aban-donados. Tras décadas de persecu-ción comunista terrible, ahora tení-an la impresión de que se les sacrifi-caba, en aras de las buenas relacio-nes con el Patriarcado de Moscú. Poreste motivo –pensaban–, Roma no re-conocía ni siquiera su realidad jurí-dica. En plena comida, el Papa dijo:«Como obispo de Roma, no puedoabandonarlos». En ese momento, de-cidió visitar a las comunidades cató-licas mártires de Ucrania, a pesar deque Alejo II se opuso frontalmente aaquella visita. Por ese motivo, nor-maliza ahora la realidad del catoli-cismo ruso.

La crisis actual tiene una ventaja: seha tocado fondo. Las relaciones conel Patriarcado no podrían ser peores.Ahora es el momento de seguir recu-perando la confianza ortodoxa, conpaciencia (llevará décadas) y con eltestimonio del amor cristiano, de-mostrando que católicos y ortodoxostienen una misma misión: el anunciode Cristo y de su Evangelio.

Las armascristianas

paracombatir

el mal

Apártate, Satanás» (Mar-cos 4, 10).

La actitud decidida delMesías constituye para no-sotros un ejemplo y una in-vitación a seguirlo con va-liente determinación. El de-monio, príncipe de estemundo (Juan 12, 31), conti-núa todavía hoy con su ac-ción falaz. Todo hombre estentado por la propia con-cupiscencia y el mal ejem-plo de los demás, así comopor el demonio, y es mástentado aún cuando menoslo percibe. ¡Cuántas vecescon ligereza cede a las fa-laces lisonjas de la carne ydel Maligno, y experimentadespués amargas desilu-siones! Es necesario seguirsiendo vigilantes para reac-cionar con prontitud a todoataque de la tentación.

La Iglesia, experta ma-estra de humanidad y desantidad, nos señala instru-mentos antiguos y siemprenuevos para afrontar el dia-rio combate contra las su-gerencias del mal: la ora-ción, los sacramentos, lapenitencia, la escucha aten-ta de la Palabra de Dios, lavigilancia y el ayuno.

Emprendamos con ma-yor compromiso el caminopenitencial de la Cuaresmapara estar preparados avencer toda seducción deSatanás y llegar a la Pas-cua en la alegría del Espíri-tu.

(17-II-2002)

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Una normalización esperada

4 diócesis en Rusia

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La vidaAlfa y Omega22 21-II-2002

La dirección de la semana

La ONG Dominicans for Justice and Peace, de los padres de laOrden de Predicadores, ha sido reconocida como organismo

consultor del Consejo Económico y Social de la ONU. Esta ONG fuefundada en 1998, para trabajar de manera particular en la Comisiónde Naciones Unidas para los derechos humanos en Ginebra. Coneste reconocimiento, pueden participar con derecho propio en lasdiversas sesiones de trabajo de la ONU, y en las reuniones cum-bre del ECOSOC y de los organismos que enlazan a éste con el res-to del sistema de Naciones Unidas.

http://www.fiop.org/background/dominican.html

Internethttp://www.fiop.org/background/dominican.html

Nombres propios

La iglesia parroquial de San Pedro Apóstol, en el barrio de Ver-salles de la diócesis cubana de Matanzas, joya arquitectónica de

indiscutible valor histórico y artístico, está siendo restaurada graciasal entusiasmo y al empeño de los frailes franciscanos conventua-les, padres Silvano Castelli, Fernando Maggiori y Roberto Car-boni, italianos como el arquitecto que la proyectó en 1870. Es ad-mirable el tesón de los católicos cubanos que, pese a las dificultadesdel régimen comunista de Castro, sostienen publicaciones como Vi-da cristiana, o Iglesia peregrina, en la diócesis de Matanzas.

La Fundación Independiente y la Fundación Santa Maríaconvocan el IV Concurso nacional Háblame de tu abuelo/a. Há-blame de tu nieto/a, con el fin de potenciar el encuentro interge-neracional. Más información: Tel. 91 388 09 94.

El Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales acaba de premiar lalabor de los Centros juveniles salesianos, a favor de la solidari-dad, concediendo la Cruz de Plata de la Orden Civil de la SolidaridadSocial a la Confederación de Centros juveniles Don Bosco.

Tan cerca, tan lejos: la cuestión del otro en un mundo globalizadoes el tema del II ciclo de cine de valores San Pablo-CEU, organizadopor don Juan Orellana. Intervendrán también don Alfonso Co-ronel de Palma, don José Luis Pallarés, don José Alberto Parejo,don Jerónimo J. Martín, don Javier Restán y don Alberto Fijo.

El ex Rabino de Roma, Elio Toaff, se ha mostrado convencidopartidario de la necesidad de constituir un Estado palestino y pro-mover las vías de paz y de colaboración que lo hagan posible.

Don Alberto de la Hera, don Jesús Poveda, don Eugenio Na-sarre, don José T. Raga y don Antonio Vázquez Galiano ten-drán a su cargo las Conferencias cuaresmales este año en la pa-rroquia del Santísimo Corpus Christi-Buen Suceso (calle Princesa,43), a las 20.30 h., los días 25 de febrero y 4, 11 y 18 de marzo.

Unos 450 sacerdotes de la OCSHA (Obra de Cooperación Sa-cerdotal Hispanoamericana) trabajan en Iberoamérica; cada año seles unen 10 o 15 nuevos sacerdotes misioneros. El arzobispo de Se-villa, monseñor Amigo Vallejo, Presidente de la Comisión epis-copal de Misiones, y don Anastasio Gil García, Director del co-rrespondiente Secretariado, han presidido y participado en dosencuentros, con 106 sacerdotes de la OCSHA, en Perú.

El pasado 14 de febrero comenzó una interesante iniciativa dela Universidad Católica San Antonio, de Murcia: un curso en el queprofesores de Bioética responden, bajo demanda, a cuestionesbioéticas, exponiendo las razones por las que la Iglesia se pro-nuncia en temas como aborto, eutanasia, fecundación in vitro, etc.Participan los profesores doctoras Menárguez Carreño y Tomásy Garrido, y doctores Sánchez Abad y Modesto Ferrer.

Monseñor Fidel Herráez, obispo auxiliar de Madrid, ha presidi-do un Encuentro de oración y las Jornadas de Pastoral de la salud,con motivo del Día mundial del enfermo, y han participado donJusto Bermejo, doña Teresa de la Parra y don Javier Rivas.

La Facultad de Teología San Dámaso, de Madrid, ofrece el jue-ves 28 de febrero, a las 12 h. (calle San Buenaventura, 9), la con-ferencia del profesor José Miguel Odero, de la Universidad deNavarra: Entre el mito y la realidad: la magia narrativa de Tolkien.

Comunión y Liberación: 20 años

Con intensa participación meuno a la alegría de la Fra-

ternidad de Comunión y Libe-ración, en el 20 aniversario desu reconocimiento, por partedel Consejo Pontificio para losLaicos, como Asociación de fie-les, de Derecho pontificio. Yaen 1954, usted, queridísimomonseñor Giussani, había da-do origen en Milán al movi-miento Comunión y Liberación,que había ido difundiéndose enotras partes de Italia y, a conti-nuación, también en otros Pa-íses del mundo. La Fraternidadconstituye el fruto maduro deeste movimiento. En este felizvigésimo aniversario, me esparticularmente grato recorrerlos pasos significativos del iti-nerario eclesial del movimiento, para dar gracias a Dios por todo lo queÉl ha obrado, a través de su iniciativa, Reverendo monseñor, y la decuantos se han unido a usted en el curso de los años. Es motivo de con-suelo recordar las vicisitudes a través de las cuales se ha manifestadola acción de Dios, y reconocer juntos la grandeza de su misericordia»: és-te es el primer párrafo de un emotivo y largo mensaje de dos folios queel Papa Juan Pablo II ha dirigido el 11 de febrero de 2002, fiesta de la Vir-gen de Lourdes, a monseñor Luigi Giussani, Fundador del movimientoComunión y Liberación. «El cristianismo –dice el Papa–, antes de ser unsistema doctrinal o una norma de salvación, es el acontecimiento de unencuentro. Os exhorto –concluye– a cooperar, con constante concienciaresponsable, a la misión de las diócesis y de las parroquias, ampliandovalientemente su acción misionera hasta los últimos confines del mun-do».

Los dos elementos esenciales del carisma de este Movimiento son: elanuncio de que Dios se ha hecho hombre, compañía histórica en nues-tro caminar de hombres, y la afirmación de que Jesús de Nazareth estápresente en un signo de concordia, de comunión, de comunidad, deunidad: la Iglesia, su Cuerpo misterioso.

El 3 de febrero, don Giussani dirigió una carta al Corriere della Sera,el diario de mayor tirada en Italia, comentando la Jornada de Oración con-vocada por Juan Pablo II en Asís, y explicando la participación gozosa delmovimiento en dicho Encuentro. Subrayaba el realismo del Papa, y con-cluía dándole las gracias «por darnos ejemplo continuamente en este lu-gar de batalla que es el mundo, para los cristianos y los no cristianos».

El próximo 26 de febrero, tendrá lugar en Madrid, a las 20,30 h., en elAula Ramón y Cajal de la Facultad de Medicina de la Universidad Com-plutense, la presentación de la nueva edición del volumen II del Curso bá-sico de cristianismo de don Giussani: Los orígenes de la pretensión cris-tiana, a cargo de monseñor Fernando Sebastián y don Eugenio Nasarre.

Iglesia-Estado, en FranciaAl concluir un encuentro entre el Primer ministro francés Jospin y los

máximos representantes de la Iglesia católica, la Iglesia y el Estadofrancés han constatado una neta mejoría en sus relaciones recíprocas,tras decenios de tensión –informa Zenit– a causa de proyectos de ley so-bre uniones de hecho, aborto, experimentación con embriones, etc. LosAcuerdos que rigen desde 1923 estas relaciones siguen pareciendo sa-tisfactorios a ambas partes, que coinciden en reconocer que la Iglesia nopuede ser arrinconada al ámbito de la esfera privada.

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Monseñor Luigi Giussani, con Juan Pablo II

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La vida Alfa y Omega 21-II-2002 23

Dios y el mundo es un libro-entrevista enel que el cardenal Joseph Ratzinger,

Prefecto de la Congregación para la Doc-trina de la Fe, se expresa, en un estilo in-sólitamente confiado y libre, sobre tres gran-des y fundamentales cuestiones: el cristia-nismo, Cristo, y la Iglesia.

A las puertas de sus 75 años, fecha enque, por edad, los obispos presentan al Pa-pa su renuncia, Ratzinger no acaba deasombrar, y encuentra un realista y espe-ranzado optimismo entusiasta para volvera proponer, desde estas páginas lumino-sas, la fe en Jesucristo.

Dio e il mondo, que es el título de este li-bro editado en italiano por San Paolo, tiene

como sub-título: Sercristianosen el nue-vo mile-nio, y esuna suge-rente invi-tación aacercarsesin prejui-cios a la fecristiana,con la se-guridad deun sor-prendentey gozosoencuentro

de vida verdadera. Peter Seewald es el mis-mo periodista con el que Ratzinger mantu-vo, en 1996, el coloquio que dio lugar al li-bro La sal de la tierra, ya traducido al cas-tellano. Esperemos que éste lo sea prontotambién.

Comienza con esta provocadora pre-gunta: ¿Alguna vez tiene usted miedo deDios? La respuesta es: «Yo no hablaría demiedo. Gracias a Cristo sabemos cómo esDios. Sabemos que nos ama, y Él sabe có-mo somos y cómo estamos hechos. Sabeque somos carne, que somos polvo; poreso nos acepta con nuestras debilidades.De todos modos, siempre noto la quemazónde la inquietud de mi falta de adecuacióna la idea que Dios tiene de mí, de lo queyo podría y debería dar. Para eso está elsacramento de la Penitencia, y Dios no esun gendarme ni un juez. A los católicos nosanima la fuerte convicción del perdón deDios».

Cuando el periodista le pregunta por suexperiencia de fe, recurre a esta preciosametáfora: «Es como una crecida silencio-sa. Como cuando, desde las aguas pocoprofundas de la orilla, se nos lleva lenta-mente y con prudencia, cada vez más aden-tro, hasta que empezamos a notar los signosdel océano que sale a nuestro encuentro».

Le pregunta el periodista qué aspecto tie-ne Dios, y responde: «Jesús nos dijo unavez: Quien me ve a mí ve al Padre».

Bastan estas simples pinceladas inicialesdel libro, para comprender que se trata de unauténtico y maravilloso regalo. Uno más delcardenal Ratzinger.

M.A.V.

El chiste de lasemana

Libros de interés

Ventura & Coromina, en La Vanguardia

Velar: nueva revista católica

Velar –que «es algo más que hacer guardia», como dice E.T. Gil deMuro refiriéndose a las religiosas Siervas de Jesús– es el título de

la revista de actividades sociales y asistencia al necesitado, cuyo número1, correspondiente a enero de 2002, acaba de aparecer, editado por laCongregación de Siervas de Jesús, bajo la dirección de don Eduardo T.Gil de Muro. La revista, magníficamente editada e ilustrada a todo co-lor, recoge la crónica puntual de la vida y actividades de esta benemé-rita Congregación. En la portada de este número, la madre Mercedes deMiguel, Superiora General, con otras Siervas de Jesús, en Loja, Ecua-dor.

15.000 jóvenes neocatecumenales con el cardenal Rouco en Madrid

Alrededor de 15.000 jóvenes de co-munidades neocatecumenales de

España y de Portugal tuvieron un en-cuentro vocacional, el sábado pasado,en la plaza de Toros cubierta de Lega-nés (Madrid). Presidió el acto el car-denal arzobispo de Madrid, don AntonioMaría Rouco, y el obispo de la diócesisde Getafe, monseñor Golfín. Los ini-ciadores de este Neocatecumenado,Kiko Argüello y Carmen Hernández,comentaron el mensaje del Papa parala XVII Jornada Mundial de la Juven-tud que se celebrará en la ciudad ca-nadiense de Toronto –especialmentemulticultural y fuertemente seculariza-da–, cuyo lema este año es Vosotrossois la luz del mundo, vosotros sois lasal de la tierra. La predicación de Car-men a los jóvenes giró en torno a la fi-gura bíblica de José, el justo, que renunció al placer sexual, al adulterio con la mujer de Pu-tifar, ajustándose así a la voluntad de Dios; por ello fue capaz de dar de comer a numerosospueblos hambrientos. Se revela así un vínculo entre la castidad y la justicia. Por otra parte, Ki-ko, con una predicación existencial del Kerigma –anuncio de la muerte y resurrección de Je-sucristo–, que siempre hace resonar la fe en el corazón de los oyentes, exhortó a los jóvenesa ofrecer sus vidas al plan salvador de Dios, sin miedo al futuro y confiados en los donesdel Espíritu Santo. Tanto el cardenal de Madrid como el obispo de Getafe animaron a estosmiles de jóvenes a estar con el Papa el 25 de julio en Toronto. Aquellos procedentes de Por-tugal y de las zonas más alejadas, fueron acogidos por las parroquias de Madrid para cele-brar la Eucaristía y rezar Laudes, la mañana del domingo, por los frutos de la próxima JornadaMundial de la Juventud. Sin duda, este encuentro vocacional impulsará a miles de jóvenes es-pañoles a la peregrinación de este verano a la ciudad de Toronto.

E. Bonete

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El pueblo de Israel crecía dentro de Egipto yllenaba aquella tierra. El rey de Egipto, queobservaba esto, pensaba:«El pueblo de

los hijos de Israel es más nu-meroso y fuerte que nosotros.Tenemos que ser astutos e im-pedir que siga creciendo, por-que si alguna vez tenemos unaguerra, seguro que se juntan connuestros enemigos».

Así que los egipciosles impusieron a los he-breos, o israelitas, lostrabajos más du-ros y les tra-taron comoesclavos.Además, elrey ordenóque todoslos niños he-breos quenaciesenfuesen arro-jados al río,y dejaran vi-vir sólo a lasniñas.

Un día,una mujer is-raelita tuvoun bebé. Eraniño, y lo en-contró tan bo-nito que lo ocultódurante tres meses.Llegó un momento en que nopudo tenerlo escondido por más tiem-po, así que decidió meterlo en una cesta, y de-jarlo en la ribera del río Nilo. La hermana delbebé se quedó por allí para vigilar bien lo quepasaba. En esos momentos, la hija del faraón,el rey de Egipto, bajaba al río a bañarse acom-pañada de sus doncellas. Fue ella la que des-

cubrió la cestita y comprobó que había dentroun bebé llorando. Se compadeció la joven delniño, pues enseguida comprendió que era un hi-

jo de hebreos, y lo sacó de allí. En ese ins-

tanteapareció la

hermana del bebé, y le preguntó a la hija delfaraón: «¿Quiere usted que vaya a buscar en-tre los hebreos a una niñera para que críe alniño?» Y de esa manera el bebé fue entregadoa su verdadera madre, que lo crió hasta que

fue mayor. Entonces la madre se lo llevó a la hi-ja del faraón, que lo acogió como a un hijo y lepuso de nombre Moisés, porque se dijo «Delas aguas lo saqué» (es lo que significa la pa-

labra moisés).Moisés crecía con la hija

del faraón, y cuandoya iba siendo adulto,

salía a veces a vera su gente. Cuan-do estaba conellos veía lo malque se portabanlos egipcios conlos hebreos y lomucho que sufríasu pueblo. Undía, vio cómo unegipcio maltrata-ba a un israelita,y dejándose lle-var por la cólera,mató al egipcio.Este hecho llegó a

oídos del faraón, ya Moisés no le que-

dó más remedio quehuir a otras tierras,

donde el faraón no le en-contrase. De esta forma

Moisés se refugió en la tie-rra de Madián. Allí tomó poresposa a Séfora, que le dioun hijo.

Mientras Moisés estaba entierras extranjeras, Dios se acor-

daba del pueblo de Israel, que se-guía atormentado bajo el pueblo egipcio, y sesirvió de Moisés para liberar a su pueblo.¿Queréis saber cómo lo hizo? Pues a Moisésle ocurrió una cosa muy extraña, pero ten-dréis que esperar al próximo capítulo para po-der leerlo… ¡No os lo perdáis!

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Desde la feAlfa y Omega24 21-II-2002

EEll ppeeqquueeaallffaaTextos: A. Llamas Palacios. Ilustraciones: Elena de la Cueva

http://www.alfayomega.es

MMooiissééssHistorias de la Biblia

Título: ¿La has visto?Autor: Xavier P. DocampoIlustraciones: Xosé CobasEditorial: Magisterio-Casals

AZita le encantan los cuentos. Pero una vez lee uno que la conmueve especialmente. A partir de aquel cuen-to, Zita tiene una inquietud que le hará buscar sin descanso algo que ansía con todo su corazón. En su

búsqueda conoce a un Hacedor de cuentos y a un Hacedor de estampas, que le ayudarán a conseguir suobjetivo. Es un libro muy original, y lleno de fantasía para niños a partir de 12 años. A su autor, Xavier P. Do-campo, le han concedido el Premio Nacional de Literatura Infantil.

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PasatiempoVamos a ver si has estado atento a las historias de la Biblia! ¿Serías capaz de responder a estas

preguntas? Si no te acuerdas de la solución… ¡A buscar las respuestas!

SOLUCIONES: 1.c - 2. b - 3. c - 4. c

Desde la fe Alfa y Omega 21-II-2002 25

En Internet se puede leer un montón de cosas interesantes. Pe-quealfa, por ejemplo, se encuentra en Internet, dentro de la páginaweb de Alfa y Omega: www.alfayomega.es. En esta versión digital

del Pequealfa se encuentran las mismas secciones de siempre: Historiasde la Biblia, Ven y sígueme, Pasatiempos, Libros, Noticias, pero, además,podréis encontrar un apartado donde veréis muchas de oraciones paratodos los momentos de la vida, frases y cuentos para reflexionar…, y, siqueréis, podéis leer todas las historias de la Biblia publicadas en Alfa yOmega, todas las noticias, los pasatiempos…

En el Pequealfa digital tenéis la posibilidad de escribir vuestras opi-niones sobre lo que queráis, vuestras inquietudes, vuestras peticiones,ideas o consejos.

¡¡PPeeqquueeaallffaaeennIInntteerrnneett!!

OOrraacciióónnOigo en mi corazón: Buscad mi rostro.Tu rostro buscaré, Señor,no me escondas tu rostro.El Señor es mi luz y mi salvación,¿a quién temeré?El Señor es la defensa de mi vida,¿quién me hará temblar?Una cosa pido al Señor,eso buscaré:habitar en la casa del Señortodos los días de mi vida.

PPaarraa ppeennssaarr

Es muy fácil sentirse solo en algunos momen-tos de nuestra vida. Sabemos que Jesús es-

tá ahí, aunque no siempre le sentimos, sobre to-do cuando estamos tristes. Pero hay un ejemploen la historia de la Iglesia muy claro de fe y con-fianza en Dios a pesar del miedo, la inseguri-dad…, todo lo que siempre aparece ante los retos.

El ejemplo del que hablamos es Abraham,y decimos que es un ejemplo de fe porqueconfió en Dios y, ante Su llamada, no dudó, lodejó todo y emprendió el camino que Dios lemostraba. Abraham se lanzó nada menos queal desierto sólo porque Dios se lo había pedi-do. «Sal de la tierra y de la casa de tu padre,hacia la tierra que te mostraré», le dijo el Se-ñor a Abraham, y Abraham depositó toda suconfianza en el Señor, y le fue fiel a su Pala-bra.

En la oración hoy le pedimos al Señor podertener algo así como las armas para serle fieles.Y Él nos da una clave: «Buscad mi rostro»,porque sólo en constante búsqueda podre-mos encontrarlo. En estos días de Cuaresmahay que abrir bien los ojos y los oídos, estarbien atentos e iniciar la búsqueda que nos lle-ve a su encuentro. Y dejar la pereza a un lado,dejar la comodidad del que se deja llevar; por-que sí; quién sabe a dónde; qué más da…¡Vamos! Sal de tu pueblo, de tu hogar, abrelos ojos, busca su rostro… Eso es precisa-mente rezar. Y es muy fácil porque, en realidad,es el Señor quien sale el primero a nuestroencuentro.

TTeessttiimmoonniioo::

Lucha siempre, aunque no sientas nada,aunque el estado de ánimo no te favo-

rezca. Acuérdate de santa Teresita: «¿Dón-de estaría vuestro mérito si sólo lucháis cuan-do tenéis ganas de luchar?»

Padre Tomás Morales, SJ

VVeenn yy ssíígguueemmee

1. La mujer de Abraham se llamaba:a) Raquelb) Agarc) Sarad) Ruth

2. Abel era:a) Agricultorb) Pastorc) Comercianted) Artesano

3. AMoisés lo dejaron dentro de una cesta en el río:a) Danubiob) Zambezec) Un afluente del Volgad) Nilo

4. José era hijo de:a) Abrahamb) Esaúc) Jacobd) Neftalí

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J.F.S. / B.R.M.

Eminencia, ¿cuál es la ense-ñanza del histórico encuen-tro de Asís?

La enseñanza de Asís es –como elSanto Padre escribió en su Mensajepara la Jornada de la Paz del 1 de ene-ro– que «no hay paz sin justicia, y nohay justicia sin perdón». Vemos trescosas coherentes: el 14 de diciembre,la oración y el ayuno por la paz; el 1 deenero, el Mensaje de la Jornada de laPaz para el mundo; y, la tercera, el 24de enero, la Jornada de oración enAsís. Tres momentos coherentes. Larelación entre los dos días de oraciónestá entre medias: el Mensaje del San-to Padre. Este Mensaje habla de la jus-ticia y del perdón. Porque si, despuésdel 11 de septiembre, solamente se ha-bla de la justicia, no se puede esperaruna paz duradera, una paz verdadera.Solamente habrá justicia y venganza.La paz unilateral siempre es frágil. Lapaz debe ser, a su vez, bilateral: per-donar y también pedir perdón, de talforma que se reconozcan además lasinjusticias de cada parte. Y así, con elperdón, la paz es la reconciliación sin-cera de dos partes, y solamente así hayuna paz que puede durar mucho tiem-po. Aquí está el valor del mensaje delSanto Padre. Y esto lo propone conun gesto de oración con todas las reli-giones del mundo.

Después del 11 septiembre, elpensamiento laico ha acusado a lareligión de estar en la raíz del fun-damentalismo, causa de este con-flicto. ¿Cuál es hoy la contribuciónde la fe al mundo?

La fe es una gran contribución fren-te a esos hechos, porque todas las re-ligiones son una voz de condena de laideología que usa la religión comocausa del terrorismo. Una condena deeso, hecha por todas las religiones, eraalgo muy importante.

¿En qué momento de la Historiase encuentra el diálogo entre las re-ligiones, y el ecumenismo?

El diálogo se da siempre en variospaíses, pero, sobre todo, durante y des-pués del Concilio Vaticano II. El PapaPablo VI, con gestos de humildad ysinceridad con el Patriarca Atenágoras,mostró una determinación firme en eldiálogo interreligioso. Pablo VI ins-tituyó el Consejo Pontificio de diálo-go interreligioso y también el Conse-

jo Pontificio de la Unidad entre loscristianos. Y el Papa Juan XXIII mos-tró su deseo de proceder muy veloz-mente en el ecumenismo.

¿Cuáles cree o considera que sonlas causas fundamentales del malen el mundo?

Las causas fundamentales del malen el mundo son múltiples: el egoís-mo, la soberbia, el interés –tambiénel interés económico o financiero–, lahegemonía de la fuerza superpotente,etc…Y estas causas crean una situa-ción de injusticia sobre los pueblosque, a su vez, crean una reacción tam-

bién de estos pueblos. Todo tipo dehegemonía.

¿Qué efectos ha producido el co-munismo en la historia de la Hu-manidad?

El comunismo tiene un efecto muygrande y muy destructivo. Si vemoslas publicaciones últimas sobre la his-toria del comunismo, vemos que esmuy destructivo de la persona, de lavida. La ha destruido, matado, conde-nado o exiliado. Y, sobre todo, ha ani-quilado la dignidad de la persona hu-mana. ¡Tantos pueblos han sido redu-cidos a la esclavitud!

Una extraña trinidad

Tras los atentados de Nueva Yorky Washington, ¿cómo se puede sertestigo de esperanza en el mundo?

Después del 11S, ser testigo de es-peranza en el mundo es, ante todo, re-conocer los límites de ciertas fortale-

zas. El símbolo de la fortaleza delmundo, de su superpotencia, en Nue-va York, el símbolo de la economía,de las finanzas, se ha derrumbado. EnWashington, el símbolo del ejércitose derrumbó, en parte. Es necesariouna conciencia y una humildad parareconocer esto. Y también intentaridentificar de dónde vienen estas co-sas. Recuerdo, en un viaje de Roma aWashington para el Congreso Euca-rístico, que leí en el avión un periódi-co en el que venía publicado un artí-culo titulado La nueva trinidad (The

Desde la feAlfa y Omega26 21-II-2002

El cardenal Van Thuân muestra la cruz pectoral que él mismo talló en maderadurante sus años de prisión

Entrevista al cardenal Van Thuân, Presidente del Consejo Pontificio de Justicia y Paz y ex-arzobispo de Hanoi

No hay un pueblo superior a otroEn todo encuentro con el cardenal vietnamita Nguyên Van Thuân se palpa el martirio. Las historiasde la persecución contra los cristianos no son sólo de otros tiempos. Cuando los ojos delsufrimiento por Cristo hablan, la respuesta es puro silencio. Silencio y oración fueron parte del climaque acompasaba su testimonio de fe, de esperanza y de caridad. Éstas fueron sus declaracionesen la entrevista concedida a Alfa y Omega, con ocasión de su reciente estancia en Madrid

Esto es la doctrinasocial: cuandoescuchamos a Dios,nuestro Padre,sentimos que somoshermanos y hermanasde una gran familia.Escuchamos tambiénnuestra conciencia.Y con la oraciónescuchamos también a nuestros hermanosafligidos,discriminados,perseguidos. Esto es la doctrina social

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Desde la fe Alfa y Omega 21-II-2002 27

new trinity). Explicaba esta nueva tri-nidad. El padre es la Casa Blanca. Elpadre introduce las ideas sobre la ad-ministración del mundo, ideas de supotencia para administrar el mundo.El hijo: la CNN. La CNN manifiestay promueve las ideas del padre en elmundo. No otras ideas. Solamente lasideas del padre. El espíritu santo esel consumismo, que hace que la gen-te y los pueblos deseen consumir aque-llas cosas según la voluntad del padrey del hijo. Es esta concepción la quegenera la situación del mundo. Unmundo descristianizado. Un mundonuevo con esta concepción, que sepuede comprobar en Kosovo, en Af-ganistán, por doquier.

He leído, además, un libro publi-cado en París titulado Tres superpo-tencias: América, Rusia, China. Ydentro el dólar, el marco y el yen. Tressuperpotencias: es la visión del mun-do. La nueva superpotencia del mun-do es la fuerza del dinero. Por eso sur-ge el G8, un G8 que toma en gran me-dida el puesto de la ONU. La ONUpasa a servir solamente para la estra-tegia de la paz, pero las decisiones setoman en el G8.

Hay otro libro ilustrador, publicadoen Francia, y titulado El horror eco-nómico. El autor describe tres etapasdel mundo. La primera es la explota-ción, la esclavitud, el colonialismo, ola nueva esclavitud y nuevo colonia-lismo. La segunda etapa es la actual: laexclusión. Solamente el G8 decide to-do. Otros países se ven excluidos delas decisiones: España, Portugal, etc…La tercera etapa es la eliminación. Elautor dice que hay muchos gobernan-tes que no saben que son muchos lospueblos considerados como inútilesen el mundo; y muchos pueblos en elmundo tampoco saben que son con-siderados inútiles. Sobre todo, Áfri-ca, un continente al que ahora regresala malaria, sumada a la pobreza y alsida. Esta situación del mundo createrrorismo. Ante estas situaciones delmundo, ¿cómo tiene que reaccionarla Iglesia? La Iglesia promueve la doc-trina social para enseñar a todos lospueblos los derechos humanos, los de-rechos de respeto de la persona hu-mana y la concepción de que todospertenecemos a una gran familia. Nohay un pueblo más grande y potente,que sea superior a otro. Solamente es-te pensamiento puede lograr la paz enel mundo.

Recuerdo cómo en el Jubileo de lospolíticos, en Roma, un senador afri-cano dijo en su discurso: «Solamenteahora en el Vaticano me siento igual atodos los pueblos. Solamente hoy en elVaticano. Porque en otras partes delmundo, me siento inferior». Y es elPapa quien ayuda a promover estosvalores humanos en el mundo.

La mayor autoridad moraldel mundo

¿Cuál es el fundamental mensa-je de Juan Pablo II como testigo deesa respuesta, de esa esperanza pa-ra la Humanidad, frente a estos ma-les y a esta situación del mundo?

Frente a estos males del mundo,el Santo Padre es la mayor autoridadmoral del mundo. Él no cesa jamásde reclamar al mundo estos valoresde respeto a la persona. No cesa ja-más de reclamar la cancelación de ladeuda internacional para ayudar acancelar también la pobreza en elmundo, las injusticias en el mundo.El Santo Padre muestra también suintención de dialogar con todos lospueblos. Por ejemplo, después del 11de septiembre, el Santo Padre ha sidoel único Jefe de un Estado, el Esta-do del Vaticano, que ha ido a dialogara dos países musulmanes: Kazajstány Armenia. El Santo Padre no cesade llevar la esperanza de que la paz esposible, y con la paz podemos hacermuchas cosas. Sin la paz no es posi-ble una felicidad y una convivenciaen el mundo.

¿Cómo hacer posible que la doc-trina social de la Iglesia cale, estéen la vida pública y particular delos cristianos?

Creo que, para esto, es necesariauna educación. La educación en elmundo es muy importante. Y la Igle-sia es la única institución que puedehacer esto. Es la gran contribución dela Iglesia: la educación en el mundo,en las escuelas católicas, la educaciónen la sociedad, en las homilías de lasiglesias, etc… Es un gran esfuerzo dela Iglesia, que necesita verse apoya-do por los que tienen responsabilidaden el mundo, que tienen la responsa-bilidad de aplicar esto con corazón ydeterminación.

Eminencia, usted dictó unosEjercicios espirituales al Santo Pa-dre, que posteriormente se publica-ron en un libro. «El siglo futuro se-rá religioso o no será», dijo Mal-raux. ¿Qué papel juega o debe ju-gar la espiritualidad en la vida deun cristiano?

No estoy muy de acuerdo con esaafirmación de que «el siglo futuro se-rá religioso o no será». Todos los si-

glos serán siempre religiosos. La reli-gión no desaparece del mundo. Sí, es-tá el hecho de la indiferencia; perosiempre está la disposición, disponi-bilidad del mundo a ser religioso, co-mo se está viendo después del 11 deseptiembre. Tantas gentes que acudena las iglesias, tienen dentro esta dis-ponibilidad, pero se habían olvidadode ella. Por eso, el Santo Padre hablasiempre de la esperanza. Éste es tam-bién el título de una gran biografía delSanto Padre: Testigo de esperanza. Éles el testigo de la esperanza para no-sotros, y un hombre providencial queDios manda a la Iglesia en este mo-mento difícil. Él, con su edad y consu enfermedad, es muy fuerte, algoque se ve con con claridad. Recorreel mundo para transmitir esta espe-ranza, porque él cree que la esperanzano defrauda. La esperanza nuestra esJesucristo, Salvador del mundo y en-viado por el Padre al mundo, y por esotenemos siempre esperanza. Ésta esla enseñanza del Papa.

La oración en la vida de un cris-tiano, ¿es una forma también deaplicar la doctrina social de la Igle-sia? ¿Qué papel juega la oración pa-ra la justicia?

Sí, porque con la oración tenemosun diálogo. Escuchamos y hablamoscon Dios, que es nuestro Padre, y es-cuchamos a Dios. Esto es la doctrinasocial. Cuando escuchamos a Dios,nuestro Padre, sentimos que somoshermanos y hermanas de una gran fa-milia. Escuchamos también nuestraconciencia. Y con la oración escu-chamos también a nuestros hermanosafligidos, discriminados, perseguidos.Esto es la doctrina social. Y la oraciónayuda a la doctrina social.

El Redactor Jefe de Alfa y Omega dialoga con el cardenal Van Thuân

ex-arzobispo de Hanoi

r a otro

Con el perdón, la paz es la reconciliación sincerade dos partes, y solamente así hay una pazque puede durar mucho tiempo. Aquí está

el valor del mensaje del Santo Padre

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Desde la feAlfa y Omega28 21-II-2002

A. Llamas Palacios

Hoy distinguimos dos acepciones: la esclavitudy la cautividad. Los cautivos son privadosviolentamente de su libertad; los esclavos lo

son desde el nacimiento. Cuando fue abolida la es-clavitud, la Orden de los trinitarios tuvo que recon-vertirse para la liberación de las nuevas esclavitu-des modernas. Esclavitud es cuando una persona essometida a otra y privada de sus derechos humanos.En ese sentido, las cárceles, la droga, los niños sol-dados, los obligados a trabajar son una forma de es-clavitud que nos interpela. Las formas de esclavitudcambian, pero la esclavitud continúa.

Nosotros hemos organizado muchas visitas paraconstatar la esclavitud que se denunciaba en Sudán,y hemos comprobado que la esclavitud está muy li-gada al fundamentalismo musulmán. En Sudán hayuna guerra, y en ella el botín lo es todo: personas,riquezas…, y con ello pueden hacer lo que quieran.Es algo que permite el Corán. Todo este fenómeno sesigue dando en otras naciones islámicas: Maurita-nia, Chad, Benín… Nosotros nos hemos sentido in-terpelados y, en las últimas reuniones que hemos te-nido, hemos fundado Solidaridad Trinitaria Inter-nacional para ayudar a liberar a toda esta gente.

El problema es el siguiente: en la parte centro surdel Sudán se han descubierto grandes yacimientospetrolíferos, en los que países como China o Canadáhan invertido mucho dinero. Para poder asegurar laestabilidad de las compañías petrolíferas, el Gobier-no de Jartúm quiere hacer una limpieza étnica. Losdel ejército de liberación atacan a los musulmanes ylas empresas quieren seguridad. Paramilitares y ejér-cito barren a los que no son árabes, porque lo quequieren es la islamización de todo Sudán: una solalengua, una sola religión, y una sola ley, la sharia. Co-mo el Gobierno no puede pagar, deja que se cobre enespecie: hombres, lo que encuentren en los pobla-dos. La gente escapa hacia el norte. Alrededor de

Jartúm hay hoy más de dos millones de refugiados.El Gobierno no les deja instalarse en la ciudad y loscolocan en pleno desierto (a 50 ó 100 kilómetros dela ciudad). No sabemos exactamente cuántos niñosesclavos hay, porque no se puede viajar al sur delSudán, pues bombardean constantemente.

Los casi 3 millones de cristianos son consideradosciudadanos de segunda clase. Sus escuelas no recibenayuda, no les dejan tierras para construir sus casas, noencuentran trabajo… Encuentran todos los impedi-mentos del mundo. En Sudán hay hoy unos 300 sa-cerdotes, casi todos sudaneses. La Orden de los Com-bonianos lleva trabajando casi un siglo. Hay tam-

bién Padres Blancos, Salesianos, y Congregacionesfemeninas. La Iglesia allí, a pesar de las dificulta-des, está viva. Como en el sur había más católicosy se han desplazado a Jartúm, ahora la diócesis másnumerosa es la de Jartúm.

Queremos fundar una comunidad en Sudán, y enEl Cairo hemos abierto una casa, porque entrar enSudán era muy difícil, y como en El Cairo hay mu-chos refugiados allí les acogerían. En SolidaridadTrinitaria Internacional quisiéramos estar presen-tes en todas las situaciones de opresión, de violaciónde los derechos humanos, tal y como reza nuestrocarisma».

Habla fray José Hernández Sánchez, Superior General de la Orden de los Trinitarios:

«La esclavitud continúa»

Historia de la Orden Trinitaria

El francés san Juan de Mata funda, en el siglo XII, la fami-lia religiosa de la Santísima Trinidad, más conocida co-

mo trinitarios. Nace como la primera institución oficial en la Igle-sia católica dedicada al servicio de la redención de cautivos,con la única arma de la misericordia y el amor de Dios. A lo lar-go de toda su historia, la liberación de los cautivos ha sidola ocupación principal de los trinitarios. De hecho, desde el si-glo XIII al XV llevaron a cabo muchísimos rescates de cauti-vos, y a partir del siglo XV comienzan a centrarse en la libe-ración de los españoles presos en el norte de África.

Los cronistas atribuyen a los trinitarios calzados de Espa-ña, Portugal, Francia e Italia más de 90.000 liberaciones decautivos, entre éstos, don Miguel de Cervantes, rescatadoen 1580 de su cautividad en Argel. De los trinitarios descal-zos españoles se conocen, desde 1625 hasta 1769, casi5.000 rescates, y desde Centro Europa se rescataron, en lossiglos XVII y XVIII, a más de 5.000 personas.

La reforma de la Orden Trinitaria fue obra de san JuanBautista de la Concepción, que fundó 19 conventos de reli-giosos, y que transmitió a sus hijos el espíritu de caridad, ora-ción, recogimiento, humildad y penitencia.

Desde el Concilio Vaticano II, la Orden Trinitaria inició unabúsqueda de la propia identidad, que pasa por una renovacióny recuperación del fundacional de la Orden, que responda alos retos que plantea el nuevo milenio.

¡¿Esclavitud, hoy?!

Sí, esclavitud hoy, en el siglo XXI, en la era de las comunicaciones, de losderechos humanos, de las nuevas tecnologías…, y de las diferencias e

injusticias. De la lucha por escolarizar a tantos millones de niños pobres, yla lucha por eliminar el stress de los niños ricos; la era de los niños tiranosdel primer mundo, y de los niños esclavos del tercero; de los niños que fa-brican juguetes con los que luego juegan otros, al otro lado del mundo.

La organización Anti-Slavery International calcula que hay en el mun-do al menos 27 millones de personas que viven como esclavos. La Or-ganización Internacional del Trabajo va más allá, y cifra en más de 250 mi-llones de niños, de 5 a 14 años, en condiciones de esclavitud. En África,los traficantes pagan a las familias entre 2.000 y 4.000 pesetas por sus hi-jos, para luego venderlos por diez veces ese valor. Prometen a las fami-lias una educación y un sueldo para sus hijos, que nunca llegará. Una delas actividades más lucrativas es emplear a los niños como soldados.

En Asia, de todos los niños de entre 4 y 17 años, se calcula que el70% es explotado laboralmente. En la India, varios millones de niñosmenores de 14 años trabajan exclusivamente en el campo, y cerca de unmillón picando piedra y en hornos de ladrillos, así como confeccionandoalfombras. Lo mismo sucede en Pakistán, Tailandia, Filipinas y Malasia,en talleres de alfombras o fábricas de juguetes…

Según la OIT, en Sudamérica trabaja el 26% de la población infantil.Brasil, Perú, Méjico, Colombia, o las plantaciones de caña de la RepúblicaDominicana son un claro ejemplo de ello.

de Familia trinitaria

Fray José Hernández Sánchez, Superior General de los Trinitarios

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Desde la fe Alfa y Omega 21-II-2002 29

¿Renacimiento del personalismo?

El personalismo es una corriente filosófi-ca original surgida en el siglo XX, que

se sitúa en el álveo de la filosofía realista, yse caracteriza por estructurarse sistemáti-camente en torno a la noción de persona.¿Algunos elementos característicos? La in-salvable distinción entre las cosas y las per-sonas; la importancia radical de la afectivi-dad, que posee, al menos en parte, un ca-rácter espiritual; la importancia de la rela-ción; la primacía de los valores morales yreligiosos sobre los intelectuales; el trata-miento diferenciado de los dos tipos de per-sonas que existen: el hombre y la mujer; lacentralidad de la persona en el entramadode la sociedad; el rechazo de la versión aca-demicista de la filosofía; y su conexión –nonecesaria, pero real– con el cristianismo.

Esta filosofía ha tenido una gran influen-cia en Europa: fundamentación de la con-vicción de la dignidad de la persona y delos derechos humanos, influencia en lasConstituciones de diversos Estados euro-peos, en el Concilio Vaticano II, etc. A Es-paña llegó con retraso por motivos políti-cos, pero cuando lo hizo, en los años 70,se introdujo con cierta fuerza. Sin embar-go, al poco tiempo fue barrida del panoramaintelectual por el marxismo y la revolución demayo del 68. Hoy, sin embargo, el perso-nalismo parece renacer con fuerza en el pa-norama intelectual español. Desde el puntode vista editorial, esto se puede afirmar sinningún género de dudas, ya que en los últi-mos 10 años se han editado, por lo menos,100 títulos de autores personalistas, funda-mentalmente en tres editoriales: Encuen-tro, Palabra y la colección Espíritu en Edi-ciones Caparrós. Teniendo en cuenta quepublicar –y más aún vender filosofía– no esuna tarea nada fácil, esto significa que hayuna fuerte demanda del público.

Esa demanda corresponde a la existen-cia de un vacío cultural causado por la de-saparición de las ideologías y que tiene co-mo telón de fondo la caída del muro de Ber-lín. La desaparición del marxismo y la neu-tralización ideológica del capitalismo,transformado principalmente en un sistematécnico-económico, ha dejado a la socie-dad sin referentes culturales, y es en estehueco donde reaparece con cierta fuerza elpersonalismo, con su carga de valores hu-manos y antropológicos.

¿Hasta qué punto esa recuperación pue-de convertirse en un auténtico renacimien-to? Ante todo, haría falta una mayor difu-sión, es decir, que al boom editorial le si-guiera un correlativo interés en ámbitos académicos, periodísticos, medios de co-municación, etc. Pero una filosofía no pue-de vivir sólo del pasado. Por lo tanto, un au-téntico renacimiento requiere la apariciónde filósofos de talla que, junto a nombresya consagrados como Marías, Zubiri en cier-ta medida, López Quintás o Carlos Díaz, seempeñen en esa tarea y logren sacarla ade-lante. Si estos dos elementos realmenteaparecen, creo que podría hablarse de unauténtico renacimiento del personalismo.

Juan Manuel Burgos

Punto de vistaL I B R O SDebemos al profesor Norberto G. Gaitano, que ha participa-

do magistralmente en la reciente Asamblea de Delegados demedios de comunicación social de las diócesis españolas, la

siguiente historia que cuenta el periodista inglés Malcon Mugge-ridge. El genial periodista de la BBC imaginaba una cuarta tentaciónde Jesús en el desierto, en el transfondo de los medios de la época.Lucius Gradus el Viejo, un magnate del espectáculo, de paso por unaperdida ciudad del imperio, oye hablar de un rabí de Galilea que tie-ne mucho atractivo entre las masas. Con el olfato del buen empre-sario de la comunicación y del espectáculo, regresa a Roma y con-vence a sus socios capitalistas para organizar un gran aconteci-miento mediático: un escenario lujoso, coros potentes, comparsasorientales, un debate, de no más de diez minutos, entre los profesoresde la Academia de Atenas sobre el último tema de los anaqueles y,por último, la intervención estelar del Rabí galileo, con milagroincluido. ¿Rechazaría este maestro popular una audiencia tan vas-ta y los efectos del comentario posterior de este acontecimiento demáxima audiencia? Incluso aceptaría el empresario que no se in-sertara más publicidad que una inserción final, con el lema: Este pro-grama le ha sido ofecido por la Lucifer Corporation... El Señorde la Historia, lógicamente, rechazó esta cuarta tentación y dijo...

El pasado mes de abril se celebró en el Seminario de Madrid elprimer encuentro diocesano de comunicadores sociales, bajo labatuta siempre atenta de don Manuel María Bru Alonso y con lainestimable colaboración del Consejo de Laicos de la diócesis deMadrid. Ya tenemos las actas, que son un lujo polifónico de testi-monios, de ponencias, de reflexiones, de consideraciones y pro-puestas sobre cómo se hace compatible el ejercicio de la profe-sión con los innegables requerimientos de la vida de fe en el ejer-cicio profesional. Para muestra, los nombres de los intervinientes,encabezados por el cardenal arzobispo de Madrid: José Luis Prie-to, monseñor César Augusto Franco, José María Desantes, Ra-món Pi, Cristina López Schlichting, Justino Sinova, Alex Rosal, El-sa González, José Luis Restán, Pilar Salcedo, Javier Rubio, CarmenGiussani, Inmaculada Ballestero, Rocío Travesedo, Francisco Re-bollar, Humberto Martínez-Fresneda, Leopoldo Seijas, GabrielGaldón, Javier Fernández del Moral, Mercedes Gordon y JuanPedro Ortuño, entre otros. Un plantel de lujo que anima y recon-forta, y que seguro creará una honda expansiva de coherencia en-tre fe y vida.

La profesora Adela Cortina ha dado un paso más en su pensa-miento sobre el fundamento del discurso político, social e,

incluso, religioso. Un paso más en el que no se aclara muy bien aúnhacia dónde. Se intuye, se desvela, pero no se muestra en todo suesplendor. Recoge en este libro algunos de sus últimos y más des-tacados ensayos sobre la teoría del pacto social, recordándonosalgo clave en la configuración de las relaciones políticas y socia-les: «No es el contrato mismo quien funda los derechos, sino que,para que el pacto tenga sentido, es preciso admitir un buen nú-mero de presupuestos anteriores al pacto». Este acertado diag-nóstico necesita, probablemente, un poco más de tiempo para quedescubramos, a base de conflictos multiétnicos, por ejemplo, cuá-les son los fundamentos de esta Alianza, y cuál es su principalcontribución al orden de la sociedad política y de la sociedad ci-vil. Interesa, de este trabajo, la radiografía que hace de las teoríaspolíticas contemporáneas más en boga. E interesa, sobremanera,un último capítulo en el que se leen párrafos como el siguiente: «Loque significa exigir la justicia y hacerla, en lo grande pero sobre to-do en lo menudo, trabajar codo con codo en los valores de unaética cívica con los que se siente en casa, ofrecer y regalar la gra-cia, sin la que no hay un yo desde el que entrar en la alianza con losotros, y no renunciar al misterio, al que estamos ya vitalmente re-ligados. Interioridad y misterio son dos dimensiones ineliminablesde la vida humana, no sólo accesibles a todas las fortunas racionalesy sentimentales, sino sólo rechazadas con desprecio por los pre-potentes, los intrigantes, y por los que viven una existencia verti-da a la exterioridad».

José Francisco Serrano Oceja

Buenperiodistay periodistabueno

Título: Periodistas de primera,cristianos de verdadAutor: Manuel María Bru (coord.)Editorial: Ciudad Nueva

Teoríapolítica y social

Título: Alianza y contrato.Política, ética y religiónAutor: Adela CortinaEditorial: Trotta

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Desde la feAlfa y Omega30 21-II-2002

Gentes

Alex Rosal, periodista

«¿Es posible triunfar en televisión sin basura?: es la pregunta del millón a la quelos sabios programadores de nuestro país respondían al unísono que no, quepara tener mucha audiencia hacían falta elementos escandalosos y barrioba-jeros que atrajeran a los televidentes. No hay alternativa a los programas ba-sura, decían unos. La gente prefiere este tipo de espacios, se escudabanotros. Nosotros ofrecemos los programas que nos pide la audiencia, afirmabanlos dueños y ejecutivos engominados de los canales, como justificándose an-te sus familias y amigos por la cutrez de la parrilla que proponían. Así duranteaños. Y ahora resulta que se pueden hacer programas de gran audiencia, conpoco presupuesto y con valores».

Javier Martínez, obispo de Córdoba

«Vivimos como nunca ansias de paz, y tiempos de perturbación. Soña-mos con un mundo en armonía, y cada día nos despertamos con noticiasde violencia, terrorismo y guerra. Cualquiera que analice a nuestra socie-dad, la reconoce amenazada de muerte. Nunca podremos crear una culturade la paz por el camino de la fuerza, el rearme o la guerra. Nunca la violenciaes camino que posibilite la paz. Es necesario educar para la paz, erradicandode nosotros la cultura consumista e insolidaria, cultura de muerte, y contribuira una cultura del diálogo, de la comprensión, de la tolerancia y de la coo-peración solidaria entre razas y pueblos, que nos ayude a resolver de ra-íz todos los problemas que hacen peligrar la convivencia pacífica».

Jaimer Mayor Oreja, jefe de la Oposición en el Parlamento vasco

«La Iglesia es, con diferencia, la institución a la que ETA está haciendo másdaño. Siempre he creído que, en la defensa de la libertad, la Iglesia tie-ne que estar en la vanguardia. Se agradecen posiciones, como la demonseñor Sebastián, que estén en una razonable vanguardia. La reli-gión ha sido sustituida en muchas personas por la política. La Iglesia esla institución de los principios, de los pilares, de lo profundo, de la raíz. Poreso, en este tema, tiene que ejercer una función de liderazgo, para re-cuperar raíces, valores… Creo que los valores y principios de la Iglesia sonlos que más han sufrido en el País Vasco. Y al mismo tiempo son losúnicos que pueden recuperar al País Vasco».

También los asesinos son hijos de Dios

Tarde a Misa

Conocí, hace ya años, antes de ser or-denado de presbítero, a un sacerdote

que regentaba una parroquia de la perife-ria madrileña, a la que yo iba a misa. Hacíapoco que lo habían hecho párroco de esaiglesia, pero ya tenía años de experienciasacerdotal. Se dio tiempo hasta conocer al-gunas virtudes y defectos de sus nuevosparroquianos que frecuentaban la iglesia,más bien pocos y casi siempre los mismos.Un año, más o menos, después, convenci-do ya de algunas debilidades casi invenci-bles de sus feligreses: Llegar tarde a Misa yhablar durante la celebración, sin el más mí-nimo reparo, el cura empezó a ser el azotede los tardones y de los charlatanes/as. Y unbuen domingo, por fin, estalló. Nos dijo: «Eldía tiene 24 horas y la semana 168. Deésas, los que vienen a Misa el domingo lededican 45 minutos, y todavía llegan tarde.¿Cuántas horas empleamos en hacer colapara sacar una entrada de fútbol, para los to-ros, el cine, para comprar el décimo de lo-tería, sobre todo por Navidad, y, para col-mo, cuánto dinero nos cuesta? Parece cla-ro que lo que se da gratis no se valora. Pues,bien, a partir del próximo domingo, los queno lleguen a tiempo a Misa, como se haceen los teatros, los cines y otros espectácu-los, no entrarán en la iglesia».

Terminada la Eucaristía, me quedé reza-gado para oír los comentarios de la gente.Nadie hablaba de la homilía, por cierto muyinteresante, sino de la bronca –¡Encima quevenimos a Misa!– del buen sacerdote. Peroaquel cura, que pensaba lo que decía y ha-cía lo que pensaba y decía, puso en prácti-ca su advertencia a partir del domingo si-guiente. Me fui a Misa, y a ver qué pasaría.Apostó a la puerta del templo a dos educa-dos, fornidos y jóvenes catequistas (no go-rilas), que nada más comenzar el cura ElSeñor esté con vosotros (con los que esta-ban dentro del templo) no dejaron entrar anadie en la iglesia. Las protestas de algu-nos fueron tan fuertes como cuando los me-rengues y culés se quedan sin ver el partidodel año. Pero el método, con el tiempo, re-sultó.

Me acuerdo de esto, porque hace unosdomingos, después de tres años de estarsufriendo la misma experiencia, se me ocu-rrió pedir por favor que se procurase llegara tiempo a Misa; ni más ni menos sustanti-vos ni adjetivos. Terminada la Eucaristía, unseñor de unos 60 años, me puso de vueltay media. Me dijo: «Vengo todos los domin-gos a Misa, porque así me lo mandaron mispadres, y lo mismo hago con mis cuatro hi-jos, de entre 26 y 28 años. Fíjese –añadió–lo que le habrá molestado a mi hijo de 26años (entró cuando se leía el Evangelio),que se salió de la iglesia y estoy seguro queno volverá a Misa, por lo menos a la queusted diga».

¿Comentarios? Los que quieran. La rea-lidad es que en no pocas de nuestras Mi-sas dominicales, desde que se empieza has-ta la homilía, los pasillos laterales y el cen-tral de los templos parecen pasarelas.

José Barrado, OP.

Punto de vista

Aveces ocurren milagros que pasan inadvertidos y que llegan a nosotros al modo de una noticia cualquiera,como si se tratara de hechos sin importancia, más o menos comunes, y que no llaman la atención tal co-

mo ocurre con los milagros puramente físicos, al desaparecer repentinamente una enfermedad o al producir-se la curación instantánea de una deficiencia irreversible.

Sin embargo, es indudable que también existen milagros psíquicos tan importantes como los relacionadoscon nuestra anatomía corporal. Al margen del milagro diario que supone vivir (especialmente en los tiempos ac-tuales), de vez en cuando se producen fenómenos inexplicables como el que sucedió no hace mucho enAmérica, en el Estado de Oklahoma. Me refiero a lo ocurrido al reo Timothy Mc. Veigh, que desde el año 1995,tras colocar una bomba en el edificio del Gobierno Federal de dicho Estado, en el que desgraciadamente per-dieron la vida 168 personas, tercamente se aferraba a una total falta de remordimiento por su terrible acción. Des-de aquella fecha la dureza de su actitud (incluso sabiendo que estaba condenado a muerte) era tan inflexible,que por nada del mundo (pese haber reconocido su culpabilidad) quiso apearse de su terquedad y declarar suarrepentimiento. No obstante, y sin explicación plausible, como si una fuerza superior a él le obligara a ello, unminuto antes de recibir la inyección letal, suplicó repentinamente volver al seno de la Iglesia católica, haceruna confesión general de sus pecados y recibir el sacramento de la Extremaunción. ¿Cuál fue el motivo de es-ta inesperada reacción?, sólo Dios lo sabe, pero es indudable que, por la causa que fuera, el cambio radical que,durante seis años, probablemente acumuló oraciones, sacrificios y peticiones, consiguió que la misericordia deDios produjera el prodigio de esa conversión que, como cualquier enfermedad física irreversible, parecía imposible.

Mercedes Salisachs

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Desde la fe Alfa y Omega 21-II-2002 31

¿A que no saben ustedes de quién es la culpa de todo el guirigay que, en tornoa la niña y el chador, o hiyab, o pañuelo, han montado los mismos medios que nise habían enterado de que, en ese mismo centro escolar, los niños llevan todo elinvierno sin calefacción? Pues no se preocupen ustedes, que Antonio Gala selo explica –¡no faltaba más!, y ya muchos lo estaban echando de menos– en sutronera de El Mundo: «El problema vino provocado por unas monjas un poco in-tegristas, que debían de (sic) quitarse sus propias tocas o renunciar a la subven-ción. Tampoco se prohíbe llevar medallitas de Fátima o crucifijos a quienes cre-an en ello. La cuestión fue resuelta hace años en otros países...» ¿Se han entera-do ustedes? ¡Pues Gala no se entera! (véase página 11). No acababa yo de ver deltodo por dónde iban los tiros en este asunto del pañuelo de la niña, ni quién de ver-dad lo había organizado y montado. He tardado poco en enterarme. Ahora ya ten-go claro qué es lo que, en realidad, se buscaba. Lo del pañuelo de la niña, tan in-mediatamente resuelto –cuando hay sentido común cualquier problema desa-parece. Lo de la ablación y la poligamia es más complicado –, no era más que unaexcusa. Uno de los habituales portavoces de la organización ha tardado horas endescubrir el pastel, haciendo realidad aquella cínica afirmación del ilustre ho-mosexual Oscar Wilde: «La única manera de vencer las tentaciones es cayendoen ellas». Gala, menos lúcido que Umbral a fin de cuentas, llevaba ya varios dí-as dando la murga, siempre en torno a sus mismos patológicos resentimientos con-tra la Iglesia católica: que si «la indisolubilidad ya ha sido abolida» –¡qué más qui-siera él!–, que si tal y que si cual. Está claro que lo que, en realidad, le molesta sonlas medallas de Fátima y los crucifijos. Pues espero, por el bien de todos, que ten-ga que respetarlos de por vida, con democrático respeto a las personas que nos hon-ramos llevándolos, con pañuelo o sin pañuelo en la cabeza. A lo peor cree que só-lo el pañuelo es respetable. ¿Piensa que la ofensa que ha escrito podría escribir-la en un periódico de un país árabe, si las cosas fueran al revés?

Javier Pérez Royo escribió no hace mucho un artículo en El País, de Anda-lucía, titulado Falta de legitimidad, en el que, más o menos desde la misma lí-nea de pensamiento, es un decir, y después de afirmar: «No creo que la Igle-sia católica tenga la más mínima legitimidad para dar lecciones a los poderespúblicos sobre cómo deben proceder», añade: «La falta de respeto de la Igle-sia por el Estado puede llegar a alcanzar límites extremos», y pone el ejemplode lo que el Papa ha dicho a los jueces católicos sobre el divorcio. El señor Pé-rez Royo debe creer, claro, que el Estado –que ya me contará qué es– es másimportante que las personas. El Papa y la Iglesia, con una autoridad moralindiscutible y más reconocida que nunca, no le dice a ningún Estado cómo tie-ne que proceder; señala a sus fieles, y a cualquier hombre de buena voluntadque quiera escucharlo, lo que moralmente es bueno o no para las personas. Leguste al señor Pérez Royo y al Estado, o les deje de gustar.

De nuevo, por desgracia, otro intento de asesinato en Vascongadas; esta vezen la persona de un joven militante socialista, al que, de momento cuando es-cribo estas líneas, le han tenido que amputar una pierna, y Dios quiera que to-do se quede en eso. El cáncer de allá arriba se llama, desde luego, terrorismo;pero antes se llama nacionalismo cerril. No es ya que no se puedan hacerelecciones municipales con miedo; es que con miedo no se puede vivir. Elmiedo, el que sea, jamás es deseable, por tanto; pero, de momento, por desgraciadurante un largo momento, mientras el miedo allá arriba no cambie de bando,no se resolverá el problema. Si la situación es de excepción, habrá que tomarmedidas de excepción. ¿O es que son franquistas como la reválida? ¿Cuándose va a acabar el estúpido complejo del antifranquismo, y se van a adoptarlas medidas que normalmente se adoptan en otros países ante situaciones así?

Oigan, ¿qué hubiera pasado si un pelotón de soldados españoles se equivo-ca de playa y, en vez de tomar, en ejercicios de maniobras, una playa de La Lí-nea de la Concepción, toma la de Gibraltar? ¿Qué hubiera ocurrido? Por cier-to, los capitostes gibraltareños proclaman que no quieren ser españoles de lasiguiente manera: «La hente eztá baztante mozqueá...» ¡Ele for ever!

Gonzalo de Berceo

NO ES VERDADNO ES VERDAD

VÍDEOVÍDEO

El reto de ser cristiano es una colección de vídeos dirigidos a tres tiposde público muy diferenciados: los niños, los jóvenes y los mayores.

Tres formas de ver la vida muy distintas y que, por lo tanto, necesitan tra-tamientos diferentes. Se trata de acercar a Dios a la gente de una formaatractiva, utilizando la imagen como el mejor gancho del que podemosdisponer. La cultura de la imagen está muy desarrollada y no podemospermitir que los vídeos de religión queden anticuados. Debemos llegaral público con su lenguaje, con garra, con fuerza y con calidad. La doc-trina siempre es la misma, pero la forma de transmitirla debe cambiar. Pa-ra conseguir esto hay que disponer de un buen equipo humano de pro-ducción: teólogos, psicólogos, guionistas, diversos profesionales delmundo audiovisual... La responsabilidad es mucha, ya que estos víde-os pueden hacer un gran bien a mucha gente.

Pero un buen equipo de producción no puede hacer nada si no seapuesta por ello. La editorial Magisterio Casals, desde el primer mo-mento, apostó por este proyecto que nos llevará tres años de produc-ción. Para comenzar, realizamos un estudio detallado de las necesi-dades de los niños y jóvenes de hoy. Había que trabajar muy en seriolas virtudes humanas y cristianas, dar una visión más clara de lo que

significan los sacramentos, y profundizar en los aspectos antropológicosde la persona. Nos pusimos a trabajar distintas técnicas de expresión,descubriendo el gran atractivo que pueden tener el dibujo animado yla animación en plastilina. Decidimos que a los niños les íbamos acontar cuentos, y creamos a Juan el molinero y a su nieta Nina, que vi-ven en un viejo molino. A los jóvenes les contamos historias reales, quelleguen al corazón y a la cabeza con una visión optimista de la vida. Pro-curamos transmitirles pocas ideas pero muy claras. Con los mayores,tocamos los temas de actualidad con más profundidad y con una fun-damentación antropológica sencilla, que les permita tener argumentossólidos. Tras la producción de los 14 primeros títulos, podemos decirque los resultados están siendo muy satisfactorios. La base de la pro-ducción son los guiones. Sin un buen guión no hay nada que hacer, yen éstos hemos conseguido enseñar divirtiendo. Sin embargo, no po-demos pararnos. Seguimos investigando y pensando en nuevas fór-mulas para enriquecer esta colección, ya que, para nosotros, cadadía que pasa es un reto.

Pedro Marcet

Nuevos retos en la pedagogía de la fe

Ricardo y Nacho, en El Mundo

Page 34: Nº 295/21-II-2002 SEMANARIO DE INFORMACIÓN RELIGIOSA …al cardenal Van Thuân, Presidente del Consejo Pontificio de Justicia y Paz y ex arzobispo de Hanoi: No hay un pueblo superior

No es circo, es catedral.Catedral plantada sobre el costillar de un pla-neta viejo, con grandes lonas azules comba-

das por excepcional arquitecto en línea de cúpula,taladradas de agujeros a tres, a cuatro, a siete puntas.

Es catedral, el mundo.Le cabe dentro toda la vida del circo. Pasen y ve-

an la función: el pañuelo y los elefantes, la paloma,el serio profesor, las comadres, las abejas y las rosas,el niño amigo de gorriones, un tranvía cascado, mu-chos autos de última serie, muchas máquinas, muchapalabra… Y en medio del barullo algún cura queotro, volviéndose a los cuatro puntos para decir: «Do-minus vobiscum», y «La paz sea con vosotros, ami-gos».

¿Qué más da que a unos les agrade la vuelta alruedo, mientras otros prefieren saltar al trapecio?Aquí juegan a familias, allá organizan un parlamen-to, en un ángulo la guerra, en otro la paz, cuatro sa-bios escriben libros, veinte muchachos se divierten.Como un gran circo. Pero es un circo con luz de ca-tedral. La luz le viene por arriba y de dentro, miste-riosamente. Por arriba, por donde puso Dios el sol, yla luna, y las estrellas, altas para la frente erguida.De dentro, misteriosamente, como brotando de las co-sas cuando las acaricia el hombre, como gritando silas estruja, como un lamento cuando en ellas se de-ja prender la entraña. Todo el misterio de la luz dedentro nació una tarde en que Dios también paseópor el circo.

Nos da risa la retórica. Entiendan bien nuestrosamigos los poetas, los novelistas, los pintores, losmúsicos, los magos del cine –también, también ellos,y, si rezagados por cronología, no últimos en la in-tención–, entiendan bien que nos da risa siempre la re-tórica, tanto cuando se engola para ofrecer mercan-cía piadosa, como cuando escupe por el colmilloamarguras, tristezas, hambre, suburbio, cuestionessociales y soledad terrible. Nos da risa, y un pocode lástima, porque pone a la vergüenza pública eldesnivel entre las palabras y la vida de quien las pro-nuncia.

Nosotros sabemos, claro, que el mundo sufre, queen el circo cabe la tragedia. Quisiéramos hallar re-medio, y en lo que lleguen nuestras fuerzas partire-mos el pan. Nos escuece la maldad, escuece muchomás cuando el mal se llama pecado, y a nosotrossuele llegar tantas veces bajo ese nombre... Pero nosrebelamos contra la mentira de que todo sea barro ytinieblas. Entra la luz en el circo. Cuando a los hom-bres se les rompen las cosas en las manos, suele Diosestar a la espera. Es un gran momento. Y cuando al-guien cae del trapecio, no por eso se le parte el alma.

El mundo es un circo convertido en catedral.Es un tablero de ajedrez sobre el cual mueve Dios

las fichas. Es un nacimiento, un belén, con figuras detamaño natural, con ríos sin papel de plata y monta-ñas con nieve no imitada cucamente. Dios y los án-geles avanzan las figuras, las guardan del tropiezo, lasdefienden del diablo. Es un belén con Virgen Maríay Niño Jesús y zagales y pastores…

Amigos, todo está en acertar con el secreto, endescubrir el truco. No somos prestidigitadores avaros,podemos contar el truco a quien quiera nos lo pida.Lo podemos descubrir con palabras del evangelio:«Si vuestros ojos están limpios, todo vuestro cuerposerá iluminado».

Hermoso el mundo, el circo, la catedral.¿Sabéis qué, sabéis cómo? Hay en Siracusa un

teatro griego con la gradería de cara al mar. En laminúscula plataforma remansaban, tantos siglos atrás,las mejores obras del arte dramático europeo, quellegaban a Siracusa por el mar abierto. La construc-ción de aquel teatro no tuvo más misterios arquitec-tónicos: una gradería escalonando la colina en se-micírculo abierto para el mar, para el sol, para la es-puma…

Sólo eso. Y desearos al terminar la función unblanco regocijo, virgen de toda espina.

José María Javierre

Alfa y Omega

Alfa y Omega agradece la especial colaboración de:

Nada hay nuevo bajo el sol, o vigencia de lo escrito hace más de medio siglo

Del circo a la catedral

Estreno de Mingote, en el número especial del aniversario de Estría

Hace ya un buen puñado de años, en 1954, José María Javierre publicó en aquella maravillosa iniciativa que fue la revista Estría,que editaba el Colegio Español en Roma, este artículo, cuya plena actualidad y vigencia sorprende más de medio siglo después.

Se estrenaba también, en aquel número 6 de tan clarividente Estría, un jovencísimo dibujante que ilustraba precisamenteel número, en el que la revista lo presentaba en sociedad así:

«Los dibujos de Ángel Antonio Mingote proclaman la belleza de las cosas buenas»