Metafora en el Discurso Politico de la Democracia Argentina Reciente
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Discurso Político en la Democracia Argentina Reciente (1999-2003)
La Metáfora en los Discursos de Asunción de los Presidentes, De la Rúa, Rodriguez Saa, Duhalde y Kirchner. Por Ricardo Esteves
“Supongamos que tratáramos de enunciar el contenido cognoscitivo de una metáfora interactiva en lenguaje llano y directo.”
M. Black “La Metáfora” “Como en todas las metáforas, las metáforas políticas y económicas pueden ocultar aspectos de la realidad. Pero en el área de la política y la economía, las metáforas importan más, porque limitan nuestras vidas. Una metáfora en un sistema político o económico puede llevar a la degradación humana en virtud de aquello que oculta.”
G. Lakoff y M. Johnson “Metáforas de la vida cotidiana”
En este trabajo proponemos analizar las metáfora utilizadas en los discursos inaugurales por
los últimos cuatro presidentes –De la Rúa, Rodriguez Saa, Duhalde y Kirchner- en referencia
a la deuda externa.
A parte de todo lo que podamos decir respecto de la metáfora en sí, su utilización en el
discurso político, en especial en estos cuatro seleccionados de nuestra democracia reciente, y
en referencia a, lo que llamaremos deuda a “secas”, dejando que cada discurso imponga su
matiz particular a este sintagma. Aún así, las selección de la muestra no se limitó solo a este
sintagma, sino que se mantuvo un criterio semántico que pudiera admitir equivalencia a nivel
sémico. Puntualmente podemos encontrar la utilización del sintagma déficit en referencia a
esta misma cuestión.
Estas metáforas son utilizadas en estos discursos, en primer lugar para darle una entidad a esa
deuda, en segundo lugar para ubicarla, es decir darle una localización espacial y también son
utilizadas para darle peso y volumen. A partir de estos elementos cognitivos básicos se
utilizaron figuras retóricas que representaran de forma persuasiva, a los objetivos del
hablante, aquella entidad que es la deuda.
Para llegar a esta prematura conclusión hemos revisado la literatura en torno a la metáfora. M.
Le Guern (Le Guern, 1978) es nuestro punto de partida sobre la metáfora como comparación,
1
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quien nos permite fácilmente articularla con la visión –por lo menos con una de ellas1- que
tiene la pragmática de la metáfora. (M. V. Escandell Videl 1993). Mencionaremos algunos de
los modelos y aquetipos de M. Black (1966). Por último trataremos de utilizar los elementos
teóricos presentados por G. Lakoff y Jhonson (1980) respecto a como la metáfora en el uso
cotidiano del lenguaje esta relacionado con cuestiones sobre la misma constitución del
sistema conceptual y de que manera, dado que es posible encontrar su sistematicidad, puede
representar por medio del lenguaje un concepto complejo que implica elementos de la
experiencia sensorial y motora dentro del mundo a nivel cognitivo.
Respecto a la espacialidad consideramos marginalmente a G. Fauconnier (1993).
Una vez establecidos, en esta pequeña reseña, los rasgos y criterios a considerar sobre la
metáfora incursionamos en el análisis de los cuatro discursos inaugurales pronunciados entre
diciembre de 1999 y mayo de 2003. Ya hemos mencionado el criterio para seleccionar cada
una de las metáforas en los discursos, y en base a nuestro acotado marco teórico, se realizó el
análisis. Este análisis no incluye ninguna observación sobre variación en las estructuras
gramaticales. En este sentido el peso del análisis está concentrado en la particularidad con que
se apela a diferentes rasgos cognitivos para connotar un mismo elemento sémico.
El punto al que queremos llegar con este análisis, que es puramente descriptivo, es mostrar
como la deuda puede adquirir distintas entidades o formas en los distintos discursos políticos.
Esto nos implicaría directamente en una discusión (J. Etkin. 1999 yG. Lakoff y M. Johnson
(1998 [1980]) respecto a la metáfora y el discurso político. Estos autores hablan de la
metáfora y ocultamiento en el discurso político. Nuevamente adelantado conclusiones solo
podré decir que la metáfora necesita aún de algo para poder ocultar; y nuestro trabajo se
limita a observar la metáfora que oculta dejando de lado lo que esta oculte. Por otro lado,
aquello de lo que se vale para ocultar necesariamente necesita mostrar algo. Teniendo en
cuenta los principios de la metáfora cognitiva, podríamos sostener que la metáfora más que
ocultar, muestra.
Metáfora Cognitiva
El camino que podemos atravesar para llegar a idea de que la metáforas es una de las formas
que posee el lenguaje para expresar o representar experiencias sensibles en distintos aspectos.
Podemos comenzar a enfocar la atención en la metáfora, considerando primeramente a Michel
Le Guern, quien desde una corriente más contemporánea presenta una definición de metáfora,
metonimia y sinécdoque rastreada de la retórica tradicional en la que plantea:
21 Interacción de Rasgos.
3
“La metáfora es una figura por medio de la cual se transporta, por así decir, el
significado propio de una palabra a otro significado que solamente le conviene en
virtud de una comparación.”2
La metonimia, también como tropos o figura retórica, es definida en sus múltiples formas,
sustitución de causa por efecto, el contenente por el contenido, el nombre por el lugar, las
partes del cuerpo a las que se le atribuyen pasiones o sentimientos por esa mismas pasiones o
sentimientos, etc3.
La metáfora genera un poder connotativo al introducir un elemento sémico que en
comparación a los demás elementos, este posee un sentido aislado. Este efecto permite poner
en relieve un significado más rico para la comunicación. El poder evocativo de la metáfora
permite asociar conceptos de dominios conceptuales distintos, y de allí el efecto de salto de
sentido en la expresión. Este aspecto sirve para diferenciar a la metáfora de la metonimia;
mientras que una reemplaza elementos de distintos dominios conceptuales –generando el así
llamado salto semántico-, mientras que la metonimia funciona por contigüidad, desplazándose
en el mismo campo semántico. Un ejemplo: “Cien velas se divisaban a lo lejos de la costa”,
donde el sintagma velas reemplaza a barcos dentro de un mismo campo o dominio semántico.
Por su lado la pragmática plantea la metáfora como un fenómeno de desplazamiento
semántico. En este sentido la explicación de este fenómeno ha tomado dos caminos, el de la
interacción de rasgos y la comparación elidida. Según la primer postura plantea que el
significado léxico de una palabra puede descomponerse en rasgos semánticos distintos. En
este caso la metáfora combina alguno de estos significados de las unidades léxicas, haciendo
posibles combinaciones semánticas peculiares. La metáfora puede ser considerada una
combinación sintagmática de unidades léxicas incompatibles. La teoría de la comparación
elidida sostiene la idea de comparación. La metáfora, dentro de un orden sintagmático
introduce un elemento léxico ajeno a la cadena que establece la referencia de la
comparación4.
Max Black aunque propone dos modelos, uno sustitutivo y otro interactivo, presenta una
visión profundamente del alcance cognitivo de la metáfora (Black, Max, 1966 p:55.)5. En los
2 M. Le Guern “La metáfora y la metonimia” Cátedra, Madrid, 1978. Pág. 13. 3 Ibid. pág. 14. 4 M. V. Escandell Videl “Introducción a la pragmática” Anthropos, Barcelona, 1993.págs 220-223. 5 “Pués las metáforas de sustitución y las de comparación puden remplazarse por traducciones literales (con la posible excepción de la catacresis) Sin más que sacrificar parte del encanto, vivacidad o ingenio del original, pero son pérdda de contenido cognositivo; en tanto que de las “de interacción” no cabe prescindir: su modo de 3
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modelos de Black funcionan distintos principios. En las metáforas sustitutivas, existe un
elemento M que representa el elemento de valor metafórico; y elemento L que es el
significado literal de su contenido. El modelo interactivo, que propone que es un conjunto de
elementos actuando al mismo tiempo lo que permite que las metáforas funcionen. En este
modelo interactivo se reconoce un foco, que sería el elemento que ocuparía un lugar central
en el juego de interacción, constituido por un marco, de la metáfora.
El verdadero dilema que debemos enfrentar según propone Black es entender los modelos
como algo también en sí metafórico. La noción de maqueta, pequeño modelo a escala que
intenta representar algo distinto a sí en tanto dimensiones, pero aún así sí, similar en sus
rasgos. Aún así tanto los modelos como las metáforas dejan algo sin ver, fuera de nuestro
registro de visión y escucha.
Una obra que ha sido de vital referencia al armar los sistemas de categorías que iban a ser
utilizados para clasificar las metáforas presentes en los discursos presidenciales ha sido
“Metáforas de la vida cotidiana” (G. Lakoff, M. Johnson 1980). En principio rescatamos
principios sobre el planteo de cómo estado fundamentado nuestro sistema conceptual, que a
pesar de estar influido por la cultura existiría un substrato de experiencia física que utilizamos
en el lenguaje. Respecto a la metáfora adherimos en este análisis al las bases estructurantes de
las metáforas en términos que nos permiten constituir el espacio y las coordenadas que
podemos conocer como arriba, abajo; dentro fuera, etc. Estos aspectos cognitivos espaciales
básicos hacen posible el poder de “causación” de la metáfora. La causación es lo que permite
vincularnos en el funcionamiento con el mundo y encontrar una gama de variantes
prototípicas de las causas como control, programa, motor, volición, etc (G. Lakoff, M.
Johnson 1980. p: 112.). Por supuesto otro concepto fundamental presentado en la obra
referida respecto a las metáforas es la distinción de las metáforas ontológicas. Estas metáforas
nos permiten hacer referencia experiencial, o de contenido cognitivo respecto a objetos con
sustancia y entidades. El ejemplo mismo que se utiliza tanto a nivel teórico conceptual es muy
adecuado. El caso concreto que plantean es:
“La inflación es una entidad: La inflación está bajando nuestro nivel de vida. Si hay mucha
inflación no sobreviviremos. La inflación nos está poniendo entre la espada y la pared.” funcionar exige que el lector utilice un sistema de implicaciones (ya sea de “lugares comunes” o un sistema especial establecido con vistas a la finalidad del caso.)(...).”p:55. (...) “Una metáfora memorable tiene fuerza para poner en relación cognositiva y emotiva dos dominios separados, al emplear un lenguaje directamente apropiado a uno como lente para contemplar el otro: las implicaciones, sugerencias y valores sustentantesentrelazados con el uso literal de la expresión metafórica nos permiten ver un nuevo tema de una forma nueva; y no cabe predecir anticipadamente ni parafrasear subsiguientemente en prosa los significados más
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Pareciera tan adecuado por la simpleza con la que la simple sustitución de la palabra deuda
por la de inflación funcionaría en este caso. Por esta misma razón sostenemos este principio
teórico presentado por Johnson y Lakoff, que parte de la simple noción o experiencia de
recipiente que podemos desarrollar conceptual y sistemáticamente una amplia serie de
material cognitivo en el nivel del lenguaje, específicamente en el contenido de las metáforas.
Otro elemento que considero de relevancia y resulta útil para nuestro análisis particular es la
noción de “identificar causas”. El ejemplo que utiliza ilustra esto es: “La presión de as
responsabilidades fue la causa de su crisis.”6
Complementando la visión de Lakoff y Johson tenemos presentes otros aspectos en referencia
al valor cognitivo de la metáfora. En este sentido la noción de “Espacios Mentales” G.
Fauconnier resulta muy sugestivo. :
“Mental spaces, the connections linking them, the linguistics, pragmatic, and cultural
strategies for constructing them are a significant part of what is happening backstage, behind
the scenes, in the cognitive background of everyday speaking and common sense reasoning.
The principles governing the operation are, in themselves, simple and general”.
La propuesta es más amplia e implica la gramática o sintaxis, elementos con los que
operaremos en menor medida. De todas formas queremos rescatar las cuatro características
que menciona Fauconnier que son la partición, la función de cruce de dominio, procesamiento
de discurso y modelo mental.
La noción de partición es un mecanismo que funcionaria –como sí- a nivel indicial, dando una
referencia del universo o contexto, del espacio mental al que se refiere. El cruce de dominio
hace referencia a la utilización de un elemento de un dominio, como podría ser género y
utilizarlo en otro contexto. Los últimos dos puntos hacen referencia a la configuración
espacial en correspondencia a la forma lingüística.
Este libro resulta inspirador y esclarecedor de varios conceptos, entre los cuales sintetiza una
interesante discusión, acaso diálogo con otros autores7.
amplios que así resultn, como tampoco las relaciones de tal modo creadas entre reinos inicialmente dispares”p: 232. (M. Black, 1966 ). 6 Ibid. p:64. “Lakoff y Johnson hace otras menciones interesantes como la capacidad de referirse, cuatificar, identificar aspectos, establecer metas y motivaciones. p:64-65. 7 “Two notions, easily overlooked in traditional accounts of reference and grammar, seem crucial: framing and point of view. Work in cognitive and construction grammar (Langacker, Talmy, Fillmore, Lakoff, Brugman, Goldberg) suggests that syntactic configurations are a mean of accessing very general (and generic) frames, within in turn map on to more specified frames, via lexical specification, and that those frames in turn map on to even more specific ones determined by local context, local space connections, and relevant cultural and background knowledge. Space building, in this respect, is also frame building.” G. Fauconnier, “Mental Spaces” p:30. 5
6
Este enfoque brinda gran parte del fundamento teórico a este análisis. Esto no elimina otras
referencias, las complementa. Este marco no es incontinente, tiene limites y umbrales en los
que se hospedan referencias secundarias, que aunque no se encuentren en el centro de nuestra
atención analítica tenemos presente.
Entendemos por esto aspectos que hacen a la constitución de lingüística cognitiva (Bérnardez
1999) como el análisis en la regularidad que pueden establecer la gramática cognitiva como es
propuesta por R. Langacker, o la gramática constructiva de Fillmore y Kay. Incluso según la
propuesta de Bernardez propone que la lingüística cognitiva hoy estaría constituida por
paradigma mixto que enunciaría ciertos principios básicos como: 1) la cognición humana
como base del lenguaje; 2) que junto a los principios de la gramática generativa; 3) la noción
de espacio mental de Fauconnier; 4) la noción de Lakoff de razonamiento metafórico y; 4) la
“binding theory” de R. Langacker que plantea que “una anáfora debe limitar en su dominio”.
Como conclusión Bernardez plantea que el programa de investigación de la lingüística
cognitiva nos ha brindado un conjunto de concepciones y categorías para constituir topologías
y realizar explicaciones biologisitas sobre el funcionamiento de la cognición humana en
relación al lenguaje (Bermudez, 1999 p:21;25.)
Dentro de este marco general anclamos nuestro análisis. Dentro de las pocas referencias que
nos gustaría agregar a este trabajo se encuentran dado su relevancia al tema son, “Cognitive
Mappings for Language and Thought” de Gilles Fauconnier y “Metaphor, Morality, and
Politics”, de G. Lakoff (1995)
Respecto al trabajo de Fauconnier, y para no ser muy reiterativos rescatamos:
“Expressions do not mean; they are prompts for us to construct meanings by working
with processes we already know. In no sense is the meaning of [an] ...utterance "right
there in the words." When we understand an utterance, we in no sense are
understanding "just what the words say"; the words themselves say nothing independent
of the richly detailed knowledge and powerful cognitive processes we bring to bear. The
same fundamental tenet is expressed in Cognitive Mappings for Language and Thought:
Language, as we use it, is but the tip of the iceberg of cognitive construction. As
discourse unfolds, much is going on behind the scenes: new domains appear, links are
forged, abstract mappings operate, internal structure emerges and spreads, viewpoint
and focus keep shifting. Everyday talk and commonsense reasoning are supported by
6
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invisible, highly abstract, mental creations, which grammar helps to guide, but does not
by itself define.”8
Esta referencia nos sirve para abrir el camino a la ultima cuestión que trataremos sobre
metáfora y ocultamiento, para comentar que posturas y conclusiones extraemos de Lakoff,
Etkin, quienes han trabajado en particular esta misma cuestión, la metáfora en relación a la
política. Para concluir con esta referencia de Fauconnier que nos trae también como referencia
“la punta del iceberg” de Van Noppen, esta cuestión es de utilidad en este trabajo para
trabajar la metáfora y el ocultamiento, y la otra parte, que es la que intentamos desarrollar, lo
que se utiliza para no mostrar. Esto, adelantando algunas conclusiones tiene que ver que el
análisis se enfoca en lo que se muestra y no lo que se oculta, aunque en este caso lo que no
interesa ver es que se muestra para ocultar. Por último, sostener que el efecto de la metáfora
va más allá de la sintaxis a pesar que ella también puede brindar un marco para su análisis.
El artículo de Lakoff, a pesar de que le presta central atención a la situación electoral
norteamericana de su momento, tal vez se aleja en algún sentido de lo que deseamos llevar
adelante en este trabajo. Sin embargo los elementos que rescatamos de este artículo se podrían
agrupar en dos. Por un lado la cuestión de la metáfora superficial y la metáfora profunda, y
como este tipo de metáforas posibilitan distintas estrategias retóricas. La aclaración
tautológica es que las metáforas superficiales son aquellas que presentan menos contenido
cognitivo en relación a las profundas. La segunda cuestión, que como está presentada en este
artículo podría constituir otro capítulo de metáforas de la vida cotidiana, son como se
constituyen por medio de metáforas y asociaciones semánticas los sistemas morales. Esto es
que la experiencia moral no es metafórica, y que la experiencia del obra bien es de donde
procede el poder de las metáforas morales9. La discusión y el desarrollo teórico se mantiene
focalizado en la situación electoral norteamericana del momento y casi tiene un tono
prescriptivo a forma de consejos estrategia de retórica y discursiva para que los liberales
puedan contrarrestar el triunfo conservador. A pesar de lo anecdótico del artículo resulta
interesante cuestiones no especificadas por el mismo y que se dan pragmáticamente. Con esto
quiero decir que aunque Lakoff (1995) en este articulo no mencione explícitamente ciertas
8 Fauconnier, G.. “Cognitive Mappings for Language and Thought”. Cambridge University Press. La referencia que implica es a Turner Reading Minds. Princeton University Press. (1991). Aún así es reconocible la expresión utilizada también por J.P Van Noppen, en la que toda figura, metáfora, no es más que la parte visible del un Iceberg. 9 Lakoff, G. “Metaphor, Morality, and Politics”, (1995):” “...we should point out the obvious -- that morality is not all metaphorical and that nonmetaphorical aspects of morality are what the metaphorical system is based on. Nonmetaphorical morality is about the experience of well-being.” p:6. 7
8
cuestiones las manifiesta pragmáticamente. Con esto me gustaría hace referencia a la cuestión
específica del discurso político. Este artículo a pesar de estar centrado en la metáfora y ser
desarrollado en la misma sistematicidad de “Metáforas de la vida cotidiana” revela palabras y
conceptos nuevos como pueden ser retórica y estrategia y la tensión que implica esta
competencia tanto dentro como fuera del discurso. A pesar de la externalidad imprescindible
de la experiencia que moldeará el lenguaje, Lakoff reconoce la centralidad del discurso para la
política. No es algo que haya obviado en “Metáforas de la vida cotidiana”, pero aquí aparece
como preocupación central. De esto podríamos decir que en este artículo surgen dos
preocupación de fondo. La primera: el poder de las metáforas. La segunda: como un grupo, un
sector, los conservadores, hegemonizando cierto aspecto del lenguaje –o acaso discurso de la
moralidad- han logrado realizar materialmente ese poder de las metáforas.
Lo último que quedaría agregar antes del análisis al corpus es un comentario sobre un aspecto
que aparece en forma similar en dos trabajos que tratan el tema específica que nos
corresponde aquí (Etkin 1999, Lakoff, Johnson 1980). J. Etkin Habla de metáfora y doble
discurso; Lakoff y Johnson de ocultamiento. Con respecto a la primera postura presentamos
ciertas discrepancias con el enfoque. La primer diferencia entre la postura de Etkin y la que
aquí se presenta es que no consideramos que el discurso político se constituye a partir de su
contenido o temas10, sino que lo específico del discurso político es que es enunciado desde la
legalidad del Estado. La segunda diferencia con esta postura es que no abordamos el estudio
de la metáfora en el discurso político como un figura que oculta, sino más bien que muestra.
Lakoff y Johnson insisten esta cuestión11. Incluso en mérito de ocultar algo, la metáfora se
muestra como figura retórica. La metáfora necesita mostrar algo para ocultar otra cosa.
En este sentido nos interesa exclusivamente lo que estas metáforas muestran, incluso el hecho
de que están ocultando algo. Esto no es lo mismo que partir de que las metáforas pueden
ocultar cosas, por eso buscamos aquello que no muestran12. Encaramos este análisis
considerando lo que dicen estos discursos y no lo que ocultan. No buscamos lo que el discurso
no muestra. No hay una intención metadiscursiva oculta. Uno se arriesgaría a decir que no
dicen lo que piensan, o que no dicen la verdad. En tal caso seguiríamos manteniendo el foco
en lo que el discurso o la metáfora dice, más que no dice. Incluso frente a lo que podría ser
considerado incoherente –en relación al discurso de un partido, funcionario, etc- y la misma
10 Ibidem. 247. 11 G. Lakoff y M. Johnson “Metáforas de la vida cotidiana”, Cátedra. Madrid 1998 [1980]. Pág 281. 12 En el caso de Etkin: “(..)suponemos que es el juego de lo manifiesto-oculto que está en lo política. (...) debemos aceptar que las expresiones son también una forma de no mostrar “las otras” intenciones que subyacen.” Ibidem 8
9
mentira, prestaremos antelación en que es lo que estas metáforas muestran para poder ocultar
aquello que no se quiere revelar en el discurso.
Compartimos aspectos de este artículo –más que los que discutimos- como el de las
modalidades que puede adoptar el discurso político. Específicamente Etkin habla del modo
poético y científico; y del efecto –emotivo- que puede tener uno; y –persuasivo- en el otro13.
En este sentido incluimos estos aspectos dentro de la retórica, que consideramos aspecto
fundamental de la política. La retórica es el medio por el que se apela a las distintas
modalidades, la poética, la científica, para conseguir su fin último: la persuasión.
Metáforas en el discurso de De la Rúa 10-12-1999
En un intento de ajustar las categorías de este modelo conceptual al análisis del corpus
sistematizamos dos niveles, el inferior, a partir de la teoría de la metáfora interactiva de
M. Black; y en el nivel superior aplicamos las categorías sugeridas por Lakoff y
Jhonson (1980).
En el discurso de De la Rúa el sintagma deuda no es utilizado. Utiliza la expresión
“endeudamiento de las provincias” en una ocasión. La referencia más cercana a este
tópico, léxicamente hablando, es la palabra déficit. Consideramos que cuando se utiliza
esta palabra, en este discurso –así también como en el discurso de Kirchner- se hace
algún tipo de alusión al tópico de la deuda. # 1 El déficit presiona Sobre la tasa de
interés, Afecta las obligaciones básicas del Estado y
Perjudica al conjunto de la economía.
Fuerza: Presión Espacialidad: Arriba Efecto: Alcance Efecto: Consecuencia FOCO: presiona MARCO En su momento, cuando tratamos las metáforas ontológicas y la cuestión de la causación adelantamos la utilidad de este concepto teórico. Aquí en el caso concreto vemos la articulación de esta operación. En este caso (# 1) la deuda, que esta representada lexicamente en todo el discurso –salvo en su caso por endeudamiento- por déficit aparece como una entidad, “algo” que tiene un efecto de causación sobre el Estado y la economía. Lo que revela este esquema de dos niveles es que considerando esta una metáfora interactiva, el fragmento “el déficit presiona” sería el elemento detonante del sentido metafórico, al combinarse –casi como en una fórmula química- con los elementos del marco. Por otro lado, en el siguiente nivel, encontramos elementos de razonamiento metafórico que revelan el 13 Existe cierta alusión a los factores y funciones del lenguaje según R. Jackobson. Esta referencia puede resultar interesante si logramos establecer el vínculo entre la poética y el discurso político. Claramente la metáfora es un punto que permite este vínculo. Existiría cierto elemento emotivo de la poética que el discurso político quisiera utilizar como recurso de persuasión. Maquiavello decía que la política era pasión y razón. La poesía y su valor emotivo necesitan de la metáfora como figura movilizadora. 9
10
aspecto cognitivo que domina el lenguaje. Esto es básicamente darle entidad al déficit -anáfora de deuda si se quiere- y establecer a partir de esto un esquema de causasión en la que la deuda, una entidad aplica una fuerza física sobre otras entidades, abstractas, en términos que son colectivas, y que intentan incluir al oyente-receptor. Este esquema nos revela cuestiones fundamentales de la retórica argumentativa y el contenido cognitivo de la experiencia de tener que lidiar políticamente con fenómeno real que es la deuda. En ese sentido es un peso, una presión que afecta a conceptos abstractos pero que también son colectivos de los que formamos parte. La presión de la deuda o el déficit se intenta transmitir a la experiencia cognitiva concreta y cotidiana de los receptores. # 2 Cuando hay que cubrir un bache Del orden de los 10 mil millones de pesos no se
puede decir alegremente que hay cuentas ordenadas.
Evento: Localización14 Referencia: Magnitud Metonimia - Ironía FOCO: bache MARCO En un rumbo distinto, encontramos la alusión al bache. La deuda sería algo similar a un agujero, algo faltante que debe ser cubierto para no crear obstáculos. Este bache, este agujero tiene un diámetro cuya magnitud está registrada en miles de millones de pesos. Por último, un metonimia, que casi con ironía trata de confesar que lo que el Estado cuenta, está desordenado. La imagen es clara. Alusiva y gráfica. # 3 En un contexto de crecimiento podremos generar nuevos puestos de trabajo.
Para esto, lo primero es equilibrar las cuentas públicas Porque un presupuesto equilibrado
Retribución/Estable en relación al suelo/Compromiso moral15 FOCO: Equilibrar MARCO atraerá nuevas inversiones que nos pondrán en marcha y se
Evitará que el peso del déficit caiga sobre el conjunto de la población
, que en definitiva es la que paga las consecuencias.
14 Según la clasificación del catálogo del departamento de ciencias cognitivas de U.C. Berkeley, se podría referir a este tipo de metáfora como: “ Event Structure (Location Case)” La descripción que dan de este tipo es: “In this large metaphorical system we understand various aspects of being and acting as interaction etween an entity and a landscape.” 15 Según la misma guía encontramos dos campos semánticos que hacen referencia a la noción de equilibrio. Una hace referencia a algo específicamente económico o financiero; la compensación por algo “Restoration is getting a good thing in compensation: In the transfer cases, restitution is provided by an accounting balance of good and bad effects. The relationship between this metaphor (which includes notions of Causal Commerce) and Harm is having a harmfull posession (which i notions of Causal Transfer) is still unclear.” Pág: 56. Por otro lado otra referencia similar es: “Results are Net Balances: In sum, To sum it all up. Knowledge structures: The transactions add up to the balance Entailments: Events taken together yield the result”.pág.136. El otro grupo de refieren a la estabilidad emocional y la la estabilidad emocional como algo en contacto con el suelo “Inherits States are locations, coherent with Good is Up, Emotional Stability is balance and (...) Maintaining position” pág. 148. Y poder responder moralmente de una transaccón. pág 188. El segundo grupo de campos referenciales están relacionados a la moral, al equilibrio 10
11
# 4 Quiero un Estado que, en vez
de pesar sobre la gente Como una rémora por su ineficiencia y su déficit,
acompañe y apoye a quien quiera trabajar y producir;
Volumen: Peso Comparación: rémora Entidad: Positiva FOCO: Rémora Marco Que en vez de ponerle obstáculos
lo promueva, que aliente las exportaciones, el desarrollo tecnológico y la información.
Entidad: Opositiva FOCO: Obstáculo MARCO Metáforas en el discurso de Rodriguez Saa
En el discurso inaugural de Rodriguez Saa encontramos dos metáforas por medio de las
cuales se intenta mostrar un aspecto cognitivo sobre la deuda. La primera de ellas busca
mostrar a los ámbitos en los que se pacta, asume o “trata” la deuda. En este caso la metáfora
es utilizada para presentar la deuda como algo no genuino, algo decidido por unos pocos, sin
un legítimo conocimiento público, y de acuerdo a intereses particulares. Los recursos
metonímicos de “escenarios reducidos” y “ a puertas cerradas” desenlazan en la metáfora de
“dar la espalda” al interés general. # 5 Este concepto se agrava porque su tratamiento siempre
se ha realizado en escenarios reducidos,
en oficinas a puertas cerradas,
con decisores desconocidos,
Espacio: Atributivo Espacio: a espaldas del interés general
y lo que es más grave se ha priorizado el pago de la llamada deuda externa frente a la deuda que este país tiene con sus propios compatriotas.
Localización
La expresión metafórica de dar la espalda contiene material cognitivo en tanto dar la espalda
es algo que se realiza con el cuerpo. Aquí podemos apreciar como la metáfora se manifiesta
como figura retórica cargando el discurso de figuras que poseen un alcance de experiencia
cognitiva –y elementos poético, ó con intención de función poética, como conmover-
orientado persuadir.
En comparación con los demás discursos, la forma en que la metáfora es utilizada en este
caso, se podría decir que existe un matiz dramático en las figuras elegidas.
La otra metáfora referente a la deuda en este discurso es una metáfora de fuerza. Esta metáfora
de fuerza no es como la anterior metáfora de fuerza, en la cuál la deuda era una entidad con
11
12
volumen que ejerce peso sobre la sociedad convirtiéndose en un obstáculo; sino es una fuerza
de envestida. # 6 Vamos a tomar el toro por las astas. Vamos a hablar de la deuda externa. Fuerza FOCO: Toro MARCO # 7 En primer lugar, anuncio que el Estado argentino suspenderá el pago de la deuda externa. MARCO La deuda externa sería un tema tan controversial que incluso hablar sobre esto es algo que
requiere la utilización de fuerza. Esta fuerza es muy particular, es una fuerza aplicada contra
una bestia. La fuerza que implica tomar a un toro por sus cuernos es una fuerza que busca
someter aplicando fuerza sobre la cabeza del animal. Esto podría decir que está metáfora
referiría a que hablar de la deuda es algo que requiere fuerza, pero que al mismo tiempo, la
fuerza que aplicará su discurso sobre este tema buscará someter a su oponente. Seguido de la
promesa de que se tratará con fuerza este tema aparece el anuncio: “se suspenderá el pago de
la deuda”. Una vez más este caso nos muestra la función retórica de la metáfora. La metáfora
es jugada en el discurso como una figura conmovedora, de desafío, de coraje. Este análisis
nos permite descubrir una serie de aspectos retóricos, como pueden ser ethos discursivo; en
este caso particular podemos apreciar como Rodríguez Saa se constituye a sí mismo en sujeto
de su propio discurso. La metáfora que utiliza en ese sentido. En la metáfora #6, por todo lo
hasta aquí dicho, Rodríguez Saa se constituye a sí mismo como un sujeto valiente y con
fuerza para someter a la bestia que es la deuda. La conclusión de este punto sería que la
metáfora, además de someternos a una experiencia sensible a nivel corporal por medio del
discurso, busca generar un efecto retórico, en tanto conmover y ser persuasivo. También
hemos visto que las metáforas no solo sirven para personificar o darle entidad a un objeto,
sino que también sirven para constituir al sujeto o locutor.
Metáforas en el discurso de Duahlde # 8 No tenemos crédito externo ni crédito interno. Están metidos en el famoso "corralito" 65 mil millones, Espacio: Atributivo FOCO: Corralito # 9 Entre pesos y dólares, que los bancos han prestado a empresas, familias o al sector público.
12
13
MARCO Existe preguntarse si aquí nos encontramos ya frente a una nueva cristalización de significado
que frente a una metáfora. La expresión “corralito” responde a un desplazamiento de
significado propio de la metáfora. En este sentido se podría hablar de un doble enlace de
significado. Corralito ya sería una expresión léxica de origen metafórico. Respecto al
contenido metafórico de la expresión, ese lugar, donde se encuentra el crédito, es lo que se
llama corralito. Esta expresión nos presenta claramente que implica que haya dinero en el
corralito. En primer lugar el corral es un lugar donde se encierran los animales como el
ganado16. La variación morfológica corralito se utiliza para denominar los corrales en los que
se depositan los bebés. Esta expresión con sentido metafórico ya acuñado, hace referencia a
que el crédito está encerrado en el corralito. Existen, pero cuál bebés, se encuentran
protegidos dentro de un corralito.
Es interesante l # 10 La deuda flotante del sector público
Alcanza a 5 mil millones de pesos, sin computar la deuda que tiene la Dirección General Impositiva
Entidad: Suspendida en Espacio FOCO: Flotante MARCO en concepto de reembolso de impuestos. MARCO Metáforas en el discurso de Kirchner 25-5-2003. # 11 El país no puede continuar cubriendo el déficit
por la vía del endeudamiento permanente ni puede recurrir a la emisión de moneda sin control,
Evento: Localización17 FOCO: Cubrir MARCO Haciéndose correr riesgos inflacionarios que siempre terminan afectando a los sectores de menos ingresos. MRCO La metáfora de cubrir el déficit es muy rica. La deuda está relacionada al déficit, a algo que falta. La deuda hace referencia a una carencia, la falta o ausencia de algo que necesariamente debería estar. En este sentido una variable que no estamos contemplando es la gramaticalidad; 16 Esta referencia sería coherente con nuestro legado cultural, donde esta es la forma predominante que se encierra en un corral. 17 Símil # 2. 13
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y en este caso el uso del pretérito es particularmente llamativo, y si se quiere saber en relación a qué a que criterio vale esta llamada, la respuesta es a simple nivel comparativo, esto es en relación a este corpus constituido en variables. Independientemente de la particularidad del tiempo verbal utilizado en esta metáfora la referencia semántica es a cubrir eso que falta, la deuda, en términos de la experiencia del trabajo manual, como el de cubrir un pozo. Teniendo en cuenta el dramatismo enfatizado en el marco, este agujero que hay llenar debe ser tapado sin llegar a medidas desesperadas. Aquí existiría algún tipo de consecuencia si se tratara de cubrir la falta por medio de actos desenfrenados que pongan el riesgo el control, que se pierda, y que hundamos en el caos. Este ejemplo sirve para comprobar varias observaciones mencionadas anteriormente en referencia al complejo funcionamiento de las metáforas. En este caso vemos que desde distintos marcos conceptuales podemos atrapar distintos aspectos del material cognitivo de las metáforas. A pesar de nuestro énfasis en el nivel semántico del análisis, las variables gramaticales, aunque aquí no sistematizadas rigurosamente, brindan también mayor cantidad de sentido. # 12 No se puede recurrir al ajuste ni incrementar el endeudamiento. Fuerza FOCO: Ajuste MARCO La metáfora aquí no habla de la deuda sino del ajuste. A pesar de esto y como hemos ya visto del poder de la metáfora como causación, podemos deducir que el ajuste es una contracara, una consecuencia de la deuda. En este sentido se podrían considerar semánticamente relacionadas. Técnicamente son términos que designan conceptos diferentes. Pero si dejamos pesar un poco el contexto podremos hacer que la balanza nos atribuya esta expresión al campo semántico de la deuda. # 13 Este gobierno seguirá principios firmes
de negociación con los tenedores de deuda soberana
en la actual situación de default,
Fuerza Entidad FOCO: Soberana MARCO de manera inmediata y apuntando a tres objetivos:
la reducción de los montos de la deuda, la reducción de las tasas de interés
MARCO y la ampliación de los plazos de madurez y vencimiento de los bonos. Procesos: Desarrollo, etapas de la vida, crecimiento. FOCO: Madurez MARCO Dado la extensión de esta metáfora (# 13) primero deberíamos tratarla por partes y después tratar de estraer un sentido que pueda dar cuenta de la unidad de la misma. Empecemos por
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partes y en orden regresivo. Muy interesante la metáfora sobre la madurez, lo que apela a un aspecto cognitivo básico que es la vida y el desarrollo por etapas. La madurez también tiene relación semántica con el estado de los frutos y cuando estos se brindan como alimento. Contextualicemos, aquí se habla sobre los objetivos de la negociación de la deuda. Lo que nos trae a otro elemento. Aquí la deuda es deuda soberana. Un interrogante que podría sugir aquí es si esto busca hacer un distinción o una recategorización. En el caso de la distinción nos encontraríamos más cercanos a la estrategia retórica de Rodriguez Saa de adjetivar la deuda para distinguirla de lo que podía ser considerada una deuda legítima y otra deuda ficticia y negociada con arreglo a los intereses de otros. Esto apunta a descubrir si la deuda soberana es una entre la deudas, pero esta a diferencia de las demás es soberana, es decir, tiene poder sobre ella misma. En el caso de la recategorización todo sería más simple: -hay una sola deuda que es ésta, y para que así sea, esta deuda será soberana. Esta experiencia cognitiva que representa un entidad que es doblemente interesante por su doble articulación, una individual y otra colectiva. Todos sentimos en algún nivel nuestra soberanía física sobre el cuerpo. En este sentido nos sentimos soberanos en tanto mandamos –en la medida de lo posible- sobre nuestro cuerpo. Pero el lexema soberanía está más asociado semánticamente a cuestiones jurídicas y de derecho internacional, por no admitir llanamente de la política. Sin embargo esta soberanía no se encuentra muy lejos de esa experiencia corporal, de sentimiento de unidad, que brinda el cuerpo del Estado. Pero para pasar al último elemento tenemos los principios firmes. Aquí surge la duda de si esto es metafórico o literal. En otras palabras la pregunta que vale aquí ¿Duro es una metáfora? O para ser descaradamente cínicos ¿Realmente pretenden ser duros? Si fuera una metáfora –y esta notado en el esquema de esa manera- podríamos interpretar que dentro de las posibilidades se hará lo posible, aunque en términos del valor cognitivo de fuerza nos da a entender firmeza, esto es mantener algo inmóvil frente a una fuerza opositora. Si en este caso debiéramos interpretar que es lo que se supone que se debe mantener firme podemos deducir que los términos de negociación, la posibilidad de establecer ese proceso de maduración. Ahora si tuviéramos que armar todo esto que hemos visto por separado podemos arribar a que el gobierno se esforzará –o se mantendrá firme- para que la deuda sea soberana, es decir que tenga poder sobre sí misma, madure sin la interrupción de otros que perturbe este desarrollo. # 14 No somos el proyecto del default. Metonimia: La parte por el todo En este último efecto está claro el funcionamiento metonímico en el default encarna a un contradestinatario, que como ya hemos podido apreciar es el presidente precedente, pero en este caso particular, no el inmediatamente antecedente sino que De la Rúa. El juego de asociaciones semánticas que abre esta metonimia pueden dirigirse en dos principales direcciones. Por un lado la asociación a la persona, y la asociación al programa político o tipo de gobierno. Personalmente me inclinaría que el sentido de esta expresión busca asegurar en los destinatarios la seguridad –valga la redundancia- de que por medio de la política del nuevo
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gobierno no habrá una nueva devacle como la que se experimentó con la caida del gobierno de De la Rúa. Variable verbal. Realizamos algún comentario sobre los verbos utilizados en los focos de las metáforas de
estos discursos. Manteniendo esta forma superficial, pero con una mínima sistematización de
lo mencionado presentamos el siguiente cuadro que sistematiza estas observarciones.
De la Rúa Rodriguez Saa Duhalde Kirchner
Presiona - Están metidos Cubriendo
Cubrir Tomar Alcanza Recurrir
Equilibrar Seguirá
Acompañe somos
De este sintético esquema no logramos deducir ninguna conclusión definitiva. Aceptamos el
valor descriptivo de esta propuesta, y en ese sentido este apartado da cuenta de otro aspecto
que complementa agregando un pequeño nuevo matiz al análisis.
Esto que ya hemos podido apreciar a lo largo del análisis ya realizado, presentado junto y
comparativamente nos da una pauta de la variación en la elección y conjugación verbal en
estos discursos.
Conclusión La metáfora, un elemento que pareciera pertenecer a géneros discursivos más cercanos a
la literatura, como podrían ser la poesía, también se encuentra presente en otros ámbitos
como puede ser el discurso político. En alguna medida, como hemos podido observar en
este análisis, existen momentos en los que el discurso política apela a conmover a los
receptores por medio de recursos poéticos.
Aún así, la perspectiva que hemos mantenido en este análisis, el de la metáfora y su
poder cognitivo, nos permitió ver más allá del aspecto retórico que acabamos de
mencionar. Esto significa que la metáfora es un recurso que manifestar estados de
cosas a un nivel profundo apelando a experiencias intimas que involucran las
interacciones más básicas de los sentidos que se implican en el cuerpo humano.
En particular, la cuestión de la deuda nos permitió dar cuenta de algunos de estos
aspectos. Este tema particular presenta grandes dificultades a la hora de encontrar
recursos lingüísticos para manifestar las implicaciones concretas de esta deuda para la
16
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política nacional. Cada uno de estos presidentes no solo adopta posiciones distintas
respecto a este tema, sino que necesita caracterizarlo de formas particulares, que al
mismo tiempo logren coherencia con su posición política, sino que además pueda ser
comprendida por la comunidad lingüística a la que se dirigen.
Respecto al análisis en términos de las perspectivas metodológicas, principalmente
realizamos el análisis en dos niveles manteniendo aún así algunos principios teóricos
más amplios de lo que se podría llamar la teoría cognitiva del lenguaje enfocada
especialmente en la metáfora. Esas dos perspectivas que mencionamos son, en primer
lugar la de M. Black que permite descomponer la expresión metafórica en un foco que
encierra el elemento metafórica y su marco que contiene dicha expresión. Por otro lado,
a partir de los principios de la lingüística cognitiva intentamos identificar la naturaleza
de la expresión y de los sentidos a los que apelan.
En el caso de De la Rúa el aspecto cognitivo de las metáforas utilizadas en relación a la
deuda –que se caracterizan mediante la utilización del sintagma déficit- nos la muestran
en primer lugar como una entidad, y en segundo lugar como la falta o ausencia de algo.
En este sentido, la deuda es algo que existe en sí misma, y al mismo tiempo es un
“agujero” algo que debe ser repuesto en un cuerpo o superficie.
Rodríguez Saa presenta una concepción completamente distinta de la deuda. Esta ya no
es una entidad, sino que es una trama, hasta incluso una conspiración. Los elementos
metafóricos utilizados caracterizan lugares oscuros donde ciertas personas se
encargaron de gestar esa deuda. Rodríguez Saa también es el autor de la pintoresca
metáfora con la que proclamaba el cese del pago de la deuda: “Vamos a tomar el toro
por las astas”. Esto es una clara demostración de los dotes poéticos del político.
Duhalde en su discreto discurso –en términos de tono y extensión- utiliza la expresión
metafórica “corralito” con la cuál permite ubicar en una suerte de espacio a la deuda al
encerrarla junto a “los ahorros de las personas y familias” en ese lugar”. Por otro lado
vuelve a establecer a la deuda como una entidad que se encuentra suspendida en el
espacio. Con esto nos referimos a la curiosa expresión de “deuda flotante”.
Kirchner vuelve a las nociones acuñadas por De la Rúa, pero más a partir del recurso
del discurso referido –aunque velado- a manera de comparación y diferenciación. En
todos los casos estos discursos buscan señalar que no se parecen a sus antecesor, claro
está con las variantes correspondientes en cada caso. Podríamos decir que Kirchner
haciendo uso de ese procedimiento rescata muchas de las metáforas utilizadas por De la
Rúa pero de manera peyorativa. El aspecto original de las metáforas de Kirchner
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respecto a la deuda hace referencia a ésta como una entidad. A pesar de que este recurso
es usado en los demás discursos, el aspecto innovador de estas expresiones se
encuentran en la noción de “deuda soberana” y en la de “madurez”. La primera
expresión metafórica apelaría a una deuda legítima frente a una aparente deuda que no
lo es. La segunda expresión resulta también muy interesante porque no solo hace
referencia a una entidad, sino que también hace referencia a un proceso, biológico, por
caracterizarlo de alguna manera, que intenta expresar que la deuda deberá ser tratada
como un organismo vivo y que se deberá respectar sus momentos metabólicos.
Esto resume el análisis en torno a las metáforas utilizadas en los discursos de asunción
de los cuatro presidentes que se sucedieron entre 1999 y el 2003.
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19
Bibliografía Bernardez E. “Some reflections on the origins of cognitive linguistics” en “Journal of english studies I” 1999. Págs. 9-27. Black, M. “Modelos y Metáforas” Ed. Tecnos, Madrid, 1966) Block Ned “Max Black’s Objection to Mind-Body Identity” NYU 2003 Cubo de Severino L.; Israel D. A.; Zonana V. G. “Globalization and its Metaphores in Journalistic Discourse in Argentina” Universidad Nacional de Cuyo. Fauconnier Gilles “Mental Spaces” (MIT Press, 1994)
Lakoff G. “Metaphor, Morality, and Politics ” The Institute for Cultural Democracy.
1995. Lakoff G. y Johnson M. “Metáforas de la vida cotidiana” Parente D “Literalidad Metáfora y Cognición”, Revista de Filosofía Nº11 Robinson, B. “Causation as Metaphor–a Catachresis” 2002
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Anexo: Notas y Discusiones.
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Discurso Político en la Democracia Argentina Reciente (1999-2003)
Retórica y Metáforas
La metáfora puede ser considerada una cuestión del lenguaje, además de un elemento
fundamental que da cuenta de cómo se estructuran los sistemas conceptuales por los que
percibimos el mundo. Este elemento juega un papel particularmente importante tanto en
el discurso político en general como en los casos de los discursos de asunción de los
últimos cuatro presidentes argentinos, correspondientes al período 1999-2003. En
relación al discurso político en general, ya Aristóteles en la retórica planteaba la
importancia de esta figura como elemento de persuasión. En la concepción clásica la
metáfora cumple una función ornamental. En los escritos sobre retórica Nietzsche
descalifica esta concepción ornamental de la metáfora considerándola un elemento
fundamental para decir la verdad.
En corrientes más contemporáneas sobre el estudio del lenguaje se sigue sosteniendo
que tropos como la metáfora, la metonimia y la sinécdoque son elementos de la retórica.
Michel Le Guern realiza una revisión de las definiciones en torno a estos tropos
De la Rúa 10-12-1999
El déficit presiona sobre la tasa de interés, afecta las obligaciones básicas del Estado y
perjudica al conjunto de la economía.
Cuando hay que cubrir un bache del orden de los 10 mil millones de pesos no se puede
decir alegremente que hay cuentas ordenadas.
En un contexto de crecimiento podremos generar nuevos puestos de trabajo. Para esto,
lo primero es equilibrar las cuentas públicas porque un presupuesto equilibrado atraerá
nuevas inversiones que nos pondrán en marcha y se evitará que el peso del déficit caiga
sobre el conjunto de la población, que en definitiva es la que paga las consecuencias.
Quiero un Estado que, en vez de pesar sobre la gente como una rémora por su
ineficiencia y su déficit, acompañe y apoye a quien quiera trabajar y producir; que en
vez de ponerle obstáculos lo promueva, que aliente las exportaciones, el desarrollo
tecnológico y la información.
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22
Rodriguez Saa
Este concepto se agrava porque su tratamiento siempre se ha realizado en escenarios
reducidos, en oficinas a puertas cerradas, con decisores desconocidos, a espaldas del
interés general y lo que es más grave se ha priorizado el pago de la llamada deuda
externa frente a la deuda que este país tiene con sus propios compatriotas.
Vamos a tomar el toro por las astas... Vamos a hablar de la deuda externa.
En primer lugar, anuncio que el Estado argentino suspenderá el pago de la deuda
externa.
Duhalde
No tenemos crédito externo ni crédito interno. Están metidos en el famoso "corralito"
65 mil millones, entre pesos y dólares, que los bancos han prestado a empresas, familias
o al sector público.
La deuda flotante del sector público alcanza a 5 mil millones de pesos, sin computar la
deuda que tiene la Dirección General Impositiva en concepto de reembolso de
impuestos.
Kirchner
El país no puede continuar cubriendo el déficit por la vía del endeudamiento
permanente ni puede recurrir a la emisión de moneda sin control, haciéndose correr
riesgos inflacionarios que siempre terminan afectando a los sectores de menos ingresos.
No se puede recurrir al ajuste ni incrementar el endeudamiento. No se puede volver a
pagar deuda a costa del hambre y la exclusión de los argentinos, (aplausos), generando
más pobreza y aumentando la conflictividad social.
Este gobierno seguirá principios firmes de negociación con los tenedores de deuda
soberana en la actual situación de default, de manera inmediata y apuntando a tres
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objetivos: la reducción de los montos de la deuda, la reducción de las tasas de interés y
la ampliación de los plazos de madurez y vencimiento de los bonos.
No somos el proyecto del default.
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Metáfora: Ocultamiento y Doble Discurso. J. Etkin (1999) habla de doble discurso mientras que Lakoff y Johnson (1998 [1980]).
Con respecto a la primera postura presentamos ciertas discrepancias con el enfoque. La
primer diferencia que presentamos hace referencia a como es tratado la categoría de los
político. Para Etkin lo político se establece a partir del contenido del discurso18. El
análisis que presentamos considera el discurso política es independiente de su
contenido. La especificidad del discurso político, según nuestro enfoque, refiere al
Estado. El discurso político es aquel que emana de la legalidad e institucionalidad del
Estado. Esta distinción permite una amplia distinción de diferentes niveles y tipos de
discursos. De entre todos los textos producidos como consecuencia del funcionamiento
de la burocracia estatal, aquellos que pueden presentar algún tipo de interés para el
análisis son los textos o discursos producidos por los jefes del poder ejecutivos19.
Existirían matices en esta distinción del discurso político. Es necesario considerar
ciertos tipos de discursos públicos, que aunque no procedan del Estado, poseen una
pretensión de influir sobre el Estado, o disputar algún tipo de espacio de poder. Esto,
enmarcado dentro del funcionamiento del Estado democrático, nos obliga prestar
atención a una zona de transición: el discurso electoral. En otro extremo se encuentran
quienes consideran otro tipo de discursos públicos, como el de la prensa, como
discursos políticos20. Este último caso sirve para ilustrar la diferencia entre el discurso
político de otro tipo de discursos con contenido político. Un artículo de un periódico
sobre una cuestión política, no es discurso político, a pesar de su contenido, y que en
alguna medida puede llegar tener algún efecto político. La discusión entre dominación
política y la dominación en otros ámbitos –no políticos, como la familia, el sexo, y
situaciones de imposición de poder o voluntad de otro- es un tema delicado. Sin una
solución definitiva a este problema proponemos un discurso político directamente
18 El autor menciona: “Con la categoría de político marcamos la presencia de un proyecto, bases ideológicas, búsquedas de consenso y voluntad de poder”.Etking, Jorge “Metáfora y doble discurso político. Los juegos del lenguaje en ñas prácticas políticas de poder”. Eudeba, Bs. As. 1999. Pág 245. 19 Aunque tal vez sin relación extricta al estudio del cognitivo del lenguaje, el discurso crítico del discurso (CDA) en algunas variantes como las de N. Ferlough, que centra sus análisis en corpus como los documentos firmados por el Primer Ministro. Específicamente una Foreword al UK Department of Trade and Industry White Paper, ‘Our Competitive Future: Building the Knowledge Economy’, escrita, (o por los menos firmada) por el Primer Ministro, Tony Blair. Fairclough, Norman. “Critical Discourse Analysis in Researching Language in the New Capitalism: Overdetermination, Transdisciplinarity and Textual Analysis”, Lancaster University, 2003b 20 Los trabajos de T. Trew trabajan la sintaxis de los titulares de los períodicos considerándolos discurso político. Seidel, Gill “Political Discourse Analysis” en “Handbook of Discourse Analysis” Vol IV. van Dijk, T. A., 1985. Pág.51. 24
25
ligado al Estado. En este sentido, el discurso político no está establecido por su
contenido, la presencia de proyectos, bases ideológicas, menciones a los líderes21. Por
otro lado, la “búsqueda de consenso” y “voluntad de poder”, serían consideradas no
como capacidades ligadas al poder del Estado y la performatividad específica de su
discurso. No existe un contenido específico que corresponda a la búsqueda de consenso.
La primer diferencia entre la postura de Etkin y la que aquí se presenta es que no
consideramos que el discurso político se constituye a partir de su contenido o temas22,
sino que lo específico del discurso político es que es enunciado desde la legalidad del
Estado. La segunda diferencia con esta postura es que no abordamos el estudio de la
metáfora en el discurso político como un figura que oculta, sino más bien que muestra.
Lakoff y Johnson insisten esta cuestión23. Incluso en mérito de ocultar algo, la metáfora
se muestra como figura retórica. La metáfora necesita mostrar algo para ocultar otra
cosa.
En este sentido nos interesa exclusivamente lo que estas metáforas muestran, incluso el
hecho de que están ocultando algo. Esto no es lo mismo que partir de que las metáforas
pueden ocultar cosas, por eso buscamos aquello que no muestran24. Encaramos este
análisis considerando lo que dicen estos discursos y no lo que ocultan. No buscamos lo
que el discurso no muestra. No hay una intención metadiscursiva oculta. Uno se
arriesgaría a decir que no dicen lo que piensan, o que no dicen la verdad. En tal caso
seguiríamos manteniendo el foco en lo que el discurso o la metáfora dice, más que no
dice. Incluso frente a lo que podría ser considerado incoherente –en relación al discurso
de un partido, funcionario, etc- y la misma mentira, prestaremos antelación en que es lo
que estas metáforas muestran para poder ocultar aquello que no se quiere revelar en el
discurso.
Compartimos aspectos de este artículo –más que los que discutimos- como el de las
modalidades que puede adoptar el discurso político. Específicamente Etkin habla del
modo poético y científico; y del efecto –emotivo- que puede tener uno; y –persuasivo-
en el otro25. En este sentido incluimos estos aspectos dentro de la retórica, que
21 Ibidem. 245. 22 Ibidem. 247. 23 G. Lakoff y M. Johnson “Metáforas de la vida cotidiana”, Cátedra. Madrid 1998 [1980]. Pág 281. 24 En el caso de Etkin: “(..)suponemos que es el juego de lo manifiesto-oculto que está en lo política. (...) debemos aceptar que las expresiones son también una forma de no mostrar “las otras” intenciones que subyacen.” Ibidem 25 Existe cierta alusión a los factores y funciones del lenguaje según R. Jackobson. Esta referencia puede resultar interesante si logramos establecer el vínculo entre la poética y el discurso político. Claramente la metáfora es un punto que permite este vínculo. Existiría cierto elemento emotivo de la poética que el 25
26
consideramos aspecto fundamental de la política. La retórica es el medio por el que se
apela a las distintas modalidades, la poética, la científica, para conseguir su fin último:
la persuasión.
La metáfora es un elemento fundamental de la retórica, y esta un elemento esencial para la
política. En este sentido se podría decir que la metáfora cumple un papel de suma importancia
en el discurso político. La pregunta que aquí cabría es como son utilizadas aquí retóricamente
las metáforas en los discursos inaugurales de los presidentes F. De la Rúa, A. Rodríguez Saa,
E. Duhalde y N. Kirchner –entre diciembre de 1999 y mayo de 2003- en torno a la cuestión de
la deuda. El tema ó tópico de la deuda es un interrogante que trataremos de develar a través
del análisis de la metáforas utilizadas para referirse a esta cuestión en cada uno de los
discursos inaugurales de estos presidentes. Este análisis permite ver la variación en las
estrategias discursivas –lo que implica distintas elecciones lexicogramaticales así como
variados tipos de metáforas y dominios cognitivos- en torno a un mismo tópico, en una
situación de enunciación muy particular.
Los cuatros discursos poseen la particularidad de haber sido enunciados en la misma
situación, es decir pronunciado públicamente en Asamblea Extraordinaria del Congreso de la
Nación, en presencia de los representantes de las dos Cámaras y otras autoridades nacionales.
El aspecto particularmente interesante de estos casos es que presentan una irregularidad,
según lo que establece la norma que da existencia a esa misma situación de enunciación26, en
lo que respecta a su regularidad en el tiempo27. En un período de 3 años, cinco meses y diez
días –menos que lo que corresponde a un solo mandato presidencial- se sucedieron cuatro
discursos inaugurales de cuatro distintos presidentes. Otro aspecto contextual interesante es
que solo dos de estos presidentes fueron elegidos por voto popular28.
discurso político quisiera utilizar como recurso de persuasión. Maquiavello decía que la política era pasión y razón. La poesía y su valor emotivo necesitan de la metáfora como figura movilizadora. 26 Artículo 93 Constitución de la Nación Argentina establece que la Asamblea Constituyente implica que ambas cámaras del Congreso Nacional se reúnen, según lo dispone la–reformado en 1994– establece que: “Al tomar posesión de su cargo el presidente y vicepresidente prestarán juramento, en manos del presidente del senado y ante el Congreso reunido en Asamblea, respetando sus creencias religiosas, de “desempeñar con lealtad y patriotismo el cargo de presidente (...) de la Nación y observar y hacer observar fielmente la Constitución de la Nación Argentina”” El texto original de 1853 –artículo 80– decía: “Al tomar posesión de su cargo, el presidente (...) prestarán juramento en manos del presidente del Senado (...), estando reunido el Congreso, en los términos (...) juro por Dios Nuestro Señor y estos Santos Evangelios, desempeñar con lealtad y patriotismo el cargo de presidente (...) de la Nación, y observar y hacer observar fielmente la Constitución de la Nación Argentina. Si así no lo hiciera, Dios y la Nación me lo demanden” 27 Artículo 90, que dice: “El presidente y vicepresidente duran en sus funciones el término de cuatro años(..).”. 28 Según establece el artículo 94 de la Constitución Nacional. 26
27
Las metáforas utilizadas entorno a la deuda en estos discursos pueden dar cuenta de cómo se
percibía cognitivamente este problema en cada uno de los casos y apreciar sus variaciones y
diferencias. En este sentido la metáfora como aspecto o variable de análisis aporta no solo
elementos de las estrategias retóricas de cada uno de estos presidentes, y la representación
cognitiva que alberga este problema en cada discurso.
Este trabajo presentar descriptivamente las metáfora utilizadas en estos discursos en torno al
tópico de la deuda.
En estos discursos de asunción se hace uso en repetidas oportunidades de metáforas. En
términos generales estas metáforas hacen referencia a la deuda como algo que falta, una
fuerza que presiona sobre el estado argentino y sus obligaciones. También se representa como
un obstáculo al funcionamiento del Estado de la sociedad. Un obstáculo para el crecimiento y
del desarrollo. Como una conspiración, la deuda como un negociado que acuerdan unos pocos
a favor de los intereses de los otros, especuladores extranjeros.
Existen dos aspectos particularmente relevantes en este sentido. El primero, cuál es el efecto
retórico en el uso de las metáforas en estos discursos. El segundo, que aspectos cognitivos
revelan respecto de cómo es percibido este tema –o tópico-, desde un enfoque del estudio del
lenguaje que sea capaz de dar cuenta a nivel sensible de estas expresiones.
Este trabajo presenta estas mismas cuestiones analizadas en el siguiente orden. En primer
lugar valdría una muy mínima reseña sobre la importancia de la metáfora para la retórica. En
segundo lugar cabría mencionar a la metáfora, como opera y su relación con otros trops, como
la metonimia sinecdóque y como el discurso se puede ejecutar mediante figuras que pueden
dar cuenta de nuestra relación con el mundo a nivel cognitivo. Estas serían las expresiones –
que mediante el mecanismo de desplazamiento de dominio conceptuales- permite representar
por medio del lenguaje experiencias cognitivas, que revelan aspectos semánticos y pictóricos,
con gran alcance interpretativo.
27
28
Retórica y Metáfora
A un nivel muy general podemos mencionar a Aristóteles que en la Retórica menciona la
metáfora como un elemento importante que embellece el habla y que hace a la persuasión.
Las figuras o tropos buscan causar un efecto sobre un oyente, esto es conmoverlo, persuadirlo,
etc. Ya en esta concepción de Aristóteles encontramos a la metáfora como una figura retórica
o tropos que debería afectar –en tres niveles- el habla misma, la audiencia –o receptores-,
conmoviéndolos, y por último lograr depositar sobre el último, el cuerpo de orador la
confianza o legitimidad de lo que ha dicho; a través de una serie de elementos que son
exteriores al discurso.
Aún así en Aristóteles la metáfora todavía cumple una función predominantemente
ornamental para el discurso. Otra perspectiva en particular los escritos de retórica de
Nietzsche la metáfora ya no representa un sentido figurado, sino que muestra la misma
verdad29.
De esta breve reseña que buscó ligar el nexo y la importancia que cumple la metáfora para la
política, cuando menos al discurso político. La retórica es el elemento que liga estas dos
actividades, el de la política y el de ejercicio de la metáfora. Por otro lado mencionamos que
la metáfora opera –retóricamente- sobre varios planos, y pueden servir como figura
ornamental y por tanto recurso de la elocuencia, menos que de persuasión. Presentamos la
metáfora no como una manera de hablar figurado, sino como una manera legítima de expresar
las verdades; y que finalmente, las metáforas como la retórica permiten dar cuenta de
nociones que no pueden ser retenidas exclusivamente dentro del lenguaje, y que representan
un afuera del lenguaje30.
29 F. Nietzsche “Escritos sobre retórica” Ed. Trotta. Madrid. 2000. 30Aristóteles menciona que un hombre que ha llevado un vida recta, cuando se lo acuse de algún crimen, su mejor defensa podría hacer silencia, porque la mayor evidencia de su inocensaia no se encuentra dentro del lenguaje sino fuera de él. 28
29
Metáfora y ocultamiento
Trabajos que hacen referencia a la metáfora y la política (J. Etkin. 1999) hablan de
doble discurso y ocultamiento (G. Lakoff y M. Johnson (1998 [1980]). Con respecto a
la primera postura presentamos ciertas discrepancias con el enfoque. La primer
diferencia que presentamos hace referencia a como es tratada la categoría de lo político.
Para Etkin lo político se establece a partir del contenido del discurso31. El análisis que
presentamos considera el discurso político es independiente de su contenido. La
especificidad del discurso político, según nuestro enfoque, refiere al Estado. El discurso
político es aquel que emana de la legalidad e institucionalidad del Estado. Esta
distinción permite una amplia distinción de diferentes niveles y tipos de discursos. De
entre todos los textos producidos como consecuencia del funcionamiento de la
burocracia estatal, aquellos que pueden presentar mayor relevancia o despertar más
interés para el análisis, son los textos o discursos producidos por los jefes del poder
ejecutivo32. Existirían matices en esta distinción del discurso político. Es necesario
considerar ciertos tipos de discursos públicos, que aunque no procedan del Estado,
poseen una pretensión de influir sobre el Estado, o disputar algún tipo de espacio de
poder. Esto, enmarcado dentro del funcionamiento del Estado democrático, nos obliga
prestar atención a una zona de transición: el discurso electoral. En otro extremo se
encuentran quienes consideran otro tipo de discursos públicos, como el de la prensa,
como discursos políticos33. Este último caso sirve para ilustrar la diferencia entre el
discurso político de otro tipo de discursos con contenido político. Un artículo de un
periódico sobre una cuestión política, no sería necesariamente discurso político, a pesar
de su contenido, y que en alguna medida puede llegar tener algún efecto político34.Sin
31 El autor menciona: “Con la categoría de político marcamos la presencia de un proyecto, bases ideológicas, búsquedas de consenso y voluntad de poder” .Etking, Jorge “Metáfora y doble discurso político. Los juegos del lenguaje en ñas prácticas políticas de poder”. Eudeba, Bs. As. 1999. Pág 245. 32 Aunque tal vez sin relación estricta al estudio cognitivo del lenguaje, el discurso crítico del discurso (CDA) en algunas variantes como las de N. Ferclough, que centra sus análisis en corpus como los documentos firmados por el Primer Ministro. Específicamente una Foreword al UK Department of Trade and Industry White Paper, ‘Our Competitive Future: Building the Knowledge Economy’, escrita, (o por los menos firmada) por el Primer Ministro, Tony Blair. Fairclough, Norman. “Critical Discourse Analysis in Researching Language in the New Capitalism: Overdetermination, Transdisciplinarity and Textual Analysis”, Lancaster University, 2003b 33 Los trabajos de T. Trew trabajan la sintaxis de los titulares de los períodicos considerándolos discurso político. Seidel, Gill “Political Discourse Analysis” en “Handbook of Discourse Analysis” Vol IV. van Dijk, T. A., 1985. Pág.51. 34 Deberíamos considerar esto y lo presentado en la nota anterior bajo algunos principios que rigen la democracia, como lo presenta el modelo de la “poliarquía” de Robert Dhal, que considera como requisito indispensable para la existencia de una democracia, medios de comunicación independientes del gobierno. En alguna medida este modelo de democracia establece una serie de procedimientos que hacen a la elección y funcionamiento de los gobiernos. En este sentido la democracia debe considerar la opinión 29
30
una solución definitiva a este problema proponemos un discurso político directamente
ligado al Estado. En este sentido, el discurso político no está establecido por su
contenido, la presencia de proyectos, bases ideológicas, menciones a los líderes35. Por
otro lado, la “búsqueda de consenso” y “voluntad de poder”, serían consideradas no
como capacidades ligadas al poder del Estado y la performatividad específica de su
discurso. No existe un contenido específico que corresponda a la búsqueda de consenso,
esto es, en distintas situaciones se podrá apelar a distintos contenidos y formas retóricas
para persuadir a los oyentes o receptores.
La primer diferencia entre la postura de Etkin y la que aquí se presenta es que no
consideramos que el discurso político se constituye a partir de su contenido o temas36,
sino que lo específico del discurso político es que es enunciado desde la legalidad del
Estado. La segunda diferencia con esta postura es que no abordamos el estudio de la
metáfora en el discurso político como un figura que oculta, sino más bien que muestra.
Lakoff y Johnson insisten esta cuestión37. Incluso en mérito de ocultar algo, la metáfora
se muestra. La metáfora necesita mostrar algo para ocultar otra cosa.
En este sentido nos interesa exclusivamente lo que estas metáforas muestran, incluso el
hecho de que están ocultando algo. Esto no es lo mismo que partir de que las metáforas
pueden ocultar cosas, por eso buscamos aquello que no muestran38. Encaramos este
análisis considerando lo que dicen estos discursos y no lo que ocultan. No buscamos lo
que el discurso no muestra. No hay una intención metadiscursiva oculta. Uno se
arriesgaría a decir que no dicen lo que piensan, o que no dicen la verdad. En tal caso
seguiríamos manteniendo el foco en lo que el discurso o la metáfora dice, sosteniendo
en que nos interesa más la mentira que la verdad que intenta se intenta ocultar. Esto
significa que nos interesa más ver si la metáfora oculta o muestra, -y en el caso que
oculte, de que manera lo hace-, sin prestar demasiada atención en lo oculto.
En el caso particular de este trabajo nos interesa ver de que manera se utiliza la metáfora
en referencia a la deuda. En este caso la deuda juega un papel de incógnita. No partimos
de otros (la opinión pública) a la hora de tomar decisiones. Esto es relevante a nuestra discusión sobre el discurso político, porque al admitir el término democracia, debemos considerar una gama de discursos que no emanan del Estado, pero que buscan tener influencias sobre el proceso de toma de decisiones del gobierno. Desde esta perspectiva, otros discursos, como puede ser el de los medios, en algunos casos, puede ser político. 35 Ibidem. 245. 36 Ibidem. 247. 37 G. Lakoff y M. Johnson “Metáforas de la vida cotidiana”, Cátedra. Madrid 1998 [1980]. Pág 281. 38 En el caso de Etkin: “(..)suponemos que es el juego de lo manifiesto-oculto que está en lo política. (...) debemos aceptar que las expresiones son también una forma de no mostrar “las otras” intenciones que subyacen.” Ibidem 30
31
de algún preconcepto cerrado sobre el significado de la deuda, sino más bien vemos que
significado se le da a esta deuda en cada uno de los discursos.
Pareciera que en el caso de Etkin el discurso tuviera dos dimensiones. Replicaría el
esquema del signo lingüístico de F. de Sassure, pero extendido al discurso como unidad.
Incluso desde nuestra perspectiva –podríamos decir que- el interés se centra en la
dimensión significante. Esto es, si la metáfora funciona como un iceberg cognitivo, y
nosotros deseáramos estudiar este fenómeno, lo podríamos hacer de la misma manera
que se estudian estos mismos fenómenos. Metafóricamente hablando podríamos
organizar una expedición científica para estudiar los icebergs. En tal caso viajaríamos
hacia aguas frías en las que estos floten y realizaríamos nuestra investigación en lo que
vemos de estos icebergs. Esto no implica ignorar que la mayor parte de estas montañas
de hielo se entrañan bajo el agua. Sin embargo eso es lo que no vemos. Como
investigadores solo podemos especular o proyectar sobre lo que hay bajo el agua. En
este caso nos conduciremos de esta manera. En el mar que representa cada discurso –y
en las heladas aguas del tópico de la deuda- nos acercaremos a los icebergs
conceptuales que representan las metáforas, y estudiaremos en cada caso lo que estos
dejan mostrar, entendiendo que buena parte de la extensión de estas figuras yace oculta
bajo el océano.
Compartimos aspectos de este artículo –más que los que discutimos- como el de las
modalidades que puede adoptar el discurso político. Específicamente Etkin habla del
modo poético y científico; y del efecto –emotivo- que puede tener uno; y –persuasivo-
en el otro39. En este sentido incluimos estos aspectos dentro de la retórica, que
consideramos aspecto fundamental de la política. La retórica es el medio por el que se
apela a las distintas modalidades, la poética, la científica, para conseguir su fin último:
la persuasión. Esto es completamente coherente con que “del discurso político se espera
un llamado al encuentro y la suma de voluntades, pero también está condicionado por
los intereses que sostienen ese mismo llamado”40
Otro aspecto fundamental del enfoque de Etkin con el que coincidimos –y que nos
permite el abordaje cognitivo de la metáfora- es que es que la metáfora es “un intento de
colocar a sus interlocutores dentro de un cierto esquema conceptual y de apreciación
39 Existe cierta alusión a los factores y funciones del lenguaje según R. Jackobson. Esta referencia puede resultar interesante si logramos establecer el vínculo entre la poética y el discurso político. Claramente la metáfora es un punto que permite este vínculo. Existiría cierto elemento emotivo de la poética que el discurso político quisiera utilizar como recurso de persuasión. Maquiavello decía que la política era pasión y razón. La poesía y su valor emotivo necesitan de la metáfora como figura movilizadora. 40 Ibidem. pág. 247. 31
32
de la realidad, de manera que dicho esquema condicione sus observaciones”. Esto pone
en relevancia la capacidad del lenguaje a expresar experiencias cognitivas. A partir de
aquí estamos en condiciones de sostener que en el discurso político, aquel que proviene
de la institucionalidad del Estado recurre a estas figuras, retóricamente –en los modos
poéticos ó científicos, etc.-, como recurso persuasivo; pero también porque estos tropos
permiten operaciones como la del establecimiento de sistemas conceptuales que refieren
a los aspectos de la percepción más básicos de la experiencia humana.
Este recorrido ha servido para brindar un marco de análisis para el estudio de la
metáfora y su valor tanto retórico como cognitivo para el discurso político.
Podrían concluir esto con las mismas palabras de Etkin que proponen que la metáfora
provee una ”(...) imagen y la representación en el decir político (y) no es sólo un
recurso para ejemplificar o aclarar la propuesta del orador y resaltar las ideas de su
mensaje. La metáfora es además elemento de estrategia discursiva”41
41 Ibidem. pág. 248. 32
33
Metáfora Cognitiva
El camino que podemos atravesar para llegar a idea de que la metáforas es una de las formas
que posee el lenguaje para expresar o representar experiencias sensibles en distintos aspectos.
Podemos comenzar a enfocar la atención en la metádora, considerando primeramente a
Michel Le Guern, quien desde una corriente más contemporánea presenta una definición de
metáfora, metonimia y sinécdoque rastreada de la retórica tradicional en la que plantea:
“La metáfora es una figura por medio de la cual se transporta, por así decir, el
significado propio de una palabra a otro significado que solamente le conviene en
virtud de una comparación.”42
La metonimia, también como tropos o figura retórica, es definida en sus múltiples formas,
sustitución de causa por efecto, el contenente por el contenido, el nombre por el lugar, las
partes del cuerpo a las que se le atribuyen pasiones o sentimientos por esa mismas pasiones o
sentimientos, etc43.
La metáfora genera un poder connotativo al introducir un elemento sémico que en
comparación a los demás elementos, este posee un sentido aislado. Este efecto permite poner
en relieve un significado más rico para la comunicación. El poder evocativo de la metáfora
permite asociar conceptos de dominios conceptuales distintos, y de allí el efecto de salto de
sentido en la expresión. Este aspecto sirve para diferenciar a la metáfora de la metonimia;
mientras que una reemplaza elementos de distintos dominios conceptuales –generando el así
llamado salto semántico-, mientras que la metonimia funciona por contigüidad, desplazándose
en el mismo campo semántico. Un ejemplo: “Cien velas se divisaban a lo lejos de la costa”,
donde el sitagma velas reemplaza a barcos dentro de un mismo campo o dominio semántico.
A diferencia
Por su lado la pragmática plantea la metáfora como un fenómeno de desplazamiento
semántico. En este sentido la explicación de este fenómeno ha tomado dos caminos, el de la
interacción de rasgos y la comparación elidida. Según la primer postura plantea que el
significado léxico de una palabra puede descomponerse en rasgos semánticos distintos. En
este caso la metáfora combina alguno de estos significados de las unidades léxicas, haciendo
posibles combinaciones semánticas peculiares. La metáfora puede ser considerada una
42 M. Le Guern “La metáfora y la metonimia” Cátedra, Madrid, 1978. Pág. 13. 43 Ibid. pág. 14. 33
34
combinación sintagmática de unidades léxicas incompatibles. La teoría de la comparación
elidida sostiene la idea de comparación. La metáfora, dentro de un orden sintagmático
introduce un elemento léxico ajeno a la cadena que establece la referencia de la
comparación44.
Max black y el principio de sustitución.
Metáforas de la vida cotidiana de Lackoff y Jhonson
Sobre la Mente el Lenguaje y las Metáforas45.
Sobre el mapeo mental.46
ya que la mejor forma de decir la verdad.
Metáforas en el discurso de De la Rúa 10-12-1999 # 1 El déficit presiona sobre la tasa de
interés, afecta las obligaciones básicas del Estado y
Perjudica al conjunto de la economía.
Fuerza: Presión Espacialidad: Arriba Efecto: Alcance Efecto: Consecuencia
44 M. V. Escandell Videl “Introducción a la pragmática” Anthropos, Barcelona, 1993.págs 220-223. 45 Expressions do not mean; they are prompts for us to construct meanings by working with processes we already know. In no sense is the meaning of [an] ...utterance "right there in the words." When we understand an utterance, we in no sense are understanding "just what the words say"; the words themselves say nothing independent of the richly detailed knowledge and powerful cognitive processes we bring to bear. [ Turner (1991) ] Turner, M. 1991. Reading Minds. Princeton University Press. 46 The same fundamental tenet is expressed in Cognitive Mappings for Language and Thought:: Language, as we use it, is but the tip of the iceberg of cognitive construction. As discourse unfolds, much is going on behind the scenes: new domains appear, links are forged, abstract mappings operate, internal structure emerges and spreads, viewpoint and focus keep shifting. Everyday talk and commonsense reasoning are supported by invisible, highly abstract, mental creations, which grammar helps to guide, but does not by itself define. Fauconnier, G. to appear. Cognitive Mappings for Language and Thought. Cambridge University Press. Pasaje que resulta muy similar, por la expresión que utiliza también J.P Van Noppen, que toda figura no es más que la parte visible del un Iceberg cognitivo 34
35
La elección léxica ya de por sí tiene un aspecto enmacarador. Aunque se está haciendo
alusión a la duda, el déficit puede hacer referencia a otro fenómeno, que en este sentido sería
dinámico, como el proceso por el cual en una situación dada hay menos ingresos que egresos,
o más egresos que ingresos. Así y todo, el déficit asume el peso de la deuda, porque como
vemos en # 1 ejerce una fuerza física aplastante sobre los mecanismos económicos con los
que cuenta el Estado argentino para operar sobre la economía. # 2 Cuando hay que cubrir un bache Del orden de los 10 mil millones de pesos no se
puede decir alegremente que hay cuentas ordenadas.
Evento: Localización47 Referencia: Magnitud Metonimia - Ironía El aspecto cognitivo que revela esta metáfora es que la deuda –si no el défcit- es o tiene forma
de agujero. Se habla de la falta de la carencia de algo, y que esta representa el desplazamiento
de una sustancia, de materia, hace alusión a la extracción de algo, puede ser alusivo a un
recurso natural, o más explícitamente a la tierra. Si quisiéramos utilizar las metáforas como
un recurso que nos prevee de un plus de sentido, si acaso estas mismas expresiones tampoco
sean medio o figuras para crear y cristalizar nuevas expresiones de sentidos. El bache se
refiere al agujero que implica la falta de los 10 mil millones de pesos, que se le adjudica a las
cuentas [“ordenadas”]. # 3 En un contexto de crecimiento podremos generar nuevos puestos de trabajo.
Para esto, lo primero es equilibrar las cuentas públicas Porque un presupuesto equilibrado
Retribución/Estable en relación al suelo/Compromiso moral48 atraerá nuevas inversiones que nos pondrán en marcha y se
Evitará que el peso del déficit caiga sobre el conjunto de la población
, que en definitiva es la que paga las consecuencias.
47 Según la clasificación del catálogo del departamento de ciencias cognitivas de U.C. Berkeley, se podría referir a este tipo de metáfora como: “ Event Structure (Location Case)” La descripción que dan de este tipo es: “In this large metaphorical system we understand various aspects of being and acting as interaction etween an entity and a landscape.” 48 Según la misma guía encontramos dos campos semánticos que hacen referencia a la noción de equilibrio. Una hace referencia a algo específicamente económico o financiero; la compensación por algo “Restoration is getting a good thing in compensation: In the transfer cases, restitution is provided by an accounting balance of good and bad effects. The relationship between this metaphor (which includes notions of Causal Commerce) and Harm is having a harmfull posession (which i notions of Causal Transfer) is still unclear.” Pág: 56. Por otro lado otra referencia similar es: “Results are Net Balances: In sum, To sum it all up. Knowledge structures: The transactions add up to the balance Entailments: Events taken together yield the result”.pág.136. El otro grupo de refieren a la estabilidad emocional y la la estabilidad emocional como algo en contacto con el suelo “Inherits States are locations, coherent with Good is Up, Emotional Stability is balance and (...) Maintaining position” pág. 148. Y poder responder moralmente de una transaccón. pág 188. El segundo grupo de campos referenciales están relacionados a la moral, al equilibrio 35
36
Nuevamente se refuerza la noción de déficit como fue mencionada anteriormente frente a la
noción de deuda. El déficit estaría más relacionado a la noción de cuentas equilibradas.
También podemos apreciar la manera dramática en que es puesta la situación o las
consecuencias de este desequilibrio, que el déficit caiga como una entidad física con volumen
y peso y que colisionará con la población. Aquí también se denotaría una amenaza, en tanto
que se le adjudica la responsabilidad de esta catástrofe al culpable del déficit. En este discurso
la postura es muy clara en tanto responsabilizar primordialmente del déficit a las provincias. # 4 Quiero un Estado que, en vez
de pesar sobre la gente como una rémora por su ineficiencia y su déficit,
acompañe y apoye a quien quiera trabajar y producir;
Volumen: Peso Comparación: rémora Entidad: Positiva Que en vez de ponerle obstáculos
lo promueva, que aliente las exportaciones, el desarrollo tecnológico y la información.
Entidad: Negativa De la misma manera que el déficit, el Estado es una entidad con peso y volumen, que
por su peculiar desformamiento, es torpe, ineficaz y por ì¥Á�9 En las metáforas del
discurso del presidente De la Rúa, vemos que aunque no habla de la deuda en estos
términos explícitos. Sin embargo en lexema déficit nos muestra un aspecto muy
interesante de cómo es entendida o presentada la deuda en este discurso. La deuda no
sería entonces un objeto u entidad concreta o definble, sino más bien un proceso donde
o hay mayor salida de recursos que entrada de los mismos; o por el contrario hay menos
entrada que salida. Así y todo, este proceso también adquiere entidad en el Estado y se
convierte en un objeto que puede causar presión sobre los canales con que cuenta el
mismo Estado para mantener su funcionamiento financiera, y así afectar y hacer víctima
al conjunto de la población. De manera que el déficit –mal que provoca todas estas
desgracias- se eliminado, dándole equilibrio al estado para poder ayudar a quienes
quieran trabajar y producir. Aún así, existe un agujero –el llamado bache de 10 mil
millones- que pareciera tener una entidad real más concreta que el proceso del déficit.
Metáforas en el discurso de Rodriguez Saa
En el discurso inaugural de Rodriguez Saa encontramos dos metáforas por medio de las
cuales se intenta mostrar un aspecto cognitivo sobre la deuda. La primera de ellas busca
mostrar a los ámbitos en los que se pacta, asume o “trata” la deuda. En este caso la
metáfora es utilizada para presentar la deuda como algo no genuino, algo decidido por
unos pocos, sin un legítimo conocimiento público, y de acuerdo a intereses particulares.
36
37
Los recursos metonímicos de “escenarios reducidos” y “ a puertas cerradas”
desenlazan en la metáfora de “dar la espalda” al interés general.
# 5 Este concepto se agrava porque su tratamiento siempre
se ha realizado en escenarios reducidos,
en oficinas a puertas cerradas,
con decisores desconocidos,
Espacio: Atributivo Espacio:
a espaldas del interés generaly lo que es más grave se ha priorizado el pago de la llamada deuda externa frente a la deuda que este país tiene con sus propios compatriotas.Localización
La expresión metafórica de dar la espalda contiene material cognitivo en tanto dar la espalda es algo que se realiza con el cuerpo. Aquí podemos apreciar como la metáfora se manifiesta como figura retórica cargando el discurso de figuras que poseen un alcance de experiencia cognitiva –y elementos poético, ó con intención de función poética, como conmover- orientado persuadir.
En comparación con los demás discursos, la forma en que la metáfora es utilizada en este caso, se podría decir que existe un matiz dramático en las figuras elegidas.
La otra metáfora referente a la deuda en este discurso es una metáfora de fuerza. Esta metáfora de fuerza no es como la anterior metáfora de fuerza, en la cuál la deuda era una entidad con volumen que ejerce peso sobre la sociedad convirtiéndose en un obstáculo; sino es una fuerza de envestida.
# 6
Vamos a tomar el toro por las astas.Vamos a hablar de la deuda externa.Fuerza# 7
En primer lugar, anuncio que el Estado argentino suspenderá el pago de la deuda externa.
La deuda externa sería un tema tan controversial que incluso hablar sobre esto es algo que requiere la utilización de fuerza. Esta fuerza es muy particular, es una fuerza aplicada contra una bestia. La fuerza que implica tomar a un toro por sus cuernos es una fuerza que busca someter aplicando fuerza sobre la cabeza del animal. Esto podría decir que está metáfora referiría a que hablar de la deuda es algo que requiere fuerza, pero que al mismo tiempo, la fuerza que aplicará su discurso sobre este tema buscará someter a su oponente. Seguido de la promesa de que se tratará con fuerza este tema aparece el anuncio: “se suspenderá el pago de la deuda”. Una vez más este caso nos muestra la función retórica de la metáfora. La metáfora es jugada en el discurso como una figura conmovedora, de desafío, de coraje. Este análisis nos permite descubrir una serie de aspectos retóricos, como pueden ser ethos discursivo; en este caso particular podemos apreciar como Rodríguez Saa se constituye a sí mismo en sujeto de su propio discurso. La metáfora que utiliza en ese sentido. En la metáfora #6, por todo lo hasta aquí dicho, Rodríguez Saa se constituye a sí mismo como un sujeto valiente y con fuerza para someter a la bestia que es la deuda. La conclusión de este punto sería que la metáfora, además de someternos a una experiencia sensible a nivel corporal por medio del discurso, busca generar un efecto retórico, en tanto conmover y ser persuasivo. También hemos visto que las metáforas no solo sirven para personificar o darle entidad a un objeto, sino que también sirven para constituir al sujeto o locutor.
Metáforas en el discurso de Duahlde
De la misma manera que en los demás casos la metáfora se presenta en este discurso, atenuado, medido o conciliador. El tono y la extensión de este discurso, en relación a los demás casos es atenuado y reducido. Es el discurso más corto, en términos de extensión y de cadencia lenta en lo que respecta a la ejecución oral del mismo. Se podría decir que este discurso persigue estratégicamente el objetivo de denotar la intención de pacificación ó conciliación. Aún así, la deuda continúa siendo un tema controversial.
# 8
37
38
No tenemos crédito externo ni crédito interno.Están metidos en el famoso "corralito" 65 mil millones,Espacio: Atributivo# 9
Entre pesos y dólares, que los bancos han prestado a empresas, familias o al sector público.
Existe preguntarse si aquí nos encontramos ya frente a una nueva cristalización de significado que frente a una metáfora. La expresión “corralito” responde a un desplazamiento de significado propio de la metáfora. En este sentido se podría hablar de un doble enlace de significado. Corralito ya sería una expresión léxica de origen metafórico. Respecto al contenido metafórico de la expresión, ese lugar, donde se encuentra el crédito, es lo que se llama corralito. Esta expresión nos presenta claramente que implica que haya dinero en el corralito. En primer lugar el corral es un lugar donde se encierran los animales como el ganado49. La variación morfológica corralito se utiliza para denominar los corrales en los que se depositan los bebés. Esta expresión con sentido metafórico ya acuñado, hace referencia a que el crédito está encerrado en el corralito. Existen, pero cuál bebés, se encuentran protegidos dentro de un corralito.
Es interesante l
# 10
La deuda flotante del sector públicoalcanza a 5 mil millones de pesos, sin computar la deuda que tiene la Dirección General ImpositivaEntidad: Suspendida en Espacio
en concepto de reembolso de impuestos.
Kirchner
# 11
El país no puede continuar cubriendo el déficitpor la vía del endeudamiento permanente ni puede recurrir a la emisión de moneda sin control,Evento: Localización50
Haciéndose correr riesgos inflacionarios que siempre terminan afectando a los sectores de menos ingresos.# 12
No se puede recurrir al ajusteni incrementar el endeudamiento.Fuerza
# 13
Este gobierno seguirá principios firmesde negociación con los tenedores de deuda soberanaen la actual situación de default,FuerzaEntidad
de manera inmediata y apuntando a tres objetivos:la reducción de los montos de la deuda, la reducción de las tasas de interés
y la ampliación de los plazos de madurezy vencimiento de los bonos.Procesos: Desarrollo# 14
No somos el proyecto del default.Metonimia: La parte por el todo
Robinson, B. “Causation as Metaphor–a Catachresis” 2002
Parente D “Literalidad Metáfora y Cognición” A parte Rei, Revista de Filosofía Nº11
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Lakoff G. “Metaphor, Morality, and Politics ” The Institute for Cultural Democracy.
1995.
G. Lakoff y M. Johnson “Metáforas de la vida cotidiana”
Fauconnier Gilles “Mental Spaces” (MIT Press, 1994) Block Ned “Max Black’s Objection to Mind-Body Identity” NYU 2003
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